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PSICOLOGÍA
CLÍNICA.
Niños y
Adolescentes
Victoria Alonso Martín
Psicóloga Especialista en Psicología Clínica.
Doctora en Psicología.
FEA Psicología clínica hospital de día infanto juvenil de Vallecas.
Master en terapias contextuales.
ES PROPIEDAD DE:
©
CENTRO DOCUMENTACIÓN
DE ESTUDIOS Y OPOSICIONES
PRESENTACIÓN
La tendencia actual del examen PIR exige una preparación en profundidad de la materia de Psicología
Clínica Infantil que es una de las áreas nucleares de la prueba.
La séptima edición de los Manuales Cede ha actualizado exhaustivamente los contenidos, incorporando
las novedades de modelos explicativos y actualizando los datos epidemiológicos en función de las últi-
mas publicaciones de referencia para el examen (por ejemplo, el Manual de Psicopatología de Belloch,
2020). En este sentido, se han añadido nuevos contenidos acerca de los acercamientos dimensionales
y transdiagnósticos a los problemas de salud mental.
Asimismo, se presta especial atención a la definición de los trastornos desde las distintas clasificaciones
diagnósticas, permitiendo revisar de forma clara y concisa las semejanzas y diferencias entre las clasifi-
caciones de referencia para el examen (DSM y CIE). Como novedad, se han eliminado del manual los
criterios diagnósticos DSM-IV-TR ya que el actual examen PIR se centra exclusivamente en los criterios
de la última edición de la clasificación de la APA, DSM-5 (2013). También se incluyen los criterios de la
CIE-11, que fue presentada a la Asamblea Mundial de la Salud en 2019 y tiene prevista su entrada en
vigor en 2022.
La distribución de los temas sigue la agrupación de los trastornos mentales que se realiza actualmente
en los sistemas oficiales de clasificación y diagnóstico. Para el desarrollo de los temas se ha mantenido
una misma estructura: Introducción, Clasificaciones diagnósticas (incluyendo criterios DSM-5 y CIE-11),
Epidemiología, Diagnóstico Diferencial, Curso y Comorbilidad, Teorías explicativas y evaluación. Como
elementos adicionales al desarrollo de los contenidos, se incluyen en cada uno de los temas orientacio-
nes para su estudio; los aspectos esenciales del tema; las novedades más relevantes de la última edi-
ción del manual y las preguntas más representativas.
Dentro del texto que desarrolla el tema, se han ido incorporando las preguntas PIR de las últimas con-
vocatorias, incluyendo la convocatoria 2021. Se han limitado estas referencias a las últimas convocato-
rias (desde el año 2000) con el objetivo de que supongan una guía de la tendencia actual de preguntas
del examen.
Finalmente, como anexo se incluyen con las preguntas PIR de todas las convocatorias anteriores clasi-
ficadas por temas y año de convocatoria.
ASPECTOS RELEVANTES
De forma general, si bien el tipo de preguntas depende de los temas concretos, hay dos aspectos clave:
a) Criterios diagnósticos DSM (puntualmente también se pregunta por los criterios CIE).
b) Modelos teóricos.
En cuanto la importancia de las materias, han recibido mayor atención los temas relacionados con los
Trastornos de ansiedad, Trastornos del comportamiento perturbador y TDAH.
BIBLIOGRAFÍA
Los manuales básicos de consulta para prácticamente todos los trastornos de materia de clínica son:
PREGUNTAS PIR
DE CONVOCATORIAS
ANTERIORES
8 03. PSICOLOGÍA CLÍNICA. Niños y Adolescentes
Página 350 03 02 10
ADICCIONES EN LA POBLACIÓN
INFANTO-JUVENIL
1. Introducción
2. Trastornos por consumo de sustancias
2.1. Clasificaciones diagnósticas
2.1.1. DSM 5
2.1.2. CIE 11
2.2. Epidemiología, curso y comorbilidad
2.2.1. Epidemiología
2.2.2. Curso
2.3. Evaluación
3. Adicciones comportamentales en población infanto-juvenil
3.1. Introducción
3.2. Definiciones y descripción
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PIR 12, RC 3.
PIR 14, RC 1.
PIR 18, RC 4.
1. Introducción histórica
Pero la historia del TDAH es anterior a la del DSM. Así, se
2. Trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH)
ha hablado de síndrome de hiperactividad, síndrome hiper-
2.1. Clasificaciones diagnósticas
cinético, daño cerebral mínimo (concepto utilizado por
2.1.1. DSM-5
autores que enfatizaban la etiología biológica-neurológica),
2.1.2. CIE-11
disfunción cerebral mínima (DCM, propuesto por Bax y
2.2. Diagnóstico diferencial
McKeith en 1963, al no encontrar ese supuesto daño) y
2.3. Epidemiología, curso y comorbilidad
síndrome de inmadurez. En resumen, desde los defectos
2.3.1. Epidemiología
de control moral de Still (1902), pasando por síndrome de
2.3.2. Curso
lesión cerebral exógena, disfunción cerebral mínima, sín-
2.3.3. Comorbilidad
drome hipercinético el TDAH ha ido siendo comprendido
2.4. Otras características clínicas
de diferentes maneras, hasta el actual trastorno del que
2.4.1. Manifestaciones principales
hablan la CIE-11 y DSM-5.
2.4.2. Manifestaciones secundarias
2.4.3. Características por subtipos
Concretamente, se atribuyen a Heinrich Hoffman y a D. J.
2.4.4. Características transdiagnósticas
Bourneville las primeras referencias a la hiperactividad
3. Otro TDAH especificado
infantil, en el siglo XIX.
4. TDAH no especificado
5. Teorías explicativas
A continuación, resumen de la historia del TDAH:
5.1. Hipótesis biológicas
5.1.1. Funcionamiento biológico
Historia del TDAH (adaptado de Vallejo, 2016)
5.1.2. Complicaciones en embarazo y parto
5.1.3. Genética HASTA MITAD DEL SIGLO XX
5.1.4. Factores epigenéticos − Still (1902) describe el comportamiento de 20 niños con
5.1.5. Plomo ambiental actividad e impulsividad excesivas, relacionándolo con
5.1.6. Otros factores déficit en el desarrollo moral que impedía la inhibición de
5.2. Hipótesis psicológicas los impulsos.
5.2.1. Factores psicosociales − Descripciones de niños con síntomas de TDAH relacio-
5.2.2. Modelos de déficit único nadas con trastornos orgánicos. Etiquetas de daño cere-
5.2.3. Modelos de déficit múltiple bral mínimo.
5.2.4. Aproximación analítico funcional DE 1950 A 1970
5.2.5. Modelo de cognición social
− Abandono del término daño cerebral mínimo y sustitu-
5.2.6. Modelo de funciones ejecutivas y
ción por síndrome de niño hiperactivo (no se encontró
regulación emocional lesión orgánica que lo explicara).
6. Evaluación − Inclusión en la CIE-8 como Síndrome hipercinético de la
6.1. Entrevista infancia y en el DSM-II como Reacción hiperquinética de la
6.2. Escalas infancia.
6.3. Observación directa
DÉCADA DE 1970
6.4. Medidas aplicables directamente al niño
− Los influyentes estudios de V. Douglas cambian el foco
6.5. Evidencia en la evaluación del TDAH
de la hiperactividad al déficit de atención.
− Expansión del uso de psicoestimulantes. Polémica
sobre su abuso y acusaciones del TDAH como un “mito”.
1. INTRODUCCIÓN HISTÓRICA − Tª sobre los aditivos alimenticios (Feingold) sin base
empírica.
El TDAH tiene una relativamente breve pero compleja histo- − DSM-III: Trastorno por déficit de atención.
ria. Prueba de ello es su cambiante denominación en las − Primeras aplicaciones de la modificación de conducta
clasificaciones diagnósticas. Así, el DSM-I no aludía al como tratamiento alternativo para el TDAH.
TDAH, DSM-II (1968) lo definía como reacción hiperquinéti- − Visión del TDAH como retraso en el desarrollo del habla
ca de la infancia (énfasis en la hiperactividad), el DSM-III interna y propuesta del entrenamiento autoinstruccional
(1980) habla de trastorno por déficit de atención (TDA) como tratamiento (Meichenbaum).
TDAH
DSM-5 (APA, 2013)
A. Patrón persistente de inatención y/o hiperactividad-impulsividad que interfiere con el funcionamiento o desarrollo, que
se caracteriza por (1) y/o (2):
1. Inatención: Seis (o más) de los siguientes síntomas se han mantenido por lo menos durante 6 meses en un grado
que no concuerda con el nivel de desarrollo y que afecta directamente a las actividades sociales y académicas/
laborales:
Nota: Los síntomas no son meramente una manifestación de una conducta oposicionista, desafiante, hostil o dificultad
para comprender las tareas o instrucciones. Para los adolescentes mayores y adultos (a partir de los 17 años de edad),
se requiere un mínimo de cinco síntomas.
(a) Con frecuencia falla en prestar la debida atención a detalles o por descuido se cometen errores en las tareas escola-
res, en el trabajo o durante otras actividades (p. ej. se pasan por alto o se pierden detalles, el trabajo no se lleva a cabo
con precisión).
(b) Con frecuencia tiene dificultades para mantener la atención en tareas o actividades recreativas (p. ej. tiene dificultad
para mantener la atención en clases, conversaciones o la lectura prolongada).
(c) Con frecuencia parece no escuchar cuando se le habla directamente (p. ej. parece tener la mente en otras cosas,
incluso en ausencia de cualquier distracción aparente).
(d) Con frecuencia no sigue las instrucciones y no termina las tareas escolares, los quehaceres o los deberes laborales
(p. ej. inicia tareas, pero se distrae rápidamente y se evade con facilidad).
(e) Con frecuencia tiene dificultad para organizar tareas y actividades (p. ej. dificultades para gestionar tareas secuen-
ciales, dificultad para poner los materiales y pertenencias en orden, descuidos y desorganización en el trabajo, mala
gestión del tiempo, no cumple los plazos).
TDAH
DSM-5 (APA, 2013)
(f) Con frecuencia evita, le disgusta o se muestra poco entusiasta en iniciar tareas que requieren un esfuerzo mental
sostenido (p. ej. tareas escolares o quehaceres domésticos; en adolescentes mayores y adultos, preparación de infor-
mes, completar formularios, revisar artículos largos).
(g) Con frecuencia pierde cosas necesarias para tareas o actividades (p. ej. materiales escolares, lápices, libros, instru-
mentos, billetero, llaves, gafas, móvil).
(h) Con frecuencia se distrae con facilidad por estímulos externos (para adolescentes mayores y adultos, puede incluir
pensamientos no relacionados).
(i) Con frecuencia olvida las actividades cotidianas (p. ej. hacer las tareas, en adolescentes mayores y adultos, devolver
las llamadas, pagar facturas, acudir a las citas).
2. Hiperactividad e Impulsividad: Seis (o más) de los siguientes síntomas se han mantenido durante, al menos, 6 me-
ses en grado que no concuerda con el nivel de desarrollo y que afecta directamente a las actividades sociales y aca-
démicas/laborales:
Nota: Los síntomas no son solo una manifestación del comportamiento de oposición, desafío, hostilidad o fracaso para
comprender tareas o instrucciones. Para adolescentes mayores y adultos (a partir de 17 años de edad), se requiere un
mínimo de cinco síntomas.
(a) Con frecuencia juguetea con o golpea las manos o pies o se retuerce en el asiento.
(b) Con frecuencia se levanta en situaciones en que se espera que permanezca sentado (p. ej. se levanta en clase, en
la oficina u otro lugar de trabajo, o en otras situaciones que requieren mantenerse en su lugar).
(c) Con frecuencia corretea o trepa en situaciones en las que no resulta apropiado (Nota: en adolescentes o adultos
puede limitarse a estar inquieto).
(d) Con frecuencia es incapaz de jugar o de ocuparse tranquilamente en actividades recreativas.
(e) Con frecuencia está “ocupado” actuando como si “lo impulsara un motor” (p. ej. es incapaz de estar o se siente in-
cómodo estando quieto durante un tiempo prolongado, como en restaurantes, reuniones; los otros pueden pensar que
está intranquilo o que le resulta difícil seguirlos).
(f) Con frecuencia habla excesivamente.
(g) Con frecuencia responde inesperadamente o antes de que se haya concluido una pregunta (p. ej. termina las frases
de otros, no respeta el turno de conversación).
(h) Con frecuencia le es difícil esperar su turno (p. ej. mientras espera una cola).
(i) Con frecuencia interrumpe o se inmiscuye con otros (p. ej. se mete en las conversaciones, juegos o actividades, pue-
de empezar a utilizar las cosas de otra persona sin esperar o recibir permiso; en adolescentes y adultos, puede inmis-
cuirse o adelantarse a lo que hacen otros).
B. Algunos síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivos estaban presentes antes de los 12 años.
C. Varios síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivos están presentes en 2 o más contextos (p. ej. casa, escuela,
trabajo).
D. Existen pruebas claras de que los síntomas interfieren con el funcionamiento social, académico o laboral, o reducen la
calidad de los mismos.
E. Los síntomas no ocurren exclusivamente en el transcurso de una esquizofrenia u otro trastorno psicótico, y no se expli-
can mejor por la presencia de otro trastorno mental.
Especificar si:
Presentación combinada: Si cumple los criterios A1 (inatención) y A2 (hiperactividad-impulsividad) durante los últimos 6
meses.
Presentación predominante con falta de atención: Si cumple el criterio A1, pero no el criterio A2 durante los últimos 6
meses.
Presentación predominante hiperactivo/impulsivo: Si cumple el criterio A2, pero no el criterio A1 durante los últimos 6
meses.
Especificar si:
En remisión parcial: Cuando ha cumplido previamente todos los criterios, y actualmente no cumple todos los criterios
en los últimos 6 meses, y los síntomas todavía siguen deteriorando el funcionamiento social, académico o laboral.
TDAH
DSM-5 (APA, 2013)
Especificar la gravedad actual:
Leve: Pocos o ningún síntoma están presentes más que los necesarios para el diagnóstico y los síntomas solo produ-
cen deterioro mínimo del funcionamiento social o laboral.
Moderado: Síntomas o deterioro entre “leve” y “grave”.
Grave: Presencia de muchos síntomas a parte de los necesarios para el diagnóstico o de varios síntomas particular-
mente graves, o los síntomas producen deterioro notable del funcionamiento social o laboral.
(PIR 00, 160; PIR 01, 51; PIR 04, 255; PIR 07, 117; PIR 09, 99; PIR 10, 28; PIR 11, 168)
Trastorno por hiperactividad y déficit de la atención − Trastorno explosivo intermitente: En ambos trastornos
(CIE-11, 2019) hay conducta impulsiva. Sin embargo, en el trastorno ex-
El patrón de comportamiento debe ser claramente obser- plosivo intermitente además hay hostilidad hacia los otros
vable en más de un escenario. que no es típica del TDAH y no presentan dificultades
El equilibrio relativo y las manifestaciones específicas de la atencionales. Se puede hacer ambos diagnósticos si se
falta de atención y la hiperactividad o impulsividad varían cumplen criterios.
entre los individuos y pueden cambiar en el curso del desa-
rrollo. − Trastorno específico del aprendizaje: Los niños con
Interfiere significativamente con el funcionamiento acadé- este trastorno pueden parecer inatentos por su frustración,
mico, laboral o social. falta de interés o capacidad limitada. Ahora bien, cuando
no hay TDAH no hay deterioro fuera del ámbito académico.
En resumen, ambas clasificaciones son muy similares:
− Discapacidad intelectual: los síntomas del TDAH son
frecuentes en niños que están en situaciones académicas
DSM-5 CIE-11
(APA, 2013) (OMS, 2019) no adaptadas a su capacidad intelectual. En estos casos,
Nombre del Trastornos del Trastornos del los síntomas no se muestran durante tareas no académi-
capítulo neurodesarrollo. neurodesarrollo. cas. Se puede realizar diagnóstico de TDAH en caso de
Indicadores Inatención, hiperactivi- Inatención, hiperactivi- discapacidad intelectual si la inatención y/o hiperactividad
principales dad e impulsividad. dad e impulsividad. son excesivas para la edad mental.
Criterio 6 meses. 6 meses.
temporal − Trastorno del espectro autista (TEA): Tanto los niños
Escenarios 2 o más. 2 o más. con un TEA como con TDAH muestran inatención, disfun-
Inicio del Antes de los 12 años Periodo temprano del ción social y difícil manejo. Los niños con TDAH suelen ser
trastorno debe haber síntomas desarrollo rechazados por sus compañeros, mientras que los niños
Presentación Presentación con TEA muestran desvinculación social, aislamiento e
combinada. combinada.
indiferencia. Los niños con TEA muestran rabietas por no
Presentación predomi- Predominantemente
nante con falta de con falta de atención. tolerar cambios en el ambiente o acontecimientos, mien-
Subtipos
atención. Predominantemente tras que los niños con TDAH las tienen por su impulsividad
Presentación predomi- con hiperactividad e y bajo autocontrol.
nante hiperactivo/ impulsividad.
impulsivo.
− Otros trastornos del neurodesarrollo.
− Trastornos depresivos.
2.2. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
frustración, pero la impulsividad y la atención desorganiza- − Síntomas de TDAH inducidos por medicación.
da no son manifestaciones nucleares. Muchos de los niños
y adolescentes con este trastorno tienen síntomas que − Trastornos neurocognitivos.
también cumplen los criterios del TDAH, que se diagnosti-
ca por separado. Por último, también hay que señalar que hay que distin-
guir el TDAH de los comportamientos normales de un
− Trastornos por consumo de sustancias. niño, como corretear, moverse, jugar, etc. y de la inquie-
tud que puede mostrar en un ambiente poco estimulante.
− Trastornos psicóticos.
A continuación se presenta una tabla que facilita el diag-
− Trastornos de la personalidad. nóstico diferencial del TDAH con otros trastornos:
Trastorno explosivo intermitente No hay hostilidad intensa. Hay proble- Impulsividad, hostilidad, agresividad.
mas de atención. No problemas de atención.
Trastorno de conducta Puede haber impulsividad, pero no violan Impulsividad, falta de respeto por dere-
derechos o normas sociales. chos básicos y normas.
Estereotipias y tics Pueden juguetear con inquietud, pero no Hay estereotipias y tics motores.
son movimientos repetitivos ni estereoti-
pados.
Trastorno específico del La inatención se da en diferentes contex- Inatención secundaria a las dificultades
aprendizaje tos, no solo en los de aprendizaje. para realizar las tareas, frustración y de-
sinterés.
Discapacidad intelectual La inatención e hiperactividad deben ser Puede parecer inatención, impulsividad e
excesivas para la edad mental, en caso hiperactividad en contextos que no se
de ser comórbidos. adecuan a su capacidad.
TEA Las dificultades sociales son por el re- Desvinculación social, déficits en la comu-
chazo de los compañeros por sus sínto- nicación social, rabietas por intolerancia a
mas disruptivos. cambios.
Trastorno de relación social Puede aparecer desinhibición social La desinhibición social no es por impulsi-
desinhibida asociada a la impulsividad. vidad, sino por antecedentes de cuidados
insuficientes.
Trastornos de ansiedad Inatención por distractores, novedades, Inquietud e inatención por temor, preocu-
inquietud. pación y rumiación.
Trastornos depresivos Falta de concentración en diferentes Falta de concentración durante los episo-
contextos y persistente. dios afectivos.
Trastorno bipolar Hiperactividad, impulsividad, baja con- De forma transitoria elevada actividad,
centración, labilidad emocional. impulsividad, en el marco de ánimo ex-
pansivo, elevado e irritable.
Trastorno de desregulación Problemas atencionales, desorganiza- Irritabilidad generalizada, intolerancia a la
disruptiva ción e impulsividad. frustración, pero no es nuclear el proble-
ma de atención. Pueden cumplir criterios
para TDAH.
Trastornos de la personalidad Conducta desorganizada, intrusiva en la Conductas desorganizadas, intrusión so-
vida de otros. cial, y los demás síntomas característicos.
Diagnóstico diferencial de TDAH (basado en DSM-5 [APA, 2013], adaptado de Belloch, Sandín y Ramos [2020]).
De acuerdo con el DSM-5 la tasa de prevalencia del TDAH La actividad motora excesiva es observada por los padres
es del 5% en los niños y del 2,5% en adultos. Representa muchas veces en la primera infancia, pero los síntomas
entre el 20 y el 50% de las consultas de salud mental in- son difíciles de diferenciar del comportamiento normal
fantil. En España, según Catalá-López (2012) la prevalen- antes de los 4 años. Así, el TDAH se identifica más fre-
cia es del 6,8% en menores de 18 años (en general los cuentemente en la escuela (aparecen demandas como
datos se mueven en el rango 5,9-7,2%). estar sentado, atender, obedecer, etc.), cuando destaca la
inatención y aparece el deterioro en el rendimiento.
Si se siguen criterios de la CIE-10, que es más restrictiva,
la prevalencia es menor, en torno al 2%. Prevalencia por subtipos
Las diferencias de prevalencia entre diferentes grupos Diferentes estudios han estimado la prevalencia según el
culturales podrían estar explicadas, en parte, por una dife- subtipo de TDAH:
rente interpretación y evaluación de los síntomas, además
de artefactos metodológicos. Frick y Silverhorn Cornejo et al.,
(2002) (2005)
El TDAH es el trastorno neuroconductual más frecuente en Subtipo Prevalencia Prevalencia
la infancia. Si bien la dislexia constituye la patología neu- Combinado 55% 52%
ropsicológica más frecuente durante la infancia, se puede Inatento 27% 34,8%
afirmar que el TDAH es una de las patologías infantiles Hiperactivo-
18% 13%
cuyo diagnóstico va en mayor aumento. impulsivo
El DSM-5 también señala que el TDAH es más frecuente Así, el más frecuente sería el subtipo combinado, seguido
en el género masculino que en el femenino, con una del inatento y en último lugar el hiperactivo-impulsivo.
proporción de 2:1 en niños y 1,6:1 en adultos. Otros estu-
dios hablan de entre 3-16:1 en población clínica (Belloch, Sin embargo, no hay consenso absoluto en esos datos, ya
2020) o entre 2-9:1 (Fonseca, 2021). Las niñas tienen más que depende de variables como el tipo de población en
tendencia a presentar principalmente inatención (síntoma que se estudie. Siguiendo a Comeche y Vallejo (2016), en
en el que hay menos diferencias entre géneros) y son población clínica el más frecuente sería el combinado
menos hiperactivas e impulsivas que los niños. Esto quizá (con un rango entre 45-65% de los casos). Cuando se trata
se relacione con el hecho de que los varones son más de población normal, la presentación predominantemente
remitidos a las clínicas. inatenta sería la más prevalente (4,5% - 11,3%), seguida
de la combinada (1,9%-8,5%). En población española
En población general hay muchos más niños que niñas normal (Lora y Moreno, 2010) se encontró, siguiendo
con TDAH, mientras que en población clínica la diferencia criterios diagnósticos, que la presentación más frecuente
es mucho menor, aunque siguen predominando los varo- era la inatenta.
nes. Esto sugiere infradiagnóstico en niñas. Se podría
explicar porque las niñas tienden a manifestar más inaten- En Belloch (2020) señalan que la presentación más fre-
ción y los niños más hiperactividad-impulsividad, que se cuente es la combinada (3/4), luego la inatenta (1/4) y
puede acompañar de agresividad y son más disruptivos, lo después la hiperactiva-impulsiva, muy infrecuente.
cual aumenta la demanda. Hasta la fecha no hay datos de
diferencia por sexo en adultos. 2.3.2. Curso
Cuando se utilizan escalas (para padres y profesores) las La hiperactividad-impulsividad se puede empezar a ver
tasas de prevalencia encontradas son mayores que cuan- antes de los 6 años, con dificultades para adquirir hábitos.
do se usan entrevistas clínicas. Los problemas atencionales se suelen hacer evidentes en
la enseñanza primaria (6-12 años). En la adolescencia
El debate sobrediagnóstico vs infradiagnóstico sigue abier- pueden aparecer conductas antisociales, si bien en esta y
to, pues las consecuencias de ambos pueden ser igual de la adultez la hiperactividad suele disminuir, la impulsividad
graves. Los datos indican que se diagnostican más niños
se puede mantener, y lo que con mayor probabilidad per- Algunos autores comienzan a afirmar la existencia de un
siste es la inatención. síndrome TDAH de inicio tardío, que no sería una conti-
nuación del TDAH infantil, sino uno diferente.
Una vez los niños comienzan a exhibir conductas relacio-
nadas con el TDAH los problemas suelen mantenerse de 2.3.3. Comorbilidad
forma estable e incluso incrementarse durante la niñez.
Es frecuente que el TDAH se asocie a leves retrasos del
El trastorno es relativamente estable durante la adolescen- desarrollo lingüístico, motor o social, así como a baja tole-
cia temprana, si bien algunos individuos tienen un curso rancia a la frustración, irritabilidad y labilidad afectiva.
que puede empeorar con la aparición de conductas antiso-
ciales. Según Biederman et al., (2010) los niños varones tienen
mayor riesgo de sufrir de forma comórbida trastornos anti-
En preescolar normalmente predomina la hiperactividad. sociales, depresión y de ansiedad en la edad adulta.
Llegada la adolescencia los síntomas de hiperactividad se
atenúan y suelen ser menos obvios, evolucionando a in- En los contextos clínicos es frecuente que el TDAH apa-
quietud o impaciencia. El exceso de movimientos se expre- rezca de forma comórbida a otros trastornos. En la pobla-
sa de forma diferente en función de la edad. En los niños ción general el trastorno negativista desafiante concurre
pequeños predomina la hiperquinesia (exceso de movi- con el 50% de los niños con presentación combinada de
mientos sin finalidad concreta más allá del mero movimien- TDAH y en la cuarta parte de los niños y adolescentes con
to) que tiende a sustituirse por hiperactividad (exceso de presentación predominantemente inatenta (PIR 11, 89).
actividades, o movimientos con una finalidad). Este exceso
de movimiento tiende a disminuir con los años, conforme la El trastorno de conducta concurre con la cuarta parte de
persona va adquiriendo habilidades para controlarlas, y se los niños y adolescentes con presentación combinada del
va manifestando en forma de inquietud interna. TDAH.
En resumen, la hiperactividad disminuye, la impulsividad Otros autores, como Abikoff y Klein, señalan que entre el
podría hacerlo en menor medida y la inatención es más 20-60% de niños con TDAH presentan además trastorno
estable en el tiempo (Belloch, 2020). disocial o negativista desafiante; y que el 90% de los niños
con trastorno disocial presentaría TDAH (PIR 06, 113).
En la adolescencia se asocia a mayor riesgo de intentos
de suicido, especialmente si hay trastornos comórbidos Sea como sea, el TDAH parece más asociado a anomalías
del estado de ánimo, de la conducta o de consumo de neuroevolutivas, mientras que los trastornos de conducta se
sustancias. relacionan más con factores familiares y sociales adversos.
Una porción sustancial de niños con TDAH tendrá deterio- La mayoría de los niños y adolescentes con trastorno de
ros que persistirán en la adolescencia y en la vida adulta. disregulación disruptiva del estado de ánimo tiene
Sobre el 50-80% de los niños continúa cumpliendo criterios síntomas que cumplen criterios para TDAH; un menor
en la adolescencia. La persistencia de los síntomas en número de niños con TDAH tiene síntomas que cumplen
personas con TDAH oscila entre el 6 y 60% en adultos. criterios para el trastorno de disregulación disruptiva del
estado de ánimo.
En la edad adulta, junto con las dificultades atencionales
(que suelen mantenerse) y la inquietud (forma atenuada de El trastorno específico del aprendizaje también concurre
la hiperactividad), puede ser problemática la impulsividad, frecuentemente con el TDAH. Los datos señalan que entre
aunque suela tender a disminuir desde la adolescencia. el 15-20% de las dificultades específicas de aprendizaje se
acompañan de TDAH y que el 40-50% de niños con TDAH
Considerando todo lo previo, cabe decir que no todos los tienen dificultades específicas de aprendizaje.
niños con TDAH tendrán desadaptación en años posterio-
res, el pronóstico depende de diversos factores (familiares, Los trastornos de ansiedad y el depresivo mayor ocurren
sociales, educativos, comorbilidad, etc.). en una minoría de individuos con TDAH (pero más que en
la población general), lo mismo sucede con el trastorno
El pronóstico es más favorable cuando el impacto adverso explosivo intermitente. En ocasiones la depresión es resul-
se centra en el rendimiento académico y no afecta a la tante de la opinión negativa de sí mismo que va configu-
adaptación social y familiar. rando el niño en base a los reproches y comentarios de los
madurativas en atención sostenida, control de impulsos, ción durante horas (p. ej. jugando, pintando, etc.) Así, si el
concentración, planificación y respuesta a la disciplina. niño está motivado podría fijar la atención, siendo la falta
de atención un problema que se manifiesta especialmente
Para Barkley el problema central es la pobre inhibición en tareas monótonas, aburridas, complejas, rutinarias y
comportamental del niño, tanto del tipo con predominio de vigilancia (PIR 13, 30).
hiperactivo-impulsivo como del combinado, siendo el tipo
inatento cualitativamente diferente, para este autor. Los niños mejoran su rendimiento si las instrucciones son
directas, rinden mejor ante tareas novedosas (cuando se
Barkley señala como síntomas primarios escasa amplitud hacen familiares se aburren), se sienten más atraídos por
de la atención, impulsividad y distraibilidad, y como secun- materiales coloridos y el desempeño es mejor en tareas
darios pobres relaciones sociales, escaso progreso aca- cortas por la mañana y si hay refuerzo inmediato.
démico y agresividad.
Respecto al tipo de proceso atencional, la investigación
La escasa amplitud de la atención se refiere a incapaci- empírica ofrece diversos datos, pero en resumen no apo-
dad para persistir en la ejecución de una tarea más allá del ya firmemente el déficit en la atención selectiva (capa-
desinterés o aburrimiento, independientemente de la pre- cidad para atender a los estímulos relevantes del entorno e
sencia o ausencia de estímulos distractores. La distraibi- ignorar los no importantes). Y en cuanto a la atención
lidad se refiere a pobre concentración, incapacidad para mantenida (p. ej. durante la realización de un test de eje-
atender selectivamente a estímulos relevantes desechando cución continua) se ha observado que los niños con TDAH
los irrelevantes. La impulsividad indica la tendencia a cometen más errores de no reacción al estímulo diana
responder rápidamente y sin tener en cuenta las alternati- (falta de atención/vigilancia) y de comisión/responder a
vas (PIR 05, 70). estímulos distractores (falta de atención o impulsividad), y
además son más lentos. Sin embargo, un déficit real lleva-
Con todo esto, Barkley (1990) define TDAH como “un ría a un empeoramiento conforme aumenta la duración de
trastorno del desarrollo caracterizado por niveles de falta la tarea y los datos de investigación no han podido encon-
de atención, sobreactividad e impulsividad inapropiados trar este efecto, por tanto, no está claro el déficit en la
desde el punto de vista evolutivo. Estos síntomas se ini- atención sostenida, si bien parece que los datos referentes
cian, a menudo, en la primera infancia, son de naturaleza a las tareas de atención sostenida son los más relevan-
relativamente crónica y no pueden atribuirse a alteraciones tes y es la más alterada (PIR 12, 198; PIR 18, 210).
neurológicas, sensoriales, del lenguaje o motoras graves, a
retraso mental o a trastornos emocionales importantes. En el examen PIR también han preguntado por la flexibili-
Estas dificultades se asocian normalmente a déficit en las dad atencional, capacidad de cambiar el foco de atención
“conductas gobernadas por reglas” y a un determinado con eficacia, alternando el foco de un estímulo a otro, p. ej.
patrón de rendimiento”. cuando un niño busca una pintura en su estuche (PIR 13,
22).
2.4.1. Manifestaciones principales
2.4.1.2. Problemas de actividad
De acuerdo con la mayoría inmensa de la literatura sobre
TDAH, son 3 las manifestaciones principales del TDAH: Estos niños no paran de moverse, son inquietos, nerviosos
Déficit de atención, problemas de actividad e impulsi- e incapaces de estar sentados. Suelen tener accidentes
vidad, lo que Barkley llama la santísima trinidad, en clara que van desde pequeños golpes hasta lesiones considera-
referencia a las dificultades que hay para conceptualizar bles. Su actividad es enérgica, desorganizada y carente de
este trastorno. objetivos.
Autores como Barkley lo plantean como un problema de Meichenbaum señaló que en estos niños había dificultades
inhibición conductual, entendiéndolo como una incapaci- en los procesos de autorregulación ejercidos por el habla
dad o dificultad para dejar de realizar respuestas prepo- lo cual repercutiría en la capacidad para generar las auto-
tentes que entran en conflicto con las normas sociales. instrucciones adecuadas para controlar la acción. Esto
Las respuestas prepotentes son las dominantes, las que estaría relacionado también con la dificultad para automa-
tienen mayor probabilidad de ocurrencia de forma espon- tizar tareas y usar esquemas cognitivos.
tánea (PIR 16, 195).
Del mismo modo, lo niños con TDAH suelen tener un estilo
Otros prefieren hablar de déficit de reflexividad. atribucional externo, tanto sobre acontecimientos positivos
como sobre negativos, aumentando su percepción de
Algunos autores distinguen entre impulsividad social e escaso control sobre los acontecimientos.
impulsividad cognitiva. La primera se vería en las conduc-
tas referidas por el DSM (p. ej. esperar el turno). La se- 2.4.2.2. Problemas sociales y conductuales asociados
gunda, la cognitiva, ha recibido mucha atención en el mar-
co del desarrollo del estilo cognitivo reflexividad-impulsi- Se han descrito cuatro características de los niños con
vidad. El niño impulsivo sería aquel que tiende a responder TDAH en relación a los problemas sociales.
más rápidamente cometiendo más errores en tareas que
impliquen incertidumbre de respuesta. En primer lugar, estos niños son molestos, intranquilos,
perturbadores y antipáticos. Pero la cualidad intrusa de sus
Los datos respecto a este estilo cognitivo son controverti- acciones parece no intencionada, lo cual hace que el niño
dos, pues los niños hiperactivos se asemejan más a un se tome por sorpresa la reacción negativa de los demás.
estilo lento-inexacto que a un patrón impulsivo.
En segundo lugar, estos niños tienen mucho impacto so-
2.4.2. Manifestaciones secundarias cial, pues son habladores y activos. Normalmente son
acciones prosociales, pero al haber tanta actividad aumen-
Además de los déficits primarios señalados son frecuentes ta la probabilidad de sufrir experiencias negativas.
los problemas escolares y de aprendizaje, sociales y con-
ductuales. A nivel conductual los aspectos alterados son el En tercer lugar, estos niños suelen ser más ruidosos y
comportamiento y ejecución de tareas, la conducta social y enérgicos que sus iguales, lo cual normalmente no está en
la conducta motora (PIR 02, 94). armonía con las expectativas sociales.
2.4.2.1. Problemas escolares y de aprendizaje asociados En último lugar, muchos de ellos también son agresivos, lo
cual fomenta su exclusión del grupo.
Los niños con TDAH tienen un rendimiento ligeramente
inferior en los test de inteligencia que los sujetos de su Los déficits académicos y problemas con la escuela se
grupo de referencia (entre 7 y 15 puntos), si bien la mayo- relacionan con la inatención, mientras que el rechazo de
los compañeros y lesiones con hiperactividad y/o impulsi- 2.4.3. Características por subtipos
vidad. Los padres y profesores tienden a ser más directi-
vos e invasivos con estos niños. 2.4.3.1. Tipo combinado
De forma esquemática se resumen algunas de las caracte- En este tipo hay más varones y presentan un mayor dete-
rísticas clínicas citadas, algunas de ellas fruto del consen- rioro en general. Además, es mayor la tasa de comorbili-
so científico y se adelantan algunas particularidades que dad con otros trastornos.
después se desarrollarán:
Estos niños tienen más dificultades en tareas de atención
Conceptos fruto del consenso sobre TDAH sostenida y el control de la impulsividad.
(adaptado de Comeche y Vallejo, 2016)
2.4.3.2. Tipo con predominio de falta de atención
El TDAH es un trastorno real, reconocido por la comuni-
dad científica. Este tipo tiene mayor proporción de niñas, de mayor
Se trata de un trastorno universal de inhibición, atención y edad y con mayor nivel de deterioro académico.
autocontrol que se observa en todos los países y culturas.
Tiene su inicio en la infancia. Estos niños muestran más dificultades con tareas de aten-
Se encuentra entre los trastornos más prevalentes en ción selectiva o focalizada y la velocidad de procesamiento.
población normal.
Se reconoce la contribución genética al TDAH. Es el más prevalente en la adolescencia (Barkley, 2004).
Conlleva deficiencias graves en capacidades psicológicas
esenciales que suponen grave perjuicio para los individuos 2.4.3.3. Tipo con predominio de hiperactividad/impulsi-
afectados. Se observa afectación de la autoestima y vidad
competencia personal.
Las alteraciones consecuentes se aprecian en el ámbito Este tipo suele ser el más conflictivo.
escolar, familiar, relaciones sociales, funcionamiento y
profesional. 2.4.4. Características transdiagnósticas
Los elementos esenciales que definen al TDAH son déficits
en inhibición del comportamiento y en atención soste- Las funciones ejecutivas son una de las funciones que se
nida. han considerado alteradas en múltiples trastornos, entre
El TDAH es un trastorno crónico, cuya evolución es más ellos el TDAH. En personas con TDAH se han visto afecta-
adversa cuando se asocia a falta de tratamiento. Sus das la memoria de trabajo, la inhibición, la flexibilidad cog-
manifestaciones cambian, las dificultades atencionales nitiva, la atención selectiva y sostenida, la fluidez verbal, la
constituyen la dimensión crónica del mismo. planificación y el control de las interferencias.
Se trata de un trastorno comórbido. Asociado a otros
síntomas propios de trastornos del comportamiento, tras- También se ha encontrado que pacientes con TDAH pre-
tornos del aprendizaje y trastornos de ansiedad. sentan regiones prefrontales/insular-estriatal ventrolatera-
Las personas con diagnóstico de TDAH tienen más proba- les más pequeñas y con bajo funcionamiento, a diferencia
bilidad de sufrir otros trastornos y alteraciones mentales de pacientes con otros trastornos, p. ej. TOC donde estas
a lo largo de su vida. regiones son más grandes y con mayor funcionamiento.
Las personas con TDAH son más propensas a sufrir acci-
dentes y lesiones. La impulsividad se ha explicado como un fenómeno abajo-
Resulta imposible, hasta la fecha, eliminar el TDAH, pero arriba, mediado por una respuesta deficiente de la dopa-
sí es posible aminorar las deficiencias atencionales y ma- mina mesolímbica, lo cual se asocia también a irritabilidad
nejar adecuadamente los comportamientos disruptivos. e hiperactividad.
Las recomendaciones y propuestas de tratamiento varían
según la edad del paciente. Se dispone de tratamientos También se ha encontrado que en el TDAH la toma de
eficaces, si bien su eficacia se limita sobre todo al periodo decisiones es deficiente (ineficiente, poco reflexiva) e im-
en el que se administra la terapia. pulsiva (tendencia a elegir alternativas inmediatas).
Se recomienda tratamientos de naturaleza multimodal
que integren terapia farmacológica, modificación de con-
ducta e intervenciones psicosociales.
Fuente: Barkley, Cook, Diamond, Zametkin et al. (2002); Kutcher,
Aman, Brooks, Buitelaar et al. (2004); AAP (2011); Moreno (2013).
4. TRASTORNO POR DÉFICIT DE La mayoría de los modelos aquí referidos solo poseen
ATENCIÓN/HIPERACTIVIDAD evidencia a nivel correlacional, por lo que las conclusiones
NO ESPECIFICADO deben tomarse con cautela. Ningún marcador biológico
es diagnóstico para TDAH.
Esta categoría se aplica a las presentaciones en las que
los síntomas característicos del trastorno por déficit de
A nivel temperamental se relaciona el TDAH con menor
atención/hiperactividad que causan un malestar o deterioro
inhibición conductual, emotividad negativa y elevada bús-
significativo en el funcionamiento social, laboral o en otras
queda de novedades, sin que sean factores específicos del
áreas significativas, pero no cumplen todos los criterios
TDAH.
para el trastorno por déficit de atención con hiperactividad
o cualquier otro trastorno en el neurodesarrollo. La catego-
5.1.1. Funcionamiento biológico
ría trastorno por déficit de atención/hiperactividad no espe-
cificado se usa en situaciones en las que el clínico elige
Tiempo atrás se consideró que la causa principal del TDAH
no comunicar la razón específica por la que no cumple
era un daño cerebral. Del mismo modo, la investigación
los criterios para el trastorno por déficit de aten-
que se realizó sobre niños que habían sido afectados por
ción/hiperactividad u otro trastorno del neurodesarrollo, e
una epidemia de encefalitis (época de la Primera Guerra
incluye las presentaciones en las que no hay suficiente
Mundial) vinculaba esta afección a problemas como falta
información para hacer un diagnóstico más específico.
de atención e hiperactividad.
Teorías más modernas aluden a anomalías en los proce- que se manifiesta como impulsividad y problemas para la
sos de activación e inhibición o inmadurez del sistema autorregulación.
nervioso.
El córtex heteromodal integra señales procedentes de
A continuación se detallan las hipótesis etiológicas más distintas modalidades sensoriales, permitiendo atribuir
referidas en la literatura especializada. significado a las percepciones y movimientos. Las lesiones
en el hemisferio derecho alteran más las funciones aten-
a) Estructuras cerebrales y funcionamiento cionales, en personas normales. De tal forma que, habi-
tualmente en personas sanas existe asimetría frontal, con
Las áreas que más interés han suscitado son la frontal y predominio del lóbulo frontal derecho sobre el izquierdo.
la fronto-límbica. Los niños con TDAH tienen menor nivel En niños con TDAH no se suele encontrar ese patrón de
de flujo sanguíneo, de consumo de glucosa y de actividad asimetría, a la vez que sí se encuentra el ya mencionado
electroencefalográfica en los lóbulos frontales. Esto se hipometabolismo frontal, sobre todo en el prefrontal.
relaciona con la dificultad para inhibir respuestas motoras,
alteraciones en conductas atencionales y menor sensibili- Asimismo, las áreas orbito-frontales (en la cara basal del
dad a los reforzadores (PIR 06, 114; PIR 08, 72; PIR 11, lóbulo frontal) son un sistema de inhibición y sincronización
94). de la atención, con estrecha relación con el sistema límbi-
co. Considerando todos estos factores se explica el TDAH
Se ha destacado el papel de las áreas frontoestriatales como alteraciones o lesiones en las vías orbito-frontales.
(prefrontal, calloso, ganglios basales, zonas temporoparie-
tales) y cerebelosas. Se han detectado dificultades en En las áreas temporoparietales destaca la vía mesolím-
funciones ejecutivas cuyo sustrato estaría en zonas pre- bica (conecta el mesencéfalo con el sistema límbico),
frontales dorsolaterales, ventrales y mediales, añadiendo asociada al sistema de recompensa cerebral, motivación y
también el papel del cíngulo anterior. regulación emocional. Las áreas cerebelosas se han rela-
cionado con el control del movimiento, funciones motoras y
Los lóbulos frontales tienen una importancia decisiva para atencionales.
garantizar la función reguladora del lenguaje y, por tan-
to, la organización de los actos voluntarios. Este mecanis-
El estriado ventral parece tener un volumen 25% inferior al
mo suele madurar hacia los 4 años de edad. De esta for-
de niños controles. Se han encontrado reducciones en el
ma, son clave también para regular los procesos de activa-
globo pálido y putamen derecho, caudado derecho e iz-
ción y su relación con el sistema del habla.
quierdo, amígdala y córtex cingulado anterior. Esta última
reducción parece persistir incluso en adultos, aunque el
Los niños con TDAH realizan pobremente tareas que en
tratamiento farmacológico parece tener efectos positivos.
adultos miden disfunción de los lóbulos frontales.
Empleando la batería neuropsicológica Luria-DNI se apre- Estudios recientes han encontrado alteraciones estructura-
cian dificultades en tres subescalas, principalmente en la les en la amígdala, accumbens e hipocampo.
regulación verbal del acto motor, y también en escritura
y memorización lógica (PIR 11, 93). Se ha detectado menor actividad metabólica cortical
fundamentalmente en el hemisferio derecho (especial-
Otras estructuras relacionadas son la formación reticular, mente en áreas frontales) y alteraciones de la conectividad
los ganglios basales y el córtex heteromodal. en redes neuronales de control cognitivo, atencionales,
córtex visual y red neuronal por defecto. La menor sincro-
La formación reticular regula el nivel de activación. Se acep- nía entre estar redes se relaciona con síntomas de hiper-
ta que en el TDAH existe una alteración de las vías que actividad/impulsividad.
conectan la formación reticular con los ganglios basales y el
córtex asociativo, causando los problemas de atención.
Existen dos tipos de redes, la red neuronal orientada a
tareas y la red neuronal por defecto. En personas neuro-
Los ganglios basales ejercen una función inhibitoria en
típicas cuando la red neuronal por defecto se activa, la
relación con el control motor y atencional. Las alteraciones
orientada a tareas se inactiva, pero toma el control si hay
dopaminérgicas guardan relación con hipometabolismo en
que ejecutar alguna tarea, y la red por defecto se desco-
los ganglios basales, lo cual impide la adecuada inhibición
necta. Parece que en personas con TDAH funcionarían
simultáneamente, interfiriéndose.
La inhibición motora se relaciona con hipoactivación desde Existen déficits de dopamina en el cíngulo anterior (cuya
la corteza inferior derecha hasta la ínsula anterior, área hipoactivación produce déficit en funciones ejecutivas) y el
motora suplementaria, caudado y tálamo. Las dificultades núcleo caudado (cuya sobreactivación produce exceso
atencionales se han relacionado con hipoactivación en la motor). Parece ser que las personas con TDAH tienen una
corteza prefrontal dorsolateral derecha, putamen, tálamo menor densidad del transportador de dopamina (lo cual se
posterior, caudado y parietal. El tiempo de reacción y aten- compensa con medicación).
ción sostenida se han relacionado con alteraciones en el
córtex prefrontal, dorsomedial, medial, ventrolateral, ínsula Sin embargo, otros estudios no han hallado diferencias en
anterior y zonas parietales. los metabolitos de estos neurotransmisores entre niños
con TDAH y niños control, e incluso se plantea que la
relación sea inversa; así pues, no se puede establecer
La anticipación de recompensas parece relacionarse con
ninguna causalidad.
anomalías en el estriado ventral. Las dificultades en mane-
jo del tiempo cognitivo parecen deberse a hipoactivación
El estudio con fármacos ha permitido saber que la nora-
de zonas de la corteza frontal inferior, prefrontal dorsolate-
drenalina y dopamina son relevantes para el funcionamien-
ral, motora suplementaria, cingulado anterior, ganglios
to de las áreas frontales y fronto-límbicas del cerebro.
basales y zonas parietales y del cerebelo.
c) Aspectos electrofisiológicos
En resumen, el TDAH sería el resultado de una disminu-
ción de la actividad metabólica de los ganglios basales, las Se han visto alteraciones en el EEG, así como en la tasa
conexiones córtico-estriadas y las áreas prefrontales, so- cardíaca y reactancia de la piel en una parte de los niños
bre todo en el hemisferio derecho, como consecuencia de con TDAH.
alteraciones en los circuitos dopaminérgicos (especialmen-
te), noradrenérgicos y serotoninérgicos, lo cual apoya la Los estudios señalan un aumento de la potencia de on-
hipótesis catecolaminérgica. das theta y delta en el lóbulo frontal y diminución de
las alfa y beta, lo cual es una desviación. Aunque no es
Otros hallazgos anatomofuncionales son los siguientes: un marcador diagnóstico, la diferencia en la ratio theta/beta
sí es un indicador pronóstico.
Disminución del volumen del cerebelo, especialmente del
vermis. Relacionado con la menor capacidad para regular La alteración en el TDAH se caracteriza por un aumento de
la actividad motora. las ondas theta (que causaría aumento de la actividad) y
Menor volumen del globo pálido, caudado y córtex pre- disminución de las alfa y beta (que favorece el reposo,
frontal. relajación y atención consciente). Si la ratio theta/beta es
Disminución del volumen del cuerpo calloso, especialmen- muy elevada (más cuanto mayor es el numerador -theta-
te en la zona anterior y el esplenio. respecto al denominador -beta-), puede aparecer hiperacti-
vidad, impulsividad y dificultades atencionales.
Presencia de heterotopias en fosa posterior, con exceso de
LCR.
Según los estudios con EEG la actividad tónica cortical (de
base) aparece más lenta en niños hiperactivos, es decir,
b) Neurotransmisores
muestran EEG tónicos menos activados. En cualquier
persona cuando aparece un estímulo nuevo (y hay reac-
Se ha propuesto la hipótesis catecolaminérgica del
ción de orientación) se bloquean o atenúan las ondas alfa,
TDAH, ya que las tres principales catecolaminas (dopami-
para lo que los niños hiperactivos presentan mayor laten-
na, noradrenalina y adrenalina) parecen estar implicadas.
cia, coherente con la menor activación cortical.
El déficit asociado en TDAH es fundamentalmente en
dopamina y noradrenalina, en zonas del córtex prefrontal,
También se ha observado que muestran una menor acti-
calloso y ganglios basales, lo cual afectaría a las funciones
vación en diversas regiones cerebrales durante la inhibi-
ejecutivas a la hora de atender, inhibir, planificar y regular
ción de respuestas motoras, la inhibición de las interferen- El bajo peso al nacer (< 1,5 kg) aumenta el riesgo de
cias y en tareas que requieren atención selectiva y proce- TDAH de 2 a 3 veces, pero la mayoría de niños con bajo
samiento temporal. Estos resultados en adultos son menos peso al nacer no desarrolla TDAH. Los niños con síndrome
claros. de alcohol fetal (SAF) suelen presentar manifestaciones
del TDAH.
Todos estos datos son coherentes con las teorías de la
hipoactivación-infraactivación cortical (arousal). Estas variables también se consideran en ocasiones epi-
genéticas, las cuales se desarrollan un poco más en un
Las primeras teorías, sin embargo, aludían a sobreactiva- apartado posterior.
ción. La hiperactividad sería consecuencia de algún tipo
de disfunción cerebral que interferiría con la habilidad para 5.1.3. Genética
dejar fuera el input irrelevante, lo que llevaría a sobreacti-
vación por dificultad para filtrar selectivamente. Los fárma- La genética juega un papel importante para la predisposi-
cos estimulantes tendrían un efecto paradójico reducien- ción a la hiperactividad, algunos datos señalan que los
do el arousal cortical. Paradójico también porque son esti- factores genéticos están implicados en hasta el 80% de los
mulantes, pero disminuyen la actividad motora del niño casos. La concordancia entre gemelos monocigóticos es
sobreactivado. En estos niños los psicoestimulantes actua- del 51-81% y entre dicigóticos del 29-33%. La heredabili-
rían de forma diferente a como lo hacen en el resto de dad estimada a través de las correlaciones de síntomas
niños (PIR 11, 88). entre gemelos es del 75%. Existe mayor probabilidad de
presentar TDAH si algún progenitor está afectado, aumen-
La teoría alternativa, la de la infraactivación, señala que tado por 8,2 veces el riesgo, estimándose en un 76% la
los síntomas serían fruto de los intentos de los niños para varianza a factores de heredabilidad (PIR 03, 147; PIR 07,
aumentar su bajo nivel de activación cortical. Esta teoría es 120).
más consistente con el efecto de los fármacos estimulan-
tes y la respuesta a estos de los niños con TDAH, ya que Algunos autores señalan que el TDAH es el más hereda-
los estimulantes aumentarían ese bajo nivel de activación ble de los trastornos mentales. La transmisión genética es
cortical y los niños no tendrían que sobreactivarse para menor en los cuadros de TDAH con predominio de hiper-
compensarlo. actividad-impulsividad.
Algunos autores señalan que lo que realmente sucedería La heredabilidad del TDAH es poligénica, no hay un gen
es que existe un déficit en la capacidad para modular el que por sí solo pueda ser responsable del cuadro. Se
arousal en respuesta a las demandas del ambiente. conoce parte del mapa genético, que describe los 12 ge-
nes principales implicados, entre ellos el F0XP2 (implicado
Con potenciales evocados se ha visto retraso en la apari- en las sinapsis, lenguaje y aprendizaje), el DUSP6 (impli-
ción de las latencias tardías en niños con TDAH respecto a cado en la transmisión dopaminérgica) y el SEMA6D (rami-
niños sanos. La onda P300 aparece de forma más tardía y ficaciones neuronales). La mayoría de los implicados están
con amplitud disminuida. relacionados con la recepción y transporte de la dopamina,
el cromosoma más implicado es el 15.
5.1.2. Complicaciones durante el embarazo y naci-
miento Se ha señalado la importancia de los genes vinculados a
los receptores (DRD4, DRD5) y transportadores (SCL6A3,
La idea de que la mayor parte de los TDAH están debidos DATI, DAT5) de la dopamina y noradrenalina (NETI), el
a lesiones o infecciones pre o perinatales no tiene apoyo, receptor serotoninérgico (5HTRIB) y proteína neural
menos del 5% de niños con TDAH presenta algún tipo de (SNAP25).
daño relacionado.
Los modelos genéticos señalan que los niños con TDAH
Se han encontrado algunos datos que sí correlacionan, tienen menos dopamina en el cerebro pues tienen más
como el consumo de alcohol o tabaco por la madre durante genes receptores y transportadores de esta, lo cual dismi-
el embarazo y mayor proporción de anomalías físicas sin nuye su tiempo en el cerebro. Esto repercutiría en que los
trascendencia (sobre todo cuando es comórbido a trastor- ganglios basales tendrían menor capacidad para inhibir la
nos de conducta), sin poder establecer más relación. actividad motora.
La exposición al plomo es dañina para los seres humanos a) El modelo atencional de Virginia Douglas
y produce alteraciones cognitivas. Los estudios no han
encontrado datos claros sobre su influencia en el TDAH, Douglas es la responsable de la distinción entre TDA
siendo la asociación entre plomo y TDAH muy pequeña. con/sin hiperactividad (DSM-III), centrando el foco en las
dificultades atencionales.
Estudios recientes que han seguido por esta línea señalan Se ha encontrado que los umbrales de activación por esti-
que los déficits atencionales pueden conceptualizarse en el mulación son más elevados en niños con TDAH, de tal
marco de una disfunción más general del procesamiento forma que cuando decrece el nivel de estimulación am-
de la información. biental las conductas de falta de atención e hiperactividad
serían una forma de compensar.
Resumiendo, para Barkley, el problema básico es una Al modelo de Barkley se le ha criticado que simplemente
relativa falta de sensibilidad a los estímulos ambienta- describe el desarrollo, pero no especifica las condiciones
les socialmente relevantes y un déficit en las conduc- necesarias, sino que alude a que surge fruto de la madura-
tas gobernadas por reglas (PIR 16, 197). ción cerebral.
Estos déficits serían causantes de los problemas de aten- c) El modelo de la memoria de trabajo de Rapport
ción sostenida, desinhibición, incapacidad de demora de (2008)
refuerzos, impulsividad, etc.
Basado en el de Baddeley, considera que lo que está alte-
Habría una fuerte base neurológica y sería ajeno a la vo- rado de forma nuclear en el TDAH es la memoria de tra-
luntad del niño. Este énfasis no quita que las condiciones bajo. Ese déficit derivaría en desorganización conductual y
ambientales influyan en exacerbar o mejorar los síntomas problemas en la atención sostenida.
del niño; el tratamiento multicomponente sería el óptimo y
tendrían lugar las técnicas cognitivo-conductuales además 5.2.3. Modelos de déficit múltiple
de los fármacos.
a) El modelo explicativo de Brown (2005)
Barkley ha desarrollado una teoría general de las funcio-
nes ejecutivas que aplica al caso concreto del TDAH, re- No considera la inhibición conductual como central, sino
sultado su Modelo Híbrido de autorregulación. que propone seis funciones ejecutivas (sin jerarquía) que
actúan en conjunto: activación, concentración, esfuerzo,
De esta manera, en su formulación actual Barkley apunta emoción, memoria y acción. Sería necesario un adecuado
como núcleo central el déficit en la inhibición conduc- nivel de desempeño en todas ellas de forma independiente
tual. La inhibición conductual sería un elemento central en e integrada.
el surgimiento de la autorregulación y las funciones ejecu-
Habla de que habría una dificultad para regular el esfuerzo Esta perspectiva se asienta en el conductismo radical
y la motivación, siendo difícil para estos niños regular los (Skinner, 1953), de tal forma que la conducta impulsiva e
estados energéticos necesarios para ejecutar las tareas, inatenta sería como cualquier otra conducta, es decir, es
habiendo déficits ejecutivos en el procesamiento de la un producto histórico de las sucesivas interacciones del
información. Habría tres niveles de en los que se podrían organismo y contingencias del ambiente físico y social.
manifestar las dificultades: atención, alerta y supervi-
sión/planificación. Según este modelo, la ejecución de las La conducta de los individuos con TDAH sería consecuen-
personas con TDAH en diversas tareas atencionales es cia de una carencia de oportunidades de discriminación y
frecuentemente baja porque su estado energético no es reforzamiento apropiado para establecer un adecuado
óptimo. control de estímulos y conductas de autocontrol. Las con-
diciones habrían potenciado conductas incompatibles con
c) El modelo dual o de doble vía de Sonunga-Barke atender, permanecer en las tareas y lograr objetivos a
(2003) largo plazo. Los adultos habrían (quizá de forma inadverti-
da) prestado atención cuando no correspondía, facilitado
Evolución de su modelo de aversión a la demora. Habla de que tareas de atención y solución de problemas se convir-
dos vías, la cognitiva (frontoestriado, control inhibitorio) y la tieran en aversivas y permitido el escape de estas. Así, se
motivacional (mesolímbica, recompensa). El trastorno se habría ido moldeando y manteniendo el repertorio conduc-
debería a la afectación de estas vías de forma indepen- tual disruptivo.
diente o en interacción. Años después formuló su modelo
de la triple vía (2010) añadiendo las dificultades del pro- En los últimos años este modelo ha incorporado las apor-
cesamiento temporal. taciones de la Teoría del Marco Relacional, asumiendo una
perspectiva contextual-funcional.
d) El modelo de inhibición-activación de la conducta
de Quay (1997) Así, la perspectiva contextual-funcional es defendida por
Ruiz, Luciano, Gil y Barbero en Vallejo (2016), donde ha-
Se basa en que los sistemas de activación e inhibición cen una revisión crítica de la evidencia actual respecto al
funcionarían en condiciones distintas. El sistema de activa- TDAH. Aluden a la tendencia, en ocasiones, a convertir la
ción se pondría en marcha en condiciones que requieren evidencia correlacional en causal, por ejemplo en los ha-
esfuerzo y el de inhibición en condiciones de castigo o no llazgos neurológicos, a los problemas metodológicos de
refuerzo. Las personas con TDAH serían menos sensibles algunos estudios genéticos y al diagnóstico laxo del TDAH.
a los estímulos aversivos, por lo que tendrían menor capa-
cidad de inhibición de respuestas en situaciones en las que Señalan que quizá sea más plausible que la genética jue-
las consecuencias aversivas se evitan con la no respuesta. gue un papel en la facilidad con la que el ambiente social
moldea los repertorios conductuales, pero no el repertorio
e) El modelo dual de comorbilidad entre TDAH y dislexia en sí mismo. Los niños con TDAH suelen mostrar un com-
portamiento irritable y activo durante los primeros meses
Señala que en ambos trastornos hay dificultades en la de vida. Este hecho puede influir en el comportamiento de
velocidad de procesamiento, memoria de trabajo verbal y los padres que, reforzarán o extinguirán (en ocasiones de
flexibilidad cognitiva. El déficit común más estudiado es la forma inadvertida) comportamientos más o menos adapta-
baja velocidad de denominación automática rápida. dos. Teniendo en cuenta esto, cabe pensar que resulta
más difícil moldear repertorios de inhibición conductual en
f) El modelo dual de comorbilidad con el autismo este tipo de niños que en otros.
Señala que hay déficits compartidos entre personas con También critican la propuesta terapéutica de Barkley (ex-
autismo de alto nivel, Asperger y TDAH, tales como rigidez ternalizar las fuentes de control del comportamiento hasta
cognitiva, dificultades para elaborar respuestas complejas, que el niño madure) pues puede ser iatrogénica, en el
para interactuar con el medio y en la autorregulación emo- sentido de que puede generar aún más dependencia del
cional y conductual. exterior y disminuir el número de interacciones que mol-
dearían una autorregulación adecuada.
Los niños con TDAH no suelen mostrar problemas en la El niño que no logra este repertorio conductual es muy
comprensión de reglas, sin embargo, sí que, a pesar de probable que no atienda a lo relevante para alcanzar me-
comprenderlas, son incapaces de seguirlas. Comprenden tas a largo plazo y quede atrapado en reglas que solo
la regla, pero son incapaces de inhibir la conducta que la tienen efecto a corto plazo. Podría ser etiquetado de TDAH
transgrede. y perder oportunidades para desarrollar un repertorio de
autocontrol adecuado. En la adolescencia el patrón impul-
La inhibición conductual, desde el marco contextual- sivo llevará a consecuencias deseadas a corto plazo, pero
funcional, depende de la habilidad de discriminar verbal- ineficaz a largo plazo, resultando, quizá, en el patrón de-
mente los propios comportamientos y experiencias en el nominado evitación experiencial destructiva.
momento en que tienen lugar y no responder de modo
automático, sino en función de lo que sea relevante (no Los autores arriba citados proponen para estos casos la
solo responder en función del impulso, sino en función de Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT, Hayes
la consecuencia a medio o largo plazo, si no estoy quieto, Strosahl y Wilson, 2012; Wilson y Luciano, 2002) para el
me castigarán). tratamiento de adolescentes y adultos con TDAH, orienta-
do específicamente al desmantelamiento de la evitación
Esta habilidad implica diferentes operaciones generaliza- experiencial.
das que se conocen como dimensiones del yo (yo proceso,
yo contexto) que se aprenden tras el entrenamiento en En definitiva, desde este punto de vista, el objetivo del
múltiples ejemplos donde se pregunta al niño por las ac- tratamiento del TDAH debe ser fomentar una autorregu-
ciones que está realizando, lo que está sintiendo, lo que ha lación flexible, basada en discriminar los pensamientos y
hecho y lo que va a hacer. Se requieren muchos ejemplos sensaciones que surjan en el momento presente y hacer la
para que se desarrollen estas habilidades que implican acción que mejor se ajuste para lo que es importante a
diferenciar a la persona de las acciones en el momento largo plazo.
presente y las contingencias que tienen lugar.
5.2.5. Modelo de cognición social
Cuando la habilidad para discriminar el propio comporta-
miento se ha desarrollado, el niño puede ser entrenado Se ha postulado que en el TDAH también habría dificulta-
para alterar su conducta automática según tales discrimi- des en la teoría de la mente, las cuales se traducirían en
naciones, sin que haya contingencias inmediatas y media- dificultades de tipo social que en estas personas están
das por otros al hacerlo. Este entrenamiento se realiza afectadas.
mediante múltiples preguntas en las que se le pide que,
tras haber discriminado su experiencia elija qué quiere 5.2.6. Modelo de funciones ejecutivas y desregulación
hacer. Tras muchos ejemplos el niño comenzará a estar en emocional
condiciones de regular su comportamiento sobre la base
de la discriminación del mismo y de sus experiencias. Es Además de la importancia de las funciones ejecutivas los
decir, desarrolla repertorios de autocontrol para orientar su últimos años se ha puesto de relieve la importancia de la
conducta a metas a largo plazo. desregulación emocional, aunque entendiéndola también
como una función ejecutiva, e incluso proponiéndola como
Cuando en la historia del niño no se han dado las múltiples un síntoma del TDAH. La desregulación emocional es la
interacciones necesarias para que sus reacciones no sean falta de control sobre la propia conducta y los estados
automáticas y sea consciente de las consecuencias de su emocionales asociados, con dificultades para recuperar un
conducta, el niño emitirá respuestas automáticas guiadas estado de calma.
por contingencias de reforzamiento inmediato y rehuirá de
las personas o contextos que no aporten ese reforzamiento 6. EVALUACIÓN
inmediato.
Normalmente además del psicólogo clínico están implica-
dos otros profesionales como el neurólogo y pediatra.
A la hora de evaluar a un niño con posible TDAH se ha de que los niños con TDAH se comportan de forma más ade-
dar mucha importancia a la observación (durante meses, cuada durante la consulta que en otros ambientes.
e incluso años), recogida de información con cuestionarios
(para profesores y padres) e información del comporta- Algunas de las entrevistas que se pueden utilizar son In-
miento atencional del niño en diferentes situaciones o forme Parental de Síntomas Infantiles (PACS, Taylor et al.,
ambientes. 1986), Entrevista Clínica Semiestructurada para Niños
(SCIS, Achenbach y McConaughy, 1989), Entrevista Se-
No solo se evalúan los síntomas, sino también las altera- miestructurada para el TDAH (Barkley, 1998) y el Formula-
ciones emocionales y conductuales, momento evolutivo, rio Diagnóstico del TDAH (Brown, 1996); a nivel de entre-
trastornos del desarrollo, alteraciones físicas, relaciones vistas generales pero útiles para evaluar el TDAH existen
familiares, relación con iguales y profesores, etc. la Pauta de Entrevistas para Padres (PEP, Pelechano,
1979) e Información Diagnóstica General (IDG, Capafons
Es necesaria una entrevista clínica, evaluación médica y et al., 1986).
diagnóstico adecuado por un especialista, incluyendo la
valoración de las funciones ejecutivas, CI y comorbilida- 6.2. ESCALAS
des. Aunque existen anomalías neuroanatómicas, la hete-
rogeneidad y superposición es tal que las medidas de Existen diversas escalas que pueden ayudar a determinar
neuroimagen no sirven para diagnósticos individuales. Lo si el comportamiento se desvía de la norma y si se diferen-
mismo sucede con los estudios genéticos, neuropsicológi- cia de conductas de otros trastornos. Además son rápidas
cos y de EEG que, aunque aportan información no son y de bajo coste.
suficientes, per se, para un diagnóstico. Además, su uso
en la práctica clínica diaria sería inviable a día de hoy. Una de las escalas utilizadas es el Child Attention Profile
(Perfil Atencional Infantil) (CAP, Edelbrock). El CAP es el
El TDAH lo debemos entender como un síndrome, un resultado de la selección de 7 ítems de la escala de
patrón de signos y síntomas que suelen aparecer juntos, inatención y 5 de la de sobreactividad de la Child Behavior
genera disfunción y que, una vez diagnosticado permite Checklist (CBCL). Permite distinguir predominio de sobre-
establecer un pronóstico y tratamiento (y también investi- actividad o de inatención. La CBCL completa también es
gar), sin que los correlatos, antecedentes y oras variables de mucha utilidad para la evaluación del TDAH, máxime si
sean siempre homogéneos (de hecho, no hay marcadores se considera que tiene escalas para padres y profesores.
biológicos).
Otras son las Escalas Calificación Infantil, ECI, deriva-
Resumiendo, es fundamental recoger información a través das de entrevistas no estructuradas, como la propuesta por
de los profesores y familia, empleando entrevistas y Manga, Garrido y Pérez (1997), que permite obtener tres
escalas. También se administran pruebas a la persona subfactores atencionales y uno de hiperactividad.
evaluada, evidentemente. Algunos autores las clasifican en
3 tipos: 1) de inteligencia (perfil cognitivo), 2) psicológicas Las Escalas Conners son un instrumento ampliamente
(para lectoescritura y a matemáticas) y 3) neuropsicológi- utilizado, basado en los criterios DSM. Hay diferentes
cas (especialmente de FFEE). La información es relevante versiones, para padres y profesores, la Parent Rating Sca-
no solo para el diagnóstico sino también para diseñar la le de Conners y la Conners Teacher Rating Scale. Se ha
intervención individualizada. adaptado al español con el nombre de Escala de evalua-
ción del trastorno por Déficit de Atención con Hiperac-
A continuación se exponen con detalle las pruebas y técni- tividad (EDAH, Farré y Narbona, 2001). Evalúa los sínto-
cas para relevantes para la evaluación del TDAH y en mas primarios, pero también los afectivo-adaptativos.
último lugar su nivel de evidencia. También tiene una Escala de Autoevaluación, para adoles-
centes de 12 a 17 años, y una versión para adultos
6.1. ENTREVISTAS (CAARS, Conners´ Adults ADHD Rating Scales).
La principal fuente de información son los padres. Se La Werry-Weiss-Peters Activity Rating Scale (Escala de
pueden utilizar entrevistas estándar estructuradas o semi- Evaluación de la Actividad) es otra escala útil, consistente
estructuradas. También se hacen entrevistas con los pro- en varios items que valoran los padres en diferentes situa-
fesores, pues pasan también mucho tiempo con los niños. ciones.
Por último, también se entrevista al evaluado, sin olvidar
Nivel Grado
Evaluación
evidencia recomendación
Diagnóstico clínico, con
repercusión funcional y ha-
biendo excluido otros tras- 4+ D
torno o problemas. Criterios
diagnósticos.
Datos sobre el rendimiento
académico, que suele estar 4 D
mermado.
Instrumentos de evaluación
son útiles para el cribado y 4 D
evaluación diagnóstica.
ESQUEMA DE CONTENIDOS
TDAH Definición
DSM-5
6 o más síntomas de inatención y/o 6 o más síntomas de hiperactividad-impulsividad (5 a partir de los 17 años de edad).
Durante al menos 6 meses.
Algunos síntomas estaban presentes antes de los 12 años de edad.
Varios síntomas están presentes en 2 o más contextos.
Subtipos:
− Inatento.
− Hiperactivo/impulsivo.
− Combinado.
TDAH: etiología
Teorías Biológicas Teorías Psicológicas
Funcionamiento biológico: Factores Psicosociales
a) Estructuras cerebrales y funcionamiento: lóbulo frontal. Modelos de déficit único
b) Neurotransmisores: dopamina. a) Modelo atencional de Douglas
c) Aspectos electrofisiológicos: sobreactivación vs infra- b) Modelo de Barkley
activación. c) Modelo de memoria de trabajo de Rapport
Modelos de déficit múltiple
a) Modelo explicativo de Brown
b) Modelo cognitivo energético de Sergeant
c) Modelo de doble vía de Sonunga-Barke
d) Modelo de inhibición-activación de la conducta de
Quay
e) Modelo dual de comorbilidad TDAH y dislexia
f) Modelo dual de comorbilidad TDAH y autismo
Aproximación analítica-funcional
Complicaciones durante embarazo y nacimiento Cognición social
Genética Funciones ejecutivas y desregulación emocional
Epigenética