Pobreza y Justicia Globales Una Interpre
Pobreza y Justicia Globales Una Interpre
Pobreza y Justicia Globales Una Interpre
DOCTORANDA
DIRECTORA DE TESIS
CARRERA DE FILOSOFÍA
AGRADECIMIENTOS GENERALES……………………………………………........7
AGRADECIMIENTO ESPECIAL…………………………………………….………..9
NOTA DE EDICIÓN……………………………………………………………..........11
INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………...13
POBREZA……………………………………………………...………………………25
2) El diezmo…………...……………………………………………………….31
GLOBAL………………………………………………………………….……...….....41
2. El derecho de gentes……………………………………..………..…44
de la justicia…………………………………...……………………………50
3
1. La tesis fuerte……………………………………………………….59
2. La tesis convencional…………………….…………………………63
4. Conclusión……………………………...…………………………..66
ASISTIR……………………………………………………………………….……….99
HUMANOS……………………………………………………………...……………115
humanos?.....................................................................................................122
3) ¿Violadores o contribuyentes?....................................................................125
4
7. ROMPECABEZAS POGGE: UNA INTERPRETACIÓN MODERADA DE LOS
5) ¿Cuánto es suficiente?.................................................................................143
hacerlo?...........................................................................................144
PALABRAS FINALES……………………………………………………………….149
BIBLIOGRAFÍA…………………………………………….………………………..151
5
6
AGRADECIMIENTOS GENERALES
cuando yo era todavía una tímida e introvertida estudiante de Filosofía, por haberme
permitido descubrir temas y problemas que aún hoy me fascinan y por estar conmigo a
7
8
AGRADECIMIENTO ESPECIAL
A los miembros del Tribunal de Tesis, Javier Flax, Andrés Rosler y Graciela
Vidiella, por el tiempo que le dedicaron a la tesis y por sus valiosos comentarios.
9
10
NOTA DE EDICIÓN
Con respecto a las traducciones, cuando cito textos que no están traducidos al
11
12
INTRODUCCIÓN
campo unificado constituido por teorías bien definidas, tal como podría ser el campo de
la justicia doméstica o local. Más bien, “está constituido por varias discusiones
gobernar las interacciones entre las personas, los Estados, las corporaciones y otros
agentes que actúan en la arena global”1 y acerca del diseño de las instituciones que
conecta a todos estos actores. Así, de este conjunto, recortaré las discusiones suscitadas
entre Thomas Pogge, uno de los filósofos contemporáneos más influyentes en materia
de justicia global, y sus críticos más importantes. Además, es necesario señalar que,
dado que la pobreza revelaría la injusticia mundial2, los debates sobre justicia global
están estrechamente relacionados con los debates sobre pobreza y las formas de
erradicarla.
filósofo utilitarista Peter Singer, con su ya clásico texto “Famine, affluence, and
morales, uno fuerte y otro moderado. El principio fuerte afirma: “Si está en nuestro
poder evitar que algo malo pase, sin sacrificar nada de una importancia moral
1
Barry, Christian y Lawford-Smith, Holly (2012), “Introduction”, en Barry, Christian y Lawford-Smith,
Holly (2012).
2
Pogge, Thomas (2005a), capítulo 4.
3
Singer, Peter (1972).
13
comparable, nosotros debemos, moralmente, hacerlo”4. Y el principio moderado
sostiene: “Si está en nuestro poder evitar que algo muy malo pase, sin sacrificar nada
asistir a quienes están necesitados. Estos deberes son positivos, ya que su cumplimiento
lugar, algunos autores afirman (en contra de Singer) que ayudar o asistir es una acción
segundo lugar, algunos autores afirman que los principios establecidos por Singer son
demasiado exigentes y que su teoría moral es una teoría para santos o héroes morales 7.
Thomas Pogge también está preocupado por la pobreza y la injusticia, pero parte
desde otra posición teórica. Para evitar la primera de las críticas mencionadas, en su
libro La pobreza en el mundo y los derechos humanos8, toma una estrategia diferente.
En las discusiones sobre pobreza y justicia globales, este autor no apela a nuestro deber
de ayudar sino a nuestro deber de no dañar. Para Pogge, todos nosotros tenemos dos
sociales injustas sin hacer una protección que compense y esfuerzos de reforma para sus
4
Singer, Peter (1972), pág 231.
5
Singer, Peter (1972), pág. 231.
6
Narveson, Jan (2003).
7
Singer, Peter (1995), capítulo 8.
8
Pogge, Thomas (2005a).
9
Pogge, Thomas (2005c), pág. 75.
14
víctimas”10. Estos deberes son negativos, ya que su cumplimiento requiere la abstención
and International Affairs. Allí, Mathias Risse11, Alan Patten12, Rowan Cruft13, Norbert
Anwander14 y Debra Satz15 han formulado algunas de las críticas más importantes a los
argumentos de Pogge sobre pobreza y justicia globales. Estos autores niegan que Pogge
haya mostrado que el orden institucional global daña a los pobres globales, objetan que
Otro conjunto de críticas se encuentra en el libro Thomas Pogge and his critics16
[Thomas Pogge y sus críticos]. Allí, se destaca el texto del filósofo Joshua Cohen,
global]. En este trabajo, Cohen niega que las tesis de Pogge tengan el impacto que éste
les atribuye sobre la pobreza global y afirma que las tesis de este autor deberían ser
10
Pogge, Thomas (2005c), pág. 75.
11
Risse, Mathias (2005b).
12
Patten, Alan (2005).
13
Cruft, Rowan (2005).
14
Anwander, Norbert (2005).
15
Satz, Debra (2005).
16
Jaggar, Alison (2010).
17
Cohen, Joshua (2010), “Philosophy, social science, global poverty”, en Jaggar, Alison (2010), págs. 18-
45.
18
Rawls, John (2001).
15
criticada por Pogge. Pogge considera que Rawls es el exponente más prominente de lo
tesis por no tener en cuenta los factores globales que contribuyen a la persistencia de la
sus instituciones19.
Otro crítico, en la misma línea de Rawls y Risse, es Julio Montero. Este autor
objeta la idea (que atribuye a Pogge) de que los países ricos y nosotros mismos seamos
global injusto “sin hacer una protección que compense y esfuerzos de reforma para sus
víctimas”21.
reconstrucción que los críticos hacen de los argumentos de Pogge. Con esto, se espera
autor.
19
Risse, Mathias (2005a).
20
Montero, Julio (2008b).
21
Citado más arriba.
22
Pogge, Thomas (2005a).
16
1. Tesis principal. El deber negativo de no “cooperar en el mantenimiento de
instituciones sociales injustas sin hacer una protección que compense y esfuerzos de
reforma para sus víctimas”23 (en adelante, el “deber de no contribuir con la injusticia”)
es menos exigente de lo que los críticos de Pogge afirman. Para defender esta tesis, se
de 2) trabajar para reformar los rasgos injustos de ese orden. Asimismo, se tratará de
establecer cuáles son las implicancias prácticas de estas dos obligaciones positivas.
a los agentes morales en “violadores” de derechos humanos, tal como los críticos de
las críticas que se le formulan al autor con respecto a la falta de cumplimento del deber
los principales argumentos de Pogge sobre justicia y pobreza globales que esclarezca los
puntos incomprendidos o malinterpretados por sus críticos más importantes. Así, este
trabajo constituye una contribución valiosa al campo de estudio, ya que, 1) sienta sobre
bases más firmes una de las teorías filosóficas contemporáneas más citadas y
23
Citado más arriba.
24
Agradezco a Andrés Rosler por sus comentarios, los cuales me motivaron a hacer esta aclaración.
17
Esta tesis comprende siete capítulos.
primer capítulo está dedicado al filósofo Peter Singer. En el primer apartado, expongo
su posición con respecto al tema de la pobreza global tal como él mismo la desarrolla en
moralidad]. Aquí, explicito e interpreto los dos principios morales que Singer sostiene y
cambio que sufre esta posición en su libro Ética práctica. Segunda edición26. En este
libro, Singer se hace eco de las críticas que sostienen que sus dos principios morales son
demasiado exigentes y afirma que, como mínimo, deberíamos donar el 10% de nuestros
ingresos. En el tercer apartado, expongo otro cambio, tal como aparece en su libro Un
explica por qué, al menos, deberíamos donar el 1%. En el cuarto apartado, me pregunto
cuál debe ser el nivel de exigencia de una teoría moral e intento dar una respuesta.
depende de ningún vínculo especial con la persona necesitada de ayuda. Así, este
enfoque resulta insoslayable, tanto en un sentido histórico como desde un punto de vista
moral. Constituye una primera estrategia para abordar el problema de la pobreza, más
25
Singer, Peter (1972).
26
Singer, Peter (1995).
27
Singer, Peter (2003).
28
Alegre, Marcelo; Montero, Julio y Monti, Ezequiel (2015).
18
no se interroga por las causas del problema. Debido a esto, se hace necesario el análisis
del enfoque relacionista, representado de modo sobresaliente por John Rawls y Thomas
Pogge29.
elaborado por Rawls en su libro El derecho de gentes31. Aquí, explico cuáles son los
tres criterios que se deben tener en cuenta al momento de cumplir con este deber y por
qué Rawls afirma que este deber no es, de ningún modo, un principio de justicia
Estas críticas señalan las incongruencias entre la posición que Rawls adopta en el
(sostenida por Rawls, según Pogge) es falsa y 2) que el orden internacional daña a los
pobres globales. Estos puntos serán retomados y analizados a lo largo de toda la tesis.
El tercer capítulo presenta, y ofrece una respuesta a, la crítica que hace Joshua
29
Agradezco a Andrés Rosler por sus comentarios, los cuales me motivaron a agregar esta aclaración.
30
Pogge, Thomas (1989).
31
Rawls, John (2001).
32
Rawls, John (1995).
33
Cohen, Joshua (2010), “Philosophy, social science, global poverty”, en Jaggar, Alison (2010), págs. 18-
45.
19
social, pobreza global], al planteo poggeano con respecto a la pobreza global. Esta
crítica resulta relevante ya que Cohen pretende estar atacando la “tesis fuerte” de Pogge.
En el primer apartado, expongo la tesis fuerte, tal como Cohen la concibe, y las
objeciones que le formula a la misma. Para esto, expongo también las críticas de Cohen
a los “privilegios de los recursos” y a los “privilegios de los préstamos” como rasgos del
orden institucional global que generan malos arreglos institucionales domésticos (según
Pogge). En el segundo apartado, doy una respuesta a las objeciones, a la vez que
presento una primera interpretación del planteo poggeano. Por un lado, afirmo que la
tesis fuerte (criticada por Cohen) no es esencial al planteo de Pogge. Por otro lado,
sostengo que la pobreza no es la preocupación principal de este último autor, sino más
desarrollada en el capítulo 7.
El cuarto capítulo, así como también el quinto, está dedicado al debate entre
Thomas Pogge y uno de sus críticos más importantes: Mathias Risse. El debate se inició
con el artículo de Pogge, “World poverty and human rights”34 [Pobreza mundial y
derechos humanos], siguió con varias respuestas de varios filósofos, entre ellos Risse35,
y concluyó con otro artículo de Pogge, en el cual pretende contestar a las objeciones
planteadas por sus críticos (y el cual analizo en el capítulo 7). En el primer apartado de
este capítulo, expongo con mayor detalle la posición poggeana, en especial los tres
argumentos que este autor ofrece para mostrar que el orden institucional global daña a
los pobres globales. Estos tres argumentos son: el de la historia real o violenta (que
utiliza una noción de daño diacrónica), el del estado de naturaleza (que utiliza una
34
Pogge, Thomas (2005b).
35
Pero además: Alan Patten, Rowan Cruft, Norbert Anwander y Debra Satz.
20
una noción de daño concebida en términos de una noción de justicia). Además, señalo
cuáles son las innovaciones que conlleva una posición como la de Pogge para el debate
apunta a los factores globales en lugar de a los factores internos que causan la pobreza.
5). Con respecto a estos dos primeros argumentos, Risse procede del siguiente modo.
Por un lado, acepta el criterio diacrónico del argumento de la historia real o violenta
pero dice que, según este criterio, no hay daño, ya que la humanidad en general y los
pobres en particular están mucho mejor que hace 200 años e incluso que hace 50 años.
Por otro lado, rechaza el criterio contrafáctico del argumento del estado de naturaleza,
ya que, para él, carece de sentido. Es imposible saber si los pobres globales están peor
apartado, presento las respuestas de Pogge a las objeciones de Risse. Para terminar,
extraigo lo que se puede sacar en limpio del debate presentado. El verdadero objetivo
del argumento de la historia real o violenta no es mostrar que el orden institucional daña
a los pobres globales sino más bien impugnar ese orden. En cuanto al argumento del
El quinto capítulo analiza las objeciones de Risse al tercer argumento que utiliza
Pogge para mostrar que el orden institucional global daña a los pobres: el argumento de
los arreglos globales institucionales. En el primer apartado, presento lo que Risse llama
21
afirma que lo que hace rico o pobre a un país, o estable o inestable, es la calidad de sus
institucional global daña a los pobres porque fracasa en cumplir con el deber de
derechos humanos.
poggeana. Esta discusión permite esclarecer el planteo de Pogge acerca de los derechos
presento la tesis, que Montero le atribuye (con razón) a Pogge, de que “todos somos
explícito es rechazar esta tesis) conduce exactamente a la misma conclusión (que todos
todos seamos violadores de derechos humanos son en verdad tan nocivas para nuestras
vidas como plantea Montero, quien afirma que, de acuerdo con Pogge, deberíamos dejar
tercer apartado, formulo una distinción entre ser un violador de derechos humanos y ser
de Pogge) y brindo mi interpretación acerca de por qué Pogge algunas veces habla de
22
El séptimo capítulo, de carácter conclusivo, realiza una reconstrucción e
[Pobreza severa como una violación de deberes negativos], el cual cierra el debate con
Risse y con el resto de los filósofos que participaron del mismo37. En el primer
concepción mínima se basa en los derechos humanos y Pogge la adopta con el objetivo
que el orden institucional global daña a los pobres. En el segundo apartado, explico en
injusto) sin compensar”. Este deber es impuesto por los derechos humanos. Y de este
que se convierta en uno más justo. En el tercer apartado, explico a qué se refiere Pogge
cuando habla de las dos obligaciones positivas que se derivan del deber negativo de no
de nuestro orden institucional global que Pogge identifica y señala como injustos. En el
Finalmente, el quinto apartado está dedicado a responder dos preguntas: 1) ¿tienen los
36
Pogge, Thomas (2005c).
37
Alan Patten, Rowan Cruft, Norbert Anwander y Debra Satz.
23
ciudadanos ordinarios alguna responsabilidad por la imposición de un orden
capítulo.
24
1. PETER SINGER:
POBREZA
¿Por qué empezar una tesis sobre pobreza y justicia globales con Singer? En
primer lugar, porque Singer es, sin duda, tal como se dijo en la Introducción, el
precursor del tema de la pobreza global. En 1972, este filósofo utilitarista publicó un
38
Singer, Peter (1972).
39
Barry, Christian y Lawford-Smith, Holly (2012), “Introduction”, en Barry, Christian y Lawford-Smith,
Holly (2012). Por otra parte, según los autores, Thomas Pogge es el representante de la posición que
invoca “responsabilidades basadas en la contribución”.
40
Con respecto a la riqueza, Singer afirma: “Frente al cuadro de pobreza absoluta que nos ha dibujado
McNamara [ver nota siguiente], se podría plantear una situación de “riqueza absoluta”. Los que son
absolutamente ricos no lo son necesariamente en comparación con sus vecinos, sino que lo son teniendo
en cuenta cualquier definición razonable de las necesidades humanas. Esto significa que tienen más
ingresos de los que necesitan para satisfacer de forma adecuada todas las necesidades básicas de la vida.
Después de adquirir […] comida, vivienda, ropa, servicios sanitarios básicos y educación, a los
absolutamente ricos les queda todavía dinero para gastar en lujos. Los absolutamente ricos eligen su
alimento por el gusto de su paladar, y no para detener el hambre; se compran ropa nueva para variar, y no
para abrigarse; se mudan de casa para vivir en un barrio mejor o tener una habitación de juegos para los
niños, y no para resguardarse de la lluvia; y después de todo esto les queda todavía dinero para gastar en
equipos de sonido, video-cámaras y vacaciones en el extranjero. [La característica que define a la riqueza
absoluta] es la importante cantidad de ingresos por encima del nivel necesario para satisfacer las
necesidades humanas básicas de uno mismo y de los suyos”. Singer, Peter (1995), pág. 275.
41
Con respecto a la pobreza, dice Singer: “La pobreza con la que estamos familiarizados en los países
industrializados es una pobreza relativa, lo que quiere decir que algunos ciudadanos son pobres, en
relación con la riqueza de que disfrutan sus vecinos. […] La pobreza absoluta, por otra parte, es pobreza
se tome la referencia que se tome. Según McNamara: ‘la pobreza en el nivel absoluto […] es vivir en el
mismo límite de la existencia. Los pobres absolutos son seres humanos con graves privaciones que luchan
por sobrevivir en unas circunstancias de miseria y degradación que, desde nuestras condiciones
25
simplemente porque existe una obligación de asistencia. Esta obligación de asistir o
ayudar queda establecida en el texto de 1972. Sin embargo, como intentaré mostrar, a lo
largo de los años, Singer fue matizando su posición. O más precisamente, fue bajando el
1) un principio fuerte: “Si está en nuestro poder evitar que algo malo pase, sin
moralmente, hacerlo”42 y
2) un principio moderado: “Si está en nuestro poder evitar que algo muy malo
moralmente, hacerlo”43.
primero nos dice que debemos impedir que suceda algo malo siempre que no tengamos
que sacrificar nada de una importancia moral comparable, el segundo nos dice que
debemos impedir que algo muy malo suceda siempre que no sacrifiquemos nada
moralmente significativo.
privilegiadas, casi no podemos concebir en nuestra sofisticada imaginación’”. Singer, Peter (1995), págs.
271-272.
42
Singer, Peter (1972), pág. 231. La letra cursiva es mía. “[…] if it is in our power to prevent something
bad from happening, without thereby sacrificing anything of comparable moral importance, we ought,
morally, to do it”.
43
Singer, Peter (1972), pág. 231. La letra cursiva es mía. “[…] if it is in our power to prevent something
very bad from happening, without thereby sacrificing anything morally significant, we ought, morally, to
do it”.
26
Si estamos tratando de ayudar a aliviar el hambre, entonces el primer principio
nos diría que debemos donar dinero hasta el punto de utilidad marginal, esto es, hasta el
punto en que, donando más, pondríamos en peligro nuestra propia supervivencia. Tal
como señalan Barry y Overland, “la [propia] vida […] es casi el único costo que podría
ser considerado comparativamente tan malo”44, desde un punto de vista imparcial, como
la muerte de otra persona (a causa del hambre o la pobreza). Es decir, de acuerdo con
este primer principio (fuerte), deberíamos dejar de gastar nuestro dinero en cualquier
cosa que no estuviera directamente relacionada con nuestra supervivencia. Las cosas en
las cuales gastamos nuestro dinero y que no están relacionadas directamente con nuestra
supervivencia son, sin duda, muchas: comprar ropa nueva, ir al cine, cenar en
un auto, etc. Ninguna de estas actividades tiene una importancia moral comparable a
y haciendo una interpretación de algunos pasajes del texto de Singer, los autores
abrigados en invierno y cómodos en verano es una necesidad, pero comprar ropa nueva
para estar “a la moda” ciertamente no lo es. Alimentarse es una necesidad, pero comer
44
Barry, Christian y Overland, Gerhard (2013), pág. 193.
45
Barry, Christian y Overland, Gerhard (2013), pág. 193.
46
Barry, Christian y Overland, Gerhard (2013), pág. 194.
27
platos caros o salir a comer en restaurantes sin duda no lo es. Refugiarnos del clima y
tener un lugar donde vivir es una necesidad, pero tener una casa o un departamento con
segundo se vuelven bastante parecidos, ya que sacrificar una necesidad importante (de
alimentación, vivienda, salud) sería tanto como poner en peligro nuestra propia vida. De
acuerdo con el primer principio, debemos sacrificar prácticamente todo, hasta el punto
todo, hasta el punto en que, sacrificando más, pondríamos en peligro nuestra capacidad
de cubrir nuestras necesidades importantes. Como señalé, esta interpretación hace a los
dos principios muy parecidos. Por esta razón, considero que la expresión “moralmente
significativo” debe ser entendida en un sentido más laxo, dado que precisamente se trata
siguiente modo: mientras el primer principio nos dice que debemos despojarnos
nos dice que debemos llevar vidas frugales y sencillas y donar el resto 48. Así, cosas
como practicar algún deporte al aire libre, ver alguna película en el cine o comprar
regalos a los seres queridos podrían formar parte de una vida frugal (aunque no
las cuales algunas personas no estarían dispuestas a sacrificar para ayudar a aliviar el
47
Singer, Peter (1972), pág. 241. Vale la pena destacar también que mientras el primer principio nos dice
que debemos evitar que pase algo malo a secas, el segundo nos dice que debemos evitar que suceda algo
muy malo.
48
Ver la crítica de Singer al despilfarro y al consumo exagerado y su defensa de la frugalidad. Singer,
Peter (1995), págs. 354-359.
28
hambre mundial. De todos modos, hay muchas cosas que hacemos y compramos que no
forman parte de una vida frugal y de las cuales podríamos prescindir: comprar ropa
nueva, comer platos caros, comprar un auto, cambiar el auto, cambiar la computadora,
cambiar el celular, comprar una casa más grande, ir de vacaciones a otro país, etc.49.
de consumo peligraría quizá hasta desaparecer. Y Singer considera que hay razones por
En este artículo de 1972, Singer elabora el ejemplo del estanque que luego se
haría famoso: “Si estoy caminando delante de un estanque poco profundo y veo a un
niño ahogándose en él, debo meterme y sacar al niño. Esto significará embarrar mi ropa,
pero esto es insignificante, mientras que la muerte del niño sería presumiblemente algo
muy malo”50. Este ejemplo es una aplicación del principio moderado y Singer volverá a
De acuerdo con Singer, los dos principios que ha establecido tienen dos
características:
49
Estoy segura de que cada lector y lectora podría seguir agregando a la lista cosas de las cuales podría
prescindir (sin llegar al nivel de utilidad marginal).
50
Singer, Peter (1972), pág. 231. La letra cursiva es mía.
51
Singer, Peter (1995).
52
Singer, Peter (2003).
29
2) no tienen en cuenta si yo soy la única persona que puede hacer algo para
Singer reconoce que puede haber una diferencia psicológica, pero no una
diferencia moral. Puede ser que nos sintamos más dispuestos a ayudar a una persona
que vive en nuestra cuadra o nuestro barrio o nuestra ciudad que a una persona que vive
en otro país. Pero esto no significa que tengamos una obligación moral hacia la primera
pero no hacia la segunda o que debamos ayudar a la primera antes que a la segunda.
Nuestra obligación moral es hacia ambas y, en todo caso, deberíamos ayudar primero a
la persona que se encuentre más necesitada. Del mismo modo, es posible que el hecho
de que haya muchas personas que puedan donar dinero para aliviar el hambre (aunque
no lo donen) haga que nos sintamos menos culpables si no donamos. Pero, tal como
dice Singer, el hecho de que, al levantar la vista del estanque, veamos a muchas
personas caminando por ahí, a igual distancia del niño que se está ahogando que
nosotros (aunque ninguna de ellas haga nada), no nos quita ni un ápice nuestra
fracasan (junto con nosotros) en hacer lo que se debe no nos quita la responsabilidad de
hacerlo.
supererogatorio, como usualmente se piensa. No es algo que estaría bien hacer pero que
no está mal omitir54. Omitir ayudar, siempre que no sacrifiquemos nada moralmente
53
Singer, Peter (1972), pág. 233.
54
Es interesante la distinción que hace Larry Temkin entre un deber supererogatorio y un deber positivo:
“Frecuentemente, se asume que la diferencia entre deberes positivos y negativos es que mientras los
negativos son estrictos –y deben ser cumplidos de formas precisas– los positivos otorgan un gran margen
para su cumplimento. Así, se piensa que los deberes positivos son como dar a la caridad […]. Pero esto es
un grave error. [Esto] mezcla la categoría de deberes positivos –actos que tenemos un deber de hacer,
quizá en beneficio de otros– con la categoría de deberes supererogatorios –actos que están por encima y
30
comparable (según el primer principio) o nada moralmente significativo (según el
segundo principio), está mal. Ayudar es algo que todos debemos hacer.
categorías morales es que ayudar a todas las personas que lo necesiten supondría
convertirnos en héroes o santos morales. Es decir, tal como Singer lo concibe, el deber
de ayudar nos exige un nivel de sacrificio que la mayoría de nosotros (que no somos
santos ni héroes) no estaría dispuesta a hacer. Como dicen Barry y Overland, sacrificar
prácticamente todo para salvar a otra persona de morir de hambre puede ser algo
“heroico y digno de elogio”55 pero excedería por mucho al sacrificio que la mayoría de
2) El diezmo
la siguiente manera:
más allá del llamado del deber. […] uno no puede simplemente ignorar los deberes positivos, sin actuar
mal [without acting wrongly], ni puede cumplirlos de cualquier manera”. Temkin, Larry (2004), pág. 357.
La letra cursiva es del autor.
55
Barry, Christian y Overland, Gerhard (2013), pág. 193.
56
Singer, Peter (1995).
31
“Primera premisa: si podemos evitar que ocurra algo malo sin sacrificar nada de
Tercera premisa: hay parte de la pobreza absoluta que podemos evitar sin
Tal como vimos en el apartado anterior, este argumento nos dice que debemos
dar hasta que, dando más, nos causaríamos un daño a nosotros o a nuestras familias
último apartado del capítulo 8, titulado “¿Un nivel demasiado alto?”58, hace lugar a las
Así, afirma que todos deberíamos donar, al menos, el 10% de nuestros ingresos. El 10%
es la cifra adecuada porque “es más que una donación simbólica y no [es] tanto como
para convertirnos en santos”59. Además, “tiene la ventaja añadida de que [recuerda al]
los pobres dentro de la comunidad local a la que uno pertenecía”60. Así, todas las
personas cuyos ingresos les permiten cubrir sus necesidades básicas y gastar dinero en
lujos o frivolidades deberían donar el 10% de sus ingresos para ayudar a aliviar el
57
Singer, Peter (1995), pág. 287. La letra cursiva es mía.
58
Singer, Peter (1995), pág. 302.
59
Singer, Peter (1995), pág. 307.
60
Singer, Peter (1995), pág. 307.
32
hambre. Por supuesto, quienes puedan donar más deberían hacerlo. Pero “bajo cualquier
nivel ético razonable, esto es lo mínimo que deberíamos dar, haciendo mal si aportamos
menos”61.
Como puede verse, la opción defendida en este capítulo 8 (donar el 10% de los
propios ingresos) es incluso más moderada que el principio moderado del artículo de
1972, el cual ya era una segunda mejor opción con respecto al principio fuerte, que era
en 1993, Singer afirma que el mínimo que debemos dar para cumplir con nuestra
apenas la cifra del 1%, esto es, el 10% de su 10% anterior. ¿Cómo es que Singer llega a
Singer hace los siguientes cálculos. Según el Banco Mundial, “costaría entre
40.000 y 60.000 millones de dólares de ayuda adicional al año lograr los objetivos de
61
Singer, Peter (1995), pág. 307. La letra cursiva es mía.
62
Singer, Peter (1995).
63
Singer, Peter (2003).
64
El 1% es la cifra que Singer sigue defendiendo: http://www.thelifeyoucansave.org/
65
Singer, Peter (2003), pág. 205. Los objetivos son reducir a la mitad la pobreza extrema y el hambre.
33
aproximadamente 600 millones de personas adultas. Si cada una de ellas donara 100
dólares al año por los siguientes 15 años, se podrían cumplir los objetivos de la Cumbre
del Milenio, ya que 100 dólares multiplicados por 600 millones de personas da como
resultado 60.000 millones de dólares, que era la cifra requerida, según el Banco
Ahora bien, Singer calcula que 100 dólares es el 0,4% de un salario medio en los
países ricos. Si todas las personas adultas que viven en los países ricos y que ganan un
pobreza a la mitad. Pero 1) “debería ser más urgente para nosotros eliminar la
propios ingresos”67. De acuerdo con Singer, “una cifra simbólica más útil sería el 1% y,
de hecho, esta cifra estaría más cercana a lo que se necesitaría para eliminar, más que
para reducir a la mitad, la pobreza global”68. Por supuesto, Singer afirma que el 1% es
Como no todas las personas adultas que viven en los países ricos ganan lo
suficiente como para donar una parte de sus ingresos y como algunas personas adultas
que viven en los países pobres ganan más de lo necesario para cubrir sus necesidades
básicas, Singer concluye que todas las personas del globo cuyos ingresos les permitan
cubrir sus necesidades básicas y gastar en lujos y frivolidades tienen la obligación moral
de donar (al menos) el 1% de esos ingresos para ayudar a aliviar el hambre. De acuerdo
66
Singer, Peter (2003), pág. 206.
67
Singer, Peter (2003), pág. 206.
68
Singer, Peter (2003), pág. 206.
69
Singer, Peter (2003), pág. 207. La letra cursiva es mía.
34
con Singer, “dar el 1% de los ingresos anuales para superar la pobreza mundial es lo
mínimo que uno debe hacer para llevar una vida moralmente digna”70.
Como puede verse, este 1% está lejos del 10% anterior, el cual ya estaba lejos
del principio moderado, el cual era una segunda mejor opción con respecto al principio
fuerte, que es, para Singer, el principio moralmente correcto. Y donar el 1% de ninguna
A lo largo de 30 años, Singer fue matizando, cada vez más, su posición. O mejor
dicho, fue bajando el nivel de lo que, según él, nos exige la moral. En su artículo de
1972, ya hace una primera concesión con respecto a aquello que considera como lo
moralmente óptimo (el principio fuerte) y luego continúa concediendo hasta llegar a un
1%, en su libro de 2002. La idea que subyace a estas concesiones es la siguiente: poner
cambio, poner un nivel más bajo podría hacer que la gente ayudara más, al ver que
aquello que se le exige no es tanto (o es casi nada). Así, estas concesiones tienen el
Tal vez, hubiera valido la pena detenerse en el 10%, una cifra más significativa, aunque
70
Singer, Peter (2003), pág. 207. La letra cursiva es mía.
35
4) ¿Cuál debe ser el nivel de exigencia de una teoría moral?
En el capítulo 5 del libro Lo que nos debemos unos a otros71, Scanlon formula
un Principio de auxilio. Este principio afirma que “si a usted se le presenta una situación
en la que puede impedir que ocurra algo muy malo, o en la que puede aliviar la penosa
situación de alguien con sólo un pequeño (o incluso moderado) sacrificio, entonces sería
favor de tal principio”73. Disiento con Scanlon. Como puede leerse en el apartado 1 de
este capítulo, el Principio de auxilio no recoge ninguno de los dos principios a favor de
los cuales argumenta Singer en su texto de 1972. Ambos principios exigen algo más que
mucho más que el Principio de auxilio y el principio moderado exige como mínimo (y
no como máximo) hacer un sacrificio moderado. Más bien, creo que el Principio de
auxilio recogería el principio que está detrás del ejemplo del estanque. En este ejemplo,
este principio sino de principios más exigentes. El Principio de auxilio, formulado por
Dice Scanlon: “Sería razonable […] rechazar un principio que nos exigiese, en
cada decisión que tomásemos, no otorgar más peso a nuestros intereses que a los
intereses similares de los demás”74, ya que, desde la perspectiva del agente, “dicho
71
Scanlon, T. M. (2003).
72
Scanlon, T. M. (2003), pág. 285.
73
Scanlon, T. M. (2003), pág. 285, nota.
74
Scanlon, T. M. (2003), pág. 285.
36
principio sería intolerablemente intrusivo”75. Pero el Principio de auxilio evita “este
grado de intrusividad”76, ya que sólo es válido “en los casos en que se puede impedir
que ocurra algo muy malo sólo con un coste leve o moderado para uno mismo. Dadas
las circunstancias en las que vivimos, incluso este principio limitado es exigente. Es
difícil que alguno de nosotros viva de acuerdo con lo que dicho principio exige. Sin
puede ser altamente intrusivo. Pero considero que si realmente creemos que “todo ser
principio fuerte es el principio correcto. Para responder a la pregunta que da título a este
apartado, creo que el nivel de exigencia de una teoría moral debe ser el más alto o, al
menos, el suficiente como para mostrar que la teoría en cuestión realmente afirma y
sostiene el valor moral igual de todas las personas. Sin duda, reconocer humanidad e
igual valor moral a todos los seres humanos puede ser algo muy exigente, tanto para
nosotros como para nuestras instituciones, pero que la exigencia sea alta no debería
llevarnos a sostener teorías menos exigentes, sino a reflexionar sobre las formas en que
Dicho esto, estoy de acuerdo con Singer en bajar las exigencias de la moral para
que la gente no vea esas exigencias como inalcanzables y aumentar así las
75
Scanlon, T. M. (2003), pág. 286.
76
Scanlon, T. M. (2003), pág. 286.
77
Scanlon, T. M. (2003), pág. 286.
78
Nussbaum, Martha (1999), pág. 161. La cita completa dice: “Sean cuales fueren nuestros vínculos y
aspiraciones, deberíamos ser conscientes, independientemente del coste personal o social que ello
implicase, de que todo ser humano es humano y que su valor moral es igual al de cualquier otro”. La letra
cursiva es mía.
37
probabilidades de que la gente cumpla, pero sin dejar de sostener el principio fuerte
como el principio moralmente correcto. Si actuar de acuerdo con el principio fuerte nos
parece algo imposible y fuera de nuestro alcance, podemos optar por alguna de las otras
nuestros ingresos. No hacer ninguna de estas cosas sería claramente inmoral. Pero aun
haciendo alguna de ellas, debemos tener siempre en mente que el ideal a alcanzar es el
Para terminar, hago una distinción entre los principios y deberes mencionados en
este capítulo. Considero que mientras el Principio de auxilio y las propuestas de donar
principio fuerte y el moderado nos dicen cómo debemos vivir. Por un lado, el principio
fuerte nos dice que debemos vivir una vida casi completamente despojada. Por otro
lado, el principio moderado nos dice que debemos vivir una vida frugal y sencilla,
alejada del consumismo que impera en las sociedades contemporáneas. En este sentido,
creo que estos dos últimos principios son más interesantes, ya que no nos dicen
exclusivamente cuánto debemos donar, sino principalmente qué debemos hacer para
llevar vidas morales en un mundo en el que una gran parte de la población vive en la
pobreza absoluta.
Aunque los análisis realizados en este capítulo son muy interesantes, aquí
abandono los argumentos de Singer (que sin embargo retomaré en la última parte de la
capítulo siguiente, la posición de este último filósofo tiene dos aspectos relevantes (que
contrastan con la de Singer): se interroga por las causas de la pobreza global y hace
79
Ver las Palabras finales, luego del capítulo 7.
38
hincapié en nuestros deberes negativos, lo cual resulta totalmente desafiante y novedoso
39
40
2. JOHN RAWLS Y THOMAS POGGE:
Asamblea General de las Naciones Unidas, el 8 de septiembre del año 2000. El primer
metas:
padecen hambre.
80
Ver http://www.un.org/spanish/milenio/ares552s.htm
81
Ver http://www.un.org/es/millenniumgoals/poverty.shtml
82
Las Metas del Milenio han recibido varias críticas. Por ejemplo, Peter Singer dice: “[…] el Banco
Mundial calcula que costaría entre 40.000 y 60.000 millones de dólares de ayuda adicional al año lograr
los objetivos de desarrollo establecidos en la Cumbre del Milenio. Estos objetivos, dirigidos a reducir la
41
opiniones con respecto a las causas que deben ser atacadas para alcanzar las metas
propuestas.
En este capítulo, confrontaré dos visiones acerca del problema de la pobreza. Por
un lado, la pobreza puede verse exclusivamente como un problema cuyas causas son
internas a cada país y respecto del cual el orden internacional no juega ningún rol
importante. Por otro lado, puede verse como un problema cuyas causas son tanto
internas como externas y respecto del cual el orden internacional (diseñado y modelado
Rawls), el deber de los países ricos con respecto a los pobres es un deber de asistencia,
ejemplificado por Thomas Pogge), el deber de los países ricos con respecto a los pobres
o ayudar a realizar las reformas necesarias en el orden global para que todas las
pobreza y el hambre a la mitad para el 2015, son más modestos que la eliminación de la pobreza. Podrían
dejar intacta la situación de los más pobres, en países donde los costes de llegar hasta la gente más pobre
sean mayores que en países donde hay mejores infraestructuras. Pero al menos sería un hito en el camino
hacia una victoria total sobre la pobreza”. Singer, Peter (2003), págs. 205-206. Por su parte, Marcelo
Alegre señala: “[…] las metas pueden ser criticadas por pretender reducir a la mitad la proporción de
personas que viven bajo extrema pobreza en lugar de eliminar la pobreza. Esta formulación no muestra
respeto hacia cada una de las víctimas de esta injusticia global. […] La pobreza extrema es una evitable
vergüenza moral para la humanidad que debe ser erradicada lo más urgentemente posible”. Alegre,
Marcelo (2005), pág. 182.
83
Ver Gilabert, Pablo (2012), págs. 11-18.
84
Ver Pogge, Thomas (2000).
42
1) Rawls y el deber de asistencia
respecto al tipo de cosmopolita que Rawls sería. El cosmopolitismo “débil” difiere del
“fuerte” en tanto este último requiere “un principio de justicia global distributivo”86. Y
de acuerdo con Freeman87, es posible leer a Rawls como un cosmopolita “fuerte”. Dice
Freeman: “El deber de asistencia de Rawls no es (como sus críticos afirman) un deber
de caridad. Más bien es un deber de justicia que los pueblos bien ordenados les deben a
las sociedades menos favorecidas que viven bajo circunstancias desfavorables. El deber
debería tener como objetivo ‘asegurar un mundo que haga posible una vida valiosa para
todos’”88. En este sentido, Freeman argumenta: “Dado el paralelismo que Rawls hace
con el principio de ahorro, parecería que el deber de asistir a las sociedades menos
de asistir a las sociedades menos favorecidas entonces debería tener prioridad sobre el
principio de la diferencia y sobre los deberes de justicia distributiva hacia los miembros
mundo, lo cual modera los reclamos de justicia distributiva dentro de una sociedad. En
85
Agradezco a Javier Flax por sus comentarios, los cuales me motivaron a agregar esta sección.
86
Freeman, Samuel (2007), pág. 439.
87
Freeman, Samuel (2007), capítulo 10.
88
Freeman, Samuel (2007), pág. 441. La letra cursiva es del autor.
89
Freeman, Samuel (2007), págs. 441-442. La letra cursiva es del autor.
43
este sentido, y dadas las demandas potencialmente exigentes que el deber de asistencia
puede poner sobre los pueblos aventajados, el cosmopolitismo ‘débil’ de Rawls podría
ya que, como se verá en la siguiente sección, Rawls rechaza cualquier tipo de principio
filósofos rawlsianos, como Mathias Risse y Julio Montero (cuyos trabajos se incluyen
en esta tesis). Ninguno de estos autores (ni otros, al menos según mi conocimiento)
siguen los propios rawlsianos (ya que la tesis dialoga y debate con ellos).
que [un orden institucional doméstico] funciona de modo justo”93. En respuesta a esta
pregunta, elabora dos principios de justicia doméstica94. Casi treinta años más tarde, en
1999, publicó otro libro, El derecho de gentes95, orientado esta vez a responder a la
90
Freeman, Samuel (2007), pág. 442.
91
Rechazo que, para Freeman, es “difícil de defender”. Freeman, Samuel (2007), pág. 442.
92
Rawls, John (1995).
93
Gargarella, Roberto (1999), pág. 21.
94
Rawls, John (1995), capítulo II.
95
Rawls, John (2001).
44
pregunta acerca de cuándo podemos decir que un orden institucional internacional es
“8. Los pueblos tienen el deber de asistir a otros pueblos que viven bajo
condiciones desfavorables que les impiden tener un régimen político y social justo o
decente”98.
De acuerdo con Rawls, estos principios son adoptados por todos los pueblos bien
ordenados. El nombre de “pueblos bien ordenados” hace referencia a los pueblos que
están orientados a “promover el bien de sus miembros”99 y engloba tanto a los pueblos
liberales razonables como a los pueblos jerárquicos decentes, los cuales poseen una
sociedades menos favorecidas a las que los pueblos bien ordenados tienen el deber de
asistir? Rawls dice: “Las sociedades menos favorecidas se caracterizan porque no son
96
Rawls, John (2001), pág. 50. Las incongruencias entre ambos libros serán expuestas en el apartado
siguiente.
97
Los siete primeros principios son los siguientes: “1. Los pueblos son libres e independientes, y su
libertad y su independencia deben ser respetadas por otros pueblos. 2. Los pueblos deben cumplir los
tratados y convenios. 3. Los pueblos son iguales y deben ser partes en los acuerdos que los vinculan. 4.
Los pueblos tienen un deber de no intervención. 5. Los pueblos tienen el derecho de autodefensa pero no
el derecho de declarar la guerra por razones distintas a la autodefensa. 6. Los pueblos deben respetar los
derechos humanos. 7. Los pueblos deben observar ciertas limitaciones específicas en la conducción de la
guerra”. Rawls, John (2001), pág. 50. La letra cursiva es mía.
98
Rawls, John (2001), pág. 50. Si bien es cierto que todos los principios son principios de justicia
internacional, el principio que tiene una importancia mayor para mi tesis es el 8, dada la relevancia que
este principio adquirió en los debates sobre justicia y pobreza globales y dada la atención que se le brinda.
Ver Freeman, Samuel (2007), capítulo 10. Agradezco a Javier Flax por sus comentarios, los cuales me
motivaron a agregar esta aclaración.
99
Gargarella, Roberto (1999), pág. 35.
100
Rawls, John (2001), págs. 14-15.
45
agresivas ni expansivas y carecen de las tradiciones políticas y culturales, el capital
En primer lugar, debemos tener en cuenta que una sociedad no necesita ser rica
para ser bien ordenada. El objetivo del deber de asistencia es ayudar a las sociedades
En segundo lugar, se debe tener en cuenta que no hay una “receta simple” que
les indique a los pueblos bien ordenados cómo pueden ayudar a las sociedades menos
favorecidas. Rawls dice: “Creo que las causas y las formas de la riqueza de un pueblo
políticas”102. Se entiende entonces por qué no hay una “receta simple” mediante la cual
las sociedades bien ordenadas puedan ayudar a las sociedades menos favorecidas:
porque las causas de la pobreza son internas y están asociadas a la cultura y a las
tradiciones de una sociedad determinada. No hay nada que se pueda hacer “desde
101
Rawls, John (2001), pág. 125.
102
Rawls continúa: “Me aventuro a suponer que no existe sociedad alguna en el mundo, salvo casos
marginales, por escasos que sean sus recursos, que no se pueda organizar y gobernar razonable y
racionalmente, y convertirse en una sociedad bien ordenada. Los ejemplos históricos parecen indicar que
los países con recursos escasos, como Japón, pueden hacerlo muy bien, mientras que los países con
recursos abundantes, como Argentina, pueden afrontar grandes dificultades. Los elementos cruciales que
establecen las diferencias son la cultura política, las virtudes políticas de la sociedad civil, y la probidad,
laboriosidad y capacidad de innovación de sus miembros. También resulta decisiva la política
demográfica del país: no hay que sobrecargar el territorio y la economía con una población mayor que la
que se puede sostener”. Rawls, John (2001), págs. 127-128. La letra cursiva es mía.
46
afuera”. Y si lo hay, no se sabe bien qué es ni cómo hacerlo103. A pesar de esto, según
envío de dinero, sino, muchas veces, en la insistencia en que las instituciones y los
gobernantes de las sociedades menos favorecidas cumplan con los derechos humanos.
En tercer lugar, y tal como se mencionó, se debe tener en cuenta que el deber de
asistencia tiene un objetivo preciso: ayudar a las sociedades menos favorecidas de modo
que logren convertirse en bien ordenadas. Una vez alcanzado este objetivo, la ayuda
internacional debe cesar, a pesar de que “la nueva sociedad bien ordenada puede ser
regula la distribución de los recursos dentro de una sociedad y afirma que las
desigualdades de recursos entre sus miembros sólo son aceptables si favorecen a los
principio de la diferencia afirmaría que las desigualdades de recursos entre países sólo
son aceptables si benefician a las sociedades menos favorecidas. Sin embargo, Rawls
103
En la misma línea irá Mathias Risse. Ver capítulo 5, apartado 2.
104
Rawls, John (2001), pág. 128.
105
Rawls, John (2001), pág. 130.
106
Rawls, John (1995), capítulo II.
107
Ver también el análisis de Freeman, Samuel (2007), págs. 449-455. Dice Freeman: “[…] en ausencia
de un Estado mundial, no puede haber una estructura básica global equivalente a la estructura básica de la
sociedad. En efecto, no hay nada en las relaciones globales que esté cerca de ser comparable a las
instituciones políticas, legales, de la propiedad y económicas de la estructura básica de la sociedad. […]
47
En el primer caso, hay dos países liberales o decentes que tienen el mismo nivel
y el otro decide llevar una vida más apacible y placentera. Luego de un tiempo, el país
que decidió industrializarse es dos veces más rico que el otro. Rawls dice: “Si
suponemos que ambas sociedades son liberales o decentes y sus pueblos libres y
impuesto al país industrializado para ayudar al otro país? Según el deber de asistencia,
no habría impuesto alguno y ello parece justo; pero con un principio de distribución
global sin objeto específico habría impuestos mientras la riqueza de un pueblo fuese
misma riqueza y la misma cantidad de gente. Ambos países deciden promover los
derechos de las mujeres. Uno de los países le otorga a este objetivo una prioridad
especial, por lo que las mujeres avanzan en todos los ámbitos públicos, haciendo
descender la tasa de natalidad. El otro país, debido a las creencias religiosas que
sostiene, no logra hacer descender su tasa de natalidad. Luego de un tiempo, el país que
bajó la tasa de nacimientos es dos veces más rico que el otro. Nuevamente, Rawls
sostiene que cobrar un impuesto al país rico para ayudar al pobre sería “inaceptable”109.
Existe una cooperación global y existen instituciones globales, pero éstas no son instituciones básicas.
Más bien, los arreglos políticos, legales y económicos son instituciones y prácticas secundarias: ellas son
en gran medida el producto de arreglos y tratados entre los pueblos y sobrevinieron después de la
multiplicidad de instituciones sociales básicas que constituyen la estructura básica de muchas sociedades
diferentes. Consecuentemente, la única estructura básica global factible que puede existir es también
secundaria y sobreviniente: en el caso ideal, es nada más que ‘la estructura básica de la Sociedad de los
Pueblos’ y los principios que la gobiernan son el Derecho de Gentes”. Freeman, Samuel (2007), pág. 450.
La letra cursiva es del autor.
108
Rawls, John (2001), pág. 136.
109
Rawls, John (2001), pág. 137.
48
Para apoyar estas conclusiones, Rawls señala que existe una diferencia
transición, esto es, tiene un objetivo y un término específicos: “En la sociedad del
derecho de gentes, el deber de asistencia rige hasta cuando todas las sociedades han
adoptado instituciones básicas justas, liberales o decentes”111. Una vez que este objetivo
distributiva no sería un principio de transición, sino que regiría siempre, así como el
principio de la diferencia rige siempre (en el ámbito doméstico). De este modo, Rawls
señala que existe un contraste marcado entre el derecho de gentes y lo que él llama la
mientras el derecho de gentes se preocupa por que todas las sociedades sean justas, la
este contraste con otro caso. Hay dos sociedades que cumplen con los dos principios de
individuo representativo que está peor que el individuo representativo que está peor en
la otra sociedad. Ahora bien: “Supóngase que fuere posible, a través de alguna forma de
redistribución global que permitiera a ambas sociedades seguir satisfaciendo los dos
110
Rawls, John (2001), pág. 137.
111
Rawls, John (2001), pág. 137.
112
Rawls, John (2001), pág. 138.
113
Este contraste entre Rawls y Pogge se repetirá entre Pogge y Risse, seguidor de Rawls. Ver capítulos 4
y 5.
114
Rawls, John (1995), págs. 67-68.
49
original?”115. La respuesta de Rawls es que el derecho de gentes es “indiferente”116
la justicia de las sociedades. Como las dos sociedades del ejemplo son justas, el derecho
de gentes no cree que el hecho de que se pueda mejorar la situación del individuo
representativo que está peor sea un hecho que le concierna a él. Por el contrario, la
de la justicia
Peter Singer critica la posición adoptada por Rawls en El derecho de gentes. Las
críticas señalan algunas incongruencias entre este último libro y Teoría de la justicia, en
el que Rawls elabora los principios de justicia que deben regir una sociedad justa.
convertirse en bien ordenadas. Singer afirma: “[…] tal como es el actual estado de
115
Rawls, John (2001), pág. 139.
116
Rawls, John (2001), pág. 139.
117
Singer, Peter (2003), pág. 192.
50
pone demasiado énfasis en el objetivo de lograr que las sociedades del mundo sean bien
ordenadas y demasiado poco énfasis en el objetivo de ayudar a las personas que ahora
evitadas.
poder de esta crítica. De acuerdo con Freeman, la lista de Rawls de los derechos
forzado, y el derecho a tener propiedad personal); (3) los derechos a la igualdad formal
y a las protecciones garantizadas por el estado de derecho (debido proceso, juicio justo,
considera [que cobrar un impuesto al país rico para ayudar al pobre es] inaceptable,
inaceptable que una persona que ha trabajado duro y se ha enriquecido sea sometida a
impuestos para apoyar a alguien que ha llevado una vida más relajada y que está ahora,
en términos de recursos, entre los que están peor en su sociedad? Ambos casos plantean
razones por las cuales no pueda ser respondido en el caso de la redistribución entre
118
Freeman, Samuel (2007), pág. 435. La letra cursiva es mía. Agradezco a Javier Flax por sus
comentarios, los cuales me motivaron a agregar esta aclaración.
51
sociedades”119. En el ámbito doméstico, la redistribución que hace el principio de la
las personas que están peor, en términos de recursos, por elección y las que están peor
igualmente difícil distinguir entre las sociedades que están peor, en términos de
recursos, por elección y las sociedades que están peor debido a circunstancias no
aceptable.
entre ellas. Sin embargo, en el mundo real, las sociedades no funcionan así, sino que
las sociedades industrializadas contaminan mucho más la atmósfera que las sociedades
cuales las primeras no pagan nada. Así, pretender un aislamiento o desconexión entre
circunstancias sociales’. Ahora, sin embargo, declara que su teoría es indiferente a las
consecuencias de algo tan contingente como a qué lado de la frontera le toca a uno vivir.
119
Singer, Peter (2003), pág. 191.
120
E incluso puede resultar humillante e inhumano. Ver Wolff, Jonathan (2007).
52
Estas dos posiciones no pueden ser reconciliadas”121. Nadie merece la suerte de haber
nacido en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o la mala suerte de haber nacido en una
zona rural de la Provincia del Chaco. Así como nadie merece la suerte de haber nacido
Con esta última crítica, Singer termina de señalar las incongruencias entre la
posición que Rawls adopta con respecto a la justicia en el ámbito doméstico (plasmada
en El derecho de gentes).
idea de Rawls de que las causas de la pobreza son puramente internas. Para Pogge,
persistencia de la pobreza de los países pobres son internas y que, por lo tanto, la
con Pogge, esta tesis tiene dos efectos. En primer lugar, hace que las personas
acomodadas de los países ricos y que las personas acomodadas de los países pobres
53
un problema de justicia (o de falta de ella). Y en segundo lugar, hace que estas personas
pobres y no como agentes sobre los cuales pueden recaer deberes más fuertes 125. Para
Pogge no niega que la pobreza de los países pobres se deba a factores internos, pero
afirma que estos factores son, muchas veces, causados, modelados y sostenidos por
factores externos, los cuales entonces no pueden ser soslayados al hablar de las causas
[ambiente], uso de los recursos de los fondos marinos, y muchos más. Este tipo de
reglas pueden ser amoldadas para ser más o menos favorables a las partes que son
afectadas por ellas, como las sociedades ricas y las pobres”126. De acuerdo con Pogge, el
El otro punto del planteo de Pogge consiste en sostener que el orden mundial
daña a los pobres globales. Para mostrar esto, Pogge recurre a la siguiente estrategia: no
125
Estos deberes serán explicitados de forma completa en el capítulo 7.
126
Pogge, Thomas (2005e), pág. 221.
54
determinará si el orden mundial daña o no a los pobres globales mediante un concepto
de daño temporal-histórico (esto es, cómo les iba a los países pobres antes de que
surgiera este orden global y cómo les fue después de su surgimiento) o mediante la
comparación con un estado de naturaleza hipotético (esto es, cómo les iría a los países
pobres si no hubiera orden global alguno). En cambio, evaluará si los pobres globales
son dañados mediante un juicio acerca de la justicia de las reglas y las prácticas que
estructuran el orden mundial127. Así, Pogge afirma: “El acuerdo vigente de ADPIC
es mejor para nosotros y peor para los pobres globales que uno alternativo que hubiese
requerido que los países ricos proveyesen a los pobres de fondos con los que protegerse
Ley del Mar es mejor para nosotros y peor para ellos que uno alternativo que hubiese
recursos del lecho marino. Es mejor para nosotros y peor para los pobres globales que
nosotros no tengamos que pagar por las externalidades negativas que les imponemos:
por la polución que hemos producido durante muchas décadas y los efectos resultantes
contribución de nuestros turistas a la epidemia del sida y por la violencia causada por
nuestra demanda de drogas y nuestra guerra contra ella”128. En base a esto, Pogge
concluye: “Resulta pues muy difícil de ver el modo de defender los intercambios
mencionados en nuestro orden global como compatibles con la justicia. Y si este orden
es injusto, entonces se sigue, sin necesidad de apelar a ninguna línea de base, histórica o
[a] un supuesto estado de naturaleza, que estamos dañando a los pobres globales –
127
La estrategia de Pogge para determinar el daño se verá con más detalle en el capítulo 4.
128
Pogge, Thomas (2005e), págs. 241-242.
55
malnutrición y muertes prematuras es mucho mayor de lo que hubiese sido bajo algunas
alternativas factibles”129. El orden internacional daña entonces porque las reglas y las
prácticas que lo estructuran son injustas. Y son injustas porque muchos de los
internacional ha reconocido130.
Si los países ricos diseñan el orden global que perjudica a los países más pobres,
entonces los países ricos no tienen solamente el deber de asistirlos, como afirma Rawls,
sino que tienen principalmente el deber de no dañarlos. Para Pogge, no dañar a los
países pobres implica el deber de realizar o ayudar a realizar las reformas necesarias en
el orden global para que este orden se convierta en un orden más justo, en el que los
negativo de no dañar tiene dos ventajas. En primer lugar, este deber es más fuerte que el
deber positivo de asistir y, por lo tanto, su violación es más seria. Como se dijo en el
deber supererogatorio: ayudar es algo que está bien hacer pero que no está mal omitir132.
deber de asistir parece más fuerte con respecto a nuestros conciudadanos, el deber de no
dañar a terceros es tan fuerte cuando se trata de las personas que viven en nuestro
territorio como cuando se trata de personas que viven en países lejanos. Así, si el orden
ciudadanos y los gobiernos de los países ricos que sostienen y apoyan este orden están
129
Pogge, Thomas (2005e), pág. 242.
130
Ver Pogge, Thomas (2007a).
131
Ver Pogge, Thomas (2005a), capítulo 2 y Pogge, Thomas (2000).
132
Aunque tanto Singer como Temkin cuestionan esta idea. Ver capítulo anterior, apartado 1.
56
violando (o más precisamente, están contribuyendo a violar)133 su deber negativo de no
dañar.
133
La diferencia entre “violar” y “contribuir a violar” se explicitará en los capítulos 6 y 7.
57
58
3. JOSHUA COHEN:
social, pobreza global], Joshua Cohen cuestiona y critica algunas de las tesis centrales
son las formas posibles de recorrerlo. En este capítulo, recortaré la crítica que hace este
autor a lo que él llama la “tesis fuerte” de Pogge y trataré de dar una respuesta135. Esta
respuesta incluirá la intención de elaborar una visión propia del planteo poggeano sobre
Cohen es el “impacto” que Pogge le asigna a “los cambios apropiados de las reglas
134
Cohen, Joshua (2010), “Philosophy, social science, global poverty”, en Jaggar, Alison (2010), págs.
18-45.
135
Mi respuesta es diferente a la respuesta que el propio Pogge le da a Cohen. Pogge, Thomas,
“Responses to the critics”, en Jaggar, Alison (2010), págs. 175-191.
136
Jaggar, Alison (2010), pág. 19.
59
“Tesis fuerte: la mayor parte del problema de la pobreza global podría ser
Cohen extrae esta tesis del libro de Pogge, La pobreza en el mundo y los
lugar, afirma que el orden global “comprende las reglas basadas en tratados y
derechos humanos y el medio ambiente: las reglas que gobiernan a los que hacen las
reglas globales, las normas y los estándares asociados con la soberanía territorial, las
políticas adoptadas por las organizaciones que hacen las reglas globales […] y las
políticas de seguridad y asistencia de los Estados más poderosos del mundo […]”142.
Sin embargo, Cohen afirma que definir con precisión qué es lo que se entiende por
137
Un ejemplo de “reducción pequeña” sería el siguiente: “Los 2.800 millones de personas más pobres
tienen juntas cerca del 1,2% de la renta global agregada, mientras que los 908 millones de personas de las
‘economías de renta alta’ acaparan el 79,7%. Con sólo transferir un 1% de la renta global agregada –
312.000 millones de dólares anuales– del primer grupo al segundo, se erradicaría la pobreza mundial
extrema”. Pogge, Thomas (2005a), pág. 14.
138
Jaggar, Alison (2010), pág. 19. “Strong Thesis: Most of the global poverty problem could be
eliminated through minor modifications in the global order that would entail at most slight reductions in
the incomes of the affluent”.
139
Pogge, Thomas (2005a).
140
Especialmente del ensayo “Severe poverty as a human rights violation” [Pobreza severa como una
violación de derechos humanos]. Allí, Pogge dice: “La mayor parte del número de muertes anuales [18
millones de muertes por pobreza por año] es fácilmente evitable a través de modificaciones menores en el
orden económico global que implicarían solamente una pequeña reducción en los ingresos de los ricos”.
Pogge, Thomas (2004b), pág. 18.
141
Jaggar, Alison (2010), pág. 19.
142
Jaggar, Alison (2010), pág. 19.
60
“orden global” es una tarea difícil143. Por lo tanto, declara que su argumento no
un punto de vista normativo más general. El corazón de este punto de vista es que el
orden global daña a los pobres globales, los daña al tratarlos injustamente, los trata
injustamente al violar sus derechos humanos, viola estos derechos al imponer reglas que
podrían ser cambiadas en formas que aliviaran la mayor parte de la pobreza extrema
mundial. Más específicamente […], nosotros dañamos a los pobres globales, nosotros
ciudadanos de los países ricos, al imponer (al menos a través de una complicidad
culpable) las reglas globales actuales y al no hacer los cambios de reglas que resolverían
Por último, Cohen afirma que la tesis fuerte no dice que “los cambios en las
reglas globales son la única forma de reducir la pobreza extrema”145, ya que los países
podrían sacar a sus poblaciones de la pobreza aun cuando las reglas globales se
mantuvieran fijas (tal como hizo China, por ejemplo). La tesis fuerte dice que “los
cambios en las reglas globales bastarían para eliminar ‘la mayor parte de la pobreza
severa’ y que nosotros no estaríamos ahora viendo estos efectos si el orden global
143
En el texto breve “Global justice” [Justicia global], Cohen ofrece una caracterización no del “orden
global” pero sí de lo que se denomina “globalización”. Allí, sostiene que la globalización es un hecho y
que este hecho no puede ser ignorado por la filosofía política y la moral. De acuerdo con Cohen, la
globalización se manifiesta en tres aspectos: el económico, el político y el civil. En el económico, “el
mundo está más integrado, con costos reducidos de comunicación y transporte, un flujo incrementado de
bienes y capitales entre las fronteras y una dispersión de la producción”. Esta integración económica, si
bien no constituye un mercado único, afecta la vida de las personas en todo el mundo. En el político,
existen ahora nuevas formas de gobierno que tienen injerencia en áreas como los derechos humanos, el
medio ambiente y la economía mundial. Estas nuevas formas de gobierno hacen reglas y establecen
políticas que afectan las vidas de millones de personas en todo el planeta. Por último, en el civil, existe
una sociedad global emergente constituida por distintos movimientos y organizaciones no
gubernamentales que peticionan y reclaman no sólo ante los Estados sino también ante las nuevas formas
de gobierno global. Por lo tanto, de acuerdo con Cohen, “enfrentamos un mundo nuevo de integración
económica global, políticas globales y una sociedad civil global emergente”. Cohen, Joshua (2005), págs.
5-6.
144
Jaggar, Alison (2010), pág. 20. La letra cursiva es del autor.
145
Jaggar, Alison (2010), pág. 20. La letra cursiva es del autor.
61
hubiera sido diseñado de forma diferente”146. Nuevamente, lo que llama la atención de
Cohen es el impacto (o la magnitud del impacto) que los cambios de las reglas globales
Luego de aclarar estos tres puntos, Cohen presenta su argumento del siguiente
modo: “Me parece indiscutible que hay mucho que los países ricos y los que hacen las
reglas globales pueden y deben hacer, y que los ciudadanos de esos países comparten la
No veo ninguna razón para aceptar la afirmación de que los cambios en las reglas
globales bastarían para acabar con la mayor parte de la pobreza terrible que sufren
tantas personas”147. Sin duda, Pogge estaría de acuerdo con Cohen con respecto a sus
dos primeras afirmaciones: 1) “hay mucho que los países ricos […] pueden y deben
extrema y su alivio”. Las preguntas que se le podrían hacer a Cohen son las siguientes:
¿qué es lo que pueden y deben hacer los países ricos? ¿Por qué deben hacerlo? ¿Por qué
los ciudadanos de los países ricos comparten la responsabilidad por la pobreza extrema?
146
Jaggar, Alison (2010), pág. 20.
147
Jaggar, Alison (2010), pág. 20.
62
2. La tesis convencional. La tesis fuerte es diferente de otra tesis a la que Cohen
llama “tesis convencional”, la cual afirma que “algunos cambios en las reglas globales
cambios en las reglas globales que no resultarían ellos mismos en daños morales
serios”149.
Como puede verse, la diferencia crucial entre ambas tesis es que mientras la tesis
fuerte afirma que los cambios apropiados de las reglas globales eliminarían “la mayor
parte” del problema, la tesis convencional sólo afirma que podría solucionarse “alguna
parte”.
De acuerdo con Cohen, esta tesis es menos controvertida que la tesis fuerte y,
acción coordinada”150. La virtud de esta tesis es que no exagera los efectos que tendrían
En la parte 4 de su texto, Cohen afirma que Pogge no nos ofrece “ninguna razón
para apoyar la tesis fuerte como distinta de la tesis convencional” 151. Y más adelante,
148
Jaggar, Alison (2010), pág. 26.
149
Jaggar, Alison (2010), pág. 26. La letra cursiva es del autor. “Conventional Thesis: Some global
poverty could be eliminated by changes in global rules that would not themselves result in serious moral
injuries”.
150
Jaggar, Alison (2010), pág. 27.
151
Jaggar, Alison (2010), pág. 31.
63
declara: “Sería absurdo negar que algunos cambios en las reglas globales serían más
tesis fuerte. De acuerdo con el autor, aquello que anima el punto de vista de Pogge sobre
doméstica”153. De este modo, la tesis fuerte se apoya en la idea de que los “malos
arreglos domésticos son el resultado de las reglas globales”154. Y según Pogge, los dos
rasgos de nuestro orden institucional global que generan malos arreglos domésticos son
Privilegio de los recursos. “La idea del privilegio de los recursos es que las
reglas globales actuales asignan el control completo de los recursos naturales de un país
depredación, no provee incentivos económicos para que los gobernantes sean decentes,
reduce los beneficios del control compartido del Estado […] y puede atraer a personas
crueles a la vida política”155. Si las reglas globales asignaran el control de los recursos
(como, por ejemplo, un apoyo popular), las instituciones domésticas mejorarían, ya que
152
Jaggar, Alison (2010), pág. 34.
153
Jaggar, Alison (2010), pág. 37.
154
Jaggar, Alison (2010), pág. 37.
155
Jaggar, Alison (2010), págs. 37-38. La letra cursiva es del autor.
64
los autócratas y los depredadores no tendrían incentivos para tomar el poder mediante
golpes de Estado.
Sin embargo, Cohen afirma que no hay ninguna manera plausible de mostrar que
las instituciones domésticas son tan sensibles a los cambios globales y que, por lo tanto,
tampoco hay ninguna manera de mostrar que las reglas globales explican las malas
instituciones domésticas. Para mostrar esto, necesitaríamos saber, entre otras cosas,
“cuán sensibles son los autócratas a las ganancias esperadas del control de los recursos
naturales, cuánto varía el índice esperado de ganancia con los cambios en las reglas
para Cohen, no hay forma de saber estas cosas. Por lo tanto, Pogge no ha mostrado que
que los problemas aparecen debido a las muy grandes ganancias que fluyen del
gobierno político, dadas las reglas actuales sobre los préstamos y los pagos.
soberanos de préstamos y pueden usar los préstamos para pagar las armas que usan para
arruinar las vidas de las personas a través de la guerra y aplastar a la oposición y luego
los prestamistas pueden requerir al gobierno sucesor que pague la deuda del déspota”157.
De modo similar al privilegio de los recursos, si las reglas globales fueran modificadas
pagar las deudas contraídas por gobiernos autoritarios anteriores, las instituciones
156
Jaggar, Alison (2010), pág. 39.
157
Jaggar, Alison (2010), págs. 39-40.
65
incentivos para llegar al poder y de medios para mantenerse (porque difícilmente
Dice Cohen: “Es horroroso ver a un régimen sucesor, por lo tanto a los
ciudadanos de un país, cargado con el pago de una deuda contraída con el propósito de
alimentar el gusto por los diamantes de sangre de algún depredador”158. Sin embargo,
afirma que la relación entre unas reglas globales que limiten las cargas de las deudas
débil. Esto se debe a dos razones. Por un lado, “porque mucha de la pobreza extrema no
es tocada por las cuestiones acerca de los privilegios de los préstamos”159. Por otro lado,
“porque las consecuencias, para el alivio de la pobreza, de cambiar esas reglas [sobre
los préstamos] son muy inciertas”160. Por lo tanto, Cohen considera que los cambios en
que tantos estén viviendo tan mal constituye un desastre moral […]. Construir un
mundo sin pobreza extrema […] requerirá una gama de esfuerzos, dependiendo del
lugar […]. Construirlo de una forma sostenible dependerá (entre otras cosas) de arreglos
domésticos decentes tanto como de reglas globales decentes […]. Y los países más ricos
tienen una responsabilidad significativa en construir ese mundo”161. Sin duda, Pogge
158
Jaggar, Alison (2010), pág.40.
159
Jaggar, Alison (2010), pág. 40.
160
Jaggar, Alison (2010), pág. 40.
161
Jaggar, Alison (2010), pág. 41.
66
2) Defensa de Pogge contra las críticas de Cohen
Una vez expuestas las críticas de Cohen, me gustaría presentar mi propia visión
del planteo poggeano sobre la justicia y la pobreza globales. En primer lugar, afirmaré
que la tesis fuerte no es esencial al punto de vista de Pogge sobre la pobreza global. En
Pogge.
1. La tesis fuerte como una tesis periférica162. Para mostrar lo primero, citaré un
duties”163 [Pobreza severa como una violación de deberes negativos]. Allí, Pogge dice,
es innegable que las reglas actuales conducen previsiblemente a una carencia evitable de
drogas asequibles para las enfermedades transmisibles más destructivas […]. Estas
Esto es una justificación suficiente para emprender los esfuerzos de reforma, incluso si
enfermedades transmisibles”165. El punto aquí es que las muertes causadas por las
enfermedades causadas por la falta de acceso a las drogas (causada, a su vez, por las
162
Tomo el nombre de “tesis periférica” (y más adelante, el de “núcleo”) del artículo de Gilabert, Pablo
(2007), aunque no sigo la clasificación que establece el autor.
163
Pogge, Thomas (2005c).
164
“Estas reglas recompensan a los inventores de nuevas drogas permitiéndoles cobrar precios
monopólicos por veinte años. Durante este período, incluso las drogas que salvan vidas no deben ser
producidas ni vendidas de modo más barato por los productores de genéricos y, por lo tanto, sus precios
están fuera del alcance de los pobres globales. Más aún, estas reglas desvían la investigación médica
hacia los ricos: las condiciones médicas que representan el 90% de la carga global de enfermedad sólo
reciben el 10% de toda la investigación médica alrededor del mundo”. Pogge, Thomas (2005c), pág. 77.
165
Pogge, Thomas (2005c), págs. 77-78. La letra cursiva es mía.
67
reglas globales sobre la investigación farmacéutica) son una justificación suficiente para
reformar las reglas actuales, aun cuando no sepamos cuántas muertes evitarán las
reformas.
“Es innegable que las reglas actuales del orden institucional global conducen
previsiblemente a una pobreza evitable. Esta pobreza explica las millones de muertes y
qué porcentaje la reforma reducirá la pobreza”. De nuevo, el punto aquí es que las
muertes causadas por la pobreza (causada, a su vez, por las reglas globales actuales) son
una justificación suficiente para reformar el orden institucional global, aun cuando no
Lo que intento mostrar es que la tesis fuerte puede convertirse en alguna suerte
de tesis convencional sin que el planteo de Pogge pierda su fuerza. Ya sea que las
reformas eliminen “la mayor parte” del problema de la pobreza, “alguna parte” o
pobreza global. Y criticar esta tesis no significa haber criticado alguna parte
fundamental de la posición de este autor. Esto es así porque la tesis fuerte es más bien
una tesis periférica que rodea el núcleo del planteo poggeano. Tal como señala
constituido por la tesis de que el orden institucional global daña a una parte significativa
de la población mundial (los pobres globales) al privarla del acceso seguro a los objetos
166
Ver apartado 1, sección 1, en este capítulo.
68
de sus derechos humanos167. Esta tesis es la que le otorga al planteo de Pogge toda su
Algo similar puede decirse con respecto al privilegio de los recursos y al de los
la cual también, según Cohen, sería sostenida por Pogge. Esta tesis afirma que las
globales. De este modo, los cambios en las reglas globales aliviarían la pobreza extrema
alguna medida” las malas instituciones domésticas (y, por lo tanto, “alguna parte” del
sensibles son los autócratas a las ganancias esperadas del control de los recursos
naturales, cuánto varía el índice esperado de ganancia con los cambios en las reglas
167
Ver Pogge, Thomas (2000).
168
Y la que ha sido, por supuesto, el objeto de numerosas críticas. Ver, por ejemplo, el tríptico formado
por Risse, Mathias (2005a), (2005b) y (2005c).
169
Jaggar, Alison (2010), págs. 23-24. “[…] bad institutions are substantially explained by global rules.
So changes in global rules would alleviate extreme poverty […] by shifting domestic political incentives
and opportunities in ways that transform domestic institutions and policies”.
69
satisfacción de cualesquiera condiciones que sean estipuladas”170. Ya sea que los
autócratas sean muy o poco sensibles, o que el índice esperado de ganancias varíe
mucho o poco, o que los índices de crecimiento y de pobreza sean muy o poco
dependientes, el privilegio de los recursos debe ser reformado. Del mismo modo, en
cuanto al privilegio de los préstamos, no necesitamos saber cuánta pobreza “es tocada
por las cuestiones acerca de” este privilegio171. Ya sea que mucha o poca pobreza sea
tocada, el privilegio debe ser modificado172. Recordemos que el propio Cohen afirma
que “[s]ería absurdo negar que algunos cambios en las reglas globales serían más
a reformar las reglas del orden institucional global cuando tenemos certeza acerca de
cuáles serán las consecuencias de estas reformas para el alivio de la pobreza extrema.
malas instituciones domésticas (y, por lo tanto, causan “alguna parte” de la pobreza
global), ambos privilegios deben ser reformados, aun cuando no sepamos cuánta
pobreza estaremos aliviando174. Por supuesto, se deben tomar todos los recaudos para
que los resultados de la reforma sean los deseados. Pero afirmar que no podemos actuar
hasta tener certeza de las consecuencias sería tanto como condenarnos a la inacción y
170
Citado más arriba.
171
Citado más arriba.
172
Para una justificación completa de la modificación de estos privilegios, ver capítulo 5.
173
Citado más arriba.
174
Como afirma Kant, “la razón no está lo suficientemente esclarecida como para contemplar la serie de
causas predeterminantes que permiten prever con certeza, siguiendo el mecanismo de la naturaleza, el
buen o mal resultado de la acción y omisión humanas”. Kant, Immanuel (2007), pág. 82.
70
lo horroroso que es ver cómo un gobierno democrático (y toda una nación) paga la
fuerte ni refutar sus críticas al uso que Pogge hace del privilegio de los recursos y de los
préstamos. Más bien, mi intención ha sido, en el caso de la tesis fuerte, mostrar que las
Como ya dije, esta tesis puede convertirse en una tesis convencional sin que el planteo
intención ha sido, una vez más, mostrar que las críticas de Cohen se dirigen a un uso de
estos privilegios que tampoco es fundamental al núcleo poggeano. Este uso puede
variar. Es decir, los privilegios pueden pasar de explicar “la mayor parte” de la pobreza
a explicar “alguna parte”. Y por lo tanto, las reformas de estos privilegios pueden pasar
de remediar “la mayor parte” del problema a remediar “alguna parte”. Estas variaciones
no afectan el núcleo de la teoría, constituido, como ya dije, por la tesis de que el orden
derechos humanos175, Pogge analiza las diferencias de los juicios morales que hacemos
acerca de los órdenes económicos nacionales y globales. En esa sección, afirma que “la
175
Pogge, Thomas (2005a).
71
mayoría de las personas de los países ricos piensa que nuestro orden económico global
es justo, aunque este orden no satisface dos requisitos mínimos importantes que
[…] las reglas sociales deben poder ser modificadas pacíficamente por una amplia
cualquier amplia mayoría de sus participantes pueda modificar [las reglas del orden
embargo, “pocas personas en los países ricos plantean una exigencia moral igual al
que amenace la vida debe evitarse. En la medida en que sea razonablemente posible, un
orden económico debe configurarse de modo que produzca una distribución económica
tal que sus participantes puedan satisfacer sus necesidades básicas”179. En el nivel
todas las personas puedan cubrir sus necesidades básicas, juzgamos a esa sociedad
como injusta. Sin embargo, “pocos de nosotros creen que esta pobreza [global] absoluta
global”180.
176
Pogge, Thomas (2005a), pág. 128.
177
Pogge, Thomas (2005a), pág. 128.
178
Pogge, Thomas (2005a), pág. 128.
179
Pogge, Thomas (2005a), pág. 129.
180
Pogge, Thomas (2005a), pág. 129. La letra cursiva es mía.
72
revela la injusticia del mundo. Y la injusticia es el problema principal que la teoría
poggeana intenta erradicar. De este modo, considero que si bien la pobreza es,
de su libro, Pogge afirma: “[…] debemos dejar de pensar acerca de la pobreza mundial
en términos de ayuda a los pobres. Es obvio que los pobres necesitan ayuda. Pero la
necesitan sólo a causa de las terribles injusticias a las que se hallan sometidos. Así
pobres, sino que les protegen de los efectos de unas reglas globales cuya injusticia nos
reformas institucionales. Las donaciones y la ayuda al desarrollo están muy bien y son
absolutamente necesarias. Pero ¿qué sentido tiene hacer esto (donar y dar ayuda) en un
mundo que es básicamente injusto con los pobres globales y que los daña al imponerles
un orden institucional global que no les permite satisfacer sus necesidades básicas?182
181
Pogge, Thomas (2005a), pág. 39. La letra cursiva es mía. Es llamativa la semejanza con las palabras de
Kant. Kant piensa que cuando ayudamos a una persona pobre no la estamos ayudando sino que le estamos
restituyendo aquello que cooperamos a quitarle. En palabras de Kant: “En virtud [del impulso de la
benevolencia] unos hombres se compadecen de otros y hacen un bien al mismo a quien acaban de
arrebatarle algo, aunque no sean conscientes de haber cometido injusticia alguna, debido a un análisis
insatisfactorio de la situación. Se puede participar en la injusticia universal aun cuando no se sea injusto
con nadie según las leyes y disposiciones civiles. Si se hace un bien a un indigente, no se le habrá dado
nada de balde, sino que se le ha restaurado parte de cuanto uno habría cooperado a sustraerle por medio
de la injusticia universal”. Kant, Immanuel (1988), pág. 238. La letra cursiva es mía. Creo que las ideas
presentes en este párrafo son las que animan a Pogge. Hay una injusticia universal de la cual todos
participamos, aun cuando no violemos ninguna ley. Todos cooperamos con la injusticia universal. La
ayuda al pobre no es ayuda sino restitución de aquello que cooperamos a quitarle.
182
Dice Pogge en una entrevista: “[…] lo que los países ricos dan con una mano, lo recuperan con la otra.
De hecho, obtienen mucho más de lo que dan. Los derechos de propiedad intelectual les cuestan a los
países pobres decenas de miles de millones de dólares en rentas económicas, agravan mucho sus cargas
de enfermedad y sofocan sus esfuerzos para actualizarse. Las barreras al comercio les cuestan a ellos
cerca de un trillón de dólares anualmente en rentas de exportación perdidas. Otros cientos de miles de
73
Estas medidas sólo pueden ser un paliativo, mientras reformamos las instituciones
pobreza.
La mayoría de las personas piensa que una sociedad en donde una parte
vivienda, salud y educación es una sociedad injusta. Y la mayoría de las personas piensa
que una sociedad así debe reformar sus instituciones para convertirse en una sociedad
orden global justo, todas las personas tendrían un acceso seguro al objeto de sus
derechos humanos.
millones se pierden a través de exportaciones de recursos que enriquecen y consolidan tiranos y juntas
completamente ilegítimos. Unos $500 mil millones son ilícitamente transferidos cada año de los países
pobres a los ricos: los frutos del soborno y la corrupción, la malversación, el contrabando, el tráfico, la
evasión de impuestos y la fijación estratégica de precios de transferencia. Y decenas de miles de millones
se transfieren –como ustedes los argentinos saben bien– para pagar las deudas en las que los tiranos y
juntas anteriores incurrieron por el bien del despilfarro y de gastos para el enriquecimiento personal”.
Pogge, Thomas (2007c), pág. 5.
74
4. MATHIAS RISSE:
de Pogge está constituido por “la tesis de que el orden institucional global daña a una
precisamente esta tesis, especialmente los tres argumentos mediante los cuales Pogge
Thomas Pogge y hacer una evaluación de las críticas del primero y de las respuestas del
Del último artículo, sólo analizaré aquí la primera parte, en la cual Pogge responde a las
183
Pogge, Thomas (2005b).
184
Risse, Mathias (2005b).
185
Pogge, Thomas (2005c).
186
El resto del artículo de Pogge será analizado en el capítulo 7.
75
1) Los argumentos de Pogge
El artículo que da origen al debate con Risse187 tiene el mismo título que el libro:
World poverty and human rights (traducido como La pobreza en el mundo y los
sostenidas por el autor. Ambos están separados por tres años: mientras el libro es de
2002, el artículo se publicó en 2005 (aunque el simposio del cual este último formó
debajo de la línea de pobreza de 2 dólares por día y consume el 1.3% del producto
global. En cambio, los ciudadanos de los países ricos (955 millones) consumen el 81%
los países ricos] sería generoso de nuestra parte, [pero] no algo que debemos
[hacer]”191; y
187
Y también con Alan Patten, Rowan Cruft, Norbert Anwander y Debra Satz. Ver capítulo 7.
188
Pogge, Thomas (2005a).
189
Pogge, Thomas (2005b), pág. 1.
190
Pogge continua: “Con nuestro ingreso promedio per cápita [es decir, el ingreso de los ciudadanos de
los países ricos] casi 180 veces más grande que el de los pobres, podríamos erradicar la pobreza severa
mundial si lo intentáramos –de hecho, pudimos haberla erradicado hace décadas”. Pogge, Thomas
(2005b), pág. 1.
191
Y por lo tanto, negar la suposición de que el fracaso en reducir la pobreza severa en el extranjero es
“como mucho una falta de generosidad que no nos hace moralmente responsables por las privaciones
continuas de los pobres”. Pogge, Thomas (2005b), pág. 2.
76
2) negar que “los 955 millones de ciudadanos de los países ricos tengan
El objetivo general de Pogge es mostrar que “las formas usuales de justificar nuestra
gran ventaja [la ventaja de los ciudadanos de los países ricos] fracasan”193. Para llevar a
cabo estos objetivos, Pogge elabora tres argumentos diferentes que se dirigen a públicos
distintos.
distribución es justa si las transferencias que dieron lugar a ella fueron legítimas194.
Según Pogge, existen desacuerdos acerca de qué es una transferencia legítima, pero
todos estarían de acuerdo en que “la historia común y muy violenta a través de la cual la
desigualdad radical presente se acumuló”195 no califica como tal. Dice Pogge: “[…] los
crímenes históricos reales fueron tan horrendos, diversos y trascendentes que ninguna
concepción histórica de los derechos podría sostener de manera creíble la idea de que
nuestra historia común [la historia de los países ricos y pobres] fue lo suficientemente
concluye: “El camino histórico desde el cual se levanta nuestra riqueza excepcional [la
192
Pogge, Thomas (2005b), pág. 2.
193
Pogge, Thomas (2005b), pág. 2.
194
Ver Wolff, Jonathan (2006), págs. 206-207.
195
Pogge, Thomas (2005b), pág. 2.
196
Pogge, Thomas (2005b), pág. 2.
197
Pogge, Thomas (2005b), pág. 3.
77
El segundo argumento podría llamarse “argumento del estado de naturaleza” y
está dirigido a un público lockeano. Dice Pogge: “[Locke] sostiene que en un estado de
naturaleza las personas tendrían derecho a una parte proporcional de los recursos
naturales del mundo. Quienquiera que prive a otros de ‘suficiente y tan bueno’ –ya sea a
los peor situados bajo él están al menos tan bien como las personas estarían en un
estado de naturaleza con una parte proporcional de los recursos”198. Pogge reconoce que
esta línea de base “es imprecisa […], pero es suficiente […]: imagine el estado de
naturaleza que uno imagine entre los seres humanos en este planeta, uno no podría
entonces moralmente inaceptable sobre bases lockeanas en la medida en que […] ‘los
cuyos beneficios los peor situados están en gran parte, y sin compensación,
tienen ningún reclamo válido si están mejor trabajando la propiedad de otra persona de
lo que estarían en el estado de naturaleza. Para Pogge, es claro que las personas pobres
están peor ahora de lo que estarían en el estado de naturaleza. Por lo tanto, tienen un
198
Pogge, Thomas (2005b), pág. 3. La letra cursiva es del autor.
199
Pogge, Thomas (2005b), pág. 3.
200
Singer, Peter (2003), págs. 42-43.
78
Según Pogge, estas teorías desacuerdan en muchos aspectos, pero al menos acuerdan en
que “un orden económico es injusto cuando […] previsible y evitablemente causa
entonces que los ciudadanos de los países ricos están “preservando sus grandes ventajas
institucional compartido que es diseñado por los mejor situados e impuesto sobre los
desigualdad radical en tanto existe una alternativa institucional factible bajo la cual tal
orden institucional global actual daña a los pobres globales porque los trata
injustamente. Los trata injustamente porque viola sus derechos humanos. Y viola sus
derechos humanos porque bajo este orden casi la mitad de la población mundial (el
44%) no tiene un acceso seguro a los objetos de sus derechos humanos (es decir, no
orden alternativo bajo el cual esa porción de la población mundial tendría un acceso más
seguro a los objetos de sus derechos (es decir, podría satisfacer sus necesidades de
201
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
202
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
79
Los tres argumentos expuestos hasta aquí (el de la historia real o violenta, el del
objetivo de mostrar que el orden institucional daña a los pobres globales. Estos
1) “que los pobres globales tienen un reclamo moral de peso a una parte de
ricos]”203; y
2) “que nosotros [es decir, los ciudadanos ricos], al negarles lo que ellos tienen
De acuerdo con Pogge, los tres argumentos utilizan tres nociones de daño
diferentes.
diacrónica, según la cual “alguien es dañado cuando es puesto peor de lo que estaba en
contrafáctica. De acuerdo con esta segunda noción, alguien es dañado cuando es puesto
peor “de lo que habría estado si algún arreglo anterior hubiera continuado sin
perturbaciones”206.
203
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
204
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
205
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
206
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
80
Estos dos argumentos utilizan una noción independiente de daño y “conciben la
justicia […] en términos de daño”207. Dice Pogge: “[…] nosotros [los ciudadanos de los
cualquier línea creíble de un estado de naturaleza”208. Como hay daño, hay injusticia.
globales) no utiliza una noción independiente de daño. Más bien, utiliza una noción
Pogge afirma: “[…] nosotros [los ciudadanos de los países ricos] estamos dañando a los
Para decirlo de otro modo, los tres argumentos utilizan tres líneas de base
diferentes para mostrar que el orden institucional actual daña a los pobres globales. El
primer argumento utiliza una línea de base histórica. El segundo argumento utiliza
como línea de base el estado de naturaleza. Y el tercer argumento utiliza una línea de
base moralizada: la situación actual de los pobres globales debe ser comparada no con
una situación anterior ni con un estado de naturaleza sino con un estado del mundo en el
cual los derechos humanos se cumplieran efectivamente. Esto es lo que significa utilizar
207
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
208
Pogge, Thomas (2005b), pág. 4.
209
Pogge, Thomas (2005b), pág. 5. La letra cursiva es del autor.
81
Pogge afirma que su posición conlleva dos innovaciones en relación al debate
empírico.
posiciones han afirmado que estos deberes positivos son fuertes y demandantes y que
actuamos moralmente mal si no los cumplimos210. Otras posiciones han sostenido que
estos deberes son más bien débiles y que no actuamos moralmente mal si no
ayudamos211. Pogge no niega que los deberes positivos sean fuertes. Sin embargo, pone
dañar. Esto significa que, para Pogge, tenemos dos deberes: el deber de “no exponer a
las personas a una pobreza que amenaza la vida”212 y el deber de “protegerlas de los
daños por los cuales nosotros [los ciudadanos de los países ricos] seríamos activamente
pobreza se deba a factores internos. Sin embargo, pone el acento en los factores
82
1) que “el orden institucional global existente no juega ningún rol en la
de la pobreza.
en algunos e incrementándose en otros. Los casos del último tipo usualmente muestran
gobernantes, lo cual parece darnos [a los ciudadanos de los países ricos] toda la
explicación que necesitamos para entender por qué la pobreza severa persiste [en los
países en desarrollo]”217.
Sin embargo, si alejamos nuestra mirada, podemos encontrar algunos rasgos del
provee una ilustración persuasiva de la hipocresía de los Estados ricos que insisten y
ordenan que sus propias exportaciones sean recibidas con mercados abiertos. Y esto
215
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
216
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
217
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
83
perjudica enormemente las oportunidades de exportación de los países y regiones muy
pobres”218.
Los derechos de propiedad intelectual. Los países ricos “insisten en que sus
ser vigorosamente respetados en los países pobres”219. Esto impide, por ejemplo, que los
países pobres puedan producir y vender medicamentos genéricos, los cuales salvarían a
Las externalidades negativas que los países ricos imponen a los países pobres y
por las cuales los primeros no pagan nada. Los países ricos imponen estas
pobres, “se benefician poco, si es que se benefician, de las actividades que polucionan, y
además son menos capaces de protegerse del impacto que tal polución tiene sobre su
218
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
219
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
220
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
221
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6. Peter Singer dice casi exactamente lo mismo: “[…] muchos de los
más pobres de la Tierra […] no pueden beneficiarse [del] incremento de la productividad en las naciones
industrializadas (no se pueden permitir comprar sus productos) y si el aumento del nivel del mar [debido
al calentamiento global] inunda sus tierras de labor, o los ciclones destruyen sus casas, estarán mucho
peor de lo que podrían haber estado”. Singer, Peter (2003), pág. 43.
222
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
223
En un sentido similar, Peter Singer afirma: “[…] los estadounidenses, junto con los australianos, los
canadienses y, en menor medida, los europeos, privan a los habitantes de los países pobres de la
oportunidad de desarrollarse siguiendo las pautas adoptadas por los países ricos. Si los pobres se
comportasen como lo hacen ahora los ricos, el calentamiento global se aceleraría y casi con seguridad
provocaría una gran catástrofe”. Singer, Peter (2003), pág. 44. Por su parte, Martha Nussbaum pregunta:
“¿Cómo afrontaremos los estadounidenses el hecho de que es harto improbable que el alto nivel de vida
del que disfrutamos se pueda universalizar […] sin causar un desastre ecológico?”. Nussbaum, Martha
(1999), pág. 24.
84
Los privilegios de recursos, de préstamos, de armas y de tratados. Los países
ricos reconocen como gobernante de un país pobre a cualquier persona que ejerza el
gobierna. De este modo, los países ricos reconocen a estos gobernantes el derecho a
vender los recursos del país, el derecho a pedir dinero prestado, el derecho a comprar
224
Dice Pogge: “Estos privilegios internacionales […] que nosotros [los países ricos] extendemos a tales
gobernantes son bastante ventajosos para ellos, ya que los proveen con el dinero y las armas que necesitan
para permanecer en el poder […]. Estos privilegios son también bastante convenientes para nosotros, ya
que nos aseguran las importaciones de recursos desde los países pobres independientemente de quién
gobierne o de qué tan mal lo haga. Pero estos privilegios tienen efectos devastadores para los pobres
globales, ya que les permiten a los gobernantes corruptos oprimirlos, excluirlos de los beneficios de los
recursos naturales de sus países y cargarlos con enormes deudas y onerosas obligaciones de tratados”.
Pogge, Thomas (2005b), pág. 7. Ver el documental “La pesadilla de Darwin” (Hubert Sauper, 2004), el
cual constituye una perfecta ilustración, brutal y dramática, de este párrafo.
225
Se podría agregar también aquí la cuestión del soborno. Dice Pogge: “[…] el orden mundial existente
es en sí mismo un factor causal crucial para la persistencia de la corrupción y la opresión en los países
pobres. No fue hasta 1999, por ejemplo, que los países desarrollados accedieron finalmente a frenar los
sobornos que sus compañías hacían a cargos extranjeros al adoptar la OCDE, la Convención sobre el
Soborno de Cargos Públicos Extranjeros en Transacciones Comerciales Internacionales. Hasta entonces,
la mayoría de los países desarrollados no solo autorizaban a sus compañías de forma legal a sobornar a
cargos extranjeros, sino que incluso les permitían deducir estos sobornos de sus ingresos declarables, por
lo tanto, proporcionando incentivos financieros y soporte moral a la práctica de sobornar a cargos y
políticos en los países pobres. Esta práctica desvía las lealtades de los cargos en estos países y también
supone una importante motivación para muchas personas que luchan para conseguir un cargo público en
primer lugar. Los países en desarrollo han sufrido pérdidas asombrosas como resultado, de manera más
clara en la concesión de contratos. Estas pérdidas se deben en parte al hecho de que los sobornos están
incluidos en el coste: los contratos tienen que elevar su coste para recibir lo suficiente como para poder
pagar los sobornos. Surgen pérdidas adicionales porque algunos postores se pueden permitir no ser
competitivos, sabedores de que el éxito de su oferta dependerá de sus sobornos más que del producto que
ofrecen. Incluso pérdidas mucho más cuantiosas responden al hecho de que los cargos públicos,
preocupados por los sobornos, prestan escasa atención a si los bienes y servicios que ellos adquieren para
el bien de su país, son de buena calidad o incluso necesarios. Una gran cantidad de lo que los países en
desarrollo han importado a lo largo de décadas ha sido inútil para ellos o incluso dañino, promoviendo la
degradación ambiental o la violencia (el soborno es una práctica bien asentada en el comercio de armas).
Evidencias preliminares sugieren que la nueva convención es ineficaz para controlar los sobornos por las
corporaciones multinacionales. Pero incluso si fuese eficaz, sería muy difícil de purgar la perversa cultura
85
2) Las objeciones de Risse
El artículo de Risse comienza con dos preguntas importantes. La primera pregunta está
en el título: ¿los ciudadanos de los países ricos les deben a los pobres globales asistencia
¿el orden institucional global daña a los pobres? Risse contesta que no. Si hubiera daño,
debería haber rectificación. Pero como no lo hay, solamente debe haber asistencia.
¿Qué entiende Risse por “orden político y económico global”? Dice el autor:
“Por primera vez en la historia, existe una sociedad global continua basada en la
soberanía territorial. […] Este sistema de Estados [que surgió “de la expansión del
reglas, las más importantes de las cuales están plasmadas en la Carta de las Naciones
Unidas. […] Estas instituciones [el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y
incluye, pero no es reducible a, las acciones de los Estados”227. Hasta aquí, Pogge
acordaría con Risse. Sin embargo, a partir de acá, ambos autores se distancian. El
de corrupción que está profundamente arraigada en muchos países en desarrollo gracias a la extensa
práctica del soborno a la que fueron sujetos en sus años de formación”. Pogge, Thomas (2005e), págs.
230-231. Agradezco a Javier Flax por sus comentarios, los cuales me motivaron a agregar esta nota.
226
Risse, Mathias (2005b), pág. 9.
227
Risse, Mathias (2005b), pág. 9.
86
desacuerdo más general e importante es que Risse considera que el orden institucional
parecer un juego de palabras, pero no lo es, al menos para Risse. Más aún, sostiene que
el orden global merece reconocimiento por todos los avances y las mejoras que trajo a la
Risse objeta los dos primeros argumentos de Pogge, el que usa la noción de daño
diacrónica y el que usa la noción de daño contrafáctica. Para objetar estos argumentos,
procede del siguiente modo: acepta el criterio diacrónico, pero dice que, según este
Con respecto al criterio diacrónico, Risse dice: “Uno podría pensar que los
orden global. Pero no lo hacen. […] El progreso hecho en los últimos 200 años es
milagroso. […] Históricamente casi todo el mundo era pobre, pero esto ya no es
pobreza, sino que tantos no lo hagan […]. En general, si uno mira los últimos 200, 100
o 50 años, las cosas han mejorado dramáticamente para los pobres. El horizonte de 200
su vez, condujo a los avances técnicos (originados en gran parte en lo que actualmente
son los países industrializados), los cuales beneficiaron a todos. El horizonte de 50 años
el orden global, ha cobrado relevancia –un sistema cuya ausencia dañaría más a sus
228
“El orden global no es fundamentalmente injusto, sino incompletamente justo”. Risse, Mathias
(2005b), pág. 10. La letra cursiva es del autor.
229
Risse, Mathias (2005b), pág. 10. La letra cursiva es del autor.
87
miembros más débiles. Históricamente hablando, el orden global parece haber
Tal como dije, Risse acepta el criterio diacrónico que supuestamente usa Pogge
en su primer argumento para determinar el daño, pero afirma que, según este criterio, la
humanidad en general y los pobres en particular están mucho mejor que hace 200 años e
estarían mejor; y
estarían mejor.
segundo usa una línea de base hipotética: el estado de naturaleza. Los pobres están peor
Si los pobres están peor de lo que estarían sin la colonización europea o en un estado de
este criterio es que es imposible decir nada acerca de él. Es concebible que, por ejemplo,
hubieran emergido en África estructuras políticas que les hubieran permitido a los
230
Risse, Mathias (2005b), págs. 11-12.
88
igualmente concebible que las guerras hubieran frustrado tales esfuerzos. El punto no es
que no podemos alcanzar un cierto umbral de certeza razonable, sino que debemos
podemos darle sentido a las afirmaciones acerca de cómo habría sido el desarrollo de
desarrollado”232. En el caso de Polonia, podemos tomar otro país que nunca haya
formado parte de la Unión Europea y cuya situación, en el pasado, haya sido similar a la
comparar las situaciones actuales de ambos países. Pero en el caso del mundo, no
podemos tomar otro mundo en el cual el orden global nunca se haya desarrollado y cuya
orden global todavía no se había desarrollado y, por lo tanto, no podemos comparar las
situaciones actuales de ambos mundos. “Nosotros sólo tenemos este único mundo con el
cual trabajar”233.
“necesita reforma más que un derrocamiento revolucionario”235 (tal como, según Risse,
Pogge pretende). Estas afirmaciones dicen más acerca del miedo de Risse y de su
231
Risse, Mathias (2005b), pág. 12.
232
Risse, Mathias (2005b), pág. 13.
233
Risse, Mathias (2005b), pág. 13.
234
Risse, Mathias (2005b), pág. 18.
235
Risse, Mathias (2005b), pág. 18.
89
3) Respuesta a las objeciones
planteo de Risse y su propia posición. En primer lugar, mientras que la pregunta que
Risse formula en su texto es si “el sistema global de soberanía territorial que emergió en
el siglo XV”236 daña a los países pobres, la pregunta que Pogge se hace es si “los
ciudadanos presentes de los países ricos, en connivencia con las elites gobernantes de la
mayoría de los países pobres, están dañando a los pobres globales”237. Pogge se
interroga por la responsabilidad de los ciudadanos de los países ricos con respecto a este
bienestar de los seres humanos individuales”238. Esto se debe a que un país rico puede
tener, sin embargo, una población muy pobre (como sucede con los países ricos en
gentes se preocupa por que todas las sociedades sean justas, liberales o decentes, la
posición de Risse sobre la pobreza y la justicia globales está muy influida por el planteo
rawlsiano.
236
Pogge, Thomas (2005c), pág. 55.
237
Pogge, Thomas (2005c), pág. 55.
238
Pogge, Thomas (2005c), pág. 55.
239
Ver capítulo 2, apartado 1.
90
Pogge sostiene que la desigualdad radical y la pobreza extrema son reproducidas
alternativo bajo el cual esta pobreza y esta desigualdad no existirían muestra que “el
diseño presente [del orden global] es injusto y que, mediante su imposición, nosotros [es
decir, los ciudadanos de los países ricos] estamos dañando a los pobres globales al
apartado 1 de este capítulo, este argumento concibe el daño en términos de una noción
Dice Pogge: “[…] en mi explicación, los pobres globales están siendo dañados
por nosotros [los ciudadanos de los países ricos] en la medida en que ellos están peor de
lo que cualquiera estaría si el diseño del orden global fuera justo. Ahora bien, los
requiere que cualquier orden institucional impuesto sobre los seres humanos debe ser
diseñado de modo que los derechos humanos sean satisfechos bajo él en la medida que
esto sea razonablemente posible. Casi todos creen que la justicia requiere más, que un
orden institucional puede ser injusto incluso si satisface este estándar mínimo […]. Pero
yo puedo evitar estos problemas en tanto nosotros acordemos que un orden institucional
no puede ser justo si fracasa en satisfacer el estándar mínimo de los derechos humanos.
Debido a que el orden institucional global presente no alcanza incluso este estándar
240
Pogge, Thomas (2005c), pág. 55.
241
Risse objeta este argumento en el texto “How does the global order harm the poor?” [¿Cómo el orden
global daña a los pobres?], Risse, Mathias (2005a), el cual será analizado en el capítulo siguiente.
91
mínimo […] puede mostrarse que es injusto sin invocar ningún estándar más
este criterio porque consideraba que era imposible darle sentido. Es imposible establecer
las comparaciones que estos contrafácticos requieren que hagamos. Es imposible saber
si los pobres estarían mejor si Europa no hubiera invadido el resto de los continentes o
si la humanidad viviera en un estado de naturaleza. Podría ser que sí. Pero también
podría ser que no. Acerca de la verdad o la falsedad de estos contrafácticos no podemos
decir ni saber nada. Por lo tanto, el criterio contrafáctico no sirve para apoyar el
argumento de que el orden institucional global daña a los pobres. Pero, dice Pogge,
entonces tampoco sirve para refutarlo. El reclamo moral de los pobres a una parte de la
riqueza de los ricos “no puede ser socavado mostrando que la pobreza severa habría
lockeano”243. Y el reclamo moral de los ricos a su riqueza “no puede ser reafirmado
mostrando que nosotros [los ciudadanos de los países ricos] no habríamos estado peor
utiliza una noción de daño diacrónica. Pogge acepta el argumento y dice: “[Risse]
considera que los últimos siglos han traído mejoras fabulosas en el bienestar humano.
Esto es bastante cierto –al menos siempre que miremos los agregados y los
242
Pogge, Thomas (2005c), págs. 55-56. La letra cursiva es del autor. Ver capítulo 7, apartado 1.
243
Pogge, Thomas (2005c), pág. 56.
244
Pogge, Thomas (2005c), pág. 56.
92
promedios”245. Sin embargo, el hecho de que los pobres estén mejor ahora que hace 200
años no disminuye su reclamo moral contra los ricos. Pogge afirma: “[las estadísticas de
Risse] muestran que la riqueza de los que no son pobres se está incrementando a pasos
estadísticas sólo pueden exacerbar el escándalo de la pobreza severa que persiste en una
escala masiva”246.
En los párrafos finales de su respuesta a Risse, Pogge afirma que está de acuerdo
con este autor en que el orden institucional global necesita reformas más que un
“derrocamiento revolucionario”247. Lo que debe ser reformado son los cuatro rasgos o
factores del orden global que Pogge mencionó al final de su primer artículo. Estas
que imponen248 y no reconozcan a los gobiernos de facto. Esto último significa que no
con ellos acuerdos o tratados. Sin embargo, Pogge no está de acuerdo con Risse en que
debemos abstenernos de decir que este orden institucional global es injusto. Para Pogge,
relacionadas con la pobreza cada año. Esto es una imperfección. Pero es también un
Volvamos ahora a los tres argumentos que Pogge elabora para determinar si hay
245
Pogge, Thomas (2005c), pág. 57.
246
Pogge, Thomas (2005c), pág. 57.
247
Pogge, Thomas (2005c), pág. 59.
248
O mejor aún, que no generen externalidades negativas.
249
Pogge, Thomas (2005c), pág. 59.
93
naturaleza y el argumento que se refiere a los arreglos institucionales globales. Como
dije, de acuerdo con Pogge, el primero utiliza una noción de daño diacrónica. El
presente, en el cual existe mucha pobreza, con el pasado, en el cual existía menos, y
atribuyendo este aumento al orden global. En este argumento, lo que Pogge está
haciendo es (nada más y nada menos que) impugnar el statu quo, es decir, mostrar o
recordar que la riqueza de los países ricos no surgió de transferencias legítimas, sino de
la expropiación, por parte de Europa, de los recursos del resto de los continentes250. De
que el orden institucional global no es justo. Y podemos decir esto aun cuando, según
una noción de daño diacrónica, no podemos decir que los pobres globales están peor
Como Pogge afirma que el argumento de la historia real o violenta utiliza una
noción de daño diacrónica, Risse cree estar objetándolo al mostrar que ahora existe
menos pobreza de la que existía antes. En su respuesta a Risse, Pogge reconoce este
hecho (que ahora existe menos pobreza). Sin embargo, este reconocimiento no lesiona
su argumento, el cual no sostiene que ahora hay más pobreza de la que había antes.
250
Dice Pogge: “[…] nuestra enorme ventaja económica [la ventaja de los países ricos] está
profundamente contaminada por cómo se acumuló a lo largo de un proceso histórico que ha devastado las
sociedades y las culturas de cuatro continentes”. Pogge, Thomas (2005e), pág. 220.
94
El argumento que utiliza Risse para objetar el de Pogge sí involucra una noción
de daño diacrónica y sostiene que el orden global no daña a los pobres porque de hecho
los pobres globales están mejor ahora de lo que estuvieron nunca antes en la historia de
1) que hay menos pobres en términos relativos (es decir, que el porcentaje de
pobres es menor); y
2) que hay menos pobres en términos absolutos (es decir, que el número de
pobres es menor).
Sería muy raro decir que las mujeres, dentro de una sociedad, no están siendo dañadas si
mujeres golpeadas es menor ahora que antes, aun cuando podemos decir que las mujeres
están mejor ahora que antes o que la situación presente representa un beneficio para
ellas (en comparación con la situación pasada). Y sería muy raro decir que las mujeres,
dentro de esa sociedad, no tienen ningún reclamo para hacer. De este modo, considero
que los argumentos que utilizan una noción de daño diacrónica no son buenos
Risse al afirmar que es imposible saber si actualmente los pobres globales están mejor o
Risse afirma también que es imposible saber si actualmente los pobres globales están
mejor o peor de lo que estarían si Europa nunca hubiera invadido el resto de los
251
Pogge, Thomas (2005e), pág. 238.
95
continentes. Este segundo contrafáctico nunca es mencionado por Pogge en su primer
artículo. Aún así, Pogge acepta las objeciones de Risse en contra del uso de una noción
de daño contrafáctica.
tal como señalé en el capítulo anterior, creo que es precisamente en este argumento
global daña porque es injusto y es injusto porque viola derechos humanos. Estas
que existe otro orden alternativo bajo el cual estas violaciones no se producirían.
pobres globales”253. Allí, Pogge ilustra su idea de determinar si hay o no daño mediante
injusto no se basa en cómo les había ido a las mujeres bajo el dominio británico. No se
basa en una comparación con cómo les hubiese ido a las mujeres en un estado de
naturaleza. (Todas estas comparaciones pueden ser invocadas de forma más plausible
para justificar que para criticar el orden institucional sujeto a consideración). Más bien,
es porque asignaba a las mujeres un estatus inferior al de los hombres que juzgamos que
252
Como dije en una nota, más arriba, en este apartado, Risse considera este argumento en el texto “How
does the global order harm the poor?” [¿Cómo el orden global daña a los pobres?], Risse, Mathias
(2005a), el cual analizaré en el capítulo siguiente.
253
Pogge, Thomas (2005e).
96
este orden ha sido injusto con las mujeres y su imposición, por lo tanto, un daño
realizado a ellas”254. Es decir, ese orden institucional dañaba a las mujeres porque era
igualdad.
Pogge, “cualquier orden institucional impuesto sobre los seres humanos debe ser
diseñado de modo que los derechos humanos sean satisfechos bajo él en la medida que
esto sea razonablemente posible”255. El orden global actual no cumple con este estándar
mínimo. Y existe un orden alternativo que sí lo cumpliría. De este modo, Pogge afirma
que el orden presente es injusto y que su imposición, por parte de los ciudadanos y los
gobernantes de los países ricos, constituye un daño hacia los pobres globales.
254
Pogge, Thomas (2005e), págs. 239-240.
255
Citado más arriba.
97
98
5. MATHIAS RISSE:
ASISTIR
En el capítulo anterior, analicé el texto de Risse: “Do we owe the global poor
rectificación?]. A esta pregunta, Risse respondía que los ciudadanos y los gobiernos de
los países ricos les debían asistencia pero no rectificación. Y esto era así porque el orden
global no dañaba a los pobres. Si los dañara, el daño debería ser rectificado. Pero como
En este capítulo, analizaré el texto, también de Risse, “How does the global
order harm the poor?”257 [¿Cómo el orden global daña a los pobres?]. Como puede
global no daña a los pobres. En su lugar, sostiene que el orden global daña a los pobres
instituciones domésticas.
la tesis que él llama de las “instituciones compartidas”, la cual pretende recoger el tercer
256
Risse, Mathias (2005b).
257
Risse, Mathias (2005a).
258
Ver capítulo anterior, apartado 1.
99
explicitar la forma en la que Risse interpreta el planteo de Pogge sobre la justicia global
Tal como hizo en el artículo analizado en el capítulo anterior, Risse afirma que
existe un “orden económico y político global” y lo describe casi con las mismas
conjunto de reglas, las más significativas de las cuales están codificadas en la Carta de
las Naciones Unidas. […] En el nivel económico, [el Fondo Monetario Internacional, el
Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio] proveen una red cooperativa
instituciones, conjuntamente con los Estados más poderosos del mundo actuando solos
Acerca del orden global, “debemos hacer preguntas […] que siempre hemos
hecho acerca de las entidades políticas. Una de tales preguntas es si [el orden global]
daña a los pobres, y la pregunta más amplia que motiva esta pregunta es si el orden
global es justo”260. El objetivo del artículo de Risse es responder estas preguntas. Con
respecto a la primera, afirma que el orden global daña a los pobres (aunque no los daña
en el mismo sentido que Pogge dice que lo hace). Con respecto a la segunda, sostiene
que el orden global no es injusto. Y no es injusto porque para Risse no hay violación de
derechos. Pero no la hay simplemente porque, como veremos, Risse no considera esta
259
Risse, Mathias (2005a), pág. 350.
260
Risse, Mathias (2005a), pág. 350. La letra cursiva es del autor.
100
posibilidad y no porque, habiéndola considerado, la haya descartado. Veamos entonces
sostiene que “el orden global daña a los pobres mediante la imposición de un esquema
Feinberg262, Risse distingue tres sentidos en los que hablamos acerca del daño. En
primer lugar, distingue un “sentido extendido”, según el cual decimos que algo está
dañado si está averiado: “una ventana está dañada si está rota o un auto si está
rayado”263. En segundo lugar, decimos que se daña a alguien si sus intereses sufren un
retroceso264. Y si los intereses que sufren un retroceso son necesidades básicas, entonces
este sentido en el que hablamos del daño incluye preocupaciones morales (aun cuando
trata injustamente. Y se trata a alguien injustamente si se violan sus derechos 266. Para
terminar, Risse aclara que mientras “es raro que alguien sea tratado injustamente sin que
sus intereses sufran un retroceso, […] es común que los intereses sufran [un retroceso]
sin que nadie sea tratado injustamente”267. Esto es lo que quiere afirmar Risse con
261
Risse, Mathias (2005a), pág. 351.
262
Feinberg, Joel (1984), págs. 31-36.
263
Risse, Mathias (2005a), pág. 352. “[Feinberg] distinguishes three senses of being harmed, the first
merely to have a comprehensive account of harm-talk. That sense is an extended one in which just about
anything can be said to be harmed if damaged. A window is harmed if cracked, or a car if scratched”.
264
Risse, Mathias (2005a), pág. 352. “In the second sense, harm occurs if interests are set back or
defeated”.
265
Risse, Mathias (2005a), pág. 353. “[…] while the interest-thwarting sense does not always evoke
moral concern, it sometimes does, possibly even without mediation through rights-based concerns,
especially if the interests at stake are basic needs”.
266
Risse, Mathias (2005a), pág. 353. “The third sense of being harmed is that of being wronged, which is
the case if another’s “indefensible (unjustifiable and inexcusable) conduct” violates a person’s rights”.
267
Risse, Mathias (2005a), pág. 353. “It is rare for somebody to be wronged without his interests
suffering a setback, but common for interests to suffer although no one is wronged”.
101
respecto a los pobres globales: que los intereses de los pobres sufren un retroceso sin
Luego de hacer estas distinciones, Risse afirma que el objetivo de la tesis de las
instituciones compartidas es mostrar que “el orden global daña a los pobres en el
los intereses de los pobres salen mejor parados”268. Y como los intereses frustrados son
compartidas con el segundo modo de hablar del daño, ya que todo indicaría que esta
tesis se relaciona con el tercer modo, es decir, con el sentido de “ser tratado
injustamente”. Como quedó dicho en el apartado 1 del capítulo anterior, Pogge afirma
que el orden global daña a los pobres porque los trata injustamente. Y los trata
injustamente porque viola sus derechos. El tercer argumento de Pogge, acerca de los
ciudadanos de los países ricos] estamos dañando a los pobres globales si y en la medida
entiende entonces cómo Risse puede atribuirle a la tesis de las instituciones compartidas
el objetivo de mostrar que el orden global daña a los pobres porque frustra sus intereses,
268
Risse, Mathias (2005a), págs. 353-354.
269
Pogge, Thomas (2005b), pág. 5. La letra cursiva es del autor.
102
cuando Pogge repite una y otra vez que los daña porque es injusto y es injusto porque
Mi hipótesis es que Risse hace esta asociación (equivocada) entre la tesis de las
instituciones compartidas y el segundo modo de hablar del daño porque no quiere decir
que el orden global es injusto, tal como se negó a decirlo en el artículo analizado en el
capítulo anterior, utilizando un juego de palabras270. Como ya se dijo, Risse afirma que
mientras que tratar injustamente a una persona usualmente hace que sus intereses se
vean frustrados o sufran un retroceso, los intereses de una persona pueden sufrir un
retroceso o verse frustrados sin que esa persona sea tratada injustamente. Algo similar a
esto es lo que Risse pretende afirmar con respecto al orden global. El orden global
frustra los intereses de las personas más pobres (porque no cumple con el deber de
asistencia o de ayuda, postulado por Risse), pero no los trata injustamente. El orden
segundo modo de hablar del daño, Risse está evitando (nuevamente) discutir el núcleo
anterior), esto es, que el orden global daña porque es injusto y que es injusto porque
viola derechos.
el cual el orden global sí daña a los pobres. Lo que Risse sostiene es que la tesis de las
instituciones compartidas debe ser entendida a la luz de la tesis institucional, esto es, la
tesis según la cual “la calidad de las instituciones domésticas [es lo que]
270
“El orden global no es fundamentalmente injusto, sino incompletamente justo”. Risse, Mathias
(2005b), pág. 10. La letra cursiva es del autor.
103
fundamentalmente explica por qué un país es rico o pobre”271. A la luz de esta tesis,
Risse afirmará que el orden global daña a los pobres porque no cumple con el deber de
De acuerdo con Risse, para saber si el orden global daña a los pobres, debemos
saber “qué hace que las cosas vayan bien para ellos”272. La pregunta que necesitamos
responder es la siguiente: “qué hace a algunos países ricos y estables y a otros pobres y
volátiles”273. Risse afirma que hay tres tesis que responden a esta pregunta: la tesis
propósitos de [su] estudio, [adopta] la tesis institucional como el punto de vista más
plausible”276:
271
Risse, Mathias (2005a), pág. 351.
272
Risse, Mathias (2005a), pág. 355.
273
Risse, Mathias (2005a), pág. 355.
274
“El crecimiento y la prosperidad son fundamentalmente determinados por factores tales como la
ubicación, el clima, la dotación de recursos (incluyendo el suelo), la carga de enfermedades y, por lo
tanto, la productividad agrícola, la calidad de los recursos humanos y los costos de transportación”. Risse,
Mathias (2005a), pág. 356.
“El crecimiento y la prosperidad son fundamentalmente determinados por la integración al mercado
275
104
“Tesis institucional: el crecimiento y la prosperidad dependen de la calidad de
correcta, lo que los de afuera pueden hacer para promover la prosperidad está limitado
por lo que pueden hacer para ayudar a construir instituciones, […] tales limitaciones son
instituciones […]. Lo que importa para los propósitos presentes es que, aunque el deber
instituciones, este deber está limitado por las dificultades que involucra. A menudo, la
construirlas]. Por lo tanto, a menudo es imposible derivar del hecho de que las
277
Risse, Mathias (2005a), pág. 355. “Institutional Thesis: Growth and prosperity depend on the quality
of institutions, such as stable property rights, rule of law, bureaucratic capacity, appropriate regulatory
structures to curtail at least the worst forms of fraud, anti-competitive behavior, and graft, quality and
independence of courts, but also cohesiveness of society, existence of trust and social cooperation, and
thus overall quality of civil society”.
278
Risse, Mathias (2005a), pág. 357.
279
Risse, Mathias (2005a), pág. 358.
280
La letra cursiva es mía. Esta frase recuerda la afirmación de Rawls acerca de que no hay una “receta
simple” que las sociedades bien ordenadas puedan seguir para ayudar a las sociedades desfavorecidas a
lograr instituciones justas o decentes. Ver capítulo 2, apartado 1.
105
instituciones de un país están en mala forma que los de afuera deberían [haber hecho] o
A pesar de que Risse afirma que las limitaciones del deber de asistencia en
construir instituciones son “bastante severas”, nunca dice cuáles son estas limitaciones
ni en qué consisten. Sin embargo, creo que el planteo de Pogge puede ofrecernos una
idea acerca de cómo descargar o cumplir con este deber. Para Pogge, existe un rasgo del
orden institucional global que constituye un incentivo para los golpes de Estado. Este
rasgo está formado por los cuatro privilegios de recursos, de préstamos, de armas y de
Risse parece creer que todo el planteo de Pogge sobre la justicia global se reduce
la creación de un orden institucional global que (precisamente y tal como Risse desea)
minimice los incentivos para el surgimiento de las malas). Así, la modificación de los
281
Risse, Mathias (2005a), págs. 358-359. La letra cursiva es mía.
282
Ver por ejemplo, Risse, Mathias (2005a), pág. 371.
106
3) La tesis de las instituciones compartidas
la tesis de las instituciones compartidas, la cual, como ya dije, pretende recoger el tercer
prácticamente oración por oración284. Risse declara que acepta la primera afirmación y
283
Risse, Mathias (2005a), pág. 367. “Imposition: The better-off impose a shared institutional order on
the worse-off […]. Feasible Alternatives: There is a feasible alternative institutional order under which
radical inequality would not persist. Implication: The existing institutional order is implicated in the
persistence of radical inequality because there is such an alternative. Extrasocial Factors: Radical
inequality cannot be traced to extrasocial factors affecting different people differently”.
107
En el punto 3 de la sección 4 de su texto, Risse se pregunta “qué hace a un orden
distribuir dinero a los países en desarrollo, dinero que podría y debería ser provisto por
los países ricos. Él calcula que sólo tomaría el 1.2% del ingreso de las economías ricas
[…] salvar el déficit agregado de aquellos que viven con menos de 1 dólar por día para
llegar a la línea de 2 dólares [por día]. La propuesta de Pogge para recaudar al menos
Risse concluye: “Así, lo que Pogge tiene en mente cuando él dice que existe una
alternativa ‘factible’ al orden global actual es que podrían ser tomadas medidas
¿Qué es lo que Pogge tiene en mente cuando habla de una alternativa factible?
En mi opinión, no es lo que Risse cree. O al menos, lo que Risse cree no es todo lo que
Pogge tiene en mente. Por supuesto, Pogge propone el Dividendo Global de Recursos288
como una medida para recaudar fondos. Pero lo que Risse no alcanza a ver es el lugar
injusticia del orden global289. Y proteger a las víctimas es sólo una de nuestras
284
También siguen los puntos 6, 7 y 8 de la sección 8.2.1 del capítulo 8 del libro de Pogge. Pogge,
Thomas (2005a), pág. 252.
285
Risse, Mathias (2005a), pág. 371.
286
Risse, Mathias (2005a), pág. 371.
287
Risse, Mathias (2005a), pág. 371.
288
Ver Pogge, Thomas (2005a), capítulo 8.
289
Ver capítulo 7, apartado 3.
108
orden institucional global290. Así, considero que lo que Pogge tiene en mente cuando
apartado 1 del capítulo anterior y se refieren a los cuatro privilegios (de préstamos, de
los países ricos imponen a los pobres. Por otra parte, considero que Pogge piensa que el
dinero (en este caso, ese 1.2%) debe ser distribuido no solamente haciendo que los
las reglas globales para que no lo ganen. Lo que parece que Risse no llega a comprender
sino que está elaborando una teoría de la justicia para el orden institucional global.
Risse afirma: “[…] mientras que el cálculo de Pogge muestra que al menos la
pobreza extrema no sería insuperable si cerrar esta brecha [entre las personas que viven
con menos de 1 dólar por día y la línea de 2 dólares por día] fuera meramente una
que estamos en la situación S1 en la cual tenemos los fondos para cubrir el déficit
financiero. […] aún así esto sería insuficiente para crear una situación S2 en la cual
nadie vive con menos de 1 dólar por día. Lo que se necesita son formas confiables de
distribuir los fondos a los individuos quienes, después de todo, no tienen simplemente
una cuenta de banco a la que pueden acceder de forma segura y regularmente […], así
como [se necesita] un ambiente en el cual los individuos puedan realmente gastar el
290
Ver capítulo 7, apartado 3.
109
uno quiere que los cambios sean duraderos. […] Sin al menos una red básica de
instituciones que funcionen, la ayuda no puede ni siquiera ser administrada” 291. Como
se advierte en esta última oración, Risse está pensando el planteo de Pogge en términos
de ayuda y no de justicia. Por otra parte, según mi interpretación, Pogge no piensa que
cerrar la brecha sea “meramente una cuestión de transferir dinero”. Y tampoco está en
orden global que él propone tienen como objetivo mejorar (o al menos favorecer el
Risse continua: “El punto general que interviene aquí no es sólo que las buenas
instituciones son necesarias para la distribución de ayuda, sino que en general las
Finalmente, Risse concluye: “[…] tener los fondos para cerrar el déficit
que S2 sea realmente factible. Siguiendo la tesis institucional, S2 se vuelve factible sólo
este capítulo: “[…] cómo uno puede producir un mejoramiento institucional requiere
ofrecido también razones para pensar que, a menudo, la asistencia de los de afuera será
291
Risse, Mathias (2005a), págs. 371-372. La letra cursiva es del autor.
292
Risse, Mathias (2005a), pág. 372. La letra cursiva es del autor.
293
Risse, Mathias (2005a), pág. 373. La letra cursiva es del autor.
110
de limitado valor para [producir ese mejoramiento]. [La afirmación de] Alternativas
factibles, entonces, debe ser entendida a través de los lentes de la tesis institucional”294.
Risse parece creer que como Pogge cuestiona el uso de la tesis institucional
como único factor para explicar la pobreza global, entonces la rechaza completamente.
pobreza, una entidad que hasta ahora no había sido claramente incluida: el orden global.
Esto queda claro en el artículo de Pogge analizado en el apartado 1 del capítulo anterior,
en el cual habla de las dos innovaciones que su planteo trajo a los debates sobre la
Según Risse, para que un orden global alternativo sea factible se necesitan
buenas instituciones. Sin embargo, no se sabe bien cómo los de afuera pueden ayudar o
asistir a los de adentro a construir esas instituciones. Como ya dije, mi creencia es que,
siguiendo a Pogge, es posible tener una idea acerca de cómo favorecer el surgimiento de
esto es, eliminando (o limitando sustancialmente) los cuatro privilegios (de recursos, de
ventaja mutua sino en uno de justicia como imparcialidad296), modificando los derechos
de propiedad intelectual y haciendo que los países ricos paguen por las externalidades
negativas que imponen al resto del mundo. Estos cuatro rasgos constituyen rasgos
294
Risse, Mathias (2005a), pág. 373.
295
Pogge, Thomas (2005b), págs. 5-7.
296
Ver Wolff, Jonathan (2006).
111
injustos de nuestro orden institucional global y deben ser eliminados (o sustancialmente
limitados).
lado, podemos entenderla “en el sentido de que existe un curso de acción simple para
mejorar la situación de los pobres que los representantes de este orden se rehúsan a
adoptar (tal como pagar dinero o tomar medidas institucionales bien entendidas abiertas
forma, entonces la tesis de las “Instituciones compartidas condenaría al orden global por
dañar a los pobres”298. Por otro lado, podemos entender la “factibilidad” “en el sentido
una noción más creíble de ‘factibilidad’ de acuerdo con la tesis institucional. Pero
entonces será mucho más difícil juzgar en qué medida el orden global realmente daña a
los pobres [ya que, de acuerdo con la tesis institucional] a menudo es difícil establecer
lo que los de afuera pudieron [haber hecho] o deberían haber hecho para mejorar la
situación [de los pobres globales]”300. Y Risse concluye: “[…] esta [segunda] forma de
entender la factibilidad aún da lugar a una acusación sobre el orden global si se puede
de que sean apropiadas. […] sería implausible insistir en que, en verdad, se ha hecho
297
Risse, Mathias (2005a), pág. 375.
298
Risse, Mathias (2005a), pág. 375.
299
Risse, Mathias (2005a), pág. 375.
300
Risse, Mathias (2005a), págs. 375-376.
112
el cambio institucional] –lo cual es lo que sería requerido para rechazar [la tesis de las]
de [la tesis de las] Instituciones compartidas es correcta, pero [esta versión] debe ser
afirma que el orden global daña a los pobres porque los países ricos no hacen lo
Lo que los países ricos deberían hacer y no hacen de forma suficiente es explorar las
artículo, Risse afirma que el orden global daña a los pobres porque los países ricos no
cumplen con su deber de asistir o de ayudar a los países pobres a construir buenas
instituciones domésticas. Esto hace retroceder sus intereses (de los pobres globales)
asistencia y, desde esta concepción, lee la teoría de Pogge. De acuerdo con Risse, todo
lo que Pogge desea es que los ricos ayuden a los pobres mediante el pago de un
dividendo global para que ninguna persona esté por debajo de la línea de pobreza de 2
dólares por día. Sin duda, Pogge celebraría el logro de este objetivo. Pero que los ricos
los derechos de las personas más pobres no serviría de mucho303. Reducir el planteo de
Pogge sobre la justicia global al logro de este único objetivo no parece correcto. Según
301
Risse, Mathias (2005a), pág. 376. La letra cursiva es del autor.
302
Lo que podría preguntarse es por qué los países ricos harían estas cosas si, desde el principio, se afirma
que la ayuda o asistencia de “los de afuera” está sujeta a “severas limitaciones”. Ver apartado 2, en este
capítulo.
303
Ver capítulo 3, apartado 2, sección 2.
113
creo, lo que Pogge desea, aquello por lo que su teoría brega, es principalmente la
externalidades negativas y los cuatro privilegios). Y estos rasgos deben ser modificados
injustos. Pogge insiste sobre todo con los cuatro privilegios. Estos privilegios
constituyen un incentivo para los golpes de Estado y, por lo tanto, crean un ambiente
institucional.
que Pogge tiene mucho para decir acerca de cómo descargar el deber que, según Risse,
los países ricos tienen hacia los pobres, esto es, el deber de asistirlos o de ayudarlos a
Para terminar, vale la pena recordar que el núcleo del planteo poggeano, el cual
sostiene que el orden institucional global daña porque es injusto y es injusto porque
viola derechos, permanece incólume, ya que Risse no dice nada acerca de él. Más aún,
compartidas con el segundo modo de hablar del daño (el modo de frustrar intereses), tal
114
6. JULIO MONTERO:
El artículo que discutiré en este capítulo, escrito por Julio Montero304, se basa en
realiza su autor a una de las afirmaciones más controvertidas del filósofo Thomas
Según Montero, Pogge afirma que “todos aquellos que sostienen un ‘orden
institucional’ que viola derechos humanos son ellos mismos violadores de derechos”306.
El objetivo de Montero es rechazar esta tesis y, en su lugar, afirmar que todos aquellos
que sostienen un “orden institucional” que viola derechos humanos pueden tener algún
grado de responsabilidad por esas violaciones o tener algún tipo de responsabilidad por
ellas, pero no son (o al menos no todos ellos son) violadores de derechos humanos.
derechos humanos, Montero dice: “[…] según el enfoque institucional defendido por
304
Montero, Julio (2008b).
305
Meckled-Garcia, Saladin (2008).
306
Montero, Julio (2008b), pág. 2. La letra cursiva es del autor.
115
sistema social debe estar organizado de modo tal que todos sus miembros tengan un
acceso razonablemente seguro a X. Ahora bien, según el enfoque institucional, toda vez
y evitable a una falta de acceso de sus miembros a los objetos de sus derechos humanos
las personas a tales objetos, este orden viola los derechos humanos de las personas. Al
mismo tiempo, Pogge afirma que los derechos humanos de los demás nos imponen un
evitable conduzca a una falta de acceso a los objetos de los derechos humanos de las
personas que viven bajo éste. Desde este enfoque, todo miembro de un orden
discutible. Todo el artículo de Montero está dirigido a rechazar esta última afirmación.
Mi objetivo aquí es mostrar 1) que aun aceptando esta afirmación, no se siguen las
consecuencias nocivas para nuestras vidas que Montero pretende y 2) que los textos de
Antes de continuar, me gustaría hacer una aclaración. Pogge no afirma que “los
derechos humanos de los demás nos imponen un deber negativo de no apoyar ningún
orden institucional” que viola esos derechos. Más precisamente, Pogge sostiene que “no
307
Montero, Julio (2008b), págs. 2-3.
308
Pogge, Thomas (2005c), pág. 75. Ver capítulo siguiente, apartado 1.
116
institucional injusto sino cuando lo apoyamos sin compensar (ya sea protegiendo a sus
idea de Pogge es que es poco realista dejar de apoyar un orden institucional (sobre todo
orden institucional injusto sin hacer esfuerzos para proteger a sus víctimas (directa o
conjunción con nuestro apoyo a un orden institucional injusto, crea las obligaciones
es no cumplir con nuestro deber negativo de no apoyar sin compensar (tal como no
las promesas que hacemos). E incumplir nuestro deber negativo es violar el derecho del
cual ese deber es correlativo. Conclusión: puesto que la mayoría de nosotros apoyamos
afirmaciones que hace Montero en su artículo acerca de los derechos humanos y de los
309
De forma directa sería protegiendo nosotros mismos a las víctimas (el ejemplo es el caso de Oskar
Schindler). De forma indirecta sería bregando por medidas institucionales que protegieran a las víctimas.
310
Pogge explica la distinción entre el deber negativo de no apoyar un orden institucional injusto y el
deber de no apoyarlo sin compensar en su respuesta a Norbert Anwander. Pogge, Thomas (2005c), págs.
69-70.
311
Ver Pogge, Thomas (2005c), págs. 68-69. Ver capítulo siguiente, apartado 2.
312
Ver capítulo siguiente, apartado 3.
313
Lo formulo así, por ahora. Ver apartado 3, en este capítulo.
117
Montero distingue dos tipos de deberes: los deberes de primer orden y los de
segundo orden. Y afirma que ambos tipos de deberes son correlativos a los derechos
humanos. Dice Montero: “Al afirmar que estos dos tipos de deberes son correlativos a
los derechos humanos, quiero decir que mantener que alguien tiene un derecho humano
a algo implica sostener necesariamente que algún otro agente tiene deberes de primer
orden, reproduzco aquí las definiciones que ofrece Montero. “Los deberes de primer
orden son deberes que un agente tiene de no violar los derechos humanos de otros
mediante sus acciones u omisiones. Estos deberes pueden ser violados a) al privar a
sus derechos humanos cuando se tiene un deber de así hacerlo”315. Por otra parte, “los
deberes de segundo orden son deberes que los agentes tienen respecto de la capacidad
de sus instituciones de satisfacer los derechos humanos de sus miembros. Los deberes
derechos humanos de las personas como una cuestión de deberes de primer orden
314
Montero, Julio (2008b), pág. 3. La letra cursiva es mía. Ver capítulo siguiente, apartado 2.
315
Montero, Julio (2008b), págs. 3-4.
316
Montero, Julio (2008b), pág. 4.
118
Resulta claro que los deberes de primer orden son deberes que tienen las
instituciones y que los deberes de segundo orden son deberes que tienen las personas
puede concebirse como una violación de derechos humanos”318. Y continua: “Si mi idea
es acertada, omitir actuar en el ámbito público para conseguir reformas políticas que
aseguren a todos los miembros de nuestro sistema institucional acceso seguro a los
mata y tortura a disidentes políticos, puede constituir un grave mal moral, más
segundo orden son correlativos a los derechos humanos (tal como él mismo afirma),
entonces no veo por qué el incumplimiento de esos deberes no constituiría una violación
de esos derechos (tal como el incumplimiento de los deberes de primer orden constituye
que su incumplimiento deje de constituir una violación de los derechos de los cuales
esos deberes son correlativos (como si su incumplimiento fuera menos grave que el
incumplimiento de los deberes de “primer orden”). Por lo tanto, considero que Montero
317
En una nota al pie, Montero aclara: “No pretendo negar que un individuo que priva a otro de acceso al
objeto de sus derechos humanos de manera interaccional no sea un violador de derechos humanos.
Determinar si quienes actúan de ese modo son o no violadores de derechos humanos es una cuestión
controvertida que no puedo considerar aquí”. Montero, Julio (2008b), pág. 5.
318
Montero, Julio (2008b), pág. 4.
319
Montero, Julio (2008b), pág. 4.
119
En el apartado 2 de su artículo, Montero pregunta: “[…] ¿qué tipo de acción
manera previsible y evitable me priva de acceso a los objetos de mis derechos humanos.
único agente que posee los poderes morales y políticos necesarios para llevar a cabo
institucionales]. Ningún otro agente, incluidos los ciudadanos, tiene autoridad para
diseñar o imponer ninguna norma social abarcadora sobre una sociedad”320. Creo que la
respuesta que ofrece Montero a su pregunta inicial está desencaminada. Porque lo que
debería ser evidente es que (dentro de su planteo) aquello que constituye una violación
orden, correlativos a esos derechos. Y si un Estado que no cumple con sus deberes de
primer orden es un Estado violador de derechos humanos, ¿por qué un individuo que no
cumple con sus deberes de segundo orden no lo sería también? El planteo de Montero
influencia que los ciudadanos puedan tener en el diseño de sus instituciones, sólo el
320
Montero, Julio (2008b), pág. 5.
120
otras”321. La afirmación de que no honrar los deberes de segundo orden no constituye
anterior (del propio Montero) de que los deberes de segundo orden son correlativos a
los derechos humanos. Por otro lado, si sólo el Estado “es capaz de organizar
asigna a los individuos unos deberes de segundo orden que, según el propio Montero,
Finalmente, el autor sostiene: “[…] para que una violación de derechos humanos
tenga lugar, es el Estado el que debe actuar. Es el Estado, en este sentido, el que, al
margen de la voluntad general, tiene los poderes legales y políticos requeridos para
diferenciado de la ciudadanía. […] Sólo un tipo de agente particular, los Estados, tiene
responsabilidad por imponer una trama de instituciones que causa que algunas personas
carezcan de acceso seguro a los objetos de sus derechos humanos de un modo previsible
y evitable”322. Si bien estas afirmaciones están en línea con la visión tradicional de los
derechos humanos, de acuerdo con la cual sólo los Estados pueden ser agentes
orden como deberes correlativos a los derechos humanos. Para afirmar que solamente
los Estados pueden violar los derechos humanos (pero no los individuos), Montero
debería decir que no hay deberes de segundo orden correlativos a los derechos humanos.
El autor parece creer que los deberes que él llama de “segundo orden” son en verdad
321
Montero, Julio (2008b), pág. 5.
322
Montero, Julio (2008b), pág. 6.
121
derechos humanos (aun cuando, según él mismo, son correlativos a esos derechos),
Considero que tanto Pogge como Montero quedan atrapados por las premisas de
humanos?
Supongamos, tal como parece, que la idea de que todos somos violadores de
él, decir que el incumplimiento de deberes de segundo orden constituye una violación
de derechos humanos “socavaría seriamente nuestras chances de vivir una vida humana
resguarden los derechos humanos prevaleciera sobre toda otra obligación, nuestro deber
obligaciones [hacia nuestros padres, nuestros hijos, nuestros amigos]. También podría
disfrutar del tiempo libre, a desarrollar nuestros talentos, o a invertir tanto tiempo como
323
Montero, Julio (2008b), pág. 7.
122
deseamos en nuestra vida profesional. Sin embargo, tener una personalidad humana
preferencias originales y proyectos propios. Por tanto, la idea de que nuestros deberes
aquí es que es el propio Montero el que les asignó a los individuos deberes de segundo
orden correlativos a los derechos humanos. Pero ahora dice que cumplir con estos
humanos (para contribuir a la capacidad de mis instituciones de cumplir con sus deberes
injusto) socavarían mis posibilidades de vivir una vida humana propia y me destruirían
esclavitud328. Pogge cita este ejemplo como modelo de lo que las personas deberíamos
hacer. ¿Qué es lo que hicieron los ciudadanos y ciudadanas de Manchester que, a fines
del siglo XVIII, lucharon contra la esclavitud? Juntaron firmas (a favor de la abolición
de la esclavitud), boicotearon productos (el azúcar que se producía con trabajo esclavo)
324
Montero, Julio (2008b), pág. 7.
325
Montero, Julio (2008b), pág. 4.
326
Montero, Julio (2008b), pág. 4.
327
Montero, Julio (2008b), pág. 4.
328
Pogge, Thomas (2007c), pág. 6. Ver capítulo siguiente, apartado 5, sección 2.
123
y donaron dinero. Sin duda, estaban comprometidos con una causa y participaban de
una forma de activismo. Y supongo que todos ellos tenían padres, hijos y amigos, así
escenarios imposibles en los que las personas ya no tienen vidas humanas propias y ya
no son entidades distintivas. Ciertamente, Pogge no está pensando en que las personas
dediquen cada segundo de sus vidas a la lucha contra la pobreza. Lo que Pogge pide es
Pensemos en cuáles son las dos obligaciones positivas que debemos cumplir
para cumplir a su vez con nuestro deber negativo de no apoyar un orden institucional
injusto sin compensar: proteger a las víctimas de ese orden (ya sea directa o
protección ya no sean necesarias. Lo que Pogge pide entonces es que cada persona
bregue, desde el lugar que ocupa en la sociedad, por medidas institucionales que
protejan a las víctimas del orden institucional injusto y por reformas institucionales que
conviertan a ese orden injusto en uno más justo. Pogge dice: “Todos tenemos un voto,
una voz, amigos, influencia”329. Esto es todo lo que Pogge pide: que presionemos a
329
Pogge, Thomas (2005c), pág. 81. Algo parecido, acerca de nuestras responsabilidades como
ciudadanos y ciudadanas del mundo, dice Martha Nussbaum. Para cumplir con estas responsabilidades,
podemos apoyar o unirnos a “organizaciones no gubernamentales de diversos tipos”. Estas organizaciones
“se movilizan para influir en las acciones de los gobiernos en asuntos que van desde la ecología a la
violencia doméstica” y pueden “presionar a los gobiernos nacionales para que emprendan acciones
encaminadas a conseguir determinados objetivos globales”. También podemos dar “ayuda financiera a la
organización Human Rights Watch”, participar “en debates sobre el bienestar de los niños y las mujeres”
y “pensar y escribir [sobre estos temas] (dónde, depende de cada uno)”. Nussbaum, Martha (1999), págs.
162-163.
124
favor de la erradicación de la pobreza a través de nuestro voto, nuestra voz (donde sea
que podamos hacerla oír) y nuestra influencia (la que sea que tengamos).
decir que cumplir con nuestros deberes y obligaciones socavaría nuestras posibilidades
de vivir una vida humana propia y nos destruiría como entidades distintivas.
3) ¿Violadores o contribuyentes?
Como traté de mostrar, esta afirmación no se condice con la afirmación anterior (del
propio Montero) acerca de que tanto los deberes de primer orden como los deberes de
segundo orden son correlativos a los derechos humanos. Así, sostener que “únicamente
erradicar la pobreza global, no necesita comprometerse con una visión tan controvertida
[es decir, con la visión de que nosotros mismos somos violadores de derechos
humanos]. Sostener que las personas tienen responsabilidad por lo que hacen sus
institucional global que contribuyen a mantener, debería ser suficiente para motivarlas a
330
Montero, Julio (2008b), pág. 8.
331
Montero, Julio (2008b), pág. 8.
125
realizar las acciones moralmente requeridas”332. Como dije, coincido con Montero. Y
El artículo de Montero niega que los individuos sean ellos mismos violadores de
derechos humanos. Sin embargo, afirma que aquellos que no cumplen con sus deberes
de segundo orden contribuyen con las violaciones llevadas a cabo por sus instituciones.
Dice Montero: “[…] cuando las personas apoyan o sostienen instituciones violadoras de
violador de derechos humanos. Esto es, sin duda, un grave mal moral”333.
constituir una violación de derechos humanos y todos aquellos que los incumplieran
deberían ser violadores de derechos humanos. Lejos de esto, Montero afirma que el
[Pobreza severa como una violación de deberes negativos], Pogge dice: “[Las
parte del daño que infligimos juntos –protegiendo a sus víctimas o trabajando a favor de
obligaciones positivas, por lo tanto, viola derechos humanos”335. Es decir, todos los que
no cumplen con sus obligaciones positivas son ellos mismos violadores de derechos
332
Montero, Julio (2008b), pág. 8. La letra cursiva es mía.
333
Montero, Julio (2008b), pág. 6. La letra cursiva es del autor.
334
Pogge, Thomas (2005c).
335
Pogge, Thomas (2005c), págs. 68-69.
126
competentes que cooperan en imponer un orden institucional que previsiblemente causa
déficits evitables de derechos humanos sin hacer una protección que compense y
derechos humanos”336.
negativo) debería constituir una violación de derechos humanos y todos aquellos que las
respaldada por el hecho de que Pogge distingue, tal como pide Montero, grados de
acuerdo con Debra Satz en] que los ciudadanos que nacieron en una familia rica, han
disfrutado de una excelente educación y tienen un buen trabajo, salud e influencia tienen
más responsabilidad por las políticas de su país que los ciudadanos con características
opuestas”337.
De todos modos, Montero tiene razón cuando señala que Pogge, en varios
podría afirmar que Pogge oscila entre llamar violadores o contribuyentes a los
individuos.
336
Pogge, Thomas (2005c), pág. 69. La letra cursiva es mía.
337
Pogge, Thomas (2005c), pág. 80. Ver capítulo siguiente, apartado 5, sección 1.
127
Resulta evidente que decir que los incumplidores de las obligaciones positivas y,
por lo tanto, incumplidores del deber negativo de no apoyar sin compensar son, ellos
Nadie quiere ser, ni quiere que le digan que es, un violador de derechos humanos. Pero
considero que decir que son contribuyentes es más preciso y consistente. Y tal como
señala Montero, decir que los individuos son contribuyentes debería alcanzar para que
cumplan con sus deberes de segundo orden (en el lenguaje de Montero) o con sus
que cooperan o contribuyen (en diferentes grados) a violarlos. Y esto es así porque, tal
como señalé en el apartado 1 de este capítulo, el deber que todos tenemos es el deber de
protección que compense y esfuerzos de reforma para sus víctimas”. Violar el deber de
dice, en contribuyentes.
violar o para no violar los derechos humanos, lo que debemos hacer es cumplir con
cumplimiento de nuestras obligaciones sólo exige que usemos nuestro voto, nuestra voz
con esta causa y también alguna forma de activismo. Pero nada de esto representa un
128
escenario en el cual ya no podemos vivir nuestras vidas ni cumplir con nuestras otras
obligaciones.
deberes. Debido a la novedad que introduce el planteo de este filósofo en los debates
sobre la justicia y la pobreza globales, creo que muchas veces se lo lee con demasiados
prejuicios o reparos, los cuales terminan conduciendo a una lectura muy extremista de
sus textos. Considero que, aun siendo un autor muy crítico con respecto a otras
cree338.
autor. Tal como dije en el apartado 1, creo que Pogge “queda atrapado por las premisas
como expliqué en el apartado 3, creo que Pogge varias veces llama “violadores” de
derechos humanos a los ciudadanos comunes para causar un mayor impacto y provocar
338
O tal vez sucede que el statu quo es tan bajo que las exigencias de Pogge, aunque pocas, parecen
excesivas.
339
Agradezco a Andrés Rosler por sus comentarios, los cuales me motivaron a agregar este apartado.
129
una mayor incomodidad. Pero considero que esta búsqueda de impacto colaboró a que
su teoría fuera vista como más exigente o más demandante de lo que en verdad resulta.
Pareciera que, por momentos, el activista que hay en Pogge le ganara al filósofo, en
2) Una segunda crítica consiste en señalar (al contrario que la mayoría) la poca
exigencia de la teoría poggeana. Sostengo que los argumentos de Pogge son bastante
menos exigentes y más moderados de lo que sus críticos suponen y que esto lo pone
fuera del alcance de muchas de las objeciones que se le han planteado. Pero también
creo que la teoría de Pogge corre el riesgo de ser muy poco exigente. Dicho de una
manera muy informal, uno podría creer que está cumpliendo con sus deberes morales,
por ejemplo, al compartir en las redes sociales alguna frase en contra de la pobreza. La
teoría puede ser imprecisa o abierta con respecto al límite inferior o más bajo de
cumplimento moral, pero no puede ser tan abierta o imprecisa que permita este tipo de
En las Palabras finales, luego del capítulo siguiente, retomo esta última
pregunta340.
340
Ver también capítulo 7, apartado 5, sección 2.
130
7. ROMPECABEZAS POGGE:
JUSTICIA GLOBAL
Este capítulo tiene un carácter conclusivo. Me propongo tomar las piezas que he
ido desplegando en los capítulos anteriores y armar con ellas, lo que yo llamo, el
“rompecabezas Pogge”, esto es, una interpretación original y más sofisticada de la teoría
intención es ponerlas finalmente en el lugar que les corresponde. Para hacer esta
of negative duties”341 [Pobreza severa como una violación de deberes negativos], al cual
considero una suerte de compendio de las tesis principales sostenidas por este autor y el
cual es una respuesta a varias críticas formuladas por algunos filósofos342 en el marco de
un simposio realizado en 2003. De este artículo, tomo aquello que considero más
defenderlo de algunas de las críticas más importantes que se le han formulado, basadas
341
Pogge, Thomas (2005c).
342
Mathias Risse, Alan Patten, Rowan Cruft, Norbert Anwander y Debra Satz.
131
1) Una concepción mínima de la justicia
sin hacer una protección que compense y esfuerzos de reforma para sus
víctimas”344.
Como Pogge mismo reconoce, decir esto no es decir nada todavía acerca de qué
es un orden social justo o un orden social injusto. Y para decir qué es un orden justo,
Pogge no adopta una concepción de máxima acerca de la justicia social (la cual no
conseguiría muchos adeptos), sino una concepción de mínima acerca de qué es lo que se
requiere para que un orden social pueda ser considerado justo345. El objetivo de adoptar
con respecto a la afirmación de que este orden institucional global es injusto. Y por lo
afirmación de que este orden institucional global daña a los pobres globales.
institucional debe estar diseñado de modo que, en la medida que sea razonablemente
343
Pogge, Thomas (2005c), pág. 75. “[…] we must not participate in just social institutions without a
willingness to comply with them […]”.
344
Pogge, Thomas (2005c), pág. 75. “[…] we must not cooperate in upholding unjust social institutions
without making compensating protection and reform efforts for their victims […]”. Este deber fue
introducido en el capítulo anterior, apartado 1.
345
Aunque es verdad que, para los liberales nozickeanos, la concepción de la justicia social de Pogge no
resulta tan de mínima.
132
posible, los derechos humanos de aquellas personas sobre las cuales es impuesto estén
satisfechos”346. Y tal como dice Pogge, esta concepción mínima347 implica que
humanos”349.
justicia “agote lo que la justicia requiere”350, sino que la propone como una “condición
necesaria”351 de la justicia social. Esto significa que, para que un orden institucional sea
justo, debe satisfacer “al menos”352 los derechos humanos de las personas sobre las
cuales es impuesto (“en la medida que sea razonablemente posible”). Por otro lado, el
hecho de que un orden institucional no satisfaga los derechos humanos de las personas
sobre las cuales se impone es una “condición suficiente”353 para decir que ese orden es
los derechos humanos “porque es ampliamente aceptada y suficiente para alcanzar [sus]
derechos civiles y políticos como a los sociales y económicos, es decir, a los derechos
346
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
347
Una concepción no mínima (es decir, más ambiciosa) de la justicia sería una teoría igualitarista
internacional, con un criterio igualitarista global de distribución de bienes y servicios, entre todos los
seres humanos.
348
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
349
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76. La letra cursiva es del autor.
350
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
351
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
352
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
353
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
354
Pogge, Thomas (2005c), pág. 76.
133
humanos tal como están enumerados en la Declaración Universal de Derechos
10 de diciembre de 1948355.
terceros356. En este sentido, Pogge afirma, en su respuesta a Rowan Cruft, que “los
derechos humanos de otros imponen sobre nosotros un deber negativo de ‘no cooperar
insatisfechos los derechos humanos sin hacer esfuerzos razonables para ayudar357 a sus
víctimas y para promover una reforma institucional’”358. Es decir, los derechos humanos
pueden ser de dos tipos: pueden consistir en proteger a las víctimas de un orden injusto
apoyando medidas institucionales que las protejan, como subsidios, por ejemplo) o
pueden consistir en apoyar reformas institucionales que modifiquen los rasgos injustos
del orden institucional para que se convierta en un orden más justo. Un tercer tipo de
compensación (que está más cerca de la protección que de las reformas institucionales)
355
Ver http://www.un.org/es/documents/udhr/index.shtml
356
Pogge, Thomas (2005c), págs. 68-69. Ver también Nino, Carlos (1984), pág. 32.
357
Aquí, Pogge está citándose a sí mismo y, en la cita, utiliza el verbo “ayudar”. Un verbo más adecuado
habría sido “proteger”, el cual utiliza en el resto de su artículo.
358
Pogge, Thomas (2005c), pág. 65.
359
Tal como hizo Oskar Schindler. Ver apartado 4, en este capítulo.
134
sería la donación a entidades como OXFAM o UNICEF. De acuerdo con Pogge, en los
casos en los que el derecho es correlativo de un deber, la violación del deber es ipso
Más adelante, Pogge distingue entre deberes y obligaciones: “Los deberes son
generativos –es decir, deberes que, en conjunción con las circunstancias empíricas
decir, algunos deberes (los deberes generativos), “en conjunción con las circunstancias
empíricas apropiadas”, generan obligaciones, esto es, “razones morales más específicas
para la acción”. Estos deberes generativos pueden ser tanto positivos como negativos.
conjunción con una emergencia aguda, genera una obligación positiva de lanzarle un
promesas y luego romperlas, “en conjunción con una promesa de devolver un préstamo,
genera una obligación positiva de pago”362. Un deber negativo puede entonces generar
deberes positivos derivativos. A estos deberes positivos derivativos, Pogge los llama
positivo es que la obligación positiva (cuando está generada por un deber negativo)
parece más fuerte. Incluso las personas más liberales, que no aceptan deberes positivos,
aceptan sin embargo que hay una obligación positiva de pago si uno pidió dinero
360
Pogge, Thomas (2005c), pág. 68. La letra cursiva es del autor. Ver también Pogge, Thomas (1992),
págs. 233-234.
361
Pogge, Thomas (2005c), pág. 68.
362
Pogge, Thomas (2005c), pág. 68.
363
Pogge, Thomas (2005c), pág. 68.
364
Pogge, Thomas (2005c), pág. 69.
135
De acuerdo con Pogge, todas las personas tenemos un deber negativo de “no
dañar a otros al cooperar, sin una protección que compense y esfuerzos de reforma, en
imponer sobre ellos un orden institucional que previsiblemente causa déficits evitables
hacer una protección que compense y esfuerzos de reforma para aquellas personas
cuyos derechos humanos permanecen insatisfechos bajo ese orden”366. Como se puede
que es impuesto por los derechos humanos. No cumplir con estas obligaciones positivas
es no cumplir con nuestro deber negativo, lo cual es violar los derechos humanos (o más
que forman parte de ese orden tienen alguna responsabilidad en esas violaciones y el
deber de remediarlas. Tal como Pogge dice más adelante, sería muy cómodo si
personas más privilegiadas del mundo se tomaran en serio el deber negativo de “no
dañar a otros al cooperar, sin hacer una protección que compense y esfuerzos de
365
Pogge, Thomas (2005c), pág. 68.
366
Pogge, Thomas (2005c), pág. 68.
367
Ver apartado 5, sección 1, en este capítulo.
136
reforma, en imponerles reglas institucionales que previsiblemente causan déficits
evitables de derechos humanos”368, la mayor parte de esos déficits podrían ser evitados.
medidas institucionales que protegen a las personas cuyos derechos están siendo
violados. Así, Pogge está pensando en este Dividendo como una forma de proteger a las
libro, La pobreza en el mundo y los derechos humanos370. Allí, dice lo siguiente: “[…]
368
Pogge, Thomas (2005c), pág. 69.
369
“Esta propuesta prevé que los estados y sus gobiernos no deberán disfrutar de plenos derechos
libertarianos de propiedad sobre los recursos naturales de su territorio, sino que se les podrá exigir que
compartan una pequeña parte del valor de cualquier recurso que decidan utilizar o vender. El pago que
deben realizar se denomina dividendo, porque se autoriza con la idea de que los pobres globales poseen
una porción inalienable de todos los recursos naturales no renovables. Como en el caso de las opciones de
compra de acciones, esta porción no confiere ningún derecho a participar en las decisiones acerca de si se
deben usar, y cómo, los recursos naturales, y por tanto no interfiere en el control nacional sobre los
recursos, ni tampoco en el derecho de expropiación. No obstante, confiere a sus titulares el derecho a una
porción del valor económico del recurso en cuestión, si, de hecho, se decide utilizarlo. Esta idea podría
abarcar los recursos no renovables que el uso no destruye, sino que sólo erosiona, gasta u ocupa, tales
como el aire y el agua que se usan en el vertido de agentes contaminantes o la tierra que se usa en el
cultivo, la ganadería o la construcción”. Pogge, Thomas (2005a), págs. 249-250.
370
Pogge, Thomas (2005a).
137
Global de Recursos […]– ayudan a los pobres, sino que los protegen de los efectos de
unas reglas globales cuya injusticia nos beneficia y de la que somos responsables. Y
deberíamos pensar no sólo en estas medidas reparadoras, sino también en las reformas
institucionales que podrían reducir la injusticia del orden global de una manera que
obligación positiva.
institucional injusto, considero que Pogge está pensando en las reformas de los cuatro
propiedad intelectual, las externalidades negativas que los países ricos imponen a los
injusto sin proteger a sus víctimas y sin hacer esfuerzos para reformarlo, en conjunción
conviertan al orden institucional injusto en uno más justo, de modo que, a futuro, las
Con respecto a las reformas de los cuatro rasgos del orden institucional global,
Pogge afirma, en su respuesta a Satz, que una reforma de este tipo “puede estar
371
Pogge, Thomas (2005a), pág. 39. Texto ya citado, con algunas diferencias, en el capítulo 3, apartado 2,
sección 2.
372
O la obligación de protegerlas nosotros directamente, tal como hizo Oskar Schindler. Ver apartado
siguiente.
138
reducción sustancial del daño que nosotros esperamos de ella no es necesaria sino sólo
altamente probable a la luz de los hechos y correlaciones empíricos tal como nosotros
los entendemos”373. Para ilustrar lo que acaba de decir, Pogge pone el ejemplo de las
estas reglas, Pogge dice que es innegable que “conducen previsiblemente a una carencia
evitable de drogas asequibles para las enfermedades transmisibles más destructivas […].
año”375. Estas muertes y este sufrimiento, causados por la falta de drogas, causada a su
vez por las reglas globales actuales sobre investigación farmacéutica, son “una
transmisibles”376.
Del mismo modo, es posible afirmar que las reglas actuales sobre comercio,
Este empobrecimiento, causado por las reglas globales actuales, es “una justificación
suficiente para emprender los esfuerzos de reforma, incluso si no podemos saber por
pobreza directamente, sino indirectamente, al reducir los incentivos para los golpes de
373
Pogge, Thomas (2005c), pág. 77.
374
Pogge, Thomas (2005c), pág. 77. En el capítulo 3, apartado 2, sección 1, utilicé este ejemplo para
elaborar una defensa de Pogge contra las críticas de Cohen a la “tesis fuerte”.
375
Pogge, Thomas (2005c), pág. 78.
376
Pogge, Thomas (2005c), pág. 78.
139
Estado. De acuerdo con Pogge, la reforma de este rasgo injusto de nuestro orden
buenas instituciones domésticas. Tal como sostienen las personas que Pogge llama
imponerse desde afuera. Y Pogge no afirma que se puedan imponer. Lo que sí afirma es
exclusivamente endógenos, sino que también pueden ser alentados o desalentados por
proteger a sus víctimas y sin hacer esfuerzos para reformarlo, es lo que Pogge llama el
este deber. Allí, dice: “[Este deber] no hace incorrecto contribuir con […] una injusticia
colectiva cuando uno hace una protección que compense y esfuerzos de reforma para
sus víctimas”379. Para explicar esto, Pogge recurre al ejemplo de Oskar Schindler: “A
377
Pogge, Thomas (2005b), pág. 6.
378
Un tercer deber mencionado por Pogge, además de los dos mencionados en el apartado 1 de este
capítulo, es el deber de no aprovecharse o de no tomar ventaja de la injusticia. Ver la respuesta de Pogge
a Norbert Anwander. Pogge, Thomas (2005c), págs. 69-74.
379
Pogge, Thomas (2005c), pág. 69. “[The duty not to contribute to injustice does] not make it wrong to
contribute to […] a collective injustice when one makes compensating protection and reform efforts for
its victims”.
140
hacer esto le permitió compensar (más que adecuadamente) por sus contribuciones al
daño a través de los esfuerzos de protección para sus víctimas. Su conducta cumplió con
el deber negativo que yo postulo –no menos completamente que si hubiera dejado
Alemania. De hecho, Schindler hizo mucho más por las víctimas de lo que habría hecho
orden institucional doméstico. Y parece ser cierto que, en este caso, Schindler hizo más
por las víctimas del régimen nazi al quedarse en Alemania de lo que habría hecho si se
hubiera ido, aun cuando, quedándose, estaba contribuyendo con un orden doméstico
injusto.
deber negativo; y
Pero en el caso de un orden global injusto, parece que solamente tenemos dos de
las tres opciones: las dos últimas. Si bien la mayoría de nosotros puede abandonar el
país en el que vive, ninguno de nosotros puede abandonar el planeta (al menos todavía).
Por lo tanto, las compensaciones que Pogge sugiere tienen todavía más sentido.
380
Pogge, Thomas (2005c), pág. 70.
141
En el capítulo 8 de su libro La pobreza en el mundo y los derechos humanos,
Pogge dice: “Podemos poner fin a nuestra implicación en [la] pobreza extrema de una
reforma económica que acabe con la pobreza. Si otros obstaculizan las reformas
factibles, puede que al final nosotros no seamos capaces de hacer más que mitigar
algunos de los daños que también ayudamos a provocar. Pero incluso en ese caso
prestar ayuda al necesitado, sino al deber de proteger a las víctimas de toda injusticia a
propuesta del Dividendo Global de Recursos. Y esta cita corrobora lo que afirmé en el
apartado anterior: que Pogge está pensando en el Dividendo como una medida
institucional que cumple con nuestra obligación positiva de proteger a las víctimas de
cumplimos con nuestras dos obligaciones de proteger a las víctimas del orden
contribuyendo con las violaciones de los derechos humanos de aquellas personas sobre
las cuales nosotros colaboramos en imponer un orden institucional injusto. Ésta es una
de las conclusiones más fuertes del planteo de Pogge. Todos nosotros (o casi todos
381
Pogge, Thomas (2005a), págs. 266-267. La letra cursiva es mía. En esta cita, resuenan también las
palabras de Kant, citadas en una nota al pie en el capítulo 3, apartado 2, sección 2, acerca de la “injusticia
universal”.
142
nosotros) estamos contribuyendo con las violaciones de los derechos humanos de las
5) “¿Cuánto es suficiente?”382
Debra Satz pregunta lo siguiente: “¿[…] podemos nosotros, ciudadanos de todas las
naciones desarrolladas del mundo, ser responsables por las políticas del FMI y del
Banco Mundial? […] ¿Cuál es exactamente nuestra responsabilidad? ¿En qué medida
las políticas injustas (en verdad algunas veces ruinosas) del FMI nos hacen
“Nuestros políticos y negociadores ejercen el poder que nosotros les delegamos”384. Por
lo tanto, nosotros somos responsables por “cómo nuestro poder colectivo es ejercido en
dijera, tal como dice Satz, que no somos responsables porque nuestros políticos y
que Pogge llama una “escapatoria moral”386. Dice Pogge: “En la medida que las
382
Pogge, Thomas (2005c), pág. 79.
383
Satz, Debra (2005), págs. 50-51. La letra cursiva es de la autora.
384
Pogge, Thomas (2005c), pág. 79. La letra cursiva es del autor.
385
Pogge, Thomas (2005c), pág. 79.
386
Pogge, Thomas (2005c), pág. 79. Ver también Pogge, Thomas (2005a), capítulo 3.
143
políticas injustas y de una economía mundial injustamente estructurada más la
humanos que tal injusticia produce”387. De acuerdo con Pogge: “Nosotros no podemos
por la forma en que ellos ejercen el poder que nosotros les damos en nuestro nombre.
responsabilidad entre los ciudadanos ordinarios?), Pogge acepta que es muy difícil
calcular exactamente la responsabilidad de cada una de las personas que viven en los
países ricos. Y acepta también que las personas más privilegiadas y mejor educadas
tienen una mayor responsabilidad por las políticas que adoptan sus países389. Sin
embargo, Pogge pregunta: “¿Qué tan importante es que una distribución precisa de la
juicio de que casi todas las personas ricas hoy están evidentemente fracasando en
compensar su parte del daño colectivo, incluso sobre las estimaciones más
387
Pogge, Thomas (2005c), pág. 79. La letra cursiva es del autor.
388
Pogge, Thomas (2005c), pág. 79. La letra cursiva es del autor.
389
Ver capítulo anterior, apartado 3.
390
Pogge, Thomas (2005c), pág. 80.
144
académicos, acerca de los ciudadanos ordinarios y sus defectos”391. Pogge pretende
hablarles “a [sus] conciudadanos en los países ricos acerca de cómo nosotros podemos,
con nuestros deberes ciudadanos no significa que debamos abandonar nuestras vidas y
nuestras obligaciones para dedicarnos día y noche a la lucha contra la pobreza global.
Considero que lo que Pogge les (nos) pide a los grupos de académicos y a los
ciudadanos más privilegiados (tanto de los países desarrollados como de los países en
orden injusto y que trabajen por reformas institucionales que modifiquen los rasgos
injustos de ese orden, de modo que, a futuro, esas medidas de protección se vuelvan
innecesarias. Esto es, según mi interpretación, todo lo que Pogge les (nos) pide. Y este
pedido no suena desmedido sino más bien bastante mesurado. Aún así, la mayoría de
derechos humanos. Pero recordemos que las obligaciones positivas son proteger a las
víctimas (ya sea de forma directa o indirecta) y hacer esfuerzos para reformar el orden
institucional. Así, bregar por medidas que protejan a las personas más pobres o por
reformas institucionales que modifiquen los rasgos más injustos es cumplir con nuestras
391
Pogge, Thomas (2005c), pág. 81. La letra cursiva es del autor.
392
Pogge, Thomas (2005c), pág. 81. La letra cursiva es del autor.
393
Meckled-Garcia, Saladin (2008).
394
Algo similar sucede con Peter Singer y con su pedido de que donemos, al menos, el 1% de nuestros
ingresos anuales. Este pedido también es mesurado pero la mayoría de las personas tampoco lo cumple.
Ver capítulo 1, apartado 3.
145
obligaciones positivas. Resulta extremista, entonces, reaccionar como si Pogge nos
estuviera pidiendo que renunciáramos a nuestras vidas para luchar contra la pobreza
Para ilustrar nuestros deberes ciudadanos, podemos tomar el ejemplo que Pogge
esclavitud395. Acerca de este ejemplo, Pogge dice: “[a fines del siglo XVIII] un grupo
movimiento abolicionista que hizo progresivamente más difícil para sus compatriotas
crucial cuando, en 1787, [se unieron a] la ardua batalla contra la esclavitud con una
peligro sus sustentos porque mucho del algodón de las plantaciones de trabajo esclavo
pobres de lo que los ciudadanos de las adineradas democracias de hoy pueden siquiera
imaginar. Aquellos que no tenían dinero para dar apoyaban la causa con aquello que
podían. Las mujeres especialmente, aún muy forzadas por la ley y las costumbres,
inscripciones (‘¿No soy una mujer y una hermana?’) y se negaron a comprar azúcar
395
Mencioné este ejemplo en el capítulo anterior, apartado 2.
396
Pogge continua: “Esta gente no miró para otro lado, ni hizo todo lo posible por mantenerse ignorante
del gran crimen en el cual su país estaba involucrado. No culparon de todo ello a los cazadores africanos
de esclavos o a los comerciantes de Liverpool o a los políticos británicos. No señalaron a otros países para
exonerar al propio. Ellos no alegaron pobreza, falta de poder o ignorancia. Ellos no se refugiaron en el
pensamiento según el cual la gente de su bajo rango no podía ser considerada responsable por los
crímenes cometidos por su país. Ni tampoco fueron disuadidos por sus bajas probabilidades de éxito.
Estos hombres y mujeres de la clase trabajadora de Manchester del siglo XVIII entendieron mejor su
responsabilidad compartida por la miseria, de lo que lo entienden hoy sofisticados periodistas y filósofos
políticos. Si ellos fueron capaces de reconocer y parar el crimen de su país, entonces también pueden
hacer lo propio los ciudadanos de los países ricos de hoy en Europa y Norteamérica”. Pogge, Thomas
(2007c), pág. 6. La letra cursiva es mía.
146
Como dije en el capítulo anterior, imagino que esas personas (mujeres y
hombres) tenían familias y amigos y que no los abandonaron. Imagino también que
ciudadano que Pogge propone y el que pretende que nosotros sigamos. Es el modelo en
el cual Pogge se inspira y con el cual pretende inspirar a sus lectores. Es como si Pogge
dijera: “Si ellos y ellas pudieron acabar con la esclavitud, entonces nosotros podemos
acabar con la pobreza”. No hace falta que dejemos de vivir nuestras vidas o de cumplir
con nuestras obligaciones. Hace falta que presionemos a favor de medidas que protejan
a las personas más pobres y a favor de reformas institucionales que conviertan a este
orden injusto en uno más justo, de modo que, a futuro, las medidas de protección ya no
sean necesarias, porque todas las personas tendrán acceso a los objetos de sus derechos
humanos.
147
148
PALABRAS FINALES
En general, se lee a Pogge como si este autor fuera un extremista y como si sus
posturas fueran radicales397. Pero he tratado de mostrar que esta lectura es errada.
Así como el principio fuerte era el principio moralmente óptimo para Singer398,
es verdad que, para Pogge, lo moralmente óptimo sería que imitáramos a Oskar
Schindler. Sin embargo, así como había, para Singer, otro principio moderado, hay, en
Pogge, otras opciones moderadas, al alcance de todos y no sólo de los héroes o santos
morales. Estas opciones son: hacer boicots, donar dinero, escribir sobre los temas que
nos preocupan, participar en debates, comprometernos con una causa. No hacer nada
de esto sería claramente inmoral. Pero ¿cuánto hacer? Creo que Pogge no desea dar una
elección. Y creo que cada uno sabe (o tiene alguna creencia acerca de) qué es lo que
Singer pone el nivel de exigencia muy alto y luego debe bajarlo, ante las críticas
que le señalan que su teoría exige demasiado399. Por el contrario, Pogge no exige tanto,
pero siempre tiene como modelo de aquello que deberíamos hacer a las personas que
modelo e intentar alcanzarlo. Es el modelo que Pogge cita en muchos de sus textos y
397
Ver especialmente capítulos 4 y 6.
398
Ver capítulo 1, apartado 1.
399
Ver capítulo 1, apartados 2 y 3.
149
con el cual cierra el libro Thomas Pogge and his critics400 [Thomas Pogge y sus
críticos]. Es el modelo que Pogge quiere que permanezca en las mentes de sus lectores y
En resumen, creo que los textos de Pogge nos instan a abandonar un sistema
injusto (como lo era también el sistema esclavista), que mantiene en la pobreza a una
gran parte de la humanidad, por otro en el que todas las personas puedan vivir vidas
donde sea que habiten. En definitiva, las palabras de Pogge no hacen otra cosa que
400
Jaggar, Alison (2010). Dice Pogge, en el último párrafo del libro: “[…] mi inspiración más grande es
el movimiento antiesclavista […]. Sus miembros sabían que los esclavos embarcados con cadenas a
América eran negros, y ellos defendieron los derechos de esos esclavos presentándolos como seres
humanos, como hermanos y hermanas. Nosotros sabemos que aquellos mantenidos en la esclavitud hoy
son en su abrumadora mayoría de piel negra y nosotros podemos defender sus derechos apelando a su
humanidad. Así como unos miles de una generación anterior se organizaron para abolir la esclavitud,
nosotros podemos –y debemos– organizarnos para abolir la pobreza”. Jaggar, Alison (2010), pág. 238.
150
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