Ceramica Kotosh
Ceramica Kotosh
Ceramica Kotosh
A lo largo de los periodos hubo semejanzas con la cerámica de la cultura Chavín. Luego, entre
el año 250 y el 1 a.C., los habitantes de Kotosh se distancian de Chavín y construyen nuevos
edificios, por lo que producen cerámicas de nuevo tipo como la de figuras antropomorfas. Este
periodo es Kotosh-Sajarapatac.
Excavaciones de Kotosh (1960-1966)
Tras la muerte de Tello, no hubo más investigaciones en la zona, hasta que en 1960 la
Universidad de Tokio envió una expedición al mandó del profesor Seiichi Izumi, conformada por
el arqueólogo Toshinico Sono, el antropólogo Kazuo Terada y otros especialistas. El equipo
removió escombros en Kotosh, hasta encontrar los restos de una antiquísima construcción del
precerámico, al que llamaron el Templo de las Manos Cruzadas, debido a que, en dos de sus
paredes, en la parte inferior, descubrieron relieves de barro modelado en forma de brazos
cruzados, de significado misterioso, aunque aparentemente de connotación religiosa.
Tras un paréntesis, en 1963 retornó Izumi al Perú, trayendo consigo un equipo de especialistas
mayor que el de 1960, con el propósito de dilucidar definitivamente el misterio del Templo. Los
arqueólogos desenterraron totalmente el templo de las Manos Cruzadas, confirmando que era
del precerámico, al no hallarse vestigios de alfarería (hacia 1800 a. C.). Los restos de cerámica
recién se hallan en la siguiente estructura superpuesta, llamada el Templo de los Nichitos.
Asimismo, se estableció para la cerámica de Kotosh una larga secuencia, que llega hasta el
Intermedio Temprano.