Sesión de Autoestima
Sesión de Autoestima
Sesión de Autoestima
Para que el lector pueda apreciar cómo anda en cuanto su autoestima, deberá escribir
una V de verdadero o una F de falso en la línea que hay después de cada frase,
reflejando al contestar la manera como piensa habitualmente:
8.-¿Qué es lo que más les gusta de ti a los miembros del sexo opuesto. (Cualidad o
logro)?
YO SOY
En el mundo no hay nadie como yo,
Hay personas que se parecen, que reconozco,
Pero nadie es igual a mí,
Así, lo que hago, lo que yo digo, es verdaderamente mío,
Porque sola (o) lo escogí, Sola (o) me elegí... Soy mi dueña (o).
Soy responsable
De lo que siento y de lo que pienso.
(VIRGINIA SATIR)
Querido yo, merezco que me trates mejor. Aprovecharé esta ocasión en que estás
frente al espejo para decirte cómo me haces sentir. ¿Alguna vez te has parado a
pensar que lo que me dices te lo dices a ti mismo?
He tolerado toda clase de cosas, desde descalificaciones hasta críticas . ¿Por qué
eres tan poco amable conmigo?, ¿acaso te has olvidado de que somos la misma
persona?
Quiero que sepas que esta no es una carta de reclamo. Querido yo, para eso te
bastas solo. Lo que quiero lograr con esta carta es que entiendas que tienes
muchas cosas que no ves. Deja de prestar atención solo a lo que nos daña.
Deja de autocompadecerte
Querido yo, ¡la cantidad de veces que te he escuchado quejarte de mí, es inmensa!
No muestras mucho respeto por lo que somos. La autocompasión parece ser uno
de tus deportes favoritos y ni siquiera te permites ver lo bueno que tenemos.
Tan solo vas por la vida preguntándote por qué no tienes lo que mereces. ¿Has
pensado que tienes más de lo que valoras? Me gustaría que por un momento te
pararas frente al espejo y en lugar de criticar tu nariz o tu barriga agradecieras por
las piernas que te dejan moverte.
Quizás no lo veas así, pero autocompadecerte no te ayuda a lograr nada. Si al
menos fuese una crítica constructiva que te obligase a hacer algo, valdría la pena.
Rétanos
¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo que creías que no lograríamos? Querido
yo, a veces pienso que de verdad no me conoces. Temes ponerte nuevos retos
porque temes fracasar. Lo irónico es que ya fracasaste cuando te convences de
que no lo lograremos.
No importa de qué se trate, quiero que me retes a ir más allá. Rompamos límites y
alcancemos nuestros sueños . Trato de decírtelo a través de anhelos y esperanzas
pero tú solo respondes pensando en la realidad.
¿Me puedes decir qué es la realidad? Porque así como lo veo, la realidad es solo
aquello que te permites aceptar. ¡Déjame demostrarte todo el potencial que tienes!