Los Recursos
Los Recursos
Los Recursos
Intención
Este documento busca fundamentalmente hacer una propuesta de cambio con relación a
las prácticas y a las concepciones, que hasta el momento se tienen acerca de lo que es el
objeto de estudio de la contabilidad.
La nueva realidad: Imperativo de un cambio de actitud
El mundo ha estado cambiando vertiginosamente; dichos cambios se producen cada
día de una manera inusitada y drástica. No nos hemos adaptado a la nueva situación
cuando ya estamos frente a una diferente, de tal forma que el proceso de obsolescencia
de las tecnologías duras y blandas es muy rápido.
Es el siglo XX, el siglo de mayor desarrollo de la humanidad, el cual ha deparado al
hombre desarrollos tecnológicos y científicos sorprendentes, jamás logrados, ni siquiera
imaginados por sus predecesores. Se descubrió la ley de la relatividad; se dividió el átomo
lo que ha proporcionado al hombre el uso de la energía atómica para fines médicos y
bélicos; se han elaborado equipos electrónicos que le permiten construir aparatos ínter
espaciales y procesar electrónicamente información; se transportan mediante satélites
imágenes y sonidos a la velocidad de la luz, lo que le permite captar mensajes de otros
confines del universo y enviar sus propios mensajes. Se hace manipulación genética.
Este fue el siglo del cine, la radio, la televisión, los computadores, el Internet,
propiciando una nueva realidad virtual. El siglo del carro, de los
Araujo: Los recursos: objeto de estudio de la Contabilidad
180
Eso es lo que está pasando, esos valores que parecían inmutables, están siendo
cambiados totalmente, revolucionados, de pies a cabeza, haciendo giros de 180º y para
eso no se puede menos que ser inteligentes y adaptarse a esas formas del cambio; no se
puede ir en contra vía de toda esa fuerza de transformación del mundo, hay que aceptarlo
y participar de él; ser los protagonistas de los cambios; ser precursores o pioneros de los
cambios. Y si no se es ni una cosa ni la otra, al menos aceptar que los demás cambien.
Todas las disciplinas o ciencias siempre han estado sujetas a resolver una serie de
interrogantes, entre ellos, el interés por establecer cuál es el objeto de estudio y de
conocimiento, cuál su metodología; cuál la naturaleza del conocimiento que produce, y el
tipo de teoría que construye. Estos son aspectos que siempre han estado presentes en
las discusiones de aquellas disciplinas que han tenido la osadía de considerarse ciencia y
luego ser reconocidas dentro de la comunidad científica como tales.
Dentro de esa expectativa se enmarca este trabajo que no es más que un esfuerzo por
aportar elementos a una discusión acerca de cuál es el objeto de estudio y de
conocimiento de la contabilidad, tema en donde no hay uniformidad de criterio, puesto que
existen varios paradigmas históricamente considerados.
El hecho de que hallan muchos paradigmas no es un problema en sí; pero las ciencias
regularmente, en periodos estables y no de crisis, tienen modelos reconocidos en forma
general. Siempre hay acuerdos entre los miembros de esa comunidad disciplinal o
científica acerca de ciertas cosas.
La relación sujeto-objeto
Entonces, cuando se habla del objeto contable, se está haciendo un planteamiento
también en términos de la relación sujeto-objeto; es decir, el objeto cobra significación
cuando el sujeto se interesa en él. Sin el sujeto, el objeto de conocimiento deja de existir
para ser simplemente una cosa. El objeto es lo conocido y el sujeto es quien conoce.
A pesar de que las cosas se ven hasta aquí muy obvias, no son tan simples de
apreciar, porque si bien podemos identificar rápidamente al sujeto que conoce, no
siempre identificamos el objeto conocido. Ese es al menos el caso de la contabilidad.
Los subobjetos
Una tercera situación que puede considerarse es la de algunas disciplinas que si bien
tienen uno o varios objetos de estudio, a su vez algunos de estos objetos puede
descomponerse, y en este caso se les llama subobjetos, como en la medicina que si bien
estudia al hombre lo hace atendiendo a cada uno de sus órganos por separado
constituyéndose estos en subobjetos de estudio. No obstante, puede darse el caso que
algunos de estos subobjetos puedan ser el objeto de alguna otra disciplina, como en la
psicología que tiene como objeto al hombre pero en una perspectiva individual,
comportamental y psíquica.
No confundamos lo que es objeto con lo que es subobjeto. Pueden darse casos, como
en la psicología, una ciencia en donde el objeto es real pero el subobjeto es ideal. En el
caso de las ciencias sociales encontramos algunos objetos ideales o una combinación de
reales con ideales. El objeto es el hombre pero pueden haber variantes allí de subobjetos
ideales. Por eso se da esa combinación por que el hombre tiene ambas posibilidades, ya
que tiene un aspecto material y otro esencial.
Se debe tener claro el objeto para poder diseñar una metodología y por lo tanto
construir una teoría. La pregunta es, si la contabilidad no ha definido claramente su
objeto, ¿qué metodología puede tener para abordarlo? De ello se desprende la pregunta:
¿qué teoría puede tener si la misma metodología y el mismo objeto son nebulosos,
inciertos? Todo esto conlleva a plantear que la contabilidad es una disciplina científica en
construcción. A diferencia de otros que dicen que es una ciencia, considero que la
contabilidad, esta lejos, de consolidarse como una disciplina científica. No obstante esta
distancia puede acortarse, en virtud del trabajo sistemático y prolífico de la comunidad
contable.
Es muy difícil fijarse un término para todo esto. Varios autores, entre ellos, Rafael
Franco, Danilo Ariza, Jorge Burbano (q.e.p.d), Edgar Gracia y otros, han aportado acerca
de cuál es el objeto de la contabilidad y han expresado, por ejemplo: Rafael Franco, que
es la riqueza. Yo mismo escribí alguna vez que era la Utilidad y ahora estoy diciendo que
son los recursos. Danilo Ariza, afirma que es el patrimonio, últimamente ha propuesto que
es el control y muchos otros hablan de la información. En general, la cotabilidad informa
sbre el patrimonio y la riqueza como acumulación de utilidad. Dicha utilidad esta función
de una concepción y uso particular de los recursos.
Sobre los recursos trabaja la administración, porque ésta es la utilización racional de
aquellos y la economía produce la utilidad, al convertir los recursos en producto, para que
sean útiles. Pero la contabilidad informa acerca de los recursos. O sea, muchas
disciplinas actúan sobre los recursos pero cada una de manera distinta.
Sin embargo, cómo es la forma, es decir, cómo se presentan ante nuestros ojos los
recursos, cómo los podemos identificar y decir: esto es un recurso. Su condición de ser
tangibles es esencial para este proceso de identifcación, por 185 Contaduría Universidad
de Antioquia – No. 50. Medellín, enero-junio 2007
ejemplo, la contabilidad se ocupa de los recursos financieros, establecer el flujo de
fondos y efectivo, cómo se obtienen y cómo se aplcan esos recursos financieros. Los
recursos económicos, que son aquellos relacionados con la producción como las
maquinarias, las materias primas, etc., son medibles en términos de costos. O sea, la
contabilidad de costos se ocupa de hablar de esos recursos económicos, en tanto costea
los productos, mide la depreciación de las maquinas, en fin, todo lo que tenga que ver con
la producción. Hay igualmente una serie de recursos administrativos que tienen que ver
con los procesos de decisión: la información. Esa información tiene un costo.
Otro aspecto que queda comprendido en esta conceptualización del objeto es que ello
le da el carácter interdisciplinario a la contabilidad, ya que, en cada tipo de recurso, la
contabilidad puede conversar con una serie de profesionales que tienen como objeto
dichos recursos. Así, por ejemplo: en tanto recurso financiero, el contador puede
interactuar con profesionales tales como los administradores, los financistas, los
economistas, los ingenieros industriales, abogados, etc. Si se trata de los recursos
sociales, lo hará con profesionales tales como los trabajadores sociales, sociólogos,
comunicadores sociales, psicólogos. Si los recursos en mención son los ambientales este
diálogo se dará con los biólogos, ambientalistas, ecologistas, economistas ambientalistas,
etc.
Todo ello conduce a que los contadores deban tener una sólida formación de tipo
epistémico que les permita este trabajo disciplinal e interdisciplinal.
Algunos dicen que la contabilidad simplemente aporta información para medir la utilidad,
otros dicen que la contabilidad sirve para cumplir con requerimientos legales, que sirve
para apoyar los procesos de toma de decisiones, para otros debe servir para ejercer
control sobre los recursos. Pero todos esos son fines intermedios de la contabilidad,
puesto que, si nos preguntamos a su vez, ¿para qué se ejerce control?, ¿para qué
producir información?, los anteriores no resultan ser objetivos terminales. Apoyar los
procesos de toma de decisiones, no puede ser el propósito último de la contabilidad. La
MISIÓN de la contabilidad es contribuir a mejorar la calidad de vida de la población. Hacia
ese fin es donde se dirigen todos estos objetivos intermedios, puesto que si no hay
control, los recursos se despilfarran; en la medida en que se ejerza control sobre ellos y
se utilicen racionalmente, se produce información para que haya un mejor proceso de
toma de decisiones. Ésta se sitúa en el origen de una cadena productiva y distributiva, es
decir, las decisiones van buscando mejorar la calidad de los productos, y los productos se
distribuyen buscando satisfacer mejor las necesidades; un consumo que se traduce en
calidad de vida.