Misa Asuncion de La - Virgen María
Misa Asuncion de La - Virgen María
Misa Asuncion de La - Virgen María
ORACIÓN COLECTA
PRIMERA LECTURA
Pero apareció también en el cielo otra figura; un enorme dragón, color de fuego,
con siete cabezas y diez cuernos, y una corona en cada una de sus siete cabezas.
Con su cola barrió la tercera parte de las estrellas del cielo y las arrojó sobre la
tierra. Después se detuvo delante de la mujer que iba a dar a luz, para devorar a
su hijo, en cuanto éste naciera. La mujer dio a la luz un hijo varón, destinado a
gobernar todas las naciones con cetro de hierro; y su hijo fue llevado hasta Dios y
hasta su trono. Y la mujer huyó al desierto, a un lugar preparado por Dios.
Entonces oí en el cielo una voz poderosa, que decía: “Ha sonado la hora de la
victoria de nuestro Dios, de su dominio y de su reinado, y del poder de su
Mesías”.
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL
DEL SALMO 18
Escucha, hija, mira y pon atención: olvida a tu pueblo y la casa paterna; el rey
está prendado de tu belleza; ríndele homenaje, porque él es tu Señor. R.
SEGUNDA LECTURA
En efecto, así como en Adán todos mueren, así en Cristo todos volverán a la
vida; pero cada uno en su orden: primero Cristo, como primicia; después, a la
hora de su advenimiento, los que son de Cristo.
EVANGELIO
Entonces dijo María: “Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se llena de júbilo
en Dios, mi salvador, porque puso sus ojos en la humildad de su esclava.
María permaneció con Isabel unos tres meses y luego regresó a su casa.
Palabra del Señor.
1. Para que todos los hijos de la Iglesia, unidos a la gloriosa y santa María,
Madre de Dios, proclamen la grandeza del Señor y se alegren en Dios, su
salvador, roguemos al Señor.
2. Para que la misericordia del Señor llegue a sus fieles de generación en
generación, y todos los pueblos feliciten a aquella en la cual Dios ha hecho obras
grandes, roguemos al Señor.
3. Para que el Señor, con las proezas de su brazo, enaltezca a los humildes,
colme de bienes a los pobres y auxilie a Israel, como lo había prometido a los
antiguos padres, roguemos al Señor.
4. Para que Cristo, el rey ha coronado a María como reina, cuando entregue la
creación al Padre, nos conceda a nosotros, como a María, la posesión del reino
preparado desde la creación del mundo, roguemos al Señor.