LA DISCRIMINACIÓN LABORAL EN REPÚBLICA DOMINICANA

LABOUR DISCRIMINATION IN THE DOMINICAN REPUBLIC

| Juan Rosario Gratereaux | | Yudelka Duran Cortes |

Magister en Derecho del Trabajo y Seguridad Magister en Asesoría Jurídico Laboral.

Social (PUCMM), Docente de La Catedra de Universidad Rey Juan Carlos (Madrid, España).
Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social Abogada litigante del Derecho Laboral. Oficina
(PUCMM), Abogado litigante del Derecho LEXSIDE ABOGADOS
Laboral. Oficina LEXSIDE ABOGADOS Correo de contacto: [email protected]
Correo de contacto: [email protected]
https://orcid.org/0000-0003-0961-0174

Recibido: 28.02.2021| Aceptado: 30.05.2021

Resumen Abstract
En nuestra realidad jurídica en la Republica In our legal reality in the Dominican Republic,
Dominicana, el trabajador se ve afectado del the worker is affected by the phenomenon of
fenómeno de la discriminación, en el que sufre discrimination, in which he suffers great
grandes desigualdades, producto de diversas inequalities, due to various reasons, such as his
razones, como por ejemplo su origen, raza, origin, race, color, creed or religion, among
color, credo o religión, entre otras. Es por esto, others. For this reason, we have decided to
que hemos decidido tratar la discriminación address labor discrimination in this article for
laboral en el presente artículo para la Revista the Ibero-American Association of Labor and
Asociación Iberoamericana del Derecho del Social Security Law (AITSS), in order to
Trabajo y de la Seguridad Social (AITSS), en clearly identify the problem of injustice and
aras de identificar claramente el problema de victimization experienced by workers in our
injusticia y victimización que viven los country. country, and its forms of
trabajadores de nuestro país, y sus formas de manifestation, in order to thus propose possible
manifestación, para poder así, proponer solutions that advocate for the eradication of
posibles soluciones que propugnen por la Labor Discrimination or reduction
erradicación de la Discriminación Laboral o programming.
programación de disminución.
For the present investigation of our article, we
Para la presente investigación de nuestro have made an analysis of the statistics reflected
artículo, hemos hecho un análisis de las by the Ministry of Labor, the International
estadísticas reflejadas por el Ministerio de Labor Organization (ILO), and even the
Trabajo, de la Organización Internacional del complaints filed by civil society. We have
Trabajo (OIT), e incluso de las denuncias analyzed and proposed an antidiscrimination
interpuestas por la sociedad civil. Hemos method used in Spain, on a study of the
analizado y planteado un método Personnel Payroll of a company, as part of the
antidiscriminatorio utilizado en España, sobre fight against employment discrimination.
un estudio de la Planilla de Personal de una
empresa, como parte del combate en contra de Keywords
la discriminación laboral Employment discrimination, ILO, Inequality

Palabras clave
Discriminación laboral, OIT, Desigualdad

REVISTA I BEROAMERICANA DE D ERECHO DEL T RABAJO Y DE LA SEGURIDAD SOCIAL

| Nro. 5 | Vol. 3 | Primer Semestre de 2021 | pp. 61 - 78

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Capítulo I

L o primero que hicimos en el presente artículo, fue analizar la discriminación laboral,

desde su concepción, hasta los tipos y formas de manifestación de este fenómeno. Así
mismo, los diversos textos legales que dentro del marco jurídico de la Republica
Dominicana, buscan prevenir la ocurrencia de la discriminación en el mercado laboral.
También, los programas que desarrollan algunas instituciones, para una mejor protección de
los sectores víctimas de la discriminación. Es entonces, nuestra pretensión en el presente
artículo, servir como guía para sensibilizar, prevenir y educar a los ciudadanos dominicanos
sobre lo que es la discriminación laboral, y los mecanismos de defensas con que cuentan para
hacer valer sus derechos.

Toda persona física se supone sujeto de derechos que les son atribuidos desde el momento
en que se origina su vida; ya que eventualmente podrá desarrollar las aptitudes necesarias
para ser sujetos de derechos y obligaciones a partir de su nacimiento.

Existen una serie de derechos que buscan proteger a toda persona física, que parten de la
posibilidad de salvaguardar la existencia desde el momento de la concepción, la
individualización de la persona dentro del contexto de la sociedad en que nace y se desarrolla,
hasta la protección de todo lo que deja tras su paso por la vida. A dichos derechos se les
denomina comúnmente derechos humanos o derechos fundamentales, entre otras
terminologías que también se utilizan para referirse a ellos (Castillo, 2000, p. 15-16).

En este sentido, uno de los derechos fundamentales de mayor importancia, se trata del
Derecho a la Igualdad, por lo menos para nuestra investigación y nuestra concepción
personal. Todo ser humano tiene acceso a este derecho fundamental, intrínseco de todo
individuo, desde el momento de su nacimiento hasta su muerte. Tenemos derecho a tener
igualdad en la protección, el tratamiento y las obligaciones ante el Estado, el país y la
comunidad en la que vivimos. Sin embargo, este presupuesto de igualdad no siempre ocurre
debido a la existencia del fenómeno conocido como la discriminación.

Una discriminación, la constituye: (Código Penal de República Dominicana, articulo 336)

Toda distinción realizada entre personas físicas en razón de su origen, edad,

de su sexo, de su situación de familia, de su estado de salud, de sus
discapacidades, de sus costumbres, de sus opiniones políticas, de sus
actividades sindicales, su ocupación, de su pertenencia o de su no pertenencia,
verdadera o supuesta, a una etnia, una nación, una raza o una religión
determinada.

A este respecto, con el fin de protegen a los colectivos discriminados y buscar tanto
concientizar como evitar el fenómeno de la discriminación, se han implementado la

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protección en contra ella y la prohibición de la misma, en los textos legales tanto de carácter
nacional como internacional.

La Constitución de la República Dominicana, en su Artículo 39, consagra el derecho a la

igualdad y la no discriminación cuando establece que:

Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, reciben la misma
protección y trato de las instituciones, autoridades, y demás personas y gozan
de los mismos derechos, libertades y oportunidades, sin ninguna
discriminación por razones de género, color, edad, discapacidad,
nacionalidad, vínculos familiares, lengua, religión, opinión política o
filosófica, condición social o personal. En consecuencia:
1) La República condena todo privilegio y situación que tienda a
quebrantar la igualdad de las dominicanas y los dominicanos, entre quienes
no deben existir otras diferencias que las que resulten de sus talentos o de sus
virtudes;
2) Ninguna entidad de la República puede conceder títulos de nobleza ni
distinciones hereditarias;
3) El Estado debe promover las condiciones jurídicas y administrativas
para que la igualdad sea real y efectiva y adoptará medidas para prevenir y
combatir la discriminación, la marginalidad, la vulnerabilidad y la exclusión;
4) La mujer y el hombre son iguales ante la ley. Se prohíbe cualquier acto
que tenga como objetivo o resultado menoscabar o anular el reconocimiento,
goce o ejercicio en condiciones de igualdad de los derechos fundamentales de
mujeres y hombres. Se promoverán las medidas necesarias para garantizar la
erradicación de las desigualdades y la discriminación de género;
5) El Estado debe promover y garantizar la participación equilibrada de
mujeres y hombres en las candidaturas a los cargos de elección popular para
las instancias de dirección y decisión en el ámbito público, en la
administración de justicia y en los organismos de control del Estado.

De este artículo, podemos ver cómo el legislador pretende proteger a las personas al tratar de
erradicar la discriminación refiriéndose a sus diversas manifestaciones. En su numeral 1, se
refiere al fenómeno conocido como la discriminación positiva, el cual veremos más adelante,
permitiéndose únicamente la discriminación en los casos en que la misma sea producto de
los talentos y virtudes de cada persona como individuo. Los numerales 2 y 5 se refieren a la
prevención de la discriminación por causas políticas, prohibiendo que las instituciones del
Estado puedan otorgar títulos de nobleza o de cualquier otra índole para privilegiar a una
persona o grupo, dándole la oportunidad tanto al hombre como a la mujer de participar en la
vida política y en el ámbito de control y administración de la sociedad en que vivimos. El
numeral 3 se refiere a la discriminación por la proveniencia de determinado estrato social, y
por factores económicos, al querer evitar y proteger a los sectores menos favorecidos de la
comunidad. Y, finalmente, el numeral 4 se refiere a la discriminación por género o en razón
de sexo, dándoles al hombre y la mujer una condición de igualdad ante la ley y la sociedad.

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El derecho a la no discriminación, también se establece en la Declaración Americana de los

Derechos y Deberes del Hombre, en su Art. 2, cuando dice que “todas las personas son
iguales ante la Ley y tienen los derechos y deberes consagrados en esta declaración sin
distinción de raza, sexo, idioma, credo ni otra alguna”. La Convención Interamericana sobre
Derechos Humanos, de fecha 22 de noviembre de 1969, en su Art. 24 establece la igualdad
ante la ley, cuando dice que “todas las personas son iguales ante la ley. En consecuencia,
tienen derecho, sin discriminación, a igual protección de la Ley”.

Asimismo, este derecho se encuentra igualmente establecido en la Declaración Universal de

los Derechos Humanos en su Artículo 1, que establece que “todos los seres humanos nacen
libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben
comportarse fraternalmente los unos con los otros”; en su Artículo 2, que dice que “toda
persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta declaración, sin distinción
alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole,
origen nacional, social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición”; y, en su
Artículo 7, que estipula que “todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a
igual protección de la ley”.

“Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta
Declaración y contra toda provocación a tal discriminación”. También, podemos ver la
consagración de este derecho en el Artículo 26 del Pacto Internacional de los Derechos
Civiles y Políticos, que dice: que

Todas las personas son iguales ante la ley y tienen derecho sin discriminación
a igual protección de la ley. A este respecto, la ley prohibirá toda
discriminación y garantizará a todas las personas protección igual y efectiva
contra cualquier discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma,
religión, opiniones políticas o de cualquier índole, origen nacional o social,
posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social

Así como la discriminación se encuentra ampliamente protegida en los diversos textos legales
nacionales e internacionales, tiene igualmente una extensa gama de manifestación, ya que
son muchos los factores que inciden y propician a la misma: en razón de sexo, edad, raza,
discapacidad, etc., por lo que existen diversos tipos de discriminación dependiendo del factor
que influya en la misma.

Como expresamos anteriormente son muchos los tipos de discriminación existentes, que se
manifestarán dependiendo de cuáles sean los factores incidentes en la misma, según tenemos
(Recursostic.com, s.f.):

1. Discriminación racial o étnica: este tipo de discriminación se produce

cuando una persona, o grupo, es tratada como inferior por su pertenencia a una
determinada raza o etnia.

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2. Discriminación religiosa: esta se da cuando una persona, o grupo, recibe un

trato desfavorable por el hecho de no practicar la creencia religiosa
mayoritaria a la que pertenece la sociedad en la que vive, o por no profesar
creencia alguna.

3. Discriminación política: se manifiesta cuando algunas personas no tienen

la posibilidad de expresar libremente sus convicciones políticas porque viven
bajo la opresión de gobiernos totalitarios o dictatoriales.

4. Discriminación sexual: este tipo de discriminación viene desarrollándose a

lo largo de la historia gracias a la creencia de que el sexo masculino era
superior al sexo femenino; de ahí la denominación de que los hombres
constituyan el sexo fuerte y las mujeres el sexo débil; y así quedaban ellas
relegadas al ámbito doméstico, pues se pensaba que no tenían capacidad
intelectual ni fuerza física suficiente para el trabajo.

5. Discriminación de nivel cultural y económico: esta se produce cuando

algunas personas consideran a otras inferiores por el hecho de que no hayan
tenido acceso al mismo tipo de educación o formación que ellas, o porque no
hayan podido disfrutar de una buena situación económica a lo largo de sus
vidas.

6. Discriminación estética: este tipo de discriminación se produce cuando una

persona es tratada de forma inferior porque su imagen personal no encaja con
el ideal de belleza establecido en la sociedad en la que vive.

7. Discriminación por edad: esta tiene lugar cuando se trata con inferioridad o
se menosprecia a las personas que no tienen una determinada edad.
Generalmente goza de mejor consideración social, la franja de edad en la que
sus miembros están insertos en el mundo laboral (que oscila aproximadamente
entre los 25 y los 60 años).

8. Discriminación por discapacidad: este tipo de discriminación tiene lugar

cuando una persona es menospreciada o infravalorada por sufrir algún tipo de
discapacidad, bien sea física o mental.

9. Discriminación por enfermedad: esta se manifiesta cuando algunas

personas son tratadas con cierto recelo o desprecio por el hecho de padecer
alguna enfermedad.

Otra forma de manifestación del fenómeno de la discriminación ocurre en la prohibición de

esta y la protección en su contra que se da en los textos legales. En este sentido, la
discriminación puede ser directa o indirecta.

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La discriminación ocurre en todo tipo de contexto laboral. Son muchas las formas en que se
manifiesta, y la misma entraña un trato desigual por diversas razones, como lo son, por
ejemplo, la raza, el color, el sexo, entre otras, lo cual genera un deterioro en la igualdad en
las oportunidades de empleo y el trato que se le da a cada trabajador. Este fenómeno, coarta
a las personas en su capacidad de desarrollarse y de escoger y realizar sus aspiraciones
profesionales y personales, sin importar que tanto se destaquen en las mismas, provocando
que las personas dejen de sentir gratificación por el trabajo y se genera un sentido de
humillación frustración e impotencia.

La discriminación en el ámbito laboral puede ocurrir desde la descripción de los

requerimientos para determinado tipo de trabajo que aparecen en los avisos de empleo, en la
selección, evaluación, contratación y despido del personal de una empresa, en los términos y
condiciones de empleo, así como también en la remuneración, la participación en los
beneficios, y en las decisiones sobre quién recibe capacitación y qué tipo de capacitación se
brinda, en la elección de a quién se tiene en cuenta y selecciona para los promoción a mejores
posiciones dentro del empleo, y a quien se dejara cesante en los casos en que la empresa deba
recurrir a una reducción de personal. Son muchas las formas en que puede manifestarse, sin
embargo, para delimitar la existencia de esta, hace falta la presencia de determinados
factores.

La discriminación laboral contiene elementos que nos permiten tipificarla, para poder
discernir en qué casos se produce este fenómeno, y en cuáles no. Son dos las vertientes en
las que se presentan dichos elementos; en primer lugar, cuando la misma tiene lugar durante
la búsqueda del empleo (discriminación fuera de la empresa); y, en segundo lugar, cuando se
produce dentro del ambiente laboral, es decir, una vez obtenido el empleo (discriminación
dentro de la empresa)

En el primer caso, la discriminación fuera de la empresa, deben de manifestarse los siguientes

elementos para que dicho fenómeno se constituya, a saber:

1. El puesto de trabajo que se intenta conseguir debe de ser un puesto que vaya
acorde con las leyes de la República Dominicana; en otras palabras, debe de ser un
empleo lícito. Este elemento puede verse de manifiesto en la Constitución de la
República Dominicana, en sus Artículos 47 sobre la libertad de asociación
(Constitución Política de RP), Artículo 48 sobre la libertad de reunión
(Constitución Política de RP), y el Artículo 50 sobre la libertad de empresa
(Constitución Política de RP). Así mismo, en favor de este factor, el Artículo 265
del Código Penal dominicano, consagra el delito de Asociación de Malhechores,
prohibiendo cualquier asociación, reunión o empresa que se constituya para
desarrollar fines ilícitos y cometer crímenes. (Código Penal dominicano)

2. Para la elección de una persona por sobre otra, deben de haber tenido ambas
iguales o similares condiciones para poder desempeñar el cargo que se está
ofertando. Este indicio es muy difícil de detectar, y mucho más de probar, en

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especial cuando el número de candidatos aspirando a la obtención de un empleo es

muy elevado; en cambio, cuando el número de aspirantes es reducido, resulta
posible que se analicen las diferencias existentes entre los candidatos que se
postularon, para así determinar que la elección de la persona que desempeñará el
puesto de trabajo, haya sido basada en las aptitudes para el desenvolvimiento en
dicho trabajo, y no en factores superfluos y discriminatorios;

3. Que dentro del proceso de elección para el empleo se hayan hecho diferencias
discriminatorias que hayan impedido a los aspirantes al puesto la oportunidad de
acceder a ese puesto de trabajo. Este elemento constituye en sí mismo la clave
principal para determinar la existencia de la discriminación. Desde el momento
mismo en que el empleador se basa en motivos distintos a los requeridos para el
desempeño del empleo para elegir a quien ocupará el puesto de trabajo, desde ese
instante habrá discriminación; y,

4. Que el empleador este consciente de que las diferencias que hizo o hace al
momento del proceso de contratación, son ajenas al trabajo que se estará
realizando. Existen autores que consideran que sin la existencia de este factor en
adición al hecho de que el empleador se base en motivos distintos a las cualidades
del trabajador para su contratación para un puesto de empleo, la discriminación
como tal no se tipifica; pues el empleador debe saber que está haciendo un mal a
otro. En otras palabras, debe de existir la intención por parte del empleador de
causar un mal a uno para poder así favorecer a otro (Sole, 1995).

La segunda vertiente en la que se constituye la discriminación laboral se refiere a la que se

manifiesta dentro de la empresa, dentro del ambiente laboral. En esta, los elementos que la
tipifican son los siguientes, a saber:

1. Que los trabajadores que se estén desempeñando en determinada labor (deben

ser varios), posean iguales condiciones y de igual categoría para el trabajo. En este
caso, debe de tratarse de una categoría o rama de trabajo específica y ejecutada por
varios empleados a la vez, en la que las capacidades y habilidades para realizar
dicho trabajo, deban ser comunes a todos los trabajadores que la vayan a realizar;

2. Que entre los trabajadores referidos en el numeral anterior, a pesar de que

ostenten iguales condiciones e igual categoría para el trabajo, se haga una
distinción entre unos y otros. En cuanto a este factor, se evidencia por el hecho de
que el empleador se encuentra inclinado a favorecer a unos trabajadores y a otros
no;

3. Que la distinción que se haga entre los trabajadores no sea producto de los
aspectos referentes a su eficiencia para el desempeño de la labor, ni de las
cualidades del trabajador para realizar la misma. Es decir, que el trato desigual
viene dado por motivos que no guardan relación con las cualidades y la

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productividad del trabajador a la hora de desarrollar sus labores, sino más bien lo
hace tomando en cuenta aspectos discriminatorios desligados de las aptitudes que
se deberán poseer para el empleo; y,

4. Que el empleador esté consciente de que las diferencias en las que incurre con
respecto al trato desigual de los trabajadores no están relacionadas con su trabajo.
Sin esta intención, la discriminación laboral no se tipifica. Debe de tratarse en este
caso, de una actitud considerada ofensiva a la dignidad de la persona, que el
empleador ostente hacia uno o varios de los trabajadores, actitud que la sociedad
no tolere como práctica normal para el desempeño de un empleo (Sole, 1995).

Como podemos ver, los elementos constitutivos de la discriminación laboral, en cualquiera

de las dos vertientes en que se manifiesten, tienen como factor incidente principal, las
actitudes que emplea con relación al trabajador, el empleador que comete la falta; el cual no
considera el tipo de trabajo que se va a desempeñar, ni las cualidades y talentos para realizar
la labor, ni la productividad del trabajador; sino que se deja influenciar de factores superfluos
de carácter social, o incluso por prejuicios físicos y estereotipos, que provocan una actitud
discriminatoria de parte del empleador hacía en trabajador.

La discriminación laboral es una realidad en la que se vive a diario en nuestro país. Los
trabajadores dominicanos son objeto dentro de su vida cotidiana, a exclusión por razones que
van desde el nivel de sus estudios, su nivel social o posibilidades económicas hasta el color
de piel que posea cada individuo. Sin embargo, entre las más notorias y que suceden con más
frecuencia, podemos encontrar la discriminación por género; por el origen social, raza o etnia;
por edad; o incluso por discapacidad.

Como ya vimos en el texto anterior es un problema generalizado en la mayoría de la

población productiva, no solo de la República Dominicana, sino también del mundo entero
es por ende que entendemos que todos los países debemos luchar con cuerpo y alma para su
erradicación. Si bien algunas de las formas de manifestación de este fenómeno se han
reducido a lo largo de la historia, muchas continúan aun siendo un elemento de la vida
cotidiana, y de carácter permanente en el lugar de trabajo. Incluso, en la actualidad, las formas
más flagrantes de discriminación han tomado nuevas y más sutiles maneras de revelarse,
como por ejemplo lo es el acoso moral.

La Organización Internacional del Trabajo hace responsable de las constantes formas de

discriminación, a los perjuicios, estereotipos y a aquellas instituciones que han ignorado las
medidas, tanto legislativas como políticas, que han tratado de implementar los Estados,
empleadores y trabajadores en busca de disminuir, y erradicar, los rastros de desigualdad en
el entorno laboral, y propugnar por una igualdad de oportunidades, y desarrollo equitativo
dentro de su ámbito de trabajo.

Son muchos los factores que influyen en la discriminación laboral, y que la propician; y
diversas las formas en que se manifiesta dentro del ámbito laboral. Pero, sobre todo, en lo

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que podemos concluir para definirla legalmente, es estableciendo que la discriminación

laboral, no es más que una flagrante violación al principio de la igualdad.

La Igualdad como principio constitucionalmente protegido y antítesis de la

discriminación

Entre los principios que rigen el Derecho Laboral, uno de los más importantes es el
Principio de la Igualdad. Este es un principio constitucionalmente consagrado en el precitado
Artículo 39 de nuestra Carta Magna.

Del análisis de dicho artículo, se pueden inferir tres aspectos que se encuentran relacionados
entre sí. Dichos aspectos son:

1) La Igualdad como Principio Fundamental y Valor Suprema. Esto es que toda

situación de desigualdad o de discriminación, resulta incompatible con el orden
constitucional; situación que se advierte en la primera parte del referido Artículo
39, cuando se establece expresamente que toda persona debe ostentar igualdad de
condiciones “sin discriminación por razones de género, color, edad, discapacidad,
nacionalidad, vínculos familiares, lengua, religión, opinión política o filosófica,
condición social o personal”. En este mismo sentido, debemos decir, además, que
el Estado se encuentra directamente vinculado a este principio constitucionalmente
establecido, ya que éste, está obligado a promover las condiciones necesarias para
que la igualdad sea efectiva;

2) La Igualdad en el Trato dado por la Ley. Este aspecto lo podemos ver cuando
dicho artículo establece que “todas las personas nacen libres e iguales ante la ley,
reciben la misma protección y trato de las instituciones, autoridades y demás
personas y gozan de los mismos derechos, libertades y oportunidades”. Este
mensaje está dirigido específicamente al Estado Dominicano como ente que, a
través de sus poderes, crea las leyes y las aplica. En este sentido, el Estado debe
dar la protección debida a todos sus ciudadanos sin distinción alguna. Este aspecto
podemos verlo, además, en el numeral 1) del referido Artículo 39, el cual “condena
todo privilegio o situación que tienda a quebrantar la igualdad de las dominicanas
y los dominicanos”; y,

3) La Igualdad en la aplicación de la ley. Esto implica, además de un límite al

legislador en su ejercicio legislativo, el hecho de que ningún órgano estatal puede
dar un trato diferente a personas que se encuentran en condiciones similares;
constituyendo esto una barrera en contra de la arbitrariedad de los Poderes
Públicos, particularmente del Poder Legislativo. La aplicación de la ley debe ser
igual para todos los ciudadanos, sin más diferencias que las que establece la propia
ley, cuyas causas de desigualdad deben ser de carácter objetivo y razonable.

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El Principio de Igualdad, es un principio fundamental totalmente contrario a cualquier

situación de desigualdad. Es por esto, que toda discriminación es incompatible con el orden
constitucional que propugne por la igualdad entre todos sus ciudadanos (Fundación
Institucional y Justicia [FINJUS], 2012, p. 96-99).

El Principio de la Igualdad, está muy vinculado al Principio de la Legalidad. Esto es, que
todas las personas deben ser tratadas como iguales bajo un único criterio de diferenciación,
que no sea otro que de las diferencias que puedan surgir en base a su desempeño y propias
aptitudes y capacidad para un puesto de trabajo. Las personas nacen libres, y esto quiere decir
que, en todo momento, el referido principio persigue la abolición de la esclavitud, por lo que
las relaciones entre las personas, no debe desarrollarse como si unas fueran instrumento de
otras.

La igualdad, por su naturaleza, no es únicamente un principio, un derecho fundamental o un

derecho subjetivo público de los ciudadanos; sino que consiste además en un principio
general del derecho, cuyas dimensiones impactan a la sociedad en general, y que vinculan a
un Estado social y democrático de derecho.

El Estado dominicano, tiene como meta inicial garantizar la no existencia de privilegios y

situaciones de ventajas que promuevan la desigualdad entre los hombres y las mujeres. Así
mismo, debe desarrollar todas las condiciones para que no se generen situaciones de
privilegios que signifiquen desventajas discriminatorias, producto de la arbitrariedad y la
ilegalidad. Por esto, el Estado Dominicano no puede conceder ni títulos de nobleza ni
reconocer distinciones hereditarias1.

En caso contrario, el Estado debe disponer las medidas necesarias para combatir todas las
situaciones que promuevan la desigualdad, no solamente para aquellos que se encuentren en
un estado de posibilidad a ser discriminado por situaciones, ya sean económicas, físicas o
mentales, como también para los grupos marginados o discriminados. La discriminación
constituye una trasgresión al derecho de la igualdad cuando se crean políticas de
diferenciación prohibidas. Para contrarrestar la discriminación directa o deliberada, la
marginalidad y la exclusión, surge del derecho antidiscriminatorio, el cual va en auxilio de
aquellos grupos de personas que, por su condición particular, son socialmente diferenciados,
auxiliando a los mismos para que puedan gozar y disfrutar sus derechos en condiciones de
igualdad (FINJUS, 2012, p. 98-99)

Este Principio de Igualdad constitucionalmente consagrado, lo podemos encontrar en el

Código de Trabajo, por ejemplo, en el precitado Articulo 194, que trata sobre la igualdad de
salario en base a un trabajo de igual valor o en idénticas condiciones. Por otra parte, en este
mismo sentido, en el III Principio Fundamental del Código de Trabajo (cita código del
trabajo), en su parte in fine, establece lo que puede parecer una contradicción en cuanto a la

1 Léase artículo 96 numeral 1 Constitución Política de República Dominicana.

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protección y regulación de los derechos y obligaciones de empleadores y trabajadores,

cuando establece que:

No se aplica a los funcionarios y empleados públicos, salvo disposición

contraria de la presente ley o de los estatutos especiales aplicables a ellos.
Tampoco se aplica a los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía
Nacional. Sin embargo, se aplica a los trabajadores que prestan servicios en
empresas del Estado y en sus organismos oficiales autónomos de carácter
industrial, comercial, financiero o de transporte.

De aquí podemos desprender que, aunque no a todas las personas que participen de una vida
laboral activa, se les aplique el Código de Trabajo, debemos tener en consideración que, si
todos pueden estar afectados del fenómeno de la Discriminación Laboral, con la única
salvedad de que sus casos particulares serán regulados por las leyes adjetivas autónomas al
referido Código.

Capitulo II
En este mismo sentido, debemos establecer que esto es así, ya que todos los
trabajadores, no importando si no se les aplican las disposiciones del Código Laboral
dominicano, también se encuentran protegidos de la discriminación laboral, ya que este es
un mal que puede afectar a todas las personas sin distinción alguna, y gracias a que el
Principio de la Igualdad que recae sobre toda persona humana, está previsto en nuestra Carta
Magna sin hacer diferenciaciones.

Como podemos ver, el Principio de la Igualdad es una medida tomada por el legislador, en
aras de combatir la discriminación, no solo en el entorno laboral, sino en todos los ámbitos
de la vida humana. Este principio, solo se ve limitado por las propias virtudes y/o defectos
que pueda poseer un individuo, y, en consecuencia, cabe destacar, que no tienen cabida
dentro del ámbito de la discriminación laboral, las preferencias que pueda tener un empleador
sobre un trabajador en lugar de otro, que resulten producto de sus experiencias laborales,
calificaciones, o por no ostentar condiciones acordes con las requeridas para desempeñar
determinado puesto de trabajo.(Organización Internacional del Trabajo [OIT], 2012, p. 23-
24)

Las acciones positivas, se encuentran definida por una serie de rasgos que enumeraremos
más adelante, según Sierra Hernaiz (1999, p. 75-85) a saber:

1. El establecimiento de metas o cuotas dentro de un empleo para proteger a

una minoría; como por ejemplo sucede con el empleo protegido destinado a
las personas con discapacidad, a las que se les reserva un porcentaje del saldo
total de trabajadores de una determinada empresa, para fomentar su
integración a la comunidad económicamente productiva;

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REVISTA IBEROAMERICANA DE D ERECHO
DEL T RABAJO Y DE LA S EGURIDAD SOCIAL Nro. 5 | Vol. 3 | Primer semestre de 2021

2. Las acciones positivas son instrumentos ideados contra los efectos de

conductas y actos discriminatorios sistemáticos y colectivos. Esto quiere
decir, que para que la acción positiva actúe en protección a un sector
poblacional, no se precisa necesariamente que haya existido previamente un
acto discriminatorio concreto o fácilmente identificable, sino que por el simple
hecho de que se presuponga que existen dificultades para que esa minoría
accede y se desarrolle en un entorno laboral, se le otorga protección para
propugnar la existencia de verdaderas condiciones de igualdad.
3. La acción positiva, no toma en cuenta las diferencias concretas que dan
origen a los actos discriminatorios; sino más bien, tomo en cuenta datos más
generales; como, por ejemplo, en lugar del sexo del trabajador, tomara en
cuenta el porcentaje de mujeres u hombres que se desempeñan en
determinados trabajos, que no están conectados a una discriminación clara y
concreta.
4. Que la referida acción, posee una triple vertiente, en cuanto a que: a) es una
forma de evitar que las conductas discriminatorias sigan produciéndose; b) es
una forma de compensar a la minoría discriminada por las conductas
discriminatorias del pasado que continúan proyectando aún sus efectos en el
presente; y, c) es una forma de valoración de las diferencias que se suscitan
en el trabajo de los determinados sectores poblacionales víctimas de la
discriminación.
5. Para que pueda concurrir la acción positiva, debe de tratarse de una
comunidad o sector poblacional históricamente discriminado, el cual se
encuentre en la capacidad de desempeñar determinada labor, cuando no pueda
fomentarse la igualdad de oportunidades a favor de esa minoría, o que se
demuestre que el grupo beneficiario sigue estando en una situación de
desigualdad de hecho y se implanten con carácter temporal.
6. Las medidas de acción positiva tienen que superar el juicio de razonabilidad
y proporcionalidad; es decir, que se debe analizar y comprobar que son
medidas eficaces en el cumplimiento de los objetivos de disminución y
erradicación de la discriminación.

Para combatir la Discriminación Laboral, es necesario el afianzamiento de nuevas políticas

que sean insertadas por ante la administración pública y otras instituciones, ya sean públicas
o privadas. Debe crearse un Plan de Igualdad y un Plan de Acción del mismo, así como
también debemos fomentar la sensibilización de la comunidad en general, en aras de
propugnar por la igualdad de oportunidades. A elaboración y puesta en marcha de programas
que persigan la igualdad de oportunidades, se4 han dedicado diversos organismos, como por
ejemplo la Unión Europea, (1997, artículo 2) a través del Tratado de Ámsterdam, entidad que
actúa para ello desde 1982.

En la República Dominicana, existen diversos organismos que destinan sus operaciones a la

protección de determinadas minorías. Algunos de estos, son, por ejemplo, el Consejo
Nacional de la Discapacidad (CONADIS), la Fundación Dominicana de Ciegos (FUDCI), la

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LA DISCRIMINACIÓN LABORAL EN REPÚBLICA DOMINICANA | Juan Rosario y Yudelka Duran

Escuela Nacional de Sordomudos, el Despacho de la primera dama de la República

Dominicana, el Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID), entre otros.

Uno de los mecanismos que más han servido para la regularización y el combate contra el
fenómeno de la Discriminación Laboral, ha sido la Jurisprudencia.

Son muchos los casos que se han suscitado en nuestro país sobre problemas de discriminación
hacia determinadas personas dentro de su ambiente de trabajo, los cuales han llegado hasta
los Tribunales de la República, y han servido para sentar precedentes al respecto del tema de
la discriminación.

Entre las sentencias más interesantes y destacadas que pudimos observar dentro de la
Jurisprudencia reciente de nuestro país, podemos encontrar las siguientes sentencias de la
Suprema Corte de Justicia:

Sentencia No. 24, del 20 de enero de 2010

Recurso de casación interpuesto por Productos Medicinales, C. por A., en contra de

la señora Ángela Xiomara Estévez Jáquez, entendiendo la Suprema Corte de Justicia, que
dicho despido se realizó de manera injustificada, y propugnando una discriminación notable
en contra de la demandante, a esta enfermarse y al mismo tiempo su empleador ejercer un
desahucio en su contra, dicho Alto Tribunal estableció lo siguiente:

Considerando , que la sentencia impugnada expresa lo siguiente: “Que al

constituir las actuación antes indicada un acto de discriminación y que la
misma al estar consignada como un derecho en la normativa laboral vigente,
configura un abuso en su ejercicio, resulta necesario acoger la presente
demanda en reparación en daños y perjuicios fundada sobre la base de ese
mismo hecho, evaluando la compensación de los daños en la suma de
RD$250,000.00 a la cual debe ser condenada la empresa recurrente”;

Considerando, que, en la especie, el Tribunal a-quo, tras ponderar la prueba

aportada, de manera principal las declaraciones de los testigos aportados por
las partes, llegó a la conclusión de que la causa real por la que la recurrente
puso término al contrato de trabajo de la recurrida fue su condición de salud,
al estar afectada de un cáncer maligno de mama, para lo cual recurrió al
desahucio de la misma;

Considerando, que a pesar de que el desahucio es un derecho que puede ser

ejercido sin que la parte que haya decidido poner término al contrato de trabajo
unilateralmente alegue causa, su ejercicio puede comprometer la
responsabilidad del actor si el mismo es ejercido en forma tal que constituya
un abuso de derecho o un acto de discriminación por tener una motivación

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REVISTA IBEROAMERICANA DE D ERECHO
DEL T RABAJO Y DE LA S EGURIDAD SOCIAL Nro. 5 | Vol. 3 | Primer semestre de 2021

solapada y una intención encubierta de afectar derechos de la parte contra

quien se ejerce (…)

En el presente caso, se puede verificar una discriminación notable. La señora Ángela

Xiomara Estévez Jáquez, era un trabajadora ejemplar, pero al momento de enfermarse, sus
empleadores entendieron que no podían tenerla bajo esas condiciones; y a pesar de que el
desahucio es un derecho que puede ser ejercido sin que la parte que haya decidido poner
término al contrato de trabajo unilateralmente alegue causa, su ejercicio puede comprometer
la responsabilidad del actor, si el mismo es ejercido en forma tal que constituya un abuso de
derecho o un acto de discriminación, por tener una motivación solapada y una intención
encubierta de afectar derechos de la parte contra quien se ejerce. Es por esto que entendemos
que la presente sentencia de la Suprema Corte de Justicia reforzó los criterios en cuanto a la
discriminación por enfermedad.

Por ende, dicha sentencia fue casada, de la que entendemos la mejor manera, cumpliendo con
las normas legales pertinentes, en vista de que la discriminación en sus diferentes formas
consiste en una violación al Principio de Igualdad; principios que es promovido por la
Constitución Dominicana, en su citado Artículo 39.

Sentencia No. 41, del 25 de enero del año 2006.

Considerando, que la Corte a-qua para llegar a la conclusión

anteriormente señalada determinó, como era su deber, la existencia de un
cargo de mayor retribución que el anteriormente desempeñado por la
recurrida, y que esta sustituyó de forma definitiva en ese cargo de mayor
retribución a otro funcionario de la misma categoría; por otro lado la Corte a-
qua comprobó que la recurrida fue incumbente de dichas funciones por casi
11 meses, lo que le daba el carácter de permanencia en la referida prestación
de servicios.

En la presente sentencia, podemos ver expresamente una violación, tanto en razón del salario
devengado, como respecto al trato igualitario. El Banco BHD, en ningún momento aumentó
el salario de la recurrida, pese a ésta haber sido ascendida a Gerente, siendo por igual la única
mujer del Banco en llegar a ocupar dicho puesto. A este respecto, sostenemos que hubo una
notable violación al Código de Trabajo, específicamente en su Artículo 194, el cual expresa
que “a trabajo igual, en idénticas condiciones de capacidad, eficiencia o antigüedad,
corresponde siempre igualdad de salario cualesquiera que sean las personas que lo realicen”.

La OIT entiende que la expresión: “igualdad de remuneración, por un trabajo de igual valor,
en los tipos de remuneración se fijarán, según la naturaleza del trabajo, sin que se haga
discriminación alguna en relación con el sexo del trabajador” (OIT, 2013, p. 23 y 28)

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LA DISCRIMINACIÓN LABORAL EN REPÚBLICA DOMINICANA | Juan Rosario y Yudelka Duran

En esta sentencia de fecha 12 de agosto del año 2004, dictada por la Corte de Trabajo del
Departamento Judicial de La Vega; ratificada por la Suprema Corte de Justicia (No. 41, de
fecha 25 de Enero del año 2006, Págs. 1107-1118), relativa a una señora que trabaja en una
institución bancaria, y que entendía que el salario a recibir durante el ascenso realizado en su
trabajo de ahí que: “La corte a-qua para llegar a la conclusión anteriormente señalada
determinó, como era su deber, la existencia de un cargo de mayor retribución que el
anteriormente desempeñado por la recurrida, que esta sustituyó de forma definitiva en ese
cargo de mayor retribución, a otro funcionario de la misma categoría. Por otro lado, la Corte
A-qua comprobó que la recurrida fue incumbente de dichas funciones por casi 11 meses; lo
que daba el carácter de permanencia en la referida prestación de servicios”.

En consecuencia, dice la Suprema Corte de Justicia:

Que al quedar establecido por ante la corte-a qua, como puede comprobarse
en la motivación de la sentencia impugnada, que el salario que debería
devengar la recurrida era de treinta y siete mil pesos oro dominicanos (RD$37,
000.00) y no de Dieciochos Mil pesos Oro Dominicanos (RD$118,000.00)
mensuales, es obvio que las sumas contenida en la oferta real de pago de las
prestaciones laborales y de los derechos adquiridos resultaba insuficiente para
cubrir los créditos de que era beneficiara la recurrida de conformidad con las
disposiciones del Código de Trabajo, referentes al desahucio, bonificación,
salario de navidad, auxilio de cesantía, preaviso, vacaciones, por lo que la
corte-a qua procedió conforme al derecho de hacer un nuevo cálculo del
salario diario que le correspondía a la recurrida.

Conclusión
A modo de conclusión de nuestro artículo, pudimos ver que son muchos los factores
que influyen en la discriminación laboral, y que la propician; y diversas las formas en que se
manifiesta dentro del ámbito laboral. Pero, sobre todo, con nuestro artículo, quisimos que se
estableciera que la discriminación laboral, no es más que una flagrante violación al principio
de la igualdad.

Mediante el estudio comparado pudimos verificar que no se puede hablar de una disminución
en materia discriminación laboral en vista de que pese a los esfuerzos del Ministerio de
Trabajo de manera conjunta con la Organizaciones civiles e Organización Internacional de
Trabajo (OIT) aun en República Dominicana y así lo confirma el método de investigación de
planilla de personal donde nos refiere que en nuestro país se siguen practicando estas
desigualdades, partes de estas desigualdades muchas veces no son conocidas por el
Ministerio de Trabajo ni por los tribunales laborales.

Tanto los informes internacionales de la Academia Iberoamérica de Derecho Laboral y la

Organización Internacional de Trabajo (OIT) donde nos dicen la triste realidad de nuestro
país no han puesto la debida atención requerida las autoridades para seguir, someter

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DEL T RABAJO Y DE LA S EGURIDAD SOCIAL Nro. 5 | Vol. 3 | Primer semestre de 2021

cumpliendo no solo con lo establecido en el código de trabajo sino por igual las disposiciones
del Código Procesal Penal y la constitución de la Republica Dominicana.

La discriminación es algo que ataña el desarrollo de los pueblos ya que las desigualdades,
crean faltas de oportunidades, lo que a su vez provoca grandes consecuencias en la economía
de un país.

Una política que contribuya a combatir la discriminación laboral y promover los derechos
humanos será la que garantice el acceso a la justicia para todos sin distinción, y que
contribuya con la autoridad de la jurisprudencia a depurar y enriquecer la legislación y con
la severidad de la pena a reparar el daño y restablecer el equilibrio social.

El trabajo es una función social que se ejerce con la protección y asistencia del Estado. Este
debe velar porque las normas del derecho de trabajo se sujeten a sus fines esenciales, que son
el bienestar humano y la justicia social. El estado dominicano debe llevar a cabo una
adecuada política social con miras a la consecución de un orden laboral justo.

En el país en la actualidad se ha iniciado el reordenamiento de la política social del Estado,

con lo cual se persigue una mayor focalización de poblaciones especialmente vulnerables y
una eficientizarían de las políticas laborales, para garantizar que la discriminación laboral no
siga creciendo, parte de esto lo tratamos en la presente tesis mediante los convenios realizado
por el Ministerio de Trabajo con organizaciones sociales.

Podríamos afirmar de manera de conclusión, que, desde el comienzo de la lucha por las
reivindicaciones laborales, se ha dado prioridad a las prestaciones y beneficios sociales de
los cuales deben disfrutar los trabajadores una de estas es la protección y de poder realizar
dimisión establecido en el código de trabajo por discriminación, como una forma de
compensación indirecta que mejore sensiblemente sus condiciones de salud, sociales,
intelectuales y económicas.

De manera definitiva para lograr la lucha contra la discriminación debemos enfocarnos en

que necesitamos de una economía que genere oportunidades de inversión, iniciativa
empresarial, desarrollo de calificaciones, puestos de trabajo y modos de vida sostenibles.

Un Estado que no garantice los derechos de sus trabajadores no es un estado, para lograr el
reconocimiento y el respeto de los derechos de los trabajadores y en particular de los
trabajadores desfavorecidos o pobres que necesitan representación, participación y leyes
adecuadas que se cumplan y estén a favor, y no en contra, de sus intereses.

Debemos promover tanto la inclusión social como la productividad al garantizar que mujeres
y hombres disfruten de condiciones de trabajo seguras e igualitarias, que les proporcionen
tiempo libre y descansos adecuados, que tengan en cuenta los valores familiares y sociales,
que contemplen una retribución adecuada en caso de pérdida o reducción de los ingresos, y
que permitan el acceso a una asistencia sanitaria apropiada como lo establece la OIT.

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LA DISCRIMINACIÓN LABORAL EN REPÚBLICA DOMINICANA | Juan Rosario y Yudelka Duran

Debemos establecer la participación de organizaciones de trabajadores y de empleadores,

sólidas e independientes, es fundamental para elevar la productividad, evitar los conflictos
en el trabajo, así como para crear sociedades cohesionadas.

La solución, por tanto, de los problemas inherentes a la discriminación por discapacidad

planteada en la presente tesis, no es sólo individual y requiere también cambios en los
entornos inmediatos (hogar, escuela, centros de trabajo, establecimientos comerciales, etc.),
en las estructuras sociales formales e informales existentes en la comunidad (transporte,
comunicaciones, seguridad social, políticas laborales, etc.), y también en las normas, criterios
y prácticas que rigen e influyen en el comportamiento y en la vida social de los individuos.

Finalmente esperamos que con el presente artículo se hayan podido llenar las expectativas
planteadas con relación al tema de la discriminación laboral, a su vez reconocer que la
discriminación laboral es un tema que conmueve y que requiere una responsabilidad
particular por parte del Estado para evitar que la discriminación laboral siga su curso.

Referencias bibliográficas.
Carlota Sole, Discriminación Racial en el Mercado de Trabajo, artículo: “Discriminación Laboral”,
(Madrid, Editora Consejo Económico y Social, Departamento de Publicaciones, 1995),
http://www.oocities.org/exocet_r/ney4.html (Acceso noviembre 6,2013).

Castillo Pantaleón, Juan Miguel (2000). Sujetos de derechos: compilación de la normativa vigente en
la República Dominicana hasta el 16 de agosto del año 2000 sobre personas humanas, niños,
niñas y adolescentes, mujeres, envejecientes, discapacitados, familia y población, Volumen
I. Santo Domingo: PUCMM.

El concepto de discriminación y su tipología. (s.f.). Recursostic.co. Recuperado de:

http://recursostic.educacion.es/secundaria/edad/4esoetica/quincena8/quincena8_contenidos_
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Fundación Institucionalidad y Justicia (2012) Constitución comentada, 3ra Edición, Santo Domingo,
Editora Búho.

Organización de Estados Americanos:

(1948) Declaración americana de los derechos y deberes del hombre. Bogotá.

(1969) Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José.

Organización de Naciones Unidas:

(1948) Declaración Universal de Derechos Humanos. París.

(1966) Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. New York.

Organización Internacional del Trabajo (2013). Manual de la Organización Internacional del Trabajo,
Informe 2013, Erradicación de la discriminación laboral. Ginebra.

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DEL T RABAJO Y DE LA S EGURIDAD SOCIAL Nro. 5 | Vol. 3 | Primer semestre de 2021

República Dominicana, Asamblea Nacional:

(1992) Código del Trabajo. Santo Domingo.

(2007) Código Penal. Santo Domingo.

(2010) Constitución de la República. Gaceta Oficial número 10561.1. Santo Domingo.

Unión Europea (1997) Tratado de Ámsterdam. Ámsterdam.

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