Salcedo - Irrupción y Continuidad en Las Vanguardias Latinoamericanas
Salcedo - Irrupción y Continuidad en Las Vanguardias Latinoamericanas
Salcedo - Irrupción y Continuidad en Las Vanguardias Latinoamericanas
: 0213-1498
ANTONIO SALCEDO*
Resumen
Las vanguardias latinoamericanas tienen una personalidad propia, por lo que no pue-
den considerarse meros epígonos de las europeas y deben resituarse al mismo nivel que éstas.
El análisis de su irrupción y desarrollo en los diferentes países (México, Cuba, Venezuela,
Brasil, Uruguay y Argentina), pone de manifiesto su naturaleza dual entre las tendencias
nacionalistas, de exaltación de las raíces prehispánicas, e internacional, asumiendo y desa-
rrollando la modernidad artística, a la búsqueda de un arte latinoamericano específico y dife-
rente.
Latin-America’s avant-gardes have a personality of their own; we can’ consider them as
simple extensions of European artistic movements: we should place them at the same level of
Western artistic traditions.
The analysis of their emergence and development within different nations (Mexico, Cuba,
Venezuela, Brazil, Uruguay and Argentina) reveals a duality between two tendencies: the natio-
nalist recovery of pre-Hispanic cultural roots, and the internationalism, assuming artistic moder-
nity, searching an specific Latin-American art.
* * * * *
* Profesor Titular del Departamento de Historia del Arte de la Universidad Rovira i Virgili.
Especialista en Arte Contemporáneo y Arte Latinoamericano.
72 ANTONIO SALCEDO
México
1
CARDOZA Y ARAGÓN, Luis, Pintura Contemporánea de México, México Era, 1974, p. 149.
74 ANTONIO SALCEDO
2
CARDOZA Y ARAGÓN, Luis, «Rufino Tamayo. Un nuevo ciclo de la pintura de México» en Gua-
temala con una piedra adentro, México, CEESTEM, Nueva Imagen, 1983, p. 101.
3
TAMAYO, Rufino, Rufino Tamayo Imagen y Obra escogida, México, Colección México y la
NBAM/95. En http//lemniscata.topcities.com/tamayo_acerca.html.
4
Idem.
5
ALBA, Víctor, Coloquios de Coyoacan con Rufino Tamayo, México, 1956. Colección Panoramas en
http//www.uammx/difusion/revista/dic99/sainz.html.
IRRUPCIÓN Y CONTINUIDAD DE LAS VANGUARDIAS LATINOAMERICANAS 75
6
ESPINOSA CAMPOS, Eduardo, Carlos Mérida un artista integral, México, Consejo Nacional para
la cultura y las Artes, 1996. Ed. Digital.
7
CONDE, Teresa del, México» en Arte Latinoamericano del S. XX, Madrid, Nerea, 1996, p. 32.
78 ANTONIO SALCEDO
Brasil
12
SALCEDO MILIANI, Antonio, Armando Reverón y su Epoca, Mérida, Universidad de los Andes,
Fundación Museo Armando Reverón, 2000.
13
SULLIVAN, Edward, Artistas latinoamericanos del siglo XX, Ayuntamiento de Sevilla y The Museun
of Modern Art, 1992, pp. 46-47.
14
MALFATTI, Anita, RASM, (revista Annual do Salo de Maio) nº 1, Sao Paulo, 1939) en Arte y
Arquitectura del Modernismo Brasileño (1917-1930), Caracas, Biblioteca Ayacucho, 1978, p. 15.
IRRUPCIÓN Y CONTINUIDAD DE LAS VANGUARDIAS LATINOAMERICANAS 79
15
AMARAL, Aracy, Prólogo, en Arte y Arquitectura del Modernismo Brasileño, op. cit., pp. XII-XIII.
16
AMARAL, Aracy, Tarsila do Amaral, Buenos Aires, Banco Velox, 1998, p. 199.
80 ANTONIO SALCEDO
Uruguay
17
FABRIS, Annateresa, «Figuras de lo Moderno» (posible) 1920 Brasil 1950, Valencia, IVAM Cen-
tre Julio González, octubre 2000-enero 2001, p. 48.
IRRUPCIÓN Y CONTINUIDAD DE LAS VANGUARDIAS LATINOAMERICANAS 81
18
GLUSBERG, Jorge, «El «otro mirar del Arte Latinoamericano» en Horizontes del Arte Latinoa-
mericano, Madrid, Tecnos, 1999, p. 47.
19
AA.VV., Pedro Figari, mito y memoria rioplatenses, Caracas, Fundación Museo de Bellas Artes,
2000.
20
Sobre Rafael Barradas, ver el artículo del profesor Manuel García Guatas en este mismo
número.
82 ANTONIO SALCEDO
el arte universal, representado por el arte abstracto. Como muy bien se-
ñala Mari Carmen Ramírez en un excelente artículo, Torres García no solo
legitimó la cultura prehispánica en el contexto de las demas civilizaciones, sino
que situó su contribución artística al mismo nivel de las de la antigüedad clásica.
Por otro lado... la noción de un constructivismo indígena, anterior a la época
colonial, presentaba al arte precolombino como el precursor de la abstracción moder-
nista y constructiva en la América, convirtiéndolo, a no dudarlo en el elemento
clave de la legitimación del uso de la abstracción como símbolo de identidad para
nuestros artistas21.
Argentina
21
RAMÍREZ, Mari Carmen, «Inversiones: la Escuela del Sur», en Heterotopías, Medio siglo sin lugar:
1918-1968, Madrid, Centro Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 12-XII-00–27-II-01.
En este mismo sentido resulta particularmente interesante el siguiente catálogo: AA.VV., Abs-
tracción el paradigma amerindio, Valencia IVAM, octubre 2001-enero 2002, en el cual se muestra
como culturas no europeas han incidido en la creación del arte abstracto. Además hay un artículo
de Cecilia de Torres. «Peregrinaje del arte amerindio en el que trata los viajes de los integrantes del
taller Torres García a los yacimientos precolombinos.
IRRUPCIÓN Y CONTINUIDAD DE LAS VANGUARDIAS LATINOAMERICANAS 83
Badi, Raquel Forner y Bigatti. Eran artistas que conocían las vanguardias
europeas y que traían nueva sabia a tierras americanas. Querían que su
país se pusiera al día de lo que ocurría a nivel internacional en el campo
artístico. La mayoría de estos creadores eran conscientes de la necesidad
de avanzar, de romper con una situación caduca, pero siempre con la
intencionalidad de generar un arte propio. Como señalara Figari:
Soy el primero en reconocer y admirar el soberbio grado de lucimiento y de cul-
tura alcanzado por ustedes, así como en deplorar nuestras deficiencias; pero si yo
fuese encargado por cualquier gobierno sudamericano, de venir a buscar vuestros
progresos me esmeraría en tomar sólo lo que nos conviene, dejando lo demás, Por
ahí ya llegaremos nosotros también, algún día, aun grado superior de civilización22.
Alfredo Guttero (1882-1932) vivió en Europa durante 23 años, prin-
cipalmente de París. En 1927 regresó a Buenos Aires donde se convirtió
en el impulsor de la renovación plástica. En 1927 fundó el Taller libre
de Arte en compañía de Raquel Forner, el escultor Alfredo Bigatti y Pedro
Dominguez Neira.
Fue el organizador del Nuevo Salón (1929) donde exponen las prin-
cipales figuras del arte del movimiento de vanguardia argentino: Xul Solar,
Emilio Pettoruti, Pedro Figari, Juan del Prete, Miguel Carlos Victorica,
Lino Enea Spilimbergo, Horacio Butler y Héctor Basaldúa, entre otros.
Guttero era un pintor de excelente formación, dentro de un plan-
teamiento tradicional, admirador del renacimiento italiano. Creó una
obra que se caracteriza por su sinceridad, por la solidez de su estructura,
por la síntesis que hace entre tradición y vanguardia. Su posición de pin-
tor reconocido fue muy importante en su labor para crear un ambiente
propicio para las nuevas formas de expresión.
En 1924 aparece el periódico Martín Fierro en el participaron Hector
Basaldúa, Bigatti, Horacio Butler, Emilio Pettoruti, Raquel Forner i Xul
Solar. Entre los críticos que tuvo esta revista figuran Córdova Iturburu,
Payró, Prebisch. Córdoba Iturburú, para referirse a este hecho, le llama
la revolución martinfierrista dada la importancia que tuvo este capítulo
del arte y la cultura argentina. Fundada por el poeta Evar Méndez reu-
nió a su alrededor a un grupo de jóvenes creadores, poetas, escritores,
pintores. El manifiesto publicado en el número cuatro redactado por Oli-
verio Girondo fue un revulsivo en la sociedad de la época por su crítica
corrosiva a lo tradicional y su alabanza de lo nuevo, dentro de una línea
similar a como lo había hecho el manifiesto futurista en Italia.
22
FIGARI, Pedro, «Hacia la eficiencia de América», La Prensa, Buenos Aires, 27 de junio de
1925. Citado por ARTUNDO, Patricia, «Los Años veinte en la Argentina, El ejercicio de la mirada»,
http://lehman.cuny.edu/cibeerletras/v03/Artundo.html.
84 ANTONIO SALCEDO
23
CÓRDOBA ITURBURU, 80 Años de Pintura Argentina, Buenos Aires, Ediciones Librería la Ciu-
dad, 1978, p. 42.
24
Idem, p. 44.
25
SULLIVAN, Edward J. Emillio Petorutti, Buenos Aires, Banco Velox, 2000, p. 3.
26
Es muy interesante el artículo de en el que demuestra que la producción de Petorrutti no
es un epígono de Picasso, sino una obra con personalidad propia, que desgraciadamente en los últi-
mos años en vez de ganar en prestigio, ha sido minusvalorada por la crítica y el mercado interna-
cional, como consecuencia del esquema tradicional del arte argentino —y se puede agregar latino-
americano en general y de la visión etnocéntrica que hemos esbozado al inicio de este artículo—.
Pacheco, Marcelo Eduardo, «La Argentina y una mirada trasvestida» en Arte Historia e identidad en
América, XVII Coloquio Internacional de Historia del Arte, México, op. cit., pp. 788-802.
IRRUPCIÓN Y CONTINUIDAD DE LAS VANGUARDIAS LATINOAMERICANAS 85
27
BORGES, Jorge Luis, «Recuerdos de mi amigo Xul Solar», Arte y Parte, Revista de Arte —España
Portugal e Iberoamérica, n.º 37, febrero— marzo, 2002, p. 44.
28
PELLEGRINI, Aldo, Panorama de la Pintura Argentina Contemporánea, Buenos Aires, Paidos, 1967.
86 ANTONIO SALCEDO