Pensamiento Crítico Latinoamericano: Volumen

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Volumen I

PENSAMIENTO
CRÍTICO
LATINOAMERICANO
Conceptos Fundamentales

Ricardo Salas Astrain


Coordinador Académico

EDICIONES UNIVERSIDAD CATÓLICA SILVA HENRÍQUEZ


2005
BIBLIOTECA DIGITAL

TEXTOS SOBRE BOLIVIA

CONSTITUCIONES BOLIVIANAS, CONSTITUCIONALISMO IBEROAMERICANO,


LA ÚLTIMA ASAMBLEA CONSTITUYENTE 2006 - 2009, HISTORIA
PARLAMENTARIA E INTELECTUALES

FICHA DEL TEXTO

Número de identificación del texto en clasificación Bolivia: 4854


Número del texto en clasificación por autores: 23580
Título del libro: Pensamiento crítico latinoamericano. Volumen I. Conceptos
Fundamentales
Autor (es): Ricardo Salas Astrain (coordinador)
Editor: Ediciones Universidad Católica Silva Henríquez
Derechos de autor: ISBN: 956-7947-31-7
Año: 2005
Ciudad y País: Santiago de Chile – Chile
Número total de páginas: 346
Fuente: https://ebiblioteca.org/?/ver/10901
Temática: Intelectuales
Consejo Editorial Ediciones UCSH 2005

Profesora Lucía Araya


Profesora Ana María Álvarez
Profesora Carmen Rosas
Profesor Gonzalo Miranda
Profesor José Albuccó
Profesor Mario Silva
Profesor Jaime Labra, Presidente
Profesor Manuel Loyola, Secrrtario Ejecutivo

Secretaria: Sra. Andrea Aravena

© Ediciones UCSH

Primera Edición, Mayo 2005

Obra General
ISBN 956-7947-31-7

Vol. I
ISBN 956-7947-32-5

Registro Intelectual Nº 146.549

General Jofré Nº 396. Santiago de Chile.


Teléfono 56 2 665 27 20 anexo 653 - 663
e-mail: [email protected]
web: www.ucsh.cl

Imagen de portada fragmento de "Amanecer en Cautín" de José Vemurelli ( I 971)


tomada del libro "Hoy es todavía, José Venturelli, una biografía·· de
Luis Al heno Mansilla. LOM Ediciones, 20lB

Ninguna parte de esta ohra, incluyendo el discllo de !a cubierta, puede ser reproducida, almacenada o
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Diseño y diagramaciún: Lucía Salvatierra


Impreso en LOM Ediciones
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Dr. Jan Van Nieuwenhove, (Holanda)

Dr. Michele Pallotini (Italia)

Dr. Raúl Fornet-Betancourt (Alemania)

Dr. Gonzalo Díaz Díaz (España)

Dra. M. Christine Morkovsky CDP (EEUU)

(t) Dr. Leopoldo Zea (México)

Dr. Enrique Dussel (México)

Dr. Arturo Andrés Roig (Argentina)

Dr. Eduardo Devés (Chile)

Dr. Sirio López (Brasil)

Secretaría académica chilena:

Dr. Cristián Parker (USACH y CERC -U.A.H.C., Santiago de Chile)

Dr. Ricardo Salas (UCSH y CERC - U.A.H.C, Santiago de Chile)


- - --- ------- - - -
ÍNDICE

PRESENTACIÓN ................................................................................ 9

ALTERIDAD
(Antonio Sidekum-Brasil) ..................................................... 19

ANTROPOLOGÍA
(Manoel Castelo Branco-Brasil) ............................................ 29

CAPITALISMO Y SOCIALISMO
(Franz J. Hinkelammert-Costa Rica) ..................................... 39

CONCIENCIA CRÍTICA-CONCIENTIZACION
Qoao Libanio-Brasil) ............................................................. 53

CONTRADICCIÓN-CONFLICTO
(Alberto Parisi-Argentina) ..................................................... 63

CULTURA
( Cristián Parker-Chile) .......................................................... 79

CULTURA POPULAR
(Eduardo Santa Cruz-Chile) ............................................... 101

DEMOCRACIA
(Carlos Ruiz-Chile) ............................................................. 115

DERECHO ALTERNATIVO
(Manueljacques-Chile) ...................................................... 125

DERECHOS HUMANOS
(Pablo Salvat-Chile) ........................................................... 135

DESARROLLO
(Antonio Elizalde-Chile) ..................................................... 153

-5-
DIALÉCTICA
(Freddy Salazar - Colombia) .............................................. 167

DIALÉCTICA DESAPARECEDOR / DESAPARECIDO


( Roberto Fragomcno - Costa Rica) ................................... I 79

DIFERENCIA
(Alberto Parisi- Argentina) ................................................. 189

DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL


(Jorge Vcrgara-Chile) .................. .. .. .... 201

ECOLOGÍA
(Guillermo Kcrber-Suiza) ................................................... 217

EDUCACIÓN LIBERADORA
(Juan Edo. García Huidobro-Chile) ................................... 227

ENSAYO
(Fernando Ainsa-España) .................................................. 239

EPISTEMOLOGÍA
(Jorge Vergara Estévez-Chile) .............................................. 267

ÉTICA
(Luis José González Alvarez-Colombia) ............................. 293

ÉTICA APLICADA
(Jovino Pizzi-Brasil) ........................................................... 301

ÉTICA DEL DISCURSO


(Hans Schelkshorn-Austria) ............................................... 315

ÉTICA SOCIAL
(Adriana Arpini-Argentina) ................................................ 32 7

ETN O-EUROCENTRISMO
(José Santos - Chile) .......................................................... 341

FEMINISMO
(Ana María Portugal - Perú) ............................................... 355

REFERENCIAS DE AUTORES ....................................................... 361

-6-
PRESENTACIÓN

l. ¿Existe un Pensamiento Crítico en América Latina?

Hace más de tres décadas, el fi- racionalidades hermenéuticas, entre


lósofo peruano Augusto Salazar Bondy otras, la de las Ciencias Sociales, de
titulaba una pequeña obra en forma la Filosofía y de la Teología latinoa-
de pregunta; se planteaba ¿Existe una mericanas
filosofía de Nuestra América?. Esta pre-
gunta ha sido formulada de diferentes Si se quiere responder la pre-
maneras, y en esta obra se encuentran gunta inicial del párrafo anterior,
las pluriformes respuestas que se han todos los resultados de estas investi-
dado a esta cuestión en el curso de gaciones disciplinarias que iniciaron
estos treinta últimos años. Pero, esta un creciente diálogo y apertura a la
interrogante también podría ampliarse compleja realidad de nuestras tierras
al conjunto del pensamiento latino- mestizas, son la mejor y palmaria
americano. Cualquiera sea la alternati- respuesta. De este modo, esta obra
va que propongamos para responder a colectiva Pensamiento Crítico Latino-
esta pregunta inicial, puede ayudarnos americano, Conceptos fundamentales
a responder una segunda cuestión es un intento por demostrar la rique-
referida al conjunto del pensamiento za epistemológica de los diferentes
latinoamericano: ¿existe un tal pensa- ángulos que asumen los problemas
miento?, ¿cuáles son sus tradiciones socio-culturales y políticos que carac-
reflexivas y críticas?; este pensar, ¿se terizan a Nuestra América; asimismo,
encuentra proyectado en el actual son parte de una postura ético-política
debate epistémico e ideológico?. Sin por la que el ejercicio crítico de aná-
intentar bosquejar una respuesta a lisis que se da en la mayor parte de
partir de los resultados de las épocas los países de la región, permite que
anteriores, nos parece que bastaría surjan investigaciones y estudios que
considerar la rica y contemporánea abordan pertinente y críticamente la
productividad intelectual, vinculada realidad social y cultural de América
a tradiciones propias y perspectivas Latina, incentivando a los intelectua-
multidisciplinarias, para esbozar una les a que asuman su responsabilidad
respuesta positiva acerca de la existen- frente al mundo que les rodea.
cia compleja y variada del pensamien-
to latinoamericano actual. Este pensar Problematizando reflexiva-
se expresa, entonces, en las diversas mente esta compleja realidad socio-

-9-
cultural, no sólo han surgido múl- pensamiento cuestionador requiere
tiples y más apropiadas categorías asegurar las formas de justificación de
que ya no son meras repeticiones o su propia aproximación. En segundo
modas de otros contextos culturales, lugar, este adjetivo también llama la
sino que también se han construido atención respecto de problemáticas
teorías interdisciplinarias acordes a la multidisciplinarias y de cruces cate-
complejidad de las experiencias his- goriales que eventualmente no forman
tóricas y socio-culturales específicas: parte de la matriz epistemológica
teorías acerca de la dependencia, teo- específica que las ha puesto en uso,
rías acerca de la lucha socio-política, sino a los modos que asumen en los
teorías del mestizaje y, finalmente se programas de investigación. No se
han propuestos sugerentes intuiciones trata, entonces, de contraponer "un
teórico-prácticas en vistas a com- pensar crítico" a las formas "ingenuas"
prender y explicar las especificidades de aprehensión de la realidad, sino un
contextuales como resultado de nues- ejercicio que devela las limitaciones de
tras comunes historias y de los entre- las perspectivas disicplinarias y apun-
cruzamientos de las raíces culturales ta a ejercer un cierto control y valida-
constitutivas, pero sobre todo de un ción de las categorías utilizadas por el
complejo entramado de eticidades de trabajo intelectual del continente. Por
protesta y de resistencia. último y, consecuencia de lo anterior,
se trata de un pensar que cuestiona las
En esta obra sobre el Pensa- formas discursivas veladas o encubier-
miento Crítico Latinoamericano tas, tan propias de los ideologías de la
Contemporáneo se busca exponer dominación, del cinismo imperante y
el fecundo trabajo realizado en las de la negación del otro.
últimas décadas por pensadores e
investigadores de muchos países. Es Por su parte, al agregar el
preciso reconocer que es un esfuerzo complemento latinoamericano, pre-
mancomunado de instituciones, redes tendemos relevar un hecho que nos
intelectuales y asociaciones por dar a resulta elocuente: este énfasis no se
conocer los trabajos de reconocidos da por el sólo hecho de nacer o vivir
pensadores e intelectuales que discu- en América Latina, sino para destacar
ten categorías y enfoques acerca de una intencionalidad epistemológica
temáticas de esta tradición latinoa- que tiene, en este marco geocultural,
mericana crítica, preocupada por deli- el anclaje vital de sus preocupaciones.
mitar, en forma epistemológicamente Estos volúmenes son el aporte de una
rigurosa, tanto los cambios sociales y comunidad intelectual y humana cuyo
culturales como su sentido. interés es trabajar en conjunto, del
aprendizaje recíproco y de avanzar en
El hecho de adjetivar, en estos la comprensión del complejo devenir
tiempos de des-encanto, de crítico de las sociedades latinoamericanas.
el pensamiento puede parecer con- En este marco consideramos decisi-
troversial, pero queremos seguir una va la contribución de intelectuales
propuesta conocida en la tradición europeos que nos han aportado su
filosófica moderna: que apunta, en perspectiva para configurar un pensar
primer lugar, a precisar que todo con claras pretensiones universalistas,

-1 O-
las cuales se hallan implícitas en varias ración de la pobreza. En este sentido,
de las categorías que conforman el el problema de una filosofía y de un
hábeas de estos volúmenes. pensamiento como perspectiva de la
liberación, va más allá de los acuerdos
En efecto, y no estará demás o desacuerdos de cada una de sus
recalcarlo, desde los primeros even- proposiciones teórico-prácticas que
tos filosóficos de los años '70 hasta le dieron origen en un país específico,
la fecha, se han consolidado ciertas y consideramos que ya son parte de
posiciones filosóficas y políticas, y se una tradición intelectual enraizada
han consagrado autores que han al- en una historia de prácticas e ideas
canzado una producción significativa emancipadoras que, de un modo u
que se difunde y circula más allá de otro, se ven igualmente reflejadas en
América Latina. Un hito fundamen- los presentes volúmenes.
tal en esto es el representado por la
llamada filosofía de la liberación, la
cual fue desarrollada inicialmente por 2. Las categorías
autores argentinos. Otras propuestas
filosóficas permitieron también la ac- Las categorías y temáticas
tiva participación de intelectuales de aquí reunidas, expresan el fecundo
otros países, quedando de manifiesto despliegue del pensamiento latino-
que el problema teórico-practico de americano en estas últimas décadas y
la emancipación es parte no sólo del demuestran la particular sensibilidad
esfuerzo de tal filosofía, sino a la vez, del mundo académico para asumir sus
de muchos programas de investiga- propias formaciones disciplinarias de
ción y de las variadas disciplinas que cara a las transformaciones vividas y
conforman las ciencias humanas y sufridas por nuestro continente en los
sociales. De esta suerte, la filosofía diferentes ámbitos de su vida social y
como perspectiva de liberación ha política. Asimismo, ellas demuestran
involucrado a especialistas de variada la búsqueda intelectual con el pro-
índole y con intereses epistémicos pósito de desarrollar otras teorías y
y ético-político diversos, como es modelos para imaginar nuevos rum-
posible constatar en los contenidos bos en tiempos de incertidumbre y de
tratados en las diferentes reuniones aparente inmovilismo social.
internacionales que se han convocado
en las últimas tres décadas. Lo significativo en este pro-
yecto editorial radica en el trabajo
Algunos filósofos y cientistas exhaustivo y riguroso, que los auto-
sociales reunidos aquí, tienen plan- res se han dado para establecer los
teamientos clara y explícitamente contornos del debate, mostrando sus
innovadores; otros en cambio, cues- estructuraciones teóricas, señalan-
tionan temáticas específicas y de-velan do las diferencias que existen con
presupuestos que no conforman un planteamientos de otros autores de la
pensamiento políticamente eman- comunidad científica. Esta perspectiva
cipador, solo asumen la diversidad permite mostrar la fecunda heteroge-
de las formas socioculturales en la neidad en el uso de los términos y de
reivindicación de la identidad y supe- sus significaciones. Esta ambivalencia

-11-
y diversidad conceptual no se disimu- luego, la gran cantidad de autores
la ni se encubre, sino que se explicita importa una complejidad importante
como una forma de maduración del en materias de comunicaciones y co-
pensamiento regional. ordinaciones. A su vez, este proyecto
se desarrolló en la difícil -y a veces
A partir del camino trazado se tormentosa- vida de los claustros y
busca exponer nociones, categorías y centros de investigación <le América
conceptos más difundidos y aludidos Latina, en medio de realidades socio-
por el pensamiento y la filosofía lati- políticas y culturales caracterizadas por
noamericana, sin que ello implique sus permanentes controversias, ruptu-
caer en una postura re<luccionista. Si ras y cambios. Muchos de los autores
bien se hace hincapié en un examen se fueron conociendo por intermedio
filosófico de las temáticas, nuestro de otros colegas y en el intercambio de
propósito permanente ha sido el de re- sus publicaciones. En los últimos años
coger, en alguna medida, la discusión hemos vivido no sólo el nomadismo
interdisciplinaria y transdisciplinaria propio de la actividad intelectual la-
que está presente en la actual inves- tinoamericana, sino además, las peri-
tigación filosófica de la región, la que pecias histórico-políticas de nuestros
por cierto, está abierta a los aportes países. Aunque sea una situación
del conjunto de las ciencias humanas anecdótica, hemos pasado de una dé-
y sociales. De este modo, esta obra, a cada donde nos hemos comunicado a
la par con asumir aspectos importan- través de cartas manuscritas y trabajos
tes de la discusión sobre la sociedad mecanografiados, a otra sustentada en
latinoamericana, su identidad y sus la velocidad de los correos electrónicos
cambios, posee como correlato la y de los documentos "adjuntos".
evidencia de otros tantos cambios que
han experimentado en el transcurso Pero, por sobre lo anterior, esta
de las últimas décadas, las ciencias obra se sostuvo en el tiempo gracias
humanas, en general, y la filosofía la- a la dedicación y fraternidad de mu-
tinoamericana, en particular. Se trata, chos de nuestros colegas con quienes
en definitiva, de un planteamiento hemos compartido los esfuerzos por
epistemológico y ético <le fondo que diagnosticar la realidad social, cultu-
aspira a una comprensión cuestiona- ral y disciplinaria que nos atañe en
dora de la realidad social, que devele diversas reuniones convocadas por El
las categorías en uso y las grandes Corredor de las Ideas del Cono Sur, la
tensiones y contradicciones existentes Sociedad Sudamericana de filosofía
en las formas de comprensión de los Intercultural y los Encuentros <le los
mismos problemas que nos suscita la Grupos <le Discusión por Áreas. Es
realidad social. decir, las redes virtuales y presenciales
fueron consolidando los intercambios,
cruces y desarrollos <le nuestras ideas.
3. Algunos avatares Hoy sabemos que se realizan muchos
más Encuentros y Seminarios inter-
No hay proyecto editorial serio nacionales que tienen por temática
que no tenga sus complicaciones, y central aspectos regionales y conti-
éste no ha siclo la excepción. Desde 1 nentales de América Latina.

-12-
En este sentido, esta obra es ultranacionalismos que nunca han
producto de los nuevos tiempos de favorecido a nuestros pueblos.
"integración regional y continental"
en que muchos académicos e investi-
gadores de diferentes países van inte- 4. La presente Obra
grándose en redes de trabajo intelec-
tual, en las que se discuten temáticas Pensamiento Crítico Latinoame-
internacionales comunes y donde ricano, Conceptos Fundamentales, es el
académicos y estudiantes participan resultado de varios esbozos y tenta-
en programas de post-grado en países tivas, ideas y vivencias compartidas;
vecinos sobre problemas latinoameri- es la conclusión, en fin, de tiempos,
canos; surgen redes de investigadores espacios y reflexiones lentamente
articulados en torno a instituciones, macerados y decantados.
disciplinas y temas comunes; en algu-
nas disciplinas, estos espacios ya están En sus orígenes, necesaria-
en plena consolidación; en otras, se mente, debemos rememorar que su
dan los primeros pasos en medio de ideación emanó a partir de varios diá-
no pocas dificultades. logos, debates y estudios acerca de la
filosofía latinoamericana realizados en
En síntesis, esta obra es parte el Seminario de Filosofía en América
del trabajo mancomunado de profe- Latina del Instituto Superior de Filo-
sores y profesoras universitarias que sofía de la Universidad de Lovaina,
comparten sus preocupaciones teóri- entre los años 1987 y 1989. En ellos
cas por lo cultural y lo político, con participaron, en diversas formas y
el doble propósito de alcanzar tanto momentos,José Maria Aguirre, André
resultados epistemológicos válidos en Berten, Sirio López, Raúl Fornet-Be-
sus labores específicas, como propen- tancourt, Luiz Leite, Víctor Méndez,
der a la integración y a la cooperación y otros más, correspondiendo al sus-
intelectual de países y comunidades. criptor de esta nota de presentación,
Esta obra que se ve alentada por la tarea de coordinación académica
el espíritu de integración regional de los temas y debates. A pesar de
y sub-regional que ya ha generado las dificultades creadas por nuestros
formas de integración política y respectivos regresos, idas y venidas
económica como el MERCOSUR, en por la región y fuera del continente,
nuestros días se abre a una realidad se mantuvo el interés y la necesidad
más esperanzadora como, por ejem- de pensar colectiva y solidariamente a
plo, la propuesta de una Comunidad la región. Durante estos años, ha sido
Sudamericana de Naciones. Nos fundamental el apoyo del Centro de
parece asimismo que en la medida Estudios de la Realidad Contemporá-
que nuestras sociedades inicien los nea, ( CERC-Universidad Academia de
preparativos acerca de la fecha sim- Humanismo Cristiano), y la Universi-
bólica del Segundo Centenario de dad Católica Cardenal Silva Henríquez
la Independencia, surgirán muchas (UCSH), de Santiago de Chile.
iniciativas, trabajos y propuestas de
integración socio-económica y polí- Como resultado parcial de lo
tica que disminuirían los peligros de realizado, tras casi una década de

-13-
trabajo, la UCSH publicó una versión corrientes y autores latinoame-
preliminar de esta obra en el Boletín ricanos que han aportado a la
de Filosofía Nº9, correspondiente al categoría.
año editorial 1997-1998. Esta publi-
cación tuvo una rápida difusión en IV Delimitación conceptual:
el Primer Corredor de las Ideas en la donde se plantea argumen-
ciudad de Maldonado (Uruguay), y , talmente la discusión que el
se agotó completamente a fines del investigador ha recogido y re-
2002. Surgió, obviamente, el inte- sume una perspectiva discipli-
rés por reeditarla y al discutirse la naria del concepto estudiado.
nueva edición, se consideró que era
pertinente hacer algunas correccio- V Bibliografía: donde se citan
nes y ampliaciones de los trabajos, las principales obras y tra-
incorporándose nuevos conceptos bajos que permitan al lector
y actualizándose otros a fin de que orientarse o documentarse más
respondieran a problemáticas y ampliamente sobre la materia
realidades emergentes. En conse- expuesta.
cuencia, lo que el lector ahora tiene
ante su vista, corresponde a la labor Debemos advertir, sin embar-
de revisión, ajustes y actualización go, que en algunos casos, por razones
hecha por los autores originales, más de estilo, el investigador no explicitó
la participación de nuevas voces que, rigurosamente cada una de las partes
en el transcurso de los años 2003 antes señaladas. Los editores de esta
y 2004, han aportado al enriqueci- obra han respetado estas opciones
miento de este acervo editorial de particulares, manteniendo intactos
76 conceptos. tanto los aspectos de redacción como
de contenido de cada uno de los
De acuerdo a las pautas de conceptos.
redacción exigidas a cada autor,
cada categoría conforma un artí- Agradecemos la contribución
culo compuesto de las siguientes inestimable de todas las personas que
partes: trabajaron en las distintas fases de la
producción (traducción, transcrip-
l. Referencias claves: donde se ción y ordenamiento). En particular,
exponen expresiones analíticas destacamos el trabajo dactilográfico de
relevantes tanto del propio artí- Angélica Crooker y Ana María Salinas;
culo como las categorías relacio- el trabajo de corrección de Ignacio Zen-
nadas que puedan consultarse Leno; y las traducciones del portugués
en el conjunto de la obra. al español de los profesores Freddy
Parra y Francisco Troncoso; del italiano
11. Introducción: donde se resu- al español, de P. Giovanni Carraro SDB
me una parte importante de la y j.Galgani; y del alemán, por Mario
problemática desarrollada. Berríos, lamentablemente fallecido.

111. Delimitación histórica: don- Agradecemos la valiosa colabo-


de se exponen las principales ración de los autores de cada uno de

-14-
los textos, reconociendo la destacada en especial a M. Ríos y C. Valdes y
ayuda de todos los profesores y pro- al apoyo brindado por el Dpto. de
fesoras, chilenos, latinoamericanos y Filosofía y Humanidades de la Uni-
europeos que, a través de su perma- versidad Alberto Hurtado. Asimismo,
nente estímulo y apoyo, generaron destacamos el eficiente trabajo de la
la sinergia que se requería para la Sección de Ediciones UCSH, el cual
organización de esta obra volumino- lo asumió como proyecto editorial de
sa. Finalmente, un agradecimiento al alcance continental. A cada uno de
Equipo de la Unidad de Filosofía de la ellos, personas e instituciones, nues-
Universidad Católica Silva Henríquez tros sinceros agradecimientos.

Dr. Ricardo Salas Astrain


Coordinador Académico

Santiago de Chile, marzo 2005

-15-
CONCEPTOS
ALTERIDAD
Antonio Sidckum
Brasil

, - - - - - - - - - - - PALABRAS CLAVE - - - - - - - - - - ,
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - FILOSOFÍNTEOLOGÍA
- METAFÍSICA-ONTOLOGÍA - RACIONALIDAD - ÉTICA - ÉTICA DEL
DISCURSO - ANTROPOLOGÍA - PUEBLO - SUJETO - DIFERENCIA

INTRODUCCIÓN el "otro" en América Latina no sería


una categoría a-histórica o abstracta,
sino el que está más allá de un sistema
La traducción de este término opresor*: el oprimido, llámese indio,
ha merecido una polémica en el pen- campesino sin tierra, el marginal de
samiento hispano. Lain Entralgo 1 ha las periferias de los grandes centros
propuesto el neologismo "otredad" urbanos, el desempleado, el pobre del
como derivación válida de "otro". pueblo que clama por la justicia, es
Pensadores latinoamericanos siguen decir aquél que nos interpela teórica y
la tendencia francesa y acuñan a su prácticamente desde su miseria.
vez el neologismo "alteridad" como
derivación del latín alter. Seguimos
aquí esta segunda tradición. Uno de DELIMITACIÓN
los pensadores que más ha influido en HISTÓRICA
este pensar de los años 70 es el filósofo
francés E. Levinas.
Hablar de alteridad significa, an-
Levinas rompe con la tradición tes que nada, incluir la ética en el pensar.
filosófica occidental, al introducir en La relación para con el otro se realiza
su reflexión las categorías de "rostro en la forma de bondad, que se llama
del otro", la alteridad como el princi- justicia y verdad y que se concretiza his-
pio de la filosofía. A través de los con- tóricamente en una infinita experiencia
ceptos de alteridad y de exterioridad de trascendencia, como solidaridad y
somos llevados al punto central de la responsabilidad por el otro.
filosofía de la ética de la alteridad: la
experiencia por la liberación del otro Las categorías bíblicas: el huér-
que se encuentra en la injusticia. Pero, fano, el pobre, la viuda y el extranjero,

* El autor hace alusión a la categ01ría levinesiana del Otro, el que nos interpela
con su mirada, y no se reduce a una situación social y política. Retomando la
interpretación de Dussel, es el otro que estcí mcís allá de la contingencia.

-19-
ALTERIDAD

utilizadas en la filosofía de Levinas, !ación del otro. La tradición de la


reciben una concreta significación y filosofía latinoamericana de liberación
destino en la filosofía de la liberación. está profundamente enraizada en la
El otro es el oprimido. La revelación experiencia de la historia del éxodo
de este otro exige la praxis liberadora y de la resurrección y con esto ella se
correspondiente. manifiesta comprometidamente con
la tradición crítica.
A este otro no se le podrá negar,
ni dejar de tomar en cuenta, a partir La perspectiva de la filosofía
del momento en que se encuentra latinoamericana está en el hecho de
fuera del juego de mi yo. poder realizar una relectura crítica de
la realidad, a partir de la experiencia
El otro que viene a mi encuen- de las categorías vivenciales del pobre,
tro, que en su interpelación clama por del huérfano, de la viuda y del extran-
la justicia, rompe con el sistema de jero (excluido), en la perspectiva de
opresión, con la ideología o ilusión, una ética de la liberación.
rompe con el egoísmo del yo.
El quehacer de la filosofía
El ser humano experimenta latinoamericana de la liberación no
la presencia concreta del otro en consiste en retomar el "logos" griego
su exterioridad y se encuentra con o de usar la "ratio" de la Europa im-
el mismo en la trascendencia. En perialista, sino que está comprome-
este sentido, la proximidad en el tidamente llamada a hacer uso de la
horizonte del ser-para-el-otro no palabra y de los gestos de la América
tiene ninguna delimitación espacial Latina oprimida, en una perspectiva
o temporal, más bien abarca a toda hermenéutica.
la humanidad. El ser-para-el-otro se
refiere a un saber moral, al pensar La filosofía de la liberación
moral, a la bondad, a la diaconía, a como ,un pensar que surge de una
la sustitución por el otro y a la jus- historia de sufrimiento y que por lo
ticia. La relación para con el otro tanto sirve como fundamento ético
en el ser-para-el-otro, se hace plena para comprender la alteridad. Ella
fundamentalmente en el ser de la será, en este sentido, una nueva di-
comunidad, lo que corresponde, en mensión de la filosofía. Esta filosofía
una experiencia de alteridad, a la coloca un nuevo horizonte en la luz de
responsabilidad ética con el otro. la historia. Ella apunta a los derechos
En la definición de la interioridad fundamentales de los oprimidos y de
soberana, Levinas describe la liber- sus virtudes.
tad como voluntad.
La filosofía de la liberación se
La verdad será experimentada fundamentará en una perspectiva po-
por el ser humano cuando éste prac- sitiva. En la filosofía de la liberación
tica la justicia. La justicia consiste las categorías de paz, justicia, amor,
en reconocer la alteridad del otro en solidaridad y promoción humana,
su absoluta alteridad. La solidaridad reciben un espacio especial en la re-
consiste en oír el grito y la interpe- flexión interior y un status social, son

-20-
Antonio Sidekum

realidades éticas y, por consiguiente, camino de esperanza renovadora de la


son portadoras de una liberación utopía humana.
histórica.
La comunidad de comunica-
El filósofo de la praxis libe- ción real existe en la solidaridad, en
radora no desarrollará su filosofía la responsabilidad vivida plenamente
en la pura abstracción especulativa, por el otro. Esta solidaridad despierta
sino que buscará la fundamentación y genera una vida de comunidad real,
originaria de su pensar en medio en la cual todos tendrán participación
del pueblo sufriente en camino a la de la liberación.
liberación.
La verdadera liberación se ori-
La praxis liberadora parte de gina en el otro, que se encuentra en
la verdad del oprimido. El pobre, el la exterioridad, en la injusticia. Este
oprimido posee conciencia de su con- otro posibilidta la experiencia del yo,
tigencia h1:,tórica. Cuando hablamos, a través de su rostro que se revela. Esta
no hablamos de un mero deseo sino liberación ética es la vocación del ser
de una realidad transformadora. humano, que la realiza en plenitud
por la solidaridad y la comunidad.
La realidad histórica es la rea-
lidad del pobre oprimido que intenta En síntesis, el Yo infinito pen-
su liberación. La liberación es una sante es más de lo que él piensa. El
reacción comunitaria del ser huma- necesita en su relación metafísica,
no. Esta liberación se expresa como afirmar su ipseidad y su autodeter-
solidaridad y atañe en plenitud la vida minación, de la misma forma como el
social. Así se desenvuelven siempre otro en su Exterioridad. La distancia
relaciones más nuevas, relaciones so- genera tensión, que es metafísica y
ciales de solidaridad, de participación precisa ser preservada, una vez que
social, de corresponsabilidad para con ella encuentra en el Infinito su uni-
el pueblo y de experiencia de una cidad. Metafísica en Levinas, debe
utopía concreta. entenderse como trascendencia, la
que siempre englobará la alteridad
En esta perspectiva y en la liber- radical y la distancia absoluta. Tras-
tad de la acción histórica del pueblo y cendencia será entonces sinónimo de
de sus muchas otras realizaciones so- lo absolutamente otro, de dirigirse
ciales, se crea una nueva realidad para irreversiblemente al otro, de entrar
el ser humano, que redundará en una en relación con el otro.
nueva sociedad. Esta nueva forma de
sociedad se establecerá por las luchas
solidarias históricas contra la totalidad, DELIMITACIÓN
descrita por Levinas, que se mani- CONCEPTUAL
fiestan como guerra, imperialismo,
como fuerza militar, por la dictadura
económica en el Tercer Mundo, en la Levinas al introducir en su
alienación de la juventud y la manipu- filosofía la categoría de "rostro del
lación social. La solidaridad es el nuevo otro", rompe con la tradición occi-

-2 l-
ALTERIDAD

dental, situando a la alteridad como mienzo de la filosofía y por eso, su


el principio de la filosofía. Además epifanía es ética. El rostro del otro
de eso, concibe el 'rostro' no como me hace frente en una interpelación,
expresión de interioridad, sino de su se caracteriza por el modo personal
exterioridad incondicionada. de expresarse, se abre en el mismo
momento a una dimensión universal
En su exterioridad, el rostro de la realidad y pone a mi Yo delante
tendrá como una constante, super- de un imperativo ético.
abundancia de trascendencia y esto
constituye su carácter ético irrever- Con el concepto de rostro no se
sible en su manifestación, o sea, en debe aquí comprender una represen-
su epifanía. tación filosófica o psicológica. Según
Levinas, no se trata de una expresión
El rostro como epifanía del personal del rostro, aunque de eso
otro, es el símbolo que nos afirma no nos sea permitido separarnos.
que no se podría asumir la plena Tampoco se trata de querer establecer
autonomía como punto de partida diferencias fisiológicas y comparativas
en la relación interpersonal, sino la de mi rostro con la alteridad del otro.
heteronomía. El rostro del otro es infinitamente
otro e infinitamente trascendente. Es
La autonomía es el pensar que la novedad que se manifiesta en la
encuentra en sí mismo su plena ver- exterioridad.
dad. La heteronomía existe cuando
se da obediencia al otro, al otro que "El otro metafísico es otro de
solicita mi ayuda, mi responsabilidad una alteridad que no es formal, de una
y entonces me someto a él, ofrecien- alteridad que no es un simple reverso
do mi libertad, orientando por él mi de identidad, ni una identidad anterior
libertad. a toda iniciativa, a todo imperialismo
del Mismo; otro de una alteridad que
En la exterioridad se da la al- constituye el propio contenido del Otro;
teridad de forma incondicional. Y la otro de una alteridad que no limita en
alteridad es una experiencia ética. Ella el mismo, porque en ese caso el otro
se manifiesta por el rostro del otro. El no sería rigurosamente el Otro: por la
rostro muestra al otro en su alteridad comunidad de frontera, sería, dentro del
absoluta. El rostro del otro es reflexio- sistema, aunque el mismo" 2 •
nado, pensado por Levinas, no como
una cosa entre las cosas, sino como El rostro del Otro, con el cual
un acontecimiento ético. Es interpe- él me interpela significa una ruptura
lación que coloca en cuestionamiento para con el mundo, que nos es co-
mi mundo egoísta, mi seguridad y mi mún. En el rostro del otro se abre
certeza. Además de eso, desafía a mi una nueva dimensión del ser, que
yo en la justificación y en la infinita en su forma de ser no podrá ser más
responsabilidad. excluida y a nosotros transmitida, sin
embargo deberá abrirse. Ella recibe
El rostro del otro hace una una profundidad y su característica
crítica radical, él es el principio, co- inconfundible. El rostro es en su modo

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Antonio Sidekum

de ser absolutamente peculiar y, por es otro, o sea, unicidad, es exterior, es


consiguiente, infinito. Esta dimensión extranjero para mí, no será alcanzable,
de ser abierto y de no ser transmisible, él se encuentra a una distancia infinita
esta irrupción interna de la forma, se "para mi yo". El es sujeto absoluto.
llama expresión. Pero el otro se presenta en su plena
desnudez delante de mi yo. El otro
Así podemos desde luego, de- confirma mi unicidad. El se encuentra
velar y delinear una categoría única en la exterioridad de toda relación de
en su importancia y expresión, para poder y de libertad de mi yo.
hacernos una filosofía del otro, que
es excluida, que fue puesta al margen Ser abierto significa ser exclui-
del pensar del centro, del eurocentris- do y vulnerable para el otro. La vul-
mo de la modernidad, esta categoría nerabilidad del rostro del otro exige
se llama Exterioridad. Ella servirá un compromiso ético en la opción
como "instrumental" interpretativo histórica. El yo será, constantemente
suficiente para comenzar un discurso colocado en cuestión por el otro. Este
filosófico a partir de la periferia, a cuestionamiento, que es un cuestio-
partir de los oprimidos 3 • namiento ético, torna especialmente
sobre la responsabilidad que yo tengo
Veamos algunos conceptos para con el otro. Así genera una con-
referentes a la ética de la alteridad, ciencia ética.
que podremos extraer del concepto de
exterioridad en Levinas. Volveremos Esta antropología filosófica sig-
al concepto de rostro del otro, que se nifica: amor por la verdad, o sea, ella
manifiesta en la exterioridad. La ex- llama al otro en cuanto es real, llama
terioridad es radical. Es trascendencia al ser del otro, actitud que no debe ser
del otro. confundida con una mera reflexión
abstracta del yo en su solipsismo.
En el pensamiento filosófico
de Emmanuel Levinas irrumpe una Levinas nos muestra cómo, en
nueva imagen de ser humano. El hilo la relación de excluyente soledad para
conductor de la obra de Levinas es la la alteridad, se da un rompimiento, un
preocupación por la ética de la alteri- real trascender, que no significa más
dad y de la trascendencia. para el yo, un retorno a si mismo. El
trascender, como relación para con
La Antropología Filosófica es otro, no sucede en las categorías
enriquecida con el pensamiento de del ser, pero sí en su temporalidad:
Levinas. La concepción fundamental o sea, en la esperanza, en la cual se
de la imagen del hombre levinasiano da la expectativa de la liberación. El
estará correlacionada con el huma- rompimiento ético con la totalidad se
nismo del otro hombre, con la ética da a través de la aproximación para
de la alteridad y la condición de ser con el otro.
rehén de otro.
Levinas llama metafísico el
Levinas acentúa lo absoluto de impulso hacia la exterioridad radical,
los polos del Yo y del Otro. El Otro esta búsqueda del otro es un impulso

-23-
ALTERIDAD

metafísico hacia éste, que es abso- A través de la obsesión por


lutamente otro. Es la búsqueda del el otro, se da la ruptura para con la
absolutamente otro, del infinito. totalidad y el ser humano entra, así,
en la relación para con la alteridad del
El otro se encuentra en la otro. La alteridad tiene una dimensión
Exterioridad. La idea del infinito metafísica, es ética. Nuestro mundo
es deseo infinito por el otro. Este permanece, a través de la alteridad,
deseo metafísico abarca la filosofía de como un mundo abierto. El otro es el
Levinas. En el deseo por el otro, mi origen radical y el fin último del ser
solidaridad se torna acción histórica en el mundo.
concreta, como forma de la irrestricta
responsabilidad que tengo por otro. La totalidad será rota a partir
Esta responsabilidad sobrepasa todas de la subjetividad. La subjetividad
las dimensiones de mis límites y de mi aparece como abierta para la Exteriori-
finitud, a través de la idea del infinito. dad, sin poder escaparse de la relación
El deseo no parte de mí, él va hacia asimétrica, la cual, por su lado, se ma-
el otro: de su mirada que me reclama nifiesta al otro de manera diacrónica
justicia, de su palabra por la cual él como culpable y responsable.
se revela y del infinito. Este deseo por
otro es, según Levinas, la medida para La experiencia ética es, en ver-
el infinito. Este deseo por la alteridad dad, una experiencia metafísica, esto
suscita en nosotros siempre más de- es, ni un proceso de desvelamiento, ni
seos. Este deseo no podrá ser saciado uno ontológico, sino un proceso inter-
por ningún fin ni satisfacción. personal y de trascendencia. El deseo
por la trascendencia será despertado a
La idea del infinito, en conjun- través del grito por la justicia y por la
to con la idea de la bondad y la idea revelación del rostro del otro.
del deseo, despierta la subjetividad a
la responsabilidad por el otro. Esta A través de los conceptos de
responsabilidad antecede al propio yo. alteridad y de exterioridad, desa-
Levinas fundamenta a través de la idea rrollados en la filosofía de Levinas,
del infinito, su crítica a la totalidad. somos llevados al punto central de la
filosofía de la ética de la alteridad: la
La proximidad será pensada experiencia por la liberación del otro
por Levinas fuera de las catego- que se encuentra en la injusticia.
rías ontológicas. Según Levinas la
existencia del ser humano es tejida La afirmación de la totalidad
profundamente por la proximidad de es al mismo tiempo la negación del
la relación. Esta relación es plenitud otro. La totalidad cerrada incluye
de relación ética, de responsabilidad la negación y la exclusión del otro.
infinita por el otro. La proximidad no En la totalidad el otro se encuentra
se extiende, en la filosofía de Levinas, oprimido. En la totalidad no existe
como una dimensión de la espaciali- la posibilidad de una libertad radical
dad, sino como pura relación, sin in- y originaria para el otro. Pero, en la
termediaciones; ella no se comprende alteridad se da vuelta para el otro. En
sin el peso del drama del ser. la relación del hombre con el otro se

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Antonio Sidekum

realiza la felicidad del ser. La exterio- quiera, que podría ser reversible. La
ridad recibe su más profundo sentido reversibilidad de una relación, en la
en la ética del ser. cual los términos se leen indiferen-
temente de izquierda a derecha o de
La tendencia del ser humano derecha a izquierda, los ataría el uno
es para la trascendencia. "La aspira- al otro". O como dice también: "De
ción a la exterioridad radical, llamada este modo se constituiría un sistema,
por tal motivo metafísica, el respeto visible, exterior (de fuera). Se preten-
de esa exterioridad metafísica, que dería fundir así la trascendencia, en la
es preciso por encima de todo "dejar unidad de un sistema, lo que destrui-
ser", constituye la verdad"4. ría la alteridad radical del otro" 7 .

En el surgimiento de la exte- La verdadera subjetividad ocu-


rioridad se revela una novedad: la al- rre a través de la exterioridad, a través
teridad absoluta del otro. La alteridad, de la recepción de la alteridad. Esta
que viene del absolutamente otro, es recepción de la alteridad condiciona
novedad, ella es trascendencia. Esta la conciencia y el tiempo.
novedad se origina del otro. Es tras-
cendencia. Es deseo insaciable por el A partir de la subjetividad se
otro. Es deseo metafísico que, "tiende abre un nuevo camino a la filosofía.
para una cosa interiormente diversa, En la subjetividad se da la irrupción
para lo absolutamente otro" 5 • de la exterioridad también llamada
trascendencia. El camino por el cual
El trascender es un fundamen- llegaremos a la exterioridad por la rup-
to de posibilidad, para que yo pueda tura de la totalidad se llama ética 8 .
entrar en comunicación para con el
otro en cuanto absolutamente otro. La ética se manifiesta a través
Así, la filosofía es para Levinas, un del rostro del otro. La realización de
llamado a la trascendencia. la exterioridad coloca la justicia como
condición radical, que posibilita la
El deseo metafísico es irrever- relación del ser humano con el otro.
sible. "El deseo es absoluto si el ser La ética se realiza en la metafísica,
que desea es mortal y el deseado, es que para Levinas es un deseo por
invisible. La invisibilidad no indica lo absoluto, en un deseo metafísico.
una ausencia de relaciones, implica Metafísica es el cuestionamiento ra-
relaciones con lo que no es dado y del dical y ético del Yo por el Otro, de lo
cual no podemos hacernos ideas" 6 . trascendente.
Este deseo es siempre un deseo de
lo absolutamente otro. Es el deseo La alteridad tiene una dimen-
metafísico. "Lo metafísico y lo otro sión ética; el rostro del otro es justa-
no constituyen una correlación cual- mente el comienzo de la filosofía.

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ALTERIDAD

NOTAS

1 Cf, P. Lain Entralgo, El problema del otro, Madrid, Revista de Occi-


dente.
2 E. Levinas, Totalidad e Infinito, p. 26.
3 Dussel, 1982, p. 45.
4 E. Levinas, Totalidad e Infinito, p. 16.
5 Ibídem, p. 21.
6 Ibídem, p. 22.
7 Ibídem, p. 23.
8 Ibídem, p. 23.

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-27-
ANTROPOLOGÍA
Manoel Castelo Branco
Brasil

Palabras Clave
RAZA-ETNIA - ALTERIDAD - PUEBLO - SUJETO - MESTIZAJE
- INDIGENISMO - FEMINISMO - PRIMER MUNDO/TERCER MUNDO
- DERECHOS HUMANOS - PSICOLOGÍA

INTR'.ODU CCIÓN Las opciones pastorales (el po-


bre, el indio, el negro, el niño) y las re-
flexiones teológicas (eclesiología, pas-
La evolución del pensa- toral, moral) buscaron mediaciones,
miento de liberación, que ya se sea en la sociología de la dependencia,
consolida en disciplinas y ofrece en el materialismo histórico, o en la
perspectivas de investigación, va hermenéutica; creando y adoptando
acumulando, sin embargo, algunos al mismo tiempo la matriz de la praxis
problemas no resueltos, problemas para la epistemología de la liberación.
que toman la forma de imprecisio- El recurso a las relaciones reales,
nes teóricas o que aparecen como permitió a las diferentes diciplinas
lagunas. desarrollar sus propias premisas, que
constituyen fragmentos de una com-
Las últimas décadas registran prensión de la realidad humana en
un período histórico de emergencia situación de opresión social y de ne-
de los sujetos en el territorio de gación del ser. Pero esas disciplinas,
dominación colonial y neocolonial al mismo tiempo que contribuyen a
en América Latina, África y Asia. una comprensión de la realidad hu-
El pensamiento de la liberación es, mana, carecen de una reflexión más
en parte, expresión teórica de ese profunda sobre el tema.
movimiento histórico (como los
escritos de Che Guevara, Eduardo Se abre un campo para una
Galeano, Pablo Neruda) y, en parte, reflexión antropológica, que debe
la invención de preocupaciones y recoger las premisas ya desarrolladas
perspectivas aún no tematizadas en las diferentes áreas, retomar lí-
por la epistemología de la compren- neas de investigación ya iniciadas y
sión del hombre (filosofía: Enrique abrir también otras propias. El primer
Dussel, Leopoldo Zea, Octavio Paz) camino consiste en develar el proceso
y de su autorrevelación como tras- histórico de dominación y opresión
cendente (teología: G.Gutiérrez, social, que se revela como negación
H. Assmann y L. Boff). efectiva y cultural del sujeto. El fin es

-29-
ANTROPOLOGÍA

tejer una comprensión de la realidad pacificación de los conflictos cul-


humana en causa, bajo la mirada del turales y étnicos de entonces, por
pobre y de sus formas de ser. una especie de democracia racial
en que el mestizaje, en el proceso
de la formación de la familia brasi-
DELIMITACIÓN leña, da un molde al mejoramiento
y depuración de los tipos, lo que
HISTÓRICA
resulta en el padrón del mestizo
moreno y en el carácter pacífico de
la propia gente.
Es antiguo el interés por al-
canzar, al menos, una comprensión
Ya Darcy Ribeiro (Darcy Ribeiro,
de la sicología de nuestra gente.
1969) recupera la dimensión del con-
Pero los primeros esfuerzos que se
flicto y extiende sus preocupaciones por
dedicaron al problema no pasaron
sobre el contexto de las contradicciones
de ser caracterizaciones de tipologías
coloniales, en que se procesan las dis-
regionales, textos literarios y ensayos,
torsiones culturales y se confunden la
prisioneros de factores de la tradición
identidad de la gente, pero en que los
positivista y culturalista, tales como la sobrevivientes étnicos resisten cultu-
teoría del mestizaje, las influencias ralmente y se reinscriben en busca del
del medio, entre otros. destino perdido y de las propias raíces,
en que los pueblos nuevos se dedican al
El ensayo de Paulo Prado (Pra- proyecto histórico de definir el propio
do, 1927) sobre la tristeza del paulista, rostro. Pero él mismo no se libera de
pero que generaliza sus considera- la apología del mestizo moreno, figura
ciones con la pretensión de dar una humana y expresión de cultura, que lo
comprensión de la realidad brasileña fascina bajo el hechizo de lo nuevo.
y de sus aspectos negativos del punto
de vista humano y social, es ejemplar Otro autor es Octavio Paz (Paz,
de las versiones regionales y elitistas 1949), cuyas reflexiones sobre las con-
del proceso histórico de la formación tradicciones sociales y las situaciones
cultural en el régimen colonial, cuya humanas de los grupos mexicanos,
tónica hace pesar la culpa por los reducidos a la condición de víctimas
males sociales a quienes son víctimas vivas, aprehenden y explicitan las re-
de esos males y da un perfil falso al laciones de absorción y exclusión, de
común del pueblo. indignación y soledad, de alienación
y lucidez, de pasión y muerte. Es la
El trabajo de Gilberto Freyre dialéctica de la negación del indivi-
(Freyre, 1933) a pesar de prolongar duo y de la invención del sujeto, de
el horizonte de investigación hasta la negación del otro y de su aparición
el período colonial y de ocuparse como presencia, para una compren-
de las distintas culturas desde sus sión de la resistencia cultural del
matrices hasta los conflictos de las oprimido y de las minorías étnicas, de
situaciones coloniales, compone una su conciencia y formas de ser.
versión apenas atenuada o civilizada
de la barbarie de la dominación Pero es con León Portilla
colonial, que se expresa como una (1963) que el campo de la investiga-

-30-
Manoel Castelo Branca

ción y de la reflexión antropológica se que caracterizan su formación y


adentra en el continente de la historia evolución como propio de nuestra
y de la memoria de los oprimidos de cultura. El primero reúne versiones
América Latina, recogiendo los re- literarias, de percepciones positivas
gistros en fragmentos dispersos, que o negativas, de descripción estética
rompen el supuesto silencio en que la de los tipos nacionales o regiona-
visión de los vencidos es reconstituida les, como en el romanticismo o en
a partir de los relatos de los aztecas, el expresionismo, así como en los
de los mayas y de los incas. Son las realismos regionales. El segundo
víctimas del trauma de la pérdida, registra ensayos temáticos, en los
pero que resisten como sujetos, al límites de la sociología y de la antro-
menos a nivel de la conciencia, del pología cultural (como Paulo Prado,
deseo, del habla. Gilberto Freyre, Darcy Ribeiro), que
tampoco superan las caracterizaciones
Enrique Dussel (Dussel, 1977) de tipologías culturales, herederas de
desenvuelve una analéctica de la los análisis positivista o culturalista,
alteridad, en que la consideración como la teoría del mestizaje, el sincre-
del "otro" parte de la relación de tismo cultural, el atraso social.
"dominación", de la relación de "ex-
clusión", de la condición de "negado" La perspectiva de la liberación
y de "víctima", en que la liberación se inaugura un tercer momento, en el
efectúa como retorno a la "presencia", cuadro de una transición política que
del que se afirma como "sujeto", de lo cambia el lugar tradicional de los
que se rescata como "sentido" y que sujetos sociales y conduce a una ma-
recupera el poder de "habla", en una durez en lo cultural y en la reflexión
"ética" que se traduce como "actitud", teórica. La máxima de la epistemología
como "gesto" de "curación". latinoamericana emergente (como en
Enrique Dussel, Alejandro Serrano,
En 1987, Manoel Castelo Bran- Leopoldo Zea) es que la filosofía en una
ca (Castelo, 1987) abarca el conjunto situación de dominación y opresión
de esas preocupaciones, pero bajo sólo puede ser una filosofía de la libe-
la perspectiva unificadora de una ración, tanto en cuanto a reflexión, que
antropología filosófica cuyo destino en cuanto práctica. Se abre un triple
y contenido de liberación resulta de movimiento (histórico, metodológico,
la búsqueda de las raíces del trauma temático): el movimiento histórico de
de nuestra gente, de la escucha de su liberación política y social; la libe-
deseo de ser. ración epistemológica de la filosofía
como reflexión y práctica; la propia
reflexión de liberación de los sujetos y
DELIMITACIÓN sobre el sentido. Es sobre todo en En-
CONCEPTUAL rique Dussel (una filosofía enraizada
en la política con una reflexión ética)
que se acentúa la reflexión sobre el
El tema del hombre situado en oprimido, sobre la situación y con-
la cultura latinoamericana conoce, en dición en que el oprimido se define
su desarrollo, momentos diferentes, como excluido y negado, en que la

-31-
ANTROPOLOGÍA

liberación como reflexión y práctica aplicaciones prácticas, de la trascen-


se define como ética, para un nuevo dencia y de su relación con Dios, de la
modo de ser. El ser del hombre lati- dignidad humana y de la comunión
noamericano (hombre, mujer, niño, con los hermanos, de la redención
negro, pobre, indio) no se describe humana en la tierra. Es para quien
como un abstracto en el tiempo y se habla y de quien se oye con algún
en el espacio, sino como un residuo sentido, la propia palabra viva.
de lo que sobró de la exclusión y de
la negación que sufrió: el oprimido, Son tematizaciones de diversas
el negado, el sufrido, el hambriento, disciplinas que rápidamente esbozan
el enfermo, el pobre. El proceso un nuevo concepto, pero que no supe-
histórico y las relaciones sociales (las ran los límites de la propia óptica. Las
marcas del trauma y las cicatrices de preocupaciones básicas de Enrique
las dentelladas de la nada), le dan los Dussel son el método y el destino,
atributos del ser y le definen el propio cuyas líneas transitan de la discusión
ser, sea en relación con otro, sea en la de las mediaciones epistemológicas
percepción de sí mismo. Lo ético se y de los lenguajes, a la invención de
da como la actitud en la cual el negado una política en la cual la relación ética
se percibe como no ser, pero se yergue sea posible. Pero el propio ser del
y en el "cara a cara" de la relación con oprimido (negado históricamente,
el otro, se asume como proyecto y excluido socialmente, marcado por el
donación de sí mismo. trauma, herido, sufrido) sólo figuran
como mención y mediación antro-
Las mediaciones teológicas de pológica en la lógica de su ética, que
la perspectiva de la liberación (como designa el negado que se afirma como
en Gutiérrez, Assmann, Boff ) tam- sujeto, pero que no lo toma como
bién convergen hacia una mediación tema. Su filosofía no se prolonga en
principal, que marca el norte de toda la investigación y en el análisis del ser
la reflexión: es la que la teología (y del oprimido y de sus modos de ser,
la Teología de la Liberación) es la no se dedica al rescate del proceso
comprensión de la posibilidad de histórico que se hace del oprimido,
trascendencia del hombre y de su el negado que se pierde en la nada,
relación histórica con Dios, de que no analiza las marcas del trauma que
la trascendencia es una experiencia le ahoga el alma, que le aparece en lo
histórica y socialmente determinada trágico del rostro, en el mirar vacío.
por la situación vivida, de que (si)
Dios se revela al hombre, es en la re- Lo mismo ocurrió en la Teo-
lación concreta de la propia vida. El logía de la Liberación, en que la
hombre del que se habla, en América mención del ser del oprimido es sólo
Latina como en general en el resto de una mediación para la comprensión
las periferias del mundo, es el ciu- de la hermenéutica del Evangelio y
dadano oprimido, el trabajador ex- de la pastoral, que se destina y que
plotado, la cultura negada, el sujeto nace de la angustia y de la palabra que
inválido, marginalizado, excluido, se encarna en la vida del pobre y le
el sufrido, el pobre. Es del pobre de habla de la propia vida. La Teología
quien se habla, en la teología y en sus de la Liberación, al mismo tiempo

-32-
Manoel Castelo Branco

que hizo la filosofía de sus media- so fía, pedagogía) y propone ( Castelo,


ciones, esbozó una antropología de la 1987) una antropología situada del
opresión y de la pobreza, pero sólo latinoamericano, enraizada en la
como mediación a sus reflexiones investigación de los antecedentes
exegéticas de fondo y para aclarar histórico-culturales y del contexto
la razón pastoral de sus opciones, social, inserta a su vez en una reflexión
como la opción por los excluidos, filosófica de fondo. El proyecto pro-
los marginalizados, los abandonados, pone recomponer y reinterpretar el
los sin-tierra, los sin-casa, los pobres, movimiento de la experiencia de la
los niños. La propia teología carece conciencia en América Latina, mostrar
de una reflexión temática sobre la en qué medida se ha constituido la
opresión como situación de vida, negación, en la dominación colonial y
del oprimido como sujeto inválido, en la opresión social, sea por el recur-
de la pobreza como atributo del ser, so a la fuerza que domina e impone,
el pobre y su percepción del mundo, oprime y excluye, sea por la llamada
del otro y de sí mismo. a lo simbólico del otro, inversión y
alteración del mismo al nivel de la
Si las tematizaciones del pen- conciencia y de la cultura, en que el
samiento de la liberación incluyen negado queda sin norte, vacío de ser.
mediaciones que contribuyen a la Pero escribir la historia de la experien-
comprensión de la realidad humana cia de la conciencia en América Latina
en situación de opresión, los límites de implica partir del momento inicial del
estas mediaciones se presentan como descubrimiento de las tierras y de los
lagunas que apuntan a un nuevo hombres y del encuentro cultural de
problema teórico: la necesidad de las gentes. Pero sobretodo del proceso
una comprensión del ser del oprimido de conquista y de instalación en las
y de sus modos de ser. El desafío se tierras en que los habitantes son muer-
replantea como demanda por expli- tos o son expulsados lejos, o bien re-
citar lo que fue percibido y mostrado, ducidos a condición servil. El ser del
pero no aprehendido y revelado en hombre latinoamericano es resultado
su riqueza y en su pobreza: el ser del del proceso histórico de 500 añós de
oprimido como negado, el submundo dominio colonial y neocolonial, bajo
de la miseria, lo trágico de la vida, la la lógica de la ambición mercantil y de
sombra de la muerte, el casi no-ser. Se la justificación cristiana; esclavitud y
abre un campo para la reflexión an- explotación del trabajo, inculturación
tropológica separada, en que la media- y dominación cultural, opresión y
ción pide un lugar propio y se ofrece exclusión social, negación y anulación
como tema, y se hace patente que un del sujeto, reducción y pobreza. Es la
esfuerzo teórico en ese sentido, como experiencia de una conciencia marca-
proyecto de investigación y análisis, da históricamente por la opresión, por
marcó un momento nuevo. la negación y por el trauma, que puede
ser explicitada bajo los diversos en-
En una serie de artículos, Ma- foques de las culturas que se cruzan,
noel Castelo Branca ( Castelo, 1986) bajo la fascinación o el rechazo, dentro
muestra las lagunas del proyecto de un conflicto mortal. Comenzando
global de la liberación ( teología, filo- por la visión de los blancos, pero bajo

-33-
ANTROPOLOGÍA

el prisma del choque cultural: del estas consideraciones, pero bajo


punto de vista del indio, del negro, otras preocupaciones y direcciones:
del pobre. reconstruir teóricamente el proceso
histórico de las relaciones coloniales,
La primera discusión es con considerando el elemento definidor de
Tzvetan Todorov (Todorov, 1982) sobre la perspectiva del europeo rubio, pero
el factor cultural del descubrimiento y en una reflexión basada bajo el prisma
de la conquista, en la dialéctica de la de la conciencia del oprimido, para
aparición y del sometimiento del otro, releer los factores en que se funda la
pero buscando un diálogo fecundo con identidad del latinoamericano, pero
los propios relatos del descubrimiento en la relación perversa en que se
(Cristobal Colón, Américo Vespucio, fundamenta de forma negativa, en
Vaz de Caminha) y con los escritos cuanto se pierde. Las barcos que
de los autores y de los testigos de la llegan a las costas de América, vacían
Conquista (Hernán Cortes, Bernal del en tierra la ambición y los intereses
Castillo, Las Casas) hasta la memoria de una civilización deslumbrada por
de las propias víctimas (aztecas, mayas, el padrón de una cultura racional que
incas). El trabajo de Todorov (bajo la conoce y domina, en una empresa en
perspectiva de la cultura central), es que marinos ávidos de riqueza fácil y
una reflexión sobre el descubrimiento mucho oro y ciegos de deseo sexual,
del otro, el que puede estar presente bajan a tierra para saciar sus vicios,
en la misma sociedad (las mujeres bajo el estandarte de los comandan-
para los hombres, los "locos" para los tes investidos de poder real y bajo
"normales", los pobres para los ricos), las bendiciones de los frailes traídos
o puede ser un grupo étnico o social para la misión de expandir el mundo
exterior a la sociedad en cuestión, sea cristiano, bautizar al gentío, enseñar
en una relación próxima en el espacio el rito. La primera percepción del ex-
histórico y cultural (como los judíos, tranjero es que las tierras son fértiles
los palestinos, los turcos), sea como y ricas y que no son de nadie (sin due-
extranjeros totalmente otros (los ne- ño) ya que el gentío es in-gente (sin
gros, los indios). Su enfoque principal alma) no hablan "ninguna" lengua,
es que el descubrimiento de América no conocen la moral. Es "tabula rasa",
producirá una modificación radical en ingenuo y sorprendido, de vida libre y
la historia y en la cultura, ampliando la piel desnuda, a quien transformar en
dimensión del mundo y alterando los un cristiano servil, en quien inscribir
padrones de la cultura y de la moral. El la letra de la ley.
propio mundo se redefine, comienza la
época moderna que da el fundamento La india Malinche servira
a la identidad mundial actual, bajo de "lengua" (intérprete) a Hernán
la sorpresa de la aparición del otro. Cortés en la conquista de México y
Su marca es la conquista y la muerte, será después la figura simbólica de la
la destrucción y el sometimiento, la propia América: vencida, vilipendia-
ambición y el dominio. da, prostituida, víctima, servil. Otros
indígenas, tribus enteras enemigas
Los ensayos de Manoel Cas- de los aztecas, seguirán a Cortés y
telo Branco retoman el conjunto de le servirán como escudo y guía, en

-34-
Manoel Castelo Branca

el papel servil de llevarlo a él y sus ' servil, amontonado en los barracones


soldados a la Tenochtitlan sagrada, de esclavos, vigilado y castigado en
a la conquista de la ciudad del sol. el campo, en una jornada extenuante
Si los españoles codician las tierras y bajo régimen de hambre. Sufrirá
y desprecian a los indígenas (sus también la negación ele su religión, la
costumbres, su cultura, su religión, alteración ele sus costumbres patrias,
su lengua), éstos los perciben como la prohibición del culto y del canto,
extranjeros rubios venidos del mar y los azotes y la prisión, las torturas y
los reciben como a dioses desconoci- la muerte. Pero ocupará también el
dos o como enviados del gran dios, lugar simbólico ele lo que debe ser
cuya venida es profetizada y esperada socialmente odiado, sáclicamen te
según su propia leyenda: salen de las negado y aplastado, en la dialéctica
aguas de donde nace el sol (llenos de negativa en que el señor se burla: se
vida, de poder y de luz). El español afirma mediante la negación del otro,
entra en la ciudad (como después en hasta reducirlo a la nada.
Cusca, en las aldeas y la selva) y se
impone por la fuerza, pero penetra en La negación del sujeto circula
lo simbólico de la conciencia indígena desde el contexto social hasta el
y ahí es que de hecho domina y vence ámbito ele la cultura, pasando desde
al otro, que entonces deberá servirlo y la perversión que oprime y excluye
cumplir su ley. El español desviste al hasta el cinismo del odio y la risa.
indígena de su cultura y de sus dio- La perversión colonial no fue nunca
ses y se impone él mismo como dios: tan intensa como en los cultivos del
impone su lengua, sus costumbres, su trabajo esclavo, en que éste es odiado
moral, su "fe". y castigado, tanto para mantener el
lujo de sus familias como para saciar el
Otro tópico de la reflexión de sadismo ele sus vicios. Los negros son
Castelo Branco es sobre el segundo tratados como bestias de carga en los
momento del proceso colonial: el cañaverales (como en las minas de oro
tráfico de africanos para el trabajo es- y en los campos de café) y acarreados
clavo en los cañaverales y los ingenios como brutos para los barracones ele
(en Cuba, en las Antillas y en Brasil) las senzalas, donde tienen prohibido
y después para las minas de oro, para incluso salir al patio para bailar y
los yacimientos de diamante, la cose- cantar. Pero el señor se complace con
cha del café. Fue preciso que el Papa los atractivos ele las negras (sean las
"decretara" que el indio "tenía alma", esclavas ele campo o las otras de lujo),
pero después de que la conquista de para servirse de ellas, hasta hartarse de
sus tierras hubiera siclo completada sexo. Si ella se niega, entonces delira
por el dominio o la ext111ción ele las ele gozo en golpearlas hasta oír los gri-
tribus; y ya los jesuitas habían salido tos ele dolor, o las castiga en régimen
en su "defensa·· tardía, en reduccio- ele hambre, a agua y sal.
nes llamadas '·111 is iones", en que el
indio se viste de blanco y respondía a Lo dramático para Castelo
la "misa", oía las lecciones y aprendía , Branco, es que éstas no son situacio-
el latín, manso y dócil. El africano nes que pertenezcan al pasado co-
reemplaza al indígena en el trabajo lonial, sino que se repiten perversas

-35-
ANTROPOLOGÍA

y crudas en las relaciones sociales Todavía inéditas, otras reflexio-


de la vida cotidiana, en el campo y nes del autor radicalizan el esfuerzo
en las calles. La así llamada "demo- para una comprensión del oprimido
cracia política" repite el círculo de y evoluciona hacia una especie de
la dominación ideológica y social y ontología de la pobreza, cuya temática
todavía vende la imagen torcida del incide sobre el ser del pobre como
obrero modelo, miserable y alienado, residuo del proceso histórico y como
obediente y servil, que avanza en la lo que sobra en el plano social, en que
vida, pero como obrero bien en su queda como negado (no-ser) y como
lugar, dócil y bueno. La supuesta de- vacío (falto) de ser. El pobre vive en
mocracia racial camufla los más sór- situaciones de carencia, y no se puede
didos prejuicios raciales y sociales, decir que de hecho vive, sino que so-
en relaciones cínicas que humillan brevive en una especie de subvida de
y abyectan al otro, para después cas- carencia, que de la situación cambia a
tigarlo por una culpa que no es suya, la condición de existir y de ser, que le
en una trilla de mala fe que confirma reduce a la carencia del propio ser. El
el prejuicio. El propio lenguaje está pobre se define como ser-de-carencia,
cargado de signos negativos que se por haber sido podado incluso antes
cristalizan en el discurso del sentido del acceso a la vida y al ser. La caren-
común, dando forma incluso a la idea cia es la llaga que le come la carne de
que el negado tiene de sí mismo. la vida y le marca el vacío de sí.

El pobre es la categoría general Su desafío es descubrir una


que designa el objeto final del proceso salida que lo libre del cerco de la
de opresión del sujeto y de la negación carencia y de la muerte que lo ronda,
del ser, en el curso histórico y en las que lo salve del hambre y le permita
relaciones sociales. El pobre es el el acceso al habla, para instalarse en
indio sin identidad propia, expulsado la vida y poder, finalmente, ser. Y
de sus tierras y mantenido en reservas la cuestión de la liberación (que los
sin vida, que pasa hambre y se vicia pobres perciben pero no formulan en
para pasar los días. Es el negro, toda- lenguaje propio) que bajo la óptica
vía tratado como ser servil, mano de del pobre se abre en tres direcciones,
obra barata e ignorante para el trabajo en la teoría y en la praxis: una po-
manual en los cañaverales del azúcar lítica de los sujetos, una pedagogía
y del alcohol, o para la fabricación de de la palabra, una ética. El pobre se
carbón. Es el mestizo (de indio o mueve en el espacio de la carencia,
de negro), perdido entre los valores pero entonces se percibe en común
de la cultura impuesta y los signos con los otros en el mismo lugar social
de la magia y el animismo (afoxé). El del hambre, hasta que en común, con
pobre es el trabajador explotado, el los hermanos, se yergue en busca de
trabajador del café confuso, el po- una salida.
blador marginalizado, el campesino
hambriento que huye de la sequía, Pero él tendrá que aprender a
las mujeres de la vida, los niños de la confiar en él mismo y en sus pares
calle. Es el sin tierra, el sin casa, el y tendrá que trazar un camino a se-
mendigo, el enfermo, ... guir. Su utopía es un lugar social,

-36-
Manoel Castelo Branca

donde al menos se respete el derecho La vida sólo le será posible


y se promueva la justicia; en que la como una curación: de la carencia y
justicia sea el derecho a la presencia, del mal que le roen el ser. La pura
con rostro propio, de viva voz. Pero ansia es lo que lo suspende por so-
tendrá todavía que aprender una bre el vacío de la nada, que lo salva
nueva palabra, en que su imagen sea de perderse y que lo mueve hacia
imagen fiel de su angustia y de su adelante, hacia el riesgo y hacia sí
deseo: la de hallar una salida que le mismo. Su deseo apenas alcanza
sane el alma. al ser.

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18-
CAPITALISMO Y
SOCIALISMO
FranzJ. Hinkelammert
Costa Rica

Palabras Clave - - - - - - - - - - - - .
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - SOCIOLOGÍA - DESARROLLO
- PRIMER MUNDO/TERCER MUNDO - MARXISMO
- REVOLUCIÓN - MODERNIDAD - GLOBALIZACIÓN
- MUNDIALIZACION - NUEVO ORDEN MUNDIAL
- NEOLIBERALISMO - POSTMODERNIDAD - DEMOCRACIA

INTRODUCCIÓN en las luchas sociales surgidas con la


aspiración de la creación de una so-
ciedad nueva, que sea capaz de ir más
Analizar la relación entre capi- allá de las fuerzas destructoras, que el
talismo y socialismo presupone ubicar movimiento socialista denuncia en su
ambos conceptos en la historia moder- crítica a la sociedad capitalista.
na, en la cual surgieron. Recién duran-
te el siglo XIX se hizo familiar hablar
en referencia a la sociedad, que había DELIMITACIÓN
surgido con la revolución industrial en HISTÓRICA
la Inglaterra del siglo XVIII, de la socie-
dad capitalista. Esta denominación no
tenía nada de despreciativo, sino que De los movimientos socialistas
corresponde al nombre, con el cual esta del siglo XIX, resulta con la revolución
sociedad se refiere a sí misma. Se trata rusa en el año 191 7, la primera sociedad
de la sociedad, que es constituida por que proclama ser la superación del capi-
relaciones de producción basadas en talismo y por tanto sociedad socialista.
la propiedad privada de los medios de
producción y por un mercado consi- A partir de ese momento recién
guiente, al cual se interpreta como un se habla de relaciones entre capitalis-
gran automatismo. mo y socialismo en el sentido de una
referencia a dos tipos de sociedades
El socialismo, en cambio, no diferentes existentes, es decir, socie-
comienza como sociedad socialista, dad capitalista y sociedad socialista.
sino como movimiento socialista en Después de la II Guerra Mundial, eso
el interior de esta sociedad capitalista. desemboca en un confrontación entre
Surge por la crítica a esta sociedad . capitalismo y socialismo, que marca
El concepto de socialismo aparece toda una época de la historia moderna

-39-
CAPITALISMO Y SOCIALISMO

con el nombre de guerra fría que ter- movimientos populares más bien
mina en el año 1989 con la caída del ' espontáneos, muchas veces erupti-
muro de Berlin y colapso de las socie- vos, que siempre son derrotados muy
dades socialistas. En Europa Oriental, rápidamente. Se trata, en especial,
estas sociedades se disuelven, en otras de los movimientos anarquistas. El
partes entran en crisis profundas, cuya primer movimiento de este tipo, que
perspectiva hoy no es clara. llega a tener notoriedad en los inicios
de la sociedad capitalista moderna,
En el presente -desde 1989- la es el movimiento de los iguales de
sociedad capitalista surge como abso- Babeuf durante la revolución france-
lutamente determinante del mundo sa. A éste le siguen los movimientos
entero y se proyecta como una so- anarquistas del siglo XIX, que do-
ciedad, a la cual no hay alternativa. minan los movimientos obreros en
El socialismo parece derrotado, y los la primera mitad de este siglo. Son
mismos movimientos socialistas, que movimientos de gran espiritualidad
existían en el interior de la sociedad sin capacidad de hacer política racio-
capitalista, están extremadamente nal. Sin embargo, dan el punto de
debilitados. Como resultado, este partida, luego del cual aparecen los
capitalismo "sin alternativa" se im- movimientos socialistas a partir de la
pone como un capitalismo sin lími- segunda mitad del siglo XIX.
tes. Si bien durante el tiempo de la
guerra fría había sido un capitalismo Estos movimientos socialistas
de reformas, ahora se hace presente formulan la protesta por la explota-
como un capitalismo sin necesidad ción en términos teóricos. Aparecen,
de reformas, capaz de derrotar cual- por tanto, no solamente como fuerza
quier movimiento con perspectivas política, sino que estructuran esta
alternativas. fuerza a partir de un cuerpo teórico
elaborado que les permite enfocar
Siendo los movimientos socia- una sociedad alternativa a la sociedad
listas movimientos contestatarios en el capitalista. Por tanto, elaboran teorías
interior de la sociedad capitalista, se de la sociedad, de la economía y de la
originan por la crítica al capitalismo. democracia. Esperan una sociedad
Son movimientos para los cuales el diferente y la formulan de una mane-
pensamiento teórico juega un papel ra tal que la puedan perseguir como
fundante, a pesar de que su origen fuerza política. Elaboran un concepto
real es la experiencia de explotación de nuevas estructuras sociales. Con-
vivida por las capas populares en el testan, por tanto, a la sociedad capita-
sistema capitalista. lista no solamente como protesta, sino
también por formulaciones teóricas en
Los movimientos socialistas todos aquellos campos, en los cuales
surgen a partir de esta experiencia. la misma sociedad capitalista ha for-
En el grado en que carecen de una mulado -también teóricamente- sus
base teórica formulada, se trata de estructuras.

-40-
Franz J. Hinkelammert

DELIMITACIÓN sociedad, en la cual cada uno sirve al


CONCEPTUAL otro y lo hace tanto mejor, cuanto más
se sirve a sí mismo. La condición es
que cada uno persiga su interés propio
en el mercado capitalista y no contra
Los paradigmas
él. Esa es la magia del mercado 1•
teóricos básicos
El análisis se da vuelta para
Por tanto, con los polos capi-
desembocar en una ética. Los valores
talismo y socialismo se hace presente
institucionalizados del mercado -pro-
una polarización de paradigmas teó-
piedad privada y el cumplimiento de
ricos constituyentes. Eso aparece con
contratos- son presentados como el
gran claridad en la relación entre los
único camino realista, para producir
paradigmas de sus teóricos fundan-
instrumentalmente la situación que
tes, es decir, entre Adam Smith por
cumple con el postulado del amor
un lado y Carlos Marx por el otro.
al prójimo. Se trata de la utopía total
Como paradigmas básicos siguen del mercado, que hasta hoy domina
vigentes hasta hoy. Voy a resumirlos, de una u otra manera la ciencia eco-
para poder apreciarlos en su relación nómica burguesa y de la cual derivan
complementaria. sus valores.

El paradigma básico de Adam 2. La teoría clásica de los salarios.


Smith se puede resumir en dos enfo- Se basa en el concepto del valor de
ques teóricos que aparecen constante- uso, de valores concretos, sobre los
mente en su obra. Se trata de su tesis cuales disponer es una condición ob-
de la "mano invisible" por un lado, y jetiva de vida o muerte. El mercado
de su teoría del salario por el otro. coordina la producción y el consumo
de valores de uso de productos, que
l. La tesis de la "mano invisible". deciden sobre vida o muerte. Por eso,
Smith sostiene que toda actuación en la función de subsistencia de necesida-
el mercado capitalista realiza de una des juega un papel central. Quien no
manera no-intencional un interés co- logra el acceso a la subsistencia está
mún en el grado en el cual se orienta condenado a la muerte. Al distribuir
por su interés propio. El interés de el mercado los valores de uso pro-
todos está mejor resguardado si cada ducidos, distribuye chances de vida.
uno se comporta en el mercado de una Quien no se integra en el mercado o
manera tal que no lo tome en cuenta no puede hacerlo, resulta sobrante y
intencionalmente. Según Smith, en el condenado a la muerte. Adam Smith
mercado capitalista el interés común sostiene que, como resultado de oferta
está realizado, cuando todos los par- y demanda por fuerza de trabajo, el
ticipantes en el mercado se olviden de mercado decide sobre vida o muerte.
él. Se trata de una mano invisible que Si el salario sube por encima de la sub-
transforma la orientación individual sistencia, hay demasiados obreros, y
por el interés propio en una orienta- éstos se multiplican demasiado. Como
ción no-intencional por el interés co- resultado el salario tiene que caer por
mún. Aparece la imaginación de una debajo de la subsistencia, para que los

-41-
CAPllÁiiS,üv f SOCiALISMO

sobrantes sean eliminados. Ésta es la tiene el hombre concreto y que puede


armonía del mercado, que regula la reivindicar frente a las instituciones
propia cantidad de los seres humanos y de su lógica -en especial frente a la
existentes, para que siempre pueda rea- lógica del mercado-.
lizarse un equilibrio macroeconómico.
en el cual hay tanta oferta de mano La crítica al capitalismo de
de obra como demanda. El mercado parte de Marx responde a las tesis
realiza la regulación por el hambre centrales mencionadas de la eco-
que, por medio del mecanismo de la nomía política clásica burguesa. Se
formación del salario, es canalizado de pueden destacar dos planos de la
una manera tal, que oferta y demanda respuesta:
consiguen siempre un precio de equi-
librio tanto para los bienes como para 1. La crítica al capitalismo. Marx
los seres humanos. Esa es la otra cara la desarrolla a partir del análisis de
de la mano invisible 2 • la reproducción de la vida humana
como condición de la posibilidad de
Éstos son los pilares no so- la actuación económica: la tendencia
lamen te de la teoría económica de hacia la pauperización. Desarrolla
Adam Smith, sino de toda la economía esta tendencia por inversión y am-
política clásica burguesa 3• pliación de los enfoques de Adam
Smith. Marx parte de la constatación
La contradicción es evidente. del hecho destacado por Smith, según
Si el interés común exige la elimina- el cual el mercado crea sobrantes,
ción de una parte de la comunidad, a a los cuales elimina. Sin embargo,
la cual el interés común se refiere, este concluye que en consecuencia el mer-
resulta contradictorio por lo menos cado no crea armonía, sino conflictos.
para aquella parte de la humanidad Los amenazados por el mercado ca-
amenazada por la eliminación. Para pitalista son objetos de una lucha de
ella no hay armonía, sino amenaza. clases desde arriba, a la cual tienen
que contestar con una lucha de clases
De este problema se derivan desde abajo.
los movimientos de emancipación del
siglo XIX, inclusive el movimiento Marx sigue usando el concepto
obrero socialista, pero también la crí- de la mano invisible. Él no niega que,
tica marxista de la economía política como consecuencia de los efectos no-
burguesa. El interés común, en el intencionales de la acción humana,
cual se basa el análisis de Smith, es resulta una "mano invisible". que
abstracto y destructor. No conoce orienta al mercado. Sin embargo,
siquiera derechos humanos, sino ex- sostiene que estos efectos no-inten-
clusivamente derechos mercantiles. cionales del mercado capitalista -visto
e.d. derechos de instituciones. Para ; como automatismo del mercado- son
que viva el mercado como idea abs- armónicos exclusivamente para una
tracta, se destruye al ser humano. De minoría de la humanidad, mientras
la crítica de tales abstracciones surge son destructores para el resto. Se
la concepción actual de derechos hu- trata simplemente de una inversión
manos en el sentido de derechos que del análisis de Adam Smith. Resul-

-42-
Franzj. Hinkelammert

ta por el reemplazo del punto de 2. La superac1on del capitalismo


vista smithiano del interés común por el socialismo/comunismo.
abstracto por el interés concreto de Como resultado de su análisis de la
los seres humanos concretos. No tendencia hacia la pauperización,
cambia el análisis de los hechos. Marx considera la superación del
Lo que cambia es su interpretación: capitalismo como una necesidad para
Marx insiste en que un mercado que la sobrevivencia de la humanidad.
crea sobrantes a los cuales elimina El mercado capitalista, al destruir la
contiene una lógica destructiva para propia vida humana y la naturaleza,
el ser humano. la humanidad, si quiere vivir, forzosa-
mente tiene que superarlo. Para Marx
Sin embargo, al invertir el aná- y para los movimientos socialistas,
lisis de Adam Smith, Marx lo amplía que se basan en su pensamiento, eso
en dos sentidos. Por un lado, sostiene es obvio. Sin embargo, la solución que
que la lógica del mercado hacia la propone es tan instrumental como ya
producción de seres humanos so- era el pensamiento de la economía
brantes y hacia su eliminación es una política burguesa. Ésta había pro-
lógica acumulativa y no, como cree metido la armonía como resultado
Adam Smith, aceite para la máquina instrumental de la imposición uni-
del progreso, que de esta manera versal y homogénea del mercado ca-
puede dar vueltas hacia la eternidad. pitalista -la gran utopía de la sociedad
Por otro lado, sostiene que la lógica burguesa-; Marx la prometió como
del mercado capitalista no solamente resultado igualmente instrumental de
destruye a la humanidad, sino a la na- la abolición universal y homogénea
turaleza también. Su conclusión es la no solamente del mercado capitalista,
siguiente: "por tanto, la producción sino de cualquier mercado: la utopía
capitalista sólo sabe desarrollar la del comunismo.
técnica y la combinación del proceso
social de producción, socavando al Resulta una ética tan mecánica
mismo tiempo las dos fuentes origi- e instrumental como la ética burguesa.
nales de toda riqueza: la tierra y el El ser humano realiza automática-
hombre" 4 . mente los derechos humanos del ser
humano concreto, en cuanto ha abo-
Por tanto, el mercado destru- lido las relaciones mercantiles, para
ye al producir las riquezas a niveles sustituirlas por alguna "asociación de
siempre mayores, las fuentes de toda hombres libres". Seguramente Marx
la riqueza producida: el ser humano lo piensa todavía menos mecánico
y la naturaleza. de lo que posteriormente lo enfoca
la sociedad socialista soviética, pero
En este sentido, Marx sos- su pensamiento ya va en esta direc-
tiene que el mercado contiene una ción. Según esta conceptualización,
tendencia a la pauperización que es la abolición de las relaciones mer-
resultado de efectos no-intencionales cantiles libera al progreso técnico de
de la acción humana y que lleva hacia sus tendencias destructores y crea
la destrucción acumulativa del ser en forma concreta aquella armonía,
humano y de la naturaleza. que la economía burguesa promete

-43-
CAPITALISMO Y SOCIALISMO

en forma abstracta. Igual como en el evidente todavía en Lenin. Sociedad


análisis burgués, también aquí se ve socialista se identifica con economía
la política instrumentalmente como centralmente planificada. Eso lleva a
la aplicación de una técnica. En lugar la división del movimiento socialista
del automatismo del mercado resulta entre la corriente social demócrata
el automatismo de su abolición. de orientación "reformista" y la
corriente comunista de orientación
Resulta que los paradigmas de revolucionaria.
capitalismo y socialismo son inversa-
mente complementarios, aunque cada Cuando aparece con la revolu-
uno parte de un punto de vista dife- ción rusa en 1917 la primera sociedad,
rente. El paradigma del capitalismo que proclama ser la sociedad socialis-
parte del mercado, para construir su ta, ésta se organiza desde el comienzo
utopía del mercado total idealizado. en nombre de un automatismo deri-
El paradigma del socialismo parte vado de la abolición de las relaciones
de las necesidades del ser humano mercantiles. De hecho, nunca las
concreto, para desembocar en la idea- abolió, porque era imposible hacerlo.
lización de una sociedad sin mercado Pero legitimó a partir de esta meta
con su utopía del comunismo. Ambos -siempre más postergada al futuro-su
prometen una solución homogénea y estructura económica y social, que usó
universal para la humanidad entera y la planificación central de la economía
ambos vinculan ésta su solución con como su spiritus rector de una manera
la vigencia de un progreso técnico inversamente correspondiente de la
ilimitado e irrestricto y la promesa forma en que la sociedad capitalista
de un esplendor futuro derivado de usa el automatismo de mercado como
su magia. su centro de derivación de todas sus
decisiones y valores. Con esto surge
la planificación total en nombre de
La sociedad socialista la superación del mercado total. A
la homogenización por el mercado
A partir de este planteo teórico seguía la homogenización por la pla-
de Marx, se organizan los movimien- nificación.
tos socialistas para la toma del poder
y el cambio de la sociedad. Cuanto Por eso, la historia de la so-
más avanza esta organización, más ciedad socialista es la historia de su
tiene que elaborar un concepto de la planificación central. La planificación
sociedad por hacer. La concepción de 1
es considerada como un proceso au-
esta sociedad en Marx es todavía una tomático que por inercia cumple con
concepción de espontaneidad, que los objetivos de humanización, que el
no concibe una planificación central, movimiento socialista había trazado.
sino marginalmente. Sin embargo, ya
antes de la II Guerra Mundial, la con- En esta línea, la sociedad socia-
cepción de la sociedad socialista está lista soviética entiende la planificación
orientada casi exclusivamente por la central basada en la propiedad pública
idea de una planificación central. Eso socialista como la palanca que permite
ya está muy explícito en Engels y más desatar un progreso técnico ilimitado e

-44-
Franzj. Hinkelammert

irrestricto junto con la movilización de Los países socialistas habían


toda la fuerza de trabajo, para derivar realizado una política de desarrollo
en el futuro de este progreso desatando a partir de un subdesarrollo previo,
una humanización de todas las relacio- que intentó realizar la integración
nes humanas como un producto auto- económica de la población entera por
mático de esta dinámica de las fuerzas medio de la planificación central. Sin
productivas. Por tanto, la dinámica del embargo, ya en la Unión Soviética re-
crecimiento económico es vista como sultó que esta integración por medio
el motor, que -dirigido por la plani- del pleno empleo llevó a la necesidad
ficación central- integra la población de ocupar más mano de obra de lo que
entera en una carrera de crecimiento según un criterio capitalista habría
económico cuyo fruto automático e sido necesario. El resultado fue más
instrumental será la humanización bien una paralización del crecimiento
de la sociedad humana. Idealizando económico y la incapacidad de seguir
la meta de este proceso, se la concibe el paso de la revolución tecnológica
como comunismo5. que ocurría en el Occidente. Eso
mostraba que la presión hacia la
La sociedad socialista soviética exclusión de grandes partes de la
logró grandes éxitos económicos a población se hacía anotar también
partir de esta organización de la socie- allí. Al no aceptar tal exclusión, se
dad y su sistema de legitimación. En sofocaba la dinámica económica. Dos
la década de los sesenta de este siglo trabajadores ocupados en un puesto
resultó ser la segunda potencia indus- de trabajo diseñado para uno no
trial y militar del mundo, y la guerra producen más que uno, sino menos.
fría entre capitalismo y socialismo Uno obstaculiza al otro. El producto
implicaba la polarización del mundo de ambos es menor de lo que sería el
entre dos superpotencias, Estados producto de uno solo. Al no aceptar
Unidos y la Unión Soviética. el socialismo la expulsión de partes
de la población de la división social
Sin embargo, a este auge siguió del trabajo, -o frente al hecho de ser
el rápido colapso, que se consumó en estructuralmente incapaz de aceptar-
el año 1989 con la caída del muro de la- sofocaba la dinámica económica.
Berlin. La industrialización exitosa En el grado en el cual la promesa de
de la Unión Soviética había sido una una dinámica económica más grande
industrialización que recuperaba los todavía de la del capitalismo era la
avances industriales de los países base de la legitimidad del socialismo,
capitalistas de períodos anteriores. éste vivía su crisis de legitimidad. La
Sin embargo, desde la década de los propia población, cuya expulsión este
sesenta se da en los países capitalis- socialismo había evitado, se levantó en
tas un nuevo cambio tecnológico, al contra de él. En Alemania oriental, los
cual el socialismo soviético no era propios obreros celebraban en el pri-
capaz de seguir. A partir de la década mer año después de la caída del muro
de los setenta, bajaron sus tasas de de Berlín el desempleo como algo sa-
crecimiento para llegar, en la década ludable que indicara un futuro nuevo
de los ochenta, a una situación de prometedor. Posteriomente, cuando al
paralización económica. desempleo seguían las tendencias al

-45-
CAPITALISMO Y SOCIALISMO

subdesarrollo, -que hoy aparecen en occidental misma. Al inscribirse el


todo el mundo ex-socialista y que lo socialismo soviético en la tradición
están transformando en el cuarto con- ele la civilización occidental y su mo-
tinente subdesarrollado- le seguía una dernidad, no pudo ni ver lo que era
frustración sin capacidad de pensar la crisis del capitalismo en su fondo.
siquiera algún futuro nuevo. Por tanto, no pudo ser la alternativa
al capitalismo, que pretendía ser, y
Eso no significaba solamente reproducía en su interior esta misma
el fin de esta sociedad socialista, sino crisis del capitalismo, cuya solución
el fin de cualquier posibilidad de rnn- había pretendido.
cebir una alternativa al capitalismo en
términos de una sociedad alternativa El colapso del socialismo so-
con pretensión de ofrecer una solu- viético demuestra que este socialismo
ción homogénea con instituciones no era la alternativa necesaria para
universales para contestar a la pre-- responder a la crisis del capitalismo.
tensión universal de homogenizaci(m La victoria del capitalismo, en cambio,
del munclo entero de parte del sistema muestra que la crisis del capitalismo es
capitalista mundial. la crisis de la civilización occidental.
Es una victoria de Pirro, una victoria
aparente, en la cual el victorioso resul-
La crisis del capitalismo ta ser el derrotado. Superar la crisis
del capitalismo nos lleva ahora a la
Hay una semejanza evidente necesidad de ir más allá de la civili-
entre la concepción de la sociedad zación occidental y de su modernidad
socialista y la conceptualización que misma.
la sociedad capitalista hace ele sí
misma. Eso revela también el límite de
la crítica del capitalismo de parte de
El socialismo soviético ha sido Marx. Esta crítica es íntegramente
el intento de solucionar la crisis del cierta, en cuanto al capitalismo se
capitalismo en el marco de la conser- refiere. El mercado capitalista. tratado
vación de la civilización occidental. como automatismo de mercado, es un
De hecho, ha sido una gran palanca sistema de homogenizaci(m universal
para la extensión de la civilización ¡ de todas las relaciones sociales huma-
occidental en el mundo, cubriendo es- nas, que subvierte tcnclencialmente la
pacios económicos tan graneles como vida humana y la naturaleza entera.
la Unión S(iviética y China, un espacio Existe hoy una conciencia muy amplia
donde vive casi un tercio de la pobla- sobre este problema.
ción mundial. Socialismo Soviético
es civilización occiclcntal en países en Sin embargo, el pensamiento ele
los cuaks el capitalismo no ha siclo Marx contiene a la vez un error que lo
capaz de promover la modernización caracteriza también en su integridad.
industrial. El colapso del socialismo ~e trata ele la convicción de Marx, ~c-
soviético re\·ela el hecho ele que la gún la cual la civilización occidental
crisis del capitalismo no es solamente es capaz de superar al capitalismo para
del capitalismo. sino de la sociedad realizarse en su integridad en la nucYa

--1-6-
Franz J. Hinkelammert

sociedad socialista. Por eso, opone lización occidental con su utopía de la


al mercado capitalista, por su parte armonía entre progreso técnico y pro-
también, un sistema de homogeniza- greso humano, este suicidio colectivo
ción universal por la planificación que es lo único que queda. Aquí surge una
solamente podía reproducir aquellas nueva distinción entre 'capitalismo
consecuencias, que Marx mismo había utópico' y 'capitalismo cínico' 7 •
criticado en el sistema capitalista. Por
tanto, resultó un sistema económico El capitalismo salvaje, cuando
que perseguía el crecimiento econó- se piensa a sí mismo, se interpreta en
mico con el mismo afán destructor, términos cínicos, y aunque no susti-
destruyendo las fuentes de la produc- tuye completamente el pensamiento
ción de toda riqueza -el ser humano y capitalista utópico, vinculado al
la naturaleza- en pos de la producción Welfare State sí lo vacía, y en alto gra-
de la riqueza. La contradicción del do. Tomemos el caso del presidente
capitalismo volvió a aparecer dentro brasileño Cardoso, que se presentó en
del sistema socialista mismo. todos sus discursos como un utopista
completo. Observamos aquí un uto-
De esta manera, resulta que pismo capitalista nítido, pero vaciado
se trata efectivamente de una crisis completamente de todos los elemen-
de civilización y no simplemente de tos de la teoría económica neoclásica,
relaciones sociales de producción. Sin que todavía existen, en la cual a la
embargo, por esta misma razón, la mano invisible del mercado hay que
crítica del capitalismo de Marx vuelve ayudarle, con una mano visible para
con toda su fuerza original. Pero se que funcione, la mano del Estado. Y,
transforma en una crítica de la civili- en general, sigue habiendo una defen-
zación occidental misma. No pierde sa de este capitalismo utópico en las
su vigencia, sino que la vuelve a tener. discusiones públicas, en las campañas
Pero la alternativa, que ahora resulta electorales, incluso en el seno mismo
de ella, tiene que ser una alternativa a del FMI; pero simultáneamente apa-
esta civilización. Se trata de la alterna- rece una argumentación cínica que
tiva a una civilización que ha nacido me parece dominante en el ámbito
en miles de años y que se ha impuesto del capitalismo de las empresas, en
sin misericordia al mundo entero. Ella el mundo de los ejecutivos y de sus
resulta ahora hueca, amenazando la representantes ideológicos. El mundo
existencia de la humanidad. de los ejecutivos se hace cada vez más
cínico y ahí la argumentación cínica es
Hoy hay mucha conciencia de la traducción directa del capitalismo
que nos encontramos frente a una salvaje.
disyuntiva de este tipo 6 • También las
muchas filosofías de la "Post-moder- Por eso, lo que enfrentamos
nidad" atestiguan el hecho, aunque su no es sólo una crisis del capitalismo,
tendencia sea sobre todo la de la des- sino una crisis del concepto fun-
esperación, que las lleva a una especie dante de la modernidad. Se trata del
de mística del suicidio colectivo de la concepto de la armonía inerte entre
humanidad. Efectivamente, al negar progreso técnico y progreso de la hu-
la posibilidad de alternativas a la civi- manidad, mediatizada por un marco

-47-
CAPITALISMO Y SOCIALISMO

institucional como el mercado o el es el fin del universalismo ético, que


plan central. La crisis del capitalismo ahora vuelve como un universalismo
se ha transformado en una crisis de la del hombre concreto, que en nombre
civilización occidental misma. de la vida humana y de la naturaleza
reivindica la legitimidad de cuestio-
En consecuencia, en sus térmi- nar cualquier sistema de homogeni-
nos tradicionales, se desvanece la pola- zación universal, para relativizarlo en
rización entre capitalismo y socialismo. función de la vida concreta tanto del
Se trataba de dos polos, que ambos se ser humano como de la naturaleza 4 •
incribieron en una civilización occi-
dental -la modernidad- con su pre- Este universalismo del hombre
tensión de un sistema institucional de concreto es precisamente la negación
homogenización universal, que podía de los universalismos abstractos, para
armonizar a priori y por principio el reivindicar la libertad humana, que
progreso técnico y la humanización de consiste en respetar la vida humana
las relaciones sociales. Sin embargo, y de la naturaleza por encima de los
principios abstractos del mercado o
con la crisis actual del capitalismo, que
no fue resuelta por el colapso del so- de la planificación, que se quieren
cialismo, resulta la crisis de esta misma
imponer al ser humano como prin-
modernidad y sus homogenizaciones cipios, a los cuales la misma vida
universales. En lugar de la polaridad humana hace falta sacrificar. Es la
capitalismo/socialismo, aparece otra, libertad de recurrir a mercados o
que es capitalismo/vida, capitalismo/ intervenirlos, donde eso hace falta;
sobrevivencia de la humanidad. Pero pero también la libertad de planificar
capitalismo tiene ahora un sentido la economía o de no hacerlo donde
más amplio de lo que tenía en la crí- sea necesario. Es a la vez la libertad
1

tica de Marx al capitalismo. Implica de respetar a economías premodernas


civilización occidental, modernidad y donde éstas subsisten, pero también
aspiración a sistemas institucionales dede cambiarlas, donde sea conveniente.
homogenización universal de todas las Desde el punto de vista de la libenad
relaciones humanas. Por tanto, implica humana, las relaciones de producción
al mismo socialismo, como había sur- -mercado, planificación, economías
gido con las sociedades socialistas en precapitalistas- son un asunto de
la tradición soviética. conveniencia, no de principios de un
, humanismo abstracto, que dicta la
Eso es también el fin del uni- homogenización universal de todas
versalismo abstracto, como lo había las relaciones sociales según un solo
propiciado la misma modernidad. Se criterio. No se trata de un abstracto
trata del universalismo de los siste- evetylhing goes (todo va), sino de un
mas de homogenización universal, criterio universal de vida concreta,
tanto en la línea del capitalismo como que rompe en caso de necesidad todos
del socialismo 8 . Sin embargo, eso no los principios 10

-48-
Franzj. Hinkelammert

NOTAS

1 "Ninguno, por lo general, se propone originalmente promover el interés


público, y acaso ni aun conoce cómo lo fomenta cuando no abriga tal
propósito. Cuando prefiere la industria doméstica a la extranjera, sólo
medita su propia seguridad y cuando dirige la primera de forma que
su producto sea del mayor valor posible, sólo piensa en su ganancia
propia; pero en éste y en otros muchos casos es conducido, como por
una mano invisible, a promover un fin que nunca tuvo parte en su
intención". Smith, Adam: La riqueza de las Naciones, Libro IV, Cap. II,
Sección I, Tomo II, p. 191
2 "En una sociedad civil, sólo entre las gentes de inferior clase del pueblo
puede la escasez de alimentos poner límite a la multiplicación de la es-
pecie humana y esto no puede verificarse de otro modo que destruyendo
aquella escasez una gran parte de los hijos que producen sus fecundos
matrimonios ... Así es, como la escasez de hombres, al modo que las mer-
caderías, regulan necesariamente la producción de la especie humana:
la aviva cuando va lenta y la contiene cuando se aviva demasiado. Esta
misma demanda de hombres, o solicitud y busca de manos trabajadoras
que hacen falta para el trabajo, es la que regula y determina el estado de
propagación, en el orden civil, en todos los países del mundo .. " Smith,
Adam op.cit. Tomo I, p.124. (Libro I, Cap. VIII: "De los salarios del
trabajo". Sección II: pp. 118-133)
3 Hayek, en una entrevista dada en Santiago de Chile, sigue pronunciando
este mismo principio en términos actuales: "Una sociedad libre requiere
de ciertas morales que, en última instancia, se reducen a la mantención
de vidas: no a la mantención de todas las vidas porque podría ser nece-
sario sacrificar vidas individuales para preservar un número mayor de
otras vidas. Por lo tanto, las únicas reglas morales son las que llevan al
"cálculo de vidas": la propiedad y el contrato". Hayek, Friedrich von.
Entrevista El Mercurio, 19.4.81
4 Ver Marx, Karl: El Capital. p.424
5 Ver Hinkelammert, Franz: Ideologías del Dasarrollo y Dialéctica de la
Historia; Crítica a la Razón Utópica.
6 Jonas, Hans: Das Prinzip Verantwortung. Versuch einer Ethik für die tech-
nologische Zivilisation. Suhrkamp. ("El principio responsabilidad, Ensayo
de una ética para la civilización tecnológica"). Frankfurt,1984.
La postmodernidad no es más que un camuflaje de la eternización de
la modernidad. Estas afirmaciones se encuentran muy afines al último
informe del Club de Roma, con el título: "La revolución global". (The
First Global Revolution.) (1991) El informe insiste: "Evidentemente,

-49-
CAPITALISMO Y SOCIALISMO

problemas globales no se pueden solucionar sólo por una economía del


mercado, si estos exigen un enfoque a largo plazo o si se trata de pro-
blemas de la distribución. Además, aquellos problemas, donde se trata
de energía, medio ambiente, investigación básica o el trato equivalente
(Jairne:;s) no pueden ser solucionados únicamente por el mercado. Estos
problemas solamente pueden ser enfrentados por la intervención del
Estado, que se basa en procesos políticos y que usa muchas veces me-
canismos de mercado como instrumentos de una planificación estatal".
"Las fuerzas que operan en el mercado pueden tener efectos colaterales
peligrosos, por el hecho de que no se basan en el interés de todos".
"... el concepto (de una economía sostenible a largo plazo) es utópico, pero
vale la pena seguirle el paso. La sociedad sostenible jamás podría resultar
de una economía mundial, que confía exclusivamente en las fuerzas del
mercado, aunque éstas sean importantes para mantener la vitalidad y la
capacidad inno,vativa de la economía. Como ya mencionamos, las fuerzas
del mercado sólo reaccionan a señales de corto plazo." Citado según la
edición alemana, con traducción del autor. "Die globale Revolution".
Bericht des Club of Rome 1991. Spiegel Spezial. Hamburg, 1991.
7 Ver Hinkelarnmert, Franz: El grito del sujeto (San José, DEI, 1998). Esta
distinción implica que el capitalismo ya no supone ningún "potencial de
razón": "Si ya no se pretende una razón de interés general, estos juicios
de hecho, que demuestran que el capitalismo no realiza ningún interés
general, se transforman ellos mismos en un deber. Si el capitalismo
excluye y destruye, se deriva de eso un deber; según el capitalismo se
debe excluir y destruir. Se celebra entonces la 'destrucción creadora' en
el contexto de la afirmación de que no hay ninguna alternativa. Ahora se
puede decir abiertamente lo que el capitalismo es, sin que estos juicios
de hecho tuvieran el más mínimo contenido crítico. Por eso, hoy se
dice muy abiertamente lo que el capitalismo es. Y lo que se dice sobre
el capitalismo es cierto y veraz. No hay hipocresía, porque lo que es, es
lo que debe ser. Fuera de eso, lo que es, no debe haber ningún deber.
Sin embargo, lo que resulta de esta posición cínica, es un nihilismo",
Franz Hinkelammert, El Nihilismo al desnudo, Santiago de Chile, LOM,
2001, pp. 74- 75. Cf. La reseña a este libro por parte de] orge Vergara E.,
en Revista Polis on line, www.revistapolis.cl volúmen 1, Nº4 (2003)
8 Son sistemas megalómanos. Esta megalomanía llegó hoy a marcar el
mundo entero. Nunca ha habido un plan tan megalómano como es hoy
el ajuste estructural, en nombre del cual se devasta toda la tierra.
9 Ver Hinkelammert, Franz: "Consideraciones sobre las Alternativas del
Cambio de las Estructuras Económicas en Chile", en Cuadernos de la
Realidad Nacional, NºlS, 1972. Santiago. Hinkelammert, Franz: La
lógica de la expulsión del mercado capitalista mundial y el proyecto de
liberación. En: Pasos. Número Especial 3/1992.

-50-
Franz J. Hinkelammert

10 Marx ha formulado este humanismo de la vida concreta por primera vez.


Marx había hecho esta crítica del universalismo abstracto en nombre de
su crítica a la religión. Su formulación del humanismo concreto sigue
vigente, aunque el mismo Marx haya desembocado en otro universa-
lismo abstracto. Marx lo formula de la manera siguiente: "La crítica
de la religión desemboca en la doctrina de que el hombre es la esencia
suprema para el hombre y, por consiguiente, en el imperativo categórico
de echar por tierra todas las relaciones en que el hombre sea un ser
humillado, sojuzgado, abandonado y despreciable." ver Marx, Carlos:
La introducción a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel. En:
Fromm, Erich: Marx y su concepto del hombre (Marx, 1964, p. 230).

BIBLIOGRAFÍA

Hinkelammert, Franz: Ideologías del Desarrollo y Dialéctica de la Historia,


Buenos Aires, Editorial Universidad Católica de
Chile-Paidos, 1970.
Crítica a la Razón Utópica, San José, DEI, 1984.
"Consideraciones sobre las Alternativas del Cambio
de las Estructuras Económicas en Chile", en
Cuadernos de la Realidad Nacional, Nºl5, 1972.
Cultura de la esperanza y sociedad sin exclusión, San
José, DEI, 1995.
El grito del sujeto, San José, DEI, 1998.
El nihilismo al desnudo, Santiago, LOM, 2001.
"La lógica de la expulsión del mercado capitalista
mundial y el proyecto de liberación". En Pasos,
Numero Especial 3/1992.
Marx, Karl: El Capital. Mexico, FCE, 1966
Manuscritos económico-filosóficos, México, FCE, 1964.
Smith, Adam: La riqueza de las Naciones. Barcelona, Editorial Bosch,
1983. Reproducida por UACA, San José, Costa Rica,
1986.

-51-
CONCIENCIA
CRÍTICA/CON CIENTIZACIÓN
J. B. Libanio, S.J.
Brasil
~ - - - - - - - - - - - Palabras Clave - - - - - - - - - - - - ,
RACIONALIDAD - TEORÍA DE LA COMUNICACIÓN
- TEORÍA CRÍTICA - LENGUAJE POLÍTICO - POLÍTICA - PRAXIS
- DESARROLLO - PSICOLOGÍA - EDUCACIÓN LIBERADORA
- MODERNIDAD - GLOBALIZACION

INTRODUCCIÓN pacidad de la razón para poseerse de


manera refleja, superando las amarras
de los mitos (ilustración griega),
El problema de la conciencia tomando distancia refleja de la pro-
crítica cubre el arco de la historia pia tradición occidental (ilustración
de la propia existencia humana. Al kantiana), invirtiendo el movimiento
emerger de la noche del animal, al teoría/práctica (ilustración marxiana),
superar por el proceso evolutivo la rompiendo ancestrales alienaciones
inercia inconsciente de la materia, el y dependencias históricas culturales
espíritu humano surge como el ser ( concientización latinoamericana).
que, por primera vez, es capaz de
autoposeerse a sí mismo, ser cons-
ciente. Tal fenómeno, de gigantesco DELIMITACIÓN
significado, acontece en el mundo. El HISTÓRICA
hombre es "espíritu en el mundo" (K.
Rahner). Mundo es el cosmos, son las
relaciones sociales que el ser humano Se trabaja con dos conceptos
establece con sus pares, ya sea en la próximos, pero no idénticos. Con-
simplicidad no refleja (conciencia in- ciencia crítica es un estado. Concien-
genua), o en la perspicacia conocida tización es un proceso. El primero es
y reconocida de esas relaciones, mo- el término. El segundo es el camino.
vidas por los más diferentes intereses El primero fue antes trabajado por
( conciencia crítica). La percepción las filosofías de corte occidental, cuya
de tales intereses en juego no surge cuna fue Grecia. El segundo, en el sen-
espontáneamente, sino que se hace tido aquí tratado, nació en territorio
dentro de un proceso con obstácu- latinoamericano, en el mundo de la
los, con objetivos, con métodos, con pedagogía y la política. Conciencia
reglas propias (concientización), en crítica denota la dimensión filosófica
el interior de la historia (conciencia y connota aspectos pedagógicos, políti-
histórica). La crítica significa la ca- cos. Concientización denota la dimen-

-53-
CONCIENCIA CRÍTICA/CONCIENTIZACIÓN

sión pedagógico-política, connotando situación que la objetivaba y anulaba,


un horizonte filosófico. pedía una antropología existencialista
y personalista. La tensión fundamental
No se pretende aquí hacer fue entre sujeto y objeto, en el sentido
retroceder la reflexión teórica a de que la dominación social objetivaba,
aquel primer movimiento crítico cosificaba la mayoría del pueblo latino-
del mundo griego, cuando la razón americano. Es al respecto de esas masas
instaura la crítica al mito, iniciando dominadas que se ponía el problema de
su marcha luminosa hasta nuestros la conciencia crítica/concientización.
días. El término "crítica" en ese
momento expresa la dimensión ra- El ser humano, fundamental-
cional y lógica del pensar humano mente conciencia, libertad-en-rela-
en contraposición a la fantasía, al ción sólo adquiere "conciencia crítica"
universo mágico de los dioses y ele cuando puede vivir ésa su dimensión
las tradiciones religiosas. profunda en la sociedad y no está
impedido por la situación de opresión
La presente reflexión se sitúa y dominación. Esta conciencia se va
en el momento crítico que se inicia forjando en la historia, dentro del
con la modernidad. El término "con- juego de relaciones económicas y po-
ciencia crítica" no asume, sin embar- líticas. Y la praxis desempeña un papel
go, el sentido de "crítica" de la filoso- fundamental. "La concientización no
fía kantiana. No se trata de investigar puede existir fuera de la 'práctica', o
el valor objetivo y alcance metafísico mejor, sin el acto de acción-reflexión''
del conocimiento. Ni se pregunta por (Freire, 1980). Y la praxis en cuestión
el entendimiento y por la razón en es la de la liberación dentro de un
sus posibilidades de conocimiento, continente de constante tradición de
determinándoles las condiciones. No dominaciones externas con reproduc-
se estudia el aspecto formal del valor ción en las estructuras sociales inter-
cognoscitivo humano, en las posibili- nas. Conciencia/concientización dice
dades y límites. relación con tal condición social.

Los términos tienen relación


con las tradiciones existencialistas (G. DELIMITACIÓN
Marcel, K. Jaspers), personalista (E. CONCEPTUAL
Mounier), hegeliana e marxiana, que
influían en el pensar latinoamericano
en el momento en que ellos fueron Conciencia crítica/Concienti-
teóricamente forjados. Pues acen- zación se sitúan en el proceso teórico
túan la dimensión del hombre como de la evolución del pensamiento pe-
existencia, abertura, ser-en-el-mundo, dagógico y político cultural del Brasil
ser-con-los-otros, sujeto situado, en re- de la década del 50 e inicios del 60.
lación con los hombres, con la historia, Solamente dentro del cuadro social y
con la sociedad y con el mundo. cultural de ese período se consigue
entender el significado y alcance de
La problemática de la concien- esas categorías filosóficas, de fuerte
cia, como emergencia dentro de una impacto pedagógico y político.

-54-
J. B. Libanio, S. J.

El contexto político se defi- la ideología que las venía reteniendo


ne por un momento de ebullición y en esa situación de marginación.
crisis. Tres factores principales faci- Desarrolla un método que pretende
litan el surgimiento del movimiento entrar en la dinámica de ese cambio
de concientización en el horizonte de la conciencia promoviendo una
de la alfabetización. 1) Las clases alfabetización concientizadora. En
dominantes pertenecientes, antes el nordeste, la región más pobre del
de la década del 30, a la oligarquía país, donde tal experiencia se inicia,
rural, entran en decadencia, a pesar había en ese momento 15 millones de
de mantener todavía mucho poder en analfabetos adultos sobre 25 millones
el nordeste. 2) En este contexto de de habitantes. Los primeros resultados
menor poder de esas clases, que ya animadores refuerzan el clima propi-
no consiguen mantener sin más sus cio a tal experiencia: 300 trabajadores
privilegios, y dentro de una creciente alfabetizados en 45 días. Para 1964,
urbanización e industrialización, estaban previstos 2 millones de al-
surge un clima de movilización po- fabetizados y la creación de 20.000
pular en el sentido de participación círculos de cultura, la unidad escolar
política y social en esa región más alfabetizadora. Se crea un verdadero
pobre del país. 3) Y finalmente, movimiento de cultura popular, que
interesa, bajo cierto sentido, al go- el movimiento estudiantil asume e
bierno populista aumentar sus bases incentiva. El proceso alcanza también
electorales de modo que un proceso la creación de 1.300 sindicatos en
rápido de alfabetización favorezca sus un año. Surgen las primeras huelgas
intereses. Un alfabetizado, un voto. rurales en Pernambuco en 1963, en-
Por consiguiente, el movimiento de volviendo una de ellas a 230.000 huel-
concientización fue respuesta en el guistas. Entretanto, el golpe militar de
plano educacional y político, a la ne- 1964 interrumpe tal proceso. Se vivió,
cesidad de movilización democrática por lo tanto, un período de tránsito,
del pueblo brasileño. de crisis de los valores y de los temas
tradicionales con la emergencia de
En ese momento, Paulo Freire nuevas orientaciones. Momento de
interpreta esa crisis de la sociedad bra- opciones, de lucha, con el despertar
sileña subdesarrollada como el paso de de tendencias a la democracia.
una sociedad cerrada, refleja, donde
el pueblo sufría restricción al diálogo, En el universo pastoral de la
sin libre comunicación, pasivo, fatalis- Iglesia, intervienen en la creación del
ta, inmerso en la realidad y distante de clima concientizador el Movimiento
las élites, a una sociedad abierta, con de Natal y el Movimiento de Edu-
aspiraciones nuevas de participación, cación de Base (MEB), en cuyo
democracia, donde el pueblo quiere contexto la palabra concientización
ser sujeto creador de su propio futuro fue usada por primera vez (Agostini:
histórico (Freire, 1969). 1990). El primero se caracteriza por
un conjunto de actividades sociales
Le interesan los problemas y religiosas llevadas a cabo por la
ligados a la conciencia de las masas diócesis de Natal, (Río Grande do
marginadas en vía de transición y a Norte/Brasil), ligadas a la educación

-55-
CONCIENCIA CRÍTICA/CONCIENTIZACIÓN

de base e inspiradas en las escuelas transcendencia activa del hombre


radiofónicas de Sutatenza ( Colom- sobre el plano de la interpretación
bia). El MEB es un movimiento científica del universo natural y de
más amplio de educación de base, su transformación, su creatividad
adoptado a nivel nacional, a partir de frente al mundo y una historia abierta,
1961, donde se introducen aspectos cuyos proyectos, dirección y ritmo
sociales, comunitarios y de toma de vienen marcados por la matriz de la
conciencia política. Ambos movi- subjetividad humana. Esta conciencia
mientos estaban orientados para una histórica transcribe en plano profa-
educación que fuese concientizadora no intuiciones bíblico-cristianas de
y politizante. la historia. Matriz primera de toda
inteligibilidad histórica, ella es enten-
En el contexto de la pastoral dida como elemento estructural de la
universitaria de la Iglesia, se elabo- conciencia moderna, en cuanto surge
ran los conceptos de ideal histórico y como sujeto históricamente activo y
conciencia histórica, que antecedieron creador de un específico universo de
al concepto de concientización. En el cultura con sus dimensiones origina-
seno de la juventud universitaria ca- les y sus características líneas fuerza
tólica QUC), se presenta por primera (Vaz: 1968 A, 2001).
vez (1959) la idea de un "ideal his-
tórico", como forma de compromiso Colocada en una perspectiva
en el orden temporal, influenciada pluralista, ella se revela con incom-
por J. Maritain. Se quiere responder al parable fuerza en la función crítica
problema de militantes cristianos, que de los condicionamientos histórico-
en virtud de la conciencia cristiana, sociales de la cultura. El cristiano está
sienten que no basta para cumplir su llamado a insertarse en la historia, en
1

tarea en el mundo conocer la tesis de · sus movimientos y en sus proyectos y


una teología cósmica, ni estar en una ahí tener una presencia crítica delante
perspectiva de encarnación, sino que de todo lo que lo aliena. Por tanto:
necesitan fijarse ciertos principios me- Encarnación, crítica y superación
dios, que expresen lo que se puede lla- (Souza, 1984).
mar ideal histórico cristiano. Término
medio entre los análisis de sociólogos, En esta altura de la elaboración
economistas, planificadores, políticos del concepto de concientización, ad-
y el pensamiento filosófico, teológico quieren importancia las influencias de
(Becerra: 1959). La influencia cre- Hegel, que estudia en la Fenomenolo-
ciente de E. Mounier y del P. Lebret gía del Espíritu el caminar de la con-
marcan el compromiso en una línea ciencia en dirección al saber absoluto,
personalista y socialista. haciendo la ciencia de la experiencia
de la conciencia, y de G. Lukács con
En un momento posterior, se su obra Historia y Conciencia de
elabora el concepto de conciencia clase, cuya traducción francesa llegara
histórica en nítida superación de "un entonces a Brasil. Esta última provoca-
ideal histórico cristiano". Se trabaja rá discusión sobre la importancia de la
con una conciencia histórica de tipo toma de conciencia en el movimiento
antropológico, donde se afirman la dialéctico de la historia.

-56-
J. B. Libanio, S. J.

Además de esas discusiones a las sugerencias y a las cuestiones


teóricas, el término concientización circundantes por parte del pueblo y en
fue marcado y consagrado, de cierta el aumento de la capacidad de diálogo
manera, por la reflexión de Paulo con los otros, con el mundo. Los inte-
Freire (Freire, 1972). En el inicio, ésta reses y preocupaciones se extienden
floreció a la sombra del pensamiento a esferas más amplias que la simple
liberal, no exento, sin embargo, de sobrevivencia. Se vence la ausencia de
autoritarismo, y del maritainismo y compromiso.
personalismo (E. Mounier). En esa
primera fase, Paulo Freire dependió En un primer momento, la
mucho de los pensadores del ISEB conciencia se hace semi-intransitiva
(Instituto Superior de Estudios Bra- o transitivo-ingenua, todavía domi-
sileños) de tendencia nacionalista- nada, sin suficiente distanciamiento
desarrollista, a quien él atribuye la de la realidad para objetivarla y cono-
creación del término concientización cerla de forma crítica. Es dependiente,
y a Don Hélder su divulgación en los históricamente condicionada por las
universos francés e inglés (Freire, estructuras sociales, como la sociedad,
1980). Faltaban en su pensamiento en la cual se sitúa. Se da una semi-ad-
cierta dialecticidad entre el conoci- herencia y una semi-inmersión en la
miento de la realidad y su transforma- realidad. Los acontecimientos ya no
ción para ir más allá de la mera crítica son percibidos como fruto del acaso
de la realidad y la dimensión política y de fuerzas extramundanas. Se tiene,
de la educación (Paiva: 1980). sin embargo, una visión insuficiente
de las causas y cómo develadas. Se
El término concientización dispone aún de explicaciones dema-
sólo se explica dentro del proceso y siado simples, mágicas, fabulosas y
recorrido que la conciencia hace de de tenor fuertemente emocional. Hay
una conciencia intransitiva para una todavía gregarismo, masificación.
conciencia transitivo-crítica pasando Esta conciencia es impermeable a la
por la fase de la conciencia transitivo- investigación, frágil en la argumen-
ingenua (Freire, 1969). tación, inclinada más a la polémica
que al diálogo.
La CONCIENCIA INTRANSI-
TIVA se caracteriza por la limitación El paso de la anterior para ésta
de su esfera de aprehensión. Es im- se da automáticamente por el hecho
permeable a los desafíos histórico- de la transformación de los patrones
sociales, fuera de la órbita vegetativa. económicos de la sociedad, por el
Manifiesta una falta de compromiso proceso de urbanización. Entretanto,
del hombre con la existencia. Está tal conciencia transitivo-ingenua no
vigente en el interior de la sociedad evoluciona necesariamente para una
cerrada, donde el pueblo tiene la conciencia crítica. Puede decaer para
condición de objeto. diversas formas de conciencia: mági-
ca, fatalista, fanática.
El MOVIMIENTO DE TRAN-
SITIVIDAD consiste en la ampliación La conciencia mágica degrada
del poder de captación y de respuesta la conciencia ingenua y primaria. Per-

-57-
CONCIENCIA CRÍTICA/CONCIENTIZACIÓN

cibe los hechos aislados a los cuales Verifica los resultados, se dispone
se somete. Les atribuye un poder su- a revisiones. Niega la transferencia
perior que viene del exterior y que la de responsabilidad. Se desprende
domina inexorablemente, generando al máximo de preconceptos en el
actitud de resignación y sentimiento análisis de los problemas. Implica
constante de culpabilidad. No se retorno a la matriz de la democracia
perciben las verdaderas causas ni el y a las formas de vida: interrogadoras,
aspecto procesual de los acontecimien- inquietas, dialogales en oposición a
tos históricos. La conciencia fatalis- formas mudas, quietas, discursivas
ta, parecida a la anterior, encara la de fases autoritarias. Desenmascara
situación como algo que jamás podrá la ideología en sus múltiples funcio-
ser cambiado. Es herencia ancestral de nes. Es capaz de autocrítica. Supera
la conciencia de los antepasados frente la ignorancia, la inercia, la impotencia
a las humillaciones, a la esclavitud y a frente a la realidad.
la larga dominación.
En la acción ejerce la función
La conciencia fanática y de mediación entre los valores obje-
manipulada es otra forma de desvío tivos y una determinada situación en
y degradación del estado pre-crítico. el tiempo y espacio. Favorece la cons-
Sucumbe a la armadilla de los sectaris- titución de un conjunto de reglas de
mos miopes. Se somete a un proceso acción, escalonando valores, normas,
de regresión por un irracionalismo exigencias, órdenes, leyes e intención
ciego y pasional. Teme la libertad. crítica. Ejerce función crítica por la
definición y práctica de principios e
El proceso puede tomar otro ideales universales para más allá de
rumbo, de verdadera concientización, la autoridad o identificación pura y
al terminar en la conciencia tran- simple del individuo con un grupo.
sitivo-crítica. Esta no se crea auto-
máticamente, sino a través de una El proceso de concientización
educación dialogal, activa, vuelta para acontece dentro de una comunidad,
la responsabilidad social y política. Se permitiéndole crear un proyecto his-
caracteriza por la profundidad en la tórico como respuesta a determinadas
interpretación de los problemas. Es situaciones y comprometiéndose en
capacidad de diálogo, con orientación pequeñas transformaciones sociales
para la praxis. Es filosófica en su re- que harán surgir una reacción en
flexividad, científica en los contenidos cadena en vista de una transforma-
socio-políticos y culturales, ética en la ción mayor. Le rompe el círculo de
elección de los criterios para la acción, situación marginal e infrahumana.
práctico-política en la orientación al Genera profunda modificación en la
actuar, sico-pedagógica en el interés conciencia que la comunidad tiene de
educativo popular. sí. Surge una conciencia dinámica. Le
hace crecer el nivel de aspiraciones y
Se opone a la conciencia in- la lleva a asumir una actitud crítica
genua, mítica y a la pura adhesión al frente a situaciones vistas hasta enton-
sentido común. Sustituye explicacio- ces desde una perspectiva fatalista. Le
nes mágicas por principios causales. cambia la visión del mundo, los estilos

-58-
]. B. Libanio, S. J.

de vida, los tipos de comportamiento. sociedad que exige una educación


Se pasa de la conciencia oprimida a la de base.
conciencia de opresión, emergiendo
de la existencia oprimida a la concien-
cia del oprimido (Barreiro, 1974). 2. La concientización en la línea
de la integración social del
grupo"marginado" en la gran
Doble orientación básica sociedad
de la concientización
Para neutralizar la solución
revolucionaria, se busca una con-
El proceso educativo de con- cientización que sea elevación del
nivel de cultura y vida del pueblo,
cientización se tornó el polo de discu-
en una perspectiva y mentalidad
sión de dos movimientos ideológicos
reformista (Alianza para el Progreso,
fundamentales que le disputaron la
Voluntarios de la Paz). La promoción
orientación básica (Vaz, 1968,B).
humana cultural de grupos de vida
infrahumana es pensada como factor
de integración social. Corresponde a
1. La concientización como factor
los intereses de los grandes grupos
de un cambio global y estructural,
internacionales (USA). Se trata de una
revolucionario
dignidad humana consentida, otorga-
da y nunca reivindicada, conquistada
Se torna parte esencial de la
por el propio pueblo.
pedagogía de la revolución. Los gru-
pos se hacen agentes de revolución,
A partir de esa doble perspec-
al asumir una conciencia crítico-re-
tiva, surge la pregunta si concientizar
volucionaria en relación a la situación es ideologizar. En el nivel de la forma-
de dominación. La concientización lidad abstracta, hay clara distinción
es, por tanto, el primer momento de entre concientizar e ideologizar. Pero
la formación de la cultura popular, en toda concientización concreta, hay
como formación de conciencia revo- siempre elementos ideológicos y por
lucionaria. En esa perspectiva, el cine eso ella produce una ideologización.
nuevo, la UNE (Unión nacional de La cuestión se traslada entonces para
estudiantes) con teatros populares y el aspecto ético de la elección de los
determinados cantores invirtieron su elementos ideológicos que más corres-
caudal cultural-artístico en función de pondan a la justicia, a los derechos
la ideología de las clases oprimidas, humanos y a los valores universales.
para que las masas latinoamericanas El criterio ético fundamental de la
pudiesen empeñarse en la lucha de liberación es la afirmación de la
liberación. Quien se concientiza es la vida, sobretodo en favor de aque-
comunidad solidaria y no individuos llos a los cuales está negada por el
aislados, en una situación como de sistema, a saber, los pobres. En ese
marginación y miseria. Es una fase sentido, la opción por los pobres se
y momento de proceso global de torna el principio ético fundamental
transformación revolucionaria de la de discernimiento en el proceso de

-59-
CONCIENCIA CRÍTICA/CONCIENTIZACIÓN

concientización. El proceso de con- sociedad cerrada de cosmovisión fixista


cientización implica una ideología y estática, carente de un pensar histó-
refleja de la liberación, una concien- rico y donde la estructura familiar es
cia crítica a las opresiones presentes extremadamente autoritaria, machis-
del sistema y una utopía de sistema ta, patriarcal y sin diálogo. Tampoco
alternativo. Y en una perspectiva acontece donde el imaginario social
pastoral eclesial, interfieren los crite- religioso sagrado forja una conciencia
rios evangélicos en la elección de los de absoluta dependencia a factores
elementos ideológicos. explicativos y actuantes transcendentes
al respecto de los hechos cósmicos,
sociales y políticos.
Obstáculos de la
conciencia crítica 4. Manipulación ideológica: ésta se
produce a través de mecanismos de
ocultamiento de los reales intereses
El proceso de concientización de los grupos dominantes, haciéndo-
tiene sus trastornos: los aparecer como orientados para el
bien de todos, especialmente de las
1. Basismo: afirmación de la autono- masas marginadas. Se tienen ejemplos
mía del grupo social popular. Tiende recientes de experiencias desastrosas
a rechazar toda influencia venida del y patológicas de manipulación ideoló-
exterior. Se teme que por el hecho de gica (nazismo, fascismo, estalinismo,
enseñar al pueblo genere automatis- macartismo, dictaduras militares de
mos y mistificación popular. seguridad nacional). Esta manipula-
ción termina produciendo en las ma-
2. Vanguardismo: concibe el proceso sas una conciencia de connaturalidad
transformador de la sociedad lleva- con la realidad social. Les determina
do por una fuerza de primera línea los comportamientos y actitudes.
que concientiza la sociedad para un Legitima el orden institucional, esta-
movimiento general de liberación. bilizando el poder. Domestican a las
Se instaura una práctica vertical, au- personas, internalizando en ellas los
toritaria entre agentes y base. Tiene valores dominantes.
carácter elitista. Propugna la forma-
ción de pequeños filósofos ilustrados, 5. Masificación: este fenómeno puede
que desde sus alturas teóricas dirigen distorsionar la conciencia transitivo-
y enseñan. Tal posición revela una ingenua hacia posiciones míticas más
conciencia sectaria, que incluso peligrosas que el tenor mágico de la
conteniendo elementos críticos de la conciencia intransitiva, generando un
realidad, se endurece y se radicaliza descompromiso con la existencia aun
de tal manera que termina perdiendo peor. Con el recurso de los sofistica-
el sentido de autocrítica, la capacidad dos medios de comunicación social
de diálogo y discusión. por parte de las fuerzas dominantes,
es hoy la masificación, sin duda, el
3. Condicionamientos socio-políticos, mayor obstáculo para el desarrollo
culturales: el surgimiento del proceso y mantención viva de la conciencia
concientizador no acontece en una crítica.

-60-
J. 13. Libanio, S.J.

Nuevas coyunturas 1
especialmente de los Estados Unidos.
Esa cultura fragua la mente consumista
en el doble efecto·perverso de ofrecer
1
El colapso del socialismo dejó a la~ •clases privilegiadas el acceso a
al capitalismo en la forma neoliberal los bienes sofisticados y a las clases
como único sistema vigente. Éste populares la frustración no exenta de
asumió la tarea de sacar de raíz todo violencia. Se genera una enorme masa
resquicio social presente en el capi- de excluidos, entregados a la pobreza
talismo keynesiano, deºsmontando al y a la miseria.
Estado de Bienestar social. Arrojó al
socialismo para el mundo arcaico y En ese sentido, la concientiza-
del mito. Anunció el fin de la historia, ción se torna todavía más importante,
de la ideología y de la utopía, presen- aunque fuera del. sistema. Se lucha
tando, como único modelo viable, la contra la corriente, por casualidad ya
democracia liberal americana articula- no se cuenta con la inteligencia que
da con el capitalismo avanzado de tal la secundó en la década del 50 ni con
modo que toca a las naciones, sobre la organización popular. No obstante,
todo emergentes copiarlo. Se renun- así como Paulo Freire dispone de las
cia de este modo a cualquier posible Escuelas radiofónicas, hoy es posible
proyecto social diferente. Se firma el aprovechar de las vías electrónicas
documento de defunción para todo para acelerar el proceso de concien-
el proceso de concientización porque tización y de educación de la base.
no hay qué criticar ni qué proyectar Es el desafío que se presenta en el
utópicamente. Todo ya está realizado espíritu de la utopía del Foro Social
como única alternativa. Se asocia a Mundial: "Otro mundo es posible".
ese sistema económico neoliberal un La tarea de hoy de la concientización
proceso de globalización propiciado "a través del análisis político, serio y
por el avance de la comunicación. Con correcto, es develar las posibilidades,
eso, una cultura de masa es generada no importan los obstáculos para la
y difundida desde los países centrales, esperanza" (Freire, 1992).

-61-
CONCIENCIA CRÍTICA/CON CIENTIZACIÓN

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-62-
CONTRADICCIÓN/
CONFLICTO
Alberto Parisí
- - - - - - - - - - - - - - - -

Argentina

Palabras Clave
RAZÓN - DIALÉCTICA - ONTOLOGÍA - MARXISMO - DIFERENCIA
- EPISTEMOLOGÍA - HISTORIA - MODERNIDAD/POSTMODERNIDAD.

INTRODUCCIÓN la vieja impugnación de Popper, para


quien la contradicción sólo podía ser
un atributo o característica de los
Si bien debe reconocerse una enunciados, no así de la realidad 2 •
cierta polisemia en conceptos tales Aunque sea una ingenuidad teórica
como contradicción, conflicto, anta- pensar una realidad social "sin contra-
gonismo, lucha, oposición, etc., todos dicciones" (lo mismo que imaginarla
ellos ligados a las distintas teorías metafísicamente "contaminada" por
sobre la dialéctica y sus respectivas contradicciones), debe indicarse
tradiciones, se necesitan algunos que las contradicciones sociales son
acuerdos semánticos mínimos, para fechables: esto quiere decir, son his-
poder siquiera exponer la temática. tóricamente determinadas, sus causas,
En función de ello propondremos el empírica y parcialmente ubicables. No
término contradicción como concep- provienen de determinismos genéti-
to que remite a oposiciones o antago- cos, la fatalidad, el sinsentido o desde
nismos inherentes a la propia realidad "fuera" de la historia.
social, de carácter estructural. Con
ello, no se propone ninguna metafísica El carácter real, empírico, his-
de la contradicción, sino que se señala tóricamente determinado de las con-
la índole no homogénea, no lineal y tradicciones sociales y su dimensión
no estática de lo social. Tampoco se estructural, son el "telón de fondo"
quiere negar su carácter discursivo, de la interacción social. Ello no im-
lo cual no significa que adhiramos plica que los actores sociales a priori,
a los excesos del "giro lingüístico" sean conscientes de esta dimensión
el cual, por temor a referirse a cual- objetiva de su existencia social. Pero
quier esencia(lismo), ha terminado pueden llegar a serlo parcialmente,
-en diferentes casos- expresándose pueden llegar a serlo grupos, sectores
en relatos sobre las bondades de la sociales, individuos, etc .. Siempre en
fragmentación y la evanescencia 1 • principio, las inercias de la vida social
Debe precisarse, asimismo, que con la conducen a la naturalización de las
postura que aquí se asume se rechaza condiciones objetivas. Es por ello que

-63-
CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

las contradicciones no se expresan tancia, de las contradicciones que se


ni automática, ni lineal ni necesaria- pretendieron asumir y resolver. Toda
mente en conflictos abiertos, que esta temática debería articularse con
pongan en tela de juicio los supues- la cuestión clásica de la praxis y, en
tos de cualquier orden social dado. lenguaje gramsciano, con el proceso
Los conflictos, pues, conllevan tanto de constitución de la hegemonía. 3 .
un grado mayor de percepción de las
propias condiciones objetivas por parte
de los actores sociales involucrados, DELIMITACIÓN
cuanto un mayor nivel de demanda, or- HISTÓRICA
ganización y confrontación con aquellas
condiciones mencionadas. En relación a
las contradicciones, los conflictos sólo l. Esta antigua temática filosó-
expresarían un "descongelamiento" fica, cuyos desarrollos pueden seguirse
inicial, parcial, de la naturalización en las diferentes teorías de la dialéctica,
sobre la que reposan las mismas. No tiene hitos clásicos en el pensamiento
nos indican más; por ejemplo, los con- griego, vgr.: Platón", Aristóteles 5 . De
flictos no son una garantía en relación los estoicos a la edad media pueden
a la dirección que asumirán, a la poten- encontrarse innumerables textos, au-
cialidad que tendrán para desbloquear tores y momentos del tratamiento de
las contradicciones en el sentido de , la dialégueszai griega. En el idealismo
una resolución positiva de las mismas. alemán se encuentra otro momento
Con ello, quiere decirse que la rela- decisivo: la Doctrina de la ciencia
ción entre conflicto y contradicción de Fichte y Hegel, por supuesto: La
no es necesaria, sino contingente; no Fenomenología del Espíritu y la
se trata de una secuencia mecánica o Ciencia de la Lógica, textos clásicos
lineal, sino compleja y que dependerá ya consagrados6 . Un tercer momento
-para fijar su sentido y dirección- de está constituido por la obra de Marx
las prácticas sociales portadoras de de- y el contexto de su producción: des-
mandas, organización y confrontación de lo que aprendió de los críticos de
de los actores sociales. De últimas, Hegel, en especial L. Feuerbach ( La
la expansión y recomposición de los filosofía del porvenir, por ejemplo) ,
conflictos se expresará en el ámbito de los trabajos de f Engels (sólo algunos,
lo político, como confrontación y de- básicamente su L. Feurbach y el fin
bate de los diferentes actores sociales de la filosofía clásica alemana) y
en torno al poder social, sus formas de la posterior y problemática tradición
construcción, acumulación y gestión. del "socialismo científico". Ello se
Decimos "en el ámbito de lo político", verá con más claridad en el siglo XX:
en la medida que postulamos que el por un lado la dogmática tristemente
conflicto abierto "no legitimado" es célebre del Diamat, que no aportó nada
una expresión de descongelamiento teórica o empíricamente que pueda
de la contradicción "sin norte", sin considerarse significativo, y sí resultó
capacidad de producción de novedad un retroceso conceptual generalizado.
histórica y social y, paradójicamente, Por otro lado, autores y desarrollos de
con una fuerte capacidad de destruc- relevancia, tales como G. Lúkacs7, la
ción y reforzamiento, en última ins- Escuela de Frankfurt 8 , el pensamiento

-64-
Alberto Parisí

gramsciano, Sartre 9 , Merleau-Pon- y, de la contradicción en particular.


ty10, Goldmann 1 \ Kosik 12, Dussel 13 y Salvada esta observación debe aña-
filósofos reconocidos de las escuelas dirse que ello tampoco es el objetivo
italiana, yugoslava y checoslovaca. principal de este escrito.
Enumeración parcial de lo que fue la
contracara del Diamat, a lo que habría 2. Con los cambios originados
que añadir la producción de filósofos a partir de las crisis del Estado de
de habla sajona, españoles, africanos, Bienestar, la tercera gran revolución
asiáticos y latinoamericanos. científico técnica, el fin del modelo de
acumulación keynesiano y la creciente
El pensamiento latinoameri- imposición del "giro lingüístico" en
cano siguió, en gran medida, el molde la filosofía y las ciencias sociales, se
europeo. El discurso oficial partidario llegó -entre otras consecuencias- a un
(básicamente, los PC) siguió recitan- eclipsamiento notable del "marxismo
do la "vulgata marxistaleninista". El occidental". En Latinoamérica, el dis-
mundo académico presentó matices y curso académico desertó del desafío
algunas elaboraciones de indudable de seguir pensando y resignificando
valor conceptual: sólo algunos nom- la llamada racionalidad dialéctica ( cosa
bres para reconocer una producción que ocurrió por cierto, primeramente
que se expresó en estudios sociales, en Europa). Ahora bien, un filósofo
políticos, epistemológicos, etc.: Ma- latinoamericano radicado desde los
riátegui, Silvio Frondizi, Alfredo Lla- '60 en Inglaterra (Universidad de
nos, Ricaurte Soler, Serrano Caldera, Essex) llevará a cabo una significa-
González Casanova, etc.etc .. tiva empresa: desde el corazón de
los supuestos del "giro lingüístico",
Dos movimientos merecen una fuertemente ligado al pensamiento
atención especial: "Pasado y Presen- de Lacan y Derrida, intentará retomar
te", nacido en Córdoba (Argentina) en y redefinir cuestiones centrales del
la década del '60, como escisión nota- discurso dialéctico. Nos referimos a
blemente progresista del PC argentino Ernesto Laclau. Si bien su producción
(y con figuras de gran relieve, como al respecto ha abarcado textos que van
José Aricó, el introductor-traductor desde finales de los 70 hasta comien-
de Gramsci en Latinoamérica) 14 y el zos del siglo XXI 16 , Laclau acuerda
movimiento de intelectuales surgidos inicialmente con Popper, para quien
en torno a la revista "Dialéctica" de hablar de "realidad contradictoria" no
la Universidad Autónoma de Puebla, tiene sentido; en función de eso, sólo
México, que se comenzó a publicar las proposiciones pueden considerarse
en 1976. Un tratamiento especial contradictorias. No obstante y, para-
merecería el pensamiento del filósofo dójicamente, nuestro autor concluirá
argentino, residente en México desde que " ... las proposiciones son también
1975, Enrique Dussel1 5 • El cuadro parte de lo real y, en la medida que
precedente es, necesariamente incom- existen empíricamente proposicio-
pleto. No refleja ni expresa el conjunto nes contradictorias, es evidente que
de la producción que por países, por existen contradicciones en lo real" 17 •
ejemplo, aportó a un debate sobre la Sorprende que un pensador formado
cuestión de la dialéctica, en general dentro de una perspectiva por demás

-65-
CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

diferente, flexible y rica que la pop- igual. Para Laclau, el antagonismo


periana, coincida, por una parte, con deviene de que, además de Ego, tam-
Karl Popper, epistemólogo imper- bién está Alter; la presencia de uno
meable a la historicidad y con fuertes siempre atenta contra la plenitud de la
prejuicios en relación a la dialéctica; presencia del otro. Esta imposibilidad
por otra, que reitere una afirmación de un positividad plena u objetividad
sorprendentemente banal, como es plena originada en la diferencia (igual
decir que la contradictoriedac/ de los que en la metafísica de Hegel, donde
real proviene de que las proposiciones el descubrimiento del otro llevará a la
-que sí pueden ser contradictorias- ¡ conciencia -que se autocomprendía
existen empíricamente. La verdad es una y única- a un desgarramiento y
que esto último y la afirmación de la a la instauración de una relación des-
"discursividad de la realidad social" igual, expresada en la figura del amo
-central en el planteo de Laclau- tie- y el esclavo)'" constituirá la génesis
nen poco y nada que ver. del antagonismo. " ... en el caso del
antagonismo nos encontramos con
En realidad, Ernesto Laclau va una situación diferente: la presencia
a ir en otra dirección, más allá de este del ·otro· me impide ser totalmente yo
desafortunado y paradójico encuentro mismo. La relación no surge de identi-
y acuerdo con Popper. Para el filósofo dades plenas, sino de la imposibilidad
argentino radicado en Essex, la cues- de constitución de las mismas" 2 º
tión a pensar es la del "antagonismo"
(que nosotros aquí llamamos "contra- Si bien Laclau no replicará
dicción"; el propio Laclau identificó totalmente el derrotero de Hegel
ambos conceptos hasta 1980, según (que concluye el proceso dialéctico
lo aclara él mismo en una nota a pié en la reconciliación de los opuestos o
de página en su Hegemonía y ... , contradictorios -reconciliación harto
pág. 144). problemática ya que, como se puede
constatar en la Ciencia de la Lógica,
En el tratamiento del antago- la conciencia de lo otro no será sino
nismo, Laclau llevará al extremo los una nueva determinación de lo uno),
supuestos del "giro lingüístico"; en sí ha pensado la contradicción -en su
realidad, habría que decir que sesga caso, el antagonismo- en perspectiva
su análisis por uno de los derroteros hegeliana: es siempre el otro quien
débiles del famoso "giro", por lo que me limita y constituye el origen del
concluirá elaborando una nueva meta- antagonismo. Como si el "ideal de
física del antagonismo y la diferencia, ser" fuera que sólo debería existir Eg,o;
como veremos 18 • No porque trate lo y Alter emergiera para limitar, con-
social como "discursivo" (de hecho frontar, antagonizar. Esta perspectiva
hace claros esfuerzos para que se com- de fondo trágico y melancólico para
prenda qué significa esa sustantiva entender al otro, además de ser una
afirmación), sino porque dentro de la metafísica al modo hegeliano, tiene
estrategia de su concepción "antago- la "desventaja" respecto de Hegel de
nismo" y "diferencia" quedarán al in- que ni siquiera puede plantearse la
terior de una comprensión por demás reconciliación, ya que es una versión
problemática y una relación asimismo ! secularizada del pesimismo religioso

-66-
Alberto Parisí

de la alteridad del filósofo alemán. y en cualquier escala para advertir


" ... el antagonismo es el fracaso de la que existe una dinámica de las con-
diferencia ... ", señala Laclau 21 ; ¿no es tradicciones que, inexorablemente,
esto un hegelianismo secularizado, conduce a resultados esperados 24 •
hecho desde los flancos débiles que ha Se llegó a identificar groseramente
manifestado el "giro lingüístico"?. contradicción con diferencia, de tal
modo que era "dialéctica" tanto la
totalización de las diferencias, como
DELIMITACIÓN la totalización sobre las diferencias (es
CONCEPTUAL decir, se identificó la totalización que
se construye a partir de la fecundiza-
ción de las diferencias como la que
En relación y en función de se yergue sobre la eliminación de las
lo expresado previamente, plantearía mismas). Por ello, hay que reafirmarlo
inicialmente que dos cuestiones deben con claridad: las contradicciones no
destacarse 22 : la "hegelianización" de son garantía per se, de movimiento ni
la contradicción (es decir, volverla resolución dialécticos. Sólo un "feti-
un atributo metafísico de la realidad) chismo de la contradicción" puede
y la conversión de la diferencia en resignar el curso de la historia y su
una ilusión. Ello sería explicable, en comprensión, a las solas potenciali-
principio, a partir de cuánto se sea dades espontáneas e inmanentes de la
tributario de la herencia del filósofo misma . Proseguiremos ahondando en
alemán. Expondré estas cuestiones estas cuestiones, a partir de un análisis
confrontándolas con la tradición del algo pormenorizado del discurso de
pensamiento dialéctico histórico- Hegel, en sus obras centrales.
social.
2. La contradicción mistifi-
1. En diferentes tradiciones
donde se sostuvo el discurso dialé-
ctico, no únicamente el Diamat sino Hegel fue un notable "lector"
tradiciones más actuales como la de la historia, que supo comprender
escuela de Althusser (uno de cuyos que su desarrollo no es lineal ni homo-
descubrimientos fue retomar el pen- géneo, sino contradictorio; y que en la
samiento de Mao y especular sobre el superación de las contradicciones, la
mismo), a pesar de su rechazo verbal historia devenía totalización dialéctica.
de Hegel, se pensó desde la tradición Sin embargo, para Hegel, las contra-
metafísica hegeliana. Así en Mao y, dicciones, por más que aparecieran
mucho más rígidamente en el Diamat, empíricamente en la historia y la
bastó con que se comenzara por afir- sociedad, no podían entenderse en
mar que "todo es contradictorio" 23, se y por la historia y la sociedad, sino
prosiguiera con que las contradic- que debían remitirse al plano profundo
ciones generan cambios cualitativos del sujeto espíritu; en ese nivel podían
y se terminara constatando que ello entenderse y resolverse. Esto impli-
implicaba haber descubierto el "se- ca plantear desde ya una hipótesis
creto" de la historia. Bastaba aplicar de lectura de la contradicción en
este esquema a cualquier proceso Hegel: para él la contradicción se

-67-
CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

revela en la historia y la sociedad, los pueblos avanzados (lo que será


pero en realidad ello no es sino su el capitalismo colonialista inglés y
apariencia. En esencia, la contra- europeo continental) al dominio
dicción pertenece y se resuelve (el ultramarino (la segunda coloniza-
momento de la "reconciliación") ción) para resolver por ese medio
en el ámbito del sujeto-espíritu, la contradicción planteada. Es muy
como ya afirmamos. La contra- importante hacer notar que para el
dicción deshistorizada, aunque con filósofo alemán dicha contradicción
efectos empíricos visibles es, pues, expresada en la historia empírica de
de carácter "metafísico" (asumiendo su tiempo no se explicaba inmanen-
el término en un sentido peyorativo, temente; venida desde fuera - "sin
como cuando se quiere decir que una aviso previo" - y anclaba en un es-
expresión es mistificadora, portadora cenario empírico "inocente" (la libre
de la "mala abstracción"). Esta con- sociedad civil, preocupada en produ-
tradicción no-histórica, de entidad cir y progresar), no tiene solución
empírica al modo platónico, aparece ni salida, como se ha dicho. Se trata
a los ojos profanos de repente, como de una maldición o sino trágico. Sin
un desastre natural inesperado. Es embargo, visto el problema desde el
una suerte de pecado original inex- desarrollo del sujeto-espíritu, la racio-
plicable dentro de la historia; pero nalidad superadora y reconciliadora
si poseemos las claves o el secreto se improndrá finalmente: "aparece-
de la verdadera historia -secreto y rán" las colonias como espacios don-
claves sólo comprensibles en las de obtener nuevos consumidores,
honduras especulativas- sabremos nuevas fuerzas productivas y nuevas
qué es, de dónde viene y a dónde fuentes de trabajo e inversión. Y hay
va. Un texto muy ilustrativo de esta que hacer notar, además, que el mo-
cuestión se encuentra en la Filosofía tor de toda esta empresa no será un
del Derecho, parágrafos 243-248, estrecho deseo de sola ganancia, sino
donde Hegel se plantea la contra- esencialmente una nueva actitud
dicción surgida en el capitalismo espiritual: la elevación del deseo de
de su época, por efecto de la fuerte lucro, su fluidez y purificación por
concentración de la riqueza (pocos el peligro y la renuncia a los placeres
se han apropiado de la mayoría de los inmediatos. Así, este nuevo "enlace"
bienes y las masas -la "plebe" según -término expresado por Hegel- (el
el texto- se debaten en la mayor mi- comercio colonialista) adquirirá un
seria). Cualquier solución inmediata lugar y un sentido racional en la
que se plantee (mayores tributos a la historia universal.
riqueza o soluciones filantrópicas)
no harían sino profundizar la con- 3. La contradicción mistifica-
tradicción emergente; como lo dice da momento del método dialéctico
Hegel, ello llevaría a " ... aumentarla idealista
indigencia en la riqueza". Sin em-
bargo, desde el punto de vista de su Profundicemos un poco más el
teleología histórica, Hegel advierte concepto de contradicción en cuanto
la racionalidad de la contradicción, despliegue del espíritu, en cuanto pro-
al postular cómo ello impulsará a ceso del saber (i.e. desarrollo del con-

-68-
Alberto Parisí

cepto) o método dialéctico idealista. ¿Qué ocurre, entonces? Que la con-


Para ello, habrá que detenerse breve- ciencia inmediata, por sí misma, ha
mente en textos de la obra central de entrado en contradicción (recuérdese
Hegel, la Ciencia de la Lógica 25 . Allí, la "conciencia desgarrada" de la Feno-
el proceso dialéctico comienza en el menología del Espíritu).
mismo punto de partida que la Feno-
menología del Espíritu: la absolutez Uno podría presumir que este
de la conciencia inmediata. "Por doloroso desencantamiento se con-
tanto, el comienzo no tiene, por el vertiría en un camino sin retorno, a
método, ninguna otra determinación partir del cual la conciencia se abriría
que la de ser lo simple y universal [o definitivamente al orden de lo otro que
universalidad abstracta e inmediata, está fuera de la misma. Pero, pensar
A.P.]; ésta es, precisamente, la deter- así sería ser poco hegeliano; implica-
minación por la cual el comienzo es ría creer que la contradicción puede
defectuoso ... (pero) tiene que poseer doblegar al sujeto-espíritu, romper
el don del impulso para llevarse ade- con sus "reglas de juego", imponerle
lante26. Hegel expone, pues, que si el condiciones. De ninguna manera: la
comienzo (la conciencia inmediata) contradicción no negará a la concien-
es defectuoso, porque aún no está cia como absoluta e incondicionada,
desarrollado, no obstante posee en motor de su propio desarrollo, motor
sí mismo la capacidad de su autodes- de lo real. Sólo negará su inmediatez
pliegue. Será en este autodesplegarse para que, a continuación, la propia
donde aparecerá la contradicción conciencia advierta que ese "otro" que
como momento necesario. En efec- parece existir más allá de sí misma, es
to, cuando la conciencia inmediata solamente una nueva determina-
, en el momento del juicio, afirma ción ... de la propia conciencia.
algo exterior a ella, distinto de ella,
es cuando emerge la contradicción: Hay un texto lapidario de la
"Este momento del juicio, por cuyo Ciencia de la Lógíca, probablemente
medio lo universal inicial se deter- uno de los más sublimes del pensa-
mina por sí mismo como lo otro con miento de Hegel, donde se manifiesta
respecto a sí, tiene que ser llamado con mayor hondura el núcleo duro
el momento dialéctico. . .. ( en él) lo del idealismo; dice así: " ... el método
inmediato ha perecido en el otro; [dialéctico, A.P.] tiene que ser reco-
pero el otro no es esencialmente el nocido como la manera ilimitada,
negativo vacío, la nada, ... sino que universal, interna y externa, y como la
es el otro del primero, lo negativo de fuerza absolutamente infinita, a la que
lo inmediato ... "27 • ningún objeto, mientras se presente
como exterior, alejado de la razón e
Al afirmar en el juicio una independiente de ella, podría ofrecer
existencia exterior a sí misma, la resistencia, esto es conservar frente a
conciencia inmediata afirma algo que ella una naturaleza particular y recu-
está más allá de sí, exterior a su sus- sarse de ser compenetrado por ella.
tancia espiritual. Pero en ese mismo Por eso, el método es el alma y la sus-
instante se rompe el encantamiento de tancia, y cualquier cosa es concebida
su absolutez y universalidad iniciales. y conocida en su verdad sólo cuando

-69-
CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

está totalmente sometida al método . ... se termina imponiendo es la identi-


el método no es sólo la potencia supre- dad del sujeto espíritu, que se engulló
ma o, mejor dicho, la potencia única y la diferencia.
absoluta de la razón, sino también su
supremo y único impulso, que lo lleva 4. La crítica la dialéctica idea-
a encontrar y conocer, por sí misma, a lista, desde el discurso dialéctico
sí misma en toda cosa". 28 • histórico-social

Es este poder del sujeto espíri- ¿Es inexpugnable la posición


tu el que, como señalamos anterior- hegeliana? Ya Feuerbach no pensaba
mente, convierte a la diferencia en eso. La atacó desde algunas "posicio-
una ilusión; ya Sartre había afirmado nes débiles" del sistema hegeliano: la
que en Hegel la " ... conciencia del cuestión de la sensibilidad. Para el
Otro ... es el ser otro de la concien- crítico de Hegel, la sensibilidad y el
cia"29. Y, en este mismo sentido, T. amor se constituirán en nuevos crite-
Adorno sentenció que "Desde el rios epistemológicos que posibilitarán
momento en que Hegel resuelve abordar dimensiones de la realidad
consecuentemente lo diferente en más allá del logos hegeliano. Por ello,
la pura identidad, el concepto pasa para Feuerbach la dialéctica pierde el
a ser garantía de lo no conceptual, carácter de gigantesca tautología al
la trascendencia es capturada por la interior del sujeto espíritu, y se abre
inmanencia del espíritu y práctica- a la alteridad real y efectiva del otro.
mente eliminada al convertirse en la Casi concluyendo su Filosofía del
totalidad de éste" 1º. Por ello enten- porvenir nos previene así: "la ver-
demos que Hegel pudiera decir en la dadera dialéctica no es un monólogo
Enciclopedia de las ciencias filosó- solitario del pensador consigo mismo,
ficas que "La esencia no es sino pura sino diálogo entre yo y tú" 32 •
identidad ... en sí misma ... ; contiene,
pues, esencialmente la determinación En cuanto a Marx -un momento
de la diferencia" 11 . Como hemos vis- fundacional de lo que hemos llamado
to, pues, la contradicción ha jugado "dialéctica histórico-social" - deben
el papel endógeno y necesario de ne- hacerse algunas observaciones pre-
gación de la inmediatez, para relanzar vias. En primer término, en sus obras
al sujeto espíritu a la conquista de lo maduras trabaja esencialmente en una
(que parece) otro. La negatividad es- lectura científico-crítica del Modo
peculativa (negación o superación de producción capitalista y no en la
de la contradicción -o "negación de elaboración filosófica epistemológica
la negación"-) conseguirá triunfar de categorías. Debe, eso sí, en muchas
sobre lo pretendidamente otro, al ocasiones detenerse y precisar teórica-
demostrar que éste (la diferencia, mente sus categorías, pero siempre en
de últimas) no vive sino de la vida función de sus objetivos centrales. En
racional del espíritu. Por lo tanto, este sentido, más se tienen que recons-
la conciencia, en el momento de la truir categorías teóricas, que recogerlas
contradicción no experimentó sino la ya elaboradas y explicitadas (cosa que
ilusión de una diferencia "diferente". no ocurre con el filósofo profesional
Pero lo que siempre y reiteradamente que es Hegel).

-70-
Alberto Parisí

En segundo término, asumir En tercer lugar, cierta herencia


a Marx implica una lúcida crítica a positivista que siempre acechó y pro-
por lo menos dos momentos de su blema tizó la producción marxiana.
discurso, que van a contramano de Entre varios lugares, recuérdese cuan-
su rol como clásico o piedra basal do en el Epílogo a la segunda edición
de una dialéctica histórico-social. del tomo I de El Capital (1873),
Nos estamos refiriendo tanto a algo Marx consiente y reafirma lo dicho
más que "coqueteos" con Hegel al por un crítico sobre su obra, quien
embarcarse en una suerte de filosofía aseveró lo siguiente: "Marx concibe el
de la historia, al modo hegeliano. movimiento social como un proceso
Recordemos los trabajos periodísticos de historia natural, regido por leyes
de Marx sobre el problema colonial, que no sólo son independientes de
en la década de 1850; en relación a la voluntad, la conciencia y la inten-
México y la India, la figura de Bolívar y ción de los hombres, sino que, por
otros tópicos, nuestro autor desarrolla el contrario, determinan su querer,
una concepción del curso histórico conciencia e intenciones ... " 34 .
que asume como eje de comprensión
totalizadora, el propio desarrollo del Hechas estas importantes sal-
capitalismo (que se suponían que jus- vedades, intentaremos explicitar
tamente debía -allí- criticar). De esta algunas características centrales de
forma, aunque lamente moralmente la concepción de la contradicción y
que México haya perdido la mitad los conflictos en el discurso marxia-
de su territorio nacional, o que las no. Se debe aclarar, finalmente, que
fuerzas productivas de la India hayan el desarrollo que sigue se funda, en
sido destruidas por el capitalismo gran medida, en la clásica exposición
colonialista inglés, pareciera que que Marx hiciera en la Introducción
asiente al fatalismo de un desarrollo los Grundrisse 35 .
implacable, que no puede tener otra
alternativa. De este modo, por ejem- En primer término, en la con-
plo, Marx concluye en relación a la cepción de Marx las contradicciones
India: "De lo que se trata es de saber si son históricamente determinadas y
la humanidad puede cumplir su misión sociales; vale decir, que han desalo-
sin una revolución a fondo del estado jado las premisas metafísicas con que
social de Asia. Si no puede, entonces, se presentan en el discurso de Hegel.
y, a pesar de todos sus crímenes, Ingla- La inteligibilidad de la contradicción
terra fue el instrumento inconsciente de no se sitúa a nivel especulativo (el
la historia al realizar dicha revolución. orden del sujeto espíritu), sino en el
En tal caso, por penoso que sea para terreno de la historia y la sociedad.
nuestros sentimientos personales el Esto no significa que postule mo-
espectáculo de un Viejo Mundo que mentos históricos en que "no hubo"
se derrumba, desde el punto de vista de contradicciones y en donde, por lo
la historia, tenemos pleno derecho a tanto, la historia y la sociedad habrían
exclamar con Goethe: ·Quién lamenta constituido una unidad simple, origi-
los estragos/ si los frutos son placeres,/ naria, armónica y autotransparente.
¿no aplastó a miles de seres/Tamerlán Por el contrario, enfatizar el carácter
en su reinado? ·33. de historicidad determinada reafirma

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CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

el rechazo a una necesidad metafísica nismo objetivo o voluntarista en


de la contradicción. Así, por ejemplo, el campo histórico y social. Si bien
cuando Marx -en El Capital- pos- debemos resignificar las exposicio-
tula una contradicción inherente a nes de Marx, para que se liberen
todas las sociedades productoras de de determinadas acentuaciones
mercancías (contradicción que en la positivistas, en aquellas está clara
sociedad/mercado capitalista encuen- la cuestión de la determinación
tra su máxima expresión en la figura estructural (no absoluta, por cier-
del fetichismo de la mercancía), no to). A través de la resignificación
plantea un problema historiográfico aludida previamente, deberíamos
acerca de la fecha de comienzo de hacer hablar al determinismo relativo
tal contradicción, "antes" de la cual de las estructuras de la dialéctica
no habría habido contradicciones; histórico-social, al modo como,
más bien su planteamiento tiende a vgr., A. Giddens replanteó la do-
explicarnos el origen específico de ble función de las estructuras, en
esa contradicción, posibilitado en su trabajo Las nuevas reglas del
determinada forma histórica de las método sociológico o en el sentido
relaciones sociales. del Hábitus, tal como lo desarrolló
la teoría sociológica de P. Bourdieu.
En segundo lugar, el carácter Por cierto que algunas décadas antes
antimetafísico de la contradicción a la producción de estos autores,
debe oponerse a todo naturalismo L. Goldmann ya había planteado
de la contradicción; vale decir, a cuestiones centrales acerca de la
aquellos discursos que han hecho de temática estructuras/historia y de
la misma un principio a priori de la la "naturaleza" de la determinación
naturaleza (y por lo tanto, también, estructural.
de la sociedad y la historia). Según
este discurso (en el que tenemos que En cuarto término, no conce-
incluir parcelas importantes de los bir metafísicamente las contradiccio-
desarrollos engelsianos sobre la dia- nes también supone no conferirles
léctica de la naturaleza; asimismo, re- la función activo-crítica que posee
cordar que ello fue moneda corriente en Hegel. Para este autor, según ya
dentro del Diamat), la contradicción se expuso anteriormente, la contra-
es un a priori óntico, regido por leyes dicción necesaria , necesariamente
específicas, tal como las famosas "le- relanza la inmediatez desgarrada
yes de la dialéctica". Está claro que -vía negatividad especulativa o ne-
el naturalismo de la contradicción es gación de la negación- más allá de
tan metafísico como la contradicción sí misma hacia una finalidad que ya
necesaria de Hegel, sólo que el esque- estaba inscripta in nuce en la misma.
ma está invertido. Vale decir, la contradicción y su ne-
gación (producto del "trabajo de la
En tercer lugar, la concepción negatividad", según Hegel) conllevan
marxiana de la contradicción, al re- desde su origen y por naturaleza, una
chazar el determinismo metafísico finalidad a la que necesariamente el
(idealista o materialista mecanicista) despliegue del sujeto espíritu debe
no adopta, por ello, un indetermi- llegar.

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Alberto Parisí

Para la dialéctica histórico- diferencia y praxis- deben tratarse


social las contradicciones expresan conjuntamente y de manera articulada
la represión, bloqueo o aniquilación que, en el paso de las contradicciones
de las diferencias, totalizadas repre- a los conflictos, conjugue proyectos y
sivamente en cualquier vínculo o horizontes en el marco de un "resca-
totalidad totalitaria, dominante. En te" y potenciación de las diferencias
este sentido, más que activo-crítica, reprimidas. La histórica y permanente
la contradicción manifiesta un cierre resolución de las contradicciones, en
o barrera a la expansión y articulación el discurso de la dialéctica histórico
de las diferencias. Per se la contradic- social, tiene una notable distancia con
ción no abre, sino cierra horizontes el planteo metafísico de Hegel. Para
de totalizaciones abiertas, complejas, éste, es el propio y endógeno principio
creativas. Por ello, el movimiento del método (el sujeto espíritu) el que
espontáneo de las contradicciones extrae de sí mismo, de su sustancia
no garantiza procesos dialécticos de espiritual, la fuerza capaz de disolver
resolución de contradicciones; ello permanentemente su estado contra-
supone, por lo tanto, un principio dictorio y resituarlo, por sí mismo, en
práxico. El tema de la "praxis", que una nueva y más rica dimensión de su
hoy debemos retraducir en conceptos unidad espiritual. En el otro planteo,
y categorías como construcción de es la praxis la que constituye la ver-
hegemonía, práctica política en cuan- dadera negatividad social e histórica
to construcción de ciudadanía social, en la medida en que puede "destruir"
respuesta ética desde el reclamo de las (en el sentido de Kosik) el principio
víctimas, etc., es algo que, en el marco de cierre de las totalizaciones sociales
de este artículo, no puede desarrollar- e históricas dominantes y vigentes;
se. No obstante, algo al respecto he asimismo, tiene la capacidad de re-
indicado en el vocablo "Diferencia" lanzar permanentemente los procesos
y plantearía, asimismo, que las cate- de totalización, "fundándolos" en la
gorías del discurso dialéctico histó- inédita novedad de las diferencias
rico social -totalidad, contradicción, potenciadas y articuladas.

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CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

NOTAS

1 Sobre el sentido del giro lingüístico, sus aciertos y problemáticas, cfr.:


Giddens, A., "El estructuralismo, el post-estructuralismo y la produc-
ción de la cultura", en Giddens, A., y Turner, ]., La Teoría Social, Hoy,
Madrid 1990, Alianza Editorial; asimismo, Anderson, r, Tras las huellas
del materialismo histórico, Madrid, ed. Siglo XXI, 1986.
2 Popper, "Qué es la dialéctica", en Conjeturas y refutaciones, Madrid, Ed.
Paidós, 1982; ya se verá luego que estas dos últimas precisiones son
fundamentales para un breve debate con E. Laclau, sobre el tema en
cuestión. Debo señalar, asimismo, mi clara oposición a la interpretación
de Jorge Dotti, cuando afirma: "El postulado fundan te de la dialéctica, a
saber: la afirmación de la índole contradictoria de lo real, es la clave de
bóveda para la demostración de la existencia de Dios"; cfr.: su trabajo
"Teología, dialéctica, guerra", en la revista La ciudad futura, núm 4, Bue-
nos Aires 1987. En el desarrollo de nuestro escrito se verán las razones
del rechazo a una visión peyorativa de la dialéctica, que la identifica,
sin más, con la metafísica de Hegel.
3 Véase, para el tema de la superación de planteas extendidos -pero bana-
les- acerca de la relación entre contradicción y conflicto, el interesante
artículo de J.C. Portantiero, "De la contradicción a los conflictos", en
revista La ciudad futura,núm 2, Bs, Aires, octubre de 1986. Dos textos de
Mao Tse Tung hicieron época en Latinoamérica, entre los '60 y 70, los
cuales están en la mira de la crítica de Portantiero: Sobre el tratamiento
correcto de las contradicciones en el seno del pueblo, Pekín 1966, ed. en
Lenguas Extranjeras y "Sobre la contradicción" (193 7), en Obras Esco-
gidas, tomo I; Pekín 1973, Ed. en Lenguas extranjeras; en este último
texto, Mao comienza así: "La ley de la contradicción en las cosas, es
decir, la ley de la unidad de los contrarios, es la ley más fundamental
de la dialéctica materialista" (p.333)]
4 Protágoras, Fedro, Gorgias, La República, UNAM, México DF 1973 (edi-
ción bilingüe), entre otros lugares clásicos
5 Parte final del Organon, la Retórica, lugares diferentes de La Metafísica,
etc ..
6 Para un reconocimiento de las distintas teorías de la dialéctica, desde los
griegos al mundo moderno, véase el excelente libro de Livio Sichirollo,
Dialéctica, Barcelona, ed. Labor, 1976, con amplia bibliografía.
7 tanto Historia y consciencia de clase, México DF 1969, ed. Grijalbo, como
El joven Hegel, México, ed. Grijalbo, 1969.
8 los clásicos textos de Adorno, Horkheimer, Marcusse y el joven Ha-
bermas: del primero Dialéctica negativa, Madrid, ed. Taurus, 1976; del
siguiente su Teoría crítica, Buenos Aires, ed. Amorrotu, 1974; y del
último Teoría y praxis, Madrid 1976 y el trabajo titulado "Teoría ana-
lítica de la ciencia y dialéctica" en el volumen colectivo La disputa del

-74-
Alberto Parisí

positivismo en la sociología alemana, Madrid, ed. Grijalbo, 1962.


9 Básicamente, su Critica de la razón dialéctica, Bs. Aires, ed. Losada, 1970.
10 Las aventuras de la dialéctica, Bs. Aires, ed. La Pléyade, 1974.
11 En especial, Investigaciones dialécticas, Caracas, ed. Universidad Central
de Venezuela, 1962.
12 Su clásico Dialéctica de lo concreto, México, ed. Grijalbo, 1965.
13 Su importante trabajo La producción teórica de Marx, México DF 1985, ed.
Siglo XXI y La dialéctica hegeliana, Mendoza, ed. Ser y Tiempo, 1972.
14 Sobre la obra de Aricó está escribiendo un extenso libro el brillante autor
argentino, residente en México, Horacio Crespo; varias referencias a su
significado y trayectoria (ya que murió en 1990) podrán leerse en la revista
La ciudad futura, Buenos Aires y Estudios, núm. 5, 1995, del Centro de
Estudios avanzados de la Universidad Nacional de Córdoba.
15 Ya citado previamente y expuesta su posición en el estudio sobre la
"Diferencia", en este mismo volumen.
16 Entre sus obras principales, Hegemonía y estrategia socialista: hacia una
radicalización de la democracia, Madrid 1987; "Tesis acerca de la forma
hegemónica de la política", en el libro colectivo Hegemonía y alternativas
políticas en América Latina, México DF, ed. Siglo XXI, 1985; Emancipación
y diferencia, Bs. Aires, ed. Ariel, 1996; y sus trabajos en el colectivo de
Butler, ]., Laclau, E., y Zizek, S., Contingencia, hegemonía, universali-
dad, Bs. Aires, ed. Fondo de Cultura Económica], 2003; de su amplia
producción -citada sólo en parte- nos centraremos en uno de sus textos
clave: Hegemonía y estrategia socialista, hacia una radicalización de la
democracia, base de la autocrítica a escritos suyos previos y plataforma
conceptual de sus textos posteriores.
17 Ob. Cit. P 143.
18 cfr.: los ya citados textos de Giddens y Anderson, en nota 1, acerca del
"giro lingüístico.
19 En el clásico lugar de la Fenomenología del Espíritu, "Independencia
y sujeción de la autoconciencia; señorío y servidumbre", México DF
1966, ed. FCE.
20 Laclau, Ob. Cit. 145
21 ob.cit. p. 145.
22 Sigo en parte los desarrollos planteados en mi trabajo "Totalidad, con-
tradicción y diferencia en Hegel y Marx", en revista Administración y
política, 3". Época, núm 6, segundo cuatrimestre 1983, Universidad
Autónoma del Estado de México, p. 107-154; asimismo, mi libro Filo-
sofía y dialéctica, México DF, ed. Edicol, 1979.
23 Recuérdese la expresión maoista del ya citado texto "Sobre la contradic-
ción" del líder chino, cuando afirma "La ley de la contradicción en las
cosas, es decir, la ley de la unidad de los contrarios, es la ley más funda-
mental de la dialéctica materialista" - Obras escogidas, tomo I, ediciones en
lenguas extranjeras, Pekín 1971-; asimismo, Sobre el tratamiento correcto
de las contradicciones en el seno del pueblo, Pekín 1957.

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CONTRADICCIÓN/CONFLICTO

24 La versión estructuralista de Althusser parece, en principio, totalmente


alejada de la simpleza dogmática de Mao; sin embargo, su postura fuerte-
mente estructuralista reproduce en versión objetivista, el determinismo
hegeliano, a pesar de su permanente recusación de la dialéctica de Hegel.
Véase en su Pour Marx -París 1966- [en cast. La revolución teórica de
Marx, Buenos Aires, ed. Siglo XXI], 1969, los trabajos "Contradicción y
sobredeterminación", "Estructura a dominante" y toda la temática de la
historia como proceso sin sujeto. Esta visión ha tenido el efecto, además,
de afianzar el dogmatismo ingenuo, el de oscurecer la diferencia.
25 En el clásico lugar de su último capítulo, "La idea absoluta"; Bs. Aires,
ed. Solar-Hachette, 1968, (traduc. de Rodolfo Mondolfo).
26 Hegel, ob.cit. p. 729.
27 ob.cit. p. 730,732.
28 ob.cit. p. 727.
29 Sartre, Crítica de la razón dialéctica, T.I, p. 154; Bs. Aires, ed, Losada,
1970.
30 Adorno, T., Dialéctica Negativa, Madrid, ed. Taurus, 1975, p. 400.
31 Hegel, ob.cit. parágrafo 116, México DF, ed. Porrúa, 1973, p. 69.
32 L. Feuerbach, ob.cit. parágrafo 62, México 1970, ed. Roca. Para una
profundización de los planteas de Feuerbach, cfr.: Schmidt, Alfred,
Feuerbach o la sensualidad emancipada, Madrid, ed. Taurus, 1975; en
especial, p.69 a 139.
33 Marx-Engels, Sobre el colonialismo, Bs. Aires 1973, ed. Pasado y Presen-
te, p. 29-30 -cursivas mías-. Véase el profundo y equilibrado análisis
acerca de esta cuestión que realizó José Aricó en su libro Marx y América
Latina, México 1982, Alianza Editorial Mexicana.
34 cfr.: K.Marx, El Capital, TI, vol. I, Bs. Aires 1975, ed. Siglo XXI, p. 18.
Una importante reflexión sobre esta problemática se halla en el trabajo
de Manuel Sacristán, titulado "El trabajo científico de Marx y su noción
de ciencia", en revista Dialéctica, año VIII, núm 14-15, diciembre de
1983/marzo de 1984, Puebla, México.
35 cfr.: Elementos fundamentales para la crítica de la economía política, (bo-
rrador), 1857-1858, Tomo I, Bs. Aires 1973, p. 3-33 (en especial, 20-33);
este lugar clásico ha tenido una amplia exégesis; de los autores que
resaltan de entre la enorme cantidad de escritos producidos al respecto,
deseo recordar la tradición creada por la Escuela de Frankfurt: [a los
textos de Adorno y Habermas citados, añadir la Teoría crítica de M.
Horkheimer, Bs. Aires, ed. Amorrortu, 197 4 y Razón y revolución, de H.
Marcusse, Madrid, Alianza Editorial] 1971; a Goldmann, L.: Investiga-
ciones dialécticas, Caracas, Universidad Central de Venezuela, 1962; el
clásico Historia y consciencia de clase, de Lukács -editado por Grijalbo,
México 1969-; de K. Kosik, Dialéctica de lo concreto, México DF, ed.
Grijalbo, 1965; el importante trabajo de Enrique Dussel, La producción
teórica de Marx: un comentario a los Grundrisse, México DF, ed. Siglo XXI,
1985. Véase, también, Parisí, Alberto, Filosofía y dialéctica, México, ed.
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Alberto Parisí

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-78-
CULTURA
Cristián Parker
Chile

Palabras Clave
FILOSOFÍA LATINOAMERICANA - FILOSOFÍA INTERCULTURAL
- HISTORIA DE LAS IDEAS - LATINOAMÉRICA - SIMBOLISMO
- NUCLEO ÉTICO/MÍTICO - IMAGINARIO ESCATOLÓGICO/
UTÓPICO - INDIGENISMO - MESTIZAJE - GEOCULTURA
- CULTURA POPULAR - IDENTIDAD - SOCIOLOGÍA
- ANTROPOLOGÍA - PSICOLOGÍA

INTRODUCCIÓN y lenguajes significantes que tejen y


constituyen la segunda naturaleza
del hombre. La cultura es lo que el
El concepto de cultura refiere a ser humano adquiere o aprende como
una realidad que forma parte indiso- miembro de la sociedad en oposición
luble de lo que constituye el ser social a lo que hereda como miembro de la
del hombre. Dado que el hombre vive especie.
una realidad dinámica y compleja, la
historia del pensamiento moderno Esos objetos significantes (ar-
registra innumerables definiciones tefactos) y lenguajes (verbales y no-
de lo que se entiende por "cultura". verbales), codificados en modelos
La polisemia del término no puede significativos que orientan valorativa
impedir que veamos, sin embargo, al y normativamente las prácticas, son
menos tres perspectivas para analizar fruto de la objetivación del proceso de
la cultura: la perspectiva filosófica, trabajo y del proceso de comunicación
aquella desde la antropolgía cultural que van así transformando la natura-
y la perspectiva sociológica. En Amé- leza con la que el hombre se enfrenta.
rica Latina, el concepto de cultura ha Su internalización en los sujetos por
sido ampliamente aceptado y ha sido medio de la socialización (endocultu-
empleado bajo esas tres perspectivas. ración) posibilitan una guía para las
Analizaremos aquí más extensamente prácticas y así reproducen o modifican
la definición socioantropológica de a la sociedad.
cultura, la trayectoria histórica del con-
cepto y ciertos enfoques actuales desde Ambos procesos -el de trabajo
el pensamiento latinoamericano. y el comunicacional- se dan bajo
coordenadas espacio-tiempo y son
Puede definirse someramente a fruto del hombre -sujeto de dignidad
la cultura como el conjunto de objetos y libertad-, su capacidad creativa y la

-79-
CULTURA

posibilidad de su perfeccionamiento bres, patrimonios comunes, que carac-


como persona y como especie en la terizan y perfilan a cada grupo y tejen
historia. Por ello, en cada región las redes de integración y solidaridad
geográfica y en cada época se va con- de los individuos entre sí y con su
formando a partir de cada experiencia grupo o sociedad.
histórica, de cada modo de producción
y de comunicación, un determinado En las sociedades primitivas
núcleo significativo -una tradición y de subsistencia, donde la división del
un patrimonio- que va definiendo el trabajo es simple y no genera exce-
sentido y la orientación, así como las dente, en la cultura se refleja la repre-
características básicas de la cultura del sentación de la totalidad del grupo; en
grupo humano que habita ese suelo y las sociedades más complejas, donde
ese tiempo. la división del trabajo posibilita un
modo de producción con excedente
De modo que, en la experiencia que es apropiado por un grupo o clase
histórica del hombre, se ha dado y se dominante, en la cultura se expresa-
dará constantemente una pluralidad rán -abierta o encubiertamente- las
de culturas y subculturas cuya interco- tensiones entre el grupo hegemónico
nexión se produce en forma diferencial, y los diversos grupos subalternos y
ya sea armónicamente -sobre la base sus propias expresiones culturales.
de lazos de entendimiento, colabo- En las sociedades contemporáneas,
ración, alianza y paz- ya conflictiva- con los procesos de globalización,
mente -sobre la base de relaciones de revolución científico-técnica, infor-
enemistad, competividad, dominación, mática y comunicacional, en tránsito
explotación y guerra-. La cultura al modo de producción post-indus-
latinoamericana, por ejemplo, es el trial, el dinamismo de los fenómenos
resultado de la confluencia contradic- culturales subnacionales, nacionales y
toria de la cultura occidental -con un transnacionales es altamente complejo
aporte principal iberoamericano- y de y está mediatizado por un sinnúmero
las culturas indígenas. La dominación de instituciones y procesos.
colonial gestó una forma peculiar de
mestizaje racial y cultural que -con el
aporte africano de la población traída DELIMITACIÓN
como mano de obra esclava- fue con- HISTÓRICA
formando la base histórica de lo que
hoy entendemos por cultura mestiza
indo-ibero-latino-afro-americana. El concepto de cultura fue por
primera vez utilizado en su acepción
Así, con el tiempo, cada cultu- antropológica moderna por Taylor
ra va conformando un determinado en 1871, para quien la cultura es "el
estilo de vivir y ver las cosas y una complejo conjunto que incluye el
determinada forma de sentir, gustar conocimiento, las creencias, el arte,
y apreciar la vida y sus contingencias. la moral, las leyes, las costumbres y
Es decir, va definiendo históricamente toda otra capacidad y hábito adquirido
una determinada identidad cultural, por el hombre como miembro de la
cristalizada en tradiciones, costum- sociedad".

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Cristián Parker

En su etimología latina (cul- La concepción burguesa de


tura) se remonta al cultivo de la cultura, sobre todo la que se trans-
tierra. Parece originarse en la ex- mite en la tradición heredera de la
presión latina colere que refería a modernidad ilustrada occidental, está
la recolección, luego referida a la centrada en la libertad del hombre.
acción de preparar la tierra para el Para Rousseau en El Emilio la idea
cultivo: cultus agri, en tanto cultus de cultura -en un sentido original y
deodorum se aplicó a los dioses. En habitual en su época- encierra la no-
la Europa medieval se aplicó cultus ción de perfeccionamiento moral: "se
agri para el laboreo de los campos forman las plantas por la cultura y los
y cultus mentís para el cultivo de hombres por la educación".
la mente en el marco del dualismo
materia/espíritu imperante. Porque si los hombres nacen
libres e iguales, es sólo en virtud del
En el continente americano, paciente esfuerzo de perfeccionamien-
donde florecieron numerosas culturas to que cada individuo puede llegar a
en la época precolombina, con miles realizar finalmente su libertad.
de lenguas nativas y en Mesoamérica
y los Andes con elevada producción La filosofía idealista alemana
artística, literaria y espiritual, no en- con Fichte, Goethe y Hegel dará forma
contramos el término "cultura" u otro original a esta idea con la noción de
semejante. Así como tampoco parecen Bildung en contraposición a Kultur
haberlo tenido los egipcios, chinos, (término referido a lo agrícola y eco-
indostánicos, y griegos. No obstante, nómico). La Bildung, que concretiza
esos pueblos tenían clara conciencia un momento central en la concepción
de pertenecer a una determinada burguesa de cultura, es la formación
cultura y desarrollaron complejos, y intelectual, moral y estética del hom-
muchas veces refinados, procedimien- bre. La formación intelectual no se
tos de producción y reproducción de reduce a la adquisición del saber,
sus creencias, obras, artes, tradiciones sino a la interiorización del espíritu
y patrimonio cultural. filosófico según la concepción de La
Enciclopedia. Esta idea de cultura
El hombre culto es, antes que supone pues la noción de universali-
nada, etimológicamente, aquel seden- dad humana.
tario capaz de dominar la tierra por un
conjunto de operaciones orientadas a Esta concepción humanista de
extraer sistemáticamente del suelo los cultura no deja de encubrir los pre-
vegetales útiles para la satisfacción de juicios de la cultura occidental euro-
sus propias necesidades alimenticias. céntrica. La verdadera cultura sería la
En este primer significado, está ya en posibilidad del "cultivo" del espíritu
germen un significado más amplio del hombre: el "hombre culto" es el
y preciso que dice relación con la que se ha "elevado" a la cumbre del
transformación de la naturaleza por saber, de las artes y las letras. Se trata
el hombre y que es central en su acep- de una concepción humanista y bur-
ción contemporánea para la sociología guesa de cultura que sólo refiere a la
y la antropología. cultura "clásica" de tipo occidental,

-81
CULTURA

precisamente aquella cultura que las que tipifican a los grupos populares,
elites y aristocracias europeas han dominados y oprimidos.
definido histórica y situadamente
como "la" única expresión de la "alta Esta concepción, en su ar-
cultura" o de las "bellas artes". mazón conceptual, no sólo remite
a códigos espaciales subyacentes,
El pensamiento latinoamerica- privilegiando lo "alto" y rechazando
no no ha estado exento de una visión lo "bajo" y "vulgar", sino también
semejante, sobre todo desarrollada connota códigos de tiempo profun-
en la segunda mitad del siglo XIX, damente evolucionistas: entonces, la
(Sarmiento y los positivistas) según "alta cultura" occidental es la única
la cual la "civilización" -la ciudad, la "civilizada" y por ende "avanzada" y
educación, las ciencias y la industria, "progresista"; en cambio, las culturas
según el modelo europeo (inglés no-occidentales, populares, afro e
o francés)- debían desplazar a la indígenas, son "bárbaras", "atrasa-
"barbarie"-la cultura de la pampa, das" y "tradicionales". Es necesario,
inculta, atrasada y llena de atávicas entonces, reconocer con Grasmci, la
costumbres coloniales indígenas e distinción entre cultura oficial o he-
hispánicas-. gemónica y las culturas subalternas.
En todo proceso cultural, siempre
La forma de ver la cultura dinámico, dada la determinada estruc-
reseñada es ideológica. Ciertamente tura de las relaciones sociales en los
apunta a un ideal de perfecciona- países del mundo (cuya distribución
miento del espíritu humano, pero desigual de la riqueza, la propiedad,
distorsiona la realidad, ya que tiende el poder y el status privilegian rei-
a ocultar dos procesos que subyacen terativamente un centro oficial que
a la dinámica cultural en la época hegemoniza a la periferia), habrá una
contemporánea: el colonialismo y la tendencia a la aparición de visiones
dominación social. El colonialismo, del mundo de los grupos dominantes
porque tiende a consagrar la cultura que definirán lo que es la "cultura
del colonizador blanco occidental oficial", despreciando las culturas de
como cultura superior y universal los grupos y clases medias, populares,
y a menospreciar la cultura de los afro e indígenas. A su vez, estos gru-
colonizados como cultura "bárbara" pos producirán, a partir de su buen
o "inferior": los indígenas, negros, sentido, sus formas y estilos de vida,
mestizos y mulatos serían "incultos". sus visiones de mundo y tradiciones
La dominación social, porque eleva a que serán propias y no pocas veces
la peculiar cultura de los grupos eco- cultura de resistencia en relación a las
nómica, social y políticamente privi- culturas dominantes.
legiados, a la categoría de "universal",
imponiendo esos estilos, modelos y En América Latina, el campo
gustos a las culturas dominadas como cultural constituido por esta cultura
si fueran únicos. Por medio de esa oficial -yanquizada y europeiza-
operación, se va homogeneizando la da- se configura con cierta claridad,
pluralidad cultural, reprimiendo la al oponérsele la gran diversidad de
creatividad y la diversidad de culturas culturas y subculturas de los grupos

-82-
Cristián Parker

subordinados y dominados. El capital parte de los grupos sociales deben su


cultural, (Bourdieu) por consiguien- cohesión a su poder de exclusión, es
te, estará desigualmente distribuido decir, al sentimiento de diferencia
y los procesos de endoculturación ligado a los que no son "nosotros"
( transmisión institucionalizada de (Hoggart). En las culturas populares
cultura), el sistema educacional y los el eje semántico "nosotros-ellos" divide
modernos medios de comunicación, tajantemente el mundo en un espacio
se encargarán de reproducir esta conocido y familiar propio de las clases
diferenciación cultural y la escisión pobres en contraposición a un espacio
del campo cultural entre una cultura ajeno del "mundo de los ricos" que
oficial y múltiples culturas total o generalmente es visto como discri-
parcialmente subalternas. minador, pero que es ambiguamente
admirado y rechazado.
Un factor poderoso que influye
en la distorsión ideológica de la visión El humanismo ilustrado por
acerca de la cultura que hemos ana- una parte, el etnocentrismo del sen-
lizado se ubica en el sentido común tido común, por otra, son enfoques
y proviene del etnocentrismo. Todo parciales y distorsionados de la cultu-
grupo humano requiere para autolegi- ra. Ambas perspectivas se encuentran
timarse y afianzar su sentido de iden- presentes en América Latina y han
tidad y de orientación en el cosmos sido sistematizadas por pensadores
en el cual cohabita con otras culturas, que buscaban precisamente definir
afirmarse autoprivilegiándose como una identidad latinoamericana, que
el centro de toda medida y valor, y desde la independencia constituye
rebajando a lo distinto, lo extranjero, un problema por resolver en este
lo "Otro" a la categoría de "curioso", continente.
"inferior" e incluso "peligroso". El
etnocentrismo, como la actitud más Frente a la concepción ilustra-
arcaica que tiende a reaparecer en da de cultura, a la luz de las experien-
todos los pueblos, opera sobre la cias históricas de la explotación capi-
valorización semántica positiva de talista desde la revolución industrial
"lo humano" en contraposición al en adelante, se fue desarrollando una
"bárbaro", al "salvaje" (habitante de aguda crítica materialista al idealismo
la selva). Se valora aquello que se está burgués en esa concepción de cultura.
habituado a habitar y manejar, aquello El enfoque de Marx y Engels que se
que se define como específicamente desarrollara a mediados del siglo XIX,
"humano", y se desconoce la "diversi- se pretende guiado por el interés
dad cultural: se prefiere rechazar fuera emancipatorio y en crítica radical
de la cultura, hacia la naturaleza, todo a la ideología burguesa ilustrada del
lo que no se conforma a la norma bajo mundo y de la cultura.
la cual se vive"(Lévi-Strauss).
Marx llega a la convicción de
El etnocentrismo, a diferencia que las formas jurídicas e ideológicas
de la hegemonía de la cultura oficial, no pueden explicarse en función de
es una actitud presente en toda cultura la pretendida "evolución general del
sea dominante o subalterna. La mayor espíritu humano"(Hegel), sino que,

-83-
CULTURA

por el contrario, ellas tienen sus raíces todo caso hay una coincidencia en
en las condiciones materiales de vida. asumir el carácter fundamental que
Los hombres generan, en la produc- tendría el desarrollo de las fuerzas
ción social de su existencia, relaciones productivas como marco en el cual
necesarias e independientes de su evolucionan las sociedades y se elevan
voluntad: esas relaciones de produc- sus estructuras ideológicas, políticas,
ción corresponden a un determinado jurídicas y culturales.
grado de desarrollo de sus fuerzas
productivas materiales. "El modo de Si el aporte del análisis mar-
producción de la vida material domi- xista clásico consiste en ofrecer una
na en general el desarrollo de la vida visión crítica que llama la atención
social, política e intelectual. No es acerca de la dialéctica conflictiva en
la conciencia de los hombres lo que la reproducción del sistema social,
determina su existencia sino, por el su énfasis lo limita al análisis de las
contrario, es su existencia social la que relaciones económicas, relegando lo
determina su conciencia" (Marx). cultural a lo superestructural. Los
desarrollos posteriores de la Escuela
Según esta aproximación mar- de Frankfurt (Alemania) (Adorno,
xista, la infraestructura o base material Marcuse, Horkheimer, Benjamín) en
económica es la que determina la 1
una crítica radical al capitalismo, la
superestructura cultural y el conjunto industria cultural y la sociedad de
de valores e ideas. Precisamente por masas, recogiendo los ideales de la
la influencia del materialismo en la ilustración pero criticando la raciona-
concepción de Marx y Engels, y dado lidad instrumental y la deshumaniza-
que su teoría se desarrolla contra la ción, reivindicando la posibilidad de
filosofía idealista hegeliana, el con- la democratización de la producción
cepto de cultura no aparecerá jamás estética, abren nuevas perspectivas
en sus escritos. para el análisis de la cultura contem-
poránea. El heredero de esa tradición,
Es la teoría de la ideología, el sociólogo J. Habermas, desarrolla
en cambio, la que ha tenido mayor una teoría postmetafísica de la socie-
influencia como expresión del análisis dad en la cual postula la importancia
crítico de las realidades del ámbito de de la cultura como ámbito de la acción
la cultura. La ideología, según la con- comunicativa desde el cual el mundo
cepción de Marx está formada por el de la vida tiene la posibilidad de con-
conjunto de ideas y representaciones, trarrestar la alienación presente en la
que, como falsa conciencia, contribu- lógica burocrática de las estructuras
yen a la dominación social. sociales, llevando a buen término los
ideales de una modernidad todavía
La teoría de la ideología, ha inacabada.
tenido diversos desarrollos a lo largo
del siglo XX: Lenin, Lukacs, Korsh, La concepción del italiano A.
Althusser, etc. Hay claras diferencias Gramsci, en su lectura de la "filosofía
que van desde la "teoría del reflejo" de la praxis", toma en consideración,
leninista a la preocupación de Lukacs por el contrario, como elemento clave
por la producción estética, pero en del análisis social, la dimensión cultu-

-84-
Cristián Parker

ral. En la organización de la cultura, marxista y estructuralista -teniendo


en reacción contra una presentación a Althusser como fuente inspirado-
mecanicista del marxismo, hay que ra- dominó todos los estudios, el
reconocer la importancia de la toma de debate y la reflexión acerca de "la
conciencia, de la realidad intelectual dominación ideológica" en nuestras
y moral en la lucha de clases en la so- sociedades "dependientes".
ciedad. En la lucha por la hegemonía
(dirección intelectual y moral) en la Es interesante destacar la in-
sociedad, así como la clase dominante fluencia del pensamiento gramsciano
generará sus "intelectuales orgánicos", en los análisis políticos y culturales
así el proletariado deberá generar sus de las elites intelectuales progresistas
propios intelectuales. Pero dado que de América Latina desde fines de la
"todos los hombres son filósofos" se década de los setenta. Esta valoriza-
trata de llevar el "buen sentido" de las ción de la cultura dice relación con la
clases subalternas a un grado máximo crisis de los enfoques estructuralistas
de expresión, coherencia y organi- y marxistas clásicos a la luz de la
cidad a fin de hacerlo hegemónico implantación de regímenes represivos
en la sociedad civil y en el Estado, de Seguridad Nacional en casi todo
provocando así una revolución socio- el continente. El redescubrimiento
cultural en toda la sociedad. de los sujetos sociales constituidos
en movimientos sociales que tejen la
En América Latina, el concep- resistencia de la sociedad civil frente
to clásico antropológico y funcio- al Estado burocrático autoritario, va
nalista de cultura estuvo vigente en acompañado de un intenso trabajo de
las ciencias sociales hasta la década base en el cual las prácticas educativas
de 1950. Las visiones de la cultura (educación popular), comunitarias
eran en esa época muy dependientes (comunidades de base) y culturales
de la antropología y de la sociología (movimientos culturales y solidarios)
norteamericana. Clásica fue la distin- se van inspirando en las teorías de la
ción folk-urbano desarrollada por R. Educación Liberadora de Paulo Freire
Redfield a partir de sus estudios en y la "teoría de la praxis" de A. Grams-
México. Durante la década de los '60, ci. Un aporte complementario a esta
luego de la Revolución cubana, y en revalorización de la cultura proviene
el marco del ascenso de las luchas po- también de la teología de la libera-
pulares, el enfoque acerca de la cultu- ción que se desarrolla y expande en
ra cedió ante el avance del marxismo el continente desde principios de la
y la teoría de la ideología. Hasta ese década de los setenta.
momento, el interés se había centra-
do en el estudio de las expresiones Pero, frente a estos enfoques
más "exóticas" de nuestra realidad: alternativos acerca de la cultura, se
la supervivencia de tradiciones in- levantan otros, de corte conservador,
dígenas, el tradicionalismo de los cuyo reductivismo no proviene ex-
campesinos, el folklore, etc. A partir clusivamente desde una perspectiva
de esa convulsionada década, bajo el ortodoxa del marxismo. Los hay desde
influjo de los intelectuales que habían las perspectivas positivistas, materia-
ido a estudiar a Europa, el enfoque listas e idealistas.

-85-
CULTURA

Desde cierta filosofía y sociolo- En este sentido, no puede


gía de la cultura, se suele entender que afirmarse en forma directa que la
la cultura (entendida como avance "esencia" de la cultura latinoameri-
material), es determinante de las po- cana sea católica, así como tampoco
sibilidades de emergencia de tal o cual puede aceptarse que exista una
civilización ideacional. Para Spengler "cultura cristiana" como cultura
"la civilización es el destino inevitable suprahistórica y como realidad
de una cultura", entendiendo a la civi- universal. El culturalismo corre el
lización como la "conciencia personal riesgo de "idealizar las sociedades
de una nación". Si en la acepción mar- consideradas, no tomando suficien-
xista los procesos de determinación temente en cuenta las reticencias de
histórica se dan en forma dialéctica, los individuos y los antagonismos
en esta última acepción se compren- o conflictos de interés... Puede
den como parte de un proceso cíclico aparecer como una 'antihistoria"
(Spengler, Toynbee). (Boudon y Bourricaud) y derivar
hacia una concepción idealista de
La dificultad de muchas de los procesos socioculturales. Si la
estas concepciones idealistas, funcio- Iglesia habla hoy de la inculturación
nalistas, historicistas, es que niegan el de la fe, debe reconocer la interac-
carácter dinámico e histórico de toda ción entre la fe ( cuyos portadores
cultura. En efecto, no existe cultura son también sujetos de cultura) y
que surja en forma totalmente aislada las diversas y plurales culturas del
del resto de culturas (pretéritas o co- planeta. De allí que el concepto de
etáneas) y, a lo largo de la historia de la "catolicidad" se ve manifestado no
humanidad, las diversas culturas han en la imposición de un determinado
interactuado unas con otras, generan- molde cultural que adopta históri-
do complejos procesos de intercambio camente una expresión de fe, sino
(marcados por la colaboración o la en la asunción, desde la fe, de los
agresión). valores que puedan estar presentes
y actuantes en las más diversas cul-
Por ello, las comprensiones turas del planeta.
"culturalistas", donde el conjunto
de objetos y símbolos reflejan un A esta proliferación de con-
determinado "espíritu" de una época, ceptualizaciones sobre la cultura, hay
o bien un conjunto de conductas, que contraponer el intento que hace
rituales, normas y sistemas de co- la ciencia por comprender el comple-
municación expresan la "esencia" del jo fenómeno cultural en la sociedad
modo de ser de un pueblo, tienden, contemporánea. De partida, es claro
a la larga, al a-historicismo que esca- que la vieja y pre-científica concep-
motea los conflictos socioculturales ción que asimila la raza a la cultura
reales. La reproducción de estas ha sido totalmente descartada por la
expresiones aplicadas a nuestra rea- antropología y por toda la comuni-
lidad latinoamericana ha generado dad internacional. El racismo ha sido
enfoques cuestionables como el que condenado por la humanidad a la luz
se ha generalizado en el discurso del nazismo y el holocausto judío, y la
católico conservador. conciencia creciente de los derechos

-86-
Cristián Parker

humanos constituye hoy un llamado de la propaganda y de los modernos


al respeto de la igual dignidad del medios de comunicación.
hombre en su diversidad. Lévi-Strauss
afirma que, si hay contribución ori- Sin embargo, el reconocimien-
ginal de los diversos grupos étnicos to de la pluralidad de culturas no sig-
de la tierra, ello no se debe a sus di- nifica abandonarse a la tesis relativista,
ferencias biológicas, ni siquiera a su por cuanto es posible discernir, en el
pretendida inferioridad o superioridad marco de diversas definiciones y ac-
intelectual de una respecto a la otra. tualizaciones, la persistencia de cier-
Más bien, "si esa originalidad existe tos principios humanos universales
-y no cabe duda de ello- ella se debe relativos a la sobrevivencia y a la sana
a circunstancias geográficas, históricas convivencia entre los hombres. De allí
y sociológicas, no a aptitudes distintas que existan ciertas normas éticas y
ligadas a la constitución anatómica o morales que, más allá de la diversidad,
física de los negros, amarillos y blan- tienen vigencia transcultural.
cos" (1973:378).
Cultura, desde este punto de
vista, dice relación con las diversas
DELIMITACIÓN dimensiones por medio de la cuales
CONCEPTUAL el hombre se sitúa activa y creado-
ramente delante de la Naturaleza,
ejerciendo sus propias capacidades
La revolución del pensamiento espirituales y corporales a fin de
antropológico moderno provino del crear, cultivar y proteger su mundo.
hecho de que se suprimió la idea de Esta capacidad creadora del hombre
que existía el Hombre (con mayús- no se reduce a su conciencia ni a la
cula) y en cambio, como plantea C. sola razón. A diferencia de lo que
Geertz existe el hombre (con minús- plantea el racionalismo ilustrado,
cula). Ello no significa rechazar la esas capacidades incluyen también a
igualdad en la condición biológica y sus sentidos, afectos, sentimientos,
natural del ser humano, sólo destaca valores, intuiciones y capacidades
la gran diversidad cultural de la es- extrasensoriales.
pecie humana. De aquí que cualquier
concepto moderno de cultura debe En términos socioantropológi-
partir del supuesto de que no existe cos, ello supone cuatro notas caracte-
una cultura universal, sino una di- rísticas de la cultura:
versidad muy amplia de culturas en
constante interacción e influencia a) la capacidad creativa del
recíproca, sometidas o no a procesos hombre que se objetiva en:
de dominación y/o relaciones intercul-
b) el proceso de producción
turales. Esta cuestión es cada vez más
originado por la comunicación
evidente en el contexto de mutaciones
y el trabajo, que generan:
que vive el mundo contemporáneo,
aun cuando la cultura modernizante c) la producción cultural, si-
transnacional pretende imponerse m ul táneamen te material y
hegemónicamente con el uso masivo simbólica de toda sociedad:

-87-
CULTURA

d) a fin de satisfacer las necesi- está mediado ideacionalmente para el


dades humanas. hombre y, como dice Godelier, no hay
determinación de superestructuras
Toda cultura conforma, pues, por infraestructuras, sino componen-
un determinado sistema cultural que tes ideacionales en la conformación
se desarrolla diferencial y dinámica- misma de todo lo material. En cuanto
mente en la historia. al proceso de comunicación, éste se
da entre los hombres entre sí, con su
a) Por cultura, entendemos la medio natural y con la realidad que
capacidad del hombre como sujeto lo trasciende.
por cuyo trabajo, como actividad
finalista, es capaz de transformar A ambos procesos hay que
creativamente la naturaleza, gene- comprenderlos en su sentido más
rando un producto diferente que amplio: al trabajo como actividad
viene a constituir su segunda natu- creativa y no exclusivamente como
raleza. La cultura designa, entonces, la actividad productivista del hamo fa-
aquella capacidad del hombre de ber; el proceso comunicacional como
generar comunicación y de fabricar capacidad de entrar en una relación
instrumentos que potencian su na- con el Otro, en tejer con el otro lazos
turaleza biológica y lo distinguen que van más allá de las necesidades
de su entorno natural. Cultura es utilitarias de la supervivencia, que
aquella segunda naturaleza que apuntan al crecimiento colectivo y al
tipifica al hombre y lo distingue perfeccionamiento en función de las
cualitativamente de toda otra espe- necesidades superiores, simbólicas y
cie sobre el planeta. Ahora bien, el espirituales del hombre.
hombre puede construir esta segun-
da naturaleza en armonía con la Dada la centralidad del trabajo
primera (manteniendo el equilibrio en la conformación de la cultura, es
ecosistémico), o bien puede hacerlo posible hablar de diversas definiciones
destruyendo su ecosistema y negan- de la cultura del trabajo que van des-
do así su vocación de protección y de la concepción modernista, produc-
recreación de la vida natural. tivista y "eficientista" a la concepción
holística y solidaria generalmente
b) La capacidad del sujeto ínsita en las culturas dominadas e
para transformar la naturaleza (a) se indígenas.
objetiva en el conjunto de procesos
sociales productivos cuyos modos c) De estos procesos colectivos
de producción se articulan gracias (b) surge el producto social del hom-
a los procesos comunicacionales. bre, entendido en su sentido amplio,
No hay cultura sin una división del (no reductivo), es decir, un conjunto
trabajo que coordine los esfuerzos de objetos artificiales, materiales y
ni menos sin lenguajes y signos que simbólicos, y un conjunto de prác-
posibiliten organizar esa división del ticas sociales codificadas. De aquí
trabajo para que opere eficazmente que toda cultura no remite solamente
para los fines que el hombre se pro- a los signos y símbolos, a los conoci-
pone. En este sentido, lo material mientos, creencias, artes y mercancías,

-88-
Cristián Parker

sino que incluye de manera sustantiva global de satisfacción del conjunto


al conjunto de prácticas codificadas en de necesidades humanas, desde las
modelos y hábitos de conducta, moral, más básicas hasta las necesidades de
leyes, costumbres y rituales. Y como tipo superior, como las espirituales.
lo han demostrado la lingüística y la La religión, por consiguiente -en
semiótica modernas, no hay significa- tanto conjunto de creencias, rituales
do alguno que no se construya sobre e instituciones orientadas a alimentar
la base de un significante, que es su el proceso comunicativo con lo sobre-
soporte material, lo que quiere decir natural- es un aspecto fundamental
que si por cultura entendemos el con- de cada cultura, aun cuando no es su
junto de signos de la vida social, ellos "esencia", al modo como lo plantea
son, al mismo tiempo, significados el idealismo.
simbólicos y significantes objetivos
y materiales. De acuerdo a las cuatro ca-
racterísticas de la cultura que hemos
d) Ahora bien, toda cultura, en descrito, podemos afirmar que toda
tanto que producción del hombre (c), cultura se organiza en un conjunto de
tiene como finalidad la satisfacción elementos articulados en forma más
de las necesidades humanas en todo o menos coherente, en un sistema o
el espectro y rango. Esto es, en su estructura. Cada estructura significa-
interacción, el hombre va generando tiva que se manifiesta en los códigos y
cultura con el fin de satisfacer sus modelos culturales, en una gramática
necesidades humanas, individuales y cultural (a veces llamada -dependien-
colectivas, para sobrevivir y progresar do del paradigma filosófico o cientí-
material y moralmente en la historia fico- conciencia colectiva, visión de
y así alcanzar un nivel verdadera y mundo, estructuras mítico-rituales,
plenamente humano. Por ello, toda núcleo ético-mítico, ethos, etc.) en
cultura, en tanto satisface pacífica- cada época histórica y en cada socie-
mente las necesidades verdaderas del dad nacional o local, va definiendo de
grupo, es, en cierta medida, "cultura manera diferencial tanto la escala de
de la vida", claro que en función de necesidades como el conjunto de re-
los medios violentos y coercitivos que cursos, medios y productos, así como
use para sí misma o en función de otra las formas productivas y comunicacio-
cultura puede llevar a convertirse én nales que caracterizan el modo de ser,
"cultura de la muerte". el sentido y la orientación general de
cada sociedad.
Por ello, la cultura no se re-
duce exclusivamente a los productos Tal es así, que cada cultura
económicos de un conglomerado, particular define y redefine las "nece-
entendiéndolos como meros objetos o 1
sidades" al proyectar una determinada
mercancías orientados a satisfacer las visión antropológica -histórica y
necesidades básicas del hombre. De geográficamente situada- sobre la so-
hecho, todo producto cultural, en su ciedad. La actual sociedad dominada
materialidad, no es sino un significan- por la lógica del mercado proyecta así
te para un significado que cada cultura una "cultura consumista" que redefine
le concede en el marco del proceso como necesarios ciertos bienes sun-

-89-
CULTURA

tuarios y clasifica como prescindibles como existencia refleja, intento de


aquellos que constituyen elementos ubicación y orientación en el mundo,
vitales para la satisfacción de las ver- producto de un esfuerzo sistemático
daderas necesidades en las culturas de elites intelectuales que, en sus ideas
populares. y proyectos, al formularse, piensan
Latinoamérica y la proyectan más allá
Esta precisión conceptual per- de sus estrechos límites hundiendo
manecería abstracta y estéril si la esas orientaciones de origen existen-
definición de cultura no es ampliada cial en el acontecer de una historia
y ubicada en el marco del carácter dia- colectiva.
léctico e histórico de su evolución,
de su dinamismo interno (con sus El problema de la cultura en
complejos procesos reproductivos), pensadores latinoamericanos tiene,
así como de la dinámica de la domi- entre otras, dos grandes vertientes que
nación social y del colonialismo deben ser distinguidas aun cuando
que subyacen a todo proceso cultural hay entre ellas vasos comunicantes.
en la actualidad, y sobre los cuales ya La preocupación por la identidad
hemos hablado anteriormente. cultural de latinoamérica, tema que
ha urgido tempranamente al pensa-
Desde el punto de vista socio- miento latinoamericano desde su
antropológico, es posible definir a la independencia, es distinguible de la
cultura, como se ha intentado más interpretación más socioantropológi-
arriba, pero esta cultura así definida ca, y más reciente, acerca del carácter
fenoménicamente no es un dato obje- de la cultura latinoamericana en-
tivo de la realidad externa. Es también frentada a los procesos de moderni-
una configuración significativa que zación de cara al siglo XXI. Con todo,
tiene relación con la forma cómo los es posible trazar una constante de la
sujetos productores y reproductores reflexión latinoamericana que oscila
de esa cultura la viven, la recuerdan y entre la tradición y la modernidad
la proyectan. Por ello, no puede haber (Devés, 2003).
disociación entre la cultura tomada
como realidad sociológica o antropo- En la primera corriente, es
lógica y la reflexión de carácter filosó- posible ubicar toda una trayectoria
fico acerca del hombre latinoamerica- de pensamiento político, ideológico
no, sus marcas de identidad, su puesto y filosófico que arranca desde Simón
y su proyecto en el cosmos. Bolívar y se prolonga entre otros, en
Bello, Mora, Alamán, Lastarria, Bilbao,
La primera dimensión dice re- García Moreno, Montalvo, Sarmiento,
lación con la cultura como estructura Alberdi, Sierra, Maní, Vasconcelos y
de significaciones, producto estructu- los pensadores de principios de siglo.
rado y estructuran te, modelo de com- Ella se ve continuada en nuestros
portamientos y de representaciones de días, por cierto en perspectivas mo-
origen colectivo que expresa de hecho dernas, en géneros y estilos diversos
una forma y estilo de vida colectivo; y plurales, en autores como Dussel,
la segunda dimensión tiene relación Miró Quesada, Paz, Roig y Zea, entre
con la cultura como reflexión crítica, varios otros.

-90-
Cristián Parker

La segunda corriente es recien- pueblos nuevos (los mestizos que son


te y se desarrolla cuando las ciencias hijos del genocidio y el etnocidio de
sociales latinoamericanas, desilu- la colonización, pero que, despojados
sionadas con las transformaciones de su glorioso pasado, sólo tienen
sociales fracasadas bajo la bota militar, futuro). "Somos los hijos de la mul-
comienzan desde la década de los '80 tiplicación prodigiosa de unos pocos
a pensar en serio las dimensiones europeos y contados africanos, sobre
culturales de nuestra realidad. ( Cfr. millones de vientres de mujeres indí-
García Canclini y Brunner). genas, secuestradas y sucesivamente
estupradas" (D. Ribeiro).
Interesa destacar dos o tres
ideas centrales sugeridas por algunos Desde la filosofía ha surgido,
de los autores a los cuales nos hemos en las últimas décadas, toda una ten-
referido. No interesa, por lo reducido dencia a analizar el problema de la
de este breve espacio, recoger la totali- identidad cultural (Ramos y Salazar
dad de los argumentos y del debate. Bondy); se han profundizado propues-
tas en la línea de la llamada Geocultu-
José Carlos Mariátegui uno ra, que define el ámbito de reflexión
de los intelectuales más claros de a partir de un sujeto geográficamente
principios de siglo, adelantándose a situado: la cultura de la Patria Grande
Gramsci, recalca, desde un análisis se opondría a las culturas imperiales
marxista latinoamericano, la impor- del Norte desarrollado, ( C. Cullen, R.
tancia del problema indígena para Kush y J. C. Scannone); se indaga en
nuestro continente y la necesidad de el mestizaje y la difícil búsqueda de
que liberación del proletariado se haga la libertad, despertando a la tradición
simultáneamente con el campesinado del pensamiento latinoamericano,
indígena. La preocupación de la eman- más allá de toda dominación cultural
cipación de la opresión secular de los europeizan te o yanquizante (Zea, Roig
indígenas -preocupación compartida y Miró Quesada); se liga derechamen-
con Víctor Raúl Haya de la Torre- le te el tema de la cultura a la tarea de la
lleva a valorar aquellos elementos liberación de los pueblos latinoame-
propios de la cultura como son el ricanos oprimidos social, económica,
mito y la religión. Desde la mitad del religiosa y culturalmente (Dussel,
siglo, el antropólogo brasileño Darcy Boff, Comblin e Irarrázaval).
Ribeiro viene también librando una
lucha por el reconocimiento tanto Las ciencias sociales de la cultu-
de los indígenas como de la diver- ra han desarrollado enfoques distintos.
sidad cultural del continente. En la Entre otros, cabe mencionar a: Moran-
geografía cultural del continente en- dé reivindica el ritual sacrificial como
contramos a los pueblos testimonio fundante de toda cultura, presente en
(los indígenas y descendientes de las el barroco mestizo de América hispana;
antiguas civilizaciones que subsisten y Brunner recalca la importancia de la
resisten), los pueblos transplantados industria cultural en la desintegración
(los migrantes producto de la expan- de la cultura dependiente y la dificul-
sión europea que se han adaptado sin tad de ésta para reasumir sus valores;
mezclarse con la población local) y los García Canclini insiste en la distorsión

-91-
CULTURA

que establece el mercado y la mercan- 1


histórico y no filosófico) amenaza
tilización del folklore, el teatro, las con la disolución de las señas, mar-
artesanías, en fin la mercantilización cas y elementos identificatorios que
de lo autóctono frente a lo cual las le daban seguridad a la gente y le
culturas latinoamericanas responden permitían reproducir sus identidades
"hibridándose" en un mapa colorido personales "naturalmente" (sentido
de expresiones culturales; Parker, por común) y "ritualmente" (rutiniza-
su parte, reivindica la "otra lógica" ción) asociadas a las identidades y
presente en las culturas populares e adhesiones de grupos: familia, reli-
indígenas, que les permite enfrentar gión, nación, clase, etnia, etc ..
desde sus valores a la modernidad, pro-
duciendo una perspectiva "hemiderna" Es todo un proceso de "des-
en estas culturas. clasificación" y de "reclasificación"
social el que está en marcha. Ya no sólo
Todos ellos son esfuerzos her- sobre lo "otro", lo "distinto" sino que
menéuticos para pensar una concep- ahora lo es también sobre "yo", el "mi
ción americana particular, que ha mismo", en su sentido personal, pero
recibido el aporte de occidente, de en forma más evidente en su sentido y
las culturas precolombinas y de las significado sociocultural. Who are we?
fuentes afroamericanas, pero que en se pregunta Huntington en su reciente
su "síntesis vital", en su sincretismo libro que analizar la "amenaza" hispana
religioso y en su mestizaje cultural (mexicana) a la cultura W ASP ( white,
nunca ha sido enteramente occidental anglosaxon, protestant) norteamerica-
y ya desde la conquista ha dejado de na, a lo que Carlos Fuentes replicara
ser indígena. acusándolo de "racista enmascarado"
(marzo de 2004).

GLOBALIZACION E En el caso latinoamericano,


INTERCULTURALDAD existe cierto consenso entre los más
INICIANDO EL SIGLO XXI lúcidos analistas de la cultura que es-
tamos ante una cultura que es muy he-
terogénea, que sólo metafóricamente
A la luz de los procesos de es posible aprehenderla como "única"
globalización acentuados desde la y que corresponde a una situación de
década de los 80, se va generado dependencia y dominación.
una dinámica paradójica por cuan-
to, al mismo tiempo que tiende Precisamente, la globalización
a homogeneizar la cultura por la al inicio del siglo XXI acentúa la di-
internacionalización del mercado y versidad y la interculturalidad.
de las comunicaciones, se estimulan
procesos de respuesta que reivindican Las identidades culturales
las identidades particulares: locales, están desafiadas por lo diverso, por
étnicas, nacionales, religiosas ... Las lo plural, por el multiculturalismo e
"identidades" culturales están ahora incluso por la interculturalidad que
de moda, precisamente porque la cul- plantea desafíos éticos (Salas, 2003)
tura "post moderna" (en su sentido precisamente porque no existe proce-

-92-
Cristián Parker

so de construcción de una identidad sociales, etc. continúan generando


social y cultural que no sea eso: un sus valores y sentidos. Ello es posible
proceso dialógico con el "otro". A dado que ningún sistema de informa-
medida que cambia el "otro" cambio ción y comunicación global es capaz
también imperceptiblemente "yo". de erradicar la creatividad. "Nuevas
imágenes computarizadas y nuevos
La globalización, y la revolu- entornos de migración están gene-
ción de las NTIC (nuevas tecnologías rando neo-culturas: Ciberia, culturas
de la comunicación y la información) criollas, culturas fronterizas como la
con sus dinámicas de debilitamiento de Mexamérica en la frontera entre
de los Estados-naciones, de dilución Estados Unidos y México y culturas
de fronteras geográficas, comunica- viajeras, todas ellas en proceso de
cionales y culturales y a nivel de los formación" (Arizpe, 2003).
mercados internacionalizados, está
haciendo mas patente la contradicción Se puede observar, en la pro-
que provoca el encuentro desigual de liferación de microcomunidades
culturas en las sociedades contem- (étnicas, culturales, religiosas, políti-
poráneas. cas), una reacción a la concentración
económica transnacional que derriba
Los medios están acortando fronteras tradicionales: de nación,
las distancias en ambientes de ciu- etnia, cultura y religión y amenaza así
dades latinoamericanas que, por los la soberanía de estos interlocutores lo-
procesos de urbanización, durante la cales. Estamos frente a un proceso de
segunda mitad de siglo XX se transfor- respuesta a la nivelación en el terreno
maron en pocos años en megalópolis. económico y a la uniformización téc-
En investigaciones sobre los cambios nica, que deja el campo abierto para
en las prácticas de consumo cultural el libre juego de las identidades como
de la ciudad de México, García Can- desahogo de las diferencias. Castells
clini (2003) registra un proceso de dice, en su análisis de los procesos
"desurbanización", en el sentido en de globalización en la construcción
que disminuye el uso recreativo de de la "sociedad red", que se refuerza
los espacios públicos y gracias a los una búsqueda de sentido e identidad
medios electrónicos de comunicación, (Castells, 1999).
se incrementa la "cultura a domicilio"
llevada por la radio, la televisión y el El afán homogeinizador que
video. caracterizó a los procesos de mo-
dernización al tratar de construir
El desarrollo desigual de la un modelo de Estado-nación a la
sociedad global impacta a la cultura. europea ha negado las posibilidades
Prueba de ello es que sólo uno de cada que permitía la pluriculturalidad que
tres habitantes del planeta tiene hoy caracteriza a América Latina. A pesar
acceso a la electricidad. Pero las cul- de ese afán uniformizador, nuestro
turas y subculturas latinoamericanas, subcontinente constituye, todavía,
populares, campesinas, indígenas, un espacio culturalmente complejo
afroamericanas, juveniles, femeninas, y rico en el cual confluyen cerca de
ecologistas, de nuevos movimientos cincuenta millones de indígenas, casi

-93-
CULTURA

cuatrocientos pueblos indígenas dife- el pentecostalismo, los cristianismos


rentes y un número mucho mayor de independientes, las iglesias misione-
idiomas, dialectos y culturas diversas, ras como los adventistas, testigos de
tanto ancestrales como producto de jehová, mormones, y también una
la migración europea y africana. Con parte de los cultos afroamericanos e
la rememoración de los 500 años "de indígenas renovados, se están mul-
resistencia" (dirán los movimientos tiplicando los nuevos movimientos
indígenas) en el panorama cultural religiosos inspirados en la Nueva Era y
latinoamericano, emerge el actor en cultos orientalistas. Lo cierto es que
étnico. En consecuencia, la temática el ateismo decrece y no hay una secu-
intercultural hoy en América Latina es larización que indique la desaparición
el resultado del movimiento étnico y del fenómeno religioso, sino la revita-
social (Bengoa, 2000, Bastida, 2001), lización de antiguas tradiciones reli-
a lo cual hay que agregar ese pro- gioso-populares y nuevas alternativas
fundo movimiento generado por las que pueden caracterizarse como "neo
migraciones y el pluralismo religioso magias" (Parker, 2004) en el marco de
creciente. rasgos de cultura postmoderna.

Quinientos mil latinoamerica- La diversidad religiosa ha sido


nos han migrado al año, durante el úl- siempre un dato presente en la historia
timo tiempo, generalmente motivados de América latina: pero nunca el conti-
por motivos laborales y socioeconómi- nente había tenido una diversidad cul-
cos ( ya no tanto por motivos políticos tural y religiosa con los desafíos que
como fuese durante las décadas del 70 tiene hoy en el transcurso de un pro-
y el 80). De un continente de inmi- ceso de integración a la globalización.
grantes, se ha pasado a un continente Allí está la Umbanda, el Candomblé,
de emigrantes y el impacto cultural la Santería y el Espiritismo, pasando
de esta nueva realidad poblacional por "Pare de Sufrir", el televangelis-
todavía está por analizarse. El fenó- mo, la Teología de la Prosperidad, los
meno convierte a América Latina en Metodistas Pentecostales, el Padre
la región del mundo con mayor cre- Rossi y sus CD, la Madre Angélica,
cimiento de migración. En la última y los santos populares como Sarita
década, emigró hacia Estados Unidos Colonia, Romualdito, María Lionza,
y Europa, y en menor proporción a y la Difunta Correa, etc ..
países vecinos, el equivalente a toda la
población de Perú, unos 25 millones En este contexto intercultural,
de personas. se vuelve a plantear el reto de la inte-
gración latinoamericana.
Por otra parte, es claro que
con el incremento de los evangélicos Hay voces que cuestionan
y el decremento de los católicos, el los modelos de integración por el
continente se está transformando en mercado, al estilo neoliberal, en
sus estructuras simbólicas religioso- donde las discusiones en el Mercosur
culturales. No es sólo eso. Junto a las (p.ej.) son por el reconocimiento de
nuevas afiliaciones que desde 1970 en certificados, títulos y estudios. Tam-
adelante han aparecido en la población: bién hay críticas a los planteos que

-94-
Cristián Parker

quedaron fijados en una imaginada ral y mayoritariamente mestizo. De lo


esencia latinoamericana, que consti- que se trata es de descubrir las marcas
tuiría «la patria grande», «la nación de estilo de esa identidad mestiza la-
latinoamericana". Dichos conceptos tinoamericana. La amplia producción
son constructores de utopías que hay de la literatura latinoamericana con
que transformar en voluntad política. ensayos como los de O. Paz, C. Fuentes
También se cuestionan los análisis u obras como las de G. García Márquez,
"postmodernistas" (Follari, 2002) M. Vargas Llosa e l. Allende, etc., dan
criollos que disuelven al sujeto en muestra de la profundidad, complejidad
la fragmentación, los "hibridismos" y riqueza de este "realismo mágico" de
como proceso de generación de iden- nuestra cultura.
tidades "que son ahora multiétnicos,
migrantes, políglotas y que cruzan El dinamismo propio de la cul-
elementos de varias culturas». Hay tura reclama también nuevas aproxi-
quienes propugnan un proceso de maciones. En las últimas décadas, la
integración que reconozca las dife- temática cultural ha despertado una
rencias y las mezclas, que negocie los creciente preocupación en América
derechos y construya nuevos espacios, Latina. Por diversos motivos vincu-
asumiendo políticas de participación y lados, en parte a las circunstancias
de redistribución de saberes y poderes históricas del continente y en parte
que corrijan las asimetrías entre los a los cambios y a la globalización,
grupos y sus identidades flexibles, la crisis de los paradigmas y de la
para evitar precisamente una licuación praxis en Latinoamérica, ha abierto
de las diferencias. un espacio a la cultura. Al análisis
de las necesarias transformaciones
El reto cultural es la integra- estructurales de una sociedad depen-
ción a los procesos contemporáneos diente, ha sucedido el análisis de la
con una mirada auténtica y crítica, acción cultural en la vida cotidiana
entrando, como dice un viejo diri- de los pueblos. De la estructura, se ha
gente indígena ecuatoriano, "en la pasado a la subjetividad; de la revo-
conquista del conocimiento universal, lución, al cambio sociocultural; de la
de la tecnología y en el manejo de un acción política y sindical militante, a
buen castellano y del inglés, manejar la educación popular y la acción cul-
la macro y la micro economía, en el tural; de la búsqueda de respuestas
manejo del comercio mundial, la polí- totalizantes, a respuestas vinculadas
tica y la toma del poder; pero siempre a la cultura local y cotidiana de la
amparados bajo nuestra filosofía de gente; de la crítica a la ideología, al
Ama llulla, ama kílla y ama shuwa, análisis del mestizaje y el hibridismo
para no caer en la corrupción y en el cultural; de la crítica al imperialismo,
abuso a nuestro propio pueblo, y que a la crítica a la cultura de masas y a
nunca deje de pensar que es un indí- la industria cultural en una cultura
gena en su máxima expresión." transnacionalizada; del estudio de
los movimientos sociales, al análisis
De hecho, tendemos a conside- de las discriminaciones étnicas y de
ramos "occidentales" cuando en verdad género; del estudio de los modos de
somos un continente plural, intercultu- producción, al análisis de la vida coti-

-95-
CULTURA

diana; del estudio de los procesos de rituales espiritualistas, esotéricos, de


acumulación, al análisis de la crisis adivinación, etc. todo ello sin contar
medioambiental y la preocupación las profundas transformaciones de
por la ecología; etc. Nuevos actores la sociedad mediática e informática
sociales emergen en el contexto (la cultura de las telenovelas y de la
de la modernización y sus contra- farándula criolla) y de la cultura del
dicciones y, con ellos, la variable espectáculo, incluyendo los deportes
cultural se torna más relevante: multitudinarios como pasión de los
pueblos indígenas; movimientos de latinoamericanos ( vgr. el fu tbol).
mujeres y de género; comunidades Todos ellos conforman una realidad
y grupos cristianos de base; grupos cultural dinámica, compleja, rica
pentecostales; asociaciones barria- en matices y contradicciones, que
les; grupos culturales; grupos de reclama nuevas aproximaciones no
consumidores; grupos ecologistas; sujetas a categorías y conceptuali-
nuevas agrupaciones y cultos re- zaciones que todavía permanecen
ligiosos; nuevas subculturas juve- atadas a la sociedad latinoamericana
niles, verdaderas "tribus urbanas"; que ya está siendo superada al inicio
auge de expresiones creencias y de este tercer milenio.

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-100-
CULTURA POPULAR

Eduardo Santa Cruz --------------

Chile

Palabras Clave
FILOSOFÍA LATINOAMERICANA - CULTURA - GEOCULTURA
- RACIONALIDAD - MODERNIDAD - PUEBLO - MESTIZAJE
- SIMBOLISMO - TEORÍA DE LA COMUNICACIÓN
- ANTROPOLOGÍA - PSICOLOGÍA - HISTORIA

INTRODUCCIÓN Así, el concepto comienza a ser


usado hacia los años ·50 contemplan-
do a la cultura popular como el lugar
El concepto "cultura popular" preferente para la emergencia de un
ha pretendido dar cuenta de la exis- proyecto cultural, que apuntara a la
tencia, procesos constitutivos, formas construcción de una identidad nacio-
y modos de manifestarse, etc. de una nal y latinoamericana independiente
realidad cultural particular y distintiva y autónoma. Esta visión adquirió una
de los sectores más pobres y masivos especial importancia, en la medida en
de la sociedad latinoamericana. que fue asumida por extensas masas
movilizadas por la izquierda (y aun
En términos generales, el con- más allá) y se concretó en movimien-
cepto ha girado en torno a dos ejes tos culturales y artísticos, cuya vigen-
fundamentales, en su desarrollo epis- cia perdura, aunque en buena medida
temológico y metodológico. Por una asimilada y desprovista de algunos
parte, la visión de la cultura popular de sus elementos más sustantivos.
se ha relacionado directamente con el Esta visión de lo popular, además,
problema de la identidad nacional y apareció como respuesta a tradicio-
latinoamericana. En esa perspectiva, nales concepciones de la nación y el
se ha partido de un supuesto más o pueblo, subyacentes o explícitas en los
menos explícito y expuesto de manera proyectos conservadores, liberales o
más o menos radical y que se refiere a la populistas, planteados a través de los
concepción de las oligarquías o clases siglos XIX y XX.
dominantes como irremediablemente
tributarias y dependientes de modelos Por otro lado, y en gran medida
y patrones culturales foráneos, de los complementando lo anterior, se ha de-
centros universales dominantes, en sarrollado la relación entre la cultura
los distintos planos (económico, po- popular y el desarrollo acelerado de
lítico, cultural,etc.) y en los diferentes los medios masivos de comunicación
momentos históricos (inglés, francés, y de la industria cultural, los cuales
norteamericano, etc.). aparecen desde esta óptica, general-

-101-
CULTURA POPULAR

mente como incrustaciones foráneas, vertir un hilo conductor común y que


con un claro perfil cultural invasor. es el lugar y papel de lo popular en la
En la medida en que se van haciendo sociedad. Así, la primera fase (de los
más y más evidentes los efectos de la años '60-70) apreció con énfasis a la
realidad cultural moderna, vehicu- cultura popular como una cultura de
lada y difundida por los medios y la resistencia, como expresión del sujeto
industria (masificación, tendencia a histórico del cambio social. En esa
la homogeneización de pautas cultu- perspectiva y en el contexto del sur-
rales y, con ello, el reverso paradójico gimiento de las dictaduras militares,
y simultáneo de la fragmentación y basadas en la Doctrina de Seguridad
atomización, ruptura de identidades, Nacional, se reforzó la idea de que el
etc., la relación comunicación/cultura rol de resistencia es el único modo
se hace decisiva para la investigación posible de existencia de lo popular.
de la cultura popular, la cual se va
haciendo imposible de entender y Esta mirada se sustentaba en
explicar al margen de la constitución diferentes matrices teóricas, entre las
y desarrollo de los sistemas de comu- cuales cabe destacar la Teoría de la De-
nicación social, generados alrededor pendencia y del imperialismo cultural
de los medios y la industria cultural. y el enfoque estructuralista-marxista
Por ello, el campo disciplinario de la althusseriano, a la base de los trabajos
Comunicación Social ocupa un lugar de Armand Mattelart (1973), Marta
central, tanto en calidad como canti- Harnecker (1971-72). Paralelas son
dad, en trabajos acerca del tema. las obras que se inscribían en lec-
turas más o menos libres, dentro de
Finalmente, ambos ejes encuen- una mirada más bien estructural,
tran su lazo de unión y su sentido en el del marxismo como las de Ludovico
marco del contexto político latinoame- Silva (1971). Asimismo, la versión
ricano y su evolución histórica de los más ortodoxa del marxismo sirve de
últimos 35 años. Obviamente, el con- marco a trabajos como el de Camilo
cepto mismo aparece como extraordi- Taufic (1973), profusamente editado
nariamente sensible a dichas coyunturas y que es la obra más difundida en esta
y, por otro lado, como instrumento de perspectiva.
intervención política en ellas.
Una tercera matriz fundamen-
tal la constituyó la difusión del pen-
DELIMITACIÓN samiento de la Escuela de Frankfurt,
HISTÓRICA especialmente en aquellos aspectos,
autores o textos que ponían de relieve
la complicidad intrínseca entre el de-
En la evolución del concepto sarrollo tecnológico y la racionalidad
de cultura popular, es posible dife- mercantil y su impacto en la cultura.
renciar tres fases o etapas, cada una En ese sentido, tal vez el autor en
de las cuales dice relación con pers- que más claramente se expresa esta
pectivas epistemológicas así como con influencia es Antonio Pasquali (1963
opciones metodológicas, por lo menos y 1970), aunque, de hecho, la lectura
diversas. En todo caso, es posible ad- frankfurtiana que se hizo en América

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Eduardo Santa Cruz

Latina se hizo complementaria con perspectiva son Nestor García Can-


los marcos antes señalados. Esto clini (1982) y Jesús Martin Barbero
último: el hecho de que enfoques (1987). También cabe mencionar a
epistemológicos no sólo distintos, Bernardo Subercaseaux (1985) y las
sino en buena medida contrapuestos publicaciones de FELAFACS (1987
en sus contextos teóricos e históricos y revista DIA-LOGOS) y CIESPAL
originales, apunten subsidiariamente (revista CHASQUI).
en la misma perspectiva al ser usados
para el estudio de la realidad latinoa- Este período vino a significar
mericana, constituyó un sesgo original un salto cualitativo en la perspectiva
que espera un estudio acucioso, desde epistemológica y metodológica. Como
el punto de vista de los fenómenos lo señala el título de la obra de Martín
de apropiación del pensamiento Barbero, el hecho de pasar del análisis
universal. medial y de sus efectos al de las me-
diaciones, producto de los procesos de
Esta mirada cedió el paso a apropiación cultural popular implicó
una concepción más compleja de que desde la Comunicación Social se
lo popular y su cultura. La matriz analizaron dimensiones y procesos
teórica fundamental se construyó a que, necesariamente, incorporaron
partir de la difusión masiva (y por interrogantes y conocimientos histó-
ello con diversas lecturas) del pen- ricos, antropológicos, estéticos, etc.
samiento gramsciano, especialmente y, al revés, esas disciplinas debieron
en lo que se refiere a la Teoría de la ocuparse de los fenómenos comuni-
Hegemonía (años '70-'80). También cacionales. Desde allí, surgirán, hasta
caben mencionar las lecturas de ahora, numerosos estudios interdisci-
Foucault y Bourdieu, especialmente plinarios (no sólo en el sentido formal,
en lo que se refiere a la concepción sino especialmente en lo que dice rela-
del poder y sus dispositivos y los ción con la óptica investigativa) sobre
conceptos de campo cultural y habitus, la música, las expresiones religiosas
respectivamente. Si bien se conservó populares, el deporte, la ciudad, las
el supuesto básico de la estructuración fiestas, los géneros y formatos comu-
clasista de la sociedad, se complejizó nicacionales, etc., de las cuales pueden
la visión de los mecanismos y relacio- citarse, sólo a manera de ejemplos, los
nes entre los sectores hegemónicos trabajos incluidos en la Bibliografía
y subalternos. Lo popular ya no es específica, entendiendo que ésta es
visto como puramente un espacio muchísimo más vasta.
autónomo de resistencia, sino que se
le vio constituyéndose en procesos Finalmente, a comienzos de
de apropiación cultural, en los cuales los '90 se abrió un tercer período
está presente el conflicto social, pero marcado por la derrota y crisis del
también las alianzas, los consensos y proyecto revolucionario marxista,
la posibilidad de disputar la hegemo- la difusión en América Latina de las
nía social, política y cultural, es decir, visiones que enfatizan la crisis del
el desarrollo de un proyecto cultural proyecto cultural de la modernidad
popular con dimensiones nacionales. y su secuela, la emergencia del pen-
Los autores fundamentales en esta samiento posmoderno. Los procesos

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CULTURA POPULAR

anteriores se ubican también en Junto con ello y en aparente


América Latina en el marco de la paradoja, la consolidación de las ten-
crisis general de las ciencias sociales, dencias globalizan tes en la economía,
caracterizada en lo esencial por la política, cultura, etc., por un lado,
puesta en duda de todos los mode- y la violencia y profundidad de la
los, a partir del cuestionamiento de i crisis económica y la pauperización
la razón instrumental. La llamada creciente en la mayoría de los países
globalización en todos los planos, re- latinoamericanos, por otro, crearon las
gida por un mercado crecientemente ' condiciones para la explosión social,
universal, barrenó por su lado las ba- que en muchos de ellos ha provocado
ses y desbordó los límites de la teoría profundas crisis de gobernabilidad. En
del imperialismo y la dependencia este nuevo marco, lo popular asoma
que, de alguna forma. se mantenía como un mosaico yuxtapuesto de
como un cimiento inconmovible de ; grupos étnicos, marginales, sindi-
las etapas anteriores. A pesar de lo ; cales urbanos, campesinos, etc. que
reciente, cabe distinguir al menos catalogados como nuevos movimientos
dos líneas principales frente a la sociales constituyen, para algunos, el
crisis. Por un lado, los trabajos de principio de una rearticulación social
J.j.Brunner (1988) que terminan y política con perspectivas alternativas
por asumir y aceptar como un dato al dominio del capital global. Con ello,
el desperfilamiento de la identidad las visiones dominantes e impositivas
y la fragmentación del sujeto po- de la globalización uniformadora
pular, hasta hacerse indistinguible han revitalizado la concepción de lo
al interior de la masa y, a partir de nacional-popular como espacio de
ello, separando el análisis cultural resistencia por excelencia.
de las relaciones de poder. Por otro 1

lado, las obras de García Canclini 1

(200) y Martín Barbero (2003) que, I DELIMITACIÓN


aceptando muchos de los elementos CONCEPTUAL
que sustentan la visión anterior,
siguen interrogándose frente al pro-
blema del poder y la desigualdad, Como es sabido, los años '60
como marcos que necesariamente marcan un momento particularmente
conllevan a una práctica cultural significativo en la historia contempo-
distintiva en los sectores populares, ránea de América Latina. El impacto y
caracterizada ahora por la hibridez la in!luencia de la Revolución Cubana
y la oblicuidad en sus relaciones -especialmente en lo que se refiere a
con la dominación, en el contexto originalidad política y teórica- y poste-
de los llamados procesos globaliza- 1 riormente de experiencias como la de
dores que, entre otras cosas. están la Unidad Popular en Chile,junto a un
imponiendo una redefinición del proceso generalizado de ascenso de la
Estado-nación, en términos tales acción política popular y de izquierda,
que, por lo menos, en lo cultural generaron un contexto efervescente
habrían permitido la aparición de que se vio retroalimentado con un
lo que Ortiz (1997) llama cultura proceso similar en el campo de la
intcnwcional popular. , teoría y el pensamiento.

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Eduardo Santa Cruz

La teoría de la dependencia, esencial desde donde llevar a cabo la


la reactualización del pensamiento utopía de una nueva sociedad y una
frankfurtiano, la difusión de la obra nueva cultura (Mattelart, 1973; Har-
de Althusser y el redescubrimiento necker, 1971-72; Taufic, 1973). Como
del marxismo latinoamericano de los lo hemos dicho, esta perspectiva se
años ·20 (en especial, Mariátegui y nutrió del materialismo histórico (en
Recabarren), sirvieron de matrices sus versiones más ortodoxas o más
para la emergencia de una visión de o menos heterodoxas) y en plantea-
lo popular que pretendió no sólo dar mientos sociológicos que inciden más
cuenta del proceso revolucionario directamente en el terreno cultural
en curso, sino servir de instrumento (como los trabajos de Gunder Frank,
teórico, al servicio de la aceleración de Hinkelammert y especialmente por su
dicho proceso. Así, hizo su aparición difusión e influencia más masiva, los
el concepto de cultura popular, de de Mattelart). En síntesis, lo popular
manera explícita en algunos autores aparecía como la reserva cultural des-
y subyacente en otros. La preocupa- de la cual resolver el viejo problema
ción por lo popular decía relación, de la identidad. Al desahuciar todo
además, con fenómenos de más larga rol posible de las clases dominantes
data y desarrollo como los procesos de o sectores de ella, por su dependencia
industrialización y urbanización y su estructural de los centros imperia-
secuela de marginalidad; expansión de listas históricamente de turno, el
los mercados económicos y culturales; pueblo como sujeto histórico del
la incorporación de nuevos sectores cambio social era el agente capaz de
populares al consumo y la compleji- construir y llevar adelante un proyec-
zación de los conflictos sociales en el to cultural nacional independiente y
campo, la ciudad y entre ambos.Junto autónomo.
a ello, el intento finalmente fracasado
del Estado desarrollista por encauzar Lo anterior permitía respon-
la emergencia de los movimientos der a la concepción biológica- telúrica
sociales, a partir del conocimiento ( García Canclini,1987), surgida como
de sus estructuras culturales, con el ideología de los estados oligárquicos
objeto de sentar las bases de nuevos y sobreviviente en movimientos
consensos dentro del cambio. nacionalistas de derecha (reactua-
lizada, en parte, por las dictaduras
En este marco, la visión de lo militares de los 70) y singularmente
popular lo sitúa como el lugar prefe- reasumida por corrientes populistas
rente de un proyecto alternativo y su e indigenistas, coincidentes en la
cultura como una cultura de resisten- sospecha frente a lo foráneo. Esta
cia. En ese sentido, lo popular es visto visión identificaba lo popular con
más ... como un ideal y no como una el ser nacional y las tradiciones. La
realidad fáctica (Subercaseaux,1985), cultura nacional se concibe como ya
acentuándose los elementos de au- lista en algún origen legendario del
tenticidad y autonomía. Lo popular y ser nacional, en la tierra, en la sangre
su cultura aparecían como un espacio o en virtudes del pasado. Asimismo,
puro e incontaminado por la ideología enfrentaba la concepción estatalista
dominante, poseedor de un núcleo de los populismos ( Ciria, 1983),

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CULTURA POPULAR

para los cuales la identidad nacional los dominados, de tal manera que,
aparece alojada en el Estado, lugar develando los objetivos económicos
que condensa los valores naciona- e ideológicos de los medios masivos,
les. En este caso, lo popular es visto permitía saber qué falsas necesidades
como destinatario preferente de la generaban y cómo sometían a los con-
acción estatal y, en retribución, debe sumidores. Las masas receptoras eran
subordinar su iniciativa a los intereses vistas como pasivos ejecutantes de las
de la nación. Ambas concepciones prácticas inducidas por la dominación.
coinciden en un cierto chovinismo De esta forma, por la vía de denunciar
que los hace rechazar, al menos en la el poder se terminaba, muchas veces,
retórica, en bloque, lo extranjero. Lo sacralizándolo como omnipotente y
popular como espacio de resistencia a omnipresente. La importancia de esta
la dominación permitía, entonces, por visión no es sólo teórica, sino que en
la vía de la afirmación de una cultura gran medida irradió mucho más allá
y política autónoma, enfrentar visio- de círculos interesados, políticos e
nes que ocultaban los mecanismos intelectuales y la sospecha frente a
de la dominación. Por otro lado, esta un interés manipulador intrínseco
concepción de lo popular de los años de los medios masivos se ha hecho
º60-70 permitió un gran desarrollo parte de un cierto sentido común
a los estudios y análisis de denuncia hasta hoy vigente. Finalmente, cabe
de los mecanismos y estructuras de mencionar que en este contexto de la
dominación ideológica. En ello, jugó denuncia de la comunicación masiva,
un papel relevante la Semiótica, como surgen en América Latina una serie
instrumento de desmontaje de la de aportes teóricos en el estudio de
ideología subyacente a todo discurso la relación comunicación y cultura,
(en especial, la influencia de Barthes, como por ejemplo la diferenciación
Eco, Greimas, Lacan,etc.). entre los conceptos de información y
comunicación, como contradictorios
La industria cultural y la cul- y ya presentes tempranamente ( ver
tura de masas, caracterizada como Pasquali, 1963 y 1970).
no perteneciente a lo popular, eran
percibidas en bloque como campos El modelo anterior vive una
de alienación que atentaban contra crisis teórica y política que provocará
la toma de conciencia del sujeto po- su reemplazo por una nueva concep-
pular y, por ende, ponían en peligro ción. La denuncia global terminó por
la cultura nacional (ver Dorfman y llegar a un callejón sin salida, en la
Mattelart, 1971, como un clásico al medida en que al sobrevalorar el poder
1

respecto). En esta perspectiva, es que de los aparatos ideológicos, se podía


hizo su aporte la tradición frankfurtia- llegar al extremo de la imposibilidad
na, especialmente en lo que se refiere , ele resistir una manipulación, además,
a la mcrcantilización ele la cultura y dotada ele una tecnología cada vez más
la manipulación de las conciencias. sofisticada. Ello se reforzó con los
La investigación de denuncia de los fracasos de populistas y marxistas en
aparatos ideológicos (Silva,l CJ71) sus concepciones clientelistas o eco-
tendía a deducir ele las estrategias nomicistas sobre el comportamiento
de la dominación los efectos sobre ideológico ele las masas. De esta for-

-106-
Eduardo Santa Cruz

ma, se comienza a trasladar la mirada sino fundamentalmente decisivo es el


hacia los procesos de interacción uso y la relación con los dispositivos
simbólica que se dan en las prácticas del poder.
sociales populares y masivas. Con
ello, la cultura popular comenzará a De esta forma, se abrió paso la
verse no sólo como lugar de resisten- posibilidad de terminar o, al menos,
cia, sino incorporando elementos de matizar la visión demoníaca de la
integración social y como un espacio industria cultural y la cultura de ma-
interpenetrado con la cultura domi- sas; la visión maniquea que colocaba
nante (Subercaseaux,1985). signo positivo a todo lo nacional y uno
negativo a lo foráneo y la percepción
Desde el punto de vista de de una cultura popular encerrada en
los objetos, la tendencia a ver el fe- un aislamiento social y/o espacial. El
nómeno a nivel de una racionalidad aporte foucaultiano sobre el poder y
instrumental y en el ámbito de lo sus dispositivos y el de Bourdieu, con
ideológico-político, se abre también la diferenciación y relación entre el
a otras dimensiones (lo expresivo, lo campo cultural y la cultura cotidiana de
lúdico, festivo, emotivo) orientadas a masas abrió perspectivas que llevarían
una racionalidad distinta, valorando a un cambio paradigmático. Por ahora
fenómenos que antes aparecían, en señalemos que, en ese contexto, se
gran medida, como espacios instru- impuso la idea de la apropiación cul-
mentalizados por la manipulación tural (Subercaseaux,1989), a partir de
de las conciencias y el tiempo libre: la cual la identidad popular, nacional
la música, la religión, el melodrama, y latinoamericana, es vista como un
el deporte, etc. Los textos de García proceso permanente de construcción/
Canclini (1982) y Martín Barbero desconstrucción, que desterrando la
(1987) son los trabajos fundamentales posibilidad de núcleos incontamina-
que, a la vez, dan cuenta de este viraje dos e inmanentes, pone el acento en la
epistemológico y metodológico y lo manera como se asimilan y procesan
enmarcan y justifican teóricamente. elementos de toda procedencia. No
En este cambio, juega un rol decisivo existen, por lo tanto, formas o conte-
la difusión del pensamiento gramscia- nidos sustancialmente fijados de una
no en los años 70--80 y en especial vez para siempre. Al decir de García
su concepción de la hegemonía, de las Canclini, la pregunta de si el rock o
culturas subalternas y de la relación el tango son hegemónicos o subal-
entre ambas. Si bien, en un primer ternos, es una pregunta falsa ( García
momento, el aporte gramsciano sirvió Canclini, 1987). La cultura de masas
para reciclar la concepción anterior, es vista ahora como una de las formas
por la vía de valorar como alternativo de existencia de lo popular y la indus-
y contestatario todo lo proveniente del tria cultural puede ser tanto obstáculo
mundo popular, se terminó por impo- como potenciación del desarrollo y
ner la idea central de Gramsci de que democratización de la cultura. Se trata
no es el origen el criterio fundamental más que de denunciar los medios, de
de identificación como subalterno o entenderlos en sus sectores, sus ló-
popular de un producto cultural, de gicas, sus procedimientos,etc. A esta
los medios, los espacios sociales, etc. nueva mirada, le interesó también el

-107-
CULTURA POPULAR

ángulo del consumo, de la posibilidad y la impugnación coexisten con la


de la recepción crítica y activa (ver reproducción de hábitos y relaciones
en especial los trabajos de Valcrio sociales instaurados por el sistema
Fuenzalida). hegemónico ( García Canclini,1987).
Sin embargo, ya el desarrollo de esta
La cultura popular, en tanto perspectiva conllevaba un conjunto
cultura de apropiación y resignifi- de desafíos y peligros teóricos, con
cación, no es ni opuesta ni separada claras consecuencias políticas. Suber-
de otros segmentos del campo cul- caseaux se preguntaba (1985) si acaso
tural, sino sencillamente distinta. El no existía el riesgo del eclecticismo y
concepto de cultura popular se ha el relativismo; de separar el análisis
desplazado desde una prefiguración cultural de las relaciones de poder; de
ideal hasta una concepción más bien cómo construir desde una concepción
fáctica (Subercaseaux,1985). En este puramente fáctica de lo popular un
contexto, surge un interés renovado pensamiento crítico sobre la cultura
por el estudio del consumo y la or- de masas, la transnacionalización y
ganización popular y su relación con uniformación cultural; de si la idea
la hegemonía (García Canclini,1995). de la heterogeneidad cultural de lo
Entendida como dirección política popular podía admitir la coherencia
e ideológica, la hegemonía de los de éste como sistema,etc.. Estas pre-
sectores dominantes admite la exis- ocupaciones de alguna forma prefi-
tencia de espacios propios y a veces guraban algunos de los principales
contestatarios de los sectores sub- problemas que se plantearían más
alternos. Con respecto al consumo, tarde y contenían los elementos sobre
éste es visto como procesos sociales los cuales se han construido algunas
de apropiación y de conflicto social de las respuestas.
por participar en la distribución; es
mucho más que los gustos medidos En los años ·90 se abrió un
por las encuestas o que el espacio período que se ha caracterizado como
donde se realiza el producto. Aparece de crisis general de modelos y para-
como un concepto clave para explicar digmas, con lo cual algunas de las
la vida cotidiana. interrogantes y dudas surgidas en la
etapa anterior se han tendido a res-
A su vez, la organización po- ponder más bien negativamente. El
pular puede gozar de los espacios de concepto de lo popular y su cultura
autonomía que deja la hegemonía, tendió a diluirse en la constatación
justamente en tanto no es reductible ¡ de la atomización y fragmentación
a la pura dominación, pero, a la vez, social. Difícilmente hoy se puede
no es vista sólo como instrumento contestar con rigor qué es la cultura
de representación de los intereses y popular o desde qué criterios puedan
demandas populares, sino participan- encontrarse bases de sustentación a
do de las relaciones sociales y reglas su identidad. En este marco, han sur-
del poder fijadas por el sistema. En gido diferentes líneas interpretativas.
definitiva, quienes luchan contra el Desde las que asumen la hegemonía
poder lo hacen desde contextos mul- -aparentemente incontestable- de la
tideterminados, donde la resistencia modernización neo-liberal, hasta los

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Eduardo Sar.ta Cruz

que buscan nuevas bases desde las posible del Estado, para que se liberen
cuales elaborar, al menos, un pensa- las energías creativas del mercado y
miento crítico, pasando por la difu-
-;ión del pensamiento posmoderno, 3.- La descongestión de la
en variadas tendencias. Se han asumi- gestión administrativa en pequeñas
do también las ideas de la crisis de la unidades de decisión. Lo anterior,
modernidad y la pérdida del sentido y descansando en el supuesto de una
la vigencia de los grandes relatos. En suerte de perversidad intrínseca del
ese contexto, pareciera que la preocu- Estado y de identificar lo social con
pación por lo popular no es sino parte los intereses privados, de los cuales el
de un pasado superado por los acon- mercado sería la mejor y más democrá-
tecimientos, especialmente a partir tica expresión, en el cual confluirían
de la constatación de que existe un las distintas iniciativas individuales
modernismo moldeado en sus gustos libremente. Dicha visión angelical, en
por la industria cultural, en el que se el caso de los mercados culturales e
encuentran buena parte de las clases informativos, oculta interesadamente
altas y medias, con la mayoría de las los procesos de concentración del
clases populares (Brunner,1998). Sin poder, paradójicamente (o tal vez no
embargo, tras ello pareciera advertir- tanto) incrementados con la democra-
se un desfase importante entre la cri- tización política de los últimos años
sis paradigmática y la realidad social. (Sunkel, Russell).
Mientras en la primera la carencia de
certezas y la pérdida de sentido no El modelo intenta consagrar
tienen contrapeso importante toda- un Estado eminentemente adminis-
vía, a nivel de los hechos asistimos trador que tiende a abandonar un
al desarrollo -con diferentes ritmos rol político, con lo cual se genera el
e intensidad según los países- de distanciamiento creciente entre la
un proyecto cultural neo-liberal clase política y la sociedad civil y se
claramente hegemónico y que, de traspasa el sentido de lo público al
facto, moldea la cultura cotidiana de sector privado. La política tiende así
masas, generando en buena medida a convertirse en un mercado más, a
ese malestar en la teoría, de que habla cargo de especialistas. Los consumi-
Martín Barbero (1988). dores son tratados como ciudadanos
y éstos como aquellos. Este proceso
Dicho proyecto se caracteriza, se ha facilitado en los países donde
en lo básico, por tres elementos: la modernización económica ha te-
nido, al menos, la eficiencia técnica
1.- Una descentralización, suficiente para lograr el equilibrio y
que no sólo no se ha opuesto sino eventualmente el crecimiento, incor-
que, por el contrario, aparece como porando sectores sociales más amplios
complementaria de los procesos de al consumo y participando en alguna
concentración del poder; medida de los patrones culturales de
la modernidad, en especial los que son
2.- La desregulación de la ac- producto del desarrollo tecnológico.
tividad cultural (y social en general), Un efecto de ello es que las nuevas
que supone la menor intervención tecnologías hacen fuerte al Estado

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CULTURA POPULAR

al reforzar sus aparatos de control zontalmente (García Canclini,1990).


y administración y, eventualmente, Aun quienes asumen la hegemonía
represión de minorías excluidas y del modelo neo-liberal como un dato
marginadas y lo hacen débil al quitarle y proponen una administración que
funciones de que se ha apropiado el busque los equilibrios y consensos
sector privado y el mercado ( García entre el Estado, los agentes privados
Canclini, 1995; Moulian). La frag- (léase empresas) y los organismos
mentación social, la violencia como sociales, garantizando el acceso al
cuestión incorporada cotidianamente mercado y, con ello, una paulatina
en las grandes urbes, las explosiones democratización social y cultural
sociales a veces con fuerte contenido (Brunner,1998), admiten la existen-
étnico, la conservación de identidades cia de un malestar por la modernidad,
y lealtades políticas o culturales, la que el autor atribuye a la vigencia de
búsqueda de pequeñas identidades la heterogeneidad cultural que no es
grupales en la música, el deporte (las mera diversidad.
llamadas barras bravas), las religiones
(proliferación de todo tipo de sectas Desde allí surge para otros
y popularización de toda laya de mis- (García Canclini,1990) un concep-
ticismos), la reivindicación de modos to clave para entender la realidad
de ser diferentes (punk, hardcore, actual de la cultura popular: la
trash,etc.etc.) no son sino algunas de noción de cultura híbrida, cultura
las consecuencias provocadas por la de cruces y de fronteras, caracte-
imposición de un modelo que se au- rizada por las relaciones y mezclas
toproclama como garantía de orden, de productos culturales, por las
libertad y progreso para todos. mediaciones y apropiaciones, por
la desterritorialización y desco-
Una consecuencia teórica de lección, etc .. La hibridación es la
esto es que la interpenetración de los otra cara del estallido y la frag-
estudios culturales y de la comuni- mentación, de la heterogeneidad.
cación responde al lugar estratégico Es la forma de identidad con que
que la comunicación ocupa en los se sobrevive en el marco de la
procesos de reconversión cultural que diseminación de los centros, la
requiere la nueva etapa de moderni- multipolaridad de las iniciativas
zación. Otra consecuencia que apunta sociales, la pluralidad de referen-
en la misma dirección es que si lo cias, cuestión especialmente mani-
culto, lo popular y lo masivo no están fiesta en las ciudades que, al decir
donde tradicionalmente los ubicaban de Martín Barbero (1992), son un
ciencias o disciplinas especializadas marco ambiguo y necesario que no
(historia del arte y literatura; folklo- se agota en la diferencia excluida y
re y antropología; la comunicación excluyente de lo propio y tampo-
social, respectivamente), es que se re- co desde la inclusión disolvente
quieren nuevos enfoques epistemoló-- de lo moderno. Porque de lo que
gicos y metodológicos que se muevan esta noción intenta dar cuenta es
por los instersticios, circulen por las que el poder no ha dejado de ser
escalas que comunican estos niveles poder y la desigualdad no sólo no
o, mejor, que los comuniquen hori- ha desaparecido, sino que se ha

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Eduardo Santa Cruz

incrementado en muchos lugares y De alguna forma, entonces,


en diversos planos, a partir no sólo la conceptualización de la cultura
de la contradicción entre capital y popular se encuentra después de
trabajo, sino también en la apro- un largo recorrido en un punto de
piación desigual del consumo y del partida, que incluso contiene como
capital cultural y porque, ubicados desafío la necesidad de delimitar
generalmente entre lo tradicional y renovadamente, y aún legitimar, su
lo moderno, con un pie en ambos, objeto de estudio. Junto con ello,
los sectores subalternos siguen pareciera sano rehuir la vuelta a
reproduciendo, transformando y viejas certezas maquilladas ad hoc,
representándose sus condiciones como también el facilismo que bajo
de vida de manera particular, lo el rótulo de pragmatismo asume lo
que no significa, como señala Or- existente como dato natural. Más
tiz, ni autarquía, ni prescindencia bien se requiere de una actitud inte-
de la inserción y participación en lectual crítica ante una realidad que
realidades culturales globales. amerita al menos la sospecha.

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-113-
DEMOCRACIA
Carlos Ruiz Schneider
Chile

Palabras Clave
DESARROLLO - MODERNIDAD - REVOLUCIÓN - SOCIALISMO
CAPITALISMO - TEORÍA-PRAXIS - PUEBLO - POLÍTICA

INTRODUCCIÓN DELIMITACIÓN
HISTÓRICA
En América Latina han exis-
tido dos grandes concepciones A pesar de una impresión
acerca de la democracia en este difundida, el tema de la democracia
último tiempo: la primera subraya es algo relativamente nuevo en la fi-
que la democracia es una entidad losofía política y las ciencias sociales
de carácter exclusivamente político, en América Latina, por lo menos en el
entendiéndose por política, de una período posterior a la Segunda Guerra
manera restrictiva, la lucha compe- Mundial.
titiva por el poder del Estado, en la
que participan organizaciones como En los años ·so y "60, el debate
los partidos y cuyo núcleo institu- político- intelectual estuvo dominado
cional son los gobiernos y el parla- por el tema del desarrollo y la moderni-
mento. Para la segunda, la imagen zación. En el contexto de estas teorías, la
legitimadora más importante, en la democracia es sólo una de las múltiples
base de los procesos de transición, formas políticas por las que las élites mo-
es la del pacto o el contrato. La evo- dernizadoras pueden optar para lograr
lución de estas concepciones enseña el objetivo final del desarrollo.
que estos modelos contractualistas
o consensuales, van incorporando A fines de los años ·50 y co-
cada vez más a las ideas neo-liberales mienzos de los 70, el tema del de-
que comenzaron combatiendo. Con- sarrollo cede su lugar al de la depen-
senso en lo político y mercado en dencia y a la formulación de diferentes
lo social, parecen ser las consignas proyectos revolucionarios que intentan
básicas de un nuevo proyecto he- superar los obstáculos que enfrenta
gemónico, presente en las políticas el desarrollo capitalista en la región
laborales, educacionales, en la salud (Lechner, 1985).
e incluso en el medio ambiente, con
las consecuencias sociales que son Desde mediados de los 70, y
de esperar. aun antes, en el caso de Brasil, las die-

-115-
DEMOCRACIA

taduras militares, junto con derrocar pero también a intelectuales socialis-


los regímenes democráticos en Chile, tas y marxistas más radicales.
Argentina y Uruguay, legitiman los
nuevos sistemas autoritarios a partir Al interior de este marco po-
de concepciones como la Seguridad lítico e ideológico, hay, me parece,
Nacional, las ideas nacionalistas, dos líneas predominantes de inter-
el corporativismo y, finalmente, el pretación.
discurso neo-liberal. Todos estos
sistemas ideológicos son natural- La primera subraya que la de-
mente opuestos a la democracia o la mocracia es una entidad de carácter
consideran sólo como un medio para exclusivamente político, entendién-
proteger los derechos individuales y, dose por política, de una manera
en particular, el derecho de propiedad restrictiva, la lucha competitiva por el
privada. (Hayek, 1976). poder del Estado, en la que participan
, organizaciones como los partidos y
Pero la lucha contra las dicta- cuyo núcleo institucional son los
duras militares latinoamericanas en los gobiernos y el parlamento. Se habla,
70 y los ·so, trae consigo una revitali- así, por ejemplo, de "democracia sin
zación muy significativa de la idea de- apellidos" para excluir sobre todo la
mocrática y de los derechos humanos idea de una democracia social, au-
que se postulan como su fundamento tonomizando así a la democracia de
ético. A esto hay que agregar el impacto la sociedad y, en particular, de todo
de la crítica antitotalitaria en Europa y compromiso con la reducción de las
la crisis de los regímenes comunistas desigualdades o el fin de las exclu-
en Europa del Este. siones generadas por la economía
capitalista. Desde esta perspectiva,
La expectativa del fin de las avalada por un cierto uso de las con-
dictaduras latinoamericanas a me- cepciones de H. Arendt y de autores
diados de la década de los ·so y el contractualistas como N. Bobbio, se
inicio de un conjunto de procesos sostiene que la democracia no es un
de transición, terminan por poner al tipo de sociedad, sino una forma de ré-
tema de la democracia en el centro de gimen. Constituye entonces un error
la reflexión política. El objetivo cen- conceptual proponerse, por ejemplo,
tral de este período es la elaboración democratizar las relaciones laborales,
de una alternativa de reemplazo del la educación, o cualquier otra esfera
autoritarismo. de las relaciones sociales.

El debate intelectual de los Pero, la imagen legitimadora


·so, auspiciado por un conjunto muy más importante, a la base de los pro-
importante de organizaciones políti- cesos de transición, es la del pacto o
cas y sociales y por centros e institu- el contrato. Para E. de lpola y J. C.
ciones europeos y norteamericanos, Portantiero, por ejemplo, la .. "única
no incluye, sin embargo, a todas las metáfora fundadora de un orden
posiciones. Excluye, naturalmente, a político democrático a la altura de la
representantes neo-liberales y nacio- diversidad de los proyectos, que en
nalistas, partidarios de las dictaduras, su estallido constituyen la crisis, es la

-116-
Carlos Ruiz Schneider

clásica, la del pacto. En esta dirección, suerte de idealización y sublimación


la democracia se coloca rigurosamente de la política, en la que la primacía
como una utopía. Pero no como una de las reglas para procesar conflictos,
utopía de sociedad perfecta, transpa- termina con una neta subordinación
rente, sino como una utopía de con- de las demandas sociales que resul-
flictos, de tensiones y de reglas para tan conflictivas. De esta manera, las
procesarlos". (de Ipola, 1984, 15). Del demandas de justicia social (incluso
mismo modo, para Lechner, el grueso las exigencias de justicia para los
del debate "puede ser situado dentro responsables de las violaciones a los
de la temática "neocontractualista". derechos humanos), se transforman
En sociedades convulsionadas, cuya en amenazas para la democracia, en la
historia política se caracteriza por medida en no caben en los términos de
situaciones de empate catastrófico y pactos aceptables para los defensores
vetos recíprocos ( Argentina, Bolivia), de los regímenes autoritarios. En el
por una fuerte polarización ideológica mediano plazo, es evidente que estas
(Chile, Perú) o bien por mecanismos limitaciones atentan incluso contra el
tradicionales de dominación (Brasil, objetivo de la paz, en la medida en que
Colombia, Ecuador) la idea de pacto el retorno a la democracia significa
y las estrategias de concertación sig- probablemente la multiplicación de
nifican importantes innovaciones." las demandas sociales que han per-
(Lechner, 1985, 66). Para Lechner, manecido insatisfechas durante largos
estas innovaciones tienen que ver, so- años de represión política.
bre todo, con la respuesta a un anhelo
generalizado de una institucionalidad Esta visión neo-contractualista
estable y participativa. de la democracia es complementada
por una idea "realista" de la política
En las circunstancias por las como "arte de lo posible" (Flishfisch,
que atraviesa la región, es compren- 1985). Estas nuevas versiones del
sible el apoyo que encuentra esta idea realismo político apuntan, por una
de la democracia: después de las dic- parte, a la revisión del significado de
taduras y sus sistemáticas violaciones la búsqueda de la buena sociedad y, en
a los derechos humanos, la paz social particular, del ideal socialista, el que
puede aparecer como el valor central. es ahora interpretado como utopía.
Pero, difícilmente puede sostenerse (Lechner, 1984). Por otra parte, las
que la mantención de la paz sea el utopías mismas son también rein-
valor democrático central. En efecto, terpretadas, en términos de una idea
. muchas formas de paz social no son regulativa en el sentido kantiano,
compatibles con la autonomía y el cuya realización empírica no es facti-
autogobierno de la sociedad que sí ble. (Hinkelammert, 1984). Como se
parecen ser esos valores democráticos comprenderá, y aunque la visión de
más centrales. Hinkelammert, en particular, tenga
objetivos muy distintos, estas nuevas
Sobre la base de las experien- concepciones dificultan pensar los
cias traumáticas de las dictaduras mi- compromisos éticos de la política;
litares, las ideas neo-contractualistas entre otras razones, porque no es
van frecuentemente aparejadas a una claro ya si aproximarse al modelo

-117-
DEMOCRACIA

utópico es algo positivo o negativo. los intereses de las fuerzas asociadas


Se abre así el camino para una visión con el régimen autoritario y minimice
de la democracia en términos axioló- así la amplitud de eventuales transfor-
gicamente neutros, como se expresa maciones." (Ibid., 25).
en las corrientes predominantes de
la ciencia política empírica. De esta Pero, sin duda, es en el caso de
manera, la idea democrática pierde la transición chilena donde esta idea
progresivamente su contenido crítico de compromiso democrático se aplica
y se transforma en una modalidad de una manera más sistemática, bajo
particular de orden, dirigido por élites la forma de un modelo consensual o
razonables y responsables, al interior consociatívo (Brunner, 1990), (Flis-
de una sociedad de masas. De hecho, fish, 1986).
la etapa siguiente de esta reflexión se
enmarca en gran medida dentro de lo El origen del modelo consocia-
que C. B. Macpherson y P. Bachrach ti vo hay que buscarlo, sobre todo, en
han denominado las teorías elitistas los trabajos del politólogo holandés
de la democracia. Arend Lijphart que lo ha elaborado
para contrarrestar los efectos de la
Desde una óptica convergente, democracia mayoritaria en sociedades
reviste importancia la defensa de un fragmentadas. En sociedades que no
modelo fundado en el compromiso son homogéneas, en donde hay con-
democrático (Przeworski, 1986) pen- flictos intensos por razones étnicas,
sado a partir de la "ruptura pactada" religiosas o ideológicas, la regla de
de la transición española. La idea de la mayoría significa dictadura de la
Przeworski es que "la democracia mayoría y conflicto social más que
sólo puede establecerse si existen democracia. "Lo que necesitan estas
instituciones que hagan improbable sociedades -sostiene Lijphart- es un
que el proceso político competitivo régimen democrático que enfatice el
lleve a resultados sumamente nega- consenso por sobre la oposición, que
tivos para los intereses de alguien, incluya en lugar de excluir y que trate
dada la distribución de los recursos de maximizar el tamaño de la mayoría
económicos, ideológicos, organi- gobernante...una democracia consen-
zativos etc." (Przeworski: 1986, 9). sual." (Lijphart, 1984, 23).
Ahora bien, para el mismo autor, el
rasgo más destacado de la transición Según uno de los autores que
española es que se transformó el sis- introducen en Chile las ideas con-
tema político sin que se alteraran en sociativas, Alberto van Klaveren, las
los más mínimo las relaciones eco- teorías consensuales de la democracia
nómicas. De la experiencia española, postulan que "sociedades fuertemente
se deriva, concluye Przeworski, que fragmentadas desde el punto de vista
puede ser que "el conservadurismo político pueden ser estabilizadas a
social y económico sea el necesario través de un esfuerzo consciente de
precio a pagar por la democracia : las sus élites políticas orientado hacia la
instituciones políticas que organizan búsqueda deliberada de medios que
el compromiso democrático deben ser permitan contrarrestar los efectos
diseñadas de tal forma que protejan centrífugos de esta fragmentación ...

-118-
Carlos Ruiz Schneider

Para poder neutralizar las divisiones decisiones fundamentales del Estado


políticas, ellas deben abandonar las en este campo. En América Latina,
prácticas competitivas y el principio especialmente en Chile, este estilo
de las mayorías simples ... y formar, social de concertación ha estado, en
en cambio, grandes coaliciones que cambio, menos presente.
incluyan a los principales grupos
políticos existentes en la sociedad." Para críticos como Terry Lynn
(van Klaveren, 1983, 19). Junto al Karl, estos pactos y, con mayor razón,
énfasis en las coaliciones amplias, los mecanismos de la democracia de
la marginalización de las prácticas consenso, son "mecanismos antide-
competitivas y la defensa del régi- mocráticos negociados por las élites,
men parlamentario de gobierno que que buscan crear un contrato socio-
impulsa la formación de estas coali- económico y político que desmovilice
ciones, la democracia consensual se a los representantes de las masas ... "
caracteriza por la institución del veto (Karl, 1991, 432). Pero lo más grave,
mutuo o veto de minoría, que permite en opinión de esta autora, es que al
constitucionalmente a las minorías conciliar los intereses de las élites
oponerse de una manera efectiva a las tradicionales y las emergentes, "una
decisiones mayoritarias. democracia pactada puede institu-
cionalizar un sesgo conservador en la
Es claro que, como práctica forma de gobierno, creando un nuevo
por aplicar en sociedades en donde statu quo capaz de bloquear el progre-
la división social fundamental tiene so ulterior hacia la democracia polí-
que ver con clases sociales y grandes tica, social y económica." (Karl,1988,
diferencias socio-económicas y no 298). De lo que se sigue que modelos
con diferencias étnicas o religiosas, democráticos útiles en forma táctica
el veto de minoría es una institución para el período de transición, pueden
conservadora que tiende a preservar frenar en cambio la consolidación de
el poder y la identidad de los grupos la democracia.
dirigentes. Se confunde aquí el respeto
a los derechos de las minorías con el Más radical es la crítica de
ca-gobierno de las minorías, lo que otros autores que, como Franz Hinke-
viola un principio democrático cen- lammert, han denominado a estos
tral, la igualdad política. nuevos regímenes "democracias de
Seguridad Nacional", enfatizando así
Desde un punto de vista social, lo común entre estos modelos y las
la democracia consensual es com- dictaduras militares anteriores, por
plementada por lo que los cientistas encima del cambio o la ruptura que
políticos contemporáneos, siguiendo ellos parecen implicar. En su descrip-
a Philippe Schmitter, han llama- ción, Hinkelammert subraya el nuevo
do neo-corporativismo (Schmitter, rol soberano de las Fuerzas Armadas y
197 4). Esto significa la búsqueda la pérdida correlativa de la soberanía
de la conciliación de intereses so- popular. Para este autor, las nuevas
cioeconómicos y la incorporación de democracias latinoamericanas no sig-
actores sociales como las organizacio- nifican un retorno a las democracias de
nes empresariales y sindicales, a las los años 60, sino que son "democracias

-119-
DEMOCRACIA

de un nuevo tipo que de ninguna ma- defienden vías alternativas. Entre ellas,
nera disuelven el Estado de Seguridad sin pretensión de ser exhaustivo, pue-
Nacional, más bien lo racionalizan" den señalarse, por ejemplo, los trabajos
(Hinkelammert, 1987, 214). Esto tie- de Ernesto Laclau y Chanta! Mouffe
ne que ver, para Hinkelammert con el que intentan replantear, desde una teo-
hecho que el reformismo en América ría general de los discursos, una base
Latina, a diferencia de la experiencia para una estrategia socialista en la que
europea que resultó en una estabiliza- se trata de articular demandas sociales
ción capitalista, reforzó el surgimiento progresistas y de crear un sujeto demo-
de movimientos revolucionarios. De crático colectivo capaz de impulsar un
esta suerte, según Hinkelammert, el modelo alternativo. Esto debe contra-
miedo al retorno del terrorismo de rrestar la tendencia a la marginación
Estado "es el resorte del regreso a la de los contenidos democráticos en la
democracia pura y sin apellido, cuya democracia liberal actual, producto
legitimidad ya no depende de la so- de la expansión del neo-liberalismo
1ución de ningún problema concreto. (Laclau,Mouffe: 1987).
En la raíz de esta democracia pura que
resulta de la democratización de las Desde perspectivas diferentes,
dictaduras de Seguridad Nacional, está trabajos como los de Daniel García
el horror y sus recuerdos traumáticos" Delgado en Argentina intentan re-
(Ibid., 227-228). constituir una tradición democrática
popular, al mismo tiempo que desa-
rrollan una crítica de los supuestos
DELIMITACIÓN elitistas de los nuevos modelos
CONCEPTUAL vigentes en el continente (García
Delgado, 1989). En España, los es-
tudios de J.M.González y Fernando
La evolución de las con- Quesada han incidido también en
cepciones que hemos analizado y una crítica de las tendencias elitistas
de las políticas democráticas en y de las teorías económicas de la
aplicación en la región nos enseña democracia, planteando alternativas
que estos modelos contractualistas que, a partir de Macpherson y Ha-
o consensuales van incorporando bermas buscan elaborar propuestas
cada vez más a las ideas neo-libera- alternativas O.M. Alvarez y F Que-
les que comenzaron combatiendo. sada: 1987).
Consenso en lo político y mercado
en lo social parecen ser las consignas Por último, en mis propios
básicas de un nuevo proyecto he- trabajos sobre teoría de la democracia,
gemónico, presente en las políticas he analizado, en una primera etapa,
laborales, educacionales, en la salud a las concepciones de la política y la
e incluso en el medio ambiente, con democracia centradas en las élites, los
las consecuencias sociales que son procedimientos y el mercado político
de esperar. de las que he tratado más arriba. La
crítica que he desarrollado en este
Frente a esta convergencia, se punto ha buscado subrayar los conte-
abren caminos, también voces que nidos valorativos infiltrados en estas

-120-
Carlos Ruiz Schneider

visiones supuestamente neutras. Lo diferenciar las decisiones políticas es


que resulLa en general de estos enfo- la posibilidad de que ciertas deman-
ques es una legimitación del orden das sociales puedan ser consideradas
social vigente y su reduplicación en como derechos. Si los derechos son
una esfera política en que los actores relaciones políticas, entonces estas
son "élites" consideradas racionales y demandas sociales pueden ser con-
responsables, mientras que la partici- sideradas políticas. Este paso nos
pación social y política de las masas parece muy importante porque nos
populares es marginalizada y conside- permite desarrollar razones para
rada como una amenaza. una ampliación de la democracia
a esferas tales como la laboral o la
Una segunda gran línea de educacional.
análisis ha tomado por objeto los
intentos de definir a la democracia Una tercera línea de trabajo
como una entidad exclusivamente ha estado focalizada en las relaciones
política. En este punto, y a partir entre democracia y consenso. Además
de un acuerdo sobre la naturaleza de las razones mencionadas más arriba
predominantemente política de la en la crítica de las teorías consen-
democracia, lo que he tratado de suales de la democracia, he tratado
desarrollar es que, precisamente, de desarrollar, sobre la base de los
no es del todo claro lo que se debe estudios de H. Arendt, la idea de que
entender por política ni cuales sean en estas concepciones hay una cierta
sus límites. La conclusión es que reificación del concepto de poder y
tenemos que ensanchar los límites una reducción de éste a la violencia.
de lo que entendemos por política; Dadas estas representaciones sobre el
que ésta no puede seguir siendo con- poder no es extraño que de ellas se
siderada como equivalente a las solas deriven visiones muy conservadoras
actividades electorales, los partidos, sobre las posibilidades de cambio
los parlamentos y los gobiernos, social y político, las que refuerzan así
sino que tiene que incluir toda una otros sesgos también conservadores
serie de otras decisiones de alcance de las teorías del consenso ( C. Ruiz,
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DEMOCRACIA

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ALTERNATIVO
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- - - - - - - - - - - - Palabras Clave - - - - - - - - - - - - ,
CONTRADICCIÓN/CONFLICTO - TEORIA CRÍTICA
- DERECHOS HUMANOS - ALTERGLOBALIZACION
- ETICA - ETICA SOCIAL - POLÍTICA

INTRODUCCIÓN occidental marcado por la lógica de la


racionalidad técnico-formal y por los
presupuestos científicos de la dogmá-
La noción del Derecho Al- tica del cientificismo positivista.
ternativo surge en América Latina a
inicios de la década del '80. Aparece
asociado, por una parte, a un conjunto DELIMITACIÓN
de nociones teóricas provenientes del HISTÓRICA
movimiento de Crítica Jurídica, y por
otra, al trabajo práctico por la lucha
democrática llevada a cabo por los Ser- El movimiento de crítica ju-
vicios Legales Populares Alternativos rídica resulta de la coexistencia de
en los diversos países de la región. diversas corrientes socio-políticas y
filosóficas desarrollado en Europa,
Las formulaciones centrales de USA, y América Latina, durante las
las propuestas que se anidan en torno décadas '70 y '80 y cuyas bases se
al movimiento de derecho alternativo, gestaron bajo la influencia de la obra
están situadas en una percepción y de Antonio Gramsci, de la relectura
convicción de la crisis y ruptura de la de los textos clásicos del marxismo
racionalidad tradicional (positivismo realizada por Althusser, de la corriente
jurídico institucional) y la búsqueda de escuela de Franckfurt y de las tesis
de construcción de nuevos paradig- de Michel Foucault sobre el poder.
mas socio-político jurídicos que den
una nueva racionalidad al ser de lo Considerando la particularidad
jurídico. de cada realidad y proceso histórico,
es posible ordenar el movimiento de
Desde este punto de vista, crítica jurídica en los siguientes ver-
la noción del Derecho Alternativo, tientes centrales:
realiza un profundo cuestionamiento
a los fundamentos y a la estructura Association Critique Du
del pensamiento jurídico moderno Droit (Asociación de Crítica Jurídica)

-125-
DERECHO ALTERNATIVO

surgida y desarrollada en Francia, los ideales normativos y la estructura


principalmente por juristas y pro- social y proponer una reforma social
fesores de las facultades francesas (Morton Horwitz, Ducan Kennedy,
de Derecho de Lyon, Montpellier, David Trubek y otros).
Saint-Etienne y Grenoble. Plantea
centralmente la idea de que el Derecho Corrientes críticas del Derecho
y el Estado son producidos por las en América Latina: Se destacan diver-
contradicciones sociales, por lo cual, sas expresiones del movimiento de
la apreciación neutra del Derecho no crítica jurídica en América Latina.
hace más que reforzar la dominación
del modo de producción capitalista. La revista 11Crítica Jurídica»
Sus planteamientos se hacen visibles editada en México, dirigida por Osear
con «el manifiesto» del año 1978. Correas, cumple un rol pionero y central
Este enfoque teórico cuenta con una en el debate teórico. También es impor-
gran aceptación en el Tercer Mundo tante mencionar a Jesús Antonio de la
y América Latina (Michel Miaille, A. Torre Rangel (Facultad de Derecho de
Jeammaud, André Arnaux y otros.). Aguas Calientes), autor de varios iibros,
entre ellos El Derecho que nace del Pueblo
Uso Alternativo del Derecho. y el Derecho como arma de liberación en
Postura crítica desplegada en Italia y América Latina.
adoptada en España y otros países de
Europa, llevada adelante por algu- En Argentina, diversos teó-
nos magistrados progresistas. Crean ricos en el ámbito universitario han
el movimiento de uso alternativo elaborado importantes aportes en
del derecho a finales de los '60 y la reflexión teórica principalmente
comienzos de los '70. La propuesta en temas de la cultura jurídica, el
central fue proponer la utilización discurso del poder y del movimien-
del ordenamiento jurídico vigente to psicoanalítico-jurídico. Entre los
y de sus instituciones al servicio de principales exponentes se destacan
la práctica judicial emancipadora Ricardo Entelman, Carlos M. Cárcava,
dirigido a las clases o a los sectores Alicia Ruiz, Enrique Zuleta, Enrique
sociales menos favorecidos (Pietro Eduardo Mari y otros.
Barcellona, Luigi Ferrajoli, Alesandro
Baratta y otros). En Brasil, se ha generado un
activo movimiento de crítica jurídica
Critical Legal Studies (Estu- principalmente nucleado en torno a:
dios Jurídicos Críticos). Movimiento Grupo de Derecho y Sociedad: grupo
de crítica norteamericana, con in- vinculado a la Asociación Nacional de
fluencia de la cultura anglo-ameri- Post-grados e Investigación en Cien-
cana. Grupo fundado en 1977, por cias Sociales (ANPOCS); destacan
profesores y especialista provenientes Joaquín de Arruda Falcao, Luciano
del movimiento Law and Society Oliveira, José Eduardo Fa rías, Eliane
(Derecho y Sociedad). Desde una Junqueira, entre otros. El Instituto de
dimensión empírica tiene como fi- Derechos Alternativo: (IDA) creado
nalidad formular una denuncia de luego del Primer Centro Internacional
las tensiones y contradicciones entre de Derecho Alternativo (Septiembre

-126-
Manueljacques P.

1991) con sede en Florianopolis fun- Otro Derecho» se han promovido y


dado y presidido por Edmundo l. de activado los principales grupos de
Arruda, Jr.. La Asociación de Jueces servicios legales críticos, populares,
por la Democracia, creada por Magis- innovativos y alternativos de los
trados de Sao Paulo (Mayo 1991). El distintos países de América Latina.
Grupo de Magistrados Gauchos. Liga- Destacan entre los que han jugado
dos al sector cultural de la Asociación un rol gravitante en estos últimos
de Jueces de Río Grande del Sur, con 20 años, en Brasil, el Instituto de
trabajo de reflexión crítica. Destaca Apoyo Jurídico Popular (AJUP- Río
el Juez Amilton Bueno de Carvalho, deJaneiro), dirigido por el abogado
quien dirige la colección «Lecciones Miguel Presburger. El Gabinete de
de Direito Alternativo". Asesoría Jurídica de los Organismos
Populares (GAJOP), en Olinda. En
Por su parte, el Movimiento Argentina, el grupo CISAP, dirigido
de Servicios Legales Alternativos ha por Octavio Carsen. En Chile, el
cumplido en la Región un rol prepon- Centro de Desarrollo y Estudios
derante en la creación y fundación Jurídicos (Quercum), antes y ahora,
de propuestas prácticas y teóricas en la Asociación Chilena de Teoría
busca de otro Derecho. A la vez que Crítica y Derecho Alternativo, diri-
cuestiona el sistema jurídico formal gida por el abogado ManuelJacques
positivista impuesto, propone nuevas Parraguez. En Bolivia, el Centro de
estrategias y diseños jurídicos en lo Estudios Jurídicos y Sociales - Ce-
que se ha denominado ampliamente, jis. En Perú, el grupo de mujeres
sin una definición en sí, el «Movimien- Flora Tristan y otras. En Colombia,
to de Derecho Alternativo». En torno además del aporte del equipo de
a él se mezclan conceptos tales como ILSA, desde Fernando Rojas, Víctor
Derecho Popular, Derecho Insurgente, Manuel Moncayo, Germán Palacios,
Derecho hallado en la calle. Germán Burgos, Eduardo Rodrí-
guez, Camilo Castellanos, Héctor
La ausencia de denominación Moncayo, existe un variado grupo
específica en torno a su calificación de servicios legales y redes de gran
no ha sido la urgencia por resolver importancia, entre otros, la Red de
una cuestión teórica, sino más bien, Justicia Comunitaria que dirige el
ha constituido el espacio para animar abogado Edgar Ardila.
diversas tendencias y propuestas que
desde distintos grupos de servicios En general, la propuesta de
legales y juristas han ido complemen- los Servicios Legales Alternativos en
tando el gran movimiento de Derecho la Región ha constituido una nueva
Alternativo y Teoría Crítica en la re- modalidad de articular el trabajo de
gión Latinoamericana. los abogados en defensa de los secto-
res populares en una perspectiva de
Nucleado en torno al Insti- derechos colectivos y por una lucha
tuto Latinoamericano de Servicios democrática, cuestionando tanto el
Legales (ILSA) con sede en Bogotá, derecho formal del sistema establecido
Colombia y que tiene como princi- como los mecanismos de represión
pal órgano de difusión la revista « El y exclusión que operaron en varios

-127-
DERECHO ALTERNATIVO

países de América Latina desde la componente de legitimidad. De esta


década de los '70. forma, el Derecho Alternativo intenta
dar respuesta a la crisis del paradigma
legal monista, referido el derecho
DELIMITACIÓN como una expresión única de legali-
CONCEPTUAL dad y de derecho estatal. El enfoque
alternativista, abarca como expresión
de juridicidad una amplia diversidad
En un sentido amplio, la pro- de dinámicas sociales de regulación,
puesta crítica alternativa latinoameri- entre otras, las que se dan al interior
cana se instala desde la denuncia del de las comunidades tradicionales o
formalismo normativista de la cultura en nuevas comunidades excluidas
jurídica tradicional y propone una con- o marginalizadas, las que emergen
tribución a la renovación de la actual como resultado de la acción de los
epistemología del derecho, echando movimientos sociales, tales como
bases para un nuevo paradigma de lo los de perspectiva étnica, de género,
jurídico. campesina y otras que producen, en
su accionar, sistemas de regulaciones
De esta manera, se ha delinea- normativas propias en el operar de
do un grueso proyecto jurídico en los diversos conjuntos de relaciones
América Latina que cuestiona desde el que a su interior, se establecen y que
espacio del Derecho y desde la crítica ca-existen y conviven con los procedi-
de su concepto mismo su funcionali- mientos normativos legales vigentes.
dad, desmitificando y desacralizando Esto es lo que en términos generales
la teoría y práctica jurídica como com- se denomina «Pluralismo Jurídico».
ponente de aparente igualdad formal Componente conceptual esencial
de derechos y mostrando la ineficien- en el marco de la teoría crítica del
cia del formalismo normativista y de Derecho y del Derecho Alternativo.
sus mitos democráticos como formas Boaventura de Sousa Santos, uno de
de relaciones de poder dominante, los principales exponentes de la Teoría
abriendo posibilidades reales para un Crítica del Derecho, ha planteado que
pensamiento y práctica emancipadora el concepto del Derecho propuesto
en un espacio dialógico de construc- por la teoría política liberal elaborada
ción hacia un verdadero derecho justo sobre las bases del positivismo jurídi-
y de legitimación social. co de los siglos XIX y XX sustentado
sobre la ecuación entre Nación, Estado
Uno de los aspectos críticos y Derecho, es demasiado estrecho
que sustenta la perspectiva del Dere- porque reconoce sólo uno de los espa-
cho Alternativo tiene que ver con la cios y tiempos; el nacional y excluye
construcción de una cultura jurídica los espacios jurídicos supraestatales,
informal y el desarrollo de los proce- transnacionales que ca-existen en el
sos jurídicos de prácticas de legitima- sistema mundial, con el Estado, como
ción social. Ello, en el entendido que con los órdenes jurídicos, infraesta-
el principio de legalidad no contiene, tales, locales o particulares de los es-
como lo ha sostenido la cultura clá- pacios comunitarios de comunidades
sica del positivismo tradicional el reales de distintos pueblos.

-128-
Manueljacques P.

En el campo latinoamericano, s10n normativa (legalidad) aparece


la experiencia de un Derecho Comu- cuestionada una manera única de
nitario (barrial, local y de las diversas enfrentar el proceso y funcionamien-
expresiones de la convivencia ciuda- to jurídico sólo desde el espacio y
dana) coloca el debate del Pluralismo discurso legalizado impositivo. Dado
Jurídico como uno de los aspectos que se restringe o imposibilita y niega
centrales en torno al Derecho, puesto como expresión de juridicidad una
que, desde esta mirada, las socieda- múltiple y variada forma de mani-
des modernas no están reguladas por festación normativa creada desde la
un único ordenamiento jurídico sino propia comunidad. Por lo tanto, des-
por una pluralidad de órdenes jurídi- de el enfoque de la conceptualización
cos, interrelacionados y distribuidos general de lo que se ha denominado
socialmente de varias maneras. En Derecho Alternativo se cuestiona
este sentido, Boaventura de Sousa como componente único de juridi-
Santos plantea que el Derecho está cidad la dimensión de legalidad o
compuesto por la conjunción de tres de validez formal, incorporándose
tipos de discursos, retórica, burocracia también un criterio de juridicidad en
y violencia. La retórica referida a la torno a la validez material, contenido
estrategia de toma de decisión en base valórico de la norma, la idea de justi-
a la persuasión, o en la movilización cia y la de validez por eficacia, o por
del potencial argumentativo de los legitimidad, en tanto cuanto norma
mecanismos verbales y no verbales socialmente aceptada y hecha suya
aceptados. La burocracia es la estra- por la comunidad.
tegia de toma de decisiones basada en
la imposición autoritaria mediante la Otro aspecto relevante que
movilización del potencial demostra- se propone desde la construcción
tivo de los procedimientos regulados teórica alternativa es la superación
y de los estándares normativos. La de la histórica separación en el cam-
violencia como estrategia de toma po del derecho de las categorías del
de decisión basada en la amenaza de deber ser y del ser, entendiendo sólo
la violencia. Estos tres discursos, el como manifestación de lo jurídico
burocrático, impositivo, el retórico lo referido al mundo del deber-ser
persuasivo y el coercitivo se combinan en tanto cuanto categoría imperati-
de manera diversa y definiendo lacen- va que regula y sanciona conductas
tralidad del campo jurídico a partir de preestablecidas en el universo del
las formas discursivas dominantes en discurso formal-legal. La búsqueda
cada contexto y realidad. de una nueva concepción teórica y
práctica del Derecho, en lo que se ha
Así, en el espacio Latinoame- denominado genéricamente Derecho
ricano, donde se manifiesta un fuerte Alternativo reconoce también como
desarrollo de prácticas jurídicas dimensión de juridicidad aquellas
comunitarias y donde los procesos manifestaciones del mundo del ser,
de legitimación son crecientemente de la realidad, que si bien aún no
determinados por las experien- tienen formalización normativa en
cias vivenciales de los sujetos que el espacio de legalidad, tienen el atri-
experimentan el efecto de la deci- buto de generar imperio vinculante

-129-
DERECHO ALTERNATIVO

a la comunidad, quien le reconoce comunidad formula para su propia


validación para regular y ordenar convivencia colectiva. De esta manera,
conductas legitimadas desde la vi- la comunidad se convierte en cole-
vencia y práctica consuetudinaria gisladora y/o autorreguladora. Hay
y/o colectiva. múltiples experiencias en el contexto
de la Región Latinoamericana donde
En el enfoque alternativista se llevan a cabo estos procesos de au-
del Derecho, es importante observar torregulación normativa y de control
que su formulación se instala por comunitario de las mismas. En este
un lado, desde una crítica al sistema plano, están las diversas modalidades
jurídico imperante y, por otro, desde regulatorias, estatutos comunitarios,
una construcción propositiva en las acuerdos colectivos, normas de con-
dimensiones esenciales de la vida vivencia no escrituradas y tantas otras
del Derecho. Esto es el campo de la formas de construir nuevos espacios
producción, regulación y resolución de asociación y vinculación normativa
jurídica. en el espacio ciudadano, local, barrial,
vecinal o comunitario.
Así, en el espacio de la Produc-
ciónj urídica, la fuente productora del En la dimensión de Resolución
Derecho no radica única y esencial- Jurídica, la mirada crítica está dirigida
mente en la Ley, sino que en las prác- no sólo a descentralizar o desjudicia-
ticas comunitarias y los saberes co- lizar la estructura del aparato judicial,
lectivos, arraigados desde la vivencia sino a entender de forma distinta su
colectiva, como modos de producción rol, según el cual el juez no sólo le
jurídica legitimada, en complemento cabe la función de explicar la ley sino
con la normatividad legal vigente y la de hacer justicia. Lo justo y lo le-
que en algunos casos opera más allá gítimo no siempre, y particularmente
de ella o contra ella. De esta forma, el en varias regiones de América Latina,
Derecho no es sólo instrumento que va de la mano de lo legal. Así, surgen
monopoliza el saber y el poder y lo otras preocupaciones que, desde la
instituye impositivamente sino que se formulación crítica, se proponen
convierte en un instrumento capaz de como los mecanismos alternativos de
reconocer modos de producción jurí- resolución de conflictos. Entre ellos:
dica diversos. De esta forma, el debate arbitraje, mediación, jueces locales,
en torno a los criterios de autogestión conciliadores de equidad, en donde
jurídica y de construcción colectiva de la propia comunidad instituye mo-
normatividad generadora de vínculos dalidades para resolver su forma de
validados, es una preocupación y un conflictividad jurídica. Debe hacerse
reconocimiento que en el contexto la- el alcance de que esta perspectiva no
tinoamericano por su riquísima diver- indica que todo asunto controvertible
sidad de expresiones hay que relevar y es media ble. Hay situaciones que, por
visibilizar. De este modo, el espacio de lo delicado de los derechos esenciales,
Regulación jurídica, no sólo habita en no pueden ser sujetas a acuerdos de
la esfera legislativa o el aparato estatal, las partes, sino que en ellas el Estado
sino en múltiples manifestaciones debe cumplir un rol garante mínimo
regulatorias que crecientemente la de derechos por dignidad.

-130-
Manueljacques P.

En esta perspectiva general de otra verdad en la cual ni siquiera ha


la Teoría Crítica del Derecho y del participado.
Derecho Alternativo en América La-
tina, el eje central por donde avanza La razón jurídica moderna, que
su enfoque es desde una lógica cons- critica la perspectiva del Derecho Al-
tructivista en oposición al modelo de ternativo, se convierte en una efectiva
una lógica impositivista que es la que técnica de control social, de vigilancia
se cuestiona como crisis de paradigma y de mecanismos de disciplinamiento.
y donde el decisor de la norma no es La ley se erige en un poder-saber y
siempre el vivenciador del efecto de en un activo instrumento de disci-
la legalidad impuesta. En el enfoque plinamiento social. El Derecho y la
alternativo, el discurso de juridicidad dimensión de lo jurídico no se orienta
instituye un juicio de realidad y des- hacia el estímulo para liberar las infi-
mitifica, además de la impositividad nitas potencialidades del ser humano
injusta, el orden simbólico de sumi- y satisfacer sus necesidades como lo
sión que genera por una obediencia postula el enfoque alternativista sino
ciega a una normatividad ilegítima o para aplicar el modelo normativo de
antiética. la sociedad establecida.

La crítica del Derecho Alter- Un aspecto coherente con esta


nativo a la concepción del paradigma perspectiva alternativa del Derecho
clásico moderno formal-positivista, tiene relación con la construcción de
tiene también relación con como un nuevo enfoque de conflictividad
se construye la verdad jurídica. La jurídica, entendiendo ésta como «el
ideología legalista como expresión estado de insatisfacción de las necesi-
del formalismo y de la concepción dades humanas fundamentales».
formal de justicia en cuanto creencia
de que la verdad se encuentra en la ley, Esta concepción cuestiona la
plantea en el fondo un falso criterio de concepción formal y liberal positivista
construcción de verdades. La sociedad y reduccionista al situar el conflicto
legal dista mucho de representación jurídico sólo como un conflicto con
verídica de lo que ocurre en la socie- la legalidad y, por ende, con la ley. Eso
dad real. La comunidad como sujeto definiría lo jurídico como asociado a lo
de construcción de verdad, a partir legal; y no es así. El conflicto jurídico
de sus propias prácticas y saberes, abierto al estado de insatisfacción de
queda por una parte sustituida por las necesidades humanas fundamenta-
este modelo de representación legal y, les abre un amplio abanico de conflic-
por la otra, desprovista de capacidad tividades del derecho, indicando que
de reconocerle validez de verdad a hay conflicto jurídico cuando no se
sus propias realidades. El saber de la satisfacen necesidades de subsistencia,
comunidad es arrebatado por el saber protección, libertad, participación,
de la ley. Ésta la determina, la ajusta a identidad, entendimiento, creación,
su verdad y le ordena obediencia. Por etc .. Por lo tanto, habrá siempre
un lado, actúa y siente un determina- conflicto de orden también jurídico
do mundo que lo inspira y lo impulsa cuando la sociedad excluya a la co-
y, por el otro, se somete a obedecer munidad en la satisfacción de dichas

-131-
DERECHO ALTERNATIVO

necesidades y no podrá ampararse en étnicas, género, laboral informal,


un estado violatorio y comunicador consumidores y todo lo relativo a
de necesidades sobre el expediente de violaciones de derechos humanos.
que la ley regula de otra forma dicha El Servicio Legal Alternativo trabaja
situación o no la prevé. en la perspectiva de una práctica
pedagógica que reapropie el poder y
En este enfoque alternativo, el el desarrollo del saber y organización
Derecho se visualiza como un medio de la comunidad, para la transfor-
y un fin que debe ordenarse para mación de la sociedad, orientada a
posibilitar un proyecto social que satisfacer las necesidades humanas,
sea transformador de lo existente y trabajando principalmente, no en un
circunscrito a una finalidad definida: enfoque individual, como lo hace el
el ser humano y sus necesidades. Las servicio legal tradicional, sino en una
necesidades humanas se constituyen perspectiva colectiva, desarrollando
en el supremo bien jurídico protegi- programas que capaciten, planteen
do. Así, el Derecho se concibe desde reformas legales y den curso a es-
una perspectiva dinámica constante, trategias de defensa extra-judiciales,
opuesta al criterio de imposiciones da- dando en ella participación activa a
das y estructuradas en ordenaciones y la comunidad, rompiendo el esque-
se subordina a la idea de construcción ma clásico consistente en considerar
del sistema social. que el depositario protagonista del
problema jurídico es el abogado y
En coherencia con los pos- no la propia comunidad que lo ex-
tulados esenciales que preocupan perimenta.
la perspectiva teórica y práctica del
Movimiento del Derecho Alternativo, El Servicio Legal asume una
la tarea de juristas y, en particular de tarea de coherencia y propuesta al-
abogados, como de los servicios lega- ternativa cuando rompe la relación
les deben operar en función de estas tradicional entre abogado y usuario,
nuevas matrices teóricas y metodo- proporciona capacitación a los be-
lógicas en el apoyo a la comunidad neficiarios en el manejo práctico de
en sus estrategias de defensa. Así, un las técnicas jurídicas y contribuye
servicio jurídico coherente alternati- de modo activo al cambio global
vo deberá tener una estructuración del sistema de dominación vigen-
y una finalidad diferente al trabajo te. La comunidad no es concebida
que tradicionalmente se ha llevado a como un sujeto pasivo de derechos,
cabo. Así, el servicio legal tradicional sino como un sujeto propositivo
no cuestiona la estructura social, sino que autoafirma su propio campo
más bien, se instala desde un enfoque de decisión y que, en caso de des-
asistencialista, en cambio, los servi- equilibrio con la norma legal, la
cios legales alternativos se orientan, confronta en su propia legitimidad
además de los sectores que no tienen consensuada, generando un proceso
acceso a la justicia, a la defensa de lo distinto de interpretar y organizar
popular como construcción de iden- su dimensión de cotidianeidad y de
tidad social colectiva, al trabajo con sus saberes, introduciendo prácticas
los sectores campesinos, las minorías y acciones diversas a las habituales,

-132-
Manuel Jacques P.

principalmente en una perspectiva posibilidad de articular instrumentos


propositiva de soluciones a partir de construcción de una sociedad más
de su propio contexto. justa, de expresión de valores éticos
y prácticas legitimadas y emancipa-
En síntesis, el Movimiento del das en una perspectiva de dignidad
Derecho Alternativo se instala como humana y de creciente satisfacción
un otro paradigma general transgre- de las necesidades humanas funda-
sor del convencional, instituido en la mentales.

BIBLIOGRAFÍA

de Sousa Santos, Boaventura :


La Globalización del Derecho. Los nuevos caminos de
la regulación y la emancipación. Bogotá, Universidad
Nacional de Colombia, 1998.
"Derechos y Necesidades Humanas fundamentales:
Un nuevo enfoque de lo jurídico".
Crítica de la razón indolente, Bilbao, Desclée de
Brouwer, 2003.
Jacques, Manuel: Una concepción metodológica del uso alternativo del
Derecho.
Sanchez Rubio David: Filosofía, Derecho y liberación en América Latina,
Bilbao, Desclée de Brouwer, 1999.
VVAA: en Revista «El Otro Derecho», ILSA.
Wolkmer Antonio: Introducao ao pensamento jurídico crítico, Sao Paulo,
Editora Académica, 1991.
Pluralismo Jurídico: fundamentos para urna nova
cultura no directo, Sao Paulo, Alfa Omega, 1994.

-133-
DERECHOS HUMANOS

Pablo Salvat Boloña


Chile

Palabras Clave
ÉTICA - ÉTICA DEL DISCURSO - ÉTICA SOCIAL - ALTERIDAD
- DIALÉCTICA DEL DESAPARECEDOR - DESAPARECIDO - POLÍTICA
- REVOLUCIÓN - CAPITALISMO/SOCIALISMO - NUEVO ORDEN
MUNDIAL - NEOLIBERALISMO - MARXISMO - MODERNIDAD

INTRODUCCIÓN otra parte, la aparición de una serie


de organizaciones y movimientos,
en el ámbito de las iglesias y también
La presencia y significado del fuera de ellas, que trabajaron en la
tema de los derechos humanos (D.H.) defensa y promoción de los DH y la
y su discusión actual en América La- paz. También habría que considerar
tina tiene un origen histórico-político entre los factores que influyeron en el
relacionado con la emergencia, más o sitial ocupado por los DH, la crisis de
menos paralela, de una serie de regí- los modelos de "socialismo real" y de
menes autoritarios que combinan, con la ideología que los sostenía. Estos
sus diferencias y matices, la doctrina tres factores, autoritarismo, defensa y
de Seguridad Nacional con políticas promoción de los DH y crisis ideoló-
económicas de corte neo liberal. No gica del progresismo, nos parecen ser
puede afirmarse que estos derechos claves en la revalidación del valor los
no hayan sido conocidos antes o in- DH y en su reposición en el escenario
corporados a algunas constituciones o público de nuestras sociedades hace
declaraciones de principio en distintos más de dos décadas.
países del continente, así como tam-
poco podría decirse que con anterio- Ciertamente, esta revalidación
ridad a los setenta fueron plenamente de la noción de los DH no ha sido
respetados. Quizá lo distinto resida homogénea en el tiempo ni ha estado
en que el conjunto de esos nuevos exenta de conflictos. Ella ha dependido
regímenes llevó a cabo una política tanto de los distintos actores políticos
de violación sistemática de los DH, y sociales (léase, gobiernos, estados,
amparados algunas veces y aunque partidos, movimientos sociales), como
suene a paradoja, en su pretendida de los cambios ocurridos en cada
condición de defensores de los valores país y en el orden internacional. En
occidentales. la actualidad, el perfil y la discusión
sobre los DH están marcados por los
En la revalorización político- procesos de recuperación democrática,
jurídica y ética de los DH, incidió, por en particular en América Latina, los

-135-
DERECHOS HUMANOS

cuales, en muchos casos, han relegado mueve u opera con una lógica bipolar
la temática de los DH a un segundo y excluyente. En esta visión, la política
plano. Por cierto, la reimplantación es vista como el arte de conducir a los
de la democracia ha sido positiva y ha "amigos" a una victoria sobre los "ene-
significado un retroceso en el irres- migos". La implementación práctica
peto hacia los DH de las personas. de esta perspectiva aderezada, además,
Sin embargo, esta nueva situación no por otros elementos, como la adhesión
puede considerarse como la realización a un catolicismo integrista, justificó la
plena de esos derechos. Aún tenemos eliminación física de muchos dirigen-
analfabetismo, miseria, exclusiones tes y militantes políticos y, más amplia-
de todo tipo entre nosotros. Por tanto, mente, a un control generalizado de
hay que ampliar la noción de los DH la actividad social, política y cultural
y los campos que puede irradiar en el vía una acción represiva debidamente
presente. Ello obliga a tener y producir organizada.
una noción mas amplia de los DH, no
remitida solamente a derechos cívico- Sin embargo, este nuevo dis-
individuales, sino también a todo aquel ciplinamiento y orden de lo sociopo-
conjunto de derechos que aparecen lítico no está diseñado para acabarse
como condición de posibilidad para la en sí mismo. Paulatinamente, la lógica
misma realización de aquellas prerro- represiva en lo político se pone al
gativas individuales. servicio de un modelo económico
neoliberal, con lo cual, a la falta de
derechos cívico-políticos, hubo que
DELIMITACIÓN agregar el no respeto de derechos
HISTÓRICA sociales adquiridos y el cambio de
las reglas del juego en el escenario
económico-social. El mismo Estado,
La relevancia actual del tema que por momentos había sido capaz
de los DH encuentra sus orígenes, en de condensar, incorporar o dinamizar
la mayor parte de América Latina, en reivindicaciones de sectores medios
la década de los años setenta, y se re- o populares, se ve amagado en sus
laciona histórico-políticamente, con la funciones por este nuevo ideario de
instalación de un conjunto de regíme- la reforma y los ajustes.
nes autoritarios que violan los DH de
manera sistemática. Estos regímenes, Frente a esta situación, y no
en su mayoría gobiernos de las FFAA como resultado de una mera moda
o sostenidos por ellas, se apoyaban intelectual, es que surge con fuerza la
ideológicamente en la doctrina de reivindicación de los DH, convertidos
seguridad nacional, la cual obedecía ahora en referente simbólico-político
a un esquema de relaciones políticas de la lucha por la recuperación de la
internacionales típico del período de la democracia y una vida digna en todo
guerra fría entre bloques antagónicos. el continente y centroamérica. No
se trata de descubrir o inventar por
Esta doctrina ve las sociedades primera vez los DH, como si antes no
y la política mediados por un esquema hubieran estado presentes (hay que re-
de relaciones "amigo-enemigo" y se cordar que en América Latina se había

-136-
Pablo Salvat Boloña

firmado la "Declaración Americana de te de la tradición marxista. Ambos


los derechos y deberes del hombre", -modelo socialista y marxismo/le-
ya en mayo del 1948). Pero sí podría- ninismo-, fueron inspiradores -con
mos hablar de un redescubrimiento o los debidos matices-, de una buena
reinvención social de sus significados parte de la expresión del "progresis-
y potencialidades. mo" político-intelectual en América
Latina y Centroamérica. En esta
Podemos decir, entonces, que tradición, la lectura de los DH es-
fue la propia experiencia vivida en tuvo marcada por la visión que de
dictaduras militares la que propició ellos dio el joven Marx, para el que,
el nacimiento de prácticas y organiza- tanto el derecho, así como también
ciones agrupadas en torno a la defensa la democracia formal moderna eran
de DH, las cuales sostenían su acción vistos como el producto y conquista
en el valor ético-político y jurídico de de una clase social, la burguesía.
esos derechos y en la importancia de Ahora, si los DH son, en lo medular,
su defensa y promoción en todos los expresión de los intereses parciales
niveles de la sociedad. de la clase que tiene el poder, enton-
ces su formalismo y universalismo
En torno a los DH, se fue arti- están viciados desde la partida: re-
culando la diversidad política y social flejan la univerzalización y formali-
excluida del proyecto autoritario. Esta zación de intereses particulares, y no
unidad se dio no sólo en función de su del conjunto de la sociedad. Luego,
reivindicación negada, sino también, la tarea es criticar y desenmascarar
en función de levantar una suerte estos discursos que se hacen en su
de proyecto de sociedad a partir del nombre por ilusorios y engañosos.
ideario mismo de los DH. Tanto la democracia formal como los
mismos DH estaban llamados a ser
Una buena parte de este movi- superados a través de la revolución
miento funcionó bajo la égida y alien- proletaria y el socialismo 1 •
to de las distintas iglesias cristianas,
las cuales justificaban la validez de su Será la propia crisis política y
reclamación y apoyo en la doctrina teórica del socialismo, así como las
social y el evangelio, desde los cuales nuevas realidades político-económi-
se fundamentaba el valor de los DH cas generadas en el continente, las que
para ellas. llevarán a este importante segmento
de la vida político-intelectual a un
Otro de los factores que in- giro radical en su postura respecto a
cidió en la revalidación de los DH la validez y legitimidad de los DH 2 •
(amén de la acción del autoritaris- Un paso intermedio en este giro fue la
mo y la correspondiente reacción toma de partido en favor de los dere-
y reclamo de distintos sectores y chos económico/sociales, los derechos
movimientos), se relacionó, desde de igualdad, puestos como condición
un punto de vista más ideológico, para una real libertad política.
con la crisis del socialismo real y
con el cuestionamiento a fondo de su El contexto histórico, enton-
práctica y teoría política, provenien- ces, en el cual emergen como tema y

-137-
DERECHOS HUMANOS

realidad los DH, viene marcado con la origen burgués. Si son pensables como
impronta de una fuerte politización. "categoría política", ello se debe a que
Ellos son reinventados y redescubier- poseen un potencial crítico/utópico
tos desde una realidad política (y eco- que sirve como referente ético de
nómico/social), evaluada de diferentes todas aquella luchas contra la arbi-
maneras respecto a la vigencia o no trariedad y a favor de una vida digna.
de aquellos derechos. Sus lecturas, Ello supone colocar el discurso de los
por ende, no han sido neutras ni el DH en el terreno de la modernidad
resultado de un ejercicio meramente y, por ende, criticar ciertos recursos
académico. argumentativos para fundamentar
esos derechos: ni el naturalismo, ni el
En torno a ellos se ha dado una historicismo o el positivismo pueden
permanente disputa interpretativa por dar cabal cuenta de su carácter y po-
reivindicar un sentido y un alcance más sibilidades. Por ello, para muchos en
o menos funcional a ciertas posiciones esta línea, los DH aparecían como la
político/ideológicas. Si la conciencia "ética de la democracia" por excelen-
respecto a la importancia de los DH cia4. Por cierto, en esta perspectiva,
tiene que ver con la experiencia límite los DH no sólo sirven de referente
de su violación, sus repercusiones tie- ético para la acción, sino también,
nen una traducción político/reflexiva cuestionan y replantean la noción
mediada por la defensa de determina- misma del derecho y de su uso 5 •
dos intereses. Este procesamiento de la
situación relativa a los DH nos permite La apelación a los DH no
constatar lo siguiente: no hay una tra- sólo ha provenido de los sectores
ducción mecánica desde el contexto calificados de "progresistas". Tam-
histórico vivido a un contexto reflexivo bién desde una línea que podemos
de profundización sistemática; no hay catalogar corno neoconservadora, se
tampoco, aunque exista conciencia del ha realizado una determinada crítica
valor de los DH, una misma decodifica- y reivindicación de los DH. En esta
ción de las causales que producen una óptica, la reivindicación nacional e
situación violatoria ni del impacto que internacional de esos derechos tiene
ello genera para las sociedades y su cul- un fuerte sesgo político que no respeta
tura. Su reconsideración se da en medio ni el real origen de los DH ni tampoco
de una sociedad escindida y conflictiva la diversidad cultural a la cual se les
en cuanto a poderes y riquezas, lo cual aplica. Para algunos, estos derechos
dificulta la generación de un consenso pertenecen a cierta tradición anclada
racional respecto al lugar que ocupan en en occidente y deben resguardarse de
tanto categoría respecto a la historia, al su uso efectuado por vertientes filosó-
dominio de lo político/jurídico o de lo fico/políticas que no participarían de
económico/sociaP. este tronco. Por ello, tienen dificulta-
des con el tema de la universalidad de
Para el progresismo político/ los DH y sus posibilidades de exigen-
intelectual, que ha redescubierto el cia a distintas formas de vida cultural.
valor de la democracia en su lucha Los DH serían el producto de ciertos
antiautoritaria, el discurso de los DH "juegos de lenguaje" basados en tradi-
ya no viene más invalidado por su ciones particulares. Otros leen los DH

-138-
Pablo Salvat Boloña

al interior de una tradición religiosa y, continente latinoamericano. A pesar


por ende, colocan en primer lugar el de las democracias, la necesidad de
reconocimiento de la fe y del Dios que la defensa, protección y conciencia
le da origen como la condición para en torno a los DH, sigue siendo una
una correcta validación y jerarquiza- tarea actual. Muchos temas siguen
ción de esos derechos 6 • estando en la palestra de la discusión,
para hoy y para mañana. Entre otros,
Junto a estas perspectivas en los siguientes: la discusión sobre
juego, también hay voces que se las relaciones y posible articulación
levantan a favor de los DH desde lo entre ética y derechos humanos, lo
que podríamos llamar un liberalis- cual supone entrar en las definicio-
mo democrático e igualitario. Aquí nes del derecho y de lo humano y
se pone el esfuerzo en generar un de lo ético; el tema de la naturaleza
debate y discurso racional en torno humana: ¿ existe algo así como una
a la mejor forma de salvaguardar y naturaleza humana una?; la cuestión
proyectar la vigencia de los DH en de la igualdad y la discusión sobre
nuestras sociedades. Este debate ha sus basamentos; por último, todo el
estado relativamente ausente y ello ámbito referido al tema de la univer-
se debería al predominio de visiones salidad y a la relación de los DH con
dogmáticas o escépticas respecto a los la diversidad de culturas: es ¿cúales
fundamentos de los DH. El acento está derechos consagrados en el ámbito
puesto en evitar la inflación lingüística cultural pueden ser obligatorios de
en relación a DH, la cual provendría de manera universal?
la defensa de posiciones "holísticas" o
"perfeccionistas". Se trataría, entonces,
de elaborar una metaética que permita DELIMITACIÓN
fundamentar de modo racional ciertos CONCEPTUAL
principios morales, a los cuales podrían
conectársele tanto unos principios defi-
nidos como liberales, así como derivar l. La reflexión sobre DH desde
de ellos derechos individuales básicos. América Latina se ha dado enmarcada
Los DH serían "derechos morales" en un contexto histórico en el que
puestos como defensa y protección de sobresalen, como lo hemos reseñado
ciertos derechos básicos pertenecientes más arriba, dos momentos principales:
a cada individuo. Los nuevos derechos uno, el de la imposición y expansión
actúan aquí como instrumentos para la del autoritarismo (aliado a una polí-
satisfacción de esos derechos básicos tica de modernizaciones neo liberal),
individuales 7. y el otro, más reciente, de tránsito
generalizado hacia la democracia.
Es posible decir, entonces, que En ambos momentos, los DH han
el discurso de y sobre los DH es un cumplido y tienen un rol relevante en
discurso abierto y en movimiento. ámbitos más o menos delimitados.
En él queda aún una serie de cuestio-
nes pendientes y en constante debate, 2. Nuestra lectura de los DH
ahora, en un contexto de reafirma- intenta asumir y trascender su carác-
ción de la democracia en todo el ter reivindicativo o de mera referencia

-139-
DERECHOS HUMANOS

a un tiempo pasado de negaoon. sobre los cuales hemos construido y


Esta reflexión tiene como telón de habitado nuestro mundo. Aunque
fondo una conciencia, cada vez más sabemos que es una tarea de largo
amplia, de que nuestra civilización aliento, nos parece que la reflexión
vive un tiempo de crisis en el que desde los DH tiem. que considerar
está puesto en cuestión un modelo de y participar del debate sobre la cri-
racionalidad y desarrollo basado en sis actual y la búsqueda de nuevos
una combinatoria de ciencia, técnica paradigmas. Quizá una de las tareas
y economía. Lo singular es que no centrales, en relación a esto, sea la de
pareciera representar un tipo más de contribuir a la génesis de una nueva
crisis, contingente o parcial. Aquí gramática de los DH, acorde a los
estaría en juego el sentido profundo tiempos que corren.
del paradigma de modernización que
ha configurado nuestro mundo desde A partir del diagnóstico es-
hace ya cinco siglos, basado en un bozado más arriba, que visualiza la
ethos del dominio y el poder. Múlti- humanidad como atravesada por
ples síntomas expresan este malestar un tiempo de crisis, emerge la idea
epoca!: desequilibrio ecológico, po- de poner a los DH, primero, como
breza, fragmentación del tejido social lugar particularmente privilegiado
y las identidades, renacimiento de los a partir del cual es factible susten-
nacionalismos y fascismos, etc.. tar una práctica de transformación
y esperanza en medio del clima de
3. La discusión sobre los DH, escepticismo generalizado respecto
sobre el rol del derecho o la justicia se a la capacidad de transformación y
mueve en el marco de la crisis y de la cambio de la realidad mediante la
crítica al proceso de racionalización acción colectiva. Su particularidad
moderno. Esto es importante, porque deriva del hecho de funcionar como
los DH son una creación singular de idea reguladora a través de la cual se
la modernidad política, destinados expresan -de distintas formas y en
a proteger ciertos derechos del indi- diferentes tiempos-, las constantes
viduo en cuanto ciudadano. Reivin- búsquedas de la humanidad por una
dicar los DH hoy supone, entonces, mayor libertad, justicia o felicidad.
no desahuciar de manera global las Segundo, los pensamos como un
conquistas modernas. posible foco articulador de un nuevo
tipo de racionalidad integradora que
Sin embargo, la proyección de coloca en su centro una ética de la
estos derechos en cuanto sustentado- responsabilidad solidaria.
res de una nueva racionalidad ético-
política y una efectiva democratiza- Desde esta perspectiva, los
ción, supondría una reconsideración DH se constituyen en un marco
del paradigma que está a la base de ético-político que sirve de crítica y
su génesis y plasmación modernas orientación real y simbólica de las
en sus aspectos epistémicos, antro- distintas prácticas sociales -jurídicas,
pológicos y políticos. Ello, porque económicas, educativas-, en el nunca
vivimos en un tiempo histórico que acabado bregar por un orden social
demanda un examen de los supuestos más justo y libre.

-140-
Pablo Salvat Boloña

En este sentido, se los conside- La elaboración de una pers-


ra como paradigmáticos, esto es, como pectiva de esta naturaleza tiene sus
una suerte de modelo y/o criterio propios supuestos y condiciones de
ejemplar desde el cual podemos leer posibilidad. Sin pretensiones de ex-
nuestra historia y nuestro porvenir haustividad, podemos mencionar los
como pueblos. Y esta potencialidad siguientes aspectos:
se relaciona, a su vez, con la necesaria
interdisciplinariedad de su enfoque. 1) Lo primero a efectuar es una
aclaración y delimitación.
Este enfoque interdisciplinario Cuando hablamos de construir
no implica la reunión dispersa de una cierta visión de los dere-
diferentes disciplinas respecto a un chos humanos, nos referimos
mismo tema. Se trata de, respetando a una concepción de ellos que
sus racionalidades propias, producir intenta articularlos en sus dis-
encuentros, complementaciones críti- tintos momentos de expresión
cas mutuas. El tema de los DH parece histórica, como parte de la lar-
relacionarse prioritariamente con el ga lucha de la humanidad por
derecho o la filosofía del derecho. Sin hacer retroceder la geografía
embargo, no es posible trabajarlo en su del dominio, la exclusión o la
amplitud y sustancia sin el concurso de segregación.
la sociología, la economía o la historia
y, por supuesto, la misma ética. No creemos en la necesidad
de una jerarquización de valor
Estamos hablando, entonces, a-priori entre la así llamada pri-
de ubicar a los DH como elementos mera, segunda o tercera "gene-
fundantes de una reorientación del ración" de derechos humanos.
pensar y de la acción, que atravie- Por el contrario, nos parece
se transversalmente las relaciones que se necesitan mutuamente,
con la naturaleza, con los demás a pesar del distinto alcance jurí-
(intersubjetividad) y consigo mis- dico-político que puedan tener.
mo (identidad). Cuando hablamos Ahora, afirmar esto no significa
aquí de mediación "fundante" no lo que en las lógicas sistémicas y
hacemos en el sentido de un funda- en las estructuras actuales de
mentalismo sectario o integrista. Su nuestras sociedades no haya, in-
uso no significa recurrir a puntos de cluso de manera inintencional,
vista absolutos o a ciertas realidades una opción por el privilegio de
inmutables. La tarea de fundamentar tales o cuales derechos, normas
la noción DH es tarea filosófica (y o valores.
estética, según algunos), que forma
parte de un proceso constante y Ésta existe y parece obedecer,
abierto por dar cuenta, de manera entre otras cosas, a la misma
teórica, de las distintas articulaciones imposibilidad del orden social
y momentos, vía los cuales los DH de- para satisfacer el conjunto de
vienen norma social, jurídica y ética esos derechos. Luego, si es
para las sociedades y la humanidad posible su satisfacción plena
históricamente consideradas. tiene que efectuarse algún

-141-
DERECHOS HUMANOS

tipo de jerarquización, lo cual i derechos pierdan buena parte


comporta algún grado de nega- de sentido y posibilidades.
ción. Con todo, considerando
el ideario de los DH como Es en esta dirección, entonces,
una "idea reguladora", toma- que puede hablarse de una
dos en su conjunto, resulta visión integradora -no integris-
factible colocar como desafío ta-, sobre DH, de sus distintas
político-reflexivo el pensar dimensiones y momentos his-
las condiciones de posibilidad tóricos.
de su mutua articulación. Al
respecto, quizá la tarea de hoy 2) Si bien la propuesta de levantar
sea levantar una lectura de los un paradigma de los DH se
DH desde la así llamada su "ter- hace desde una vivencia y lec-
cera generación": los derechos tura latinoamericana de ellos,
de solidaridad. Esto significa los entiende e incorpora como
articular de una nueva manera patrimonio de la humanidad.
los derechos provenientes de la
"libertad de los modernos" con Con todo, en una lectura desde
los derechos de igualdad, sin América Latina no basta con
subordinaciones excluyentes. la mera proclamación formal
Con ello, de paso, cumplimos de ciertos derechos civiles y
con la necesaria articulación políticos. Las desigualdades,
de las distintas dimensiones injusticias o discriminaciones
del existir humano: personal, existentes, hacen poco viable
social y planetaria. Se trata de una promoción y acceso de
que el reconocimiento de la los distintos sectores sociales
calidad de sujeto de derecho (en especial, los más poster-
para todo hombre y mujer no gados), al ejercicio pleno de
se limite solamente al ámbito esos derechos. Los actuales
cívico-político, sino que pue- cambios económico/culturales
da darse también en el plano en curso, promovidos por una
económico-social y cultural. incesante revolución tecnológi-
ca -globalización e internacio-
Ahora, sí podemos afirmar des- nalización-, no hacen más que
de la experiencia histórica, que aumentar la brecha existente
tanto los derechos económicos- no sólo entre países del primer
sociales o culturales, así como y tercer mundo, sino también al
los de Solidaridad requieren, interior de cada uno de nuestros
para ser concretados, de la de- países. No es sólo una brecha
fensa y profundización de los de tipo económico, sino tam-
derechos cívico-políticos, esto bién educativa y cultural. Las
es, de la existencia de una real modernizaciones en curso no
democracia participativa. Basta traen consigo una realización
con negar de raíz los derechos del ideario de los DH. Si hay
ciudadanos a poder incidir en la exclusión política, incapaci-
cosa pública, para que los otros dad económica o marginación

-142-
Pablo Salvar Boloña

cultural, la vida democrática se emergiendo unilateralmente


vuelve frágil y se imposibilita la desde cada individuo, de forma
plasmación, dentro y fuera de subjetiva, sino como radical-
las instituciones, de los DH. mente intersubjetiva. Una in-
tersubjetividad que no se apoya
Por ello, desde acá se requiere en alguna metafísica especial
bregar por una triple reclama- sino en el reconocimiento de
ción de derechos: ser sujeto los humanos como seres de
de derechos en lo económico; comunicación y lenguaje.
ser sujeto de derecho en lo
cívico/político, pero también, La mediación del lenguaje y
poder ser sujeto de derecho en la comunicación en los pro-
el ámbito comunicativo/cultu- cesos de individuación y
ral. En estos tres ámbitos, en socialización son un mentís al
los cuales se desarrolla la vida solipsismo de las posiciones
de cada sujeto, es factible una individualistas. Sólo porque
reivindicación y apropiación el espacio de la expresión
del significado de los DH y de de racionalidad no queda
su configuración como idea constreñido a sus manifesta-
reguladora al interior de nues- ciones estratégico-utilitarias,
tras sociedades y también hacia es factible concebir al hombre
fuera de ellas. como un sujeto capaz de no
quedar encerrado en la exis-
3) Una relectura de los DH en tencia fáctica del mundo tal
clave ético-cultural y neopara- como es. Es decir, como un
digmática exigiría, a su vez, una alguien capaz de trascender,
reconsideración de la concep- vía la crítica y la imaginación,
ción antropológica del hombre el orden de lo dado.
moderno. Ello aparece aún más
pertinente si pensamos en poner La redefinición de la razón
a los derechos de solidaridad en perspectiva comunicativo/
como articuladores de los dere- discursiva no sólo nos abre a
chos de libertad e igualdad. una visión más complejizada
y menos simplista. Nos per-
Esto implica poner en cuestión mite, también, por un lado,
y redefinir el "individualismo redescubrir el rostro del otro,
posesivo" que está a la base de marginado y silenciado por el
la visión moderna del hombre. sistema, y, al mismo tiempo,
Esto no sólo por un prurito hacernos responsables por las
especulativo, sino porque este consecuencias globales de las
individualismo se ha mostra- decisiones que se toman. A tra-
do incapaz de responder a la vés del diálogo y la discusión,
actual situación de crisis. Por se pone de manifiesto la incom-
ello es que, si bien hacemos un pletud de cada cual. Por eso,
rescate de la razón y la raciona- si bien el discurso representa
lidad, no las concebimos como el hecho de decir algo, más

-143-
DERECHOS HUMANOS

importante aun es su radical Nos interesan en la medida en


dirigirse al otro. Saliéndonos que en el proceso de concien-
del paradigma cartesiano de la ciación y realización de DH
res cogitans aislada, es facti- han estado presentes, aunque
ble redescubrir que el pensar no siempre hayan tenido una
humano implica siempre su decodificación unívoca y sean
trascendencia, apertura a lo hoy motivo de disputa.
otro, socialidad.
En cuanto a la universali-
Pretender re-anudar libertad e dad, postulamos que los DH
igualdad desde los derechos de constituyen un conjunto de
solidaridad conlleva, entonces, enunciados que poseen un
la tarea de redefinir el sujeto gran potencial de universali-
de derechos y deberes no sólo zación (por lo demás, siempre
en plano del derecho y las abiertos a la posibilidad de in-
normas, sino también en su corporar nuevas significaciones
dimensión antropológica. La y dominios), que es factible
posibilidad de validación que de configurar de una manera
tenga una propuesta de DH-en no autoritaria, esto es, que no
tanto mediación articulante venga impuesta desde fuera de
de ética, política y cultura-, los sujetos involucrados hoy o
parece requerir la presencia y mañana. Esta universalidad la
reconocimiento del otro como vemos como un posible produc-
otro distinto a mí, pero tam- to de un proceso participativo
bién como capaz de concordar y de discusión, desde el cual se
conmigo, de comunicarse y de puede arribar a determinados
conmoverse. consensos socializantes sobre
el alcance y reconocimiento
4) Nos parece, por último, que la de los derechos humanos en
posición de los DH, en cuanto una sociedad dada. Es factible
articuladores de una renovada ' postular y trabajar por una
racionalidad ética en el ámbito construcción común de los
del espacio público, tiene la valores y sentidos que tiene la
virtualidad de poder satisfacer perspectiva de los DH, en las
tres condiciones: el ser univer- distintas esferas de la vida en
sales, históricos y trascendenta- común. La discusión racional,
les, al mismo tiempo. el diálogo, la argumentación o
acción comunicativa son vías
Ciertamente, estas tres son ca- relevantes del proceso de uni-
tegorías que tienen una buena versalización concreta en torno
historia y discusión en el ám- a los DH.
bito de la filosofía, la sociología
o la historia. No pretendemos Desde este punto de vista, los
aquí referirnos a cada uno DH no serían la expresión de
de los significados que han un universal abstracto (a pesar
recibido en esta discusión. del origen histórico-cultural

-144-
Pablo Salvar Boloii.a

situado en occidente) que des- no existieran esas violaciones.


estima la lucha de los poderes Existían, pero no eran decodifi-
y de los afectados en la histo- cadas como atropello de los DH
ria, sino que quizá podamos de la manera como lo fueron
pensarlos como un universal desde los setenta en adelante.
pragmático. Esto es, como un Dos notas queremos destacar
universal construido desde las del reconocimiento histórico
distintas perspectivas de los que se produce en torno al va-
participantes, de un nosotros, lor de los DH. Por una parte,
que por intermedio de la discu- pensamos que su historicidad
sión y el acuerdo en la acción refiere a la posibilidad de que
puede hacer prevalecer tales o sus formulaciones y contenidos
cuales intereses de conjunto. sean reapropiados y reinterpre-
Por cierto, esta posibilidad tados más allá de su momento
de universalizar intereses en de origen y, de esta manera,
torno a los DH exigirá el dise- se conviertan, para sectores
ño de una estrategia práctica de nuestros pueblos, en un
discursiva encaminada en este universal pragmático. Esto, es
sentido. Ella debería ser obra claro, no significa ahorrarse el
de los propios involucrados. conflicto de interpretaciones al
interior de cada sociedad ni en
En este aspecto, entonces, pen- el escenario mundial.
samos que los DH pueden bien
funcionar como ideas regula- Por otro lado, la historia del
doras posibles de ser univer- reconocimiento de estos de-
salizadas y puestas en acción rechos, al ser una historia de
vía la discusión, el diálogo, la luchas y conflictos, puede ser
participación de todos aquellos reconstruida también como
interesados e interpelados. una expresión histórica de
los pueblos, lo cual tiene una
En segundo término, hay que función más bien narrativa,
considerar que la toma de con- esto es, una función de recor-
ciencia respecto al valor que dar lo sucedido, de traerlo al
encierran o pueden encerrar presente como un elemento de
los DH ha sido un producto confrontación y emancipación.
histórico. Ello quiere decir El carácter histórico de los DH
que los DH poseen una histo- lo conectamos, entonces, con
ria, un devenir, y que no han el proceso de concienciación y
caído del cielo ya listos de una reapropiación de ellos; con el
vez y para siempre. Esa his- carácter abierto de sus signifi-
torificación de estos derechos caciones, y, por último, con la
fue un fenómeno que se dió recuperación y reposición de
en Latinoamérica a partir de la solidaridad anamnética, esto
las masivas violaciones de los es, con la función emancipato-
DH en los regímenes militares. ria que tiene el ejercicio de la
No quiere ello decir que antes memoria histórica.

-145-
DERECHOS HUMANOS

Una tercera nota central que Es a partir de esta práctica


pose~rían los DH desde este que se ha ido fraguando la
enfoque, es su carácter de reflexión precedente, como
trascendentales. La noción un segundo momento (en la
de trascendentalidad para el imagen del búho de minerva),
caso de los DH tendría una desde el cual se toma distancia
significación: por un lado, de la experiencia diaria, para
estaría apuntando al hecho indagar por las potencialidades
de que las propuestas sobre innovadoras que trasluce esta
DH no llegan a identificarse forma de praxis, para ver cómo
nunca con sus actuales o fu- proyectarla en tanto soporte de
turas realizaciones posibles. una nueva cultura política.
Siempre hay un margen, una
brecha, una distancia entre Por cierto, no se trata, en este
la propuesta o postulado y enfoque, de diluir la lucha
su encarnación histórico- por la efectiva vigencia de los
concreta. Por otro lado, y distintos derechos y deberes,
complementando el momento ni de aminorar su relevan-
anterior, ellos aparecen como cia jurídico-política. Nuestra
condiciones de posibilidad de modesta pretensión ha sido
una transformación y cambio la de contribuir a ubicar este
de las sociedades actuales en compromiso en un marco más
función de mayor justicia, amplio, porque sabemos que
solidaridad y libertad. Por la reducción a su aspecto rei-
tanto, en su conjunto, pueden vindicativo no es suficiente ni
concebirse como una suerte de garantiza, en el nuevo contex-
utopía democrática, imposible to, la posibilidad de su efectiva
de alcanzar a cabalidad, pero realización y/o vigencia.
que orienta y da sentido, des-
de el presente, al conjunto de No es fácil resumir o sinte-
liberaciones parciales a nivel tizar en tan breve espacio lo que ha
de países y de la humanidad. estado sucediendo con la dinámica
de los derechos humanos en estos
5. La causa de los derechos hu- últimos diez años. Comencemos
manos ha llegado a tener la por una impresión a un nivel más
dimensión y reconocimiento general. Respecto a los DH quizá
actual merced, en gran medida, podemos decir que viven la suerte
al movimiento por su defensa de una paradoja: por un lado, nunca
surgido a causa de las expe- tantas autoridades políticas y po-
riencias autoritarias vividas deres constituidos - globalizados o
en el continente. El dolor, el no-, hablan o pretenden referir sus
sufrimiento o la injusticia han acciones y decisiones a los DH (la
enseñado el valor, la vigencia y lucha contra el mal, el terrorismo, a
la necesidad de proyectar una favor de las libertades, etc); por otro,
cultura democrática basada en sin embargo, da la impresión de que,
los DH. al mismo tiempo, se desvanecen los

-146-
Pablo Salvat Boloña

medios y portadores que posibiliten y la permanencia de factores como la


conferirles una efectivización o una desigualdad, más aun ahora en tiem-
forma determinada. pos de globalización, interrogan el
significado y viabilidad de la misma
Quizá esto tenga que ver con democracia y sus instituciones fun-
la propia configuración de la noción dantes. Por ello, la nueva importancia
de DH, una noción construida a base de temas como la reconciliación, la
de materiales mixtos: de un lado, reparación, el cultivo de la memoria
aquellos provenientes de la propia histórica y, con ellos, la revisión de la
praxis del humano, en especial, de historia y la manera de ser contada e
aquellas dimensiones más negativas interpretada.
o negadoras respecto a sí mismo;
del otro, un esfuerzo permanente de Un segundo aspecto tiene que
justificación teórica (ética, jurídica, ver con discusiones de carácter mas
política), de la defensa y reinvindi- teórico -que toman pie en nuevos
cación del humano en cuanto tal. desafíos históricos emergentes-, al
Podemos prever que esta situación interior del universo de los DH y
paradoja! seguirá formando parte relacionados con los temas de justifi-
del accionar en torno a los DH. Pues cación y validación. En este sentido,
bien, de algún modo, esta situación especial relevancia cobra la discusión
está presente también en los as- - de carácter ético-filosófico y también
pectos que hemos destacado de la jurídico-, en torno a la eventual va-
dinámica en torno a los DH en estos lidez y alcance universal de los DH.
últimos diez años. Podemos engarzar a esta discusión
otra que se da como una concepción
Un primer aspecto de esta universalista y otra particularista de
dinámica ha estado ligado al debate la ética. En especial, estos debates
en torno a las violaciones a los DH han adquirido relevancia debido a las
cometidos por las dictaduras cívico- nuevas reivindicaciones surgidas en
militares. Un debate que posee aristas torno a minorías culturales (étnicas
propiamente políticas (más contin- o religiosas) o también, de género.
gentes) y otras más reflexivas, de Ambas reivindicaciones, a las que
talante hermenéutico y prospectivo podrían sumarse las realizadas a favor
(con un abordaje interdisciplinario). del medio ambiente, puestas de re-
Nuestras sociedades aún viven los lieve de manera nueva por el proceso
efectos de esos años duros y debaten de globalización y algunos sucesos
en función de la justicia que hay que recientes 8 .
hacer, de las responsabilidades, de las
raíces de estas situaciones en nuestra Un tercer punto a destacar par-
propia cultura política e institucional, ticipa también del carácter histórico-
de lo que habría que pensar y hacer teórico del punto anterior. Pero esta
de cara al futuro. Todo ello, ligado a vez aparece más ligado a la evolución
su vez al destino y peso que pueden y evaluación del orden socioeconó-
alcanzar los nuevos regímenes de- mico que introduce el proceso de
mocráticos en plaza. Dicho de otro modernización globalizante, a veces,
modo, los acontecimientos históricos con marcado acento "neoliberal". Se

-147-
DERECHOS HUMANOS

trata del tema de los derechos socia- autorganizacion de los ciudadanos


les9 o también a veces llamados de hacia las instituciones. Nuevamente
"segunda generación", de su vigencia se plantea aquí la cuestion de las po-
y exigibilidad, en un momento como sibilidades de la democracia respecto
el actual, donde el rol del Estado social a garantizar el cumplimiento de los
como garante está puesto en cuestión. derechos, sean individuales y cívicos,
Cómo y desde dónde hablar de los de- o sociales y culturales 11 •
rechos sociales en momentos en que
lo social mismo está o aparece frag- Para concluir, indiquemos que
mentado, debilitado; en momentos de el nuevo "orden" mundial pone de
precarización del trabajo y del empleo, manifiesto, por una parte, la presen-
de aumento de las desigualdades a cia o consolidación del "fenómeno de
nivel mundial y continental 1º. Tanto los derechos humanos" (E.Rabossi),
en relación a los temas de sociedad, en estos últimos diez años, como
como a los económicos y culturales, un referente normativo difícil de
están en juego - en lo concerniente a soslayar (para los actos y decisiones
"derechos"-, cuestiones de justicia de los distintos poderes); al mismo
de importancia capital. Se discutirá tiempo, pone a sus estudiosos, críti-
entonces en torno a qué concepción cos y defensores ante nuevas tareas
de justicia, ligada a derechos sociales, de efectivización y profundización
resulte la más adecuada o pertinente. reflexiva. Es probable que esta situa-
Pero no sólo eso. También aquí hay ción paradójica pertenezca -después
una labor teórica de discusión y tam- de todo-, a la propia dinámica de los
bién defensa de los derechos sociales OH y, por ende, podemos prever que
como derechos humanos propiamente formará parte de ella por un largo
tales y, por tanto, exigibles desde la tiempo más.

NOTAS

1 Cfr. por ejemplo, Lechner, N,"El significado de los derechos humanos


para los países capitalistas desarrollados", en Capitalismo: violencia y
anti-vida, 2 Vols, pp. 113-137.
2 Cfr. C. Lefort, "Droits de l'Homme et politique", Libre,Nº 7, Payot,
1980.
3 Cfr. l. Ellacuría: "Historización del Bien Común y de los DDHH en una
sociedad dividida", en Capitalismo ... pp.81-93; también puede verse el
texto "Los derechos humanos como política", H. Villela, F Hinkelam-
mert, P. Morandé, J. Castillo, N. Lechner et al..
4 Cfr. Waldo Ansaldi,compilador, La ética de la democracia; Véase en
especial, los artículos de N.Lechner, de W.Ansaldi, y A.Flisfisch.
5 Cfr. Alicia E. Ruiz, "El uso alternativo del derecho y los derechos hu-
manos", en La ética de la democracia.

-148-
Pablo Salvat Boloña

6 Cfr. Desde distintas perspectivas, M. Novak: Los derechos humanos y


el nuevo realismo; desde un tradicionalismo católico, O. Lira Derechos
humanos: mito y realidad. También puede verse desde un neotomismo
contemporáneo, j.Maritain, Los derechos del hombre y la ley natural.
7 Cfr. al respecto el libro de C. S. NinoEticayderechoshumanos; también puede
verse, desde un liberalismo democrático, de A. Squella Estudios sobre derechos
humanos.
8 En particular, los hechos relacionados con las nuevas expresiones del
terrorismo político-fundamentalista en el mundo (11 de sept. del
2001 en USA), y los hechos desencadenados posteriormente, como
la guerra contra el gobierno de lrak (y contra ciertas expresiones del
islamismo).
9 Ligados al Pacto de derechos sociales, económicos y culturales, de
1966.
10 A modo de ejemplo puede verse el Informe sobre la Desigualdad dado a
conocer por el Banco Mundial, sobre la situación de A.Latina y el Caribe,
en octubre del 2003.
11 También hay posiciones desarrolladas desde nuestra América sobre estos
temas. Podemos destacar a E.Dussel, O.Guariglia, A.A.Roig, entre
otros.

BIBLIOGRAFÍA

Alonso Manuel A., y j.Giraldo Ramirez (Ed):


Ciudadanía y derechos humanos sociales, Medellín,
Ediciones ENS(Escuela Nacional Sindical), 2001.
Ansaldi, Waldo (comp.): La ética de la democracia, Buenos Aires, CLACSO,
1986.
Basombrío, Carlos: "Educación y Ciudadanía" (La educación para los
derechos humanos en América Latina), IDEDDHH/
CEAAL, Santiago 1991.
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-152-
DESARROLLO
Antonio Elizalde
Chile

Palabras Clave - - - - - - - - - - - - ,
NEOLIBERALISMO - NUEVO ORDEN MUNDIAL - PRIMER MUNDO/
TERCER MUNDO - CAPITALISMO-SOCIALISMO - PENSAMIENTO
ALTERNATIVO - ECOLOGÍA - POLÍTICA - MARXISMO
- MODERNIDAD - DEMOCRACIA - REVOLUCIÓN

INTRODUCCIÓN de desarrollo político, de desarrollo


cultural o de desarrollo social; del
mismo modo, se hace referencia a
El concepto desarrollo surge escalas de la realidad o a espacios.
vinculado al esfuerzo político por Por tal razón se habla de desarrollo
hacer transitar a los países pobres por local, de desarrollo regional, de
un camino que les permita superar desarrollo nacional; por último,
su pobreza o carencia de desarrollo también se hace referencia a partes
(subdesarrollo). o segmentos de la sociedad y se hace
mención a desarrollos sectoriales
Este concepto es tremenda- como el desarrollo agrícola o rural,
mente equívoco y polisémico. Preten- el desarrollo industrial, el desarrollo
de dar cuenta simultáneamente de un de las telecomunicaciones o de los
estado (desarrollo o subdesarrollo) y medios masivos, etc ..
de un proceso ( vías de desarrollo).
Como tal entonces tiene una doble Torna aún más ininteligible el
acepción: sincrónica, referida a un es- debate el hecho de que este concepto
tado o situación y diacrónica, relativa es también usado en otras ciencias,
a un proceso. amén de las sociales. En el ámbito
psicológico, por ejemplo, se habla de
A la vez, es una noción enor- desarrollo de la personalidad, o de
memente amplia en su campo de algún aspecto particular de ésta tales
aplicación. Se habla del desarrollo como la sensibilidad o la racionalidad,
tanto de individuos como de gru- o del desarrollo de las competencias
pos o sociedades, es decir, de ele- o habilidades individuales y también
mentos considerados aisladamente colectivas.
así como también de conjuntos.
Por otra parte, con el concepto se Es por lo tanto un concepto
pretende asimismo, dar cuenta de que adquiere una connotación diversa
distintas dimensiones. Es así cómo dependiendo del especialista que esté
se habla de desarrollo económico, haciendo uso de él.

-153-
DESARROLLO

HISTORIA DEL el pensamiento occidental en diversos


CONCEPTO momentos, a partir de 1945. Ellos son
los siguientes:

Gustavo Esteva (1992) sitúa la l. El modelo de la Moderniza-


invención del Subdesarrollo y el inicio ción
de la era del Desarrollo exactamente el 2. La teoría de la Dependencia
20 de Enero de 1949 en un discurso 3. El modelo de las Necesidades
del Presidente Truman: "Debemos básicas
embarcarnos en un valeroso nuevo 4. La propuesta del Ajuste estruc-
programa para hacer que los benefi- tural
cios de nuestros avances científicos y 5. Los modelos de Articulación
progreso industrial estén disponibles 6. La Internacionalización del
para el mejoramiento y crecimiento capital
de las áreas subdesarrolladas. El an- 7. La Antimodernización
tiguo imperialismo - la explotación 8. El Desarrollo de las raíces po-
para beneficio ajeno - no tiene lugar pulares básicas
en nuestros planes. Lo que nosotros 9. El Ajuste con rostro humano
visualizamos es un programa de de- 10. El Desarrollo sostenible
sarrollo basado en los conceptos de
legítimas relaciones democráticas." Entre ellos, es necesario desta-
car los que fueron dominantes durante
John McKay (1991) señala que largos años en la reflexión en torno
no existe un modelo de desarrollo y al tema:
afirma: "La definición del desarrollo
sigue siendo uno de los conceptos El Modelo de la Moderniza-
más discutidos de nuestro campo y ción, el cual fué la sabiduría más o
ciertamente permanecerá así. Si exa- menos aceptada entre 1945 y media-
minamos la historia del pensamiento dos de los años 60, estaba basado,
buscando las cuestiones acerca del entre otros, en supuestos como los
desarrollo, es evidente que la idea siguientes: que el desarrollo y el cre-
del desarrollo es la cuestión clave cimiento son idénticos; que el creci-
de las ciencias sociales, y ocupa un miento puede conseguirse mediante la
lugar central en los escritos de Adam aplicación de la tecnología y la ciencia
Smith, Karl Marx, Max Weber y otros occidentales a la producción; que to-
muchos. Sin embargo, se ha afirmado das las sociedades pasan por una serie
que el final de la Segunda Guerra de fases delineadas por su capacidad
Mundial representa una línea divi- de invertir en esas herramientas de la
soria en la evolución de la teoría del ciencia y la tecnología y de contro-
desarrollo. Desde 1945, se aceptó que larlas; que conforme el crecimiento
el desarrollo es un derecho de todos tiene lugar, las instituciones sociales y
los pueblos ... " políticas de la sociedad tradicional son
sustituídas por formas más modernas;
Sostiene McKay que se pueden que en el campo social, eso significa la
identificar diferentes modelos de de- sustitución de modelos de obligación
sarrollo que han sido dominantes en e identificación, más comunes o tri-

-154-
Antonio Elizalde

bales, por otros modos de motivación los países que ahora son pobres no se
más individualistas; que las formas encuentran en una especie de estado
tradicionales y feudales del poder virginal del subdesarrollo, más bien se
político serán sustituidas por formas han subdesarrollado por un sistema de
de gobierno más democráticas; y que explotación global; y el Tercer Mundo
la convergencia de las sociedades sólo puede desarrollarse si corta sus
hacia este modelo de la modernidad vínculos con el sistema mundial.
producirá un orden global menos
proclive a las divisiones y conflictos Aunque este modelo inter-
políticos agudos. pretativo fue atacado seriamente en
los años 70, sigue teniendo muchos
La Teoría de la Dependencia partidarios. A fines de los años 80 se
surge debido a que, desde mediados hicieron algunos intentos interesantes
de los años 60, muchos analistas de los de poner al día el modelo, teniendo en
países del Tercer Mundo empezaban a cuenta las objeciones teóricas y empí-
impacientarse por la evidente falta de ricas planteadas por los críticos.
progreso hacia la modernización. Mu-
chos críticos cuestionaban también Gilbert Rist (1976) elaboró
los supuestos culturales occidentales una tipología muy sugerente de las
implícitos en la teoría de la moderni- teorías del desarrollo distinguiendo
zación. El resultado fue una inversión las siguientes:
total de la lógica de la modernización,
ya que para los teóricos de la moder- a) el modelo clásico-marginalista
nización el contacto con el mundo (Lewis)
industrial ofrecía la promesa de desa- b) el modelo evolucionario (Ros-
rrollo, mientras que para los teóricos tow)
de la dependencia era ese mismo con- c) el modelo humanista-liberal de
tacto con el mundo industrializado Perroux
el que aseguraba la continuación del d) la crítica marxista-leninista (S.
empobrecimiento. Amín)
e) el modelo del NOEI
Los teóricos de Latinoamérica O la propuesta alternativa: el mo-
proporcionaron el impulso inicial de delo de la autodependencia
esta concepción, siendo adoptadas esas
ideas rápidamente en Africa y Asia. En Rist, haciendo uso de los con-
su forma más simple, los teóricos de la ceptos componentes o variables
dependencia afirmaban que el desarro- relevantes al desarrollo (producción,
llo de Occidente no podría haber tenido distribución, estructuras, organiza-
lugar sin la sistemática explotación de ción, balance ecológico y especificidad
las colonias del Tercer Mundo; las fases cultural), realiza una identificación
de desarrollo tratadas por los teóricos del centro de gravedad de cada teoría
de la modernización son una ilusión. sobre el desarrollo:
La existencia de un sistema mundial
explotador asegura que los países del El modelo clásico (Lewis), se-
Tercer Mundo no pueden seguir el ca- gún él, enfatiza la producción a nivel
mino del desarrollo de los países ricos; nacional e internacional y considera

-155-
DESARROLLO

los otros medios para el desarrollo Indica que el modelo del


como variables dependientes de la NOEI (Nuevo Orden Económico
producción. Esto no en razón de con- Internacional) quiere maximizar las
siderar que ellos no sean importantes, ganancias y la producción para el
sino que debido al supuesto de que mercado internacional y mejorar la
ellos se ajustan casi automáticamente distribución a nivel internacional.
al crecimiento económico. Son igno- Las estructuras no tienen necesa-
rados la especificidad cultural y el riamente que ser cambiadas. Las
balance ecológico. circunstancias nacionales y la espe-
cificidad cultural no son tomadas
Señala que el modelo ros- en cuenta; y el balance ecológico es
towiano, principalmente, se dedica levemente considerado.
a la dialéctica entre producción,
crecimiento económico y cambios Señala que el modelo de la
estructurales (cada cual ayuda al autodependencia (What Now o Qué
otro); el contexto internacional es de Hacer) define claramente sus obje-
segunda importancia. La desigualdad tivos: satisfacción de las necesidades
de la distribución refuerza la produc- humanas, y somete todas las va-
ción y los cambios estructurales. La riables a éstas de manera tal que es
especificidad cultural y el balance difícil aislar unas de otras (¿ balance
ecológico son ignorados. ecológico?) y considerarlas como el
factor decisivo.
Sostiene que el modelo liberal
de Perroux está preocupado por la Rist sostiene finalmente que,
producción y la distribución. Las con la excepción del último mode-.
estructuras nacionales e interna- lo, todos tienen lagunas al mirar la
cionales también son consideradas selección de medios, considerados
en el modelo en orden a reducir las relevantes para la consecusión del
desigualdades de la distribución y a desarrollo. La más parcial de las teo-
asegurar una forma de crecimiento rías es ciertamente la teoría clásica y
balanceado y armónico. El objetivo todas las otras tienen algún tipo de
del desarrollo (para el hombre y de coherencia interna, la cual depende
todo el hombre) es afirmado clara- de su punto de partida.
mente; sin embargo, son ignorados
tanto especificidad cultural como el Fernando Henrique Cardoso
balance ecológico. (1981) en un breve ensayo realiza una
síntesis sobre la teoría del desarrollo
Afirma que el modelo marxis- que se elaboró en América Latina,
ta-leninista (S.Amin) inicia su análisis identificando tres momentos en la
desde la distribución desigual y la ne- reflexión realizada:
cesidad de modificar las estructuras
en orden a alcanzar formas de mayor 1. La teoría "latinoamericana" del
igualdad. Esto tiene consecuencias desarrollo;
sobre la producción (principalmente 2. El enfoque de la dependencia;
a nivel internacional: rechazando la y
división internacional del trabajo). 3. El enfoque alternativo.

-156-
Antonio Elizalde

La tesis que plantea Cardoso es precios, tales como la lucha sindical, la


que la reflexión latinoamericana sobre capacidad organizativa de los obreros y
el desarrollo, por lo menos en sus dos de las empresas en el centro y los efectos
primeros momentos, es tributaria de de los monopolios .. Sin embargo, no se
la noción iluminista del progreso, y negaba la necesidad de la técnica y sus
de ... "la creencia en la forma por la cual efectos multiplicadores, ni su relación
la Razón se hace presente como Técni- con la riqueza (o más precisamente con
ca y como principio formal ordenador la acumulación de capitales), etc. Al
del mundo." contrario, se ponía énfasis en la toma de
decisiones políticas para permitir que
El primer momento surge, de la racionalidad técnica resultase un
como él señala, cuando el prestigio de provecho para las naciones y para los
algunas ideas nacidas en la CEPAL, estratos perjudicados."
respecto al desarrollo económico,
condujo a: ... "llevar a creer que existe Furtado (1961), uno de los
un conjunto de propuestas relativas a primeros y principales teóricos desarro-
una "teoría latinoamericana del desa- llistas latinoamericanos,junto con Raúl
rrollo". Y, de hecho, en años recientes, Prebish, señalaba que "El concepto de
como se verá más adelante, tanto Celso desarrollo abarca la idea de crecimien-
Furtado ( 1974) como Osvaldo Sunkel y to, superándola. En efecto, se refiere
Pedro Paz (1970) dieron a la tradición al crecimiento de una estructura com-
de análisis llamado estructuralista, pleja. Esa complejidad estructural no
formulaciones sintéticas en el sentido es una cuestión de nivel tecnológico.
de la consolidación de un paradigma En verdad, ella expresa la diversidad
analítico. Sin embargo, en las formu- de las formas sociales y económicas
laciones originales, los enfoques sobre engendradas por la división social del
el desarrollo fueron fragmentarios. trabajo".
Si despertaron particular interés, fue
porque delimitaron problemas im- Asimismo, Sunkel y Paz ( 1970)
portantes y, a pesar de ser teóricamente afirmaban: "El desarrollo y el subdesa-
modestos, contrastaban con lo que la rrollo pueden comprenderse, entonces,
teoría económica ortodoxa presentaba como estructuras parciales, pero inde-
como "verdad establecida"." pendientes, que configuran un sistema
único. La característica principal que
En su análisis crítico respecto diferencia a ambas estructuras es que
a esta teoría, Cardoso afirma: "No es la desarrollada, en virtud de su capa-
difícil entender por qué afirmaciones cidad endógena de crecimiento, es la
aparentemente tan simples hayan dominante, y la subdesarrollada, dado
provocado tanto ruido. Se negaba la el carácter inducido de su dinámica,
importancia del comercio internacional es dependiente: y esto se aplica tanto
per se como fundamento de la igual- entre países como dentro de un país ... "
dad económica entre las naciones y se y continúan afirmando más adelante:
incorporaban a la explicación otros "El concepto de desarrollo, concebido
factores institucionales y estructu- como un proceso de cambio social, se
rales, situados más allá de la esfera del refiere a un proceso deliberado que
mercado y de la libre fluctuación de los tiene como finalidad última la equipa-

-157-
DESARROLLO

ración de las oportunidades sociales, Según Keith Griffin (1999): "La


políticas y económicas, tanto en el aproximación del desarrollo humano
plano nacional, como en relación a que emergió a finales de los ochenta
sociedades que poseen patrones más representó un cambio radical en dos
elevados de bienestar social". sentidos. En primer lugar, el proceso
de desarrollo abandona los supuestos
A partir de la década de los 90, militaristas para ser visto, siguiendo la
se inició la producción de los Infarmes orientación de Sen, como un proceso
de Desarrollo Humano por parte del de expansión de las "capacidades" de la
PNUD. Según el PNUD, el desarrollo gente para elegir el modo de vida que
humano es una teoría y una metodolo- cada cual valora ... En segundo lugar,
gía del desarrollo económico, político también se desafía el supuesto de que el
y social que integra y supera los enfo- desarrollo depende fundamentalmen-
ques convencionales y no se reduce al te de la expansión del capital físico,
aumento de la riqueza o del ingreso es decir, de la inversión en plantas y
per cápita, sino que abarca otros va- equipamiento. Inspirándose en los
lores como la equidad, la democracia, trabajos de Schultz, se enfatiza ahora la
el equilibrio ecológico y la justicia de importancia de la acumulación de ca-
género, también esenciales para vivir pital humano que implica fundamen-
mejor. talmente invertir en educación, salud,
investigación y desarrollo, nutrición y
Los promotores de este para-
planificación familiar... Una visión del
digma -el Premio N óbel de Economía,
desarrollo centrada en la producción de
Amartya Sen, y el profesor Mahbub ul
bienes es sustituida por otra centrada
Haq- sostienen que el "desarrollo es
en la ampliación de las capacidades de
libertad" y que, por eso, las políticas
la gente ... "
públicas deben generar opciones para
que la gente lleve su propia vida de
También a partir del año 1992,
manera cada vez más satisfactoria.
en que se realiza en Río de Janeiro la
Cumbre Mundial sobre Medio Am-
Según el paradigma de desa-
rrollo humano: biente y Desarrollo, se agrega al con-
cepto de desarrollo el adjetivo de sos-
• La libertad es un fin y el mejor tenible, introduciéndose de este modo
medio para lograr el desarrollo. la preocupación por los límites físicos
• La gente no sólo es beneficiaria y biológicos que a la expansión del
o receptora de las opciones sino ecosistema humano, nos pone nuestro
la protagonista por excelencia. planeta frágil y finito, acuñándose así
• El desarrollo depende del es- el concepto de desarrollo sostenible,
fuerzo creativo de hombres y el cual es definido como aquel "que
mujeres y no de la naturaleza atiende las necesidades de las gene-
ni de la suerte. raciones presentes sin menoscabar
• El desarrollo es para la gente las necesidades de las generaciones
porque el fin no es añadirle futuras" (Bruntland, 1986).
ceros a las cuentas nacionales,
sino mejorar la vida de las Este concepto se enraizó rápi-
personas. damente en todos los espacios, desde

-158-
Antonio Elizalde

la sociedad civil, pasando por los go- la perspectiva del largo plazo; y que el
biernos hasta las agencias internacio- desarrollo sólo puede ser sostenible
nales de financiamiento y finalmente si se toman en cuenta las generacio-
el sector empresarial. El concepto es nes por venir. El desarrollo humano
tan amplio que no es posible estar sustentable considera tres elementos
en desacuerdo con él, pero la gran críticos para su despegue: la experi-
pregunta es cómo se construye, cómo mentación social, que se refiere a que
se hace operativo. Frecuentemente, el objetivo de programas y proyectos
los defensores de esta visión tienen debe ser el probar la viabilidad de
una mirada unilateral de que el pro- opciones de desarrollo u observar el
greso social radica en la expansión y despliegue de opciones hasta ahora
el consumo. Y es muy probable que desconocidas; la innovación social,
los países en desarrollo necesiten ex- reconociendo la necesidad de exis-
pandir su base productiva para poder tencia e interacción entre diversidad,
satisfacer las necesidades básicas de espacio, responsabilidad y equidad,
su población y crear oportunidades como matriz generativa de nuevas
para los sectores marginados; pero, formas y estrategias para afrontar
debido a las capacidades finitas del desafíos; y los conocimientos sociales,
ecosistema planetario, esta expansión entendiendo este elemento como el
requerirá que los países industriali- cambio desde un enfoque basado en el
zados minimicen sustantivamente su control, a otro basado en la adopción
impacto ambiental, si queremos que el de conocimientos."
deterioro ambiental se detenga.

En años más recientes, ha co- DELIMITACIÓN


menzado a hablarse de Desarrollo Hu- CONCEPTUAL
mano Sustentable, el cual es definido
por Banuri et al. ( 1994) como "la am-
pliación de las preferencias y aptitudes Cuando hablamos de desarro-
de las personas mediante la formación llo, estamos pensando en algo que
de capital social de modo que satisfaga es bueno, algo que nos conduce en
de la manera más equitativa posible las pos de algo mejor de lo que somos
necesidades de generaciones actuales o tenemos. La noción dice relación
sin comprometer las necesidades de con un cambio, con un pasaje desde
generaciones futuras". un momento inferior a un momento
superior. La palabra desarrollo tiene
Elizalde y Quiroga (2000) se- relación con rollo, con algo que está
ñalan que "Esta definición revela por arrollado, replegado; y que se des-
lo tanto que el desarrollo comienza encoge, se despliega, se desenrrolla.
desde las personas y la definición de Desarrollar es amplificar, desenvolver,
sus propias condiciones; que no se explicar, aumentar, crecer, madurar,
puede dar desarrollo sin un marco progresar, extender. Desarrollo es
de acción colectiva nacida desde la sinónimo de adelanto, superación,
voluntad; que la sectorialidad debe aumento, crecimiento, desenvolvi-
reconocer las relaciones existentes y miento, incremento, maduración,
que sus temáticas deben abordarse en madurez, progreso, prosperidad. Hoy

-159-
DESARROLLO

también de "modernidad" o como lo a las propias en nombre de la cruz


diría Hinkelammert (1989) de occi- o de la media luna, durante estas
dentalización del mundo. décadas recientes, en nombre del
"desarrollo", todo tipo de expertos
Al parecer, hasta ahí todo va de la más variada índole han asolado
bien; sin embargo, lo que ocurre es los pueblos del Sur para impulsar-
que este concepto, al igual que todas los a imitar a los países del Norte.
las cosas, tiene dos caras: una tiene re- Mediante estos esfuerzos, millones
lación con los beneficios del proceso; de personas perdieron su calidad de
otra, con los costos de él. productores y de trabajadores "libres"
transformándose en asalariados y
Hemos creído durante largo consumidores.
tiempo que cualquier iniciativa que
nos llevase a una mayor modernidad Sin embargo, el "desarrollo"
era buena; se llegó a creer, parafra- fue mucho más allá de un enorme
seando las visiones conservadoras, esfuerzo colectivo de caracter socio-
"que todo tiempo futuro sería mejor". económico. Ha llegado a ser una for-
Sin embargo, no todo proceso de de- ma de percepción que ha modelado
sarrollo ha conducido necesariamente la realidad, ha generado un sistema
a una situación más beneficiosa y, por de lenguaje que ha domesticado a
otra parte, no todos los esfuerzos y los las poblaciones de los países más po-
resultados de esos esfuerzos se han bres, ha llegado a ser un mito que ha
traducido en beneficios para todos alienado y conforta a las sociedades
los involucrados en dichos procesos. convirtiéndose casi en una religión y
Más aun, toda la evidencia histórica asimismo en una fantasía que desata
nos muestra que siempre el desarrollo aún todo tipo de pasiones, ideologías
de algunos se ha hecho a costa del y violencias.
empobrecimiento de otros.
Vandana Shiva (1991) sostiene
El tema del desarrollo, por con- que los destinos del desarrollo y las
siguiente, debería suscitar inmediata- Naciones Unidas han estado siempre
mente algunas preguntas que aunque cercanamente entrelazados desde que
parecen obvias, no lo son tanto. las Naciones Unidas fueron creadas
en San Francisco. Una horrible gue-
rra mundial había recién terminado.
¿Desarrollo, para qué y La Organización quería promover
para quiénes? una futura "seguridad y cooperación
internacional" entre las naciones. Los
padres fundadores fueron predomi-
Desde hace ya más de cuatro nantemente blancos, occidentales,
décadas, el conjunto de la humanidad cristianos y, es necesario decirlo,
se encuentra inmersa en la "Era del exclusivamente varones. Ideológi-
Desarrollo" (Sachs, 1992). De manera camente, sus ideas y paradigmas
similar a lo ocurrido hace algunos estaban moldeados por el raciona-
siglos, cuando legiones de guerreros lismo y positivismo Newtoniano y
destruyeron las formas de vida ajenas Cartesiano. Shiva indica que usará

-160-
Antonio Elizalde

los ojos y la experiencia de base de RECONCEPTUALIZACIÓN


una mujer del Tercer Mundo para DE LA NOCIÓN DE
señalar que el desarrollo, desde un
"DESARROLLO"
comienzo, ha sido "el gran nuevo
proyecto de patriarcado occidental"."
y continúa afirmando que, en nom-
Parece fundamental reconcep-
bre del "desarrollo" y el progreso,
tualizar la noción de "desarrollo",
se están destruyendo los bosques, el
estableciendo ciertas distinciones
agua y la tierra, esto es, los sistemas
necesarias que permitan recuperar
en que se apoya la vida. Afirma que
un concepto que, al irse cargando de
la violencia hacia la naturaleza, que
tantos sentidos, se ha ido vaciando de
parece inherente al modelo de desa-
contenido; pero, a la vez es necesario
rrollo dominante, se asocia también
mantener abiertas las posibilidades
con la violencia hacia las mujeres
que dependen de la naturaleza para para que dicho concepto pueda tam-
obtener el sustento para ellas, sus bién dar cuenta de la infinidad de
familias y sus sociedades. Asevera, posibles realizables en la práctica
asimismo, que en vez de seguridad histórica de las sociedades.
y cooperación, el mundo se man-
tuvo enredado en las rivalidades de El concepto de desarrollo, con su
dos ideologías dominantes. Ellas se connotación de sustentable, requiere ser
embarcaron en una competencia sin disociado de la noción de "desarrollo"
piedad y en la estrangulan te "Guerra entendido como crecimiento, concep-
Fría" por la supremacía. Cada lado ción esta producto de la Ideología del
trató de hacerlo mejor, producir más, Progreso y del Paradigma Cartesiano.
ser mas agudo, intimidar y adelantar ¿En que radica la diferencia fundamen-
al otro, hasta el punto de la demen- tal entre ambas nociones? El desarrollo-
cia. Un juego en el cual una parte, crecimiento entendido como progresión
como ha llegado a ser evidente para ilimitada, supone la posibilidad siempre
cualquiera, siempre tuvo una consi- abierta a expandir los horizontes, dado
derable desventaja. el desconocimiento de las limitaciones
sistémicas. Se piensa que, a las limitacio-
El "Desarrollo" fue funda- nes que puedan irse presentando en el
mentalmente un intento de repetir proceso de crecimiento, constantemente
los logros del "Plan Marshall" el se les encontrará alguna forma de supe-
cual había sido tan exitosamente ración, por medio de la manipulación de
aplicado a la Alemania devastada por alguna de las variables involucradas. El
la guerra. De ese modo, se buscó ase- nuevo concepto reconoce la existencia
gurar que las naciones recientemente de límites o umbrales, los cuales una vez
independizadas en Asia, Africa y el transgredidos generan inevitablemente
Caribe, así como el conjunto de las situaciones catastróficas o de desplome
restantes naciones del Hemisferio Sur de los sistemas en desarrollo.
permanecieran dentro de la esfera de
influencia política occidental, pero El principal aporte rescatable
principalmente como tributarios de del pensamiento dependentista res-
su zona de libre comercio. pecto al desarrollo, es algo que pio-

-161-
DESARROLLO

neramente enunció Gunnar Myrdal no reduccionista a la economía; la


(1957). La idea de que el desarrollo existencia de enfoques pluralistas y
y su fenómeno opuesto, el subdesa- no reduccionistas sobre la tecnología;
rrollo, son ambas caras de la misma la valoración de los seres humanos
moneda. Esto es, que ambos son como un valor último y no meramente
fenómenos complementarios o partes instrumental; el respeto sagrado de la
de un mismo fenómeno observado biosfera como base de sustentación
desde puntos diferentes de la reali- de la existencia humana; y la respon-
dad. El desarrollo es lo que ocurre sabilidad por la administración del
en la parte luminosa de la realidad; cosmos y la integridad y supervivencia
el subdesarrollo es lo que se da en de la naturaleza.
la parte oscura. Algo así como el
Yin y el Yan. Es preciso introducir, Asimismo, el desarrollo tam-
por consiguiente, la consideración bién debe contener la existencia de
de la sustentabilidad, como la otra un profundo ethos solidario, que se
cara de la misma moneda. El de- exprese en solidaridad interna de los
sarrollo-crecimiento buscaría dar pueblos, solidaridad internacional y
cuenta de la dimensión de lo que es solidaridad intergeneracional. Sólo la
endógeno o propio de un fenómeno solidaridad puede restañar los efectos
específico en particular; sin embar- de las dinámicas excluyentes de las
go, tiene indisolublemente asociada fuerzas del mercado y de los procesos
otra dimensión exógena o externa de crecimiento operando sin ningún
al fenómeno en cuestión; de modo control o regulación.
que siempre estarán presentes ambas
dimensiones: lo que está dentro y lo
que está afuera, dos aspectos de una EL CARÁCTER
misma realidad. Paradójicamente, lo MULTIDIMENSIONAL
que habitualmente es más fácil de DEL DESARROLLO
observar y de medir, por su mayor
cuantificabilidad, es justamente la
dimensión exógena o exterior. Es fundamental asumir el
caracter global, holístico, integral
de la noción de "Desarrollo" 1, en-
EL CONTENIDO ÉTICO tendiendo que contiene diversas
DEL DESARROLLO dimensiones no contradictorias entre
sí, que se encuentran profundamente
interrelacionadas y en relaciones de
El desarrollo, tal como lo ha mutua dependencia entre sí. Por tal
señalado Denis Goulet (1992), para razón, el abordaje parcial y atom-
ser tal requiere de nítidos contenidos izado de una dimensión en particular
éticos: el respeto de la diversidad inevitablemente termina acarreando
biológica y de la diversidad cultural; alteraciones - en la mayor parte de
la coexistencia de una pluralidad de los casos negativas - en las otras di-
racionalidades, es decir, tolerancia; el mensiones. De allí la necesidad de
reconocimiento de la pluralidad de superar el enfoque "eficientista" por
modelos posibles; una aproximación una aproximación capaz de reconocer

-162-
Antonio Elizalde

y fomentar la sinergia en los procesos Cabe preguntarse hasta qué


del desarrollo. punto esos intentos de emulación
tienen sentido. En primer lugar, no
El concepto sinergia significa, existen evidencias de que en aque-
en fisiología, "colaboración de varios llos países las personas vivan sus
órganos en una función." El término necesidades de manera integrada. En
griego del cual deriva quiere decir segundo lugar, en los países ricos,
"cooperación, acción conjunta." Im- la abundancia de recursos y de bie-
plica una forma de potenciación, un nes económicos no ha llegado a ser
proceso en el que la potencia de los condición suficiente para resolver el
elementos asociados es mayor que la problema de la alienación.
potencia sumada de los elementos
aislados. Es imprescindible, por con-
siguiente, un profundo cambio en
Enfocar el desarrollo en térmi- nuestra percepción e ideación del
nos sinérgicos implica un profundo fenómeno del desarrollo: desde el
cambio de la racionalidad económica arriba al abajo, desde lo exógeno
dominante. Obliga, entre otras cosas, a lo endógeno, desde el centro a la
a un cuestionamiento profundo del periferia, desde la concentración a la
concepto de eficiencia. Esta suele dispersión.
asociarse a nociones de maximización
de productividad y de utilidad, a pesar Una propuesta en tal sentido
de que ambos términos son ambiguos. está contenida en lo que fue conocido
Sin embargo, al llevar el criterio eco- y difundido como la propuesta del
nómico al extremo más alienado de la Otro Desarrollo (1975), posterior-
razón instrumental, la productividad mente profundizado en el Desarrollo
se nos aparece como bastante inefi- a Escala Humana (1986).
ciente. Sobredimensiona la necesidad
de subsistencia y obliga al sacrificio "Sólo un estilo de desarrollo
de otras necesidades, acabando por orientado a la satisfacción de las
amenazar la propia subsistencia. necesidades humanas puede asumir
el postergado desafío de hacer crecer a
En los discursos dominantes toda la persona y a todas las personas.
sobre el desarrollo, se asocia también Sólo la creciente autodependencia
la eficiencia a la conversión del trabajo en los diversos espacios y ámbitos
en capital, a la formalización de las puede enraizar dicho desarrollo en el
actividades económicas, a la incorpo- Continente Latinoamericano. Sólo el
ración indiscriminada de tecnologías inclaudicable respeto a la diversidad
de punta y, por supuesto, a la maximi- de los innumerables mundos que ha-
zación de las tasas de crecimiento. El bitan en el ancho mundo de América
desarrollo consiste, para muchos, en Latina garantiza que esa autonomía
alcanzar los niveles materiales de vida no se confine al jardín de las utopías.
de los países más industrializados, Sólo el fomento y la articulación de
para tener acceso a una gama creciente estas diversidades en un proyecto po-
de bienes (artefactos) cada vez más lítico democrático, desconcentrador y
diversificados. descentralizador puede potenciar los

-163-
DESARROLLO

recursos smergicos indispensables el motor del desarrollo mismo. Ello se


para la decantación de un desarrollo logra en la medida en que la estrategia
a la medida del ser humano." de desarrollo sea capaz de estimular
permanentemente la generación de
"El Desarrollo a Escala Huma- satisfactores sinérgicos."
na no excluye metas convencionales
como crecimiento económico para "Integrar la realización ar-
que todas las personas puedan tener mónica de necesidades humanas en
un acceso digno a bienes y servicios. el proceso de desarrollo significa
Sin embargo, la diferencia respecto la oportunidad de que las personas
de los estilos dominantes radica en puedan vivir ese desarrollo desde sus
concentrar las metas del desarrollo comienzos, dando origen así a un
en el proceso mismo del desarrollo. desarrollo sano, autodependiente
En otras palabras, que las necesida- y participativo, capaz de crear los
des humanas fundamentales pueden fundamentos para un orden en el
comenzar a realizarse desde el co- que se pueda conciliar el crecimiento
mienzo y durante todo el proceso económico, la solidaridad social y el
de desarrollo; o sea, que la realización crecimiento de todas las personas y de
de las necesidades no sea la meta, sino la persona toda."

NOTAS

1 Creo importante hacer mención a la sistemática y rigurosa indagación


teórica que en torno a la cuestión del desarrollo realiza Luis Razeto, en
su libro Desarrollo, transformación y perfeccionamiento de la economía
en el tiempo. Así como a las varias dimensiones exploradas en la obra
colectiva El resignificado del desarrollo. Estrategias de transición del
paradigma mecanicista a la conciencia planetaria.

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-166-
DIALÉCTICA
Freddy Salazar
Colombia

Palabras clave
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - CONFLICTO
- FILOSOFÍA/TEOLOGÍA - METAFÍSICNONTOLOGÍA - EPISTEMOLO-
GÍA - DIFERENCIA - SIMBOLISMO - HISTORIA - MARXISMO

INTRODUCCIÓN no son dioses y su naturaleza es ra-


cional, ¿cómo explicar su autonomía
frente a la razón? ¿Esta les está sujeta
La dialéctica es un concepto tan o es una realidad independiente de
antiguo como la filosofía misma. Ella los mismos? ¿O acaso la razón es el
señala la presencia de un conjunto de único y verdadero principio? Si ella
problemas que surgen de la naturaleza es distinta de los fundamentos, ¿cómo
propia de la filosofía, como un saber explicar su relación con éstos? Si los
que intenta ser la alternativa frente al principios generan la diversidad de
mito, asumiendo las funciones que seres que hay en el mundo, ¿éstos
éste cumplía como explicación radical son de una naturaleza distinta de
de la realidad. Desde esos orígenes aquéllos? Y, entonces, ¿cómo explicar
surge la comprensión de la filosofía la relación de lo Uno (el principio) y
como saber racional no sujeto a la lo múltiple?
creencia, con pretensiones de abarcar
la realidad bajo todas sus manifes-
taciones, mediante una explicación DELIMITACIÓN
por principios o causas, también de HISTÓRICA
orden racional, distintos de los orí-
genes de carácter divino propuestos
por el mito. La dialéctica surge con los grie-
gos en el contexto de esos problemas,
El cumplimiento de esa in- no sólo como un intento metodoló-
tencionalidad de la filosofía generó gico de construcción de la filosofía
nuevos problemas al interior de la como ese saber de los fundamentos
misma; en efecto, está en la naturaleza sino como una concepción de la rea-
de los principios el ser absolutos, es lidad que intenta dar cuenta de dichos
decir, el ser independientes de cual- problemas 1 . Por ello a la dialéctica
quier otro aspecto de la realidad y el le son esenciales los conceptos de
explicarse por ellos mismos. Si ellos totalidad, de absoluto, de identidad;

-167-
DIALÉCTICA

por ello su problema esencial es el Esa distinción de contextos


de la relación del ser y del pensar, del permite proponer un sentido general
objeto y del sujeto al interior de la del concepto de dialéctica correspon-
misma totalidad; por ello, igualmente, diente al uso del mismo en la Filo-
apunta a la dinámica que explica no ' sofía Latinoamericana y un sentido
sólo la constitución de la realidad bajo restringido pertinente al ámbito de la
todos sus aspectos sino al proceso por Filosofía de la Liberación. En ambos
el cual se desarrolla el conocimiento contextos, empero, la utilización del
que da cuenta de ella 2 • concepto de dialéctica presenta las
siguientes características:
Las respuestas que ha dado la
filosofía a tales problemas no han sido a) Refleja los aspectos básicos
agotadas. Han sido diferentes, cier- que se atribuyen a dicho concepto en
tamente, a través de toda la historia la reflexión filosófica europea:
de la filosofía, pero no exhaustivas y :
definitivas. Por ello en el concepto de : Como saber dialéctico, la filo-
dialéctica se descubre la historia de sofía es saber de la totalidad.
esos problemas y de las respuestas que La dialéctica implica una com-
se les han dado. En consecuencia, la prensión histórica y cambiante
dialéctica se revela como un concepto de la realidad bajo todos sus
sin contenido unívoco, sin definición aspectos.
esencial posible, cuyo sentido se es- Implica, igualmente, una con-
tablece necesariamente con relación cepción de la realidad como
a un contexto. En otros términos, no unidad de contrarios.
es posible determinar su contenido si
no es en relación con una época, un b) Esos aspectos que respon-
autor o un ámbito específico en el que den a un contenido básico del concep-
ha sido aplicado 3• to de dialéctica, no han sido asumidos
con base en una demostración previa
La Filosofía de la Liberación del concepto.
se presenta como un nuevo contexto
en la historia del concepto de dialé- En las líneas siguientes se
ctica. Con aquel nombre se designa pretende dar cuenta de estas afirma-
la reflexión filosófica que surgió en ciones, además de precisar las par-
Argentina a partir del gobierno de ticularidades que, con respecto a la
Onganía ( 1966), con una generación dialéctica, se presentan en la Filosofía
que se expresa por primera vez en el de la Liberación.
II Congreso Nacional de Filosofía en
Córdoba en 1972 4 y que desde allí A) Sentido general
se proyectó al ámbito más amplio de
la Filosofía Latinoamericana, en ten- El uso habitual del concepto
diendo por ésta la filosofía que desde de dialéctica por parte de los filósofos
1840 se presenta con Juan Bautista latinoamericanos, revela la presencia
Alberdi como pensamiento referido del contenido básico que se le asigna
a la realidad particular de América comúnmente a dicho concepto en la
Latina '. filosofía europea, que, a su vez, es

-168-
Freddy Salazar

deudora del significado que a través B) Sentido estricto


de la historia de la filosofía se ha ido
como fosilizando hasta permitir, no Bajo este aspecto, se conside-
una definición, sino el enunciado de ra la dialéctica en el contexto de la
unas características generales que Filosofía de la Liberación. En esta
pueden señalarse como el sentido se pueden distinguir, según Horacio
intuitivo de tal concepto. Cerutti Guldberg9, las siguientes fases
o momentos que reflejan diferencias
Se dice que esas característi- teóricas internas con respecto al "pun-
cas conforman un sentido intuitivo to de partida del filosofar, el sujeto del
de la dialéctica porque se suponen filosofar, el método de la filosofía de
sabidas y, en consecuencia, el uso la liberación, la concepción misma de
del concepto aparece eximido de la filosofía" 10 :
sustentación o demostración. Por
ello, el sentido intuitivo del con- 1. El sector populista (llamado así por
cepto corresponde a un uso libre sus relaciones con el populismo pero-
del mismo 6 que permite aplicarlo sin nista) que comprende a su vez 11 :
muchas restricciones en contextos
y a realidades muy diferentes. Hay l. l. El dogmatismo de la ambigüedad
que señalar, además, que se da un concreta: G.R. Kusch, M. Casalla,
reconocimiento, en ese orden de Amelía Podetti, entre otros 12 .
ideas, de la influencia de Hegel y
especialmente de Marx en la deter- 1.2. El populismo de la ambigüedad
minación del sentido a tribuido a abstracta: J. C. Scannone, E. Dussel,
la dialéctica. Ese reconocimiento, O. Ardiles, entre otros.
también hay que señalarlo, obedece
en general a ideas vagas y no sus- 2. El sector crítico del populismo que
tentadas. Ello quiere decir, en suma, comprende:
que el uso general del concepto de
dialéctica en el ámbito de la filosofía 2.1. El subsector historicista: A.A.Roig.
latinoamericana, no está fundado Entre los latinoamericanos, Leopoldo
en un análisis riguroso del término, Zea es el más próximo a esta posición.
ni en su inscripción en un contexto Este sector se preocupó sobre todo de
filosófico que determine apodícti- la relación de la filosofía de la libera-
camente las connotaciones que se ción con sus antecedentes dentro de
le atribuyen 7 • la tradición de pensamiento argentino
y latinoamericano 13 .
Por contrapartida, mas allá
del uso intuitivo, se presenta tam- 2.2. El subsector problemático: ].S.
bién un tratamiento académico Croatto, M.I. Santos, H. Cerutti, G.
del término que es producto de la Ortiz. Entre los latinoamericanos, se
reflexión y del análisis de los textos aproximan a este sector H. Assmann y
pertinentes. En tales casos, empero, A. Salazar Bondy14. Hicieron énfasis
no se transcienden, por lo general, sobre la dimensión epistemológica de
los cánones y exigencias que son las filosofía de la liberación, tratando de
propios de la filosofía europea 8 • cuestionar y verificar el discurso 15 .

-169-
DIALÉCTICA

Ahora bien, tan solo en el ¡ DELIMITACIÓN


subsector de la "ambigüedad abs- ' CONCEPTUAL
., 1
tracta" se da una consi d erac10n 1

detenida del método de la Filosofía


de la Liberación que se considera ~ La analéctica es el nombre que
como un momento y a la vez, como ! se le da al 1m'todo de la Filosofía de
una alternativa frente a la dialéctica la Liberación por parte de algunos
(o ética ontológica en su terminolo- ! de sus representantes pertenecientes
gía) y que llaman analéctica (o ética al sector del populismo de la ambi-
metafísica) 16 , El término analéctica güedad abstracta, según Cerutti. La
fue introducido, según Cerutti, por ¡ exposición más amplia y detenida del
Juan Carlos Scannone 1;_ Según: mismo concepto se debe, como se
Enrique Dussel, a quien se debe el ' anotó, a E. Dussel. Este afirma que en
estudio más avanzado y extenso de 1 la constitución de dicho método hay
dicho concepto y para quien consti- 1

que reconocer como precursores a los


tuye la clave de su ética, vale decir, i críticos de Hegel (Feuerbach, Marx,
de la Filosofía misma de la Libera- Schelling) y a Heidegger y Levinas
ción, dicho concepto fue tomado, principalmente. A tales precursores
aunque con otro sentido, de la obra se debe la perspectiva antropológico-
de B.Lakrebrink: Hegel dialchtischc ética de la Filosofía de la Liberación y,
Ontologic und die Thomist isch Ancilc- en particular, el concepto de alteridad
hti /1 (1955)IH_ elaborado por Levinas, que constituye
el punto de partida de la analéctica 2 5.
Además de Dussel y Scannone, 1

el término de analéctica es usado y 1

Esta se presenta como un mo-


asumido para significar el método ; mento y como superación, a la vez,
propio de la Filosofía de la Liberación, de la dialéctica hegeliana 26 y supone
aunque con pequeñas variaciones en una concepción de la filosofía en la
1
-

algunos casos, por O. Ardiles 1", J que se afirma la correspondencia entre


Rubio Angulo 2'', E. Hermíndez 21 , M.C. la filosofía y la realidad 27 . El método
Casalla 22 , etc. 1
analéctico, en igual forma que la
dialéctica con respecto a la filosofía
Enrique Dussel ordena el estu- \ hegeliana, se refiere indisociablemente
dio de la filosofía latinoamericana, en al contenido de la Filosofía de la Li-
una perspectiva ciertamente diferente : beración. Aunque ésta pretende ser,
de la de Cerntli, a partir de la Filo- . fundamentalmente, una propuesta éti-
sofía de la Liberación que considera ' co- antropológica 28 , tiene sin embargo,
como la verdadera y única filosofía de una base metafísica en cuanto remite,
1

América Latina o simplemente como como en la metafísica tradicional. a


la Filosofía Latinoamericana, cuyo la indagación por los principios de la
método es la analéctica. Esta culmi- realidad. Esta intencionalidacl de la
na y supera, según él, la crüica de la , reflexión se expresa aquí en el estu-
filosofía y de la dialéctica hecha por dio de los conceptos de analogía y ele
Feuerbach, Marx, Kierkegaard, Sche- alteridad sobre los cuales se furnia la
lling, Heidegger, Levinas ... 2 ' e instaura crítica y superación de la diait'ctica y
una nueva época de la filosofía 21 . la constitució11 ele la analéctica 2''.

-170-
Freddy Salazar

"El método dialéctico es el ontológica es posible porque el ente


camino que la Totalidad realiza en es analógico o porque se le predica
ella misma: desde los entes al fun- el ser analógicamente; es decir, el ser
damento y desde el fundamento a está siempre más allá y el movimiento
los entes"'º. Ello quiere decir que es posible como actualidad de la po-
la dialéctica expone el proceso por tencia. Pero al fin el ser es uno y el
el cual la totalidad (concepto que en movimiento ontológico fundamental
Hegel es también el ser, la realidad, el es 'la eterna repetición de lo Mismo'.
sistema) se diferencia al interior de La mera analogía del ente termina por
ella misma, permaneciendo, empero, ser la negación de la historicidad" 34 .
en su identidad. Totalidad, identidad
y diferencia constituyen una tríada Si se afirma, en cambio, la alte-
conceptual básica de la "ontología" ridad o lo otro como distinto de dicha
hegeliana (términos de Dussel), con totalidad o identidad del ser, éste ya no
respecto a la cual se opera el distan- tendría un sentido análogo o, mejor,
ciamiento de la analéctica (o de la la analogía se extendería al mismo
metafísica, según el mismo Autor) 31 . ser y expresaría no ya la identidad
Distanciamiento que se da acudiendo del otro en el ser sino la presencia de
al concepto de alteridad para significar una realidad que le es ajena, extraña
la presencia, no ya de la diferencia y que no se comprende a partir del
en la totalidad, sino de lo distinto mismo ser 35 . Para acceder a ella hay
mas allá (meta-física) de ésta. Dicho que dejarla oír, escucharla para reco-
distanciamiento sólo es posible si se nocer lo que dice de ella misma: "El
rompe, a la vez, con el sentido de la saber oír es el momento constitutivo
analogía aristotélica 32 . del método mismo" 36 .

Ésta, en efecto, se presenta La referencia a la alteridad


como una modalidad del ser que como lo radicalmente distinto del
permite predicarlo de él mismo (de la ser, constituye el punto de partida del
totalidad) y del ente al mismo tiempo método analéctico que se considera
y sin salir del ámbito del ser o, lo que como un método nuevo para una
es lo mismo, de su propia identidad. nueva filosofía, la de la liberación;
"El ser se dice analógicamente" se la analéctica continúa siendo, em-
afirma con Aristóteles. Por ello, en el pero, un momento en el desarrollo
ente se descubre lo otro del ser que de la dialéctica porque ésta sigue
no es ajeno o externo a él mismo. Es estando presente en la Filosofía de la
decir, por la analogía atribuida al ser, Liberación bajo la exigencia de una
este se revela como uno y múltiple, comprensión de la realidad como
como diverso e idéntico a si mismo 33 . unidad de contrarios y en constante
En esta particularidad de la analogía transformación que se descubre al
se basa Dussel, por lo demás, para interior de la analéctica 37 .
considerarla como el fundamento
de la dialéctica, método que permite Esa exposición metafísica de
conocer la realidad como totalidad los fundamentos teóricos de la Filo-
e identidad del sujeto y del objeto, sofía de la Liberación, al aplicarse a la
del pensar y del ser: "La dialéctica realidad de los pueblos latinoamerica-

-171-
DIALÉCTICA

nos, genera una interpretación propia la verdadera expresión de la totalidad,


y nueva de estos últimos: el esquema frente a la cual no queda otra alternati-
ontológico de la dialéctica hegeliana va que la dependencia cultural, social,
se descubre como la base teórica e política y económica. Al ser negado
ideológica de la dominación de los dicho esquema por la analéctica, se
países europeos sobre América Latina abre la posibilidad teórica del recono-
y, en general, sobre el tercer mundo. cimiento y expresión propia de lo otro
Este no representa en ese contexto y lo distinto, no sólo en las relaciones
ninguna distinción real con respecto a entre las naciones sino al interior de
la racionalidad europea que, en el mis- las relaciones sociales de los pueblos
mo ámbito se toma como la única y latinoamericanos 18 .

NOTAS

1 "La dialéctica, como veremos, es un método (del griego meta-hodos)


o un camino, un movimiento radical e introductorio a lo que las cosas
son. El método dialéctico es el inicio mismo. La cuestión ha sido plan-
teada por todos los grandes filósofos. Pero, tantas serán las dialécticas
cuantos sean los sentidos radicales del ser". Enrique Dussel, Método
para una Filosofía de la Liberación. Superación analéctica de la dialéctica
hegeliana. Salamanca, Sígueme, 1974, p.15. Cf.también pp.17-31.
2 "Los dos pilares en los cuales se funda el método dialéctico (según Hegel)
son la afirmación de la identidad del sujeto y del objeto en el concepto
o en el pensamiento objetivo propio de la razón especulativa, por una
parte y, por la otra, la afirmación de la unidad de los contrarios (lo
negativo y lo positivo) y de lo negativo como el motor del movimiento
del concepto". Freddy Salazar P. "Reflexiones en torno a la dialéctica",
p. 22. (Se cita según el texto original).
3 E. Dussel, op. cit. p.15.
4 E. Dussel, "La Filosofía de la Liberación en Argentina. Irrupción de
una nueva generación filosófica". (En Revista de Filosofía Latinoame-
ricana. Julio-diciembre 1975, número 2, pp.219-220. Según el Autor,
comprenden dicha generación:Juan Carlos Scannone, Osvaldo Ardiles,
Aníbal Fornari, Mario Casalla, Alberto Parisi, Enrique Guillot, De Zan,
Kienen, Cerutti, A.Roig, E.Dussel.
5 Leopoldo Zea, "La historia de la Filosofía Latinoamericana". En Análisis
(Bogotá) Nº 32, vol. XV (1980), p.15.
6 Refiriéndose a Abelardo Villegas, a Leopoldo Zea y a Sambarino, Fran-
cisco Miró Quesada anota: "Es interesante observar cómo se repite, en
el lilosofar latinoamericano, la tendencia a utilizar la dialéctica de ma-
nera libre, rompiendo los esquemas congelados que se encuentran en la
tradición hegeliana marxista''. (f: Miró Quesada: Proyecto y realizacicín
dt'l filosofar latinoamerirnno. México, EC.E., I 981, p.185). El uso libre,

-172-
Freddy Salazar

según el contexto, permite utilizar el concepto introduciendo diferencias


en su aplicación pero conservando un fondo común de sentido.
7 Pueden citarse como ejemplos del uso genérico:
- Abelardo Villegas: "América Latina en la encrucijada", (pp.184 ss).
Se apoya en la dialéctica para comprender la relación entre las ideas y
la realidad social.
- Leonardo Boff: "Qué es hacer teología desde América Latina". Servicio
de Documentación. 20. MIEC.JECI. Marzo de 1977. Integra el concepto
de dialéctica en la reflexión sobre Teología de la Liberación. Lo usa para
significar la circularidad entre la reflexión y la praxis (p.20), así como
la distinción de momentos contrarios y su mutua implicación; con esta
base teórica distingue formas diferentes de hacer teología (p.32).
- Xosé Miguélez: La Teología de la liberación y su método. Barcelona:
Herder, 1976, p.100. Utiliza la dialéctica para designar una división
tripartita ("estructura ternaria") en el método de la teología de la
liberación, división que es común, dice, a Gustavo Gutiérrez y Hugo
Assmann.
-J. Severino Croatto: Una hermenéutica da liberdade. Sao Paulo, Edi<;oes
Paulinas, 1981. "Podemos falar de una dialetica circular entre aconte-
cimento e palavra, entre querigma e situac;:ao, entre a palavra bíblica
sobre a libertac;:ao e nossos processos de liberta<;ao" (p.16).
- E. Dussel: "Tesis provisorias para una Filosofía de la Liberación" (en
Praxis latinoamericana y Filosofía de la Liberación. Bogotá: Ed. Nueva
América, 1973. Se refiere a la dialéctica como a un saber radical, es decir,
cuyo origen y destino es práctico (p.21-22) o como el paso del todo a las
partes (p.35).
- J.C. Scannone: "Hacia una dialéctica de la liberación. Tarea del pensar
practicante en Latinoamérica hoy" Stromata. (Argentina). Año XXVII.
Enero-marzo 1971, número 1, pp.23-60. Habla de la dialéctica dialógica
como de un nuevo método que supera las limitaciones de la dialéctica
y, sin embargo, continúa usando este último término (como también lo
hacen Dussel (Op. cit. por ej.) y RoigA.A.: "Función actual de la filosofía
en América Latina". Ponencia al Colegio Nacional de Filosofía de Morelia
(México), 4-9, agosto 1975, p.63) apelando al sentido o fondo común
que se le atribuye a dicho concepto (pp.51-52).
8 Pueden ser ejemplos de dicho tratamiento académico del término, los
siguientes trabajos:
- Díaz ].A. "La dialéctica hegeliana como método" (en Cuadernos de
Filosofía y Letras Vol. Vll, número 1-2. (Bogotá), Enero-junio de 1984,
pp.61-81).
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-Astrada Carlos: "dialéctica y positivismo lógico". Humanitas (Tucumán)
(9): 1961, pp. 5-91.

-173-
DIALÉCTICA

- Orozco Silva Luis E.: "Significación de la dialéctica para la lógica de


las ciencias sociales". Cuadernos de Filosofía y Letras, (Bogotá), 2 (6):
junio 1979, pp.83-97.
9 Cerutti Guldberg H, Filosofía de la Liberación latinoamericana. México,
FC.E. 1983, pp.186 SS.
10 Op.cit. p.188.
11 Cabe notar lo extraño de la terminología utilizada en la clasificación,
como también que ella implica una toma de posición política contra
el populismo por parte del Autor (Cf. pp.186-189) y contra "el sector
populista" de la Filosofía de la Liberación (pp.199-203). Ello no obsta
para que el Autor atribuya a los distintos sectores diferencias temáticas
específicas (p.203).
12 Op.cit. p.205.
13 Op.cit. pp.202-203.
14 Op.cit. pp.203-204.
15 Ibid.
16 Op.cit. p.230; sobre las consideraciones metodológicas de los otros
subsectores, véase op.cit. VI, "Metodología y sujeto del filosofar" pp.
226-248.
17 Op.cit. p.230, nota 14. Scannone la llama también dialéctica dialógica.
Cf. Scannone J.C., "Hacia una dialéctica de la Liberación. Tarea del
pensar practicante en Latinoamérica hoy". Stromata, (Argentina). año
XXVII (1971), Nº 1, p.48.
18 Dussel E. "El método analéctico y la Filosofía Latinoamericana" (En
América Latina: dependencia y liberación. Buenos Aires: Fernando García
Cambeiro, 1973, p.127, nota 32.
19 Ardiles O. "América Latina, Tercer Mundo. Epistemología y nueva racio-
nalidad". Exposición realizada el 18 de octubre de 1975 en el Centro de
investigaciones latinoamericanas de Mendoza. Citado por H. Cerutti G.
en Filosofía de la liberación latinoamericana (Pgs.43-45)- La analéctica
aparece como oposición de exterioridad-totalidad, nueva racionalidad-
racionalidad y como crítica: "La crítica desde atrás, desde dentro, desde
lo nuevo, es la analéctica (. .. ). Esta crítica supone la "exterioridad", el
desde fuera". Ibid. p.45.
20 Jaime Rubio Angulo, "Elementos metodológicos para la Filosofía Lati-
noamericana". En Análisis (Bogotá) 23,vol 10 (1976) pp.63-88. Funda
la propuesta de una Filosofía Latinoamericana, como filosofía herme-
néutica, en la crítica de la filosofía de la identidad del ser (Parménides,
Hegel) de la ontología europea y en la adopción de una metafísica que
reconozca la diferencia del otro. En dicha propuesta, que resalta la fun-
ción hermenéutica, están presentes las tesis fundamentales de Dussel,
Scannone, Casalla, Ardiles, etc. Véase también]. Rubio Angulo: "Her-
menéutica y crítica en el filosofar latinoamericano actual". En Análisis
(Bogotá) 32, vol XV, (1980) pp.129 y sgts.
21 E. Hernández: "Concepto y método en la Filosofía Latinoamericana
actual". En Análisis (Bogotá) 32, vol.XV, (I 980) p.14 3 sgts.

-174-
Freddy Salazar

22 M.C. Casalla: "Filosofía y cultura nacional en la situación latinoameri-


cana contemporánea". En Nuevo Mundo (Bs.As.) t.3, número 1 (1973)
pp. 36-50.
23 E. Dussel: "El método analéctico y la Filosofía Latinoamericana". (En
América Latina: Dependencia y liberación. Buenos Aires: Fernando García
Cambeiro, 1973, pp.109-112.
24 E. Dussel: "La Filosofía de la liberación en Argentina. Irrupción de
una nueva generación filosófica". Revista de Filosofía latinoamericana 2
(1975) p.221.
25 "La crítica a la dialéctica hegeliana fue efectuada por los post hegelianos
(entre ellos por Feuerbach, Marx y Kierkegaard). La crítica a la ontología
heideggeriana ha sido efectuada por Levinas. Seguiremos indicativamen-
te el camino de ellos para superarlos desde América Latina. Ellos son la
prehistoria de la Filosofía Latinoamericana (. .. ). La superación real de
toda esta tradición (. .. ) ha sido la filosofía de Levinas, todavía europea
y excesivamente equívoca. Nuestra superación consistirá en repensar su
discurso desde América Latina y desde la analogía". E. Dussel: Método
para una Filosofía de la Liberación. p.176.
26 E. Dussel resume así los pasos dados en el desarrollo de la dialéctica:
"En primer lugar, el discurso filosófico parte de la cotidianidad óntica
y se dirige dialéctica y ontológicamente hacia el fundamento (. .. ). En
segundo lugar, demuestra científicamente (. .. ) los entes como posibili-
dades existenciales. Es la filosofía como ciencia, relación fundante de
lo ontológico sobre lo óntico (. .. ). En tercer lugar entre los entes hay
uno que es irreductible a una deducción o demostración a partir del
fundamento: el "rostro" óntico del Otro que en su visibilidad perma-
nece presente como transontológico, metafísico, ético. (. .. ). El pasaje
de la totalidad ontológica al Otro como Otro es analéctica, discurso
negativo de la totalidad, porque se piensa la imposibilidad de pensar
al otro positivamente desde la misma totalidad; discurso positivo de
la Totalidad, cuando piensa la posibilidad de interpretar al Otro desde
el Otro. Esa revelación del otro es ya un cuarto momento, porque la
negatividad primera del otro ha cuestionado el nivel ontológico que es
ahora creado desde un nuevo ámbito". E. Dussel: "El método analéctico
y la filosofía latinoamericana". p.114.
27 "Los supuestos de estas líneas son los siguientes: el discurso filosófico
no es un nivel abstracto o independiente de la existencia humana, sino
que, por el contrario, se encuentra inserto en la totalidad del quehacer
cotidiano. Por ello hemos de ver los condicionamientos que se ejercen
en el mismo discurso filosófico hasta transformarlo frecuentemente en
una justificación ideológica. Por ideología entendemos la expresión de
un pensar que en función práctica encubre más que descubre la realidad
que pretende significar". E. Dussel: "La Filosofía de la Liberación en Ar-
gentina. Irrupción de una nueva generación Filosófica". Op. cit. p.217.
28 "Lo propio del método analéctico es que es íntrinsecamente ético y
no meramente teórico, como es el discurso óntico de las ciencias u

-175-
DIALÉCTICA

ontológico de la dialéctica. Es decir, la aceptación del Otro como Otro


significa ya una opción ética, una elección y un compromiso moral: Es
necesario negarse como totalidad, afirmarse como finito, ser ateo del
fundamento como identidad". E. Dussel: Op. cit. p.115.
29 Op. cit. pp.115-118.
30 Op. cit. p.113.
31 "De lo que se trata ahora es de un método (. .. ) que parte desde el Otro
como libre, como un más allá del sistema de la totalidad; que parte en-
tonces desde su palabra, desde la revelación del Otro y que confiando
en su palabra obra, trabaja, sirve, crea". Ibid.
32 "La noción de analogía es ella misma analógica. La analogía del ser y el
ente (cuya diferencia es ontológica: la "diferencia ontológica") no es la
analogía del ser mismo (cuya diversidad es alternativa: la "distinción
metafísica"). Si el ser mismo es analógico los dos analogados del ser no
son ya diferentes sino distintos y de allí la denominación que propone-
mos(. .. ) de distinción metafísica". Op. cit. p.116
33 "Pero en último término, el contenido de la palabra "ser", el "ser en
cuanto ser" es idéntico a si mismo, es uno y "lo mismo". Si es verdad
"que puede predicarse de muchas maneras" con respecto al ente (. .. ) sin
embargo, es idéntico a sí mismo. El ser que se predica analógicamente
del ente, es él mismo (to auto, das Selbe). Op. cit. p.117.
34 "No se trata de que sólo el ser como fundamento se diga de maneras
analógicamente diferentes. Es que el mismo ser como fundamento de
la Totalidad no es el único modo de predicar el ser. El ser como más
alto (ano) o por sobre (ana) la Totalidad, el Otro libre como negatividad
primera, es analógico con respecto al ser del noein, de la razón hegeliana
o de la comprensión heideggeriana. La Totalidad no agota los modos
de decir ni de ejercer el ser". Op. cit. p.118.
35 Op. cit. p. 115.
36 Op. cit. p. 1 I 4.
37 Op. cit. p. 113.
38 Op. cit. p. 113.

-176-
Freddy Salazar

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-177-
DIALÉCTICA
DESAPARECEDOR/DESAPARECIDO
Roberto Fragomeno
Costa Rica

Palabras Clave - - - - - - - - - - - ~
ÉTICA - ÉTICA SOCIAL - ÉTICA DEL DISCURSO - DERECHOS
HUMANOS - ALTERIDAD - RACIONALIDAD - POLÍTICA
- REVOLUCIÓN - CAPITALISMO/SOCIALISMO - GLOBALIZACIÓN
- POSTMODERNIDAD - NIHILISMO - SOCIEDAD DE CONTROL

INTRODUCCIÓN cidos y desaparecedores son hijos de


la misma sociedad, y cómo de las con-
tradicciones de la sociedad burguesa,
Plantear una reflexión filosó- de la entronización de lo irracional,
fica a partir del "dato" social de des- la historia de América Latina de los
aparecedores y desaparecidos puede últimos años nos dejó instalados en
resultar osado y hasta impertinente si la barbarie de la civilización.
no se recorren las mediaciones nece-
sarias para construir un concepto que
permita pensar esta problemática. DELIMITACIÓN
CONCEPTUAL
La tragedia social que vivió
y vive la mayoría del pueblo latino-
americano durante los años '70 y '80, En función del espacio del que
fue el paroxismo, la exacerbación, disponemos, vamos a trabajar algunas
entronización y triunfo en la destruc- mediaciones: la económica, la subje-
ción de aquella razón (¿sinrazón?) tiva y la ética, a sabiendas de que de-
civilizatoria que sonriente bajaba de jamos de lado dos que consideramos
los barcos europeos. importantes: la jurídica y la religioso-
teológica. En la cuestión jurídica, el
Lo dialéctico, para que sea au- tema partiría por la pregunta acerca
ténticamente lógica de la liberación, de la justicia y obligaría a rediscutir
no debe abandonar a su suerte a la la temática desde Antígona; y la cues-
razón. Es relativamente sencillo decir: tión religioso-teológica, nos llevaría
"aquí los torturadores, allí los tortura- a redefinir el concepto de "muerte de
dos", "allí los desaparecidos, por allá Dios" desde una perspectiva latinoa-
los desaparecedores". Lo complejo mericana. Por las limitaciones ya di-
está en dar cuenta cómo y por qué, chas, desarrollaremos tres de las cinco
torturadores y torturados, desapare- mediaciones ya mencionadas.

-179-
DIALÉCTICA DESAPARECEDOR/DESAPARECIDO

l. Aspectos económicos ¿ Cómo es posible esto? Los


teóricos burgueses responden en-
La importancia que el pensa- columnados detrás de A. Smith: "la
miento de Marx tuvo y tiene en la filo- mano invisible" del mercado. Marx
sofía latinoamericana viene dada por el ve en este sistema una profunda irra-
hecho de haber sido el primer filósofo cionalidad que despilfarra energías
que dio cuenta (y ya en su juventud) productivas y que siembra por doquier
del núcleo contradictorio de la socie- la pauperización y el desempleo.
dad burguesa y su racionalidad.
El Obrero se vuelve tanto más
En el origen del modo de pobre cuanta más riqueza produce ... La
producción capitalista, el que Marx depreciación del mundo de los hombres
llama "acumulación originaria", aumenta en razón directa al incremento
está la expulsión de los campesinos del mundo de las cosas (Marx, 1984).
de sus tierras para transformarlas
en pastizales para los rebaños que La escisión es también inver-
suministrarían lanas para la indus- sión e institucionalización: propiedad
tria textil; el tráfico de esclavos; la privada de los medios de producción
destrucción paulatina de las cor- sobre la base de la división del trabajo:
poraciones de artesanos en favor unos dirigen, otros son dirigidos; unos
de industriales y comerciantes; y ordenan, otros obedecen; unos viven
el despojo de riquezas de América sin trabajar, otros viven trabajando.
Latina que es incorporada (al igual
que hoy en el nuevo orden) como Un mundo así, donde no son las
un inmenso depósito de materias necesidades básicas del individuo, ni
primas con población sobrante. las necesidades colectivas los criterios
de racionalidad y organización social
La "acumulación primitiva" sino la lógica de la ganancia por medio
pone en marcha el primer paso de la de la competencia, resulta que:
estructura de la desaparición: la esci-
sión que es relación del hombre con En el estadio de la economía,
el trabajo por un lado y, por otro, la la actualización del trabajo aparece,
escisión en la misma sociedad: obre- respecto del obrero, como la pérdida de
ros por un lado y propietarios de los la realidad de éste; la objetivación como
medios de producción por otro. la pérdida del objeto, y la apropiación,
como la alienación, como desapropia-
El proceso de trabajo (que miento (Marx, 1984).
consumará la escisión) tiene un factor
subjetivo (la fuerza de trabajo) y un Esta pérdida, esta alienación
factor objetivo (medios de produc- descrita por Marx no debe ser enten-
ción) que sólo aparentemente se en- dida como una cuestión mecánico-
cuentran y celebran un contrato entre natural del tipo causa-efecto. Es una
iguales y en donde cada uno busca y cuestión histórica y, por eso, dialec-
decide lo que cree le conviene más: tica, pues el resultado del trabajo
buscando cada cual su propio prove- alienado es la propiedad privada y,
cho se logra el bienestar general. una vez que ésta se ha constituido e

-180-
Roberto Fragomeno

institucionalizado, es el medio para la individualismo burgués; éstos, pen-


permanente alienación del trabajo. samos nosotros, se han instalado en
las sociedades latinoamericanas como
Sobre estos supuestos enrique- aparatos represivos internalizados.
cidos con ulteriores estudios sobre
Marx y una constante información Si hay una imposibilidad
acerca del desarrollo capitalista en exterior que divorcia al individuo
América Latina, tomó fuerza la teoría de la comunidad, pues sus estruc-
de la dependencia como un intento turas le son impuestas, esa impo-
genuino de criticar la irracionalidad sibilidad exterior se reproduce al
económica en la región. interior del individuo, que repite
así un mundo idéntico a sí mismo,
Tanto el nihilismo como el desgarrado.
positivismo acuerdan la inevitabili-
dad del desarrollo capitalista, sea con ¿ Qué es lo que desaparece
su confianza en la técnica, sea en la aquí? Desaparece la capacidad de ar-
aceptación del "desencantamiento del ticular un lagos liberador, desaparece
mundo" (M. Weber). la palabra y el símbolo se disocia de
la cosa. El individualista imita la co-
Esta irracionalidad es la nega- herencia, se libera en su imaginación
ción práctica de todos los logros de de la incompatibilidad social.
la humanidad, y aceptar este rebaja-
miento en aras del desarrollo no es El desaparecedor lo distancia
sino la aceptación cínica y cruel de de su propio ser para que pueda ser.
la tragedia social. Tragedia que, vale La desaparición interior es el resul-
la pena insistir, tiene en su base una tado de una desaparición política, lo
causa económica: la desaparición de sedimentado de una historia trágica
personas se realiza en función de la y un terror que lo retrotrae hacia
perpetuidad de un sistema de desapa- adentro.
rición. La explotación del trabajo, la
transferencia de valor desde nuestros Desaparece la capacidad de
países a los centrales a través de un escucha. El desaparecido real como
mecanismo que se retroalimenta mediador extraño, que habla otro
(deuda externa) no es otra cosa que un idioma, un anónimo, pero que queda
mecanismo de desaparición de vida. como residuo real.
Las desapariciones del Estado terro-
rista son las mismas desapariciones El individuo que ha visto des-
de la economía burguesa, sólo que por aparecer su subjetividad en la subje-
otros medios. tividad de otro negocia una salida, un
tránsito inmóvil que va de lo conocido
a lo posible.
2. Subjetividad (o el
asalto al individuo) ¡Lo posible es el terror abstrac-
to que evoca otro concreto! Lo posible
Hegel, en la Fenomenología hace desaparecer la individualidad en
del Espíritu, mostró los límites del la racionalidad calculística al punto

-181-
DIALÉCTICA DESAPARECEDOR/DESAPARECIDO

tal, y económicamente hablando, que i el cual el sistema se protege del


en la sociedad vigilada la individuali- individuo dentro del individuo
dad sólo es una posibilidad de error mismo, y
y de transgresión al funcionamiento
racional y calculado de la máquina. 2) el individualista sin individua-
lidad que se protege a sí mismo
La matemática da al sistema protegiendo a la maquinaria
su aparente grado de solidez y, como desaparecedora de la que es
tal reemplaza a la teología, y a la vez víctima proyecta al exterior la
oculta la contradicción sobre la que desaparición concreta, esa que
está montado. Su destino es la formali- tiene miles de rostros y miles de
zación teórica y la barbarie política. nombres como "problema forá-
i
neo", como "ideología apátrida".
La formalización, en todas 1 Invierte así la desaparición de
sus posibilidades, apunta a que la , sí mismo al tratarla como pro-
realidad aparezca fragmentada en la blema externo. No elimina el
conciencia individual. Esta escisión problema; por el contrario, lo
produce, por un lado, al especialista materializa pero sin liberación,
como hijo dilecto de la formalización ' sin aparición de sí y de los otros;
1
científica y, por otro, al desaparecido ¡ sin conciencia y sin historia;
que está adentro como terror concreto i
1

y al desaparecido que está afuera como 3) el desacuerdo entre el indi-


terror abstracto. vidualista sin individualidad
con el desaparecido (tanto
El especialista es, así, un indi- de afuera como de adentro)
vidualista sin individualidad que en su es el fundamento del acuerdo
"desvarío presuntuoso" cree ser el lugar entre aquél y la democracia
originario y puro que vive en la sociedad formal burguesa, regulado y
desgarrada como estado natural. · conformado por las leyes de la
concurrencia capitalista.
La democracia formal ratifica
esta escisión en la individualidad que La filosofía positivista es la re-
el terror concreto abrió (y convirtió en , presentante teórica del individualista.
abstracto), y en este vivir como "natu- : Siendo una mutilación de Kant, el
ral" el mecanismo de la desaparición positivismo cree encontrar la razón
1

se encuentra el fundamento de todo ' en conceptos que retienen la forma del


sometimiento económico, político y movimiento de lo real. Como desprecia
cultural. la individualidad, que es el contenido
del individuo, no se hace cargo del pro-
El hombre que ha sido víctima ceso social. Sólo lo piensa, tragándose
de la maquinaria desaparecedora que así la creatividad y la potencialidad
ha triturado su subjetividad, no sólo transformadora propia y del otro.
queda como víctima, sino que:
En la trama salvaje de la so-
1) el individualismo sin indivi-1 ciedad caníbal, el individualista sin
dualidad es el mecanismo por individualidad no sólo pierde su capa-

-182-
Roberto Fragomeno

cidad de transformar la sociedad y su ocupan de eso; este hombre se somete


memoria histórica, sino que también a lo absoluto para ser libre.
se convierte a sí mismo en desapareci-
do móvil y desaparecedor en potencia: El yo del desaparecedor enmu-
su yo es desaparición. dece y obedece bajo la voz del dogma y
de la orden. Renuncia a su libertad y la
En su individualismo, el des- conquista obedeciendo órdenes. Sólo
aparecido obedece al desaparecedor: la orden y los valores absolutos son
no ver, no hablar, no escuchar y no la libertad absoluta. El desaparecedor
actuar. parece ser dueño y señor absoluto de
vidas y destinos (y bienes económi-
Creer entonces que su indi- cos) pero en realidad él encarna otra
vidualidad no tiene origen, darle la libertad, no la propia.
razón al victimario sin asumir su
condición de víctima. Caer en la El desaparecedor puede tener
trampa de la escisión social como si intenciones, no proyectos. "Salvar a la
la desaparición fuera un problema patria", "a la civilización occidental y
ajeno que, sin embargo, es grabado cristiana", "al ser nacional", "a nues-
a fuego en la memoria colectiva: no tros sagrados valores", etc ..
poder ser en totalidad (personal y
social) para poder seguir siendo en Por otro lado, el cautivo no es
parcialidad, sin individualidad y sin el desaparecido, ni el sujeto atado a la
comunidad. mesa de torturas, ni el niño robado.
¡El cautivo es el desaparecedor! Él ha
perdido su autonomía, recibe y ejecuta
3. El fracaso de órdenes. Órdenes absolutas, intempo-
la ética rales, obviamente no cuestionables y
mucho menos punibles.
El fracaso de la ética es uno de
los más difíciles de resolver. Si la vida Redimir al hombre se transfarma
económica, social y política está mar- en exterminar al enemigo del hombre
cada por una intrínseca irracionalidad, encamado en el adversario. El sacrificio
la ética muestra el quiebre de la comu- como holocausto que purificará a la huma-
nidad de la siguiente forma: impunidad nidad para un futuro nuevo, asume incluso
por socialización de las culpas. la propia destrucción como paso necesario
hacía este gran sacrificio en pos de la hu-
Para la metaética irracional, el manidad (Hinkelammert,1987).
yo del desaparecedor es puesto desde
fuera. Por tanto, el desaparecedor El desaparecido, por el contra-
actúa por necesidad, por los valores rio, no sólo tenía intenciones, ¡quería
supremos y trascendentes que se le resultados! El yo del desaparecido no
imponen con fuerza objetiva. es un yo. Es un yo habitado por los
otros, es un nosotros.
Retorna al primado de la esen-
cia sobre la existencia. El hombre no La existencia y la libertad de
es el resultado de su actividad, otros se los otros son la condición de posi-

-183-
DIALÉCTICA DESAPARECEDOR/DESAPARECIDO

bilidad de la existencia y la libertad Vivimos desapareciendo. El


de su propio yo. La libertad del otro desaparecido hace la historia porque
no es el límite de su libertad, sino el es lo no-advenido. Él es no-ser. El
lugar donde se verifica y realiza la todavía no ha llegado a ser.
propia libertad. Esta conciencia ética
fue guardada celosamente tal como La filosofía latinoamericana
solía hacer el pueblo bíblico cuando no habla de los desaparecidos como
sobrevenía una tragedia, llenando de objetos, porque lo que ha desapareci-
cenizas sus cabezas. do y desaparece es parte de nosotros
mismos que regresa como recuerdo,
Hay cabezas blancas que apa- como dolor, como indiferencia, incer-
recen, se muestran en la plaza. Su tidumbre y miedo.
concepto es el de recuerdo; su fun-
ción, ser memoria colectiva. Memoria Tanto lo destruido como lo que
colectiva que no está petrificada. Se quedó en pie han quedado girando en
mueve, camina y al caminar se nie- torno a este vacío, a estas ausencias.
ga, niega el duelo porque no da por Nada ha llenado esta falta y cuando se
muerto al desaparecido. Recupera, ha creído en la satisfacción sólo se ha
por tanto, el movimiento de aquel encontrado vida ausente.
que ya no está.
Nunca antes estas figuras de lo
Pero su movimiento es circu- vivo y lo no vivo habían aparecido tan
lar, esto es, la imagen también rígida dialécticamente entrelazadas y tan fi-
de una historia que espera su realiza- jas como estrellas en el firmamento.
ción, de una historia que al devenir
por el mismo lugar una y mil veces Unidas y desunidas, caminan-
muestra su trabazón ética. Es historia do por las mismas calles pero por
no resuelta. veredas opuestas, estas siluetas, por
un lado vivas pero desaparecidas y,
por otro, anuladas pero impunes, son
cristalizaciones de un mundo sin plan,
4. Conclusión ( que una historia desgarrada, el desapare-
no quiere concluir) cido no está vivo y el impune no está
anulado; y sólo en esta desgarradura
En América Latina primero está el motor de la liberación.
desaparecieron los autóctonos, sus
culturas, sus religiones, sus recuerdos, Si la tragedia y el miedo no
sus nombres y el mundo que habían mueven al pensamiento liberador, no
nombrado. habrá preguntas que destotalicen la
mismidad, quedará un pataleo obs-
Luego fueron desapareciendo tinado, un desahogo cómodo para
los proyectos de los humildes, sus cobardes e indiferentes.
palabras, sus esfuerzos.
En esta búsqueda sin certezas,
Desaparece, también, la mone- nada es vano, nada está de más. Cada
da, por la inflación. gesto, cada sueño, cada palabra y

-184-
Roberto Fragomeno

cada silencio hacen sentir su efecto sensible: siente dentro de los límites
en esta historia de tragedias y espe- fijados por la culpa y la asimulta-
ranzas. neidad compulsiva; pero también
piensa dentro de los límites que la
La aparición del desaparecido conciencia vencida y convencida le
no es el límite del proceso liberador, impone. Simplemente actúa dentro
sino el momento en que ésta se ve- de los parámetros que la división del
rifica y resplandece. La Liberación trabajo le pauta aun cuando este pro-
es la realización del proyecto del ducto histórico, el trabajo asalariado,
desaparecido. tiende a su auto-abolición.

Pero que nadie se engañe en La invisibilización de los sen-


esta búsqueda. La razón liberadora tidos y significaciones de la utopía
no pierde de vista el fracaso; nuestra constituyente encuentra, en el indi-
búsqueda puede resultar defraudada, viduo sin individualidad, su segura
pero es el fin el que le da cohesión a persistencia: falsa extensión de la
nuestra racionalidad en esta época de conciencia, información sin cono-
desteleologizaciones. cimiento concomitantemente a la
restricción del cuerpo como locus del
La latencia de la desaparición
deseo. Así, áreas periféricas y parcia-
sigue aquí.
les de pertenencia donde se accede a
zonas de realidad perimetrales que
Aún así: non omnis confundar.
coinciden con la escisión y le son
funcionales.
En nuestro último trabajo, la
Utopía constituyente (2001) hemos
Funcionalidad analógica, en-
elaborado más ampliamente la cues-
tonces, entre globalización excluyente
tión del individuo sin individualidad
e individuo sin individualidad. No
como el resultado sedimentado de una
historia trágica, de la desaparición. puede hacer reducción de una a otra
Sólo desde aquí se puede articular porque se perdería lo específico de
dialécticamente la posibilidad de la una y otra. La escisión y exclusión
emergencia del individuo como indi- del individuo sin individualidad es
vidualidad, como mediación hacia la la contracara donde la globalización
multitud política, sujeto-objeto de la excluyente oculta la asimetría, deján-
utopía constituyente. dose ver sólo como competitividad.
En el individuo sin indivualidad, el
Aquí la ontología del no-te- cuerpo del otro sólo se ve como obs-
ner se muestra como desaparición. táculo. No es, por tanto, significativo
Cuerpos desaparecidos y cuerpos que de otro vínculo con lo real-social y
continúan en América Latina, pero otra apertura posible. Un obstáculo a
como cuerpos sometidos a un orden vencer que, una vez superado, otorga
global y excluyente impuestos por la beneficios personales y privados de
conciencia. El cuerpo del individuo lo que fue y es un resultado colecti-
sin individualidad, es decir, como re- vo. Por eso, puede existir y se torna
sultado de otros cuerpos desapareci- coherente la globalización excluyente:
dos, queda detenida en su extensión ! porque constituye una tipo de subje-

-185-
DIALÉCTICA DESAPARECEDOR/DESAPARECIDO

tividad contradictoria convencida de d) Como identificación reforzada,


su incapacidad estructural de romper es decir, como autismo masivo.
la "jaula de hierro". Como sometimiento al deter-
minismo objetivo, a la ciega
No mirar, saberse mirado mecánica del tráfico de cosas
y, por eso, desfallecer de miedo, e imágenes.
palidecer, inmovilizarse, caminar
hacia atrás, hacia el útero para ven- Frente a las significaciones de
cer allí a otro vencido. En la edad la utopía constituyente, la globaliza-
de la globalización excluyente, del ción excluyente es una totalidad ante-
¡quiero trabajar! Es tal el lazo de rior (como la tumba de Mons. Romero
dependencia que se crea a partir de en El Salvador o los cuerpos de los
la desaparición, que esta escisión y desaparecidos). Totalidad anterior le
exclusión no es resistida, la ausencia llamo, porque al querer ser como la
de individualidad para ganar 'com- globalización excluyente lo dictamina
petitividad' es una solicitud del indi- somos y no somos. Somos parte de la
viduo. Así, nadie reclama una expli- semejanza en la medida que reprimi-
cación por el carácter excluyente de mos lo específico. Por inversión, lo
la globalización: éste es un "hecho" específico consiste en no tener lo que
fundamental, no fundamentado por- el primer mundo tiene. En este no ser
que su fundamento ha, literalmente, plenamente semejantes y simultáneos
desaparecido. Pero, ¿acaso podrían con quienes nos mantienen en el ser
los agentes de la globalización radica nuestra pertenencia al campo
excluyente asumir, en su presunta de los semejantes: deseo insatisfecho.
normalidad positiva, la verdad de Somos iguales ante las leyes del merca-
la desaparición, de la que su apari- do; somos iguales ante el dominador,
ción y despliegue viven 7 ¿Pueden pero él, como fundamento de la ley
entonces, resistirse al simulacro? del mercado, no es igual a nosotros. El
Imposible, porque el simulacro es la reino del padre se ha desteologizado
fragmentación absolutizada: pero para fetichizarse en direcciones
polimorfas y, por eso, aparentemente
a) Como afirmación de la propia inaprensibles.
razón sin inclusión de la razón
de los vencidos. La desaparición de los cuerpos
como hecho biológico se prolonga en
b) Como rito para alejar otro tipo la desaparición cultural e histórica:
de racionalidad en la irraciona- porque, en el tránsito hacia la globa-
lidad. lización excluyente, la desaparición
queda confirmada por las institu-
c) Como cosmética para que, ciones sociales y estatales. Tener y
desde el individuo sin indivi- no tener es lo que da consistencia al
dualidad, se niegue el acceso a ser. La propiedad privada se estira
la verdad del desaparecido que en la propiedad privada del ser. Y el
desmiente la verdad de la ex- ser es un bien escaso. La exclusión
clusión como dato 'natural'. elabora, así, su propia ontología en el

-186-
Roberto Fragorneno

tener. Producción de individuos sin como modo de la inclusión (no hay


individualidad a través de las cosas; exterioridad); no tener, un reflejo
objetividad sin constitución de la biológico del mercado, sin comunidad
subjetividad. En el límite: exclusión y sin historia.

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DIALÉCTICA DESAPARECEDOR/DESAPARECIDO

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-188-
DIFERENCIA
Alberto Parisí
Argentina

~ - - - - - - - - - - - Palabras Clave
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - ALTERIDAD - CONTRADICCIÓN/
CONFLICTO - RACIONALIDAD - METAFÍSICA-ONTOLOGÍA
- NIHILISMO - EPISTEMOLOGÍA - ANTROPOLOGÍA - DIALÉCTICA
- PRAXIS - MODERNIDAD - POSTMODERNIDAD

INTRODUCCIÓN otras palabras, a partir de la categoría


de diferencia, se busca rearticular
una teoría de corte histórico-social,
El problema de la diferencia superadora de la dialéctica hegeliana
se refiere a la significación, al sen- y marxista positivista tradicionales,
tido del otro como irreductible en para abrirse a un pensamiento de
última instancia a la identidad de formas histórico-políticas y cultura-
lo-mismo que sustenta a la Totalidad les nuevo, que surgen en la reflexión
vigente y dominante; es decir, nos de los países periféricos respecto del
indica que la identidad del otro no se mundo central, opulento y signado
agota nunca totalmente en el espacio por la tendencia permanente hacia un
y horizonte de la totalidad de la cual "pensamiento único" .
es parte, dimensión o momento. Que
lo otro o el otro reclamen identidad
y consistencia más allá del Todo DELIMITACIÓN
vigente o dominante, como hecho HISTÓRICA
esencial, ello es nombrado por la
categoría de diferencia. Por ello, de-
berá también referirse a las distintas y 1.El tema de la diferencia tiene
posibles "posiciones" de lo diferente una larga tradición en el pensamiento
en el espacio abierto por cualquier filosófico, que puede remontarse a la
totalización: relaciones de dominio filosofía griega. Pero es a partir del
(es decir, represión de la diferencia), moderno idealismo filosófico que, en
relaciones de in-diferencia (es decir, Hegel, adquiere una problemática fun-
olvido, abandono o desconocimiento damental. Hegel resume el proyecto
de la diferencia) o articulación de filosófico de la modernidad europea
las diferencias (es decir construcción (Descartes, Kant, Fichte, etc.) y le
siempre renovada de nuevas formas imprime una dirección dominante,
más abiertas y críticas de unidad, al resolver lo diferente en la pura
en el horizonte de la diferencia). En identidad del todo.

-189-
DIFERENCIA

En América Latina la cuestión en Francia e Italia promovidos, entre


antropológica, ética y aun teológica de otros, por Derrida, Lacan, Vattimo,
la alteridad y el otro tiene un largo ca- etc.". Si bien la cuestión de la diferencia
mino, a partir de la reflexión efectuada en nuestras ciencias sociales ha tenido
aquí en torno a tradiciones teóricas de un desarrollo marginal, por cuanto ha
autores tales como Buber, Brunner, generado pocos desarrollos propios y
Laín Entralgo, Jolif, Levinas, etc.. En sistemáticos>, vale la pena hacer un
la vertiente de corte marxista, si bien señalamiento más al respecto: indicar
dicha temática fue siempre sospechosa que, paradójicamente, en estas dos
de "idealista", en los círculos del "mar- últimas décadas se ha producido un
xismo humanista" (donde se leía a R. masivo trasvasamiento de dicha cate-
Garaudy y H. Lefebvre, por ejemplo) goría, desde el campo filosófico al de
fue cultivada remontándola al joven las ciencias sociales. Vía traducción de
Marx y, aun, al propio Feuerbach. literatura específica producida en otros
idiomas, aunque también en trabajos
Pero la reflexión estrictamente locales y regionales, ello puede verse en
teórico-filosófica del otro, discutido los estudios ele género, la antropología
sistemáticamente a partir de un deter- cultural, los estudios postcoloniales y
minado campo categorial, se instaura culturales, los trabajos sociológicos
-a nuestro juicio- a partir de los tra- enmarcados en el cualitativismo y la
bajos de Enrique Dussel 1: en primera hermenéutica, etc.; dicho trasvasa-
instancia ( comienzos de la década de miento -lento y silencioso al principio-
los '70) cuando explicita sus reflexiones se tornó masivd'.
críticas en torno a la obra de E. Levi-
nás, asumiendo, no obstante, la misma Tres cuestiones preocupan al
semántica teórica del filósofo lituano- respecto:
francés como contexto interpretativo
del otro: la categoría de exterioridad. a)por un lado, que dicho tras-
Posteriormente, Dussel tomará un vasamiento moviliza una categoría
rumbo propio en la edificación teórica del campo filosófico al terreno de
de la exterioridad 2 y, en la etapa actual las ciencias sociales, sin dar cuenta
(mediados de los '80 en adelante), teóricamente ("metateóricamente",
enhebrará sus reflexiones al desarrollo sería la forma correcta de expresarse)
de una original reinterpretación de las de dicha operación, sus posibilidades
obras centrales de Marx'. y límites.

Por otra parte, y ya desde la b) Por otro, debido a lo que se


década de los '80, se ha instalado acaba de señalar, en innumerables ca-
en algunas disciplinas sociales en sos, "diferente" (como sinónimo de el
latinoamérica, el tema de la diferen- otro/a, la alteridad, los distinto, etc.)
cia: distinta manera de referise a la pasa a usarse indiscriminadamente
cuestión del otro, pero desde la óptica como entidad empírica sin más. Un
y los presupuestos del postestructu- ejemplo de ello, aunque no referido a
ralismo y el llamado "pensamiento este contexto, que clarifique lo que se
débil" (es decir, los movimientos de intenta indicar puede ser el traspaso
reactualización del último Heidegger de la "razón trascendental" kantiana

-190-
Alberto Parisí

(sede de la producción del sentido de DELIMITACIÓN


lo real) al sujeto empírico portador CONCEPTUAL
de significaciones en la teoría de la
acción social de Weber (no al aca-
so, discípulo de una de las escuelas l. Plantear teóricamente la
herederas intelectuales de Kant). Si cuestión del otro a partir de los seña-
bien Weber abrió con ello una nueva lamientos mencionados supondrá, en
problemática en una naciente ciencia el presente desarrollo, dos cuestiones:
social empírica (la sociología), hace a) superar el nivel discursivo de las
un siglo que se sigue discutiendo si discusiones antropológicas, éticas o
el sentido intencional mentado en la teológicas, para situarse a un nivel
acción del actor social no condena estrictamente categorial y b) dentro de
a Weber a una sociología idealista la semántica teórica, optar claramente
(fundada justamente en una filosofía por la categoría de diferencia como eje
del sujeto-fuente del sentido); o, si y referente central. Lo cual, a su vez,
al contrario, por vía de los "tipos implicará ir estableciendo cuánto nos
ideales" el autor alemán escapa tan- separa esta opción -paradójicamen-
gencialmente a ello, ya que en diver- te- de la temática postestructuralista y
sas interpretaciones los tipos ideales postmoderna de la "diferencia" (pero
son lo que hoy llamamos modelos también de los puntos comunes de
teóricos para la interpretación de la confluencia con la misma) y en qué
acción social. medida nos acercaremos al planteo
dusseliano de la "exterioridad".
c) Por último, en los casos
donde se explicita una problemati- 2. La categoría teórica de dife-
zación de la categoría (a modo de rencia se refiere a la significación del
ejemplo, en algunos escritos de E. La- otro como no reductible en última ins-
cia u; respecto a este autor argentino, tancia a la identidad de lo-mismo (lo-
radicado en Inglaterra hace más de mismo: el eje articulador que sustenta
treinta años, el texto fundamental de a la Totalidad vigente y dominante).
su producción al respecto es el largo Con estas formulaciones abstrusas,
capítulo tres de su libro -escrito con queremos decir: la identidad del otro
Chanta! Mouffe- Hegemonía y estrate- no se agota nunca ni totalmente en
gia socialista: hacia una radicalización el espacio y horizonte de la totalidad
de la democracia, todas sus obras de la cual se parte, dimensión o mo-
posteriores dependen teóricamente mento. Que lo otro o el otro reclamen
del texto citado), no puede darse identidad y consistencia más allá del
cuenta del campo categorial al cual Todo vigente o dominante, ese hecho
pertenece, las implicancias de su esencial es nombrado por la categoría de
paso desde la filosofía a las ciencias diferencia. Pero no sólo eso: también
sociales empíricas y la relación de la la índole de las relaciones posibles
categoría con otras, sin las cuales la -al interior de las totalidades- entre
misma se torna incomprensible (vgr.: lo-mismo y lo otro. Es decir, rela-
sin su relación con categorías como ciones de dominio, de indiferencia o
"totaliclad", "contradicción", "praxis construcción siempre renovada de
o práctica", etc). nuevas totalizaciones más abiertas,

-191-
DIFERENCIA

más críticas (lo cual implicará que a razón dominadora) 8 • Con esto, Vatti-
la categoría de diferencia habrá que mo asume el programa heideggeriano
articular, entonces, las categorías de del pensar como An-denhen, es decir,
contradicción y praxis). del "pensar rememorativo" que se
define por "... pensar no al ser como
En otros términos, a partir presencia de lo que está presente, sino
de la categoría de diferencia se la presencia en su proveniencia ... "9 •
resignifica y rearticula una teoría Para este pensamiento, siempre según
dialéctica de corte histórico-social, Vattimo, interpretando a Heidegger,
superadora de la dialéctica hegelia- la diferencia es aquella identidad no-
no-marxista tradicional (una por presente del ser, su futuro, su inapre-
idealista, la otra, la comprometida hensible horizonte. Con sus palabras:
con el positivismo; ello deja para "La diferencia como destitución de la
otra discusión en qué medida en el definitividad de la presencia es, por
propio Marx efectivamente existen el contrario, esencial al pensamiento
elementos de una dialéctica históri- 'crítico', contra cualquier tentación de
cosocial abierta). En efecto, estas conciliaciones dialécticas ... " 10 .
últimas -además de no haber llegado
nunca estrictamente a la cuestión de En esta misma dirección, pro-
la diferencia- entendieron al otro pone J. Derrida su concepción de
como un momento de la identidad la diferencia: "Diferir. .. significa
de las totalidades (y nada más). De- temporizar, recurrir, consciente o in-
bido a ello concibieron la superación conscientemente, a la mediación tem-
dialéctica solamente como efecto del porizadora de un rodeo que suspende
1
movimiento de las contradicciones la ejecución o cumplimiento del deseo
mismas. En torno a ésto último, sue- o la voluntad ... " 11 . Este exponente
nan luminosas las palabras de Adorno: del postestructuralismo explicitará
"Desde el momento en que Hegel re- en profundidad su cometido cuando,
suelve consecuentemente lo diferente por ejemplo, al estudiar el intento de
en la pura identidad, el concepto pasa Levinas por fundamentar su filosofía
a ser garantía de lo no conceptual, del "otro como absolutamente otro", a
la trascendencia es capturada por la partir de la categoría de exterioridad.
inmanencia del espíritu y práctica- En la oposición Levinas/Heidegger,
mente eliminada al convertirse en la largamente explicitada en Totalidad e
totalidad de éste" 7 . infinito, Derrida tomará un claro par-
tido por Heidegger (por su específica
3. Las relaciones entre la dife- concepción de la temporalidad dife-
rencia y la dialéctica son imposibles renciadora de Identitat und Differenz y
para el discurso postmoderno y pos- otros trabajos del último Heidegger),
testructualista. Según G. Vattimo, la acusando a Levinás de haber ingresa-
diferencia sólo puede hacerse patente do a un empirismo sin retorno 12 .
en el "pensamiento débil" que haya
renunciado -en profundidad-al ejerci- Qué es ese "otro de la razón"
cio del logos como dominación (y por dominadora, heterogéneo al pensa-
tanto, también al discurso dialéctico, miento discursivo, que aparece en la
uno de los últimos exponentes de la reflexión postmoderna, se pregunta

-192-
Alberto Parisí

Habermas 13 , al plantearse una re- elaboración especulativa del orden


significación de la modernidad que práctico de sentido y significaciones
camine por otros carriles que los de que sustenta a la existencia social 17 •
Heidegger, Derrida, Foucault, etc .. ¿Expresa el orden práctico de sentido
Para Habermas, este planteo post- de la actual vida socio-cultural euro-
moderno acerca de "lo otro" que la pea preocupaciones sustantivas por la
razón dominadora de la modernidad, suerte y destino de los excluidos del
no es claro; y su peligro evidente es mundo? La reivindicación crítica de
ingresar al camino sin vuelta del irra- que la filosofía de la presencia repri-
cionalismo, más que de la superación me y oculta un "más allá" del orden
de la razón como dominio. Además, dominante, ¿conjuga en la voz de sus
para el antiguo discípulo de Frankfurt pensadores un reclamo (no sólo ético)
los planteamientos ligados al último y un cuestionamiento teórico a partir
Heidegger reniegan tanto de cualquier de quienes práctica y efectivamente
proximidad a una analítica científica, son lo-otro-excluido del mundo de
cuanto de posibilidades de inserción la opulencia?
efectiva y justificada en la práctica
social14. 4. E. Dussel, en sus últimos tra-
bajos (mediados de los '80 en adelan-
A estos importantes señala- te), ha planteado cuestiones básicas al
mientos sobre la categoría de dife- respecto, que intentaré sintetizar:
rencia en su versión postmoderna
y posestructuralista, de parte de a) Por una parte, ha resignificado
Habermas, añadiremos elementos la problemática de la exteriori-
de la reelaboración que sobre esta dad, articulándola a una cuida-
centralísima categoría se trabajan en dosa lectura y reinterpretación
Latinoamérica. Tendremos como mo- de las obras centrales de Marx.
tivo expreso, al respecto, las últimas Ha establecido, así, un engarce
propuestas teóricas de Dussel, a partir sustantivo entre exterioridad
de sus trabajos actuales 15 . y "trabajo vivo" redefiniendo,
a nuestro juicio, el contenido
Por último, deseo indicar que teórico de la exterioridad más
un latente peligro se cierne sobre el allá de Levinás. En nuestro
planteo acerca de la diferencia que concepto, ésta es, justamen-
se ha efectuado en Europa (quisiera te, la categoría de diferencia
excluir de alguna forma provisoria- (que Dussel seguirá llamando
mente del mismo a Totalidad a infinito exterioridad). En la totalidad
y a recientes trabajos de Todorov 16; dominante del orden mundial
querría preguntarme si su crítica a la capitalista, la diferencia nom-
filosofía de la presencia, la identidad bra al trabajo vivo como lo-
de la no-presencia que reclama no otro-reprimido al ser subsumi-
serán, en definitiva sino la reivindica- do por el capital. La diferencia,
ción del por-venir de lo-mismo, y sólo pues ("exterioridad", siempre
eso. ¿Por qué plantear esto? Porque, según Dussel) expresa a nivel
en definitiva, las categorías teóricas teórico la realidad o identidad
del discurso no constituyen sino la del trabajo vivo como realidad

-193-
DIFERENCIA

"más allá" del capital. " ... todo c) Esta compleja articulación es
se inicia desde la exterioridad una suerte de garantía contra
del trabajo vivo y, de todas ma- cualquier tipo de unilaterali-
neras, continuamente, recorda- zación en la interpretación. La
rá la exterioridad de la fuente de realidad es compleja, plural,
valor. La afirmación de esta ex- múltiple; todo no es político-
terioridad, de la alteridad real social, no todo juega su sentido
del obrero (aunque subsumido a nivel macro. Pero el estudio
de hecho en el capital como de la diferencia, a partir de sus
trabajo asalariado) nunca ol- referencias a lo político y so-
vidada, constituirá el punto de cial, nos puede otorgar claves
apoyo de la criticidad de Marx. de interpretación simultánea-
La exterioridad del trabajo vivo mente totalizadoras, críticas y
es el punto de apoyo exterior al abiertas.
sistema que exigía Arquímides,
el no-capital; la realidad va más En este sentido, debemos
allá del ser del valor objetivado afirmar que la exclusión o
pasado" 18 • represión de la diferencia (es
decir, su "posición relativa"
b) Por otro lado, ha mostrado en las totalidades) es múltiple,
los distintos niveles en que pluridimensional. Dicho de
puede plantearse la categoría otra forma: en la producción y
central de diferencia, según reproducción de la existencia
el tipo de totalidades que se -material y simbólica- de nues-
analicen 19 • Así, uno será el tras sociedades se genera un
nivel de la relación abstracta complejo sistema de exclusio-
capital/trabajo; otro, las re- nes, formas distintas de repre-
laciones a nivel del sistema sión de la diferencia. Podemos
mundial capitalista, otro el de situar un eje importante en la
las relaciones que estudió la "falla" del mercado capitalista
vieja teoría de la dependencia, (generador "per se" de macro-
etc.. Debemos aclarar que estos asimetrías), pero a su vez, las
últimos desarrollos de Dussel exclusiones se expresan de un
se conectan estrechamente modo específico en una mul-
con planteamientos suyos an- titud de ámbitos. Estos son,
teriores2º, donde mostraba un entre otros, la exclusión de la
complejo sistema de articula- mujer, los ancianos y los niños,
ciones categoriales, de acuerdo a partir de un "mandato" social
a los niveles de totalización. patriarcalista y productivista,
Allí están expuestos los niveles que los reprime y excluye de
llamados: I) político (en el cual las esferas decisivas del poder,
deberíamos incluir los aspectos la gestión y el goce. Las ex-
sobre los cuales acabamos de clusiones racial, religiosa y de
reflexionar), II) erótico, III) todo tipo de minorías, a partir
pedagógico y IV) antifetichis- de un complejo entramado de
mo. prejuicios ancestrales. La ex-

-194-
Alberto Parisí

clusión de la propia naturaleza, despotenciación de la fuerza


a partir de un modelo produc- vincular que la ha constituido,
tivista depredador, que nos ha la relación entre "uno" y "otro"
hecho creer que el mundo es ingresaría a una dinámica de
propiedad exclusiva y exclu- in-diferencia, donde lo que
yente de nuestra especie, etc .. podrá ocurrir es la cancelación
del vínculo o que el mismo se
d) No podríamos hablar de la resignifique en torno a un polo
diferencia sino es en relación dominante (en relación al cual
a la unidad (a alguna forma de "lo otro" se tornará diferencia
vínculo, unidad o totalidad). dominada, reprimida). La di-
La diferencia "en sí, sola", es námica de la in-diferencia no
una abstracción sin sentido. Un es un avatar naturalista que
problema central es cuál es su afecte a los vínculos, unidades
posición al interior de la uni- o totalidades de que se trate:
dad o vínculo en el que se halla siempre tendremos que pre-
o pertenece: si de subordina- suponer la existencia de una/s
ción (hablaremos, entonces, contradicción/es no resueltas,
de diferencia reprimida), si de que no pudieron permanecer
in-diferencia (hablaremos, por siempre en forma latente,
ello de diferencia irrelevante, tampoco "explotar" (es decir,
marginal, para el vínculo del expresarse en un conflicto
cual es parte o dimensión abierto) y sí, asumir la forma
constitutiva) o de diferencia de una suerte de "implosión".
articulada y potenciada en
una unidad simétrica, múlti- e) La unidad o vínculo construido
ple, abierta. sobre la articulación-poten-
ciación de las diferencias es
Estas "posiciones" o relaciones el mayor desafío que los seres
entre unidad (totalidad o vín- humanos debemos enfrentar;
culo) y diferencia tienen que la utopía básica de toda inte-
ver, a su vez, con la cuestión racción vincular (micro o ma-
de la "contradicción" y el "con- cro) que apunte a la libertad,
flicto". Si en el vínculo, unidad la autonomía, la capacidad de
o totalidad de que se trate, el iniciativa y, a la vez, la comu-
"uno" se yergue como polo nión, la solidaridad y el amor.
central y dominante, relega a Esta utopía central, positiva
"lo otro" (la diferencia) a una e indeclinable, permanente-
posición de subordinación, mente debe confrontar con las
de otro-dominado; la unidad contradicciones y conflictos;
queda, así, atravesada por el secreto de su concreción
una contradicción (que podrá radicaría -creemos- en la
expresarse, en algún momen- simultánea capacidad de su-
to, en un conflicto abierto o peración-resignificación de las
no). Si la unidad o totalidad contradicciones y conflictos,
tendiera a la fragmentación y por una parte y, por otra, en la

-195-
DIFERENCIA

fuerza articulatoria que desde se despliegue. Su represión, exclusión


allí generara para fortalecer o absolutización nunca podrán dar
la unidad en las diferencias cuenta de proyectos vinculares simé-
potenciadas. tricos, ricos, complejos, pluralistas,
, creadores. Según, pues, los avatares
Más arriba nos habíamos pre- de su dinámica en la unidad de la
guntado qué es la diferencia; pen- que sea parte, dimensión o momento,
samos que algo hemos avanzado y será constitutiva de unidades cerradas
señalar que se trata de una "realidad" ("totalitarias") o, al contrario, unida-
o dimensión constitutiva de toda des o vínculos en proceso de apertura,
unidad, vínculo o totalidad, cuya enriquecimiento, resignificación de
entidad y significación es variable sus contradicciones y repotenciación
según la dinámica vincular en la que de sus diferencias 21 .

NOTAS

l Entre otros de sus trabajos de esta época, véase: "El método analéctico
y la filosofía de la liberación", p.116 sgs; Método para una filosofía de
la liberación; Filosofía de liberación; Y los cinco tomos aparecidos de
su Etica, a partir de 1973, en diferentes ediciones y países. Los plan-
teamientos de Dussel aparecen en el contexto de la llamada "Filosofía
de la liberación latinoamericana", con antecedentes importantes en la
filosofía del peruano Augusto Salazar Bondy, el mexicano Leopoldo
Zea, etc. Una evaluación contemporánea del desarrollo dusseliano en
el marco de la Filosofía de la Liberación, escrito por un europeo, es
el trabajo de Antonino Infranca, El otro occidente, Bs. Aires 2000, ed.
Antídoto, Colección Herramienta. Entre los estudios sistemáticos sobre
Levinas en dicha época, en latinoamérica, Cfr. Guillot, Enrique: ·'Em-
manuel Levinas: evolución de su pensamiento", Fac. de Filosofía de la
Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina) -mimeo- 1973;
asimismo el estudio introductorio a Totalidad e infinito (traducido por
Guillot al castellano).
2 Los dos textos donde puede advertirse este rumbo más propio, a pesar
de la continuidad semántica con los planteas anteriores, son: Filosofía
de la liberación y Filosofía ética latinoamericana I y II.
3 Me refiero a tres trabajos centrales: La producción teórica de Marx, un
comentario a los Grundrisse; Hacia un Marx desconocido, un comentario
de los Manuscritos del 61-63; El último Marx y la revolución latinoameri-
cana.
4 Lacan,]., "Subversión del sujeto y dialéctica del deseo", en Escritos I, Ed.
Siglo XXI. "De un otro al Otro", en Seminario. Derrida,]., La escritura
y la diferencia; "La difference", en Marges de la philosophie; Vattimo,
G., Las aventuras de la diferencia; Vattimo, G., Rovatti, P.A. y otros: El
pensamiento débil. Respecto a las tendencias (marginales) en las ciencias
sociales latinoamericanas a cernirse de la categoría de diferencia, a modo

-196-
Alberto Parisí

de ejemplo, ver: Veron Eliseo, La semiosis social, Bs. Aires, Ed. Gedisa,
1987; Lechner, N., La conflictiva y nunca acabada construcción del orden
deseado, Santiago de Chile, Flacso, 1984, Laclau, Ernesto, Hegemonía
y estrategia socialista (en colaboración con Ch. Mouffe), México, Ed.
Siglo XXI, 1987. De Ipola, E., Ideología y discurso populista, México, Ed.
Folios, 197 4. La rebelión del coro: estudios sobre la racionalidad política y
el sentido común, Bs. Aires, ed. Nueva Visión, 1989., etc. (no deberíamos
olvidar aquí los desarrollos latinoamericanos del psicoanálisis de corte
lacaniano).
5 En Parisí, Alberto: "Totalidad, contradicción y diferencia en Hegel y
Marx", se reflexiona sobre la cuestión del otro con la categoría de dife-
rencia, pero no según el contexto postestructuralista, sino más cerca de
los desarrollos del último Dussel. Vid. asimismo mi trabajo "Paradigmas
teóricos e intervención profesional: en torno al campo categorial de la
dialéctica histórico-social", en revista Con Ciencia Social, año 1, núm 1,
Córdoba. noviembre de 1993.
6 A modo de ejemplo, los estudios de género de Alcoff, L.; Scott, J.;
Frazer, N.; Mouffe, Ch., etc. Estudios poscoloniales de Said, Mignolo,
Quijano, etc.; trabajos antropológicos y culturales de García Canclini,
Martín Barbero, O. Landi, R. Ortiz, etc. En el campo sociológico de
corte cualitativo y hermenéutico, trabajos de l. Vasilachis, P Bourdieu
(al menos algunos de sus textos básicos, como La distinción ,La miseria
del mundo, El sentido práctico) , una parte importante de la corriente
etnográfica americana, etc
7 Dialéctica negativa, Madrid, Ed. Taurus, 1975, p. 400.
8 cfr.: Vattimo, Rovatti y otros: El pensamiento débil, ed.cit.
9 Vattimo, G., Las aventuras de la diiferencia, ed. cit., p. 118.
10 Idem., p. 8.
11 Marges de la philosophie, ed. cit. p. 8. (en castellano, Márgenes de la
filosofía, Madrid 1994, ed. Cátedra)
12 Cfr.: "Violencia y metafísica", en La escritura y la diferencia, p. 107-210.
13 El discurso filosófico de la modernidad, pp. 351-386.
14 Idem., pp. 163-195.
15 Me refiero a La producción teórica de Marx, Hacia un Marx desconocido,
El último Marx y la revolución latinoamericana.y su fundamental Etica
de la liberación en la edad de la globalización y de la exclusión, Madrid
1998, ed. Trotta.
16 Todorov, T., La conquista de América, la cuestión del otro, México, Ed.
Siglo XXI, 1988; Nosotros y los otros, México, Ed. Siglo XXI, 1991.
17 Este proceso de producción práctica del sentido y su reelaboración espe-
culativa en el campo categorial puede consultarse en:Jolif,J Comprender
al hombre, cap. VI. También Verón, E., La semiosis social, Bs. Aires, Ed.
Gedisa, 1987.
18 Hacia un Marx desconocido, p. 371-372.
19 Entre otros lugares cfr. "La cuestión popular", en La producción teórica
de Marx, p. 400 sgs.

-197-
DIFERENCIA

20 cfr.: Filosofía de la liberación, p. 77 sgs.


21 He tomado parte de estas reflexiones teóricas sobre la diferencia de una
investigación en curso titulada "La educación sexista en la educación
primaria de la ciudad de Córdoba", que llevo adelante conjuntamente
con la Lic. Rosa Giordano.

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Vattimo, Gianni: Las aventuras de la diiferencia, Barcelona, Península,
1988.
Vattimo, Rovatti, y otros: El pensamiento débil, Madrid, Cátedra, 1988.

-199-
DOCTRINAS DE
SEGURIDAD NACIONAL
Jorge Vergara Estévez
Chile

~ - - - - - - - - - - - Palabras Clave
POLÍTICA - DERECHOS HUMANOS - REVOLUCION - DEMOCRACIA
- NUEVO ORDEN MUNDIAL - SOCIALISMO-CAPITALISMO
- PRIMER MUNDO/TERCER MUNDO - GLOBALIZACIÓN/
MUNDIALIZACION - FUNDAMENTALISMO - RAZA/ETNIA

INTRODUCCIÓN bien forman parte de ideologías co-


lonialistas o imperialistas. En ambos
casos, constituyen uno de los mayores
La expresión "Doctrina de se- obstáculos para la resolución negocia-
guridad nacional" es de uso habitual da y pacífica de los conflictos políticos
en el lenguaje político latinoamerica- dentro de cada sociedad o internacio-
no, mientras en el estadounidense se nales, y para la vigencia de un orden
prefiere la expresión "Estrategias de basado en el derecho internacional, y
seguridad nacional". Sin embargo, no sólo en decisiones coyunturales de
es menos frecuente en el contexto los Estados.
europeo; por ejemplo, no la incluye
el Diccionario de Política de Norberto
Bobbio. Sin embargo, en casi todos DELIMITACIÓN
los países pueden encontrarse con- HISTÓRICA
cepciones de este tipo, aunque no
aparezcan con esta denominación.
Puede decirse, en términos generales Las bases teóricas de estas
que estas doctrinas son concepciones concepciones provienen del pen-
y discursos nacionalistas, elaborados samiento político europeo. Sus
por autores civiles y militares identi- precedentes más antiguos podrían
ficados con sus Estados. Su propósito encontrarse en la creencia de la reli-
es el de fortalecer el poder de éstos, gión hebrea de que los judíos son el
determinar cuáles son sus enemigos, pueblo elegido de Dios, el cual castiga
y estimular o justificar el uso (irres- severamente a los pueblos opuestos a
tricto) de la violencia estatal contra ellos. Asimismo, se hallan en la cons-
otras naciones o "enemigos internos". trucción del concepto de "enemigo"
Por ello es que, habitualmente, son o de algunos discursos políticos roma-
están asociados a discursos autorita- nos, como se muestra paradigmática-
rios o de democracia restringida, de mente en Las Catilinarias de Cicerón.
carácter tecnocrático o militarista, o En la época medieval, en el siglo XII,

-201-
DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL

San Bernardo de Claraval, el principal externos, castigue el uso de violencia


predicador de las Cruzadas, afirmaba entre particulares, defienda la propie-
que matar a los pecadores musulmanes dad privada y estimule la producción y
era servir a Cristo. "Los soldados de el comercio; (c) se requiere mediante
Cristo -decía en uno de sus sermones-, un pacto "de todos con todos", crear
combaten confiados en las batallas del un Estado fuerte de poder irrestricto,
Señor, sin temor alguno a pecar por po- el que debe concentrar el poder de
nerse en peligro de muerte y por matar todos sus súbditos, cuyo objetivo sea
al enemigo. Por algo llevan la espada; el de asegurar la realización de dichos
son el agente de Dios, los ejecutores de bienes, y el cual no puede aceptar ni
su reprobación al delincuente. No peca reconocer como límites a su poder
como homicida, sino como malicida, la existencia de derechos humanos;
el que mata al pecador por defender a (d) el Estado hobbesiano gobierna
los buenos" (cit. Hinkelammert 2003: por razón de los recursos del con-
206). Por su parte, el teólogo Ginés de trol ideológico sobre las religiones
Sepúlveda, consejero de Carlos V, creó y sobre la producción y difusión de
la doctrina de la guerra justa contra ideas, y mediante el terror para evitar
los aborígenes latinoamericanos, que cualquier intento de rebelión de sus
se justificaba por: "l. La gravedad de súbditos; (e) la democracia es exclui-
los pecados cometidos por los indios, da, porque Hobbes no la considera un
especialmente su idolatría y sus peca- sistema de gobierno, puesto que no
dos contra naturaleza. 2. A causa de puede garantizar el orden al limitar
su rudeza natural que los obligaba a y dividir el poder estatal, y por que
servir a personas de naturaleza más reconoce la existencia de conflictos en
refinada, como los españoles. 3. A fin la sociedad; (f) el Estado radicalmente
de divulgar la fe, lo que se lograría autoritario o Levíathán debe defender
con más facilidad mediante el previo a sus súbditos de las agresiones de
sometimiento de los indios" (Hancke, otros Estados y, a la vez, asegurar el
1958: 49). orden interno descubriendo, neu-
tralizando y destruyendo a los que
Las bases filosóficas de los considera enemigos del Estado y del
discursos o doctrinas de seguridad orden (Hobbes, 1651).
nacional (DSN), consideradas como
teorías políticas, provienen de la filo- Las DSN surgen en el contexto
sofía moderna. Especialmente, de la del desarrollo, competencia y conflic-
teoría del Estado del pensador inglés to entre los Estados nacionales. Por
Thomas Hobbes (1588- 1679), expues- ello es que expresan sus concepciones
ta en Levíathán. Allí sostuvo: (a) la y utopías sobre el orden social y políti-
tesis de que principales motivaciones co de su sociedad y los intereses y los
humanas son: el deseo ilimitado de sentimientos patrióticos de sus auto-
placer, de poder y de acumulación; el res. En general, constituyen discursos
anhelo de disfrutar de los bienes pro- basados en el concepto de "enemigo"
pios; de asegurar la sobrevivencia y la externo y/o interno. El nacionalismo
búsqueda de seguridad; (b) para ello, agresivo posee una doble dimensión,
es necesario crear un orden social que e implica una doble construcción
defienda la sociedad de sus enemigos identitaria. De una parte, la propia

-202-
Jorge Vergara Estévez

nación, Estado e identidad nacional de la decrepitud y la inepcia para la


son idealizados, considerado superior vida civilizada. (Es necesaria) la ex-
a (todos) los otros y, de otra, se cons- terminación a cañonazos de esta raza
truye un discurso negativo sobre la inútil" (Palma, 1987). El nacionalis-
identidad de (los) "otros" los que son mo generó, y continúa haciéndolo, en
vistos como inferiores, y es frecuente muchos países, una perversa retórica
que no sólo sean descalificados, sino de exaltación de la guerra, de la cual
incluso demonizados y casi siempre este texto dejünger es un ejemplo pa-
vistos como amenazas al Estado, la radigmático: "Crecimos en una época
patria y la nación. de seguridad, sentimos de pronto la
necesidad de lo extraordinario, del
Las concepciones racistas eu- gran peligro. Nos había abrazado la
ropeas de los últimos siglos, por guerra como un éxtasis. La guerra
ejemplo, pretendieron establecer el debía brindarnos la grandeza, la fuer-
dogma de la superioridad de "la raza za, lo solemne. Nos pareció un hecho
blanca" sobre los otros grupos étnicos varonil, una especie de fiesta de caza
y el "derecho" a dominarlos e incluso en un prado con flores regadas con
preconizaron la destrucción de las rocío de sangre. Ninguna muerte es
razas consideradas inferiores: "La con- más hermosa en este mundo" (Cit.
cepción racista establece la diferencia Bayer, 2004).
entre los valores de las diversas razas
primitivas de la humanidad. El fin La obra de Car! Schmitt (1889-
del Estado es el mantenimiento de las 1984), el principal teórico del nacio-
razas humanas. El antípoda del ario es nal-socialismo, aportó otros principios
el judío. Como el pueblo judío nunca fundamentales para las DSN: (a) la te-
poseyó un Estado, no tuvo una cultura sis de que distinción constitutiva de la
propia. El judío fue siempre un pará- política es la de "amigo" y "enemigo";
sito del organismo nacional de otros éste último es "existencialmente, otro
pueblos. Envenena la sangre de otros, distinto, un extranjero, que tiene otra
en tanto conserva incontaminada la manera de ser" (1932), cuya existen-
suya" (Hitler, 1924: 131-136). cia amenaza mi identidad; no existe
ninguna categoría que pueda integrar
En América Latina, en el siglo esta distinción fundamental, pues la
XIX y comienzos del XX, en el período humanidad no es una categoría po-
de expansión interna de los Estados lítica; (b) el Estado y sólo éste puede
nacionales, apareció un discurso ra- determinar quiénes son sus enemigos
cista basado en el desprecio radical y usar contra ellos todos los medios
a las etnias vernáculas, que llamaba que estime necesarios, la soberanía es
a su exterminio, que ciertamente fue el poder de declarar estados de excep-
interiorizado por los militares chi- ción; (c) el poder del Estado no tiene
lenos, argentinos que emprendieron límite alguno ni ético, ni político, ni
"las campañas del desierto". Dice, por legal: "la autoridad y no la razón es la
ejemplo, un autor peruano: "la raza que hace las leyes".
india es una raza degenerada y vieja
del tronco del que surgieron las razas Otra fuente que concurre a la
inferiores. Tiene todos los caracteres formación de estas doctrinas son las

-203-
DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL

concepciones geopolíticas de los en lucha permanente con los otros


siglos XIX y de la primera mitad del Estados, especialmente limítrofes,
XX, creadas por el geógrafo alemán por mantener y acrecentar su "espacio
F riedrich Ra tzel (1844- I 904), el ju- vital" (Lebensraum), como decían los
rista sueco progermano RudolfKjellen geopolíticos del nazismo.
(1864-1922), el general alemán Karl
Haushofer (1869-1946), y el geógrafo Las doctrina antisubversiva
inglésjohn Mackinder (1861-1947). francesa de la década de los cincuenta
Autores norteamericanos, de media- y sesenta del siglo pasado puede ser
dos del siglo pasado, por ejemplo, el considerada como una versión co-
cientista político alemán-norteameri- lonialista de las DSN, puesto que su
cano Hans Weigert (1896-1967), y el objetivo principal era conservar "la
especialista en relaciones internacio- grandeza de Francia". Ello requería
nales holandés-norteamericano John mantener sus colonias, derrotar la
Spykmans (1893-1943) cuestionaron rebelión en ellas y crear gobiernos
la geopolítica alemana, por sus im- subordinados estables, y ojalá recono-
plicaciones imperialistas germanas, cidos como legítimos por los nativos.
pero propusieron refundarla, des- Sus autores fueron coroneles franceses
de la perspectiva de los intereses que tuvieron directa participación en
norteamericanos. La geopolítica se dichas guerras.
diferencia de la geografía política la
cual es, básicamente, descriptiva, La tesis central era que estos
porque ella analiza la significación de movimientos eran dirigidos por los
los espacios de la tierra para la toma comunistas, cuya ideología era el
de decisiones políticas y militares, y marxismo-leninismo, y que sus mi-
pretende convertirse en "conciencia litantes tenían una fe ciega en esta
geográfica del Estado" (Ratzel, Kjellen doctrina. Creían que, si el ejército
et alli 1975). francés quería vencer debía no sólo
usar la fuerza, en la medida que fuera
Las concepciones geopolíticas necesaria, sino que debía tener una
surgieron en la época del imperialis- ideología fuerte que oponer a la de
mo, en un contexto de competencia sus adversarios. Los coroneles fran-
y luchas de las principales potencias ceses tenían una gran admiración por
por el control del mundo. Fueron los métodos nazis y estalinianos de
motivadas por el reconocimiento de propaganda y adoctrinamiento y los
la importancia de los factores geo- usaron, en la medida de lo posible,
gráficos en la política y recibieron el para atraer a su causa a la población
influjo del darwinismo social. Estas argelina. De ahí la importancia que
influencias se expresan en dos aspec- atribuyeron a "la guerra psicológica"
tos centrales: en la aplicación de las -basada en antiguas teorías de la so-
teorías darwinianas de la superviven- ciología conservadora sobre las masas
cia, de los individuos y especies más y en la concepción de propaganda
aptos, a las organizaciones y a los política de Goebbel-, las que combi-
Estados y, asimismo, en la tendencia naron con el uso masivo de medidas
a considerar al Estado como un gran coercitivas, de modo análogo a los
organismo en crecimiento, un ser vivo regímenes totalitarios.

-204-
Jorge Vergara Estévez
---

Atribuyeron gran importancia a individualismo, la democracia y otros,


la aplicación generalizada de la tortura mientras el segundo en sus opuestos.
como un arma fundamental en la lucha El ex presidente Reagan otorgó un
contra la subversión, y en sus textos carácter teológico a esta oposición:
intentaron justificarla aduciendo su el primero correspondía al "imperio
utilidad práctica como fuente de in- del bien" y, el segundo, al "imperio
formación, para salvar vidas y evitar del mal". Se decía que el equilibrio
nuevos ataques. No consideraron que nuclear disuasivo evitaba el conflicto
muchos de los torturados mueren y directo entre los bloques y por ello
muchos más quedan con traumáticas el conflicto se había desplazado a los
secuelas para toda la vida. Otro de los países del Tercer Mundo. Occidente
aspectos significativos de estas doc- estaba amenazado por la infiltración
trinas es la tesis de la autonomía que ideología en los centros, y por los mo-
deben tener los militares, respecto de vimientos comunistas de las naciones
los políticos, en su lucha contra la sub- periféricas, que operaba directamente
versión. Ésta no debía estar obstaculi- y en forma encubierta mediante los
zada por limitaciones éticas, políticas movimientos sociales y políticos
o de otro tipo. En la búsqueda de esta populares.
autonomía y de la elaboración de una
ideología fuerte contra la de sus enemi- En las naciones periféricas
gos, fueron aislándose políticamente, afectadas por la subversión comunista
acercándose a grupos minoritarios era necesario, de una parte, realizar re-
integristas y nacionalistas católicos que formas destinadas a mejorar el nivel de
aceptaban su discurso colonialista y la vida de los sectores populares y, sobre
justificación de la tortura. Finalmen- todo, fortalecer el Estado, especial-
te, fueron entrando en contradicción mente a las fuerzas armadas, para que
con el Estado democrático francés, tomaran el poder, si fuera necesario, y
convirtiéndose en un grupo terrorista: para desarrollar una guerra no conven-
la Organización Secreta del Ejército cional antisubversiva que combinaba
(OAS), que realizo actos violentos, e estrategias represivas y psicopolíti-
intentó asesinar al Presidente De Gau- cas. "Nuestro objetivo primordial en
lle (Arriagada, 1976). Latinoamérica es ayudar al continuo
desarrollo de las fuerzas militares y
La doctrina norteamerica- paramilitares, capaces de proporcionar
na de la seguridad nacional en el la necesaria seguridad interna" (Mac
período de Guerra Fría es muy co- Namara, 1963, cit Conadep, 1984:
nocida y fue elaborada, en diversas 4 74). Éste fue el objetivo de la llamada
versiones, entre 1945 y 1989. Sostenía "Alianza para el Progreso".
que el mundo estaba dividido en dos
sistemas políticos y económicos en La cooperación de los mili-
conflicto: Occidente, el "oeste", y el tares y las elites prooccidentales era
área comunista o el "este", el cual pre- cardinal para evitar la caída de dichas
tendía dominar el mundo. Occidente naciones en el bloque comunista. Las
se fundamentaba en representar los fuerzas armadas y los sectores conser-
valores permanentes del cristianismo vadores latinoamericanos aceptaron
y la cultura occidental: la libertad, el esta doctrina, que concordaba con sus

-205-
DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL

históricas tendencias anticomunistas individuos no son reconocidos como


y con sus concepciones e intereses ciudadanos, sujetos de derechos po-
corporativos. En la mayor parte de los líticos y sociales, sino como súbditos
países de la región se realizaron golpes cuyas necesidades están subordinadas
de Estado y se crearon las dictaduras a las de superviviencia y crecimiento
de seguridad nacional de los setenta del poder del Estado.
y ochenta. Dice, a vía de ejemplo, el
ex General argentino Ramón Camps: Un oficial de inteligencia pe-
"Hay que partir de una concepción ruano declaró en un juicio: "la doc-
estratégica global, ya que la Argentina trina de seguridad nacional consistió
no es más que un campo operacional en el uso de la violencia para ganar
en un enfrentamiento global entre el conflicto y, para ello, los militares
Moscú y los E.E.U.U" (La Semana, asumieron el papel protagónico en la
1983, cit. Conadep, 1984: 474). Den- conducción de los Estados. Por eso,
tro de la Iglesia Católica, integrantes esta doctrina dejó de ser una política
del Opus Dei, Legionarios de Cristo exterior y se convirtió en la política
y otros apoyaron y participaron acti- interior de cada país latinoamericano.
vamente en los regímenes militares, Hubo firma de convenios entre Esta-
especialmente en Argentina y Chile. dos Unidos, los Estados latinoameri-
No es casual que estos mismos gru- canos y sus ejércitos, para impulsar el
pos de poder hayan tenido un papel apoyo contrainsurgente, potenciar la
decisivo para evitar el juicio al Gene- eficacia de los órganos de inteligen-
ral Pinochet en España y después en cia, equipamiento, entrenamiento y
Chile. Las DSN latinoamericanas del educación, así como estrategias de
período son una adaptación, cuando acción cívica (guerra psicológica) y
no una vulgarización, como es el caso el concepto del enemigo interno. El
del General Pinochet, de las doctrinas perfil del enemigo interno fue aplica-
norteamericanas y francesas, combi- do en todos los países. Bastaba ser in-
nadas con conceptos geopolíticos. vestigador social, universitario y usar
cierto léxico considerado comunista,
En las DSN latinoamerica- para que la persona fuese considerada
nas del período, encontramos un un enemigo interno. En especial, se
discurso que comprende conceptos introdujo la doctrina de seguridad
abstractos extraídos de la geopolítica. nacional en el currículum de estudio
Se identifica el Estado con la nación, de los oficiales militares, por lo cual
habitualmente, en una perspectiva cada militar salía de la academia im-
organicista y psicologista, en la cual pregnado de esta doctrina. Los ejérci-
el Estado está considerado como una tos de América Latina no tuvieron un
"suprapersona" que incluye la nación. espíritu crítico y, por ello, la doctrina
Escribe, por ejemplo, Pinochet: "El se aplicó tal cual fue diseñada en Es-
organismo Estado alcanza la mayor tados Unidos" (Pino, 2002).
importancia entre los grupos sociales,
no sólo por su acción absorbente y Los ideólogos latinoameri-
dominante sobre la sociedades infe- canos de la DSN sostenían que
riores y los individuos, sino por su los gobiernos militares poseían los
propia personalidad" (1968, 71). Los recursos y capacidades no sólo para

-206-
Jorge Vergara Estévez

dirigir la lucha contra la subversión, y del mal", decía en 1977, el coronel


sino para conducir a la "Nación", y argentino Hugo Pascarelli (cit. Na-
para formular y realizar los "Objeti- varro 1997, 8). Esta concepción del
vos Nacionales". Todo esto requería "enemigo interno" fue potenciada
defender y consolidar la "Unidad por el discurso integrista de secto-
nacional", concepto que excluye los res del clero católico. El entonces
conflictos sociales y políticos, los que pro-vicario castrense argentino
son estimulados por las "ideologías Mons. Victoria Bonamín, dijo en un
foráneas", "el sectarismo partidista" sermón, durante la dictadura mili-
y "el antagonismo de las clases so- tar: "Cuando hay derramamiento de
ciales". Otro de sus conceptos claves sangre hay redención. Los militares
era el de "Poder nacional" que es la son una falange de gente honesta,
suma del poder político, económico. pura. Han llegado a purificarse en
Éste es la capacidad irresistible de los eljordán de la sangre para ponerse
gobiernos para organizar y conducir al frente del país" (Ibid).
"la masa humana" (Pinochet 1968). El
desarrollo es visto como un proceso de Uno de los textos de DSN más
crecimiento del poder nacional. estudiados por militares chilenos fue
La función política del ejército, ( 1966)
Un segundo nivel discursivo de Herman Oehling, teórico político
es el de las opciones políticas asu- perteneciente al Opus Dei. Ésta fue
midas en esta DSN. La primera era una extensa tesis de doctorado de la
la alineación con occidente contra Facultad de Derecho de la Universi-
el comunismo, la segunda es la con- dad de Navarra. Allí se afirma la tesis
cepción de guerra antisubversiva, de que en un mundo en crisis, ame-
aprendida de los autores norteame- nazado por la agresión comunista,
ricanos y franceses, según la cual el las fuerzas armadas no pueden sino
enemigo comunista busca destruir ser un actor político permanente.
las estructuras fundamentales de Oehling rechaza la doctrina de la
la nación, infiltrándose en todas subordinación de las fuerzas armadas
sus instituciones, usando todos los al poder político democrático. Entre
recursos psicológicos y políticos. El los autores que cita en su apoyo se en-
problema era trazar con precisión cuentran importantes conservadores
la línea ideológica para diferenciar españoles: Donoso Cortés, Balmes y
"amigos" y "enemigos", y usar otros. Sostiene que, en todos los paí-
contra éstos la fuerza militar. El ses, las fuerzas armadas intervienen,
enemigo es visto como un cáncer en grados diversos, en las decisiones
que amenaza el Estado nacional, gubernativas. El golpe de Estado es la
y frente al cual es legítimo el uso forma radical de intervención militar.
de todos los recursos represivos: Estas intervenciones son exitosas si
ejecuciones, desaparecimientos, logran evitar ciertos riesgos señala-
tortura, exilio, etc., lo que convir- dos por el autor.
tió a esta DSN en la ideología del
terrorismo de Estado: "La lucha Chile ha sido quizá el país
que libramos no reconoce límites latinoamericano donde la DSN de lo
morales, se realiza más allá del bien sesenta y setenta ha tenido efectos más

-207-
DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL
- - - - - - - - -------

profundos. La Constitución de 1980, ciones políticas directas -en diversos


tal vez la única en el mundo que fue momentos históricos-, ha permitido
elaborada desde la referida DSN, en preservar la unidad nacional.
conjunción con la teoría neoliberal
y las teorías políticas conservadoras. La presencia de la referida DSN
Esta Carta otorga a las fuerzas armadas en el pensamiento militar chileno
el rol institucional de actor político, de actual se expresó inequívocamente
un poder suprapolíLico que está sobre en un texto elaborado por el Centro
las autoridades elegidas por el pueblo. de Investigaciones Militares del Ejér-
Les otorga el rango constitucional de cito, CESIM, sobre la detención de
"garantes de la institucionalidad". Pinochet en Londres en 1999. Allí
Crea un "Consejo de Seguridad Na- se reafirma el mito militarista de que
cional presidido por el Presidente de las fuerzas armadas son la institución
la República" donde los Comandantes fundamental de la nación de la cual
en Jefe tienen mayoría, el cual puede: depende su unidad e integración: "El
"representar, a cualquiera autoridad Ejército ha sido, es y debe continuar
establecida por la Constitución su siendo una verdadera reserva moral
opinión frente a cualquier hecho, para Chile. Tenemos la responsabili-
acto o materia que atente gravemente dad moral de ser custodios del alma
en contra de las bases de la institu- nacional. Ella alimenta las apetencias
cionalidad o pueda comprometer la más profundas y trascendentes" (CE-
seguridad nacional" (Honorable junta SIM 1999). Se reitera la interpretación
de Gobierno, 1980, art. 96: 67-68); de que el golpe y el gobierno militar
otorga a los Comandantes en Jefe la fueron una respuesta necesaria de las
atribución de designar cuatro sena- fuerzas armadas a "la agresión marxis-
dores, los cuales actúan apoyando ta internacional". Consiguientemente,
a los representantes de los partidos los militares critican a quienes ''no
conservadores (lbid, art. 45,d: 37); y consideran en el análisis histórico de
nombran dos miembros del Tribunal la época que el mundo era bipolar
Constitucional (lbid, art. 81 b: 56). y se encontraba en pleno apogeo la
denominada "Guerra Fría", en la que
Asimismo, los oficiales siguen se enfrentaban dos cosmovisiones: por
recibiendo una formación política en un lado, la democracia capitalista y,
teorías políticas militaristas. Hasta por otro, la dictadura marxista, lidera-
hace pocos años, y quizá hasta ahora, da la primera por EE.UU. y la segunda
la bibliografía principal provenía de por la Unión Soviética. Estos actores, a
la época de la dictadura, la que in- fin de evitar el enfrentamiento directo,
cluye no sólo el mencionado libro de llevaron el conflicto a las áreas perifé-
Oehling, sino la Historia del ejército ricas del planeta, dentro de las cuales
de Chile, (Autores varios 1980-1986), estaba Sudamérica" (lbid). Repiten la
encargada por el General Pinochet, tesis de que hubo una "guerra interna"
según la cual las fuerzas armadas se en la cual ellos actuaron de modo in-
crearon antes que la nación y el Esta- cuestionable: "El Ejército no cometió
do, en el siglo XVII, y ellas son el eje atropellos a los derechos humanos.
central de constitución tanto de la na- Sí hubo bajas propias, y adversarias,
ción como del Estado, y sus interven- y algunos cometieron excesos. Natu-

-208-
Jorge Vergara Estévez

ralmente, una operación militar en los derechos humanos; la lucha contra


una situación de guerra, o al menos las nuevas amenazas que representan
de enfrentamiento armado, conlleva el narcotráfico y el deterioro del medio
violencia en esos momentos. Para ambiente; la acción conjunta contra el
consolidar el orden, esa violencia fue terrorismo; y la participación en misio-
necesaria" (Ibid). Afortunadamente, nes de paz" (Salgado, 1998).
con posterioridad, el Comandante
en Jefe del Ejército reconoció que se De acuerdo a William Perry,
cometieron actos injustificables que ex Secretario de Defensa de Estados
no pueden volver a repetirse. Unidos, los principales objetivos
son: "estrechar lazos de unión entre
Los oficiales superiores lati- las instituciones de defensa y mili-
noamericanos siguen siendo formados tares, y el compromiso de apoyar el
profesional y políticamente en Estados proceso democrático para reforzar la
Unidos en una versión actualizada de democracia, la estabilidad y la reforma
la DSN. El concepto de enemigo se económica. Específicamente, los vín-
ha modificado y ampliado. Los terro- culos de defensa y militares ayudarán
ristas -que nunca son definidos con a que las amenazas se orienten hacia
precisión-, son el enemigo principal, la paz y la estabilidad, a promover la
pero no el único. A ellos se suman los cooperación hemisférica, y alentar
narcotraficantes, la delincuencia orga- el crecimiento de las instituciones
nizada, los movimientos étnicos, por militares que sirven y benefician a la
los derechos humanos, ambientalistas, democracia" (Perry 1994).
altermundistas y otros. Un militar
chileno especializado en el tema es- Asimismo, en esta nueva ver-
cribe: "el Estado sigue siendo un actor s1on de la DSN, el concepto de
relevante y básico. Del mismo modo el "amenazas a la seguridad nacional"
concepto de seguridad se ha ampliado, se ha ampliado extraordinariamente:
abarcando los problemas de recursos "las amenazas están cambiando. En
naturales, energía, medio ambiente, especial para las grandes potencias,
población, uso del espacio, sin dejar las cuales, al desaparecer aquellas
de lado los tradicionales problemas tradicionales del enfrentamiento
fronterizos" (Villagrán, 1998). Este-Oeste, ahora deben enfrentarse
a otras mucho más inciertas. (Éstas)
Desde 1994, en la Cumbre de son un elemento de gran interés para
Miami, con el decidido impulso de planificar la defensa, razón por la que
Estados Unidos, se avanzó en el dise- se estima adecuada una revisión de
ño de una nueva DSN para las fuerzas las que se perciben en la actualidad y
armadas latinoamericanas denominada respecto de las cuales la mayoría de las
Agenda Williamsburg, "la que básica- opiniones son coincidentes: prolifera-
mente plantea que una vez terminado ción de armas de destrucción masiva;
el enfrentamiento bipolar, deben problemas limítrofes históricos; lucha
redefinirse las premisas de seguridad, por recursos escasos; narcotráfico y
orientándose, entre otras, al logro de narcoterrorismo; inmigración des-
los siguientes objetivos centrales: la de- controlada; desequilibrio estratégico;
fensa y promoción de la democracia, y problemas tribales, étnicos y políticos

-209-
1)0<::TRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL

internos; lucha de civilizaciones; Joseph Comblin,José Aldunate, y por


nacionalismos; pobreza e injusticia la jerarquía de la Iglesia. La Confe-
social; crimen organizado; catástrofes rencia Episcopal Latinoamericana, en
naturales" (Rivera, 2003). el Documento de Puebla de, 1979, la
cuestionó por su "carácter totalitario o
autocrático" (IW conferencia General
DELIMITACIÓN del Episcopado Latinoamericano 1979:
CONCEPTUAL Nº 49, 67); "por su visión estatista que
limita las libertades individuales y la
voluntad del estado se confunda con
Como puede verse, esta nueva la de la nación" (lbid: Nº 314, 131);
versión tan amplia y diversificada por su función de justificación de
es un sustituto simplificado de la "asesinatos, desapariciones, prisiones
ciencia política de los civiles y busca arbitrarias, actos de terrorismo, secues-
potenciar el supuesto básico de esta tro, torturas continentalmente exten-
doctrina, desde los sesenta: las fuer- didas, que muestran un total irrespeto
zas armadas, por su preparación y a la dignidad de la persona humana.
disciplina son la elite burocrática fun- Algunas pretenden justificarse como
damental. Por esto deben ser un actor exigencias de la seguridad nacional"
político permanente, con presencia e (lbid Nº 1262, 338); "entendida como
influencia en todos los ámbitos de la ideología absoluta, no se armonizaría
vida nacional. Al parecer, el objetivo con una visión cristiana del hombre en
central de esta nueva versión es la de cuanto responsable de la realización de
convertir a los oficiales superiores en un proyecto temporal, ni del Estado en
eficientes y preparados tecnócratas, cuanto administrador del bien común"
que conociendo una gran diversidad (lbid Nº 549, 189).
de temas de políticas públicas estén
en condiciones de participar en Asimismo, ha sido analizada y
los procesos de toma de decisiones cuestionada por cientistas sociales, ju-
públicas y, eventualmente, de tomar ristas e intelectuales latinoamericanos
el poder y gobernar los países la- como Jorge Mera, Manuel Antonio Ga-
tinoamericanos. Así se entiende el rretón, Genaro Arraigada,Jorge Tapia
significativo esfuerzo de las últimas y otros (Vgr. Tapia, 1980). El jurista
décadas de elevar la preparación aca- chileno Hernán Montealegre mostró
démica de postgrado de los oficiales las falacias contenidas en la apelación
de las fuerzas armadas y, a la vez, la de los gobiernos militares al concepto
conservación o aumento de los altos de ·'guerra interna" para justificar la
presupuestos militares, en varios supresión de los derechos humanos
países de la región. En Chile, por políticos, culturales y económico-
ejemplo, durante el período postau- sociales, el cual no corresponde a
toritario, desde I 990, el presupuesto ninguna de las figuras del derecho y
militar se ha duplicado. de los pactos internacionales Mon-
tealegre, 1978). Por su parte, Franz
La DSN en América Latina fue Hinkelammert ha situado el tema de
criticada ampliamente, en las últimas la DSN de los sesenta y setenta como
décadas, por teólogos católicos como principio legitimador de la violación

-210-
Jorge Vergara Estévez

sistemática de los derechos humanos, el general Prats, planteó las bases de


en el contexto de una concepción de- una DSN que respetaba el proceso
mocrática conservadora. Cada teoría democrático de transición al socia-
democrática jerarquiza los derechos lismo. Sostuvo, por ejemplo, que: "el
humanos de modo distinto y, en ese desarrollo del movimiento de masas
período en América Latina, los pro- es legítimo en la dinámica del mundo
yectos populistas y socialistas fueron actual, encauzado en la legalidad que
vistos por los sectores conservadores le es substancial. Los líderes populares
y las fuerzas armadas como violación chilenos comprenden por otra parte
a los derechos humanos, fundados que el ejército no está al servicio de
en los derechos de propiedad. Desde estamentos sociales específicos, sino
esta perspectiva, en las llamadas al servicio de los intereses permanen-
"dictaduras de seguridad nacional el tes de la patria" (Prats, 1972).
terror aparece como una respuesta,
como un castigo a un crimen contra Finalmente, se analizará la nue-
la humanidad, es el cuestionamien- va "Estrategia de seguridad nacional"
to de la sociedad, de su nomos (es del gobierno norteamericano, difun-
la expresión que usa Berger). Vista dida en 2002, después del atentado a
así, la represión es un intento de las torres gemelas. Allí se señala que
recuperar los derechos humanos" Estados Unidos es la "sociedad más
(Hinkelammert 1985: 88). Esta di- fuerte y libre", la única superpotencia,
mensión de recuperación del orden la cual no aceptará desafíos a su poder.
amenazado por los movimientos Su principal enemigo y de toda la hu-
populares se complementa con una manidad son las "organizaciones terro-
dimensión "fundacional". Hinke- ristas internacionales" y los "Estados
lammert ha mostrado la profunda fallidos" que los ayudan y protegen.
conexión entre "las dictaduras de Estos Estados "tratan brutalmente a
seguridad y la economía de expor- sus pueblos", auspician el terrorismo
tación". Éstas procuraron eliminar y "detestan a los Estados Unidos y lo
toda oposición a la transformación que él representa". Ambos amenazan a
de "la economía del desarrollo", la esta nación, a sus aliados y amigos con
versión latinoamericana del Estado armas tecnológicas, nucleares, biológi-
de Bienestar europeo, en "economías cas y otros. Constituyen el "imperio del
de exportación", y posteriormente en mal" frente a Estados Unidos que sería
sociedades periféricas de mercado. La "el imperio del bien" (Departamento
sociedad chilena actual es el ejemplo de Estado de Estados Unidos, 2002).
clásico de este proceso (Hinkelam- Éste empleará todos sus recursos y,
mert, 1992, 4-6). junto a los demás gobiernos aliados,
dirigirá la lucha hasta destruirlos o
Sin embargo, es necesario seña- vencerlos. Dado el carácter de esta
lar que no todas las DSN tienen este amenaza radical, se justifican las accio-
carácter conservador o reaccionario, nes y la guerra preventiva. El gobierno
radicalmente nacionalista y agresivo. norteamericano procurará el mayor
Por ejemplo, en la época de la Unidad apoyo internacional a sus acciones,
Popular en Chile, entre 1970 y 1973, pero, si no lo obtuviera, actuará unila-
el comandante en jefe del Ejército, teralmente (Ibid).

-211-
DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL

Estados Unidos es la nac10n (Foo Kong Dejo, 2003). El atentado


rectora del mundo, el paladín de la del 2001 radicalizó y apresuró el pro-
lucha de los pueblos por su dignidad; ceso de realización de dicho proyecto
y, por "ampliar el círculo del desarro- mediante la invasión de Afganistán e
llo", ayudará a los pueblos a luchar Irak, la renuncia al multilateralismo y
por la democracia y a mejorar su la inducción de la crisis de Naciones
calidad de vida. Colaborará a resolver Unidas, y la limitación de las liber-
los conflictos regionales, así como a tades públicas en Estados Unidos,
"suscitar una era de crecimiento eco- (Gallardo, 2004). Este proyecto ha
nómico mundial por medio del libre concitado el consenso de las elites po-
mercado y el comercio libre" (Ibid). líticas, económicas e incluso religiosas
Esto implica una activa promoción del de Estados Unidos. Algunos autores
modelo neo liberal en todos los países sostienen que tiene un doble carácter:
y favorecer el crecimiento económico se trata de instaurar la hegemonía de
de Europa y Japón, el cual es "vital los Estados Unidos a nivel mundial.
para los intereses de seguridad nacio- Y, en el nivel interno, de aplicar pro-
nal de Estados Unidos" (lbid). gramas de desmantelamiento de las
conquistas progresistas logradas por
Esta Estrategia es una síntesis las luchas populares durante el siglo
y, a la vez, un componente relevante XX" (Chomsky, 2003, 12).
de un proyecto político que viene
siendo elaborado desde los noventa Sin embargo, su realización
de constitución de un imperio global enfrenta importantes obstáculos: el
dirigido por Estados Unidos al cual gigantesco aumento del gasto militar,
han contribuido diversos autores el más alto de la historia, que ha ge-
como Hungtington, Fukuyama y nerando un considerable déficit fiscal
otros. Zbigniew Brzezinski es tal vez el que no puede seguir creciendo por
mayor teórico del proyecto estadouni- mucho tiempo, por sus consecuencias
dense del imperio global. En un libro económicas internas y sobre la econo-
fundamental, Thc Grand Chessboard. mía mundial. Tampoco ha asegurado,
American Primacy and Its Gcostratcgic hasta ahora, el aprovisionamiento
Imperatives, de 1997, sostiene que abundante, barato y seguro de petróleo
Estados Unidos debía elaborar una que es uno de sus principales objetivos
estrategia de largo plazo para conser- explícitos. Ha concitado un rechazo
var y acrecentar su supremacía, y ello creciente y generalizado no sólo en el
requiere el control de Eurasia, lo que mundo árabe, sino en Europa y otras
aseguraría el de África y el Oriente naciones, generando un gran movi-
próximo. Este gran continente, "el su- miento pacifista, quizá el más grande
per continente eje del mundo", como conocido. Se ha demostrado ineficaz
lo denomina, reúne las tres cuartas para disminuir los atentados terroristas
partes de la población mundial, simi- y, más bien, ha favorecido el desarrollo
lar proporción de recursos energéticos de los grupos fundamentalistas, pese al
y las seis potencias mayores después enorme despliegue de recursos huma-
de Estados Unidos, las economías ma- nos y tecnológicos empleados. Su pro-
yores y más dinámicas y, a la vez, sus yecto y principio de legitimación ético
competidores económicos y políticos político de convertir las principales

-212-
Jorge Vergara Estévez

sociedades periféricas, especialmente Su concepto de "guerra pre-


las árabes, en sociedades de mercado ventiva" proveniente de la geopolítica
de democracia liberal, al estilo nor- nazi, y rechazado en su momento por
teamericano, parece irrealizable por el ex presidente Truman, justifica las
ahora, puesto que la democracia no se guerras de agresión contra los Esta-
puede exportar, si no surgen poderosos dos considerados enemigos. Abando-
movimientos internos por la demo- na el principio básico del derecho in-
cratización (Gray, 1998). Finalmente, ternacional de ilicitud de atacar a un
el pueblo norteamericano no parece Estado que no ha usado la violencia,
dispuesto a asumir los altos costos en y su estrategia anterior de disuasión
vidas humanas, económicos y políticos y contención constituye una justifi-
que implica el intento de construir un cación para las acciones terroristas.
imperio mundial; ni tampoco la de- Minimiza el principio de cooperación
gradación que implica en convertirse, multilateral privilegiando el de la
de modo permanente, en el primer acción unilateral, lo cual es una for-
Estado terrorista del mundo, como ma de presión sobre otros Estados; e
lo ha mostrado Chomsky, es decir, incluso reivindica la impunidad para
en potencia agresora e invasora que el personal norteamericano frente al
aplica sistemáticamente la violación de Tribunal Penal Internacional, para
los derechos humanos de los pueblos asegurar la impunidad de violación
sometidos, y extrae sus recursos. de los derechos humanos sistemá-
ticamente realizados por las fuerzas
Esta estrategia, y el referido armadas estadounidense en los países
proyecto político, niegan el prin- ocupados. Incluye, en este nuevo
cipio de soberanía e igualdad entre concepto de seguridad, la promo-
los Estados, sobre el cual se había ción e imposición de las fracasadas
construido el sistema de Naciones políticas económicas neo liberales en
Unidas, que es un principio insus- todos los países, las cuales favorecen
tituible para crear un orden interna- sólo a las principales economías y
cional. Constituye una amenaza a las a las corporaciones trasnacionales,
naciones y organizaciones políticas pero perjudican a las economías
que pudieran ser considerados ene- nacionales, como puede verse en las
migos, de acuerdo a categorías muy últimas décadas en América Latina.
imprecisas y generales de "organiza- A la vez, justifica la adopción de me-
ción terrorista internacional" o "Es- didas proteccionistas para la indus-
tado fallido". Como lo ha señalado tria y agricultura norteamericanas.
Chomsky, los documentos oficiales Finalmente, puede decirse que esta
nunca incluyen una definición clara Estrategia forma parte de un proyecto
del terrorismo, puesto que cualquie- de globalización, pensado como pro-
ra de esas definiciones mostraría yección de los intereses, prejuicios y
el carácter terrorista de la política sueños de poder de Estados Unidos
internacional de Estados Unidos. (Gallardo, 2004).

-213-
DOCTRINAS DE SEGURIDAD NACIONAL

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-216-
ECOLOGÍA
Guillermo Kerber
Suiza

~ - - - - - - - - - - - Palabras Clave
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - ÉTICA - ÉTICA SOCIAL
- RACIONALIDAD - DESARROLLO - MODERNIDAD
- POSTMODERNIDAD - NUEVO ORDEN MUNDIAL - PRIMER
MUNDO-TERCER MUNDO - IDENTIDAD - UTOPÍA - GEOCULTURA
- INDIGENISMO - TEORÍNPRAXIS

INTRODUCCIÓN (información, estudio, elaboración)


con una praxis comprometida. La
contextualización de la disciplina es
El desarrollo histórico del la que le permite la posibilidad de ser
vocablo ecología (en alemán Oeko- respuesta válida a nivel latinoamerica-
logie) muestra un verdadero cambio no así como le señala los límites.
semántico. El término es acuñado en
1870 a instancias del biólogo Ernst
Hackel, discípulo de Darwin, como "el DELIMITACIÓN
estudio de las relaciones entre un ser HISTÓRICA
vivo y su entorno tanto orgánico como
inorgánico". En ciento treinta años ha
pasado de ser una rama específica de La inclusión de un término
la biología a referirse a un conjunto como ecología en una obra so-
de ciencias que tienen que ver con el bre pensamiento latinoamericano,
ambiente pero que, en algunos casos, muestra las transformaciones que
incorporan a su vez otras variables no esta disciplina ha vivido desde sus
biológicas, sociales, políticas y filosó- inicios. Para los efectos de este texto,
ficas que hacen referencia a la actual cobran especial relieve las acepciones
crisis del ambiente en el planeta. de Ecología, ya acuñadas en nuestro
continente, ya presentadas con una
La crisis ambiental y la ecolo- peculiaridad propia por los ecólogos
gía latinoamericana plantean no sólo latinoamericanos.
cuestionamientos o desafíos. También
muestran un camino práctico que hace Ingemar Hedstróm, ecólogo
su aporte a la filosofía. Por ejemplo, sueco del DEI (Costa Rica), por
el diálogo en el que nace la ecología ejemplo, habla de la "ecología hu-
latinoamericana con la ecología social mana" como disciplina intermedia
y la ecología profunda del Norte; o entre las Ciencias Biológicas y las
la conjugación de rigor científico Ciencias Sociales. En esta perspec-

-217-
ECOLOGlA

tiva, para Hedstróm, la ecología se adquirido connotaciones tan profun-


ha constituido en una crítica y hasta das que nos colocan a todos y no sólo
en una denuncia del funcionamiento a los ambientalistas, ecólogos y filó-
de las sociedades modernas. Tomar sofos en una situación límite: la vida
conciencia sobre la problemática del planeta Tierra está amenazada de
ecológica global significa necesa- desaparecer, de continuar tal cual el
riamente adquirir conciencia de la "progreso científico-tecnológico". La
situación socioeconómica, política Conferencia de las Naciones Unidas
y cultural de nuestras sociedades, sobre Ambiente y Desarrollo llevada
lo que implica conocer la situación a cabo en Río de Janeiro en 1992,
de explotación de los países del Sur puso de manifiesto la preocupación
por los industrializados del Norte mundial por la actual situación
(Hedstróm, 1985). Las publicacio- del planeta. Lamentablemente, los
nes posteriores de Fernando Mires, resultados de la Conferencia, como
también del DEI, profundizan diver- han señalado tanto representantes
sos aspectos de la cuestión. de las delegaciones oficiales, como
Organizaciones No Gubernamen-
Más al sur del continente, tales, no han estado a la altura y
Eduardo Gudynas y Graciela Evia, profundidad de la consideración de
ecólogos uruguayos del CIPFE (Mon- la problemática.
tevideo), hablan por su parte de Eco-
logía Social Latinoamericana. Cuando hablamos de crisis am-
biental, entendemos tanto problemas
Son estos dos, a nuestro modo ambientales globales como problemas
de ver, los aportes más significativos de locales. Son llamados problemas
la Ecología latinoamericana. En ambos ambientales globales, entre otros, el
casos, al hacerse cargo de la cuestión recalentamiento de la atmósfera, segu-
ambiental desde una perspectiva que ramente debido al gran incremento de
trasciende la biología e incorpora las emisiones de dióxido y monóxido
numerosos elementos de las Ciencias de Carbono, óxidos de Nitrógeno y
Sociales, merecen una atención dete- Azufre y otros gases; la reducción de la
nida por parte de la filosofía. capa de ozono, especialmente debido
a gases de cloro-fl -carbono (co-
Cada tiempo, cada época, nocido como CFC) (Gudynas, 1990).
plantea nuevos desafíos a una filo- Son problemas locales, entre otros, la
sofía que está abierta a la realidad erosión de los suelos, la contaminación
histórica, social, científica, cultural del agua de los mares, ríos y arroyos, la
en la que vive inmersa. Al filosofar contaminación del aire, la desaparición
latinoamericano se le plantea no tan- de especies autóctonas. Como respues-
to como objeto, cuanto como desafío ta a la crisis ambiental, desde nuestro
la crisis ambiental (Hernández, I 984) continente surge la denominada "eco-
y la ecología social latinoamericana logía social latinoamericana" (ESL).
como ciencia.
Murray Bookchin, uno de los
¿Por qué crisis ambiental? más conocidos ecólogos, padre de la
Porque la problemática ambiental ha ecología social, concibe la misma como

-218-
Guillermo Kerber

"una disciplina que permite estudiar "latinoamericana" en todas estas


los problemas creados por las crisis disciplinas señala, entre otros as-
sociales y ambientales" (Gudynas & pectos, el intento de unir teoría y
Evia, 1991). Por su parte,John Clark práctica. En este sentido, la ESL
la presenta como una concepción com- afirma que "la ecología social puede
prehensiva y holística del sí mismo, la caracterizarse por tres dimensiones.
sociedad y la naturaleza (Clark, 1988). Primero, es una tarea de investiga-
Ame Naess, a su vez, ha desarrollado el ción científica; segundo, esta tarea
concepto de "ecología profunda". incluye en un todo a una acción y
promoción; y, finalmente, tanto la
Ecología Social y Ecología Pro- investigación como la práctica se
funda son dos corrientes ecológicas del realizan desde una postura ética de
Norte que, si bien han mantenido una respeto a toda la vida" (Gudynas &
discusión acalorada entre sí, ofrecen Evia, 1991).
aportes a ser tenidos en cuenta en su
conjunto en una perspectiva desde
el Sur. DELIMITACIÓN
CONCEPTUAL
Los autores latinoamericanos
reconocen la importancia de las con-
tribuciones de los autores del Norte, Existen en las diversas corrien-
a quienes citan abundantemente. Pero tes de la ecología latinoamericana
expresan, por ejemplo, que estas con- (ecología humana, ecología social)
tribuciones deben ser creativamente una serie de notas comunes que ad-
re-consideradas desde una perspectiva quieren relevancia para el quehacer
latinoamericana (Gudynas & Evia, filosófico.
1991).
Las mismas pueden sintetizarse
La ESL nace en diálogo con como: interdependencia de las crisis,
su homónima anglófona, pero tiene vinculación de la crisis ambiental con
como premisa la hoy famosa frase de el modelo de desarrollo, importancia
Josué de Castro: la pobreza es el mayor de la consideración ética de la cuestión;
problema ambiental de América Latina. relevancia de la praxis, recuperación de
Con esta perspectiva, la intencionali- la dimensión utópica, referencia a los
dad de esta nueva disciplina es con- estilos de comunión indígenas:
tribuir a una superación de la división
de naturaleza y sociedad.
a. Interdependencia de
Las características de la ESL las crisis
reflejan una tendencia que se ha ido
afianzando en los últimos veinte La conciencia social de los
años en la elaboración intelectual autores que consideramos se reve-
del continente y que se ha visto la en la afirmación de que la crisis
expresada en las Ciencias Sociales, ambiental no existe al margen de la
la Pedagogía, la Teología y ahora situación socio-económico-política de
la Ecología Social. La adjetivación nuestros pueblos. No existe una crisis

-219-
ECOLOGIA

económica y una crisis cultural y una c. Importancia de una


crisis ambiental como diversas crisis. consideración ética de
Éstas están profundamente vinculadas la cuestión
entre sí, al punto que debemos hablar
de una sola crisis con componentes Ya señalamos, en el item an-
económicos, políticos, ambientales. terior, la perspectiva ética vinculada
con los modelos de desarrollo. En este
El corolario de esta afirmación nivel, es donde se sitúa un campo de
es que la respuesta a la crisis no puede
diálogo e intercambio explícito con
ser sólo política o económica o am-
la perspectiva filosófica que aborda-
biental. Tiene que articular los diversos
remos más adelante.
ámbitos para afrontarla con lucidez.

d. Relevancia de la praxis
h. Vinculación de la crisis
ambiental con el El título de uno de los libros
modelo de desarrollo , de los autores que consideramos
relevante para la ecología latinoa-
Como consecuencia de la nota mericana es La praxis por la vida. Una
anterior, la actual crisis ambiental introducción a las metodologías de la
latinoamericana (deforestación del Ecología Social (Gudynas y Evia 1991).
Amazonas y de los bosques tropicales ! Su propuesta no es sino un manual
de Centro América, contaminación para agentes sociales que conjuga la
del aire en las grandes urbes como atención a las diferentes prácticas del
Ciudad de México, Santiago de Chile
trabajo social, en una investigación
y San Pablo, erosión de los suelos,
participativa, liberadora, de la vida co-
procesos de desertificación, contami-
tidiana con un acento en las situaciones
nación del agua en ríos, mares, etc.)
de marginalidad, pobreza y exclusión
tienen una estrecha vinculación con
social, con la atención al entorno, al
los modelos y las políticas de desa-
ambiente, al ecosistema, en el que los
rrollo aplicados en América Latina
grupos humanos habitan.
a lo largo de su historia. Algunos in-
vestigadores hacen una historia de la
depredación ambiental desde la época
de la conquista. e. Recuperación de la
dimensión utópica
Vale decir que la gravedad de
la crisis ambiental no es sólo por el Ante hipótesis que procla-
riesgo de desaparición de tal o cual man el fin de las ideologías, el "fin
especie (en cuyo caso la respuesta de la historia" (F Fukuyama) o el
sería una política conservacionista), enfrentamiento de civilizaciones (S.
sino por lo que aquélla significa en Huntington), los ecólogos latinoa-
cuanto a los valores éticos que están mericanos reivindican el papel mo-
en juego en los diversos modelos de vilizador de la utopía. Actualmente,
desarrollo. La cuestión de un desarro- la dominación de la Naturaleza está
llo ambientalmente sustentable es un anclada en una ideología que todo
tema todavía en discusión. lo tiñe. La Naturaleza es concebida

-220-
Guillermo Kerber

como fuente ilimitada de recursos, Una América Latina que apostó


siempre al servicio del hombre, sin a la modernización y a la industrializa-
derechos propios. La dominación se ción según el modelo occidental y que
ha extendido a ser dominación en sí consideró a los indígenas barbarie,
misma, no sólo sobre la Naturaleza lastre, atraso, hoy debe revisar sus
sino también sobre los hombres. patrones de desarrollo si quiere so-
Ella se mantiene vigente gracias brevivir. La conmemoración, en 1992,
a una cultura, a una técnica, una de los quinientos años de la conquista
ciencia y una política que la legiti- de América, abrió el camino, en los
man. Ante esta situación, reacciona años siguientes, a una consideración
la ecología social y contrapone una más amplia del pensamiento indígena
utopía a esta ideología antropocén- en diversos países latinoamericanos.
trica y dominadora. La utopía a la Las movilizaciones y reivindicacio-
que se apunta es la del re-encuen- nes planteadas por movimientos
tro del hombre con la Naturaleza indígenas en los 90 y a comienzos
y de los hombres entre sí. Es una del nuevo siglo en Bolivia, Ecuador y
utopía de desenmascaramiento de México han vuelto a poner de relieve
la ideología actual, muestra sus un potencial silenciado con un fuerte
límites, la pone en tensión apun- impacto político.
tanto a un futuro posible. Es una
utopía movilizadora. La ecología
social es uno de los senderos hacia CUESTIONES
esa utopía. Los procesos del Foro FILOSÓFICAS
Social Mundial, tanto los celebra-
dos en Porto Alegre (2001 - 2003)
como en Mumbai (2004) así como A esta altura del desarrollo
los foros temáticos y regionales han temático, pensamos que ya está su-
subrayado esta dimensión utópica ficientemente explicitada la sintonía
expresada desde su lema "Otro de este modo de hacer ecología con
mundo es posible" con un fuerte un modo latinoamericano de hacer
componenete ecológico. filosofía.

Un poco más arriba señalá-


f. Referencia a los estilos bamos que la crisis ambiental y la
de comunión indígenas ecología latinoamericana más que un
objeto para la consideración filosófica
¿Qué valores proponer para un se plantean como un desafío para la
cambio en la relación del hombre con misma. ¿Por qué? Porque un análisis
la Naturaleza que ha provocado y si- del desafío ecológico, tal como lo
gue provocando tantos desastres? Uno estamos presentando, nos permite
de los referentes para esta nueva escala reconocer que su cuestionamiento
de valores es el estilo de relación más atraviesa el espectro de la filosofía
participativo del ser humano en rela- pudiendo señalar, por lo menos, las
ción con su entorno, tal como fue y es siguientes cuestiones: ética, antropo-
vivido en las diferentes comunidades lógica, epistemológica y la cuestión de
indígenas de América Latina. la "liberación".

-221-
ECOLOGIA

a. La cuestión ética mo y propone el biocentrismo como


respuesta ecológica. La polémica an-
La filosofía latinoamericana tropocentrismo-biocentrismo ha sido
ha enfocado desde sus inicios el fi- una de las más fecundas de uno de los
losofar como una ética y en especial primeros eventos latinoamericanos
como una ética política. Para Dussel, dedicados a los desafíos planteados
por ejemplo, la ética política es filo- por la ecología, el primer Encuentro
sofía primera. En este campo, como de "Cultura, Ética y Religión frente
apuntábamos más arriba, el tema del al desafío ecológico" (1990). En su
desarrollo no ha sido todavía resuelto. ponencia en el mismo, Ramos Regi-
La teoría de la dependencia surge a dor critica con razón la reducción a
fines de los 60 para criticar el modelo los problemas biológicos o bióticos
desarrollista de la Alianza para el y físicos del ecosistema sin explícita
Progreso. Hoy, las discusiones sobre conciencia de la dimensión social de
el desarrollo sustentable aún no han la cuestión ambiental (1990). En los
llegado a su fin. encuentros siguientes, celebrados en
Buenos Aires y Porto Alegre, diversas
Pero, en otro nivel dentro de exposiciones abordaron desde distin-
la misma perspectiva ética, la crisis tos ángulos la temática.
ambiental pone en cuestión el valor
"vida" en todas sus manifestaciones. La cuestión ecológica vincula-
La dialéctica muerte-vida adquiere da a la cuestión del género es tratada
mayores y más estridentes tonos con profundidad por Vandana Shiva
de resonancia. La muerte, realidad en su libro sobre la mujer y la ecología
cotidiana en el continente, se vuelve en la India (1991). Su análisis econó-
clamor ético cuando alcanza princi- mico y filosófico del tema ambiental
palmente a los niños, las mujeres, los en escritos posteriores, aporta elemen-
indígenas, los pobres, los excluidos tos interesantes en el diálogo Sur-Sur,
de una vida digna y plena. También desde esta óptica.
cuando la muerte ataca la vida de los
ríos y los suelos.
c. La cuestión
La ética ambiental es todavía epistemológica
una tierra casi ignota para la reflexión
filosófica latinoamericana. Los pri- La propuesta de la ecología la-
meros pasos son sólo incipientes. tinoamericana contribuye a cuestionar
Algunas indicaciones se encuentran la racionalidad científico-técnica de
en un trabajo de S. López. Occidente que ha sido hegemónica y
que no ha sido evitada en la reflexión
filosófica latinoamericana.
b. La cuestión
antropológica La mayor parte de las veces,
la necesidad de responder a un cues-
La concepción moderna del tiona mi en to a la racionalidad del
hombre sufre los embates de la ESL discurso filosófico latinoamericano
cuando ésta critica al antropocentris- por parte sobre todo de la filosofía

-222-
Guillermo Kerber

europea, ha requerido tanta energía La filosofía latinoamericana


en los filósofos que los ha enredado de la liberación, no puede dejar de
en su propia trama. lado lo ambiental. La cuestión "ver-
de" ha sido mirada la mayor parte de
No sólo, como mencionamos las veces como un hobby europeo o
más arriba, por las repercusiones norteamericano, con algo de roman-
de los quinientos años de América ticismo decadente, a lo sumo como
Latina el recurso a la racionalidad del un momento posterior al proceso de
pensamiento indígena precolombino liberación socio-económico-político
es una constante a diversos planos que se considera impostergable para
del discurso. Filósofos como Kusch nuestro continente.
hace años planteaban el desafío del
pensamiento indígena. Las obras de B. Sin embargo, hacerse cargo de
Meliá, por ejemplo, son una profun- la variable ambiental es una cuestión
dización en la antropología guaraní compleja. La pregunta la podemos for-
(Meliá, 1988). mular así: ¿cómo integrar la variable
ambiental al proceso de liberación de
La referencia en la ESL a un América Latina? Y consecuentemente,
estilo de relación más en comunión ¿ qué filosofía debería fundamentar
con la Naturaleza, es otro aspecto a esta praxis?
tener en cuenta.
La crisis ambiental plantea una
serie de preguntas a la reflexión. La
d. La cuestión de la ecología como ciencia busca respon-
"liberación" der a estas preguntas. Los ecólogos
latinoamericanos buscan hacerse
La filosofía de la liberación de cargo "latinoamericanamente", valga
la década del '70 surge íntimamente la redundancia, de la cuestión y
relacionada a un análisis sociológico proponen una Ecología Social lati-
de la realidad. Es el que le permite ha- noamericana. Esta nueva disciplina se
blar de liberación, opresión, injusticia, abre paso buscando conjugar investi-
al considerar la situación económica, gación con praxis y ética. Una nueva
política y cultural. investigación que pro-voca y con-voca
a los filósofos a revisar esquemas,
El paso de más de treinta precomprensiones, afirmaciones. La
años desde aquellas controversias filosofía latinoamericana ha sido de-
entre Salazar Bondy y Zea o de las safiada por esta disciplina regional (la
Jornadas de San Miguel (Argentina), ecología latinoamericana) que enfoca
nos han revelado la complejidad de una problemática global (la crisis am-
los planteamientos y, por lo tanto, biental) y que, a través de sus notas,
de las respuestas a dar. Una vez más o características, plantea una serie de
la simplificación de la problemática, cuestiones al filosofar.
en este caso el reduccionismo a lo
ecológico, hipotecaría de nuevo la En los albores del nuevo mile-
respuesta a la crisis que estamos nio el pensamiento filosófico latino-
viviendo (López, 1991). americano se encuentra tal vez hoy

-223-
ECOLOGIA

en una situación de menor tensión i teología o de las ciencias sociales,


para relevar su propia racionalidad, tal vez hoy en América Latina deba
su propio camino. Y así como en otro tornar como compañera de camino
momento o en otro lugar, la filosofía también a la Ecología Social Lati-
caminó de la mano de la física, de la noamericana.

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-225-
EDUCACIÓN LIBERADORA
Juan Eduardo García-Huidobro
-------·------- - - - - ----

Chile

Palabras Clave
CONCIENCIA CRÍTICA - TEORÍA DE LA COMUNICACIÓN
- DESARROLLO - MODERNIDAD - CULTURA - HISTORIA
- POLÍTICA - PUEBLO

mayorías; de otra parte, constituye


INTRODUCCIÓN una propuesta alternativa que busca
poner a la educación al servicio del
cambio social, contribuyendo a que
La educación liberadora, en los sectores populares lleguen a ser
sentido amplio, ha acompañado a la sujetos/actores conscientes y organi-
educación latinoamericana durante zados en la transformación estructural
todo su desarrollo. Ya en el siglo XIX de la sociedad, necesaria para el logro
las luchas por la emancipación de la de su liberación.
tutela de la Corona y el proceso de
constitución de estados nacionales,
señalaron la educación del pueblo DELIMITACIÓN
como condición de la formación de HISTÓRICA
verdaderas repúblicas. Sin embargo,
el nacimiento del término data del
comienzo de los años sesenta y posee Se señaló como fecha de naci-
un sentido bastante más preciso. La miento del uso del término "educa-
educación aparece desde siempre ción liberadora" los años 60. Quien
como la institución encargada de la lo acuña es el educador brasileño
permanencia de una sociedad (fun- Paulo Freire (nacido en Recife 1921
ción reproductora), pero también y fallecido en Sao Paulo en 1997).
se la ha asociado siempre al cambio Este comienza a elaborar su método
y al enriquecimiento de la sociedad a partir de experiencias prácticas en
(función creadora). La educación 1961. El primer texto que le daría re-
liberadora reinterpreta estas dos fun- nombre a Freire, más allá de su Brasil
ciones de la educación en un doble natal: Educacao como práctica da
sentido: de una parte, cumple una Libertade, se publica en 1967, fecha
función crítica frente a los sistemas para la cual su autor ya ha padecido
educativos establecidos en la región, la prisión y ha debido emigrar como
a los que se ve como instrumentos de consecuencia del Golpe Militar de
legitimación de la situación de injus- 1964. Desde sus inicios el pensamien-
ticia y dominación en la que viven las to de Freire tuvo una gran acogida en

-227-
EDUCACIÓN LIBERADORA

los medios cristianos progresistas de pueden ser caracterizados por dos


América Latina. A través de la Iglesia rasgos comunes: ellos buscan la or-
Católica, la "educación liberadora" ganización de los sectores populares
alcanza gran notoriedad, ya que es de modo que éstos se constituyan en
propuesta como camino para la edu- reales actores de la sociedad y buscan
cación católica latinoamericana en lo anterior a través de una educación
la Segunda Conferencia General del que subraya siempre la participación
Episcopado Latinoamericano (Mede- de los educandos como algo inherente
llín, 1968) 1 a este tipo de educación.Junto a estos
rasgos comunes hay que indicar tam-
En la década de los sesenta, los bién que los procesos de educación
términos educación liberadora y edu- popular están atravesando por una
cación popular se usan casi indistinta- discusión política acerca de muchos
mente. Sin embargo, es posible mostrar de sus puntos cruciales: ¿qué es lo
algunas variantes históricas entre am- popular? ¿qué caracteriza a la orga-
bos conceptos. El término educación nización popular, a la participación
popular tiene una historia más larga, popular 7 ¿cuál es el rol del educador?
ya que así se suele denominar a todo ¿cómo interpretar la relación entre la
el lento proceso de creación, en Amé- cultura popular y la cultura letrada u
rica Latina, de una escuela universal, oficial? 2 •
gratuita y obligatoria, el cual se inició
antes de la Independencia y sólo cul- Se presentan a continuación
mina, dando lugar a una real escuela de las ideas centrales de la problemática
masas, entre los años '50 y '60. En esta de la educación liberadora y/o edu-
acepción educación popular es igual a cación popular. Para comenzar, una
educación del pueblo o de los sectores precisión de vocabulario: aunque,
populares. Más recientemente, durante como se dijo, la educación liberadora
las décadas del '70 y del '80, se empieza tiene un lugar/tiempo identificables,
a hablar preferentemente de "educa- en varios momentos de su desarrollo
ción popular", para señalar procesos no es diferenciable de la educación
educativos que guardan semejanza popular. Además la temática ha sido
en sus objetivos y métodos con los tratada también bajo otros rótulos
nacidos bajo el apelativo de educación que hay que tener en cuenta para una
liberadora: acá el término "popular" visión más integral: 1) el desarrollo
identifica una opción política explícita en América Latina de la educación de
que tiene una clara connotación de cla- adultos (llamada también educación
se. El sector popular tiene en común su popular de adultos o educación no
carácter de oprimido y dominado. En formal de adultos): y 2) las variadas
este período el pensamiento de Freire experiencias de investigación-acción
sigue siendo inspirador, pero se recurre (o investigación participante).
más a su Pedagogía del Oprimido
(1969) y a escritos posteriores de ca- El texto que sigue comienza
rácter más político. con una breve presentación histórica
de la problemática de la educación
Los procesos de educación del pueblo en América Latina; a con-
popular de las últimas dos décadas tinuación, se resume el pensamiento

-228-
Juan Eduardo Gracía-Huidobro
---------

de Freire, la propuesta de Medellín y aumento real aunque limitado de la


se entregan algunos rasgos de la pro- escolarización. De hecho, las metas
blemática de las últimas décadas. propuestas sólo se alcanzan en los
países latinoamericanos casi cien años
l. La preocupación por la después. Recién al promediarse el siglo
educación de los sectores populares, XX es legítimo hablar de una "escuela
sentido amplio de educación popular de masas" en América Latina 3 •
que la contrapone a la educación de
las élites, tiene una historia larga en 2. Para Paulo Freire el primer
América; aún más larga que la historia referente de la "educación liberadora"
del surgimiento y desarrollo de los es la "estructura de dominación" que
Estados nacionales y de la formación caracteriza a las sociedades dependien-
de las respectivas conciencias nacio- tes. Para enfrentar esta realidad, Freire
nales. Algunos marcan su inicio en enfatiza que una transformación de las
la era borbónica reformista (segunda estructuras no es posible ni válida, si no
mitad del siglo XVIII), la que junto se acompaña y no va procedida por una
con propiciar la educación popular en verdadera liberación de las conciencias.
la metrópoli, para modernizar la socie- Se subraya así que la dominación es
dad española y mejorar su agricultura también y muy fundamentalmente
y manufactura, hace extensiva esta cultural; ella vive en la conciencia de
política a las provincias de ultramar. los oprimidos ("conciencia hospedado-
ra de la opresión", PL4 ), convirtiendo
Sin embargo, el real nacimiento la cultura del pueblo en una "cultura
del proyecto de una educación popular del silencio", que conlleva el fatalismo
institucionalizada se liga, más bien, al y el determinismo, e imposibilita la
proceso de construcción de un Estado organización del pueblo y su acción
político consolidado y al ideario eman- transformadora.
cipa torio que lo acompaña. Así, puede
hablarse de una concepción bolivariana La educación, enmarcada en
que incluye la idea de expandir la edu- el proyecto global de liberación de
cación popular, como servicio estatal, los oprimidos, expresa sus objetivos
propuesta que encuentra su paralelo en en términos de "praxis". El cambio
sociedades de artesanos que nacen en de conciencia será la condición para
distintos países en el siglo XIX y que pasar de la inmersión pasiva en la
pregonan el desarrollo de la educación sociedad a una capacidad de acción
del pueblo como condición para que y lucha por su transformación. ("La
el nuevo Estado fuese posesión de forma de actuar-de los hombres- es
todos. Ahora bien, este ideal superó función, en gran parte, de cómo se
las posibilidades de realización de los perciben en el mundo", PO). De acá
jóvenes Estados y es sólo en la segunda el término "concientización" que
mitad del S. XIX cuando empieza a ha popularizado el pensamiento de
concretizarse en leyes sobre instruc- Freire. Tomar conciencia es apropiarse
ción primaria gratuita y obligatoria críticamente de la situación, lograr
(por ejemplo, 1860 en Chile; 1861 en una conciencia crítica e histórica. Es el
México; 1870 en Venezuela; 1884 en paso de estar en el mundo a estar con
Argentina), en instituciones y en un el mundo; hecho que nunca es solitario

-229-
EDUCACIÓN LIBERADORA

porque el mundo humano es social, no su célebre contraposición entre esta


existe fuera de la intersubjetividad y de educación y su contrario, la educación
la comunicación. El conocimiento hu- anti-dialógica o "bancaria". Mientras
mano es una estructura dialógica. Así, en la primera los sujetos de la edu-
la educación liberadora es llamada tam- cación son tanto el educando como
bién "educación dialógica". La toma de el educador, en diálogo (lo que lleva
conciencia conduce a un encuentro de a la repetida frase de Freire: "no más
sujetos, mediatizados por el mundo, educador del educando, no más edu-
para pronunciarlo. "La existencia hu- cando del educador, sino que educa-
mana, en tanto humana, no puede ser dor-educando y educando-educador),
muda, silenciosa, ni tampoco nutrirse en la educación anti-dialógica el único
de falsas palabras, sino de palabras , sujeto es el educador, pasando a ser el
verdaderas con las cuales los hombres · educando un receptáculo en el que se
transforman el mundo" (PO). deposita el conocimiento de éste. Si en
la educación bancaria el objeto-objeti-
Otro rasgo central del pensa- vo de la educación es una realidad, ya
miento de Freire es la unión entre la definida, que debe ser mantenida y a
reflexión, que es la palabra-diálogo- la cual los educandos están obligados
comunicación, y la acción (praxis=co- a adaptarse, en la educación liberadora
nocimiento+acción). El pensar crítico ' el objeto es la realidad histórica. Ella
"no se dicotomiza a sí mismo de la es, de una parte, materia mediadora de
acción, sino que es básicamente un los sujetos en diálogo para producir
pensamiento histórico que se inserta conocimiento en un proceso de síntesis
1

en el mundo para humanizarlo" (PO), cultural entre diversas perspectivas y


lo que permite la autopercepción de es, de otra parte, el mundo que debe
los hombres "como sujetos de la trans- ser problematizado y transformado, en
formación del mundo" (PO). pos de su humanización como proceso
permanente.
En muy apretada síntesis, te-
nemos que la educación liberadora de Es claro que no basta con con-
Freire busca superar una situación de ceptualizar una educación para la
dominación, que somete a las grandes liberación; es preciso también inventar
mayorías al silencio y a una aceptación procedimientos para educar en confor-
acrítica de un mundo dicho/hecho por midad. De nuevo acá sobresale Paulo
otros. La liberación se dará a través Freire con sus aportes metodológicos.
de la toma de conciencia, que es en- El más conocido es su método de al-
cuentro con el mundo y con los otros, fabetización, llamado a veces método
en un diálogo en el que recuperan su psico-social, pero son notables también
palabra y con ella su capacidad de or- sus contribuciones a la educación agrí-
ganizarse y transformar el mundo. cola y a la educación política. Todas
estas contribuciones tienen algunos
Hasta acá el núcleo de ideas- rasgos en común. Para señalar uno de
fuerza que caracterizan la educación los principales, es posible indicar que el
dialógica, liberadora, problematizado- proceso educativo se concibe como un
ra, propuesta por Freire. Su concreción proceso de creación cultural. Su primer
pedagógica es presentada por Freire en paso será siempre el respeto a la cultura

-230-
Juan Eduardo Gracía-Huidobro

popular, la que debe ser conocida e lo que se logra a través de una


investigada por el educador y devuelta educación "abierta al diálogo,
a los educandos para producir su aná- para enriquecerse con los va-
lisis crítico y su superación mediante lores que la juventud intuye y
una síntesis cultural que incorpora los descubre ... "
aportes del educador (sujeto, también, se trata de una educación crea-
del diálogo educativo). dora, "pues ha de anticipar el
nuevo tipo de sociedad que
3. La concepción y el término buscamos en América Latina".
"educación liberadora" encuentran Lo que lleva a criticar "desde
una importante recepción en diversas un punto de vista social, los
iglesias cristianas de América latina. sistemas educativos (que) están
Así, la Segunda Conferencia General orientados al mantenimiento
del Episcopado Latinoamericano de las estructuras sociales y
(Medellín, 1968), se propone "com- económicas imperantes, más
prometer a la iglesia (Católica) en que a su transformación".
el proceso de transformación de los por último, la educación libera-
pueblos latinoamericanos" 5 y, desde dora debe "afirmar con sincero
esta perspectiva, hace suyo el término aprecio las peculiaridades loca-
"educación liberadora" y recoge varios les y nacionales en la unidad
de los planteamientos freirianos. pluralista del continente y del
mundo". En esta perspectiva
En Medellín, la educación aparece el respeto a la cultura
liberadora es la respuesta educativa a popular y la educación como
una sociedad opresiva, atravesada por síntesis cultural, encontrados
"tensiones entre clases y colonialismo ya en Paulo Freire. Afirman
interno", que da lugar a una "violencia los obispos: "La educación
institucionalizada", y por "tensiones de estos hermanos nuestros
internacionales y neo-colonialismo no consiste propiamente en
externo". Se insiste, como en Freire, incorporarlos a las estructuras
en la dupla toma de conciencia/cam- culturales existentes, y que
bio de estructuras. Marcando, eso sí, pueden también ser opreso-
una originalidad propia al pensamien- ras, sino en algo mucho más
to cristiano, se conjugan permanen- profundo. Consiste en capaci-
temente dos aspectos: el social, cuyo tarlos para que ellos mismos,
referente es América Latina, la que ne- como autores de su propio
cesita redimirse de las "servidumbres progreso, desarrollen de una
injustas" y la personal, que nos llama manera creativa y original un
a superar "nuestro propio egoísmo". mundo cultural, acorde con su
Los rasgos básicos de la "educación propia riqueza y que sea fruto
liberadora" propuesta en Medellín de sus propios esfuerzos. Es-
son los siguientes: pecialmente en el caso de los
indígenas se han de respetar los
es liberadora la educación valores propios de su cultura,
"que convierte al educando en sin excluir el diálogo creador
sujeto de su propio desarrollo"; con otras culturas".

-231-
EDUCACIÓN LIBERADORA

DELIMITACIÓN posiciones que por privilegiar el rol


CONCEPTUAL protagónico de los sectores populares
empobrecen la educación al negar el rol
del educador (definido como un mero
La educación liberadora nace animador) y al descuidar la síntesis
en un momento en que la sociedad cultural que debe darse entre la cultura
latinoamericana esperaba mucho de popular y el conocimiento que provie-
la educación. Una de las caracterís- ne de la ciencia y de la técnica".
ticas de la teoría del desarrollo (del
desarrollismo, en boga) era poner a la Es difícil dar cuenta del desa-
educación como una palanca central rrollo de la educación liberadora o
para la modernización de la sociedad popular en estos años. Ciertamente
y la superación del subdesarrollo. que ella adquiere rostros muy distin-
Los años sesenta son de un aumento tos cuando está inserta en un proceso
explosivo de la oferta educativa desde nacional que es popular y mayoritaria-
los Estados, oferta que es muy bien mente aceptado como liberador, como
recibida por la sociedad, lo que per- la Cruzada Nacional de Alfabetización
mite hablar de un creciente aprecio de Nicaragua (1980); o cuando acom-
popular por el acceso a la Escuela. En paña las estrategias de sobrevivencia
ese marco social la educación libera- material y de defensa política de los
dora criticaba los sistemas educativos sectores populares en el marco de
existentes, cambiaba el énfasis en la dictaduras militares que suspenden
educación, insistiendo en su carácter los derechos civiles y sociales más
político y en la necesidad de que ella básicos (por ejemplo, situación vivida
contribuyera en la constitución de los en los países del Cono Sur y Brasil);
grupos populares en sujetos sociales pasando por la situación intermedia
y políticos plenos. Pero ella mantenía de países con democracias represen-
una enorme confianza en la educación tativas y en proceso de modernización
como palanca de cambio. social. También ella adquiere énfasis
y orientaciones diferentes según sean
Los aflos setenta marcan una las características de los grupos popu-
inflexión a la tendencia anterior. Em- lares entre los que actúa: es distinto
piezan a predominar teorías críticas el punto de partida y las necesidades
respecto a la educación, que tocan educativas de grupos obreros, ele
muy fundamentalmente a la escuela grupos de marginales urbanos o de
que fue definida como un instrumen- grupos de campesinos en una eco-
to para la reproducción ideológica y nomía de autosubsistenoa 7 .
social del sistema imperante, pero
que mellan también la confianza en Cruzando esta diversidad pue-
la educación de muchos grupos de den distinguirse tres rasgos o finalida-
educación popular. Lo anterior en des comunes a las más variadas expe-
varios sentidos: ya sea, subordinándola riencias y movimientos de educación
a una perspectiva de transformación liberadora. Estos son: su búsqueda
revolucionaria y reduciéndola sólo a del cambio social en pos ele un orden
un instrumento de politización de los más justo; su carácter participativo,
grupos populares; ya sea, cayendo en tanto porque buscan abrir espacios de

-232-
Juan Eduardo Gracía-Huidobro
----------------------------

participación popular en la sociedad, de la unidad del movimiento popular


como porque lo hacen a través de un y, en consecuencia, postula que todo
método educativo que se define como el proceso de organización popular
participativo; finalmente, todos postu- debe basarse en la existencia actual
lan el fortalecimiento de las organiza- de un germen o inicio de la misma:
ciones de los sectores populares como el o los partidos obreros, a los cuales
el camino para lograr tanto el cambio deben vincularse las experiencias de
social como la participación efectiva educación popular. Acorde con este
de los sectores populares. modo de ver, da primera importancia
a la formación de dirigentes que se
La expresión concreta de esta apropien de "la" teoría o visión del
búsqueda común se materializa con cambio común al movimiento. La
diferencias. Así, se ha podido señalar segunda matriz no discute la idea que
que se dan casos en los que el cambio el poder de los sectores populares se
social propiciado se desarrolla bajo el acrecentará al llegarse a un movimien-
control del poder del Estado, otros to popular unitario, sin embargo pos-
en que el cambio social se identifica terga el problema de la organización
con el fortalecimiento de la sociedad unitaria. Insiste más bien que el aporte
civil para abrirla a un mayor nivel de de los procesos educativos liberadores
democratización social y política y, fi- está en un trabajo lento y profundo,
nalmente, otros grupos ven el cambio que vitalice las organizaciones de
a través de una acumulación de poder base, para que de ellas vaya surgien-
de las clases populares para lograr una do un movimiento popular que se
transformación de la sociedad bajo espera, sea crecientemente unitario y,
su dirección 8 • Además de estas dis- al mismo tiempo, enriquecido por la
tintas orientaciones se puede señalar diversidad del mundo popular.
también un conjunto de tensiones
que cruzan los distintos procesos de
educación popular. Sólo a modo de POSTCRIPTUM
ilustración se enuncian tres de estas
tensiones: 1) Una tensión pedagógica
al in tentar constituir una relación El texto anterior está profunda-
educativa que, sin negar la respon- mente atado a su tiempo: optimismo
sabilidad del educador, sea fiel a las de los sesenta, dolor de derrotas, pos-
exigencias de "participación" de los trimerías de los tiempos de dictadura
educandos; 2) Una tensión cultural y una mirada esperanzada del tiempo,
que se da al buscar simultáneamente los tiempos que se abrían.
el respeto de la expresividad popular y
el ser un aporte para que esta palabra Con la distancia de este tiempo
del pueblo se problematice y llegue a (15 años no pasan en vano) se pueden
explicarse la situación en que vive; 3) hacer algunas afirmaciones que mues-
Hay, por último, una tensión política tran la continuidad y el cambio.
entre dos concepciones de la política
que coexisten; una matriz política Paulo Freire falleció y es hoy,
más clásica y otra más emergente. La ciertamente, el más grande educador
primera pone en primer plano el tema del siglo XX en América Latina; al

-233-
EDUCACIÓN LIBERADORA
-- - - - - - - - - - - - -

menos, el único que ha logrado un la vida social. En América Latina


lugar en el pensamiento mundial gana terreno la propuesta de CEPAL
sobre educación. (1992) sobre la Transformación pro-
ductiva con equidad, cuyo corolario
El mundo cambió, todos cam- educativo fue planteado en el docu-
biamos en estos años. Con la demo- mento CEPAL-UNESCO "Educación
cracia llegó la necesidad de ocuparse y conocimiento: eje de la transforma-
de la sociedad, de reconstruir las ción productiva con equidad", que
instituciones, de abrir espacios de más revaloriza el papel de la educación
justicia e igualdad. En estos nuevos en el desarrollo actual de la región y
empeños, de nuevo, la educación fue vincularla al esfuerzo mayor de au-
crucial. (El mismo Paulo Freire fue mentar simultáneamente en nuestras
en 1989, Secretario de Educación en sociedades competitividad producti-
el Municipio de Sao Paulo.) va, equidad y ciudadanía.

Durante los noventa son nu- En la actualidad las Reformas


merosas las referencias a la educa- educativas recorren la región. Bus-
ción como un elemento central de can una educación de más calidad
la justicia social y de la integración y mejor distribuida; enfatizan de
y, ¿por qué no? de la libertad de las nuevo y de otra forma la vieja idea
mayorías. En 1990, la Conferencia que liga conocimiento y libertad; se
Mundial sobre Educación Para Todos plantean por primera vez una visión
Qomtien, Tailandia), que tiene su más internacional y más global de la
centro en el concepto de "necesida- humanización y la liberación, mirada
des básicas de aprendizaje", con el que el mismo Paulo Freire alcanzó a
cual se quiere mostrar que en nuevo promover, al postular una educación
escenario de la sociedad del conoci- con dimensión internacional, tanto
miento, los excluidos de la educación en la visión de la realidad como en el
están absolutamente al margen de compromiso de solidaridad.

NOTAS

1 Para una visión completa de la vida, obra y bibliografía sobre Paulo


Freire recomendamos recurrir al Instituto Paulo Freire (Sao Paulo)
http://www.paulofreire.org/
2 Son muchos los autores que han mostrado rastros de esta discusión. Ver
los textos citados de Jara, Paiva, Brandao, García-Huidobro, Barquera.
3 Para completar este breve bosquejo puede recurrirse a los textos de C.
Braslavsky y de G. Weinberg.
4 PL= Educación como práctica de la libertad; PO= Pedagogía del Oprimi-
do.
5 Las citas entre comillas están sacadas de las "Conclusiones" de la citada
Conferencia.

-234-
Juan Eduardo Gracía-Huidobro

6 En relación al tema pueden verse los análisis críticos de Rama y Paiva.


7 Para una caracterización final de estas situaciones puede verse, entre
otros, Brandao (1984) y García-Huidobro (1982).
8 Caracterización de Brandao (1984).

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-237-
ENSAYO
Fernando Aínsa
España

, - - - - - - - - - - - - - Palabras Clave
LITERATURA LATINOAMÉRICA - IDENTIDAD - MESTIZAJE
- SÍMBOLO - NÚCLEO ÉTICO/MÍTICO - NUEVO MUNDO
- FILOSOFÍA INTERCULTURAL

INTRODUCCIÓN ya, en sí, un problema, un ensayo de


nuevo mundo, algo que tienta, provo-
No por azar, el más indefinido ca, desafía a la inteligencia" 1 .
de los géneros literarios -el ensa-
yo-ha sido tradicionalmente el más Género utilizado para que los
representativo e idóneo para reflejar europeos reflexionaran sobre la singu-
la plural y compleja, cuando no con- laridad del Nuevo Mundo -como hizo
tradictoria, realidad latinoamericana. el propio Montaigne en sus famosos
Género incitante, polémico, paradó- ensayos Los caníbales, Los vehículos y
jico, problemático, pero básicamente De las costumbres- esta nueva forma
dialogante, el ensayo cubre una parte expresiva sirvió también a los america-
amplia del spectrum semántico de nos para conocerse e identificarse a sí
un continente que desde su incor- mismos. La modalidad--que otros lla-
poración al imaginario occidental ha man proto-ensayos- estaría presente
provocado interrogantes y reflexiones. en la tradición de crítica y protesta que
"¿ Por qué la predilección por el ensa- inauguran el sermón de Montesinos
yo en nuestra América?"-se pregunta (15ll) y La relación de la destrucción
Germán Arciniegas en 1963- para de las Indias (1552) de Bartolomé De
recordar que muchas páginas de corte Las Casas. Mientras la novela aparece
ensayístico se escribieron en el Nue- en forma tardía y el género biográfico
vo Mundo antes de que Montaigne será inexistente hasta la época con-
reflexionara sobre la alteridad ameri- temporánea, el ensayo como palestra
cana y reconociera que "nada hay de natural de discusión ya está presente
bárbaro ni de salvaje en esas naciones; en las amonestaciones a los encomen-
lo que ocurre es que cada cual llama deros del sermón navideño de Mon-
barbarie a lo que es ajeno a sus cos- tesinos y en la apasionada defensa de
tumbres". Para Arciniegas esa singu- los indios que hace De las Casas.
laridad era evidente ya que "América
surge en el mundo con su geografía y A partir de entonces, el pen-
sus hombres, como un problema. Es samiento latinoamericano se expresa
una novedad insospechada que rompe a través de este género marcado por
con las ideas tradicionales. América es la urgencia y la intensa conciencia de

-239-
ENSAYO

la temporalidad histórica; elabora Con el mismo apasionado én-


diagnósticos socio-culturales sobre fasis, el ensayo ha propiciado también
la identidad nacional y continental denuncias de injusticias y desigual-
-"radiografías" al modo de Radio- dades y ha inspirado el pensamiento
grafía de la pampa (1933) de Eze- antiimperialista o el de la filosofía de
quiel Martínez Estrada o El perfil del la liberación con un sentido de ur-
hombre y la culiura en México ( 1934) gencia ideológica más persuasivo que
de Samuel Ramos y, posteriormente, demostrativo y donde el conocimiento
El laberinio de la soledad (1950) de del mundo no se puede separar del
Oc ta vio Paz-; reflexiona sobre la di- proyecto de transformarlo. De ahí su
ferencia y la alteridad, sobre lo propio intensa vocación mesiánica y utópica,
y lo extraño en ese inevitable "juego "esa especie ingrávida en perpetuo
de espejos" entre el Viejo y el Nuevo . vértigo, cuyo cuerpo más luminoso es
Mundo que caracteriza la historia de ' la utopía", al decir de Fryda Schultz
las ideas en un continente enfrentado de Mantovani 5 • Esta desiderata de
a "contradicciones y antinomias" 2 . proyección utópica ha contrastado la
Ello propicia "otra mirada", esa cur- realidad (el ser de América) con una
va abierta del descentramiento de aspiración ( el deber ser), expresión de
la modernidad en la que se inscribe una tensión utópica entre lo real y lo
América Latina que se plasma en la ideal que, más que proponer modelos
formulación de un discurso desde la orgánicos y precisos, se ha manifesta-
periferia, entre otros por Leopoldo do como "intención" ,función utópica 6
Zea en Discurso desde la marginación que se consagra en ensayos paradig-
y la barbarie, (1988) y, desde otra máticos como La utopía de América
perspectiva, Richard Morsei. El juego (1925) de Pedro Henríquez Ureña y
de reflejos lo convierte j.M.Briceño última Tule (1941) y No hay tal lu-
Guerrero en un juego revelador sobre gar .. (1960) de Alfonso Reyes.
la "segunda" identidad europea de ¡
América Latina (Europa y América A diferencia de autores como
en el pensar mantuano, 1981). Estos Ángel Ganivet o Miguel de Unamuno,
reflejos mutuos prolongan en el centrados en el desgarrado diagnósti-
tiempo una curva flexible que se ha co de un período de crisis como fuera
ajustado y adaptado a las ideologías el 98 español, el ensayismo latinoame-
de cada época, muchas veces en ricano tiende a ser más programático
forma diacrónica, abordando desde y se orienta hacia el futuro, aunque
diferentes ángulos temas recurrentes hunda sus raíces en el pasado, un
como el ser de América; la unidad pasado que le interesa por lo que to-
continental; el mestizaje cultural; davía perdura como parte integrante
"el humanismo americano"" o las del presente. "El presente del pasado"
dualidades civilización/ barbarie, presupone una actitud activa y actua-
campo/ciudad, evasión/arraigo y lizadora de los elementos vitales del
tradición/ modernidad. Un espectro pasado que integra en el presente, en
de preocupaciones que Franciso Miró nombre de lo cual propone lo que
Quesada resume en la afirmación: "el hay que hacer, lo que se debe hacer.
principal problema del latinoameri- Esta idea de corregir la realidad, que
cano es el de la autenticidad". subyace tras diagnósticos general-

-240-
Fernando Aínsa

mente pesimistas, proyecta el ensayo en plantear fines sociales deseables y


en un esperanzado optimismo. Sin enunciar medios de cómo alcanzar-
embargo, la crítica de lo real, implí- lo, auténtico género "bisagra" entre
cita en esta propedéutica, no debe la historia y la reflexión, punto de
confundirse con un nuevo dogma, inflexión entre teoría y praxis 11 .
"intencionalidad utópica" que debe "Literatura funcional" la llama José
desmarcarse del fundamentalismo y de Onís, donde el contenido impera
las "tentaciones totalitarias" Qoaquín sobre la forma y donde la misión ética
Herrera Flores 7) para aproximarse a lo del autor prima sobre cualquier otra
que Alfonso Reyes llama "orden de la consideración estética.
duda y la creencia, de la insinuación y
la esperanza", aunque reconozca que La polisemia del ensayo pro-
"hoy por hoy los americanos tenemos picia incursiones no sistemáticas en
el derecho, acaso tenemos el deber, de temas filosóficos, éticos e incluso
ser algo profetas" 8 . metafísicos y cubre un espectro que
puede ir del ensayo formal -históri-
Si la proyección mesiánica ha co, sociológico, crítico, literario- al
conducido a la visión grandilocuente más informal, impresionista, según
del destino de América en ensayos el énfasis que se le da a uno u otro.
como La creación de un continente Como modalidad textual transgené-
(1912) de Francisco García Calde- rica puede "hablar de casi todo" (Al-
rón o las "iniciativas" de Francisco dous Huxley), lo que permite plasmar
Bilbao9 , la conciencia de esa "vieja e sobre el papel reflexiones siguiendo
incurable exaltación verbal de nues- la libre asociación del pensamiento.
tra América" -según ya advertía De "libertad camaleónica" la califica
José Carlos Mariátegui- no necesita Juan Marichal para señalar que, en el
alimentarse de "una artificiosa y re- ensayo, la forma literaria se pliega a
tórica exageración de su presente" 1º. las intenciones del ensayista. Género
El autor de Siete ensayos de interpre- camaleónico -reitera José Miguel
tación de la realidad peruana (1928) Oviedo- que tiende a adoptar la
consideraba que la fe de América en forma que le convenga como parte
su provenir -aunque sinceramente se de una búsqueda experimental de
creyera que será "el hogar de la futura un compromiso entre "el análisis y la
civilización" o se repitiera el lema de intuición, entre el lenguaje expositivo
José Vasconcelos, "por mi raza hablará y el metafórico, entre el conocimiento
el espíritu"- engendraba una serie de objetivo y la percepción íntima" 12
exageraciones categóricas que debían porque "hay mil maneras de escribir
ser acotadas. un ensayo y todas ellas son correctas"
Qosé Emilio Pacheco).
La "acotación" se apoya en el
sentido responsable y comprometido "Centauro de los géneros", lo
de inserción en la historicidad del llama en forma metafórica Alfonso
ensayista que se siente éticamente Reyes, porque en el ensayo "hay
"reformador" y "transformador de de todo y cabe todo, propio hijo
la sociedad". De ahí que buena parte caprichoso de una cultura que ya
de la producción continental insista no puede responder al orbe circular

-241-
ENSAYO

y cerrado de los antiguos, sino a la hasta la raíz de las cosas que quere-
curva abierta, al proceso en marcha, mos decir: afinar, definir, con ansia de
al etcétera" 1 i_ En ese vasto "etcétera" perfección" 1'. Lo que se dice es cómo
que da cabida al análisis y a la creati- se lo dice, lo que si bien agudiza la
vidad, la vocación literaria del ensayo dificultad para distinguir la forma del
es manifiesta, ya que en su forma de contenido, hace del estilo ensayístico
expresión ancilar intercambia técnicas algo muy personalizado e íntima-
y procedimientos, preocupaciones con mente ligado al autor. El ensayista es
la literatura y otras disciplinas. siempre el núcleo vital de lo tratado,
un centro de irradiación germinativa
Aunque, de todos los géneros, a partir del cual despliega su tema,
el ensayo es probablemente el menos aunque se disimule en un "nosotros"
sometido a modas y escuelas literarias, colectivo o en un "yo" nacional.
la "voluntad de estilo" como preocu-
pación que inaugura el modernismo El ensayista es un "un lírico en
con Los raros (1896) de Rubén Darío prosa" capaz de poetizar por medio
y Ariel (1900) de José Enrique Rodó, de la inteligencia y la fantasía (Mario
resulta esencial para comprender su Praz), algo así como "una lírica de las
especificidad. Es más, de acuerdo a la ideas" (Anderson Imbert), rasgos de la
acepción estricta de ensayo es Rodó lírica que se reconocen en la medida
quien escribe el primer ensayo pro- en que el hablante lírico -a diferencia
piamente dicho en América Latina. del narrador ficticio en la novela o en
Sólo entonces y merced a la búsqueda la épica- está siempre directamente
de la perfección estética a través de la asociado a su autor 16 . De ahí que, para
acumulación de recursos estilísticos, Octavio Paz, el valor de una obra resi-
la unidad del ensayo se logra en el de en su novedad, en la invención de
trazo artístico unívoco, donde se formas o combinación de las antiguas
concilian "la profundidad y la gracia" de una manera insólita, en el descu-
(Ricardo Gullón). brimiento de mundos desconocidos
o exploración de zonas ignoradas en
"El estilo es el hombre" -re- los conocidos, en las revelaciones y
cuerda José Luis Martínez- ya que sorpresas que puede procurar 17 .
"un ensayo, generalmente, atrae a los
lectores no por el tema que trata, sino La "doctrina" diluida en "el
por el autor implícito que reflexiona comentario animado o con la medita-
sobre él mismo" 14 • En efecto, más allá ción alada" ( Cintio Vitier) hace que la
del interés del tema, muchos ensayos "nobilísima función del ensayo" con-
se leen por el estilo de su autor. Su sista en poetizar en prosa el ejercicio
nombre, sus opiniones, la columna o pleno de la inteligencia y la fantasía.
el artículo periódico que firma, más El ensayo se propone como una es-
que el tema tratado, conduce a la lec- tructura lógica, pero donde la lógica
tura. Por ello, Pedro Henríquez Ureña "se pone a cantar" 18 , tal vez porque
aconseja que el secreto de la expresión ese "extraño puente entre el mundo
es trabajar hondamente la lengua de las imágenes y el de los conceptos"
castellana, "trabajarla hondamente, -que es el ensayo- protege un poco
esforzarse en hacerla pura, bajando al hombre entre "las oscuras vueltas

-242-
Fernando Aínsa

del laberinto" y lo ayuda a buscar "el y extravagante" 20 - y Francis Bacon


agujero de salida" 19 -"meditaciones dispersas"- que se
evidencia el deseo de reaccionar con-
tra las formas solemnes, escolásticas y
DELIMITACIÓN canónicas de la filosofía y se reivindica
HISTÓRICA la libertad de pensar, la diversidad de
opiniones y la "duda metódica" que se
instala en el centro de todas las certe-
En el origen del género ensayo, zas. En España,José Luis Martínez no
está la ruptura en las creencias uní- duda en remontar la tradición ensayís-
vocas y dogmáticas, ese ligero escep- tica a Antonio de Guevara y propone
ticismo que alimenta la desconfianza una sugerente lectura de Las moradas
ante las cosmogonías que pretenden de Santa Teresa desde la perspectiva
explicarlo todo. Aunque no puedan del género 21 . Otros recuerdan páginas
llamárseles ensayos por su forma, sus de Los sueños de Quevedo y Augusto
características aparecen en el relativis- Monterroso propone una lectura de
mo de Protágoras y Gorgias y en los los Prólogos de la primera y segunda
sofistas, maestros de la retórica, que parte de Don Quijote como ensayos 22 •
predisponen a las formas del diálo- En todo caso, si ya es evidente en tex-
go socrático que desarrolla Platón. tos de Jerónimo Feijoo,José Cadalso,
Centrado en las preocupaciones por Gaspar Melchor de Jovellanos y Ma-
el sujeto, esa forma de pensar empí- riano José de Larra, el género adquiere
rico-inductiva que parte de la duda dimensión literaria con Leopoldo Alas
sobre los sistemas dados y alimenta "Clarín" quién justamente emplea la
un relativismo sobre los resultados palabra ensayo para referirse al Ariel
la forma ensayística propicia un me~ de José Enrique Rodó. La Generación
<litar basado en el hombre y en una del 98 -Ángel Ganivet, Miguel de
preocupación centrada en el sujeto. Unamuno, Azorín- como posterior-
Estos caracteres -traducidos en la mente José Ortega y Gasset le dan la
actitud dialogal- se reconocen en forma que rige hasta hoy en día en el
los gérmenes de los que serían las pensamiento hispánico.
características del género presentes
en las Meditaciones de Marco Aurelio En América Latina, aunque se
en las Epístolas a Lucilio de Séneca ; pueda hablar de pre-ensayística en las
en algunas de las Vidas paralelas de Crónicas de Indias, donde se mezcla
Plutarco y resurgen en el individua- la épica con la didáctica y se funda la
lismo antropocentrista que propicia personalidad y la conciencia histórica
el humanismo renacentista, aunque del continente, es en realidad con el
también pueden rastrearse proto-en- pensamiento crítico de la Ilustración
sayos en sermones y "ejemplos" me- primero y luego en los idearios de la
dievales. emancipación, que el género refleja
de un modo más palmario el carácter
Sin embargo, es con la creación de "intelectual orgánico" -al modo
del género, tal como lo definen Mon- definido por Gramsci- que encarna
taigne -"libro único de su clase en el el escritor y hombre de acción del
mundo" y de "una intención indómita siglo XIX. Abocado a la construcción

-243-
ENSAYO

de los estados nacionales y de una máxima: "nuestra filosofía ha de salir


identidad cultural insertada en una de nuestras necesidades" 25 .
intersubjetividad histórica basada
en herencias y raíces recuperadas, Sin embargo, es evidente que
experiencias comunes y tradiciones América ya tiene su historia y no pue-
asumidas, el ensayo contribuye a de "inventarse" en permanencia: no es
crear la imagen de la colectividad, un vacío que debe llenarse una y otra
encontrar los modelos más adecuados vez -advierte el propio Martí- al
para afrontar los conflictos y las an- recordar que América son sus indios,
tinomias en que se divide y polariza pero también sus conquistadores, li-
la sociedad tras la independencia. bertadores y civilizadores: un todo, un
La búsqueda de una "orijinalidad" auténtico crisol de culturas. Se trata,
americana -que Simón Rodríguez por lo tanto, de "imitar si no se puede
resume en la máxima "inventamos hacer otra cosa; pero, aun al imitar,
o erramos" 21- marca una ensayís- inventar un tanto, adaptar" 2", porque
tica centrada en la temática de la existe el riesgo de que en el afán por
identidad cultura, aunque si bien el ser diferente de lo que se es, se pueda
anhelo se expresa con vehemencia, la negar justamente todo aquello que
respuesta no es fácil de concretar. ya se es. Un examen de la historia del
ensayo desde esta perspectiva, permite
A partir de la Independencia y rastrear una terminología que insiste
a todo lo largo del siglo, el proceso de en "reivindicar nuestro pasado",
diferenciación se agudiza. Se empieza "fomentar valores propios», "buscar
a hablar del "ser americano", de la la autenticidad", "combatir las ideas
idea de América, de americanidad, de foráneas", "evitar la alienación", "ser
conciencia nacional, de expresión u fieles a nosotros mismos", denuncian-
originalidad americana. Las nociones do la cleculturación provocada por la
de idiosincrasia, auctoctonía y pecu- alienación, cuando no el imperialismo
liaridad se suceden para referirse a cultural y, más recientemente, comba-
una preocupación planteada tanto tiendo la globalización.
a nivel nacional (cuando no nacio-
nalista) como continental. Integrar El inventario de "nuestras
el sentimiento de pertenencia a un necesidades" -que proponía Alber-
pasado común supone racionalizar di- es esencial en las reflexiones
sentimientos e ir simbolizando es- alrededor de las nacientes naciona-
tructuras profundas del subconsciente lidades que, a lo largo del siglo XIX,
colectivo alrededor de lo que podía desgranan el propio Alberdi, Andrés
ser la conciencia de un "ser nacional". Bello, Domingo Faustino Sarmiento,
Para ello hubo que romper con ciertos Juan Montalvo, Eugenio María de
esquemas de dependencia que José Hostos, José Martí o Manuel Gonzá-
Martí parodió en Nuestra América: lez Prada, como lo harán luego José
"éramos una máscara con los calzones Enrique Rodó y José Vasconcelos.
de Inglaterra, el chaleco parisiense, Todos ellos son hombres públicos que
el chaquetón de Norteamérica y la desempeñan papeles muy diversos en
montera de España" 24 y que Juan la sociedad. El ensayista es un polí-
Bautista Alberdi había resumido en la grafo polivalente: político, hombre

-244-
Fernando Aí:i.sa

de acción, periodista, conferencista, El siglo XX amplía el es-


educador, legislador, ministro, diplo- pectro e introduce otras variantes.
mático o poeta, lo que se traduce en Así, el ensayo del 900 ejemplifica
una escritura transgenérica y en una el individualismo filosófico, ese
variada temática, Un ejemplo recurri- movimiento de autonomía en el
do es Facundo. Civilización y barbarie pensar que acompaña la crisis del
de Sarmiento donde se entrelazan positivismo y el advenimiento del
en forma inextricable componentes modernismo literario. Elyo protagó-
estéticos, sociológicos, políticos, nico al evacuar parte del "yo nacional"
históricos, narrativos, panfletarios y y el nosotros decimonónico conduce a
costumbristas literarios. un autocentramiento estético que se
desarrolla a partir de Rubén Darío y
Durante el siglo XIX, el en- prosigue luego con las vanguardias de
sayo demuestra ser una excelente los años veinte.
herramienta de combate. Manuel
González Frada -calificado de Sin embargo, al mismo tiem-
"sembrador de ideales" por Rufino po, el proyecto bolivariano de la
Blanco Fombona-titula significati- unidad americana -frustrado por
vamente sus ensayos como Páginas la balcanización continental, la ri-
libres (1894), Horas de lucha, (1908) y validad entre caudillos y las guerras
Propaganda y ataque (1938)- en alu- civiles y regionales que asolan el
sión directa a una misión intelectual siglo XIX- reaparece en el idealis-
que resume en su famoso discurso mo voluntarista de Francisco García
"El intelectual y el obrero" dirigido a Calderón (Las democracias latinas de
la Federación de Obreros Panaderos América y La creación de un continente,
el 1 de mayo de 1905. "Ardua tarea 1912) y en los renovados proyectos
corresponde al escritor llamado a con- de unidad continental de Manuel
trarrestar el influjo del mal político: Ugarte, La Patria Grande (1922) y La
su obra tiene que ser de propaganda nación latinoamericana (1923). "El
y ataque" -afirma en 1888- aunque patriotismo necesita reformas, ya no
para ello "no se requiere tanto el li- debe haber peruanos, ni mexicanos, ni
bro, como el folleto, el periódico y la argentinos o chilenos. Sólo las almas
hoja suelta", herramientas útiles para de moluscos siguen apegadas a la roca
desarrollar una "fogosa propaganda" de la patria", proclama José Vasconce-
y un "ataque decidido a política y po- los, autor del ensayo emblemático del
líticos"27. En 1905, ya está convencido mestizaje americano, La raza cósmica
del destino ineluctable de la revolu- (1925). América sigue siendo un
ción proletaria, aunque sea consciente problema para Ernesto Mayz Valle-
desde su perspectiva libertaria que nilla (El problema de América) donde
"toda revolución arribada tiende a se pregunta: "¿ Y por qué ese afán de
convertirse en gobierno de fuerza, "empezar a ser" distinto y radicalmen-
todo revolucionario triunfante dege- te "nuevo" frente a los demás? ¿Por
nera en conservador". En todo caso qué ese temor de ser "confundido"
-asegura- "no somos la inundación con otros, que lo impulsa tan ardien-
de la barbarie, somos el diluvio de la temente a la búsqueda de su modo de
justicia" 28 • ser "original" y "originario"? 29

-245-
ENSAYO

Uno de los núcleos temáticos inertes, un explorador, un cateador


del ensayismo contemporáneo es la de terrenos auríferos, un vikingo de
deontología de la cultura nacional. los mares incógnitos, un viajero que
Análisis funcional de la cultura ( 1971) sueña en continentes desconocidos,
titula Ezequiel Martínez Estrada una el más fecundo proveedor de ma-
reflexión que parte de la máxima mar- teriales de fermento para la cultura
tiana de "injértese en nuestras repú- filosófica"'º.
blicas el mundo, pero el tronco ha de
ser el de nuestras repúblicas"; Rodolfo
Kusch propone superar "el miedo DELIMITACIÓN
de ser nosotros mismos" asumiendo CONCEPTUAL
una Geocultura del hombre americano
(1976); Dardo Cúneo descubre en
Cultura, país y época ( 1983) una "im- La primacía del ensayo sobre
paciente conciencia argentina, latinoa- la filosofía es para algunos prueba
mericana" empeñada en el desafío de de la falta de rigor y de organicidad
trabajar certidumbres. Sus páginas son del pensamiento latinoamericano.
"actas de esa conciencia" y sus crite- La ausencia de sistemas elaborados
rios están expuestos para "la urgente o doctrinas totales capaces de con-
acción". Ernesto Sábato, en La cultura centrar y ordenar el saber acumulado
en la encrucijada nacional (1987), que ca.racteriza el filosofar tradicional
realiza un severo enjuiciamiento de se traduciría en el Nuevo Mundo en
"nuestra hibridez" H.A.Murena se una dispersión de esfuerzos y en un
plantea el "ser o no ser de la cultura corpus heterodoxo y por momentos
latinoamericana" en un volumen inclasificable. La historia del ensayo
de significativo título, Ensayos sobre es de una "desazonadora anarquía,
subversión (1962). El intelectual y la de una multiplicidad, aparentemente
sociedad, el intelectual y la política, la loca de ambiciones, de blancos, de
misión y el compromiso forman parte medios, de técnicas, de propósitos"
de la reflexión ensayística de poetas -afirma algo consternado Carlos Real
como Roberto Fernández Retamar de Azúa 11 - aunque en esa diversidad
cuyos ensayos sobre Calibán y Nuestra haga radicar justamente su riqueza. En
América y el mundo (1979) retoman efecto, lo que para algunos es prueba
y actualizan el Ariel de Rodó desde de la dispersión que se adjudica al
un novedoso y polémico enfoque; género, es para otros la palmaria de-
novelistas como Alejo Carpentier y mostración de su naturaleza proteica
filósofos como Héctor Agosti (autor y de la polifonía de voces y temas a la
de "La cultura militante", 1951). Lo que invitan las fluidas transferencias
resume con entusiasmo Martínez Es- disciplinarias entre lo histórico, socio-
trada al afirmar que el escritor debe lógico, filosófico, político y estético.
identificarse con la historia, inventar,
crear, agitar, ensayar en el área de sus En realidad, la falta de un
actividades ya que "tiene de hecho y orden secuencial lógico no supone
de derecho, como uno de sus deberes que el ensayo carezca de un sentido
sociales apremiantes el de ser un propio. Por el contrario, se puede
agitador, un removedor de materiales hablar de un "desorden sistemático"

-246-
Fernando Aínsa

(Angel Ganivet), de un orden estético es instrumental y en ningún caso


interno, de una unidad artística más sustantiva o absoluta. Este compo-
que temática. Por ello, Rodó distingue nente de la "escritura" que nace de
entre el ensayo rectilíneo y el "desor- objetivos poco literarios como son las
denado y libre de todo plan metódico" cartas abiertas y artículos polémicos
que ejemplifica en "el curso volunta- está particularmente presente en la
rioso y errabundo" de un autor como ensayística. Basta recordar, a título de
Montalvo 32 . ejemplo, el origen epistolar de ensayos
"clásicos" como la Carta de Jamaica de
En la improvisación ajena a Simón Bolívar, las cartas a Gonzalo de
la concepción del tratado o la mono- Quesada, Manuel Mercado, o Barto-
grafía, incluso cuando es caprichoso, lomé Mitre de José Martí; "El sentido
divagante o cuando propone puntos de América" carta dirigida al filósofo
de vista inusitados o está impregna- Francisco Romero por Alfonso Reyes;
do de un cierto lirismo, el ensayo la correspondencia entre José I turriaga
está controlado y modulado por una y Juan Larrea sobre el tema "Hacia una
necesaria organización discursiva ra- definición de América".
cional, donde se reconoce un estilo.
Ello permite superar el tópico de que Otras formas de expresión
el ensayo es un híbrido entre razón literaria son también utilizadas por el
e intuición, imagen y concepto, pe- ensayo. La del memorial sirve de título
riodismo y filosofía, para asegurar su al Memorial de Agravios de Camilo
especificidad "mestiza". A partir de Torres y al Memorial de los hacendados
su mestizaje disciplinario y de géne- de Mariano Moreno; las meditaciones
ro se comprende su variada temática de "trayectoria diversa", pero "todas
(filosófica, moral, histórica, política, ensartadas en el mismo objetivo pri-
sociológica, antropológica, cultural, mordial" de contribuir al logro de una
artística ... ), referida, más allá de sus expresión latinoamericana, es la forma
variantes, a una realidad que atañe elegida por Juan Marinello para los
al ser humano. Género abordado cinco ensayos reunidos en Meditación
por críticos como Alfonso Reyes, americana (1959); las parábolas que
polemistas como Juan Montalvo, José Enrique Rodó proyecta como
antropólogos como Fernando Ortiz, cuidados productos estéticos en Moti-
filósofos como Carlos Vaz Ferreira, vos de Proteo (1909). Pero nadie como
Alejandro Korn, Francisco Romero, José Martí para alternar técnicas de
José Gaos, Leopoldo Zea, Francisco crónica y ensayo con las de artículo y
Miró Quesada o Arturo Ardao, es- gacetilla, oratoria, epístolas, discursos
critores como Eduardo Mallea, Jorge patrióticos, manifiestos (ej. el Manifies-
Luis Borges,José Lezama Lima o Alejo to de Montecristi) donde se entrelazan
Carpentier, los modos de apropiación conocimiento, arte y acción y lo esté-
de esa realidad también son variados tico se cruza con lo heroico.
y en su forma caben los préstamos de
géneros conexos (epistolar, periodís- En realidad el trasiego trans-
tico, filosófico, histórico, aforístico ... ) genérico que propicia el ensayo se
o modalidades orales (conferencias, inscribe en la premonición de Ernst
discursos, charlas) cuya utilización Jünger: "no se tardará en reconocer

-247-
ENSAYO

que la parte más sólida de nuestra Repertorio americano que consagra en


literatura es la que nació de los ob- Costa Rica el polígrafo García Monje
jetivos menos literarios: todas esas o Asomante fundada y defendida con
informaciones, cartas, diarios íntimos tenaz empeüo en Puerto Rico por
nacidos en las grandes cacerías hu- Nilita Vientós- acompaña la historia
manas, emboscadas y desolladeros de de la ensayística latinoamericana. Su
nuestro tiempo"ll_ aporte a la historia de las ideas y de
los movimientos literarios y estéticos
Sin embargo, es con el pe- del continente es innegable, tal como
riodismo y las variadas formas que lo reconocen recientes congresos y
asume -artículos de fondo y de opi- publicaciones sobre el tema.
nión, crónicas, columnas, editoriales,
"cuadros" y "estampas"- donde el Producto equidistante -por
ensayo comparte mayores competen- lo tanto- entre el periodismo y el
cias genéricas, lo que ha estimulado sistema filosófico 35, el ensayo -con-
en América Latina su producción y siderado un "género adulto", fruto
facilitado su amplia difusión. Gracias de la "pasión meditabunda" del ser
a la frecuencia, asiduidad, comuni- humano (Guillermo Díaz Plaja)- se
cación que propicia la "literatura de mueve también en la zona fronteriza
quiosco" (Flora Ovares H) y aunque entre filosofía y literatura. Guiado por
André Gide considerara periodismo la inspiración más que por la lógica, el
"todo lo que mañana será menos in- ensayo tiende a ser narrativo 16, aun-
teresante leer que hoy", el ensayista que en principio prima en el ensayo la
latinoamericano ha sido fundamen- voz reflexiva sobre la narrativa. Así, la
talmente atento "cronista" de su dimensión imaginativa está presente
sociedad. Al abordar los temas de en jorge Luis Borges, especialmente en
"nuestro tiempo" -al decir de Octa- Inquisiciones ( 1925), Discusión ( 1932)
vio Paz- ha sido crítico y opinante y Otras inquisiciones ( 1952), donde el
(Periodismo militante, 1978, titula una valor estético de las ideas filosóficas
de sus recopilaciones periodísticas adquieren una inusitada proyección;
Gabriel García Márquez) y ha creado en Octavio Paz en su vasta y polifacé-
complicidades y lealtades con lecto- tica obra; en Alejo Carpentier (Tientos
res que se reconocen en sus propias y diferencias, 196 7) y Julio Cortázar,
inquietudes y preocupaciones. Las para quién las ideas más que razonar-
polarizadas reacciones que suscita se intelectualmente deben vivirse en
el ensayismo periodístico de Mario forma apasionada y las fronteras de
Vargas Llosa son la mejor prueba. los géneros transgredirse lúdicamente.
Pero nadie como José Lezama Lima
Una larga lista de revistas y concilia de un modo más original y
periódicos -desde Biblioteca Ame- apasionado rigor formal y profundi-
ricana (1823) publicada por Andrés dad reflexiva como propone en los
Bello en su exilio londinense, a las ensayos fundacionales de La expresión
argentinas Sur y Crisis, Cuadernos americana (1957).
Americanos en México, pasando por
El Cosmopolita, El Regenerador y El Mientras el ensayo se hace
Espectador que dirige Juan Montalvo, más "literario", muchas páginas de

-248-
Fernando Aínsa

ficción incorporan, entre otras formas su "mestizaje" disciplinario y de


de expresión (diarios, cartas, confe- género, es posible proyectarlo
siones, testimonios), las digresiones como un activo revulsivo de los
ensayísticas. Si ello es visible en la sistemas cerrados y un cuestio-
narrativa reciente de Carlos Fuentes, nador de la razón acrítica.
Augusto Roa Bastos, Ernesto Sábato,
Eduardo Mallea y el propio Carpen- b) El discurso ensayístico no
tier, la intencionalídad ensayística es pretende ser total, preciso,
notoria en las llamadas "novelas de la ordenado y cierto como el
tierra" (por ejemplo en Doña Bárbara científico, ni orgánico como el
y Canaima de Rómulo Gallegos); en filosófico; prefiere tipificarse
el costumbrismo decimonónico de como literatura de ideas, "una
Ricardo Palma y Tomás de Carrasqui- forma de pensar"(Eduardo Ni-
lla y en el naturalismo de vocación col) basada en una espont'ánea
ejemplificadora. lntertextualidad y asociación de ideas 37 • Su inten-
contextualización que lleva a solicitar ción primordial es "inquietar",
de los "hombres de letras" una activa suscitar dudas, imaginar "otros
contribución a "la formulación del mundos posibles", objetivo
discurso axiológico de un pueblo", problematizador, deconstruc-
al modo en que Gustavo Gutiérrez cionista que no busca tanto
rastrea en la obra de José María Ar- sistematizar lo cuestionado,
guedas. Esta constante ha llevado a sino inspirar una reflexión.
propiciar estudios sobre la "estructura Las reflexiones codificadas
ensayística de la novela latinoamerica- en el ensayo -recuerda José
na" Qacques Leenhardt) y a extender Luis-Gómez Martínez -se
el campo semántico del ensayo a la generan a partir de la confron-
"sociología de la literatura". tación de dos sistemas, a la vez
antagónicos y dependientes
Esta rica polisemia, sus varian- entre sí: el discurso axiológico
tes expresivas y temáticas dan al ensa- del estar (valores que dominan
yo latinoamericano una especificidad y diferencia a la vez una época
y originalidad que merece analizarse de otra), y el discurso axio-
en detalle. A su caracterización están lógico del ser (la conciencia
consagradas las páginas siguientes. del autor de su historicidad,
de estar viviendo ante un
horizonte de posibilidades e
l. Función crítica imposibilidades que modelan
su libertad). El ensayo hace del
a) El ensayo fomenta la duda, la choque de estos dos sistemas el
ruptura y la crítica y, en la me- tema central de su reflexión ' 8•
dida de su escepticismo crea-
tivo, puede ser productivo de c) El ensayo no debe ser, en
nuevas ideas significativas, de principio, dogmático. Debe
aperturas a nuevas vías desde estar abierto a otras alter-
el margen, desde una periferia nativas del pensamiento no
que se torna central. A partir de sistemático o doctrinario y

-249-
ENSAYO

echar mano de todo lo que que antes de significar juzgar,


considere necesario para res- quiere decir separar, distinguir.
ponder a los problemas que Pero aun como "esgrimidor de
plantea, eclecticismo notorio ideas" el ensayista contribuye
en el ensayismo de tradición a una reflexión sobre otros
sajona y francesa. La informa- ángulos posibles para obser-
lidad, la soltura y distancia de var un mismo problema. Todo
la que hace gala el ensayismo parece confirmar -al menos
inglés o el esprit del francés en América Latina- que el
están lejos del dramatismo del ensayo se desarrolla, por su
ensayismo latinoamericano. propia naturaleza, en épocas
La tradición del inglés con su de crisis, cuando "el hombre se
ironía y aparente despreocupa- siente más confundido y están
ción distanciada (detachment), crujiendo, amenazantes -ante
las buenas maneras literarias de que emerjan otros- los va-
(good manners), no cuenta con lores de una vieja cultura""'\
seguidores en un continente
cuyo pensamiento está menos 2. Función
dirigido al individuo que a una desmitologizadora
colectividad (conciudadanos,
nación) y donde prima un no- Escribe en forma ensayística el
sotros o un yo nacional sobre que compone experimentando, el que
el yo individualista del ensayo vuelve y revuelve, interroga, palpa,
clásico europeo. examina el objeto de su reflexión sin
la ayuda de la "providencia divina",
d) El ensayo latinoamericano de visiones totalizantes (por no decir
rehúye adoptar un cordial totalitarias) de la historia ni otras se-
eclecticismo, emitir juicios guridades confortables. José Donoso
medidos y dar algo de razón preconiza un escribir a "la intempe-
a todo el mundo y opta, en rie", sin la protección de los muros
general, por una actitud más de los "templos" donde se refugian
militante, esa "poderosa carga las certidumbres, cuestionamiento
estética y ética compulsiva de que abre fronteras y niega formas
acción" 39 que puede observarse sacralizadas del conocimiento.
en Martí. "Trincheras de ideas
valen más que trincheras de Si el ensayo se orienta hacia
piedra", asegura el mismo la verdad, no pretende ser la verdad,
Martí, porque en el ensayo "la relación paradoja! que acentúa su ca-
prosa, centelleante y cernida, rácter especulativo, inquisitivo, pero
va cargada de idea". La exal- que desmiente su posible dogmatismo
tación de la figura del héroe o taxatividad. La cacería de los idola
concebido como asceta mártir f ori -tópicos, supersticiones, mitos
destinado al sacrificio, la dis- y "falsas nociones"- que emprendió
posición militante y quijotesca Bacon para reinterpretar la naturaleza
prima sobre el sentido crítico y desacralizar, desmitoligizar y des-
en el sentido de krinó, verbo prejuiciar un conocimiento protegido

-250-
Fernando Aínsa

por una "clase sacerdotal", está más tonterías". Evitar el "espíritu de secta"
cercana del esfuerzo "liberador" del tanbién obsesiona a Jesús Silva Herzog
ensayo latinoamericano. que concibe el ensayo como parte
de una "disidencia herética" abierta
Carlos Arturo Torres en !dala donde "lo humano" es el problema
Fori (1910) retoma esa misión desde esencial. "El hombre es periferia y
la perspectiva del Nuevo Mundo centro, medio y fin, irradiación y foco
donde hay que debatirse contra luminoso de él mismo" -recuerda-,
ideas, ideologías y formas de pensar por lo cual "hay que buscar en un
que llama "verdaderas supersticio- nuevo humanismo los materiales para
nes políticas", que lejos de ayudar construir el mundo del mañana" 41 .
a la organización mental y social la
congelan con "letal fuerza catalép- "Nos sobraron las creencias,
tica". Consciente de lo arduo de su nos faltaron las ideas", sentencia En-
empresa, Torres considera que el sólo rique Krauze, para proponer que hay
intentarlo, "el señalar la posibilidad que "someter las creencias al examen
de reducir a sus verdaderas propor- de las ideas" y distinguir entre "el
ciones de pensares falibles o caducas claustro de las creencias y la intem-
opiniones cuantos ya se tuvieron por perie de las ideas". La tarea resulta
canon y dogma incontrovertible de la urgente en un continente donde las
política y de la filosofía, es despertar creencias "lindaron con la ortodoxia"
los aletargados estímulos del examen y proliferan tantas "ideas fijas" sobre
y exaltar el valor y las afirmaciones la realidad44 . A esta dicotomía entre la
de la autonomía humana" 41 , ya que situación real y las ideologías sistemá-
frente al fanatismo de los principios ticas que dicen interpretarla consagró
se yergue el fanatismo "oscuro y mi- José Luis Romero su obra Situaciones e
lenario de las tradiciones". Las ideas ideologías en Latinoamérica (1986).
no son formas estáticas -recuerda
citando a Hegel- impulso inmanen- La actitud crítica, la descon-
te que hace del principio del devenir fianza ante la institucionalización de
una ley de sistematización filosófica una razón política promotora de una
para luchar "contra el fiero ideal de retórica cerrada a toda alternativa
la cristalización del pensamiento en cultural disidente, la incredulidad
formas inmutables". ante los mitos fundacionales creados,
la sospecha de vivir una nacionalidad
Octavio Paz recuerda que "el artificial y ficticia ya había sido de-
pensamiento independiente es casi nunciada por el movimiento de "los
siempre impopular" 42 en la línea de Contemporáneos" en México, especial-
aquellos ensayos de Bertrand Russell mente a través de los ensayos de Jorge
-"Esbozo del disparate intelectual", Cuesta. Este pensamiento "disidente"
"Ideas que han ayudado a la huma- -que puede rastrearse en otros países
nidad" e "Ideas que han perjudicado latinoamericanos desde la Argentina a
a la humanidad"reunidos en Ensayos Cuba- considera que la verdadera tra-
impopulares- escritos para combatir dición puede ser la de la ruptura y del
"el desarrollo del dogmatismo" y desarraigo, la del rompimiento con los
contra "los predicadores de ampulosas modelos establecidos y la innovación

-251-
ENSAYO

permanente, el desenmascaramiento inauguró la reflexión individualizada


de la inautenticidad, esa dimensión y, por lo tanto, diferente al canon, al
que permite que "un país frustrado en dogma y a lo aceptado imperante, per-
su esencial político puede alcanzar vir- cepción de lo diferente y de la alteridad
tudes y expresiones por otros cotos de que caracteriza al ensayo, un género
mayor realeza", según la sutil imagen que se elabora a partir del punto de
de José Lezama Lima". vista de su autor, donde prima un
subjetivismo y una intencionalidad
El ensayo cumple, en cierto basada en la perspectiva del propio
modo, una función de despensar lo yo. "Me atrevería a tratar a fondo al-
pensado anteriormente, negación guna materia, si me conociera menos
crítica de la cultura petrificada como -reconoce el fundador del género-.
ideología, como tópico -lo que hoy Sembrando una frase aquí, otra allá,
podríamos llamar "políticamente co- muestras desgajadas de su conjunto,
rrecta"- que el ensayista realizar para separadas sin designio ni promesa, no
dejar al descubierto esa parte que el creo que haga nada bueno, ni que me
pensamiento canónico había dejado, mantenga yo mismo sin variar cuando
justamente, impensada, sumergida, me plazca y sin rendirme a la duda o a
insospechada.¡6 "Pensar más de lo que la incertidumbre o a mi estado original
encuentra ya pensado", recomendaba que es la ignorancia" .¡H.
Adorno.¡], haciendo del ensayo la
forma crítica por excelencia, "crítica El ensayo se elabora, pues, a
inmanente de las formaciones espiri- partir de una reflexión personal sub-
tuales" que problematiza situaciones, jetiva sobre temas muy diversos rela-
atiende urgencias y responde a lo cionados con lo actual y cotidiano a
inmediato y apremiante. En América los que se proyecta en una dimensión
Latina, esa urgencia se traduce en la universal y abstracta. Por lo tanto, no
tensión que el ensayo refleja, radical se puede pretender que el ensayista,
disidencia que no es sinónimo de la aun siendo ecléctico, sea imparcial.
mesura que preconizaba el ensayo En tanto que discurso personal que
clásico siguiendo los preceptos de expone una secuencia argumentativa
Montaigne: tolerancia religiosa, liber- está sujeto a la efusión, a las pasiones,
tad de conciencia, confianza en el dis- ocurrencias, versatilidad, perspicacia,
curso de la razón, preferencia por las digresiones o meras divagaciones a
"expresiones que moderen la audacia las que se libra su autor. De ahí, tam-
de lo propuesto", actitud que lo llevó bién, el carácter confesional de ciertos
a rechazar afirmaciones tajantes por ensayos y su proximidad genérica
dogmáticas y la certeza de la verdad con lo epistolar o autobiográfico. Los
por insensatez. juicios estéticos, históricos, políticos
o sociales se pronuncian a partir de
una subjetividad enraizada en su pro-
3. Subjetivismo del pia contemporaneidad, un presente
ensayo que tiñe cualquier opinión sobre el
pasado, interpretación personal que
Con esa observación del mun- es justamente la que otorga interés
do a partir de sí mismo, Montaigne al ensayo.

-252-
Fernando Aínsa

Los ejemplos abundan en el cias de la crítica", según ironiza José


ensayo latinoamericano. "No es éste Edmundo Clemente-, menciones
un libro orgánico. Mejor así -advierte eruditas que son marginales, auxilia-
Mariátegui-[. .. ]Mi pensamiento y res a la idea central. Su visión -sea
mi vida constituyen una sola cosa, un didáctica, moralizante, heterodoxa,
único proceso . Y si algún mérito es- ingeniosa, intuitiva, paradójica o
pero y reclamo que me sea reconocido irónica- no se presenta como una
es el de [ ... ] meter toda mi sangre en verdad absoluta, resultado de una in-
mis ideas" 4''. Héctor Murena define su vestigación o un descubrimiento -"el
ensayo El pecado original de América ensayo es la ciencia, menos la prueba
( 1954) como "una especie de auto bio- explícita", dijo Ortega y Gasset en
grafía mental" para saber dónde está una recurrida cita- sino guiada por
situado él mismo. Bajo el significativo un deseo de autenticidad basado en la
título de Uno y el universo, Ernesto persuasión lógica o estética que avanza
Sábato confiesa: "uno se embarca hacia por asociaciones e intuiciones donde se
tierras lejanas, o busca el conocimiento impone la sensibilidad del autor. Una-
de hombres, o indaga la naturaleza, o muno lo llama "sentir la idea y pensar
busca a Dios; después se advierte que el el sentimiento" y el propio Ortega "la
fantasma que se perseguía era uno mis- expansión del íntimo calor con que
mo""'. Cuando el hombre se encuentra los pensamientos fueron pensados". A
en el universo como "un extranjero partir de esta libertad, el ensayo se per-
solitario y desamparado" y se siente mite digresiones, ese romper aparente
a "la intemperie" y sin hogar, se hace del discurso expositivo para referirse
preguntas sobre sí mismo, reitera en a temas que no tienen relación directa
Hombres y engranajes. De pensamiento con lo que se está tratando. Aunque
"arborescente" se tilda la sugerente la digresión no es nunca sustantiva,
ensayística de Carlos Real de Azúa. sirve de complemento a una forma
esencialmente voluble.
Más recientemente, Carlos
Fuentes en Tiempo mexicano (1971)
confiesa no haber pretendido escribir 4. Forma dialogante
un texto frío, objetivo, estadístico o
totalizante, sino haber preferido dar Sin embargo, aunque centrado
libre curso a sus obsesiones, prefe- en el yo enunciativo, el ensayo es por
rencias y pasiones de mexicano, sin naturaleza una forma esencialmente
desdeñar ni la arbitrariedad ni la "dialogante", expresión de un pensa-
autobiografía. "Búsquese aquí -nos miento que aspira a ser comunicativo
invita- menos el rigor que la vivencia y necesita estar en contacto con el
y más la convicción que la imposible mundo histórico al que pertenece.
o indeseable objetiviclacl"' 1• Más que otros géneros (basta pensar
en la poesía), necesita de un lector
Al no apoyarse en la autoridad con el cual establecer una complicidad
de otros, el ensayista no necesita de basada en la sensación ele sincera au-
citas o ele aparato crítico y puede tenticidad que es capaz de comunicar.
prescindir libremente de notas, fichas Gracias al proceso de asociaciones
y bibliografías -"las que son las deli- intuitivas que genera, incorpora el

-253-
ENSAYO

lector con su propio bagaje, ya que tivo) para conocer y mostrar la realidad
leer ensayos suscita ideas, reacciones, social, política, cultural y económica.
trae a colación otros temas, estimula Su profunda vocación social, aunque
el propio pensamiento como una se- integre aspectos emotivos, éticos, ideo-
milla que pregona su potencialidad en 1
lógicos, armonizados conceptualmente
el espíritu del lector. El grado de su con notas filosóficas, se plasma en
recepción se puede medir en la inter- "ensayos prácticos" e instrumentales.
pelación y en la capacidad de involu- Desde los albores de la independen-
crarlo, pero también en la capacidad cia americana, un autor como Simón
de modificar los propios planteos. Rodríguez propone nuevas formas dis-
cursivas capaces de construir un modo
El ensayo se desarrolla gracias didáctico de exponer las ideas basado
a la heterogeneidad espiritual, la va- en una original disposición gráfica de
riedad de opiniones que propicia su las oraciones en las páginas y en las
mayor apertura a la otredad y lo hace reglas de una nueva gramática. Hostos
no para formular verdades tajantes o con tono didáctico y un claro afán de
definitivas desde un punto de vista ilustrar y aleccionar, pretende ser maes-
autoreferido, sino para entablar un 1 tro y guía moral de su pueblo. En la
diálogo intercultural en pie de igual- renovación de modelos educativos que
dad. Su "propedeútica cordial" Qosé propone, aún influida por el krausismo
Edmundo Clemente) se traduce, en y el positivismo, su pasión redentora
general, en un estilo límpido, claro, toma la forma de un discurso pedagó-
que privilegia la densidad metafórica gico orientado a la independencia de
o aforística en desmedro de la retó- Puerto Rico en el marco de una visión
rica ampulosa explicativa, cuando global de las Antillas. Del mismo modo,
no aseverativa del tratado. Con la en la prosa de las Catilinarias (1880)
informalidad que asume pretende de Juan Montalvo se reconoce un tono
evitar "cierta pedantería magistral", moralizante enraizado en la mejor
de cuadrarse con "aires académicos" tradición oratoria hispánica, donde se
o predicar "cosas sabias o necias, que combinan rasgos del estilo panfletario
podrían decirse con mayor sencillez, y de la encendida diatriba con una
o callarse por decoro elemental". Se vocación de transmitir que aproxima
trata de evitar decir "nimiedades muy el saber del ensayo a la didáctica. El
discutibles, con flema dogmática" 52 . mismo Rodó concibe la "oración cívi-
ca" de A riel (l 900) como las lecciones
que el "Maestro Próspero" dirige a la
5. Función didáctica y juventud americana.
moralizante
Esta vocación pedagógica del
La intensidad docente, la voca- ensayo lleva a definirlo como "di-
ción pedagógica social es una de las dáctica hecha literatura" (Gómez de
características más notorias de la ensa- Baquero) y a que Arturo Andrés Roig
yística latinoamericana, un género que, lo considere un modo de aprendizaje,
tanto por su fondo político como por cuya relevancia pedagógica tiene un
su forma estética, se proyecta como el gran valor para asegurar una coedu-
medio más eficaz (por no decir opera- cación permanente.

-254-
Fernando Aínsa

6. El ensayo como sustantivado y diversificado por


meta texto significativos ensayistas del siglo XX
(Benjamín, Adorno, Cioran, Barthes,
El ensayo es una manera flui- Blanchot. .. ), asegura Martín Cerda 55 •
da y libérrima de crear "literatura de Si el fragmento parece corresponder
ideas", discursos de asedio e inteligen- a un proceso más amplio de descom-
cia, dotado de una fuerte referencia- posición de la sociedad, "estilo de
lidad vertida sobre los problemas de decadencia" que refleja la fractura y
hoy, precisa Juan Loveluck 53 . Gracias la crisis de la modernidad, "síntoma
a su carácter "intuitivamente interdis- de ruinas" -como anunciara apoca-
ciplinario" (Real de Azúa) el ensayo líticamente Baudelaire- esos "des-
tiende a hacer coexistir distintos pla- perdicios de escritorio de las personas
nos y órdenes de ideas en el seno de letradas"-como los llama Roben
un mismo texto. De ahí su tipificación Musil- alimentan el rico venero de
como metatexto. la empresa de demolición de la que
el ensayismo contemporáneo partici-
"Si escribo, ensayo. O si escri- pa. En la misma dirección, Theodor
bo, pruebo: intento. O bien, si escribo WAdorno titula Mínima Moralia su
ensayo literario lo hago como prueba "tentativa de presentar momentos de
legal o documento de una actividad in- una filosofía sustentada en común
cierta que mezcla sus métodos y desvía desde el punto de vista de la experien-
de su objeto, Ojalá que este desfiladero cia subjetiva" 56 . Si bien es consciente
de cursivas nos lleve a definir lo que de que sus textos no se sostienen
llamamos metatexto" -sugiere Héc- frente a la filosofía sistemática, los
tor Libertella en un paradójico enfo- define como "fragmentos" de filoso-
que sobre "una nueva introducción al fía, condición fragmentaria que hace
ensayo", ese "tipo textual" hijo directo del ensayo una forma independiente.
de la cruza interdisciplinaria que "si Los aforismos de Gracián, la ironía de
teoriza, teoriza, sí, pero apenas en el Voltaire o de Osear Wilde, los Propos
sentido de proponer teorías: posibles". de Alain, el mordaz y falso diario de
El ensayo como "gesto crítico" que Gag de Giovanni Papini, las paradojas
"sale por cualquier lado desde todas de Unamuno, las glosas de Eugenio
las actividades literarias, pero que se D'Ors completan las variantes ex-
devuelve rigurosamente a cada una presivas de un género fragmentario
de ellas", es -para Libertella- un que tiene una creciente aceptación
discurso proyectivo, "un juego inte- en América Latina. Las "esquirlas",
resado donde para explicarme uso de ese extremo del ensayo convertido
las palabras de los otros" 54 . en pensamiento breve, "suelto" pe-
riodístico o aforismo con que José
Miguel Oviedo titula una parte de su
7. El ensayo como libro La vida maravillosa (1988) o esos
fragmento mini-ensayos, al modo de sus cuentos
breves, que propone con tono diverti-
La tradición ensayística se do Augusto Monterroso en La palabra
entronca con la del escrito fragmen- mágica ( 1983) y La letra E ( 1987) son
tario de larga tradición literaria, pero algunos ejemplos.

-255-
ENSAYO

Si el ensayo no tiene sistema, ni -según desarrolla en El alma y las


ideas preconcebidas, y está librado a formas (1911) 58 - la materia de una
impresiones sucesivas, ¿cómo se forma obra y configurarla de tal modo que
la opinión "sincera y personal"?, se constituya un todo internamente co-
pregunta Paul Grossac 57 , para aventu- herente, "principio de estructuración"
rar una respuesta: con la reacción del y exposición razonada que guía al
sujeto ante el objeto, por lo cual espera ensayista justamente porque el género
que sus ensayos trasluzcan "una tenta- carece de una forma a priori y necesita
tiva literaria plausible", ya que más que de esa interrogación permanente.
otros géneros el ensayo aspira alcanzar
un estilo literario sobrio y preciso, Aunque en América Latina no
ajeno al "campaneo verbal" abundaba hasta ahora el ensayo iróni-
co, esta acepción de crítica a lo consa-
grado, lo dogmático y lo jerárquico por
8. La condición irónica la ironía está presente en Indagación
del choteo (1928) de Jorge Mañach,
Georg Lukács consideraba que choteo entendido como burla, cuyo pa-
en la modesta denominación de "en- pel de "descongestionador espiritual"
sayo", en esa "cortesía orgullosa" de y transfigurador del resentimiento y el
un género sin aparentes pretensiones, malestar es esencial en la tipificación
se disimulaba su condición esencial: del carácter cubano. La "caricatura"
la ironía. Si ser "solamente" ensayista que Manuel González Frada propone
provocó reproches a Montaigne y luego como variante ensayística en Figuras y
a Ortega y Gasset y a tantos polígrafos figurones(l 938), el tono irónico de las
americanos como Alfonso Reyes, para "ficciones" con forma de ensayos de
el crítico húngaro, la ironía del ensa- Borges, preceden la mayor presencia
yista consiste justamente en esa capa- de la ironía en el ensayo contemporá-
cidad de hablar de temas en apariencia neo de julio Cortázar, de Gabriel Zaid
sencillos y actuales para referirse a lo (sus ensayos "Un país para las visitas"
que lo realmente le preocupa. La iro- o "Intelectuales" 59 constituyen un
nía es una estrategia para enmascarar buen ejemplo) o en los textos satírico
interrogantes más profundas. Gracias sociales de Carlos Monsiváis como
a la ironía -ese "arte de preguntar Amor perdido (1977) y en el ya citado
fingiendo ignorancia" según la define Augusto Monterroso.
el diccionario- el ensayo proyecta
su interés más que sobre el tema que
trata en las interrogantes que suscita. 9. La paradoja
Los tópicos, la doxa del saber altanero
y dogmático, son erosionados desde A través de la paradoja -una
dentro y demolidos. La propia caren- de las formas literarias preferidas por
cia de una forma precisa del ensayo Unamuno- el ensayo ha impulsado
permite esta reducción de saberes a la misión de cuestionar críticamente
esa "materia prima informe" con la tópicos e ideas aceptadas y ha abierto el
que el ensayista empieza a trabajar. pensamiento a nuevos significados. Ese
De ahí que Lukács se esforzara por reflexionar contrario al sentido común
caracterizar al género ensayo por la o el "buen sentido", auténtica arma de
ironía. La forma permite delimitar crítica contra las convenciones, pro-

-256-
Fernando Aínsa

voca una saludable sorpresa que para bibliográficas, han ido esterilizando la
Liliana Weinberg resulta esencial: "La fresca y espontánea prosa ensayística.
paradoja y el ensayo se han unido en El ensayo se despersonaliza en benefi-
su común vocación de crítica y hetero- cio de la monografía. La profundiza-
doxia, en su común afán por constituir ción exhaustiva de un tema acotado
interpretaciones originales del mundo y su presunta objetividad científica se
y despertar a las conciencias dormidas, aprecia más que el devaneo diletante
provocando admiración y moviendo a o el gusto por la forma estilística de la
compromiso" 60 . Sus características son ensayística. La sociología, las ciencias
el carácter crítico-constructivo de los sociales han despojado al ensayo de
conceptos aceptados o "institucionali- esa complicidad entre autor y lector
zados" y, al mismo tiempo, su capaci- que era parte de su esencia y donde
dad para interesar al lector, superando era más importante el comentario que
el ensayo didáctico o el texto plano en la información, la interpretación que
favor de una crítica más profunda e in- el dato, la creación que la erudición,
cisiva. A través de la paradoja, se llega la postulación que la demostración,
más lejos y se descubren perspectivas la opinión personal que la afirmación
insospechadas. demostrada científicamente, las hi-
pótesis y conjeturas que las verdades
tajantes o definitivas.
CONCLUSIÓN
Ante este panorama, es posible
El ensayo latinoamericano ha preguntarse: ¿Puede el ensayo latino-
podido desarrollarse gracias a la di- americano regresar a sus fuentes de
versidad cultural, la heterogeneidad rebeldía y discrepancia?; ¿puede vol-
espiritual, la variedad de opiniones ver a ser vehículo para un pensar inde-
que propicia su mayor apertura a la pendiente y desprejuiciado?; ¿puede
otredad. Consagra el derecho de cada volver a regodearse libremente en las
individuo y cada cultura a dialogar en formas que asume, prescindiendo de
pie de igualdad, un relativismo cultural las jergas universitarias que imponen
propiciatorio de interculturalidad del "los estudios culturales"?; ¿Puede
que la ensayística contemporánea es su desafiar al "pensamiento único" o al
mejor prueba. "políticamente correcto" que constri-
ñen la libre asociación de ideas?
Sin embargo, esta tradición del
ensayo latinoamericano -indagar Si bien los márgenes que se le
libremente, escudriñar más allá de han dejado al ensayo son estrechos,
las apariencias y elaborar imágenes es necesario impulsar cuatro vías
alternativas-está hoy amenazada. El para que siga siendo el género por
creciente predominio de la crítica y el excelencia del pensamiento latino-
academicismo que va borrando toda americano: utilizar el periodismo
subjetividad; la prosa monográfica y en todas sus formas como soporte y
didáctica; el artículo de revistas espe- medio de comunicación para man-
cializadas, académicas o universitarias tener su esencial condición dialogal;
acompañado de un riguroso y regla- manejar la ironía y la paradoja como
mentado aparato de notas y referencias armas para desmontar certidumbres;

-257-
ENSAYO

integrar el metatexto, el fragmento aprovechar esta oportunidad que se


como formas anti-retóricas de expre- presenta para "reclamar con más fuer-
sión complementaria; y, finalmente, za el puesto que le corresponde en el
reconstruir una función utópica que diálogo de culturas" 61 • Pero hay más.
nutra el pensamiento alternativo y sea Sigue habiendo en América Latina
esperanzada proyección del presente "maestros de la vida interior", escrito-
en el futuro. res cuya actitud vital es el ensayismo,
esos seres cuyo "reino está entre la
Sobre lo que no hay dudas es religión y la ciencia, entre ejemplo y
que la realidad y el imaginario ameri- doctrina, entre el amor intellectualis
cano siguen siendo un venero inago- y la poesía". Son "san tos con y sin
table para que el desarrollo de estas religión" -decía Robert Musil- y
vías pueda ser posible. No por azar la a veces son también simplemente
historia de las ideas y del pensamiento "hombres enredados en una aventu-
está tan estrechamente relacionada ra""2. Una aventura que -estamos
con el discurso ensayístico. Sólo debe convencidos- vale la pena vivir.

NOTAS

1 Germán Arciniegas, "Nuestra América es un ensayo", Con América nace


la nueva historia, Bogotá, Tercer Mundo editores, 1991, p.357.
2 María Andueza, "Trayectoria y función del ensayo hispanoamericano del
siglo XX", El ensayo en nuestra América. Para una reconceptualización,
Actas del Coloquio Internacional sobre el ensayo en América Latina
(Abril 1993), México, UNAM, 1993, p.7.
3 Richard Morse en El espejo de Próspero (México, Siglo XXI, 1982)
propone que América Latina se mire en su propio espejo y no en los
"reflejos" de los Estados Unidos. Un espejo a construirse a lo largo de
un proceso histórico forjado por seres humanos de "carne y hueso"
y no por la reencarnación nostálgica de una Edad de Oro indígena
perdida con la conquista. La realidad actual entre la servidumbre de la
herencia colonial y la situación periférica debe abrirse, no sin esfuerzo,
a una racionalidad y modernidad que reafirme valores comunitarios.
La pluralidad étnica y cultural, religiosa y lingüística no tienen por qué
ser incompatibles el pensamiento crítico de raíz iluminista. Conciliar la
agenda de la modernidad con las tradiciones culturales latinoamericanas:
de eso se trata.
4 Edgar Montiel en El humanismo americano. Filosofía de una comunidad
de naciones (Lima, FCE, 2000) reivindica la tradición humanista de un
Nuevo Mundo que se inaugura en la modernidad sin caer en una ideo-
logía complaciente que haya elaborado "un antropocentrismo laudatorio
del hombre y de su capacidad transformadora" p.18.
5 Fryda Schultz de Mantovani, Ensayo sobre el ensayo, Bahía Blanca,
Universidad Nacional del Sur, 1967, p.8.

-258-
Fernando Aínsa

6 En Fernando Aínsa. La reconstrucción de la utopía, México, El Correo


de la UNESCO, 1999, hemos desarrollado el tema. Consideramos que
la utopía no debe ser un proyecto total y absoluto, sino una propuesta.
Su función es propedéutica: desencadenar una tensión moral que evi-
dencie la insatisfacción y motive éticamente a pensar en otros futuros
posibles y a tener una visión plural y no única de la libertad. La función
utópica es, por lo tanto, un factor dinámico del cambio histórico y de
esa condición del hamo utopicus que parece inherente a la naturaleza
humana y se proyecta a partir de "sueños diurnos" y de fantasías, se
integra con sedimentos de la edad de oro y del paraíso perdido, con
ingredientes progresistas de ideologías, arquetipos, ideales, alegorías y
símbolos. La función utópica es, por lo tanto, una constante histórica; lo
que varían son las respuestas y los modelos propuestos a lo largo de los
siglos. Los contenidos utópicos se mueven en el interior de la historia
que los engendra, es decir, la utopía es la forma o contenido concreto y
positivo de las ideas directamente ligadas al momento histórico-social
en que surgen.
7 Joaquín Herrera Flores, "Utopía, fundamentalismo y espíritu utópi-
co", El ensayo en nuestra América. Para una reconceptualización, o.e.,
pp.175-195.
8 Refiriéndose a "América, ¿cuna de una nueva cultura?" incluido en su
colección de ensayos Tentativas y orientaciones, Alfonso Reyes recuerda
que el ensayo "no pertenece al orden de la aseveración que los gramáticos
llaman modo indicativo, sino al orden de la duda y la creencia, de la
insinuación y la esperanza" ("Posición de América", Obras completas,
México, FCE, 1960, XI, p.254) y está basado en el principio de la pro-
babilidad, pero no de la certeza. Reyes reivindica un tipo "extravagante"
de ensayo: el modo profético, lo que deseamos que sea, ya que "hoy por
hoy los americanos tenemos el derecho, acaso tenemos el deber, de ser
algo profetas".
9 Francisco Bilbao, autor de El Evangelio Americano, propone unificar
el alma, el pensamiento, el corazón y la voluntad porque "la América
debe al mundo una palabra [ ... ]: esa palabra serán los brazos abiertos
de la América a la tierra y la revelación de una era nueva", (Iniciativa de
la América, Latinoamericana. Cuadernos de Cultura latinoamericana,
96, UNAM, 3, 1978, p.6). Pese a su manifiesto voluntarismo no deja de
comprobar que frente a los Estados Unidos, América Latina se presenta
como "los estados desunidos".
10 José Carlos Mariátegui, "¿Existe un pensamiento hispanoamericano?",
Fuentes de la cultura latinoamericana, (Leopoldo Zea, Compilador), II,
México, FCE, 1993, p.40.
11 Horacio Cerutti, "Hipótesis para una teoría del ensayo. Primera aproxi-
mación", El ensayo en nuestra América. Para una reconceptualización,
o.e., p.23.
12 José Miguel Oviedo, Breve historia del ensayo hispanoamericano, Madrid,
Alianza, 1991, p.12

-259-
ENSAYO

13 Alfonso Reyes, "El deslinde", Obras completas, XV, México, FCE,


1981.
14 José Luis Gómez-Martínez, Teoría del ensayo, México, Cuadernos de
Cuadernos, 1992, p.96.
15 Pedro Henríquez Ureña, "El descontento y la promesa", Seis ensayos en
busca de nuestra expresión, México, FCE, p,251.
16 Walter D.Mignolo, "Discurso ensayístico y tipología textual", El ensayo
hispánico, Actas Hispanic Studies, The University of South Carolina,
1984, pp.45-63.
17 Octavio Paz, Corriente alterna, México, Siglo XXI, 1978, p.19
18 Enrique Anderson Imbert define al ensayo como "una unidad mínima,
leve y vivaz donde los conceptos brillan como metáforas" porque -con-
fiesa- No creo que un tratado sistemático, construido con métodos
y bibliografías, de esos que conmueven a los profesores, valga más,
necesariamente, que un ensayo personal, espontáneo y audaz sobre
el mismo tema. Todo depende de quien sea el autor y cuál su fruto"
("Defensa del ensayo", Los domingos del profesor; Buenos Aires, 1972,
p.51).
19 Mariano Picón Salas, La conquista del amanecer; Casa de las Américas,
1992, p.77.
-----20 Montaigne, "De Demócrito y Heráclito", Ensayo 50, Libro 1,, Ensayos,
Madrid, Cátedra, 1985, p.371.
21 José Luis Martínez, Teoría del ensayo, México, Cuadernos de cuadernos,
UNAM, 1992, pp.24-27.
22 "Cervantes es quizá también en nuestro idioma el primer ensayista
moderno; y que para confirmar esta insólita aseveración no tiene sino
que tomarse la molestia de ir a sus prólogos de las partes Primera y Se-
gunda de Don Quijote de la Mancha" (Augusto Monterroso, Literatura y
vida, 2004, reproducido en "Babelia", El País, Madrid, 24 de abril, 2004,
p.24).
23 "¿Dónde iremos a buscar modelos ..... ? -se pregunta Simón Rodríguez
en 1828-La América española es orijinal, orijinales han de ser sus Ins-
tituciones i su Gobierno - i orijinales los medios de fundar uno i otro
o Inventamos o Erramos", (Simón Rodríguez, inventamos o erramos,
Caracas, Monte Ávila, 1980, p.9).
24 José Martí, Nuestra América, Caracas, Biblioteca Ayacucho, 1977,
p.30
25 Juan Bautista Alberdi considera que, para erradicar el absolutismo que
hace posible las tiranías, América debe educarse siguiendo las pautas de la
filosofía universal, aunque sólo tomando de ella las doctrinas y corrientes
que convengan a la realidad y necesidades americanas Uuan Bautista
Alberdi, Ideas para un curso de filosofía contemporánea, Latinoamericana.
Cuadernos de Cultura latinoamericana, 96, UNAM, 9, 1978).
26 Antonio Caso, "Alas y plomo", Apuntamientos de cultura patria (1943),
incluido en Precursores del pensamiento contemporáneo (Antología, Intro-
ducción y selección de Leopoldo Zea), México, SEP/Diana, 1979, p.160.

-260-
Fernando Aínsa

27 Manuel González Frada, Páginas libres. Horas de lucha, Caracas, Biblio-


teca Ayacucho, 1976, p.107.
28 Idem, p.234.
29 Ernesto Mayz Vallenilla, El problema de América, México, Latinoameri-
cana. Cuadernos de Cultura latinoamericana, 93, 1979, p.6
30 Ezequiel Martínez Estrada, "El problema de los deberes sociales del
escritor", En torno a Kafha y otros ensayos, Barcelona, Seix-Barral, 1967,
p.171.
31 Carlos Real de Azúa, "Introducción", Antología del ensayo uruguayo
contemporáneo, Montevideo, Publicaciones de la Universidad de la
República, 1964, p.13.
32 En Montalvo -diagnostica Rodó- "se echa de ver que el tema es lo
accesorio para el ensayista, y lo principal el alarde continuo y cente-
lleante de ingenio, lectura y de estilo. Cuando le sale al paso una idea
accidental, jamás la aparta, ni la reprime, ni la urge, sino que se le en-
trega del todo y la sigue mientras ella da pábulo a la fantasía, o mientras
no acude una idea nueva a torcer otra vez y otra vez su camino, como
en esas carreras anhelantes y sin rumbo, que, en los cuentos de hadas,
tienen por guía el vuelo de un pájaro maravilloso o el rodar una piedra
animada de una magia interior" ("Montalvo", El mirador de Próspero,
Montevideo, Barreiro y Ramos, 1958, p.222).
33 Ernstjünger, Tratado de un rebelde, citado por Martín Cerda, La palabra
quebrada. Ensayo sobre el ensayo, Valparaíso, Ediciones Universitarias,
p.95.
34 Flora Ovares, Literatura de kiosco, revistas literarias de Costa Rica
1890-1930, San José, EUNA, 1994. Esta obra incluye un interesante
planteo teórico sobre el "soporte" periodístico de la literatura.
35 Xavier Villaurrutia considera que "el ensayo es ya una realidad palpable
en la vida moderna. En todas las literaturas del mundo se cultiva este
producto equidistante del periodismo y del sistema filosófico" ("En-
sayistas franceses contemporáneos, Textos y pretextos, Obras, México,
FCE, p.693).
36 José Emilio Pacheco cree que "el ensayo tiende a ser narrativo, no
encadena, sino libera y siempre ha sido el más indefinido y el menos
encasillado de los géneros" ("El ensayo, el género menos encasillado",
La jornada, México, 12 de enero 1992, 2634, p.39).
37 "El ensayo es lo más espontáneo", afirma Miguel de Unamuno: "Ponerse
uno a escribir una cosa sin saber adónde ha de ir a parar, descubriendo
terreno según marcha, y cambiando de rumbo a medida que cambian las
vistas que se abren a los ojos del espíritu. Es caminar sin plan previo, y
dejando que el plan surja" (Ensayos, I, 588). "Pienso ir aquí agrupando
las reflexiones y sugestiones que me han ocurrido pensando en torno a
este punto del casticismo" (En torno al casticismo). Por su parte, Jorge
Mañach sugiere que "más que seguir un camino, el ensayista contempla
un paisaje intelectual".
38 José Luis-Gómez Martínez, Teoría del ensayo, o.e. p.36.

-261-
ENSAYO

39 Salvador Morales, "El ensayo revolucionario: José Martí", El ensayo en


nuestra América. Para una reconceptualización, o.e., p.330.
40 Mariano Picón Salas, Crisis, cambio, tradición. Ensayos sobre la forma de
nuestra cultura, Madrid/Caracas, Edime, 1955, p.144.
41 Carlos Arturo Torres, Idola Fori, México, Latinoamericana. Cuadernos
de Cultura latinoamericana, 96, UNAM, 1979, p.7.
42 Octavio Paz, Posdata, 100.
43 Jesús Silva Herzog, Comprensión y crítica de la historia", México, Editorial
Nueva imagen, 1982, p.33.
44 Enrique Krauze, "Personas e ideas", El ensayo hispano-americano del
siglo XX,John Skirius (compilador), México, FCE, Tierra Firme, 1994,
p.613.
45 José Lezama Lima, Imagen y posibilidad, La Habana, Letras Cubanas,
1981, p.196.
46 Martín Cerda, La palabra quebrada. Ensayo sobre el ensayo, Valparaíso
Ediciones Universitarias, 1982, p.28.
47 Theodor Adorno, "El ensayo como forma", Notas de literatura, Barcelona,
Ariel, 1962, p.23.
48 Montaigne, ''De Demócrito y Heráclito", Ensayos, L, I, Madrid, Cátedra,
1985, p.371.
49 José Carlos Mariátegui, Siete ensayos de interpretación de la realidad
peruana, Lima, Biblioteca Amauta, 1972, p.11.
50 Ernesto Sábato,Uno y el universo, Buenos Aires, Sudamericana, 1952,
p.13.
51 Carlos Fuentes, Tiempo mexicano, México, Joaquín Mortiza, 1971,
p.7.
52 Germán Arciniegas, América, tierra firme, Buenos Aires, Losada, 1944,
p.9-10.
53 Juan Loveluck, "Esquividad y concreción del ensayo", El ensayo hispá-
nico, Actas Hispanic Studies, The University of South Carolina, 1984,
pp.29-39.
54 Héctor Libertella, El ensayo hispano-americano del siglo XX, o.e.,
p.607
55 Martín Cerda en La palabra quebrada (o.e.) desarrolla la tesis de la forma
esencialmente fragmentaria del ensayo contemporáneo.
56 Theodor Adorno, Mínima Moralia, Caracas, Monte Ávila, 1975, p.14.
57 Paul Groussac advierte en Del Plata al Niágara que "sentiría que labre-
vedad material de cada esbozo engañase respecto de su contenido [ ... ]
Pero acaso algún lector atento advierta que la forma ligera encubre un
fondo sólido, y que alguna vez la concisión puede ser condensación.
Tampoco he creído que fuera indispensable adoptar un plan metódico
y un tono doctrinario, rechazando la poesía y la sonrisa, y vaciando una
materia, de suyo elástica y vagabunda, en un rígido molde artificial. Sin
mucho cuidado del orden lógico he trascripto mis sensaciones instan-
táneas y mis reflexiones inmediatas, no rehuyendo las contradicciones
aparentes o reales, que son legítimas cuando completan el aspecto vario

-262-
Fernando Aínsa

de la verdad" (Paul Groussac, Del Plata al Niágara, Buenos Aires, Dictio,


1980, p.20).
58 Georg Lukács, El alma y las formas. Barcelona: Grijalbo, 1985.
59 En "Intelectuales", Gabriel Zaid, define a los que "no son intelectuales".
Entre ellos sitúa a "los que son escuchados por su autoridad religiosa o
por su capacidad de imponerse por vía armada, política, administrativa,
económica" y a "los taxistas, peluqueros y otros que hacen lo mismo
que los intelectuales pero sin el respeto de las élites" (El ensayo hispano-
americano del siglo XX, o.e., p.529).
60 Liliana Weinberg, "Ensayo, paradoja y heterodoxia", El ensayo en nuestra
América. Para una reconceptualización, o.e., p.537.
61 Janusz Wojcieszak, "Ensayo y filosofía: el caso latinoamericano", El
ensayo en nuestra América. Para una reconceptualización, o.e., p.575.
62 Roben Musil, El hombre sin atributos, Volumen I, Barcelona, Seix-Barral,
1969, p.309.

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EPISTEMOLOGÍA
___ _ __________ Jor_g_e Ver__g_ara fa,tévez __ ________ ______ ___ _
Chile

.-------------Palabras Clave
RACIONALIDAD - POSITIVISMO-ANTIPOSITIVISMO
- HERMENÉUTICA - SOCIOLOGÍA - ANTROPOLOGÍA - HISTORIA
- PRAXIS - TEORÍA CRÍTICA

INTRODUCCIÓN tífico (1906, tomo I). Este significado


de la expresión es predominante en
el léxico filosófico español, francés y
La expres10n epistemología alemán, aunque hay autores de esas
(épistémologie) (F), Wissenschaftle- lenguas que lo usan de modo análogo
hres (A), epistemology (I) significa o a los ingleses.
equivale a filosofía de las ciencias,
aunque algunos autores sostienen la La expresión epistemology,
tesis de su autonomía respecto a la de uso generalizado en los autores
filosofía. Su objeto no es el estudio anglo-sajones, a diferencia de su
de los métodos científicos, que es el significación en el léxico continental
tema de metodología de la ciencia. europeo, y en oposición a su etimolo-
Tampoco puede entendérsela como gía, se emplea para designar "la teoría
una síntesis de las leyes científicas a la del conocimiento" o "gnoseología",
manera que la concebía el positivismo que los alemanes denominan Erkennt-
y evolucionismo. "Se usa la expresión nistheorie. Lalande sostiene que debe
'epistemología' para referirse a "la mantenerse la distinción entre epis-
teoría del conocimiento científico" temología y teoría del conocimiento,
(Ferrater-Mora 1994, 1041). En el reconociendo que la primera sería la
vocabulario de filosofía de Lalande se introducción o auxiliar indispensable
dice que "es esencialmente el estudio de la segunda, puesto que "estudia el
crítico de los principios, las hipótesis conocimiento en detalle y a posterio-
y los resultados de diversas ciencias, ri, en la diversidad de ciencias y de
destinado a determinar su origen objetos más que en unidad del espí-
lógico, no psicológico, su valor y su ritu" (1962, 293 ). Es probable que
propósito objetivo, (. .. ) y de la historia la identificación entre epistemología
filosófica de las ciencias" (1962, 293). y teoría del conocimiento provenga
Esta significación corresponde a su o suponga la identidad previa entre
etimología de origen griego. También conocimiento y ciencia, es decir, la
Ernest Cassirer considera que la epis- idea de que el conocimiento científico
temología es, básicamente, el estudio sería el único conocimiento. Esta con-
del problema del conocimiento cien- cepción cientifista ha sido cuestionada

-267-
EPISTEMOLOGÍA

desde la filosofía post-positivista. la de las hipótesis y de la imaginación,


teoría sociológica fenomenológica, el el modo de someter a contraste"
pensamiento oriental, postmoderno, (Lord Acton, cit. Popper, 1934, 15).
etc. Hoy se reconoce que existen Otros sostienen que debe propor-
diversos tipos de saberes y el conoci- cionar recursos intelectuales para la
miento científico es sólo uno de ellos, investigación científica. Einstein, por
y tampoco puede decirse que sea el de ejemplo, decía que "las condiciones
mayor jerarquía. externas que se manifiestan por medio
de los hechos experimentales, no le
permiten (al científico) ser demasiado
DELIMITACIÓN estricto en la construcción de su mun-
CONCEPTUAL do conceptual mediante la adhesión a
un sistema epistemológico. Por eso,
tiene que aparecer ante el epistemó-
La relación entre la epistemolo- logo sistemático como un oportunista
gía y las ciencias ha sido interpretada poco escrupuloso" (Cit. Feyerabend
de diversas maneras. Sus enunciados 1970: 8). Este último autor opina que
se refieren a los científicos. pero están el papel de la epistemología crítica
situados en otro nivel de lenguaje que consiste en liberar a los científicos de
ellos. Por eso, se dice que la epistemo- la ilusión de que es posible realizar
logía es una metaciencia. Algunos au- investigaciones innovadoras basadas
tores sostienen la tesis de su primacía en la concepción de que existen méto-
sobre las ciencias: "la epistemología dos científicos generales y estándares
se sitúa en un nivel superior desde comunes que deben ser respetados por
donde las domina" (Blanché, 1973, todos los científicos. "Las ciencias no
23). Esta tesis está a la base de postu- poseen una estructura común; no hay
ras de carácter normativo, de autores elementos que se den en toda investi-
muy diversos en sus orientaciones gación científica, y que no aparezcan
epistemológicas y teóricas como Karl en otros dominios" (Feyerabend 1987:
Popper, Paul Feyerabend, Hugo Ze- 20). Los científicos deben abandonar
melman y otros. La mayor parte de los los estándares comunes, "confiar ente-
especialistas, sin embargo, rechazan la ramente en las teorías del error" (Ibid,
idea de una epistemología normativa y 13), y realizar sus investigaciones
la conciben como un espacio de auto- creativamente, elaborando sus propias
rreflexión de los científicos y filósofos reglas metódicas, adecuadas al objeto,
sobre la ciencia. y a su propio temperamento y forma-
ción (Feyerabend, 1970, 13).
Tampoco existe consenso so-
bre el objeto de la epistemología. Los estudios de epistemología
Algunos sostienen que consiste en la general se diferencian de los de las
explicitación de reglas de construc- epistemologías especializadas. Los
ción del conocimiento científico: "no primeros se refieren a la noción de
hay nada más necesario al hombre ciencia, sus diferencias con otros tipos
de ciencia que la historia de ésta y ; de conocimiento, sus condiciones de
la lógica de la investigación (. .. ). la validez, etc. Las epistemologías es-
forma de descubrir los errores, el uso peciales corresponden a cada uno de

-268-
Jorge Vergara Estévez
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los grandes tipos de ciencias, y a cada neos y vivenciales sobre la realidad. La


una en particular. Uno de los temas actividad científica implica un nuevo
clásicos de la epistemología es el de nivel de elaboración respecto a los
la clasificación y diferenciación entre objetos del sentido común. Por ello es
las ciencias. La más usual distingue que el 'objeto' de las ciencias fácticas
entre ciencias formales, ideales o es siempre una construcción concep-
axiomáticas (matemáticas y lógica), y tual, realizada a partir de categorías
las ciencias fácticas o empíricas (física, teóricas. Incluso los instrumentos
sociología, etc.), las cuales se diferen- de medición y experimentación se
cian por su objeto. En las primeras, crean a partir de los parámetros que
éstos son "ideales", en el sentido de proporcionan las teorías científicas
que carecen de toda forma de exis- (Kuhn, 1962-1969). Como se ha di-
tencia externa, y son sólo "entes de cho, los relojes no miden simplemente
razón", como decían los escoláticos, el tiempo, sino lo hacen, desde una
producto de procesos abstractivos teoría del tiempo.
(Russell, 1919, 71-83). Las ciencias
fácticas construyen conceptos que Las ciencias formales y las
son modelos, o conceptos ideales fácticas son también distintas por su
(Weber) mediante procesos abstrac- método. El de las ciencias formales es
tivos de esquematización, basados en deductivo. Es decir, sus enunciados
información empírica. Dichos concep- constituyen sistemas axiomáticos,
tos-modelos representan realidades cuyos componentes son expresiones
externas y distintas del pensamiento no definidas que permiten definir
(Bunge, 1982, 9-52). Las ciencias fác- las otras expresiones del sistema,
ticas se dividen en naturales y sociales, que son los teoremas (Tarski 1951:
aunque algunas ciencias no podrían 129-135). En cambio, en las ciencias
ser incluidas en una u otra categoría fácticas, existen diversos métodos,
porque pertenecerían a ambas, como que incorporan incluso procedimien-
sucede con la geografía. La expresión tos deductivos, como sucede con el
'ciencias experimentales' ha perdido hipotético-deductivo de Popper, pero
vigencia, pues parte importante de las que nunca pueden ser exclusivamente
ciencias fácticas como la historiogra- deductivos. Es decir, la producción
fía, la arqueología y, en gran medida de conocimientos fácticos requiere
la propia astronomía, entre otras, no de métodos, que son muy diversos,
son experimentales o sólo lo son muy que permitan adquirir información
limitadamente. empírica para conocer realidades "ob-
jetivas" que siempre están, de algún
Kant decía que el objeto de modo, "arrojadas" frente al científico.
nuestra experiencia era "trascen- Se dice que el método de las ciencias
dental", en el sentido en que era una naturales es hipotético, aunque Kuhn
síntesis de los datos recibidos por los piensa que cada paradigma de las
sentidos, y de la actividad de nuestra ciencias naturales define sus propios
razón que ordenaba y conformaba métodos de investigación (Popper,
dicha información. Sin embargo, las 1934 y Khun, 1962-1969). En las
ciencias fácticas no están formadas de ciencias sociales existe una gran varie-
conocimientos inmediatos, espontá- dad de métodos que son empleados de

-269-
EPISTEMOLOGÍA

acuerdo a la concepción de la ciencia diferenciación con el conocimiento


del investigador. del sentido común y con el saber me-
tafísico. Sin embargo, Imre Lakatos
Las ciencias fácticas son siem- ha mostrado que en el núcleo duro
pre conocimiento de lo general, como de los programas de investigación
ya decía Aristóteles. La física, por pueden encontrarse teorías metafísi-
ejemplo, estudia todos los objetos y cas (1971). Alexandre Koyré y Edwin
procesos que poseen ese carácter no Arthur Burtt y otros historiadores, han
sólo en la tierra, sino en el universo. mostrado la presencia de concepcio-
Por ello, las hipótesis y las leyes de nes interpretativas en la base de las
las ciencias naturales, afirma Popper, teorías de las ciencias naturales; por
tienen carácter conjetural, son sólo ejemplo, de "fundamentos metafísicos
de anticipaciones y nunca pueden ser de la ciencia moderna" (Koyré, 1957
"verificadas", es decir, nunca podre- y Burtt, 1960).
mos llegar a saber si son verdaderas
(1934, 259-260). En las ciencias Martín Heidegger, ha señalado
sociales, la diversidad y los niveles que "a las esenciales manifestaciones
de complejidad de sus objetos son de la Edad Moderna pertenece su
mayores; y muchos de ellos poseen ciencia. La esencia de lo que hoy
una especificidad e individualidad se llama ciencia es la investigación.
que no puede ser soslayada. Por ello, Ésta se realiza gracias a que en un
muchos epistemólogos y científicos ámbito del ente, v.g., en la naturaleza
sociales se muestran escépticos frente se proyecta un determinado esque-
a la posibilidad de poder formular ma de los procesos de la naturaleza"
leyes generales de la historia, la so- (1938, 16, 19 y 20). Para este pen-
ciedad y la economía, válidas para sador, la relación entre metafísica
toda sociedad y para todo período y ciencia no se establece sólo por la
histórico (V gr. Marx 186 7, Popper, presencia de supuestos metafísicos
1944 y Gray, 1998). Aunque algunos . de las teorías científicas, sino que la
investigadores continúan elaborando ' esencia de la ciencia moderna se fun-
teorías generales sobre estos grandes damenta en una concepción del ente
temas del conocimiento, las investi- y la verdad, propio de la moderni-
gaciones en ciencias sociales se refie- dad, distinto de la ciencia medieval
ren, habitualmente, a temas espacial y griega, la cual por su "esencia no
y temporalmente muy delimitados. podía ser exacta y no necesitaba ser
Asimismo, se ha señalado que, en exacta" (!bid, 19).
importante medida, la labor de las
ciencias sociales críticas consiste en El modelo positivista clásico
explicitar el carácter ideológico de las suponía que la ciencia, especialmen-
supuestas leyes sociales universales te de la naturaleza, era un discur-
(Habermas 1965: 172). so absolutamente libre no sólo de
supuestos y teorías filosóficas, sino
Las posturas positivistas, desde también de supuestos teológicos y
el siglo XIX hasta ahora, han pretendi- creencias religiosas. En la concepción
do "demarcar" el conocimiento cien- de August Comte, la ciencia madura
tífico, es decir, establecer una nítida -que ha alcanzado el estadio superior

-270-
Jorge Vergara Estévez

de "ciencia positiva"-, ha superado o analítico, o lo necesario" (Hesse,


ya todo elemento proveniente de la 1980). De este modo, diversas inves-
teología y la metafísica. Creía que la tigaciones han corroborado la tesis de
astronomía, química y biología habían la profunda relación entre la sociedad,
accedido a este estadio, y la sociología su concepción de racionalidad y la
estaba en vía de alcanzarlo (Ferrater- producción científica, incluida la de
Mora, 1994, 609-610). Sin embargo, las ciencias naturales.
los estudios de historia de las ciencias
naturales muestran que la presencia Los positivistas han sostenido
de supuestos teológicos y creencias la tesis de la unidad de las ciencias y
religiosas es tal, tanto en las ciencias del método, presentando a la física
naturales, por ejemplo en Newton y como el modelo de las ciencias so-
Einstein, como en las sociales. ciales (Vgr. Popper, 1944). Desde di-
versas posiciones epistemológicas, se
Otro aspecto significativo del ha cuestionado este modelo único de
actual debate sobre las ciencias se re- cientificidad. Por ahora, mencionare-
fiere al tema de la "explicación social mos la posición de Wilhem Dilthey, la
del conocimiento". La postura de los fenomenológica de Edmond Husserl
epistemólogos ha sido casi siempre y Alfred Schutz, y la dialéctico-crítica
la de privilegiar la llamada "histo- de la Escuela de Frankfurt. Dilthey
ria interna" y excluir o minimizar diferencia las ciencias naturales de las
la "historia externa". Esto implica que denomina ciencias del espíritu,
privilegiar "El contexto de validez" no por su método y su objeto, que
sobre "el de descubrimiento". Sin em- a veces suelen coincidir, sino por su
bargo, la sociología del conocimiento contenido. Los hechos espirituales, a
desde Karl Mannhein hasta ahora ha diferencia de los naturales que sólo
mostrado la relevancia de la relación podemos aprehender a través de un
entre los conocimientos científicos y complejo acceso conceptual, son ex-
su contexto social. Algunos autores perienciados de un modo inmediato,
sostienen que hay una relación de de- real y completo. Esta aprehensión la
terminismo desde lo social, por la cual denomina autognosis (Selbstbesin-
las teorías científicas serían "reflejos" nung) (1883, 11 - 50).
de las ideologías sociales. Esta fue la
postura del marxismo soviético, la de Para Edmund Husserl el mo-
Lucien Goldman y de Karl Mannhein, delo galileano de las ciencias, cuyo
respecto del conocimiento social (Vgr. modelo es la física, implica "la reduc-
Goldman, 1967 y Mannheim, 1936). ción positivista de la idea de ciencias
Otros aseveran que la situación social a mera ciencia de hechos. La 'crisis' de
proporciona ciertos supuestos a partir la ciencia como pérdida de su signifi-
de los cuales se construyen teorías cación para la vida" (1936, 11). Asi-
políticas (Macpherson 1962). Los mismo, cuestiona el abstraccionismo
partidarios de la llamada "tesis fuerte de la experiencia físico-matemática que
de la sociología del conocimiento" van ignora la experiencia del 'mundo de la
más allá y sostiene que "no hay bases vida' compartido por todos y que está
extranaturales y extrasociales de la a la base y es condición de posibilidad
racionalidad y verdad en lo a priori, de la propia experiencia científica; "la

-271-
EPISTEMOLOGÍA

vestidura de ideas llamada 'matemática caractenstlco de las investigaciones


y ciencia matemática de la naturaleza' cien tífico-sociales construidas de
o bien la vestidura de símbolos, de acuerdo a dicho modelo. Éstas sólo co-
(dichas) teorías (. .. ), comprende todo nocen hechos dispersos y separados.
aquello que(. .. ) sustituye al mundo de Al intentar partir de 'datos', ignoran
la vida, lo encubre tanto para los hom- que éstos están socialmente condicio-
bres de ciencias como para los hombres nados y que forman parte de redes o
cultos" (Husserl, 1936, 57). tramas de relaciones sociales. Adorno
ha señalado que, en contradicción a su
Alfred Schu tz desarrolló los proclamado objetivismo, la sociología
análisis de Husserl y fundó la sociolo- empiricista concede el mayor valor a
gía fenomenológica. Ésta comprende lo subjetivo. pues sus métodos 'obje-
una aguda crítica de las teorías so- ; tivos' de cuestionarios y entrevistas
ciales objetivistas que tienen "como i convierten la opinión pública en
propósito principal explicar, mediante 'verdad'. La operación intelectual por
métodos científicamente correctos, lo ' la que absolutiza a la opinión pública
que en realidad sucede en el mundo a la vez reconoce en ella puntos de
social de nuestra vida cotidiana" vista previamente difundidos y con-
(1960, 18). Sin embargo, sustituyen vierte la investigación en un factor
la realidad social por un mundo de reproducción del orden existente.
ficticio y luego tratan, inútilmente, Asimismo, el empirista establece un
de explicar lo que sucede realmente primado arbitrario del método y con
en nuestra vida social y cotidiana. ello, del investigador sobre el objeto
"Estos investigadores aceptan que (Adorno 1969).
sus objetos de estudio, 'el Estado', 'el
mercado'. 'la religión', se refieren a las En la extensa y diversificada
actividades de seres humanos inteli- producción internacional de episte-
gentes, para quienes constituyen el mología de las ciencias sociales se
mundo de su vida social(. .. ). Afirman pueden distinguir, de acuerdo a la
que los especialistas pueden y deben teoría habermasiana de los intereses
limitarse a expresar lo que ese mundo cognoscitivos, tres grandes posturas
significa para ellos, dejando de lado epistemológicas (Habermas, 1965).
lo que significa para quienes actúan La primera de carácter empírico-ana-
dentro de este mundo social" (!bid, lítico, de orientación cientificista, de
19). Schutz propone desarrollar una carácter positivista o cercana a dicha
sociología subjetiva, que explicite el filosofía. Representa la tradición
sentido que tienen los actos para sus galileana que, desde la Ilustración,
protagonistas, basada en las categorías "quería demostrar de una vez que
de actos sociales y personalidad social la búsqueda de conocimiento cul-
(!bid, 20). mina en el dominio de la naturaleza
y el progreso material" (Mardones,
La crítica de la Escuela de 1982, 133). Fue sistematizada por
Frankfurt al modelo único de cienti- Comte y tiene entre sus teóricos más
ficidad propuesto por los positivistas relevantes a Emile Durkheim, Karl
se realiza como un cuestionamiento Popper, Thomas Kuhn, Jean Piaget,
radical del empirismo epistemológico Niklas Luhmann y John Elster.
Jorge Vergara Estévez

La postura denominada "pos- ha recibido la influencia de Hegel,


tura fenomenológica, hermenéutica aunque hay algunos radicalmente
y lingüística", es la más antigua, pues antihegelianos como Foucault. Karl
su origen se encuentra en las concep- Marx es uno de sus primeros y prin-
ciones teleológicas de Aristóteles. Sus cipales representantes. Este autor ha
raíces más cercanas están en Hegel y ejercido una influencia significativa
en la historiografía y lingüística ale- sobre los representantes posteriores,
manas del siglo pasado. Sin embargo, especialmente Max Horkheimer,
se constituyó como respuesta crítica Theodor Adorno,Jürgen Habermas y
al positivismo y a su pretensión de K. -0. Apel, que se cuentan entre los
adecuar los conocimientos científi- principales representantes de esta co-
co-sociales al modelo de las ciencias rriente (Mardones, 1982, 317-398).
naturales, especialmente de la física
matemática. Sus teóricos sostienen Como se ha señalado, en Marx
que las ciencias sociales poseen una encontramos una tensión entre un
racionalidad diferente y metodologías paradigma newtoniano, fisicalista, con
propias frente a las ciencias naturales. marcadas tendencias mecanicistas y
Siguiendo una tradición diltheyana, economicistas, y un análisis dialéctico
destacan el carácter auto-reflexivo y la que explicita las relaciones sociales,
identidad sujeto-objeto características las que se desarrollan por medio del
de las ciencias humanas. Esta postura lenguaje, se condensan en institucio-
reúne un diversificado conjunto de nes y, sin embargo, dejan espacio a la
autores, con planteamientos diferen- libertad humana (1857-1958). En al-
tes, pero que coinciden en considerar gunos textos, Marx identifica su teoría
la "comprensión" (Verstehen) como con las de las ciencias naturales y la
el método adecuado para acceder al plantea como una física evolutiva de la
mundo humano que es significativo sociedad (1875) y, en otros, afirma la
e intencional, aunque sus nociones existencia de leyes de tendencias que
sobre la comprensión sean diferen- pueden ser controladas por la acción
tes. No desconocen la racionalidad social consciente (1857- 1858).
de tipo empirista, pero contradicen
su reduccionismo. "Quieren mostrar El análisis dialéctico supo-
los supuestos sobre los que se apoya ne el ejercicio permanente de la
la pretendida racionalidad científica (auto)crítica, que cuestiona los proce-
(. .. ) El objetivismo empiricista cae sos de positivación y cristalización de
hecho trizas al descubrir la estrategia lo social, ya señalados por el joven He-
de silencio que teje en torno al sujeto gel; y los de fetichización analizados
y sus aportaciones. El conocimiento por Marx. Esta postura continúa con
científico está enmarcado en la trama la Escuela de Frankfurt y se convierte
de la vida" (Mardones, 1982, 247). en Adorno en el ejercicio permanente
de la crítica. Se desarrolla paralela-
La posición dialéctica y crí- mente a las investigaciones de Ernest
tico-hermenéutica difiere tanto del Bloch y Georg Lukács y conduce a los
objetivismo empiricista como del nuevos intentos de fundamentación
subjetivismo de la postura comprensi- de las ciencias humanas con Jürgen
vista. Parte importante de sus autores Habermas y K. -0. Apel. Un hito

-273-
EPISTEMOLOGÍA

significativo del enfrentamiento con ciencia elaborada a partir de la física


el positivismo se produjo con el de- clásica del siglo XVI. En todo caso, el
bate realizado a fines de la década del surgimiento de la epistemología de las
sesenta en que participaron Adorno, ciencias naturales y posteriormente
Popper, Daherendorf, Habermas, Al- la de las ciencias sociales fue paralelo
bert y Pilot, publicada como La disputa a la aparición y desenvolvimiento de
del positivismo en la sociología alemana las mismas en un ambiente cultural
(Adorno, Popper et al. 1969) . permeado por la filosofía. Más aun,
es tan directa la conexión que existe
En las últimas décadas, el pen- entre la epistemología y la investi-
samiento dialéctico. sea en su versión gación científica que muchos de los
marxista ortodoxa y en su interpre- grandes investigadores, tanto de las
tación crítica, ha perdido vigencia. ciencias naturales como de las socia-
Habermas, por razones no bien expli- les, han sido a la vez epistemólogos
citadas, claramente lo ha abandonado, o han hecho aportes significativos a
desde Teoría de la acción comunicativa esta disciplina. Es el caso en las cien-
(1981). Los motivos de esta pérdida de cias sociales, por ejemplo, de Emile
vigencia son diversos. Podemos men- Durkheim, Karl Marx, Max Weber, y
cionar la identificación de la dialéctica actualmente de Claude Lévi-Strauss,
con la cuestionable visión de mundo Michel Foucault, Anthony Giddens
del marxismo tradicional; la crisis de (Bourdieu, Chamberon y Passeron,
la racionalidad occidental, desde me- 1973). La razón de tan estrecha co-
diados de los setenta, que afectó a las nexión se debería al hecho de que las
posiciones dialécticas que aparecían dificultades teóricas de las investiga-
identificadas con el racionalismo y, ciones conducen y exigen la reflexión
en especial, la del pensamiento crítico o investigación epistemológica.
del cual el pensamiento dialéctico for-
maba parte; y, finalmente, la situación Otra de las características rele-
de las sociedades contemporáneas vantes de la epistemología europea es
sometidas a profundas tendencias el interés de los filósofos por la teoría
autodestructivas ambientales, de su de las ciencias y la relevancia de sus
sociabilidad y subjetividad, que hacen aportes. Para ello, bastaría mencionar
dudosa su sustentabilidad (Hinkelam- a René Descartes, Inmanuel Kant,
mert, 2001). Esta situación cuestiona Georg W. Hegel y muchos otros. Y
la posibilidad de "superar" sus pro- esta preocupación por la filosofía de
fundas contradicciones. las ciencias, en la modernidad, parece
provenir de la propia reflexión sobre el
Como se ha expuesto, la epis- conocimiento filosófico. Observamos, a
temología en Europa tiene un antiguo partir de Descartes, desde los orígenes
origen. Incluso algunos autores, la mismos de la modernidad filosófica,
hacen remontar a la teoría de la un progresivo desgajamiento del árbol
ciencia de Aristóteles, lo cual es muy del conocimiento estructurado desde la
cuestionable (Simmard, 1961). La filosofía, y la constitución de las diversas
concepción griega clásica de episte- ciencias empíricas autónomas. Consi-
me, como lo seií.alaba Blanché, no guientemente, la filosofía no sólo debió
corresponde a nuestra concepción de aceptar la progresiva reducción de su

-274-
Jorge Vergara Estévez

esfera de objetos, sino, a la vez, desde el la reflexión filosófica latinoamericana


advenimiento del positivismo y las posi- se inicia alrededor de 1870, con los
ciones cientificistas, el cuestionamiento autores que adscribieron al positivis-
de su propio status de conocimiento. De mo o bien lo cuestionaron: Antonio
este modo, la reflexión por la ciencia y Caso,José Vasconcelos, Enriquejosé
sus límites de conocimiento ha formado Varona, Alejandro Korn y otros. En
parte de su propia auto-reflexión y de la general, puede decirse que, en ese
fundamentación de sus propias preten- período, se asumió acríticamente la
siones de validez. concepción positivista de la ciencia,
o bien se desarrollaron posiciones an-
tipositivistas, con frecuencia cercanas
LA EPISTEMOLOGIA al intuicionismo o el irracionalismo.
EN AMERICA LATINA La llamada "normalización filosófica"
(Romero), de mediados del siglo pasa-
do, es decir, la creación de institutos
La epistemología de las ciencias o departamentos especializados de
sociales surgió tardíamente en Améri- filosofía, la profesionalización de su
ca Latina, en los setenta del siglo pa- cultivo y la introversión disciplinaria,
sado, y con características distintivas tampoco abrió mayores espacios de
respecto a su desarrollo en Europa. desarrollo de la epistemología. En
Este retraso y las dificultades para su América Latina, desde esa época, en
desarrollo se relacionan con algunas general la filosofía se ha identificado
características del ambiente cultural con la metafísica y con su historia.
latinoamericano: el escaso y reciente
desarrollo de reflexión autónoma en la Asimismo, la mayoría de
filosofía latinoamericana; el limitado las corrientes que han alcanzado
cultivo de la investigación en ciencias mayor arraigo en América Latina:
naturales; la tardía aparición de las (neo)tomismo, hegelianismo, orte-
ciencias sociales investigativas en la guianismo, marxismo, y actualmente,
región y los prejuicios positivistas y el nietszchianismo, heideggerianismo,
pragmáticos. Asimismo, debe señalar- el postestructuralismo francés y el
se que las condiciones institucionales postmodernismo, tienen una actitud
no son favorables para su ejercicio de distanciamiento o crítica respecto
(Vergara, 1994). de las ciencias sociales y muestran es-
caso o nulo interés por la teorización
La filosofía empezó a ser culti- sobre ellas. A su vez, las denominadas
vada en los seminarios y universidades "Filosofías Latinoamericanas" con
coloniales, casi exclusivamente como Enrique Dussel, Arturo Roig, Au-
docencia. Su desarrollo fue paralelo y gusto Salazar Bondy, Leopoldo Zea
subsidiario, primero, de la filosofía es- y otros, que buscan desarrollar un
pañola escolástica y, posteriormente, pensamiento filosófico propio en el
de la Ilustración europea. Aunque hay cual la temática de la región tenga un
algunos pensadores de interés en el papel central, se han orientado hacia
período colonial y las primeras déca- la historia de las ideas en América La-
das del republicano, Francisco Rome- tina, la problemática de la liberación,
ro y otros especialistas consideran que las características de nuestra cultura,

-275-
EPISTEMOLOGÍA

la teoría de la historia y otros temas En nuestra región, las cien-


alejados de la epistemología general y cias naturales y sociales tienden a
la de las ciencias sociales. ser valoradas sólo como ciencias
aplicadas, como tecnologías, las que
Las características que ha deberían contribuir de inmediato o a
asumido el desarrollo de las ciencias i breve plazo a la solución de urgentes
naturales tampoco ha favorecido el o acuciantes problemas. "Este prag-
cultivo de la epistemología de las matismo del sentido común dificulta
ciencias sociales. En primer lugar, el desarrollo de un eficiente sistema
aunque existen algunos valiosos institucionalizado de producción
precedentes coloniales, las investi- científica y constituye el mayor obs-
gaciones se inician realmente el siglo táculo para el desarro1lo científico de
XIX y, especialmente, en las primeras América Latina. Esta actitud proviene
décadas del XX. Segundo, la produc- en importante medida de la influencia
ción teClrica ha siclo muy escasa, de del positivismo y sus prejuicios anti-
modo que casi no se ha requerido filosóficos" (Vergarn, 1994).
enfrentar problemas de teoría de la
ciencia. Tercero, en general, en los am- Otra gran limitación proviene
bientes científicos, aún encontramos de lo que se ha 11amado "la perversa
una postura contraria a la filosofía, de división del trabajo a nivel inter-
origen positivista, que no valora estos nacional", según la cual al Norte le
estudios y reflexiones. corresponde elaborar la teoría y a
los latinoamericanos sólo realizar
Una tercera condición que ha la investigación empírica (Lechner,
incidido negativamente en el desarro- 1990). Se piensa que en la región no
llo de la epistemología de las ciencias es necesario elaborar teoría, pues ésta
sociales en América Latina ha sido ya ha sido hecha en el Norte y a los
la tardía aparición de la sociología cientistas sociales latinoamericanos
invcstigativa, que se remonta sólo a sólo les corresponde emplearla ade-
la década de los cincuenta del siglo cuadamente. Esta postura contiene
pasado, con tres grandes investiga- el supuesto de la plena aplicabilidad
dores: Gino Germani, José Medina de la teoría social internacional a los
Echavarría y Raul Prebisch. Dicho fenómenos sociales de América Lati-
retraso no podría atribuirse sólo a una na. Sin embargo, uno de los mayores
dificultad de aceptar la necesidad de ! aportes de nuestras ciencias sociales
investigaciCln empírica de nuestras so- ha sido la de cuestionar dicha concep-
ciedades, sino también a la resistencia ción y explicitar la especificidad de los
que presentó el tradicionalismo de la fenómenos políticos, culturales, socia-
llamada "sociología de cátedra'', en su les y económicos de nuestros países
fase terminal, que predominaba en las (Sonntag, 1988). Aníbal Quijano ha
universidades latinoamericanas. Sin mostrado en sus análisis que se trata
embargo, el mayor obstáculo para el ele una tarea permanente (Quijano,
desenvolvimiento de la epistemología 1986, 1988 y 1991). Constantemente,
de las ciencias sociales en América reaparecen o se consolidan posiciones
Latina parece residir en su carácter que sostienen la plena pertinencia
tc,,rico. de las teorías sociales del Norte. El
Jorge Vergara Estévez

ejemplo más reciente ha sido el del forma de docencia universitaria. Pese


neoliberalismo y las teorías políticas a las limitaciones descritas, desde los
neoconservadoras, las cuales en las ochenta, se ha producido un impor-
últimas décadas, se han hecho hege- tante desarrollo de la investigación
mónicas en la economía y las ciencias epistemológica en ciencias sociales
políticas latinoamericanas. Estas con autores y estudios significativos.
posturas están habitualmente ligadas
a proyectos políticos modernizadores Un importante grupo de epis-
de las elites locales que prometen con- temólogos de las ciencias sociales,
vertir los países latinoamericanos en especialmente de México, Argentina,
nuevas versiones de países europeos, Brasil, Colombia y Chile, ha venido
de Estados Unidos o, más reciente- realizando investigaciones y un con-
mente, de las naciones del Sudeste junto significativo de estudios sobre
Asiático. los temas del sujeto y el objeto en
las ciencias sociales, el marxismo,
Las actuales condiciones ins- la teoría social de Popper, la teoría
titucionales tampoco son favorables neoliberal, las nuevas metodologías,
para el desarrollo de la investigación los paradigmas científico-sociales, la
epistemológica. En las últimas décadas, teoría crítica y sobre la crisis teórica
la mayor parte de las universidades la- de la sociología y las ciencias sociales
tinoamericanas ha sufrido la reducción latinoamericanas, entre otros temas.
de sus financiamientos, y profundas
crisis internas, lo que, unido a su Pueden compararse las princi-
creciente burocratización, ha limitado pales corrientes de la epistemología
su capacidad de investigación. Las latinoamericana con las europeas:
fundaciones extranjeras que sostie- la empírica-analítica, de orientación
nen centros privados no apoyan, sino cientifista de carácter positivista; la
excepcionalmente, la investigación posición fenomenológica, herme-
teórica y epistemológica. Por su parte, néutica y lingüística; y la dialéctica
el sistema de universidades privadas y crítico-hermenéutica. Entre los
que se ha consolidado en los distintos epistemólogos latinoamericanos de las
países, casi sin excepciones, ha seguido ciencias sociales podemos, ciertamen-
una lógica de rentabilidad de mercado te, encontrar autores que adscriben
que excluye un desarrollo significativo o son cercanos a cada una de estas
de capacidad investigativa. Sin embar- orientaciones. Sin embargo, parece
go, en algunos países, como México, de mayor relevancia diferenciar tres
la modernización del sistema univer- tipos de análisis por sus objetos de
sitario ha favorecido la producción estudio, más que por su adscripción
investigativa en ciencias sociales. a teorías de la ciencia social. Esto
significa que hay autores que realizan
Dadas estas condiciones, no varios tipos de análisis, por tanto esta
resulta difícil comprender el tardío clasificación no es de autores, sino de
surgimiento de la filosofía de las tipos de producción.
ciencias y de la epistemología de las
ciencias sociales en los setenta, y al El primer tipo corresponde a la
comienzo casi exclusivamente bajo la epistemología general y es la que tiene

-277-
EPISTEMOLOGÍA

la mayor continuidad con las corrien- respecto a la distinción entre socie-


tes de pensamiento epistemológico dad y naturaleza, la división de las
europeo. Sus autores provienen, prefe- ciencias, las ciencias nomotéticas
rentemente, de la filosofía más que de e ideográficas, la biosociología y la
las ciencias sociales, pero también de sociobiología, entre otros temas. A
las ciencias naturales. Mencionaremos continuación, hace un estudio de
ahora algunos los más destacados y diversas ciencias sociales, y la obra
las temáticas de sus investigaciones. finaliza con un capítulo sobre plani-
El físico argentino Mario Bunge es ficación, utopismo y desarrollo.
el epistemólogo más conocido y es-
tudiado en América Latina, y el de El sociólogo chileno Hugo
mayor prestigio internacional, siendo Zemelman ha producido una de las
profesor en Montreal desde 1966. Es obras epistemológicas más impor-
autor de Treatise of Basic Philosophy, tantes y de mayor nivel teórico en
en ocho volúmenes, La investigación América Latina, Los horizontes de la
científica, Philosophy of Phisics, Cau- razón (1992). El primer tomo está
sality and Modern Science, Philosophy dedicado a "la dialéctica y la apropia-
of Science, Social Science under Deba- ción del presente" y el segundo a la
te, y otros treinta libros, traducidos "historia y necesidad de utopía". En
a los idiomas más importantes, que el primero, replantea la concepción
incluyen Critica/ Approches to Scien- del análisis social; afirma la necesidad
ce & Philosophy, una de las obras de la categoría de la totalidad como
colectivas más importantes sobre exigencia de razonamiento crítico;
la epistemología de Popper (Bun- propone reexaminar la crítica en su
ge, 1964/1999, 1969/1983, 1982 y relación a la racionalidad científica; el
1998). Sus análisis se inscriben en papel de la teoría y "la organización
un enfoque hipotético-deductivo, metodológica del conocimiento". El
por ello su tratado La investigación segundo tomo trata "sobre lo cognos-
científica (1969/1983) presenta un cible"; "el pensar categorial"; el tema
modelo popperiano: "la hipótesis de de las estrategias de construcción del
trabajo, la hipótesis corroborada o conocimiento; "el método como acti-
ley, el sistema hipotético-deductivo tud ante la realidad" y finalmente, los
o teoría, la predicción por medio de temas del asombro, vigilia, la duda
teorías, la acción fundada sobre la creativa y el hombre en su relación
teoría", según se señala en la presen- con la historia.
tación del libro. Ya se ha comentado
su idea del concepto-modelo. En En esta obra, Zemelman plan-
Social Science under Debate (1998), tea la dificultad de pensar científica-
Bunge enfrenta sistemáticamente la mente la realidad en transformación
epistemología de las ciencias socia- y de apropiarse de sus dinámicas.
les. Lo hace desde lo que llama "una Propone, apoyándose en Bloch,
perspectiva filosófica", con un fuerte incorporar a ellas la categoría de po-
énfasis naturalista. En el capítulo tencialidad que implica entender toda
introductorio destaca un conjunto determinación como provisoria e in-
de problemas ligados a la relación acabada. Esta idea se liga a la de acción
entre ciencias sociales y naturales: social consciente y proyecto, corno

-278-
Jorge Vergara Estévez

totalidad a construir. Su propuesta es Mencionaremos dos de sus obras


la de redefinir la temporalidad de las principales. Explicación y comprensión
ciencias sociales, desplazándolas del (1982) es un estudio sobre el tema de
eje pasado-presente e incorporando los diferentes tipos de explicación en
la dimensión del futuro, del "análisis diversas ciencias sociales y su relación
social como análisis del presente" a a la causalidad, la predicción y la re-
través de la praxis. Ésta "relaciona el fu tabilidad. Su obra El método en las
conocimiento con el problema de la ciencias sociales (1992) es un análisis
viabilidad histórica" en el marco de de los problemas epistemológicos cen-
concretas coyunturas (Zemelman, trales que se plantean sobre el tema:
1992, 27). Esta posición difiere de la la relación entre "método, realidad
actitud pragmática que queda presa de e investigación"; el debate sobre la
la facticidad actual, que reduce lo real unicidad o diversidad de métodos;
a dato y que carece de una dimensión el problema de los métodos axiomá-
de totalidad y proyectividad. ticos; de la inducción y el método
hipotético-deductivo; de los métodos
Respecto a la relación entre abstractos y la dialéctica y el método
racionalidad científica y conciencia progresivo-regresivo en relación a la
crítica, sostiene que esta última ha fenomenología.
estado presente en la práctica cientí-
fica concreta, puesto que la efectiva El autor sostiene la tesis del
reflexión nos permite despegar de la carácter hipotético y contrastable de la
realidad y no quedar inmersos en ella. construcción científica de la realidad;
Zemelman recupera la idea moderna de la necesidad de sustituir el con-
de la autocreación histórica del hombre cepto de base empírico filosófico por
auto-reflexivo; de un ser activo para el el de base empírico epistemológico;
cual el problema del ser se convirtió en releva la importancia de los proble-
problema de práctica, puesto que toda mas en la investigación científica;
realidad debe aparecer como momento mantiene la distinción entre contexto
del proceso de la conciencia, como se- de descubrimiento y de justificación
ñalaba Cassirer. La función crítica del y reafirma la importancia de conocer
conocimiento es planteada en relación los objetivos de la investigación y las
con el poder, "relación entre saber y variables consideradas relevantes por
poder que se hace presente a lo largo el investigador. Schuster defiende la
de toda la historia en el constante es- tesis del pluralismo metodológico y
fuerzo del poder por eliminar la crítica" la necesidad de reflexionar la proble-
(Ibid, 102). La actividad racional de la mática epistemológica de los métodos
crítica se realiza en la totalidad y trata científicos en el contexto de la crisis
de impedir que la razón sea converti- teórica de la sociología latinoame-
da en meramente analítica y separe y ricana y de sus transformaciones.
fragmente lo real. Especial interés tiene el capítulo
de los métodos axiomáticos en las
El filósofo argentino Félix ciencias sociales donde muestra el
Gustavo Schuster es otra de las fi- interés que presentan las propuestas
guras relevantes en esta área de la de axiomatización de investigaciones
epistemología de las ciencias sociales. de Durkheim, Radcliffe-Brown, Levi-

-279-
EPISTEMOLOGÍA

Strauss, así como el uso de modelos un conflicto internalizado que afectó


matemáticos para estudiar procesos e influyó poderosamente sobre las
políticos. propias representaciones científicas,
epistemológicas y filosóficas de la
Asimismo, muestra, pese a totalidad de los héroes de la ciencia
la radical crítica popperiana en los moderna.
treinta, la importancia del método
inductivo en la historia de las ciencias Por medio del examen de
sociales con Malthus y Durkhcim y en algunos de los aspectos centrales
las ciencias sociales contemporáneas de la vida y obra de Bruno, Galileo,
en América Latina. El penúltimo capí- Descartes, Newton y Darwin, el au-
tulo contiene una precisa presentación tor busca demostrar que la religión,
del método dialéctico y sus problemas. en tanto que sistema de creencias, o
La obra finaliza con un significativo como explicación general del origen
capítulo sobre métodos comprensivos, del hombre y del mundo, ha guardado
fenomenología y el método progre- una compleja relación con la ciencia,
sivo-regresivo propuesto por Henri y que sus efectos sobre ésta han sido
Lefebvre. Aquí se examina el debate múltiples y hasta contradictorios. Por-
sobre explicación y comprensión que la religión no se limitó nunca a ser
(Abe!, Von Wright; Collingwood, un puro obstáculo en la constitución
Apel y otros); las características del y desarrollo las teorías y descubri-
método fenomenológico y del progre- mientos científicos, sino que ejerció
sivo-regresivo y su empleo en Sartre un profundo influjo formativo sobre
y Godelier. ambas, suministrándole a la ciencia un
vasto conjunto de problemas, metáfo-
El filósofo chileno Hermes Be- ras y planteamientos, junto con una
nítez ha investigado sobre la compleja variedad de supuestos y preferencias
relación entre ciencias naturales y metafísicas, que jugaron un papel li-
cristianismo. En su libro Ensayos sobre mitante, pero también organizador y
ciencia y religión de Giordano Bruno a creativo, al interior de aquella.
Darwin (1999), se propone elaborar
una interpretación alternativa a la En Albert Einstein y la reli-
visión conílictivista clásica de las rela- gión. Un estudio sobre la ciencia y la
ciones entre ciencia y religión, para la creencia (2001), Benítez continúa
cual el efecto de las ideas y creencias sus investigaciones sobre el tema. A
religiosas sobre la ciencia habría sido partir de un análisis de la creencia
puramente negativo. Ésta se mani- positivista predominante -según la
festaría a lo largo de la historia mo- cual "la ciencia y la religión serían
derna, en la existencia de un choque mantenidas en lo principal en com-
externo entre los hombres de ciencia i partimientos separados del cerebro
y las instituciones eclesiásticas. Es de los científicos"-, busca comprender
manifiesto que hubo un tal conflicto, el verdadero carácter de las relaciones
como lo ilustran tan bien los casos de existentes entre ciencia y creencias
Galileo y Darwin, pero éste no tuvo teológicas-metafísicas de Einstein. In-
nunca un simple carácter externo, tenta demostrar que dicha creencia no
sino que se manifestó a menudo como permite explicar adecuadamente los

-280-
Jorge Vergara Estévez

vínculos existentes en su pensamiento tores muy influyentes como Popper


entre una y otras. Puede fácilmente y Habermas.
demostrarse en los casos de Descartes,
Newton y el propio Einstein que, a Una segunda área, muy ligada
menudo, las convicciones religiosas a la anterior, podríamos denominarla
de los hombres de ciencia se salen de de epistemología crítica. Este tipo de
su compartimiento o esfera propia, e estudios están siendo realizados por
"influyen" y "contaminan" su obra un conjunto de epistemólogos pro-
científica, sin que ello implique, por venientes, como en el caso anterior,
cierto, un simple abandono de la de la filosofía y las ciencias sociales.
ciencia. Einstein era consciente de esta Lo característico de esta corriente es
interpenetración, de allí la importan- el cuestionamiento de ciertas teorías
cia que en su pensamiento epistemo- epistemológicas, especialmente posi-
lógico llegaría a adquirir la distinción tivistas o neoliberales.
entre ciencia privada y pública, que
fuera posteriormente redescubierta y La figura más destacada en
desarrollada por Gerald Holton. este tipo de estudios es Franz Hinke-
lammert, cientista social alemán que
Esta sucinta síntesis anterior reside desde mediados de los sesenta
muestra la amplitud y riqueza de la en América Latina (Vergara, 2003).
reflexión de epistemología general en Desde sus primeras obras, en 1967,
nuestra región, en la cual los temas de ha reflexionado sobre la racionalidad
las relaciones entre ciencias sociales, y los sistemas sociales, cuestionando
método y sociedad tienen un papel las teorías positivistas en el amplio
central. Hay algunas diferencias con sentido de la expresión, es decir, aque-
las corrientes predominantes en el llas que separan hechos de valores y
Norte. En primer lugar, destaca la declaran que la ciencia se reduce al
presencia se diría predominante de estudio de los primeros. En Ideologías
la postura hipotética-deductiva, con del desarrollo y dialéctica de la historia
Bunge y otros autores. Segundo, es (1970), realiza una penetrante crítica
significativa la importancia atribuida de algunos de las más importantes
por varios autores, como Benítez, a la teorías sociales contemporáneas:
historicidad del conocimiento. Terce- la ideología tecnocrática soviética,
ro, la propuesta dialéctica mantiene Manheim, Galbraith, Dahendorf y,
alguna presencia, especialmente con especialmente, el racionalismo crítico
Zemelman. Cuarto, hay pocos trabajos popperiano. Cuestiona la tesis central
que podrían inscribirse en una posi- de dicha epistemología de que "las
ción empírico-analítica o subjetivista teorías lógicamente coherentes a la
al modo de Schutz. Asimismo, llama realidad y sin contenido informati-
la atención la escasa presencia de vo, son realmente evitables y por lo
posiciones postmodernas. Quinto, si tanto sin valor" (Ibid, 172). Hinke-
se examinan las bibliografías hay un lammert sostiene una tesis opuesta:
marcado predominio de referencias el núcleo de las teorías sociales está
a autores anglosajones. Se conoce formado por conceptos tautológicos
poco la epistemología francesa y la con coherencia interna y sin conteni-
alemana, a excepción de algunos au- do informativo, ejemplificando con

-281-
EPISTEMOLOGÍA

la teoría keynesiana. Ésta contiene neoliberalismo, el marxismo soviético


"una articulación tautológica de la y otras, son productos de una razón
economía como totalidad circular" utópica moderna que concibe como
que correspondería a un modelo realizables lo que llama "conceptos
platónico, según Popper carente de límites", entes ele razón que sólo pue-
cientificidad (Ibid, 174). "La expli- den ser pensados pero que no pueden
cación tautológica de la totalidad es ser realizados, aunque las condiciones
una condición de posibilidad (en el de organización social fueran comple-
sentido de Kant) para la formulación tamente favorables (1984). Asevera
de teorías informativas y de hipótesis que conceptos como la competencia
verificables en relación con la realidad perfecta de la teoría neoclásica y neo-
social" (Ibid, 175). liberal; de la armonía social que se
produciría por la liberación de la es-
Para este autor, la metodología pontaneidad si se eliminara el Estado,
dialéctica acepta el principio de que la religión y tocia forma de poder de
la teoría social siempre parte de una los anarquistas, y otros, son versiones
totalidad económica o social y formula secularizadas de conceptos teológicos
conceptos-límites que introducen de estados ele convivencia perfectos,
necesariamente los supuestos que ausentes de conflictos. Más aun, ha
permiten con ce birlos. La posición señalado que en estas utopías encon-
de Hinkelammert es similar a la de tramos una secularización de la idea
Hegel: la epistemología dialéctica no teológica del Reino de Dios, la societas
es una opción frente al empirismo y perfecta. Asimismo, ha mostrado la
el positivismo, sino que corresponde presencia de concepciones teológicas
al reconocimiento de la existencia en el discurso de Weber, Popper, Ha-
de categorías dialécticas constituti- yek y Friedman (1977 y 1984).
vas o condiciones de posibilidad de
la racionalidad científica. En obras En una de sus últimas obras, El
posteriores, ha desarrollado signi- nihilismo al desnudo en tiempos de la
ficativos análisis que muestran la globalización (2001), realiza una pene-
presencia de argumentos dialécticos trante crítica a la racionalidad científi-
impensados en autores opuestos o co-tecnológica contemporánea como
lejanos a la dialéctica, como es el caso parte de su análisis de los procesos de
de La critica a la planificación social globalización: políticos, científicos,
de Popper (Hinkelammert, 1984), o económicos, culturales y ambienta-
bien, en obras más recientes, de los les (Hinkelammert, 2001 y Vergara,
argumentos contenidos en la obra ele 2003). Estos diversos procesos tienen
Konrad Lorenz. como ejes centrales la globalización
ele las relaciones mercantiles y de la
Hinkelammert ha mostrado, tecnología, las cuales corresponden a
asimismo, la profundidad y compleji- modalidades ele racionalidad instru-
dad de la relación entre los modos de mental de medio-fin, la cual se guía
pensar teológicos y las ciencias socia- por la eficiencia. Ciencia y tecnología
les y la teoría política. Ha explicitado se han integrado, puesto que el desa-
que las grandes teorías sociopolíticas rrollo del conocimiento depende, en
contemporáneas: el anarquismo, el gran medida, del experimento y el

-282-
Jorge Vergara Estévez

objeto producido por la tecnología. de cualquier otra consideración. Su


Asimismo, la tecnología y el merca- lógica es la de la racionalidad medio-
do se han integrado, sea porque el fin, en la cual tanto los medios como
mercado financia, en gran medida, los fines se entienden como elementos
el desarrollo tecnológico, sea porque de una acción calculable y calculada.
éste produce innovaciones requeridas Este es "un concepto de eficiencia
o aplicables comercialmente. que consiste, precisamente, en la
abstracción de esta globalización de la
La lógica tecno-mercantil re- vida real, es decir, abstracción de las
quiere de sujetos abstractos, descor- condiciones de posibilidad de la vida
poralizados, y hace aparecer como si humana" (!bid, 157). Ambas proceden
fueran personajes humanos reales las como si estuviéramos no en un globo,
figuras del maximizador racional y un sistema finito y cerrado, donde las
del observador experimentador de la acciones relevantes realizadas en un
tecnología. Por ello, abstrae las condi- punto, se trasmiten al conjunto. "Su
ciones de reproducción real del sujeto, imagen de la tierra es de una planicie
y se hacen pensables formas de acción infinita en la cual se destruye una
tecnoeconómicas de intervención parte para pasar a otra, sin tener nunca
sobre la realidad social y ambiental, un problema de globo" (!bid).
que no afecten a los sujetos que las
realizan. Estas formas de acción "abs-
traen el hecho de que la realidad es
Asimismo, esta lógica con- condición de posibilidad de la vida
sidera los efectos negativos de su humana", tanto en el sentido biológi-
acción como obstáculos que hay que co como social. El sujeto económico,
remover, puesto que, actualmente, pensado como un individuo que elige
las ideologías del mercado total y del preferencias de acuerdo al principio de
progreso técnico indefinido prometen maximización, así como el científico-
resolver todos los problemas. Pero, tecnológico, que es concebido como
éstos siguen vigentes, especialmente un sujeto observador y experimen-
en los espacios tecnológicos y en tador que descubre y crea el cono-
el ámbito económico empresarial. cimiento y la información necesaria
Asimismo, la acción tecnoeconómica para la intervención tecnológica-eco-
no puede conocer los límites de su nómica, son sujetos abstractos, que se
intervención sobre las sociedades y consideran dados, meras conciencias
el ambiente, los que sólo aparecen descorporalizadas. "Hablan de la pro-
con la acción de los movimientos de ducción de productos que produce
resistencia, o bien cuando esos límites estos productos según la racionalidad
han sido traspasados y se producen medio-fin, sin hablar de la reproduc-
situaciones irreversibles. ción del productor que produce estos
productos, ni de la naturaleza, de la
El principio rector de la acción cual se extraen las materias primas
mercantil y científico-tecnológica es la para su producción" (p. 157).
eficiencia, entendida como la búsque-
da de los medios más adecuados para La racionalidad de la eficiencia
realizar un fin, con independencia mercantil y tecnológica tiene carácter

-283-
EPISTEMOLOGÍA

parcial y sectorial, y abstrae e ignora y conocido de los autores latinoame-


la amenaza global existente. "El mé- ricanos en teoría de las ciencias, no
todo científico usual se encuadra a podemos sino concluir que Popper
la perfección en esta globalización. es el más influyente epistemólogo
No proporciona sino conocimientos europeo en América Latina.
aprovechables en el ámbito comer-
cial. Su método consiste en hacer La tercera área de producción
abstracción de la globalización del de la epistemología latinoamericana la
mundo real y, en consecuencia, de la constituyen los análisis de la situación
realidad como condición de posibi- de las ciencias sociales, especialmente
lidad de la vida humana y, por tanto, de la sociología, en América Latina
el conocimiento del mundo real glo- y el Caribe y particularmente de su
balizado se le escapa" (!bid: 158). La crisis teórica. Existen diferencias
teoría de la acción racional de Weber significativas en este aspecto entre
es coincidente con esta racionalidad el desarrollo de las ciencias sociales
parcial. Considera cualquier enuncia- del Norte y las latinoamericanas. En
do sobre la globalización real como América Latina, en términos genera-
"juicios de valor", que la ciencia no les encontramos escasa auto-reflexión
puede ni debe efectuar. Su "ética de de las ciencias sociales y faltan los
la responsabilidad" implica que el balances críticos sobre lo realizado.
científico y el hombre del mercado Esta situación empezó a modificarse
no deben ocuparse de consideracio- desde la década del setenta donde
nes como las que se han hecho sobre empiezan a producirse investiga-
estos procesos reales. ciones sobre el tema, entre las que
destaca la del sociólogo españolJuan
Una obra importante en esta Francisco Marsa! (1979; Solari 1976 y
área de epistemología crítica latinoa- otros) y especialmente con el intenso
mericana ha sido la obra colectiva debate sobre el dependentismo que
Popper y las ciencias sociales ( 1992) involucró a la comunidad científica
editada por Félix Gustavo Schuster. sociológica latinoamericana ( Cama-
En ella encontramos un conjunto de cho, 1979 y Cardoso, 1978) y que
estudios sobre los temas centrales de marca el inicio de la crisis teórica de
la epistemología y teoría social po- la sociología latinoamericana donde
pperiana, la mayor parte de ellos de dicho paradigma había llegado a ser
carácter crítico. hegemónico. Durante la década de los
ochenta, con la profundización de la
La publicación de esta obra se crisis teórica de las ciencias sociales
produce en un contexto de amplia latinoamericanas, especialmente de la
influencia, difusión y discusión sobre sociología, se constata en la comuni-
el neoliberalismo, en el cual se han dad sociológica de la región un interés
publicado obras colectivas e indivi- por el análisis de la crisis teórica de
duales de auto res latinoamericanos la sociología. Éste se ha expresado en
neoliberales y sobre la teoría social la realización de diversos seminarios,
y epistemología popperiana. Si con- la realización de investigaciones, es-
sideramos la influencia de los libros tudios y artículos que han decrecido
de Mario Bunge, el más consultado en los noventa.

-284-
Jorge Vergara Estévez

En este tipo de estudios, des- les, los modelos institucionales,


tacan especialmente los análisis los el tipo de resultados teóricos que
aportes de José Joaquín Brunner, buscan producir, la duración de sús
Fernando Calderón, Jorge Larraín, proyectos, los tipos de auditorios
Fernando Mires, Heinz Sonntag que a los cuales se han conectado, los
han escrito significativos libros sobre medios preferentes de difusión de
la situación de las ciencias sociales sus resultados, el intercambio de
latinoamericanas, y los valiosos apor- investigadores, sus postgrados, sus
tes de autores como Gregario Castro, presupuestos, relación al Estado y a
Arturo Escobar, Orlando Fals Borda, las fundaciones internacionales, los
Lidia Girola, Enrique Gomáriz, Franz salarios de los investigadores, etc .. La
Hinkelammert, N orbert Lechner, obra contiene una valiosa reflexión
Aníbal Quijano, Nora Robotnikov, sobre la relación entre esas condi-
Edelberto Torres-Rivas, Jorge Vergara ciones, el problema de la autonomía,
y otros. la relación con los actores sociales,
su inserción social y la democracia.
La obra del sociólogo boli- Las condiciones institucionales con-
viano Fernando Calderón y de la dicionan en gran medida el proceso
socióloga chilena Patricia Provoste, de producción de conocimientos
Autonomía, estabilidad y renovación. sociales y permiten explicar algunas
Los desafíos de las ciencias sociales en de sus características. En varios artí-
América Latina ( 1991) está dedicada culos posteriores, Calderón ha hecho
al análisis de la institucionalidad de aportes significativos al análisis de
las ciencias sociales en América Lati- la situación actual de las ciencias
na a través del análisis de 110 centros sociales latinoamericanas, señalando
asociados a la red latinoamericana del la crisis de los paradigmas globales,
Consejo Latinoamericano de Cien- la necesidad de elaborar teorías de
cias Sociales (CLACSO). El estudio alcance medio en este contexto, la
permite tener una visión de conjunto atracción por el poder de los soció-
de las condiciones institucionales de logos, la insuficiente legitimidad
la producción de las ciencias sociales cultural y social de la sociología en
en la región: sus recursos materia- la región, etc ..

-285-
EPISTEMOLOGÍA

BIBLIOGRAFÍA

La fecha que está entre paréntesis corresponde a la primera edición


en su idioma original, y la última a la de la edición que se ha empleado. En
algunos casos la fecha de la primera edición está acompañada por la de la
edición definitiva.

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-291-
ÉTICA
Luis José González Alvarez
Colombia

~ - - - - - - - - - - - Palabras Clave - - - - - - - - - - - - ,
ÉTICA DEL DISCURSO - ÉTICA SOCIAL - ALTERIDAD
- ANTROPOLOGÍA - FILOSOFÍNTEOLOGÍA
- FILOSOFÍA LATINOAMERICANA - FILOSOFÍA INTERCULTURAL
- UNIVERSALISMO-PARTICULARISMOPOLÍTICA - DESARROLLO
- DERECHOS HUMANOS - SOLIDARIDAD

INTRODUCCIÓN DELIMITACIÓN
HISTÓRICA
La ética constituye uno de
los temas clave de la filosofía lati- Dentro de nuestra historia
noamericana debido, sin duda, a la continental, esta filosofía hunde sus
conflictividad que ha caracterizado raíces en la ética liberadora del movi-
su devenir histórico. Desde el cho- miento indigenista que, liderado por
que violento de la Conquista, hace Bartolomé de Las Casas, en la primera
quinientos años, que en medio de mitad del siglo XVI, desarrolla las tesis
su fuerza destructora da origen del derecho a la vida y a la libertad
al actual pueblo latinoamericano, que poseían los aborígenes contra el
resultado de un forzoso mestizaje supuesto derecho de conquista, domi-
durante el largo proceso de la colo- nación y explotación sostenido por los
nización, hasta los graves conflictos teólogos oficiales de la Corona. El in-
sociales en que hoy se hallan su- cipiente derecho internacional que en
midos la mayor parte de nuestros esos momentos gestaban Vitoria y los
pueblos, los temas de la justicia y teólogos de Salamanca para justificar
la libertad han llenado las páginas el movimiento expansionista europeo
más destacadas del pensamiento la- dentro de ciertos límites éticos -ori-
tinoamericano. De ahí la necesidad gen de la moralidad colonialista aún
de comenzar por referirnos, aunque vigente- es éticamente reinterpretado
sea en forma muy breve, a esos por Las Casas para defender el dere-
momentos clave que marcaron el cho inviolable de todo ser humano a la
auténtico filosofar latinoamericano, vida, a los bienes necesarios para sos-
antes de tratar la reciente filosofía tenerla y a la libertad, y para condenar
de la liberación. toda forma de opresión y explotación
del aborigen.

-293-
ÉTICA

Varios siglos más tarde, apo- Brito, Enrique Malina, Antonio Caso,
yándose tanto en esta tradición esco- José Vasconcelos, Alejandro Deustúa,
lástica de inspiración cristiana como Carlos Vaz Ferre ira, José Enrique
en la nueva filosofía de la ilustración Rodó, José Martí. Esta filosofía va a
que orientó a la revolución francesa, ser prolongada en el campo de la ética
la ética liberadora vuelve a cobrar por autores que desarrollan el tema
fuerza como savia social y política de los valores, bajo la inspiración de
que nutre los movimientos eman- Scheler y Hartmann. Mencionemos
cipadores en todo el continente. El tan sólo a Francisco Romero, Juan
tema ético-político de los derechos Llambías de Acevedo, Eduardo García
del hombre, que conlleva el rechazo Maynez, Miguel Reale, Carlos Astra-
de toda forma de sumisión humana, da, Risieri Frondizi. Dentro de las
base de la dependencia colonial, es corrientes neoescolásticas cabe citar
revivido filosóficamente para inspi- los trabajos de fundamentación de la
rar las confrontaciones políticas del moral de Octavio Derisi.
momento.
A mediados del siglo XX,
Con connotaciones sociocul- cobran fuerza en América Latina las
turales diferentes encontramos una ideas marxistas, que pronto contarán
nueva tendencia liberadora en la ética con el respaldo de la revolución so-
a finales del siglo XIX y comienzos del cialista cubana y entroncarán con la
XX. Surgen los constructores de la la- filosofía de la liberación a través de la
tinoamericanidad en la filosofía, la ge- teoría socio-económica de la depen-
neración de los fundadores. Antes, los dencia. Recordemos el pensamiento
positivistas habían buscado construir de José Mariátegui y el de Ernesto Che
una moral "científica" con el fin de Guevara. Con ellos, la preocupación
liberar a la sociedad del, según ellos, por los valores morales sufre un giro
dogmatismo y tradicionalismo de la radical al ser comprendidos como
moral católica. Con raíces positivas, expresiones no de la vida espiritual
pero abriéndose en sus últimas obras del hombre sino de la materialidad
a los nuevos valores que defendería cotidiana de su existencia. De las
luego la reacción antipositivista, halla- disquisiciones sobre la libertad como
mos a José Ingenieros, quien propone virtud o cualidad del individuo huma-
un "idealismo moral" basado en la no, se pasa a la toma de conciencia de
experiencia, tratando de impulsar una la carencia de las libertades reales en
profunda renovación de los valores en el pueblo oprimido.
la sociedad latinoamericana.

Con la misma preocupación DELIMITACIÓN


de proponer nuevos ideales de vida y CONCEPTUAL
reivindicar los valores del espíritu, en
especial la libertad humana, la ética
cobra auge entre los pensadores anti- Antes de abordar el tema de la
positivistas, considerados los "funda- ética en la filosofía de la liberación es
dores" de la filosofía latinoamericana: necesario traer a la memoria la obra
Alejandro Korn, Raimundo de Farías de Paulo Freire, por la incidencia

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Luis José González Alvarez
-~-~------ ----------

que tendrá, como formadora de una de valor. Esta tesis central da origen a
conciencia crítica, en la nueva ética finales de los años 60 a la "teología de
latinoamericana. Freire propone un la liberación", asumida por numerosos
nuevo modelo de educación liberado- grupos cristianos e incluso, en un
ra a partir de una concientización de principio, por la jerarquía misma de la
las formas de opresión que se dan en Iglesia Católica latinoamericana.
nuestra sociedad. Para Freire son tres
las categorías o "palabras" clave que En el campo de la filosofía ha
caracterizan la situación del pueblo la- sido trabajada por muchos pensado-
tinoamericano y la praxis de liberación res, entre quienes sobresale Enrique
necesaria: Opresión: es la situación de Dussel, promotor y principal represen-
las "personas injustamente tratadas, tante de la "filosofía de la liberación".
privadas de su palabra, de quienes Dussel elabora en forma sistemática
se ha abusado vendiendo el trabajo". toda una ética latinoamericana de la
Los oprimidos viven alienados porque liberación. Su pensamiento ético pue-
han introyectado en su conciencia la de resumirse esquemáticamente en
imagen del opresor y viven sometidos las siguientes ideas. Dussel encuentra
al ideal de vida establecido por las re- en el concepto de "el Otro", tomado
laciones opresor-oprimido; son seres de E. Lévinas, la clave para construir
dependientes. Dependencia: la causa una ética liberadora. La dominación
del subdesarrollo que caracteriza a la del pueblo latinoamericano es fruto
sociedad latinoamericana radica en la de la "Totalidad" que han configura-
dependencia, consistente en que los do los pueblos colonizadores desde
polos de decisión económico-política su propia conciencia de ser centro y
se hallan fuera de ella misma, que dueños del mundo. La Totalidad se
permanece sometida a la voluntad de mueve dentro de "lo Mismo": para
la metrópolis dominadora y sumida en ella no existe nada diferente que la
la cultura del silencio. Marginalidad: cuestione, su sentido de la realidad es
los grupos sociales oprimidos viven al "el" sentido; su verdad, "la" verdad; su
margen del desarrollo de la sociedad, derecho, "el" derecho. La realidad de
tanto de sus decisiones como de sus "el Otro" introduce la posibilidad de
beneficios, reservados a los grupos una subjetividad exterior y diferente
hegemónicos o privilegiados, que a la subjetividad de la "Mismidad".
ejercen directamente la dominación Frente al "Yo" de la Totalidad cerrada
o actúan como intermediarios de las y excluyente, existe el Otro que lo
grandes potencias. cuestiona, le enfrenta la exterioridad
de lo nuevo. El Otro es el pobre, en-
La categoría de la liberación tendido singular y colectivamente, el
es profundamente política y ética. oprimido, ya sea individuo, grupo o
Arranca de la conciencia de que el pueblo.
hombre concreto se halla sometido a
estructuras sociales de opresión que Desde este pensamiento cen-
lo imposibilitan para practicar su tral, Dussel replantea el fundamento
libertad. De ahí la necesidad del com- del bien y del mal moral. El mal moral
promiso en una praxis liberadora: la consiste en la negación del Otro y la
liberación socio-política como opción imposición de lo Mismo; ésta es la

-295-
ÉTICA

práctica de la Totalidad, que busca la nados; una arqueológica que, desde


perfección en la unidad y permanencia la religión entendida como aceptación
de lo Mismo, sin fisuras. De ahí que del totalmente Otro, rechaza toda for-
la moral de la Totalidad, es decir, del ma de fetichismo o divinización de la
sistema dominador vigente, sea una Mismidad en las relaciones eróticas,
moral perversa, ya que se alimenta de políticas, pedagógicas y económi-
la muerte del Otro, del pobre, del opri- cas; finalmente, una económica que
mido. Por el contrario, el bien moral replantea las relaciones del hombre
consiste en la aceptación del Otro, en con la naturaleza, las relaciones de
el respeto a su vida y la acogida de la producción y todas las formas de rela-
novedad que introduce en el sistema, ción económica, a partir de la actitud
así lleve a la misma destrucción de de justicia con el Otro, explotado y
éste. La verdadera conciencia moral oprimido por las formas de relación
consiste en oir la voz del Otro, estar capitalistas e imperialistas.
atento a su palabra. La relación respe-
tuosa del Otro se da en el cara-a-cara, Esta orientación de la filosofía
aceptación de otro yo frente a mi yo, hacia la liberación y la búsqueda de
con los mismos derechos y abierto a autenticidad e identidad, prendió en
la misma posibilidad de ser. En la si- el "Grupo de Bogotá", dentro de la
tuación de opresión generalizada que Universidad Santo Tomás, donde se
sufre el pueblo latinoamericano, el logró darle amplia difusión mediante
bien moral se identifica con la praxis la publicación de varios textos uni-
de la liberación: el compromiso en la versitarios de filosofía, entre ellos
lucha para destruir todas las formas mi Ética latinoamericana (1976), que
de dominación. conjuga una perspectiva axiológica
centrada en la vida como valor supre-
La alteridad, como perspectiva mo, de orientación personalista, con el
que ilumina el sentido ético de la sentido liberacionista de la alteridad.
praxis de liberación, penetra todos
los ámbitos de la vida humana. Desde La filosofía de la liberación se
ella Dussel escribe una erótica, en la ha desarrollado en América Latina si-
que el rostro sexuado de la mujer se multáneamente y en estrecha relación
libera de la dominación totalizante del con la teología de la liberación. Los
macho, tradicional en nuestra socie- temas centrales de la ética en pers-
dad; una pedagógica, que devuelve su pectiva de liberación están presentes
palabra al Otro en cuanto sujeto de la en esta teología, especialmente en
educación: el hijo frente al padre, el los escritos de moral, y se enrique-
alumno frente al maestro, el pueblo cen con matices y profundizaciones
frente al Estado; una política, donde de diferentes autores. Entre los más
se rechazan las relaciones de depen- destacados podemos mencionar a R.
dencia y opresión impuestas por las Alves, H. Assmann, C. Boff, l. Ella-
grandes potencias en el plano inter- curía, S. Galilea, G. Gutiérrez, ].B.
nacional y la oligarquía al interior de Libanio, T. Mifsud,J Míguez Bonina,
cada nación y se proponen relaciones J.P Miranda, F Moreno Rejón, A. Mo-
de fraternidad entre naciones ricas y ser, P Richard, J. de Santa Ana, J.C.
pobres y entre gobernantes y gober- Scannone, J.L. SegLmdo, J. Sobrino.

-296-
Luis José González Alvarez

Los aportes específicos de cada uno Simultáneamente, es una ética realista:


de ellos y otros muchos autores a la contrasta cualquier postulado de valor
moral pueden verse en la obra de F. con las condiciones materiales de vida
Moreno Rejón, Teología moral desde que afectan a los grupos humanos y
los pobres. les permiten o les impiden vivir con
dignidad. Es una ética política: coloca
Por sus profundos aportes a la su mira no tanto en la valoración del
ética social en esta perspectiva de la comportamiento de los individuos
liberación, sobre todo en sus aplica- cuanto en la transformación de las
ciones a la política y a la economía, estructuras sociales de poder que
es necesario resaltar el nombre de F. condicionan el comportamiento y las
Hinkelammert, consagrado en sus relaciones interpersonales. Por todo
obras a la construcción de una con- ello, es una ética liberadora: su prin-
ciencia crítica de los mitos del cristia- cipal objetivo consiste en la liberación
nismo burgués y de la modernidad así del hombre concreto de la opresión
como de la fetichización de los valores que pueda ejercer sobre él cualquier
económicos realizada por la ideología realidad, material o espiritual, que le
neoliberal y capitalista. impida disfrutar del bienestar social
y realizar con autonomía el proyecto
Como rasgos centrales de personal de vida.
la ética en perspectiva de liberación,
comunes a los diferentes autores, po- El trabajo propio de la ética de
demos subrayar los siguientes. Es una sentar los principios que permitan a
ética situada: parte de la situación so- las personas y a los pueblos trazar su
ciopolítica del pueblo latinoamericano: propio proyecto de vida conducente
una situación de pobreza y opresión a la felicidad, es aguijoneado hoy
que afecta a grandes sectores de la en América Latina por la necesidad
población, la cual es denunciada como de dar respuestas a interrogantes de
contraria a la realización del hombre fondo, como el mismo derecho a
de acuerdo con su dignidad. Es una la vida y '.3. un mínimo de bienestar,
ética de la vida: la situación social es cuestionado por la situación de in-
iluminada a partir del valor supremo justicia social generalizada. En forma
de la vida, que es un derecho en teoría explícita o implícita la perspectiva de
inviolable, pero del que en la práctica la liberación ha dejado una impronta
se ven excluidos millones de personas. imborrable en el pensamiento ético
Es una ética profética: denuncia las actual, que se reflejará en los próximos
estructuras, los sistemas y las actitudes años. En estos momentos de profun-
que impiden el goce de una vida con do cambio social la ética se enfrenta
dignidad y proclama las nuevas actitu- a numerosos retos, que marcan los
des y criterios que deberán regular las principales temas de interés para ella,
estructuras de una sociedad justa. Es entre los cuales podemos mencionar
una ética utópica: propone un ideal de los siguientes:
sociedad perfecta que nunca veremos
realizado pero que actúa como modelo Análisis crítico de los intereses
al que debemos tender y desde el que y valores en pugna: El discur-
podemos criticar los modelos vigentes. so ético y, con mayor razón, la

-297-
ÉTICA

propuesta de una normativa Fundamentación de una ética


moral, no puede seguir elabo- consensual a partir del diálogo:
rándose a partir de principios, A la tarea de afirmar la autono-
valores y normas aprendidas mía legislativa del ser humano,
en manuales. El conflicto de propuesta por Kant y aceptada
valores que se da en la crisis hoy por las sociedades demo-
social actual plantea a la ética cráticas, prestan una excep-
el desafío de ser orientadora cional contribución las éticas
de las conciencias en orden a comunicativas de Habermas y
propiciar una praxis política Apel, en boga actualmente por
responsable. toda América Latina. La ética
de la liberación tendrá que en-
Afianzamiento del sentido de la riquecerlas a través del cuestio-
democracia: En el cumplimien- namiento sobre la posibilidad
to de su función social de orien- de cumplir la normativa de la
tar hacia el perfeccionamiento argumentación en una sociedad
de las formas de convivencia, como la nuestra, tan distante
la ética asume hoy el reto de del modelo de la "comunidad
fortalecer el valor de la demo- de comunicación". En este sen-
cracia, esquiva por tradición en tido, son sugerentes los debates
nuestros pueblos, y esclarecer sostenidos por E. Dussel con los
la condiciones mate ria les y representantes de las propues-
formales requeridas para su real tas éticas más conocidas hoy
ejercicio. en Europa y Norteamérica. La
ética de la "responsabilidad soli-
Afirmación de la autonomía daria" propuesta en España por
del ser personal: La praxis Adela Cortina puede resultar
comprometida en asegurar el fructífera si se aplica a nuestra
derecho real a una vida digna situación latinoamericana, por
para todos los miembros de cuanto toma en cuenta las con-
nuestra sociedad debe ser secuencias de toda decisión mo-
fundamentado por la ética en ral con relación a las necesida-
la conciencia de la "dignidad des e intereses de los afectados
humana", tan presente en el y se orienta por la solidaridad
pensamiento moral, jurídico hacia el establecimiento de la
y político contemporáneo, justicia entre iguales en derecho
resultado y expresión social y dignidad.
de la conciencia, aun más fun-
damental, del valor inalienable Construcción de una ética
de la persona humana y de su civil: El paso de una sociedad
autonomía legisladora. Los te- tradicionalmente religiosa a
mas de los derechos humanos, una sociedad laica lleva consi-
la calidad de vida, la bioética y go la desaparición del código
la ecología alcanzan un lugar moral único y abre las puertas
preponderante en la reflexión al pluralismo moral, en el cual
ética actual. sólo el consenso sobre aque-

-298-
Luis José González Alvarez

llos valores fundamentales tiva y la sociedad de consumo


que garantizan el derecho a la como ideal nivelador de las
vida, a la convivencia pacífica aspiraciones humanas, la ética
y a la autonomía, permitirá no puede perder su esencial
establecer una ética universal sentido de utopía. La reflexión
que se está dando en llamar ética en América Latina sólo
ética civil. Ella asegurará la podrá contribuir al cambio
asunción de un mínimo de social si, desde un proyecto
valores y normas aceptados de sociedad ideal, regulada
por todos, sobre el cual cada por la justicia, la libertad y la
religión o ideario moral podrá paz, invalida el sistema actual
construir aquel ideal de vida, como ideal y traza los rasgos
de máximas aspiraciones, que fundamentales que deben
satisfaga el deseo de perfección caracterizar el proyecto de la
de sus seguidores. nueva sociedad. Ahí radica
el valor de la utopía, que ha
Reafirmación del sentido de venido caracterizando las
la utopía: En momentos en mejores páginas de nuestros
que el neoliberalismo capita- pensadores comprometidos en
lista impone la economía de el proyecto de identidad y de
mercado como única alterna- liberación de América Latina.

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ÉTICA APLICADA
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Brasil

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UNIVERSALISMO/PARTICULARISMO - ÉTICA - ÉTICA DEL
DISCURSO - ÉTICA SOCIAL - ECOLOGÍA - SOLIDARIDAD
- MODERNIDAD - POSTMODERNIDAD - FILOSOFÍA INTERCULTURAL

1. Ética y rehabilitación sea, con una modificación que em-


de la filosofía puja hacia delante, una actitud que
va acompañada del esfuerzo para
que ocurra la anticipación de un
Los términos ética y ética futuro nuevo. Se trata, pues, de ima-
aplicada ocupan, en la actualidad, un ginar qué puede ser mejor para los
espacio significativo, tanto en la vida seres humanos y, por eso mismo, de
social como en la privada. Este debate diseñar este futuro (Cortina, 2001:
ha producido avances en la discusión 174). Al mismo tiempo, el status
sobre el tema. Lejos de resolver el inmanente a la racionalidad comu-
problema de la fundamentación, otro nicativa diferencia la manipulación
frente se abre. En los años sesenta y se- instrumental del entendimiento lin-
tenta del siglo XX, surgen las llamadas güístico (Habermas, 1988: 29), algo
éticas aplicadas, un giro aplicado de que permite dilucidar el fundamento
la filosofía, más específicamente de la de sentido de una racionalidad com-
ética y la filosofía moral, discusión que prometida con la realidad presente,
ha invadido la filosofía, en un diálogo teórica y práctica (Cortina, 2000:
que ha involucrado las diversas áreas 182). El debate exige, por supuesto,
del conocimiento. De hecho, se trata delimitar no sólo las cuestiones de
de un debate en torno a una razón fundamentación y de aplicación,
pública proactiva, que pende para el sino también la relación entre ambos
lado contrario de una filosofía reacti- aspectos de la ética.
va. Este "giro aplicado" que se suma
a la filosofía exige ir desgranando una En este sentido, dos aspec-
ética aplicada a las distintas esferas de tos son importantes. Por un lado,
la vida práctica. eso no significa un alejamiento o
un rechazo de la filosofía, sino el
La idea de una razón públi- contrario. Una razón pública proac-
ca proactiva hace conexión con la tiva significa la rehabilitación de la
transformación de la filosofía y del propia filosofía, y nunca su muerte
propio giro aplicado de la ética, o o desaparición. Los que insisten en

-301-
ÉTICA APLICADA

el final o la muerte de la filosofía 2. El giro aplicado


confunden el imperativo de una de la ética
realidad social con los dogmatismos
o ideologías que no tienen nada que
ver con aquello que se podría llamar En una era de avances in-
o comprender por filosofía. A la de- aprensibles, es posible encontrar
claración de "muerte de la filosofía" teóricos que creen que las promesas
se suma un desgraciado fatalismo sin del progreso técnico-científico y los
salida, que no hace nada más que ideales de la ideología liberal han
entorpecer la vida social y la propia conseguido señalar los límites del
filosofía. tratamiento y de la resolución de
los problemas de la acción humana,
De entre los motivos de la incluso con respecto a la orientación
rehabilitación de la filosofía, uno de sus aspectos ético y moral. En ver-
de ellos es seguramente el giro dad, esto llega al extremo de rechazar
aplicado, con lo cual es posible no las cuestiones prácticas, pasando a
sólo superar el escepticismo y el des- orientar la acción según determi-
crédito de la filosofía, sino también nadas máximas de comportamiento
garantizar un lugar de destaque en la que vienen definidas por intereses y
comprensión del tiempo presente y, que obedecen una orientación hacia
por supuesto, en buscar alternativas una competición por maximizar
a las constantes y cíclicas crisis que ganancias o minimizar pérdidas. Se
conocemos. trata, pues, de reproducir un sistema
orgánico proyectado al nivel de las
Para poder aclarar este punto máquinas que alimenta una "tecno-
de vista, voy señalar cuatro pun- cracia de sujetos autonomizados",
tos. El primer de ellos se refiere al que se aparta y pone entre paréntesis
giro aplicado de la ética, de modo las cuestiones prácticas.
especial, en uno de los ámbitos de
la filosofía, concretamente el de la Sin embargo, el giro ético de la
ética o filosofía moral. El segundo filosofía nos hace sentir que la ética
punto se basa en la tesis de que la pisa fuerte en los pasillos académi-
fundamentación y aplicación son cos, pero lo hace porque existe una
dos ámbitos igualmente importantes gran e importante demanda social
de la reílexión ética, que funcionan que viene de fuera de la universidad
con una lógica y una metodología ( García-Marzá, 2003). Por cierto, uno
diferentes, pero que constituyen dos de los ámbitos de la vida práctica que
momentos necesarios en toda con- primero ha empezado la aproximación
cepción actual de una razón pública a la ética ha sido la medicina, hoy con
"proactiva". El tercer aspecto trata las significativas contribuciones que
del status de las éticas aplicadas, vienen de la bioética y la ingeniería
aunque esto parezca, para algunos, genética. Otro campo que ha traído
un tanto incómodo o contradictorio. contribuciones fue el feminismo. Ac-
Por fin, me gustaría señalar hacia la tualmente, la cuestión de género, con
posibilidad de hablar de una ética su planteamiento, invade la filosofía.
aplicada latinoamericana. Podríamos destacar también la ética

-302-
]ovino Pizzi

del desarrollo y otros más. Todavía, lo la utilitarista de las preferencias, etcé-


cierto es que la ética se ve obligada a tera (Martínez Navarro, 2000, 39). Sin
responder a nuevas expectativas socia- embargo, un cuadro más completo de
les depositadas en ella, interviniendo las éticas puede ser representado del
en la orientación de cuestiones prác- siguiente modo: éticas naturalistas y
ticas, orientando en la búsqueda de no-naturalistas, éticas cognitivistas y
soluciones a problemas que necesitan no-cognitivistas, ética de fines y éticas
de un respaldo filosófico. del bien, éticas materiales y éticas for-
males, éticas substancialistas y éticas
Parece que esta afirmación no procedimentalistas, éticas teleológicas
indica nada de nuevo, pero no ha sido y éticas deontológicas, éticas de la in-
siempre así. Durante muchos años, tención y éticas de la responsabilidad,
la filosofía parecía ir apagándose, y así por delante.
reduciéndose cada vez más a discu-
siones académicas, que a casi nadie Sin embargo, la exigencia de
le interesaban, empeñada en demos- respuestas o alternativas racionales a
trar su incompetencia en todos los la vida práctica ha introducido, en esa
ámbitos de reflexión. Había perdido, reflexión, un nuevo estatuto epistemo-
incluso, su carácter crítico, su interés lógico. O sea, los nuevos problemas
transformador y emancipador. Para de la sociedad denominada "avan-
algunos, parecía incluso haber sido zada" han pasado a exigir respuestas
la causa de muchos de los males del a los diferentes campos de la acción
siglo pasado. humana. Además de la cuestión de la
fundamentación, empieza un diálogo
Mientras tanto, uno de los con los diversos ámbitos del conoci-
hallazgos más significativos de la se- miento. En verdad, es la opinión pú-
gunda mitad del siglo pasado ha sido blica, la ciencia política, la economía,
el retorno de la ética. Es verdad que la la biología; son los diversos grupos de
ética nunca ha sido abandonada por la expertos que interpelan a la filosofía
filosofía, pero no pocas veces represen- para un diálogo interdisciplinar. La
taba una especulación excesivamente filosofía es llamada a formar parte de
abstracta, formal y aquejada de este- ese "saber práctico" y colaborar para
rilidad (Gómez-Heras, 2002, 26). En la definición de alternativas racionales
esta retomada, podemos afirmar que capaces de orientar las acciones de los
hasta el final de los años 70, el debate seres humanos, ahí donde las exigen-
se centraba en un tipo de fundamen- cias de deliberación se hacen sentir y
tación preocupada en responder a los repercuten de manera inmediata.
desafíos de una sociedad cada vez más
tecnicista. En ese contexto, la filosofía Surge, pues, un nuevo saber
ha buscado sistematizar el estudio de dentro de la propia filosofía, que se
la ética a través de las distintas posi- distingue de la moral y de la ética
bilidades de fundamentación. De esa tradicionales. Eso representa una
reflexión, surge una calificación de novedad que hoy día está ganando
las éticas. En este sentido, es posible cada vez más espacio, ampliando el
identificar la propuesta kantiana de los horizonte de la filosofía. Delante de
deberes, la aristotélica de las virtudes, eso, es posible afirmar que las éticas

-303-
ÉTICA APLICADA

aplicadas están conquistando un es- características básicas de la ética.


pacio sin precedentes. La ética sigue siendo el estudio del
fenómeno moral. Por tanto, es po-
De hecho, la ética ha bajado sible distinguir, según Hóffe, tres
otra vez a la caverna de nuestro formas distintas: a) el elemento des-
quehacer para poder, así, orientar la criptivo, que se ocupa en describir
acción ahí donde nos encontramos, o los diversos fenómenos de la vida
sea, en el mundo de la vida. De este moral, explicarlos y, eventualmente,
modo, la cuestión deja de preocuparse elaborar una teoría de la acción. Sin
exclusivamente con el tema de la fun- embargo, la filosofía no se limita
damentación, ya que debe responder a la descripción de los fenómenos
también por la aplicación. Veamos ya morales, investigación destinada a la
el segundo punto. historia, la etnología, la psicología y
la sociología. El elemento descriptivo
no pasa de la observación del fenóme-
3. Fundamentación y no moral; b) la segunda forma para
aplicación: dos entender la ética, se refiere al aspecto
normativo, o sea, su preocupación
ámbitos distintos de procura realizar un examen crítico
la misma cuestión de la moral social, al mismo tiempo
que intenta fundamentar principios
y normas de la acción. Se trata, pues,
El segundo punto se basa en de la formulación y fundamentación
la tesis de que la fundamentación y de proposiciones norma ti vas. En
aplicación son dos ámbitos impres- ese caso, la investigación pretende
cindibles de la reflexión ética y que, discutir ideas de justo, bueno, co-
por tanto, constituyen dos momentos rrecto, etc, y no sólo de describir el
necesarios en toda concepción actual fenómeno moral como tal, o sea, de
de una razón pública "proactiva". En principios, normas y valores capaces
otras palabras, una razón implicada de orientar la acción de todos. c) por
con las nuevas situaciones, ofreciendo, fin, Hóffe habla de una metaética,
así, determinadas claves para aclarar e preocupada en el análisis crítico de
definir los límites de la responsabilidad los elementos y las formas lingüís-
moral del sujeto. No se trata, pues, de ticas de las proposiciones morales,
reducir los problemas éticos ni morales bien como de desarrollar métodos
a la "región exclusiva del sentido lógico para su justificación (Hóffe, 1994, 99;
de los enunciados", pero de buscar Kutschera, 1989, 11). En este senti-
una "teoría contextual de los signifi- do, podríamos entender también la
cados" donde sea posible sintetizar los perspectiva de una ética cosmopolita
"principios incondicionados", con las - o global - en la misma dirección
"normas justificadas provisoriamente que apuntan Habermas y Apel.
y, además, a los discursos narrativos
relativos a valores" (Salas, 2003: 62). Mientras tanto, en nuestro
caso, parece ser importante entender
El nuevo escenario de la ra- la distinción entre Ética - a secas - y
cionalidad no ha abandonado las Éticas aplicadas, aspecto que permite

-304-
Jovino Pizzi

dilucidar el punto de vista moral y las la negac10n y el rechazo de otros


orientaciones prácticas. Como hemos intentos de fundamentación.
indicado, la ética ha hecho siempre
referencia al fenómeno moral, pues Esta posibilidad es, sin dudas,
trata de lo bueno, lo justo, lo deseable, un aspecto esencial en el debate sobre
lo correcto. Desde el punto de vista la tentativa de una ética intercultural
filosófico, la "ética general" se vincula con raigambre latinoamericana. Ya
a las diversas concepciones de la racio- hace más de cinco siglos, a lo largo
nalidad, ya que las grandes tradiciones de todo el proceso de colonización,
han señalado hacia distintos modos muchas voces han llamado la atención
de fundamentar la moral. Un posible sobre la necesidad de una filosofía que
cuadro de las teorías éticas lo hemos no cierre los ojos a la heterogeneidad
indicado arriba. de la gente de este continente, o sea,
que no admita la destrucción de la
La idea de fundamentación re- diversidad. En este sentido, la teolo-
mite al terreno teórico, o sea, reflexi- gía y la filosofía de la liberación han
vo y filosófico, no simplemente lógico tenido un papel importante. Y hoy
de los enunciados (Salas, 2003, 62). son muchas las voces que buscan
Se trata, pues, de justificar los princi- otro fundamento a los movimientos
pios generales que se consideran ade- sociales, políticos y culturales que
cuados en el momento de valorar las aspiran a una sociedad más justa, libre
morales o éticas concretas. En otras y humana. Una de ellas es la idea de
palabras, la tarea de la ética remite una ética intercultural, que apuesta
a la investigación del "fundamento decididamente por la reconstrucción
de la moral" ( Cortina, 1996, 81). En de las condiciones discursivas básicas,
efecto, describir y hacer un análisis a través de un diálogo que asegure
del hecho moral no tiene artificio ni un vínculo de reciprocidad entre
mayores complicaciones, pero fun- los diferentes modos de vida (Salas,
damentarlo no es fácil (Salvat, 2003, 2003: 29).
58). Por eso, ante la posibilidad de
evitar caer en un fundamentalismo Si, en determinado período
ciego, el intento de fundamentar de la historia latinoamericana, la
está implicado con el hecho de dar filosofía ha encontrado respaldo en
razones que justifiquen la existencia una tradición escolástica de inspira-
de principios y normas, o sea, de ción cristiana ( Cf. González Alvarez,
"aclarar por qué preferimos unos Ética), por otra parte, el pensamiento
valores frente a otros, unas teorías cientificista, de corte positivista, ha
frente a otras, unos criterios frente a insistido en otros caminos para fun-
otros" (Cortina y Navarro Martínez, damentar los principios y normas de
1998: 130). Así, pues, la tentativa la acción. El cientificismo tiene sus
de fundamentar el fenómeno moral orígenes en la separación moderna
significa poder afirmar que esto es entre hechos y valores, entre lo que
posible, como también de sostener es y lo que debe ser (Cortina, 2000b,
los argumentos que permiten tal fun- 98). Esta tentativa reserva para el
damentación y, además, de defender conocimiento científico la posible
los razonamientos que manifiestan racionalidad y objetividad, dejando

-305-
ÉTICA APLICADA

las decisiones morales para el ámbito objetividad de reglas y procedimientos


subjetivo de las decisiones y las pre- aceptados en el seno de una comuni-
ferencias, conforme los intereses de dad particular.
cada uno. En este caso, el camino más
frecuente y común para justificar los Mientras tanto, en la actuali-
valores y normas universales, para dad, hay otros intentos que procuran
poder distinguir lo que es correcto fundamentar la ética. Y esto es, sin du-
o incorrecto, es apelar a la concien- das, una de las contribuciones más in-
cia individual, a lo que creemos en teresantes de la filosofía de este nuevo
nuestro foro interno que está bien milenio. Aunque la fundamentación
o mal. Sin embargo, las críticas a las del universalismo moral no es una ta-
filosofías de la conciencia han dado a rea fácil, su metodología nos remite a
entender que el saber moral es fruto un procedimiento que nos proporcio-
a su vez de un proceso de sociali- na resultados muy valiosos, de modo
zación y, por lo tanto, está ligado a especial cuando intentamos señalar
los valores y normas de una cultura los pasos para una ética intercultural,
determinada. Esto no significa que la como da a entender Salas (2003). Esta
conciencia, la reflexión sobre los sen-tarea no separa tajantemente la funda-
timientos, valores y normas, no sea mentación de la aplicación, sino más
un referente para nuestra acción. bien es un intento que compagina los
dos ámbitos, una preocupación que
Al mismo tiempo, el politeísmo tiene en mente los vínculos humanos
axiológico trata de utilizar argumen- relevantes, cuya orientación de las
tos empírico-deductivos para destacar deliberaciones se basa en el carácter
aquello que tienen en común de hecho social de las acciones y en la reper-
las diferentes culturas, tradiciones y cusión en la vida de las personas. Es
religiones, a fin de mostrar qué ca- justamente eso lo que nos permite
racterísticas se entrecruzan y solapan hablar de ética y éticas aplicadas, un
en el proceso de fundamentación. razonamiento que involucra no sólo
En este caso, encontramos no sólo el ! los sujetos como tal, sino también las
objetivismo moderno, sino también empresas, instituciones, organismos,
el etnocentrismo, cuya metodología iglesias, profesionales, etc ..
consiste en descubrir, en las diferen-
tes formas de vida, aquellos valores,
actitudes, normas y, en el mejor de 4. El status de las
los casos, procedimientos que todas éticas aplicadas
comparten y que conforman una ética
mínima.
Hemos asistido en la década de
El etnocentrismo, así como lo los 90, a un giro hacia la aplicación.
propone Rorty, podría ser conside- Ese cambio tiene que ver con las
rado como uno de los defensores de transformaciones de la realidad. Los
una ética sin interculturalidad, una problemas se han transformado en
vez que procura, en la tradición del cuestiones globales y la reflexión no se
pragmatismo norteamericano, ele- limita al estado o a la regulación jurí-
mentos que puedan fundamentar la dica. La ética tiende a comprometerse

-306-
Jovino Pizzi

con los problemas que afectan a todos. ejercicio permanente de diálogo, de


Y es en eso que aparecen las éticas una razón pública imprescindible,
aplicadas ( ética ecológica, ética de las que nutre el carácter interdisciplinar
profesiones, bioética, ética económica de esa racionalidad proactiva.
e empresarial, etc).
Simplemente, lo que quere-
A menudo, oímos que las éticas mos decir es que el concepto de una
aplicadas suelen estar relacionadas razón práctica o, entonces, de una
a la ética discursiva. Pero, no es así, razón pública requiere la distinción
porque, en verdad, las éticas aplicadas entre el estudio de las teorías éticas,
nos ponen ante a las diversas teorías de la ética aplicada y, además, de su
éticas. De hecho, la fundamentación aspecto deontológico. En este ámbito,
discursiva ha generado una expectati- el aspecto teórico de la ética busca
va bastante grande con relación a las fundamentar principios de la acción
éticas aplicadas, quizás porque los dos humana; bajo el aspecto de ética
temas surgen casi en la misma época. aplicada, procura garantizar procesos
Todavía, el "giro aplicado" de la filoso- de decisiones en los casos concretos
fía, relacionado a la ética y la filosofía ( Cortina e Martínez, 1998, 164).
moral, se suma a los giros lingüísticos,
hermenéutico y pragmático (Cortina De este modo, es posible hablar
y García-Marzá, 2003, 13). Surge, por de un doble sentido de la ética: por un
tanto, un nuevo saber dentro de la filo- lado, las teorías éticas y, por otro, la
sofía, que se distingue de la moral y de deliberación en casos concretos. En
la ética tradicionales. Eso significa una el primer caso, tendríamos que traer
novedad que, hoy día, gana cada vez al debate las diversas teorías éticas,
más espacio, ampliando el horizonte de algunas de las cuales ya hemos he-
la filosofía. Tal cambio hace con que las cho mención. Las éticas aplicadas no
éticas aplicadas vayan conquistando un se construyen desde una sola teoría
espacio cada vez mayor. Ese carácter ética. No se trata de un eclecticismo,
interdisciplinar supone una filosofía porque "la realidad es multilateral" y,
capaz de dialogar con la diversidad de por eso mismo, el ético debe conocer
contextos humanos. Sin duda, encon- las distintas teorías éticas y tener el
tramos, en ese giro ético-filosófico, discernimiento suficiente como para
uno de los elementos importantes que dilucidar cuál de ellas resulta más
permite hablar de responsabilidad so- fecunda para ayudar en la toma de
cial de los ciudadanos, de las empresas decisiones" ( Cortina, 2003, 23).
y de las instituciones.
Cuando hablamos de delibera-
En ese horizonte, encontra- ción, pronto se produce la sensación
mos la bioÉtica, la genÉtica, la ética de que la ética aplicada cuenta con un
económica y empresarial, la ética de los modelo o, entonces, un recetario más
medios de comunicación, la ecoÉtica y o menos delimitado y, con eso, basta
la infoÉtica, la ética profesional, o sea, aplicarlo conforme sea el caso. El pro-
un amplio abanico que abarca el de- blema es que las cosas no funcionan
porte, el consumo, el desarrollo, etc .. así. Por eso, es necesario hablar de
En ese sentido, la ética representa un modelos, y no de prescripciones. Para

-307-
ÉTICA APLICADA

eso, voy utilizar el modelo diseñado a soluciones éticamente aceptables


por Adela Cortina, cuando habla de por todos (Martínez Navarro, 2000,
casuística. Ella habla de cuatro mo- 3 7). En este sentido, la deliberación
delos: l. el ideal deductivo; 2. de la depende de las circunstancias concre-
propuesta inductiva; 3. el principio tas, aunque la fundamentación trate
procedimental de la ética discursiva; y, ' de justificar los principios y normas
por fin, 3. una hermenéutica crítica. universales.

l. El primer modelo, deno- 2. El segundo modelo de la


minado "Casuística-1 ", consiste en ética aplicada es denominado de "Ca-
aplicar principios morales generales suística-2". Su metodología procura
a casos concretos. El ideal deductivo definir algunas "máximas" o criterios
supone dos niveles: un momento uni- que los expertos han ido descubrien-
versal, constituido por principios uni- do a lo largo de los años (Martínez
versales y axiomáticos, y un momento Navarro, 2000, 37). En este caso, la
particular, en el que se entran en juego deliberación parte de datos particu-
las razones concretas ( Cortina, 2003, lares y, a través de una secuencia de
24). El proceso de deliberación parte operaciones y experiencias, es posible
de principios y normas con validez agrupar los tipos o situaciones de un
universal. Los casos deben, pues, ser determinado género, según sus ca-
juzgados desde tales principios, o sea, racterísticas y, entonces, catalogar las
someterse siempre a estos principios, posibles alternativas. De este modo,
que se imponen y definen lo correcto habría solamente la posibilidad de
y lo justo y, por tanto, indican cuál llegar a conclusión sobre lo que es
resolución es la más adecuada para lo mejor para cada tipo de caso, sin
cada situación particular. presuponer principios o normas uni-
versales.
El problema es que los casos
concretos exigen probabilidad y no El problema de este modelo es
certeza. O sea, es prácticamente impo- su alcance, al máximo en nivel media-
sible hoy día delimitar los principios no, pues las decisiones pueden indicar
con contenidos morales susceptibles soluciones entre los profesionales. Sin
de aceptación universal (Martínez embargo, esas decisiones no sobrepa-
Navarro, 2000, 37). Por eso, la deli- san el límite interno del grupo, lo que
beración no se limita a la adecuación a significa que su legitimidad puede no
las normas y principios, pues las situa- encontrar respaldo en principios con
ciones concretas no son simples parti- validez universal.
cularización de lo universal. No basta,
por tanto, aplicar "verticalmente" y 3. El tercer modelo a seguir
de "arriba para bajo" los principios en la toma de decisiones se vincula
éticos tradicionales a las situaciones al principio procedimental de la ética
concretas cotidianas, ya que se hace discursiva. La fundamentación argu-
necesario un intercambio entre filó- mentativa parte del principio de que
sofos, profesionales y demás personas una norma tiene validez universal,
implicadas para, entonces, poder lle- siempre y cuando sea aceptable por
gar, a través del diálogo intersubjetiva, todos (Habermas, 2000: 177). Tal re-

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Jovino Pizzi

formulación del imperativo categórico Este marco vendría modulado a cada


kantiano se procesa a través del doble caso concreto (Cortina, 30).
aspecto del habla, el proposicional
y el preformativo, e introduce la 4. La salida, según Adela Cor-
intersubjetividad dialógica entre los tina, está en una "ética aplicada como
interlocutores e implicados. De este hermenéutica crítica", o sea, tener en
modo, la ética discursiva ve incorpo- cuenta los diversos modelos en el mo-
rado el "punto de vista moral en el mento oportuno, aunque el elemento
procedimiento de una argumentación coordinador será la ética del discurso,
verificada intersubjetivamente y que porque hunde sus raíces en la acción
lleva a los participantes a una amplia- comunicativa y en la subsiguiente
ción idealizante de sus perspectivas argumentación, que constituyen el
interpretativas (Habermas y Rawls, medio de coordinación - aunque no la
1998: 52). Así, las reglas del discurso sustancia - de las restantes activida-
definen, desde una situación ideal, lo des humanas (2003, 31). Su proce-
mejor y lo justo para todos. dimiento es mucho más complejo y,
por tanto, menos lineal que la mera
Mientras tanto, el formalis- "deducción de la casuística-! y que
mo ético limítase a "proporcionar la mera inducción de la casuística-2"
un test para comprobar la validez (Martínez Navarro, 2000, 38). En este
de las normas morales, dejando al sentido, señala Martínez Navarro, la
margen las preferencias axiológicas, hermenéutica crítica propone más
aconsejables en un ethos concreto" bien un proceso circular, en el que los
(Cortina, 1992b 173). Al ser así, la otros dos métodos mencionados se
ética se restringe a procedimientos retroalimentan mutuamente a partir
legisladores de normas y se exime de de tres vertientes: a) de las exigencias
las consideraciones sobre actitudes, éticas universales; b) articuladas a
hábitos y virtudes. Por supuesto, través del procedimiento formal de
una cosa es descubrir el principio la ética discursiva; y c) de las preten-
ideal, mientras que otra es su apli- siones específicas de cada uno de los
cación a los contextos concretos, ámbitos de la acción. En este caso, la
en los que la aplicación siempre deliberación depende de fines y, aun,
viene condicionada por el contexto de medios. La tarea consiste en diluci-
y por las consecuencias ( Cortina, dar qué principios de alcance medio,
2003: 29). Del mismo modo, el uso qué valores y qué virtudes concretas
de estrategias - por las empresas, es preciso asumir para alcanzar esos
por ejemplo - no dice nada sobre fines (Cortina,2000,33).
cuáles son los valores sociales por
los que todos los afectados deben Este modelo de deliberación
orientarse. La distinción entre la en torno a casos concretos reúne
fundamentación de normas y la toma diferentes teorías éticas, incluso en
de decisiones (parte A y parte B, si el momento de la fundamentación.
deseamos) da la sensación de que Se trata, pues, de aprovechar lo que
una vez descubierto un principio, enseñaran las importantes tradiciones
tengamos que diseñar un marco para éticas, en un proceso hermenéutico
la aplicación a los casos concretos. que posibilita deliberar dentro de cada

-309-
ÉTICA APLICADA

una de las éticas aplicadas (Martínez siones depende, normalmente, de


Navarro, 2000, 39). Sin embargo, una legitimidad, que no puede ser
se hace necesario superar las limi- garantizada a través del derecho, ni
taciones que cada una de las teorías tampoco limitarse a la filosofía de la
presenta, ya que son impotentes para conciencia, pues permanece cerrada
orientar las decisiones en los aspectos en una individualidad monológica, y
políticos, médico, ecológico, en el no dialógica.
jurídico y de los medios de comuni-
cación, hasta mismo en lo relacionado En este sentido, podríamos
con la ciudadanía. señalar que el planteamiento lati-
noamericano de la ética aplicada
De ahí que, para las éticas apli- tendría que respetar por lo menos
cadas, tres aspectos son importantes: tres niveles: el micro, el meso y el ma-
a) el momento estratégico, o sea, los cro. Son tres esferas distintas, pero
bienes internos y los mecanismos y que no pueden ser rechazadas ni
recursos para la satisfacción de nece- olvidadas en ningún momento. Creo
sidades de alcance medio; b) el marco que éste es un punto de partida inte-
jurídico, o sea, la legislación jurídico- resante en el momento de deliberar
política; y c) el aspecto deontológico, sobre cuestiones prácticas, por dos
es decir, la producción de bienes de razones. La primera viene relacio-
una conciencia moral cívica. Se tra- nada con el hecho de evitar caer en
ta, pues, de un conjunto de valores un etnocentrismo. En verdad, no es
que los ciudadanos de una sociedad lícito definir una metodología para
pluralista ya comparten, sean cuales cada situación histórico-concreta. El
fueren sus concepciones de vida bue- segundo trata de una diferenciación
na (Cortina, 2003: 34). funcional, con la cual es posible
diferenciar las tres esferas distintas
de la deliberación.
5. Hasta qué punto es El nivel micro se refiere al
posible hablar de una aspecto individual y personal. Esta
ética aplicada esfera garantiza la individualidad de
latinoamericana cada sujeto y sus expectativas nor-
mativas. Se trata pues de la autopre-
sentación del propio sujeto y que, con
Para terminar, me gustaría sus manifestaciones, da por supuesto
señalar algunos aspectos sobre la posi- una personalidad que viene riguro-
bilidad de hablar de una ética aplicada samente definida en lo que a espacio
latinoamericana. Creo que no es una y tiempo se refiere. Sin embargo, la
tarea tan sencilla, y por eso necesita individuación se apoya en el proceso
de algunas aclaraciones. de socialización, en donde y al mismo
tiempo, la originalidad de cada sujeto
El hecho de tornar decisiones es resguardada y garantizada a través
individualmente es el último nivel de la interacción con los demás. De
de la responsabilidad moral de una ahí que el nivel micro no se aparta de
acción. Todavía, esta torna de deci- los demás.

-310-
]ovino Pizzi

El nivel meso se refiere a las culturas, religiones etc. Aunque en la


relaciones y valores de cada comu- vida práctica las personas pertenez-
nidad o etnia, donde los individuos can a una determinada comunidad o
descubren o encuentran su identidad forma de vida, los desafíos de una so-
y aprenden a desempeñar el papel ciedad globalizante - o en proceso de
que da sentido a sus vidas (Cortina, globalización - reclaman respuestas a
1997: 18). En ese horizonte, coexis- problemas que afectan a todos, mismo
ten diferentes grupos, pero dependen que en la vida cotidiana, las personas
de un mismo "barco", o sea, de las no compartan de las mismas concep-
instituciones de la sociedad civil y de ciones de vida. Dentro de ese marco,
un Estado de derecho legal y legíti- la preocupación apunta hacia valores,
mamente constituido (Cortina, 1997; derechos y actitudes que deben (o
Habermas, 1999). La exigencia está en deberían) ser asumidos por todos. En
el aspecto relacionado con la sociedad ese sentido, la preocupación en educar
y los imperativos inherentes al proce- para la ciudadanía cosmopolita supo-
so de socialización. Se trata pues de la ne mucho más que la simple legalidad
pertenencia a grupos sociales, institu- jurídica y convencional del derecho o
ciones, etc, que vienen relacionados las formas de vida particulares.
con el complejo de normas jurídicas
o entramados de prácticas y usos nor- Esta es la razón principal de
mativamente regulados y socialmente una ética aplicada debe también con-
asumidos por todos los miembros de templar el nivel meso de la expectativa
la comunidad. Por tanto, los sujetos de credibilidad o de la validez que las
están siempre dependientes de una características culturales reclaman para
"red de órdenes institucionales y de sí, su legitimidad, y cuyos valores son
las tradiciones de la sociedad y de la compartidos por una comunidad o cul-
cultura" (Habermas, 1990: 102). tura. Uno de los peligros está en caer en
un etnocentrismo sin salida. Por eso,
En un plan más amplio, existe una ética aplicada con la mirada hacia
todavía una diversidad de valores y la América Latina debe tener en cuenta
una pluralidad de grupos, con dife- el nivel macro del sistema político y
rentes identidades colectivas. Ellas económico, donde los presupuestos
forman el gran mosaico de nuestra ético-filosóficos están relacionados
sociedad planetaria, con intereses con el proceso de globalización que
distintos, cuando no incompatibles. no esté cerrado o centrado en deter-
Por eso, el nivel meso no alcanza lo minados ámbitos, pues reivindican
suficiente para un diálogo a la altura principios con validez universal. Cual-
de las exigencias que van más allá quier reflexión ética sobre la actividad
del fondo común del saber cultural específica debe contar con estas tres
y los patrones de socialización de las perspectivas, y no limitarse a las deci-
instituciones sociales. siones individuales de los profesionales
de cada ámbito de la vida.
El nivel macro se ocupa primor-
dialmente de cuestiones e indagacio- Ante estas consideraciones,
nes que afectan a todos los seres hu- creo que es importante señalar que
manos, independientemente de etnias, el compromiso moral de todos exige

-311-
ÉTICA APLICADA

que se estudie los vínculos entre los aquellos vínculos con los contextos
principios éticos en su relación con , culturales y, además, en el contexto
los contextos de acción. En este caso, de acción ahí donde cada uno está
cada una de las teorías éticas tiene su vinculado. De hecho, transformar la
contribución. Gracias al giro aplica- sociedad implica ir cambiando los
do, es necesario, todavía, insistir en niveles micro, meso y macro.

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-313-
ÉTICA DEL DISCURSO
--------------
Hans Schelkshorn
Austria

. . . - - - - - - - - - - - - Palabras C l a v - ~ - - - - - - - - - - ~
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - FILOSOFÍNTEOLOGÍA - TEORÍA
CRÍTICA - RACIONALIDAD - ÉTICA - ÉTICA SOCIAL - TEORÍA DE LA
COMUNICACIÓN - LENGUAJE POLÍTICO - SIMBOLISMO

INTRODUCCIÓN tenido como epistemológicamente,


en la vida y la lucha de los pobres.
La oposición político-ideológi- De esta manera, se convierten para
ca entre el liberalismo y el marxismo J. C. Scannone sobre todo la "sabiduría
es por lo tanto el contexto relevante del pueblo" y para E. Dussel la lucha
al que se refiere críticamente la ética por la justicia en los temas centrales
del discurso en sus primeras etapas. de la filosofía. Así se han nombrado
Separándose de Kant, el pensamiento los contextos esenciales y las orienta-
liberal relegó la ética a la esfera de la ciones universales de ambas filosofías:
discreción privada por medio de la la ética del discurso se entiende como
identificación cientista de racionali- una ética en la época de la extensión
dad y neutralidad de valor. Las filoso- planetaria de la ciencia y de la técnica;
fías de las sociedades occidentales han la filosofía de la liberación como un
reproducido ideológicamente la duali- pensamiento crítico en el contexto
dad de ciencia objetiva y pensamiento de la dependencia y la dominación
subjetivo dividiendo el trabajo inter- neocoloniales.
namente entre la filosofía analítica y la
filosofía de la existencia. La tentativa
del marxismo ortodoxo de salvar de DELIMITACIÓN
nuevo el abismo entre la práctica sub- HISTÓRICA
jetiva y el saber objetivo, aunque fuera
a costo de un determinismo histórico,
no logró sino dar vigencia política a la Es un hecho que desde los fina-
tendencia totalitaria del cientismo. La les de los años 60 y comienzos de los
ética del discurso trata de sobrepasar 70 la ética del discurso de K.-0. Apel
la división entre la razón científica y la y J. Habermas y la filosofía la tinoame-
moral, entre la teoría y la práctica. ricana de la liberación se han desarro-
llado de manera independiente una
La filosofía de la liberación de otra. Durante aproximadamente
trata de liberarse de su complicidad quince años, ambas corrientes filosó-
con el imperialismo cultural fundando ficas, cada una en su contexto político
el discurso filosófico, tanto en su con- y cultural, fueron el foco de debates

-315-
ÉTICA DEL DISCURSO

públicos y académicos, en parte muy filosofía de la liberación latinoame-


vehementes. Esto demuestra que ricana recién se toman en conside-
tanto la teoría del discurso como ración mutuamente a mediados de
el pensamiento latinoamericano de los años 80. A partir de contactos
liberación lograron contextualizar anteriores, se desarrolló en los años
de manera filosófica muy eminente 90 un proyecto de diálogo completo
los problemas y esperanzas de los en cuyo centro estaban la filosofía
seres humanos en su ambiente so- de Enrique Dussel y la de K.-0.
ciohistórico, contribuyendo así a su Apel. Como lo ha demostrado R.
comprensión. Ambas filosofías se Fornet-Betancourt 1• El significado
enlazan a los movimientos políticos histórico de estos seminarios es
que se habían formado en los años 60 tanto más notable en cuanto una fi-
y tratan de aclarar sus perspectivas losofía latinoamericana se enfrenta
sometiéndolas a una crítica filosófica. al pensamiento europeo ya no para
La creciente consciencia de depen- hacer una recepción por más crítica
dencia y la aspiración a una práctica que sea sino para cuestionar la pre-
liberadora de sectores amplios de las tensión de la filosofía europea. Esta
diferentes sociedades condujeron la nueva constelación se hizo posible
filosofía latinoamericana a una re- debido a que la filosofía latinoame-
flexión radical sobre el sentido de una ricana, avanzando desde el siglo pa-
liberación auténtica. Por otra parte, la sado en su tendencia cada vez más
ética del discurso levantó el ímpetu fuerte de sobreponerse a la propia
revolucionario de las perspectivas internalización del eurocentrismo,
parcialmente irreales del movimien- ha elevado su misma constitución,
to estudiantil al nivel de una teoría como filosofía contextualizada e in-
radical de la democracia. culturada, a un nivel hasta la fecha
no conocido. De esta manera, se ha
Estos procesos han ido desa- formado una constelación del saber
rrollándose paralelamente, sin refe- que merece el nombre de diálogo,
rirse uno al otro en lo que concierne ' pues un diálogo entre homólogos
al trabajo filosófico conceptual pero, presupone alguna identidad cog-
en cuanto a la cuestión misma del noscible -aunque no necesariamen-
pensamiento, se pueden descubrir te fijada previamente-, identidad
importantes convergencias y super- de los participantes en el diálogo,
posiciones. Ambas filosofías tratan y la filosofía latinoamericana, en
de enfocar el problema original y primer lugar, tuvo que conquistar
desde su correspondiente contexto esta identidad a través de caminos
los problemas globales actuales de la muy largos y tortuosos. Desde esta
humanidad. Así se han convertido en posición cualitativamente nueva, la
temas centrales de la ética filosófica filosofía de la liberación se ocupa
el conflicto entre el Norte y el Sur, el en los últimos años de temas de la
peligro de la guerra nuclear y la crisis ética del discurso, siendo la meta
ecológica. no la mera recepción sino una dis-
cusión crítica en la búsqueda de
A pesar de las convergencias un pensamiento verdaderamente
en su objeto, la ética del discurso y la universal.

-316-
Hans Schelkshorn

DELIMITACIÓN el reto específicamente filosófico, es


CONCEPTUAL decir, el reto epistemológico, de la teo-
ría de la dependencia al diagnosticar
el eurocentrismo "latinoamericano"
La estrategia de prueba que como el reflejo de la dependencia po-
utiliza K. -0. Apel tiene como meta lítico-económica de América Latina.
llegar a un fundamentum inconcus- Según este autor, la filosofía latinoa-
sum que, siguiendo a Descartes, se mericana, alienada como está de su
consigue reflexionando sobre las propia cultura y realidad, es al mismo
condiciones de la duda pero que tiempo víctima y autor de la opresión
después del "linguistic turn" no se en cuanto estabiliza y profundiza a
puede ya reconstruir al nivel de la nivel cultural la alienación causada
filosofía de la consciencia sino de la por la imitación eurocéntrica.
pragmática lingüística. En la opinión
de K.-O. Apel el efecto inesperado de Las diferentes filosofías de la
este método de prueba consiste en liberación han desarrollado distintas
que en la duda, en cuanto argumen- estrategias para superar aquella ena-
tación, ya está contenido el principio jenación del pensamiento que fuera
de universalización moral que es descrita por Salazar Bondy: mediante
igualmente reconocido en todo acto un retorno a la tradición de la, filosofía
serio de argumentación, puesto que americana" (L. Zea, A. Roig), o a la
la argumentación no es posible sin sabiduría del pueblo y las tradiciones
las premisas éticas relevantes de una americanas (C. Cullen,J.C. Scannone,
comunidad ideal de comunicación R. Kusch) o mediante el desarrollo de
tales como la libertad de expresión una ética de la liberación (E. Dussel).
y equiparación de derechos. La idea De entre el gran número de autores
regulativa de la comunidad ideal de que en el proyecto de una, filosofía lati-
comunicación rompe todo consenso noamericana han entrado en discusión
de hecho, haciendo brotar una ver- con la ética del discurso, quisiéramos
dad cada vez más grande y concede intentar un acercamiento en detalle a
de esta manera un campo amplio al dos de ellos, en particular a Juan Carlos
falibilismo, inclusive en la esfera de Scannone y a Enrique Dussel.
la ética. De esta manera, se origina
una dialéctica inconcluible entre el
"ser" y el "deber", que sobrepasa l. El "nosotros ético-
tanto la separación liberal como la
histórico" y el apriori
identificación marxista de la ontolo-
gía y la ética.
de la comunidad de
comunicación- J.C.
Frente a este proceso, se en- Scanonne disputa
cuentra el pensamiento liberador en temprana con la ética
el contexto del debate sobre la auten- del discurso
ticidad de la filosofía latinoamericana
que se llevó a cabo a finales de los años Ya a mediados de los años 80
60 entre A. Salazar Bond y y L. Zea. Sa- J.C. Scannone había discutido acerca
lazar Bondy indicó muy precisamente de una posible relación entre una filo-

-317-
ÉTICA DEL DISCURSO

sofía latinoamericana de la liberación Apel, sobre todo en lo que se refiere


y la teoría de la comunicación de J. a su pretensión de renovar el antiguo
Habermas y K.-O. Apel2. El centro proyecto de la "primera filosofía"
del pensamiento de Scannone lo como cuestión acerca de los últimos
constituye una vecindad (perichore- fundamentos del ser. Scannone quie-
sis) de tres experiencias culturales re asumir la contribución de Apel
fundamentales que en la cultura mes- y al mismo tiempo profundizarla,
tiza han ido formando una unidad traspasando ciertos límites.
llena de tensiones: el pensamiento
amerindio-ctónico*, el greco-roma- a) Como primer punto de
no y el judea-cristiano. Estas tres apoyo sirve el concepto de "co-
culturas articulan una determinada municación". Scannone hace honra
concepción del ser, cada una desde al mérito de Apel de haber puesto al
su experiencia fundamental. En con- descubierto la intersubjetividad comu-
creto se trata de lo siguiente: nicativa en lo más profundo de la razón
como condición de la posibilidad de
• La experiencia amerindia de toda interpretación y argumentación.
radicación del estar, de la expe- Apel piensa al otro ya no a la salida
riencia de la madre tierra, de la del yo trascendental -como momento
Pacha Mama como algo sagrado; de la propia reflexión dialéctica de la
la concepción primordial del ser subjetividad (Hegel) o como "alter ego"
puede entonces describirse con del yo monológico (Husserl)- sino,
categorías como la ambigüedad, por el contrario, como sujeto empírico
la aceptación del destino, lo a causa de la incrustación en la comu-
abismal, lo imprevisible; nidad histórica de comunicación, cuyo
"ethos" vivencial tiene su norma en las
• la experiencia greco-metafí- premisas normantes de la argumen-
sica del ser como espíritu y tación. De esta forma, se comprende
fundamento con el carácter la comunidad normada éticamente a
de lo mismo, la necesidad, priori. Considerando la experiencia
la inteligibilidad y la eterni- latinoamericana de la "comunidad
dad; del pueblo", de la experiencia del
"nosotros estamos", Scannone trata de
• la experiencia judía del éxodo, ampliar el concepto de comunicación
del acontecimiento indeducti- de Apel:
ble de la libertad en el encuen-
tro personal que se expresa en • por medio de la indeductible
categorías como lo extraño, lo alteridad del otro que está
gratuito, el misterio y la nove- fundada en la libertad -como
dad histórica. lo ha probado Lévinas-, que
se sustrae a la intervención a
Tomando en cuenta este am- priori y que mantiene así la co-
plio panorama, Scannone se ocupa de munidad abierta infinitamente
la pragmática trascendental de K.-O. frente a toda totalización;

* Amerindio-clónico: indígena de América, vinculado a su tierra.

-318-
Hans Schelkshorn

• por medio de la radicalización experiencia a posteriori del otro, cuya


de la historicidad y de la aco- pro-vocación interpela la libertad en
modación cultural colegida por reponsabilidad y así exige la decisión
los símbolos de la comunidad específicamente ética de abrirse hacia
real de comunicación. Esta el otro (conversión) o de cerrarse ante
esfera conduce al segundo él. Entonces la historia no acontece en
grupo de temas común a Apel la dialéctica entre comunidad ideal y
y Scannone: la relación de real de comunicación sino en la ana-
lenguaje, significado/validez léctica de libertades indeductibles. La
y realidad y, así, a la discusión doctrina renovada de la analogía que
sobre la forma trascendental concibe la unidad no como supresión,
del pensamiento, que con la sino como liberación de la diferencia y
pragmática del lenguaje amplía que se encamina así hacia una identi-
a Apel transformándolo. dad plural sirve de concepto clave para
el concepto de historia de Scannone,
b) El paradigma trascenden- que se encuentra entre el relativismo
tal. Scannone reconoce el intento de histórico y el pensamiento dialéctico
Apel de demostrar que, partiendo de progreso.
del condicionamiento lingüístico de
todo conocimiento, la comunidad c) Síntesis trascendental
de comunicación es condición de la contra "simbólesis". También con
posibilidad de sentido, pero critica relación a la constitución de signifi-
la dialéctica, postulada con ocasión cado Scannone se separa claramente
de la cuestión de la legitimación de de Apel. Es cierto que la pragmática
la validez, entre la comunidad real de trascendental vence la "noesis" mono-
comunicación y la ideal. Según Scan- lógica de la consciencia no-verbal por
none, el pensamiento trascendental medio de la síntesis trascendental de
sigue siendo así presa de un cierto la comunidad intrasubjetiva de inter-
dualismo que, a pesar del esfuerzo por pretación en la que solamente se puede
mediar entre la identidad y la diferen- constituir el significado; pero, al mismo
cia, la universalidad y la singularidad, tiempo, se pasa por alto, según piensa
la eternidad y la novedad histórica, Scannone, que el misterio de su ser
tiende a suprimir estas categorías a en el encuentro con el otro -antes de
favor de aquéllas. Sobrepasando todo toda síntesis interpretativa- se dirige
relativismo hermenéutico, Scannone a sí mismo en la radicación común del
contrapone una dialéctica de la inte- "estar en la tierra" como una plenitud
racción sobre la base de un "nosotros desbordante de sentido y significado
ético-histórico", en la que convergen que el símbolo media y manifiesta.
tanto la incondicionabilidad de la Toda posición interpretativa (síntesis)
libertad del otro (trascendencia ética) tiene lugar en el campo del misterio
como la plenitud inagotable de los de la tierra y la libertad que se revela
símbolos. Separándose decididamente simbólicamente. La sabiduría popular
de Apel, Scannone considera que la que se basa en este proceso es, por
pretensión normativa en la historia no consecuencia, la condición de la po-
está anclada en la fuerza postulatoria sibilidad de toda validez y realización
de las premisas a priori sino en la de libertad, el verdadero "hecho de la

-319-
ÉTICA DEL DISCURSO

razón" -no como consciencia abstrac- tales o el concepto de Popper de una


ta en general- sino como el nosotros sociedad abierta. Es cierto que allí se
ético-histórico en la simbólesis de la rompe el solipsismo del "yo pienso"
intercomunicación entre culturas, que moderno para dar lugar a un nosotros
está universalmente situada. comunicativo, pero no se tiene sufi-
, cientemente en cuenta la ambigüedad
de toda sociedad concreta. Pues todo
2. Diálogo entre E. Dussel "nosotros", ya sea la pareja, un grupo,
y K.-0. Apel: una clase, una nación, se basa en una
puntos críticos identidad, que tiene una tendencia
inherente de exclusividad y opresión.
E. Dussel desarrolla su con- Esto quiere decir concretamente que
cepto de una filosofía de la liberación las sociedades occidentales ciertamen-
en primer lugar como una ética de la te cultivan en su interior cierto plura-
liberación, sin excluir una hermenéu- lismo, pero a nivel del globo oprimen
tica de los símbolos. Esta ética trata la peculiaridad de otras culturas y
sobre todo de considerar críticamente pueblos. Buscando la forma de pensa-
la opresión centenaria de los seres hu- miento que en última instancia porta
manos de la periferia y las estrategias consigo tales totalizaciones, Dussel
ideológicas de justificación de esta tropieza con el "logos" de la filosofía
opresión. La ética de la liberación se europea que fundamenta todo en una
entiende como el redoblado grito de unidad completa, en la que se supri-
los pobres unido a una aguda crítica me toda diferencia. Según Dussel, a
a las formas totalitarias del pensa- pesar de la superación del solipsismo
miento dentro de la filosofía europea. del "ego cogito", la ética del discurso
Buscando vencer las totalizaciones todavía sufre el influjo, a un nuevo
monológicas, Dussel es consciente nivel, del pensamiento de identidad
de su conformidad con la ética del y, por lo tanto, no puede lograr una
discurso. Sin embargo, Dussel critica apertura suficiente de la universa-
la solución que quiere darle la ética lidad a las diferencias heterogéneas
del discurso al problema planteado, como se había propuesto. La ética
pues en los puntos esenciales penetran de la liberación toma como punto de
elementos eurocen tris tas. 1 partida con Lévinas la experiencia de
la exterioridad irreductible del otro,
a) Liberación como supuesto cuya libertad se escapa de toda totali-
de la comunidad de argumentación zación y no se puede elevar en ningún
La discusión de Dussel con la ética del saber absoluto. Esta libertad establece,
discurso de K.-O. Apel está centrada por el contrario, una proximidad que
en la dialéctica de comunidad real cada vez renueva su vitalidad por
e ideal de comunicación. El primer medio de la epifanía del otro. Ante
punto de su crítica se refiere ya a la el reflejo de una universalidad rea-
concepción de la ética del discurso de lizada, la ética de la liberación sigue
la comunidad real de comunicación en primer lugar la pista de la práctica
como comunidad de argumentación opresora, frecuentemente oculta, que
en la que se reflejan las realidades es inherente a toda comunidad real de
políticas de las democracias occiden- comunicación, para descubrir luego a

-320-
Hans Schelkshorn

los que han sido excluidos del discur- no deja de advertir que Apel quiere
so antes de toda argumentación. La destrabar la absolutización del con-
urgencia de este problema resulta del senso actual por medio de la idea
hecho que se han tomado decisiones regulativa de la comunidad ideal de
sobre la mayoría de la humanidad, comunicación para lograr una uni-
especialmente sobre los pueblos del versalidad todavía más grande. Pero
sur, sin la posibilidad de participación especialmente en los primeros traba-
de los afectados. Por lo tanto, uno de jos de Apcl se hace notar la tendencia
los asuntos centrales de la ética de eurocentrista de esta dialéctica, pues
la liberación es elaborar, junto con la idea regulativa del juego de lenguaje
las condiciones trascendentales de la ideal funciona todavía como punto de
posibilidad de la argumentación, las referencia que tendría que prevalecer
condiciones de la posibilidad de una progresivamente en todas las formas
participación efectiva en el discurso. de vida. Según Dussel, se trata de un
Sin poder escaparse de la ambigüedad caso claro de "falacia desarrollista";
de la historia, la perspectiva de los es decir, la razón europea articula
excluidos y marginalizados permite su propia particularidad como una
la visión más clara de la estructura idea regulativa de validez universal.
de dominación de la "comunidad real En cambio, la ética de la liberación
de comunicación" y de sus contextos trata de deletrear "desde abajo" el
de ofuscación. La interpelación pro- proceso de humanización creciente.
vocativa de los pobres que rompen Entre la idea regulativa -con riesgo
el consenso actual es, por lo tanto, ideológico- y la comunidad real
la condición de la posibilidad de un de comunicación siempre infiltrada
discurso auténtico. Esta interpela- por una práctica de dominación, la
ción es un elemento central en la irrupción de los pobres introduce ya
marcha liberadora de los pobres, que no una comunidad de comunicación
primero tiene que vencer lentamente meramente postulada sino una nueva
la dominación internalizada para así alternativa concreta, o sea, una utopía
encontrar entonces su propia identi- que se genera con la colaboración
dad dominada. La liberación es, por lo de los pobres desde su exterioridad
tanto, un proceso de personalización, actualmente oprimida pero que se va
en el que se vence el poder desperso- emancipando. En consecuencia, todo
nalizador de la totalidad dominante. depende del reconocimiento del otro,
En este sentido, la comunidad de de la persona. Solamente por medio
argumentación presupone la libe- de la afirmación de la exterioridad
ración de los oprimidos, pues para del otro se trasciende la totalidad
poder argumentar tiene que haberse de una sociedad concreta hacia una
alcanzado ya una determinada liber- nueva forma histórica. Bajo la condi-
tad. Un discurso que se basa sobre la ción de la liberación del otro puede
identidad demolida del compañero de constituirse entonces el proceso de
diálogo sólo prolonga muy sutilmente argumentación como recepción de la
la situación de dominación. interpelación del otro.

b) Falacia desarrollista y el c) Comunidad de vida en


proyecto de los pobres. E. Dussel contraste con la mera comunidad

-321-
ÉTICA DEL DISCURSO

de lenguaje. Además de los problemas comienzo no estaba limitado al deba-


arriba mencionados, Dussel llama por te entre los protagonistas principales
último la atención sobre una reducción E. Dussel y K.-O. Apel, sino que
de la teoría del discurso que se refiere todo lo contrario; diferentes temas
a su carácter paradigmático. La prag- fueron discutidos por gran cantidad
mática trascendental del lenguaje se de autores que los profundizaron. La
entiende como separación del paradig- crítica a la supresión de la dimen-
ma de la filosofía de la consciencia. Sin ción material de la comunidad de
embargo -como apunta Dussel- ambos comunicación, especialmente de la
participan en un menosprecio dualista Economía y las relaciones de Poder,
de la corporeidad de la vida humana. fue desarrollada por Sirio López y
Este hecho se expresa en un nivel muy Franz Hinkelammert. F Hinkelam-
concreto cuando Habermas afirma que mert ( 1994) critica la idea de Apelde
la alienación no se puede articular ac- una "comunidad ideal de comunica-
tualmente en primer lugar en conceptos ción" en tanto que sería una más de
económicos. En este tesis se refleja, las típicas idealizaciones modernas
según Dussel, la realidad de las socieda- que, tal como la de la competencia
des prósperas del occidente, mientras perfecta y la planificación perfecta,
que la mayoría de la humanidad lucha pasa por sobre lo limitado del su-
por satisfacer las más elementales ne- jeto humano de manera ilusoria y,
cesidades. La ética de la liberación no de esta manera, crea una neblina
puede partir de la comunidad del len- ideológica. Un acceso realista a las
guaje sino de la comunidad de vida, es relaciones sociales tiene que partir,
decir, del mundo hecho accesible por la por lo tanto, según Hinkelammert,
necesidad y el instinto en el horizonte de la corporalidad, la precariedad y
de la reproducción de la vida, que se la vulnerabilidad del sujeto. A partir
satisface en la proximidad comunitaria de esto es que Maliandi, Michelini
de la fiesta. La filosofía de la corporei- y la filósofa española Adela Cortina
dad conduce de por sí a la esfera del han llevado a cabo importantes dis-
trabajo, las formas de producción y la cusiones con la Ética del discurso.
economía, cuyas estructuras de pro- Estos autores, sin estar vinculados
ducción, distribución, cambio y con- directamente al proyecto de una
sumo contrarias a la vida son criticadas "Filosofía latinoamericana", sin
a la luz de la comunidad de vida que embargo, han profundizado esen-
se va logrando. El "yo pienso" y el "yo cialemente la relación interpretativa
argumento" debe ser asumido, según con la Ética del discurso.
Dussel, en la economía trascendental
del "yo vivo". Las diferentes recepciones e
interpretaciones han llevado en el
último tiempo a esquemas interroga-
3. Intento de una tivos en los que la Ética del Discurso
integración sistemática ya no es meramente deconstruida,
de la Ética del Discurso sino que sus conquistas son recogi-
das en una teoría más compleja. El
El diálogo entre la Ética del interés por una discusión con la Ética
discurso y la de la liberación en un del Discurso que sea constructiva y

-322-
Hans Schelkshorn

ya no meramente ideológica parece conducir la crítica de la Ética de la


aumentar en tanto que la Filosofía la- Liberación a las consecuencia socia-
tinoamericana misma se va poniendo les de la Globalización. Un segundo
ante la tarea no sólo de superar re- ejemplo de una discusión crítica-in-
flexivamente su propio contexto, sino tegrativa con la Ética del Discurso es
de fundamentar también sus preten- el libro de Ricardo Salas Astraín Ética
ciones, mayoritariamente latentes, de Intercultural. Ensayos de una ética dis-
universalidad. Un aporte importante cursiva para contextos culturales con-
para esta integración constructiva es flictivos. (re)Lectura de pensamiento
puesto por E. Dussel en Ética de la Li- latinoamericano (2003). Salas Astraín
beración en la edad de la globalización desarrolla también una teoría ética
y la exclusión (1998). En esta obra, extraordinariamente compleja, que
Dussel distingue entre un momento deja atrás la contraposición inmóvil
material de la ética, que consiste en entre universalismo y contextualis-
la conservación y reproducción de mo. En una recepción cautelosa de
la vida humana, una Moral formal, gran cantidad de corrientes filosófi-
en la que con la Ética del Discurso cas, Salas logra no solo integrar, sino
la validez intersubjetiva de la Moral también unir aportes de la Ética del
se vuelve explícita, y la facticidad. Discurso y la de la Liberación con
Recién estos tres momentos juntos los motivos de pensar la identidad
constituyen un concepto universal- latinoamericana (Kusch, Scannone
mente válido de la Moral que debería y otros) de manera fructífera.

NOTAS

1 Cf. R. Fornet-Betancourt Ed., 1992. El programa de diálogo entre E.


Dussel y K.-0. Apel suma, entre 1989 y 1994, cuatro Seminarios que
tuvieron lugar alternativamente en América Latina y en Alemania.
Las actas están publicadas por R. Fornet-Betancourt (1990), (1992),
( 199 3), ( 1994) así como también en Sidekum ( 1994). En los Seminarios
a partir de 1995 el diálogo entre ambas teorías éticas ya no costituye
directamente el centro del debate, sino que lo central será el desarrollo
y la discusión de los aportes filosóficos a los retos globales.
2 Otra discución temprana con K.-0. Apel tiene lugar en el caso de]. De
Zan (1986), quien, "tiene por meta reconstruir la ética del discurso par-
tiendo de la confrontación con la situación de su propia esfera cultural
alemana".
3 Estudios completos acerca del diálogo entre E. Dussel y K.-0. Apel ver:
Schelkshorn (1997), Durán Sánchez (2001), Drees (2002).

-323-
ÉTICA DEL DISCURSO

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Verlag der Augustinusbuchhandlung 1992
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ÉTICA DEL DISCURSO

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-326-
ÉTICA SOCIAL
Adriana Arpini
Argentina

. - - - - - - - - - - - - - Palabras Clave
ÉTICA - ÉTICA DEL DISCURSO - FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN
- CAPITALISMO/SOCIALISMO - UNIVERSALISMO/CONTEXTUALISMO
- DERECHOS HUMANOS - DIALÉCTICA - NIHILISMO - UTOPÍA

INTRODUCCIÓN cuales ha sido modulado de acuerdo


a criterios diferentes a través del
tiempo, dando nacimiento a teorías
Si bien es cierto que la ética, y doctrinas éticas heterogéneas. Ellas
considerada en sí misma, es prima- son: la moral como búsqueda de la
riamente personal, pues cada hombre vida buena y la moral como cumpli-
decide y proyecta lo que va a hacer, miento del deber.
de acuerdo con las circunstancias
que en cada momento le toca vivir, En el primer caso, el logro
la dimensión subjetiva no agota la del objetivo, la vida buena, es enten-
problemática. Las personas en trance dido como sinónimo de "felicidad".
de disponer un curso de acción, por Un ejemplo clásico lo encontramos
lo general eligen entre pautas pre- en los escritos éticos de Aristóteles.
viamente dadas, deciden apelando a Ahora bien, el concepto de "felicidad"
elementos proporcionados por el con- puede entenderse de muy diversas
junto de saberes prácticos, patrones de maneras, ya sea que apunte a la auto-
existencia y de comportamiento de la rrealización o que persiga el placer. A
sociedad en que viven, del entorno su vez, ambos casos se prestan a una
sociocultural al que pertenecen. Cada pluralidad de interpretaciones. Así,
hombre -como ha sostenido José Luis entre las orientaciones que entienden la
Aranguren- se hace a sí mismo, pero a felicidad como cumplimiento del ser o
la vez es hecho por la cultura, tanto en autorrealización encontramos, además
sentido positivo como negativo. "La de la ética aristotélica, la ética tomista,
moral no es social solamente por el la eticidad hegeliana, el personalismo,
origen de las normas, sino también ... ciertas líneas del existencialismo, el
por el origen de la conciencia moral" neoaristotelismo, para mencionar las
(Aranguren,J. L., 1968, 20). más importantes. Por otra parte, entre
las posiciones que entienden la felici-
En la tradición del pensamien- dad asociada al placer o al bienestar,
to occidental es posible diferenciar pueden mencionarse la moral epicúrea,
al menos dos modos básicos de el utilitarismo, ciertas orientaciones del
entender la moral, cada uno de los hedonismo posmoderno.

-327-
ÉTICA SOCIAL

En el segundo caso, es decir colonia, los problemas éticos, aun cuan-


cuando la moral es entendida como do presentan cierta originalidad desde
cumplimiento del deber, la preocupa- el punto de vista de la orientación de la
ción central radica en fundamentar la conducta práctica, fueron planteados y
"universalidad" de la ley o norma mo- resueltos dentro del marco doctrinario
ral. Los distintos criterios a partir de de la escolástica, en su versión hispánica
los cuales se intenta garantizar dicha tardía. Sin embargo, no pocas veces se
universalidad dan lugar a posiciones produjeron resultados originales en
disímiles entre las que cabe mencionar la teoría, que fueron orientadores de
el estoicismo, la ética formal de Kant, acciones tendientes a buscar respuestas
las éticas procedimentales y dialógi- para la dolorosa situación de opresión
cas, las éticas basadas en la tesis del a la que eran sometidos los indígenas,
contrato social. a denunciar y revertir las injusticias del
régimen colonial español y a procurar
Cabe preguntar cómo se recor- formas autónomas de organización
ta la Ética Social en relación con los política.
modos clásicos de entender la moral;
es decir, qué es lo propio de la Ética A fines del siglo XVlll y co-
Social. Cabe, además, que las respues- mienzos del XIX, se produce un im-
tas a estas preguntas se busquen en portante movimiento de renovación
clave latinoamericana, esto es, desde de las ideas en América Latina que
una perspectiva que, aprovechando alcanza también al pensamiento ético.
los resultados de la reflexión ética La circulación de las "nuevas ideas"
universal, enraíce en nuestra propia actuó decisivamente en lo social y
tradición de pensamiento. político. Las ideas de la Ilustración,
en primera instancia, constituyeron
una fuente de inspiración para los
DELIMITACIÓN protagonistas de las gestas de inde-
HISTÓRICA pendencia. Los problemas éticos,
tales como la condena al comercio de
esclavos por considerarlo inhumano,
En el ámbito del pensamiento fueron planteados dentro de un marco
latinoamericano, la reflexión sobre caracterizado por el optimismo en el
problemas éticos se plantea desde el poder de la razón y en la posibilidad
momento mismo de la conquista, pero de reorganizar a fondo la sociedad
no de manera sistemática, sino a pro- en base a principios racionales. Fue
pósito de situaciones concretas, tales a la postre un proyecto paternalista
como la disputa acerca de la humani- que tomó como punto de partida una
dad del indio o el derecho de la corona valoración homogénea de la sociedad
española para llevar adelante la guerra y no tuvo en cuenta las diferencias y
de conquista. Un ejemplo en este sen- antagonismos presentes en ella, y que,
tido lo constituyen los escritos de Fray por lo tanto, no siempre contó con el
Bartolomé de las Casas donde se sienta apoyo de las "masas", sobre las que
el principio ético de igualdad de los recayó la acusación de incapacidad
seres humanos en virtud de ser todos para gozar de los beneficios de la
miembros del mismo linaje. Durante la libertad.

-328-
Adriana Arpini

El tránsito hacia la visión ro- sismo, al mismo tiempo que evita caer
mántica, que caracterizó el segundo en posiciones extremas como el esco-
tercio del siglo XIX, está señalado por lasticismo dogmático y el positivismo
el paso de la comprensión política a estrecho. Su originalidad radica en la
la comprensión social de la nación, redefinición semántica de categorías
abierta al reconocimiento de la con- tomadas de la filosofía clásica con el
flictividad de los procesos sociales propósito de adecuarlas a las necesida-
que las Guerras Civiles pusieron de des para las que se buscan respuestas: la
manifiesto. La receptividad de la pro- independencia de las Antillas españolas
blemática social quedó expresada en la (Cuba, Puerto Rico, Santo Domingo),
dicotomía barbarie - civilización, que la organización nacional y federativa
constituyó el núcleo valorativo en el de los Estados antillanos y la unidad
que se apoyó una interpretación social latinoamericana. De acuerdo con un
orientadora del accionar socio-políti- criterio evolutivo subyacente a la
co. Así, se hace recaer sobre la civiliza- concepción hostosiana de la moral, la
ción una valoración positiva frente a la fuerza conscia* crece, en los individuos
barbarie, el orden cobra cada vez más y en las sociedades, hasta que éstos
importancia frente a la libertad, y lo alcanzan su madurez. Pero el conflic-
mismo ocurre con otros valores tales to se presenta siempre que se verifica
como la unidad y la estabilidad, frente una desigualdad entre el crecimiento
a la guerra social y la anarquía. Esta re- material -de la ciencia y de la técnica
flexión ético-axiológica fue asumida, en función de satisfacer las necesidades
al margen de la actividad académica económicas de conservación y aumen-
de las universidades, con diversos to de la vida- y el progreso moral -es
matices pero con alto grado de com- decir el desarrollo de la conciencia
promiso, en el discurso de hombres racional-. En este caso se presenta otra
de pensamiento y acción como Simón contradicción, entre el aumento de la
Rodríguez, Juan Montalvo, Domingo conciencia moral -conscifacción-y la
F Sarmiento, Juan Bautista Alberdi, conciencia social -civilización-. Esta
José Martí, Eugenio María de Hostos. última es la que posibilita el logro de
Este último es autor de una Moral los más altos objetivos en cuanto a la
Social, publicada en 1888, que merece organización del derecho, la educación
un párrafo especial pues el texto se y el Estado. Hostos reconoce la exis-
inscribe en la coyuntura entre ambos tencia de sustancias éticas diferentes
mundos: el académico y el social. del individuo, los órganos sociales
-familia, municipio, región, nación,
La Moral Social del Puerto- sociedad internacional, humanidad-,
rriqueño puede quedar comprendida en relación con los cuales es caracteri-
dentro de las características generales zado el "hombre social" como un ser
de lo que Ricaurte Soler ha llamado de necesidades, de gratitud, de utilidad,
"catecismos laicos" . Constituye un de derecho y de deber. La existencia
interesante reordenamiento del saber social arraiga en una instancia anterior
ético epocal, que toma elementos del a la voluntad racional, en la necesidad
idealismo, del positivismo y del krau- que los hombres tienen, unos de otros,

* Fuerza conscia: expresión del castellano antigüo que significa fuerza moral
consciente.

-329-
ÉTICA SOCIAL

para concurrir a la satisfacción de los rias para reformarla hasta alcanzar la


fines de la vida. No se trata de una "etapa positiva". De ahí su difusión en
necesidad ciega, antes bien, implica ámbitos académicos -universidades
el reconocimiento de la dignidad de y colegios de enseñanza superior-,
cada uno en cuanto miembro de la como su utilización entre quienes te-
humanidad. Esta necesidad primera nían acceso al ejercicio efectivo del po-
de reconocer el valor intrínseco de la der, como fue el caso del Partido de los
dignidad de cada hombre deviene prin- Científicos, acólitos de Porfirio Díaz
cipio regulador de todas las relaciones. en México. Nuestro positivismo fue,
En sociedades sujetas a una compleja sin duda, una forma de pensamiento
estructura de dominación -como era decididamente orientado a la acción.
el caso de la dominación colonial de Sin embargo, los temas clásicos de la
Cuba y Puerto Rico-, la fuerza cons- ética, como el de la libertad, resultaron
cia se muestra en la tarea cotidiana de limitados en su desarrollo en virtud de
luchar por la defensa de los derechos, la interpretación mecanicista por la
de criticar, de escribir, de educar. Estos que se tendió a aplicar sin distincio-
son medios pacíficos para producir las nes el principio de causalidad a todo
reformas revolucionarias de las cos- lo existente. Con el afán de ordenar
tumbres y las normas enquistadas en las costumbres y evitar la anarquía,
la estructura social vigente y generar se tomaron decisiones cargadas de
formas de objetivación más justas que supuestos valorativos, como se pone
favorezcan el cumplimiento de los fines de manifiesto en la afirmación para-
de la vida. Pero existen otros medios, digmática de Gabino Barreda " ... la
no pacíficos, a los que sólo es legítimo libertad como medio, el orden como
recurrir cuando la estructura objetiva base y el progreso como fin" (Cfr.
de la eticidad impide el normal desa- Villegas, A., 1966, 127).
rrollo de la fuerza conscia. En síntesis,
se trata, en el caso de Hostos, de poner En forma paralela se desarrolló
en juego el saber ético y reformular sus el idealismo espiritualista que entron-
categorías analíticas y proyectivas en có con los desarrollos del krausismo
vistas de orientar y fundamentar una belga y español. Participaron de
práctica liberadora. esta atmósfera muchos de nuestros
intelectuales que tuvieron actuación
Hacia fines del siglo XIX y destacada como pedagogos, juristas
con un pie en el XX, el positivismo y políticos, entre los que cuentan,
y el idealismo espiritualista se con- además de los caribeños José Maní
virtieron en el soporte ideológico y Eugenio María de Hostos, ya men-
para la consolidación de nuestras cionados, Prudencio Vázquez y Vega,
recientemente constituidas naciones. José Batlle y Ordóñez, Hipólito Yrigo-
Las ideas positivistas sufrieron im- yen. Aunque actuaron en forma más
portantes modificaciones en función bien individual y aislada, sin llegar a
de su adaptación a las necesidades de formar escuela, el rasgo ético carac-
nuestras circunstancias. No fue sólo terístico que orientó su pensamiento
una doctrina acerca de las ciencias, y acción fue que no trataron simple-
sino también una doctrina acerca de mente de comprender el mundo, sino
la sociedad y de las normas necesa- de cambiarlo ( Cfr. VA, 1988). Se trata

-330-
Adriana Arpini

de una filosofía práctica, de una moral diversas tonalidades conforme se


orientada a la acción, que convoca a incorporaron elementos procedentes
actuar en la política, en el derecho, en del marxismo, del existencialismo y
la educación procurando la defensa de la filosofía analítica.
de la libertad, la conquista de una
mejor organización política y armonía Una mención especial merece
social, el logro de la civilización como la consideración de la cuestión de los
cúspide del desarrollo racional de la valores por parte del peruano Augusto
humanidad, todo ello enmarcado en Salazar Bondy. En efecto, de manera
un eticismo que promovía la auste- semejante a la forma en que Eugenio
ridad, la serenidad, la estimación de María de Hostos construye la Ética
la vida como expresión práctica del Social, la concepción de la experiencia
ideal humano. valorativa y de los valores por parte
de Salazar Bondy constituye un inte-
La problemática del valor, resante reordenamiento de los saberes
ineludible desde el punto de vista éticos y axiológicos de la época, con el
de una Ética Social, se desarrolló, propósito de proveer vías de solución
no obstante, en las primeras décadas a los problemas del subdesarrollo
del siglo XX, como una preocupa- socio-económico, la dependencia
ción específica en el marco de la política y la dominación cultural de
filosofía académica, nutriéndose nuestros países.
de dos vertientes: por un lado la
francesa, asociada a los nombres de Los aportes de Salazar al análi-
Durkheim y Bouglé, por otro lado, sis de la experiencia del valor pueden
la alemana, en la que resuenan los sintetizarse en tres puntos: por una
nombres de Husserl, Scheler, Hart- parte, la diferenciación entre concien-
mann, reforzada por la presencia de cia constativa, caracterizada como una
José Ortega y Gasset a través de sus contemplación neutra del mundo,
conferencias y escritos (v.gr. ¿Qué y conciencia valorativa, cuyo rasgo
son los valores?, 1923). En los ámbi- definitorio es el compromiso, es decir,
tos letrados predominó una concep- la aceptación o rechazo del mundo por
ción de los valores como entidades el sujeto, núcleo central de la praxis.
absolutas, invariables y ahistóricas, Por otra parte, la especificación de ex-
de los que se ocupa una ciencia de periencias valorativas con diferentes
los valores o Axiología, entendida grados de complejidad: atribución de
como sistema de verdades evidentes valor, realización, preferencia y pos-
e invariables, abarcada por las cien- tergación y elección valorativa. Todas
cias del espíritu. El debate sobre la ellas sujetas a un principio de oposi-
problemática axiológica contó con ción estricta, presentan un momento
el impulso, desde el magisterio, de intelectual, a través del concepto de
universitarios de personalidades cosa buena en su género, que es un
como Alejandro Korn, Alejandro índice de la inserción de la realidad
Deustua, José Vasconcelos, Carlos objetiva en la valoración. Finalmente,
Vaz Ferreira, entre otros cuya in- la afirmación de que la vida valorativa
fluencia se prolonga por varias dé- se desenvuelve en diferentes niveles:
cadas en el siglo XX. Fue cobrando las valoraciones derivadas o segundas

-331-
ÉTICA SOCIAL

caracterizadas por la aceptación de das. Es el caso de las valoraciones


un patrón o modelo valorativo; las derivadas que, además, se realizan
valoraciones originarias o protovalo- de acuerdo con patrones o modelos
raciones cuya especificidad radica en valorativos extraños. Cualquiera sea
la formulación de nuevos patrones; las el valor de que se trate o la dimen-
valoraciones críticas que consisten en sión existencial que afecte, se pre-
la modificación parcial o general de senta como una abstracción cuyas
patrones existentes. derivaciones son la indiferencia, la
frustración, la esterilidad. Otro es
El peruano concibe los valores el caso de las experiencias valora-
como trascendentales, sin embargo, tivas auténticas que implican una
esto no debe conducir al error de toma de conciencia de la situación
considerar que las categorías valo- estructural de dominación, en tanto
rativas son abstractas y absolutas, forma defectiva de ser; así como una
con lo cual quedaría cerrada toda crítica de los patrones valorativos
posibilidad de intervención original vigentes, que legitiman y justifican
del hombre en la realidad, es decir, dicha situación; haciendo viable la
toda posibilidad de cambio histórico. emergencia de energías creadoras
Por el contrario, Salazar reclama una capaces de proponer nuevos patro-
concepción abierta y dinámica de los nes valora ti vos, cuya objetividad no
valores. Según esto, los valores son es actual sino posible y se traduce
con ce bid os " ... corno condiciones de como posibilidad liberadora.
posibilidad de un mundo en proceso,
garantía justamente de constitución En nuestros días, las posi-
de tal mundo en y por el proceso de ciones éticas de Arturo Roig, Franz
la vida.·' (Salazar Bondy, A., 1971, Hinkelammert, Enrique Dussel, re-
14 2). Es decir, los valores son cate- cogen la tradición latinoamericana
gorías en cuanto condiciones de po- de una Ética Social y de una Teoría
sibilidad del obrar, pero históricas. de los valores comprometidas con la
Aquello que está contenido en los 1
liberación. Se construyen a partir de
términos valorativos, si bien funda la experiencia dolorosamente vivida
a priori la racionalidad del obrar, se de postergación social, dependencia
gesta históricamente. De ahí que no económica, subordinación política
resulten ajenos a la problemática del y dominación cultural de los países
valor los problemas de la alienación, de nuestra América. Constituyen un
la dominación, la autenticidad de momento de autoafirmación, de escla-
la praxis filosofía y la formación recimiento y denuncia, que alcanzan
humana. Desde la perspectiva de la formulación teórica y dialogan desde
dominación, la problemática axioló- una posición crítica con las princi-
gica adquiere modulaciones especí- pales teorías éticas contemporáneas
ficas vinculadas a la caracterización -éticas discursivas, neocontractualis-
de la cu! tura de la dominación y a tas, neoaristotélicas o cornunitaristas,
las exigencias de una praxis ftlosó- ! lltilitaristas-.
fica auténtica. En este marco, las
experiencias valora ti vas, simples o En efecto, las sociedades en que
complejas, pueden resultar aliena- vivimos y actuamos están atravesadas

-332-
Adriana Arpini

por una pluralidad de conflictos y de También Franz Hinkelammert


códigos morales que surgen y a la vez parte del sujeto, del "grito del sujeto"
delimitan esferas de acción con valores ante las injustas e indignas condicio-
y normas propios. Sin embargo, en tan- nes de reproducción de la vida, tanto
to somos sujetos situados en precisas de los hombres como de la natura-
coordenadas espaciales, históricas y so- leza, signadas por una racionalidad
ciales, advertimos que nuestros países puramente instrumental. Ante esta
distan de haber logrado ordenamientos situación de desamparo de la vida
políticos y sociales mínimamente re- humana, las concepciones ideales de
sistentes al juicio moral. La reflexión la ética resultan estériles. Se trata, en
llevada adelante por estos autores cambio de asumir la responsabilidad
latinoamericanos hace de la ética un por las consecuencias previsibles y no
ejercicio crítico, que implica la denun- previsibles de los acuerdos formales;
cia y enjuiciamiento de las condiciones de afirmar la reproducción de la vida
presentes y plantean, al mismo tiempo, humana como contenido de un crite-
la apertura de horizontes para posibles rio ético capaz de sustentar nuestras
transformaciones. decisiones, inclusive aquella que
consiste en negar la ley, cuando ésta
Arturo Roig propone -como exige sacrificios humanos -v.g. la ley
ya se adelantó- una moral de la del mercado-. Cualquier orden legal
emergencia, que no elude la realidad específico tiene que ser cambiado en
del conflicto y su peso moral. Se cons- la medida que las consecuencias con-
truye en el enfrentamiento entre lo cretas de la conservación de ese orden
subjetivo y lo objetivo, considerados amenazan la sobrevivencia del ser
como niveles de la moral. El momento humano y de la naturaleza. ( Hinke-
de la sujetividad -"moralidad de la lammert, F, 1993a, by 1998).
protesta"- ha jugado y juega entre
nosotros los latinoamericanos un Por su parte, Enrique Dussel
papel emergente, irruptor, frente a las propone una ética arraigada en la
formas opresivas de la eticidad vigente corporalidad del sujeto viviente, cuyo
-"ética del poder", de la obediencia-. punto de partida es una racionalidad
Se trata de un sujeto que refiere a sí material (re)productiva, sustentada
mismo sus fenómenos de conciencia en la vida humana como criterio de
mediante un ejercicio de autorreco- verdad. Ante la precarización de la
nocimiento en que se comprende vida a escala planetaria, Dussel asume
al mismo tiempo como "conciencia la posición de la "víctima", es decir de
moral", depositaria de valores -del quien es afectado negativamente por
valor supremo de la dignidad huma- un acto humano, una norma legal,
na- y de normas, desde donde surge una institución social o un sistema de
el juicio crítico como principio de eticidad. Desde esa posición, encara la
acción solidaria, inserto en la sociedad búsqueda de herramientas definidas
y la naturaleza. Al mismo tiempo, que favorezcan el ejercicio de una
Roig asume la necesidad de redefinir racionalidad práctica en relación con-
el quehacer filosófico y la filosofía creta y cotidiana con el Otro. Precisa-
misma desde el saber práctico-moral. mente, la experiencia intersubjetiva
(Cfr. Roig, A., 2002). potencialmente transformadora de lo

-333-
ÉTICA SOCIAL

dado, es el sustento de una praxis libe- aspiración a la universalidad se abre


radora. A fin de evitar las falacias que -emerge- desde la afirmación de la
surgen de una comprensión abstracta propia "sujetividad".
de la vida y del obrar humanos, Dussel
sostiene que una norma, un acto, un
orden social, aspiran a ser "buenos" en DELIMITACIÓN
un momento histórico dado, cuando CONCEPTUAL
cumplen con las siguientes condicio-
nes: - realiza un componente material
universal, con pretensión de verdad Frente a los modos básicos de
práctica que favorece la reproducción entender la moral, es posible dife-
y desarrollo de la vida humana de to- renciar otro que presenta caracteres
dos; - presenta un componente formal definidos. En efecto, lo que llamamos
universal, intersubjetivamente válido Ética Social constituye un saber cuya
en cuanto consenso alcanzado en con- especificidad se encuentra en posición
diciones de simetría de los afectados; equidistante tanto de una concepción
- considera un componente de factibi- de la ética como autoformación o
lidad que implica considerar a priori aspiración a la felicidad personal,
las condiciones con pretensiones de como de una basada en la univer-
recta intención, y analizar a posteriori salidad de la norma o en la validez
las consecuencias con pretensión de de los procedimientos de decisión.
honesta responsabilidad. (Dussel. E., Sin descuidar la importancia de las
1998). dimensiones subjetiva y normativa
de la moral, la Ética Social se recorta
En síntesis, las propuestas éti- como una forma de objetivación de
cas de estos autores latinoamericanos la moral preocupada por resolver los
-a través de los cuales se ha intentado problemas que afectan a la vida de los
ejemplificar, aunque no agotar, el hombre en sociedad. Pone en juego la
estado actual del pensamiento ético racionalidad práctica que comprende
social latinoamericano- en cuanto un momento de reflexión crítica sobre
reconoce el punto de partida en lo dado, un momento de elucidación y
un caso la dimensión moral del a comprensión de valores y normas y un
priori antropológico, en otro caso momento de aplicación en situaciones
la vida humana desamparada, y en socio-históricas concretas. Todo ello
otro la situación de las víctimas de con el propósito de achicar la brecha
los sistemas opresivos, hacen posi- entre ser y deber ser, entre cuyos már-
ble aquel desplazamiento necesario genes tiene lugar la lucha cotidiana por
hacia la "sujetividad", desde donde la realización de la vida de los hombres
es factible intentar una respuesta en comunidad. Como saber práctico se
con contenido histórico concreto a expresa en categorías que facilitan la
la pregunta por los valores y por el comunicación dentro de una estructura
principio normativo del obrar. Ello referencial histórica, social y axiológi-
no implica el olvido de la exigencia camente determinada.
de universalidad, también necesaria
al momento de definir valores y seña- En el marco del pensamiento
lar criterios de normatividad. Pero la moderno, especialmente entre los

-334-
Adriana Arpini

siglos XVI a XVIII, las diferentes teo- producto histórico, debe hacerse cargo
rías éticas ya acentuaran una u otra de los conflictos y contradicciones de
de las dimensiones antes menciona- la realidad social, desde la cual y para
das, descansaban sobre el supuesto la cual elabora sus principios, valo-
de una razón subjetiva o conciencia res y normas. La tarea de una Ética
capaz de captar en forma inmediata Social no se agota, pues, con la mera
el sentido del bien y el deber. Sin declaración de principios; desempeña,
embargo, el ejercicio de la sospecha además, una función crítica respecto
llevado adelante por los pensadores de las objetivaciones históricamente
posthegelianos del siglo XIX puso en producidas.
crisis las construcciones del subjeti-
vismo moderno. En efecto, sospechar Nietzsche, por su parte, pone
consiste en cuestionar la capacidad en tela de juicio la filosofía anterior,
de la conciencia para acceder en for- desenmascarando el hecho de que los
ma directa a la verdad, o captar sin valores que la sustentan constituyen
mediaciones el sentido del bien y el una huida hacia un mundo pretendi-
deber. Para los filósofos de la sospe- damente verdadero, situado más allá
cha -Karl Marx, Federico Nietzsche, del mundo real. Valores que, organi-
Sigmund Freud- la realidad se nos zados en sistemas conceptuales, aho-
aparece mediada por signos de na- gan la vida, movidos por una secreta
turaleza diversa, por construcciones voluntad de poderío, transformada
racionales o ideológicas que es ne- en voluntad de dominio. A su vez,
cesario trascender para desentrañar Freud expresa en El malestar de la cul-
su sentido. tura la paradoja del ser humano que
se afana por crear una civilización en
A partir de la inversión de la vistas de un mayor bienestar, cuyo
dialéctica hegeliana, Marx muestra resultado, sin embargo, ha sido nega-
que tanto el ser como el deber ser tivo, pues las instituciones destinadas
están mediados por el trabajo, es decir a regular las relaciones humanas, la
por la posición de los hombres en las religión, el derecho y también la éti-
relaciones sociales de producción. No ca, son causa de represión y malestar,
es ajena a la moral la afirmación de La ya que por medio de ellas la razón
ideología alemana según la cual "no impone deberes sin tomar en cuenta
es la conciencia la que determina la las posibilidades de los individuos
vida, sino la vida la que determina la y la búsqueda natural del placer.
conciencia" (Marx, K., 1971, 26) En Ambos pensadores, cada uno desde
este sentido, puede afirmarse que no su peculiar punto de vista, advierten
es la moral, en cuanto contenido de acerca de la necesidad de tomar en
conciencia, quien modifica las con- cuenta las tensiones que habitan en
diciones de desigualdad, injusticia e cada uno de los seres humanos y que
inhumanidad de las que son víctimas se proyectan en las diversas formas
la mayoría de los hombres, sino la de organizar la vida social. Ponen
transformación de las circunstancias de relieve la función de la sospecha
reales lo que permitiría a los hombres como movilizadora de la crítica ra-
superar la situación de alineación. En cional sobre las formas vigentes de
esta perspectiva, la Ética Social, como objetivación de la moral.

-335-
ÉTICA SOCIAL

La cnnca, que resume a las puede sino tomar como punto de


antes señaladas y que se presenta partida las condiciones socio-histó-
como constante del pensamiento ricas en las cuales y para las cuales
contemporáneo, se endereza contra se desarrolla. Esto es, ha de definirse
la conciencia como reducto racional como Ética Social.
del que brotan los valores y contra la
posibilidad de elaborar y sostener un Ahora bien, en el contexto
sistema ético a partir de la raciona- complejo y conflictivo de la realidad
lidad subjetiva. La conciencia moral socio-histórica latinoamericana, se
personal se construye en interacción hace necesario tener en cuenta ciertas
con la estructura objetiva de normas precisiones al momento de enfocar la
y valores socialmente compartidos. problemática de la Ética Social. Según
Interacción que sólo en parte puede la observación de Arturo Roig, "vivi-
ser entendida como proceso de asimi- mos en un mundo transido por líneas
lación e integración, pues involucra conflictivas ... [que] muestran, a más
también procesos de distanciamiento de un volumen y fuerza considerables,
y crítica, de rechazo, reformulación niveles variados de resolución teóri-
y creación de nuevos valores. En el co-práctica, los que van, desde posi-
seno de la vida social, el accionar ciones crudamente ideológicas, hasta
moralmente maduro se caracteriza actitudes críticas de diverso sentido
no tanto por ajustarse a las normas y profundidad" (Roig, A., 1997, 7).
vigentes cuanto por contribuir a su Así, frente a una moral del egoísmo
mejoramiento como resultado de un racional, que ha cobrado vigor parale-
proceso crítico y comprensivo del lamente a la explosión contemporánea
sentido de las mismas. del neo-liberalismo, no ha dejado de
crecer una forma alternativa de moral
La búsqueda de la felicidad y basada en el paradigma universal de
la necesidad de encontrar criterios los Derechos Humanos, que el autor
universales del obrar son todavía hoy caracteriza como humanismo prin-
cuestiones que movilizan la reflexión cipista. Una tercera línea está dada
ética. No sólo las llamadas ciencias por la discusión, fundamentación y
duras, sino también la sociología, justificación teórica del humanismo
la economía, el derecho, la política, principista que tiene lugar en el campo
la historia -que tras el impacto del de las morales filosóficas. Por debajo
positivismo se habían afianzado en de todo esto, se encuentran los mo-
su pretensión de "estar libres devalo- vimientos sociales que expresan sus
res"- se reconocen hoy como discur- requerimiento de dignidad, libertad e
sos humanos complejos que reclaman igualdad mediante formas de resisten-
una discusión valorativa. La Ética, si cia, desobediencia y disenso, buscando
ha de cumplir con sus tareas -vale de manera más o menos espontánea y
decir, si ha de llevar adelante una re- clara quebrar las estructuras objetivas
flexión crítica sobre lo dado, requiere que los sojuzgan. La moral implícita en
proponer categorías de interpretación estos movimientos, así como las mora-
y orientación axiológica: constituirse les doctrinarias construidas sobre esta
en un saber práctico para la vida de base son caracterizadas por Roig como
los sujetos y los grupos sociales- no moral emergente. En ellas se pone de

-336-
Adriana Arpini

manifiesto el conflicto entre las formas en estrecha re,ación con la problemá-


objetivadas de la eticidad vigente y el tica del reconocimiento y satisfacción
universo de la moral subjetiva que lleva de las necesidades en contextos socio-
adelante "el duro trabajo" de la sub- histórico determinados. En resumidas
jetividad en lucha por una liberación cuentas, la problemática ética latinoa-
respecto de una cultura opresiva ( Cfr. mericana se encuentra fuertemente
Ibídem, 9). La moral de la emergencia, incardinada en la problemática social
aunque no siempre alcanza niveles de y política, razón por la que presenta
formulación teórica, se articula como predominantemente los rasgos con que
una razón práctica en ejercicio, sobre caracterizamos la Ética Social.
la categoría de "dignidad" que no es
posible escindir de la problemática de - La ética, como disciplina filo-
las necesidades, porque ella es lo pri- sófica, ha tenido desarrollos fecundos
mero que necesita el ser humano para dentro de los marcos académicos. Sin
realizar su propia humanidad y porque embargo, la necesidad de resolver
es el principio ordenador y de sentido problemas socio-históricos concretos
de las necesidades y de los modos de de nuestros países, ha hecho patente la
satisfacción. necesidad de adoptar posiciones éticas
y sostener juicios de valor respecto de
Así, pueden ser agrupadas en- nuestras sociedades-, que exceden el
tre las morales filosóficas algunas teo- marco académico y es allí donde las
ría contemporáneas representativas ideas éticas se encuentren expresadas
del actual debate de la filosofía moral; de forma más rica y, desde luego, más
a saber: las éticas comunicativas y las polémica y dinámica, como se puede
neocontractualistas, que retoman, apreciar en el discurso fuertemente
cada una desde una óptica diferente, performativo de muchos de nuestros
la tradición moderna de inspiración pensadores -Simón Rodríguez, Juan
kantiana. Las éticas neoaristotélicas Bautista Alberdi, Francisco Bilbao,
o comunitaristas, se apoyan en la Emeterio Betances, Eugenio María de
tradición abierta por Aristóteles en Hostos,José Martí,José Carlos Mariá-
sus escritos sobre ética y política, y tegui, Manuel Ugarte,José Ingenieros,
también en la moderna formulación para mencionar sólo algunos-. Ello
de la eticidad hegeliana. requiere perfilar instrumentos teórico-
metodológicos capaces de dar cuenta
Por otra parte, desde una de la historicidad y especificidad de
perspectiva que intenta aportar a la los planteamientos éticos en el marco
construcción de una Ética Social La- del pensamiento latinoamericano.
tinoamericana, es dable considerar las
siguientes hipótesis: - En la segunda mitad del siglo
XX, la discusión sobre los problemas
- Los problemas éticos y valora- éticos y valorativos estuvo atravesada
tivos, el modo en que son planteados y por los desarrollos de las ciencias
las vías seguidas para su resolución, así sociales, económicas y políticas -en
como la aspiración a la universalidad particular por el avance de la Teoría
de los desarrollos teóricos a que dan lu- de la Dependencia-, así como por la
gar, arraigan en la cotidianidad y están necesidad de llevar adelante una crítica

-337-
ÉTICA SOCIAL

de las ideologías vigentes. De ahí que, este ámbito dialógico, pueden ubicarse,
a partir de los afi.os 60, se asista a una entre otras, las propuestas éticas de
renovación en el modo de plantear esos Enrique Dussel, Arturo Roig, Franz
problemas en los marcos académicos Hinkelammert, Ricardo Maliandi, Sirio
y no académicos, que ha dado lugar a López Velasco y más recientemente las
diversas líneas de desarrollo. Tal reno- aproximaciones a una Ética Intercultu-
vación fue, no pocas veces, motivo de ral de Raúl Fornet Betancourt y Ricardo
censura y de persecución de sus repre- Salas Astraín. (Sin duda estos nombres
sentantes por motivos ideológicos. En no agotan la lista).

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-339-
ETNO-EUROCENTRISMO
. -·~~· José G. Santos Herceg
Chile

~ - - - - - - - - - - - Palabras Clave - - - - - - - - - - ~
FILOSOFIA INTERCULTURAL - UNIVERSALISMO/
CONTEXTUALISMO - IDENTIDAD - ALTERIDAD - CULTURA
- LATINOAMÉRICA/ IBEROAMÉRICA / INDOAMÉRICA
- MODERNIDAD - GLOBALIZACIÓN / MUNDIALIZACIÓN - NUEVO
ORDEN MUNDIAL - PRIMER MUNDO/ TERCER MUNDO

INTRODUCCIÓN convencimiento de que "sus valores


son los valores, y eso le basta; jamás
trata, realmente de demostrarlo" .
Tzvetan Todorov ha definido
en términos muy generales todo etno- Hay, por lo tanto, dos cuestio-
centrismo como la pretensión de "ele- nes indisolublemente engarzadas con
var, indebidamente, a la categoría de la idea de etnocentrismo, dibujando
universales los valores de la sociedad a y delimitando sus contornos: la de
la que yo pertenezco". De acuerdo con "ideología" y la de "dominación".
este concepto, existen tres elementos Ambas, por supuesto, no son nece-
que son constitutivos de todo etno- sariamente independientes la una
centrismo. Por una parte, la intención de la otra. Si se echa una mirada a
de hacer universal, de otorgar un la concepción de ideología según el
carácter global -válido siempre y en joven Marx , ella implica siempre una
todo lugar- a una determinado grupo deformación de la representación de la
de valores, una cierta cosmovisión realidad; se falsea, se tergiversa la rea-
que está fija en el tiempo (ahora) y el lidad, creando una imagen "invertida".
espacio (aquí). Por otro lado, dicha Esta alteración no es nunca inocente
cosmovisión y dichos valores son los y tiene como finalidad imponerse en
propios y, por lo tanto, esa intención tanto que "verdadera" representación
se basa en el convencimiento de que de la realidad en vistas a la consecu-
"mi" forma de estar en el mundo es la ción de determinados "intereses".
mejor y más adecuada; de que "mis" Se trata de lo que Paul Ricoeur ha
valores son superiores. Por último, llamado "función deformadora de la
está el hecho de que la pretendida ideología" , que tiene como objetivo
elevación es "indebida", esto es, que último la justificación del dominio.
lisa y llanamente pretende "imponer- No es una tergiversación antojadiza ni
se" sin justificación alguna. Como anecdótica, sino que está orientada a
remarca el mismo Todorov, se trata del fundar el control, a legitimar el poder.

-341-
ETNO-EUROCENTRISMO

El vínculo entre la tentativa de justifi- finalmente, de la violenta actualidad


cación y el fenómeno del domino está del fenómeno.
dado por el intento de transformar los
intereses particulares de un grupo Dentro del mostrario de mani-
determinado (la burguesía en el caso festaciones de etnocentrismo hay una
de Marx) en universalmente válidos. que es la que nos ocupa en particular.
Esta es la inversión, la deformación Esta es la del eurocentrismo o, si se
fundamental; la de hacer pasar no- quiere tal vez más correctamente, "Oc-
ciones e in te reses particulares por cidentalocentrismo". El eurocentrismo,
universales. La función deformadora en tanto que variante del etnocentris-
da lugar a otra de carácter "legitima- mo, se relaciona particularmente con
dora", para seguir usando la termi- la centralidad de Europa o más bien
de la cultura Cristiano-Occidental;
nología de Ricoeur.
aquella que primero está radicada en
Europa, pero que luego de la Segunda
Guerra Mundial se desplaza hacia Nor-
DELIMITACIÓN te América. Estados Unidos es, hoy por
HISTÓRICA hoy, el depositario de dichos valores
y, por lo tanto, el centro del "Sistema
Mundo", para usar la expresión del
Manifestaciones de etnocen- Immanuel Wallerstein. El eurocentris-
trismo, cabría sostener, han existido mo es, entonces, un tipo particular de
siempre. Casos de etnocentrismo etnocentrismo, pero no se trata de uno
flagrante pueden, de hecho, rastrearse cualquiera, pues, como bien ha visto
a lo largo de toda la historia de la hu- Enrique Dussel, es el primer y único
manidad. Detrás de cada campaña de etnocentrismo de carácter mundial, a
conquista y cada dominación colonial, tal punto que "universalidad y euro-
en particular, se percibe especialmen- peísmo se tornan idénticos (. __ )". La
te la potencia de este fenómeno. La pretensión expansionista de este tipo
de los macedonios encabezados por particular de etnocentrismo coincide
Alejandro Magno sobre el mundo con los límites del mundo: los valores
Persa, la de los romanos sobre todo de la civilización cristiano-occidental
el Mediterráneo que terminó llamán- habrían de ser los de toda la humani-
dose Mare Nostrum, la del Islam sobre dad y su cosmovisión debería impo-
la costa sur del Mediterráneo -desde nerse sobre todo el orbe.
España hasta el Asia Menor-, la de
los Españoles y Portugueses sobre las Así descrito, el eurocentrismo
Indias Occidentales, la de los Ingleses debe tener un "acta de nacimiento".
sobre la América del Norte y más tarde La delimitación histórica del origen
sobre la India, la de Francia, Alema- de dicho fenómeno es, sin embargo,
nia, Bélgica sobre África y, más tarde, problemática. La dificultad en este
las campañas de Napoleón o de Hitler, caso no tiene que ver con que sea com-
por nombrar ejemplos paradigmáti- plicado históricamente determinar su
cos. La cruda realidad de la invasión fecha de nacimiento, sino más bien
norteamericana en Medio Oriente con su mismo carácter ideológico.
al despuntar el siglo XXI nos habla, En efecto, el hecho de que se pueda

-342-
José G. Santos Herceg

dar cuenta del lugar y fecha en que La Europa que hoy conocemos nace
surge, le resta universalidad, por lo junto con el "mapamundi" que ella
que la misma cultura occidental, en misma dibuja.
su afán de validación absoluta, ha
lanzado al baúl del olvido dicho ori- Antes de ser "Europa", el mun-
gen. "El culturalismo dominante ha do cristiano occidental era periférico;
inventado -dice Amin- un 'Occidente era, de hecho, el espacio de la barbarie
de siempre', único y singular desde su en relación a otras civilizaciones
origen". Esta ficción -tergiversación existentes que se situaban en el
más bien- no puede, sin embargo, centro. Según esta interpretación,
hacer desaparecer del todo el hecho de Europa ocupa un lugar absoluta-
que el nacimiento del eurocentrismo mente marginal hasta la entrada en la
puede circunscribirse históricamente, Modernidad. "Europa bárbara versus
esto es, puede describirse su genealo- Grecia, la helenicidad. (. .. ) Europa es
gía. No se logra borrar que sin duda se lo incivilizado, bárbaro, no-político,
trata de un fenómeno histórico cuyos no-humano". Cuando se dice que
comienzos están relacionados con Europa era bárbara en relación con
el Renacimiento y la irrupción de la otros mundos más civilizados evi-
Modernidad. dentemente no se utiliza el término
"civilización" como sinónimo de
Hasta antes de la Modernidad "modernidad" ni menos de "capita-
"Europa -citando a Walter Mignolo- lismo". Si así se hiciera, como bien
no era todavía propiamente Europa". ha visto lmmanuel Wallerstein, se
Por una parte, esto significa que hasta estaría reconociendo "la importancia
entonces no era posible siquiera -esto es, su valor- al "logro" europeo,
imaginar una historia lineal que re- precisamente en los términos en que
corriera ininterrumpidamente desde Europa lo ha definido". A lo que se
Grecia hasta el occidente europeo; apunta aquí es, más bien, al hecho
esto se hace posible recién mucho de que mientras la que hoy se llama
después: durante el Renacimiento. Europa se encontraba hundida en
Es a partir de este momento que aquella etapa primitiva de su historia,
se "construye" la "fusión" entre el en aquella fase oscura que ella misma
occidente latino y el griego oriental quisiera olvidar (no es por casualidad
dando origen aquella "ecuación": que se la llama "Edad Media": debe
Occidental = Helenístico + Romano considerársela sólo un eje, un paso,
+ Cristiano. Que Europa no sea aún un tránsito entre el mundo Antiguo
Europa, significa, por otro lado, que y la Modernidad; un gozne que dura,
hasta ese momento, lo que hoy seco- sin embargo, diez siglos), el mundo
noce como Europa era simplemente musulmán, aunque no fue en caso
el espacio ocupado por los cristiano- alguno un capitalismo, deslumbraba
occidentales. De Europa (E) sólo se con su filosofía, sus matemáticas,
puede comenzar a hablar cuando su ciencia . En resumen, como se-
ella misma se "autodefine" como tal, ñala Dussel, hasta entonces Europa
cuando se "autoconstituye" por refe- "(. .. ) en nada es superior al mundo
rencia a lo otros, a los que ella misma musulmán: muy por el contrario,
llama África, Asia y América (AAA). guarda una acomplejada posición de

-343-
ETNO-EUROCENTRISMO
-- - - - -- -

inferioridad, aislada, verdadero Finis su civilización", de su "superioridad


terrae (en el extremo occidental del absoluta en algunos aspectos". Allí es
continente asiático-afro-europeo), donde habría nacido el eurocentrismo
con total desventaja comercial con que cristalizará a lo largo de los siglos
respecto a las áreas 'centrales' mu- XVI y XVII.
sulmanas (. .. )" .

Esta lectura implica necesaria- DELIMITACIÓN


mente eliminar la idea de que exista CONCEPTUAL
un "progreso" en la historia y dejar de
pensar que la civilización occidental
es una "fase superior" en el desarrollo Si hemos de creer a Immanuel
en la historia de la humanidad. Habrá Wallerstein, hay que tener mucha pre-
que poner en cuestión, por lo tanto, ' caución al intentar aclarar el concepto
la tesis de que lo hecho por Europa de eurocentrismo pues, según sus
sea una avance en sentido absoluto; palabras, se trata de una "hidra multi-
que efectivamente hay un así llamado facética que tiene muchas encarnacio-
"milagro europeo" . Esto no implica nes" . Efectivamente, el eurocentrismo
dejar de reconocer que lo ocurrido con se manifiesta de numerosas formas:
Europa lleva aparejado un cambio que en ocasiones abierta y expresamente;
ha afectado radicalmente la fisonomía las más de las veces, sin embargo,
completa del globo; simplemente se de modo subrepticio y solapado. No
pone en duda que dicha alteración es fácil, por lo tanto, dar cuenta del
sea efectivamente una mejora en todos fenómeno con una simple definición.
los ámbitos. Para mejor o para peor, Comencemos, entonces, por lo que
durante el Renacimiento europeo, tenemos más cerca: el eurocentrismo
habría de introducirse un vuelco en la filosofía. La filosofía europeo-
radical en la organización mundial. occidental ha sido calificada de
Como sea, es un hecho que durante "etnocéntrica" en general y de "euro-
el Renacimiento se produce un giro céntrica" en particular en múltiples
tan significativo en el contexto global oportunidades y por un significativo
que a la larga habría de conformarse número de autores; pero, ¿qué se está
un nuevo "Sistema-Mundo" en el que diciendo cuando se utiliza en el caso
Europa ocupará el centro. La Euro- de la filosofía este calificativo?
pa feudal, que hasta el siglo XV era
atrasada, bárbara, periférica, transita Una respuesta expresa se puede
a partir de entonces hacia una nueva encontrar en la Declaración de More-
etapa de su historia: época que llama Jia. Allí se describe el discurso filo-
Modernidad y que se abre con el sófico europeo-occidental en términos
Renacimiento. Como dice Amín, el de una filosofía eminentemente etno-
Renacimiento es"(. .. ) el punto de par- céntrica, puesto que "hace suponer el
tida de la conquista del mundo por la destino manifiesto de un conjunto de
Europa capitalista" , porque es enton- pueblos para imponer su dominación
ces que "(. .. ) los europeos se forman al resto del mundo", caracterizándo-
una conciencia nueva", "Europa toma , se por una "negación parcial de la
conciencia del alcance universal de ! humanidad" y por la "confirmación

-344-
__l_()_sé G. SantosHerceg .

de una determinada superioridad, el texto que viene antes del texto de


o inferioridad" que "justifica (. .. ) la la humanidad, que se muestra a sí
dependencia de unos pueblos en ex- misma en su múltiple heterogenei-
clusivo beneficio de otros". El origen dad) al status de verdadera historia
de dicho discurso eurocéntrico estaría humana per excellence".
en el "ego europeo que se constituyó
desde un principio en voluntad de Centro de la Historia y centro
poder". Un destino de dominación del Mundo. Uno de los signos más
y una estrategia de negación vehicu- potentes de eurocentrismo -y tal vez
ladas mediante la dualidad superio- uno de los primeros- es, como lo ha
ridad-inferioridad y fundadas en un hecho ver José Rábasa, la proyección
determinado ego que se traduce en vo- utilizada para la confección del Atlas
luntad de poder, serían los supuestos de Mercator. Allí puede verse cómo
a-temáticos escondidos tras la filosofía la distribución del espacio obedece
europeo-occidental convirtiéndola en claramente a una priorización de Eu-
eurocéntrica. De esta descripción de la ropa, la que se sitúa en el centro y en
filosofía europea como filosofía euro- la parte superior del mapa, mientras
céntrica se desprenden los elementos que el resto de las regiones del globo
constituyentes del eurocentrismo: adquieren 'lugar' solo en tanto que se
(A) centralidad y conciencia de supe- relacionan con Europa, en tanto se
rioridad europea, (B) menosprecio y inscriben a ella de una u otra forma.
negación de lo otro y ( C) tendencia a El mapa, en tanto que pretende ser
la expansión y mundialización de la testimonio -más o menos objetivo- de
civilización cristiano-occidental. lo que existe en el mundo, da cuenta
de una determinada distribución ideo-
lógica -tergiversadora- del espacio.
A. Centralidad y Europa adquiere, así, una indiscutida
superioridad europea centralidad geográfica.

Europa se instala en el centro La centralidad de la cultura


de la "Historia Universal " o, para europeo-occidental está fundada en
decirlo con más exactitud, establece la conciencia de su "superioridad".
que ella es su centro, es decir, su Este es, de acuerdo con el mismo
comienzo y fin. Esto, a modo de pa- Serequeberhan, el "núcleo central
radigma, se expresa nítidamente en del eurocentrismo": "la creencia me-
la filosofía de la historia de Hegel: tafísica o la Idea de que la existencia
Asia es la génesis, su fase infantil; europea es cualitativamente superior
América es tal vez el futuro dada a otras formas de vida humana". Se
su "inmadurez"; África ni siquiera autodenomina "civilización" y se
cuenta, es una tierra sin historia. impone como "criterio", como "mo-
El mundo europeo-occidental se ha delo", "estándar", o "tipo". Su mundo,
situado a sí mismo en el corazón de en tanto que heredero directo de la
una historia universal que no es más cultura griega , será el espacio donde
que "su" propia historia. Como bien se dé el "Logos" y con ello el orden.
dice Serequeberhan, se "eleva la his- El paradigma de "Hombre" será el
toria europea, el pre-texto (es decir, hombre (no la mujer) europeo occi-

-345-
ETN 0-EUROCENTRISMO

dental (blanco) , dando con ello pie ! B. Menosprecio y


para el nacimiento de todo tipo de Negación
aberraciones . "(. .. ) [L]a existencia
humana es, hablando claramente, la El eurocentrismo se caracteri-
verdadera existencia humana per se". za por ser polarizante: en tanto que
Su religión será la fe cristiana; no en Europa, primero, y Estados Unidos
vano se autodenomina "civilización después, se transforman a sí mismos
cristiano-occidental. En términos de en el centro, reducen a todo el resto de
Samir Amín, su superioridad la atri- las regiones del globo a la periferia, al
buyen los europeos "a su europeidad, margen del mundo. El planeta queda
a su fe cristiana, a sus ancestros grie- así escindido: nosotros y los otros,
gos que redescubren en esta época" . civilizados y bárbaros, primer mundo
Nace así aquella "soberbia" propia de y tercer mundo, desarrollados-indus-
la cultura occidental de la que habla trializados y subdesarrollados, etc. La
Dussel. Se trata de una autoimagen, escisión no es neutra, sino que, como
de un "ego" que cae evidentemente se ve al analizar los nombres que se
en la desproporción. En tanto que utilizan, está cargada de valoración.
centro, civilización, logos, el mundo A lo que no es parte del "nosotros" se
europeo-occidental se instala en les llama "bárbaros", "tercermundis-
un plano de superioridad, transfor- tas", "subdesarrollados", entre otros
mándose a sí mismo en parámetro muchos calificativos que muestran
y referente. la evidente sub-valoración que el del
centro profesa hacia lo otro.
El plano de superioridad y
centralidad en que se instala el En el caso de América, a
mundo occidental se ve reafirmado, modo de ejemplo, Antonello Gerbi
reforzado por la opinión de aquellos recoge ciento cincuenta años de una
que quedan al margen, quienes pro- disputa tanto inverosímil como real
fesan una admiración en ocasiones que gira en torno a una acusación
insólita y exagerada por La civili- específica: "(. .. ) la de una supuesta
zación europeo-occidental. Es así inferioridad física del hemisferio
cómo en la periferia se aspira acrí- occidental, y de una consiguiente
ticamente a ser como los del centro. "debilidad" natural y constitucional
La imitación se da por todas partes de sus especies animales y de sus
reflejando una irrestricta sumisión pobladores, todos ellos condenados
a la evidente superioridad europea. por la naturaleza a una decadencia
Esto lleva a Hegel a señalar respecto irresistible, a una corrupción fatal".
de América Latina que "lo que aquí Para referir otro ejemplo paradig-
acontece no es hasta ahora más que mático -y también patético- basta
el eco del viejo mundo y el reflejo de aludir a las palabras de Hegel acerca
ajena vida" . Se copia con la triste e de África: "Entre los negros es, en
infundada esperanza de ser como el efecto, característico el hecho de que
europeo o el norteamericano; con su conciencia no ha llegado aún a
ello, no se hace más que alimentar y la intuición de ninguna objetividad
aumentar la hipertrofia de su ego a (. .. ). Es un hombre en bruto. (. .. )
costa del propio. Este modo de ser de los africanos

-346-
_José_G. Santos Herceg

explica que sea tan extraordinaria- más evidentes para el pensamiento fi-
mente fácil fanatizarlos (. .. ). África losófico se puede mencionar el hecho,
no tiene propiamente historia (. .. ). ya observado por Samuel Ramos, de
No es una parte del mundo históri- que el filósofo latinoamericano está
co; no presenta un movimiento ni un atormentado por una inseguridad y
desarrollo histórico (. ... )" . un "complejo de inferioridad" sim-
plemente abrumador que lo lleva a
En este contexto de menos- cuestionarse casi obsesivamente si
precio -que afecta a todo lo otro- es será efectivamente capaz de filosofar.
que junto a expresiones como "países Para resumir, en palabras de Enrique
sub-desarrollados", "Tercer Mundo" Dussel: "(. .. ) los filósofos de la pe-
surgen apelativos directamente in- riferia repiten una visión que les es
sultantes como son para el caso de extraña, que no les es propia: se ven en
América Latina los de "patio trasero", el centro como no ser, nada, y enseñan
"sudaca", etc. Fank Tannenbaum, en a sus discípulos, que todavía son algo
una especie de mea culpa algo tras- (. .. ) que en verdad nada son; que son
nochada, reconocía el "hecho de que nadas ambulantes de la historia" .
tratamos a los latinoamericanos como
inferiores". El menosprecio trasciende El menosprecio no es sólo
lo referente a la naturaleza, se extiende pasivo y adquiere, para usar una
acrítica y desmesuradamente a la po- terminología de la Declaración de
lítica, a la economía, a la constitución Morelia, el carácter de una "estrategia
social de los otros mundos abarcando de negación". Dicha negación de lo
aspectos culturales, alcanzando inclu- diferente ha llegado a tal punto que
so el ámbito del pensamiento filosófi- Rousseau escribe, con algo de dolor,
co. En este sentido, es que se ha dicho que "tras trescientos o cuatrocientos
de los filósofos latinoamericanos tanto años durante los cuales los habitantes
que su reflexión carece de "rigor" y de Europa han inundado las otras par-
"profesionalismo", achacándosele una tes del mundo y publicado sin cesar
"pobreza técnica" irreparable dada su nuevos libros de viajes y relatos, estoy
"juventud" y limitada e incompleta convencido de que lo únicos hombres
"formación", como que adolecen de que conocemos son los europeos" .
una falta completa de "genio filosófi- En este mismo sentido y aplicado al
co", producto, en opinión de algunos, continente americano, Enrique Dussel
de que su "raza" no está dotada para constata que "Hispanoamérica es un
las lides filosóficas . ámbito geopolítico totalizado, ani-
quilado en su exterioridad, deglutido
El menosprecio, hay que de- por el ser antropófago en nombre
cirlo expresamente, no viene sólo de de la civilización" . Para la filosofía,
Europa o Estados Unidos. Los mismos esto se verifica ya desde la llegada
latinoamericanos (tal vez esto se pue- de los españoles. La imposición de
da hacer extensivo también a todas las la filosofía europea en América pasa
ex colonias), presa del eurocentrismo por negar la reflexión que existía en el
del que son víctimas, compartirán y en continente a su llegada. Nuevo Mundo
algunos casos llevarán aun más lejos es "borrón y cuenta nueva". Ardiles lo
estos juicios. Entre las consecuencias dice con toda claridad: "Lo originario

-347-
ETNO-EUROCENTRISMO

precolombino es velado, desde el de la sacralización misma del poder


primer momento del encuentro con imperial del Norte o el Centro sobre
el pensar nord-atlántico, en función el Sur, la periferia, el antiguo mundo
de los intereses de dominación". La colonial y dependencia" .
filosofía europea se deja caer sobre el
pensamiento indígena aplastándolo, Un ejemplo paradigmático de
eliminándolo, dejándolo sin voz, sin esta racionalidad se encuentra en los
lugar, sin derecho siquiera a reivin- fundamentos para la conquista españo-
dicar su condición de pensamiento la del Nuevo Mundo argüidos por Juan
filosófico. La filosofía traída de Europa Ginés de Sepúlveda. La argumentación
"hizo -en palabras de Ardiles nue- se basa en la "superioridad natural" de
vamente- tabula rasa de la tradición los prudentes -españoles- y la "inferio-
cultural autóctona" . ridad -igualmente- natural" de los indí-
genas. La inferioridad de los "bárbaros"
-nombre con que se refiere a ellos
C. Expansión y siempre- se pone de manifiesto en dos
Mundialización cosas: su "torpeza de entendimiento"
y sus "costumbres inhumanas" . Estos
La superioridad de la cultura "hombrecillos" -nombre que también
occidental y la consecuente inferiori- utiliza para hablar de los indios-, por
dad del resto del mundo -ambas claras una parte, carecen de cultura, de cien-
deformaciones ideológicas- funda- cia, de escritura, de historia, no tienen
mentarían, justificarían, la universa- leyes escritas, lo que demuestra su
lización de la primera, su expansión falta de racionalidad, y, por otra, son
planetaria. Al igual que en todo et- antropófagos, hacen sacrificios huma-
nocentrismo, el problema se agudiza nos, tienen cultos impíos a ídolos, lo
cuando dicha universalización es si- que prueba que sus costumbres son
nónimo de "imposición" y, con ello, el inhumanas. Son irracionales, por lo
discurso se desplaza hacia conceptos tanto, por no poseer una "educación"
de dominio, conquista, colonización. y una "cultura" semejante a la europea,
La supuesta superioridad estaría en y son inhumanos por no adecuarse al
el fondo de aquel "destino manifiesto modelo de humanidad de Europa. Esto
de dominación" del que se habla en la los hace inferiores y, por ello, determi-
Declaración de Morelia. Nuevamente nados por naturaleza a estar al servicio
Hegel. El concepto aquí es el de "Wel- de otros: los superiores, los racionales,
therrscher" (Dominador del mundo) los verdaderos hombres. Amparado en
que le corresponde a aquel que en un la autoridad de Aristóteles, el autor sos-
época determinada es el "portador del tiene que los bárbaros deben someterse
Espíritu del mundo" (Trager des Welt- sin discusión a los prudentes, esto es,
geistes). El pueblo del Norte, Europa, los españoles: si no es por las buenas,
tiene, por ello, un "derecho absoluto", tendrá que ser por las malas.
y ante él todos los otros pueblos no
tienen derecho alguno (rechtlos). Lo "prudente" y "superior"
Como bien ha dicho Dussel, en Hegel de los españoles, por su parte, es la
puede encontrarse "la mejor defini- razón por la cual son ellos los llama-
ción no sólo de eurocentrismo, sino dos a ser los señores de los indíge-

-348-
José G. Santos Herceg__ _

nas. La apología que hace Ginés de el 11 de septiembre de 2001, lejos de


Sepúlveda de los españoles, sin que apaciguar a los norteamericanos, no
pretendamos desconocer las virtudes ha hecho más que enardecer y poner
de este pueblo, raya definitivamente en evidencia su "Americano-centris-
en el fanatismo. Según él, ensalza y mo" o, más bien, "Americanismo" . La
eleva a los españoles el que posean desproporción de su ego se pone ya de
figuras culturalmente excelsas, su manifiesto a los pocos días de la trage-
gran poder bélico, y las virtudes de la dia, cuando el presidente G.W. Bush
templanza, la frugalidad, la sobriedad, interpreta el hecho como una ataque
la fortaleza, la prudencia, el ingenio, la contra el progreso, el pluralismo, la
mansedumbre y la religiosidad acom- tolerancia, y la libertad, haciendo
pañada de sentimientos humanitarios. de Estados Unidos el depositario
La conclusión es, por lo tanto, "que por antonomasia de dichos valores
con perfecto derecho los españoles e instituyéndose, al mismo tiempo,
imperan sobre estos bárbaros del en su "guardián". A esta supremacía
Nuevo Mundo e islas adyacentes, los valórica se agrega la conciencia de su
cuales en prudencia, ingenio, virtud extraordinaria y efectiva superioridad
y humanidad son tan inferiores a los bélica y por tanto política: una suerte
españoles" . Es más, lo mejor que les de "Super-leviatán" como lo llama
puede ocurrir a los bárbaros será, a Fred Dalmayr. Superioridad bélica y
su juicio, el ser conquistados por los pretendida superioridad valórica que
españoles, e insiste, una y otra vez, en queda sellada con un componente teo-
el hecho de que los mayores beneficia- lógico: la supremacía norteamericana
dos con la conquista son los indianos. está definitivamente sancionada .
"¿ Qué cosa pudo suceder a estos
bárbaros más conveniente ni más De la mano de la conciencia
saludable que el quedar sometidos al de superioridad, el menosprecio de
imperio de aquellos cuya prudencia, Estados Unidos por el resto del mundo
virtud y religión los han de convertir se hace evidente no sólo en la forma
de bárbaros, tales que apenas merecían como ha manejado su relación con los
el nombre de seres humanos, en hom- países que Bush considera parte del
bres civilizados en cuanto pueden ser- "eje del mal", en particular Irak, sino
lo; de torpes y libidinosos, en probos también en la manera en que Estados
y honrados; de impíos y siervos de los Unidos lleva sus relaciones con todo
demonios, en cristianos y adoradores el resto del mundo. En este sentido,
del verdadero Dios 1 " se puede mencionar la actitud con
que se condujeron las conversaciones
Casi cinco siglos después, en en la ONU previas a la guerra contra
el umbral de un nuevo milenio, la Irak, la forma como se manejaron las
conciencia de superioridad valórica relaciones bilaterales (particularmente
y bélica, unida al menosprecio por sorprendente resulta la manera como
los otros pueblos están nuevamente se ha tratado a los países de la "vieja"
detrás del hecho de que una nación Europa como la llamó Ramsfield), y,
-esta vez Estados Unidos- dé rienda en definitiva, como simplemente se
suelta a sus intereses expansionistas . han ignorado las resoluciones de los
El atentado contra las torres gemelas organismos internacionales y se ha

-349-
ETNO-EUROCENTRISMO

actuado militarmente contra otro país liberarse del éP Lo que interesa, por
de forma unilateral e injustificada. Es- lo tanto, es rastrear el origen del "con-
tados Unidos no tiene que dar cuentas tradiscurso" del eurocentrismo.
a nadie de sus acciones .
El lugar desde donde se evacua
La conciencia de superioridad este discurso ha sido tanto el centro
valórica y bélica, unida al menospre- mismo (Europa, Estados Unidos) la
cio por los otros pueblos y una suerte periferia o el margen Esta aclaración
de mandato divino -tal como se diera inicial permite confeccionar un pa-
en el caso de Sepúlveda- justifican el norama completo del contradiscurso
que Estados Unidos no ponga coto eurocéntrico así como hacer una
alguno a sus intereses expansionistas. comparación entre dichos discursos.
"Norteamérica" debe defender y llevar Por ahora, sin embargo, el rastreo se
a todos los rincones del mundo la limitará a uno solo de estos ámbitos
justicia y la libertad, la tolerancia y de crítica: el de los márgenes, el de
la democracia; tiene el poder efectivo la periferia, el tercer mundo, o si se
para hacerlo y Dios así lo ha querido. quiere, con más detalle, el de aquellos
Una vez más la "mission civilisatrice". lugares del globo que estuvieron y tal
Esto se ve con claridad en la idea ex- vez aún están sometidos a la "(neo)
presada por Powel, en el sentido de colonización", el de una exterioridad
que se pretende "remodelar el medio construida por el mismo eurocentris-
oriente", remodelarlo a su imagen mo: principalmente América Latina,
y semejanza, lo que, por supuesto, pero también África y la India.
cerrando un paralelo abismante con
el caso de la conquista de América, La crítica expresa, en general,
es lo mejor que podría pasarle a esa comienza recién en el último tercio
porción el mundo. del siglo XX. Sólo entonces se empie-
za a hablar, de hecho, del fenómeno
del eurocentrismo. En particular, en
CONCLUSIONES América Latina hay, sin embargo,
antecedentes de una tradición en este
sentido de muy antigua data. Según
Fijado el origen de este tipo de Enrique Dussel, de hecho, dicho
etnocentrismo propio de la cultura discurso contestatario ya tendría en
cristiano-occidental y delimitado a América cinco siglos de antigüedad,
grandes rasgos su concepto, habría desde que Antón de Montecinos
que preguntarse, para concluir, por criticara a los españoles por las in-
la toma de conciencia respecto del justicias cometidas contra los indios
fenómeno. ¿En que momento el "resto americanos y fuera secundado luego
del mundo" se percata de la invasión también con acciones por Bartolomé
europeizan te de la que es objeto? de Las Casas y, más tarde, desde la
¿ Cuándo comienza la imputación, la cátedra de Salamanca por Francisco
crítica, la acusación de la existencia de de Vitoria . Aunque en estos autores
un euro centrismo? y ¿ cuáles han sido no se puede hablar de un anti-euro-
las estrategias que se han utilizado centrismo, sin embargo, sí se trata de
para evadirlo, para desmarcarse, para un discurso crítico, antiesclavista y

-350-
~Jo_sé G. Santos Herceg

anti-violencia. Estos autores son, por América Latina. Este autor constituye
lo tanto, un antecedente remoto del un quicio, un punto de inflexión. En la
contradiscurso eurocéntrico. línea de los emancipadores mentales,
Maní ve claro que "el problema de la
De un discurso anti-eurocén- independencia no era el cambio de
trico -en particular antiespañol- se formas, sino el cambio de espíritu" ,
puede hablar, con propiedad, en el por ello es que "la colonia continuó
caso de los autores que Leopoldo Zea viviendo en la república". "Éramos -
ha llamado "próceres de la emancipa- señala- una máscara, con los calzones
ción mental": Lastarria, Echeverría, de Inglaterra, el chaleco parisiense,
Mora, Bilbao, Sarmiento, Montalvo, el chaquetón de Norte América y la
Gonzalez Prada, Caballero, Bello . montera de España". La propuesta
Para estos pensadores, después de la de Maní será, sin embargo, alejarse
emancipación política, la tarea aún de todo lo foráneo, dejar de lado lo
no está terminada. La liberación final europeo y transitar hacia lo propio:
de la servidumbre colonial pasa para hacia la propia historia, hacia los
ellos por "transformar la mentalidad valores originales que se manifiesten
de los hispanoamericanos, renovarlos en instituciones particulares. "La Uni-
completamente, revolucionar sus versidad europea ha de ceder a la Uni-
mentes", pues "España estaba en la versidad Americana", señala; "nuestra
mente y en los hábitos de los his- Grecia es preferible a la Grecia que no
panoamericanos". Estos pensadores es nuestra", sostiene más adelante.
parecen haber alcanzado a percibir "Nuestra América" es, por lo tanto,
la presencia de la colonización a un un texto central en el nacimiento del
nivel más profundo, al nivel de los contradiscurso eurocéntrico. Es, para
valores, de la cosmovisión: allí donde decirlo con Fornet-Betancourt, un
el etnocentrismo español había llega- "manifiesto" fundante de una tradi-
do a ser compartido por los mismos ción crítica latinoamericana.
americanos, por los colonizados. En
estos autores se da, sin duda, un con- A Maní lo sigue una serie de
tra-discurso hispano-céntrico, pero autores que, reaccionando contra
no se puede hablar todavía de una la imposición del Positivismo en
crítica al eurocentrismo, pues ellos América, sostienen la necesidad de
entienden la ansiada autonomía men- desmarcarse del colonialismo, de lo
tal simplemente como un desmarque que se llamó "nordomanía" o "Yan-
del influjo español: en algunos de ellos quimanía". En esta línea, se pueden
se percibe, de hecho, una admiración situar los trabajos de Rodó, Caso, Vas-
tan desmesurada del resto de Europa concelos, Mariátegui, Haya de la To-
(Francia, Inglaterra, Estados Unidos) rre, Ramos, Romero. En consonancia
que llegan a proponer abiertamente con la propuesta de Maní, el objetivo
imitarlos. será la búsqueda de la "originalidad
y autenticidad" en lucha permanente
El pensamiento del cubano contra la dominación espiritual. El
José Maní es un antecedente central enemigo, el objeto de crítica -el co-
en el surgimiento de un contradiscur- lonialismo- había destruido el legado
so eurocéntrico propiamente tal en cultural latinoamericano, su memo-

-351-
ETNO-EUROCENTRISMO

ria colectiva. En el trasfondo, estará dios Postcoloniales" y la difusión que


siempre el problema de la "Identidad ha tenido su obra. Hay que resaltar el
Latinoamericana". En el plano de la hecho de que se da una coincidencia
filosofía, un lugar central en este cami- relativa entre las fechas de surgi-
no es la búsqueda de un pensamiento miento de todas estas corrientes de
auténtica y originalmente latinoameri- pensamiento. La coincidencia no es,
cano; una larga discusión que culmina sin embargo, sólo temporal; todas ellas
con la famosa disputa entre Leopoldo parten de la misma constatación: la
Zea y Augusto Salazar Bondy. situación de sumisión y dominación
respecto de los parámetros teóricos y
La denuncia y el surgimiento culturales del primer mundo. Filosofía
de un contra-discurso experimentará de la Liberación, Estudios Subalternos
un salto cualitativo hacia finales de la y Postcoloniales tienen en común la
década del 60 del siglo XX, con el sur- denuncia y lucha contra el dominio
gimiento en América Latina de tres co- ideológico: el eurocentrismo.
rrientes de pensamiento: la Teoría de
la Dependencia, la Teología de la Libe- En los últimos años del siglo
ración y la Filosofía de la Liberación. XX, a partir de la reflexión del pensa-
Las tres, aunque surgen en ámbitos dor cubano Raúl Fornet-Betancourt,
del saber diferentes -ciencias sociales, surge una suerte de desplazamiento
teología y filosofía- están íntimamente de la Filosofía de la Liberación ha-
vinculadas. La denuncia y crítica de la cia lo que se ha llamado "Filosofía
situación de dependencia económica lntercultural" y que habría de ser,
y cultural junto con las consecuencias hasta hoy, el último hito en el inten-
que ello tiene para el pueblo latino- to de desmarque del eurocentrismo,
americano, especialmente para los no sólo para América Latina, sino
más pobres, constituye el núcleo de que a nivel global. Un desmarque
estas corrientes de pensamiento. Estos que pretende ser una "transforma-
movimientos críticos, sin embargo, no ción" completa de la relación entre
se dan solamente en América Latina. culturas. La posibilidad de dicha
En el contexto de la India es Ranajit transformación pasa por superar el
Guha -historiador hindú residente "monoculturalismo" dominante, su-
en Inglaterra y profesor en Essex- peración que no es negación (lo que
quien en la década de los 70 formó haría prevalecer el problema solo que
un grupo de trabajo que comenzó al revés, al modo de una inversión
a hacerse conocido bajo el nombre carnavalesca) sino superación en el
de South Asian Subaltern Studies. En sentido hegeliano (Aufheben): negar
el contexto africano, por su parte, la Europea como única voz dominan-
luego del antecedente ineludible que te y mantenerla como una voz entre
constituye la obra de Franz Fanon, se otras. La cultura europeo-occidental
puede constatar la existencia de una deja de ser centro (porque ya no hay
tradición crítica nada despreciable. un centro) y se convierte en una voz
El nombre de Eclwarcl Saicl, palestino más del "coro polifónico" que es el
radicado en Estados Unidos, también contexto mundial de las culturas.
debe destacarse, dacia su importancia Todo etnocentrismo quedaría así
en la formación de los llamados "Estu- superado, en tanto que tocia forma

-352-
José G. Santos Herceg

de "centrismo" habría de ser abolida propuesta, un proyecto, un programa


(una especie de mesa redonda). Se que, aunque está en marcha ya hace
trata, sin embargo, como el mismo varios años, está lejos de llegar a su
Fornet-Betancourt recalca, de una concreción.

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-3.54-
FEMINISMO
_ ___ ____ ___ _.t\na_~aría P~tugal____ _ __
Perú

. - - - - - - - - - - - - - Palabras Clave - - - - - - - - - - - ~
FILOSOFÍA DE LA LIBERACIÓN - TEORÍA CRÍTICA - ÉTICA
- ANTROPOLOGÍA - PSICOLOGÍA - NÚCLEO ÉTICO/MÍTICO
- SIMBOLISMO - SUJETO - CULTURA - MODERNIDAD
- ECOLOGÍA - PUEBLO - MESTIZAJE

INTRODUCCIÓN A partir de estas concepciones,


el accionar del Movimiento feminista
en América Latina se produce en dos
El feminismo es una propuesta dimensiones. La primera, referida a
de cambio civilizatorio destinada a la lucha por conseguir la igualdad
modificar radicalmente las relaciones en lo económico, en lo social y en
entre los géneros. A medida que las lo cultural. La segunda, más allá de
ideas feministas se vieron confronta- la igualdad, tiene como contenido la
das con la realidad en el curso de la construcción de una sociedad donde
historia, el sentido de esta lucha que quede superada la dicotomía hombre-
nació para reivindicar los derechos mujer. Es decir, "la desaparición histó-
de la mujeres, fue adquiriendo una rica de los géneros", según la teórica
dimensión más globalizadora por sus Marcela Lagarde. Una sociedad con
conexiones con otras luchas sociales. un principio de realidad nuevo e in-
En este sentido, el feminismo es un tegrador. Esto significa una ética, una
proyecto antipatriarcal y anticapita- cultura y formas de comportamiento
lista que ubica a las mujeres como
radicalmente distintos.
nuevos sujetos sociales, centrando
su análisis en la situación de opre-
sión del género femenino más allá
de lo económico y de un conjunto DELIMITACIÓN
de reformas legales, ya que critica HISTÓRICA
radicalmente a todos los sistemas
civiliza torios existentes basados en la Para entender hoy la génesis
supremacía de un género sobre otro. del feminismo y sus acciones en
Al mismo tiempo, plantea una trans- América Latina, es preciso señalar
formación integral de estos sistemas, sus antecedentes que se ubican a
lo que significa acabar, no sólo con mediados del siglo pasado. Las ideas
la opresión de las mujeres, sino del avanzadas de las capas ilustradas
género humano. dentro de procesos de modernización,

-355-
FEMINISMO

fuerte migración europea y cercanía casos del Partido Feminista Nacional


fronteriza con EE.UU. facilitarán la de Argentina y el Partido Nacional de
ejecución de políticas gubernamen- Argentina, ambos fundados en 1919.
tales a favor de la educación para las Dos años antes, un Congreso de Mu-
mujeres y la introducción de nuevos jeres reunido en La Habana, acuerda
conceptos culturales. fundar el Partido Nacional Feminista.
Un hecho singular ocurrido entre
Esta coyuntura será el marco 1914 y 1915 es el Congreso Feminista
para la presencia de una generación de Yucatán, México, donde las mujeres
de mujeres intelectuales que, a través se declaran "seres libres".
del periodismo, el libro o la tribuna
de conferencias, levantan un discurso Ciertamente que todas estas
emancipatorio, que por su contenido iniciativas y acciones no tuvieron las
y significación es precursor del fe- mismas características ni el mismo im-
minismo moderno. Muchas de ellas pacto de los movimientos sufragistas
fundan periódicos y revistas para pro- anglosajones. A menudo se trató de
pagar sus ideas feministas-sufragistas, pequeños grupos o de personas que
como la argentina Juana Manso con daban batalla a través del periodismo y
su O Jornal das Senhoras (Brasil, en en las salas de conferencias de institu-
1852) o la mexicana Laureana Wrigth, ciones culturales o benéficas, y por su-
quien a través de su revista Violetas de puesto las dirigentas y sus seguidoras
Anahuac, pide el voto para las mujeres eran intelectuales y profesionales de
(1887). clase media que planteaban un "femi-
nismo maternal", a partir de la idea de
Iniciado el siglo XX, la apari- realzar las cualidades de lo femenino:
ción de movimientos de reivindica- honestidad, paciencia, abnegación,
ción económica y cultural con raíces ternura. Desde esa visión, muchas
anarco-sindicalistas, socialistas e de las sufragistas latinoamericanas se
indigenistas, crearán las condiciones empeñaron en lograr que instituciones
para visibilizar la causa de las mujeres. y gobernantes tomaran conciencia de
De manera que la aparición de movi- la necesidad de educar a las mujeres
mientos que levantan las banderas del para sacarlas de la ignorancia por ser
derecho al voto, al acceso democrático ellas las educadoras de sus hijos. Pero
a la educación y el otorgamiento de en la medida que las ideas difundidas
derechos civiles y políticos, es paralela por los anarquistas y socialistas se
a la de otros movimientos de lucha cristalizan en la fundación de los
social: obreros e indígenas, luchas que partidos, esta visión maternalista <le!
algunas veces serán convergentes. feminismo empieza a ser superada o
desaparece por acción de las luchas
La existencia durante los años político-sociales que tiene que ver
veinte y treinta de los partidos de mu- con la incorporación de las mujeres
jeres es otro fenómeno de indudable a las fábricas y a los partidos políti-
importancia que pone de manifiesto el cos, especialmente a los de tendencia
protagonismo de las latinoamericanas socialista y marxista. En cuanto a la
por dar contenido político más ex- aparición del llamado "segundo femi-
plícito a sus demandas. Éstos son los nismo", éste se iniciará marcado por

-356-
__ Ana_~1aría Portugal

hechos fundamentales: Mayo del '68, es fundamental para transformar la


las luchas guerrilleras y el auge de la realidad, no es posible que no nos
nueva izquierda. Al mismo tiempo, la interese ... ". Teóricas feministas como
instauración de dictaduras militares la mexicana Marcela Lagarde están
en el Cono Sur, principalmente, y el empeñadas en reconceptualizar los
fenómeno del exilio, serán elementos contenidos del poder. Lagarde habla
desencadenantes que posibilitarán de una dimensión distinta del poder:
un proceso de toma de conciencia el poder como afirmación. Es decir, " ...
en un sector muy grande de mujeres poder para transformar las relaciones
de clase media que viene de vuelta sociales, para crear una sociedad de-
de la ortodoxia de los partidos en la mocrática, en la cual las demandas de
búsqueda de nuevas respuestas a sus cada uno de los sectores encuentren
necesidades y afectividad como mu- un espacio de resolución. Esto re-
jeres. Éste será el sentido fundacional quiere reglas de juego que garanticen
del "segundo feminismo" de los años la presencia de pluralidad de actores
setenta en América Latina. sociales; en síntesis, queremos poder
para construir una sociedad demo-
crática y participativa ... " (Documento
DELIMITACIÓN de Taxco).
CONCEPTUAL
El concepto de autonomía
como elemento constitutivo de todo
Tres son los aspectos centrales proceso de liberación, estuvo presen-
que el feminismo latinoamericano le- te desde el inicio del feminismo en
vanta en su accionar como movimien- América Latina. En los primeros mo-
to social: la reflexión sobre el poder, mentos fue un elemento crucial para
la reivindicación de la autonomía y la delimitar espacios y compromisos con
valoración de la diversidad. el mundo de la política oficial: los par-
tidos políticos; y al mismo tiempo para
La crítica al poder como expre- rescatar las dimensiones de lo privado,
sión de dominio, de exclusión y de un ámbito subjetivo y complejo atra-
autoritarismo, ha hecho que durante vesado por múltiples contradicciones.
mucho tiempo sectores del feminismo Por ello, la expresión más radical
tengan una visión negativa y de re- de ese período está contenida en la
chazo a toda opción de poder. " ... a las reivindicación del cuerpo, territorio
feministas no nos interesa el poder... ", oculto y despolitizado. El autocontrol
postura considerada un mito y que sobre la sexualidad y la procreación es
fue rebatida en el documento titulado una primera y central reivindicación
"Del amor a la necesidad", elaborado del feminismo que tiene sus raíces en
por un grupo de feministas durante el hecho de recuperar la condición
el "IV Encuentro Feminista Latino- humana de las mujeres como seres
americano y del Caribe" realizado en libres y autónomos.
Taxco, México, en 1987. Al dilucidar
con claridad el sentido del término Ya en el terreno de la concre-
poder, el documento establecía: "si cion política de estos principios, el
partimos de reconocer que el poder concepto de autonomía, tal como lo

-357-
FEMINISMO

señalan algunas teóricas feministas tos de exclusión en los tiempos en que


como Virginia Vargas y Wicky Mey- "ser feminista autónoma" era haber
nen, " ... debe considerarse como un renegado de la doble militancia, o
continuo multidimensional en vez cuando "ser feminista" requería pasar
de una condición particular. .. " 1 • Esta por los requisitos del "feministóme-
visión amplía considerablemente el tro". Esto dificultó -y aún dificulta-
sentido de autonomía porque no está una perspectiva más rica en matices
referida exclusivamente a las mujeres, y expresiones.
sino que tiene relevancia para otros
grupos marginados de la sociedad. En la actualidad, la hetero-
Otro aspecto de esta reflexión ubica geneidad de enfoques y propuestas
a la autonomía como la capacidad de venidas de diversas vertientes del
tener poder." ... La autonomía confron- Movimiento plantea algunos retos
ta e implica poder, pero no adquirido como los que fueron formulados en
a expensas de otros-otras, sino poder 1990 en el "V Encuentro Feminista
como capacidad para definir su pro- Latinoamericano y del Caribe"'. En
pia agenda; no habilita a las personas un documento que explicita el reco-
para tener poder sobre otros, sino a nocimiento y la búsqueda de la diver-
tener poder sobre su propia vida y su sidad como parte de una perspectiva
propio cuerpo ... Presupone por ello feminista, se consignan dos posturas
también límites claros (personales, básicas para abordarla: " ... desde la
grupales, políticos) que garantizan confianza, asumiendo que existe un
espacio propio de maniobra y cuotas proyecto común, el cual concretamos
de libertad; límites, en suma, que pro- a través de múltiples estrategias de
tegen a las personas de las presiones acción. Desde la confrontación clara
y fuerzas externas que actúan sobre y explícita, en respeto y con reglas
ellos/as ... " 2 • La multiplicidad de las de juego claras, con el juego de las
formas organizativas de las mujeres mayorías y las minorías, sin pretender
latinoamericanas ha convertido a la consensos. La confrontación es acá
práctica feminista en una expresión una práctica de crecimiento y a, an-
heterogénea marcada por diversidad ee ... "". Éste es, quizá el asunto más
de presencias étnicas, de clase, de crucial del feminismo latinoamerica-
edades, lugares geográficos, profesio- no en estos momentos, porque aquí el
nales, etc. El reconocimiento de esta sentido de la diferencia se hace carne
diversidad fue un proceso que en sus en la realidad de una América Latina
inicios estuvo marcado por sentimien- multiétnica y multicultural.

-358-
Ana María Portugal
- - - ~ - - -

NOTAS

1 Cf. Los trabajos de Virginia Vargas: Cómo cambiar el mundo sin perder-
nos. El movimiento de mujeres en el Perú y en América Latina, y Me-
ynen & Vargas: "La autonomía como estrategia", Mujeres en Acción.
2 Ibídem.
3 El feminismo en los '90: desafíos y propuestas, San Bernardo (Argentina),
1990.
4 Ibídem.

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Escritor y Crítico. Trabajó en la UNESCO y en la actualidad es profesor en la
Universidad de Zaragoza. Ha escrito, entre otros, Identidad cultural de Ibero-
américa en su narrativa (1986), La Reconstrucción de la Utopía (1998) y, Del
Canon a la periferia (2002)

ARPINI Adriana - Argentina,


Profesora de la Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina.Miembro
del CRICYT e investigadora del CONICET, especialista en el campo de la his-
toria de las ideas en América Latina. Ha compilado América Latina y la moral
de nuestro tiempo (1997), Otros Discursos, (2003).

CASTELO BRANCO Manoel- Brasil,


Profesor y político del Estado de Mina Gerais, y dirigente del Partido de los
Trabajadores en Brasil. Se ha especializado en antropología y filosofía política.
Su trabajo acerca de la filosofía de la liberación y la subjetividad se encuentran
en la Revista Eclesiástica Brasileña (1986-1988).

ELIZALDE Antonio - Chile,


Sociólogo, Rector de la Universidad Bolivariana de Santiago de Chile y Di-
rector de la Revista POLIS. Ha escrito diversos trabajos acerca del desarrollo
sustentable en América Latina, ca-autor de Desarrollo a escala humana: una
opción para el futuro (1986), Desarrollo humano y ética para la sustentatibilidad
(2003) y, Las nuevas utopías de la diversidad (2003).

FRAGOMENO Roberto - Costa Rica,


Profesor en el Instituto Tecnológico de Costa Rica, ha escrito, entre otros tex-
tos: La Utopía constituyente (2003).

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GARCÍA-HUIDOBRO Juan Edo. - Chile,
Profesor y Director del Dpto. de Educación de la Universidad Alberto Hurtado.
Fue Investigador del ClDE y Jefe de la Dirección de Educación General del
MINEDUC de Chile. Especialista en el ámbito de las políticas públicas y en
educación de adultos en América Latina. Ha escrito Alfabetización y educación
de adultos en la región andina; Las reformas latinoamericanas de la educación
para el siglo XXI y, La reforma educacional chilrna, ( 1999 junto a C. Cox)

GONZÁLEZ A. Luis José - Colombia,


Profesor del Centro de Enseñanza Descolarizada de la U. Santo Tomás de Bo-
gotá. Ha escrito varios libros colectivos acerca de filosofía latinoamericana. En-
tre sus libros de ética destacan: Ética latinoamericana (1983),Justicia y Derecho
en conflicto (1989) y, Ética ecológica (1991).

HINKELAMMERT Franzj. - Costa Rica,


Filósofo y economista alemán, Director del DEI de Costa Rica. Ha escrito di-
versos libros haciendo una crítica fílosófica y teológica de la economía neoli-
beral. Entre los más importantes se destacan: Crítica a la Razón Utópica ( 1984)
y, El nihilismo al desnudo (2001 ).

JACQUES Manuel - Chile,


Abogado, Profesor y Director de la Carrera de Derecho de la Universidad Bo-
livariana de Santiago de Chile. Presidente de la Asociación Chilena de Teoría
Crítica del Derecho y Derecho Alternativo. Presidente del Instituto Latinoame-
ricano de Servicios Legales - ILSA. Es Presidente de la Asociación latinoame-
ricana de Derecho Alternativo.

KERBER Guillermo - Uruguay/Suiza,


Especialista en ciencias religiosas, Jefe de Relaciones Internacionales y Coor-
dinador del Programa sobre la Verdad y Reconciliación del Consejo Mundial
de Iglesias, ha trabajado especialmente en el campo de la ética ecológica y la
filosofía política.

LIBANIO Joao - Brasil,


Profesor de la PUC de Rio de Janeiro y de otras universidades brasileñas. Teó-
logo especialista en los temas relativos a la consciencia crítica. Ha escrito entre
otros textos: A consciencia critica dos religiosos (1973), Fe e Política (1985) y,
los Conceptos: "Esperanza", "utopía", "resurrección" e "ideología" en Myste-
rium Liberationis, II (1990).

PARISI Alberto - Argentina,


Filósofo de la Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza. Actualmente es Di-
rector de la Maestría en Ciencias Sociales Universidad Nacional de Córdoba,
Argentina. Es autor de los siguientes libros: Filosofía y dialéctica (1979), Una
lectura latinoamericana de El Capital de Marx (1989) y, Formación y trabajo
(2001).

-362-
PARKER Cristián - Chile,
Profesor e investigador, Director de IDEA de la Universidad de Santiago de
Chile. Especialista en sociología de la cultura latinoamericana y de la Religión.
Entre sus libros La otra lógica, (1994), (Ed.) Ética, Democracia y Desarrollo
Humano (1998) y, Catolicismo, Globalización e Inculturación (2001).

PIZZI Jovino - Brasil,


Profesor del Instituto de Filosofía de la Universidad Católica de Pelotas. Espe-
cialista en teoría crítica, en especial acerca de la interpretación fenomenológica
y la teoría crítica del mundo de la vida. Ha escrito recientemente O conteúdo
moral do agir comunicativo. Uma análise sobre os limites do procedimentalismo
(2005) y, O Mundo da vida (2005).

PORTUGAL Ana María - Perú, Periodista y coordinadora del Programa de Comuni-


caciones y Publicaciones de ISIS Internacional - Santiago de Chile. Ca-funda-
dora del Centro de la Mujer Peruana "Flora Tristán" y ca-autora del libro: Ser
mujer en el Perú.

RUIZ Carlos - Chile,


Profesor e investigador de la Universidad de Chile, Coordinador del Programa
de Post-Grados de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad
de Chile. Profesor invitado en la Universidad de Puerto Rico. Su campo de
trabajo es la filosofía y la historia del pensamiento político, en especial el tema
de la democracia y la vida republicana. Ha escrito El Pensamiento Conservador
en Chile e, Identidades y sujetos. Para una discusión latinoamericana (2002).

SALAZAR Freddy - Colombia,


Profesor jubilado del Instituto de Filosofía de la Universidad de Antioquia,
especialista en filosofía moderna, especialmente en el pensamiento de Spinoza
y de Marx. Ha escrito artículos en diversas revistas, y un libro sobre Spinoza.

SALVAT Pablo - Chile,


Profesor e Investigador del Centro de Ética de la Universidad Alberto Hurtado
de Santiago de Chile, es especialista en el ámbito de la filosofía política, de
la ética y de la teoría de la Derechos Humanos. Ha escrito junto a Mifsud y
Lira, Historia, Política y Ética de la Verdad (2001) y, El porvenir de la Equidad
(2003).

SANTA CRUZ Eduardo - Chile,


Profesor y periodista. Profesor de la Universidad ARCIS y la Universidad de
Chile. Director del Programa de Comunicación y Cultura, del Centro de In-
vestigaciones Sociales de la Universidad ARCIS. Ha escrito entre otros Comu-
nicación: una alternativa popular (1985), Comunicación y conciencia de masas
(1986), Crónica de un encuentro: fútbol y cultura popular ( 1991 ), Origen y futuro
de una pasión (Fútbol, cultura y modernidad) (1996). La telenovela puertas aden-
tro. El discurso social de la telenovela chilena (2003).

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SANTOS José - Chile,
Profesor del Departamento de Filosofía y Humanidades de la Universidad Al-
berto Hurtado de Santiago de Chile. Especialista en el campo de la ética y la
religión en la filosofía kantiana. Traductor de Reflexiones sobre filosofía moral
(2004), ha publicado varios trabajos acerca del pensamiento latinoamericano.

SCHELKSHORN Hans - Austria,


Profesor de la Universidad de Viena -Austria. Es especialista en teoría política
y ética contemporánea, especialmente en el ámbito del diálogo entre la ética
del discurso y la ética de la liberación. Ha publicado en alemán: Ethih der
Befreiung (1992), Dishurs und Befreiung (1997), y recientemente ha hecho el
prefacio a Ética del discurso-Ética de la liberación (2004).

SIDEKUM Antonio - Brasil,


Profesor de la Universidad de UNISINOS, especialista en el pensamiento de
Emmanuel Levinas. Miembro de la Sociedad Sudamericana de Filosofía In-
tercultural, Co-fundador del Corredor de las Ideas y Director de la Editorial
Nova Harmonía. Ha escrito varios libros acerca del tema de la alteridad: Ethih
als Transzendenzerfahrung (1993), Ética e alterídade (2002) y, Compilador de
Alteridade e multiculturalismo (2003).

YERGARAJorge - Chile,
Profesor e investigador de la Universidad Bolivariana y de la Universidad de
Chile. Editor de la Revista POLIS. Áreas de especialización: epistemología,
filosofía política y estudios culturales. Ha publicado numerosos artículos en
revistas latinoamericanas y europeas.

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