- Dios es llamado Padre por ser el origen de todo y por establecer una relación filial con la humanidad. Crea todo de la nada, teniendo al hombre como la creación más perfecta.
- Al principio existía armonía entre Dios, el hombre, la mujer y la creación, pero el pecado original consistió en desobedecer a Dios y querer ser más de lo que se es.
- Las consecuencias del pecado incluyen la ruptura de relaciones, pero Dios no abandona al hombre, elige un pueblo y establece una alianza
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- Dios es llamado Padre por ser el origen de todo y por establecer una relación filial con la humanidad. Crea todo de la nada, teniendo al hombre como la creación más perfecta.
- Al principio existía armonía entre Dios, el hombre, la mujer y la creación, pero el pecado original consistió en desobedecer a Dios y querer ser más de lo que se es.
- Las consecuencias del pecado incluyen la ruptura de relaciones, pero Dios no abandona al hombre, elige un pueblo y establece una alianza
- Dios es llamado Padre por ser el origen de todo y por establecer una relación filial con la humanidad. Crea todo de la nada, teniendo al hombre como la creación más perfecta.
- Al principio existía armonía entre Dios, el hombre, la mujer y la creación, pero el pecado original consistió en desobedecer a Dios y querer ser más de lo que se es.
- Las consecuencias del pecado incluyen la ruptura de relaciones, pero Dios no abandona al hombre, elige un pueblo y establece una alianza
- Dios es llamado Padre por ser el origen de todo y por establecer una relación filial con la humanidad. Crea todo de la nada, teniendo al hombre como la creación más perfecta.
- Al principio existía armonía entre Dios, el hombre, la mujer y la creación, pero el pecado original consistió en desobedecer a Dios y querer ser más de lo que se es.
- Las consecuencias del pecado incluyen la ruptura de relaciones, pero Dios no abandona al hombre, elige un pueblo y establece una alianza
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SUBSIDIO DEL CATEQUISTA
CATEQUESIS 1: ¿QUIÉN ES EL PADRE?
Así comienza el nro. 239 del Catecismo de la Iglesia: “Al designar a Dios con el nombre de "Padre", el lenguaje de la fe indica principalmente dos aspectos: que Dios es origen primero de todo y autoridad trascendente y que es al mismo tiempo bondad y solicitud amorosa para todos sus hijos” Esto es lo que queremos focalizar en esta catequesis. Dios en tanto Padre es origen de todo, creador de todas las cosas, y a su vez, utilizando nuestra experiencia humana como imagen, es el Padre que nos ama con infinita ternura. Para que los chicos puedan llegar a comprender estas verdades de fe, les proponemos este temario:
Dios crea todo de la nada
La Creación del hombre como culmen La desobediencia y el pecado Dios no abandona al hombre
Dios crea de la nada.
Dios creó todas las cosas por amor. Antes de la creación no había nada preexistente. Y todo cuanto existe manifiesta el desbordante amor-misericordia de Dios, pues Dios hizo todo bueno. La realidad, en consecuencia, siempre tiene “algo bueno”. Así lo dicen las primeras páginas del libro del Génesis (Gn) Creemos que toda la creación procede de la voluntad libre de Dios. El Papa Francisco recogiendo las palabras del catecismo de la Iglesia Católica (nro 295) nos dice: “las distintas criaturas queridas en su ser propio, reflejan cada una a su manera, un rayo de la sabiduría y la bondad de Dios. Por esto, el hombre debe respetar la bondad propia de cada criatura para evitar un uso desordenado de las cosas” (LS 69). Dios nos ha dado la creación para que sea nuestra casa, el lugar donde vivamos como hijos suyos y como miembros de una gran familia. En la creación hay un reflejo de Dios (Dios está en lo más íntimo de las criaturas - CatIC nro 300-)
Algunas preguntas para la reflexión de los chicos podrían ser las siguientes: ¿Cómo nos gusta que esté nuestra casa? ¿Qué hacemos para que nuestra casa este limpia y bonita? ¿Qué debemos hacer para cuidar la creación y no seguir destruyéndola? Creación del hombre La creación más maravillosa de Dios fue el hombre. “Hagamos al hombre a nuestra imagen, y semejanza” (Gn 1, 26) Es la cumbre de toda la Creación. Dice el nro 356 del CatIC: “De todas las criaturas visibles sólo el hombre es "capaz de conocer y amar a su Creador" (GS 12,3); es la "única criatura en la tierra a la que Dios ha amado por sí misma" (GS 24,3); sólo él está llamado a participar, por el conocimiento y el amor, en la vida de Dios” Es interesante en relación a los chicos, que vayan teniendo esta conciencia: son realmente la creación más perfecta. Son amados!
¿Por qué creo Dios al hombre? Dios creó al hombre para Su gloria. Deseaba un hombre conforme a Su imagen y semejanza, y quería que este hombre gobernara sobre todas las cosas. Deseaba que el hombre lo glorificara, que lo adorara, que lo amara y que tuviera una íntima comunión con Él.
¿Cómo los creó? “Entonces el Señor Dios modeló al hombre con arcilla de suelo y sopló en su nariz un aliento de vida” (Gn 2, 7) Tenemos al primer hombre y a la primera mujer creados por Dios, a partir de un elemento material (cuerpo) y un elemento espiritual (soplo): Adán y Eva. Son seres inteligentes, libres, capaces de amar y con voluntad propia. Al crearlos, les da la misma dignidad de hijos de Dios, por tanto, no vale más ni el hombre ni la mujer: los dos a los ojos de Dios tienen el mismo valor. Dios los coloca en el paraíso para que dominen la tierra y la sometan, para que crezcan y se multipliquen. Entonces:
Nos creó: a su imagen y semejanza: Esto es lo que les confiere su inigualable dignidad. Capaces de amar: El fin del hombre es el amor a Dios, a los demás. Capaces de conocer la verdad: el hombre busca la verdad, que es Dios mismo. Libres: Cuando más cerca está el hombre de Dios, más libre es. Iguales en dignidad: pero diferentes y complementarios.
Un punto del Catecismo (374) a tener en cuenta, querido catequista, para relacionar con el centro de toda catequesis, Jesús: “El primer hombre fue no solamente creado bueno, sino también constituido en la amistad con su creador y en armonía consigo mismo y con la creación en torno a él; amistad y armonía tales que no serán superadas más que por la gloria de la nueva creación en Cristo”
Algo ocurre llegados a este punto: la amistad se rompe ¿Qué es lo que sucede?
Desobediencia y pecado Es bueno volver, querido catequista, al relato del libro del Gn con una mirada profunda y desde la experiencia del mal, del sufrimiento, en el mundo. Dice el CatIC en el nro 396: “Criatura espiritual, el hombre no puede vivir esta amistad más que en la forma de libre sumisión a Dios. Esto es lo que expresa la prohibición hecha al hombre de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal, "porque el día que comieres de él, morirás" (Gn 2,17). "El árbol del conocimiento del bien y del mal" evoca simbólicamente el límite infranqueable que el hombre en cuanto criatura debe reconocer libremente y respetar con confianza. El hombre depende del Creador, está sometido a las leyes de la Creación y a las normas morales que regulan el uso de la libertad” Lo único que debían hacer los primeros padres era obedecer: el pecado original es, en consecuencia, desobediencia. Por eso, en adelante, todo pecado es desobedecer a Dios y no confiar en su bondad (CatiC 397) Y también es soberbia: Adán y Eva quisieron ser como dioses, creyeron ser más de lo que eran. Tentados por el mal, representado en la serpiente, se eligieron a sí mismos.
Las consecuencias de ese “primer pecado” son muchas.
La relación de las facultades del hombre se quiebra:
o La voluntad se debilita, o La inteligencia se oscurece o Las pasiones se ensalzan La unidad del hombre y la mujer sufre tensiones (y por tanto la convivencia humana) La armonía con la creación se rompe (se ve la naturaleza como hostil) El sufrimiento y la muerte hacen su entrada en la historia…
La traducción para los chicos sería: desobediencia como hacer aquello contrario a los que nos piden (como en casa) y soberbia como creernos algo que no somos (en relación con los demás por ejemplo) Y en cuanto a las consecuencias, lo más connatural es presentar las tensiones entre los hermanos o con los papás por ej, y las cuestiones sobre el medio ambiente, de gran actualidad desde Laudato Si.
Dios no abandona al hombre
Tras la caída, el hombre no fue abandonado por Dios. Y eso nos llena de Esperanza! Al contrario, Dios lo llama (Cf. Gn 3,9) y le anuncia de modo misterioso la victoria sobre el mal y el levantamiento de su caída (Cf. Gn 3,15). Entre el acontecimiento de la Creación y la Encarnación, está Dios operando en la Historia, por medio de la elección de un pueblo y la preferencia a algunos personajes, como Moisés, David, los profetas. No es tiempo de ahondar en todo el AT, pero vale recordar la unidad entre esta Historia y el acontecimiento de Jesús: todo prepara de una manera bella y sublime al Encuentro con el Señor. Y en este punto es bueno recordar con los chicos los 10 mandamientos. Este no abandono de Dios se revela en estos mandamientos: no deja que resbale nuestro pie como dice el Salmo 121, sino que nos sigue cuidando y amando.
SÍNTESIS Llamamos a Dios Padre por ser origen de todo y por establecer una relación filial con nosotros. Dios crea todo de la nada, en una jerarquía de seres que tiene como cumbre al hombre. Este hombre creado a imagen y semejanza de Dios es la creación más perfecta: es una unidad de cuerpo y alma, dotado de facultades que los demás seres no tienen (inteligencia y voluntad libre) En el principio existía una armonía entre todo: Dios, hombre-mujer, creación entera Tentado por el mal, desobedece el mandato de Dios, y cae. El pecado original consistió en querer ser más de lo que el hombre era y en apartar su mirada del Creador. Las consecuencias de ese pecado original son muchas, pero nombramos una más connatural a los niños: ruptura de relación con lo que nos rodea, personas y creación (naturaleza) Pero Dios no abandona al hombre: elige un pueblo, establece una alianza, la recuerda por los profetas…“Amasa” una historia. Quiere que volvamos a El!
