La Eclesiología de La "LG" Sobre La Aplicación Del Concilio Vaticano Ii

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LA ECLESIOLOGÍA DE LA "LG" SOBRE LA

APLICACIÓN DEL CONCILIO VATICANO II.

Juan XXIII no había fijado ningún tema concreto para el concilio.


La conferencia episcopal alemana propone como tema la Iglesia.
El obispo Buchberger propone hablar de Dios. Johann Metz, crisis
profunda radica que en la Iglesia hay una crisis de Dios, la crisis de
Dios se cifra eclesiológicamente no solo para la Iglesia sino para
todos. Constitución SC: lo primero es la adoración de Dios. LG: la
misión de la Iglesia es glorificar a Dios. DV: Palabra de Dios que
convoca y renueva a la Iglesia. GS: llevar al mundo a Dios.

Pueblo de Dios, entendida desde el uso político, teología de la


liberación (comprensión marxista). Análisis exegético, Werner:
manifiesta el vínculo entre Dios y su pueblo (dimensión vertical).
Josef Meyer: estructura trinitaria, la Iglesia existe como
instrumento de Dios para reunir a todos los hombres, Dios será
todo en todos. Sínodo extraordinario 1985, proponen la
eclesiología de comunión (1 Jn 1, 3). Comunión desde el carácter
teológico, cristológico, histórico-salvífico y eclesiológico.
Eclesiología de comunión es eclesiología eucarística. Comunión
une el discurso de la Iglesia con el de Dios. Posteriormente la
palabra comunión se desnaturaliza en una horizontalización,
reduciendo a una tensión entre Iglesia Universal y Particular. Se
plantea un Igualitarismo. Congregación Doctrina de la Fe 1992, la
Iglesia universal es una realidad ontológica y temporalmente
previa a cada concreta Iglesia particular. Énfasis en la cristología,
Dios prepara la Esposa (Iglesia) del Hijo.

El ver la Iglesia como organizaciones humanas es abandonar la


eclesiología de la Sagrada Escritura y patrística. Cartas
deuteropaulinas y Ap muestran la prioridad ontológica de la Iglesia
universal con respecto a las Iglesias Particulares. La Congregación
de la Doctrina de la Fe propone la imagen lucana del nacimiento de
la Iglesia en Pentecostés por obra del Espíritu Santo. Los Doce no
son miembros de una Iglesia local, son el antiguo y nuevo Israel de
Dios. La iglesia naciente habla en todas las lenguas e incluye a la
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tabla de los doce pueblos uno más que son romanos (idea de orbis).
Kasper se distancia de este presupuesto. La cuestión no es saber
exactamente dónde y cuándo surgen por primera vez las
comunidades cristianas sino el inicio interior de la Iglesia en el
tiempo.

La idea de Iglesia universal que tiene el CV II no es aquella que la


considera como una realidad cerrada en sí misma sino que la ve a
partir de Cristo. Eclesiología depende de la Cristología, y versar de
ella a partir de la realidad trinitaria. Existen diversas imágenes de
la Iglesia que la representan como única Iglesia. El bautismo no
deriva de la comunidad concreta sino que abre la puerta a la única
Iglesia. Hablar de bautismo es hablar de la Palabra de Dios, la cual
convoca y edifica a la Iglesia.

En la Eucaristía no solo es para la Iglesia local sino que se realiza


la inserción en el único cuerpo de Cristo en una comunión
universal, en ella también se ve necesario el sacramento del
servicio del orden sacerdotal. La sucesión apostólica implica el
aspecto sincrónico y diacrónico del concepto de la Iglesia:
pertenecer y estar en comunión. Ministerio episcopal entendido
desde el concepto de colegialidad (unidad). El obispo representa en
la Iglesia local a la única Iglesia.

La única Iglesia de Cristo subsiste en la Iglesia Católica. Boff


propone que la única Iglesia de Cristo, al igual que subsiste en la
Iglesia Católica, de la misma forma subsiste en las otras Iglesias
cristianas (relativismo eclesiológico fundado en el Jesús histórico).
La tradición católica confía en los evangelistas (sacramento de la
última cena). La institucionalidad no es una simple estructura
cambiante sino que se fundamenta en la realidad sacramental,
profesión de fe y sucesión apostólica. La auténtica interpretación
del “Subsistit” radica que la Iglesia de Jesucristo existe realmente,
Él mismo la quiso, el Espíritu Santo la guía y sostiene en su
identidad esencial. La institucionalidad pertenece a la realidad
concreta de la Encarnación. Por otra parte, la diferencia entre
“Subsistit” (hypóstasis, la Iglesia de Jesucristo como sujeto
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concreto en este mundo se encuentra en la Iglesia Católica, expresa
la singularidad y no la multiplicabilidad) y “est” subyace todo el
problema ecuménico y la división eclesial. Existen realidades
eclesiales, iglesias locales y diversas comunidades. El “Subsistit”
es obra de Dios.

El CV II declara que el ecumenismo es un deber como búsqueda


de la verdadera unidad. La Iglesia existe para convertirse en
morada de Dios en el mundo. Por su parte, la inserción de la
mariología dentro de la eclesiología se orienta al conjunto de la
constitución. Rahner, la Iglesia es virgen y madre, concebida sin
pecado, lleva el peso de la historia, sufre y está elevada al cielo. Se
desarrolla lentamente que la Iglesia es anticipada en María, María
entraña todo el misterio de la Iglesia. La visión mariana de la
Iglesia y la visión eclesial, histórico-salvífica, de María nos llevan
en definitiva a Cristo y al Dios trino.

Card. JOSEPH RATZINGER


Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe

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