Conservemos Lo Que Tenemos
Conservemos Lo Que Tenemos
Conservemos Lo Que Tenemos
No cabe duda de que existen hombres que pueden sentirse afortunados ya que tienen:
Dos brazos.
Dos piernas.
Dos pies.
Dos manos.
Lo que es más, todas esas cosas están en buenas condiciones y así desean mantenerlas.
Cuando a una persona le falta una parte del cuerpo o no puede usarla apropiadamente, se le llama
lisiado, inhábil, es un hombre con desventaja frente a la vida.
En las carreras de caballos a veces uno lleva un peso muerto extra (lo que se conoce como un
handicap), que es la desventaja dándole con esto oportunidades mejores a sus competidores para
ganarle. En el billar un jugador da un número de carambolas extras para que otros puedan
ganarle. Juega con desventaja.
En la vida, tener la desventaja de unos dedos menos o una pierna lisiada, ser ciego o sordo, es algo
que hace todo el negocio de vivir y de trabajar más difícil y más rudo. Es colocarse un peso muerto
extra (un handicap), es como dar un gran número de carambolas en un partido de billar.
Algunas personas con ciertas desventajas hacen grandes cosas, pero esta gente tiene que trabajar
más fuerte que el resto para cumplir su cometido.
No hay nada en las operaciones de trabajo que necesite causar accidentes que dejen hombres o
mujeres inhábiles. Pero no hay ninguna clase de trabajo en el cual no puedan ocurrir accidentes
que puedan lisiar a alguien.
La más leve cortada puede infectarse a menos que se cure inmediatamente, y una infección fuerza
al médico a cortar un dedo o la mano o el pie infectado. Un ojo se daña fácilmente, aún el
pedacito más pequeño de metal o chispa de esmeril o de polvo puede perjudicarlos. Lo mismo
pasa con los ácidos y otros químicos. Por eso que algunas operaciones requieren protección en los
ojos: para evitarle al trabajador la grave desventaja de la ceguera.
Los accidentes que producen incapacidades permanentes: caídas, quemaduras, etc, pueden
ocurrir en el trabajo o en la casa. Ninguno de ellos es particular de la planta ni tampoco de la casa.
Pero pueden suceder y suceden. De tal manera que si se quieren evitar las incapacidades, se debe
aprender a caminar con seguridad, respetar las cosas que puedan quemar o explotar, mantener
los ojos abiertos al tráfico, ya sea en las calles o en corredores de la planta.
Y no hay que olvidar que una lesión puede causar una cicatriz en esa linda cara o provocar un
impedimento en su habilidad para bailar.
Nadie quiere ser un lisiado, un inhábil para el resto de su vida. De tal manera que se deben evitar
los accidentes, trabajando juntos en forma sana y segura.