Festejos de Cumple Años
Festejos de Cumple Años
Festejos de Cumple Años
Efesios 5:6 Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene
la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.
5:7 No seáis, pues, partícipes con ellos.
5:8 Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor;
andad como hijos de luz
5:9 (porque el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad),
5:10 comprobando lo que es agradable al Señor.
5:11 Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien
reprendedlas;
Génesis 39:7 Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus
ojos en José, y dijo: Duerme conmigo.
39:8 Y él no quiso, y dijo a la mujer de su amo: He aquí que mi señor no se
preocupa conmigo de lo que hay en casa, y ha puesto en mi mano todo lo que
tiene.
39:9 No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado
sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal,
y pecaría contra Dios?
Génesis 40:20 Al tercer día, que era el día del cumpleaños de Faraón, el rey
hizo banquete a todos sus sirvientes; y alzó la cabeza del jefe de los coperos, y
la cabeza del jefe de los panaderos, entre sus servidores.
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y
recto, temeroso de Dios y apartado del mal.
1:2 Y le nacieron siete hijos y tres hijas.
1:3 Su hacienda era siete mil ovejas, tres mil camellos, quinientas yuntas de bueyes,
quinientas asnas, y muchísimos criados; y era aquel varón más grande que todos los
orientales.
1:4 E iban sus hijos y hacían banquetes en sus casas, cada uno en su día; y enviaban
a llamar a sus tres hermanas para que comiesen y bebiesen con ellos.
1:5 Y acontecía que habiendo pasado en turno los días del convite, Job enviaba y los
santificaba, y se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de
todos ellos. Porque decía Job: Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado
contra Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días.
El enemigo aprovecha cualquier momento para darle el golpe no le demos lugar al diablo