Los Contratos

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Los Contratos

Los contratos desde el punto de vista del Derecho se encuentran dispuestos en


Nuestro Código Civil Venezolano, en el Artículo 1133 de la siguiente manera:
"El Contrato en una convención entre dos o más personas para constituir,
reglar, transmitir modificar o extinguir entre ellas un vínculo jurídico."
El Contrato es ley entre las partes, son de carácter obligatorio, es decir de obligatorio
cumplimiento entre las partes, es fuente de obligaciones y deben ser ejecutados de
buena fe.
Los Contratos se clasifican de acuerdo al tipo de obligaciones entre las partes, de
carácter técnico-jurídico, pueden realizarse de manera pura y simple o de acuerdo
a la modalidad a que esté sometida. Razón por la cual nuestra legislación dispone
la clasificación general de los contratos, Según su naturaleza; Según su Objeto;
Según la determinación de las prestaciones; Por la forma en que se perfeccionan;
Según su carácter; Por la forma como nacen y como concluyen; Según las Normas
legales que lo Regulan; Según la situación de igualdad o no de las partes y Según
que el contrato produzca efectos obligatorios para las partes solamente o bien
produzca dichos efectos para terceros que no sean parte del mismo.
Contrato, acuerdo y convención
Acuerdo
Es un negocio jurídico bilateral que consiste en la manifestación de voluntad de dos
o más personas que coinciden en la determinación o solución de un asunto de
interés común.
En el acuerdo deben coincidir dos o más personas en las voluntades y no por todas
las personas (art 764 C.C)
En cambio la convención y el contrato si requieren de la voluntad unánime de todos
los intervinientes.
Convención
Es un concierto entre dos o más personas para realizar un determinado fin.
Es un negocio jurídico bilateral integrado por varias voluntades identificadas en la
consecución de un fin u objeto jurídico.
Contrato
Un contrato, en términos generales, es definido como un acuerdo privado, oral o
escrito, entre partes que se obligan sobre materia o cosa determinada, y a cuyo
cumplimiento pueden ser exigidas. Es un acuerdo de voluntades que genera
derechos y obligaciones para las partes. Por ello se señala que habrá contrato
cuando varias partes se ponen de acuerdo sobre una manifestación de voluntad
destinada a reglar sus derechos.
Doctrinariamente, ha sido definido como un negocio jurídico bilateral o multilateral,
porque intervienen dos o más personas (a diferencia de los actos jurídicos
unilaterales en que interviene una sola persona), y que tiene por finalidad crear
derechos y obligaciones (a diferencia de otros actos jurídicos que están destinados
a modificar o extinguir derechos y obligaciones, como las convenciones). También
se denomina contrato el documento que recoge las condiciones de dicho acto
jurídico.
En el Derecho romano clásico, a su vez, el contrato se refiere a la concreta situación
de estar ligadas las partes por un vínculo jurídico que crea derechos y obligaciones.
No se refiere al acto jurídico mediante el cual las partes contraen dichos derechos,
sino a lo contratado (contractus, lo contraído), la relación jurídica que ha quedado
indisolublemente constituida mediante la convención generadora.
Las partes en un contrato son personas físicas o jurídicas. En un contrato hay dos
polos o extremos de la relación jurídica obligacional, cada polo puede estar
constituido por más de una persona revistiendo la calidad de parte.
El contrato, en general, tiene una connotación patrimonial, y forma parte de la
categoría más amplia de los negocios jurídicos. La función del contrato es originar
efectos jurídicos.
En cada país puede existir un concepto de contrato diferente, y esa divergencia
tiene que ver con la realidad socio-cultural y jurídica de cada país (existen
ordenamientos en que el contrato no se limita al campo de los derechos
patrimoniales únicamente, sino que abarca también derechos de familia como, por
ejemplo, los países en los que el matrimonio es considerado un contrato).
Concepto legal de contrato
La mayoría de los Códigos civiles contienen una definición de "contrato". Muchos
de ellos, siguen los lineamientos del Código civil francés, cuyo artículo 1101 expresa
que "El contrato es la convención por la cual una o más personas se obligan, con
otra u otras, a dar, hacer, o no hacer alguna cosa".
El Código civil alemán prescribe que "para la formación de un negocio obligacional
por actos jurídicos, como para toda modificación del contenido de un negocio
obligacional se exige un contrato celebrado entre las partes, salvo que la ley
disponga de otro modo". Mientras el Código civil suizo señala que "hay contrato si
las partes manifiestan de una manera concordante su voluntad recíproca; esta
manifestación puede ser expresa o tácita".
El Código Civil soviético solo expresaba que "Los actos jurídicos, esto es, los actos
que tienden a establecer, modificar o extinguir relaciones de Derecho Civil, pueden
ser unilaterales o bilaterales (contratos)".
Los contratos se dividen en verdaderos y cuasicontratos. Eran verdaderos los que
se basaban en consentimiento expreso de las partes y los cuasicontratos los
basados en el consentimiento presunto. Cuasicontratos. Son aquellos que se basan
en el consentimiento presunto de las partes.
A su vez los contratos verdaderos de dividían en nominados e innominados. Eran
nominados los que tenían nombre especifico y particular confirmado por el derecho
(ej. compraventa) e innominados los que aun teniendo causa no tenían nombre. Los
contratos innominados eran cuatro: Doy para que des, Doy para que hagas, Hago
para que des y Hago para que hagas. Lo característico de los contratos innominados
es que en ellos no intervenía el dinero contado.
En el derecho romano existían contratos unilaterales y bilaterales. Los contratos
unilaterales obligaban solo a una de las partes (por ejemplo, el mutuo) y los
bilaterales obligaban a ambas partes (como en el caso de la compraventa).
La cosa en los contratos en Roma
La cosa presente de la cual se deriva la obligación puede ser:
• Entrega de la cosa, que equivale a los contratos reales: mutuo, comodato,
depósito y prenda.
• Palabras solemnes, que equivale a los contratos verbales, por derecho
antiguo eran: el señalamiento de la dote y la promesa jurada de obras; por
derecho nuevo únicamente quedó la estipulación.
• Instrumentos, que equivale a los contratos literales, del cual el que se conocía
era el vale.
• Consentimiento, que equivale a los contratos consensuales que son: la
compraventa, locación y conducción, enfiteusis, sociedad y mandato.
Concepción amplia:
Contrato es un acuerdo unánime entre dos o más personas para constituir, reglar,
modificar o extinguir un vínculo jurídico.
Según el Código Italiano de 1942
Contrato, es un acuerdo entre dos o más partes para constituir, regular o disolver
entre ellas una relación jurídica patrimonial (art.1321)
Para la doctrina francesa
El Contrato es una especie de convención que presenta como característica
fundamental el crear obligaciones.
La convención sería todos aquellos negocios jurídicos bilaterales destinados a
regular, modificar o extinguir vínculos jurídicos u obligaciones
Según el Código Napoleón (art.1101)
El Contrato es una convención por la cual una o varias personas se obligan hacia
una o varias otras personas a dar, hacer, o no hacer alguna cosa.
El contrato es, pues, considerado como una especie de convención destinado solo
a crear obligaciones.
Definiciones del término contrato en Venezuela.
En Venezuela nuestros dos códigos civiles (1862 y 1867) definían el contrato de
manera similar al del Código de Napoleón. Dichos códigos establecían:
Contrato o Convención es un acto por el cual una parte se obliga para con otra a
dar, hacer o no hacer alguna cosa.
Según el Código Civil Venezolano (1942) Art, 1133 “El Contrato en una
convención entre dos o más personas para constituir, reglar, transmitir
modificar o extinguir entre ellas un vínculo jurídico”.
En la reforma del 1942 de nuestro Código Civil se le añadió el concepto "transmitir"
un vínculo jurídico; que efectivamente es uno de los efectos del contrato.
Características del contrato
1.- El Contrato es una convención.
Involucra el concurso de las voluntades de dos o más personas conjugadas para la
realización de un determinado efecto jurídico.
2.-El Contrato regula relaciones o vínculos jurídicos de carácter patrimonial,
susceptibles de ser valorado desde un punto de vista económico. (Carácter
pecuniario).
3.- El contrato produce efectos obligatorios entre las partes (Es de obligatorio
cumplimiento).
4.- El Contrato es Fuente de obligaciones.
5.- El Principio de la autonomía de la voluntad es el fundamento de la obligatoriedad
del contrato.
Condiciones para la existencia de un contrato o elementos constitutivos:
Art. 1141 C.C.
Las condiciones requeridas para la existencia de un contrato son:
1. Consentimiento de las partes
2. Objeto que pueda ser materia de contrato; y
3. Causa lícita.

1. Consentimiento de las partes. Es la coincidencia de dos declaraciones de


voluntad que procediendo de dos sujetos capaces, se unen concurriendo a un fin
común.
Cómo puede ser anulado un contrato:
Art.1142 C.C.
El contrato puede ser anulado:
1.- Por incapacidad de las partes o de una de ellas; y
2.- Por vicios del consentimiento
Formación de los contratos
1. Oferta: es el acto mediante el cual una parte propone a la otra, expresa o
tácitamente, la celebración de un contrato
2. Aceptación: es la declaración de voluntad formulada por la persona a quien
va dirigida la oferta, expresando su adhesión
(Voluntad entre las partes Oferta y aceptación)
Función del contrato
• Es el instrumento por excelencia para que le hombre en sociedad pueda
satisfacer sus necesidades.
Es el acto jurídico de mayor aplicación por cualquier sujeto de derecho, hasta el
punto de que sin su uso no se podrá concebir la realización de la vida económica
en las comunidades.
2. Objeto que pueda ser materia de contrato. El objeto de todo contrato es
producir unas o varias obligaciones de dar, hacer o no hacer. Cuando nos estamos
obligando a hacer, a dar, hacer o no hacer, es la operación jurídica que se quiere
realizar, la cual está sometida a condiciones especiales.
Art, 1155 C.C. El objeto del contrato debe ser posible, lícito, determinado o
determinable.
3. Causa lícita. Definiciones:
Para Sánchez Román. La causa de un contrato, es el fin esencial o más próximo
que los contrayentes se proponen al celebrar el contrato.
Para dominic: Es la razón determinante que ha dado nacimiento a la obligación,
el por qué, la virtualidad de la obligación é, la virtualidad de la obligación
Capitans y Collins Definen la causa, cuando una persona se obliga en vista a
un fin inmediato, directo que, lo determina al establecer la obligación.
La jurisprudencia moderna enfoca el concepto de causa, identificándola con la
finalidad económica - social perseguida por el contrato.
Art. 1157. La obligación sin causa, o fundada en una causa falsa o ilícita, no tiene
ningún efecto.
La causa es ilícita cuando es contraria a la ley, a las buenas costumbres o al orden
público. (Produce la nulidad del contrato)
Quien haya pagado una obligación contraria a las buenas costumbre, no puede
ejercer la acción en repetición sino cuando de su parte no haya habido violación de
aquellas.
La causa es el fin socio-económico del contrato.
La causa es la función ECONÓMICO – SOCIAL que el contrato cumple,
considerado en su totalidad.
Cuando la cusa está fundada en algo ilicitito es nulo el contrato.
Artículo 1159 Código Civil
"los contratos tiene fuerza de ley entre las partes. No pueden revocarse sino
por mutuo consentimiento o por las causas autorizadas por la Ley."
Artículo. 1137 CCV
El contrato se forma tan pronto como el autor de la oferta tiene conocimiento
de la aceptación de la otra parte.
La aceptación debe ser recibida por el autor de la oferta en el plazo fijado por ésta
o en el plazo normal exigido por la naturaleza del negocio.
El autor de la oferta puede tener por válida la aceptación tardía y considerar y
considerar el contrato como perfecto siempre que el lo haga saber inmediatamente
a la otra parte.
El autor de la oferta puede revocarla mientras la aceptación no haya llegado a su
conocimiento. La aceptación puede ser revocada entre tanto que ella no haya
llegado a conocimiento del autor de la oferta.
Si el autor de la oferta se ha obligado a mantenerla durante cierto plazo, o si esta
obligación resulta de la naturaleza del negocio, la revocación antes de la expiración
del plazo no es obstáculo para la formación del contrato.
La oferta, la aceptación o la revocación por una cualquiera de las partes, se
presumen conocidas desde el instante en que ellas llegan a la dirección del
destinatario, a menos que éste pruebe haberse hallado sin su culpa, en la
imposibilidad de conocerla.
Una aceptación que modifica la oferta, tendrá únicamente el valor de una nueva
oferta.
El artículo 1137, establece las maneras de cómo se forma un contrato.
Tan Pronto como el autor de la oferta tiene conocimiento de la aceptación de la otra
parte, ésta debe ser recibida por el autor de la oferta en el plazo fijado o en el plazo
normal exigido por la naturaleza del negocio.
Si la aceptación no ha llegado al conocimiento del autor de la oferta, éste puede
revocarla.
Elementos comunes a todos los contratos, tenemos:
La capacidad: es la aptitud de las personas para figurar en su propio nombre en un
contrato. Por lo tanto no pueden contratar los que sufren:
Una incapacidad de derecho por falta de alguno de los status, como: los esclavos,
los peregrinos, los alieni iuris.
Una incapacidad de derecho, como los infantes, los dementes, los pródigos, las
mujeres púberes sui iuris.
El consentimiento: el contrato no puede celebrarse sin el acuerdo de voluntades.
El objeto: es la prestación del contrato: una sola prestación en los unilaterales, dos
o más en los sinalagmáticos.
El objeto es el hecho positivo o negativo que debe realizar una de las partes en
beneficio de la otra, o las dos partes cuando ambas resultan acreedoras y deudoras
en virtud del contrato.
El objeto tenía que ser posible, lícito, determinado o susceptible de serlo y presentar
un interés para el acreedor.
La causa: algunos doctrinarios afirman que ésta no se encuentra en los textos de
Derecho Romano, sino que solo fue empleada como sinónimo de fuente o de hecho
generador de la obligación.

Elementos Naturales: son aquellos que aunque acompañando normalmente a un


contrato, pueden ser excluidos por los contrayentes mediante una cláusula, tal sería,
en la compra venta, la responsabilidad del vendedor por la evicción o por los vicios
ocultos de la cosa vendida, que se considera implícitamente comprendida en el
contrato, mientras que las partes no dispongan lo contrario, ya que se trata de un
elemento que no es de la esencia sino de la naturaleza del contrato, que puede ser
excluido por la manifestación de voluntad de las partes, y el contrato no dejaría de
ser tal.

Elementos Accidentales: son aquellos que dependen solo de la voluntad de las


partes, quienes pueden incluirlo para modificar los efectos naturales del contrato.
Son llamados también modalidades y son: la condición, el plazo y el cargo.
Son aquellos que las partes establecen por cláusulas especiales, que no sean
contrarias a la ley, la moral, las buenas costumbres o el orden público. Por ejemplo:
el plazo, la condición, el modo, la solidaridad, la indivisibilidad, la representación,
etc.
En consonancia con la autonomía de la voluntad, los contratantes pueden
establecer los pactos, cláusulas y condiciones que tengan por convenientes,
siempre que no sean contrarios a la ley, la moral, las buenas costumbres o el orden
público.

Vicios del consentimiento: para que el contrato sea válido, el consentimiento debe
emanar de personas dotadas de discernimiento y estar exentas de vicios. Si se halla
afectado por uno de ellos, la parte perjudicada puede solicitar la nulidad de este.
Tres son los vicios del consentimiento más comunes:
• El Error, que es la falsa noción que se tiene de una cosa (no todos los errores
anulan el acto).
• El Dolo, que tiene lugar cuando una de las partes o un tercero induce a error
a la otra para decidirla a prestar su consentimiento, mediante el empleo de
maniobras fraudulentas con el propósito de obtener una ventaja a sus
expensas.
• La Violencia, que es un acto de fuerza material o moral ejercida contra una
persona para obligarla a prestar su consentimiento en un contrato.
Contrato como acto jurídico
El contrato tiene todos los elementos y requisitos de un acto jurídico:
Sujetos
Quien concluye un contrato debe ser capaz. Todo sujeto, como parte de su
personalidad, tiene la capacidad jurídica. Sin embargo, la capacidad de actuar es el
poder que tiene un sujeto de derecho para crear, con una manifestación de voluntad,
efectos de derechos. Así, la persona que constituya un contrato debe tener la
capacidad de actuar para obligarse según las condiciones estipuladas en el
contrato.
Objeto
El objeto del contrato de trabajo no es otro que la prestación de forma voluntaria y
retribuida de un trabajo por cuenta ajena y bajo la dependencia de otra persona que
llamamos empresario.
Elementos del acto jurídico
Los siguientes son los elementos que conforman el acto jurídico:
1. Capacidad. La capacidad se subdivide en capacidad de goce (la aptitud
jurídica para ser titular de derechos subjetivos, comúnmente denominada
también como capacidad jurídica) y capacidad de ejercicio (aptitud jurídica
para ejercer derechos y contraer obligaciones sin representación de terceros,
denominada también como capacidad de actuar).
2. Consentimiento o voluntad. La voluntad es el querer interno que,
manifestado bajo el consentimiento, produce efectos de derecho. Todo
contrato exige el libre consentimiento entre las partes que lo forman. El
consentimiento se manifiesta por la concurrencia de la oferta y de la
aceptación sobre la cosa y la causa que han de constituir el contrato. Será
nulo el consentimiento prestado por error, violencia, intimidación o dolo.
Formación del contrato
Acuerdo de voluntades
El contrato necesita de la manifestación inequívoca de la voluntad de las partes que
conformarán el acto jurídico. Así, cuando las partes contratantes expresan su
voluntad en el momento que se forma el contrato, se denomina entre presentes.
Cuando la manifestación de la voluntad se da en momentos diferentes, se denomina
entre ausentes. La distinción es importante para poder determinar con exactitud el
momento en que el contrato entra en la vida jurídica de los contratantes. El contrato
entre presentes entrará en vigencia en el momento de la manifestación simultánea
de la voluntad, mientras que el contrato entre ausentes solamente hasta que el
último contratante haya dado su manifestación.
Oferta del contrato
La oferta es una manifestación unilateral de voluntad, dirigida a otro. El ejemplo
clásico es el del comercio que ofrece sus productos a cualquiera, a un precio
determinado. La oferta es obligatoria, es decir, una vez emitida, el proponente no
puede modificarla a su antojo.
Para la aceptación de la oferta, el otro contratante debe dar su consentimiento
expreso o tácito, que indique su inequívoca intención de aceptar la oferta y apegarse
a las condiciones del oferente.
La vigencia obligatoria de la oferta varía en los distintos ordenamientos. Para
algunos, el oferente puede variar la oferta siempre que esta no haya sido aceptada,
mientras que en otros, la oferta debe mantenerse intacta por el periodo de tiempo
que normalmente tomaría un contratante en analizar la oferta.

Clasificación de los contratos


1. Según surjan Obligaciones para una o ambas partes de un Contrato. (Por la
naturaleza del Vínculo)
Contratos unilaterales y bilaterales
• Contrato unilateral: es un acuerdo de voluntades que engendra solo
obligaciones para una parte.
• Contrato bilateral: es el acuerdo de voluntades que da nacimiento a
obligaciones para ambas partes.
Esta clasificación tiene importancia, entre otros, para efectos de la teoría o
problemas de los riesgos y la excepción de contrato no cumplido.
Cuando en un contrato unilateral existen obligaciones que impliquen la transferencia
de una cosa, si está se destruye por caso fortuito o fuerza mayor es necesario poder
establecer quién debe de sufrir la pérdida. La cosa siempre perece para el acreedor
(en los contratos traslativos de dominio el acreedor es el dueño; mientras en los
contratos traslativos de uso, el acreedor a la restitución es el dueño y la cosa perece
para él).
Si el contrato fuere bilateral no habría posibilidad de plantear el problema, porque
esta cuestión supone que siendo las obligaciones recíprocas, una parte no cumple
entregando la cosa, por un caso de fuerza mayor y en atención a esto la otra parte
debe cumplir, ya que no es imputable el incumplimiento del deudor.
La excepción de contrato no cumplido (exceptio non adimpleti).
En todos los contratos bilaterales, que generan obligaciones recíprocas, cuando una
parte no cumple o se allana a cumplir, carece de derecho para exigir a la otra el
cumplimiento de su obligación, y si a pesar de ello pretendiera exigir judicialmente
el cumplimiento por una demanda, el demandado le opondrá la excepción de
contrato no cumplido.
La exceptio non adimpleti no puede presentarse en los contratos unilaterales, por
una sencilla razón de que en ellos solo una de las partes está obligada, y si no
cumple, la otra podrá judicialmente exigir ese cumplimiento, sin que pueda
oponérsele dicha excepción, ya que no tiene por su parte ninguna obligación que
realizar.
2. Según el fin perseguido por las partes. (Por su Objeto).
Contratos onerosos y gratuitos
• Contrato oneroso: es aquél en el que existen beneficios y gravámenes
recíprocos, en éste hay un sacrificio equivalente que realizan las partes; por
ejemplo, la compraventa, porque el vendedor recibe el provecho del precio
y a la vez entrega la cosa, y viceversa, el comprador recibe el provecho de
recibir la cosa y el gravamen de pagar.
• Contrato gratuito: sólo tiene por objeto la utilidad de una de las dos partes,
sufriendo la otra el gravamen. Es gratuito, por tanto, aquel contrato en el
que el provecho es para una sola de las partes, como por ejemplo el
comodato.
3. Según La determinación de las prestaciones de alguna de las partes
dependa de un hecho casual o no.
Contratos conmutativos y aleatorios
• Contrato conmutativo: es aquel contrato en el cual las prestaciones que se
deben las partes son ciertas desde el momento que se celebra el acto
jurídico, un ejemplo muy claro es el contrato de compraventa de una casa.
• Contrato aleatorio: es aquel que surge cuando la prestación depende de un
acontecimiento futuro e incierto y al momento de contratar, no se saben las
ganancias o pérdidas hasta el momento que se realice este acontecimiento
futuro. Ejemplos son el contrato de compraventa de cosecha llamado de
"esperanza", apuestas, juegos, etc.
Lo que principalmente caracteriza a los contratos aleatorios:
La incertidumbre sobre la existencia de un hecho, como en la apuesta, o bien
sobre el tiempo de la realización de ese hecho (cuándo).
La oposición y no sólo la interdependencia de las prestaciones, porque
cuando la incertidumbre cesa, forzosamente una de las partes gana y la otra
pierde, y además, la medida de la ganancia de una de las partes es la medida
de la pérdida de la otra.
Es importante señalar que el Diccionario de la lengua española, define al término
aleatorio, del latín "aleatorius" el cual significa, propio del juego de dados, adj.
Perteneciente o relativa al juego de azar.
4. Según su Carácter
Contratos Preparatorios, Contratos Principales y Contratos Conexos.
Contratos principales y accesorios
• Contrato principal: es aquel que existe por sí mismo, en tanto que los
accesorios son los que dependen de un contrato principal. Los accesorios
siguen la suerte de lo principal porque la nulidad o la inexistencia de los
primeros origina a su vez, la nulidad o la inexistencia del contrato accesorio.
• Contratos accesorios: son también llamados "de garantía", porque
generalmente se constituyen para garantizar el cumplimiento de una
obligación que se reputa principal, y de esta forma de garantía puede ser
personal, como la fianza, en que una persona se obliga a pagar por el deudor,
si éste no lo hace; o real, como el de hipoteca, el de prenda, en que se
constituye un derecho real sobre un bien enajenable, para garantizar el
cumplimiento de una obligación y su preferencia en el pago. La regla de que
lo accesorio sigue la suerte de lo principal, sufre en ciertos casos
excepciones, porque no podría existir el contrato accesorio, sin que
previamente no se constituyese el principal; sin embargo, el Derecho nos
presenta casos que puede haber fianza, prenda o hipoteca, sin que haya
todavía una obligación principal, como ocurre cuando se garantizan
obligaciones futuras o condicionales. Ejemplo: "La fianza, la prenda y la
hipoteca"
• Contratos Preparatorios: Son los que tienen por objeto crear un estado de
derecho que pueda seguir de base o fundamento a la celebración de otros
contratos posteriores. Ejemplo: "La sociedad y el mandato."
• Contratos Conexos: Son aquellos en los cuales existe una conexión tan
íntima entre ellos, que no se pueden considerar como contratos
independientes, por tener una finalidad común que requiere necesariamente
la existencia de los dos contratos. Tienen una causa común, la nulidad de
uno produce la nulidad de otro. Generalmente son contratos innominados.
4. Según la Duración de la ejecución de las prestaciones.
Por la forma como nacen y como concluyen: contrato de tracto o cumplimiento
instantáneo y de Tracto sucesivo.
• Contrato instantáneo: son aquellos que se cumplen en el mismo momento
en que se celebran, es decir, su cumplimiento se lleva a cabo en un solo acto.
• Contrato de Tracto Sucesivo: es aquel en que el cumplimiento de las
prestaciones se realiza en un periodo determinado, y que, por deseo de las
partes se puede extender para satisfacer sus necesidades primordiales y
éstos términos pueden ser:
Ejecución continuada: ejecución única pero sin interrupción.
Ejecución periódica: varias prestaciones que se ejecutan en fechas
establecidas.
Ejecución intermitente: se da cuando lo solicita la otra parte.
Características de las ejecuciones:
La ejecución es autónoma de las demás, por lo que cada acto es
autónomo.
Existe una retroactividad por cada acto jurídico que se realice.
Si se presenta un elemento antijurídico, lo que procede es anular
alguna prestación ya realizada.
5. Por la Forma como se Perfeccionan. (Por su forma)
Contratos Consensuales, Contratos reales y Contratos Solemnes.
• Contrato consensual: por regla general, el consentimiento de las partes
basta para formar el contrato; las obligaciones nacen tan pronto como las
partes se han puesto de acuerdo. El consentimiento de las partes puede
manifestarse de cualquier manera. No obstante, es necesario que la voluntad
de contratar revista una forma particular, que permita por medio de ella
conocer su existencia. No es la simple coexistencias de dos voluntades
internas lo que constituye el contrato; es necesario que éstas se manifiesten
al exterior, que sean cambiadas Ejemplos: mutuo, comodato y depósito.
• Contrato real: queda concluido desde el momento en que una de las partes
haya hecho a la otra la tradición o entrega de la cosa sobre la que versare el
contrato.
• Contrato formal, solemne o no solemne, y no formal. Existen también las
que se llaman formalidades ad probationem que son las realizadas a fin de
poder demostrar la celebración de un acto; por lo general consiste en realizar
el acto ante notario y también son llamadas solemnes que son cuando la
voluntad de las partes, expresada sin formas exteriores determinadas, no
basta para su celebración, porque la ley exige una formalidad particular en la
ausencia de la cual el consentimiento no tiene eficacia jurídica. La distinción
entre contratos formales y solemnes estriba en lo referente a la sanción. La
falta de forma origina la nulidad relativa; la falta de solemnidad ocasiona la
inexistencia. En la legislación se acepta un sistema ecléctico o mixto respecto
a las formalidades, porque en principio, se considera que el contrato es
consensual, y sólo cuando el legislador imponga determinada formalidad
debe cumplirse con ella, porque de lo contrario el acto estará afectado de
nulidad.
Contrato privado y público
• Contrato privado: es el realizado por las personas intervinientes en un
contrato con o sin asesoramiento profesional. Tendrá el mismo valor que la
escritura pública entre las personas que los suscriben y sus causahabientes
• Contrato público: son los contratos autorizados por los funcionarios o
empleados públicos, siempre dentro del ámbito de sus competencias, tiene
una mejor condición probatoria. Los documentos notariales son los que
tienen una mayor importancia y dentro de ellos principalmente las escrituras
públicas.
6. Según las Normas legales que lo Regulan. Contrato nominado o típico e
innominado o atípico
Contrato nominado o típico e innominado o atípico
• Contrato nominado o típico: es aquel contrato que se encuentra previsto y
regulado en la ley. Por ello, en ausencia de acuerdo entre las partes, existen
normas dispositivas a las que acudir. (Compraventa, Arrendamientos...)
• Contrato innominado o atípico: es aquel para el que la ley no tiene previsto
un nombre específico, debido a que sus características no se encuentran
reguladas por ella. Puede ser un híbrido entre varios contratos o incluso uno
completamente nuevo. Para completar las lagunas o situaciones no previstas
por las partes en el contrato, es necesario acudir a la regulación de contratos
similares o análogos.

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