Ley de Arbitraje Comercial
Ley de Arbitraje Comercial
Ley de Arbitraje Comercial
Artículo 7º. El tribunal arbitral está facultado para decidir acerca de su propia
competencia, incluso sobre las excepciones relativas a la existencia o a la validez del
acuerdo de arbitraje. A ese efecto el acuerdo de arbitraje que forme parte de un contrato se
considerará como un acuerdo independiente de las demás estipulaciones del mismo. La
decisión del tribunal arbitral de que el contrato es nulo no conlleva la nulidad del acuerdo
de arbitraje.
Artículo 8º. Los árbitros pueden ser de derecho o de equidad. Los primeros deberán
observar las disposiciones de derecho en la fundamentación de los laudos. Los segundos
procederán con entera libertad, según sea más conveniente al interés de las partes,
atendiendo principalmente a la equidad. Si no hubiere indicación de las partes sobre al
carácter de los árbitros se entenderá que decidirán como árbitros de derecho. Los árbitros
tendrán siempre en cuenta las estipulaciones del contrato y los usos y costumbres
mercantiles.
…..
Artículo 5º. El "acuerdo de arbitraje" es un acuerdo por el cual las partes deciden
someter a arbitraje todas o algunas de las controversias que hayan surgido o puedan surgir
entre ellas respecto de una relación jurídica contractual o no contractual. El acuerdo de
arbitraje puede consistir en una cláusula incluida en un contrato, o en un acuerdo
independiente. En virtud del acuerdo de arbitraje las partes se obligan a someter sus
controversias a la decisión de árbitros y renuncian a hacer valer sus pretensiones ante los
jueces. El acuerdo de arbitraje es exclusivo y excluyente de la jurisdicción ordinaria.
Artículo 19. Aceptado el cargo por cada uno de los árbitros, se instalará el tribunal
arbitral y se notificará a las partes de dicha instalación. En el acto de instalación se fijarán
los honorarios de los miembros del tribunal, así como la suma que se estime necesaria para
gastos de funcionamiento. Las partes podrán objetar cualquiera de los montos antes
señalados, dentro de los cinco (5) días hábiles siguientes a la notificación de la providencia
que los fijó, mediante escrito en el que expresarán las sumas que consideren justas. Si la
mayoría de los árbitros rechaza la objeción, el tribunal arbitral cesará en sus funciones.
Los árbitros dictan las medidas cautelares según su prudente arbitrio, con
arreglo a su leal saber y entender, sin estar sujetos a previa determinación legal 39. En
efecto, el artículo 26 de la LAC establece que "salvo acuerdo en contrario de las
partes, el tribunal arbitral podrá dictar las medidas cautelares que considere
necesarias". Igualmente, establece esta disposición legal, que el "tribunal arbitral
podrá exigir garantía suficiente de la parte solicitante". En este orden de ideas, es
importante recordar que conforme al artículo 23 del CPC cuando la Ley dice: "El
Tribunal puede o podrá", se entiende que 10 autoriza para obrar según su prudente
arbitrio, consultando 10 más equitativo o racional, en obsequio de la justicia y de la
imparcialidad.