Diario Reflexivo

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Diario reflexivo

Autoconocimiento para el futuro


establecimiento de la relación
terapéutica

Autor: Felipe Anyelo Valenzuela Llanquiman


Grupo 11
Profesor Martín Mendez
Sesión n°1 Autoconocimiento

¿De qué hablamos durante la sesión?


La primera sesión nos dedicamos a conocernos entre nosotras y nosotros no solo
como equipo de trabajo sino como una pequeña comunidad que estará durante poco más de
un mes compartiendo sus vivencias y reflexiones. Esto es importante, porque acá
hablaremos temas que tienen directa relación con nuestro crecimiento personal y
profesional, nuestra visión sobre nosotras y nosotros mismos y de los demás.
El foco de la primera sesión fue sobre el autoconocimiento, valor necesario para
aprender sobre nosotras y nosotros mismos, saber lo que nos sucede internamente y, tal vez,
tener una noción sobre lo que ven las y los demás sobre nuestras actitudes y
comportamiento. La imagen que tenemos sobre nosotras y nosotros mismos resulta de una
construcción interna vinculada profundamente al mundo que nos rodea y como nos
comportamos frente a él. Esto genera experiencias que van desarrollando la idea de cómo
somos en realidad y que podrían llevarnos tanto a autoesquemas positivos como negativos.
Ante esto, me gustaría compartir una reflexión sobre quien soy (o lo que pienso que soy) en
base al autoconcepto, la autoimagen, la autoestima y la autoeficacia:

¿Qué pienso sobre mí mismo?


Creo que soy una persona que puede mejorar en varios aspectos de su vida, ser
mejor hijo, hermano, amigo y pareja. Me falta por aprender muchas cosas, me falta por
superar muchas vivencias del pasado y me debo repensar sobre muchos comportamiento
que tengo con las demás personas. No obstante, soy una persona que ha logrado ser y estar
en el mundo con otra postura en muchas dimensiones de mi vida. He sabido que hacer
cuando suceden problemas y he mejorado mi interacción con las y los demás.

¿Cómo me veo en el mundo?


Mucho tiempo pensé, quizá dejándome influir por mi familia, que debía verme
como un ejemplo, como alguien que “supo” como escalar en la vida, ser “lo mejor”. Sin
embargo, me di cuenta de que nunca quise eso, y ahora me veo en el mundo como alguien
que comete muchos errores, se arrepiente de muchas cosas y que ha vivido muchas
experiencias y que ha acertado muchas veces. Quiero verme humano, no una maqueta ideal.
¿Cuánto me gusto?
A veces pienso que mi hermana o mi pololo me quieren más de lo que yo me quiero
a mí mismo. Siento que es difícil definir cuanto uno se quiere porque, por lo general, uno
no se hace esa pregunta. Pero, siento que quizá me quiero lo suficiente, aunque podría ser
más. He escuchado muchas veces que al que más hay que querer es a uno mismo, ya que
cómo vamos a querer a otras personas.

¿Qué tanta confianza me tengo?


Hace 10 años atrás podría haber dicho que no me tengo confianza, que para todo
necesito ayuda de alguien más o ayuda de un milagro. Ahora siento que puedo hacer cosas
por mismo, aunque a veces se me olvida y retrocedo 10 años para sentir que necesito ayuda.

¿Qué aprendí? ¿Cómo me sentí?


Durante la sesión me sentí en un principio un poco desorientado, ya que no sabía
exactamente que decir. Todo lo que se me venía a la mente eran cosas que hablaban mal de
mi mismo. Creo que esto fue porque se me hizo costumbre hablar mal de mi mismo, pero
con humor, de modo que las personas piensan que estoy bromeando cuando en realidad si
estoy diciendo cosas que pienso sobre mi mismo. Me tomé harto tiempo antes de hablar y
compartir sobre mi mismo, quise elegir las palabras correctas y tratar de expresar mi
subjetividad de manera de no hacerlo de forma negativa.
Como aprendizaje me gustaría compartir varias reflexiones a algunas que preguntas
que surgieron durante la sesión y que siento que puedo responder de mejor forma habiendo
pasado por esta experiencia y gracias a los conocimiento adquiridos por medio del Dossier:

Si miro al espejo ¿quién es esa persona que está al frente?


Frente al espejo hay una persona con características físicas que ama y detesta. Amo
mis pecas, la forma de mi ojos, mis manos, mis piernas y mi pelo de herencia mapuche y
mis labios herencia de mi madre. Detesto mi torno, mis mejillas, mi nariz y cuello que se ha
ido manchando a lo largo del tiempo. Frente al espejo hay una persona con la capacidad de
amar y de quererse (aunque a veces le cuesta) y que es muy querida por muchas personas
(siempre es necesario repetirse muchas veces que uno es querido por otras personas).
¿Tengo conciencia de los atributos que tengo?
Tengo absoluta conciencia de mis atributos, sé que soy una persona afectuosa y
preocupada, respetuosa del espacio personal y de las palabras que digo, sé que hacer
cuando mi personalidad llega a otras personas y cuando no llega.

Lo que yo sé de mi ¿se verá reflejado? ¿Lo verá el resto de la misma forma?


Tiendo a tener expresiones duras por lo que puedo lucir a veces intimidante, pero
una vez que hay más confianza las sonrisas abundan. No estoy seguro si las demás personas
ven todos mis atributos, ya que hablo poco de ellos. Pero si sé que ven en mi gentileza,
porque comprendo fuera de mi hay muchas personas con diferentes personalidad que no
quiero que se sientan intimidadas por mí.

¿Puedo definirme en una sola frase?


No estoy muy de acuerdo con definirme a través de roles familiares o sociales, ya
que dichos roles no son permanentes. El rol de estudiante no es para siempre, tampoco el
rol de novio. De modo que quiero definirme como algo que sea permanente y que me
acompañe toda mi vida: Soy un humano, que busca equivocarse muchas veces, aprender la
misma cantidad de veces y acertar exactamente lo mismo.

¿Hubo cambios en la descripción que di antes?


Puedo concluir que pude decir varias cosas que sabia de mismo, pero también puse
en palabras varias otras cosas de mi mismo. De modo que lo que siento de mi no cambio,
sino que se enriqueció. No sé si puedo decir que ahora se más de mismo, siento que
siempre he sabido cosas o al menos he tenido la intuición, porque, y volviendo a lo mismo,
debo poner muchas cosas en palabras.

¿Cómo te sentiste al contar tus cosas personales?


Me sentí inquieto, es difícil decir cosas frente a personas que no conoces, que es
posible que jamás conozcas y por, sobre todo, no estás viendo a la cara. El no ver las
emociones que evocan mis vivencias en otras personas no me permite saber si están siendo
bien recibidas o no.
¿Té fue difícil contar tus asuntos? ¿habías pensado en esas cosas antes? ¿qué aprendiste
de ti mismo?
Fue difícil en un principio, pero fue enriquecedor al final cuando al pude poner en
palabras varias cosas que creí no tendrían definición. Hay muchas emociones y sentimiento
que son como amebas en mi mente, sin cuerpo definido, pero que lo están porque no me he
esforzado en darles un recipiente que les de forma. Así que quizá ese es mi gran
aprendizaje, el aprender a definir mis afectos y vivencias y poder hilarlas y hablar a otras
personas.

¿Qué aspecto puedo aplicar a mi futura vida personal y profesional?


El autoconocimiento nos permitirá sobre todo entender nuestra disposición personal
cuando trabajemos como enfermeras o enfermeros. Nuestra labor incluye un fuerte
componente de interacción con otras personas, la que muchas veces dependen
enormemente de nosotras o nosotros. Si no sabemos que nos sentimos mal en ciertas
circunstancias podemos hacer las cosas mal y dañar los afectos de otras personas (ya sean
pacientes o de nuestro equipo profesional).

Sesión n°2 Autoconocimiento II: proyecto de vida

¿De qué hablamos durante la sesión?


La sesión estuvo enfocada en nuestra visión a futuro, nuestros proyectos de vida y
como alcanzar esas metan o sueños que nos planteamos, algunos de manera trivial, otros
con mucha seriedad. La forma que tenemos de llegar a concretar nuestros objetivos está
relacionados a los hábitos. Según el Dossier los hábitos son factores son pautas
consistentes, a menudo inconscientes, de modo constante y cotidiano expresan nuestro
carácter y generan nuestra efectividad o inefectividad. Esto porque hay hábitos que nos
llevan a crear, producir o aprender cosas nuevas y habitas que desequilibran nuestra vida y
se vuelven una piedra de topa para la consecución de nuestras metas.

¿Qué aprendí? ¿Cómo me sentí?


Una de las cosas que hablamos con detención fue acerca de los 7 hábitos de la
proactividad. Al respecto me gustaría compartir reflexiones y acciones sobre cada punto a
fin de crear un mapa para mi mismo, para mi vida.
Primer hábito de la responsabilidad: sea proactivo
Si bien estoy de acuerdo que cada uno tiene la capacidad de elegir la respuesta que
va a dar ante un estímulo, siento que esto se vuelve difícil en ciertas circunstancias. Por
ejemplo, ante alguna alteración física la cantidad de respuestas que podemos tener se
vuelve limitada y, a veces, por cansancio terminamos tomando una elección que quizá no es
tan correcta. Siento que es super “fácil” decir que eres “dueño de las elecciones”, cuando en
la realidad es mucho más complejo. Elegir nuestro propio destino es complicado, ya que
nuestro lugar de nacimiento nos limita en gran medida al destino que queremos para
nosotras o nosotros. Personalmente prefiero estar en el mundo sabiendo que hay cosas que
puedo controlar y cosas que no puedo controlar, pero que si puedo subsanar sus
consecuencias.
Una acción que me gustaría tomar es dejar ciertos malos hábitos que tienen gran
relevancia en mi día a día. Por ello, como muestra de proactividad, me gustaría hacer algo
al respecto. Un mal hábito que tengo es que cuando voy a dormir pongo alguna serie o
anime, lo que me causa problemas de sueño y cansancio el resto del día. Quiero elegir
desde ahora no hacer eso más y aprovechar la noche para hacer algo por mi bien, tener un
buen sueño.

Segundo hábito del liderazgo personal: empiece con un fin en mente


Siento que este hábito tiene mucha relación con la capacidad de tener orden en
nuestra vida. Pasa mucho que dejamos las cosas a la “libre espontaneidad” del flujo del día
y que no hacemos mucho para cambiar esto. Es por esto por lo que tener claridad de
nuestros objetivos y definir nuestras prioridades no solo tiene que ser a niveles generales,
sino que también debe ser así día a día. Por ello, me gustaría plantear una acción en
relación con este hábito: desde ahora me gustaría tomar el tiempo necesario para planificar
mi día, estipular concretamente lo que necesito hacer y esforzarme por cumplir esa
planificación como muestra de que, si logro realizar todo lo que me propuse, cómo no voy a
lograr mis metas a largo plazo.

Tercer hábito de la administración personal: establezca lo primero


A veces es sumamente difícil saber que es importante y que no importante. Por
ejemplo, podemos pensar que es importante estudiar para una prueba, pero, a su vez,
podemos pensar que es importante cumplir el deseo de un ser querido cuando te pide algo
de tu tiempo. Razonablemente necesitamos estudiar para esa prueba, pero emocionalmente
queremos estar con nuestro ser querido. Sea como sea, a mi parecer, no hay decisiones
correctas e incorrectas, sino que hay decisiones que puede generar mayor o menor impacto
más adelante. Por lo tanto, veo como una virtud el poder distinguir entre que es importante
o menos importante. Es algo que me gustaría aprender y llevar a cabo.
En relación con este hábito, no creo poder generar acciones que clasifiquen mis
quehaceres en importancia de un modo en que me sienta cómodo. Pero, lo que puedo hacer,
es reflexionar sobre el impacto a futuro de mis decisiones y de manera que hacer una mejor
evaluación. Si no estudio para la prueba ahora, quizá tenga que estudiar más adelante para
un examen.

Cuarto habito del beneficio mutuo: piense en ganar/ganar


Esto es algo que casi siempre aplico. La verdad es que, si me gusta llegar a acuerdos
con las personas, porque quiero que se sientan bien y no me gusta generar problemas.
Evidentemente soy consciente que quizá un acuerdo no deje a la otra parte (o a mi)
totalmente satisfecha, pero al menos me reconforta que intento que todas o todos estén bien.
No siempre aplique hábito, hubo momentos en mi vida en que solo me fijaba en lo
que yo quería y me frustraba cuando no se cumplían mis deseos. Pero aprendí, con dolor,
que un camino así solo lleva a que las persona que quieres se vayan. Creo que a nadie le
gustaría quedarse solo en el mundo, por lo que es bueno que las personas se den cuenta que
sus deseos no son absolutos.

Quinto hábito de la comunicación efectiva: procure primero comprender y después ser


comprendido
Este también es un hábito que aplico firmemente en mi vida. En el pasado viví
muchas situaciones de violencia escolar que me orillaron a cerrarme en mi mismo,
volverme egoísta y testarudo, más que nada como una forma de defesa. Pero gracias a esas
vivencia, sé que detrás de las personas hay historias de vida que pueden ser dolorosas y que
determinan como son. De manera que me esfuerzo mucho en saber porque es una persona
así y que puedo hacer para llevarnos bien.

Sexto hábito de la interdependencia: sinergia


Debo reconocer que el trabajo en equipo, si bien no me cuesta, me incomoda. Se
que puede sonar como una contradicción a lo que mencione anteriormente, pero es cierto
que, a veces, el tratar con persona cansa. Todas y todos tenemos limites, por muy gentiles y
comprensivos intentemos ser, nuestra energía puede agotarse y llevarnos al territorio oscuro
de frustraciones. Por ello, siento que es una virtud el poder trabajar en equipo y llevarse
bien con los demás. Es un gran trabajo que, actualmente, estoy cultivando porque sé que
más adelante será vital para mi trabajo profesional.

Séptimo hábito de mejora continua: afile la sierra


Los últimos años me he comprometido a hacer un trabajo interno de introspección
para evaluar mi vida cada cierto tiempo. Tengo la necesidad de saber que hice bien y que
hice mal, para aplicar nuevamente las cosas buenas y solucionar las cosas malas. Siento que
todo este trabajo me ha ayudado a mejorar y a contribuido enormemente a mi bienestar
psicológico.

También me gustaría compartir las reflexiones que obtuve en torno a algunas preguntas que
se hicieron en la sesión:

Entrevista en el futuro
- ¿Cuántos años tienes? 40 años.
- ¿Dónde vives, como es tu vida? Vivo en el sur de Chile, mi vida es tranquila, lejos
del bullicio de la ciudad.
- ¿Cuándo ganas, estás contento con tu trabajo? Gano lo suficiente para no pasar frio
en el invierno, me gusta mi trabajo.
- ¿Tienes pareja, estas casado, tienes hijos? Estoy casado y tengo una hija (Amelia) y
un hijo (Adán).
- ¿Cuáles han sido tus mejores experiencias en los últimos 10 años? Viajar a Corea,
Japón, China y Tailandia. Ver a mi hermana cumplir su sueño.
- ¿Qué consejo le darías a personas 10 años menores? Hakuna matata
- ¿Cuál ha sido tu mayor logro? Vivir la vida que soñé (el destino que planifiqué).

¿Qué aspecto puedo aplicar a mi futura vida personal y profesional?


Este ejercicios sobre los hábitos me hizo reflexionar sobre lo bueno que sería poder
en un futuro llevarme muy bien con las y los pacientes y el equipo de salud. El saber
nuestros objetivos, trabajar en equipo, ser organizada u organizado, saber llevarse bien con
las y los demás y tratar de generar beneficios mutuos son virtudes claves para cumplir
nuestros objetivos profesionales y por, sobre todo, que nuestras y nuestros pacientes estén
bien.
Sesión n°3: Manejo del estrés y autocuidado

¿De qué hablamos durante la sesión?


Durante esta sesión nos dedicamos a reflexionar acerca como el estrés es una
“entidad” que nos acompaña durante toda nuestra vida. La vida familiar, amorosa y
profesional son fuente de situaciones que nos pueden causar gran impacto psicológico y
saber que hacer ante estas situaciones es vital para evitar problemas a futuro. También
hablamos sobre lo importante que es la salud mental para nuestro trabajo a futuro y sobre
las acciones que podemos realizar para disminuir el estrés y la ansiedad.
Mi reflexión sobre esto empieza con que nuestra carrera, si bien tiene un lado
hermoso vinculado al sanar y cuidar, también tiene un lado tenebroso vinculado al dolor, al
sufrimiento y la muerte. Comprender esta dicotomía es necesario para que las situación
futura no causen mella nuestra salud mental. Debemos saber desde ya que veremos a
nuestras y nuestros pacientes salir felices desde el hospital, pero también los veremos siento
fuente de profunda tristeza para sus familiares.

¿Qué aprendí? ¿Cómo me sentí?


En esta sesión aprendí que durante nuestro desarrollo académico y laboral estaremos
ligados indisolublemente al trabajo con personas. Las personas puede ser entes
complicados, que necesitan atención y comprensión. Las y los pacientes, es específico,
necesitan atención de calidad, apoyo emocional y atención humana de parte del equipo de
salud lo que, obviamente, impacta sobre el mismo equipo de salud. Con la pandemia del
Covid19, más que nunca, se pudo ver los efectos de la sobrecarga de trabajo en las y los
profesionales de la salud. Por lo que aunar esfuerzos en cuidar la salud física y psicológica
de estas y estos es vital si queremos que siga existiendo la atención en salud.
A partir de las reflexiones de la sesión y la lectura del Dossier emergieron varios
pensamiento entorno al autocuidado de la salud, sobre todo la mental, que me gustaría
compartir.

¿Qué hago para mi propio bienestar?


Puede sonar “común”, pero creo que siempre es necesario toda situación que nos
desconecte de la realidad académica y profesional que estamos viviendo. No estoy
desconociendo que nuestra realidad puede ser fuente de grandes satisfacciones, solo estoy
dando cuenta que también es fuente de estrés y ansiedad. De manera que, cualquier ocasión
que me ayude a hacer esa desconexión es bienvenida: una fiesta con amigos, bailar en una
discoteca, salir de la ciudad, ir a acampar, etc. Otras persona pueden optar por hacer otras
cosas como yoga o deporte, pero siento que en mi caso no causar ese “click” de apagado
que busco.

Dada mi situación actual y aspiraciones ¿qué necesito aprender a hacer?


Una de las cosas que quizá aun no aprendo del todo es saber mis límites en cuanto a
labores. Tiendo muy fácilmente a llenar mi semana o mes de actividades, lo que
evidentemente puede llevarme al estrés y la ansiedad al no poder responder a todos esos
compromisos de manera correcta. Debo ponerme límites, debo entender que no soy un
superhumano y debo comprender que las acciones de autocuidado también son labores que
deben tener un horario en la semana.

¿Qué aspecto puedo aplicar a mi futura vida personal y profesional?


Se desde ya que el estrés es un “ser” que estará en cada instante de mi vida
profesional, por lo que debo aprender a lidiar con ella. No quiero verlo como algo
totalmente malo, ya que el estrés también es un indicativo de que algo no esta funcionando
bien o que debemos parar porque, o si no, nuestro cuerpo puede verse resentido. El estrés
va más allá de una mera alteración fisiológica, es una señal de que hay situaciones que nos
están afectando y saber identificarlas es clave para nuestro bienestar.

Sesión n°4: Afectividad

¿De qué hablamos durante la sesión?


Esta sesión se trato sobre las emociones, los sentimientos, la afectividad de las
personas. Este es un tema que personalmente me es relevante, porque siento que muchas
veces nos olvidamos de que la otra persona es un ser emocional y que nuestras acciones
pueden ser fuente tanto de felicidad como de sufrimiento. Esto es especialmente importante
en nuestro futuro trabajo en enfermería, porque estaremos al cuidado de seres afectivos, que
responderán de una u otra manera a nuestros cuidados y que un clima positivo puede ser
clave para una recuperación exitosa.
Considero que saber sobre los afectos, como se producen y su impacto en la realidad
nos ayuda generar una guía de interacción tanto con las y los pacientes como con el resto
del equipo de salud. Saber cuando una persona se siente mal o se siente bien es un
indicativo valioso para evaluar si nuestros cuidados están siendo efectos.

¿Qué aprendí? ¿Cómo me sentí?


Durante la sesión me sentí interpelado, ya que en el pasado le dediqué gran tiempo
al estudio de la psicología humana y, sobre todo, a los afectos. En ese tiempo me importaba
mucho saber como funcionaban las emociones, como se producía el amor o como se
llegaba a odiar a otro. Por esto, esta sesión fue importante, porque me hizo recordar todas
aquellas teorías que leía con ahínco y que buscaba su sustrato en la realidad.
El aprendizaje que obtuve es la importancia de recordar lo que hicimos en el pasado
y que nos trajo felicidad. Siento que ahora más que nunca podre ver en la realidad todas
aquellas cosas que leí en libros. También aprendí a darle valor a experiencias que, por
algún motivo, decidimos enterrar. Por ello, dejo algunas reflexiones emergidas durante esta
sesión:

¿Qué experiencia a marcado mi forma de ser?


Sin duda la transición entre el segundo y tercer pololeo determina gran parte de lo
que soy ahora. Mi primero pololeo fue realmente la definición de vivir el cielo y el infierno.
Por lo que, luego de haber terminado, decidí que había cosas sobre mi y sobre mi estar en el
mundo que debían solucionarse. Ese momento fue de gran introspección, viví horas
haciéndome preguntas y repitiendo momentos una y otra vez para darles otra salida. Hasta
que llego el tercer pololeo, donde esta vez se materializo todo lo que me había propuesto a
cambiar.

¿Quiénes han sido las personas más influyentes en mi vida?


Hay muchas personas que han sido realmente influyentes en vida, pero en honor a la
pregunta anterior, elijo a mi actual pololo, quien ha influido en vida como una persona de
acuerdos y límites bien establecidos. También elegiré a mi hermana como una persona de
amor profunda, desinteresado e incondicional.

¿Cómo han influido estas personas?


Sebastián, mi actual pareja, es una persona sumamente amable y atenta, con gran
paciencia para comprender como se sienten las personas y gran dedicación en buscar la raíz
de porque nos sentimos mal. Es una persona que me enseño el valor de ser gentiles con las
personas y de poner límites. Y Alison, mi hermana, es una persona de profunda
sensibilidad, con el valor de emocionarse hasta las lagrimas de las cosas buenas que le
pasan y sentir gran tristeza. Es una persona que me enseño el valor de demostrar mi
emocionalidad y que llorar siempre está bien.
¿Cuáles han sido las decisiones más significativas en el pasado?
Solo mencionare una, haberle dicho a mi mamá que quería una hermana para
navidad (SPOILER: si llego).

¿Qué aspecto puedo aplicar a mi futura vida personal y profesional?


Sin duda nuestras emociones son importantes en nuestra labor profesional. Saber
manejarlas es clave para que el proceso de cuidado sea beneficioso para nuestras y nuestros
pacientes. Conocer sobre nuestros afectos nos ayuda a determinar que nos hace bien (para
repetirlo) y que nos hace mal (para evitarlo).
Hay que entender desde ya, que, como profesionales de la salud, nos enfrentaremos
muchas veces a la muerte. Saber como posicionarnos en el mundo ante esta realidad es
necesario para nuestro bienestar. Debemos aceptar que esas emociones vendrán en un
futuro y que manejarlas nos hará personas capaces de seguir adelante en este trabajo.

Sesión n°5: Percepción social

¿De qué hablamos durante la sesión?


En esta sesión hablamos sobre como las percepciones afectan nuestro estar en
mundo. Como lo que pensamos hacer de alguna persona afecta nuestro trato con ella y las
decisiones que poder tomar en relación con las interacciones con dicha personas. Muchas
veces nos dejamos llevar por la “primer imagen” o por estereotipos que determinan como
nos sentimos. Muchas veces dejamos que esto simplemente ocurra sin pensar en las
repercusiones a futuro de esta postura.

¿Qué aprendí? ¿Cómo me sentí?


Varias reflexiones se suscitaron en esta sesión, sobre todo en relación con los
estereotipos. Había algunas y algunos que pensaban que los estereotipos eran totalmente
malos y que debían evitarse a toda costa. Otros eran mas moderados en esta postura,
diciendo que los estereotipos no son totalmente malos o que muchas veces evitarlos es
imposible.
En primer lugar, hay que pensar que los estereotipos son herramientas evolutivas
que nos entregan información rápidamente sobre el medio. Son una fuente de supervivencia
para evitar situaciones de peligro. En segundo lugar, hay que ser cuidadoso en el uso de
esta herramienta, ya que su mal uso puede llevarnos a malos juicios respecto a una persona.
Siguiendo esta misma reflexión, yo veo a los estereotipos como una forma que tenemos los
humanos de adelantarnos a ciertas situaciones que podrían suceder, pero esto debe estar
unido a un proceso certero de lectura del contexto. Utilizar los estereotipos son considerar
el contexto sin duda nos llevara errores en nuestro juicio.
Al respecto, me gustaría compartir una vivencia personal. Yo alguna vez trabaje
siendo conductor. Necesitaba dinero para mis planes de independencia así que opte por este
trabajo por lo lucrativo. Una vez tuve que transportar a cuatro personas que lucían y
hablaban como coloquialmente conocemos como “flaite”, un estereotipo sumamente
marcado en nuestra sociedad. Esa vez, esas cuatro personas robaron mi auto. La situación
me provoco un trauma del que no estoy seguro si resolví del todo, no solo por la violencia
del robo, sino por la crueldad con la que hablaban esas cuatro personas (hubo uno de ellos
que planteo la idea de enterrarme un cuchillo en la cara). Por mucho tiempo no pude evitar
huir literalmente de aquellas personas que lucían parecido a esas cuatro personas. Demore
un tiempo en racionalizar todo lo que paso para salir tranquilo a la calle. El saber leer el
contexto me ayuda a darme cuenta de que no todos los que lucen como esas cuatro personas
quieren hacerme daño. No niego que algunas veces esta lectura del contexto falla y siento
miedo cuando una persona socialmente vista como un “flaite” se me acerca. Pero no quiero
que esto gobierne mi vida y sea fuente de obstáculos en mi desarrollo profesional.

¿Qué aspecto puedo aplicar a mi futura vida personal y profesional?


Desde lo conversado durante la sesión y lo leído en el Dossier hay mucho que se
pueble aplicar en nuestro futuro ejercicio profesional. Muchas veces enfrentaremos a la
típicamente llamada persona “pesada”, tanto como paciente o como compañera o
compañero de labores. Nuestro trabajo en ese momento es saber leer a esa persona,
hacernos las preguntas sobre porque tiene ese carácter, y que hacer para que no nos afecte.
Ante lo anterior, me quedo con dos enseñanzas:
- Los estereotipos sociales no dan información certera: sin bien nos ayudan a
categorizar la complejidad social, muchas veces provienen de prejuicios que llevan
a concatenar ciertas características a grupos de personas que entre sí ya son muy
diferentes. Nuestra labor como profesional es atender a toda persona sin importar lo
que nos diga nuestros esquemas mentales.
- Las personas más tolerantes son menos prejuiciosas: la tolerancia es un valor
importante, ya que tendremos que trabajar con personas con diversidad de formas
de pensar, de colores, de emociones, etc. Nuestro objetivo para con las y los
pacientes es mayor que nuestros estereotipos.

Sesión n°6: Empatía

¿De qué hablamos durante la sesión?


Esta sesión se trató sobre la empatía, aquel valor que nos permite ponernos en el
lugar del otro. También puede ser entendida como la capacidad de cualquier ser humano
para sentir emociones antes la emocionalidad de otra persona. Por ejemplo, la empatía nos
permite sentir pena si vemos a otra persona llorar desconsoladamente. Por lo tanto, la
empatía nos deja tener acceso temporal a los sentimientos de otras personas y la posibilidad
de percibir sus vivencias desde su punto de vista.
Tenemos que considerar que en nuestra trayectoria profesional nos vincularemos
con personas que realmente siento mucho dolor. Por lo que esta sesión para mi es
importante, ya que plantea y materializa una virtud que todo profesional de la salud debería
tener, el poder sentir los afectos de otra persona, sentirlo en la carne, para así lograr
imaginarse por lo que está pasando.

¿Qué aprendí? ¿Cómo me sentí?


Siento que gracias a esta sesión puedo comprender aun más las implicancias del
sentir, ya que para entregar un cuidado de calidad y humanizado, debemos hacer uso de la
empatía para colocarnos en el lugar del aquel que siente dolor, de manera de comprender su
perspectiva y saber si el proceso terapéutico esta funcionando.
Respecto a esta sesión me gustaría compartir un poco de mi emocionalidad. Yo soy
ese tipo de persona que fácilmente puede llorar al ver otras personas llorando. Por mucho
tiempo veía esto como una debilidad y lo evitaba. Me sentía incomodo sintiendo esta
emocionalidad tan desbordada, tan “cárnica”. Me preguntaba si me sentía tan mal al ver el
sufrimiento de los demás, qué será de mi cuando me toque sufrir. Al final me di cuenta de
que sentir estas emociones tan profundo en mi ser es realmente una virtud. Siento que
puedo percibir la felicidad de las personas y su sufrimiento casi como si fuese propio. Es
más, me es impactando que existan personas incapaces de conmoverse con una escena de
alguna película o con el relato vivencial de alguna persona. Siento que esta habilidad es una
de las más necesarias para mi ser y estar en el mundo de la enfermería. ¿Cómo podría
atender a una o un paciente sin saber que sufre si para mi ser enfermero es necesariamente
detener el sufrimiento? No voy a negar que siento miedo de que estas emociones se
desborden y pierda completamente su regulación, pero asumo que pasar varias veces y
bienvenido sean.

¿Qué aspecto puedo aplicar a mi futura vida personal y profesional?


Los aspectos de la empatía que quiero aplicar directamente en mi vida como profesional los
sacare directo del Dossier y les agregare un pequeño comentario:
- Generar motivación: tanto la o el paciente como yo deseamos que su sufrimiento se
detenga, por lo que cada triunfo terapéutico será celebrado.
- Lleva a conductas de ayuda: esencial si queremos ser profesionales de la salud, el
querer mejorar la vida de otra persona.
- Genera interés y valoración sobre el bienestar de las otras personas, llevándolo a
desear aliviar su necesidad: queremos como profesional que la o el paciente se vaya
del recinto asistencial lo más pronto posible.
- Facilita la búsqueda de un lenguaje acomodado a los sentimientos y entendimiento
de las otras personas: nuestra forma de expresarnos es esencial para el trato con la o
el paciente. No queremos que la o el paciente se sienta mal por algo que digamos.

Sesión n°7: Cierre

Esta sesión fue más que nada un cierre de toda esta experiencia de la unidad de
autoconocimiento para el futuro establecimiento de la relación terapéutica. Donde pudimos
comentar nuestros sentimientos sobre esta experiencia, los aprendizajes que nos llevamos y
las conclusiones que sacamos de las reflexiones.
Personalmente esta instancia para mi fue muy enriquecedora, logre poner en
palabras varios afectos que tenia encerrados en mi mente. Logre comprenderme un poco
más a mi mismo y como aplicar varios elementos a mi futura labor como profesional de la
salud. Me siento muy feliz de haber compartido mis experiencias con otras personas y
agradezco haber escuchado los sentimientos y vivencias de mis compañeras y compañeros.
También estoy agradecido de la labor de Martín como facilitador y espero verlo en la
segunda parte de disciplina y profesión.

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