Samuel Fierro Tesis Final
Samuel Fierro Tesis Final
Samuel Fierro Tesis Final
SEDE ECUADOR
PROGRAMA DE ANTROPOLOGÍA
CONVOCATORIA 2008-2010
ABRIL 2012
FACULTAD LATINOAMERICANA DE CIENCIAS SOCIALES
SEDE ECUADOR
PROGRAMA ANTROPOLOGÍA VISUAL
CONVOCATORIA 2008 - 2010
ABRIL 2012
Agradecimientos
Por encima de todo agradezco a Ximena Echeverría Mantilla por su constante
compañerismo en el más alto y digno de los sentidos, y por su indispensable aporte a la
construcción de la mirada crítica con la que he desarrollado el presente trabajo. Además de
por la paciencia que, junto a los demás de mi familia, me ha tenido.
Agradezco profundamente a María Amelia Viteri, mi tutora de tesis, Daniel Moreno, Hugo
Burgos, Xavier Andrade, Alejandro Cevallos, Miguel Rivera, Juan Pablo Viteri, Juan
Zabala y Marcelo Bonilla, por brindar importantes críticas a esta investigación. Ademas, mi
más sincero reconocimiento a Carolina Ganchala, Rashell Erazo, Andrés Buitrón, Adriana
Garrido, Cayetana Salao, Leandra Macias, Beatriz Saura, Alejandra Gender, Cosme/María
Susana, Coli Fernandez, Jorge Santana, Desbordes de Géner@, Asociación Alfil, Dionisios
Arte y Cultura, PT y allegados, quienes participaron en esta investigación y me brindaron
no solamente su tiempo y su conocimiento, sino su confianza para trabajar
documentándolos audiovisualmente.
También ofrezco mis agradecimientos a las lectoras del presente trabajo Susana
Wappenstein y Lorena Lucioparedes, quienes con sus comentarios aportaron grandemente a
enfocar esta investigación. A Gabriela Zamorano, Andrea Pequeño, Francois Laso y demás
profesores de FLACSO, que con sus sugerencias y críticas fueron marcando el camino de la
tesis. Por su apoyo teórico, técnico y moral en toda la maestría y en la tesis: David Jara,
Frantz Jaramillo, Mayra Moreno, Sonia Rojas, Jaime Sánchez, Manuel Kingman, Rubén
Calderón, Pamela Cevallos y Marcia Suárez. Al grupo de activistas y personas LGBTIQ
que de una u otra forma aportaron al presente trabajo, que sin su valioso contingente no se
hubiese completado.
ÍNDICE
RESUMEN
El presente trabajo investigativo se propone como un primer acercamiento a las dinámicas
de tráfico entre activismo, academia y arte. A través de investigar la forma en que los
discursos académicos y políticos propuestos desde activismos trans y queer en Quito se
traducen en proposiciones escénicas, busco analizar críticamente las dinámicas de tráfico
entre campos.
Parto de cuestionar la post/pluri/multi/inter/trans-disciplinaridad supuesta en las puestas en
escena activistas sobre temas de género llamadas “performance” mediante plantearlas como
tráficos (Andradde 2002), debido a la falta de proceso sostenido de diálogo entre los
campos implicados y por las dinámicas de producción, consumo y beneficio en las que se
generan este tipo de producciones culturales.
CAPÍTULO 1
INTRODUCCIÓN
tráfco entre activismo, academia y arte. A través de investigar la forma en que los discursos
proposiciones escénicas; busco analizar críticamente las dinámicas de tráfco entre campos.
Para este cuestionamiento utilizo la categoría de “tráfcos” (Andrade, 2002) debido a la falta de
proceso sostenido de diálogo entre los campos implicados y por las dinámicas de producción,
sexualidad y los estudios queer y discuto la coherencia discursiva de mi objeto de estudio tanto
desde los espacios teóricos planteados para estudiar la relación entre arte-academia, arte-activismo
y arte-sociedad, como desde algunas elaboraciones teóricas sobre “performance”, hechas desde l a
Luego del marco teórico, en un segundo capítulo, hago un levantamiento histórico breve de los
colectivos trans/queer dentro del “movimiento” LGBTI de Quito; a los que me he acercado desde el
2008 al 2010. En el tercer capítulo, analizo distintas proposiciones escénicas hechas por los
Concluyo, en un cuarto capítulo, elaborando una serie de apreciaciones puntuales sobre el trabajo
diferenciado de los distintos colectivos estudiados; y con una queerización subjetiva cuyo afán no es
desmerecer el trabajo político y de dif usión de las organizaciones que discuten las problemáticas
sexo-genéricas que se dan en Quito, si no más bien, informar críticamente dicho trabajo.
MARCO TEÓRICO: EJERCICIO RELACIONAL A LA LUZ DE DISCUSIONES TEÓRICAS
La reconocida antropóloga queer Gayle Rubin explica que en tiempos de tensión y graves
problemas como los que viene confrontando el mundo en la actualidad (i.e. la pobreza, la guerra,
puede parecerles que discutir la sexualidad es un asunto frívolo y sin importancia frente a l a
gravedad de los problemas antes enumerados. Pero advierte que, al contrario, “es precisamente en
épocas como estas, [...] que la gente se vuelve peligrosamente desquiciada en lo referente a l a
sexualidad”, ya que las disputas sobre conducta sexual son instrumentos para el desplazamiento
política de los activismos que se autodefnen como abanderados de la lucha por dichas diversidades
una limitación hacia el grado de 'expertise' con el que puedo analizar la información recolectad a
y la experiencia de transitar por estos mundos desde una posicionalidad al margen, e incluso de no
pertenencia. Sin embargo, el presente estudio busca combinar de modo sinérgico, y a la vez crítico,
Asumir esta limitante, abre la puerta a posibles lecturas y críticas que cualquiera, más o menos
versado en alguno o todos estos campos, haga de lo que he seleccionado como información relevante
o sobre mis refexiones alrededor de dicha información, y las recibo como valiosas contribuciones a
la investigación de una temática que bajo ningún criterio asumo explorar en su total amplitud,
pues la presente tesis no deja de ser un acercamiento inicial a tientas al complejo mundo de las
cultural.
El presente marco busca construir un andamiaje teórico que me permita analizar las distintas
propuestas escénicas de activismos trans y queer desde las zonas de contacto de los tres campos
este estudio.
Desde una mira d a etnográfca a las diversas posiciones políticas dentro de la identifcación trans/
permitan, a nosotros activistas, explorar los lenguajes del arte como espacios para la refexión,
las complejidades a las que se enfrenta la producción cultural que discute diversidades sexuales e
Comenzaré revisando el concepto de 't ráfcos' tal y como los describe Xavier Andrade (2002)
buscando aclarar que un esfuerzo provisional por integrar agencias de diversos campamentos
puede accionar como lugar de auto-refexión, dis-loca-ción, trans-formación y de re-presentación,
sin invisibilizar o desentenderse de las diversas fragmentaciones entre y dentro de los tres campos
en donde planea desenvolverse (activismo, arte y academia), sosteniendo una visión crítica que
además permita discutir posibles alternativas a las dinámicas con las que se manejan estas áreas.
Espero explicitar, en este capítulo, cómo el “tráfco” puede ayudarnos a entender (y construir)
performance, tanto en las teorías de género como en el arte contemporáneo ( escénicas y plástica)
Pienso que la idea de tráfco se desliza, no sin conficto, por los diversos lugares desde donde
propongo mi mirada: tanto desde un activismo queer -una práctica artística que busca vinculars e
política y críticamente con comunidades sexualmente diversas-, como desde una inquietu d
académica y vital sobre la capacidad representativa del cuerpo como locus de enunciación y de l
Trá f c o s
dentro de un campo teórico a otro, con la posibilidad de hacerlas pasar como propias
presente tesis, se ha preferido del iberadamente un modelo basado en el concepto de “tráfco” tal y
como lo explica Andrade (2002), fundamentalmente por tres argumentaciones del mencionado
autor que me parecen pertinentes como postura hacia el proceso de investigación a emprenderse.
El primer argumento tiene que ver con el rigor disciplinario requerido para evitar la trampa de l a
función mercantilista que han tenido los estudios “trans”, “multi”, “pos” e “inter”, por ejemplo, en
el caso de l a inserción del arte o la gestión cultural en el tejido social. En palabras de Andrade:
Partiendo de la aparente suspicacia con la que cada una de las áreas a discutirse (academia, arte
y activismo) mira a la otra, parecería obvio asumir que estos campos funcionan como espacios
diferenciados. Así, la gente vinculada al activismo trans- ve con cierta desconfanza el trabajo
“vampiresco” de la academia, sobre todo cuando ésta problematiza los sistemas de poder dentro de l
activismo. Los artistas tienen frecuentemente confictos cuando se involucran en activismos por
verse restringidos por la burocracia jerárquica de algunos de los colectivos polít icos trans- y de
género, mientras, los activistas sospechan de las intenciones “estético-extractivistas” de los artistas
que pudiesen perjudicar sus complejos procesos. El arte y la academia también se confrontan en l a
medida en que la teoría sirve para (des)legitimar el trabajo artístico, que por su parte busc a
intersticios entre estos campos, en el caso local, muchas propuestas no son más que espectáculos
la idea de verlos como “tráfcos” resulta plausible en la medida en que nos abre la posibilidad de
las relaciones entre estos lugares sean fuidas o en algún grado procesuales de forma duradera o
consistente.
En segundo lugar, “la ausencia de un saber sistemático acumulado a falta de [...] un corpus de
conocimiento desde la antropología urbana para el caso ecuatoriano1” demanda “el préstamo de
categorías teóricas establecidas” para intentar ordenar y trazar relaciones entre aquellos
“fragmentos e interconexiones entre detalles e historias sobre los que todavía no se han articulado
visuales coexisten con referencias más sociológicas, literarias e históricas sobre el carácte r
u rbano”(Ibid:3).
Una mirada que dé cuenta de las diversas fragmentaciones que existen dentro y entre los campos
donde se propone el trafco resulta especialmente relevante en nuestro país donde vivimos u n
momento histórico en el que los activismos relacionados a temas de género están recibiendo
considerable atención por parte de medios, académicos y artistas. El trabajo etnográfco propuesto
apunta a describir ciertos procesos de intercambio (y juegos de poder) que se están dando
códigos, estrategias y relaciones (conf. Andrade, 2001) que busca negociar signifcados y
representaciones en la cotidianidad urbana más allá de los espacios legitimados de las disciplinas
o campos, su uso nos resulta estratégico para el proceso investigativo propuesto, sin perder
atender y cuestionar las fragmentaciones internas dadas por divisiones de clase, raza y sexualida d
1 Esta ausencia de saber sistemático se evidencia, para nuestro caso específco, en la casi inexistente
literatura sobre arte y activismo de género en el país.
dentro de cada uno de los campamentos. En un segundo capítulo buscaremos ahondar brevemente
trans-/queer, con el fn de establecer la validez de las experiencias usadas como ejemplo de análisis
de las dinámicas entre los campos disciplinares, además de confrontar las divisiones locales
Para poder discutir la mirada “trafcante”2 con la que se plantea el presente estudio de caso, creo
necesario revisar las refexiones alrededor del resurgir de la antropología de la sexualidad ( Nieto,
el abismo suscitado desde la publicación de Malinowski y su “Sexual Life of the Savages”, de 1927
y los trabajos antropológicos acerca de sexualidad surgidos desde mediados de los 40s hasta los 60s
-bajo un “modelo de infujo cultural” que vincula cultura y biología en busca de universales que
expliquen la sexualidad human a -. Estos estudios surgen en el marco del debate que había n
generado en Estados Unidos las publicaciones de Kinsey sobre la conducta sexual de los varones,
A mediados del siglo XX se nota un cambio signifcativo en el enfoque a los estudios de sexualida d
que deslizan la mirada radicalmente biologisista, todavía presente en estudios como el de Tager de
1962, hacia un modelo de “infujo cultural” que, como en el caso de La Barre en 1971, “aboga por
diferencia ( Nieto,2002:13)
sobre la identidad y los roles de l@s homosexuales en sociedad, iniciando una transformació n
antropológica que Rubin (1975) haría para entender la sexualidad como “activamente humana” y
“Lo más signifcativo del salto del «modelo de infujo cultural», al «modelo de
construcción social y cultural de sexualidad», se sustancia, en dos grandes apartados.
Primero, el salto de la biología a la cultura, a la hora de interpretar la sexualida d
circunscrita por la realidad social. Segundo, el salto de la universalidad comprensiv a
de la sexualidad a la comprensión particularizada de la misma. Lo primero, a su vez,
lleva en sí y envuelve una nueva presentación de los distintos aspectos de la sexualidad.
Puesto que se «culturaliza» la biología y, en consecuencia, no se «biologiza» l a
cultura. Lo segundo permite dar mayor relevancia a la particularidad cultural de
sociedades muy concretas”. ( Nieto:4)
En esta línea, según explica Tom Boellstorf (2007), citando a Newton, en “Queer in the House of
Anthropology”, la antropología de género desarrollada hasta los 70s posibilitó condiciones para el
desarrollo de la antropología de la sexualidad, no solo a nivel analítico mediante, por ejemplo las
teorías feministas, sino también creando las condiciones institucionales que posibilitaron el acceso
desestabilizar a la antropología “del fjismo conceptual del sexo y del género, favoreciendo l a
3 Posteriormente la misma Rubin (1994) elabora sobre la complejidad de elementos que intervienen en l a
construcción de la diversidad sexual alejándose del discurso de mediados de los 70s que inspiró sus
p rimeros trabajos. Sin embargo, dentro del rastreo propuesto sobre la antropología de la sexualidad, l a
trascendencia histórica de la interpretación socio-antropológica hecha por esta autora es innegable a
pesar de que actualmente se cuestionen sus alcances
emergencia de la teoría de la performatividad, que enfatiza más la ambigüedad e indeterminació n
de los actores sociales que producen los discursos sexuales, que el signifcado de los mismos”
(Morris,1995).
Tanto las concepciones sobre los procesos reguladores como la reacción que dichas pautas
discurso de poder, son temas de profunda discusión durante los 80s e inicios de los 90s, en autoras
A partir de las contribuciones desde lugares diversos, tanto la concepción de una sola y fj a
trans-) son cuestionadas por la variedad de prácticas posibles, que en su diversidad denuncia n
arrancan de raíz los patrones etnocentristas. Entonces, “se pasa de la perversidad sexual, a l a
Esta encarnación de la sexualidad hace de los cuerpos una “pasión polimorfa”, pues s u
aprehensión erótica potencia una comprensión de lo corporal que incluye sentimientos, fantasías y
Para mediados de los 90s, algunas de las creencias que inspiraron al construccionismo social de los
70s tuvieron que revisars e 4 al no ser capaces de dar cuenta de la persistencia de ciertas
restricciones a la sexualidad que resultaban más persistentes que lo que lograba cambiars e
El proceso histórico en el que se empezó a visibilizar esta discusión corpo-política reveló claramente
dichas persistencias pues no todos los cuerpos recibieron atención de forma simultánea o
en el 69, hasta su activación de procesos performáticos en espacios públicos con colectivos como
ACTUP que surgen como respuesta a la crisis del VIH/SIDA de los 80s, y también sugieren u n
proceso que, como indica Boellstorf (2007), empieza mirando primero a lo gay para solo
Obligatoria y la Existencia Lesbiana' que critica la invisibilización de lo lésbico incluso entre los
escritos feministas de principios de los 80s y aporta signifcativamente con una mirada crítica a l a
sexualidad, sino también a la capacidad innovadora, interpelante, crítica y subversiva que surge
de la interpretación que de éstas normas hacen los diversos sujetos, se evidencian en el proceso de
critica pasando “de una innovación subjetiva titubeante en los primeros momentos del
construccionismo social, a la más reciente disidencia individual formulada por la teoría queer”
El proceso vivido dentro de la antropología de la sexualidad no solo afecta su mirada hacia los
fenómenos sociales y sus actores, sino que incluso, sus más respetados paradigmas, como l a
necesidad de distancia y los limites de la observación participante, son despojados de su 'aur a'
observadora. Así, nos cuenta Nieto, para 1982, Manda Cesara/Karla Poewe relata abiertamente
sus experiencias sexuales, vividas al realizar trabajo de campo con una etnia africana,
de la etnografía de un “'crecemos aplastados por las opiniones de los demás', [a una perspectiva]
culturalmente innovadora (que celebramos): 'crecemos incluso contra las opiniones de los demás'.
(Ibid.:26).
Las citas fnales de Nieto proponen un espacio intersticial de intersubjetividad entre el antropólogo
y la comunidad donde se halla inmerso; un tráfco que no borra la diferencia entre aquel que mir a
- informado de las discusiones teóricas alrededor de los fenómenos que observa/vive y de cómo se
además, durante el trabajo de campo la línea entre la seguridad de los espacios dentro de los
refexionar sobre como éstos procesos son negociados con nuestros compañeros de travesía e
Al meditar sobre las tensiones teóricas que surgen de la propuesta de un ejercicio relaciona l
pretendido como un tráfco entre activismo trans-, arte relacional y (auto)etnografía, podemos
señalar al menos dos campos cuya discusión permitirá confrontar dicha experiencia con
tráfco) entre la etnografía y el arte, para luego conectarla con la relación arte-activismo sugerid a
artístico con colectivos sociales para fnalmente revisar, más detenidamente, los procesos históricos
p aralelos de dos teorías estrechamente vinculadas que se mencionaron durante nuestr a
teorías queer.
Arte y Etnografía
m anejar el proceso, Hal Foster (2001) en “El artista como etnógrafo”, advierte sobre varios
Foster, articula una relación entre el nuevo paradigma del “artista como etnógrafo” y l a
proposición de Benjamin del “autor como productor” (sugerida con el fn de superar las
años treintas como “sempiternas y estériles”, sin embargo, todavía infuyentes en la recepción de l
arte durante los 80s y 90s5) (ibid.:176). Inicialmente Foster sugiere que ambos modelos se
proponen como contestación a “la institución burgués-capitalista del arte, sus defniciones
estas dos propuestas, que pueden peligrosamente causar que la participación de los
5 Actualmente, estas oposiciones siguen presentes en las discusiones sobre arte contemporáneo en el
Ecuador donde, por ejemplo, espacios de participación libre, como rizoma (yahoogroups) de Fernando
Falconí (Falco), evidencian una latente controversia sobre legitimidad de 'ser artista' o 'el deber ser del
artista' que recurrentemente cae en argumentos que no superan lo que Benjamin buscaba superar.
Primero advierte sobre el asumir que la localización de las vanguardias artísticas se suscribe al de
las vanguardias polít icas y sus transformaciones, sin reconocer que ambos campos está n
delimitados diferencialmente en sus dinámicas, más allá de sus tráfcos. La segunda advertenci a
de Foster tiene que ver con el ubicar la subversión de la cultura dominante en el espacio del 'otro
cultural o social' ignorando las dinámicas o microprácticas dominantes que (se) reproducen en los
espacios sociales considerados 'otros'. La tercera advertencia del autor se enfoca en la pertenenci a
como requisito de acceso y/o garantía de esta 'alteridad transformadora' lo que por un lado nieg a
la capacidad de contribuir de aquellos que no son entendidos como parte del colectivo o, por otro,
limita la aceptación de contribuciones críticas hechas desde espacios que no se hayan legitimado
El autor explica también la existencia de dos mitos, que considera “efectivos e incluso necesarios”
dentro de estos paradigmas. Por un lado el supuesto realista bajo el cual se asume la realidad de l
otro (ibid.:178). Sin embargo, Foster advierte sobre la necesidad de poner en tela de juicio “l a
“(que no siempre es mecenazgo ideológico), tan importante para la afliación cultural y la alianz a
política”(ibid.:179).
Foster explica el paradigma del “artista como etnógrafo” como un deslizamiento en el tema de l a
asociación del de “autor como productor” pues mientras la propuesta Benjaminiana del producto r
se defne “en términos de relación económica” el paradigma del etnógrafo de Foster es defnido “e n
cuestionamientos que se plantean alrededor del artista como sujeto social? Y ¿Cómo se construy e
una situación productiva que, basada en la intersubjetividad, genere espacios que trasciendan las
Arte-Activismo
Según explica Nina Felshing (2001), el arte activista contemporáneo funciona como catalizador
de dos aspiraciones fundamentales: por un lado, representa para el activismo, la posibilidad de dar
voz al subordinado usando al arte como medio para nombrarse y ser legible tanto para grupos
especializados como para la sociedad en general. Por otro lado, en el caso de los artistas, el
activismo les permite acceder a nuevos públicos y de paso discutir los procesos de legitimación de s u
Felshing rastrea el proceso histórico del arte activista – en los Estados Unidos- desde los años 60s
y 70s vinculando la emergente demanda por participación, apertura y democratización por parte
al mundo del arte en lo referente al objeto-arte, las estrategias formalistas y la tendencia artístic a
Según la autora, prácticas artísticas como l a Performance surgen -del feminismo de los 70s- como
construida desde el estereotipo del ciudadano blanco (o blanqueado) de clase media con
representados y los que ven su cotidianidad proyectada en esta representación mediática (Berlant,
m arginados por poner en discusión a la luz pública temas sobre política, identidad y
una creciente intensión por poner en evidencia las confguraciones del poder. Felshing explica:
“al menos 'cambiar las reglas del juego'” empoderando a individuos y comunidades haci a
la consciencia pública-, pues invita a tener una consciencia mucho mayor del mundo a medid a
que refexiona sobre lo que signifca tener voz y sobre la posibilidad de visibilizar su realidad ante
político localizado públicamente y que requiere de una recepción participativa. Sin embargo, l a
m isma autora problematiza esta defnición de arte público aclarando que existen diferencias entr e
quien emplea estrategias activistas de forma superfcial y quien las maneja en forma procesual,
por otro lado, aclara que su simple emplazamiento público no garantiza comprensión n i
p articipación (ibid.:85).
Los problemas citados en el párrafo anterior son especialmente aplicables a las prácticas artísticas-
activistas locales, pues, a pesar de que el arte en el Ecuador es relativamente accesible a la socieda d
en general, es importante anotar que las personas que asisten a eventos artísticos rara vez viene n
de fuera del círculo del mundo artístico y académico.Hasta ahora, los esfuerzos por socializar l a
problemática de los activismos trans- y de género a través del arte pocas veces convocan a gente
que no esté ya involucrada en estos procesos políticos, además, la atención mediática a los mismos
Sin embargo, incluso estos esfuerzos esporádicos y dispersos (en algunos casos) pueden leerse como
espacios temporales que funcionan como desplazamiento hacia el arte como discurso social y como
intervención cultural (Richards, 2007:92), que buscan “hacer vibrar percepción, consciencia y
deseo, y trans-fgurar desde el arte la subjetividad social y los imaginarios culturales” partiendo de
“una diferencia que toma la iniciativa de formularse a sí misma como un 'acto de enunciació n'
que se rebela contra lo pre-establecido” recuperando la densidad formal y semántica del arte
Retomemos lo preguntado antes de nuestra refexión sobre el arte activista; es decir: ¿Cómo genera r
Arte Relaciona l
(Bourriaud, 2001:433)
explotación del Sur, la sustitución ciega del trabajador por la máquina y la sofsticación acelerad a
de la crisis del SIDA (Crimp, 2005:99-113) y la melancolía heterosexual denunciada por Butler
(latente en la confrontación con los cuerpos trans- sobre todo femeninos en el caso de los hombres)
que se resume en la imposibilidad silenciada del amor homosexual y propio (Butler, 2002:238).
entendemos el arte: en la medida en que las obras de arte no se fjan ya el objetivo de forma r
realidades imaginarias y utópicas -anunciando “un mundo futuro”-, sino que buscan construi r
“universos posibles”. El artista habita las circunstancias que el presente le ofrece, con el fn de
transformar el contexto de su vida (su relación con el mundo sensible o conceptual) en un universo
duradero donde los aspectos subversivos del arte parten de un proyecto “que concierne a las
demanda un arte que “tome por horizonte teórico la esfera de las inter-relaciones humanas y s u
contexto social, más que la afrmación de un espacio simbólico autónomo y privado”, es decir de u n
arte 'relacional' (Ibid:430), donde la obra se presenta como una 'duración' a ser vivida, como un a
artístico tiene por tema central el 'estar-juntos' el 'encuentro' entre espectadores y obra, “l a
elaboración colectiva del sentido”(Ibid.:431). Entonces, “más que su carácter mercantil o valor
“el 'dominio de intercambios' generado por los modelos de sociabilidad propuestos ente
artistas y espectadores debe ser juzgado según criterios estéticos, analizando l a
coherencia de su forma, así como el valor simbólico del mundo que nos propone y l a
imagen de las relaciones humanas que refeja”. (Ibid.:433)
Para explicar cómo se materializa dicha valoración Bourriaud emplea el concepto Althusseriano
“que toma como punto de partida la contingencia del mundo, que no tiene origen n i
sentido que le anteceda, ni tampoco una Razón que le asigne un objetivo. Así pues l a
esencia de la Humanidad es puramente trans-individual, hecha de vínculos que
u nen a los individuos entre ellos en formas sociales que son siempre históricas. No
existe un 'fn de la historia' o un 'fn del arte' puesto que la partida se sigue jugando,
variando en función de los diferentes contextos, es decir, en función de los diferentes
jugadores y del sistema que construyen o critican” (Ibid.:434)
Explica entonces Bourriaud que la obra de arte, entendida desde Deleuze y Guattari como 'u n
reconocer como 'mundo' una colección de elementos dispersos. En este contexto, 'la forma' es u n
La estética relacional es, desde este punto de vista, “una teoría de la 'forma'”: entendida como
“unidad coherente que presenta las características de un mundo y que nace de la 'desviación', de l
encuentro aleatorio entre dos elementos hasta entonces paralelos”. Lo 'duradero' de este encuentro,
es decir, “la aprehensión de unos elementos por otros a partir del momento en que forman u n
conjunto en el cual el sentido 'se remite' al momento de su nacimiento suscitando 'posibilidades de
“El arte actual muestra que no hay forma más que en el encuentro”, en la relación dinámica que
conecta una proposición artística con otras formaciones (objetos no cerrados sobre si mismos). “L a
forma nace en esa zona de contacto donde el individuo se 'debate' con el Otro, para imponerle [o
considera su 'Ser'”, que no es más que el resultado de “perpetuas transacciones con la subjetivida d
de los otros”.(Ibid.:436)
“La forma no toma su consistencia (y no adquiere una existencia real) hasta que
pone en juego interacciones humanas; la forma de una obra de arte nace de un a
negociación con lo inteligible que con ella nos es dado para ser puesto en común.[...]
La esencia de la práctica artística radicaría entonces en la invención de relaciones
entre sujetos, encarnando la proposición de habitar un mundo en común, de genera r
u n haz de relaciones con el mundo que a su vez generaría otras relaciones, y así
hasta el infnito. [Así,] la intersubjetividad no solo representa el cuadro social de
recepción -su 'medio' o 'campo' sino que deviene la esencia de las prácticas artísticas
(Ibid.:437)
“La forma es una cara que mira' puesto que me llama a dialogar con ella. La form a
es una dinámica que se inscribe a la vez, o alternativamente, en el tiempo o en el
espacio. La forma no puede nacer más que del encuentro de dos planos de realidad:
por que la homogeneidad no produce imágenes sino 'visualidades', es decir,
'información en bucles'” (Ibid.:438)
Cabe preguntar, sin embargo, ¿hasta dónde la construcción de estas formas interrelacionales es
posible cuando se propone desde espacios que no alcanzan la legitimación de pertenencia de la que
nos advierte Foster? ¿Cómo asumir acceso sin que las propuestas de intersubjetividad esté n
mediadas por los sistemas jerárquicos pre-existentes a la llegada del artista, y cómo evita r
suspicacia sobre su presencia o sobre la dinámica misma? ¿Qué benefcio cotidiano, práctico o
incluso económico le ofrece esta 'cara que invita a dialogar' a personas que no necesariamente ve n
al arte como una herramienta de acceso o cuya situación dentro de la sociedad está restringida de
m aneras mucho más tangibles que las discutidas por los discursos escénicos o plásticos construidos
imaginación aparece como una prótesis que viene a fjarse sobre lo real para producir más
intercambios entre interlocutores” con el objetivo de reducir lo mecánico que hay entre nosotras:
“aspira a destruir todo acuerdo a priori sobre lo percibido” (Ibid.:440). Y “el sentido de la obr a
n ace del movimiento que comunican los signos emit idos por el artista, pero también de l a
Para concluir, el autor señala que para construir el criterio crítico formal del arte relacional debe
tomarse en cuenta el “valor polít ico de las formas”: “'el criterio de coexistencia': la transposición a
“No se trata de que nuestra época carezca de proyecto político, sino más bien de que
p arece hallarse a la espera de formas susceptibles de encarnarlo, de formas que
permitan materializarlo. Puesto que la forma produce o modela el sentido, lo orient a
y lo repercute en la vida cotidiana.[...] Es en la detención de la imagen que nuestr a
época encuentra su efcacia polít ica” (Ibid.:443).
propuesta desde los sistemas hegemónicos de poder, satura nuestras percepciones; por lo que el
lugar de resistencia posible mediante el diálogo relacional debe procurar generar una pausa en el
transitar cotidiano que permita a actores sociales 'manipular en negociación' lo que estos objetos
identidades, sino también de articular, en el encuentro entre arte y política, un contra-discurso que
f losofía polít ica y actual director del departamento de artes visuales de UC en San Diego,
California, durante una entrevista con Mick Wilson (Wilson,2007:8) describe al arte relaciona l
como un esfuerzo de los artistas post-industriales por crear “modelos alternativos de sociabilida d
frente a la instrumentalización de la interacción social”, pero explica, que dichos modelos muchas
ejecutada o puesta en escena frente al espectador, lo que de cierta forma restringe el grado de
p articipación del mismo (ibid.). Por lo que Kester prefere atender a proyectos artisticos “que
extensos”, tales como los de “clínica”: que implican la “movilización práctica de tradiciones
colaborador@s) buscando “desarrollar una respuesta cultural compensatoria frente a los efectos
Kester (2004) explica las 'estéticas dialógicas' enmarcando sus procesos como necesarios frente a
del lenguaje y la forma “habitual” de percepción. Para el autor, la promulgación de los ideales de
las clases dominantes tras el disfraz del entretenimiento y el periodismo “desinteresado” o neutra l
lo propuesto por los medios como lo 'real' y de las representaciones de lo deseable. Las convenciones
producidas desde el lenguaje y las representaciones mediáticas, asumidas por el espectador como
representan, como una proyección de un “deseo de ser” alcanzable (yo quiero ser/tener lo que veo
representados, l a representació n de una realidad que les resulta natural y que invisibiliza l a
posibilidad de aceptar, valorar posit ivamente o incluir formas alternativas de vivir como normales
Pero, ¿Cómo superar, entonces, el lenguaje que nos sirve como referencial 'habitual' en nuestr a
forma que podamos escapar de su dispositivo performativo - que construye lo que enuncia- de
mediación/construcción?
Para Kester, el arte debería ser capaz de denunciar la falla implícita de comunicación dentro de l a
cuestionamiento crítico de aquello que se está mostrando, extendiendo esta actitud cuestionador a
hacia “los valores encontrados en la vida política cotidiana”. Obviamente esto se logra al “alienar”
una experiencia de forma crítica, haciendo que lo “'natural' tenga la fuerza de lo asombroso”
alrededor de una incrementada capacidad de percibir las operaciones ocultas del poder”, pues
provee un “nuevo marco discursivo” que entiende las conexiones entre eventos o condiciones,
mediante 'experiencias somáticas inmediatas' que proponen un 'reto epistemológico' que renueva y
expande nuestros esfuerzos por aprehender la complejidad del mundo que nos rodea.
Esta alienación, cuya estética depende del 'shock' somático en remplazo de la estética retórica que
asume la existencia de un discurso compartido como su base, es comparable, según Kester, a lo que
Lyotard denominó 'sublime'; es decir, el sobrecogedor poder que “excede nuestras capacidades de
medir, categorizar y entender y que nos reduce a un mudo asombro (que silencia nuestr a
Este shock se da mediante una “dislocación ontológica” que sirve como “antídoto terapéutico contr a
“differend”.
Para Kester, la misión del arte de recuperar valores activamente suprimidos dentro de la cultur a
dominante, es, muchas veces, emprendida sobre la base de la “capacidad” de la resolución forma l
del objeto-obra de producir dislocación. Sin embargo, el autor cuestiona dicho emprendimiento
porque descansa sobre la idea de una supuesta lectura universal/convencional que vuelve a
entramparse en asumir invariabilidad en la traducción. Por otro lado, sugiere que, en lugar de
esta visión “instrumental” puede pensarse en prácticas artísticas que respondan al modelo
vida cotidiana, esta misma colaboración, y cómo se retroalimenta el proceso, dan lugar a
presupuestos que, según Kester, sitúa provisionalmente las realidades cotidianas de sus
dentro del sistema de consumo que apunta a modelos de identidad legitimados a priori, lo que
del arte, la academia o la polít ica activista, tanto sobre los elementos (institucionales, materiales e
ideológicos) empleados para la producción misma como sobre las identidades de sus creadores
(Ibid.:94-96, 101).
Sin embargo, el indispensable reconocimiento de las diferencias existentes entre participantes, nos
obliga a reconocer también que el proceso de negociación no está libre de agencia, por lo que, no
hay que dejar de lado la permanente atención que ha de darse al inmanente riesgo de que los
“juegos de poder” dentro de los colectivos afecten de tal forma que una mirada sesgada resulte
sino comunicativas, y que basta para “crear entendimientos provisionales (pre-condición necesari a
p ara la toma de decisiones) entre miembros de una comunidad dada cuando los consensos
p articipación en procesos de encuentro discursivo y toma de decisiones, además que les permite
darse cuenta (awareness) de forma auto-crítica del rol contingente de sus puntos de vista e
Kester:
“El acto de producir un trabajo sobre su propio ambiente abre espacios desde los
cuales ese ambiente puede ser críticamente percibido y potencialmente transformado”
(Ibid)
En este contexto de estéticas dialógicas, para Kester, la subjetividad se forma a través del discurso
modelo epistemológico feminista de Belenky et al.-, es decir, de una forma de conocimiento que no
trabaja para identifcarse con la perspectiva del otro” reconociendo sus contextos diversos mediante
comunidad dada y crear un entendimiento más complejo y empático para esa comunidad dentro
La posibilidad de ubicarse en el “exceso” de otredad (differend) – la infnita complejidad del ser que
descansa más allá del discurso – como un intersticio provisional, que desdibuja los limites entre el
dialógico, se da, según Kester, en un proceso impuro (un tráfco) con fases de “coherencia,
Tomando en consideración lo propuesto por los modelos de prácticas artísticas que hemos revisado,
explore estas narrativas en relación a los discursos hegemónicos para así ser capaces de negocia r
Entonces, asumimos importante ver si la experiencia artístico-política tiene sentido más allá de l a
teóricas y metodológicas escogidas en el presente marco, se sugieren como estrategias para aporta r
a un entendimiento más amplio, no solo de qué es lo que entiende cada campo sobre lo trans o
queer; si no más bien, y a un nivel más seductoramente subjetivo, usar estas herramientas par a
entender ¿cómo nos trans-forma el proceso de producción cultural y cómo nos afecta el juego de l
“tráfco”?, ¿cuánto de nuestra construcción pre-fabricada -ya sea como académico, artista o
activista- de lo que signifca diversidad se reajusta luego de una experiencia que ambicion a
proponer espacios de diálogo dislocando los sit ios usuales de interacción? y más importante aún,
Teoría de la performance.
metáfora teatral (el mundo social como escenario), donde en la puesta en escena las performeras6
deben regirse a las convenciones sociales sobre identidad que “deben” honrrarse durante l a
legitimados y es controlada por prácticas defensivas, preventivas y correctivas que buscan sostener
representación colectiva-.
Las impresiones desplegadas (fostered) se defnen, según Goffman, en sinceras o cínicas en simetrí a
a las consecuencias afrmativas y sanciones que reconoce como posibles al citar apropiada o
inapropiadamente.
infelizmente entre varios escenarios (fronts) establecidos que resultan confictivos por no ajustars e
escondido so pena de ser avergonzad a 7 (Conf. Ibid.:28). La reiteración de los ritos de honor o
7 Esperamos enfatizar a lo largo del texto la relación ritual de honor/vergüenza como metáfora de
hegemónico/subordinado, yo/otro, molar/molecular, hétero/homo, masculino/femenino y todas las demás
construcciones binarias, salvando la diferencia indispensable de pensar aquello debajo del símbolo '/'
como diverso y capaz de devenir “sitio de multiplicidad subversiva” (Irigaray en Butler 1991:51-53).
performativa a su citación (Butler,2002:228). Goffman (Op.cit.) concluye su introducción sobr e
la performance así:
Antes de desarrollar cualquier análisis creemos necesario distinguir lo que entendemos como
género, parafraseando a Butler (1991) es la cita asumida como obligatoria, inescapable y siempre
imitación reiterativa de estilos corporales ideales. Por otro lado la performatividad se describe,
según la lectura que hace Maria Amelia Viteri de Butler, como una posibilidad de dotación de
nuevos signifcados, que no debe ser reducida a un performance (Viteri, 2010:4), entendiendo lo
que se evidencia mediante el Drag, el trans- y otras formas de travestismo y de puesta en escen a -
t anto cotidiana como teatral- de la reiteración de los performance de género cuando ésta se hac e
cuyo origen es disputado tanto por las artes escénicas como por la plástica, puede ser entendido en
el presente desde lo que Schechner (2000) describe como 'Actuales', es decir, puestas en escen a
n i permite al espectador mirar impasible lo que sucede frente a él a través de una cuarta pare d
invisible, pues su reacción a lo que está sucediendo es parte integral del acto mismo.
Como vemos, estas distinciones no desvinculan los conceptos unos de otros sino que más bien los
espacial desde donde se los emplee. Así, los performance escénicos que exploraremos en el capítulo
III del presente trabajo se proponen como intervenciones artísticas localizadas en el contexto de l
activismo de género, que hacen uso de la citación del performance de género de forma crítica para,
las citas mismas mediante el cuerpo como objeto y sujeto de la acción. Es decir, son, según lo
explicado, performances escénico/plásticos – que trascienden lo teatral- que hacen uso crítico de l a
norma- no solo p ara denunciar las estructuras hegemónicas de la norma sexo-genérica sino
desarrollado por Rosalind Morris en 19958 sobre las teorías de la performance de género y el
estudio de Damián Toro sobre performance como práctica artística en el Ecuador y sus respectivos
r astreos históricos - concentrándome especialmente en las décadas posteriores a los 1960s por ser
este un punto histórico nodal de las performances feministas, las prácticas colectivas arte
entre ambos autores (Morris y Toro) y /o con elaboraciones previas en este texto9. Confrontaré,
además, brevemente a estos dos autores con el rastreo histórico de Beatriz Preciado (2004) (teóric a
desarrollo histórico de la performance de diversos autores, nos veremos remitidos al ritual triba l
( Toro, 2009:29). Autores como Schechner (2000) suponen a estos ritos -especialmente aquellos en
el mundo no occidental- como originarios de las artes escénicas y cuestionan las genealogías que
apuntan al origen griego del culto a Dionisios como momento primigenio de las artes escénicas, de
donde, según el autor británico, surge la práctica artística del performance. Para Damián Toro l a
performance artística que hoy conocemos proviene de las artes plásticas y se puede rastrear dentro
de la historia del arte en occidente, -en las primeras décadas de el siglo XX: las veladas futuristas
(de 1910) con lecturas poéticas, piano y violencia entre los públicos y el dadaísmo/surrealismo (qu e
Beatriz Preciado (2004), sin embargo, propone más bien una genealogía política Foucaultian a
que se ocupe, no tanto de los orígenes como “de los momentos de emergencia, de los puntos de fuga,
de las inflexiones producidas por la crítica en el discurso dominante”. Y sugiere que dicha historia,
vista desde un feminismo queer, debería “contener una generología (una crítica de la biopolítica del
género), una cartografía de las estrategias de resistencia a la generización del cuerpo, pero también
un mapa de plataformas futuras de producción de subjetividades transgenderizadas”. Para Preciado:
9 De nuevo, atendiendo a ellos como un puente para el tráfco entre estas dos concepciones de performance
y su posible conexión con lo antes descrito en el presente marco teórico.
Bajo esta mirada feminista queer el concepto de performance utilizado desde los noventa puede
apuntar a tres momentos históricos como sus antecedentes de infexión sobre el discurso
dominante:
Primero, la emergencia de la noción, defnida por Joan Rivière, de 'feminidad como mascarada' en
el campo semántico del discurso psicoanalítico. Rivière presenta su trabajo frente a la escuela
psicoanalítica de Londres en 1929, y su conferencia se refiere a lo que su mentor Ernst Jones había
denominado mujeres “intermedias” donde “'la formación normal de la heterosexualidad' se ve
redoblada por 'una inversión patológica de la masculinidad': se trata de la mujer heterosexual
masculina.
La reflexión autobiográfica de Rivière la ubicaba en medio de un mundo dominado casi totalmente
por hombres (el psicoanalisis de principios del XX) señala que:
Según cuenta Preciado, cuando a Rivière se le pregunta por la distinción entre la verdadera
feminidad y la feminidad como mascarada, su respuesta “acaba de dinamitar la ontología
psicoanalítica cuando a la pregunta responde: 'No existe tal diferencia. La feminidad, fundamental o
superficial, es siempre la misma cosa.'”, es decir, siempre una mascarada (Ibid.)
La reflexión de Preciado sobre la superposición de imitaciones sobre imitaciones que termina
naturalizando la máscara-ficción subyacente (en la ritualizada acumulación de autoridad que le
confiere fuerza performativa – diría Butler-) como efecto de la normalización de la matriz sexo
género cuyas máscaras “giran sin otra fijación que la producida por la ansiedad y el temor político”
(ibid.:6)
El segundo episodio, según Preciado, parte del mismo lugar histórico antas mencionado en los 60s
performanc e 10, las teorías post-feministas de género (basadas en gran medida en la antropologí a
Morris explica, a partir de los 60s, la presencia histórica de dos corrientes que confuyen en lo que
es hoy por hoy la teoría del performance de género. La primera es la crítica feminista anti-
esencialista que, mediante la distinción entre género y sexo, buscaba refutar la naturalizació n
10 Schechner publica su libro en cuyo prefacio explica la relevancia que el advenimiento del happening y el
“social drama” de las performeras activistas feministas y homosexuales. Por supuesto, el autor mencion a
al hombre -Victor Turner- que habla de esos eventos, en lugar de hablar de los colectivos de mujeres y
activistas que se tomaron el espacio callejero americano, pero incluso durante los 60s-70s est a
invisibilización no sorprende pues como indica Preciado hay todo un ocultamiento hermenéutico al rol de
aquellos que disputaban sexualidad.
11 Se dice en Ecuador que mientras el resto de América Latina vivía dictaduras, en el Ecuador no pasaro n
de ser 'dictablandas'.
esencialista que fusionaba la universalidad con la necesidad biológica de la asimetría de género, y
la segunda que se conect a con las teorías de la práctica de los 70s (Bourdieu, de Certeau).
La crítica a la naturaleza prediscursiva del sexo como generador del género, realizada por el
occidental) sexo/género (Rubin,1975) privilegiante del órgano visible que refeja y pone en escen a
Foucault (1978) responde a esta inquietud explicando al género como origen discursivo del sexo,
p artiendo del análisis de la vida de Herculine Barbin (Foucault en Morris, 1995:568) cuy a
ambigüedad intersexual fue condenada y restringida a una identifcación dentro del binario por
t ambién aportaron signifcativamente a lo que hoy conocemos como teorías del performance,
problematizando las relaciones entre agencia individual, cambio histórico y pluralidad dentro de
sistemas.
Primero cabe resaltar el trabajo de Bourdieu alrededor del concepto de habitus (Mauss)
imaginado como una “estuctura estructurada estructurante” que produce y es producida por
12 Posteriormente, durante los 80s y 90s la misma Rubin habria de matizar la discusión reconociendo l a
contribución foucaultiana pero tambien un sezgo teórico durante los 70s que simplifcaba la construcció n
de la sexualidad, pero que hallaría escollos inpasables al verifcar la persistencia de restricciones a l a
sexualidad que trascendian el cambio social.
(Embodiment) permitió entender la producción de representaciones colectivas en términos
lo que 'esconde' el performance como citación de escenarios (fronts) pareciera haber caído en l a
Según Morris, De Certeau provee la línea de fuga al mencionado modelo mediante argumenta r
una diferencia estratégica entre los ideales representacionales y las prácticas cotidianas. Para de
Certeau, las prácticas son gestos creativos, inconmensurables con, pero no completamente fuera de
Los desarrollos subsecuentes sobre la crítica anti-esencialista y la teoría de la práctica hechas desde
Para hablar de los 80s, retomaré el cybermanga de Preciado (2004) en su tercer episodio , no si n
antes anotar lo que nos cuenta Toro sobre el, entonces, incipiente arte ecuatoriano, en el mejor
caso, absorbido en sus más radicales producciones por un discurso nacionalista izquierdist a
infructífero, y en la mayoría de casos por la continua producción de 'arte de moda' para el mejor
emergencia de la escena drag queen - cultura de la performance de la feminidad gay-, que servirí a
de base a la formulació n de la estética camp de Susan Sontag, y que influiría en los análisis de la
teatralización de género, fundamentalmente femeninas, pues su crítica es menos intensa a nivel de
masculinidades, tanto que mientras el simulacro de feminidad ya era discutido por Baudrillard o
Lacan, apenas a mediados de los 80s se interpretaría paródicamente lo masculino por los primeros
Drag Kings. Preciado explica:
Esta apropiación de los recursos de la producción discursiva y de las tecnologías de
representación del género que se construye en los proyectos de entrenamiento de dra g
es propia de la crítica queer a las disciplinas tradicionales en las que las fguras de l
gay, la lesbiana o el trans juegan el rol de un "afuera constitutivo" en relación al que
la normalidad heterosexual se establece (2004:10).
Las prácticas camp, tanto Queen como King, concluye Preciado, “crean un espacio de visibilidad
propio” a la cultura LGBTI (ibid.:11), a través del reciclaje/declinación paródica de modelos de la
feminidad y la masculinidad dominantes. Deviniendo en un desborde donde las oposiciones
binarias: hombre y mujer, masculino y femenino, e incluso homosexual y heterosexual resultan
“insuficientes para caracterizar la producción contemporánea de cuerpos queer” (ibid.:12).
Durante los 90s, y retomando la noción de “performativo” de Austin (1962), entendido como u n
acto de enunciación que crea (acciona) lo que nombra, Butler (2002) explica el género como un a
serie de actos que producen el efecto o la apariencia de sustancia coherente, que asumidos como
(conf. Barthes, 1999)-. Entonces, la identidad sexual se materializa por el sistema de género en l a
superfcies corporales que exceden las categorías anatómicas a las que supuestamente
corresponden, la diversidad marca a los individuos con la posibilidad de ser diferente al ideal y
por tanto asumidos como fallidos frente al ideal del sistema. El sentirse inadecuado en
comparación a la construcción ideal normativa es una idea que los individuos pueden “valiente y
vergonzoso- .
Según Morris, estos preceptos de la teoría del performance contribuyen a la consolidación de dos
Antes de abordar el tema del performance como práctica artística cabe recalcar la distinción entr e
encarnada), versus performance (la puesta en escena o práctica ritual especifca en donde se reiter a
la norma). Según Katz lo ritual se ubica en lo cotidiano como una tecnología de remembranza y
evocación (Katz en Butler 2002:578). Otros estudios muestran como la validación dada por l a
audiencia a un performance sirve para constituir la realidad (Goffman or Schechner op. cit).
Estos ritos de validación suelen girar alrededor de ideas de honor y vergüenza que permiten a un a
sociedad ubicar al individuo en un contexto que concierne su sexualidad, pero además está
podemos partir del rito para pensar a la performance artística como lugar de invocación mágica,
de develación y escondite shamánico (Conf. Goffman, op.cit.18), donde más que construir u n
contexto/meta es una dislocación que no nos habla de un “allá y entonces” sino de un “aquí y
ahora” que puede ser representado en cualquier espacio -prefriendo el espacio público- con el fn de
generar una dislocación o shock que impida la contemplación acrítica por parte de la audiencia,
Generando una interacción que rompe la distancia entre participantes y cuya intersubjetividad es
Aunque la descripción que acabo de hacer pareciera no conectarse con lo descrito sobre el
performance de género, la explicación se desprende de lo que tanto Butler como Sedgwick explica n
alrededor de la perfomance queer y la interpretación crítica que hace Douglas Crimp de estas
refexiones, que espero sirva de puente para conectarnos con lo queer, último campamento teórico
orgánico y concreto, donde la acción se desarrolla sin libreto, de forma provisional impredecible e
irrevocable, pone en riesgo nuestro estable imaginario como parte del ritual iniciático que fja l a
Para Crimp (2005), este encuentro intersubjetivo que desestabiliza la identidad y a la vez l a
construye puede darse mediante la relación no permanente que se establece con la identidad desde
lo queer y sobre todo desde la vergüenza queer. Pues es el lugar donde se encuentra l a
en ritos de control (Goffman) y la performatividad 2: como acto del habla, reiteración defectuosa,
por Goffman a la crítica subversiva hecha desde las autoras queer, Butler y Sedgwick; pues
Goffman asume la noción de un control casi infalible mediante los ritos de honor/vergüenza, pero
no es capaz de preveer el potencial del sujeto para “liberarse y súbitamente eludir su condición” de
vergüenza. Vergüenza capaz de defnir y eliminar identidad en partes iguales “al cubrir el umbra l
La vergüenza propia, o por otros, defne identidad al generar desunión pues se rompe el consenso
por empatía, ya sea por pensarse en lo que “debe pensar/sentir el otro” o en tanto permite al sujeto
que nadie esta libre de la subordinación que solo honra a la norma y controla a los 'peligrosos'
cuerpos que somete mediante la vergüenza ritualizada -Goffman, op.cit.:13-) genera un nuevo
m arco discursivo, “una camaradería, una conmovedora e inesperada generosidad. No hay nadi e
que sea demasiado bajo que escape a tal generosidad y no porque se enorgullezca de la misma, sino
moderno globalizado, que a fn de cuentas no nos deja más que melancolías -lutos insuperables
que descargan sus tensiones y ansiedades sociales en las disputas sobre la conducta sexual (Crimp
op.cit. & Rubin, 1994:143)-, y que honra estructuras y dinámicas subordinantes impuestas y
consentidas (Gramsci, t:1995), por su cita obligatoria sobre nuestros cuerpos, vale la pena indaga r
históricamente en sus prácticas cotidianas para ampliar nuestro espectro de posibilidades políticas.
Por ejemplo, los cuestionamientos actuales a la masculinidad insensible (o defnidad por oposició n
feministas sobre la estética y prácticas cotidianas 'permitidas' para las mujeres (deportes y ofcios),
la presunción de una mayor apreciación estética de los gays que genera espacios privilegiados en
industrias como la moda, el diseño y la estética. El aparecimiento de shows como Queer Eye for the
aceptación como opción valida de vida el homosexualismo -al menos a nivel de la legislació n
sociales resultantes de la lucha por el respeto de aquello que antes era solo motivo de vergüenza. Si n
que por esto dejen de mantenerse serias discriminaciones y exclusión; o que muchas de estas
mercado13.
sexualidad, las enunciaciones hechas desde sitios de vergüenza (lo afeminado, la mariconada, l a
m achonería) han logrado, en una lucha que incluso ha costado vidas, cambiar la forma en que se
13 La creciente apertura del mercado laboral a una mayor presencia GLBTI, sumado a la restricción de
derechos a las familias alternativas (i.e. Adopción o matrimonio) resulta en plusvalía para el contratante
en la medida en que no tendrá que preocuparse de que el empleado “diverso” tenga, o llegue a tener,
cargas familiares por las que la empresa deba responder económicamente.
las estructuras hegemónicas pasadas y presentes sigue dando frutos al ampliar la discusión y
cuestionar las dinámicas de poder y control sobre los cuerpos mediante la vergüenza o la coerción.
Sin embargo, estos 'saberes otros' resultan incompletos si nos negamos a la posibilidad de
cuestionar las dinámicas y microprácticas desde las que se construyen dichas representaciones en
los espacios que se asumen como legitimadores de las reivindicaciones de derechos, sobre todo s i
Explorar las limitaciones de la producción cultural sobre sexualidad y los discursos subyacentes a
las mismas, puede arrojar luz sobre los mecanismos que necesitan trans-formarse para genera r
discusiones más profundas, o alternativamente, más seductoras, que penetren el imaginario socia l
vigente para generar la sufciente dislocación requerida para establecer, o por lo menos intuir,
espacios discursivos nuevos, que escapen -aunque sea de modo provisional- a las trampas de u n
efciente sistema de absorción construido desde la razón occidental moderna (y evidente en lo pos t-
moderno).
Estos loci de enunciación no estarán solamente matizados por la incapacidad de la cita perfecta, o
aceptación legitimada, que desdibuja o invisibiliza la diferencia; sino que mediante la posibilida d
de sentir desde nosotros y en nuestros propios cuerpos las dinámicas avergonzantes nos
confrontemos, de forma inescapable, con la necesidad de construir nuevos procesos que no solo
visibilicen sino que sensibilicen, recuperando sentidos, que vayan más allá del acomodado discurso
sobre la ‘tolerancia’ hacia el respeto e incluso al abrazar posibilidades diversas como alternativas
Si los disposit ivos foucaultianos de vigilancia y castigo sobre la sexualidad propuestos desde siglos
vergüenza de las que nos habla Goffman, en las dinámicas de poder y cotidianas de los sujetos
sociales; y si, como proponen los teoristas queer (Crimp, Sedgwick, Butler), nuestra defectuosa cit a
posibilita su cuestionamiento y denuncia a través de una posible identifcación y re-proposición en
y desde el defecto mismo de la vergüenza, cabe analizar, entonces, los procesos artístico-políticos
emprendidos por diversos colectivos LGBTIQ en la medida en que sus representaciones trasciende n
o no la subjetividad de sus actores y los limitados círculos informados donde se discuten los temas
Las propuestas desde el performance como producción cultural de los activismos trans y queer en el
Ecuador procuran poner a discusión, cuestionar e incluso subvertir los espacios, instituciones y
disposit ivos de control que han sido desplegados para la legitimación de una heteronormativida d
Son, precisamente, las teorías queer y trans las herramientas metodológicas que permitirá n
Lo Queer
Para entender las diversas tensiones y procesos de esta producción artística Trans- y queer,
estimamos constructivo partir de un proceso etnográfco desde una mirada queer. Las teorías queer
como campo de estudio, según explica López Penedo, engloban “los estudios que plantean un a
desigualdades que van más allá de la clase social, y que afectan también a otros aspectos como l a
r aza, la etnia y la sexualidad; los análisis de los discursos surgidos de la producción cultural,
ajenos a las condiciones materiales de la opresión que sufren gays y lesbianas” y “los estudios que
queer”.(2008:18).
la capacidad de queer para defnir la identidad (homo)sexual como una relación y un a
oposición, pero no necesariamente como una sustancia, no como una positividad sino
como una posición, no como una cosa sino como una resistencia [y hasta subversión] a
la norma (Halperin, 2004:89)
De hecho, al igual que López Penedo, mi interés en el uso de la teoría queer para este análisis gir a
alrededor del “cuestionamiento de la categoría identitaria en tanto que categoría fja, coherente y
n atural”(op.cit.: 20) buscando llevar la discusión de sexualidad y de género en un plano que nos
ayude a asumir que las opresiones sobre los cuerpos y construcciones mentales de la norma tiene n
un efecto tanto sobre quienes subordina como sobre aquellos a quienes supuestamente privilegi a
(Ibid.)
Ya que para el presente estudio se ha decidido trabajar con un grupo reducido14 de activistas auto-
Este autor explica que durante los 80s el término “transgénero” vino a remplazar a “transexual”
-limitado actualmente a quienes han optado o piensan optar por un cambio quirúrgico en sus
cuerpos que haga coincidir su sexo con su género- pero que además puede ser usado sin tomar en
cuenta el grado de intervención quirúrgica de la persona. Por tanto, la categoría transgénero incluye
a personas transexuales, pero también se aplica a un grupo más amplio pues las personas
transgénero pueden “etiquetarse” como: transfemeninas (mujeres trans, o trans de masculino a
femenina o MaF), trans-masculinos (hombres trans, trans de Femenina a masculino o FaM), o no-
conformistas (queers, genderqueers, o queers del género). “Queer” o “no-comformista” se refiere
generalmente a identificaciones de género diferentes a aquellas de “hombre” o “mujer”,
frecuentemente, “queer” envuelve una mezcla (blending) de presentaciones, pronombres y auto-
conceptos genéricos políticamente motivados. Según Connell, “Trans”15 (“Persona trans” o “trans-”)
m ás bien relaciones tensas entre múltiples capas de género que son asumidas en diferentes
momentos, tampoco son negación de estas identifcaciones primarias sino, comentarios irónicos e
inestables alrededor de ellas. Trangénero puede ser mejor entendido como formas de identida d
inmersas dentro de otros juegos o conjuntos (sets) de relaciones genéricas en una variedad de
Es importante anotar que, para esta investigación, el uso del termino “Trans-”16, como sustantivo,
adjetivo y prefjo, -al menos, equivalente (incluso ampliado, a nivel de fexibilidad sintáctica) a
“queer” o como una queerización del “LGBTI”- se prefere por su valor como signo lingüístico
existente dentro de nuestra lengua -el español-, es decir por la posibilidad de ser más fácilmente
conectado con el sentido común (por su referencia al sentido de trans-ito, trans-formación y trans-
gresión) y por considerarlo mejor visibilizado desde el activismo tranfeminista ecuatoriano, que el
término queer proveniente del Inglés y de la academia norteamericana.17 Término (queer) que en
nuestro medio apenas y empieza a ser empleado para procesos de tráfco posicionados
Desde esta mirada queer, los rituales estéticos cotidianos y las construcciones identitarias
16 El uso ampliado del termino trans- propuesto por Striker y refejado en la amplitud inclusiva a
diversidades del trans-feminismo local coincide con la movilidad del término “queer” entendido en l a
academia – especialmente la norteamericana (Butler, Halpering).
17 Para profundizar las difcultades y objeciones en el uso del término 'queer' entre activistas
latinoamericanos revisar el trabajo de Ma. Amelia Viteri (2008)
(Butler, 2002), y miméticos en el sentido que explica Bhabha, es decir, como “sujetos de un a
artística -a la medida en que sus representaciones, construidas sobre y desde cuerpos distintos, tiene
un valor de uso simbólico que “expresa problemas relacionados con la identidad, con el género, y
con la política” (Alcázar, 2008:333), recordándonos que “lo personal es polít ico” y que, como dice n
Warr & Jones, “toda experiencia corporal lleva consigo un inevitable aspecto social, y que todo
compromiso político tiene un ineludible componente corporal” (en Alcázar, 2008: 334).
Son entonces las representaciones -tanto propias como referentes a “un otro” que sí se sujeta a l a
norma-, entendidas como enunciaciones hechas desde un locus (Hall, 1997), las que nos permite n
refexionar sobre el potencial deconstructivo estratégico que representa “lo trans-” frente a l a
heteronormatividad, y a las políticas del deseo – es decir las tensiones entre poder-conocimiento-
deseo de las que nos habla Butler (2002)-. Y fundamentalmente evidencian como “el cuerpo
deviene espacio de resistencia y medio de expresión. Cuerpos que llevan a sus límites todos los
sentidos para despertarlos nuevamente a la vida. Ritos de paso, iniciación a un nuevo estado de
Desde una mirada donde se cruzan la etnografía, las teorías de performatividad y las teorías
trans- (academia, arte y activismo), mediante una etnografía que refexione sobre sus políticas
quienes l@s trans mimetizan y parodia n 18; 2) discutir las implicancias y agencias que tensan l a
18 Véas e Hall, 1997; Sekula, 2004; Castro-Gómez, 2000; Bhabha, 1994; Alonso,2008
19 Véas e Connerton, 1992; Butler 2002 & 2006; Haraway, 2006; Stryker et al, en WSQ, 2008
CAPITULO 2
AUTO-ETNOGRÁFICO.
En este capítulo busco mapear las diversas fragmentaciones de los campos de estudio de la presente
tesis en su relación ontológica con el tema trans/queer, ubicando las distintas articulaciones que
existen alrededor de la producción artístico-política en el contexto más amplio del activismo diverso
en Quit o.
disciplinares existentes entre los campos dentro de los cuales se propone el ejercicio –
arte/academia/activismo –, su uso nos permite además dar una mirada más cercana a los
respectivos campos, que da cuenta de las fragmentaciones internas dentro de las cuales se busc a
trafcar mediante la selección de datos que de alguna forma transiten dichas fragmentaciones.
descripción de los distintos momentos en la historia del activismo Trans y Queer en Ecuador desde
sus fliaciones con estructuras fragmentadas vigentes dentro de las políticas LGBTI, pero además
desde sus permanentes esfuerzos por visibilizar sus polít icas desde la producción escénica y l a
que permite refexionar sobre las dinámicas que se despliegan desde la política trans-queer
King/Performer del Proyecto TransGénero Cuerpos Distintos Derechos Iguales20), María Ameli a
El trabajo descriptivo está construido desde una experiencia auto-etnográfca posicionada desde m i
lugar periférico/ilegítimo de trafcante en estos tres campos (arte, activismo y academia) y viene
dado por mi reciente experiencia iniciática en los mismos, durante un periodo de dos años (2008-
2010), lo que sin duda despierta suspicacia, sino desconfanza, sobre mi posibilidad legítima de
cuestionarlos. Sin embargo, e interesantemente, la serie de eventos que conectan mi trabajo con l a
presente investigación son un ejemplo fehaciente de los accesos que ciertas dinámicas permiten a
círculos de poder en estas áreas, que de forma muy breve pueden posibilitar accionares que solo por
situarse en espacios reconocidos de legitimación o áreas poco investigadas dentro de los campos y a
'expertise' sobre dichos espacios no se hace esperar, y como explic a Schechner (2000), estos círculos
de las redes de autorización y castigo donde los actos críticos, a manera de enunciaciones
cada área.
constante que garantice acceso a fondos, en ese contexto el trabajo escénico artístico resulta ser un a
efciente herramienta para lograr atención mediática y académica vital para la desead a
visibilización política en medios y el respeto legitimador provisto por las instituciones políticas y de l
21 Ver http://www.desbordes.or g
confrontación con las estructuras sociales vigentes, mientras que para el campo académico el
discurso se plantea en conexión a corrientes y discusiones 'de moda' como los estudios culturales, l a
estrategias para discusiones sobre identidad en movimiento o diversidad cruzada por clase, raza,
edad etc.
El locus intersticial artístico-político del arte Drag de Daniel Moreno/Sarahí, los performance
Rashell Erazo y los esfuerzos académico-escénicos propuestos desde el trabajo de María Ameli a
de tráfco que he propuesto para la presente investigación: entre arte, academia y activismo.
Durante los años en los que me ha sido posible interactuar con artistas, activistas y académicos de
diversos contextos socio-económicos y polít icos, he podido atestiguar que los campos dentro de los
que se propone esta investigación y sus redes sociales están internamente fragmentados. Un a
m irada al campo artístico quiteño sistematizado a través de una serie de entrevistas a diversos
actores permite dar cuenta de complejas dinámicas y divisiones alrededor del trabajo artístico:
Los entrevistados coinciden en afrmar que existen complejas fragmentaciones en el campo artístico
y acusan una serie de razones que son percibidas de múltiples formas por estos interlocutores.
En las entrevistas realizadas se enumeran una serie de factores que alternativa y transitoriamente
pie a la articulación y dispersión de colectivos que actúan casi siempre bajo procesos puntuales
fragmentación como un asunto problemático y más bien indica que son un factor productivo, y
En cuanto a las dinámicas que facilitan la conformación de colectivos, las personas entrevistadas
respuesta a criterios curatoriales, cuya articulación acontece con circuitos globales o regionales.
Los puntos de vista sobre el tema también son diversos pues, en la opinión de Kingman, el soporte
Quit o, pese a que sugiere que su recepción en públicos fuera del circuito pareciese darse más en l a
capital. Sobre el tema del trabajo colectivo algunos artistas optan por trabajar de form a
esporádicamente en acciones colectivas siempre que éstas se crucen con sus intereses procesuales o
respondan a deseos político-artísticos específcos, como comentó sobre su propio caso Cayetan a
Salao.
búsqueda de estatus, prestigio, legitimidad y visibilidad, a la vez que califca a las dinámicas
23 Artista contemporáneo quiteño y estudiante de Antropología visual en Flacso que dedica parte de s u
investigación precisamente a las dinámicas dentro de este campo.
Kingman además sugiere que el tipo de discusiones planteadas por artistas es también un áre a
modernas hasta discursos que se enmarcan en cuestionamientos más contemporáneos del arte. A
este respecto varias entrevistas coinciden en que las respuestas artísticas a “las discusiones de
moda” son indiscutiblemente un tema que genera fragmentaciones (Véase Toro, 2009).
Entre estas discusiones “in” está, según opinan varias de las personas entrevistadas, el tema de
como afrma Valeria Andrade) va de la mano con el creciente interés sobre temas de sexualidad en
la academia. Sin embargo, Xavier Andrade cuestiona la amplitud de temáticas sobre sexualida d
que se proponen como discusiones desde el arte actual y anota, por ejemplo, la total ausencia de l
tema de masculinidades y en este caso particular la correspondencia con la discusión del tem a
En cuanto a la efcacia comparativa en atraer atención mediática entre las producciones artísticas
activistas y aquellas que se dan desde artistas contemporáneos, las personas entrevistadas
coinciden en que los colectivos activistas emplean efcazmente estrategias dirigidas a atraer dich a
atención (incluso por sobre la legitimación académica) ya que como indican Manuel Kingman y
Xavier Andrade sus actividades están precisamente dirigidas a lograr este tipo de visibilidad y a
Sin embargo estas mismas comunidades a su vez son representadas como entes colectivos e incluso,
en mi opinión, monolíticos, pues a pesar de que embanderan la diversidad, este mismo término se
construcción diferenciada de cada uno de los lugares desde donde se construyen dichas diversidades
activismos.
El riesgo que se corre, o más bien la evidencia de estos sesgos en la representación, resulta en
enunciados muchas veces panfetarios, con una pobre discusión forma l 25 y por tanto, poco efectivos
en sus consecuencias reales sobre la vida de los sujetos que suponen representar. Dando como
resultado, y en esto coincido con X Andrade, puestas en escena que se ubican en pervers a
“El arte de artistas”, según nos comenta X Andrade, se encuentra más directamente articulado con
los discursos de legitimación de la academia, en comparación con la mayor parte del arte activista,
que sigue circulando, o se ubica en un punto de inercia, según la apreciación de Valeria Andrad e
y la mía propia, “en los lugares cómodos, ya preparados, ya legit imados” de sus círculos. Si n
embargo, Cayetana Salao y Maria Amelia Viteri proponen producciones o puestas en escena que
p arten de discusiones teóricas de actualidad, aunque, como indica X, esta apreciación corre el
r iesgo de abogar por un efecto perverso de “guetización de comunidades” (ie. Trans y queer) que a
su vez genera “un efecto equivalente en la teoría” sobre todo si descansa en actores monolíticos y no
amplia su discusión a los mucho más complejos cruces de clase, raza y demás.
capítulo sobre los activismos LGBTIQ y con el análisis del trabajo artístico-activista propuesto
campos donde se construyen y legitiman discursos, esto va más allá de lo que cada activismo
entiende o de lo que artistas y realizadores son capaces de representar o hasta de lo que se dice en
los medios. Un campo de fuerte infuencia y de constante pugna por legitimar estas defniciones es
defnitivamente la Academia.
p ara discutir temas como las identidades y la representación, ya sea entre antropología y estudios
de género o entre instituciones que defenden un discurso disciplinar defnido versus aquellas que
fundamentan su investigación en estudios culturales (Flacso vs. Andina), esto sin olvidar las
diferencias sociales que se evidencian en muchos de los eventos organizados en cada una de estas
instituciones.
Como supo explicar Ana María Goetsche l 26, al tiempo de la entrevista, Coordinadora de l
departamento, son reconocidos por la incidencia que han logrado en políticas públicas. Aunque,
como explicó Xavier Andrade,27 Coordinador de Antropología de la misma institución, los estudios
de género han estado principalmente interesados en temas relacionados a la mujer, y solo en años
recientes, han dado cabida a la propuesta ‘queer’ de Ma. Amelia Viteri y al mismo Andrade con
una clase de Masculinidades (dictada por Andrade desde 1998) y ha fomentado la investigació n
desde una perspectiva queer, gracias a los cursos que viene dictando Viteri desde el 2007.
Goetschel reconoce que su departamento ha visto el creciente interés sobre las diversidades como
parte del debate académico, por ser un fenómeno social cada vez más interesante y que el
momento especifco y contextos actuales han facilitado que el trabajo de María Amelia atraig a
cada vez a más público diverso al diálogo, por lo que se busca articular un Diplomado sobre
Diversidades Sexuales y Ciudadanía desde marzo del 2011, que se alimente de la refexió n
performativa sobre la construcción de ciudadanía que Viteri ha venido sosteniendo en los pasados
tres años desde la inserción del tema queer como discusión latente y en construcció n 28.
Andrade concuerda con el hecho de que el debate sobre diversidades se enriquece permanentemente
alrededor de la fgura de María Amelia Viteri, sin que por esto la penetración del tema queer en
las discusiones académicas actuales deje de ser marginal, al igual que lo es su problematizació n
desde masculinidades –que incluye un signifcativo componente queer en sus lecturas- y otras
áreas de estudio que a su entender no dejan de ser un desafío a nivel de lograr mayor
trascendencia en los diversos campos donde se está discutiendo el tema; sean estos activismos,
prácticas artísticas o la legitimación de los estudios propuestos desde estos lugares en las
Un breve mapeo de la incidencia de lo queer sirve como ejemplo claro de la creciente pero aú n
insufciente atención que se da al tema. Como ya se mencionó, luego de tres años de mantener un a
clase optativa de verano con María Amelia Viteri, el Departamento de Género y Desarrollo de
Aunque el tema es transversal en varias de las materias dictadas por el departamento de género,
como género y derechos humanos de Roxana Arroyo, o en las clases de Susana Wappenstein o
obligatorias para los antropólogos (como la de masculinidades y teorías feministas -aunque ést a
última no incluye siempre un componente queer-). Hay otras asignaturas, como es el caso de
queer en varias de sus clases. Además las materias dictadas por profesores provenientes de
Estudios Culturales como Christian León (Medios y Cultura) o María Fernanda Cartagen a
(Arte y Antropología) eventualmente suelen incluir textos que por la vinculación de los estudios
queer con los estudios culturales y de los estudios de sexualidad desde el pensamiento
Los mismos Estudios Culturales, centrales dentro de la posición política de la Universidad Andin a
Simón Bolívar, y las demás carreras allí dictadas tampoco dan fe de un interés mayor en el tem a
de diversidades, pues dicha universidad no cuenta con ningún departamento, maestría, diplomado
o clase específca sobre temas de género y mucho menos sobre diversidades o teoría queer.
En la UASB hay solo un par de ejemplos de profesores que manejan la temática como en el caso
de Edgar Vega, quien dicta materias en las áreas de Comunicación, Estudios Sociales y Globales y
Letras, y que según nos explicó, contaba con dos cursos: Representaciones Corporales en las
planteaban abierta y transversalmente para profundizar sobre las dinámicas del género en l a
sensibilidad de los sujetos emergentes (incluyendo mujeres y diversos). Finalmente está Raú l
donde propone:
“propiciar una conexión con “el hombre” y “la mujer” que vive en cada uno de
nosotros, y con las energías masculinas y femeninas que alberga nuestro cuerpo”. Y
aunque pareciera situarse en el binario, busca responder en la clase las siguientes
preguntas centrales: “¿cuáles son las fuerzas que hacen que los cuerpos se
m aterialicen como 'sexuados'?, ¿cuáles son las maneras en que opera la hegemoní a
heterosexual para modelar cuestiones sexuales y políticas?”falta cita wevon de
m ierda...
El análisis de la oferta académica se reduce básicamente a estos docentes y aunque otras materias
componente que incluya una mirada queer por lo que se puede asumir que su presencia en dichas
clases es, cuando mucho, marginal. En el caso de estudios de pre-grado la presencia del tema es
prácticamente nula.
Ac t i v i smos LGBTIQH
El campo de mayor inclusión del tema trans y recientemente de la discusión queer, es precisamente
el activismo de diversidades, siendo este espacio el que ha logrado mayor incidencia de sus
Aunque no existe un levantamiento histórico o registro de la participación polít ica de los género-
diversos en el Ecuador, historias como la relatada por Pablo Palacio en 1927 en “Un Hombr e
Muerto a Puntapies”, ya nos hablan de la noche quiteña y de los lugares frecuentados por
homosexuales como el legendario parque de “El Ejido”. Más allá de la literatura, la tradición ora l
sobre la participación polít ica de homosexuales contada por nuestros padres y abuelos nos remite a
mediados del siglo XX, donde ya se cuestionaba a gobiernos como el de Velasco Ibarra, por “las
caídas del poder a la infuencia de un montón de maricones que form a ban parte de s u
gabinete”29. Además, varios intelectuales y académicos de las décadas subsiguientes también era n
acusados de homosexualidad, sobre todo si no se habían casado antes de cumplir treinta años, pues
como decían los abuelos: 'solterón maduro: maricón seguro'. Un estudio detallado sobre la histori a
alrededor de la sexualidad diversa son campos muy interesantes y aún no explorados, pero s u
activistas LGBTI que se empieza a dar durante los años 80's, ya que nos permite rastrear los
lineamientos polít icos diferenciados y los momentos de cruce y fragmentación que estructuran a l
activismo actual.
histórico de la reivindicación lograda por el movimiento GLBT desde los primeros esfuerzos por
29 Esta acusación vuelve a hacerse presente contra el actual gobierno de Rafael Correa y su supuesto
“gabinete rosa”.
30 Duración: 22 minutos, producido por Vista de Ojos Films en el 2008 auspiciado por la alianz a
Equidad-Famvida (ambas organizaciones gays) y fnanciado por Hivos. Que contó con la participació n
de activistas de Entre Amigos, Sociedad de Gays (SOGA), FEDAEPS, Fundación Amigos por la Vid a
( FAMVIDA), Coccinelli, Grupo Tolerancia, Grupo de Cuenca, FEMIS, Fundación Jems Rodriguez,
Fundación CAUSANA, Fundación ALFIL, OEML, Fundación Ecuatoriana Equidad, Proyecto
Transgénero.
articular un movimiento hasta la despenalización de la homosexualidad en el Ecuador en 1997 y
En Primera Plana comienza su recorrido en los años 80s -década de la vuelta a la democracia e
grupos como la Sociedad Gay (SOGA) que se reunían de forma clandestina en Quito
Durante los 90s, mientras la opinión pública recogida en medios de comunicación entendía l a
preparaban un reporte sobre las violaciones de derechos humanos, la impunidad y los casos de
homofobia sucedidos en 1993 – 1994 para la Comisión Interamericana. Aunando esfuerzos con
los actores políticos emergentes durante esta década: indígenas, afros, jóvenes y mujeres, los
activismos GLBT empiezan a estructurar una agenda política de reivindicaciones que encontrará
Se crea entonces el “Triángulo Andino” agrupando a todas las organizaciones GLBT o pro
derechos GLBT que funcionaban en ese momento: FEDAEPS, Amigos por laVida (ahor a
Famvida), Grupo Tolerancia, la organización trans Coccinelli y el Grupo de Cuenc a 32, con el f n
de lograr la derogatoria del artículo 516 del código pena l 33, que castigaba la homosexualidad como
delito.
31 Aunque la mayor parte de la información a detallarse a continuación provienen de este documental, los
datos han sido confrmados en varias entrevistas a activistas como Daniel Moreno y Francisco
Guayasamín (http://www.hi5.com/friend/p143547187--LA%20DIVERSIDAD%20SEXUAL%20EN
%20ECUADOR_País%20Canela--htm l ) entre otros.
32 Vale anotar que de estas organizaciones solo Famvida (Fundación Amigos por la vida) sigu e
funcionando activamente, las demás se han desintegrado en esta última década.
Luego del arresto masivo de más de 100 homosexuales en Cuenca, la mayoría personas trans, el
“Triángulo Andino” convoca a una movilización a nivel nacional, apoyada por diversos
movimientos más allá del ámbito activista gay, que llega a los medios y a actores polít icos
importantes en Cuenca y el resto del país. Se recolectan más de 1400 frmas solicitando l a
derogatoria de la norma por inconstitucionalidad que logró ser aceptada luego de la intervenció n
En la Constitución de 1998 el trabajo activista vio cristalizada una de sus más importantes
(incluyendo los casos de gente infectada con VIH o con SIDA), el libre derecho al desarrollo de l a
Para muchas personas entrevistadas durante la presente investigació n 34, fueron realmente las
trans y su denuncia de la violencia policial de la que eran objeto, quienes comenzaron a presiona r
activistas de las organizaciones GLBT ya estructuradas al tiempo. Cabe anotar además que a
pesar de que estos activismos organizados incluían desde su formación a mujeres -lesbianas y no-,
eran instituciones principalmente manejadas por gays, cuyo trabajo se dirigía a temas sobre
formal del flm, su argumento está propuesto en un formato que restringe su investigació n
periodística, principalmente a la visión del movimiento gay activista sobre el tema. El caso de
33 En su insiso 1ro: “En los casos de homosexualismo, que no constiutyan violación, los dos correos será n
reprimidos con reclusión mayor de cuatro a ocho años”. Segun cita en 'En Primera Plan a'
34 Entrevistas realizadas en mayo y junio en Dionisios Café Teatro a Daniel Moreno y varios gays 'de l a
vieja guardia' que vivieron este proceso de lucha por despenalizar lo homosexual.
cómo se articulan los movimientos lésbico o transgénero no son considerados, ni se profundiza en
cómo surgió esta despenalización, ni en cómo la ley afectaba a las lesbianas. Tampoco considera l a
Esta visión sesgada y poco incluyente da fe de una mirada de ghetto que invisibiliza las
r ápidamente como se integró luego de la derogatoria del artículo 516 del Código Penal. E l
documental tampoco nos habla de los problemas internos de los activismos mencionados, debido a
realidad y los esfuerzos por unifcar al movimiento no han resultado fructíferos, como bien nos
35 Conversación previa a la entrevista sobre la historia de los activismos trans en la que Daniel detalló
varios confictos que tenían que ver con abusos de poder y benefcios personales que terminaron en l a
desintegración de organizaciones como SOGA, FEDAEPS, COCCINELLI (colectivo transfemenino de
trabajadoras sexuales) y FEMIS.
36 Esta falta de cohesión por intereses diferentes dentro de los movimientos LGBTI fue corroborada por
Francisco Guayasamín, cronista de estos movimientos, activista del grupo Canela y creador de l a
p ágin a http://ecuadiversos.t ripod.com / , u no de los espacios más informativos y plurívocos en la web
n acional.
Equidad [Fundación Equidad-Famvida]37, que no sé cómo se llama pero que está
m ás muerto que el nuestro (Almeida, 2009:mail personal p.1)38
Y es que pensar en la unifcación, entre gays y lesbianas en Ecuador, que vaya más allá de
eventos muy puntuales como el desfle del orgullo, resulta más que difícil si entendemos que cad a
uno de estos movimientos construyen su historia desde entenderse como realidades muy diferentes
y políticamente accionan bajo principios también bastante divergentes. Para ilustrar estas
diferencias de agenda analizaré brevemente textos de Douglas Crimp (2005) 39 y Adrienne Rich
p rimera fuente, para así describir como gays y lesbianas entienden sus procesos políticos.
La disputa por derechos desde la diversidad sexual difícilmente puede entenderse como un proceso
sólido y unifcado de confrontación, pues las formas diversas, incluyendo las sexualidades y los
distintos géneros, operan bajo condiciones diferentes de exclusión, que además están cruzadas por
cuestiones de clase y raza. Y es que no es lo mismo hoy en día salir del closet como gay declarado
cuando los accesos a capitales (ser mestizo blanco, de clase media-alta, educado en colegio privado
adolescencia, dejando una familia de 5 herman@s y desertando de los estudios secundarios par a
ejercer trabajo sexual y cubrir así los gastos de intervenciones para trans-formar su cuerpo acord e
37 Esta fundación realizó un estudio de prevalencia y sero tipifcación de VIH en el Guayas durante
2006-2007 cuyos resultados se compilaron en la Declaración de Compromiso sobre VIH-SIDA,
U NGASS . Informe al Gobierno del Ecuador 2006-2007
(www.onusida.ec/imagesFTP/6170.Informe_U NGASS_2007.doc)
39 Posiciones Críticas de Crimp es una compilación de sus escritos desde fnales de los 70s
Como discutíamos al criticar el documental 'En Primera Plana', hasta en las luchas conjuntas,
como la emprendida por organizaciones LGBT durante los 90s, su historia tiende a ser leída o
propuesta al público desde una mirada que, incluso en estos espacios diversos, sigue sostenida en
Y es que la sociedad global en la que vivimos no ha logrado escapar al ideal propuesto desde l a
modernidad que gira alrededor del hombre, con considerable acceso a capitales, gringo/europeo o
europeizado, blanco, heterosexual, adulto-joven, atlético y en últimas hasta devoto. Para dars e
cuenta de esto basta con prestar atención crítica a los múlt iples disposit ivos desplegados (medios
m asivos, textos escolares o incluso juguetes) para la reifcación de este ideal de normalidad. Así, l a
hegemonía se ejerce desde un lugar muy específco cuya construcción ideal se consume mediante
y derechos a tod@ otr@ de forma directamente proporcional a sus 'capas de otredad' frente a este
ente central.
por la reivindicación e igualdad de derechos de muchos movimientos sociales que incluyen los
feminismos, el activismo gay, los movimientos lésbicos y trans hasta las actuales iniciativas queer,
del siglo XX, los gobiernos dictatoriales y monárquicos se cuestionan con procesos revolucionarios
40 Entendemos por falocentrismo la característica de las sociedades patriarcales que sostiene el privilegio de
lo masculino en las relaciones desiguales entre géneros.
41 Los movimientos por reivindicación de derechos para los sexualmente diversos forma parte de un muy
complejo entramado de colectivos y movimientos sociales como aquellos que luchan contra l a
discriminación racial y de género, las luchas de clase, los sindicatos, etc. Estos procesos se desarrollan de
forma entrelazada y coinciden en los momentos históricos de lucha coadyubando a la generación de
espacios políticos y frecuentemente fortaleciendo en apoyo mutuo las luchas de cada colectivo.
como el mexicano o el ruso y localmente el liberalismo ecuatoriano. Al tiempo se produce el primer
conficto bélico de gran envergadura (1914 a 1918), en la misma década del desarrollo industria l
del fordismo y la revolución antimonárquica rusa. Pero no sería hasta mediados de los 60s y los
70s donde la lucha por derechos civiles permitirían la participación política explícita de otras
Ya en los 80s, como bien explica Crimp (op.cit:100-112), el SIDA no se considero verdaderamente
un problema para la sociedad hasta que cobró victimas más allá del mundo gay, e incluso en es a
circunstancia, siguió en el sentido común, entendido como algo que les pasa a los “maricas” a pesa r
de que las últimas estadísticas demuestran el mayor índice de infección se da entre mujeres
heterosexuales casadas (y asumo monógamas en su mayoría). Crimp explica que esto se da bajo l a
lógica de entender lo negativo como situado en el otro, coincidiendo con lo explicado por Hall
considerar un problema al sida -o a cualquier otra problemática que se adjudica a 'otr@s' - niegu e
su existencia bajo las mismas estructuras y mecanismos que son usados para prohibir la existenci a
m isma de est@s otr@s (Foucault explica lo inexistente, lo innombrable e ilícito como las tres
Fue entonces la magnitud del problema y su directo efecto en la sociedad en general lo que sucitó
los fuertes procesos políticos gay (StoneWall o ACTUP) que, usando al arte, pusieron en discusió n
Este origen y la permanente incidencia de la enfermedad a nivel global, y por tanto los fondos
enfoquen sus trabajos en el tema de salud sexual, para luego extenderse a otros derechos civiles.
Adrienne Rich (y Audre Lorde, Elizabeth Vasquez, Sandra Alvarez, Beatriz Preciado, en sus
estructura lesbiana legitimada, debido “a la privación de una existencia política” propia, por s u
estigma social- y la “falta de una comunidad femenina coherente” las llevan a hacer causa comú n
lesbiana con respecto a que, en el segundo caso, se suma al estigma homofóbico la condició n
subordinada de ser mujer. Y que, por tanto, las condiciones diferenciales, estructurales,
caso de las mujeres viene dada a través de un control mucho más fuerte sobre cuerpos y deseos.
Rich sugiere que estas imposiciones además han producido históricamente formas de resistencia y
Las mismas lógicas pueden verifcarse en el caso ecuatoriano, coincidiendo con lo descrito en el
capítulo anterior y lo antes enunciado en referencia al desarrollo del activismo GLBTI en los
estructuración parte en los años 80s, con colectivos 'clandestinos' gays o mixtos que funcionan de
forma unifcada bajo la identifcación de “Gay”. Luego, durante los 90s las organizaciones de
movimientos con particular atención a lo trans en la última décad a 42 . Finalmente, según explic a
42 Datos obtenidos en entrevistas a Daniel Moreno y del documental “A Imagen y Semejanza” de Dian a
Varas
Sandra Alvarez de la Organización Ecuatoriana de Mujeres Lesbianas (OEML) 43, a pesar de l a
décadas anteriores, no se acciona un movimiento lésbico sino hasta el 2002 (Alvarez, 2010,
entrevista).
sexualidad femenina más allá de la heterosexualidad da cuenta de lo efciente que ha sido est a
Alvarez además explica la situación de cómo se genera al momento la opinión pública sobre l a
Así, visibilizar existencias, nombrarlas, legit imarlas en su aporte son preocupaciones permanentes
del activismo lésbico, que reivindica además esta largamente luchada postura del feminismo de
En estos lineamiento se generan las discusiones sobre si usar glbti o lgbti, y las posiciones a veces
inconmensurables sobre los procesos de activismo trans en Quito de los dos más importantes
colectivos que trabajan directamente lo trans. Por un lado, está la Asociación ALFIL cuy a
historia se vincula directamente con lo gay y sus procesos de exigencia de derechos con principa l
preocupación en VIH/SIDA; y por otro lado, el o las corrientes de orígenes feministas como el
Proyecto Transgénero, que busca actuar contra los mecanismos de prohibición del patriarcado.
de cada colectivo y las discusiones que surgen al respecto de las mismas. A continuació n
revisaremos una discusión virtua l 45 sobre la identidad trans que evidencia y critica esta disputa:
"Las trans somos varones que renunciamos al privilegio de ser varones. Eso debe tener
u n castigo. El sistema machista dice que si renuncias a tu derecho de mandar y
dominar entonces vas a ser dominado, porque te estás degradando a pertenecer a l
género débil. Entonces debes ser tratada igual o peor que una mujer"
Claramente, la declaración de Rashell propone que la categoría trans es solo válida para el caso
de transfemeninas, es decir de Hombre a Mujer, y vale anotar que a pesar de que ALFIL se
apoyo a transfemeninas (HaM) de Quito. Sin que por esto nieguen posibilidades o intenciones
transfeminista a la que se adscribe este colectivo. Sin embargo, muchas personas que hemos
Samuel Fierro:
46 Es de mi conocimiento que existe al menos una demanda en proceso por trata de personas contra el PT
por haber ofrecido a un transmasculino extranjero venir al país a cambio de oportunidades legales,
educativas y laborales que no se cumplieron. Otras personas trans y no trans a las que entrevistamos ha n
m anifestado su molestia por situaciones similares de incumplimiento de ofertas y uso abusivo del
trabajo profesional o activista de personas por parte del P T.
Finalmente, Ximena Echeverría Mantill a 47, bajo su seudónimo de Facebook: Filomena Suntaxi,
efectiva que tiene lugar en los campos de legitimación del conocimiento respecto al tema:
Filomena Suntaxi:
Entonces habría que ver qué o quién valida ciertos posicionamientos, desde dónde se
legitima el hablar por... Es una suerte de rincón, de arrinconamiento confgurado por
u na relación permisiva y viciosa entre academia, activismos y medios de
comunicación. Ni la academia logra hacer legibles, ni aplicables y menos aú n
democratizar sus discusiones, ni los activismos abren puertas a otros aportes sino se
validan en pertenencias a raja tabla y ahí en ese gran divorcio entre quienes podría n
mover la wevada [la cuestión] (academia y activismos) aparecen los medios de
comunicación a cagar más la cosa. a aprovecharse de esa falta de acuerdo, desde un a
plataforma de dif usión mucho más poderosa y con mayor alcance y repercusión no
solo sobre la sociedad en general sino incluso entre los grupos por los que dicen habla r
y trabajar la acad[emia] y los activismos. basta explorar un poco en los referentes de
las trans. ¿que guía más el cotidiano de las trans, la butler o la beyonce? ...
Esta últ ima inter vención explica en mucho algo que ha sido preocupación permanente en todos los
colectivos que estoy explorando (ALFIL, P T, Desbordes48): ¿Qué lenguaje ha de emplearse par a
lograr una real incidencia en la construcción identitaria, de consciencia polít ica y de los procesos
individuales de las personas trans en el Ecuador y en la sociedad que niega sus derechos? ¿Cómo
48 Aunque desbordes no se defne como un activismo trans- su locus, desde el queer, discute
permanentemente las ideas de trans-gresión, trans-ito, trans-formación y movilidad de las identidades
frente a la norma y los cruces de la sexualidad con temas de clase y raza.
Las diferencias no son empero, solo políticas, sino que temas de clase también cruzan las
fragmentaciones dentro de los espacios alternativos para personas diversas sexualmente, pues por
ejemplo, no solo es diferente el público de Malva Malaba r 49 – que presenta shows en el cine
instalando equipos y maquillando a otros-. Sin desmerecer la calidad del trabajo de nadie,
defnitivamente las situaciones a las que se enfrentan para sostener su obra no es la misma, debido
En cuanto a los activismos, no falta quien evite participar en cualquier evento organizado por
“Gays corporativos”52 o “radicales lesbianas”.53 Ni qué decir de las criticas sobre quién “realmente”
m aneja los activismos trans-. Mucho más graves son las acusaciones en cuanto a las estrategias
empleadas para “reclutar” o mantener visibilidad mediante tener trans- entre las bases54.
Además, la competencia por fondos externos y confictos generados por eventos previos en l a
historia de estos colectivos repercuten en una permanente división que se hace evidente cuando en
eventos como el desfle del orgullo glbt 'gay' del 4 de Julio del 2009 (coordinado por Equida d 55),
por ejemplo, colectivos como el PT no participaron por considerar que el evento representaba a l
corporativismo gay, mientras que la Asociación ALFIL presentó a Ñuca Trans como compars a
49 Personaje drag creado por León Sierra, quién estudió en Nueva York y es actualmente docente de l a
Universidad San Francisco de Quito, además de pertenecer a una reconocido círculo de artístas.
50 Sala de cine no comercial frecuentado por intelectuales con precios ligeramente más altos que otras salas
52 Referencia utilizada por activistas del PT para criticar a las organizaciones gay
54 Referencia a nota 28
55 http://www.equidadglbt.com /
del evento. En este mismo año (2009) Causana organiza su desfle nocturno por el orgullo lgb t
pero para lesbianas. De la misma forma, El Proyecto Transgénero y Confetrans (Asociada con el
PT) se rehusaron a participar en la reina Trans 2009 convocado por la Asociación Alfl-
RedTrans, quienes por su lado tampoco asisten usualmente a eventos convocados por el P T.
Igualmente inusuales son los trabajos conjuntos entre lesbianas y gays, donde por lo general sus
agendas apuntan en direcciones diferentes, pues mientras los activismos gays están principalmente
enfocados a procesos relacionados con el VIH-Sida (siendo esta temática su principal fuente de
f nanciamiento), las reivindicaciones lésbicas se enfocan más a la lucha política feminista por u n
cambio en el paradigma patriarcal vigente56. La disputa entre lesbianas y gays se refeja en las
instituciones Trans de Quit o, pues si bien se proponen como colectivos autónomos, tanto el
Proyecto Transgénero como la Asociación Alfl acusan a su símil de depender, en el caso de Alf l
del corporativismo gay (Kimirina) y en el caso del PT de un discurso político generado desde el
transfeminismo lésbico57.
Por lo antes dicho, los activismos diversos no pueden verse como un movimiento unifcado, aunque
en sus disputas y vinculantes en sus esfuerzos por buscar alternativas en sus lenguajes; como es
queer en la fgura del colectivo Desbordes de Género. Este tipo de espacios y el papel que juega n
dentro de las políticas de géneros diversos son, en si mismos, temas para ser profundizados en
investigaciones más ambiciosas que la presente, pero a manera referencial, y como un primer
57 Un ejemplo de esta disputa se hace manifesto en la respuesta emit ida el 29 de Marzo del 2007
(TRANSGENEROS QUE DISCRIMI NA N A TRANSGENEROS ) por el Proyecto transgénero-
CasaTrans a los motivos presentados para la no inclusión de Casa Trans en la Red Trans, ver
http://casatrans.t ripod.com/noticias/.
acercamiento al tema, es importante empezar a entender al activismo trans, desde sus posturas
pensamiento queer se sugiere precisamente en estos espacios intersticiales que podrían facilita r
una discusión más fuida entre las diferentes posiciones desde donde se disputa el activismo trans.
etnográfco a cada uno de los grupos investigados (P T, Desbordes, Alfíl) trazaré su desarrollo
histórico en base a material de primera mano y datos recolectados mediante trabajo etnográfco de
campo, hasta llegar al presente histórico que viven los tres colectivos cuyo performance escénico
transfeminista, para luego describir el proceso del activismo Queer de Desbordes de Género, segú n
lidereza Rashell Erazo. La mayor parte de los datos sobre el PT provienen de sus espacios web
ofciales y de datos de campo. En el caso de Desbordes, los datos salen de publicaciones académicas
Arte/Cultura/Identidad, pues hay escasa información sobre ALFIL en otros medios. Creo que
una descripción histórica de cada colectivo permite situar su locus de enunciación y ayuda a
que desde fnes de los 90s, con la creación de un espacio artístico-político para los diversos sexuales
como el Dionisios Café Teatro (drag), empieza a articular espacios de encuentro y los activismos
LGBTI comienzan a buscar mecanismos para visibilizar problemas polít icos que les afecta n
directamente usando artes escénicas y plásticas. Desde 2004, la formación de colectivos escénicos y
Acción-arte (performance político), Ñuca-Trans (danza folklorica trans), Sin Objeto Plausibl e
(sketches teatrales con temas como VIH y transgenerismo), Reinas de la Tecnocumbia, Divas
queer) y el continuo trabajo de artistas como Daniel Moreno o Cayetana Salao entre varios otros,
dan fe de un proceso sostenido de intenciones artístico-políticas que, sin embargo, no resuelve sus
oportunidad de conocer a Elizabeth Vasquez, Ana Almeida, el trabajo del colectivo y sus procesos
entonces), los proyectos de microempresas para Trans, los diálogos interculturales, las cenas
La CasaTrans del PT está ubicada en una zona residencial del centro Norte de Quito, subiendo
desde la Avenida America por La Gasca, pasando el Seminario Mayor San José, el supermercado
58 Dionisios Arte/Cultura/Identidad es uno de los espacios más larga trayectoria en la producción cultura l
LGBT, siendo el único teatro drag de Quito funcionando desde 1998 -año de la despenalización de l a
homosexualidad en el país- y que ha mantenido su café teatro como un espacio que acoje a colectivos
gays, travestis, trans y queers como punto de encuentro de sus activistas. Daniel Moreno, su propietrio,
ha visto nacer y morir a la mayoría de grupos, fundaciones y colectivos de activismo sexualmente diverso.
Supermaxi, la Escuela-Colegio católico Miguel del Hierro de las Hermanas Lauritas, y en el
siguiente semáforo a la izquierda y avanzando hasta media cuadra antes del acceso lateral norte
de la Universidad Central del Ecuador, sobre el anden izquierdo está la CasaTrans. Dejar de
Visiblemente bien mantenida, y con un olor a cera fresca, la casa era evidentemente acogedora. A l
ingresar, a la derecha están las gradas de acceso al segundo piso, donde se habían desplegado
izquierda, en la sala pintada de naranja cuelgan una serie de fotos de la investigación histórica en
torno a destacadas personas trans que Pamela Miño y Ana Almeida recopilaron. Al frente de l a
entrada se formaba un pasillo, entre una división con la sala cubierta de madera color vino y el
resto del edifcio. Un pasillo empapelado con fotos, posters y comunicaciones del proyecto y
organizaciones afnes. A la derecha estaba el aula/sala de reunión donde se podían leer frases
sobre identidad trans de participantes del proyecto y al fondo del pasillo la puerta del baño con u n
letrero que invitaba a “dejar el género afuera”. A la derecha del baño estaba la entrada a l a
amplia cocina que sirve también de comedor para las cenas y el diario. En el segundo Piso de l a
casa estaban tres dormitorios y un baño donde residían activistas durante su tiempo de trabajo
con el PT.
Mi vinculación con el PT, desde julio del 2009, me permitió participar en una serie de eventos. Lo
p rimero que coordinamos fue una sesión fotográfca con activistas (que al momento vivían en l a
Kingman, Juan Zabala, Mayah Franco, Viviana Loaisa y Samuel Fierro59 fotografamos por
varias horas a varios activistas del Proyecto, incluid@ su invitad@ británic@ y performer Joey
59 Estuvieron además presentes Leandra Macías (fotos de backstage), Ana Almeida y Elizabeth Vasquez,
quienes no participaron como modelos para la sesió n
performance femenino y el masculino). Entre ellos Nicole (quien había sido benefciada con un a
beca para estudiar derecho en la U NAP gestionada por el Proyecto Trans en el 2007), Toal a
( Transmasculino manteño que además era madre de una niña de 6 años) y Alejandra Gender
formalmente al PT).
Luego fui invitado a documentar dos encuentros políticos cuyo proceso detallaré en el Capítulo 3.
Primero, El Dialogo Intercultural entre jóvenes Hip-hoppers del LadoSur de Quito y EL PT, que
serviría para coordinar un encuentro escénico entre Joey Hateley, performer queer británic@
invitada del PT, y la gente de la Casa del Gato Tieso (LadoSur). Y el segundo, la invitación que
realizará el Colectivo madrileño “La Acera del Frente” al PT para unirse al esfuerzo mundia l
OctubreTrans en Quito.
A mediados de Septiembre del 2009 se dió una reunión entre La Tronkal y el PT que contó con l a
asistencia de Christian León, María Fernanda Cartagena, Fernando Falconí (Falco), Edga r
Vega y Samuel Fierro por parte de La Tronkal y Ana Almeida, Cayetana Salao y Elizabeth
apoyo a las iniciativas del PT. Así, varios miembros de La Tronkal acompañaron los eventos de l
intersex en el país.
Par fnales del 2009 Edgar Vega anuncia su participación en una compilación que preparaba l a
Tronkal escribiendo un texto sobre TransTango y consolidando así el acercamiento de los dos
colectivos.
Luego, a principios del 2010, cuando varios miembros de La Tronkal llegaron a ocupar cargos
públicos en el Ministerio de Cultura y Banco Central, fue muy frecuente ver a activistas del PT
en eventos sobre Cultura y Política, dirigidos por los antiguos miembros de la Tronkal.
Para Septiembre del 2010 Joey Hateley regresa al Ecuador para el tercer intento del PT de
generar un “matrimonio” transgresor. Tras su fallida intención de casar a Cayetana Salao con
Alejandra Gender en un primer momento y luego con Jéssica Correa, una transfemenina de sexo
legal masculino, anunciado en Febrero 2010 como un matrimonio lésbico. este tercer intento
propone otra fgura donde un activista bisexual, o antes hetero y hoy gay, se casa con Joey
Aunque el juego de género planteado por esta última iniciativa se propone como transgresor, l a
fuerza discursiva de la unión entre una mujer biológica que gusta de hombres y un hombr e
biológico que opta por casarse y pretende incluso reproducirse con su pareja, corre el riesgo de ser
leído como una relación heterosexual donde, en cualquier caso, los roles de género no está n
claramente establecidos, esto tampoco es novedad dentro de las parejas hetero pues los roles, no se
asumen, en la práctica y sentido común cotidianos de la sociedad normanda, de forma tan radica l
como la orientación sexual. Además activistas gay como Andrés Buitró n 62 critican fuertemente
60 Escojo deliberadamente performar en su connotación teatral pues a lo largo del trabajo de est@ activist a
queer los juegos entre masculino y femenino son frecuentes y difcilmente se puede afrmar en base a s u
obra que es una mujer que vive como hombre y mucho menos hombre gay pues en sus líricas critica es a
identidad fja también. Ver http://www.facebook.com/joey.hateley?ref=ts,
http://www.facebook.com/group.php?gid=18844478099,
http://www.youtube.com/user/TransActionTheatreCo .
61 Una entrevista a profundidad realizada por María Amelia Viteri a los involucrados en este performance
puede hallarse en http://www.latinart.com/spanish/aiview.cfm?id=442
62 Abogado activista gay al tiempo vinculado con los Centros de Equidad y Justicia, para posteriormente
ser funcionario del Ministerio de Derechos Humanos y actualmente asesor de la Presidencia de l a
República en temas de Derechos Humanos y Equidad de Género. Quien ha trabajado en muchos de los
esta iniciativa pues siente que desdibuja el arduo trabajo realizado por él, y otros, para legit ima r
Historia del PT
Elizabeth Vásquez, luego de transitar por FEDAEPS y FEMIS, continúa con su trabajo
p aralegal que desde el 2002 da lugar a la formación de la 'Patrulla Legal' que brinda asistenci a
itinerante a trabajadoras sexuales trans en varios lugares de Quito (La Y y Mariscal, como
p rincipales zonas de ejercicio del trabajo sexual transfemenino). Luego funda la CASATRANS
(2004) como centro de operaciones y residencia activista para personas transgénero y desde este
conformistas que desde diversas identidades de género busquen transgredir las normas del sistem a
sexo-genérico binario patriarcal y hegemónico. Su discurso está mucho más informado de los
aportes del feminismo lésbico a la discusión del tema trans- y desde este lugar su preocupación por
la búsqueda de diversos frentes para la subversión del sistema dan fruto en una serie de iniciativas
como las de inserción, educación, formación política y producción cultural en diálogo con otros
colectivos con los que sin aparente relación compartiera preocupaciones subyacentes comunes a
En coherencia con las estrategias del feminismo, el transfeminismo del PT busca visibilizar s u
discurso usando las artes escénicas. Desde el 2004, en el PT se empiezan a desarrollar diversas
iniciativas artístico-activistas, muchas de las cuales se dan como experimentos discontinuos debido,
63 Para una descripción de los procesos legales y educativos del colectivo Ver
http://proyectotransgenero.blogspot.com o referir a los artículos de Elizabeth Vasquez
http://www.telegrafo.com.ec/busqueda.aspx?http://www.telegrafo.com.ec/busqueda.aspx?
q=ELIZABETH+V%C3%81SQUEZ&PageIndex=2 t ambién sobre el colectivo ver Fierro, 2009 en l a
bibliografía de esta tesis.
fundamentalmente, al abandono o irregularidad de vari@s de l@s participantes o a las difcultades
En el 2004 se prepara y presenta el monólogo “no soy una puta cualquiera”, interpretado y co-
2006 varias personas del PT relacionadas con el colectivo de performance 'acción-arte' (Cayetan a
homosexuales y lesbianas' en Guayaquil. Este mismo año se empieza a preparar Transtango que
Durante una entrevista realizada en julio del 2009 Cayetana Salao nos comentó sobre el
n acimiento de Transtango:
Según Salao, su vinculación a las artes escénicas parte de su acercamiento al trabajo de Danie l
cotidiano para explicar lo homosexual (gay, lésbico, trans) más allá del prejuicio normativo que l a
sociedad propone.
Luego al conocer a Karla Pico (transfemenina esmeraldeña), a principios del 2006, empezaron a
bailar andaréle – baile tradicional afroecuatoriano en el que el hombre simula con movimientos
fuertes una relación sexual sobre la mujer que permanece tendida en el piso- pues les parecí a
interesante la propuesta de representar dicha danza con una mujer travestida de hombre y un a
transfemenina en el rol de mujer. Karla conocía -nos cuenta Cayetana Salao- ambos roles y pudo
enseñarle los pasos. Durante los repasos del andarelé Elizabeth Vasquez decide aplicar a l a
convocatoria a las olimpiadas gay de Montreal de julio del 2006 y debido a lo particular del acto
aceptada y recibió el apoyo de una beca. Entre los requisitos de participación era necesario que l a
p areja participara en tres bailes: tango, valtz vienés y un ritmo local del país de origen. Con
construcción de una coreografía en base a dos personajes: el “batracio del puerto” y la “putita de
cabaret”. Tres meses más tarde se presenta el sketch con dos piezas de baile por primera vez
durante una tertulia en 'La Manzana de Eva', café lésbico auspiciado por la fundación Causana.
Al fnal del evento el colectivo recibe varias invitaciones a presentarse en otros eventos y además
recibieron una paga que fue dada a Karla, quien seguidamente se desvinculó del colectivo
Tratando de continuar con el trabajo logrado Elizabeth y Cayetana empezaron a buscar parej a
p ara el tango y mientras tanto Cayetana empezó a entrenarse como Drag King y a trabajar en
Para fnales del 2007 Cosme/MaríaSusana Córdova se une a Transtango por sugerencia de
Elizabeth; Cayetana construye el guión de la propuesta con la que desde el 28 de julio del 2008,
activista cuando se vincula como asesora en el campo legal de asambleístas de Alianza País64 ,
tema de diversidades no solo por su columna del diario el Telégrafo, sino por su participación en l a
65 Grupo de activistas de varios campos quienes logran notoriedad a cuestionar los 25 años de democraci a
en el Ecuador mostrando fotografías de todo este período donde los actores principales son los mismos
políticos de simpre. Ruptura de los 25 buscaba darse a conocer como un grupo emergente de políticos
jóvenes, simpatizantes al tiempo con la propuesta política de Alianza País. Hoy son un grupo de
oposición al gobierno de Correa.
redacción de la Constitución vigente desde el 2008, donde logra insertar el respeto a la identida d
de género, diferenciada de la orientación sexual, como principio transversal de la Carta Magn a 66.
Para junio del 2009, se dan dos procesos paralelos: Salsa-Trans que nunca supera la etapa de
aprendizaje de pasos y el colectivo teatral “Sin Objeto Plausible” que empezó (sin poder llegar a
Objeto Plausible' estuvo conformado por varias personas trans como Nicole, Pat y, Jorge,
Alejandra Gender, Toala, Coli, Shirley. Sin embargo el proceso se suspende por discontinuidad de
las participantes, pero sirve sufcientemente como para presentar pequeños sketches relacionados
con VIH en los meses subsiguientes. Algunos integrantes de SOP cooperan ya no como colectivo
sino a manera individual (Jorge y Alejandra) en los eventos coordinados por Salao en octubr e
como parte de la campaña internacional por la despatologización de lo Trans que tuvo lugar en
diversos espacios de la ciudad; y para diciembre del 2009 SOP tiene una notable participación en
que PT da a otros procesos. La falta de continuidad de todas las iniciativas artísticas del PT
resultan, para muchos, cuestionables en la medida en que ninguna intenta consolidar procesos.
Por otro lado esta discontinuidad del PT, que pareciera desplegarse como una diversidad de
imágenes dispersas más que un conjunto de procesos a mediano o largo plazo, sin por esto perder
su lógica, resulta más que válido cuando lo confrontamos con las ideas de Baudrillard (1989)
sobre la seducción que depende de la capacidad atrayente de la apariencia como principal arm a
disperso del PT se puede ilustrar como un bombardeo permanente a las fsuras de la estructur a
66 Previamente, ella misma había ya logrado el reconocimiento del Estado de la diferencia entre sexo legal e
identidad de género en el caso paradigmático de la ciudadana Luis Enrique Salazar (Hoy Valeri a
Salazar, activista de Alfl) donde forzó un reconocimiento de esta diferencia mediante la negación de l a
demanda en los mismos términos en la que ella hábilmente planteó los formales de ley.
p atriarcal que no dan tiempo a ser sometidas al análisis y que progresivamente explotan l a
constante violencia de la que son víctimas) para acentuar su propia visibilidad como organizació n
y gestionar recursos para luego encausarlos a temas de denuncia de lugares altamente complejos e
reivindicación ni siquiera se consideraban desde la lucha por derechos trans previo al esfuerzo de l
r uta del trabajo del PT ha sabido explotar distintos espacios de visibilización de problemáticas
sobre la diversidad sexual hasta llegar a poner sobre la mesa temas menos discutidos y más
Lamentablemente, para mediados del 2010 Cayetana Salao se desvincula del PT dando fn a
Transtango y a todo proceso de producción escénica emprendido por el colectivo en estos últimos 6
años, aunque esperamos que con el apoyo que está gestionando con activistas del PT en
al mundo de las artes (La Tronka l 67) se retomen o inicien nuevos procesos.
Desbordes de Géner@
Para el verano del 2009, Desbordes tiene ya tres años de proceso como u n esfuerzo para amplia r
las fronteras de la academia, valiéndose de alianzas con las artes escénico-plásticas del teatro y el
67 Grupo de trabajo interdisciplinario que reúne cineastas, artistas, investigadores, teóricos y críticos que
trabajan desde distintas áreas del arte y la cultura. La fnalidad del grupo es la refexión crítica y l a
intervención política en el Este colectivo busca incidir en el campo cultural local y translocal. Su
producción dialoga con las teorías poscoloniales, el pensamiento decolonial y la crític a
latinoamericanista desde el campo específco del acontecimiento simbólico. Su objetivo central es l a
intervención pública en los campos del saber, las artes, las prácticas culturales y la institucionalidad de
la cultura ecuatoriana. Ver http://latronkal.blogspot.com/2009/10/la-tronkal-grupo-de-trabajo.htm l
conocimiento. Empezando desde la iniciativa de María Amelia Viteri de invitar a sus estudiantes
a explorar las diversidades sexuales 'en carne propia', mediante experiencias de travestismo y drag,
personal y del cuerpo como proceso de traducción intima de aquello que discutíamos en su clas e -
con un claro corte queer-. Para el tercer año de la experiencia propuesta por Viteri en
coordinación con Daniel Moreno, se planteó la conformación del Colectivo Desbordes de Géner@,
ya no solo como un taller experimental paralelo a la clase sobre teoría queer que dictaba Marí a
Amelia, sino como colectivo abierto de intervención performática y discusión informada que nos
p aralelamente organizar transgresiones dentro de las instituciones académica y de arte que nos
permitieran problematizar discusiones sobre identidades más allá del aula o la galería y en l a
Para mi, Desbordes se convirtió en el espacio idóneo para cuestionar mi propia construcción como
hombre, heterosexual, de clase media, mestizo con una profunda formación religiosa en la infancia,
que había restringido mis cuestionamientos sobre sexualidad, cuerpo y deseos. La infuencia de
existencia un continuo devenir crítico que no solo dislocó la cómoda posición desde donde, hast a
entonces, veía el mundo, sino, que me permitió encarnar el activismo queer como práctica de
continua re-proposición de mi lugar dentro del sistema sexogenérico, lo que, sin lugar a dudas,
afectó no solo la forma de apropiar los conocimientos académicos propuestos desde mi proceso
formal de educación, sino que me obligó a evaluar permanentemente la situación y los limites
relacionales con los que tengo que convivir dentro de una sociedad cuya cita obligatoria de u n
'deber ser' legitimado por dicha norma media cada una de mis actividades.
benefciarios más allá de los espacios de legitimación, transgredir las fronteras de los campos,
desbordar las representaciones y generar en esa dislocación chocante, nuevos espacios discursivos
que nos permitan redefnir nuestras practicas tanto activistas como artísticas o investigativas.
Para no solo visibilizar, -pues para “ver” se necesita distancia incorpórea-, sino para sensibiliza r
( para lo que se vuelve indispensable la piel y el contacto) desde nuestros cuerpos lo que son
nuestro accionar produzca en otros, siempre que los produzca. Este posicionamiento político que
espero hacer evidente a lo largo de la presente tesis es, sin lugar a dudas, consecuencia de
Historia de Desbordes
A PARTIR DEL 2007 “Desborde de Género” surge como una iniciativa en la academi a
(FLACSO) que busca empezar a discutir el tema de las diversidades sexuales desde un enfoque
queer. Segú n María Amelia, los dos proyectos arte-acción “políticos, artísticos y visuales”
( 'Drag' y 'Desbordes') surgieron como un paralelo a dos clases que bajo la idea de ir “r e-
“ formas en las cuales una combinación estratégica entre los espacios físicos del aul a
de clase y la universidad (academia), el Dionisios: Arte-Cultura-Identidad (teatro
Drag), la calle, las salsotecas tradicionales quiteñas, l@s activistas LGBT y l@s
estudiantes de la Maestría de Género y Desarrollo de FLACSO/Ecuador [y otras
especialidades], emergen como mapas alternativos que habilitan negociaciones
alternativas alrededor del género y la sexualidad en Quit o. El teatro [y más allá de
él, el performance escénico] se convierte en otra herramienta para pensar el cuerpo, l a
ciudadanía, la pertenencia, los cruces desde otras miradas”(Viteri,2010:2).
Como lo describe Ma Amelia Viteri, la iniciativa surge de una discusión sobre la teorí a
analizar el género como un performance entendido más allá del mundo del 'Drag'” y de cómo, a l
ser la performatividad una posibilidad de dotación de nuevos signifcados, no debe ser reducida a
un performanc e (Ibid:4). Parafraseando a Alcazar, Viteri nos propone: “en este marco, el cuerpo
María Amelia Viteri (2010) continúa una discusión que ha venido sosteniendo por varios años
sobre las posibilidades de apropiación y movilidad del término queer en contextos distintos al de l a
clase media norteamericana, y en la página 7 de su texto arriba citado lo discute en los siguientes
Son varias voces al unísono y en constante tensión las que permiten desestabilizar así
sea momentáneamente -o en un proceso de camino y retroceso- lo que entendemos
como ‘nuestro cuerpo’. Es decir, al transitar de múltiples e inesperadas formas,
‘queer’ convoca una posibilidad risomática (Deleuze y Guattar i , 1987) y polivoca l
(Bakhti n , 1981) en donde sus usos y signifcados están sujetos a constantes cambios
conforme varía tanto el marco referencial como el lugar desde donde hablamos.
(Viteri, 2010,7)
Y es que como indicábamos en paginas anteriores, la identifcación queer, aunque incrementa s u
penetración día con día, es permanentemente disputada en su lucha por movilizarse desde l a
m arginalidad, aprovechando lo descrito por Viteri citando a Giroux: “las fronteras de nuestras
diversas identidades, subjetividades, experiencias y comunidades nos conectan más que nos
La denuncia que logra Desbordes desde el aglutinamiento de voces y representaciones desde loc i
iligítimos busca ampliar la discusión a temas de raza, clase y etnicidad pues éstas permean todo
aspecto de la vida cotidiana de la sociedad ecuatoriana cuando se trata de cuerpos como bien lo
explica Maria Amelia. Y la posibilidad de concebir nuestro trabajo como laboratorios lúdicos h a
permitido que busquemos proponer espacios de diálogo que problematizen la potencialidad de l
resignifcación de las identidades donde, citando a Lancaster, “el juego se convierte en la identida d
lo que el sentido es al cuerpo: nos sitúa y nos orienta, pero también va más allá y nos excede”.
Desde este enfoque surge el taller de juguetes convocado por Desbordes y La Chiripa que se
analizará en el capitulo 3.
explorar, desde los cuerpos, las posibilidades del performance artístico y además ha ubicado
nuestro trabajo bajo un posicionamiento sin adscripciones ni obligación de alinearnos con uno u
otro proceso político (trans-gay o transfeminista). Sin estar envueltos, aunque sí afectados por las
disputas lamentables que se dan en el activismo GLBTI dentro y fuera del Ecuador. Desborde es
entonces el fruto de la semilla que por varios años Daniel y María Amelia han logrado cultivar es
En el caso del Colectivo Desbordes de Géner@ su trabajo ha ido ganando más y más espacio desde
su visiblización como proyecto Drag (2007) a través de: la 'toma de la FLACSO' que tuvo como
escenarios algunas paradas del Servicio Integrado del Trolebús en Quito y los edifcios de l a
universidad con el fn “de habitar los varios espacios que ocupamos diariamente en la institució n
interactuando con las personas en el ascensor y en las varias ofcinas, desde esta otra estética leíd a
como otro género.”, explica María Amelia Viteri. Esta acción fue discutida en un Foro/Debate
dos meses después en FLACSO, donde principalmente se cuestionó la vigencia del término queer
Al año siguiente y sobre la base sentada durante el 2007, el Proyecto Desbordes (2008) busco i r
nombre que fue coordinado transnacionalmente por María Amelia Viteri y que tuvo lugar en
FLACSO/Ecuador.(Ibid:10)
El registro fotográfco (Francois Lasso) del trabajo realizado desde el 2007 empezó a circular en
plataformas virtuales sobre arte contemporáneo como 'Experimento Cultural' y para Junio de l
pensando el Binario” .
Para el 2009, ya constituido bajo la fgura de Colectivo Desbordes de Géner@68, se inaguró y cerro
performances de arte acción en tres escenarios continuos. Para julio, Desbordes desflo en el
Orgullo LGBTIQ, y en septiembre y octubre se realizaron dos pre lanzamientos del video
iniciativa del Octubre Trans- por la despatologización de lo trans69. Para diciembre Desbordes de
68 Los datos referidos a continuación provienen de la pagina web ofcial del Colectivo:
http://www.desbordes.or g
CAUSANA.
En Febrero del 2010 “Desbordes” participó en la creación del video colectivo "Cadáver Exquisito
VIDEO" organizado como parte del programa Cuarto de Proyectos de Arte Actual / FLACSO en
Quito. 62 videos provenientes de más de cinco países conformaron este corpus de imágenes en
movimiento, que son el resultado de la colaboración de artistas de Ecuador, Francia, Italia,
Alemania, España y Chile. Desbordes además acompañó a Daniel Moreno en la celebración de los
doce años de Dionisios Arte/Cultura/Identidad con un sketch teatral que formó parte de los eventos
de aniversario del Teatro.
En marzo el Documental Cuerpos/Fronteras: La Ruta fue invitado por las Facultades de Estudios
de Mujeres, Ciencias Sociales, Anthropología y Estudios Afro-Americanos de CUNY (City
University of New York) a su exhibición, seguida de un foro con activistas Latinos LGBTQA
(Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans, Queers, Aliados) y activistas feministas tanto de Nueva York
como de Washington D.C., para posteriormente ser presentado en un encuentro en el Centro
Comunitario de Long Island en Nueva York y ser proyectado en dicho centro, seguido por un foro y
preguntas y respuestas con la comunidad. El evento contó con la participación de académic@s del
área de Nueva York como también de activistas LGBTQA fomentando puentes y discusión entre
activismo y academia, género, feminismo, estudios queer y LGBT.
Durante el mes de Abril se publicó 'Los años viejos y las viudas ¿negociaciones del orden sexual?'
de Gloria María Minango Narváez, miembro del Colectivo Desbordes de Géner@ y tuvo lugar el
Lanzamiento de la página web del Colectivo Desbordes de Gener@ dentro del marco del Día
Internacional de las Mujeres a cargo del Programa de Género de FLACSO/Ecuador. Durante este
evento se realizó un performance que incluyó una transformación en vivo de Daniel a Sarahí,
participación del colectivo encarnando a l@s meser@s y concluyó con la participación de Ma.
Amelia desde Washington D.C.
Paralelamente en la New School for Social Research Maria Amelia Viteri fue invitada a presentar la
experiencia del Colectivo en la Conferencia "Politically Queer: Social In(queer)y and the
University" y el documental 'Cuerpos /Fronteras: La Ruta' participó en las Jornadas Transfeministas
de Barcelona gracias a la colaboración de Leticia Rojas y Vicky Aguirre.
En abril, la revista Vistazo de Ecuador entrevistó a la directora del colectivo, María Amelia Viteri,
acerca del tema queer70. Y para mayo 'Cuerpos/Fronteras: La Ruta' se presentó en la Universidad de
Maryland gracias a la invitación del Programa de Estudios de Mujeres , mientras que en Ecuador el
colectivo Desbordes de Gener@ participó en la campaña de concientización contra la
homo/lesbo/bi/trans/interfobia organizado por Dionisios Arte/Cultura/Identidad y el colectivo
LotoBlanco. Los “desbordados” Samuel/Ch@gr@ y Juan/HuAng perfomaron en el escenario para
visbilizar las agresiones homofóbicas públicas y los diagnósticos patologizantes que aún se dan en
la ciencia médica y siquiátrica. La campaña se realizó en conmemoración al Día Mundial de la
Lucha Contra la Fobia de Género.
Durante los meses de abril y mayo del 2010 se coordinó y llevó a cabo el Taller de Juguetería y
Corpo-política para personas Trans y Queer convocado por Desbordes de Género y el Taller de
Juguetes “La Chiripa” de Carolina Ganchala. Este proceso se discutirá en el capítulo 3 de la
presente tesis.
Para Junio del 2010, Desbordes organizó una presentación multimendia “El Papi del Barrio” que
incluyó video, post-producción y performance en Dionisios como parte de la 'Fiesta Arcoiris'
enmarcada en las celebraciones del Orgullo GLBTIQA 2010 en Quito. “El Papi de Barrio” buscó
visibilizar la violencia de género inherente a los festivales de belleza femenina, como los concursos
de 'camisetas mojadas', emulando dicho evento, pero con hombres para cuestionar los
correspondientes roles binarios involucrados. Mientras tanto 'Cuerpos/Fronteras: La Ruta' fue
seleccionado para participar en el festival de cine CINEMAROSA en el Museo de Artes de Queens
(QMA) en NY.
Como parte del mes del Orgullo GLBTIQA Hu-Ang presentó nuevamente en Dionisios su trabajo
fotográfico y de postproducción que documenta en el Sur de Quito, desde el 2005 al 2007, la
tradición de las 'Viudas de Año Viejo'. El colectivo fue además invitado a Guayaquil a participar en
un evento el 16 de Junio en el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC). Su
presentación incluyo un sketch (“las doncellas no son como los pintan”, que cuestionó las
construcciones narrativas genéricas de películas clásicas y ochenteras americanas), la presentación
de la página web: [email protected] , y una revista musical de Sarahí que fueron muy
bien recibidas por el público.
70http://www.vistazo.com/ea/vidamoderna/?eImpresa=1024&id=3249
En Julio y sobre el escenario montado para el cierre del Desfile del Orgullo Diverso, se presentó
“Más de una vez al año no hace daño”, propuesta escénica que visibilizó la costumbre ecuatoriana
de travestismo masculino que tiene lugar a fin de año para promover la idea de la maleabilidad de
los cuerpos y la importancia de trascender las restricciones de roles de hombre/mujer.
Debido a los válidos esfuerzos por traer a la discusión pública el tema de las diversidades mediante
ejercicios escénicos de cuestionamiento a la norma heterosexual, el trabajo de Desbordes se ha
conectado rápida y estratégicamente dentro de las articulaciones de lo LGBTIQA. Sin embargo, han
surgido discusiones dentro del mismo colectivo en referencia a la crítica a los procesos patriarcales
o heteronormados dentro de las colectividades diversas. Las diferencias en estas opiniones han
resultado incluso en la desvinculación de miembros por considerar que Desbordes no debe criticar
procesos de activismos de los que no ha sido parte o con cuyas identidades no se identifican sus
miembros71. Surgiendo la pregunta crítica de “¿hasta dónde las acciones emprendidas por
Desbordes de Género han sugerido la transgenerización de la escena LGBTI local, y han logrado
problematizar no solo la lógica binaria que contrapone hetero vs homo sino la misma lógica que
fragmenta lo LGBTI y enfrenta lo lésbico con lo gay, a las trans femeninas con los gays, lo lésbico
vs lo trans masculino y lo lésbico vs lo trans femenino?. Limites a los que al parecer todavía no se
ampliar su acción a espacios menos “seguros”; es decir, que visibilicen discusiones más allá de los
Asociación ALFIL
Mi primer acercamiento al trabajo de ALFIL fue indirecto, a través de una copia de su video “No
Estamos Solas” que me facilitó Daniel Moreno durante una reunión de Desbordes en Dionisios.
Detallaré las discusiones y análisis de esta producción y sobre Ñuca Trans en el Capitulo 3.
t ambién planteaban diversas formas de producción cultural en la escena LGBTI, entre esos l a
Asociación ALFIL que participó en el desfle con Ñuca Trans, grupo de baile folclórico
conformado por mujeres trans. Posteriormente ALFIL organizó la elección de la Reina Trans
Para marzo del 2010 empezaron los preparativos del Taller de Juguetes convocado por Desbordes
y el Taller de Juguetes “La Chiripa”. Rashell Erazo de la Asociación Alfl funcionó como difusor a
del evento entre personas trans. Siendo éste el primer trabajo coordinado entre Alfl y Desbordes.
Historia de ALFÍL
Según Daniel Moreno, a fnes de los ochenta se forma SOGA, que luego de años de trabajo se
visibilidad luego del encarcelamiento de decenas de personas trans en Cuenca. Acontecimiento que
este momento histórico se articularían una serie de activismos, que de manera diferenciad a
empezarían a pugnar por diversos reconocimientos a nivel político; y por supuesto a busca r
f nanciamiento para sus diversas luchas. Fedaeps es criticado por la forma en que administra sus
fondos y por como sus bases terminan siendo usadas como “peones de ajedrez” para el benefcio de
unos pocos líderes. De este reclamo surge en 1999 la Asociación ALFIL, como un grupo de
72 http://www.youtube.com/watch?v=vHfDG7Hn3OI&feature=relate d
73 Lobanna Basar Mix, Studio de Fernando Peluquería, Jaime Peluqiería, Hotel Reina Isabel, Saj
Gourmet, Fenix Digital Desing, 2.8 Studio Fotográfco.
personas gays enfocadas en la lucha contra el VIH/SIDA. Este colectivo empieza a reunirse en
las instalaciones del Dionisios convocando a gays que criticaban el ser siempre peones (de ahí que
escogieran llamarse ALFIL por la connotación de ser piezas más activas en la consecución de sus
derechos).
abanico hacia otras diversidades y capta a algunos activistas que estaban saliendo de FEMIS74,
organización que procuraba mejorar las condiciones sociales, legales y de salud de personas
transexuales y transgénero, entre ellas Rashell Erazo, en ese tiempo todavía en proceso de salir de l
Elizabeth y Rashell aprovechan entonces este momento de conficto dentro de Alfl para enfocar el
trabajo del colectivo hacia el tema trans-, mas sus diferencias de opinión sobre lo que incluía y no
trans antes de FEMIS y buscó acceso al apoyo de organizaciones internacionales como Hivos,
que funciona con fondos extranjeros para programas de prevención y asistencia sobre VIH y con
El principal accionar de ALFIL dentro de la producción cultural es Ñuca Trans, grupo de danz a
reconocimiento dentro de los activismos LGBTI. La trayectoria de Ñ UCA TRANS incluye más
Misión del PN UD; trabajo en Hospitales y barrios. El grupo Ñuca Trans se formó en el 2008 y
p ara fnes del 2009 amenizó77 la elección de la reina trans organizado por Alfl. En el 2010 h a
trans/lesbo/homo fobia. También éste es su segundo año participando en el Desfle del Orgullo
De l o s l ím i t e s de l t r aba jo ac t i v i s t a.
A pesar de que estos tres colectivos (PT, DESBORDES y ALFIL) se proponen como incluyentes,
sus esfuerzos hallan, por cierto, límites. Las áreas de interés de su trabajo y los públicos a los que
78 Dionisios Arte/Cultura/Identidad es uno de los espacios más larga trayectoria en la producción cultura l
LGBT, siendo el único teatro drag de Quito funcionando desde 1998 -año de la despenalización de l a
homosexualidad en el país- y que ha mantenido su café teatro como un espacio que acoje a colectivos
gays, travestis, trans y queers como punto de encuentro de sus activistas. Daniel Moreno, su propietrio,
ha visto nacer y morir a la mayoría de grupos, fundaciones y colectivos de activismo sexualmente diverso.
de los diversos en el caso PT, más cercano a las agendas del activismo lésbico; como a la crític a
queer hecha por Desbordes, que surge del interés académico en el tema de diversidades sexuales y
todavía acciona principalmente desde ese exclusivo espacio. Nos parece que estos lugares
diferenciados hacen evidente cómo las líderezas de cada colectivo ejercen infuencia en el
entendimiento que cada grupo tiene de su lugar dentro del activismo de diversidades sexuales y de
A pesar de todos estos esfuerzos por visibilizar el tema trans-, su efecto sobre el cotidiano no
resulta sufciente pues, tomando en cuenta que las personas trans son mayormente
áreas de cocina, peluquería y trabajo sexual, cuyos horarios tienden a depender de la afuencia de
clientes más que de un horario fjo, su disponibilidad de tiempo para dedicarlo a actividades
artísticas y políticas se ve reducido a fnes de semana y noches (tampoco hasta muy tarde). Los
pocos transmasculinos e intersexuales resultan más invisibles aún si sus posiciones polít icas
restringen su participación en eventos o procesos que no se dan desde los espacios autorizados por
forma de lograr benefcios inmediatos para personas cuyo día a día gira bajo la preocupació n
permanente de generar recursos económicos o benefcios tangibles conectados con asuntos de salu d
y derechos.
Como esperamos se haya hecho evidente en el presente capítulo, la producción visual y escénica de
los colectivos que discuten la temática trans ha sido bastante fructífera. Sin embargo, queremos
recalcar que dicha producción ha estado también limitada a ciertos espacios de consumo, sus
benefcios han sido mucho más evidentes en la legitimación de sus líderezas dentro de círculos
validantes y las posiciones polít icas encontradas también han constituido límites dentro de s u
De todas maneras, el esfuerzo constante, mult ilateral y diverso en sus procesos ha atraído
sugerido por Kester alrededor de las estéticas relacionales. De igual forma su dispersión y
funcionamiento fragmentado resuenan en los espacios artísticos como un bombardeo que dej a
atrás la discusión de la forma o el prestigio de la sala para lanzarse mal o bien a transgredir
cuando se reconocen nombres de la jerga que antecedieron a aquellos legitimados por la bibliotec a
en un esfuerzo que pareciera refejar la situación molecular o rizomática descrita por Deleuz e
En el siguiente capítulo buscaremos explorar dos producciones de cada uno de los colectivos arrib a
descritos, con el fn de brindar al lector una perspectiva crítica sobre el tipo de producción hast a
ahora generada, sugerir elementos que permitan analizar con una mirada crítica y discutir el
AUTO-ETNOGRÁFICO.
En este capítulo busco mapear las diversas fragmentaciones de los campos de estudio de la presente
tesis en su relación ontológica con el tema trans/queer, ubicando las distintas articulaciones que
existen alrededor de la producción artístico-política en el contexto más amplio del activismo diverso
en Quit o.
disciplinares existentes entre los campos dentro de los cuales se propone el ejercicio –
arte/academia/activismo –, su uso nos permite además dar una mirada más cercana a los
respectivos campos, que da cuenta de las fragmentaciones internas dentro de las cuales se busc a
trafcar mediante la selección de datos que de alguna forma transiten dichas fragmentaciones.
descripción de los distintos momentos en la historia del activismo Trans y Queer en Ecuador desde
sus fliaciones con estructuras fragmentadas vigentes dentro de las políticas LGBTI, pero además
desde sus permanentes esfuerzos por visibilizar sus polít icas desde la producción escénica y l a
que permite refexionar sobre las dinámicas que se despliegan desde la política trans-queer
King/Performer del Proyecto TransGénero Cuerpos Distintos Derechos Iguales81), María Ameli a
El trabajo descriptivo está construido desde una experiencia auto-etnográfca posicionada desde m i
lugar periférico/ilegítimo de trafcante en estos tres campos (arte, activismo y academia) y viene
dado por mi reciente experiencia iniciática en los mismos, durante un periodo de dos años (2008-
2010), lo que sin duda despierta suspicacia, sino desconfanza, sobre mi posibilidad legítima de
cuestionarlos. Sin embargo, e interesantemente, la serie de eventos que conectan mi trabajo con l a
presente investigación son un ejemplo fehaciente de los accesos que ciertas dinámicas permiten a
círculos de poder en estas áreas, que de forma muy breve pueden posibilitar accionares que solo por
situarse en espacios reconocidos de legitimación o áreas poco investigadas dentro de los campos y a
'expertise' sobre dichos espacios no se hace esperar, y como explic a Schechner (2000), estos círculos
de las redes de autorización y castigo donde los actos críticos, a manera de enunciaciones
cada área.
constante que garantice acceso a fondos, en ese contexto el trabajo escénico artístico resulta ser un a
efciente herramienta para lograr atención mediática y académica vital para la desead a
visibilización política en medios y el respeto legitimador provisto por las instituciones políticas y de l
82 Ver http://www.desbordes.or g
confrontación con las estructuras sociales vigentes, mientras que para el campo académico el
discurso se plantea en conexión a corrientes y discusiones 'de moda' como los estudios culturales, l a
estrategias para discusiones sobre identidad en movimiento o diversidad cruzada por clase, raza,
edad etc.
El locus intersticial artístico-político del arte Drag de Daniel Moreno/Sarahí, los performance
Rashell Erazo y los esfuerzos académico-escénicos propuestos desde el trabajo de María Ameli a
de tráfco que he propuesto para la presente investigación: entre arte, academia y activismo.
Durante los años en los que me ha sido posible interactuar con artistas, activistas y académicos de
diversos contextos socio-económicos y polít icos, he podido atestiguar que los campos dentro de los
que se propone esta investigación y sus redes sociales están internamente fragmentados. Un a
m irada al campo artístico quiteño sistematizado a través de una serie de entrevistas a diversos
actores permite dar cuenta de complejas dinámicas y divisiones alrededor del trabajo artístico:
Los entrevistados coinciden en afrmar que existen complejas fragmentaciones en el campo artístico
y acusan una serie de razones que son percibidas de múltiples formas por estos interlocutores.
En las entrevistas realizadas se enumeran una serie de factores que alternativa y transitoriamente
pie a la articulación y dispersión de colectivos que actúan casi siempre bajo procesos puntuales
fragmentación como un asunto problemático y más bien indica que son un factor productivo, y
En cuanto a las dinámicas que facilitan la conformación de colectivos, las personas entrevistadas
respuesta a criterios curatoriales, cuya articulación acontece con circuitos globales o regionales.
Los puntos de vista sobre el tema también son diversos pues, en la opinión de Kingman, el soporte
Quit o, pese a que sugiere que su recepción en públicos fuera del circuito pareciese darse más en l a
capital. Sobre el tema del trabajo colectivo algunos artistas optan por trabajar de form a
esporádicamente en acciones colectivas siempre que éstas se crucen con sus intereses procesuales o
respondan a deseos político-artísticos específcos, como comentó sobre su propio caso Cayetan a
Salao.
búsqueda de estatus, prestigio, legitimidad y visibilidad, a la vez que califca a las dinámicas
84 Artista contemporáneo quiteño y estudiante de Antropología visual en Flacso que dedica parte de s u
investigación precisamente a las dinámicas dentro de este campo.
Kingman además sugiere que el tipo de discusiones planteadas por artistas es también un áre a
modernas hasta discursos que se enmarcan en cuestionamientos más contemporáneos del arte. A
este respecto varias entrevistas coinciden en que las respuestas artísticas a “las discusiones de
moda” son indiscutiblemente un tema que genera fragmentaciones (Véase Toro, 2009).
Entre estas discusiones “in” está, según opinan varias de las personas entrevistadas, el tema de
como afrma Valeria Andrade) va de la mano con el creciente interés sobre temas de sexualidad en
la academia. Sin embargo, Xavier Andrade cuestiona la amplitud de temáticas sobre sexualida d
que se proponen como discusiones desde el arte actual y anota, por ejemplo, la total ausencia de l
tema de masculinidades y en este caso particular la correspondencia con la discusión del tem a
En cuanto a la efcacia comparativa en atraer atención mediática entre las producciones artísticas
activistas y aquellas que se dan desde artistas contemporáneos, las personas entrevistadas
coinciden en que los colectivos activistas emplean efcazmente estrategias dirigidas a atraer dich a
atención (incluso por sobre la legitimación académica) ya que como indican Manuel Kingman y
Xavier Andrade sus actividades están precisamente dirigidas a lograr este tipo de visibilidad y a
Sin embargo estas mismas comunidades a su vez son representadas como entes colectivos e incluso,
en mi opinión, monolíticos, pues a pesar de que embanderan la diversidad, este mismo término se
construcción diferenciada de cada uno de los lugares desde donde se construyen dichas diversidades
activismos.
El riesgo que se corre, o más bien la evidencia de estos sesgos en la representación, resulta en
enunciados muchas veces panfetarios, con una pobre discusión forma l 86 y por tanto, poco
efectivos en sus consecuencias reales sobre la vida de los sujetos que suponen representar. Dando
como resultado, y en esto coincido con X Andrade, puestas en escena que se ubican en pervers a
“El arte de artistas”, según nos comenta X Andrade, se encuentra más directamente articulado con
los discursos de legitimación de la academia, en comparación con la mayor parte del arte activista,
que sigue circulando, o se ubica en un punto de inercia, según la apreciación de Valeria Andrad e
y la mía propia, “en los lugares cómodos, ya preparados, ya legit imados” de sus círculos. Si n
embargo, Cayetana Salao y Maria Amelia Viteri proponen producciones o puestas en escena que
p arten de discusiones teóricas de actualidad, aunque, como indica X, esta apreciación corre el
r iesgo de abogar por un efecto perverso de “guetización de comunidades” (ie. Trans y queer) que a
su vez genera “un efecto equivalente en la teoría” sobre todo si descansa en actores monolíticos y no
amplia su discusión a los mucho más complejos cruces de clase, raza y demás.
capítulo sobre los activismos LGBTIQ y con el análisis del trabajo artístico-activista propuesto
campos donde se construyen y legitiman discursos, esto va más allá de lo que cada activismo
entiende o de lo que artistas y realizadores son capaces de representar o hasta de lo que se dice en
los medios. Un campo de fuerte infuencia y de constante pugna por legitimar estas defniciones es
defnitivamente la Academia.
p ara discutir temas como las identidades y la representación, ya sea entre antropología y estudios
de género o entre instituciones que defenden un discurso disciplinar defnido versus aquellas que
fundamentan su investigación en estudios culturales (Flacso vs. Andina), esto sin olvidar las
diferencias sociales que se evidencian en muchos de los eventos organizados en cada una de estas
instituciones.
Como supo explicar Ana María Goetsche l 87, al tiempo de la entrevista, Coordinadora de l
departamento, son reconocidos por la incidencia que han logrado en políticas públicas. Aunque,
como explicó Xavier Andrade,88 Coordinador de Antropología de la misma institución, los estudios
de género han estado principalmente interesados en temas relacionados a la mujer, y solo en años
recientes, han dado cabida a la propuesta ‘queer’ de Ma. Amelia Viteri y al mismo Andrade con
una clase de Masculinidades (dictada por Andrade desde 1998) y ha fomentado la investigació n
desde una perspectiva queer, gracias a los cursos que viene dictando Viteri desde el 2007.
Goetschel reconoce que su departamento ha visto el creciente interés sobre las diversidades como
parte del debate académico, por ser un fenómeno social cada vez más interesante y que el
momento especifco y contextos actuales han facilitado que el trabajo de María Amelia atraig a
cada vez a más público diverso al diálogo, por lo que se busca articular un Diplomado sobre
Diversidades Sexuales y Ciudadanía desde marzo del 2011, que se alimente de la refexió n
performativa sobre la construcción de ciudadanía que Viteri ha venido sosteniendo en los pasados
tres años desde la inserción del tema queer como discusión latente y en construcció n 89.
Andrade concuerda con el hecho de que el debate sobre diversidades se enriquece permanentemente
alrededor de la fgura de María Amelia Viteri, sin que por esto la penetración del tema queer en
las discusiones académicas actuales deje de ser marginal, al igual que lo es su problematizació n
desde masculinidades –que incluye un signifcativo componente queer en sus lecturas- y otras
áreas de estudio que a su entender no dejan de ser un desafío a nivel de lograr mayor
trascendencia en los diversos campos donde se está discutiendo el tema; sean estos activismos,
prácticas artísticas o la legitimación de los estudios propuestos desde estos lugares en las
Un breve mapeo de la incidencia de lo queer sirve como ejemplo claro de la creciente pero aú n
insufciente atención que se da al tema. Como ya se mencionó, luego de tres años de mantener un a
clase optativa de verano con María Amelia Viteri, el Departamento de Género y Desarrollo de
Aunque el tema es transversal en varias de las materias dictadas por el departamento de género,
como género y derechos humanos de Roxana Arroyo, o en las clases de Susana Wappenstein o
obligatorias para los antropólogos (como la de masculinidades y teorías feministas -aunque ést a
última no incluye siempre un componente queer-). Hay otras asignaturas, como es el caso de
queer en varias de sus clases. Además las materias dictadas por profesores provenientes de
Estudios Culturales como Christian León (Medios y Cultura) o María Fernanda Cartagen a
(Arte y Antropología) eventualmente suelen incluir textos que por la vinculación de los estudios
queer con los estudios culturales y de los estudios de sexualidad desde el pensamiento
Los mismos Estudios Culturales, centrales dentro de la posición política de la Universidad Andin a
Simón Bolívar, y las demás carreras allí dictadas tampoco dan fe de un interés mayor en el tem a
de diversidades, pues dicha universidad no cuenta con ningún departamento, maestría, diplomado
o clase específca sobre temas de género y mucho menos sobre diversidades o teoría queer.
En la UASB hay solo un par de ejemplos de profesores que manejan la temática como en el caso
de Edgar Vega, quien dicta materias en las áreas de Comunicación, Estudios Sociales y Globales y
Letras, y que según nos explicó, contaba con dos cursos: Representaciones Corporales en las
planteaban abierta y transversalmente para profundizar sobre las dinámicas del género en l a
sensibilidad de los sujetos emergentes (incluyendo mujeres y diversos). Finalmente está Raú l
donde propone:
“propiciar una conexión con “el hombre” y “la mujer” que vive en cada uno de
nosotros, y con las energías masculinas y femeninas que alberga nuestro cuerpo”. Y
aunque pareciera situarse en el binario, busca responder en la clase las siguientes
preguntas centrales: “¿cuáles son las fuerzas que hacen que los cuerpos se
m aterialicen como 'sexuados'?, ¿cuáles son las maneras en que opera la hegemoní a
heterosexual para modelar cuestiones sexuales y políticas?”falta cita wevon de
m ierda...
El análisis de la oferta académica se reduce básicamente a estos docentes y aunque otras materias
componente que incluya una mirada queer por lo que se puede asumir que su presencia en dichas
clases es, cuando mucho, marginal. En el caso de estudios de pre-grado la presencia del tema es
prácticamente nula.
Ac t i v i smos LGBTIQH
El campo de mayor inclusión del tema trans y recientemente de la discusión queer, es precisamente
el activismo de diversidades, siendo este espacio el que ha logrado mayor incidencia de sus
Aunque no existe un levantamiento histórico o registro de la participación polít ica de los género-
diversos en el Ecuador, historias como la relatada por Pablo Palacio en 1927 en “Un Hombr e
Muerto a Puntapies”, ya nos hablan de la noche quiteña y de los lugares frecuentados por
homosexuales como el legendario parque de “El Ejido”. Más allá de la literatura, la tradición ora l
sobre la participación polít ica de homosexuales contada por nuestros padres y abuelos nos remite a
mediados del siglo XX, donde ya se cuestionaba a gobiernos como el de Velasco Ibarra, por “las
caídas del poder a la infuencia de un montón de maricones que form a ban parte de s u
gabinete”90. Además, varios intelectuales y académicos de las décadas subsiguientes también era n
acusados de homosexualidad, sobre todo si no se habían casado antes de cumplir treinta años, pues
como decían los abuelos: 'solterón maduro: maricón seguro'. Un estudio detallado sobre la histori a
alrededor de la sexualidad diversa son campos muy interesantes y aún no explorados, pero s u
activistas LGBTI que se empieza a dar durante los años 80's, ya que nos permite rastrear los
lineamientos polít icos diferenciados y los momentos de cruce y fragmentación que estructuran a l
activismo actual.
histórico de la reivindicación lograda por el movimiento GLBT desde los primeros esfuerzos por
90 Esta acusación vuelve a hacerse presente contra el actual gobierno de Rafael Correa y su supuesto
“gabinete rosa”.
91 Duración: 22 minutos, producido por Vista de Ojos Films en el 2008 auspiciado por la alianz a
Equidad-Famvida (ambas organizaciones gays) y fnanciado por Hivos. Que contó con la participació n
de activistas de Entre Amigos, Sociedad de Gays (SOGA), FEDAEPS, Fundación Amigos por la Vid a
( FAMVIDA), Coccinelli, Grupo Tolerancia, Grupo de Cuenca, FEMIS, Fundación Jems Rodriguez,
Fundación CAUSANA, Fundación ALFIL, OEML, Fundación Ecuatoriana Equidad, Proyecto
Transgénero.
articular un movimiento hasta la despenalización de la homosexualidad en el Ecuador en 1997 y
En Primera Plana comienza su recorrido en los años 80s -década de la vuelta a la democracia e
grupos como la Sociedad Gay (SOGA) que se reunían de forma clandestina en Quito
Durante los 90s, mientras la opinión pública recogida en medios de comunicación entendía l a
preparaban un reporte sobre las violaciones de derechos humanos, la impunidad y los casos de
homofobia sucedidos en 1993 – 1994 para la Comisión Interamericana. Aunando esfuerzos con
los actores políticos emergentes durante esta década: indígenas, afros, jóvenes y mujeres, los
activismos GLBT empiezan a estructurar una agenda política de reivindicaciones que encontrará
Se crea entonces el “Triángulo Andino” agrupando a todas las organizaciones GLBT o pro
derechos GLBT que funcionaban en ese momento: FEDAEPS, Amigos por laVida (ahor a
Famvida), Grupo Tolerancia, la organización trans Coccinelli y el Grupo de Cuenc a 93, con el f n
de lograr la derogatoria del artículo 516 del código pena l 94 , que castigaba la homosexualida d
como delito.
92 Aunque la mayor parte de la información a detallarse a continuación provienen de este documental, los
datos han sido confrmados en varias entrevistas a activistas como Daniel Moreno y Francisco
Guayasamín (http://www.hi5.com/friend/p143547187--LA%20DIVERSIDAD%20SEXUAL%20EN
%20ECUADOR_País%20Canela--htm l ) entre otros.
93 Vale anotar que de estas organizaciones solo Famvida (Fundación Amigos por la vida) sigu e
funcionando activamente, las demás se han desintegrado en esta última década.
Luego del arresto masivo de más de 100 homosexuales en Cuenca, la mayoría personas trans, el
“Triángulo Andino” convoca a una movilización a nivel nacional, apoyada por diversos
movimientos más allá del ámbito activista gay, que llega a los medios y a actores polít icos
importantes en Cuenca y el resto del país. Se recolectan más de 1400 frmas solicitando l a
derogatoria de la norma por inconstitucionalidad que logró ser aceptada luego de la intervenció n
En la Constitución de 1998 el trabajo activista vio cristalizada una de sus más importantes
(incluyendo los casos de gente infectada con VIH o con SIDA), el libre derecho al desarrollo de l a
Para muchas personas entrevistadas durante la presente investigació n 95, fueron realmente las
trans y su denuncia de la violencia policial de la que eran objeto, quienes comenzaron a presiona r
activistas de las organizaciones GLBT ya estructuradas al tiempo. Cabe anotar además que a
pesar de que estos activismos organizados incluían desde su formación a mujeres -lesbianas y no-,
eran instituciones principalmente manejadas por gays, cuyo trabajo se dirigía a temas sobre
formal del flm, su argumento está propuesto en un formato que restringe su investigació n
periodística, principalmente a la visión del movimiento gay activista sobre el tema. El caso de
94 En su insiso 1ro: “En los casos de homosexualismo, que no constiutyan violación, los dos correos será n
reprimidos con reclusión mayor de cuatro a ocho años”. Segun cita en 'En Primera Plan a'
95 Entrevistas realizadas en mayo y junio en Dionisios Café Teatro a Daniel Moreno y varios gays 'de l a
vieja guardia' que vivieron este proceso de lucha por despenalizar lo homosexual.
cómo se articulan los movimientos lésbico o transgénero no son considerados, ni se profundiza en
cómo surgió esta despenalización, ni en cómo la ley afectaba a las lesbianas. Tampoco considera l a
Esta visión sesgada y poco incluyente da fe de una mirada de ghetto que invisibiliza las
r ápidamente como se integró luego de la derogatoria del artículo 516 del Código Penal. E l
documental tampoco nos habla de los problemas internos de los activismos mencionados, debido a
realidad y los esfuerzos por unifcar al movimiento no han resultado fructíferos, como bien nos
96 Conversación previa a la entrevista sobre la historia de los activismos trans en la que Daniel detalló
varios confictos que tenían que ver con abusos de poder y benefcios personales que terminaron en l a
desintegración de organizaciones como SOGA, FEDAEPS, COCCINELLI (colectivo transfemenino de
trabajadoras sexuales) y FEMIS.
97 Esta falta de cohesión por intereses diferentes dentro de los movimientos LGBTI fue corroborada por
Francisco Guayasamín, cronista de estos movimientos, activista del grupo Canela y creador de l a
p ágin a http://ecuadiversos.t ripod.com / , u no de los espacios más informativos y plurívocos en la web
n acional.
Equidad [Fundación Equidad-Famvida]98, que no sé cómo se llama pero que está
m ás muerto que el nuestro (Almeida, 2009:mail personal p.1)99
Y es que pensar en la unifcación, entre gays y lesbianas en Ecuador, que vaya más allá de
eventos muy puntuales como el desfle del orgullo, resulta más que difícil si entendemos que cad a
uno de estos movimientos construyen su historia desde entenderse como realidades muy diferentes
y políticamente accionan bajo principios también bastante divergentes. Para ilustrar estas
diferencias de agenda analizaré brevemente textos de Douglas Crimp (2005) 100 y Adrienne Ric h
p rimera fuente, para así describir como gays y lesbianas entienden sus procesos políticos.
La disputa por derechos desde la diversidad sexual difícilmente puede entenderse como un proceso
sólido y unifcado de confrontación, pues las formas diversas, incluyendo las sexualidades y los
distintos géneros, operan bajo condiciones diferentes de exclusión, que además están cruzadas por
cuestiones de clase y raza. Y es que no es lo mismo hoy en día salir del closet como gay declarado
cuando los accesos a capitales (ser mestizo blanco, de clase media-alta, educado en colegio privado
adolescencia, dejando una familia de 5 herman@s y desertando de los estudios secundarios par a
ejercer trabajo sexual y cubrir así los gastos de intervenciones para trans-formar su cuerpo acord e
98 Esta fundación realizó un estudio de prevalencia y sero tipifcación de VIH en el Guayas durante
2006-2007 cuyos resultados se compilaron en la Declaración de Compromiso sobre VIH-SIDA,
U NGASS . Informe al Gobierno del Ecuador 2006-2007
(www.onusida.ec/imagesFTP/6170.Informe_U NGASS_2007.doc)
100Posiciones Críticas de Crimp es una compilación de sus escritos desde fnales de los 70s
Como discutíamos al criticar el documental 'En Primera Plana', hasta en las luchas conjuntas,
como la emprendida por organizaciones LGBT durante los 90s, su historia tiende a ser leída o
propuesta al público desde una mirada que, incluso en estos espacios diversos, sigue sostenida en
Y es que la sociedad global en la que vivimos no ha logrado escapar al ideal propuesto desde l a
modernidad que gira alrededor del hombre, con considerable acceso a capitales, gringo/europeo o
europeizado, blanco, heterosexual, adulto-joven, atlético y en últimas hasta devoto. Para dars e
cuenta de esto basta con prestar atención crítica a los múlt iples disposit ivos desplegados (medios
m asivos, textos escolares o incluso juguetes) para la reifcación de este ideal de normalidad. Así, l a
hegemonía se ejerce desde un lugar muy específco cuya construcción ideal se consume mediante
y derechos a tod@ otr@ de forma directamente proporcional a sus 'capas de otredad' frente a este
ente central.
por la reivindicación e igualdad de derechos de muchos movimientos sociales que incluyen los
feminismos, el activismo gay, los movimientos lésbicos y trans hasta las actuales iniciativas queer,
del siglo XX, los gobiernos dictatoriales y monárquicos se cuestionan con procesos revolucionarios
101Entendemos por falocentrismo la característica de las sociedades patriarcales que sostiene el privilegio de
lo masculino en las relaciones desiguales entre géneros.
102Los movimientos por reivindicación de derechos para los sexualmente diversos forma parte de un muy
complejo entramado de colectivos y movimientos sociales como aquellos que luchan contra l a
discriminación racial y de género, las luchas de clase, los sindicatos, etc. Estos procesos se desarrollan de
forma entrelazada y coinciden en los momentos históricos de lucha coadyubando a la generación de
espacios políticos y frecuentemente fortaleciendo en apoyo mutuo las luchas de cada colectivo.
como el mexicano o el ruso y localmente el liberalismo ecuatoriano. Al tiempo se produce el primer
conficto bélico de gran envergadura (1914 a 1918), en la misma década del desarrollo industria l
del fordismo y la revolución antimonárquica rusa. Pero no sería hasta mediados de los 60s y los
70s donde la lucha por derechos civiles permitirían la participación política explícita de otras
Ya en los 80s, como bien explica Crimp (op.cit:100-112), el SIDA no se considero verdaderamente
un problema para la sociedad hasta que cobró victimas más allá del mundo gay, e incluso en es a
circunstancia, siguió en el sentido común, entendido como algo que les pasa a los “maricas” a pesa r
de que las últimas estadísticas demuestran el mayor índice de infección se da entre mujeres
heterosexuales casadas (y asumo monógamas en su mayoría). Crimp explica que esto se da bajo l a
lógica de entender lo negativo como situado en el otro, coincidiendo con lo explicado por Hall
considerar un problema al sida -o a cualquier otra problemática que se adjudica a 'otr@s' - niegu e
su existencia bajo las mismas estructuras y mecanismos que son usados para prohibir la existenci a
m isma de est@s otr@s (Foucault explica lo inexistente, lo innombrable e ilícito como las tres
Fue entonces la magnitud del problema y su directo efecto en la sociedad en general lo que sucitó
los fuertes procesos políticos gay (StoneWall o ACTUP) que, usando al arte, pusieron en discusió n
Este origen y la permanente incidencia de la enfermedad a nivel global, y por tanto los fondos
enfoquen sus trabajos en el tema de salud sexual, para luego extenderse a otros derechos civiles.
Adrienne Rich (y Audre Lorde, Elizabeth Vasquez, Sandra Alvarez, Beatriz Preciado, en sus
estructura lesbiana legitimada, debido “a la privación de una existencia política” propia, por s u
estigma social- y la “falta de una comunidad femenina coherente” las llevan a hacer causa comú n
lesbiana con respecto a que, en el segundo caso, se suma al estigma homofóbico la condició n
subordinada de ser mujer. Y que, por tanto, las condiciones diferenciales, estructurales,
caso de las mujeres viene dada a través de un control mucho más fuerte sobre cuerpos y deseos.
Rich sugiere que estas imposiciones además han producido históricamente formas de resistencia y
Las mismas lógicas pueden verifcarse en el caso ecuatoriano, coincidiendo con lo descrito en el
capítulo anterior y lo antes enunciado en referencia al desarrollo del activismo GLBTI en los
estructuración parte en los años 80s, con colectivos 'clandestinos' gays o mixtos que funcionan de
forma unifcada bajo la identifcación de “Gay”. Luego, durante los 90s las organizaciones de
movimientos con particular atención a lo trans en la última décad a 103. Finalmente, según explic a
103Datos obtenidos en entrevistas a Daniel Moreno y del documental “A Imagen y Semejanza” de Dian a
Varas
Sandra Alvarez de la Organización Ecuatoriana de Mujeres Lesbianas (OEML) 104, a pesar de l a
décadas anteriores, no se acciona un movimiento lésbico sino hasta el 2002 (Alvarez, 2010,
entrevista).
sexualidad femenina más allá de la heterosexualidad da cuenta de lo efciente que ha sido est a
Alvarez además explica la situación de cómo se genera al momento la opinión pública sobre l a
Así, visibilizar existencias, nombrarlas, legit imarlas en su aporte son preocupaciones permanentes
del activismo lésbico, que reivindica además esta largamente luchada postura del feminismo de
En estos lineamiento se generan las discusiones sobre si usar glbti o lgbti, y las posiciones a veces
inconmensurables sobre los procesos de activismo trans en Quito de los dos más importantes
colectivos que trabajan directamente lo trans. Por un lado, está la Asociación ALFIL cuy a
historia se vincula directamente con lo gay y sus procesos de exigencia de derechos con principa l
preocupación en VIH/SIDA; y por otro lado, el o las corrientes de orígenes feministas como el
Proyecto Transgénero, que busca actuar contra los mecanismos de prohibición del patriarcado.
de cada colectivo y las discusiones que surgen al respecto de las mismas. A continuació n
revisaremos una discusión virtua l 106 sobre la identidad trans que evidencia y critica esta disputa:
"Las trans somos varones que renunciamos al privilegio de ser varones. Eso debe tener
u n castigo. El sistema machista dice que si renuncias a tu derecho de mandar y
dominar entonces vas a ser dominado, porque te estás degradando a pertenecer a l
género débil. Entonces debes ser tratada igual o peor que una mujer"
Claramente, la declaración de Rashell propone que la categoría trans es solo válida para el caso
de transfemeninas, es decir de Hombre a Mujer, y vale anotar que a pesar de que ALFIL se
apoyo a transfemeninas (HaM) de Quito. Sin que por esto nieguen posibilidades o intenciones
transfeminista a la que se adscribe este colectivo. Sin embargo, muchas personas que hemos
Samuel Fierro:
107Es de mi conocimiento que existe al menos una demanda en proceso por trata de personas contra el PT
por haber ofrecido a un transmasculino extranjero venir al país a cambio de oportunidades legales,
educativas y laborales que no se cumplieron. Otras personas trans y no trans a las que entrevistamos ha n
m anifestado su molestia por situaciones similares de incumplimiento de ofertas y uso abusivo del
trabajo profesional o activista de personas por parte del P T.
Finalmente, Ximena Echeverría Mantill a 108, bajo su seudónimo de Facebook: Filomena Suntaxi,
efectiva que tiene lugar en los campos de legitimación del conocimiento respecto al tema:
Filomena Suntaxi:
Entonces habría que ver qué o quién valida ciertos posicionamientos, desde dónde se
legitima el hablar por... Es una suerte de rincón, de arrinconamiento confgurado por
u na relación permisiva y viciosa entre academia, activismos y medios de
comunicación. Ni la academia logra hacer legibles, ni aplicables y menos aú n
democratizar sus discusiones, ni los activismos abren puertas a otros aportes sino se
validan en pertenencias a raja tabla y ahí en ese gran divorcio entre quienes podría n
mover la wevada [la cuestión] (academia y activismos) aparecen los medios de
comunicación a cagar más la cosa. a aprovecharse de esa falta de acuerdo, desde un a
plataforma de dif usión mucho más poderosa y con mayor alcance y repercusión no
solo sobre la sociedad en general sino incluso entre los grupos por los que dicen habla r
y trabajar la acad[emia] y los activismos. basta explorar un poco en los referentes de
las trans. ¿que guía más el cotidiano de las trans, la butler o la beyonce? ...
Esta últ ima inter vención explica en mucho algo que ha sido preocupación permanente en todos los
colectivos que estoy explorando (ALFIL, P T, Desbordes109): ¿Qué lenguaje ha de emplearse par a
lograr una real incidencia en la construcción identitaria, de consciencia polít ica y de los procesos
individuales de las personas trans en el Ecuador y en la sociedad que niega sus derechos? ¿Cómo
109Aunque desbordes no se defne como un activismo trans- su locus, desde el queer, discute
permanentemente las ideas de trans-gresión, trans-ito, trans-formación y movilidad de las identidades
frente a la norma y los cruces de la sexualidad con temas de clase y raza.
Las diferencias no son empero, solo políticas, sino que temas de clase también cruzan las
fragmentaciones dentro de los espacios alternativos para personas diversas sexualmente, pues por
ejemplo, no solo es diferente el público de Malva Malaba r 110 – que presenta shows en el cin e
instalando equipos y maquillando a otros-. Sin desmerecer la calidad del trabajo de nadie,
defnitivamente las situaciones a las que se enfrentan para sostener su obra no es la misma, debido
En cuanto a los activismos, no falta quien evite participar en cualquier evento organizado por
“Gays corporativos”113 o “radicales lesbianas”.114 Ni qué decir de las criticas sobre quié n
“ realmente” maneja los activismos trans-. Mucho más graves son las acusaciones en cuanto a las
estrategias empleadas para “reclutar” o mantener visibilidad mediante tener trans- entre las
bases115.
Además, la competencia por fondos externos y confictos generados por eventos previos en l a
historia de estos colectivos repercuten en una permanente división que se hace evidente cuando en
eventos como el desfle del orgullo glbt 'gay' del 4 de Julio del 2009 (coordinado por Equida d 116),
por ejemplo, colectivos como el PT no participaron por considerar que el evento representaba a l
110Personaje drag creado por León Sierra, quién estudió en Nueva York y es actualmente docente de l a
Universidad San Francisco de Quito, además de pertenecer a una reconocido círculo de artístas.
111Sala de cine no comercial frecuentado por intelectuales con precios ligeramente más altos que otras salas
113Referencia utilizada por activistas del PT para criticar a las organizaciones gay
115Referencia a nota 28
116http://www.equidadglbt.com /
corporativismo gay, mientras que la Asociación ALFIL presentó a Ñuca Trans como compars a
del evento. En este mismo año (2009) Causana organiza su desfle nocturno por el orgullo lgb t
pero para lesbianas. De la misma forma, El Proyecto Transgénero y Confetrans (Asociada con el
PT) se rehusaron a participar en la reina Trans 2009 convocado por la Asociación Alfl-
RedTrans, quienes por su lado tampoco asisten usualmente a eventos convocados por el P T.
Igualmente inusuales son los trabajos conjuntos entre lesbianas y gays, donde por lo general sus
agendas apuntan en direcciones diferentes, pues mientras los activismos gays están principalmente
enfocados a procesos relacionados con el VIH-Sida (siendo esta temática su principal fuente de
f nanciamiento), las reivindicaciones lésbicas se enfocan más a la lucha política feminista por u n
cambio en el paradigma patriarcal vigente117. La disputa entre lesbianas y gays se refeja en las
instituciones Trans de Quit o, pues si bien se proponen como colectivos autónomos, tanto el
Proyecto Transgénero como la Asociación Alfl acusan a su símil de depender, en el caso de Alf l
del corporativismo gay (Kimirina) y en el caso del PT de un discurso político generado desde el
transfeminismo lésbico118.
Por lo antes dicho, los activismos diversos no pueden verse como un movimiento unifcado, aunque
en sus disputas y vinculantes en sus esfuerzos por buscar alternativas en sus lenguajes; como es
queer en la fgura del colectivo Desbordes de Género. Este tipo de espacios y el papel que juega n
dentro de las políticas de géneros diversos son, en si mismos, temas para ser profundizados en
118Un ejemplo de esta disputa se hace manifesto en la respuesta emit ida el 29 de Marzo del 2007
(TRANSGENEROS QUE DISCRIMI NA N A TRANSGENEROS ) por el Proyecto transgénero-
CasaTrans a los motivos presentados para la no inclusión de Casa Trans en la Red Trans, ver
http://casatrans.t ripod.com/noticias/.
investigaciones más ambiciosas que la presente, pero a manera referencial, y como un primer
acercamiento al tema, es importante empezar a entender al activismo trans, desde sus posturas
pensamiento queer se sugiere precisamente en estos espacios intersticiales que podrían facilita r
una discusión más fuida entre las diferentes posiciones desde donde se disputa el activismo trans.
etnográfco a cada uno de los grupos investigados (P T, Desbordes, Alfíl) trazaré su desarrollo
histórico en base a material de primera mano y datos recolectados mediante trabajo etnográfco de
campo, hasta llegar al presente histórico que viven los tres colectivos cuyo performance escénico
transfeminista, para luego describir el proceso del activismo Queer de Desbordes de Género, segú n
lidereza Rashell Erazo. La mayor parte de los datos sobre el PT provienen de sus espacios web
ofciales y de datos de campo. En el caso de Desbordes, los datos salen de publicaciones académicas
Arte/Cultura/Identidad, pues hay escasa información sobre ALFIL en otros medios. Creo que
una descripción histórica de cada colectivo permite situar su locus de enunciación y ayuda a
que desde fnes de los 90s, con la creación de un espacio artístico-político para los diversos sexuales
como el Dionisios Café Teatro (drag), empieza a articular espacios de encuentro y los activismos
LGBTI comienzan a buscar mecanismos para visibilizar problemas polít icos que les afecta n
directamente usando artes escénicas y plásticas. Desde 2004, la formación de colectivos escénicos y
Acción-arte (performance político), Ñuca-Trans (danza folklorica trans), Sin Objeto Plausibl e
(sketches teatrales con temas como VIH y transgenerismo), Reinas de la Tecnocumbia, Divas
queer) y el continuo trabajo de artistas como Daniel Moreno o Cayetana Salao entre varios otros,
dan fe de un proceso sostenido de intenciones artístico-políticas que, sin embargo, no resuelve sus
oportunidad de conocer a Elizabeth Vasquez, Ana Almeida, el trabajo del colectivo y sus procesos
entonces), los proyectos de microempresas para Trans, los diálogos interculturales, las cenas
La CasaTrans del PT está ubicada en una zona residencial del centro Norte de Quito, subiendo
desde la Avenida America por La Gasca, pasando el Seminario Mayor San José, el supermercado
119Dionisios Arte/Cultura/Identidad es uno de los espacios más larga trayectoria en la producción cultura l
LGBT, siendo el único teatro drag de Quito funcionando desde 1998 -año de la despenalización de l a
homosexualidad en el país- y que ha mantenido su café teatro como un espacio que acoje a colectivos
gays, travestis, trans y queers como punto de encuentro de sus activistas. Daniel Moreno, su propietrio,
ha visto nacer y morir a la mayoría de grupos, fundaciones y colectivos de activismo sexualmente diverso.
Supermaxi, la Escuela-Colegio católico Miguel del Hierro de las Hermanas Lauritas, y en el
siguiente semáforo a la izquierda y avanzando hasta media cuadra antes del acceso lateral norte
de la Universidad Central del Ecuador, sobre el anden izquierdo está la CasaTrans. Dejar de
Visiblemente bien mantenida, y con un olor a cera fresca, la casa era evidentemente acogedora. A l
ingresar, a la derecha están las gradas de acceso al segundo piso, donde se habían desplegado
izquierda, en la sala pintada de naranja cuelgan una serie de fotos de la investigación histórica en
torno a destacadas personas trans que Pamela Miño y Ana Almeida recopilaron. Al frente de l a
entrada se formaba un pasillo, entre una división con la sala cubierta de madera color vino y el
resto del edifcio. Un pasillo empapelado con fotos, posters y comunicaciones del proyecto y
organizaciones afnes. A la derecha estaba el aula/sala de reunión donde se podían leer frases
sobre identidad trans de participantes del proyecto y al fondo del pasillo la puerta del baño con u n
letrero que invitaba a “dejar el género afuera”. A la derecha del baño estaba la entrada a l a
amplia cocina que sirve también de comedor para las cenas y el diario. En el segundo Piso de l a
casa estaban tres dormitorios y un baño donde residían activistas durante su tiempo de trabajo
con el PT.
Mi vinculación con el PT, desde julio del 2009, me permitió participar en una serie de eventos. Lo
p rimero que coordinamos fue una sesión fotográfca con activistas (que al momento vivían en l a
Kingman, Juan Zabala, Mayah Franco, Viviana Loaisa y Samuel Fierro120 fotografamos por
varias horas a varios activistas del Proyecto, incluid@ su invitad@ británic@ y performer Joey
120Estuvieron además presentes Leandra Macías (fotos de backstage), Ana Almeida y Elizabeth Vasquez,
quienes no participaron como modelos para la sesió n
performance femenino y el masculino). Entre ellos Nicole (quien había sido benefciada con un a
beca para estudiar derecho en la U NAP gestionada por el Proyecto Trans en el 2007), Toal a
( Transmasculino manteño que además era madre de una niña de 6 años) y Alejandra Gender
formalmente al PT).
Luego fui invitado a documentar dos encuentros políticos cuyo proceso detallaré en el Capítulo 3.
Primero, El Dialogo Intercultural entre jóvenes Hip-hoppers del LadoSur de Quito y EL PT, que
serviría para coordinar un encuentro escénico entre Joey Hateley, performer queer británic@
invitada del PT, y la gente de la Casa del Gato Tieso (LadoSur). Y el segundo, la invitación que
realizará el Colectivo madrileño “La Acera del Frente” al PT para unirse al esfuerzo mundia l
OctubreTrans en Quito.
A mediados de Septiembre del 2009 se dió una reunión entre La Tronkal y el PT que contó con l a
asistencia de Christian León, María Fernanda Cartagena, Fernando Falconí (Falco), Edga r
Vega y Samuel Fierro por parte de La Tronkal y Ana Almeida, Cayetana Salao y Elizabeth
apoyo a las iniciativas del PT. Así, varios miembros de La Tronkal acompañaron los eventos de l
intersex en el país.
Par fnales del 2009 Edgar Vega anuncia su participación en una compilación que preparaba l a
Tronkal escribiendo un texto sobre TransTango y consolidando así el acercamiento de los dos
colectivos.
Luego, a principios del 2010, cuando varios miembros de La Tronkal llegaron a ocupar cargos
públicos en el Ministerio de Cultura y Banco Central, fue muy frecuente ver a activistas del PT
en eventos sobre Cultura y Política, dirigidos por los antiguos miembros de la Tronkal.
Para Septiembre del 2010 Joey Hateley regresa al Ecuador para el tercer intento del PT de
generar un “matrimonio” transgresor. Tras su fallida intención de casar a Cayetana Salao con
Alejandra Gender en un primer momento y luego con Jéssica Correa, una transfemenina de sexo
legal masculino, anunciado en Febrero 2010 como un matrimonio lésbico. este tercer intento
propone otra fgura donde un activista bisexual, o antes hetero y hoy gay, se casa con Joey
Aunque el juego de género planteado por esta última iniciativa se propone como transgresor, l a
fuerza discursiva de la unión entre una mujer biológica que gusta de hombres y un hombr e
biológico que opta por casarse y pretende incluso reproducirse con su pareja, corre el riesgo de ser
leído como una relación heterosexual donde, en cualquier caso, los roles de género no está n
claramente establecidos, esto tampoco es novedad dentro de las parejas hetero pues los roles, no se
asumen, en la práctica y sentido común cotidianos de la sociedad normanda, de forma tan radica l
como la orientación sexual. Además activistas gay como Andrés Buitró n 123 critican fuertemente
121Escojo deliberadamente performar en su connotación teatral pues a lo largo del trabajo de est@ activist a
queer los juegos entre masculino y femenino son frecuentes y difcilmente se puede afrmar en base a s u
obra que es una mujer que vive como hombre y mucho menos hombre gay pues en sus líricas critica es a
identidad fja también. Ver http://www.facebook.com/joey.hateley?ref=ts,
http://www.facebook.com/group.php?gid=18844478099,
http://www.youtube.com/user/TransActionTheatreCo .
122Una entrevista a profundidad realizada por María Amelia Viteri a los involucrados en este
performance puede hallarse en http://www.latinart.com/spanish/aiview.cfm?id=442
123Abogado activista gay al tiempo vinculado con los Centros de Equidad y Justicia, para posteriormente
ser funcionario del Ministerio de Derechos Humanos y actualmente asesor de la Presidencia de l a
República en temas de Derechos Humanos y Equidad de Género. Quien ha trabajado en muchos de los
esta iniciativa pues siente que desdibuja el arduo trabajo realizado por él, y otros, para legit ima r
Historia del PT
Elizabeth Vásquez, luego de transitar por FEDAEPS y FEMIS, continúa con su trabajo
p aralegal que desde el 2002 da lugar a la formación de la 'Patrulla Legal' que brinda asistenci a
itinerante a trabajadoras sexuales trans en varios lugares de Quito (La Y y Mariscal, como
p rincipales zonas de ejercicio del trabajo sexual transfemenino). Luego funda la CASATRANS
(2004) como centro de operaciones y residencia activista para personas transgénero y desde este
conformistas que desde diversas identidades de género busquen transgredir las normas del sistem a
sexo-genérico binario patriarcal y hegemónico. Su discurso está mucho más informado de los
aportes del feminismo lésbico a la discusión del tema trans- y desde este lugar su preocupación por
la búsqueda de diversos frentes para la subversión del sistema dan fruto en una serie de iniciativas
como las de inserción, educación, formación política y producción cultural en diálogo con otros
colectivos con los que sin aparente relación compartiera preocupaciones subyacentes comunes a
En coherencia con las estrategias del feminismo, el transfeminismo del PT busca visibilizar s u
discurso usando las artes escénicas. Desde el 2004, en el PT se empiezan a desarrollar diversas
iniciativas artístico-activistas, muchas de las cuales se dan como experimentos discontinuos debido,
124Para una descripción de los procesos legales y educativos del colectivo Ver
http://proyectotransgenero.blogspot.com o referir a los artículos de Elizabeth Vasquez
http://www.telegrafo.com.ec/busqueda.aspx?http://www.telegrafo.com.ec/busqueda.aspx?
q=ELIZABETH+V%C3%81SQUEZ&PageIndex=2 t ambién sobre el colectivo ver Fierro, 2009 en l a
bibliografía de esta tesis.
fundamentalmente, al abandono o irregularidad de vari@s de l@s participantes o a las difcultades
En el 2004 se prepara y presenta el monólogo “no soy una puta cualquiera”, interpretado y co-
2006 varias personas del PT relacionadas con el colectivo de performance 'acción-arte' (Cayetan a
homosexuales y lesbianas' en Guayaquil. Este mismo año se empieza a preparar Transtango que
Durante una entrevista realizada en julio del 2009 Cayetana Salao nos comentó sobre el
n acimiento de Transtango:
Según Salao, su vinculación a las artes escénicas parte de su acercamiento al trabajo de Danie l
cotidiano para explicar lo homosexual (gay, lésbico, trans) más allá del prejuicio normativo que l a
sociedad propone.
Luego al conocer a Karla Pico (transfemenina esmeraldeña), a principios del 2006, empezaron a
bailar andaréle – baile tradicional afroecuatoriano en el que el hombre simula con movimientos
fuertes una relación sexual sobre la mujer que permanece tendida en el piso- pues les parecí a
interesante la propuesta de representar dicha danza con una mujer travestida de hombre y un a
transfemenina en el rol de mujer. Karla conocía -nos cuenta Cayetana Salao- ambos roles y pudo
enseñarle los pasos. Durante los repasos del andarelé Elizabeth Vasquez decide aplicar a l a
convocatoria a las olimpiadas gay de Montreal de julio del 2006 y debido a lo particular del acto
aceptada y recibió el apoyo de una beca. Entre los requisitos de participación era necesario que l a
p areja participara en tres bailes: tango, valtz vienés y un ritmo local del país de origen. Con
construcción de una coreografía en base a dos personajes: el “batracio del puerto” y la “putita de
cabaret”. Tres meses más tarde se presenta el sketch con dos piezas de baile por primera vez
durante una tertulia en 'La Manzana de Eva', café lésbico auspiciado por la fundación Causana.
Al fnal del evento el colectivo recibe varias invitaciones a presentarse en otros eventos y además
recibieron una paga que fue dada a Karla, quien seguidamente se desvinculó del colectivo
Tratando de continuar con el trabajo logrado Elizabeth y Cayetana empezaron a buscar parej a
p ara el tango y mientras tanto Cayetana empezó a entrenarse como Drag King y a trabajar en
Para fnales del 2007 Cosme/MaríaSusana Córdova se une a Transtango por sugerencia de
Elizabeth; Cayetana construye el guión de la propuesta con la que desde el 28 de julio del 2008,
activista cuando se vincula como asesora en el campo legal de asambleístas de Alianza País125,
tema de diversidades no solo por su columna del diario el Telégrafo, sino por su participación en l a
126Grupo de activistas de varios campos quienes logran notoriedad a cuestionar los 25 años de democraci a
en el Ecuador mostrando fotografías de todo este período donde los actores principales son los mismos
políticos de simpre. Ruptura de los 25 buscaba darse a conocer como un grupo emergente de políticos
jóvenes, simpatizantes al tiempo con la propuesta política de Alianza País. Hoy son un grupo de
oposición al gobierno de Correa.
redacción de la Constitución vigente desde el 2008, donde logra insertar el respeto a la identida d
de género, diferenciada de la orientación sexual, como principio transversal de la Carta Magn a 127.
Para junio del 2009, se dan dos procesos paralelos: Salsa-Trans que nunca supera la etapa de
aprendizaje de pasos y el colectivo teatral “Sin Objeto Plausible” que empezó (sin poder llegar a
Objeto Plausible' estuvo conformado por varias personas trans como Nicole, Pat y, Jorge,
Alejandra Gender, Toala, Coli, Shirley. Sin embargo el proceso se suspende por discontinuidad de
las participantes, pero sirve sufcientemente como para presentar pequeños sketches relacionados
con VIH en los meses subsiguientes. Algunos integrantes de SOP cooperan ya no como colectivo
sino a manera individual (Jorge y Alejandra) en los eventos coordinados por Salao en octubr e
como parte de la campaña internacional por la despatologización de lo Trans que tuvo lugar en
diversos espacios de la ciudad; y para diciembre del 2009 SOP tiene una notable participación en
que PT da a otros procesos. La falta de continuidad de todas las iniciativas artísticas del PT
resultan, para muchos, cuestionables en la medida en que ninguna intenta consolidar procesos.
Por otro lado esta discontinuidad del PT, que pareciera desplegarse como una diversidad de
imágenes dispersas más que un conjunto de procesos a mediano o largo plazo, sin por esto perder
su lógica, resulta más que válido cuando lo confrontamos con las ideas de Baudrillard (1989)
sobre la seducción que depende de la capacidad atrayente de la apariencia como principal arm a
disperso del PT se puede ilustrar como un bombardeo permanente a las fsuras de la estructur a
127Previamente, ella misma había ya logrado el reconocimiento del Estado de la diferencia entre sexo legal e
identidad de género en el caso paradigmático de la ciudadana Luis Enrique Salazar (Hoy Valeri a
Salazar, activista de Alfl) donde forzó un reconocimiento de esta diferencia mediante la negación de l a
demanda en los mismos términos en la que ella hábilmente planteó los formales de ley.
p atriarcal que no dan tiempo a ser sometidas al análisis y que progresivamente explotan l a
constante violencia de la que son víctimas) para acentuar su propia visibilidad como organizació n
y gestionar recursos para luego encausarlos a temas de denuncia de lugares altamente complejos e
reivindicación ni siquiera se consideraban desde la lucha por derechos trans previo al esfuerzo de l
r uta del trabajo del PT ha sabido explotar distintos espacios de visibilización de problemáticas
sobre la diversidad sexual hasta llegar a poner sobre la mesa temas menos discutidos y más
Lamentablemente, para mediados del 2010 Cayetana Salao se desvincula del PT dando fn a
Transtango y a todo proceso de producción escénica emprendido por el colectivo en estos últimos 6
años, aunque esperamos que con el apoyo que está gestionando con activistas del PT en
al mundo de las artes (La Tronka l 128) se retomen o inicien nuevos procesos.
Desbordes de Géner@
Para el verano del 2009, Desbordes tiene ya tres años de proceso como u n esfuerzo para amplia r
las fronteras de la academia, valiéndose de alianzas con las artes escénico-plásticas del teatro y el
128Grupo de trabajo interdisciplinario que reúne cineastas, artistas, investigadores, teóricos y críticos que
trabajan desde distintas áreas del arte y la cultura. La fnalidad del grupo es la refexión crítica y l a
intervención política en el Este colectivo busca incidir en el campo cultural local y translocal. Su
producción dialoga con las teorías poscoloniales, el pensamiento decolonial y la crític a
latinoamericanista desde el campo específco del acontecimiento simbólico. Su objetivo central es l a
intervención pública en los campos del saber, las artes, las prácticas culturales y la institucionalidad de
la cultura ecuatoriana. Ver http://latronkal.blogspot.com/2009/10/la-tronkal-grupo-de-trabajo.htm l
conocimiento. Empezando desde la iniciativa de María Amelia Viteri de invitar a sus estudiantes
a explorar las diversidades sexuales 'en carne propia', mediante experiencias de travestismo y drag,
personal y del cuerpo como proceso de traducción intima de aquello que discutíamos en su clas e -
con un claro corte queer-. Para el tercer año de la experiencia propuesta por Viteri en
coordinación con Daniel Moreno, se planteó la conformación del Colectivo Desbordes de Géner@,
ya no solo como un taller experimental paralelo a la clase sobre teoría queer que dictaba Marí a
Amelia, sino como colectivo abierto de intervención performática y discusión informada que nos
p aralelamente organizar transgresiones dentro de las instituciones académica y de arte que nos
permitieran problematizar discusiones sobre identidades más allá del aula o la galería y en l a
Para mi, Desbordes se convirtió en el espacio idóneo para cuestionar mi propia construcción como
hombre, heterosexual, de clase media, mestizo con una profunda formación religiosa en la infancia,
que había restringido mis cuestionamientos sobre sexualidad, cuerpo y deseos. La infuencia de
existencia un continuo devenir crítico que no solo dislocó la cómoda posición desde donde, hast a
entonces, veía el mundo, sino, que me permitió encarnar el activismo queer como práctica de
continua re-proposición de mi lugar dentro del sistema sexogenérico, lo que, sin lugar a dudas,
afectó no solo la forma de apropiar los conocimientos académicos propuestos desde mi proceso
formal de educación, sino que me obligó a evaluar permanentemente la situación y los limites
relacionales con los que tengo que convivir dentro de una sociedad cuya cita obligatoria de u n
'deber ser' legitimado por dicha norma media cada una de mis actividades.
benefciarios más allá de los espacios de legitimación, transgredir las fronteras de los campos,
desbordar las representaciones y generar en esa dislocación chocante, nuevos espacios discursivos
que nos permitan redefnir nuestras practicas tanto activistas como artísticas o investigativas.
Para no solo visibilizar, -pues para “ver” se necesita distancia incorpórea-, sino para sensibiliza r
( para lo que se vuelve indispensable la piel y el contacto) desde nuestros cuerpos lo que son
nuestro accionar produzca en otros, siempre que los produzca. Este posicionamiento político que
espero hacer evidente a lo largo de la presente tesis es, sin lugar a dudas, consecuencia de
Historia de Desbordes
A PARTIR DEL 2007 “Desborde de Género” surge como una iniciativa en la academi a
(FLACSO) que busca empezar a discutir el tema de las diversidades sexuales desde un enfoque
queer. Segú n María Amelia, los dos proyectos arte-acción “políticos, artísticos y visuales”
( 'Drag' y 'Desbordes') surgieron como un paralelo a dos clases que bajo la idea de ir “r e-
“ formas en las cuales una combinación estratégica entre los espacios físicos del aul a
de clase y la universidad (academia), el Dionisios: Arte-Cultura-Identidad (teatro
Drag), la calle, las salsotecas tradicionales quiteñas, l@s activistas LGBT y l@s
estudiantes de la Maestría de Género y Desarrollo de FLACSO/Ecuador [y otras
especialidades], emergen como mapas alternativos que habilitan negociaciones
alternativas alrededor del género y la sexualidad en Quit o. El teatro [y más allá de
él, el performance escénico] se convierte en otra herramienta para pensar el cuerpo, l a
ciudadanía, la pertenencia, los cruces desde otras miradas”(Viteri,2010:2).
Como lo describe Ma Amelia Viteri, la iniciativa surge de una discusión sobre la teorí a
analizar el género como un performance entendido más allá del mundo del 'Drag'” y de cómo, a l
ser la performatividad una posibilidad de dotación de nuevos signifcados, no debe ser reducida a
un performanc e (Ibid:4). Parafraseando a Alcazar, Viteri nos propone: “en este marco, el cuerpo
María Amelia Viteri (2010) continúa una discusión que ha venido sosteniendo por varios años
sobre las posibilidades de apropiación y movilidad del término queer en contextos distintos al de l a
clase media norteamericana, y en la página 7 de su texto arriba citado lo discute en los siguientes
Son varias voces al unísono y en constante tensión las que permiten desestabilizar así
sea momentáneamente -o en un proceso de camino y retroceso- lo que entendemos
como ‘nuestro cuerpo’. Es decir, al transitar de múltiples e inesperadas formas,
‘queer’ convoca una posibilidad risomática (Deleuze y Guattar i , 1987) y polivoca l
(Bakhti n , 1981) en donde sus usos y signifcados están sujetos a constantes cambios
conforme varía tanto el marco referencial como el lugar desde donde hablamos.
(Viteri, 2010,7)
Y es que como indicábamos en paginas anteriores, la identifcación queer, aunque incrementa s u
penetración día con día, es permanentemente disputada en su lucha por movilizarse desde l a
m arginalidad, aprovechando lo descrito por Viteri citando a Giroux: “las fronteras de nuestras
diversas identidades, subjetividades, experiencias y comunidades nos conectan más que nos
La denuncia que logra Desbordes desde el aglutinamiento de voces y representaciones desde loc i
iligítimos busca ampliar la discusión a temas de raza, clase y etnicidad pues éstas permean todo
aspecto de la vida cotidiana de la sociedad ecuatoriana cuando se trata de cuerpos como bien lo
explica Maria Amelia. Y la posibilidad de concebir nuestro trabajo como laboratorios lúdicos h a
permitido que busquemos proponer espacios de diálogo que problematizen la potencialidad de l
resignifcación de las identidades donde, citando a Lancaster, “el juego se convierte en la identida d
lo que el sentido es al cuerpo: nos sitúa y nos orienta, pero también va más allá y nos excede”.
Desde este enfoque surge el taller de juguetes convocado por Desbordes y La Chiripa que se
analizará en el capitulo 3.
explorar, desde los cuerpos, las posibilidades del performance artístico y además ha ubicado
nuestro trabajo bajo un posicionamiento sin adscripciones ni obligación de alinearnos con uno u
otro proceso político (trans-gay o transfeminista). Sin estar envueltos, aunque sí afectados por las
disputas lamentables que se dan en el activismo GLBTI dentro y fuera del Ecuador. Desborde es
entonces el fruto de la semilla que por varios años Daniel y María Amelia han logrado cultivar es
En el caso del Colectivo Desbordes de Géner@ su trabajo ha ido ganando más y más espacio desde
su visiblización como proyecto Drag (2007) a través de: la 'toma de la FLACSO' que tuvo como
escenarios algunas paradas del Servicio Integrado del Trolebús en Quito y los edifcios de l a
universidad con el fn “de habitar los varios espacios que ocupamos diariamente en la institució n
interactuando con las personas en el ascensor y en las varias ofcinas, desde esta otra estética leíd a
como otro género.”, explica María Amelia Viteri. Esta acción fue discutida en un Foro/Debate
dos meses después en FLACSO, donde principalmente se cuestionó la vigencia del término queer
Al año siguiente y sobre la base sentada durante el 2007, el Proyecto Desbordes (2008) busco i r
nombre que fue coordinado transnacionalmente por María Amelia Viteri y que tuvo lugar en
FLACSO/Ecuador.(Ibid:10)
El registro fotográfco (Francois Lasso) del trabajo realizado desde el 2007 empezó a circular en
plataformas virtuales sobre arte contemporáneo como 'Experimento Cultural' y para Junio de l
pensando el Binario” .
Para el 2009, ya constituido bajo la fgura de Colectivo Desbordes de Géner@129, se inaguró y cerro
performances de arte acción en tres escenarios continuos. Para julio, Desbordes desflo en el
Orgullo LGBTIQ, y en septiembre y octubre se realizaron dos pre lanzamientos del video
iniciativa del Octubre Trans- por la despatologización de lo trans130. Para diciembre Desbordes de
129Los datos referidos a continuación provienen de la pagina web ofcial del Colectivo:
http://www.desbordes.or g
CAUSANA.
En Febrero del 2010 “Desbordes” participó en la creación del video colectivo "Cadáver Exquisito
VIDEO" organizado como parte del programa Cuarto de Proyectos de Arte Actual / FLACSO en
Quito. 62 videos provenientes de más de cinco países conformaron este corpus de imágenes en
movimiento, que son el resultado de la colaboración de artistas de Ecuador, Francia, Italia,
Alemania, España y Chile. Desbordes además acompañó a Daniel Moreno en la celebración de los
doce años de Dionisios Arte/Cultura/Identidad con un sketch teatral que formó parte de los eventos
de aniversario del Teatro.
En marzo el Documental Cuerpos/Fronteras: La Ruta fue invitado por las Facultades de Estudios
de Mujeres, Ciencias Sociales, Anthropología y Estudios Afro-Americanos de CUNY (City
University of New York) a su exhibición, seguida de un foro con activistas Latinos LGBTQA
(Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans, Queers, Aliados) y activistas feministas tanto de Nueva York
como de Washington D.C., para posteriormente ser presentado en un encuentro en el Centro
Comunitario de Long Island en Nueva York y ser proyectado en dicho centro, seguido por un foro y
preguntas y respuestas con la comunidad. El evento contó con la participación de académic@s del
área de Nueva York como también de activistas LGBTQA fomentando puentes y discusión entre
activismo y academia, género, feminismo, estudios queer y LGBT.
Durante el mes de Abril se publicó 'Los años viejos y las viudas ¿negociaciones del orden sexual?'
de Gloria María Minango Narváez, miembro del Colectivo Desbordes de Géner@ y tuvo lugar el
Lanzamiento de la página web del Colectivo Desbordes de Gener@ dentro del marco del Día
Internacional de las Mujeres a cargo del Programa de Género de FLACSO/Ecuador. Durante este
evento se realizó un performance que incluyó una transformación en vivo de Daniel a Sarahí,
participación del colectivo encarnando a l@s meser@s y concluyó con la participación de Ma.
Amelia desde Washington D.C.
Paralelamente en la New School for Social Research Maria Amelia Viteri fue invitada a presentar la
experiencia del Colectivo en la Conferencia "Politically Queer: Social In(queer)y and the
University" y el documental 'Cuerpos /Fronteras: La Ruta' participó en las Jornadas Transfeministas
de Barcelona gracias a la colaboración de Leticia Rojas y Vicky Aguirre.
En abril, la revista Vistazo de Ecuador entrevistó a la directora del colectivo, María Amelia Viteri,
acerca del tema queer131. Y para mayo 'Cuerpos/Fronteras: La Ruta' se presentó en la Universidad de
Maryland gracias a la invitación del Programa de Estudios de Mujeres , mientras que en Ecuador el
colectivo Desbordes de Gener@ participó en la campaña de concientización contra la
homo/lesbo/bi/trans/interfobia organizado por Dionisios Arte/Cultura/Identidad y el colectivo
LotoBlanco. Los “desbordados” Samuel/Ch@gr@ y Juan/HuAng perfomaron en el escenario para
visbilizar las agresiones homofóbicas públicas y los diagnósticos patologizantes que aún se dan en
la ciencia médica y siquiátrica. La campaña se realizó en conmemoración al Día Mundial de la
Lucha Contra la Fobia de Género.
Durante los meses de abril y mayo del 2010 se coordinó y llevó a cabo el Taller de Juguetería y
Corpo-política para personas Trans y Queer convocado por Desbordes de Género y el Taller de
Juguetes “La Chiripa” de Carolina Ganchala. Este proceso se discutirá en el capítulo 3 de la
presente tesis.
Para Junio del 2010, Desbordes organizó una presentación multimendia “El Papi del Barrio” que
incluyó video, post-producción y performance en Dionisios como parte de la 'Fiesta Arcoiris'
enmarcada en las celebraciones del Orgullo GLBTIQA 2010 en Quito. “El Papi de Barrio” buscó
visibilizar la violencia de género inherente a los festivales de belleza femenina, como los concursos
de 'camisetas mojadas', emulando dicho evento, pero con hombres para cuestionar los
correspondientes roles binarios involucrados. Mientras tanto 'Cuerpos/Fronteras: La Ruta' fue
seleccionado para participar en el festival de cine CINEMAROSA en el Museo de Artes de Queens
(QMA) en NY.
Como parte del mes del Orgullo GLBTIQA Hu-Ang presentó nuevamente en Dionisios su trabajo
fotográfico y de postproducción que documenta en el Sur de Quito, desde el 2005 al 2007, la
tradición de las 'Viudas de Año Viejo'. El colectivo fue además invitado a Guayaquil a participar en
un evento el 16 de Junio en el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC). Su
presentación incluyo un sketch (“las doncellas no son como los pintan”, que cuestionó las
construcciones narrativas genéricas de películas clásicas y ochenteras americanas), la presentación
de la página web: [email protected] , y una revista musical de Sarahí que fueron muy
bien recibidas por el público.
131http://www.vistazo.com/ea/vidamoderna/?eImpresa=1024&id=3249
En Julio y sobre el escenario montado para el cierre del Desfile del Orgullo Diverso, se presentó
“Más de una vez al año no hace daño”, propuesta escénica que visibilizó la costumbre ecuatoriana
de travestismo masculino que tiene lugar a fin de año para promover la idea de la maleabilidad de
los cuerpos y la importancia de trascender las restricciones de roles de hombre/mujer.
Debido a los válidos esfuerzos por traer a la discusión pública el tema de las diversidades mediante
ejercicios escénicos de cuestionamiento a la norma heterosexual, el trabajo de Desbordes se ha
conectado rápida y estratégicamente dentro de las articulaciones de lo LGBTIQA. Sin embargo, han
surgido discusiones dentro del mismo colectivo en referencia a la crítica a los procesos patriarcales
o heteronormados dentro de las colectividades diversas. Las diferencias en estas opiniones han
resultado incluso en la desvinculación de miembros por considerar que Desbordes no debe criticar
procesos de activismos de los que no ha sido parte o con cuyas identidades no se identifican sus
miembros132. Surgiendo la pregunta crítica de “¿hasta dónde las acciones emprendidas por
Desbordes de Género han sugerido la transgenerización de la escena LGBTI local, y han logrado
problematizar no solo la lógica binaria que contrapone hetero vs homo sino la misma lógica que
fragmenta lo LGBTI y enfrenta lo lésbico con lo gay, a las trans femeninas con los gays, lo lésbico
vs lo trans masculino y lo lésbico vs lo trans femenino?. Limites a los que al parecer todavía no se
ampliar su acción a espacios menos “seguros”; es decir, que visibilicen discusiones más allá de los
Asociación ALFIL
Mi primer acercamiento al trabajo de ALFIL fue indirecto, a través de una copia de su video “No
Estamos Solas” que me facilitó Daniel Moreno durante una reunión de Desbordes en Dionisios.
Detallaré las discusiones y análisis de esta producción y sobre Ñuca Trans en el Capitulo 3.
132 Como criticar el concepto de “orgullo gay” en el caso puntual de la intervención en Guayaquil
Desde el Desfle del Orgullo Diverso el 4 de julio del 2009, Desbordes coincidió con colectivos que
t ambién planteaban diversas formas de producción cultural en la escena LGBTI, entre esos l a
Asociación ALFIL que participó en el desfle con Ñuca Trans, grupo de baile folclórico
conformado por mujeres trans. Posteriormente ALFIL organizó la elección de la Reina Trans
Para marzo del 2010 empezaron los preparativos del Taller de Juguetes convocado por Desbordes
y el Taller de Juguetes “La Chiripa”. Rashell Erazo de la Asociación Alfl funcionó como difusor a
del evento entre personas trans. Siendo éste el primer trabajo coordinado entre Alfl y Desbordes.
Historia de ALFÍL
Según Daniel Moreno, a fnes de los ochenta se forma SOGA, que luego de años de trabajo se
visibilidad luego del encarcelamiento de decenas de personas trans en Cuenca. Acontecimiento que
este momento histórico se articularían una serie de activismos, que de manera diferenciad a
empezarían a pugnar por diversos reconocimientos a nivel político; y por supuesto a busca r
f nanciamiento para sus diversas luchas. Fedaeps es criticado por la forma en que administra sus
fondos y por como sus bases terminan siendo usadas como “peones de ajedrez” para el benefcio de
unos pocos líderes. De este reclamo surge en 1999 la Asociación ALFIL, como un grupo de
133http://www.youtube.com/watch?v=vHfDG7Hn3OI&feature=relate d
134Lobanna Basar Mix, Studio de Fernando Peluquería, Jaime Peluqiería, Hotel Reina Isabel, Saj
Gourmet, Fenix Digital Desing, 2.8 Studio Fotográfco.
personas gays enfocadas en la lucha contra el VIH/SIDA. Este colectivo empieza a reunirse en
las instalaciones del Dionisios convocando a gays que criticaban el ser siempre peones (de ahí que
escogieran llamarse ALFIL por la connotación de ser piezas más activas en la consecución de sus
derechos).
abanico hacia otras diversidades y capta a algunos activistas que estaban saliendo de FEMIS135,
organización que procuraba mejorar las condiciones sociales, legales y de salud de personas
transexuales y transgénero, entre ellas Rashell Erazo, en ese tiempo todavía en proceso de salir de l
Elizabeth y Rashell aprovechan entonces este momento de conficto dentro de Alfl para enfocar el
trabajo del colectivo hacia el tema trans-, mas sus diferencias de opinión sobre lo que incluía y no
trans antes de FEMIS y buscó acceso al apoyo de organizaciones internacionales como Hivos,
que funciona con fondos extranjeros para programas de prevención y asistencia sobre VIH y con
El principal accionar de ALFIL dentro de la producción cultural es Ñuca Trans, grupo de danz a
reconocimiento dentro de los activismos LGBTI. La trayectoria de Ñ UCA TRANS incluye más
Misión del PN UD; trabajo en Hospitales y barrios. El grupo Ñuca Trans se formó en el 2008 y
p ara fnes del 2009 amenizó138 la elección de la reina trans organizado por Alfl. En el 2010 h a
trans/lesbo/homo fobia. También éste es su segundo año participando en el Desfle del Orgullo
De l o s l ím i t e s de l t r aba jo ac t i v i s t a.
A pesar de que estos tres colectivos (PT, DESBORDES y ALFIL) se proponen como incluyentes,
sus esfuerzos hallan, por cierto, límites. Las áreas de interés de su trabajo y los públicos a los que
139Dionisios Arte/Cultura/Identidad es uno de los espacios más larga trayectoria en la producción cultura l
LGBT, siendo el único teatro drag de Quito funcionando desde 1998 -año de la despenalización de l a
homosexualidad en el país- y que ha mantenido su café teatro como un espacio que acoje a colectivos
gays, travestis, trans y queers como punto de encuentro de sus activistas. Daniel Moreno, su propietrio,
ha visto nacer y morir a la mayoría de grupos, fundaciones y colectivos de activismo sexualmente diverso.
de los diversos en el caso PT, más cercano a las agendas del activismo lésbico; como a la crític a
queer hecha por Desbordes, que surge del interés académico en el tema de diversidades sexuales y
todavía acciona principalmente desde ese exclusivo espacio. Nos parece que estos lugares
diferenciados hacen evidente cómo las líderezas de cada colectivo ejercen infuencia en el
entendimiento que cada grupo tiene de su lugar dentro del activismo de diversidades sexuales y de
A pesar de todos estos esfuerzos por visibilizar el tema trans-, su efecto sobre el cotidiano no
resulta sufciente pues, tomando en cuenta que las personas trans son mayormente
áreas de cocina, peluquería y trabajo sexual, cuyos horarios tienden a depender de la afuencia de
clientes más que de un horario fjo, su disponibilidad de tiempo para dedicarlo a actividades
artísticas y políticas se ve reducido a fnes de semana y noches (tampoco hasta muy tarde). Los
pocos transmasculinos e intersexuales resultan más invisibles aún si sus posiciones polít icas
restringen su participación en eventos o procesos que no se dan desde los espacios autorizados por
forma de lograr benefcios inmediatos para personas cuyo día a día gira bajo la preocupació n
permanente de generar recursos económicos o benefcios tangibles conectados con asuntos de salu d
y derechos.
Como esperamos se haya hecho evidente en el presente capítulo, la producción visual y escénica de
los colectivos que discuten la temática trans ha sido bastante fructífera. Sin embargo, queremos
recalcar que dicha producción ha estado también limitada a ciertos espacios de consumo, sus
benefcios han sido mucho más evidentes en la legitimación de sus líderezas dentro de círculos
validantes y las posiciones polít icas encontradas también han constituido límites dentro de s u
De todas maneras, el esfuerzo constante, mult ilateral y diverso en sus procesos ha atraído
sugerido por Kester alrededor de las estéticas relacionales. De igual forma su dispersión y
funcionamiento fragmentado resuenan en los espacios artísticos como un bombardeo que dej a
atrás la discusión de la forma o el prestigio de la sala para lanzarse mal o bien a transgredir
cuando se reconocen nombres de la jerga que antecedieron a aquellos legitimados por la bibliotec a
en un esfuerzo que pareciera refejar la situación molecular o rizomática descrita por Deleuz e
En el siguiente capítulo buscaremos explorar dos producciones de cada uno de los colectivos arrib a
descritos, con el fn de brindar al lector una perspectiva crítica sobre el tipo de producción hast a
ahora generada, sugerir elementos que permitan analizar con una mirada crítica y discutir el
CONCLUSIONES
representaciones escénicas desde los activismos trans/queer revisados, bajo la mirada de distintas
discusiones del arte y la academia, permiten descif rar las motivaciones, dinámicas y
posicionamiento de enunciación de los distintos colectivos que discuten los temas trans y queer en
Quit o.
activista que acude a lenguajes prestados de otros campos para legitimar sus construcciones
discursivas y representacionales, sino que además, he buscado cuestionar hasta dónde las
prácticas de dinámicas que se suponen son criticadas por estas organizaciones, se reiteran en sus
que proponen representar tanto posiciones políticas como cuestionar las dinámicas de exclusió n
La potencialidad tanto transgresora como condescendiente del empleo del arte como herramient a
distintos tipos de prácticas a la luz de sus consideraciones con respecto tanto a sus públicos como a
En esa medida, el performance escénico-genérico propuesto por estos colectivos evidencia sus
intereses a nivel de acceso a públicos, benefcios y de proposición formal de las temáticas que
capítulos anteriores me permite concluir que, al menos hasta el 2010 en el contexto de las
producciones artístico-políticas propuestas desde los activismos trans y queer descritas en este
estudio:
Pese a que, como me sugirió María Amelia Viteri, lo dicho por Andrade podría pensars e
invalidado porque “mucha agua ha corrido bajo el río” desde el 2002; cuando pienso en l@s
m ayores benefciari@s de los activismos aquí revisados, llego igualmente a concluir que las
sino inmersas al menos bastante contaminadas de dinámicas de tráfco entre los tres campos
He descrito, además, algunas de las razones por las que, en este momento histórico, las posiciones
movimiento unifcado y monolítico, sin que esto necesariamente implique que los diversos
p rincipios ideológicos, ni resultan en el benefcio del proceso de la lucha por derechos. Y en algunos
la verdadera envergadura de estos procesos políticos. Pues mientras no se abran más espacios de
diálogo entre las distintas posiciones, no se podrán articular procesos sostenidos, renegocia r
cómo, pese a las diferencias, existen espacios comunes por los que cada colectivo, a su turno -y
propuesta queer esto resulta especialmente relevante pues, sin caer en condescendencia, es posible
generar tanto dinámicas como espacios de dialogo inclusivo, no solo desde sino también dentro de
Otra generalidad a resaltarse es que todas las propuestas han alcanzado las metas para las que
han planteado sus distintos ejercicios y logrado atención sufciente (política o mediática) como par a
legitimar sus posturas teóricas dentro de los campos académico, artístico y polít ico. Mas no
podemos pasar por alto que en todos los casos es cuestionable el tratamiento formal del trabajo
Aunque todos los colectivos analizados se proponen discursivamente como abiertos, incluyentes y
críticos de los sistemas vigentes, una mirada más cercana a la forma en que construyen sus
Lo dicho en el párrafo anterior es aplicable a cada uno de los colectivos analizados, de form a
diferenciada, por lo que cabe cerrar el presente trabajo con una mirada crítica que visite cad a
PT
El uso instrumental del arte como herramienta comunicacional resulta efciente para atraer l a
medios, solamente para seguirles dando tela que cortar, como explica Ximena Echeverría, so pen a
del desgaste de la imagen pública de quienes son metidos a saco bajo representaciones colectivas
como “los homosexuales” o la “comunidad LGBTI” -todo esto ha resultado efectivamente par a
catapultar carreras activistas o trips autocongratulatorios de los que nos habla Xavier Andrade-,
lo que refeja la posibilidad perversa del tráfco entre arte, academia y política.
El mayor riesgo de esta forma de hacer política, traducida en proposición artística, es que sus
tráfcos solo sean prestamos perversos de términos e imágenes que luego sirven para llena r
renglones de panfetos escritos “en nombre de” pero que rara vez generan interacción incluyente en
El trabajo admirable de Vasquez, Almeida, Valverde, Santana y Salao, más allá de su afliación o
abriendo procesos más duraderos y diálogos plurívocos que vayan más allá de lo que requieren las
fotografías, hacia brindar voz a quienes dicen activar mediante sus procesos políticos.
Su acertado deslizamiento hacia atender el tema transmasculino resulta coherente con su
transfeminismo lésbico y también más cercano a la experiencia personal de sus líderes, por lo que
las discusiones planteadas a futuro desde este espacio resultan por demás interesantes.
DESBORDES
Por otro lado, la curiosidad académica propone discusiones que, de socializarse más allá de los
círculos de legitimación, podrían llegar a interpelar interesantes espacios de debate. Siempre que no
esconda su posición crítica en pro de lo políticamente correcto e inofensivo, y empiecen a tomar más
normadas.
institucional y en su miedo al vacío, aunque sus refexiones se proyectan sobre espacios cada vez
LGBTI(Q?) tanto para tenderse como puentes fexibles de un diálogo más fuido entre los distintos
espacios que ha sabido generarse dentro de la academia, el arte y el activismo, como para refresca r
de forma lúdica los diálogos hacia fuera de los campos, es decir hacia la población en general.
El permanente trabajo de dif usión de lo que signifca el colectivo requiere ser acompañado de
estrategias de largo aliento que busquen aterrizar discusiones en el imaginario social explorando
nuevos espacios gracias a su capacidad dinámica. Como dirían en Star Trek, to baldly go where
Ñ UCA TRANS
ejercicios performáticos propuestos por colectivos que construyen sus procesos desde identifcaciones
identitarias activadas por dinámicas democráticas resultan poderosas pero tristemente marginales
y pobremente socializadas además de acusar de falta de proceso crítico para su elaboración formal.
Sin embargo, el trabajo de Rashell y sus compañeras merece ser atendido proactivamente par a
aprovechar y aprender de los espacio de voz que se han articulado a lo largo del trabajo de este
colectivo. Y generar a Alfíl espacios para incluir cada vez más voces a su proceso polít ico y
un diálogo en el encuentro.
Re f ex i ón poé t i c a
artísticas concurren, como es la producción cultural desde activismos que discuten temas de género,
revela juegos de poder sobre la representación que proponen “dinámicas de encuentro” que
dirigentes que manipulan las representaciones de forma panfetaria para lograr accesos a “circulos
“embanderan luchas”. No te queda sino preguntarte sobre los usos perversos de estos términos
requiere de nuestra atención crítica. Los discursos sobre derechos pueden generar un a
acomodativas frente a casi cualquier público reciclable o para su venta en los medios, proponen u n
mundo cuya sensualidad queda totalmente revelada y en esa pulsión, asesinada frente a un a
sexualidad que dejo de ser secreta para convertirse en vox populi, desprovista ya de cualquier
procesos restrictivos hacia su libertinaje sin valor simbólico, hacia su espectacularización lúdica,
su hiperrealización pornográfca. Cuando quienes dicen inventar o ayudar a descubrir lo que eres
solo por ponerte un nuevo nombre con el que tomarte fotos cual previamente anónimo freak show,
entonces estamos irreversiblemente condenados a que sean estos fantasmas quienes prescriban las
nuevas rutas del deseo cuyo juego intersticial de apariencias ha muerto. Ese es, en últimas, lo que
cubreorejas tapando el rayban de sus gafas y cree que se pierde en la mult itud solo por que sonrí e
al que pasa.
Te pones unos tacones largos y te caes más de lo que avanzas, te aplauden siempre que no te metas
con sus trapos sucios y te sientes conciliador paraguas mientras afuera quienes se las sudan en u n
nombre que has olvidado tienen cosas más violentas de las que preocuparse que el color de l a
Aprendes a mover la boca pero solo te sirve para reírte, y ni siquiera del espejo. Pues todos tus
libros sobre la coronilla te han atrofado el andar, pero al menos tienes un nuevo nombre.
Con suerte alguien se acerca a tocarte los senos de papel higiénico y por un segundo juegas a l a
regla del espejo que increpa. En ese instante no se trata de subvertir o transgredir, se trata de
revertir sobre el eje que desdibuja la linea entre el vencedor y el vencido, cuando ambos logran lo
que pretendían no buscar. Solo allí sabes que la vaina es hasta la muerte si no sucumbes al miedo
y Desbordas para dejarte llevar por el perfume de la pantera que tu mismo emanas... que bonito
ha de ser ese momento cuando lleguemos a ver que hacer lo que merece ser dicho es la única form a
Que raro es pensar que al principio creí que tu arte de cubrir cicatrices era realmente el encanto de
la rebeldía, sin pensar en el precio cotidiano del cuchillo bajo la almohada. Mientras tanto, los que
te nombran solo transan entre ellos sin ver que eres tú quien ha descif rado el juego y entiendes que
Lo que tu cuerpo revela es que ya nada se esconde que la reiteración constante ha hundido el
barco y por eso tu juego es solitario, por que ya los que te hicieron otra se olvidaron de representa r
la indiferencia del espejo que promete ser lo que deseas. Solo para que no olvides que lo sinsentido
es lo que se queda en el rojo de la cola del zorro y lo desvía de la razón innecesaria que nos
condena.
BIBLIOGRAFÍA:
Women´s Studies Quarterly (WSQ) (2008) volume 36 numbers 3 & 4 Fall/Winter, New York ,
University of New York.