Desarrollo Módulo 6, Fundamento de Transparencia y Ética para El Servidor Público

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 64

UNIVERSIDAD DE PANAMÁ

FACULTAD DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

DIPLOMADO “ACTUALIZACION EN CONTRATACIONES


PÚBLICAS”.

MÓDULO No.6: FUNDAMENTO DE TRANSPARENCIA Y ÉTICA


PARA EL SERVIDOR PÚBLICO

CONTENIDO TEMÁTICO

I. NORMAS GENERALES DE TRANSPARENCIA EN LA


GESTIÓN PÚBLICA.
Hábeas Data “Ley 6 de 22 de enero de 2002”

La Ley 6 de 22 de enero de 2002, que dicta las normas para la


transparencia en la gestión pública, establece la acción de Hábeas
Data y dicta otras disposiciones; se alcanza un largo anhelo de la
ciudadanía, que aspira y demanda permanentemente el manejo y
administración claro y transparente de los fondos y bienes públicos,
tiene el libre acceso a información pública de toda agencia o
dependencia del Estado y garantizar el derecho que tiene toda
persona para solicitar y recibir información veraz y oportuna, en poder
de las autoridades gubernamentales de Panamá.
 El Habeas data es el derecho a solicitar información de acceso
público, que se encuentre en poder de instituciones o empresas
privadas que brinden un servicio público.

 La función pública en Panamá es organizar, con base en la Ley,


los procesos del personal que ha de entrar al servicio público y
poner, luego, esos recursos humanos a disposición de los
funcionarios administrativos en quienes reside la facultad
ejecutiva de nombrar y remover el personal.

DEFINICIONES

Para efectos de la aplicación e interpretación de esta Ley, los


siguientes términos se definen así:

1. Código de Ética: Conjunto de principios y normas de obligatorio


cumplimiento, con recomendaciones que ayudan a los miembros de
una organización a actuar correctamente.
2. Derecho de libertad de información: Aquel que tiene cualquier
persona de obtener información sobre asuntos en trámites, en curso,
en archivos, en expedientes, documentos, registros, decisión
administrativa o constancias de cualquier naturaleza en poder de las
instituciones incluidas en la presente Ley.

3. Ética: Conjunto de reglas, principios y modelos de conducta que


responden a criterios de corrección y de racionalidad que se identifican
con un código de buen gobierno.

4. Información: Todo tipo de datos contenidos en cualquier medio,


documento o registro impreso, óptico, electrónico, químico, físico o
biológico.

5. Información confidencial: Todo tipo de información en manos de


agentes del Estado o de cualquier institución pública que tenga
relevancia con respecto a los datos médicos y psicológicos de las
personas, la vida íntima de los particulares, incluyendo sus asuntos
familiares, actividades maritales u orientación sexual, su historia penal
y policivo, su correspondencia y conversaciones telefónicas o aquellas
mantenidas por cualquier otro medio audiovisual o electrónico, así
como la información pertinente a los menores de edad. Para efectos
de esta Ley, también se considera como confidencial la información
contenida en los registros individuales o expedientes de personal o de
recursos humanos de los funcionarios.
6. Información de acceso libre: Todo tipo de información en manos
de agentes del Estado o de cualquier institución pública que no tenga
restricción.

7. Información de acceso restringido: Todo tipo de información en


manos de agentes del Estado o de cualquier institución pública, cuya
divulgación haya sido circunscrita únicamente a los funcionarios que la
deben conocer debido a sus atribuciones, de acuerdo con la ley.

8. Institución: Toda agencia o dependencia del Estado, incluyendo


las pertenecientes a los Órganos Ejecutivo, Legislativo y Judicial, el
Ministerio Público, las entidades descentralizadas, autónomas y
semiautónomas, la Autoridad del Canal de Panamá, los municipios, los
gobiernos locales, las juntas comunales, las empresas de capital
mixto, las cooperativas, las fundaciones, los patronatos y los
organismos no gubernamentales que hayan recibido o reciban fondos,
capital o bienes del Estado.

9. Persona: Cualquier persona, ya sea natural o jurídica, que actúa en


nombre propio o en nombre de un tercero.

10. Principio de acceso público. Derecho que tiene toda persona


para solicitar y recibir información veraz y oportuna, en poder de las
autoridades gubernamentales y de cualquier institución a la que haga
mención esta Ley, en especial tratándose de su información personal.
11. Principio de publicidad: Toda la información que emana de la
administración pública es de carácter público, por lo cual el Estado
deberá garantizar una organización interna que sistematice la
información, para brindar acceso a los ciudadanos y también para su
divulgación a través de los distintos medios de comunicación social y/o
Internet.

12. Rendición de cuentas: Obligación de todo servidor público de


responsabilizarse individualmente de sus actos en el ejercicio de sus
funciones y en la comunicación de los resultados de su gestión ante la
sociedad. Esta obligación de rendir cuentas también les corresponde a
los cuerpos directivos colegiados de las instituciones públicas.

13. Transparencia: Deber de la administración pública de exponer y


someter al escrutinio de la ciudadanía la información relativa a la
gestión pública, al manejo de los recursos que la sociedad le confía, a
los criterios que sustentan sus decisiones y a la conducta de los
servidores públicos.

A. Derecho de Libertad de Información.

Aquel que tiene cualquier persona de obtener información sobre


asuntos en trámites, en curso, en archivos, en expedientes,
documentos, registros, decisión administrativa o constancias de
cualquier naturaleza en poder de las instituciones incluidas en la
presente Ley.
Toda persona tiene derecho a solicitar, sin necesidad de sustentar
justificación o motivación alguna; la información de acceso público en
poder o en conocimiento de las instituciones indicadas en la presente
Ley.

Las empresas privadas que suministren servicios públicos con carácter


de exclusividad están obligadas a proporcionar la información que les
sea solicitada por los usuarios del servicio, respecto a éste.

Toda persona tiene derecho a obtener su información personal


contenida en archivos, registros o expedientes que mantengan las
instituciones del Estado, y a corregir o eliminar información que sea
incorrecta, irrelevante, incompleta o desfasada, a través de los
mecanismos pertinentes.

B. Información de Acceso Libre.

Es de acceso libre; todo tipo de información en manos de agentes del


Estado o de cualquier institución pública que no tenga restricción.

El acceso público a la información será gratuito en tanto no se requiera


la reproducción de esta. Los costos de reproducción de la información
estarán a cargo del solicitante.

En todo caso, las tarifas cobradas por la institución deberán incluir


únicamente los costos de reproducción. La información será
suministrada en copia simple, o en su reproducción digital, sonora,
fotográfica, cinematográfica o videográfica, según se peticione y sea
técnicamente factible. Para los efectos de prestar el servicio de acceso
por medio de Internet, las instituciones deberán prever una oficina de
consulta que tenga los medios electrónicos indispensables para
ofrecer un servicio de acceso de calidad.

Esto se podrá lograr también por medio de kioscos de información que


hayan previsto las distintas instituciones.

Cuando la información solicitada sea requerida de manera certificada,


el peticionario deberá cumplir, para los efectos de las formalidades y
de los costos, con las disposiciones legales que rigen la materia.

La petición se hará por escrito en papel simple o por medio de correo


electrónico, cuando la institución correspondiente disponga del mismo
mecanismo para responderlo, sin formalidad alguna, ni necesidad de
apoderado legal, detallando en la medida de lo posible la información
que se requiere, y se presentará en la oficina asignada por cada
institución para el recibo de correspondencia. Recibida la petición,
deberá llevarse de inmediato al conocimiento del funcionario a quien
se dirige. Las solicitudes deberán contener lo siguiente:

1. Nombre del solicitante.


2. Número de cédula de identidad personal.
3. Dirección residencial o de su oficina.
4. Número telefónico donde puede ser localizado.
El funcionario receptor tendrá treinta días calendario a partir de la
fecha de la presentación de la solicitud, para contestarla por escrito, y,
en caso de que ésta no posea el o los documentos o registros
solicitados, así lo informará. Si el funcionario tiene conocimiento que
otra institución tiene o pueda tener en su poder dichos documentos o
documentos similares, estará obligado a indicárselo al solicitante. De
tratarse de una solicitud compleja o extensa, el funcionario informará
por escrito, dentro de los treinta días calendario antes señalados, la
necesidad de extender el término para recopilar la información
solicitada.

En ningún caso, dicho término podrá exceder de treinta días


calendarios adicionales. Se deberá prever un mecanismo claro y
simple de constancia de la entrega efectiva de la información al
solicitante, que puede hacerse también a través de correo electrónico
cuando se disponga de tal facilidad y, en todo caso, cuando la solicitud
hubiere sido presentada por esa vía.

En caso de que la información solicitada por la persona ya esté


disponible al público en medios impresos tales como libros,
compendios, trípticos, archivos públicos de la administración, así como
también en formatos electrónicos disponibles en Internet o en
cualquier otro medio, se le hará saber la fuente, el lugar y la forma en
que puede tener acceso a dicha información previamente publicada.

C. Principio de Publicidad.
Toda la información que emana de la administración pública es de
carácter público, por lo cual el estado deberá garantizar una
organización interna que sistematice la información, para brindar
acceso a los ciudadanos y también para su divulgación a través de los
distintos medios de comunicación social y/o internet.

Las instituciones del Estado están obligadas a brindar, a cualquier


personal que lo requiera, información sobre el funcionamiento y las
actividades que desarrollan, exceptuando únicamente las
informaciones de carácter confidencial y de acceso restringido.

En atención al principio de publicidad, las instituciones del Estado


están obligadas a tener disponible en forma impresa, en sus
respectivos sitios en Internet y a publicar periódicamente, información
actualizada respecto de los temas, documentos y políticas que a
continuación se detallan:

1. El reglamento interno actualizado de la institución.

2. Las políticas generales de la institución, que formen parte de su


plan estratégico.

3. Los manuales de procedimientos internos de la institución.

4. La descripción de la estructura organizativa de la institución.

5. La ubicación de documentos por categorías, registros y archivos


de la institución, y el funcionario responsable de éstos.
6. La descripción de los formularios y reglas de procedimiento para
obtener información de la institución y dónde pueden ser
obtenidos.

Las instituciones públicas que tienen páginas electrónicas, además de


los boletines, estarán obligadas a publicar a través de Internet la
información que obliga la presente Ley.

La Contraloría General de la República deberá publicar un informe


sobre la ejecución presupuestaria, a más tardar dentro de los treinta
días posteriores a dicha ejecución.

El Ministerio de Economía y Finanzas deberá publicar un informe


sobre la ejecución presupuestaria, a más tardar dentro de los treinta
días posteriores a tal ejecución.

El Estado informará a quien lo requiera sobre lo siguiente:

1. Funcionamiento de la institución, decisiones adoptadas y la


información relativa a todos los proyectos que se manejen en la
institución.
2. Estructura y ejecución presupuestaria, estadística y cualquier
otra información relativa al presupuesto institucional.
3. Programas desarrollados por la institución.
4. Actos públicos relativos a las contrataciones públicas
desarrolladas por la institución.

El Ministerio de Economía y Finanzas y la Contraloría General de la


República deberán presentar y publicar trimestralmente un informe
sobre la ejecución presupuestaria del Estado, dentro de los treinta días
siguientes a cada trimestre, el cual deberá tener, como mínimo la
siguiente información:

1. Desenvolvimiento del Producto Interno Bruto por sector.

2. Comportamiento de las actividades más relevantes por sector.

Será de carácter público y de libre acceso a las personas interesadas,


la información relativa a la contratación y designación de funcionarios,
planillas, gastos de representación, costos de viajes, emolumentos o
pagos en concepto de viáticos y otros, de los funcionarios del nivel que
sea y/o de otras personas que desempeñen funciones públicas.

D. Rendición de Cuentas.

Obligación de todo servidor público de responsabilizarse


individualmente de sus actos en el ejercicio de sus funciones y en la
comunicación de los resultados de su gestión ante la sociedad. Esta
obligación de rendir cuentas también les corresponde a los cuerpos
directivos colegiados de las instituciones públicas.

Anualmente, todas las instituciones públicas incorporarán, en las


memorias que presentarán al Órgano Legislativo, un informe que
contendrá lo siguiente:

1. El número de las solicitudes de información presentadas a la


institución.
2. El número de solicitudes resultas y negadas.

3. Una lista de todos los actos administrativos sometidos a


participación ciudadana con un informe de las observaciones y
decisiones finalmente adoptadas.

Dentro de un plazo no mayor de seis meses, contado a partir de la


entrada en vigencia de esta Ley, toda agencia o dependencia del
Estado, incluyendo las pertenecientes a los Órganos Ejecutivo,
Legislativo y Judicial, las entidades descentralizadas, autónomas y
semiautónomas, los municipios, los gobiernos locales y las juntas
comunales, de no tenerlos, establecerán y ordenarán la publicación en
la Gaceta Oficial de sus respectivos Códigos de Ética para el correcto
ejercicio de la función pública, los cuales deberán incluir, entre otros,
los siguientes aspectos:

1. Declaración de valores.

2. Conflicto de intereses.

3. Uso adecuado de los recursos asignados para el desempeño de


la función pública.

4. Obligación

E. Transparencia.

Deber de la Administración Pública de exponer y someter al escrutinio


de la ciudadanía la información relativa a la Gestión Pública, al manejo
de los recursos que la sociedad le confía, a los criterios que sustentan
sus decisiones y a la conducta de los servicios públicos.

F. Información Confidencial y de Acceso Restringido

La información definida por la presente Ley como confidencial no


podrá ser divulgada, en ninguna circunstancia, por agentes del Estado.

En el caso de que la información de carácter confidencial sea parte de


procesos judiciales, las autoridades competentes tomarán las
provisiones debidas para que dicha información se mantenga
reservada y tengan acceso a ella únicamente las partes involucradas
en el proceso judicial respectivo.

La información definida por esta Ley como de acceso restringido no se


podrá divulgar, por un periodo de diez años, contado a partir de su
clasificación como tal, salvo que antes del cumplimiento del periodo de
restricción dejen de existir razones que justificaban su acceso
restringido.

Se considerará de acceso restringido, cuando así sea declarado por el


funcionario competente, de acuerdo con la presente Ley:

1. La información relativa a la seguridad nacional, manejada por los


estamentos de seguridad.
2. Los secretos o la información comerciales de carácter
confidencial, obtenidos por el Estado, producto de la regulación
de actividades económicas.

3. Los asuntos relacionados con procesos o jurisdiccionales


adelantados por el Ministerio Público y el Órgano Judicial, los
cuales sólo son accesibles para las partes del proceso, hasta
que queden ejecutoriados.

4. La información que versa sobre procesos investigativos


realizados por el Ministerio Público, la Fuerza Pública, la Policía
Técnica Judicial, la Dirección General de Aduanas, el Consejo
Nacional de Seguridad y Defensa, la Dirección de
Responsabilidad Patrimonial de la Contraloría General de la
República, la Dirección de Análisis Financiero para la Prevención
de Blanqueo de Capitales, la Comisión de Libre Competencia y
Asuntos del Consumidor y el Ente Regulador de los Servicios
Públicos.

5. La información sobre existencia de yacimientos minerales y


petrolíferos.

6. Las memorias, notas, correspondencia y los documentos


relacionados con negociaciones diplomáticas, comercia-les e
internacionales de cualquier índole.

7. Los documentos, archivos y transcripciones que naciones


amigas proporcionen al país en investigaciones penales,
policivas o de otra naturaleza.
8. Las actas, notas, archivos y otros registros o constancias de las
discusiones o actividades del Consejo de Gabinete, del
Presidente o Vicepresidentes de la República, con excepción de
aquellas correspondientes a discusiones o actividades
relacionadas con las aprobaciones de los contratos.

9. La transcripción de las reuniones e información obtenida por las


Comisiones de la Asamblea Legislativa, cuando se reúnan en el
ejercicio de sus funciones fiscalizadoras para recabar
información que podría estar incluida en los numerales
anteriores.

En caso de que las autoridades correspondientes que deba


continuarse el carácter de restringido de la información detallada en
este artículo corresponderán a los Órganos Ejecutivo, Legislativo o
Judicial, según sea el caso, emitir resoluciones por las cuales se
prorrogará hasta por un máximo de diez años adicionales, la
restricción sobre la información mencionada en este artículo. En
ningún caso el carácter de restringido podrá superar los veinte años,
contados a partir de la primera clasificación, procediendo la
divulgación de la información si antes del cumplimiento del periodo de
restricción adicional dejaren de existir las razones que justificaban tal
acceso restringido.

El proceso de terminación de la restricción al acceso de la información


opera de pleno derecho por el solo transcurso del tiempo, sin
necesidad de resolución o acto administrativo alguno.
En caso de que exista un documento que contenga en forma parcial
información cuyo acceso se encuentre restringido en los términos de
este artículo, deberá proporcionarse el resto de la información que no
esté exceptuada.

Los expedientes administrativos de carácter reservado, tales como los


que tienen relación con cuentas bancarias, información sobre
investigaciones o reportes de operaciones sospechosas relacionadas
con el blanqueo de capitales, menores de edad; los judiciales,
arbitrales y del Ministerio Público, se regirán por las normas de acceso
y de información contenidas en el Código Judicial, la legislación
bancaria y normas aplicables a la prevención y el combate del
blanqueo de capitales.

II. Decreto Ejecutivo No. 246 (De 15 de diciembre de 2004)


Código Uniforme de Ética de los Servidores Públicos.

Las disposiciones de este decreto son de obligatorio cumplimiento


para todos los funcionarios o servidores públicos, sin perjuicio de su
nivel jerárquico, que presten servicios en las diferentes instituciones
del gobierno central, entidades autónomas o semiautónomas, así
como las empresas y sociedades con participación estatal mayoritaria.
A. Principios Generales y Particulares de Ética.

Principios Generales.

PROBIDAD. El servidor público debe actuar con rectitud y honradez,


procurando satisfacer el interés general y desechando todo provecho o
ventaja personal, obtenido por sí o por interpósita persona. Tampoco
aceptará prestación o compensación alguna por parte de terceros que
le pueda llevar a incurrir en falta a sus deberes y obligaciones.

PRUDENCIA. El servidor público debe actuar con pleno conocimiento


de las materias sometidas a su consideración y con la misma
diligencia que un buen administrador emplearía para con sus propios
bienes, dado que el ejercicio de la función pública debe inspirar
confianza en la comunidad. Asimismo, debe evitar acciones que
pudieran poner en riesgo la finalidad de la función pública, el
patrimonio del Estado o la imagen que debe tener la sociedad
respecto de sus servidores.

JUSTICIA. El servidor público debe tener permanente disposición para


el cumplimiento de sus funciones y coadyuvará a la realización plena
de los derechos de que goza el ciudadano en sus relaciones con el
Estado.

TEMPLANZA. El servidor público debe desarrollar sus funciones con


respeto y sobriedad, usando las prerrogativas inherentes a su cargo y
los medios de que dispone únicamente para el cumplimiento de sus
funciones y deberes. Asimismo, debe evitar cualquier ostentación que
pudiera poner en duda su honestidad o su disposición para el
cumplimiento de los deberes propios de su cargo.
IDONEIDAD. La idoneidad, entendida como aptitud técnica, legal y
moral, es condición esencial para el acceso y ejercicio de la función
pública.

RESPONSABILIDAD. El servidor público, debe hacer un esfuerzo


honesto para cumplir cabalmente sus deberes. Cuanto más elevado
sea el cargo que ocupa un servidor público, mayor es su
responsabilidad para el cumplimiento de las disposiciones de este
Código Uniforme de Ética.

TRANSPARENCIA. El servidor público, salvo las limitaciones


previstas en la ley, garantizará el acceso a la información
gubernamental, sin otros límites que aquellos que imponga el interés
público y los derechos de privacidad de los particulares. También
garantizará el uso y aplicación transparente y responsable de los
recursos públicos, absteniéndose de ejercer toda discrecionalidad
respecto de los mismos.

IGUALDAD. El servidor público tendrá como regla invariable de


decisiones, el respetar la igualdad de oportunidades para todos los
ciudadanos y extranjeros residentes en el país, sin distingo de raza,
nacimiento, nacionalidad, discapacidad, clase social, sexo, religión o
ideas políticas.

RESPETO. El servidor público respetará, sin excepción alguna, la


dignidad de la persona humana y los derechos y libertades que le son
inherentes.

LIDERAZGO. El servidor público promoverá y apoyará con su ejemplo


personal los principios establecidos en este Decreto Ejecutivo.
Principios Particulares.

APTITUD: Quien disponga el nombramiento de un servidor público


debe comprobar que el escogido cumpla con todos los requisitos
dispuestos por la ley o los reglamentos para determinar su idoneidad
para el ejercido del cargo. Ninguna persona debe aceptar ser
nombrada en un cargo para el que no tenga aptitud.

CAPACITACIÓN: El servidor público debe capacitarse para el mejor


desempeño de las funciones inherentes a su cargo, según lo
determinan las normas que rigen el servicio o lo dispongan las
autoridades competentes.

LEGALIDAD: El servidor público debe sujetar su actuación a la


Constitución Nacional, las leyes y los reglamentos que regulan su
actividad, y en caso de duda procurará el asesoramiento
correspondiente. También debe observar en todo momento un
comportamiento tal que, examinada su conducta, ésta no pueda ser
objeto de reproche.

EVALUACIÓN: El servidor público debe evaluar los antecedentes,


motivos y consecuencias de los actos cuya generación o ejecución
tuviera a su cargo.

VERACIDAD: El servidor público está obligado a expresarse con


veracidad en sus relaciones funcionales, tanto con los particulares
como con sus superiores y subordinados, y a contribuir al
esclarecimiento de la verdad.

DISCRECIÓN. El servidor público debe guardar reserva respecto de


hechos o informaciones de los que tenga conocimiento con motivo o
en ocasión del ejercicio de sus funciones, sin perjuicio de los deberes
y las responsabilidades que le correspondan en virtud de las normas
que regulan el secreto o la reserva administrativa.

DECLARACIÓN JURADA PATRIMONIAL. El servidor público,


obligado para ello conforme el artículo 304 de la Constitución Política
de la República y las leyes que lo desarrollen, deberá presentar una
declaración jurada sobre su situación patrimonial y financiera.

OBEDIENCIA. El servidor público debe dar cumplimiento a las


órdenes que le imparta el superior jerárquico competente, en la
medida que reúnan las formalidades del caso y tengan por objeto la
realización de actos de servicio que se vinculen con las funciones a su
cargo, salvo el supuesto de arbitrariedad o ilegalidad manifiestas.

INDEPENDENCIA DE CRITERIO. El servidor público no debe


involucrarse en situaciones, actividades o intereses incompatibles con
sus funciones o que conlleven un conflicto de intereses. Debe
abstenerse de toda conducta que pueda afectar su independencia de
criterio para el desempeño de las funciones.

EQUIDAD. El empleo de criterios de equidad para adecuar la solución


legal a un resultado más justo nunca debe ser ejecutado en contra del
ordenamiento jurídico.

IGUALDAD DE TRATO. El servidor público no debe realizar actos


discriminatorios en su relación con el público o con los demás agentes
de la Administración. Debe otorgar a todas las personas igualdad de
trato en igualdad de situaciones. Se entiende que existe igualdad de
situaciones cuando no median diferencias que, de acuerdo con las
normas vigentes, deben considerarse para establecer una prelación.
Este principio se aplica también a las relaciones que el servidor
mantenga con sus subordinados.

EJERCICIO ADECUADO DEL CARGO. El ejercicio adecuado del


cargo involucra el cumplimiento personal del presente Código
Uniforme de Ética y el deber de procurar su observancia por parte de
sus subordinados. a El servidor público no debe obtener ni procurar
beneficios o ventajas indebidas, para sí o para otros, amparándose en
el uso de su cargo, autoridad, influencia o apariencia de influencia.
Tampoco debe adoptar represalias de ningún tipo o ejercer coacción
alguna contra funcionarios u otras personas, salvo que éstas se
enmarquen en el estricto ejercicio del cargo.

USO ADECUADO DE LOS BIENES DEL ESTADO. El servidor


público debe proteger y conservar los bienes del Estado. Debe utilizar
los que le fueran asignados para el desempeño de sus funciones de
manera racional, evitando su abuso, derroche o desaprovechamiento.
Tampoco puede emplearlos o permitir que otros lo hagan para fines
políticos o particulares, ni otros propósitos que no sean aquellos para
los cuales hubieran sido específicamente destinados. No se
consideran fines particulares las actividades que, por razones
protocolares o misiones especiales el servidor deba llevar a cabo fuera
del lugar u horario en los cuales desarrolla sus funciones.

USO ADECUADO DEL TIEMPO DE TRABAJO. El servidor público


debe usar el tiempo comprendido dentro de su horario de trabajo, en
un esfuerzo responsable para cumplir con sus quehaceres. Debe
desempeñar sus funciones de una manera eficiente y eficaz y velar
para que sus subordinados actúen de la misma manera. No debe
fomentar, exigir o solicitar a sus subordinados que empleen el horario
de trabajo para realizar actividades que no sean las que se les
requieran para el desempeño de los deberes a su cargo.
COLABORACIÓN. Ante situaciones extraordinarias, el servidor
público debe realizar aquellas tareas que resulten necesarias para
mitigar, neutralizar o superar las dificultades que se enfrenten, aunque
por su naturaleza o modalidad, dichas tareas no sean las
estrictamente inherentes a su cargo.

USO DE INFORMACIÓN. El servidor público no debe utilizar, en


beneficio propio o de terceros o para fines ajenos al servicio,
información de la que tenga conocimiento con motivo o en ocasión del
ejercicio de sus funciones y que no esté destinada al público en
general. Tampoco debe utilizar, en beneficio 12 Código de Ética propio
o de terceros, información cuyo conocimiento otorgue una ventaja
indebida, conduzca a la violación del ordenamiento jurídico o genere
una discriminación de cualquier naturaleza.

OBLIGACIÓN DE DENUNCIAR. El servidor público debe denunciar


ante su superior o ante las autoridades correspondientes aquellos
actos de los que tuviera conocimiento con motivo o en ocasión del
ejercicio de sus funciones y que pudieran causar perjuicio al Estado o
constituir un delito o violaciones a cualquiera de las disposiciones
contenidas en el presente Código.

DIGNIDAD Y DECORO. El servidor público debe observar una


conducta digna y decorosa, actuando con sobriedad y moderación. En
su trato con el público y con los demás funcionarios, debe conducirse
en todo momento con respeto y corrección.
HONOR. El servidor público al que se le impute la comisión de un
delito contra la Administración Pública, debe facilitar la investigación y
colaborar con las medidas administrativas y judiciales dispuestas por
la autoridad competente para esclarecer la situación, a fin de dejar a
salvo su honra y la dignidad de su cargo.

TOLERANCIA. El servidor público debe observar, frente a las críticas


del público y de la prensa, un grado de tolerancia superior al que,
razonablemente, pudiera esperarse de un ciudadano común.

EQUILIBRIO. El servidor público debe actuar, en el desempeño de


sus funciones, con sentido práctico y buen juicio.

PROHIBICIONES GENERALES.
El servidor público no debe, directa o indirectamente, otorgar, solicitar
o aceptar regalos, beneficios, promesas u otras ventajas de los
particulares u otros funcionarios.
BENEFICIOS PROHIBIDOS.
El servidor público no debe, directa o indirectamente, ni para sí ni para
terceros, solicitar, aceptar o admitir dinero, dádivas, beneficios,
regalos, favores, promesas u otras ventajas en las siguientes
situaciones:

a. Para apresurar, retardar, hacer o dejar de hacer tareas relativas


a sus funciones;
b. Para hacer valer su influencia ante otro servidor público, a fin de
que éste apresure, retarde, haga o deje de hacer tareas relativas
a sus funciones;
c. Cuando resultare que no se habrían ofrecido o dado si el
destinatario
d. no desempeñara ese cargo o función.

PRESUNCIONES.
Se presume especialmente que el beneficio está prohibido si proviene
de una persona o entidad que:

a. Lleve a cabo actividades reguladas o fiscalizadas por el órgano o


entidad en el que se desempeña el servidor público;
b. Gestione o explote concesiones, autorizaciones, privilegios o
franquicias otorgados por el órgano o entidad en el que se
desempeña el servidor público;
c. Sea o pretendiera ser contratista o proveedor de bienes o
servicios de la institución en la cual se desempeña el servidor
público;
d. Procure una decisión o acción de la entidad en la que ejerce su
cargo el servidor público; otorgados por el órgano o entidad en el
que se desempeña el servidor público;
e. Tenga intereses que pudieran verse significativamente afectados
por una acción, decisión u omisión del órgano o entidad en la
que desempeñe funciones el servidor público.

EXCEPCIONES.
Quedan exceptuados de la prohibición establecida en el literal c) del
a) Los reconocimientos protocolares recibidos de gobiernos,
organismos internacionales o entidades sin fines de lucro, en las
condiciones en las que la ley o la costumbre oficial admitan esos
beneficios;
b) Los gastos de viaje y estadía recibidos de gobiernos, instituciones
de enseñanzas o entidades sin fines de lucro, para dictar o participar
en conferencias, cursos o actividades académico-culturales, siempre
que ello no resultara incompatible con las funciones del cargo o
prohibido por normas especiales;
c) Los regalos o beneficios que, por su valor exiguo, según las
circunstancias, no pudieran razonablemente ser considerados como
un medio tendiente a afectar la recta voluntad del servidor público.
EXCLUSIÓN.
Quedan excluidos de la prohibición establecida en los artículos
precedentes, los regalos de menor cuantía que se realicen por
razones de amistad o relaciones personales con motivo de
acontecimientos en los que resulta usual efectuarlos.

IMPEDIMENTOS POR RAZÓN DE LAS FUNCIONES


CONFLICTO DE INTERESES.

A fin de preservar la independencia de criterio y el principio de


equidad, el servidor público no puede mantener relaciones ni aceptar
situaciones en cuyo contexto sus intereses personales, laborales,
económicos o financieros pudieran estar en conflicto con el
cumplimiento de los deberes y funciones a su cargo.

Tampoco puede dirigir, administrar, asesorar, patrocinar, representar


ni prestar servicios, remunerados o no, a personas que gestionen o
exploten concesiones o privilegios o que sean proveedores del Estado,
ni mantener vínculos que le signifiquen beneficios u obligaciones con
entidades directamente fiscalizadas por el órgano o entidad en la que
se encuentre desarrollando sus funciones.

EXCUSA.
El funcionario público debe excusarse y abstenerse de participar en
todos aquellos casos en los que pudiera presentarse conflicto de
intereses y notificará tal circunstancia a su superior jerárquico.
NEPOTISMO.
El servidor público deberá abstenerse de beneficiar con
nombramientos en puestos públicos a su cónyuge, pareja de unión
consensual u otros parientes dentro del tercer grado de
consanguinidad o segundo de afinidad.

El servidor público también deberá abstenerse de ejercer la función


pública en la misma unidad administrativa o en unidades
administrativas que mantengan entre sí relaciones de control o
fiscalización, y en las que laboren personas incluidas en los
mencionados vínculos de parentesco, ya sean originales o
sobrevivientes, sin notificar tal situación oportunamente a su superior
jerárquico.

ACUMULACIÓN DE CARGOS.
Salvo en aquellos casos previstos en la Constitución Política de la
República o la ley, el servidor público que desempeñe un cargo en la
Administración Pública no podrá ejercer otro cargo remunerado en el
ámbito nacional o municipal.
PROHIBICIÓN DE CELEBRAR GESTIONES O TRÁMITES.
El servidor público no debe efectuar o patrocinar a favor de terceros,
trámites o gestiones administrativas, se encuentren o no directamente
a su cargo, ni celebrar contratos con la Administración, cuando tengan
vínculos con la entidad o institución en donde se desempeñe.

SANCIONES.
El servidor público que incurra en la violación de las disposiciones del
presente decreto, en atención a la gravedad de la falta cometida, será
sancionado administrativamente con amonestación verbal,
amonestación escrita, suspensión del cargo o destitución.

PROCEDIMIENTO.
En caso de violaciones al presente Código Uniforme de Ética los
responsables, de cada entidad, de oficio o a requerimiento de parte
interesada, deben instruir el procedimiento administrativo
correspondiente, de conformidad con las disposiciones contenidas en
el Título VII de la Ley No. 9 de 20 de junio de 1994; sin perjuicio de las
responsabilidades civiles y penales derivadas de la infracción.

En caso de determinarse la existencia de un hecho punible contra la


Administración Pública, el responsable de la entidad deberá poner el
hecho en conocimiento de la autoridad Ley 38 de 2000.
Procedimiento Administrativo General Responsabilidad del
servidor público.
III. Ley 38 de 2000. Procedimiento Administrativo General
Responsabilidad del servidor público.

Es la norma panameña: “Que aprueba el Estatuto Orgánico de la


Procuraduría de la Administración, Regula el Procedimiento
Administrativo General y Dicta Disposiciones Especiales”.

A. RESUMEN

La promulgación de la Ley 38 del 31 de julio de 2000 constituye un


antes y un después para el desarrollo del Derecho Administrativo en
Panamá. La tipificación de los principios reguladores de la
Administración Pública y de sus actuaciones, y la estructuración del
procedimiento administrativo y la justicia administrativa ha sido el
fundamento para la función pública y reguladora.

Palabras clave de esta Ley: Administración Pública, actos


administrativos, principio de legalidad, procedimiento administrativo,
silencio administrativo.

B. INTRODUCCIÓN.

La Ley 38 de 31 de julio de 2000 (en adelante, Ley 38 de 2000) es la


norma panameña que aprobó el Estatuto Orgánico de la Procuraduría
de la Administración; y, a su vez, regula el procedimiento
administrativo general. La Ley 38 de 2000 fue aprobada debido a la
necesidad de las instituciones del Estado de contar con directrices y
orientaciones claras para sus procedimientos administrativos, en
ausencia de leyes especiales, y como lo señala expresamente su
exposición de motivos al desarrollar los objetivos generales del
proyecto:

“Se establece un nuevo Estatuto Orgánico de la Procuraduría de


la Administración, el cual se inspira en la necesidad de
profundizar el rol de la entidad como defensora del Estado de
Derecho, organizándola desde una nueva visión y misión con la
sociedad, para prevenir las fallas administrativas, establecer una
redefinición institucional e incrementar su oferta de servicios a la
ciudadanía y al Estado.

Instituye nuevas reglas de procedimientos uniformes en las


Administración Pública, para fomentar la seguridad jurídica en el
país, minimizar las formalidades, procurar coherencia y
uniformidad en las gestiones de la Administración Pública, y
garantizar la aplicación de procedimientos administrativos
conforme al principio constitucional de legalidad”.

Dos décadas después de su entrada en vigencia, puede decirse que


estos objetivos generales fueron alcanzados con creces. Sin embargo,
la Ley 38 de 2000, no ha sufrido modificaciones sustanciales hasta la
fecha, y los nuevos tiempos requieren que esta norma sea revisada
para adaptarla a los “nuevos procedimientos administrativos”.

Procedimientos administrativos de tercera generación, donde se


contemple el uso de tecnología, mayor participación ciudadana,
divulgación y prevención, buen gobierno y el derecho a una buena
Administración, entre otros que forman parte del debate moderno
sobre lo que debería ser el procedimiento administrativo.
C. CONTENIDO DE LA LEY No. 38 de 31 de julio de 2000

LIBRO PRIMERO: ESTATUTO ORGÁNICO DE LA PROCURADURÍA


DE LA ADMINISTRACIÓN

 De La Organización

Disposiciones Generales, Funciones, Organización Administrativa,


Recurso Humano, Gestión Financiera y Régimen Patrimonial

LIBRO SEGUNDO: DEL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO


GENERAL.

Título I: DE LA DISPOSICIONES GENERALES

Las actuaciones administrativas en todas las entidades públicas se


efectuarán con arreglo a normas de informalidad, imparcialidad,
uniformidad, economía, celeridad y eficacia, garantizando la
realización oportuna de la función administrativa, sin menoscabo del
debido proceso legal, con objetividad y con apego al principio de
estricta legalidad. Los Ministros y las Ministras de Estado, los
Directores y las Directoras de entidades descentralizadas,
Gobernadores y Gobernadoras, Alcaldes y Alcaldesas y demás Jefes
y Jefas de Despacho velarán, respecto de las dependencias que
dirijan, por el cumplimiento de esta disposición. Las actuaciones de los
servidores públicos deberán estar presididas por los principios de
lealtad al Estado, honestidad y eficiencia, y estarán obligados a
dedicar el máximo de sus capacidades a la labor asignada.
Título II: DE LA INVALIDEZ DE LOS ACTOS
ADMINISTRATIVOS

Los actos administrativos no podrán anularse por causas distintas de


las consagradas taxativamente en la ley. Cuando se presente un
escrito o incidente que pretenda la anulación de un acto por una causa
distinta de las mencionadas en este Título, la autoridad competente lo
devolverá al interesado, le advertirá la causa de su devolución y le
concederá un término de ocho días hábiles para que, si lo tiene a bien,
presente el escrito corregido. Una vez expirado ese término, prelucirá
la oportunidad de repetir la misma gestión. Las otras irregularidades
del proceso, que la ley no erija en causal de nulidad, se tendrán por
saneadas si no se reclaman oportunamente por medio de los recursos
legales.

Título III: DE LA REVOCATORIA DE LOS ACTOS


ADMINISTRATIVOS

Las entidades públicas solamente podrán revocar o anular de oficio


una resolución en firme en la que reconozcan o declaren derechos a
favor de terceros, en los siguientes supuestos:
1. Si fuese emitida sin competencia para ello;
2. Cuando el beneficiario de ella haya incurrido en declaraciones o
haya aportado pruebas falsas para obtenerla;
3. Si el afectado consiente en la revocatoria; y
4. Cuando así lo disponga una norma especial.
En contra de la decisión de revocatoria o anulación, el interesado
puede interponer, dentro de los términos correspondientes, los
recursos que le reconoce la ley.
Título IV: DEL INICIO DE LOS PROCESOS

La iniciación de los procesos administrativos puede originarse de oficio


o a instancia de parte interesada. La iniciación ocurre de oficio cuando
se origina por disposición del despacho administrativo
correspondiente; y a instancia de parte cuando se accede a petición,
consulta o queja de la persona o personas que sean titulares de un
derecho subjetivo o de un interés legítimo.

Título V: DE LA ACTUACIÓN

Todos los términos de días y horas que se señalen en los procesos


administrativos comprenderán solamente los hábiles, a menos que
una norma especial disponga lo contrario y así se consigne en la
resolución respectiva. Los términos de meses y de años se ajustarán
al calendario común. Los términos de horas transcurrirán desde la
siguiente de aquélla en que se notificó a la persona interesada; los de
días, desde el siguiente a aquél en que se produjo dicha notificación.

Título VI: DE LA PRESENTACIÓN DE LAS PETICIONES,


CONSULTAS, DENUNCIAS Y QUEJAS

Toda petición que se formule a la Administración Pública para que


ésta reconozca o conceda un derecho subjetivo, debe hacerse por
escrito y contendrá los siguientes elementos:
1. Funcionario u organismo al que se dirige;
2. Nombre y señas particulares de la persona que presenta el
escrito, que deben incluir su residencia, oficina o local en que
puede ser localizada y, de ser posible, el número del teléfono y
de fax respectivo;
3. Lo que se solicita o pretende;
4. Relación de los hechos fundamentales en que se basa la
petición;
5. Fundamento de derecho, de ser posible;
6. Pruebas que se acompañan y las que se aduzcan para ser
practicadas; y
7. Lugar, fecha y firma de la persona interesada.

No requerirán el cumplimiento de las formalidades de este artículo, las


peticiones para la extensión de copias de documentos, suministro de
información sobre asuntos oficiales no reservados, extensión de
boletas de citación y otras que no justifiquen o den inicio a un proceso
administrativo .

Título VII: DE LAS NOTIFICACIONES Y CITACIONES

Las resoluciones que se emitan en un proceso en el que


individualmente haya intervenido o deba quedar obligado un particular,
deberán ser notificadas a éste.

Las resoluciones de mero trámite o de impulso procesal deberán ser


notificadas dentro de los dos días siguientes a la fecha en que fueron
proferidas; y las que ponen término a una instancia del proceso o que
deciden un recurso, dentro de los cinco días siguientes a la fecha de
su expedición.

Cuando se trate de resoluciones que ponen término a una instancia o


que decidan un recurso, las diligencias tendientes a la notificación
deben iniciarse, a más tardar, dentro de los cinco días siguientes a la
fecha de su emisión.

Título VIII: DE LOS INCIDENTES

En los procesos administrativos es viable la presentación de incidentes


para plantear cuestiones accesorias al proceso principal, siempre que
medien los presupuestos o requisitos señalados en la presente Ley.

Título IX: DE LAS PRUEBAS

Con anterioridad a la apertura del periodo de pruebas, el funcionario


que instruya el proceso convocará al peticionario y a las otras
personas que figuren como parte, en aras de la simplificación del
proceso, para considerar:
1. La conveniencia de puntualizar y simplificar los puntos
controvertidos;
2. La necesidad o conveniencia de corregir los escritos
presentados;
3. El saneamiento del procedimiento hasta ese momento;
4. La posibilidad de que la Administración Pública admita hechos y
documentos que hagan innecesaria la práctica de determinadas
pruebas;
5. La limitación del número de peritos; y
6. Otros asuntos que puedan contribuir a hacer más expedita la
tramitación del procedimiento.
Título X: DE LA TERMINACIÓN DEL PROCESO

Pondrán fin al proceso: la resolución, el desistimiento, la transacción,


el allanamiento a la pretensión, la renuncia al derecho en que se funde
la instancia y la declaración de caducidad. Cuando se trate de
transacción, desistimiento o allanamiento a la pretensión, en la que
intervenga una autoridad estatal como parte, deberán observarse las
normas constitucionales y legales que exigen el cumplimiento de
requisitos especiales para que sean viables tales medidas.

Título XI: DE LOS RECURSOS

Los recursos podrán fundarse en cualquier infracción del


ordenamiento jurídico, incluyendo la desviación de poder. Para los
fines de esta Ley, se entiende por desviación de poder la emisión o
celebración de un acto administrativo con apariencia de estar ceñido a
derecho, pero que se ha adoptado por motivos o para fines distintos a
los señalados en la ley. Los vicios y defectos que hagan anulable el
acto no podrán ser alegados por sus causantes.

Título XII: DEL AGOTAMIENTO DE LA VÍA


ADMINISTRATIVA

1. Se considerará agotada la vía gubernativa cuando:


2. Transcurra el plazo de dos meses sin que recaiga decisión
alguna sobre cualquier solicitud que se dirija a un funcionario o
autoridad, siempre que dicha solicitud sea de las que originan
actos recurribles ante la jurisdicción contencioso-administrativa;
3. Interpuesto el recurso de reconsideración o apelación, señalados
en el artículo 166, se entiende negado, por haber transcurrido un
plazo de dos meses sin que recaiga decisión sobre él;
4. No se admita al interesado el escrito en que formule una petición
o interponga el recurso de reconsideración o el de apelación,
señalados en el artículo 166, hecho que deberá ser comprobado
plenamente;
5. Interpuesto el recurso de reconsideración o el de apelación,
según proceda, o ambos, éstos hayan sido resueltos.

Título XIII: GLOSARIO

Los siguientes términos utilizados en esta Ley y sus reglamentos,


deben ser entendidos conforme a este glosario:

1. Acto administrativo. Declaración emitida o acuerdo de voluntad


celebrado, conforme a derecho, por una autoridad u organismo público
en ejercicio de una función administrativa del Estado, para crear,
modificar, transmitir o extinguir una relación jurídica que en algún
aspecto queda regida por el Derecho Administrativo. Todo acto
administrativo deberá formarse respetando sus elementos esenciales:
competencia, salvo que ésta sea delegable o proceda la sustitución;
objeto, el cual debe ser lícito y físicamente posible; finalidad, que debe
estar acorde con el ordenamiento jurídico y no encubrir otros
propósitos públicos y privados distintos, de la relación jurídica de que
se trate; causa, relacionada con los hechos, antecedentes y el derecho
aplicable; motivación, comprensiva del conjunto de factores de hecho
y de derecho que fundamentan la decisión; procedimiento, que
consiste en el cumplimiento de los trámites previstos por el
ordenamiento jurídico y los que surjan implícitos para su emisión; y
forma, debe plasmarse por escrito, salvo las excepciones de la ley,
indicándose expresamente el lugar de expedición, fecha y autoridad
que lo emite.

2. Actuaciones. Conjunto de actos, diligencias y trámites que integran


un expediente, pleito o proceso en la esfera gubernativa. También se
conoce como actuaciones a todas las tramitaciones que constituyen
las piezas del expediente, redactadas durante el desarrollo del
proceso.

3. Actuación de oficio. La que efectúa la propia autoridad, por deber


del cargo, sin necesidad de instancia de parte.

4. Administración central. Aquélla integrada exclusivamente por el


conjunto de todos los ministerios del Estado, dirigidos por la
Presidenta o el Presidente de la República, de la que forman parte
también los Vicepresidentes o las Vicepresidentas de la República.

5. A instancia de parte. Actuación ordenada por la autoridad al ser


promovida o solicitada por la parte o las partes en el proceso.

6. Administración descentralizada. Conjunto de entidades estatales


con personalidad jurídica y autonomía, creadas mediante ley, para
asumir funciones administrativas originalmente asignadas a la
administración central. Forman parte de la administración
descentralizada, las entidades autónomas, semiautónomas y las
empresas estatales.

7. Administración local. Conjunto de organismos o entidades


administrativas que ejercen sus funciones en un área para atender a
las comunidades locales, de la que forman parte los municipios, juntas
comunales y juntas locales.

8. Administración Pública. Desde el punto de vista objetivo, es el


conjunto de actividades heterogéneas que tienen por finalidad lograr el
bienestar social, como son la prestación de servicios públicos,
medidas de estímulo a las actividades sociales y medidas de frenos a
dichas actividades. Desde un punto de vista subjetivo, es el conjunto
de organismos o dependencias estatales que forman parte del Órgano
Ejecutivo, cuya actividad está encaminada a lograr el bienestar social.
Dentro de este Órgano del Estado, se excluye la actividad de
gobierno, que es una actividad netamente política.

9. Advertencia de ilegalidad. Observación que formula una de las


partes a la autoridad que conoce de un proceso administrativo, sobre
supuestos vicios de ilegalidad que le atribuye a un acto administrativo
que debe ser aplicado para resolver ese proceso.

10. Allanamiento a la petición. Conformidad o aceptación voluntaria,


expresa y sin condiciones ni reservas que efectúa la parte contra la
que se dirige la petición.
11. Allanamiento a la resolución. Acto de conformarse con la
decisión que resuelve el proceso administrativo, al momento de la
notificación, en escrito aparte o por el hecho de no recurrir dentro del
término respectivo.

12. Amanuense o pasante. Dependiente de abogada o abogado que,


en su representación, realiza gestiones de interés para éste, que no
implican ejercicio de la abogacía, como son: obtención de información,
obtención de copias, presentación de escritos y otras similares.

13. Apoderado. Persona natural o jurídica facultada para ejercer la


abogacía en la República, que actúa en nombre y representación de
las partes o terceros interesados, dentro del proceso administrativo, en
virtud de poder o mandato discernido conforme a las normas
respectivas del Código Judicial.
14. Apreciación o valoración de la prueba. Acto mediante el cual la
autoridad encargada de decidir un proceso, en oportunidad de dictar la
resolución de fondo, se pronuncia en la parte motiva de la decisión,
acerca de la eficacia de la prueba aportada por las partes o traídas de
oficio al expediente, para formar su convicción sobre la existencia o
inexistencia de los hechos controvertidos en el proceso. Es la
operación mental o intelectual que realiza dicha autoridad competente
para determinar la fuerza probatoria relativa de cada uno de los
medios de prueba, de acuerdo con el sistema de la sana crítica.
15. Autoridad nominadora. Aquélla que tiene potestad para nombrar
a servidores públicos.

16. Boleta de citación. Documento librado o expedido por la


autoridad que conoce del proceso o por el Secretario o la Secretaria, a
través del cual se
requiere la comparecencia de una persona al despacho para la
práctica de una diligencia relacionada con el asunto administrativo que
se ventila.

17. Caducidad de la instancia. Medio extraordinario de terminación


del proceso, a causa de la inactividad del peticionario después de
cumplido el plazo legal respectivo, mediante resolución que así lo
declara.

18. Citación. Requerimiento de la autoridad competente para que una


persona comparezca al despacho, a fin de cumplir una diligencia
oficial.

19. Coadyuvante. Persona que interviene en un proceso para


contribuir con el peticionario o con la contraparte de éste, para el logro
de los propósitos respectivos.

20. Comisión. Encargo oficial que hace la autoridad que conoce de un


proceso administrativo a otra autoridad pública, para que ésta efectúe
ciertas diligencias que la primera no puede realizar directamente,
debido a que deben cumplirse fuera de su área de competencia u
otras causas similares. Una vez cumplida la respectiva diligencia de
comisión, la autoridad comisionada debe devolver lo actuado a la
autoridad comitente para que sea agregado a los autos.

21. Competencia. Conjunto de atribuciones que la Constitución


Política, la ley o el reglamento asignan a una dependencia estatal o a
un cargo público.

22. Conflicto de competencia. Conocido también bajo la


denominación de cuestiones de competencia, es la falta de acuerdo
entre dos o más autoridades públicas, en cuanto a cuál de ellas le
corresponde conocer y decidir determinado asunto administrativo. De
esta manera, surge un conflicto positivo cuando dos o más
autoridades declaran que son competentes para conocer de un
asunto; mientras que existe conflicto de competencia negativo, cuando
dichas autoridades declaran que carecen de competencia para
conocer del caso.

23. Constancia procesal. Cada uno de los documentos, pruebas y


piezas que, en general, integran el expediente levantado con ocasión
de un proceso administrativo.

24. Consulta. Al igual que la petición y la queja administrativa, forma


parte del derecho constitucional de petición y consiste en la pregunta o
preguntas que dirige un particular a la autoridad competente, para que
ésta opine en relación a un asunto que interesa al consultante o a un
número plural de personas. La consulta, que ha de hacerse por
escrito, de acuerdo con los requisitos establecidos en esta Ley, debe
ser resuelta en un lapso de treinta días, mediante nota, oficio o
resolución que exprese la opinión o dictamen solicitado.

25. Consulta de ilegalidad. Solicitud que formula una autoridad


administrativa encargada de administrar justicia a la Sala Tercera de la
Corte Suprema de Justicia, para que se pronuncie sobre supuestos
vicios de ilegalidad de un acto administrativo que debe aplicar para
resolver el proceso.

26. Contraparte. La parte contraria en un proceso o procedimiento


administrativo.

27. Contraprueba. Prueba tendiente a enervar o probar lo contrario a


la presentada o propuesta dentro del proceso administrativo por la
parte opuesta.

28. Convalidación. Hacer válido lo que no lo era. Acto jurídico por el


cual se torna eficaz un acto administrativo que estaba viciado de
nulidad relativa; de allí que no son convalidables o subsanables
aquellos actos atacados por una causa de nulidad absoluta. Con la
convalidación o saneamiento, se procura economía procesal y que la
parte útil del acto administrativo no se deseche por la inútil; produce
efectos retroactivos, pero sin perjuicio de los derechos de terceros que
tal vez hayan adquirido durante la vigencia del acto convalidado o
saneado.
29. Cuestión de previo y especial pronunciamiento. Denominada
también artículo de previo y especial pronunciamiento, es toda gestión
incidental planteada en un procedimiento y que debe decidirse por la
autoridad encargada de resolver, antes de pasar adelante en el asunto
principal.

30. Culpa. En sentido amplio, se entiende por culpa o negligencia no


desplegar en el cumplimiento de las obligaciones las diligencias que la
ley exige, especialmente cuando tal actuación produce perjuicio a
terceros.

31. Debido proceso legal. Cumplimiento de los requisitos


constitucionales y legales en materia de procedimiento, que incluye los
presupuestos señalados en el artículo 32 de la Constitución Política: el
derecho a ser juzgado conforme a los trámites legales (dar el derecho
a audiencia o ser oído a las partes interesadas, el derecho a proponer
y practicar pruebas, el derecho a alegar y el derecho a recurrir) y el
derecho a no ser juzgado más de una vez por la misma causa penal,
policiva, disciplinaria o administrativa.

32. Denuncia. Acto por el cual se da conocimiento a la autoridad, por


escrito o verbalmente, de un hecho contrario a las leyes, con objeto de
que ésta proceda a su averiguación y castigo. La denuncia
administrativa no requiere de formalidad, y en cuanto se haga
verbalmente debe levantarse un acta que han de firmar o suscribir el
denunciante, así como la autoridad que recaba la denuncia y el
Secretario o la Secretaria del Despacho o quien haga sus veces.
33. Derecho subjetivo. Es el que corresponde a título personal o
individual a una persona natural o jurídica.

34. Desistimiento. Acto por el cual una parte en el proceso renuncia a


su petición, pretensión, reclamación, defensa o recurso que había
hecho valer; salvo que se trate de derechos indisponibles o
irrenunciables.

35. Desistimiento de la pretensión. Aquél que implica, además del


desistimiento del proceso, la renuncia del derecho, cuya declaración
se solicitaba. Quien desiste de la pretensión no podrá promover otro
proceso por el mismo objeto y causa.

36. Desistimiento del proceso. Acto de voluntad por medio del cual
el solicitante expresa su intención de dar por terminado el proceso, sin
que medie una decisión o resolución de fondo respecto del derecho
material invocado como fundamento de su petición. El desistimiento
del proceso no afecta el derecho material que pudiere corresponder al
peticionario.

37. Desviación de poder. Emisión o celebración de un acto


administrativo con apariencia de estar ceñido a derecho, pero que se
ha adoptado por motivos o para fines distintos a los señalados en la
ley.
38. Día hábil. Aquél válido o habilitado para las actuaciones
administrativas.

39. Diligencia. Actividad desplegada por la autoridad encargada de


decidir dentro del procedimiento administrativo, sus auxiliares, las
partes o sus representantes; tales como: medidas preparatorias,
presentación de escritos, traslados, notificaciones, citaciones,
emplazamientos, entre otros.

40. Dolo. Mala fe que media en la actuación de una persona, con el


propósito de obtener una finalidad ilícita.

41. Edicto. Medio de notificación o citación, ordenado por la autoridad


que conoce del proceso, que se fija en un lugar visible del despacho,
para comunicarle a una persona una resolución o citarla (emplazarla)
por ser de paradero o domicilio desconocido.

42. Efecto devolutivo. Aquél en que se concede el recurso de


apelación de una resolución de mero trámite, que consiste en que el
superior entra a conocer y a decidir sobre dicha resolución, pero sin
suspender su ejecución.

43. Efecto suspensivo. Aquél en que se conceden los recursos


ordinarios instituidos en esta Ley (reconsideración y apelación), según
el cual se suspenden los efectos y ejecución de la resolución
impugnada mientras se surte la reconsideración o la segunda
instancia.
44. Expediente. Conjunto de papeles, documentos y otras pruebas
que pertenecen a un asunto o negocio, acopiado a consecuencia de
una petición de parte u oficiosamente por la administración por
razones de interés público.

45. Fijar en lista. Diligencia que consiste en establecer el término o


plazo, de acuerdo con la ley, dentro del cual se debe sustentar el
recurso interpuesto por la parte.

46. Foliar. Acción de colocar a cada folio o página del expediente


administrativo, con tinta indeleble u otro medio de impresión seguro,
su correspondiente número, en estricto orden cronológico de arribo del
documento o constancia procesal a la secretaría del despacho de la
autoridad encargada de resolver el asunto.

47. Folio. Foja (hoja) del expediente.

48. Funcionario de la causa. Persona encargada de forma inmediata


y directa de la tramitación y agilización del expediente administrativo,
quien, para los efectos de lo dispuesto en el Capítulo II, Título VIII de
la presente Ley, debe ser identificable para el ciudadano o reclamante
de la vía gubernativa.

49. Gestión. Actuación de la parte interesada en un proceso


administrativo, encaminada a que éste cumpla su misión. También es
gestión la propia actuación del despacho para impulsar el proceso
hacia su conclusión final.

50. Hecho notorio. Es el de conocimiento común por los efectos o


consecuencias que produce, ya por un círculo mayor o menor, ya por
una multitud discrecionalmente grande o que fue perceptible en las
mismas condiciones, en tanto que también lo conozca la autoridad
encargada de resolver, tales como los sucesos históricos o políticos y
sus consecuencias, en particular para la vida económica, que difunden
los periódicos; los acontecimientos locales, como perturbaciones
sociales; la distancia entre dos lugares; la importancia de las ciudades
y otros similares. Tales hechos no requieren de comprobación en el
proceso.

51. Horas hábiles. Todas aquéllas incluidas en el horario oficial de la


dependencia administrativa respectiva.

52. Ilegitimidad de personería. Carencia de legitimación para actuar


en el proceso por una de las partes (sustantiva), o la falta de
capacidad para representar a una de las partes en el proceso
(adjetiva).

53. Imparcialidad. Principio que consiste en que la autoridad que


deba decidir o resolver un proceso administrativo debe tener desapego
a las partes, lo que posibilita proceder con rectitud. Carencia de todo
interés personal en la decisión, distinta a la recta aplicación de la ley.
Para favorecer dicha imparcialidad, la autoridad que debe decidir un
proceso en la esfera administrativa está en la obligación de declararse
impedido cuando concurra alguna o algunas de las causales de
impedimento establecidas en esta Ley.

54. Impulso procesal. Actividad necesaria para el desarrollo normal


del proceso, haciéndolo avanzar a fin de que pueda cumplir su propia
finalidad dentro del orden jurídico. El impulso puede corresponder a
las partes que piden o gestionan ante la autoridad encargada de
decidir, pero principalmente a ésta última para que, por su propia
iniciativa, adopte medidas encaminadas a evitar la paralización del
proceso.

55. Incidente. Cuestión accidental o accesoria que surja en el


desarrollo del procedimiento y que requiere decisión especial.

56. Indefensión. Situación en que se encuentra quien no se le ha


permitido defender sus derechos, teniendo derecho a ello, sin culpa de
su parte, dentro de un procedimiento o causa que le afecta. Constituye
violación a la garantía del debido proceso legal y es causa de nulidad,
según la ley.

57. Información confidencial o de reserva. Aquélla de acceso


restringido que, por razones de interés público o particular, no puede
ser difundida, porque podría ocasionar graves perjuicios a la sociedad,
al Estado o a la persona respectiva, como es el caso concerniente a
las negociaciones de tratados y convenios internacionales, seguridad
nacional, situación de salud, ideas políticas, estado civil, inclinación
sexual, antecedentes penales y policivos, cuentas bancarias y otras de
naturaleza similar, que tengan ese carácter de acuerdo con una
disposición legal.

58. Instancia. Cada una de las fases principales del procedimiento


administrativo que terminan con una decisión de fondo. En la vía
gubernativa, dicho ejercicio puede darse en primera, única instancia y
en segunda instancia.

59. Interesado. Aquella persona que comparece al proceso ya sea de


manera voluntaria o citado por la autoridad, quien ostenta un interés
legítimo, que requiere ser protegido y que puede verse afectado con la
decisión que la autoridad administrativa competente debe adoptar.

60. Interés legítimo. Interés individual directamente vinculado al


interés público y protegido por el ordenamiento jurídico.

61. Interés público. Como finalidad del Estado, es el propio interés


colectivo, de la sociedad en su conjunto, en contraposición al interés
individual.

62. Invalidez. Carencia de aptitud de un acto administrativo para surtir


los efectos jurídicos que le son propios por padecer de un vicio de
nulidad.
63. Jurisdicción. En sentido lato, es la facultad que la ley asigna a
una autoridad administrativa para conocer y decidir en derecho una
actuación o proceso administrativo.

64. Manifestación o declaración de impedimento. Acto por el cual la


autoridad que deba conocer y decidir un proceso administrativo,
declara que no debe intervenir en él, por estar comprendida en una de
las causas de impedimento señaladas en la ley.

65. Memorial. Escrito que contiene una gestión de parte.

66. Notificación. Acción y efecto de hacer saber, a la parte


interesada, cualquiera sea su índole, o a su apoderado o
representante, una resolución o acto del procedimiento, que la ley
manda sea de su conocimiento. Las notificaciones pueden ser
presuntas o tácitas, por edicto o personales.

67. Notificación personal. Es la excepción a la regla en materia de


notificaciones, y consiste en la entrega física a la parte o a su
representante de la nota o copia autenticada de la resolución de que
debe ser notificado en su domicilio legal. En la notificación personal, el
notificado debe firmar la diligencia respectiva, en señal o constancia
de que es de su conocimiento el acto respectivo.

68. Notificación por edicto. Forma común en que, conforme a la


presente Ley, ha de comunicarse a las partes el contenido de las
resoluciones que emita la autoridad en el desarrollo del procedimiento,
a excepción de aquellas resoluciones que no requieran ser notificadas
o, por el contrario, según la ley, deban notificarse personalmente. La
notificación por edicto debe hacerse en un lugar visible y accesible de
la secretaría del despacho administrativo competente.

69. Notificación tácita. Aquélla que se desprende de un hecho que


revele, sin margen a dudas, que la parte que debe ser notificada de un
acto, lo conoce, como es el manifestarlo así mediante escrito,
interponer oportunamente un recurso contra el acto y otros similares.

70. Orden público. En sentido negativo, es el desarrollo de las


actividades sociales de acuerdo con lo establecido en el ordenamiento
jurídico y en acatamiento a lo que disponen las autoridades. En
sentido positivo, es equivalente a interés público.

71. Organismo colegiado. Cuerpo u organismo público de


deliberación y decisión integrado por múltiples miembros, que ejercen
en conjunto una misma función pública.

72. Parte. Persona que reclama o defiende un derecho subjetivo en un


proceso administrativo.

73. Patrocinio procesal gratuito. Beneficio concedido a una persona


para litigar como pobre, por insuficiencia de recursos económicos; de
allí que se le exima del pago de honorarios de abogado o abogada y
gastos de tramitación en general, dentro del procedimiento
gubernativo. Dicho amparo, patrocinio o asesoramiento gratuito ha de
otorgarse a quien cumpla con los requisitos establecidos en el Libro
Segundo del Código Judicial.

74. Petición. Genéricamente, indica la acción de pedir a la autoridad,


fundamentalmente por escrito, el reconocimiento de un derecho en
interés particular o social.

75. Peticionario. Persona que solicita a la administración que se le


reconozca un derecho que reclama.

76. Presunción. Medio de prueba fundado en un indicio, señal o


suposición sobre la existencia de un hecho afirmado por la parte. El
hecho debe estar acreditado en el proceso para que se beneficie de la
presunción respectiva.

77. Presunción legal. La que establece la ley, releva de prueba al


favorecido por ella, pero admite prueba en contrario por ser tan sólo de
derecho (iuris tantum).

78. Presunción de derecho. Aquélla que establece la ley, pero que


es de pleno y absoluto derecho, por lo que no admite prueba en
contrario (iuris et de iure).

79. Pretensión. Es a lo que aspira un peticionario o parte en un


proceso administrativo.
80. Prueba. Actividad procesal realizada con el auxilio de los medios
previstos o autorizados por la ley, y encaminada a crear la convicción
o convencimiento de la autoridad encargada de resolver acerca de la
existencia o inexistencia de los hechos afirmados que sirven de
fundamento a la petición, recurso o incidente.

81. Prueba sumaria. Prueba que acredita parcialmente los hechos a


que se refiere una denuncia o queja administrativa.

82. Queja. Querella que se interpone ante la autoridad competente por


asunto en el que se ve afectado un interés particular del quejoso o de
un número plural de personas, por lo que puede ser de interés
particular, de un tercero o de interés público (social), como la que se
presenta por incorrecta actuación de un servidor público, por
desconocimiento o reclamo de un derecho, deficiente prestación de un
servicio público, entre otras. La queja no requiere de formalidad
especial y debe ser absuelta en un término de treinta días, salvo las
excepciones contempladas en esta Ley.

83. Reconvención. Petición o pretensión autónoma que se dirige


contra el peticionario original, al contestar el traslado de la petición.
Tanto la petición original como la petición en reconvención deben ser
resueltas conjuntamente al emitir la decisión de fondo.

84. Recurso. Acto de impugnación formal a través del cual se ataca,


contradice o refuta, por escrito, una actuación o decisión de la
autoridad encargada de resolver el proceso administrativo.
85. Recurso de apelación. También conocido como de alzada, es
aquel medio de impugnación que se dirige a la autoridad de segunda
instancia para que revoque, aclare, modifique o anule la decisión de la
autoridad de primera instancia.

86. Recurso de hecho. Medio de impugnación extraordinario o directo


que se interpone ante la autoridad de segunda instancia, para que
ésta conceda el recurso de apelación negado por la autoridad de
primera instancia, o para que lo conceda en el efecto que corresponda
según la ley, cuando la autoridad del primer grado lo hubiese
concedido en un efecto distinto al señalado por la ley.

87. Recurso de reconsideración. Medio de impugnación ordinario


que se interpone ante la misma autoridad de primera o de única
instancia para que ésta revoque, aclare, modifique o anule su decisión.

88. Recurso de revisión administrativa. Medio de impugnación


extraordinario, en sede administrativa, que se interpone invocando
causales especiales establecidas en esta Ley, con el objeto de que la
máxima autoridad administrativa anule, por causas extraordinarias, las
resoluciones o decisiones que agoten la vía administrativa.

89. Recusación. Derecho o facultad que tiene el interesado de


obtener la no intervención de un funcionario o autoridad en un
procedimiento en que aquél es parte, cuando concurran alguna o
algunas de las causales establecidas en la ley. El fundamento de este
instituto, al igual que la figura del impedimento, es el de garantizar la
imparcialidad y el acierto de la decisión que se requiere de la autoridad
u órgano encargado de resolver un asunto de su competencia.

90. Resolución. Acto administrativo debidamente motivado y


fundamentado en derecho, que decide el mérito de una petición, pone
término a una instancia o decide un incidente o recurso en la vía
gubernativa. Toda resolución deberá contener un número, fecha de
expedición, nombre de la autoridad que la emite y un considerando en
el cual se expliquen los criterios que la justifican. La parte resolutiva
contendrá la decisión, así como los recursos gubernativos que
proceden en su contra, el fundamento de derecho y la firma de los
funcionarios responsables.

91. Resolución inhibitoria. Aquélla que no decide sobre el fondo del


proceso.

92. Resolución de mero obedecimiento. El de inmediato


cumplimiento y que no admite ser impugnada.

93. Resolución de mero trámite. Aquélla interlocutoria que dispone


sobre el curso normal de la tramitación y que no decide el fondo de la
causa.

94. Resolución de fondo. La que decide el mérito de la petición.


95. Responsabilidad. Conjunto de efectos que surgen para una
persona que ha infringido una norma legal o reglamentaria o que ha
incumplido una obligación contractual.

96. Responsabilidad civil. Obligación de reparar daños y perjuicios


causados por una acción u omisión negligente o dolosa.

97. Responsabilidad disciplinaria. Es la que cabe exigir a un


particular o servidor público por incurrir en faltas violatorias de la ley o
los reglamentos.

98. Responsabilidad patrimonial. Aquélla exigible a particulares o


servidores del Estado por incurrir en acciones u omisiones que afecten
los bienes o dineros públicos.

99. Responsabilidad penal. Es la que cabe exigir a través de la


jurisdicción penal, con audiencia del Ministerio Público, a quienes
cometan una acción típica, antijurídica y culpable (delito). 100.
Revocatoria. Decisión adoptada por autoridad competente que deja sin
efecto una decisión o acto anterior.

101.Sana crítica. Sistema de valoración probatoria adoptado por esta


Ley, que se basa en normas de criterio fundadas en la lógica y en la
experiencia, que debe aplicar la autoridad encargada de decidir, sin
que esto excluya la solemnidad documental de ciertos actos y
contratos.
102. secretario o secretaria del Despacho. Funcionario adscrito al
despacho público o autoridad encargada de resolver un proceso
administrativo, entre cuyas funciones principales están: custodiar y
velar por la protección adecuada de los documentos, papeles y
pruebas del proceso e instrumentos en general utilizados en la oficina,
relacionados con la tramitación de los asuntos; autorizar con su firma
entera, debajo de la cual expresará su cargo, todas las declaraciones,
notificaciones, copias, diligencias y comisiones; llevar o encargar a
quien corresponda la foliación correcta de los expedientes; mantener
un archivo ordenado y confiable de éstos; informar a las personas
interesadas, abogados o pasantes, el estado de los expedientes de su
incumbencia que cursen en el despacho; hacer las notificaciones
personales o por medio de un funcionario del despacho y las demás
establecidas en esta Ley. Quien haga las veces de secretario o
secretaria, asume estos deberes.

103. Servidor público. Persona que ejerce funciones, temporal o


permanentemente, en cargos del Órgano Ejecutivo, Legislativo o
Judicial, de los municipios, entidades autónomas o semiautónomas,
que presta un servicio personal, o aquellos particulares que por
razones de su cargo manejan fondos públicos y, en general, la que
perciba remuneración del Estado.

104. Silencio administrativo. Medio de agotar la vía administrativa o


gubernativa, que consiste en el hecho de que la administración no
contesta, en el término de dos meses, contado a partir de su
presentación, la petición presentada o el recurso interpuesto por el
particular. De esta manera, se entiende que la administración ha
negado la petición o recurso respectivo, y queda abierta la vía
jurisdiccional de lo contencioso-administrativo ante la Sala Tercera de
la Corte Suprema de Justicia, para que, si el interesado lo decide,
interponga el correspondiente recurso de plena jurisdicción con el
propósito de que se le restablezca su derecho subjetivo,
supuestamente violado.

105. Sociedad secreta. Estado de anonimato, reserva o discreción en


que se encuentran ciertas confesiones o congregaciones religiosas y
gremios de la sociedad civil, no inscritos particularmente en algún
registro oficial, pero cuyas reglas de comportamiento moral, señas
distintivas o hermandad, establecen vínculos entre sus miembros, a
los que la ley les atribuye un efecto jurídico. Es causal de impedimento
pertenecer a una sociedad secreta.

106. Superior jerárquico. Servidor público con autoridad


administrativa sobre personal subalterno, con facultades para impartir
órdenes a éstos.

107. Sustanciación o sustanciar. Acción de tramitar un proceso


hasta dejarlo en condiciones de dictar resolución de fondo.

108. Sustentación del recurso. Acto de exponer mediante escrito y


dentro del término concedido para ello, las razones por las cuales se
ataca o impugna una resolución, ya sea a través del recurso de
reconsideración, apelación o de revisión administrativa.
109. Tercero. Persona natural o jurídica distinta a las partes
originarias que se incorpora al procedimiento, con el fin de hacer valer
derechos o intereses propios, vinculados al proceso o al objeto de la
pretensión o petición.

110. Transacción. Contrato por el cual dos o más partes en una


controversia se obligan a ponerle término al proceso, en las
condiciones que han acordado.

111. Traslado. Comunicación que se da a una de las partes de las


pretensiones o escritos de la otra.

112. Vía gubernativa o administrativa. Mecanismo de control de


legalidad de las decisiones administrativas, ejercido por la propia
Administración Pública, y que está conformado por los recursos que
los afectados pueden proponer contra ellas, para lograr que la
Administración las revise y, en consecuencia, las confirme, modifique,
revoque, aclare o anule.

Título XVI: DISPOSICIONES FINALES

Los vacíos del Libro Primero de esta Ley serán llenados con las
normas contenidas en el Libro Primero del Código Judicial. Las
disposiciones del Libro Segundo de esta Ley serán aplicadas
supletoriamente en los procedimientos administrativos especiales
vigentes, en los términos previstos en el artículo 37. Los vacíos del
procedimiento administrativo general dictado por la presente Ley se
suplirán con las normas de procedimiento administrativo que regulen
materias semejantes y, en su defecto, por las normas del Libro
Segundo del Código Judicial, en cuanto sean compatibles con la
naturaleza de los procedimientos administrativos.

Título XV: DISPOSICIONES ESPECIALES

El cambio en la denominación de los tribunales se hace efectivo a


partir de la promulgación de esta Ley.

Los tribunales, las fiscalías y los defensores de oficio de la provincia


de Panamá, comenzarán a funcionar a partir del primero de enero del
año 2002.

La Corte Suprema de Justicia, el Ministerio Público, la Policía


Nacional, la Policía Técnica Judicial, el Instituto de Medicina Legal y el
Ministerio de la Juventud, la Mujer, la Niñez y la Familia deberán tomar
las medidas pertinentes relativas a la planificación de recursos y
asignaciones presupuestarias, de modo que el proceso penal de
adolescentes se realice conforme lo establece el presente Régimen.

Los tribunales, fiscalías y defensores, en el resto del país, iniciarán


funciones, a más tardar, el primero de agosto de 2002.
El Ministerio de la Juventud, la Mujer, la Niñez y la Familia dentro de
los doce meses siguientes a la promulgación de esta Ley,
implementará todo lo concerniente al cumplimiento de las sanciones
impuestas a los adolescentes, y de medidas cautelares de acuerdo
con las funciones que le señale la presente Ley.

También podría gustarte