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Universidad Nacional Abierta

Dirección de Investigaciones y Postgrado

La mediación tutorial.
El papel del profesor

González, L., Lora, A., y Malagón, L. (2000). La


Educación Superior a Distancia en Colombia:
Visión histórica y lineamientos para su
gestión. Colombia: ICFES
(Compilación con fines instruccionales)
3.5 La mediación tutorial. El papel del profesor

La educación a distancia no prescinde definitivamente de la mediación del profesor,


sino de la presencia física continua en el aula de clase. La educación se basa en la
comunicación; la vida humana es toda aquella comunicación. El autoaprendizaje no es
aprendizaje en el aislamiento o la soledad, sino aprendizaje autodirigido con base en
información recibida y compartida, es decir, en comunicación. Por tanto, la figura del
educador no desaparece, aunque sí cambia la función; deja de ser propiamente docente para
convertirse en orientador, guía. De ahí que en educación a distancia el profesor cumpla el
rol de tutor. Tutor significa en latín protector, defensor. Aplicado a la educación tiene el
significado de cuidador y orientador. El estudiante a distancia necesita

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el apoyo de alguien con mayor experiencia y madurez intelectual que le oriente en su
proceso de autoaprendizaje, con el fin de evitar pérdidas de tiempo y esfuerzo cuando se
toman direcciones equivocadas.
A pesar del uso generalizado del término tutor, existe mucha diversidad en la forma
de nombrar al personal responsable de orientar los procesos académicos en las instituciones
de educación superior que ofrecen programas a distancia. En Colombia ello es debido, en
parte, a que la gran mayoría de estos programas han surgido en instituciones creadas para la
metodología presencial y, en parte también, a que en la figura del orientador académico de
la educación a distancia recaen además las funciones del tradicional profesor
presencial. Por eso, más que en poner el énfasis en el nombre que se le dé, es importante
indicar las funciones que debe cumplir o las tareas que debe asumir el personal asignado a
estos programas, sea que cada persona las desempeñe todas o sea que se distribuyan
creando tareas especializadas.
Una tipología general de las funciones que deben desempeñar los profesores en
educación a distancia podría ser la siguiente:
• Asesoría general. Los profesores o tutores deben asesorar el desarrollo de trabajos
que implican la integración de diferentes espacios curriculares. Su fuerte consiste
en la visión integradora de la totalidad del proceso educativo. Esta función a veces
se denomina pedagógica.
• Asesoría especializada. Es la función desempeñada por aquellos profesores que
son especialistas en un determinado en un determinado campo del conocimiento
que orientan sólo los procesos académicos relacionados con el saber de su
competencia. Su potencial consiste en el diseño de los procesos de aprendizaje en
su área, el apoyo conceptual y la retroalimentación académica detallada. En
algunas instituciones se denomina tutoría académica.
• Asesoría en el centro regional. Los profesores que desempeñan esta función
conocen personalmente a los estudiantes, pertenecen a la región y conocen su
problemática. Su función consiste en servir de puente entre el equipo académico
central de la institución y el grupo de estudiantes de una determinada
región. Orientan a éstos directamente en su proceso de aprendizaje. Suelen
llamarse tutores regionales.
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La anterior clasificación general no significa que se presente como modelo a seguir;
simplemente se coloca como muestra de terminología utilizada. Como decíamos antes, lo
más importante es tener claridad sobre las funciones que deben cumplir los profesores en
educación a distancia. Las más importantes son las siguientes:
• Preparación de los materiales educativos que recibirán los estudiantes (guías,
cartillas, módulos, sonovisos, mapas de navegación, etc.).
• Preparación y desarrollo de sesiones de tutoría con los materiales
correspondientes.
• Orientación en lo referente a la utilización de los materiales y de los medios
tecnológicos de apoyo.
• Seguimiento del proceso de aprendizaje: elaborar el registro de la
retroalimentación que recibe el estudiante y atender en primera instancia las
consultas que ellos hacen.
• Ejecución de los procesos evaluativos ya planeados o diseño de los instrumentos
evaluativos que le sean encomendados.
• Participación en procesos de formación permanente tanto en el campo de
conocimiento de su competencia o en el área propia del programa como en la
metodología propia de la educación a distancia.
• Participación en investigaciones relativas a su quehacer como orientador de
educación a distancia o relacionadas con su campo de formación profesional.
Para el desempeño de estas funciones el profesor-tutor requiere una adecuada
capacitación. Por tratarse de un modelo de educación basado en el autoaprendizaje, la
atención y la previsión de las posibles fallas del modelo deben ser muy cuidadosas. En
contra de lo que sucede normalmente, este tipo de profesor debería ser seleccionado y
capacitado con todo cuidado, sobre todo cuando se introduce el uso de tecnologías más
avanzadas, como las digitales, en las que él también debe ser un orientador.

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3.6 Formas de interacción y ambiente educativo
En cualquier tipo de educación, presencial o a distancia, la academia se percibe como
un ambiente especial resultante de la interacción entre los sujetos implicados en el proceso
de aprendizaje y su relación con el conocimiento y con los instrumentos o medios que les
sirven de apoyo. Interactuar significa realizar acciones o actividades en las que están
implicados varios sujetos como actores y espectadores simultáneamente en torno a un
objetivo y valiéndose de determinadas tecnologías.
La educación a distancia es interactiva por naturaleza, ya que se propone como
objetivo relacionar a sujetos dispersos en el espacio en orden a establecer un proceso de
aprendizaje. La interrelación se da entre estudiantes, medios de comunicación, docentes o
tutores y administración de la institución educativa. Los medios de comunicación o de
información son los portadores de los contenidos de estudio; el docente o tutor es el
encargado de diseñar y desarrollar los conocimientos, y la administración de la institución
educativa se responsabiliza de crear los instrumentos, procesos y procedimientos, preparar
los materiales y medios así como el desarrollo de las tutorías y las comunicaciones que se
requieran.
La educación a distancia comienza a superar el modelo del estudio realizado sobre
medios escritos y libros y se prepara a incorporar la multimedia, consistente, como ya
hemos visto, en una variada asociación de medios de diferente desarrollo tecnológico que
debe permitir la interacción con todas las poblaciones de acuerdo con las posibilidades de
comunicación que éstas poseen. El nuevo modelo de educación a distancia que se perfila
bajo la denominación de “lo virtual” tendrá que adaptar los procesos administrativos para
configurar un sistema de interacción en el que estudiantes y profesores se muevan en
iguales condiciones de interlocución apoyándose en dispositivos interactivos de tecnología
cada vez más avanzada.
Todo aprendizaje es interactivo. La interacción tradicionalmente se daba entre el
estudiante y el profesor. Éste representaba y encarnaba las fuentes del conocimiento que
buscaba el alumno. Hoy la tecnología digital unida a las

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telecomunicaciones, y concretamente Internet y el correo electrónico, han introducido la
mediática entre los agentes de la enseñanza y el alumno, con lo cual han hecho más
compleja y mediata tanto la acción de enseñar como la de aprender. Esta interacción con
los medios y a través de los medios resulta potenciadora de aprendizajes, con la sola
condición de que sea apoyada por la institución educativa. El proceso de aprendizaje se
enriquece en la medida en que el estudiante, valiéndose de las nuevas tecnologías, establece
vínculos de interacción con la institución educativa, los profesores, los estudiantes, las
empresas, los organismos de estudio y la comunidad.
Tanto el docente como el estudiante cuentan hoy con una rica mediática, como
posibilidad que se concretiza en la infraestructura de comunicaciones que posee la sociedad
y de la que participa, en diferente medida, cada comunidad y cada institución
educativa. Pero los medios y las producciones multimediales por sí solos no cumplen
ninguna función de aprendizaje. Es preciso que sean seleccionados y programados
pedagógicamente de acuerdo con los temas de estudio y los objetivos propuestos. Ésa es la
labor del profesor-tutor al interactuar con el medio: dotarlo de elementos de interacción que
resulten estimulantes y orientadores para el estudiante.
El diseño de alternativas de interacción depende de diversos factores:

• Medios materiales. Ya hemos mencionado los principales medios utilizados en


educación a distancia. Hay medios más completos que otros en cuanto a la forma
de transmitir el conocimiento que el estudiante busca. El texto guía impreso, por
ejemplo, cuando está bien diseñado, se vuelve casi suficiente como herramienta
guía del aprendizaje. Otros medios son más ricos en cuanto a la cantidad y
actualidad de la información que pueden brindar, por ejemplo la red Internet. A
veces se reducen los medios a pequeñas guías o breves materiales impresos de
consulta y se refuerza la acción de orientación e instrucción con sesiones de tutoría
muy similares a las clases presenciales.
Estas diferencias en las mediaciones hacen que las estrategias pedagógicas sean
distintas, que se requieran menos o más sesiones presenciales

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para apoyar el aprendizaje. Lo importante es que los medios contengan o permitan
acceder a la información necesaria.
• Sesiones tutoriales También aquí se dan grandes diferencias entre
instituciones. Algunas, que disponen de buenos materiales de apoyo, reducen a un
mínimo las sesiones de tutoría instruccional. Otras programan sesiones frecuentes
de tutorías presenciales con el fin de suplir las limitaciones o deficiencias de los
materiales. Incluso hay instituciones que programan cursos presenciales, sobre
todo en programas de áreas pedagógicas, en períodos en que los estudiantes, en su
mayoría docentes, disfrutan de sus vacaciones. De este modo se crea un ambiente
pedagógico mixto, con períodos de estudio a distancia y períodos de clases
presenciales.
Un tipo de educación muy difundido es la denominada semipresencialidad. Se
programa el aprendizaje de una asignatura en dos partes: varias sesiones de clase
presencial, en las que se explican de una forma rápida los contenidos, y estudio
personal “a distancia” de los temas durante un período no muy largo que concluye
con alguna sesión presencial de refuerzo previa ala evaluación o directamente con
la evaluación.
• Espacio físico institucional. La cercanía o lejanía de los estudiantes con relación
al lugar físico donde presta sus servicios la institución educativa, es otro elemento
a tener en cuenta en el intento de comprender el tipo de interacción y el grado de
satisfacción con ella que muestran los estudiantes. Aunque técnicamente ya es una
posibilidad la comunicación inmediata por teléfono o mediata cor correo
electrónico entre estudiantes y tutores, en la práctica esa comunicación
personalizada y frecuente todavía no es una realidad debido a las limitaciones de
las telecomunicaciones y al todavía escaso número de estudiantes que dispone de
computadora personal y correo electrónico.
En los programas de amplía cobertura, suprarregionnal o nacional, las instituciones
resuelven el problema de la interacción frecuente y con

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presencia física –cara a cara- mediante le establecimiento de centros
regionales. En ellos se genera un ambiente académico enriquecido por la
presencia simultánea de estudiantes y profesores que participan en el proceso de
aprendizaje.
• Modelo pedagógico. Las diferentes teorías sobre la educación (tecnología
educativa, pedagogía activa, constructivismo, problematización, etc.) producen
distintos tipos de relación entre los elementos que intervienen en el proceso
educativo: sujetos, organizaciones, discursos, prácticas y contextos. En unas se le
exige al estudiante mayor actividad y creatividad, en otras contactos más
frecuentes con los profesores y compañeros; unas organizan el programa de
estudios de modo que los estudiantes se concentren en aprender o asimilar los
contenidos de cada asignatura para dar cuenta de ellos en el momento de la
evaluación; otras vinculan más al estudiante con la comunidad local y los
problemas que la caracterizan.
El modelo escogido por una institución quedará plasmado en cada uno de los
elementos que conforman el currículo: en la planeación curricular, en los
materiales elaborados como guía del estudio, en el proceso tutorial y en las
prácticas evaluativas. Siempre habrá que estar atentos a que las decisiones
tomadas a nivel de planeación curricular se lleven a la práctica en los diferentes
procesos académicos.
• Tipos de saber. De acuerdo a la naturaleza de los diferentes saberes y sus
especificaciones será también la planificación del aprendizaje. Cada área del
saber, pertenezca a las ciencias sociales, naturales, de la salud, matemáticas,
ingenierías etc., exige condiciones específicas que deben ser tomadas en cuenta en
el modelo establecido dentro de la educación a distancia. Este factor determina,
por ejemplo, que la apropiación de cierto tipo de competencias técnicas demande
el uso de laboratorios especializados, que determinadas temáticas requieran la
utilización de medios audiovisuales, que se realicen prácticas en proyectos de las
comunidades.

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• Grupos de estudio. Bajo el supuesto de que le trabajo en grupo puede tener
resultados más eficientes que le individual, algunas instituciones recomiendan
como método de aprendizaje que los estudiantes se reúnan en pequeños grupos,
dentro de la misma localidad. A veces se les denomina cipas (círculos de
interacción y participación social). Su principal cometido es el de que los
miembros del grupo se apoyen unos a otros y se ayuden en el estudio. El
intercambio de ideas favorece la comprensión de los temas y permite aclarar dudas
sobre los conocimientos objeto del aprendizaje.
Cumplen además estos grupos una función de carácter social: proyectar hacia la
comunidad los avances del aprendizaje y recoger la problemática social con el fin
de planear acciones con la comunidad dirigida a la solución de algunos de sus
problemas.

• Prácticas estudiantiles. Las prácticas estudiantiles constituyen un excelente medio


de interacción. El estudiante a distancia, que realiza la mayor parte del estudio
teórico él solo, encuentra en las prácticas el ambiente propicio para compartir los
conocimientos con sus compañeros de práctica, para validar por medio de la
práctica dichos conocimientos, para adquirir y construir nuevos conocimientos en
el intercambio de experiencias. Si, además, las prácticas estudiantiles hacen parte
de algún programa de servicio social y promoción de la comunidad, en campos
como la salud, la educación, la capacitación tecnológica, etc., la interacción
resultará mucho más enriquecedora.

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