Rosario A Los Dolores de La Virgen María
Rosario A Los Dolores de La Virgen María
Rosario A Los Dolores de La Virgen María
SEGUNDO DOLOR:
La huida a Egipto
Oh Madre afligida, participo del sufrimiento que te llevó a huir a Egipto con tu Hijo, digno de
adoración, ya perseguido hasta la muerte por los que vino a salvar. Por el cansancio y la angustia de
este penoso viaje, por la pobreza y la humillación sufridas durante la estancia en Egipto. Te suplico,
mi tierna Soberana, que me ayudes a soportar contigo y como Tú todas las penas sufridas de este
triste destierro para gozar de la felicidad en la patria celestial.
Padre Nuestro
CUARTO DOLOR:
María se encuentra con Jesús, cargando con la cruz
Oh Madre afligida, participo del dolor que invadió tu alma cuando encontraste a tu Hijo Jesús
cubierto de sangre y heridas, coronado de espinas y aplastado bajo el peso de su cruz. Por la espada
de doble filo que atravesó entonces tu corazón y el de tu amado Hijo. Te imploro, oh Santa Madre
que me concedas la perfecta resignación a la voluntad de mi Dios y la gracia de llevar con alegría mi
cruz con Jesús hasta mi último aliento
Padre Nuestro
QUINTO DOLOR:
María al pie de la cruz de Jesús
Oh Madre afligida, participo del dolor que inundó tu alma al pie de la cruz de Jesús. Madre llena de
amor, por la agonía que sufriste por tu hijo agonizante y por la inefable bondad conque luego nos
acogiste como hijos tuyos, alcánzame de Jesús crucificado la gracia de vivir sólo para mi Dios,
perseverando en su amor hasta mi muerte antes de verlo y encontrarlo cara a cara en el Paraíso.
Padre Nuestro
SÉPTIMO DOLOR:
María deposita el cuerpo de Jesús en el sepulcro
Oh Madre afligida, participo del dolor que sumergió tu alma cuando el cuerpo consagrado de tu
amado Hijo fue depositado en el sepulcro. Y tuviste que alejarte dejando que, con tu Hijo,
sepultasen tu corazón ardiente de amor. Por tu cruel martirio, oh Madre del amor puro obtén para
mí el perdón de todos los pecados. Protégeme de la tentación y ayúdame en la hora de mi muerte.
En tus manos confío mi pobre alma, objeto de la pasión de Jesús y de tus dolores. No la abandones,
oh Madre de la Misericordia, antes de haberla llevado a la felicidad eterna
Padre Nuestro
Oración Final
Oh María, reina de los mártires, tu alma fue sumergida en un océano de dolores. Por la fuerza de las
lágrimas que derramaste en estos momentos de sufrimiento te suplicamos que obtengas para
nosotros, y para los pecadores de todo el mundo, la verdadera conversión.
Corazón doloroso e inmaculado de la Virgen María, ruega por nosotros que recurrimos a Ti.
Corazón doloroso e inmaculado de la Virgen María, ruega por nosotros que recurrimos a Ti.
Corazón doloroso e inmaculado de la Virgen María, ruega por nosotros que recurrimos a Ti.