Untitled
Untitled
Untitled
debido a esto se mudó a otra ciudad junto con su pareja. Posteriormente, terminaron al
mes y medio la relación. Actualmente, se encuentra soltera hace 3 meses, y menciona
que comenzaron a tener discusiones con su, ahora, expareja, donde el “se estaba
aburriendo… me celaba con mis compañeros de trabajo…no hacía nada mientras
estaba trabajando, como buscar trabajo en lo que el estudio y no era lo mismo”
Hace un mes y medio sufrió acoso sexual por un compañero del trabajo en la casa de
una compañera, al momento de ir a dormir. Ella se estuvo sintiendo muy mal, no dormía
y lloraba todo el día, en el trabajo registro una denuncia y sus compañeros la apoyaron.
Menciona que “no sabía que hacer, estoy lejos de mi familia… pero recibí el apoyo de
mis compañeras que me dijeron que denunciara” al final el compañero renuncio y no lo
ha vuelto a ver.
En sesión la paciente se observa un poco nerviosa, está muy atenta y declara que en
las últimas semanas siente que no tiene ganas de hacer nada, no puede dormir en las
noches y se despierta durante la noche. Además, siente que esta irritable todo el día y
muy sensible a la vez donde “lloro con el más mínimo cambio de voz” y “siento que no
tengo las energías, me cuesta mucho partir el día” y, asimismo, siente ansiedad, se pone
muy inquieta cuando tiene que presentar sus ideas en las reuniones, cuando tiene que
hablar con otros piensa: “se van a dar cuenta que estoy nerviosa” “me voy a equivocar”
“no lo voy a hacer bien” y esto mismo la hace pensar “soy muy insegura en todo” “no
me sé defender” y esta ansiedad la siente en la noche al momento de ir dormir, que le
impide dejar “su mente descansando”
La paciente señala que hace tres años se sintió de la misma manera que ahora, producto
de un conflicto familiar y discusiones entre sus padres, donde sentía que “no podía más”
“podía cruzar la calle y si pasaba un bus, no me iba a mover”. Percibe una diferencia a
ahora “siento que estoy más calmada que esa vez”. En esa ocasión estuvo con
tratamiento farmacológico con escitalopram y dejó de asistir con la psicóloga debido a
que le cancelaban las horas. Finalmente, el tratamiento farmacológico lo termino por
voluntad propia. Su mamá esta diagnosticada con depresión endógena desde hace 18
años comenta que no sabe cómo decirle las cosas porque “va a tener una recaída.”
Asimismo, la paciente describe que esta sensación de no saber qué hacer le recuerda
mucho a su infancia, donde sus padres discusión o la retaban a ella y no sabía cómo
responder. Recuerda su infancia como muy cariñosa con su mamá, pero muy autoritaria
y estricta con su papá y mamá y, además, sus padres discutían constantemente, se
gritaban y María solo escuchaba intranquila. Por otra parte, cuando tenía alrededor de
15 años, se sentía insegura consigo misma, la criticaban por su figura corporal, la
juzgaban por su forma de ser, pero comenta que nunca se atrevió a decir algo.
Dentro de las expectativas de la psicoterapia la paciente espera que su “ansiedad no
me tire para abajo” y “tener más herramientas para defenderme”. Por otra parte, la
paciente es cooperadora durante la sesión, está atenta a las preguntas y su voz tiene
un tono aplanado.