Enfermedad Degenerativa de La Columna Dorsolumbar
Enfermedad Degenerativa de La Columna Dorsolumbar
Enfermedad Degenerativa de La Columna Dorsolumbar
Conceptos básicos
Es causada por hipertrofia de las carillas articulares y del ligamento amarillo; puede ser exacerbada por una
protrusión discal o por espondilolistesis y puede superponerse a un estrechamiento congénito.
Es más frecuente al nivel L4-L5 y,en segundo lugar, a la altura de L3-L4.
La estenosis sintomática provoca dolor de espalda y de pierna progresivo al estar de pie y al caminar, que se
alivia al sentarse o al acostarse (claudicación neurógena).
Los síntomas se diferencian de los de la claudicación vascular, la cual suele aliviarse en reposo independien-
temente de la posición que adopte el paciente.
Suele tener buena respuesta tras la cirugía descompresiva (a veces con artrodesis) o con un espaciador
interespinoso.
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La estenosis lumbar sintomática es más frecuente al nivel L4-L5, en segundo lugar, a la altura de L3-L4 y por
último, en L5-S1.: Es infrecuente en Ll-L2. Por lo general, se presenta en pacientes con un conducto lumbar
congénitamente estrecho (v. "Medidas normales de la columna lumbosacra" [p. 1009]), junto con degeneración
adquirida en forma de hipertrofha de carillas articulares, hipertrofia del ligamento amarillo, protrusión de discos
intervertebrales (a menudo, calcificados) y espondilolistesis. Se la describió como una entidad separada con
síntomas propios por primera vez en las décadas de 1950 y 1960.3*
Se la clasifica de la siguiente manera:
1. Estenosis lumbar estable: hipertrofa de carillas articulares y del ligamento amarillo acompañada de degene-
ración y colapso discal.
2. Estenosis lumbar inestable: los elementos del punto"1, más lo siguiente:
a) Espondilolistesis degenerativa (p. 1003): afecta a un solo segmento vertebral.
b Escoliosis degenerativa: afecta a múlriples segmentos.
Derecha 1zquierda
L5
Cuerpo vertebral de L5
Receso lateral
norma
Pediculo de LS
Receso lateral
estrecho
Altura del receso lateral
Diametro AP
del conducto Raíz nerviosa L5
Apófisis transversa de L5
Ligamento amarillo
Lámina de L4
pófisis espinosa de L4
Figura 69.1 Representación esquemática de un corte axial a la altura de la articulación interfacetaria L4-L5 que
muestra los recesos laterales (normal a la derecha, estenóticoa la izquierda).
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Estenosis foraminal
Estrechamiento del agujero de conjunción. Puede producirse por cualquier combinación de los siguientes
elementos:
Prorrusión o hernia discal hacia el agujero de conjunción.
Espondilolistesis (p. 1003).
Hipertrofha facetaria.
. Colapso del espacio intervertebral.
Hipertroha de las articulaciones uncovertebrales (colunmna cervical).
Quiste yuxtafacetario (p. 1058) (quiste sinovial).
Por lo general, se presenta junto con estenosis del receso lateral o del conducto central, pero puede ser soli
taria.
La carga axial (como cuando el paciente está de pie o sentado con la espalda erguida) exacerba la estenosis. A
menudo, el dolor se alivia flexionando la cintura.
La raíz nerviosa comprimida es la que sale a través del agujero afectado (es decir, la que tiene el mismo número
que la vértebra superior; por ejemplo, en la estenosis del agujero L4-L5, la raíz afectada es L4; [Figura 69.2)).
La compresión nerviosa se aprecia mejor en la RM sagital al nivel del agujero de conjunción (en especial, en las
imágenes ponderadas en T2). El estudio en Tl puede resaltar la grasa que rodea al nervio en un agujero normal
(que suele estar ausente en casos de estenosis toraminal).
Raíz nerviosa L3
3
Grasa epidural
aiz nerviOsa
Figura 69.2 Estenosis foraminal al nivel L4-L5. RM L4 comprimida
parasagital en T2 a través de agujeros de conjun-
ción lumbares izquierdos. Nótese el aspecto de "lá- 4 Carilla articular
superior de L5
grima invertida" normal del agujero de conjunción
L3-L4 (resaltado con la linea entrecortada). En el
agujero L4-LS, la compresión de la raíz nerviosa L4
por parte de la carilla articular superior de L5 se ve
facilitada por la hipertrofña de dicha carilla articular
y por el colapso del disco intervertebral L4-L5. La
compresión empeora cuando el paciente está er-
L5
guido. En la Figura 69.4 se muestra un ejemplo de
estenosis foraminal por parte de un "seudodisco"
asociado a espondilolistesis
69.2.3 Espondilolistesis
Información general
Es la subluxación en sentido anterior de un cuerpo vertebral sobre otro; por lo general, el cuerpo superior es
anterior. Lo más frecuente es que se trate del desplazamiento de L5 sobre S1; le sigue en frecuencia la espondilo-
listesis de L4 sobre L5. Esta sección se centra en la espondilolistesisde la columna lumbar.
Hernia de disco y compresión radicular en pacientes con espondilolistesis: es infrecuente que una hernia de
disco lumbar se produzca a la altura de la listesis; sin embargo, es posible que el disco se "extienda" al quedar
descubierto y genere hallazgos en la RM que pueden tener un aspecto similar a una hernia de disco, situación
que se denomina "seudodisco. Es más frecuente observar una verdadera hernia de disco en el nivel de la listesis.
Si la listesis provoca compresión radicular, suele comprometer el nervio saliente por debajo del pedículo de la
vértebra superior con subluxación en sentido anterior (por ejemplo, si una espondilolistesis de L4-L5 provoca
compresión radicular, en general afecta a la raíz LA). Esto se suele observar de forma óptima en la RM sagita
ponderada en T2a través del neuroforamen. Habitualmente,la compresión se debe al desplazamiento en sentido
ascendente de la carilla articular superior de la vértebra inferior junto con material discal; con frecuencia, los
síntomas se asemejan a los de la claudicación neurógena (p. 1007), aunque, a veces, puede apreciarse radiculo-
patía verdadera. Además, el tejido fibroso e infamarorio de la seudoartrosis puede contribuir al cuadro clínico.
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Es infrecuente que la espondilolistesis del istmo provoque estenosis del conducto central debido a que solo
la parte anterior del cuerpo vertebral se desplaza en sentido anterior. Esta situación puede presentarse con
radiculopatía o claudicación neurógena por compresión al nivel del agujero de conjunción; el nervio que sale por
debajo del pedículo a esa altura es el más vulnerable. También puede presentarse con lumbalgia. Muchos casos
son asintomáticos.
Espondilolistesis en adolescentes
Suele manifestarse en jóvenes atletas que sufren hiperextensión repetitiva de la columna lumbar. A menudo,
se asocia a espondilólisis (Figura 69.5).
En mujeres, la espondilolistesis se encuentra con frecuencia en gimnastas y en lanzadoras de softbol. En
varones, es frecuente en quienes practican fútbol americano.
En estos deportistas jóvenes, interrumpir la actividad deportiva durante algunos meses suele resolver el pro-
blema.
A veces, se implementa una intervención quirúrgica en pacientes que no desean interrumpir su actividad
deportiva.
Clasificación de la espondilolistesis
Se utiliza ampliamente la clasificación del grado de subluxación en el plano sagital de Meyerding7.8 En la
Figura 69.3, se muestra cómo se obrienen las mediciones y en la Ecuación 69.1 se indica el porcentaje de sublu-
xación. En la Tabla 69.1, se muestra el sistema de clasihcación.
% de espondilolistesis= Listesis
Cuerpo vertebral X100
(Ecuación 69.1)
stmo izauierdo
de L4 intacto
d n u d dticular
Superior
Czuierda de L5
Defecto delistmo
Carilla articular
inferior
izquierda de L5
Disco
acio
Figura 69.3 Espondilolistesis grado I de L5-S1 (TC sagital) con defecto del istmo. Es el mismo paciente que en la
Figura 69.4. a TC a la altura de la línea media que muestra la técnica de medición para la clasificación de Meyerding.
b TC a través de las articulaciones facetarias y de los agujeros de conjunción del lado izquierdo (recuadro: indica la
ubicación del sitio en una TC axial) que muestra el defecto del istmo izquierdo de LS. Otro hallazgo consiste en el disco
vacío (p. 930) en L5-S1.CV: cuerpo vertebral.
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50% a 75%
IV 75% a 100%
ESpondiloptosis 100%
Agujero de conjuncion
L3-L4 izquierdo mormnal
3
Raíz nerviasa
izquierda norma
S1
Figura 69.4 Espondilolistesis grado I de L5-S1 (RM sagital). Mismo paciente que en la Figura 69.3. a Imagen pon-
derada en 12a traves de la linea media. b Imagen ponderada en 12 a traves de las articulaciones facetaras y de los
agujeros de conjunción izquierdos. Los hallazgos adicionales incluyen la compresión de la raíz nerviosa LS izquierda
por parte del"'seudodisco"LS-S1 (p. 1003).
Tipos de espondilolistesis
1.Tipo 1: displásica. Es de tipo congénito. La parte superior del sacro o el arco de L5 permiten la formación de
la espondilolistesis. No hay alteración del istmo. El 94% de los casos se asocian a espina bihda oculta, alguno
de los cuales pueden progresar (no existe una forma precisa para identificar estos casos).
2Tipo 2: espondilolistesis ístmica (también conocida como espondilólisis): es una insuficiencia del arco neural
que resulta de un defecto del istmo (literalmente, la parte intermedia entre las articulaciones facetarias supe-
rior e inferior). En las radiografías, lumbosacras en proyección oblicua, esto se aprecia como una solución de
continuidad en el cuello del "terrier escocés. Se encuentra en el 5% al 20% de las radiografías de la columna
vertebral." Es infrecuente que provoque estenosis del conducto central debido a que solo la parte anterior
del cuerpo vertebral se desplaza en sentido anterior. Puede causar estenosis del agujero de conjunción. Se
describen tres subtipos:
a) Litico: fractura por fariga o por insuficiencia del istmo. En el grupo de pacientes pediátricos, puede obser-
varse en deportistas (sobre todo en gimnastas y jugadores de fútbol americano); en algunos, puede tratarse
de una exacerbación de un defecto preexistente, mientras que en otros puede resultar de un traumatismo
repetitivo. deberse a ciclos reperidos de fracturas y consolidación.
b) lstmo alargado, pero intacto: pued
Fractura aguda del istmo (v. Figura 69.5).
3.Tipo 3: degenerativa. Se debe a inestabilidad intersegmentaria prolongada. Suele afectar al nivel L4-L5 y no
tiene fractura del istmo. Se encuentra en el 5,8% de los hombres y en el 9,1% de las mujeres (en muchos casos,
Son asintomáticas).
4.Tipo 4: traumática. Se debe a fracturas en regiones diferentes al istmo.
5.Tipo 5: patológica. Por enfermedad ósea generalizada o local, por ejemplo, osteogénesis imperfecta.
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Fractura del
istmo derecho
udas
Fracturd
de ambos Istmosmos
igura 69.5 Fracturas agudas de ambos istmos en un joven de 16 años de edad que practica fútbol americano
no presenta espondilolistesis). a TC axial. b TC sagital a través de las articulaciones interfacetarias derechas.
Historia natural
La progresión de la espondilolistesis puede presentarse sin intervencióón quirúrgica, pero es más frecuente
luego de una cirugía.
describen parestesias dolorosas de los miembros inferiores. Con frecuencia, las maniobras de Valsalva no exacer-
ban el dolor. Muchos pacientes reheren exacerbación del dolor temprano por la mañana, que se atenúa al cabo de
períodos variables después de levantarse de la cama (por lo general, alrededor de una hora).
La evolución temporal suele ser gradualmente progresiva durante meses o años. A medida que la afección
progresa, la capacidad para lograr el alivio sintomáico con los cambios de posición tiende a disminuir. Sin em
bargo, el dolor agudo e incoercible como presentación inicial no es caracteristico y se deben buscar otras causas.
En comparación, la hernia de disco lumbar suele ocasionar aumento del dolor al sentarse, tiene un inicio más
abrupro, presenta signo de Lasègue positivo y empeora con las maniobras de Valsalva.
Se piensa que la claudicación neurógena es provocada por isquemia de raices nerviosas lumbosacras, como
resultado de una demanda metabólica aumentada por el ejercicio junto con un compromiso vascular de la raíz
nerviosa secundario a la presión ejercida por estructuras circundantes. La claudicación neurógena tiene sensibi
lidad moderada (r60%), pero especihcidad elevada para el diagnóstico de estenosis raquídea." Es posible que
el dolor no sea el síntoma principal; en su lugar, algunos pacientes pueden desarrollar parestesias o paresia de
miembros inferiores al caminar. Algunos refieren calambres musculares, sobre todo en las pantorrillas.
Alivio sintomático: se produce al adoptar posiciones que disminuyen la lordosis lumbar, lo que aumenta el
diámetro del conducto central (por reducción de la protrusión interna del ligamento amarillo) y provoca dis
tracción de las articulaciones facetarias (con dilatación de los agujeros de conjunción). Las posiciones preferidas
incluyen: sentarse, ponerse en cuclillas y acostarse. Es posible que los pacientes desarrollen una postura antro-
poide (lexión exagerada de la cintura). Los pacientes con el "signo del carrito de compras' a menudo caminan
una mayor distancia si pueden inclinarse hacia adelante, por ejemplo, sobre un carrito de supermercado. A me
nudo, andar en bicicleta también es bien tolerado.
Si bien suele ser crónica, a veces puede tener un inicio agudo o subagudo. El dolor se irradia hacia la cara lateral del
muslo en el 20° al 40% de los pacientes (se la d omina "seudorradiculopatía" ), pero es infrecuente que se extienda
hacia la región posterior del muslo o que alcance la rodilla. Puede haber entumecimiento o síntomas similares a
parestesias en la región superior del muslo, con una distribución no dermatómica. Al igual que la claudicación neu-
rógena, el dolor puede ser desencadenado al estar de pie, deambular y subir una pendiente durante un tiempo pro-
longado, pero a diterencia de la claudicación neurógena también provoca dolor al acostarse sobre el lado atectado. Se
puede suscitar hiperestesia localizada en el trocánter mayor prácticamente en todos los pacientes, que es máxima en
la inserción muscular del trocánter mayor. El dolor aumenta al soportar peso (y suele estar presente desde el primer
paso, a diterencia de la claudicación neurógena) y con ciertos movimientos de cadera, en especial la rotación externa
más de la mitad de los pacientes tienen una prueba de Patrick-FABERE positiva [p. 953]) y, excepcionalmente,
ante la fHexO-extensión de la cadera. El tratamiento incluye AINE, inhltración local con gucocorticoides (por lo
general, con anestesia local), fisioterapia (con ejercicios de estiramiento y para desarrollar fuerza muscular) y aplica
ción de hielo local. No existen estudios controlados que comparen estas modalidades.
Tabla 69.3 Diámetro AP normal del conducto lumbar en radiografias laterales (entre la linea espinolaminar y el cuerpo
vertebral)2
Promedio(normal) 22 a 25 mm
Limitesnormalesdela nomalidad 15 mm
69.8 Tratamiento
69.8.1 Información general
En un estudio de veintisiete pacientes que no recibieron tratamiento quirúrgico, diecinueve permanecieron
sin cambios, cuatro mejoraron y cuatro empeoraron (seguimiento promedio: 49 meses; rango: 10 a 103 meses).
La administración de AlNE (el paracetamol puede ser igual de etectivo) y la hsioterapia por lo general son las
medidas iniciales del tratamiento no quirúrgico. A diferencia de lo que sucede en la columna cervical, la tracción
no suele ser úil.
Se puede intentar el uso de ortosis, por ejemplo, una ortosis lumbosacra. A continuación, se describen algunas
recomendaciones.
El tratamiento intervencionista del dolor es una opción para el dolor persistente. La inyección de corticoides
epidurales puede brindar alivio transitorio (por lo general, de días a semanas a lo sumo). Es posible emplear
bloqueos articulares y, si se consideran útiles, rizotomías (para lograr un alivio más prolongado).
5. Pacientes pediátricos: se pueden tratar utilizando una ortosis dorsolumbosacra y un tratamiento prolongado
de fisioterapia (por ejemplo, de 6 a9 meses) para el tratamiento sintomárico. Se puede considerar la vuelta a
la actividad deportiva cuando desaparecen los síntomas, pero la recidiva debe promover la interrupción de la
actividad fisica o considerar el tratamiento quirúrgico.
Opciones quirúrgicas
1.Laminectomía: descompresión por vía posterior (directa) del conducto raquídeo y de los agujeros de conjun-
ción sin o con artrodesis. Opciones de la artrodesis:
a) Artrodesis por vía posterior t ijación con barras y tornillos transpediculares.
b)Artrodesis intersomática: por lo general, n0 se la utiliza como tratamiento solo (es decir, a menudo requiere
estabilización adicional; las opciones incluyen: tornillos transpediculares, tornillos transarticulares, tarugos
transarticulares, abrazadera para apóhsis espinosas, etc.).
Artrodesis intersomática lumbar por vía posterior (PLIF) (p. 1409): suele consistir en la colocación de
injertos bilaterales.
Artrodesis transforaminal intersomática lumbar (TLIF) (p. 1409): colocación de injertos unilaterales a
través de una carilla articular del lado correspondiente.
2. Procedimientos para aumentar la altura del espacio intervertebral, descomprimiendo de forma indirecta los
agujeros de conjunción sin una descompresión directa:
a)Artrodesis intersomática lumbar por vía anterior (AILA) (p. 1403): por laparotomía.
b) Artrodesis intersomática lumbar por vía lateral (p. 1410): existen algunas técnicas registradas, como la
artrodesis intersomática lumbar por vía extremo lateral (XLIF°) o lateral directa (DLIF°).
Artrodesis intersomática lumbar: solo para L5-S1.
3. Limitación de la extensión mediante un espaciador interespinoso: por ejemplo, X-Stop° (w más adelante).
En presencia de espondilolistesis
Puede producirse sin descompresión, pero es más frecuente luego de la cirugía." Sin embargo, es infrecuente
la inestabilidad lumbar luego de una laminectomía descompresiva (solo »1% de todas las laminectomías como
tratamiento para estenosis desarrollan subluxación progresiva). En escasas situaciones se requiere de la artrode
sis para prevenir la progresión de una subluxación en pacientes con estenosis degenerativa."
Para las espondilolistesis grado Iy grado I de baja gravedad, se puede considerar la laminectomía sin ar-
trodesis. Se piensa que se mantiene la estabilidad (sin necesidad de colocación de implantes) si >50% al 6%
de las carillas articulares se preservan durante la cirugíay el espacio intervertebral no se altera (manteniendo la
integridad de las columnas anterior y media). Los pacientes más jóvenes y más activos tienen mayor riesgo de
subluxación. Los pacientes con un espacio intervertebral amplio (normal) tienen mayor riesgo de subluxación
que quienes presentan colapso del espacio intervertebral.
Un abordaje consiste en obtener radiografías prequirúrgicas en Hexo-extensión y realizar el seguimiento de
los pacientes luego de la descompresión. Quienes desarrollan un deslizamiento sintomático luego de la interven-
ción se tratan mediante artrodesis, posiblemente combinada con colocación de implantes.
Cuando está indicada la intervención quirúrgica, la Tabla 69.6 sirve como referencia para determinar el tipo
de procedimiento.
3Consentimiento (en términos claros para el paciente; no incluye todas las posibilidades):
a) Procedimiento: intervención a través de la región posterior de la columna para resecar hueso, ligamen-
tos y otros tejidos que estén comprimiendo uno o más nervios. Si se realiza una artrodesis, por lo
general, se emplean tornillos, barras y pequeñas jaulas, según sea necesario.
b)Opciones terapéuticas: tratamiento no quirúrgico.
Complicaciones: las complicaciones generales para la cirugía de columna vertebral (p. VIII); además,
es posible que no se logre el alivio sintomático deseado (la lumbalgia no responde tan bien a la inter
vención como el dolor radicular). La cirugía debilita un poco la columna vertebral; como resultado,
alrededor del 15% de las personas requieren una artrodesis en algún momento posterior.
interpreta que la puntuación T de cualquier sitio < -2,5 es indicativa de osteoporosis (aun cuando no haya
fracturas por fragilidad)." Opciones para estos casos:
a) Aumentar el tamaño de las apófisis espinosas inyectando s0,5 a l mL de polimetilmetacrilato en cada
apóhsis espinosa con una aguja calibre 13 G insertada aproximadamente en la mitad de la apóhsis según
las imágenes fluoroscópicas antes de dilatar el espacio intervertebral o colocar el dispositivo X-Stop" Se
verihca la posición central dentro de la apóhsis en las imágenes Huoroscópicas AP y se controla el procedi-
miento de inyección mediante fluoroscopia.
b) Colocar un dispositivo X-Stop° de ritanio y polieteretercetona (el coeficiente de elasticidad de este material
es más parecido al del hueso que el del titanio).
6.Segmento anquilosado (es decir, segmento ya sometido a artrodesis).
7. Segmento L5-S1: la apóhsis espinosa de Sl suele ser demasiado pequeña (en realidad, no es un problema
habitual porque es intrecuente que la estenosis de L5-Sl provoque síntomas).
8. Menores de 50 años de edad: no participaron en el estudio IDE.
Recomendaciones quirúrgicas:
1.Es fundamental que el espaciador quede apoyado sobre el tercio anterior de la apófisis espinosa.
2.Los resultados pueden ser mejores si el paciente permanece despierto durante el procedimiento y se lo opera
con anestesia local recostado sobre un lado en la posición que sienta que disminuyen los síntomas (abriendo
de esta manera los segmentos críticos). Esto puede disminuir el riesgo de colocar una prótesis demasiado
pequueña.
Período posoperatorio (según las recomendaciones del fabricante):
1. Para prevenir las fracturas por estrés de las apófisis espinosas: el paciente debe ir aumentando la actividad
fisica de forma gradual.
2. Primeras6semanas del posoperatorio: se debe evitar hiperextensión de la columna y el levantamiento de peso.
Minimizar el uso de escaleras.
3.Al principio, se recomienda que camine (<l h), siempre que resulte cómodo.
4.A las 2 semanas del posoperatorio: puede comenzar a hacer ejercicio en bicicleta (fija o móvil).
5.A los 6 meses del posoperatorio: puede añadir deportes como natación, golt, ráquetbol, tenis, o puede comen-
zar a trotar o correr.
Procedimiento de Gill
Este procedimiento, y sus modihicaciones,3" consiste en la descompresión radical de las raíces nerviosas e
incluye la resección de los elementos posteriores sueltos y una facetectomía total. Esto suele estar seguido de un
proceso de artrodesis (posterolateral o intersomática). Se puede aumentar el índice de fusión utilizando fijación
interna (por ejemplo, hjación con barras y tornillos transpediculares)."
Reducción de la espondilolistesis
Se puede lograr mediante colocación de implantes y requiere la realización de una artrodesis.
El riesgo de lesión radicular durante la reducción de espondilolistesis grado I o II es bajo.
La reducción de las espondilolistesis de alto grado (III o IV) conlleva un riesgo de radiculopatía (por
ejemplo, radiculopatía L5 en los casos de espondilolistesis de L5-S1) en el 50% de los casos (en algunos,
de carácter permanente) y puede provocar el síndrome de la cola de caballo, quizás por estiramiento de las
raíces nerviosas por distracción. Algunos profesionales han recomendado la estimulación intraoperatoria
del nervio mientras se realiza una EMG, ya que la listesis se reduce gradualmente, interrumpiendo el pro-
cedimiento si la corriente necesaria para la estimulación aumenta por encima del 50% respecto de la línea
de referencia.
Espondilolistesis istmica (espondilólisis) - defecto del istmo
La artrodesis puede acelerar los cambios degenerativos en los segmentos adyacentes. Algunos cirujanos reco
miendan la artrodesis a la altura de los segmentos con estenosis por espondilolistesis.3 " Los pacientes que presen-
tan espondilolistesis degenerativa, estenosis y radiculopatía pueden ser candidatos razonables para la artrodesis.
pacientes tuvieron la opción de rechazar la aleatorización tras lo cual fueron ingresados en una cohorte obser-
vacional, lo cual puede introducir un sesgo en los grupos; se permitió el entrecruzamiento de pacientes entre
los grupos aleatorizados para recibir tratamiento quirúrgico y no quirúrgico (lo que menoscaba el análisis de
la intención de tratar"); no se estandarizóó la técnica quirúrgicay el tratamiento no quirúrgico empleados; el
seguimiento a largo plazo fue relativamente corto (52% a 8 años); durante el estudio se cambió el paradigma:
se pasó de analizar la intención de tratar a analizar los resultados según eltratamiento etectivo (as-treated).
Los resultados indicaron un claro beneficio de la cirugía al cabo de un seguimiento de 4 años," que pareció
disminuir hacia los 8 años en la cohorte aleatorizada, pero se mantuvo en la cohorte observacional