01 RTN 165
01 RTN 165
01 RTN 165
CONTENIDO
PRESENTACIÓN ................................................................................... 4
NUESTRA PORTADA ............................................................................ 5
DEL ESCRITORIO DEL EDITOR ........................................................ 7
GUÍA PARA EL LECTOR ....................................................................... 8
Grabado de Carpintero en Actividad ......................................................................... 15
CIENCIAS NATURALES ...................................................................... 16
L A S ELVA T ROPICAL C ARIBEÑA AGONIZA D ÍA A D ÍA EN N ICARAGUA ...........................18
Guillermo Bendaña G. ........................................................................................ 18
C ONOCIMIENTO SOBRE CAMBIO CLIMÁTICO EN POBLACIONES URBANAS DE C OSTA
R ICA Y N ICARAGUA ...........................................................................................................24
Sergio A. Molina Murillo .................................................................................... 24
Traducción: Danilo Salamanca ........................................................................... 24
Cristo yacente. Exhibición en el Museo Linares en Chile ............................................. 48
COSTA CARIBE ................................................................................... 49
P ERMAFROST : L A V ICTIMA S ILENCIOSA DEL C AMBIO C LIMÁTICO ..................................50
Ing. M. Sc. Guillermo Bendaña ........................................................................... 50
M EDIOAMBIENTES M ARINOS DE LA C OSTA C ARIBE ........................................................59
Joe Ryan ............................................................................................................. 59
L OS S UKIA Y LA MEDICINA TRADICIONAL EN LA C OSTA C ARIBE ....................................78
Felix Coe y Gregory J. Anderson ......................................................................... 78
Trabajo en madera en Brasil .................................................................................... 83
ENSAYOS ............................................................................................. 84
L A FORMACIÓN DE LA ECONOMÍA AGROEXPORTADORA .................................................85
José Luís Velázquez Pereira ................................................................................ 85
P ROGRAMAS DEL E DITOR ............................................................................................... 136
José Mejía Lacayo ............................................................................................ 136
«A NTIGÜEDADES I NDÍGENAS N ICARAGÜENSES » - 1965 ................................................ 138
Alberto Bárcenas Reyes .................................................................................... 138
L A H UERTA Y LA C OCINA ............................................................................................... 142
Dr. Schultze Jena .............................................................................................. 142
C AMBIO C LIMÁTICO ........................................................................................................ 144
Redacción de Temas Nicaragüenses ................................................................. 144
1
Presentación
© RTN – [email protected]
2
Revista de Temas Nicaragüenses
No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
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Presentación
© RTN – [email protected]
PRESENTACIÓN
Esta edición 165 consta de 501 páginas, 154,342 palabras en 9 ensayos con
el objetivo estratégico de divulgar la cultura nicaragüense. Ud. estimado lector
puede hojear (según la RAE mover o pasar ligeramente las hojas de un libro o de
un cuaderno.) la Guía para el Lector y seleccionar lo que le gustarí a leer.
El nuevo sitio web en ttps://www.temasnicas.net/ permite seleccionar la
edición 165 en tres formatos diferentes: PDF, MOBI y EPUB, estos dos últimos
para leer en tabletas y en teléfonos inteligentes que representan cerca del 22%
de nuestros lectores.
Los comentarios y sugerencias de los lectores son esenciales para la
elaboración de la revista, y con ello contribuyen a orientarnos hacia el rumbo
correcto. ¿Qué le gustaría leer? ¿Qué no le gusta? Ud., puede informarnos
escribiendo a [email protected]
Somos una revista de historia en un sentido amplio, que incluye entre otras
ciencias, Arqueología, Biografías e historias de otras ramas del conocimiento
humano. ■
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Revista de Temas Nicaragüenses
No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
NUESTRA PORTADA
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Revista de Temas Nicaragüenses
No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
Vamos a reducir el número de páginas para que la edición sea más manejable;
esperamos que esta acción no afecte a los lectores porque mantendremos las mismas
secciones.
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Guía para el lector
[email protected]
–
PRESENTACIÓN
NUESTRA PORTADA
Los pipiles de El Salvador y los Nicaros son puebos hedrmanos. El Salvador
se ha preocupado por revivir la lengua Nahuatl, el tinte de telas con añil. Los
Nicaragüenses más bien destruimos. RTN quiere rescatar nuestro pasado indígena
y la Costa Caribe.
DEL ESCRITORIO DEL EDITOR
Queremos que los lectores envién artículos acdémicos y denlaces desde
donde poder descargar artículos. Esta revista es un esfuerzo de años para rescatar
y recordar nuestro pasado.
GUÍA PARA EL LECTOR
DE ACTUALIDAD
Esperamos pronto buenas noticias sobre la pandemia y sobre nuestra crisis
social y política. Ningún mal es eterno.
DE NUESTROS LECTORES
No tendemos ningún mensaje de lectores que amerite reproducir.
CIENCIAS NATURALES
Sobre Cambio Climático y Agricultura. Fitomejoramiento y cambios
climáticos por S. Ceccarelli et al. El cambio climático es ahora inequívoco,
particularmente en términos de aumento de la temperatura, aumento de la
concentración de CO2, derretimiento generalizado de la nieve y el hielo y aument o
del nivel medio mundial del mar, mientras que el aumento en la frecuencia de las
sequías es muy probable pero no tan seguro. Sin embargo, los cambios climáticos
no son nuevos y algunos de ellos han tenido impactos dramáticos, como la
aparición de hojas hace unos 400 millones de años como respuesta a una drástica
disminución de la concentración de CO2, el nacimiento de la agricultura por el fin
de los últimos hielos. hace unos 11000 años y el colapso de civilizaciones debido
a las sequías del Holoceno tardío entre 5000 y 1000 años atrás.
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Revista de Temas Nicaragüenses
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COSTA CARIBE
Cambio Climático por Redacción de Temas Nicaragüenses . Las lluvias y
nevadas extremas ocurren con mayor frecuencia, ya que el aire y los océanos más
cálidos generan más vapor en la atmósfera. Una tormenta "extrema" produce más
precipitaciones en un evento que el 90 por ciento de las tormentas de un año. En
las últimas décadas, estos eventos se han multiplicado en muchas áreas urbanas
y rurales y se convertirán cada vez más en la norma.
ENSAYOS
La formación de la economía agroexportadora por José Luís Velázquez
Pereira . Durante el período colonial en Nicaragua, como en la mayoría de los
países latinoamericanos donde la Conquista se dio bajo el marco de la "empresa
señorial" que caracterizó la dominación española, la extracción del excedente
económico generado por la mano de obra indígena se realizó a través del
establecimiento de relaciones serviles, es decir: la Encomienda, los Mandamientos
y los Servicios Personales Forzosos. El excedente generado bajo estas relaciones
de producción era enviado entonces hacia la metrópoli española (en el caso de
los tributos y minerales preciosos) o tenía la función de servir de apoyo logístico
a otras empresas de conquista y colonización (en el caso de los cueros, sebos,
madera, maíz y cacao, enviados al Perú, Ecuador y Chile).
Programas del Editor por José Mejía Lacayo . Los programas de Microsoft
(Word, Excel, Power Point, NotePad) nos ayudan hacer las funciones básicas:
procesamiento de textos, operaciones matemáticas, presentaciones, y textos sin
formatear. Si necesitamos procesar imágenes, revisar el contenido del disco duro,
buscar palabras u títulos de archivos necesitamos recurrir a otra aplicaciones. Por
ejemplo la búsqueda de archivos que tengan la palabra “ Granada” rinde 10
archivos, mientras que la aplicación Everything rinde 1,377 nombres de archivo
que tiene la palabra : Granada” en el título.
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Guía para el lector
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–
LAS SEGOVIAS
HISTORIA
Breve historia de la carpintería y de la ebanistería por Lilly Soto Vásquez .
Este es uno de los primeros artículos de Lilly Soto Vásquez como subdirectora de
la revista. Complementados este ensayo con los separadores de sección
seleccionados por la Dra. Soto Vásquez.
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GEOGRAFÍA
Las Provincias de Geomorfología y Fisiografía de Centroamérica por Jeffrey
S. Marshall . América Central abarca un intrincado mosaico de paisajes dinámicos
moldeados poruna amplia gama de procesos de la superficie de la Tierra. Pocas
otras regiones del mundo exhiben una magnitud comparable de diversidad
geomórfica. A lo largo del istmo centroamericano, dominios tectónicos, litológicos
y climáticos altamente variables (Figs. 3.1 3.3) se superponen en una pequeña
área terrestre (0.4% de la superficie terrestre total de la Tierra). La fisiograf ía
resultante se caracteriza por un conjunto heterogéneo de provincias geomórficas
(Fig. 3.4), cada una con un conjunto de formas de relieve distintivo que conserva
una historia única de la evolución del paisaje. Con más de 1500 km de longitud,
Centroamérica se extiende desde las escarpadas tierras altas mayas de Guatemala
en el norte, hasta las cordilleras costeras húmedas del istmo de Darién en Panamá
en el sur. Este estrecho puente terrestre une los dos continentes americanos y
forma una división crítica entre las cuencas del océano Pacífico y Atlántico, que
varía en ancho desde menos de 100 km en el Canal de Panamá hasta más de 400
km a través de las tierras altas interiores de Nicaragua y Honduras. Desde
imponentes picos volcánicos (> 4000 m de elevación) hasta tierras bajas aluviales
cubiertas de jungla, y desde escarpadas costas tectónicas hasta lagunas de
margen pasivo, Centroamérica encarna un microcosmos geomórfico de notable
diversidad.
América Central, es una región de las Américas. Limita con México al
norte, Colombia al sur, el Mar Caribe al este y el Océano Pacífico al oeste.
Centroamérica se compone de siete países: Belice, Costa Rica, El Salvador,
Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá. Su población combinada se estima
en 44,53 millones. Centroamérica es parte de la biodiversidad mesoamericana,
que se extiende desde el norte de Guatemala hasta el centro de Panamá. Debido
a la presencia de varias fallas geológicas activas y al Arco Volcánico de
Centroamérica, existe una gran actividad sísmica en la región, como erupciones
volcánicas y terremotos, que ha resultado en muerte, lesiones y daños a la
propiedad.
ANTROPOLOGÍA
Una nueva cronología arqueológica para el Pacífico Nicaragüense por
Geoffrey McCafferty . Por la enorme importancia arqueológica de sta nueva
cronología, repetimos la publiccaión abreviando el ensayo eliminado las fechas de
radiocarbono que sustentan este trabajo. El Dr. Mccafferty ha excavado por 35
años en la zona de Granada.
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HISTORIA DE VIDA
Pedrarias Dávila por José Mejía Lacayo . Pedro Arias de Ávila nació en 1468
y murió en 1531. Se casó con Isabel de Bobadilla; tuvieron nueve hijos: Diego
Arias, regidor de Segovia, que murió en 1529; Juan Arias, que murió en 1531;
Beatriz de Bobadilla, monja en las Dueñas de Sevilla; Francisco de Bobadilla, fraile
de Santo Domingo de Piedrahita; María de Peñalosa, casada con Rodrigo de
Contreras; Catalina Arias, monja en San Antonio el real de Segovia; Isabel de
Bobadilla, casada con Hernando de Sota; Arias Gonzalo, II conde de Puño en
rostro, Elvira Arias, casada con Urbano Arellano.
DERECHO
Nos hemos quedado sin editor de esta sección. La co-directora Lilly Soto
Vásquez está buscando un nuevo editor. Mientras encontramos el nuevo editor
mantenemos a Roberto Ferrey esperando que su hija Katie se reponga del golpe
de quedar huéfano de padre y madre en el corto plazo de una semana.
RESEÑAS
Prólogo al libro Pedrarias y Balboa, Leyenda negra y doradas en la
conquista de América por Bethany Aram por Manuel Arias-Dávila y Balmaseda, VII
conde de Puñoenrostro.
El condado hace referencia al lugar de Puñoenrostro, al sur de la comunidad
de Madrid. El condado es título nobiliario español de carácter hereditario
concedido por Juana I de Castilla el 24 de abril de 1523 a Juan Ar ias Dávila, IV
señor de Puñonrostro, en recompensa a sus servicios como capitán en la Guerra
de las Comunidades de Castilla en favor de Carlos I de España.
La convicción de que conocer el pasado es imprescindible para entender el
presente y prevenir el futuro no parece que se traduzca, en la práctica, en una
preocupación por que la Historia que nos creemos y que enseñamos se aproxime
más a la verdad. Se investiga, se amplía cuantitativamente la información .
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Guía para el lector
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–
GENEALOGÍA
Libros de Familias e Investigaciones Genealógicas en Nicaragua por
Faustino Sáenz . Los estudios genealógicos, lejos de constituir un delito de lesa
democracia, forman parte de las ciencias auxiliares de la Historia. En Nicaragua
abundan, pero a nivel de afición y, en su mayoría, permanecen inéditos. A
continuación, ofrezco una bibliografía anotada de los más conocidos. Para evitar
repeticiones, abrevio tres de las revistas citadas: BNBD (Boletín Nicaragüense de
Bibliografía y Documentación); RAGHN (Revista de la Academia de Geo grafía e
Historia de Nicaragua) y RCPC (Revista Conservadora del Pensamiento
Centroamericano), las tres de Managua. Sin afán publicitario y simplemente por
hobbie e interés familiar, han elaborado genealogías en Nicaragua Gerardo
Kenneth Lacayo y Norman J. Caldera Cardenal. En Miami existe un “Instituto de
Genealogía e Historia de Nicaragua” que ha promovido trabajos, aun inéditos, o
escasamente difundidos, como los de su miembro fundador Sergio A. Zeledón
(sobre su familia, naturalmente, en Nicaragua y Cos ta Rica; y los descendientes
del jefe miskito Carlos Antonio de Castilla Briton), Víctor Gabuardi Lacayo (otro
miembro fundador, sobre las familias Argüello, Lacayo y Sacasa) y Flavio Herrera
Montealegre (sobre “Los Montealegre en Nicaragua y Centroamérica ”).
BIBLIOGRAFÍA
UNIVERSALES
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Ciencias Naturales
© Guillermo Bendaña G. – [email protected]
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CIENCIAS NATURALES
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La selva tropical caribeña agoniza día a día en Nicaragua
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PROMESAS DE REFORESTACIÓN
Ya en 2015, el gobierno a través del Ministerio del Ambiente y los Recursos
Naturales (Marena) admitía que en una década (2005-2015) se habían perdido
más de un millón de hectáreas de bosques en Nicaragua. En octubre de 2019, el
gobierno de Ortega anunció que invertiría 110 millones de dólares para reforestar
Bosawás (noreste), la reserva de Indio Maíz (sur), los bosques de pinares y el
Corredor Seco, estos últimos en el noroeste, mediante el denominado proyecto
BIO Clima, apoyado por varios gobiernos y organismos internacionales. Sin
embargo, a un año de aquel anuncio, las autoridades no han actualizado
información sobre el programa.
Según ambientalistas, las áreas protegidas de Bosawás e Indio Maíz han
sido paradójicamente las más afectadas por la deforestación en Nicaragua.
Lottie Cunningham, defensora de derechos humanos y recién galardonada
con el Nobel Alternativo de la fundación sueca Right Livelihood Award, id entifica
tres grandes causas del dramático deterioro ambiental en el Caribe: la minería, la
ganadería y la tala. Estas actividades "han devastado el bosque", se lamenta.
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La selva tropical caribeña agoniza día a día en Nicaragua
RÍOS ENVENENADOS
Además de la tala indiscriminada, las concesiones mineras y la invasión de
las tierras indígenas, también la minería artesanal propicia la contaminación de
los principales ríos de la Costa Caribe.
"Casi todos los ríos están envenenados. El río Waspuk, el Coco y el Wawa
están contaminados con mercurio. El río Bambana tiene cianuro. En el Caribe es
más facil encontrar una botella con mercurio que un litro de leche", exclama
Cunningham, tras criticar la inactividad del Estado ante esta situación.
Según la activista, desde las alcaldías municipales san dinistas se promueve
la explotación sin control de los recursos naturales con indulgencias fiscales,
mientras el gobierno central ofrece facilidades de inversión a empresas
transnacionales de España, Canadá, Reino Unido y Australia, "irrespetando la
autonomía de la Costa Caribe y la propiedad comunal, invadiendo reservas y
desplazando a la población indígena que ahora ya no puede cazar, sembrar ni
hacer uso de sus territorios".
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
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1. INTRODUCCIÓN
Entre los problemas modernos que enfrenta la comunidad global
actualmente, el cambio climático se considera uno de los más importantes debido
a su amenaza tanto para la naturaleza como para los seres humanos. Se cree que
el cambio climático es el resultado de las emisiones antropogénicas de gases de
efecto invernadero y, por lo tanto, se están tomando medidas preliminares para
mitigar sus efectos nocivos. La mayoría de los escenarios indican que las personas
en países en desarrollo o en áreas pobres son más vulnerables a los impactos y
menos capaces de adaptarse a los cambios producidos por el cambio climático
(IPCC, 2007). Al respecto, el Banco Mundial (2009) informó que aproximadamente
el 75-80% del daño potencial del cambio climático lo sufrirán los países en
desarrollo. A pesar de esto, la mayor parte de la información y el conocimiento
acumulado se ha explorado en países desarrollados. La mayoría de los estudios
se centraron en la ciencia y los impactos del cambio climático, aunque también
se han realizado varios estudios sobre las percepciones y el conocimiento público
de este fenómeno (p. Ej., Kempton, 1991; Leiserowitz, Smith & Marlon, 2010;
Semenza et al., 2008 ). Para resistir mejor y prevenir los impactos del cambio
climático en los países en desarrollo, necesitamos más información sobre la
comprensión individual y colectiva del problema.
Es probable que Centroamérica se vea muy afectada por el cambio climático
global en el futuro. Los patrones climáticos cambiantes afectarán la biodiversidad,
la composición y la resiliencia de los ecosistemas, la salud pública y los medios
de vida económicos. Por ejemplo, es probable que la seguridad alimentaria en
América Latina tropical se vea comprometida por la disminución de la
productividad de cultivos y ganado clave (IPCC, 2007). Como países vecinos de
Centroamérica, se espera que Costa Rica y Nicaragua se vean igualmente
influenciados por el cambio climático (europAid, 2009). Sin embargo, sin tener en
cuenta la proximidad geográfica, estas dos naciones tienen antecedentes muy
diferentes. Si bien el modelo de desarrollo político, socioeconómico y ambiental
de Costa Rica le ha permitido emerger como una de las economías más fuertes y
estables de las Américas, Nicaragua sigue siendo uno de los países más pobres
de la región, lidiando con la frecuente inestabilidad gubernamental, carencia de
infraestructura básica y pobreza generalizada. Esto puede conducir a variaciones
en las percepciones de las personas sobre el cambio climático global.
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2. CONTEXTO TEÓRICO
2.1. La importancia del conocimiento público sobre el cambio
climático
Es importante analizar el conocimiento público del cambio climático porque
influye en la acción individual y la política gubernamental (Leiserowitz, 2006). Las
estrategias de adaptación destinadas a prepararse y responder a los efectos del
cambio climático son paliativas pero necesarias dada la situación actual. Por otro
lado, las estrategias de mitigación están enfocadas a reducir la cantidad de gases
de efecto invernadero (GEI) de la atmósfera para reducir sus efectos a corto y
largo plazo. Aunque se ha sugerido firmemente una acción rápida y
económicamente viable (IPCC, 2007; Stern, 2007), parece haber numerosas
barreras técnicas, políticas, institucionales y psicológicas.
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
Parte de la razón por la que esto ocurre con problemas globales c omo el
cambio climático, se basa en la idea de que las personas generalmente evitan
tareas en las que creen que no pueden tener éxito. Expresado en términos
psicológicos, las personas a veces no actúan porque perciben que tienen poco
control conductual sobre el resultado (Bonniface y Henley, 2008; Bandura,
1986). Por otro lado, los individuos pueden aprovechar los bienes públicos sin
contribuir suficientemente a su creación, un problema conocido como el 'efecto
de aprovechamiento gratuito'. Dado este problema, los economistas tienden a ser
escépticos con respecto al comportamiento altruista porque los individuos
egoístas pueden competir con los altruistas aprovechando su generosidad. Estos
efectos negativos podrían minimizarse mediante la creación de oportun idades
para la acción individual en múltiples áreas de la actividad diaria, como el
transporte, el reciclaje, el consumo de energía, el voluntariado o incluso pagando
más por productos neutros en carbono o impuestos sobre el carbono. Sin
embargo, autores como Gowdy (2008) argumentaron que las políticas exitosas
deben considerar más que solo el modelo de decisión racional de los individuos,
y el castigo de los oportunistas es primordial para la cooperación social.
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
pronosticaron una pérdida del 10% en la producción de maíz para 2055 en los
países de América Latina y África debido al aumento de la temperatura o al cambio
de las precipitaciones, lo que resultaría en una pérdida de $ 2 mil millones cada
año. Además, el Banco Mundial (2009) predice que 77 millones de personas
estarán muy amenazadas por el cambio climático en América Latina y el Caribe
para 2020.
A pesar de las similitudes que comparten Costa Rica y Nicaragua en
términos de impactos esperados del cambio climático, ambos países difieren
significativamente en sus modelos históricos sociopolíticos, económicos e
institucionales. Desde la época del reformismo social en la década de 1940, Costa
Rica implementó un sistema de seguridad social, estableció un sistema de
educación y salud universal y abolió el ejército, lo que le permitió disfrutar de un
período prolongado de estabilidad social y política. Económicamente, ambos
países solían depender principalmente de la exportación de productos agrícolas
(es decir, café, banano, caña de azúcar, tabaco, algodón); sin embargo, desde
principios de la década de los ochenta Costa Rica ha implementado una serie de
políticas neoliberales dando como resultado un modelo económico que se
caracteriza por una fuerte participación de industrias no tradicionales como el
ecoturismo, alta tecnología, servicios bancarios, entre otros. Hoy Costa Rica es
considerada una de las democracias más antiguas de las Américas, con altos
niveles de educación y salud. En contraste, Nicaragua desde su independencia
hace más de dos siglos, ha estado sufriendo inestabilidad socioeconómica y
política, principalmente causada por guerras civiles, invasiones militar es,
frecuentes disturbios políticos y desastres naturales. Después de que la revolución
sandinista derrocara cuatro décadas de dictadura, allá por 1979, los líderes
intentaron establecer una nación socialista democrática; sin embargo, una vez
más se vio inmerso en una guerra civil durante los años ochenta. A pesar del
cambio a principios de la década de 1990 hacia un modelo económico más
neoliberal, los líderes políticos emergentes se vieron implicados en importantes
escándalos financieros. Hoy, los líderes sandinistas están de vuelta en el poder
con una nación polarizada y un futuro incierto. Una historia tan larga de eventos
ha dado como resultado que Nicaragua se ubique como la segunda nación más
pobre de las Américas después de Haití, con bajos indicador es económicos y
sociales (ver Tabla 1 ).
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Revista de Temas Nicaragüenses
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3. ENFOQUE METODOLÓGICO
Se utilizó una encuesta escrita para recolectar la información analizada en
este estudio. Los encuestados en las áreas públicas (p. Ej., Ciudad, plazas,
mercados) seleccionaron aleatoriamente a los encuestados adultos en las
ciudades. A los encuestados se les entregó un portapapeles con el cuestionario y
fue respondido individualmente a su propio ritmo. Se proporcionó un
consentimiento informado al comienzo del cuestionario para garantizar a los
encuestados su anonimato y describir cómo se pretendía utilizar los datos en el
futuro. Se utilizaron un total de 1.047 encuestas en el análisis final (se
descartaron 44 encuestas debido a información incompleta probablemente debido
a la falta de cooperación o distracción). Desde octubre de 2008 hasta mayo de
2010, se recopilaron datos en áreas urbanas de Costa Rica y Nicaragua. Se
recolectaron un total de 488 cuestionarios en Costa Rica, en las ciudades de San
José, Alajuela, Atenas, Heredia y Jacó. En Nicaragua se recolectaron 559
cuestionarios en las ciudades de Managua, Granada, León y Masaya. Las
preguntas de la encuesta abordaron el nivel de familiaridad con el cambio
climático, las principales causas e impactos percibidos y las entidades
responsables de abordar el problema. A pesar del nivel educativo, otras variables
demográficas fueron muy similares entre los grupos muestreados (ver Tabla
2 ). Una vez codificados los datos, otros dos codificadores los auditaron para
minimizar los errores de transcripción. Con la ayuda del software estadístico JMP
Pro10, utilicé regresiones logísticas para evaluar el nivel de familiaridad entre lo s
dos países, controlando las variaciones demográficas; También realicé análisis de
contingencia y otros análisis no paramétricos.
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
4. RESULTADOS
En general, cuando las poblaciones urbanas de ambos países se compararon
en su nivel de "familiaridad con el cambio climático", hay evidencia de una
diferencia significativa (χ 2 = 74,97, gl = 4, valor de p = 0,001). Alrededor del
67% de los costarricenses estaban familiarizados con el término, otro 16,76%
indicó que no estaba familiarizado ni desconocido, y solo el 16,2% señaló que
tenía poca familiaridad con el concepto de cambio climático. En el caso de los
nicaragüenses, alrededor del 9% no declaró ni familiar ni desconocido, y solo
alrededor de la mitad del total de encuestados (52,68%) e stuvo de acuerdo en
estar familiarizado con el término. Además, cerca del doble de nicaragüenses en
comparación con costarricenses, indicó un menor acuerdo con la afirmación "Estoy
familiarizado con el concepto de cambio climático". Los resultados específicos del
análisis contingente para cada una de las variables demográficas se pueden ver
en el Apéndice 1 .
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
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Revista de Temas Nicaragüenses
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5. Discusión
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
gubernamentales y privadas. En tercer lugar, Costa Rica apoya una intensa red de
investigación ambiental nacional e internacional, lo que le permite ser un
participante activo en las negociaciones ambientales
internacionales. Específicamente para el cambio climático, Costa Rica ha
desarrollado una estrategia nacional sobre cambio climático y ha sido una de las
primeras naciones en declarar su interés en convertirse en carbono neutral (ENCC,
2010).
Además del concepto general de cambio climático, se examinó a los
encuestados sobre su nivel de familiaridad con el término más profundo "huella
de carbono". Si bien este podría ser un concepto de conciencia razonable por
parte de los ciudadanos de los países desarrollados, no se esperaría que este sea
el caso en Centroamérica. Como también se planteó la hipótesis, los encuestados
en general estaban menos familiarizados con el concepto antes mencionad o. De
hecho, solo alrededor del 27% de todos los encuestados se consideraba
familiarizado con el término 'huella de carbono' y alrededor del 60% se declaraba
desconocido. Aunque uno no tiene un punto para comparar con poblaciones de
países desarrollados, uno esperaría que esta familiaridad sea mayor dada la mayor
accesibilidad potencial a la información, ya sea a través de la educación formal o
los medios de comunicación. En los EE. UU., Por ejemplo, la Comisión Federal de
Comercio ha estado actualizando recientemente sus pautas para el uso de
afirmaciones de marketing ambiental para agregar conceptos como "huella de
carbono", dado su amplio uso en el discurso oral y escrito. Varias empresas,
incluidas cadenas de supermercados como Tesco en el Reino Unido, ya incluyen
etiquetas en sus productos para informar a los consumidores sobre la huella de
carbono del producto. Desafortunadamente, y a pesar de la mayor interconexión
entre países a través de la globalización, existen mínimos esfuerzos en esta
dirección enfocados hacia los ciudadanos de las economías en desarrollo.
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
Según Mitchell y Hulme (2000), países como Costa Rica y Nicaragua tienen
mucho en juego con el cambio climático. La vulnerabilidad de Costa Rica es de
1.900 dólares per cápita por grado de calentamiento y la vulnerabilidad de
Nicaragua es de 700 dólares per cápita por grado de calentamiento; esto
representa aproximadamente el 17,5 y el 25% de su PIB nacional per cápita,
respectivamente. A pesar de esta magnitud, el cambio climático sigue siendo una
preocupación nacional baja para los encuestados de ambos países, que lo
clasificaron en tercer lugar y significativamente más bajo en comparación con la
pobreza y la seguridad social. Dos tercios de los nicaragüenses señalaron la
pobreza como su tema de mayor preocupación, que se atribuye al bajo ingreso
per cápita y al hecho de que cerca del 50% de la población sufre de
subempleo. En el caso de Costa Rica, la seguridad social se ubicó como el tema
de preocupación número uno, lo que en realidad es consistente con los resultados
de las últimas encuestas públicas nacionales de opinión pública (2009 y 2010) en
las que la seguridad social se ubicó como el tema número uno de mayor
preocupación, incluso por encima de la economía (pobreza ). Si bien ambos
gobiernos enfrentan una enorme deuda nacional (42 y 63% del PIB de Costa Rica
y Nicaragua en 2009 según el World Factbook de la CIA), la deuda ha influido de
manera diferente en los hábitos de gasto del gobierno. Con el tiempo, el gasto en
programas sociales ha disminuido en Costa Rica con el fin de reducir la alta deuda
sostenida (Myers, 2001), mientras que el gobierno de Nicaragua nunca ha
invertido tanto en sus programas sociales. En consecuencia, los ciudadanos
costarricenses tal vez estén más alarmados por tales recortes y, por lo tanto,
perciban estos cambios como un tema más urgente. A pesar de los compromisos
para involucrar a empresas locales y agencias gubernamentales en el objetivo de
convertirse en carbono neutral para 2021, se espera que las fuentes de
financiamiento más importantes de Costa Rica provengan de negociaciones
internacionales como REDD + o canjes de deuda por naturaleza. Esto es
congruente con las opiniones de los encuestados, que indicaron que los
organismos internacionales, los gobiernos de los países desarrollados y las
empresas son los máximos responsables de las soluciones de los impactos del
cambio climático.
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6. CONCLUSIONES
Los datos analizados apoyan que los costarricenses urbanos están más
familiarizados con los conceptos de "cambio climático" y "huella de carbono" en
comparación con sus contrapartes en Nicaragua; aunque la "huella de carbono"
era ajena a la mayoría de los encuestados. Debe tenerse en cuenta, sin embargo,
que incluso en las naciones desarrolladas donde la conciencia de los problemas
ambientales es generalmente más alta, la conciencia del cambio climático no es
omnipresente ni indiscutible (Browne 2004; Leiserowitz, Smith & Marlon,
2010). Además, llegué a la conclusión de que en ambos países se priorizaban las
cuestiones sociales sobre las preocupaciones sobre el cambio climático. Si bien
Costa Rica tiene una historia socioeconómica y ambiental más progresista que
Nicaragua, ambos necesitan una mayor conciencia sobre el cambio climático,
especialmente porque los recursos políticos y económicos de estas naciones en
desarrollo pueden no ser adecuados para las dificultades inminentes que
probablemente cause el cambio climático. A pesar de los esfuerzos que ambos
países podrían hacer para abordar los impactos del cambio climático, las políticas
nacionales deben partir de una comprensión pública de este problema y sus
complejidades. Este artículo proporciona una contribución en esta dirección. La
investigación futura debe tener como objetivo evaluar los aspectos de actitud y
comportamiento de las personas con respecto a la autoeficacia o las normas
sociales para informar de manera más adecuada las estrategias de políticas de
mitigación y adaptación.
7. Agradecimientos
Me gustaría agradecer a todos los estudiantes del Centro de Estudios de
Desarrollo Sostenible de la escuela de estudios de campo (SFS) desde el otoño de
2008 hasta la primavera de 2010 que colaboraron en el proceso de recopilación
de datos. Además, me gustaría agradecer a Amara Lauren, Rosy Cohane-Mann y
los revisores anónimos por sus perspicaces comentarios y también por corregir el
manuscrito. Agradezco el apoyo financiero y logístico clave proporcionado por el
Centro de Estudios de Desarrollo Sostenible de la escuela de estudios de campo
(SFS) en Atenas, Costa Rica.
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Conocimiento sobre cambio climático en poblaciones ur banas de Costa Rica y
Nicaragua
Referencias
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planificado. Comportamiento organizacional y procesos de decisión
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una teoría cognitiva social. Englewood Cliffs, Nueva Jersey, Prentice-
Hall. [ Enlaces ]
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colectivas de eficacia y comportamiento ambiental. Revista australiana de
cuestiones sociales, 43 (3), 345-360.
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calentamiento global: Estados Unidos y perspectivas
internacionales. Investigación climática, 11,75-84.
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el cambio climático global ? Comprensión pública de la ciencia, 9 (3), 205-
218. [ Enlaces ]
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gente sobre el cambio climático ?. Análisis de riesgo, 14 (6), 959-970.
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sistema de parques nacionales en Costa Rica, Biología de la conservación, 7 (2),
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32. [ Enlaces ]
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una visión general del riesgo. Documento de trabajo del Banco Interamericano de
Desarrollo34. Disponible
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Costa Rica. Austin, Texas: Prensa de la Universidad de Texas. [ Enlaces ]
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APENDICES
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COSTA CARIBE
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COSTA CARIBE
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Permafrost: La víctima silenciosa del cambio climático
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¿Qué es el permafrost?
De la manera más sencilla, el permafrost es el suelo congelado. Más
detalladamente es una capa de subsuelo de la corteza terrestre que se encuentra
congelada de manera permanente, de esa característica deriva su nombre. Se
encuentra bajo una franja más delgada compuesta de vegetación y suelo a la que
se denomina "capa activa", que se congela cuando tiene nieve o hielo encima y
se descongela cuando se eleva la temperatura. Esta capa protege al permafrost y
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tiene una composición muy variada: tierra, rocas, arena y materia orgánica
proveniente de restos de plantas y animales, todo ello formando una matriz que
se encuentra unida por el hielo.
Es en esos restos de materiales orgánicos donde está capturado el carbono
que, congelado bajo tierra es inofensivo, pero de ser liberado en vastas cantidades
podría convertirse en una de las principales fuentes de contaminación del planeta.
Cualquier capa del subsuelo, independiente de sus características, que
permanezca congelada al menos dos años (bajo el punto de congelación del agua
de 0ºC) ya es considerada técnicamente permafrost. Pero existen grandes
extensiones mucho más antiguas que se crearon durante las diferentes eras de
hielo y tienen cientos de miles de años. Este permafrost es el más grueso y
profundo y puede llegar a extenderse hasta 1.500 metros bajo la superficie. En
cambio, el permafrost más reciente suele tener apenas unos centímetros de
profundidad.
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Permafrost: La víctima silenciosa del cambio climático
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b) Posee una capa activa, más superficial, y otra inactiva, más profunda (foto arriba).
La capa activa es variable en profundidad: entre 30 a 200 cm.
c) La capa activa se derrite en el verano y se congela en invierno. En ella se desarrolla
la vida vegetal dependiendo de la profundidad de penetración de las raíces y del
abastecimiento de agua. Debido a ello se observan diferentes paisajes en su
superficie: regiones de tundra, bosques boreales, taigas o solamente superficies
rocosas.
d) Mientras que la capa inactiva es la que permanece congelada y puede llegar hasta
1.500 m de profundidad. Este efecto de congelación puede generar, a lo largo de
miles de años, cambios sobre la superficie de la tierra, asociados a la contracción
y dilatación del suelo por las variaciones en temperatura.
e) El hielo que posee el permafrost actúa como un material cementante, haciendo
que los componentes del suelo permanezcan juntos, por lo que su derretimiento
genera desprendimientos o derrumbes del terreno y hasta hundimientos.
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2 La Edad de Hielo más reciente se inició hace 110,000 años y terminó hace cerca de 10,000 años .
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Optimista
El profesor Julian Murton, especialista en Ciencia del Permafrost
(Universidad de Sussex, Inglaterra), ha estudiado el descongelamiento del
permafrost como geólogo durante 30 años y cree que este proceso es reversible,
ejemplificándolo de la siguiente manera: "Cuando el permafrost se descongela,
muchas veces se forman depresiones y el permafrost cae por una ladera y es
enterrado por sedimentos. Es muy común que estas depresiones se estabilicen
después de un tiempo y crezca vegetación por encima, haciendo que el permafrost
ya no esté expuesto" (pero si el permafrost cae al océano no ocurre lo aseverado
por Murton). El mismo profesor Murton también resalta que el permafrost más
antiguo y más profundo de la Tierra ya ha sobrevivido a períodos aún más
calurosos que el actual. "Ese permafrost grueso, viejo y helado seguirá allí en 100
años, en 500 años y seguramente más allá", pronostica Murton (BBC).
En cuanto al extenso derretimiento del permafrost superficial, para Murton
lo más apremiante no es su efecto medioambiental, sino su impacto sobre la vida
de los millones de personas que habitan en esas áreas. "Me preocupa más el
efecto sobre la ingeniería, porque estas comunidades han construido sus casas y
sus caminos sobre permafrost y el descongelamiento de estas tierras está
generando todo tipo de problemas" dijo (BBC).
Bibliografía
BBC. 2020. Qué es el permafrost y por qué podría representar una de las amenazas más grandes
para nuestra atmósfera. 8 p.
Fundación We Are Water (2020) El deshielo del permafrost: la amenaza del fango prehistórico.
IAWA
NRDC (Consejo de Defensa de los Rec. Naturales). 2018. Permafrost: todo lo que necesitas
saber. 8 p.
Struzik, E. 2021. Cómo el deshielo del permafrost está comenzando a transformar el Ártico.
Publicado en la Escuela de Medio Ambiente de Yale U. 10 p. ■
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Mientras que las áreas con arrecifes de coral reciben mucha atención de
parte de los científicos, las bahías y lagunas tropicales han sido virtualmente
ignoradas en los países en desarrollo. Esto se debe en gran medida a que las
interacciones dinámicas entre procesos físico-químicos y la productividad
biológica son complejas y requieren estudios interdisciplinarios a largo plazo para
los cuales los países en desarrollo carecen de los recursos económicos y la
experiencia científica.
Los sistemas costeros son también más propicios para la pesca ar tesanal,
la cual muchos gobiernos tienden a ignorar porque parece menos provechosa que
la pesca industrial en mar abierto. Sin embargo, la relación costo-beneficio para
las prácticas de pesca artesanal en otras partes del mundo es impresionante. Por
ejemplo, la FAO (1984) estima que las pesquerías a pequeña escala usan la quinta
parte del capital, la quinta parte de combustible por tonelada descargada y crean
100 veces más puestos de trabajo que pesquerías a larga escala con inversiones
similares. Como resultado, las pesquerías artesanales pueden jugar un rol
importante en la recuperación económica de la costa. Actualmente, los pescadores
artesanales son responsables del 95 por ciento de la captura de peces, 50 por
ciento de langosta y 15 por ciento de camarones en las aguas costeras
nicaragüenses, aunque sólo reciben una fracción de la asistencia que el gobierno
dedica a la flota industrial.
LA CAPA LIMITE COSTERA
Procediendo hacia el Mar Caribe, uno se encuentra con la capa límite
costera (CLC). Esta surge cuando ríos masivos de agua dulce vuelcan sus cargas
de sedimentos suspendidos ricos en nutrientes en las aguas azules transparentes
del Caribe. Conforme las aguas de los ríos se desplazan hacia el mar, su avance
es retardado por una combinación de fuertes vientos alisios (permanentemente
soplando del este noreste a 7-10 metros por segundo) y la Corriente del Caribe
(desplazándose hacia el oeste a lo largo del Caribe, a 0.5-1.0 metros por segundo)
que empujan las aguas túrbidas contra la costa (Figura 3).
Detenida por la fricción en el fondo, vientos marinos y corrientes del
océano, el agua dulce de los ríos cargada de sedimentos que se encuentra con
aguas marinas transparentes y más densas establece un proceso dinámico de
mezcla que resulta en una serie de gradientes de densidad. Estos gradientes
inician movimientos de corriente hacia el sur de manera paralela a la costa.
Los gradientes de densidad (salinidad y turbidez) son el factor más
importante responsable por el movimiento de la CLC y son responsables de
aproximadamente el 80 por ciento de su momento (Murray et al. 1982; Roberts y
Murray 1983; Murray y Young 1985; Roberts 1987). Las amplitudes de las mareas
son pequeñas, variando entre 5 y 8 centímetros (Murray et al. 1982; Roberts y
Murray 1983) y tienen poco efecto en la CLC.
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CONCLUSIONES
La extensa y aislada Costa Caribe de Nicaragua es uno de los pocos
medioambientes marinos no-desarrollados que quedan en la región caribeña. La
falta de carreteras, diez años de guerra y una ausencia de mercados externos
para productos del mar, han contribuido indirectamente a la conservación de los
medioambientes marinos en la zona. Los factores económicos y sociales que han
conducido indirectamente a la conservación y aislamiento de la Costa del resto
del país, han desalentado también los estudios científicos de los procesos
naturales costeros, que son de gran necesidad —estudios que pueden hacer crecer
los rendimientos pesqueros y, simultáneamente, contribuir en la dirección de un
uso racional y sostenible de los abundantes recursos naturales.
La Costa se caracteriza por tres principales zonas geográficas: 1) humedales
cercanos a la costa, ricos en nutrientes, incluyendo las lagunas y los estuarios; 2)
la turbia capa límite costera, que corre paralela a la costa; y 3) los cayos de coral,
praderas de pastos marinos y los extensos fondos carbonados biogénicos (de
origen biológico), que caracterizan gran parte de la plataforma nicaragüense.
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Aunque varias áreas parecen estar bajo presión por razones desconocidas
(e. g., la Bahía de Bluefields y los Cayos Perlas), la mayor parte de estas zonas
han sido relativamente muy poco afectadas por las actividades humanas. Las
principales amenazas a los medioambientes cercanos a la orilla son debidas a la
sobreexplotación de la pesca y la creciente erosión ocasionada por la
deforestación, que están dañando los viveros de que dependen los rec ursos
marinos para cumplir su ciclo de vida.
Las distintas zonas ofrecen tres tipos de pesquerías, que son
insuficientemente aprovechadas por los pescadores y poco comprendidas por los
científicos. Las lagunas cercanas a la orilla, los estuarios y la CLC s irven de
viveros, en los que especies de mar adentro pasan parte de su ciclo de vida. Esas
especies se caracterizan por una diversidad relativamente baja, alta abundancia
numérica y una rápida tasa de crecimiento. La biomasa se está conservando por
la abundancia numérica con una duración de vida muy corta.
Por su parte, los medioambientes de mar adentro, como los corales
formadores de arrecifes, ocurren en aguas pobres en nutrientes. Los nutrientes
son reciclados con eficiencia dentro del sistema, y los pec es e invertebrados
típicos asociados exhiben tasas de crecimiento relativamente bajas, alta
diversidad de especies y relativamente pocos individuos de cada especie. En este
sistema, la biomasa se está conservando en peces e invertebrados grandes con
una duración de vida relativamente larga.
Para propósitos de manejo, las tres zonas geográficas deben ser tratadas
como sistemas ecológicos distintos y, sin embargo, deben ser manejadas de
manera integrada. La administración racional que asegure cosechas sosteni bles
de los recursos en estas zonas va a requerir un mejor conocimiento de los
procesos químicos, físicos y biológicos que contribuyen a la productividad de la
región. Esto va a necesitar de estrategias de manejo específicas a los ecosistemas,
que ayuden a explicar las frecuencias de renovación de la población y las tasas
de crecimiento de una amplia gama de especies.
En resumen, el manejo apropiado va a requerir una mejor comprensión de
las relaciones ecológicas que los ligan. Adicionalmente, la diversific ación de las
pesquerías para incluir recursos no tradicionales va a disminuir la presión de los
esfuerzos pesqueros, diseñados de manera estrecha-Mente focalizada a la captura
de sólo algunas especies.
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Los Sukia y la medicina tradicional en la Costa Caribe
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Los Miskitu 3 Los son uno de los tres grupos indígenas del oriente de
Nicaragua. Los usos por parte de este grupo de 353 especies de plantas
comprendidas en 262 géneros y 89
familias fueron documentados durante
dos años de trabajo de campo. Están
incluidas 310 especies medicinales, 95
especies de plantas alimenticias, y 127
especies empleadas para construcción y
artesanías, colorantes y taninos, leña y
forraje. Solamente 14 de 50 especies
alimenticias domesticadas son nativas
del neotrópico y sólo tres se originan en
Mesoamérica. La mayoría de las especies
de plantas empleadas para otros
propósitos que alimento y medicina son
especies silvestres nativas del este de
Nicaragua. Las plantas medicinales
miskitus son usadas para tratar más de
50 padecimientos humanos. La mayoría
(80%) de las plantas medicinales son
nativas del Oriente Nicaragüense, y dos
tercios de ellas tienen algún principio
bioactivo. Muchas de las plantas
medicinales son hierbas (40%) o árboles
(30%), y las hojas son la parte de la
planta usada con mayor frecuencia. Los
remedios de origen vegetal son
preparados la mayoría de las veces como
decocciones que son administradas oralmente.
3
Felixg Coe y Gregory J. Anderson, Ethnobotany of the Miskitu of Eastern Ni caragua
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Los Sukia y la medicina tradicional en la Costa Caribe
© Felixg Coe y Gregory J. Anderson – [email protected]
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Los Sukia y la medicina tradicional en la Costa Caribe
© Felixg Coe y Gregory J. Anderson – [email protected]
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Ensayos
© José Luís Velázquez Pereira – [email protected]
ENSAYOS
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Antecedentes
Durante el período colonial en Nicaragua, como en la mayoría de los países
latinoamericanos donde la Conquista se dio bajo el marco de la "empresa señorial"
que caracterizó la dominación española, la extracción del excedente económico
generado por la mano de obra indígena se realizó a través del establecimiento de
relaciones serviles, es decir: la Encomienda, los Mandamientos y los Ser vicios
Personales Forzosos. El excedente generado bajo estas relaciones de producción
era enviado entonces hacia la metrópoli española (en el caso de los tributos y
minerales preciosos) o tenía la función de servir de apoyo logístico a otras
empresas de conquista y colonización (en el caso de los cueros, sebos, madera,
maíz y cacao, enviados al Perú, Ecuador y Chile). 4
Posteriormente, en el período post-independiente, la entera unidad que
constituía la Capitanía General de Guatemala (de la cual Nicaragua e ra una
Provincia), reflejaba el estado crítico que la disolución de los vínculos coloniales
trajo consigo a los países latinoamericanos.
El rompimiento de esa sujeción afectó profundamente las bases
estructurales de la sociedad, alterando la vida económica normal de la región, y
propiciando al mismo tiempo un largo proceso de redefinición
Trataremos a continuación de los asuntos relacionados con los antecedentes
y la evolución de las relaciones de producción en la formación social objeto de
nuestro estudio.
Posteriormente, en el período post-independiente, la entera unidad que
constituía la Capitanía General de Guatemala (de la cual Nicaragua era una
Provincia), reflejaba el estado crítico que la disolución de los vínculos coloniales
trajo consigo a los países latinoamericanos.
4
Ver M.J. Malteo, Spanish Central America. (Los Ángeles: Editorial de la Universidad de
California, 1973), pp. 23-63
85
La formación de la economía agroexportadora
© José Luís Velázquez Pereira – [email protected]
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5
Halperin Donghi, Historia contemporánea de América Latina (Madrid: Alianza Editorial, 1972),
pp. 135-206.
87
La formación de la economía agroexportadora
© José Luís Velázquez Pereira – [email protected]
6
Ver N. , Las clases sociales en América Latina (Editorial UNAM, México: Siglo XXI, 1975), p. 97.
7
Al hablar de la formación de la hacienda tradici onal en Latinoamérica, y específicamente en
Centroamérica, nos referimos a los estudios hechos por MJ. MacLeot, op. cit., S. Martínez
Peláez, La patria del criollo (Guatemala: EDUCA, 1970) pp. 143 -195; M. Morner, ""La hacienda
española americana", Revisión histórica hispanoamericana (1973) Vol. 53.
8
Este período se caracterizó por tres tipos de conflictos: i) aquéllos que estuvieron motivados
por los diferentes proyectos para la unidad de América Central; II) aquéllos que aparecieron
a nivel de provincias como resultado del resquebrajamiento de la unión; III) íntimamente
ligada a la anterior, apareció en Nicaragua la guerra antifilibustera. Esta guerra se dio contra
las pretensiones expansionistas de los Estados del Sur de Estados Unidos y los intereses de
la Compañía de Tránsito que estaba tratando de tomar control sobre "la Vía del Tránsito" a
California.
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9
C. Furtado, La economía latinoamericana desde la Conquista Ibérica hasta la Revolución Cubana
(México: Siglo XXI, 1974), pp. 46-56.
10
E. Laclau, "Feudalismo y capitalismo en América Latina", Nueva Revisión Izquierdista NQ 67
(Mayo-junio 1971), pp. 33-36.
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III. En tercer lugar, la creación del mercado, que vino a constituirse con la
conversión de la pequeña producción expropiada por los nacientes grandes
propietarios en producción para el mercado, sustrayéndola de la simple
subsistencia y, por lo tanto, su conversión en otra mercancía. Al mismo tiempo
los pequeños productores expropiados pasaban a formar parte de la fuerza de
trabajo agrícola o de la manufactura artesanal. 11
A continuación trataremos estos tres puntos por separado.
11
La construcción de este esquema está basada en nuestras observaciones empíricas y ciertos
conceptos teóricos de Carlos Marx, El Capital (México: Fondo de Cultura Económica, 1971),
tres vols. Capítulos XXI-XXV. V. I. Lenín, El desarrollo del capitalismo en Rusia (Moscú:
Editorial Progreso, 1974).
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12
Paul Levy fue un ingeniero francés comisionado por el gobierno de Nicaragua para escribir
una historia y una geografía, con la intención de atraer la inmigración europea. Es el estudio
más completo sobre el período con el que estamos tratando.
Referencia: P. Levy, Notas Geográficas y Económicas de la República de Nicaragua. Reproducida
completamente en la Revista Conservadora (publicación mensual) (Managua: Editorial Artes
Gráficas) Números 59, 60, 61, 62, 63 (1965).
13
Paul Levy, op. cit. NQ 62, p. 212.
93
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14
Ibid, p. 212.
15
'bid, p. 212.
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Por todo lo anterior, concluimos que los primeros pasos hacia la formación
de la economía agroexportadora se orientaron hacia la formación de un
contingente de fuerza de trabajo capaz de dar vida a los nuevos procesos
productivos; al mismo tiempo, la escasez de fuerza de trabajo imprimiría al
proceso de formación de la economía agroexportadora en Nicaragua
características especiales, que consideraremos más adelante.
Damos a continuación algunos datos sobre la relación entre los medios de
producción y fuerza de trabajo. Haciendo nuestros cálculos en base a datos
obtenidos por Levy, para 1871 Nicaragua poseía una población de 236,000
habitantes sobre una superficie de 148,000 kilómetros cuadrados, esto arroja una
densidad de población de 11.5 habitantes por Ibid, I\P 61, pp. 118-119.kilómetro
cuadrado. El 80 por ciento de la población económicamente activa se dedicaba a
la agricultura de subsistencia, el otro 20 por ciento se ubicaba en las labores
agroexportadoras y en las artesanías. 16
La escasez de fuerza de trabajo se agudizó al incrementarse el cultivo del
café, al mismo tiempo que se hizo imperiosa la necesidad de incorporar a la
agricultura agroexportadora las tierras aptas para la producción del grano, las que
en su mayor parte se encontraban en posesión de comunidades indígenas de las
sierras del Pacifico y de la cordillera central.
Siguiendo esa tendencia, las expropiaciones de tierras se acentuaron a
partir de 1877, dando lugar a dos modalidades distintas, según la calidad de la
tierra expropiada y a la movilización de la fuerza de trabajo; ellas constituyeron
dos casos típicos:
a. En las tierras comunales aptas para el cultivo del café, la expropiación
trajo aparejada la incorporación directa de los pobladores y comuneros a la
plantación, en calidad de peones, aparceros y precaristas, que fueron ubicados
dentro de la plantación en pequeñas parcelas de subsistencia, las c uales
cultivaban reconociendo al patrón como dueño de la tierra, por lo que eran
obligados a pagar a este con su fuerza laboral. De tal modo que el aparcero estaba
atado a obligaciones de trabajo remunerado o pagado sólo parcialmente. Bajo
esas circunstancias, el uso de la tierra representaba un débito que se pagaba al
propietario mediante el trabajo personal.
b. En las tierras comunales no aptas al cultivo agroexportador, la
expropiación trajo consigo la aparición de dos situaciones:
16
Ibid No. 61, pp. 118-119
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17
Ley Agraria del 18 de abril de 1859. Ley del 15 de febrero de 1862. Ley del 27 de marzo de
1869.
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18
Paul Levy, op. cit., NQ 62, p. 215.
19
Paul Levy, op cit., NQ 62, p. 215.
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20
P. Levy escribe concerniente a los indios de Nicaragua: "La abolición de las encomiendas, de
los tributos y de la esclavitud hicieron que las empresas agrícolas tuviesen más necesidad de
ellos que antes de la independencia y los medios que se han empleado para obtener su trabajo
y hacerlos salir de su aislamiento han sido terriblemente inicuos." P. Levy, op. cit., No 60, p.
108.
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21
Reglamento de Policía del 20 de junio de 1875. Citado por J. Wheelock, Imperialismo y
dictadura (México: Siglo XXI, 1975), p. 26.
22
De acuerdo con Levy: "Mientras tanto, el productor nicaragüense se ve amenazado de varios
azotes. En primer lugar y faltándole los brazos, aumentó los precios para retenerlos, pero
entonces sus productos costaban tan caros que no podían reportarle un beneficio regular.
Fue necesario buscar otro medio, se hizo halago a las pequeñas pasiones de los mozos, se
les adelantaron sumas exorbitantes ora en dinero, ora en efectos, y en cambio para obtener
alguna garantía se promulgó una ley de agricultura que o bligaba al operario a pagar lo que
debía en días de trabajo". P. Levy, op. cit., NQ 62, p. 215.
23
"Prohibir el cultivo del plátano, del maíz y los frijoles, como no fuese en plantaciones regulares
para obligar al pequeño productor a depender de su trabajo como jornalero". P. Levy, op.
cit., p. 216.
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24
P. Levy, op. cit., 1\la 61, p. 174.
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25
" Según Levy, había 1,200,000 cabezas de ganado en Nicaragua en 1871. Levy también estimó
el ingreso por rancho ganadero en cerca del 10 por ciento de sus actividades, calculando la
producción anual para todas las haciendas del país en 120,000 cabezas. Para el mismo año,
el ingreso producido.
al país por las exportaciones de productos ganaderos representó el 8 por ciento del total. P.
Levy, op. cit., NQ 61, p. 167.
26
El tiangue o mercado indio era una institución obligatoria y cuidadosamente normada. Cada
familia indígena debía tributar para el mercado del tiangue determinada cuota de productos
agrícolas, aves, animales de caza o montería, artesanías. Según el informe del Ve edor Antolín
de Arteaga elevado al Rey de España en 1555, los indios nicaragüenses tributaban: maíz,
mantas, cera, miel, gallinas, 'e otras cosas que se vendían en la almoneda'". Sofonías
Salvatierra, Contribución a la historia de Centroamérica (Managua: T ipografía Progreso,
1936), Vol. II, pp. 161-162.
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27
"Circulaban en escasa cantidad el peso de plata español, también el sol de Perú, con la torpeza
del poco tráfico con aquellos lugares". Nicolás Buitrago, León: la Sombra de Pedrarias (León,
Nicaragua: Editorial Hospicio 1969) p 20.
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Siguiendo ese esquema, a partir de la segunda mitad del siglo XIX, se puede
encontrar un mayor grado de extensión y especialización de las actividades
artesanales y las ocupaciones de ciudad, establecimiento de talleres, así como la
sustitución gradual de la producción artesanal indígena doméstica, hilados,
vasijas, muebles, etc., por talleres típicamente urbanos. Este relativo progreso se
debió a la lenta pero persistente integración de algunos sectores productivos; a
la expansión del intercambio entre la agricultura y la pequeña producción; al
mayor desarrollo del mercado local; a la estabilización del sistema político -
administrativo del país y, en cierto grado, a la normalidad en las actividades
económicas, una vez que se atenuaron las perturbaciones producidas por más de
cuarenta años de ininterrumpidas contiendas armadas locales y por la Guerra
Nacional anti expansionista.
En el esquema sintetizado en el cuadro 2, a partir de las observaciones de
Levy, se pueden notar los lentos progresos del sector de la pequeña producción
para 1870. 28
28
"Masaya se dedica casi expulsivamente a la pequeña industria, tales como lozas, sombreros
de paja y de pita, petates, hamacas y otros tejidos de mecate y algodón, etc. Los habitantes
de Subtiava se dedican a la pequeña industria, lo mismo que en Masaya". P. Levy, op. cit.,No.
62, p 180.
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29
Aquí usamos el esquema propuesto por J. C. Garavaglia, Introducción, modos de producción
en América Latina (Buenos Aires: Siglo XXI, 1973), pp. 8 -9.
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30
Como se muestra en el cuadro 3, el principal ingreso del Estado provenía de los siguientes
impuestos: a)obligaciones de las haciendas, b) multas, c) confiscación, d) cargos legales, e)
impuestos sobre el consumo de licor y tabaco, sacrificio de ganado y el uso de explosivos.
"Las contribuciones directas no existen en Nicaragua donde se conocen sólo las contr ibuciones
indirectas. Estas son realmente exageradas y pesan sólo sobre la clase pobre". P. Levy, op.
Cit., NQ 61, pp. 166-164.
"El impuesto del tabaco y el aguardiente es recolectado por las casas de comercio, las cuales
pagan al Estado por este derecho una reducida suma". P. Levy, op. Cit., Nos 61, pp. 165.
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31
Este impuesto que el cura pude obligar a pagar a antes los tribunales es objeto de numerosos
abusos.’ P. Levy, op. Ci., pp.165
32
Garavaglia, op. cit., p. 9.
109
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33
"Las casas comerciales Ubieta, Basco y Baster ejercían su monopolio sobre el comercio
nicaragüense en base a vendedores o minoristas españoles que actuaban como agentes
subsidiarios suyos encargados de la distribución o del expendio de mercaderías extranj eras
introducidas a Nicaragua". José Coronel Urtecho o, "La familia Zavala y la política del comercio
en Centroamérica", Revista Conservadora, N" 141 -142, p. 95.
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34
Ver Levy, op. cit., No 62, p. 236.
111
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35
"En 1865 se exportaron 1,752.000 libras de algodón a un precio de 0.31 [dólares] por libra;
en cambio en 1867 solamente salieron del país 836.700 libras a un precio de 0.10 por libra
...E1 aumento de las exportaciones a partir de 1870 se debe al incremento sustancial del
precio del añil cuyo valor en 1870 lleg a a ser casi el doble del de 1867 y al incremento de las
exportaciones de oro, café y hule". Alberto Lanuza, "Comercio Exterior de Nicaragua",
Estudios Sociales Centroamericanos, NIQ 10 (San José de Costa Rica: EDUCA, 1976) p. 122.
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36
R. Quiroz Guardia, ""Desarrollo agrícola e integración económica en América Central",
(Disertación doctoral, Universidad de Wisconsin,1971), pp. 53 -54.
37
Según Levy, "Se tendrá una idea del comercio y agricultura de Granada, diciendo que arruinada
completamente en 1856, ha podido levantarse casi totalmente y formar nuevos capitales sin
haber hecho bancarrota". Levy, op. cit., NQ 62, p. 179.
38
"Pero en esos cultivos que sólo pueden hacerse con un capital regular y en los cuales debe
emplearse un mayor número de operarios es preci so establecerse cerca de un centro de
población... El primer inconveniente de este estado de cosas es el aumento del precio de las
tierras situadas cerca de las poblaciones... Sin embargo, se han visto ciertos terrenos
adjudicarse a un 100 por ciento y a u n 200 por ciento más alto precio que los demás". Levy,
op. cit., No 62, p. 212-214.
39
"Hay pocos arrendatarios y la ley sobre la materia presenta muchos vacíos, en general se paga
del 5 por ciento al 15 por ciento de interés sobre el valor supuesto de la f inca. Muchas veces
se hacen contratos a mitades, es decir, que el propietario recibe la mitad de los productos de
la quinta que administra el arrendatario". Levy, op. cit., NQ 62, p. 218.
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40
Citamos datos de 1904 porque es lo único que hay disponible.
41
Esto no significa que se dejara de producir estos productos para el consumo local. El añil que
encabezaba la lista en 1871 y durante los años sucesivos, desapareció completamente de la
lista de exportaciones a finales de los 1880 por el efecto depresivo sobre ese producto de la
invención de los colorantes sintéticos.
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42
E n el caso del algodón, la reducción de su cultivo se explica por el hecho de que su cultivo
fue introducido a Nicaragua bajo las condiciones favorables que la Guerra de Secesión en los
Estados Unidos trajo sobre la demanda de esa fibra. Cuando la guerra te rminó, estas
condiciones desaparecieron y su cultivo declinó significativamente. Véase Levy, op. cit., No
62, p. 227.
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Por otro lado, identificamos las ramas de la economía que son controlad as
por los grupos nacionales; ellas están constituidas por los procesos productivos
del café, el azúcar, el algodón y los productos pecuarios.
Tomando en cuenta esta dicotomía de la economía nicaragüense, hemos
elaborado el cuadro IO donde se puede apreciar el grado de control que tanto los
grupos nacionales como los extranjeros ejercían sobre la producción. Es
importante notar que la tendencia del período comprendido entre 1904 y 1930
arroja un saldo favorable a los grupos nacionales. En efecto, corresponde al grupo
nacional un promedio del 57.3 por ciento sobre el control de la producción,
mientras que a los grupos extranjeros corresponde el 42.6 por ciento. Estos datos
serán de vital importancia cuando examinemos la penetración del capital
extranjero, en el capítulo III de este trabajo.
Consideraremos seguidamente el asunto relacionado con la hegemonía de
la producción cafetalera.
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43
La constitución política de los Estados Unidos de América Central de 1898 estableció "Toda
persona es libre de disponer de sus propieda des sin restricción alguna". E. F. Pérez, op. cit.,
p. 21.
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44
Véase cuadro No. 14.
45
R. Quiroz Guardia, op. cit., p. 51.
46
Aquí nos referimos a la "Ley del 2 de Marzo de 1889", citada por Adolfo Altamirano, "Los
Fundadores de la República", De la Historia d e Nicaragua, (Editor: Partido Conservador de
Nicaragua, Granada, Nicaragua: Editorial Magys, 1963), p. 37.
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47
Roberto Bone, Memoria del Gobierno del Presidente Zelaya (Managua: Imprenta Nacional,
1909), p. 47.
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b. El crecimiento de la población.
En 1870, Nicaragua tenía una población de 230,000 habitantes y una
densidad poblacional de 1.5 habitantes por kilómetro cuadrado. En 1900 , la
población del país se había más que duplicado, calculándose en 500,000
habitantes; esto quiere decir que entre 1870 y 19001a población creció a un ritmo
del 3.7 por ciento anual. En 1939 el total de la población subió a 638.000
habitantes con una densidad de 4.3 habitantes por kilómetro cuadrado, aunque
la tasa de crecimiento entre 1900 y 1939 bajó a 2.7 por ciento. En consecuencia,
la tasa media del período 1870-1930 fue del 2.9 por ciento. Estos datos sobre la
población cobran interés al relacionarse con la capacidad de absorción del
sistema; en este sentido puede afirmarse que en Nicaragua se produjeron
excedentes de población hasta la década de 1940.
c. La aceleración del proceso de división social del trabajo. El desarrollo de
los dos factores enumerados produjo un impacto sin precedentes en la economía
nicaragüense. Las fuerzas productivas experimentaron, dentro de ciertas
limitaciones inherentes a las posibilidades del país, un cambio de ritmo que trajo
como consecuencia la aceleración del proceso de división social del trabajo.
Pudiera sugerirse que esto se efectuó dentro de la lógica que Cardoso y Faletto
han trazado al referirse a este punto.
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48
F. Cardoso y E. Faletto, Dependencia y Desarrollo en América Latina (México: Siglo XXI, 1973).
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49
R. Quiroz Guardia, op. cit., p. 50.
50
C. Marx, El Capital (México: Fondo de Cultura Económica, 1971), Vol. III, pp. 220, 221, 321.
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51
"Por influjos del comercio exterior siempre débil e inconstante circula ban en Nicaragua
monedas de otros países: peso de plata español, soles de Perú, pesos chilenos.
Posteriormente, a raíz del comercio y el tráfico abierto por el San Juan, para comunicar al
Este con el Oeste de los Estados Unidos, circulaban dólares y moneda fraccionaria
norteamericana". J. Wheelock, op. cit., p. 61.
52
"En 1899 se emitió una moneda de cuño nacional que se llamó el peso fuerte y se aumentó el
circulante en cinco millones". J. Wheelock, op. cit., p. 61.
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53
Este proceso fue el resultado de la apr opiación y consolidación de la propiedad inmueble. Se
crearon los registros de propiedad y las hipotecas, y otras instituciones legales similares se
establecieron al amparo de la ley.
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"Es difícil decir qué tan largo la proletarización del campesinado ha llegado
en las diferentes áreas actualmente, ya que carecemos de suficientes estudios
sobre esto, pero no hay duda de que el proceso dista mucho de haber concluido
y las condiciones semi-feudales todavía son ampliamente características del agro
latinoamericano[...)" Laclau, op . cit., pp. 29-33.
54
Véase Edelberto Torres, Interpretación de desarrollo social centroamer icano (San José, Costa
Rica: EDUCA, 1971) pp. 73-82.
133
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Como conclusión final, es preciso añadir que por medio de esta nueva
articulación de relaciones de producción, al plantador le fue ventajoso introducir
en su empresa la organización capitalista (que contribuía a su mayor eficiencia),
al mismo tiempo que conservaba aquellos atributos de las relaciones
precapitalistas que le reportaban mayores beneficios. De esta mezcla resultó un
tipo híbrido de plantación, que reúne características de la empresa capitalista y
de la hacienda o latifundio tradicional. Dentro de este marco, si bien es cierto que
en algunos casos se presentó la retribución de la fuerza de trabajo bajo formas
salariales, es necesario especificar que la recompensa salarial fue simplemente
una ficción, que no alcanzó a ocultar la naturaleza real de la relación. La utilización
de coacciones extraeconómicas para reclutar a la mano de obra y atarla a la tierra,
junto a otros mecanismos semejantes, son evidentemente formas de relación no
capitalistas. Dentro del sistema de mano de obra migratoria, la retribución salarial
no puede ser conceptualizada más que como una fuente adicional de ingresos
para la mayoría de la fuerza de trabajo, 55 que por lo general se ubicó en el área
de la economía de subsistencia; puesto que con la modernización del sistema
productivo la economía de subsistencia no se desintegró sino que se modificó,
adaptándose a las nuevas modalidades que indujo la penetración capitalista.
55
E. Torres, op. cit., pp. 75-78.
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56
"Los principales instrumentos empleados por los grupos exportadores para estabilizar los
efectos producidos por las contracciones en el precio del grano parecen haber sido
principalmente:
Reducir los costos de producción, rebajando o sustituyendo los sala rios del trabajador agrícola;
todavía por la década de los sesenta, se mantuvo la práctica latifundista de cancelar el trabajo
de recolección y otros servicios mediante bonos de estricta circulación interna con los cuales
sólo podían adquirirse ciertas mer caderías vendidas a un costo desmesurado en los
comisariatos o 'ratas'; esta práctica fue una norma general durante los años duros de la crisis
mundial, complementada con la sustitución del salario por alimentos, especies, accesorios o
arrendamientos de tierras, etc.[...]" Wheelock, op. cit., p. 30. Cuando hablamos de relaciones
capitalistas y feudales de producción, lo hacemos en este sentido:
"Entendemos por modo de producción feudal aquél en el cual: (i) el excedente económico es
producido por mano de obra compelida al trabajo mediante coacciones extraeconómicas; y
(II) el excedente económico es objeto de apropiación privada. En el modo de producción
capitalista el excedente económico es objeto de apropiación privada, pero a diferencia del
feudalismo, no existe servidumbre y la mano de obra no es obtenida por compulsiones legales
o consuetudinarias extraeconómicas, sino por la venta de la fuerza de trabajo en el mercado
laboral." Laclau, "Modos de Producción, Sistema Económicos y Población Excedente:
Aproximación Histórica a los Casos Argentino y Chileno". Revista Latinoamericana de
Sociología, No 2 (1969), pp. 283-284.
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Programas del Editor
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Antigüedades indígenas nicaragüenses
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Nueve de los once valores que integran esta emisión provenían de las
colecciones privadas de las personas siguientes:
Enrique Marín (5 y 20 centavos), Carlos Gómez A. (10
y 40 cts.), Herminio Sánchez L. (15 cts.), Miguel
Gómez A. (25 y 60 cts.), Alberto Argüello Vivas (30
cts.) y Enrique Fernández (50 cts.). Dos valores (35
cts. y 1 Córdoba); con piezas de las colecciones del
Museo Nacional de Nicaragua ( Cfr. Scott Catalogue,
Nicaragua C563-73, Indian Artifacts , 1965).
Especificaciones y primer día de circulación
Es importante mencionar que las especificaciones de esta emisión se
encuentran descritas en el contrato entre el Ministerio de Hacienda y Crédito
Público y la empresa May & Company Ltda. como representante de la firma
impresora Thomas de la Rue, de Londres. Aquí, se define que los todos los sellos
deberán tener una dimensión de 38 x 30 mm ( Cfr . LA GACETA, No. 213, pp. 2933,
Septiembre de 1964), incluyendo los márgenes del contorno a razón de 2
milímetros. Sin embargo, la emisión, retomando una resolución previa, fu e
impresa en las dimensiones de 46 x 30 milímetros.
Posteriormente, a través de otro decreto ejecutivo, se fijó el día 24 de marzo
de 1965 como primer día de circulación para todos estos sellos postales aéreos.
De la calidad de las ilustraciones
El autor es de la opinión que esta emisión postal queda, a nivel estético,
muy por debajo de las intenciones expuestas en el decreto
ejecutivo de 1963. En este, se habla de utilizar «fotos a
colores»; aspecto que hubiese sido de indudable
relevancia para juzgar la calidad de la emisión. En el
contrato de la licitación correspondiente se especifica,
textualmente, que “Estos motivos [de la emisión] … serán
suministrados por la Oficina de Control de Especies
Postales y Filatelia en transparencias fotográficas
originales para la de «Antigüedades Indígenas
Nicaragüenses» y en dibujos ad hoc para las otras dos
emisiones”.
Por el contrario, en la emisión impresa, ninguna de
las ilustraciones de las piezas presentadas puede
considerarse de alta calidad; tampoco hay ninguna clase de referencia al periodo
arqueológico al que pertenece la pieza en particular. Todo lo anterior permite, en
el mejor de los casos, formarse una idea aproximada de las cualidades de estas
«antigüedades indígenas nicaragüenses».
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Revista de Temas Nicaragüenses
No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
Referencia bibliográfica
La Gaceta – Diario Oficial, Año LXVIII, Managua, D. N., Sábado 13 de Junio
de 1964, No. 132, p. 1626. HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO. Se Editarán C$
4.200.000.00 con Sellos Aéreos con «Antigüedades Indígenas Nicaragüenses».
La Gaceta – Diario Oficial, Año LXVIII, Managua, D. N., Viernes 18 de
Septiembre de 1964, No. 213, p. 2932-2934. HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO.
Apruébanse Contratos de Licitaciones. ■
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La huerta y la cocina
© Redacción RTN – [email protected]
La Huerta y la Cocina
Dr. Schultze Jena
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Revista de Temas Nicaragüenses
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Los tomates los comemos con los alimentos, con carne, con yuca, con
verduras y con huevo. También podemos comer el plato de tomate con semillas
de ayote.
Cuando están sacas las hojas de tabaco, las enrollamos en forma de puro
y lo fumamos.
Tostamos el chile picante en el comal para molerlo. Le agregamos sal y lo
mesclamos con naranja; es un condimento delicioso. El chile ciruela es pequeño
y fuerte; se pone a secar y después se vende. El chile chiltepe es chiquito. Hay
pimienta gorda y pimienta blanca. Del chile también se hace salsa de chile.
La pencas de Maguey las atamos a un árbol y las raspamos. De estas pencas
sacamos la fibra de la que hacemos la pita que sirve para hacer matates. ■
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Cambio climático
© Redacción RTN – [email protected]
Cambio Climático
Redacción de Temas Nicaragüenses
Las lluvias y nevadas extremas ocurren con mayor frecuencia, ya que el aire
y los océanos más cálidos generan más vapor en la atmósfera. Una tormenta
"extrema" produce más precipitaciones en un evento que el 90 por ciento de las
tormentas de un año. En las últimas décadas, estos eventos se han multiplicado
en muchas áreas urbanas y rurales y se convertirán cada vez más en la norma.
Porcentaje de la superficie terrestre de EE. UU. * Donde las lluvias o
nevadas extremas de un día han aportado mucha más precipitación anual que el
promedio
Nueve de los 10 años principales (barras negras) han ocurrido desde 1996.
En 2050 habrá un 50% más de lluvias, un 10,5% más intensas
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Cambio climático
© Redacción RTN – [email protected]
CREDITOS
• Working Group I contribution to the Sixth Assessment Report of the
tergovernmental Panel on Climate Change
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El Origen del Carbón y el Señor de la Montaña
© Leonard Schultze Jena – [email protected]
Al salir el muchacho miró que el dinero que no tenía valor era buen dinero;
pero el dinero bueno se convirtió en negro carbón.
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El Origen del Carbón y el Señor de la Montaña
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Las Segovias
© José Simón Delgado - [email protected]
LAS SEGOVIAS
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Los burros de Las Segovias
© José Simón Delgado - [email protected]
Abstract: The present study was carried out in the departments of Madriz,
and Nueva Segovia, from June of 2016 to March 2017, with the aim of characterize
in general the population of Creoledonkeys ( Equus asinus ) of rural communities
in the departments of the North of Nicaragua.
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Revista de Temas Nicaragüenses
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owners at the same time. Through the evaluated variables were characterized the
population in general, and these were: age of the donkey, body condition (BC),
weight of donkey, work, physical injuries and Layer Color. The following results
were obtained: a total of 553 animals, the 66.19% corresponds to Nueva Segovia
and the 33.81% the Department of Madriz. In general, there is an a verage of
1.16donkeys by owner, the 21.52% of the males and the 36.89% of females are
within the ages of 0 to 5, this represents the 58.41% of the population under
study, whereas the mostly young population in reproductive age. Body condition
and weight of the donkeys were found within the ideal range, with an average of
2.98 of CC and 154.24 kg. The 88.79% of the population of donkeys is used for
hauling work, and only a 5.97% had injuries such as wounds caused by the misuse
of harnesses. All feed on natural pasture, none receive concentrated and not
received worming in the last year. Improper practice was identified with regard to
the Management reproductive, since they frequently made crosses between
relatives (inbreeding)which could cause the heritability of unwanted
characteristics. Layers that dominate the donkeys in the North of the country are
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Los burros de Las Segovias
© José Simón Delgado - [email protected]
grey with a 39.96% and to a lesser extent the blackcolor with a 11.93% in Nueva
Segovia donkeys are the most dense coat.
El burro (Equus asinus) como animal de trabajo, tiene una gran importancia
social y económica para las familias de zonas rurales en Nicaragua, que dependen
de él para realizarla labores agrícolas necesarias para su subsistencia,
principalmente en lugares donde la mecanización de la agricultura no existe.
Según Jarquín (2013), las especies más utilizadas en labores agrícolas son los
bueyes (64%) y equinos (34%), estos últimos incluyen caballos, burros y las
mulas.
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
@ Lilly Soto Vásquez – [email protected]
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Taller de Carpintería
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
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HISTORIA
Editor Lilly Soto Vá[email protected]
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
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57 Joan Corominas 1987, Breve Diccionario etimológico de la Lengua Castellana , Madrid, Editorial
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Corte guiado
Se usa hoja de acero templado con filo en bisel ligeramente cóncavo. Su
diseño considera una cubierta o contrahoja, y con ella evita que se levanten
astillas en la madera al afinar o pulir. Estas herramientas se pueden agrupar, a su
vez, en dos subgrupos: cepillos y desbastadores. Pueden ser de madera o
metálicos, dentro de los cuales está la garlopa para cepillar tablas largas. El
garlopín, usado para desbastar. El cepillo, para desbastar, pulir y afinar. El cepillo
curvado de base convexa, utilizado para cepillar interiores c urvos. El cepillo de
dientes, en tanto, sirve para generar asperezas en las superficies que han de
encolarse (facilita el agarre).
Desbastadores
Su diferencia con respecto a otros cepillos es tener una caja cuya base deja
libre todo el ancho de la hoja, la cual es estrecha por arriba y no lleva contrahoja,
de modo que el corte puede tener la forma de la moldura perfilada en el filo de
la hoja. Entre los desbastadores más importantes se encuentra el guillame, usado
para rebajar la madera en forma escalonada. Este rebajador es de mayor tamaño
que el anterior y de desbaste graduable. Existe también el bocel, que sirve para
realizar desbastes de mediacaña, el acanalador y el machihembrador, utilizados
para hacer canales, ranuras y guías en la madera. Estas her ramientas se usan
luego del cepillado de la madera.
Formón
Hoja de acero de 3 a 4 mm. de espesor con los bordes biselados, lo que
permite una mayor penetración en esquinas. Se usa para cortar la madera en
cualquier dirección, hacer rebajes, ajustes, encajar bisagras, y cerraduras, entre
otras acciones.
Escoplo
Es parecido al formón, se diferencia en tener una hoja más angosta y
robusta. Se usa para cortes profundos, mortajas y escopleaduras para ensamblar.
El escoplo, al igual que el formón, se afila en un ángulo de 35°, lo que permite
tener cantos fuertes para trabajos duros.
Gubia
Se caracteriza por tener una hoja curvada y vacía, permitiendo realizar
cortes en aro o círculo.
Escofina
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
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Posee una hoja plana por una cara y curvada por la otra, con dientes
gruesos y triangulares, completamente distanciados unos de otros y más gruesos
que los de la lima. Se utiliza para desbastar, en especial para perfilar curvas y
rectas, donde no se puede acceder con el cepillo.
Lima
Puede tener una fila de dientes alargados en todo el ancho de la hoja,
paralelos entre sí, dispuestos en un ángulo de 75° respecto al eje de la
herramienta o bien dos filas de dientes que se cruzan en diferentes ángulos. Su
finalidad es acabar de perfilar y quitar las asperezas dejadas por la escofina.
Lija
Es una hoja de papel fuerte, que en una de sus caras tiene adherido polvo
de vidrio, arena o esmeril fijado con cola. Existen varios grados de aspereza que
se diferencian por números, siendo el 00 la que tiene el grano más gru eso, hasta
llegar a 120, que es el grano más fino. Para su uso se envuelve un taco de madera
con medidas cómodas para la mano y sus caras planas.
Barrena
Pieza metálica labrada para facilitar la penetración con mango en forma de
"T". El movimiento giratorio permite que la pieza metálica penetre en la madera,
realizando un agujero según el diámetro de la barrena que utilicemos.
Berbiquí
Instrumento giratorio capaz para alojar una broca en la madera practicando
un orificio. Prácticamente en desuso por el uso generalizado del taladro eléctrico.
El poder de penetración depende del tipo de broca que se monte y principalmente
del radio de la manivela. Se recomienda un radio de unos 25 -30 cm.
Botador
Herramienta metálica en forma de punta para embutir las cabezas de puntas
y clavos Introducir las cabezas de los clavos en la madera para que no se vean,
golpeándolo con el martillo. La cabeza debe ser inferior a las del clavo o punta,
para que no quede marca en la madera.
Caja a ingletes
Caja de madera, plásticos o metal, con cortes efectuados en ángulos de
90º y 45º. Efectuar cortes en los ángulos indicados, consiguiéndose uniones de
gran precisión de las piezas cortadas.
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MAQUINAS ELÉCTRICAS
Taladradora
Es la máquina herramienta donde se mecanizan la mayoría de los agujeros
que se hacen a las piezas en los talleres mecánicos. Destacan estas máquinas por
la sencillez de su manejo. Tienen dos movimientos: El de rotación de la broca que
le imprime el motor eléctrico de la máquina a través de una transmisión por poleas
y engranajes, y el de avance de penetración de la broca, que puede realizarse de
forma manual sensitiva o de forma automática, si incorpora transmisión para
hacerlo.
Lijadora
es un instrumento que se utiliza para raspar la madera para que de es ta
manera quede lisa u no sea rasposa y pueda tener diferentes usos.
Sierra
Es una herramienta que sirve para cortar madera u otros materiales.
Consiste en una hoja con el filo dentado y se maneja a mano o por otras fuentes
de energía, como vapor, agua o electricidad. Según el material a cortar se utilizan
diferentes tipos de hojas de sierra. De acuerdo con la mitología griega, fue
inventada por Perdix, el nieto de Dédalo.
Sierra circular
Es una máquina para aserrar longitudinal o transversalmente maderas , y
también para seccionarlas.
Torno
(del latín tornus, y este del griego τόρνος, giro, vuelta)1 a un conjunto de
máquinas herramienta que permiten mecanizar piezas de forma geométrica de
revolución. Estas máquinas-herramienta operan haciendo girar la pieza a
mecanizar (sujeta en el cabezal o fijada entre los puntos de centraje) mientras
una o varias herramientas de corte son empujadas en un movimiento regulado de
avance contra la superficie de la pieza, cortando la viruta de acuerdo con las
condiciones tecnológicas de mecanizado adecuadas.
USOS DE LA MADERA
La madera tiene diferentes y variados usos. Se destaca su uso en el arte
sacro, en las artes marciales y en la elaboración de muebles.
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
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61 María del Pilar Peña Gómez. (2008) Manual básico de Historia del arte. Cáceres. Universidad
de Extremadura, p.42
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63 Gutiérrez S.J, Luis (2007) . Religiosidad popular, Guatemala, Fundación María Luisa
Monge de Castillo, p.10.
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para la industria forestal en Nicaragua. Principales variables de negocios para el periodo 2008-2009. – 1ª
ed. – Turrialba, C.R. : CATIE, p.1
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para la industria forestal en Nicaragua. Principales variables de negocios para el periodo 2008-2009. – 1ª
ed. – Turrialba, C.R. : CATIE, p.1
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
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productos se confecciona por encargo; solo una muy pequeña parte (3%) va a
salas de exhibición
Por otra parte, en el trabajo Caracterización de 38 talleres de carpintería
n los municipios de Santa Teresa, Jinotepe, Diriamba, San Marcos y Masatepe ,
realizado por Aishield Esther Rosales Álvarez (2006) se afirma lo siguiente:
El promedio de empleados por taller es de 5.3 personas llegando hasta un
máximo de ocupación por taller de nueve empleados. Las especies de mayor uso
en los talleres son el Cedro (28.95 %), Laurel (13.16 %) y Guanacaste (10.53 %),
siendo al mismo tiempo las de mayor preferencia incluyendo al Pochote (7.89 %)
y en menor proporción el Ñambar (2.63 %), Eucalipto (2.63 %) y Guácimo (2.63
%). Los niveles tecnológicos son bajos y los equipos rudimentarios.
El modo de producción es a través de encargos (76.31 %) y por medio de
ventas al público (23.68 %), la materia prima proviene de Puestos de venta (48.73
%) seguida de la Zona rural (39.47 %), adquirida en forma de tablones (73.68
%) y tablas (15.79 %), siendo la mano de obra principalmente familiar (55.26 %).
El aserrín (52.63 %) y ripio (26.32 %) son los principales desechos
producidos, los cuales son usados en casa (55.26 %) y muy pocas veces regalado
(47.36 %), concluyendo que no existe manejo de desechos. 70
CONCLUSIONES
Tanto los instrumentos para uso diario como para la elaboración de estos,
se requieren habilidades y el uso de herramientas manuales, eléctricas y de otro
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Revista de Temas Nicaragüenses
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tipo. Las herramientas manuales más usadas por los que ejercen el oficio de
carpintería son: a) Taladro o berbiquí, y brocas para madera; b) Garlopa; c)
Gramil; d) Gubia y formón; e) Lija; f) Regla y escuadra; g) Lápiz; h)
Transportador; i) Cepillo y j) Martillo.
El carpintero debe conocer la madera con la cual va a trabajar y en su oficio
va desarrollando habilidades y técnicas que dan paso a la formación de la
ebanistería, que es un trabajo especializado para elaborar objetos con maderas
mas finas y con concepción artística.
En Centroamérica se ha desarrollado el oficio de carpintero y ebanista los
que a través del tiempo han desarrollado numerosos objetos utilizados en la vida
diaria como son los diferentes muebles del hogar y de manera especial, la
ebanistería ha creado objetos de lujo y para agradar a los dioses, se han creado
retablos que son verdaderas obras de arte. Por la costumbre cristiana de rendir
homenaje a los difuntos en el regreso a la tierra, los carpinteros y ebanistas se
destacan en la elaboración de ataúdes.
REFERENCIAS
Gutiérrez S.J, Luis (2007). Religiosidad popular, Guatemala, Fundación
María Luisa Monge de Castillo.
Libro Primero de Aumentos de la Cofradía de Jesús Nazareno que se
Venera en el convento de la Merced de esta ciudad. archivo de La Merced, folios
50 y 51
Museo de Linares.
https://www.museodelinares.gob.cl/colecciones/imagineria -religiosa-la-fe-
tallada-en-madera/imagen-y-evangelizacion-dios-como-objeto
Peña Gómez, María del Pilar (2008) Manual básico de Historia del arte.
Cáceres. Universidad de Extremadura, p.42
Peraza, J. Enrique. La Evolución de la tecnología en la carpintería Revista
Aitum No.39. Julio -agosto de 2000
Rosales Álvarez, Aishield Esther (2006). Caracterización de 38 talleres de
carpintería n los municipios de Santa Teresa, Jinotepe, Diriamba, San Marcos y
Masatepe. Universidad Nacional Agraria. UNA.
. Santamaría, Oscar J y Guillermo A. Navarro. (2010). Determinación de la
demanda de madera para la industria forestal en Nicaragua. Principales variables
de negocios para el periodo 2008-2009. – 1ª ed. – Turrialba, C.R. : CATIE, p.1
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Breve historia de la carpintería y de la ebanis tería
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Nicaragua Colonial en la Capitanía General de Guatemala (1768 -1805)
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Nota del Editor: Domingo Juarros (Santiago de los Caballeros de Guatemala, 1752 - Nueva
Guatemala de la Asunción, 1820) fue un clérigo que ha sido reconocido como uno de los
mejores historiadores de la época colonial de Guatemala, pues ha sido referido como uno de
los escritores españoles más imparciales, aun en asuntos de iglesia, a pesar de ser religioso.
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Nicaragua Colonial en la Capitanía General de Guatemala (1768 -1805)
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FISIOGRAFÍA
Observando el territorio desde las alturas, saltan a la vista 17 recintos
fisiográficos que se acomodan longitudinal y perpendicularmente. Cinco de ellos
se ubicaron en lo que fue la intendencia de Chiapas: Soconusco, Valles Centrales
de Chiapas, Altos de Chiapas, Lacandonia y Planicies del Pacífico. Siete se
distribuyeron a lo largo de la Capitanía General de Guatemal a: Sierra de los
Cuchumatanes, Sierra de Chamá, Sierra de las Minas, Sierra de Chuacús, Altiplano
guatemalteco, Sierra de Santa Cruz y Planicies del Pacífico. En la intendencia de
San Salvador quedaron comprendidos: Valles Inter montanos, Cordillera Centra l,
Cordillera de Montecillos y Planicies del Pacífico. En la intendencia de Honduras
se localizó la Cordillera Central, la Planicie Costera del Norte, las Planicies del
Pacífico y las Llanuras Centrales. Entretanto, en la intendencia de Nicaragua y la
gobernación de Costa Rica florecieron la Cordillera Central, la Cordillera de
Talamanca, la Planicie Costera del Norte y las Planicies del Pacífico.
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DEMOGRAFÍA
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Nicaragua Colonial en la Capitanía General de Guatemala (1768 -1805)
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Revista de Temas Nicaragüenses
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mediados del siglo XVIII que en el valle de Matina existían 144 haciendas
cacaoteras que anualmente explotaban cerca de 190 mil árboles con este fruto.
En cuanto al cacao guatemalteco, el mismo Juarros refería que el comercio más
dinámico se daba en el partido de Suchitepéquez y, especialmente, en el pueblo
de San Bartolomé Mazatenango donde llegaban a producir y vender hasta 400
cargas anuales.
AÑIL
Otro cultivo autóctono fue el xiquilite o añil, una planta tintórea de la familia
fabácea, del género indigofera, de la que se extrajo el color azul o índigo. Cabe
señalar que la transformación del xiquilite en cultivo comercial, siendo su cualidad
prehispánica de tipo ritual y medicinal, tuvo que ver con hechos muy significativos
de la historia económica de América Central. Su irrupción en la estructura colonial
implicó procesos muy dinámicos que le permitieron situarse, desde una etapa
temprana, como uno de los sectores más importantes del reino. Con el paso del
tiempo y la buena rentabilidad del tinte, la estructura del añil dio paso al
desarrollo de dos tipos de unidades de producción, visualizadas en el Tratado del
xiquilite y añil con los nombres de “labores de poquiteros” y “haciendas-obrajes”.
Las labores de poquiteros fueron tierras en manos de españoles, mestizos y
pueblos de indios que se destinaron para cultivar y cosechar, en pequeña escala,
alguna de las tres variedades del añil: flor, sobresaliente y corte. Todo parece
indicar que eran pequeñas plantaciones que se distribuyeron desordenadamente
por la intendencia de San Salvador, los corregimientos de Escuintla y
Suchitepéquez, y la intendencia de Chiapas, y que coadyuvaron con la expansión
geográfica de la planta. También existen noticias de este tipo de plantaciones en
pequeños reductos de las intendencias de Honduras y Nicaragua. En contraste,
las haciendas-obrajes fueron unidades de producción sumamente complejas ya
que desplegaron estructuras que lo mismo entrañaban grandes extensiones para
cultivar la tintórea que espacios tecnificados para procesarla y comercializarla; es
decir, la hacienda-obraje fue una unidad que reunió en su interior tierras, obras
hidráulicas, máquinas y animales de tracción, e infraestructura para beneficiar,
secar y almacenar el producto. Obviamente, estas unidades fueron cruciales para
el desarrollo económico de algunas provincias y para articular numerosos circuitos
mercantiles dentro y fuera del reino. En lo que respecta al sector ganadero, debo
señalar que su localización obliga a realizar algunas precisiones para plantear una
visión general. Las tierras del Altiplano Guatemalteco y la Cordillera Central,
ocupadas en su mayoría por cultivos especializados, fueron deficitarias en ganado,
aunque dispusieron de algunas estancias dedicadas a la crianza y repastaje. El
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Nicaragua Colonial en la Capitanía General de Guatemala (1768 -1805)
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ganado menor, tanto por la lana como por la proteína animal, proliferó en las
tierras frías de Quetzaltenango, Huehuetenango y Totonicapán. La cría de cer dos,
que el proceso de colonización diversificó en muchas regiones, se concentró en
las tierras templadas y calientes. Punto notable fue la especialización de las
principales áreas de crianza para ganado mayor durante el siglo XVIII: el norte
de la gobernación de Costa Rica, la intendencia de Nicaragua, la intendencia de
Honduras, la parte meridional de la intendencia de San Salvador y el oriente de
Guatemala.
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CLIMA
En la experiencia de América Central, dos hechos reflejan con mucha
claridad el clima inusualmente frío y seco que prevaleció en esta época; primero,
las heladas recurrentes que fueron registradas por los cronistas españoles del
siglo XVII y que dieron paso a la costumbre popular de referirse a los meses de
junio, julio, agosto y septiembre como la “temporada de invierno”; segundo, los
numerosos estudios dendrocronológicos que se han realizado en las montañas de
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VULCANISMO
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tanto por la erupción que tuvo en 1772 como por las continuas fumarolas de vapor
que “salen de su interior… luego de que produce algunos temblores de tierra…”.
Entretanto, Juarros refirió tres décadas después que el Masaya dejaba ver
“continuamente una materia, como metal derretido y hecho fuego, que esta masa
hervía con mucha fuerza y levantaba con frecuencia unas olas tan altas, como
una torre, haciendo gran ruido y causando tanta claridad, que se podía leer con
ella a una legua de distancia y se percibía el resplandor a 25 leguas…”. Respecto
al volcán Turrialba, ubicado en la gobernación de Costa Rica, Pineda anotó que
era un “monte muy elevado que humea constantemente y ha tenido erupción hace
algunos años…, según puede verse en los vestigios de lava que forman un avenida
de mal país en su costado norte…”, indicó que el volcán Viejo era una elevación
pequeña que “diariamente despide muchas nubes olorosas a azufre…Al navegar
por las costas del istmo centroamericano, el mismo Pineda describió el
comportamiento “del volcán de Fuego… que es de forma cónica… y que a la vista
se mira con una nube permanente de vapor…, del que dicen haber tenido
pequeñas erupciones recientes…”. Este mismo volcán, sobresale en un grabado
de Diego Garci-Aguirre en la Descripción de las reales exequias que a la tierna
memoria de nuestro augusto y católico monarca, el señor don Carlos III… (1789)
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En las erupciones
acaecidas entre 1750 y 1805, salta a la vista que siete de ellas podrían ubicarse
en el nivel 0 de explosividad; dos pueden catalogarse en el nivel 1; dos se
inscriben en el nivel 2; y solamente dos erupciones disponen de elementos para
relacionarlas con el nivel 3. De las erupciones comprendidas en el nivel 0, debo
decir que las fuentes registran varios volcanes cuyos comportamientos se
ajustaron a estos indicadores; no obstante, solamente seis de ellos mantuvieron
a lo largo del tiempo su condición activa. Los relatos al respecto son numerosos.
No obstante, el dinamismo del Momotombo (Nicaragua), Masaya (Nicaragua),
Turrialba (Costa Rica), Viejo (Costa Rica), Fuego (Guatemala) y San Vicente (San
Salvador) es digno En las erupciones acaecidas entre 1750 y 1805, salta a la vista
que siete de ellas podrían ubicarse en el nivel 0 de explosividad; dos pueden
catalogarse en el nivel 1; dos se inscriben en el nivel 2; y solamente dos
erupciones disponen de elementos para relacionarlas con el nivel 3. De las
erupciones comprendidas en el nivel 0, debo decir que las fuentes registran varios
volcanes cuyos comportamientos se ajustaron a estos indicadores; no obstante,
solamente seis de ellos mantuvieron a lo largo del tiempo su condición activa. Los
relatos al respecto son numerosos. No obstante, el dinamismo del Momotombo
(Nicaragua), Masaya (Nicaragua), Turrialba (Costa Rica), Viejo (Costa Rica),
Fuego (Guatemala) y San Vicente (San Salvador) es digno Cómo mencioné arriba,
solamente dos erupciones ocurridas entre 1750 y 1805 pueden catalogarse e n el
nivel 3 de explosividad, ya sea por la cantidad de material que arrojaron, la altitud
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Granada.7 Sea como fuere, cabe preguntarse ¿de qué manera estos acrídidos
alcanzaron su condición migratoria?, ¿qué tipo de insectos conformaron estas
plagas y qué características desplegaron para mantener su conducta nociva? Se
sabe que esta experiencia fue común en la porción norte de Costa Rica, Nicaragua,
el occidente y centro de San Salvador, la planicie costera y el altiplano de
Guatemala, y la depresión central y zona selvática de Chiapas. Un segundo
fenómeno tuvo que ver con varias erupciones volcánicas: Izalco (San Salvador,
1798, 1803, 1805 y 1807), Fuego (Guatemala, 1799), Ometepe (Nicaragua, 1800),
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Tajamulco (Guatemala, 1800) y San Miguel (San Salvador, 1805). A juzgar por la
literatura especializada, las erupciones siempre han desempeñado un papel
relevante en las alteraciones climáticas. Basta revisar los anales de la historia
para vislumbrar la manera en que estos hechos trastornaron la temperatura,
devastaron la cubierta vegetal y provocaron mutaciones biológi cas, ya sea por los
aerosoles que depositaron en la atmósfera o por los materiales y daños que
dejaron en la superficie.14 Lo más llamativo radica en que dichas exhalaciones
alteraron los procesos de luminosidad solar, ya sea obstruyendo o reflejando los
rayos solares, quebrantando las cadenas tróficas de plantas y sofocando la vida
de muchos depredadores –como arácnidos, réptiles y anfibios– que se
alimentaban de Shistocerca. Pese a la escasez de datos, bien puede plantearse
que los materiales expulsados por dichos colosos contribuyeron indirectamente
en la formación de plagas. Lo anterior se explica porque las partículas volcánicas
extinguieron numerosas especies que regulaban el ciclo de vida de la langosta.
Así, al alterar el reino vegetal y animal y coincidir con la multiplicación de insectos
lo que sobrevino fue una plaga desoladora. El resto fue una historia donde las
poblaciones asentadas desde Nicoya hasta el Soconusco experimentaron el
deterioro agrícola, la merma de sus campos, el hambre y la enfermedad. Hasta
donde puede observarse, los primeros estragos de la plaga se documentaron en
los partidos de Chiquimula y Zacapa entre septiembre de 1767 y junio de 1768.
Subrayo la ubicación geográfica y las fechas de los sucesos ya que ponen de
manifiesto tres argumentos centrales para explicar la evolución del fenómeno.
Primeramente, el brote de la plaga en un escenario de tierras bajas y medias,
temperaturas cálidas y templadas, y grandes áreas verdes que en su momento se
destinaron para la agricultura y ganadería. En 1768 y 1769– se encontraban bajo
el asedio de la sequía y enfermedad, situaciones que en conjunto habían
propiciado migraciones, abandono de campos y dimisiones de tareas agrícolas. En
tercer lugar, la proximidad de estos partidos con las viejas zonas gregarígenas de
langosta que iban desde San Salvador hasta Costa Rica. Aunque las fuentes no
registran el proceder de los insectos, sí puede plantearse –con base en las plagas
de 1706, 1730 y 1797– que los campos meridionales fueron cruciales para que los
acrídidos se agruparan, alimentaran, reprodujeran y emprendieran su migración
hacia el interior del reino. Lo anterior también puede inferirse en una serie de
documentos sobre la colecta de diezmos en el obispado de Nicaragua y Costa
Rica, donde los administradores se quejaron, recurrentemente, de las dificultades
para liquidar el remate del bienio 1768-1769, ya sea por la sequía o los “brotes
de chapulín” que se presentaron desde Cartago hasta León. Amenazas recurrentes
y problemas endémicos (1797-1805) Durante el segundo semestre de 1796, las
autoridades del reino de Guatemala se dirigieron en numerosas ocasiones a los
199
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de langosta tan terrible que su incremento periódico formaba casi una línea recta
desde Nicaragua a Soconusco...”; “luego que la langosta asomó la cabeza en la
parte meridional de Nicaragua… se expandió por toda esta Capitanía General…”.Al
igual que otras provincias, las autoridades de Nicaragua emprendieron una
campaña permanente contra los insectos, la cual consistió en mermar su ciclo de
reproducción y erradicar todos los bichos que se encontraban en su fase
embrionaria y pre-migratoria. Para ello, echaron mano de las viejas disposiciones
que distribuía la Real Audiencia y, sobre todo, de medidas que proponían las
autoridades provinciales en función de la necesidad que padecían. El subdelegado
de la villa de Estelí, por ejemplo, persiguió y mató –con el apoyo de cuadrillas–
millones de insectos que posteriormente enterró en zanjas de cinco cuartas de
profundidad y tres cuartas de ancho.62 Por su parte, el obispo de León, don José
Antonio de la Huerta Casos, exhortó a los párrocos y feligreses de su diócesi s a
combatir la plaga y extinguir los huevecillos que dichos insectos depositaban en
los campos de Nicaragua y Costa Rica “echando pavos, puercos o gallinas que
aren la tierra… para conseguir inutilizar la propagación...”. Años después, el obispo
sucesor de León –don Juan Francisco de Vilches- elaboró un plan de contingencia
contra la plaga que implicó, entre otras cosas, el fomento de cultivos
extraordinarios, la disposición de socorros para los pueblos (con la tercera parte
de los fondos acumulados en sus cajas de comunidad), el abasto oportuno de
semillas en ciudades y villas, y la obligación de los curas de: “vigilar que sus
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pueblos el prolongar los barbechos de sus tierras cultivables hasta por 12 años,
según la ubicación geográfica de los mismos, situación que impidió roturar
periódicamente los campos y contener la llegada de insectos, la inoculación de
huevecillos y la proliferación de saltones. A lo anterior habrá que sumar la
existencia de variedades de matorrales, zacates y suelos que tenían la capacidad
de sobrevivir a las sequías más severas y –por ende– servir de alimento para los
insectos al tiempo en que se agruparon como plaga, tal como sucedió con los
arbustos de añil, el zacate chompipe y amargosa, y los suelos arcillosos de la
vertiente del Pacífico. De las estructuras agrarias, he señalado que no fue
casualidad que las zonas gregarígenas de la langosta se posicionaran so bre las
grandes planicies ganaderas de Nicaragua y Honduras, mientras que las
principales zonas de reproducción y anidación de bichos se extendieran por las
haciendas ganaderas y añileras que existieron en la vertiente del Pacífico. Sin
duda, la disponibilidad de tierras no roturadas y provistas de vegetación fue el
escenario óptimo para que estas plagas crecieran a lo largo y ancho del reino. Un
análisis panorámico de las fuentes documentales de la primera mitad del siglo XIX
pone en evidencia que este sosiego respecto a las amenazas biológicas y los
fenómenos naturales extremos persistió muy poco, pues al paso de unos años el
clima entró nuevamente en una situación cambiante. Tan solo en 1809 -1811,
1822-1824, 1830-1831 y 1848-1849 se volvieron a presentar ciclos de sequía en
los actuales territorios de Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador,
Guatemala y Chiapas. A lo anterior se sumó una fecunda actividad volcánica en
buena parte de estos espacios. En Guatemala entraron en actividad el Tajumulco
(1821), Atitlán (1827-1828, 1833, 1837, 1843, 1853), Fuego (1829, 1855, 1857)
y Tacana (1855). En El Salvador hicieron lo propio el San Miguel (1811, 1819,
1844, 1848, 1856) e Izalco (1838, 1856). En Nicaragua se registraron una serie
de erupciones del Masaya (1852-1853, 1857).1 Por si esto no fuera suficiente,
debo mencionar que hacia 1833-1834 y 1854- 1857 las plagas de langosta
volvieron a presentarse en los espacios enunciados. La situación fue tan dramática
que, el corregidor del Departamento de Sacatepequez (Guatemala), se dirigió al
gobierno central en 1854 y señaló que los “jinetes del hambre, la escasez y la
muerte” se habían apoderado de nuevo de los campos y que estos jinetes en
forma de insectos estaban causando grandes miserias entre la población. Lo más
llamativo del asunto fue que, ante la proliferación de los insectos, las autoridades
de Guatemala, El Salvador y Honduras distribuyeron –por medio de sus instancias–
una instrucción entre sus ciudadanos con el objeto de paliar esta situación. Me
refiero a la Instrucción sobre la plaga de langosta, medios de exterminarla o de
disminuir sus efectos, y de precaver la escasez de comestibles. Dispuesta por
orden del Superior Gobierno de Guatemala, por el licenciado don José del Valle,
205
Nicaragua Colonial en la Capitanía General de Guatemala (1768 -1805)
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El sistema colonial
José Mejía Lacayo
Recopilado con base en varios artículos de la Internet, incluyendo las
ilustraciones. Y The Spanish Contribution to American Agriculture por Arthur P.
Whitaker, Agricultural History Vol. 3, No. 1 (Jan. 1929), pp. 1-14 (14 pages),
Published by: Agricultural History Society
Resumen: Terminado El “Rescate” Del Oro Indígena, Los Españoles
Fundaron Varias Poblaciones En La Zona Minera De Dipilto; Estas Poblaciones
Fracasaron Por Los Ataques De Ingleses Y Sambos Miskitos. El Sistema Agrícola
Español Fue Establecido Hacia 1527, Apenas Tres
Años Después De La Fundación De León Y
Granada.
Palabras Claves: Agricultura, Oro, Colonia,
Indios, Españoles.
Abstract: Once the "rescue" of indigenous
gold was finished, the Spanish founded several
towns in the mining area of Dipilto; these
populations failed due to the attacks of the English
and the sambos Miskitos. The Spanish agricultural
system was established around 1527, just three
years after the founding of León and Granada.
Keywords: Agriculture, Gold, Colony, Indians, Spaniards.
Después de la Conquista de la región del Pacífico, después de la fundación
de Granada y León, los conquistadores hicieron entradas para “rescatar” el oro
acumulado por los indígenas. La agricultura estaba en manos de los indios
tributarios.La mayoría de la población vivía en un corredor de unas tres o cuatro
leguas (entre 16 y 22 km) de anchura que se extendía entre los golfos de Nicoya
y de Fonseca, junto a las costa de los lagos y al pie de los volcanes; 73 los recursos
lacustres y probablemente los marítimos sin duda fueron significativos en su dieta.
Los indios hacían incursiones al litoral del Pacífico para recolectar conchas,
ostiones, múrices, crustáceos, anguilas, y peces comestibles, pero salvo en la
región de Nicoya, no había asentamientos importantes en el litoral de mar. Entre
73
Este párrafo sigue a Jaime Incer, Viajes, Rutas, y Encuentros 1502 -1838, 1ra edición,
Asociación Libro Libre, San José, Costa Rica, 1989.
207
El sistema colonial
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74
Stanislawski, Dan, The Transformación of Nicaragua: 1519-1548, página 29, y tablas 1 a 4
en el Apéndice, University of California Press, iberoamericana Vol. 54, Berkeley y Los Ángeles,
1983
75
Fowler, William R., Jr., The Cultural Evolution of Ancient Nahua Civilizations: The Pipil -
Nicarao of Central America, page 104, University of Oklahoma Press, Norman, 1983
76
Todas las citas que siguen con la antigua ortografía del español están tomadas de Fernández
de Oviedo y Valdés, Gonzalo, Historia General y Natural de las Indias, pág. 63 y sig., tomo
XI, Editorial Guarania, Asunción, Paraguay, 1945
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llevan çeñida, o colgada al cuello de través, como tahelí, é con el pie çierra luego
el hoyo con los granos, porque los papagayos y otras aves no los coman; é luego
dan otro passo adelante, é haçen lo mesmo.""y porque el mahíz de sí es muy seco
é reçio, para que más pronto nazca, un día o dos antes échanlo en remojo, é
siembranlo el tercero. Y para que su labor se haga mejor, siembran en ti empo
que por haber llovido está la tierra de forma que el palo, que sirve en lugar de
reja, pueda entrar tres o cuatro dedos debaxo de la tierra, con pequeño golpe.
Este mahíz desde á pocos días nasçe, porque en quatro meses se coge, é alguno
hay más temprano, que viene a tres. E otra simiente hay que se coge desde a
dos meses después que se siembra: y en Nicaragua, que es una provinçia de
Tierra-Firme, hay simiente de mahiz que viene a cogerse a los quarenta
días." Algún tipo de riego se practicaba en Nicaragua, para casos de "socorro"
como dice Oviedo. No parece que tuvieran obras permanentes de riego, porque
Oviedo solo habla de riego para atender casos de socorro. "y en Nicaragua, que
es una provinçia de Tierra-Firme, hay simiente de mahiz que viene a cogerse a
los quarenta dias; pero es poco lo que se coge dello é menudo, é no se sostiene,
ni es sino para socorro, en tanto que llega el otro mahiz de los tres meses o
quatro. É aquesto de los quarenta dias se haçe é fuerça de riego y de la manera
que adelante se dirá. Assi como el mahiz va creçiendo, tienen cuidado de
desherbar, hasta que esté tan alto que el mahiz señoree la hierba; y quando está
bien creçido, es menester ponerle guarda, en lo qual los indios ocupan los
muchachos, y a este respecto los haçen estar ençima de los árboles y de andamios
que les haçen de madera é cañas é cubiertos, como ramadas, por el sol é por el
agua, y a estos andamios llaman barbacoas, é desde la barbacoa están
continuamente dando voçes, exeando los papagayos é otras aves que vienen a
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El sistema colonial
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comer a los mahizales: la qual vela o guarda paresçe a la que en algunas partes
de Europa se haçe, para guardar los cáñamos é los panizos é otras cosas, de las
aves." En otro lugar Oviedo explica que los indios regaban el maíz a
mano. "...quando se tardan las aguas para los mahiçales, tienen los indios
escogido é apartado algún mahiz en grano, é siembranlo, e a mano cada dia del
mundo lo riegan é tienen muy limpio, y en fin de quarenta dias lo cogen granado
é bueno. Pero como es trabaxoso de curar, é las maçorcas que dá son pequeñas,
assi lo que se coge desta manera es poco en cantidad; pero es mucho el socorro,
é ayuda que dá á la sustentaçion de la gente para esperar a que venga lo otro
que se cría con las lluvias. “Todavía se debate el rol que jugó el maíz en Nicaragua.
Su importancia parece haber variado de acuerdo con la región y el período. Y
respecto de los frijoles agrega “Yo he visto en la provinçia de Nagrando (ques en
Nicaragua, a la costa de la Mar del Sur), coger á çentenares las hanegas 77 destos
fésoles; y también en aquella tierra é en otras de aquella costa hay otras muchas
maneras de fésoles, porque demás de los comunes, hay otros ques la simiente
amarilla, é otros pintados de pecas.” La combinación de maíz y frijoles es
importante desde el punto de vista alimenticio. Los aminoácidos lisina,
suministrado por los frijoles, y la zeína, contenido en el maíz, juntos hacen una
dieta de gran valor biológico. Todos los árboles de cacao estaban en poder de los
nicaraos (nicaraguas) quienes fueron los que trajeron el cacao a la gobernación.
Los chorotegas no tenían un solo árbol de cacao; pero monopolizaban los árboles
de níspero ( nunocapot ), según Oviedo. Estando Oviedo en la plaza de Teçoatega,
con el cacique Agateyte dice que los indios estaban festejando porque "era
acabado de coger el fructo del cacao, que son aquellas almendras que entre
aquella gente corren como moneda, é de que haçen aquel brevage que es tan
excelente cosa tienen." Se concluye que también había árboles de cacao entre la
población de lengua náhuatl en el área del actual departamento de
Chinandega. "... de mucho cacao, ques aquella fructa que paresçe almendras é
corre entre aquella gente por moneda, con la qual se han é compran todas las
otras cosas que de mucho o poco presçio son, assi como el oro é los esclavos é
la ropa é cosas de comer é todo lo demás." Y en otro lugar dice que "hay mugeres
públicas que ganan é se conceden a quien las quiere por diez almendras de cacao
de las que se ha dicho que es su moneda. “Oviedo describe el cultivo del cacao y
el uso del madero negro como árbol de sombra, como sigue. “Primero quiero deçir
de la manera que crían o cultivan estos árboles, como cosa que tanto precian, y
es assi. Que después que los han plantado en la tierra que les paresçe que es
fértil e a su propósito, en sitio é agua allí cerca para regar a sus tiempos
ordinarios; y puestos por sus liños é en compás é desviados unos de otros diez ó
doce pies, porque mejor se alimenten del terreno; porque creen é cópanse de tal
77
Una fanega es una medida de granos equivalente a 55.5 litros.
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manera que debaxo dellos todo es sombra é el sol no puede ver la tierra, sino en
pocas partes entre las ramas. Y porque acasçe que algunos años el sol los suele
abuchornar é escaldar de manera que el fructo sale vano o no quaxa é se pierde,
para remedio desto, tienen puestos entre estas arboledas otros árboles que allí
llaman los indios yaguaguyt, é los chipstianos de la madera negra, que cresçen
quasi el doble que los de cacao é los defienden del sol á les haçen sombra con
sus ramas é hojas, é los van mondando é quitando los braços é ramas, como van
cresçiendo para que suban derechos a este propósito: los quales árboles son de
tal natura, que viven mucho más que los del cacao é nunca se pudren ni caen, é
es una de las fuertes maderas que se saben." Cultivaban el algodón al igual que
lo hacían los chibchas y se practicaba en los Andes. Dice Oviedo "(Hay) mucha
abundançia de algodón, é mucha é buena ropa que dello se haçe, é lo hilan é
texen las indias de la tierra; y es cañadero, porque cada año lo siembran é
cogen." Entre otros cultivos practicados en Nicaragua, comunes entre los chibchas
y entre la Amazonia noroccidental y los Andes, están la yuca dulce, el chile, la
piña, el aguacate, la papaya, el zapote, y las diversas variedades de jocotes o
"ciruelos". El cultivo de chile o chiltepe (género Caspium) debe haberse practicado
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al menos desde el período Policromo Antiguo (300 a 800 d. C.) como lo atestiguan
los ralladores de chile del tipo León Punteado que se encuentran por toda la zona
de la Gran Nicoya y aún en lugares como Nejapa (Managua), Los Placeres, y
Moyuá. Estos ralladores son escudillas de barro en que la superficie interior es
áspera porque se le hacen incisiones de puntos poco profundos. Indudablemente
no todos los productos aborígenes eran deseables para los españoles, porque
entre las tasaciones de 1548 únicamente se menciona una cosecha de chile de
1/2 fanega de tierra por los indios de Ometepe--la "isla de Nicaragua" en las
tasaciones--que tributaban a Luis de la Rocha. Oviedo menciona que los
chorotegas fumaban tabaco y de que lo cultivaban con gran cuidado, aunque no
menciona detalles específicos sobre su cultivo. Fowler 78 índice no conocer
ninguna mención específica sobre el uso del tabaco por los nahuas, pero cree que
los pipil-nicaraos lo fumaban. El cultivo de la coca (yaat en náhuat) era conocido
en Nicaragua donde los indios la usaban para aliviar la sed y el cansancio. Este
hábito es un rasgo cultural de la región andina; probablemente Nicaragua fue el
límite norte hasta donde esta práctica se extendía en tiempos prehispánicos. La
evidencia del uso de técnicas metalúrgicas en la región del Pacífico es muy
limitada, principalmente por falta de materias primas. Se han recuperado un
fragmento de molde de cera perdida que indica que se hacían algunos trabajos
usando esta técnica 79. La metalurgia según Lange se extendió por la costa del
Pacífico de América Central desde 200 a.C. hasta 700 d.C en las dos dir ecciones,
78
Fowler, William R., Jr., The Cultural Evolution of Ancient Nahua Civilizations: The Pipil -
Nicarao of Central America, page 107, University of Oklahoma Press, Norman, 1983
79
Véase Lange, obra citada
212
Revista de Temas Nicaragüenses
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80
Lothrop Samuel K., Archaeology of Lower Central America, Handbook of Middle American
Indian, volume 4:180-207, University of Texas Press, Austin, 1966
81
Sahagún, Fray Bernardino de, Historia General de las Cosas de Nueva España, libro XI, cap.
IX, página 696, 8va. edición, Editorial Porrúa, México, 1992
213
El sistema colonial
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la arena y la tierra que tienen una densidad menor. Pedro Mártir 82 describe el trazo
urbano de los pueblos aborígenes de los nicaraos, y agrega sobre los orfebres que
"La plaza real hallase circundada totalmente por las mansiones mobiliarias; en su
centro se alza la que habitan los artífices de oro. Allí se funde este m etal. Para
labrarlo luego en forma de diversas joyas; después, reducido a laminillas o barras
se acuña a voluntad de sus dueños y se le da las formas apetecidas,
admirablemente por cierto."Gil González de Ávila 83 obtuvo durante su viaje de
exploración entre Chiriquí (Panamá) y Nicaragua, un total de 70,848 pesos 84 de
oro de baja ley "rescatado" 85 solo en lo que es hoy Nicaragua. Estos 70,848
equivalen a unos 339.5 kg. En la zona de Nicoya el total fue de 23,424 pesos y
35 tostones, equivalentes a unos 112.3 kg de oro. No sabemos cuánto de esta
cantidad fue realmente "rescate" en el sentido de trocar oro por mercaderías
ordinarias, y cuanto fue obtenido por pillaje. El peso y sus subdivisiones el tomín
y el grano no eran unidades de valor o moneda, sino unidades ponderales
propiamente hablando. Según Pedro Mártir "cada peso, como por fuerza tuviste
que aprenderlo en catorce años de tan relevante lugar entre los españoles, supera
en un tercio a la dracma" 86 En la carta de Martín de Zubizarreta, fechada en
82
Mártir de Alglería, Pedro, Décadas del Nuevo Mundo, 7ma. década, libros II y III,J. Porrúa,
México, 1964-65
83
Carta del Capitán Gil González de Ávila a Su Magestad dándole cuenta del Descubrimiento
de Nicaragua, Colección Somoza, 1:85-107, Editor: Andrés Vega Bolaños, Madrid, 1954
84
El "peso" era una unidad ponderal antigua equivalente a unos 4.792 gramos.
1 peso = 1.333 dracmas, según Pedro Mártir
1 dracma = 1/8 onza = 3 escrúpulos = 3.594 gramos, según Vox, Diccionario General Ilustrado
de la Lengua Española, 8va. edición, Bibliograf, Barcelona, 1985
Para una excelente discusión sobre los pesos de oro, el castellano, el ducado, etc. véase Prescott,
William H., Historia de la Conquista de Mé xico, páginas 705-711, 2da. edición, Editorial
Porrúa, México D.F., 1976
El diccionario define rescatar , verbo transitivo, como recobrar por precio o por fuerza una
85
persona o cosa, especialmente lo que el enemigo a cogido. Para los conquistadores sig nifica
trocar oro u otros objetos preciosos por mercaderías ordinarias, que es la segunda acepción
del diccionario.
Rescatar, el verbo, es una voz castellana tardía (1495); en la Edad Media se decía redimir .
Deriva del latín CAPTARE 'tratar de coger' quizás del catalán del siglo XIII RESCATAR , o del
italiano del siglo XIV RISCATTARE .
Rescate , substantivo, es una palabra del año 1444.
Tomado de Corominas, Joan, Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Castellana, Editorial
Gredos, Madrid, 1990
86
Mártir de Alglería, Pedro, Décadas del Nuevo Mundo, 7ma. década, libros II y III, página
556, J. Porrúa, México, 1964-65
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87
Carta reproducida por Lockhart, James y Otte, Enrique, editores, Letters and People of the
Spanish Indies, Sixteen Century, páginas 19 -24, Cambridge University Press, Cambridge,
1976.
88
Un castellano equivale a 4.6 gramos. Véase Vox, Diccionario General Ilustrado de la Lengua
Española, 8va. edición, Bibliograf, Barcelona, 1985
89
Mártir de Alglería, Pedro, Décadas del Nuevo Mundo, 7ma. década, libros II y III, J. Porrúa,
México, 1964-65
90
Vox, Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española, 8va. edición, Bibliograf, Barcelona,
1985
91
Antigua moneda española, efectiva o imaginaria, de diferentes valores y califica tivos.
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El sistema colonial
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fundidor que con esta envío de más de otros 6,182 pesos de cascabeles que dicen
que no tienen ley alguna." Fausto de Elhuyar, al exponer la relación entre los
diversos sectores dice que en toda sociedad (país), existe una determinada
producción que ejerce funciones dominantes, uno o varios ramos "que llevan el
timón y gobiernan en algún modo el curso, intención y velocidad de los demás"
ramos (Ibid: 8), es decir de todo el sistema. Por lo tanto, un "punto capital" del
conocimiento, prosigue diciendo Elhuyar, consiste en discernir cuál es la
producción dominante en cada sociedad.4 Si en algunas naciones l a primacía
corresponde a la agricultura y en otras a las manufacturas, en los casos de México
y el Perú "el cultivo de las minas y la elaboración de sus productos" constituyen
la producción económica dominante. Temprano los españoles fundaron Santa
María de Buena Esperanza, Villa Hermosa y Nueva Segovia, hoy Ciudad Vieja. La
Búsqueda terminó con la fundación de ciudad Antigua en 1543, 19 años después
ce la fundación de León, y de Granada. Se hicieron los primeros preparativos 92
integrales para esta labor para trasladar de España la agricultura: Gatos, burras,
yeguas, vacas, cerdos, ovejas, arroz, mijo, labradores, jardineros, un molinero y
un herrero fueron enviados a las Indias. En los años que siguieron, la obra fue
impulsada con vigor y, a fines del siglo XV, los españoles habían avanzado
considerablemente en el traslado de su sistema agrícola a las Indias, es decir,
habían enviado allí una gran variedad de semillas, plantas y animales
domesticados; habían iniciado la transferencia de los instrumentos de la
agricultura, como molinos de trigo, refinerías de azúcar y riego; y habían
establecido un sistema de tierras liberal para el fomento de la agricultura, un
sistema que era superior en muchos aspectos al de los angloamericanos .
Finalmente, fue justo a principios de siglo que este sistema neohispánico de
agricultura se completó con un decreto en el sentido de que, si bien los indios no
deben ser esclavizados, pueden y deben ser obligados a tratar con los blancos y
trabajar para ellos con un salario justo. Si a esto le sumamos que el servicio militar
no se exigía a los indios (una exención que probablemente hizo a esas personas
más daño que bien), podemos ver que la asimilación del indio al tipo común del
trabajador europeo, el siervo, estaba prácticamente completo. Por lo tanto, a
principios del siglo XVI, el gobierno español se había comprometido con la política
de extender su sistema agrícola corporalmente al Nuevo Mundo, y los elementos
básicos del nuevo sistema (cultivos, animales domésticos, instrumentos y tierra y
trabajo. leyes) ya estaban acumuladas en las Indias Occidentales, de donde el
patrón peninsular, porque las tierras de las mesetas y las tierras altas de México
y Perú se parecían mucho más a la Vieja España en suelo y clima que las islas
92
The Spanish Contribution to American Agriculture por Arthur P. Whitaker
Agricultural History Vol. 3, No. 1 (Jan. 1929), pp. 1-14 (14 pages), Published by: Agricultural
History Society
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93
real cédula expedida en Burgos, el 20 de diciembre de 1527
94
Cédula de la reina, expedida en Ocaña el 10 de mayo de 1531
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El padre Cobo lo describía así en 1653: "...vemos que las provincias más
estériles y de más áspero y riguroso temple de este reino, cuáles son las que se
incluyen en el distrito de la Real Audiencia de los Charcas, son el día de hoy las
más pobladas de españoles y bastecidas de cuantas cosas se requieren para el
sustento y regalo de los hombres, y esto por la incomparable riqueza de minas
que hay en ellas, mayormente las del famoso cerro de Potosí y de la villa de Oruro,
cuyos términos, con ser los más estériles y ásperos del Perú, no sólo se han
poblado de españoles, sino que, con ocasión de proveer de comidas los asien tos
de minas, se han dado muchos dellos tan de veras a la agricultura, que han
fundado muy gruesas heredades en su comarca, no sólo en las tierras habitadas
de indios, sino en muchos valles que han descubierto, los cuales eran inhabitables
e incultos. A partir del esquema de Elhuyar intentemos una nueva síntesis sobre
la constitución de la economía colonial. El requisito previo, el punto de partida de
la formación del sistema es la producción minera, cuyo producto final (la
mercancía dinero) tiene la posibilidad de una inmediata realización internacional.
Esta producción, debido a la índole misma de su producto final y "a la complicación
de las maniobras y operaciones que su ejercicio requiere" (Ibid: 3), crea su propio
mercado, dentro del cual los productos agrarios son convertidos en mercancías,
al mismo tiempo que promueve nuevos tipos de producción que se basan ^desde
el comienzo mismo^ en el intercambio con el mercado minero. 7 El resultado de
este proceso es la constitución de un sistema económico merca ntil, con un
comercio desarrollado hasta cierto grado y con la consiguiente circulación
monetaria dentro de ciertos límites.
Asistimos a la creación de un espacio económico integrado y ligado por el
intercambio mercantil: "de todo ello resultó la variedad de cambios de frutos y
efectos, un comercio activo recíproco entre las provincias de diferentes
temperamentos y disposiciones..." (Elhuyar [1825] 1964: 20). La localización de
los recursos mineros en zonas situadas fuera del dominio de los grandes estados
indígenas activa un intenso proceso semisecular de expansión territorial y
ocupación del suelo (frontera minera-agraria). El emplazamiento de la producción
económica dominante significa, en consecuencia, que se configura una
organización territorial del proceso productivo completamente nueva, original en
relación a las formas espaciales de ocupación propias de las estructuras del
sistema primitivo indígena. De manera que los bastimentos de harinas, carnes,
vinos, maíz y otros frutos que se solían llevar antes a Potosí de partes distantes
a ciento, a doscientas y más leguas, ahora se dan tan copiosamente en los valles
de su contorno, que dellos se proveen de vituallas abundantemente aquellas
minas..." (Cobo 1956: 136).7. En una ponencia de 1976 hemos analiza do en
detalle el proceso de formación del mercado interno, ver Assadourian 1979: 223 -
292.Permítasenos exponer de nuevo este esquema en una forma más teórica y
citando extensamente a Marx.
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Elhuyar desarrolla esta tesis advirtiendo primero la influencia que tienen los
cambios cuantitativos de la producción en los reales de minas sobre el contorno
agrario. El estado de la producción de cada real trasciende "a los países
comarcanos y determina incontrastablemente la suerte de éstos en sus
acrecentamiento s o decadencia, en virtud de su dependencia originaria y
continua" (Ibid: 23). Estos movimientos localizados de auge y de crisis minera -
agraria, que cambian profundamente el paisaje de los distr itos, son importantes
pues muestran la sucesión de reordenamientos que ocurre en el propio territorio
que fue frontera minera-agraria.8 Pero Elhuyar no se limita a la observación8. El
siguiente es uno de los párrafos en donde Elhuyar refiere estos movimien tos
localizados de auge y de crisis mineral agraria: "Entre los muchos ejemplares que
de ello pudieran citarse, bastará recordar por moderno y bien conocido el
descubrimiento de las minas del Real de Catorce, en un país inculto y despoblado,
que sólo servía antes del año de 1774 para la cría de algún ganado, sin
trascendencia alguna al cultivo y fomento de su misma provincia, y menos de las
inmediatas que desde aquella época han tomado un incremento muy grande a
merced de aquel precioso descubrimiento que en sus rendimientos y consumos,
ha llegado a competir con los más famosos de los antiguos; por el extremo
contrario, sobran también ejemplares de la decadencia y postración a que se han
reducido distritos de consideración, por el abandono de los Minera les que
florecieron en sus inmediaciones, como no ha mucho sucedió con el de Bolaños,
que en el tiempo que estuvieron en corriente sus minas, activó y sostuvo la
industria agraria y demás trabajos de su contorno en un grado brillante; y desde
que aquéllas pararon, han desmerecido infinito, quedando sin esperanzas de
recobrar su anterior prosperidad, mientras que alguna feliz combinación no vuelva
a restablecer el laborío de las propias minas, o se descubran otras nuevas que
llenen su hueco..." (Elhuyar [1825] 1964: 22-23).
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poca diferencia en el propio grado que entonces..." (Elhuyar [1825] 1964: 49 -50).
Por consiguiente, una gran parte del análisis está destinado a descubrir cuáles
fueron esas nuevas causas que facilitaron los grandes ascensos en la producción
de plata. Este examen revela que los estímulos esenciales provienen del Estado y
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buena ley. Pero esta forma de producción convertía a los mineros indígenas en
consumidores de productos agrarios (cambio D-M).
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altos de Arica y los demás que corren por la misma Costa, que como las más de
estas provincias no son obligadas a la mita hallan los habitado res de ellas
Consideremos las cifras del cuadro 1. Sabemos que son muy inseguras, pero lo
mismo permiten algunos tanteos cuantitativos que nos acercan a nuestros
propósitos analíticos. Lo primero que sobresale de las cifras de estos tres
obispados es la dimensión alcanzada por el grupo de los forasteros hacia mediados
del siglo XVII: el 50% de los efectivos masculinos entre 18 y 50 años son
migrantes recientes o descendientes de ellos en primera o segunda generación.
Tan alta proporción responde seguramente a una causa muy clara, casi todas las
áreas que aparecen en este cuadro están obligadas a la mita de Potosí; en
consecuencia el abandono de los pueblos reflejaría aquí la resistencia a ese
trabajo forzado, el símbolo mayor de la explotación mercantil colonial.
Pero al mismo tiempo las cifras muestran otro efecto del centro minero
sobre la estructura agraria indígena, pues Potosí aparece como un verdadero foco
de atracción de migrantes (29.3 por ciento del total de ellos).31 Sumando las
cifras del Cusco y La Paz, las otras dos villas españolas incluidas en el cuadro,
tenemos que el 40 por ciento de los forasteros ha iniciado un proceso de
desvinculación de la condición de campesino.32 Sin embargo, la localización del
60 por ciento restante de los fugitivos indica que la migración rural -rural tiene
una magnitud mayor que la dirigida hacia los centros urbanos. De las cifras del
cuadro 2 nos interesa ahora destacar exclusivamente dos o tres elementos. Por
ejemplo, que las migraciones indígenas eran un fenómeno generalizado, pero que
la intensidad de estos movimientos variaba de una región a otra; sabemos ya que
los tres obispados con la proporción más alta de forasteros (Cusco, La Paz y
Chuquisaca), comprenden aquellos pueblos indígenas obligados a la mita de
Potosí. Notemos, por otra parte, que las cifras de circa 1754 y 1776 son bastante
seguras como medidas de la población indígena, pero pueden resultar muy
engañosas respecto a la cronología de las migraciones.
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Un documento con datos sobre las tierras de labranza que poseían los ay llos
de la parroquia de Santiago, de la ciudad del Cusco: Archivo General de la Nación
(Perú), sección Derecho Indígena, 1712, C. 199.Señalados de este modo la
notable importancia del fenómeno migratorio en el espacio andino y la
permanencia durante todo el período colonial de la categoría forastero -originada
por este movimiento, in- tentemos un nuevo acercamiento a la problemática de
esta estructura agraria durante los dos siglos de su reproducción. En el siglo XVII
el abandono de los propios territorios étnicos volvió a alterar el pai - saje agrario,
sobre todo para aquellas áreas indígenas afectadas a la mita de Potosí. El
vaciamiento de los pueblos y esas tierras de nuevo desamparadas de las que con
tanta insistencia se habla en los documentos, nos recuerdan aquella alteración
del siglo anterior ocasionada por la crisis demográfica. Y otra vez el Estado
español, en permanente agobio financiero, hizo caso de estas noticia s (no es justo
"que las tierras que pertenecían a los fugitivos se agreguen a los pocos que
reciden en sus pueblos, de suerte que gocen mil indios lo que havian de goçar
dies mil, siendo pertenecientes a toda la porción, sin que tengan en esto utilidad
pues siendo pocos no pueden cultivarlas. . ."33 y uso de sus derechos sobre las
tierras que los indígenas dejaban va· cantes, para vendérselas a los españoles.
Esta nueva cruzada de expropiación quizás fue tan intensa como las anteriores,
por lo menos en aquellas provincias donde la despoblación era mayor; no
olvidemos que en 1648 el virrey Salvatierra denunciaba que los últimos despojos
habían dejado "a los indios casi sin tierras o en pedregales sin agua" (Zavala
1978/79: II, 116).Vale la pena señalar que en los documentos de aquella época
esta nueva onda de expropiación territorial se consideró como lesiva a los mismos
supuestos que estructuraban el sistema mercantil andino.
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En primer lugar, los hombres de aquella época sabían muy bien que los
intercambios con el exterior y la circulación del mercado interno ^además de los
quintos del rey^ dependían de los niveles de producción de plata, de ese ciclo de
circulación del capital minero; también sabían que en ese siglo XVII se seguía
extrayendo de Potosí más de la mitad de la plata que producía todo el virreinato
peruano y que la producción de ese gran yacimiento era decreciente. Igualmente
señalaban, correctamente, que esta tendencia negativa estaba determinada por
dos causas fundamentales: la baja en la ley de los metales y la crisis que afectaba
a la mita de Potosí como consecuencia de las migraciones indígenas.34 Para
remontar la producción de plata potosina, según todos los pareceres, hacía falta
una gran masa de trabajo simple, que desprendiera y subiera volúmenes cada vez
mayores de metales de baja ley, pero cuyo salario monetario estuviera situado a
un nivel muy inferior al de los costos reales de reproducción, es decir, por debajo
del valor de los medios de vida necesarios para la subsistencia. En otras p alabras,
que cada año volvieran a entrar a Potosí los trece mil mitayos que habían asignado
los antiguos virreyes, en vez de esa fracción (¿un tercio?) que ingresaba hacia
1650. En este punto preciso el dominio colonial quedaba enredado en sus propias
políticas.
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Esto sin olvidar que ambas situaciones están determinadas por una coacción
exterior, que entra en contradicción con la organización de la p roducción
doméstica, forzándola a trascender hacia el exterior. El grupo de los forasteros
aparece como un elemento central en el análisis de la evolución agraria andina,
por su importancia cuantitativa y por el tipo de ruptura que implica su proceso de
conformación (separación del grupo étnico al que pertenecen y pérdida de sus
derechos sobre las tierras de la comunidad). Sólo recientemente este grupo ha
comenzado a atraer la atención de algunos historiadores como H. Klein y N.
Sánchez-Albornoz. Según Klein, "...esta gente, si bien podía usar algo de las
tierras comunitarias, a menudo trabajaba para los originarios con tierra. . ." (Klein
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más valiosa que sea esta apertura al análisis de larga duración, debemos admitir
que el conocimiento y la perspectiva histórica que ma nejan estos autores son
bastante limitados e incorrectos.
Para el sistema colonial, por ejemplo, muchos de ellos se han contentado
con repetir ese superficial modelo de una economía compuesta exclusivamente
por un sector agro-minero exportador con carácter de enclave, conectado hacia
el exterior a través de la gran ciudad puerto, avanzada del control político y
económico de la metrópoli. Este modelo es una sobre simplificación falsa, que no
representa las relaciones políticas, económicas y sociales realmen te existentes en
el sistema colonial, pues entre sus premisas falta nada menos que la del mercado
interno. En consecuencia, dicho modelo parcializa las funciones y las relaciones
de la ciudad-puerto, omite la proyección urbana del sector minero y las relaciones
y efectos internos que despliega esa economía exportadora y excluye del análisis
las producciones agrarias de tipo mercantil destinadas al mercado interno, así
como las características y las funciones de sus núcleos urbanos. La primera
sección de nuestro trabajo ha sido dedicada a enmendar el error principal de este
modelo.
Si bien hay un ciclo anual de expulsión “hacia afuera” de casi toda la plata
producida, que se realiza a través de la ciudad-puerto, resulta erróneo tildar de
enclave esa economía colonial de exportación. Por el contrario, la producción
minera determina la formación de un vasto mercado interno, debido a que el ciclo
de circulación del capital minero se sustenta fundamentalmente, tal como lo
hemos planteado, sobre el consumo de mercancías producidas en el propio
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espacio colonial. Pero, además, las relaciones y los efectos que genera la
producción minera en el funcionamiento del mercado interno son mucho más
amplios e intensos de lo expuesto por nosotros. Algunos de los llamados centros
mineros son en verdad grandes centros urbanos ( Potosí, Oruro, Zacatecas,
Guanajuato...), con varios miles de trabajadores mineros e importantes sectores
artesanales y de servicio y agentes comerciales y financieros, que les dan una
fisonomía semejante a la de las primeras ciudades industriales europeas.
Al revés de lo que sostienen las tesis más comunes, en estas ciudades
mineras se consumen mercancías regionales por un valor varias veces superior al
de las mercancías importadas. En consecuencia, teniendo en cuenta la
importancia cuantitativa de esta demanda de mercancías regionales a cambio de
una producción especial (plata), cabe sostener que los grandes centros mineros
cumplen con una función avanzada en el proceso de división del trabajo entre el
campo y la ciudad, dentro de la formación colonial. Las consideraciones hechas
hasta ahora sobre la producción minera y el mercado interno permiten aclarar las
funciones de la gran ciudad exportadora en el ciclo anual de circulación “hacia
afuera” de la plata. Los autores que caracterizan la economía minera de
exportación como enclave sostienen, además, que la gran ciudad -puerto cumple
una función económica de simple intermediación entre los centros mineros y la
metrópoli, que asegura el flujo plata-mercancías importadas entre ambos puntos.
Sin embargo, el intercambio internacional tiene una mayor complejidad, difícil de
comprender si se le sigue aislando de los mecanismos y de las relaciones que
hacen funcionar al mercado interno colonial.
Un esquema más real sobre el intercambio internacional debe integrar, por
lo menos, estos tres elementos básicos: a. el examen de las balanzas comerciales
del Perú y de la Nueva España muestra que las partidas de mercancías importadas
se cubren casi enteramente con barras y monedas de plata; b. la gran ciudad -
puerto tiene como función principal la de concentrar el comercio con la metrópoli,
o sea el cambio plata-mercancías importadas, pero c. los centros mineros sólo
consumen un porcentaje limitado de las mercancías importadas, ya que el
quantum mayor de las importaciones se consume en las distintas regiones agrarias
y manufactureras que forman el mercado interno. Dicho de otra manera, luego
del cambio plata-mercancías importadas que efectúan los comerciantes
monopolistas de la gran ciudad-puerto, las mercancías importadas vuelven a
realizarse en plata recorriendo dos grandes circuitos.
El primero está dado por el flujo entre la ciudad-puerto y los centros
mineros y es un cambio directo entre mercancías importadas y plata. El segundo
circuito entrelaza las regiones agrarias, los centros mineros y la gran ciudad que
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conecta hacia el exterior; sus complicados flujos o, como diría Marx, las varias
metamorfosis de las mercancías, pueden ser simplificadas y representarse
mediante dos fórmulas: mercancía regional-plata-mercancía importada o
mercancía importada-mercancía regional-plata. Este segundo circuito, que es el
de mayor dimensión cuantitativa, nos demuestra que la ciudad-puerto o, mejor
dicho, su grupo de comerciantes monopolistas realiza el ciclo anual de exportación
de la plata, manteniendo una intensa relación con las producciones mercantiles,
con el vasto y complejo mercado interno colonial.
Quizás por la incorrecta comprensión de la naturaleza del sistema
económico colonial, la investigación histórica urbana ha prestado poca atención
al análisis de aquellas villas situadas en regiones cuya producción mercantil estaba
excedente extraído del campo, pero a cambio no le suministraba nada que tuviese
valor económico..." (Singer 1975: 116). Desde una cierta perspectiva histórica, el
análisis de este último tipo urbano parecería poco significativo, pues su desarrollo
se sitúa al margen de esa "contraposición entre campo y ciudad", de esa oposición
generadora de cambios entre una economía urbana progresivamente mercantil y
una economía natural agraria que tanto destacaba Marx.
Sin embargo, nosotros creemos que una nueva y más justa interpretación
del sistema colonial y de los procesos ocurridos durante todo el siglo XIX
dependerá, en gran parte, de los futuros estudios de estos casos. Pero las
investigaciones no deberán aislar a esos núcleos urbanos de su territorio agrario.
Estas ciudades reflejan siempre la vitalidad económica del contorno rural, es decir
de la producción mercantil especializada destinada a realizarse en el mercado
interno. Como en estas villas residen los propietarios rurales, y son ellos quienes
controlan el poder político urbano, allí es donde se establecen las políticas
destinadas a defender los intereses económicos de la región. Por lo tanto, el
análisis deberá ser necesariamente urbano-rural, es decir regional.■
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No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
Presentación de la Sección
Editor: Ligia Madrigal
[email protected]
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La identidad cultural mesoamericana
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firme”, en Nicaragua en los cronistas de Indias . Introducción, selección y notas: Jorge Eduardo Arellano.
Managua, Fondo de Promoción Cultural Banco de América, 1976, p. 44.
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La identidad cultural mesoamericana
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todas las tribus habían entrado las mujeres se separaron, tomando cada cual una
calabaza llena de licor de maíz o de plátano para ofrecerla a sus maridos quienes
bebieron con todo placer”. 96
Tanto por las condiciones naturales del territorio, sociedades inhábiles para
el manejo de la agricultura, entre otros, los conquistadores se encontraron en un
terreno muchas veces hostil y variado. Los testimonios tanto del criollo segoviano,
fray Fernando Espino como fray Blas Hurtado y Plaza en sus experiencias con la
campaña de reducción indígena expresan haber conocido y articulado a muchas
poblaciones indígenas al espacio geográfico que era espacio vital de la cultura
mesoamericana.
La campaña de reducción indígena estaba expresamente orientada a tal fin
y el producto más notorio de esto fue la fundación de una serie de “aldeas de
frontera” en estas provincias regio-guatemaltecas que fueron el escenario de una
transferencia cultural, proveniente de las formas mesoamericanas y españolas,
sobre poblaciones originalmente “no mesoamericanas”.
No obstante, este alcance fue muy escaso, apenas llegó a fundar “aldeas
de fronteras” en Guatemala, Honduras, Nicaragua y Costa Rica, dejando una gran
población indígena expuesta a la influencia anglo sajona y británica -
norteamericana. Es más, el dominio anglosajón y británico- norteamericano sobre
el comercio de esclavos y sobre el comercio libre hizo más válida su influencia
cultural sobre las poblaciones de la Costa Oriental, a la vez, fue diversificando la
base cultural de aquellos pueblos indígenas.
El programa de reducciones indígenas que llevaba a cabo la dominación
española durante el siglo XVII, no garantizaba medios de sobrevivencia a los
indígenas convertidos, acostumbrados a tomar el fruto maduro del árbol y no a
trabajar la tierra. Así fue que el proceso estuvo matizado muchas veces por la
violencia de parte de los naturales al notar que el asentarse en un pueblo no les
garantizaba una rápida obtención del alimento o por la influencia de aquellos
agentes extraños (los ingleses) para enfrentar a los españoles.
Los indios de la Taguzgalpa y otras zonas desarticuladas en el Re ino de
Guatemala como los Votos y Guatuzos, Valientes, Miskitos y otros, confiaban más
en la caza y la pesca. Para esto, además existía en ellos una falta de comprensión
en la utilidad práctica del cristianismo. Fray Fernando Espino describe en algunos
pasajes de su crónica, las vicisitudes que pasó frente a los indígenas de la
96 John Roach: “El marinero extraviado en la Costa Caribe de Nicaragua, esclavo de los indios y
prisionero de los españoles (1770-1783)”, en Piratas y aventureros en las costas de Nicaragua . Selección
y comentarios: Jaime Íncer Barquero. Managua, Fundación Vida / Colección Cultural de Centroamérica,
2003, p. 244.
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Taguzgalpa siendo testigo de un ritual extraño con el que pretendían controlar las
fuerzas de la naturaleza.
Esa experiencia es la que hizo a los españoles reconocer uniformidad
cultural en los pueblos del Pacífico y la Región Central que pudieron dominar y no
llegaron a ver con suficiente tiempo la cultura de aquellos pueblos desintegrados
del sistema colonial y que comportaban una cultura y modo de vida distintos, pero
que eventualmente terminaron por aceptar algunas manifestaciones culturales
que llegaban de los pueblos mesoamericanos. De hecho, hay que indicar que los
pueblos indígenas mesoamericanos, tanto en Guatemala y México llegaron hasta
el siglo XX en ejercicio de usos y costumbres de aquellos grupos originarios que
preservaron.
De manera que es necesario pararse a reflexionar acerca de la naturaleza
de aquellas sociedades orientales que Kirchhoff dejara al margen del marco
mesoamericano, las cuales presentaban ciertas características culturales
diferentes y que vivieron una influencia cultural distinta durante el periodo
colonial. Tendrá que ser necesario para ello admitir, al igual que Lizandro Chávez
Alfaro, que los países centroamericanos son países bifrontes, es decir, co n dos
frentes hacia el Atlántico y el Pacífico por donde habrían ingresado una gama de
pueblos de distinta denominación cultural para residir en el territorio.
Oriente y Occidente en Centroamérica vinieron a ser la raíz de una
diversidad de poblaciones y cultura que fue alimentándose con el devenir de los
años. Con esta propuesta no se pretende demeritar la versión mesoamericana de
Kirchhoff, sino diversificarla ya que el resultado a largo plazo fue el mestizaje y el
sincretismo de todas esas vertientes étnico-culturales.
Así, el análisis histórico-cultural debe ir orientado en la necesidad de
reconocer el aporte de las poblaciones macro-chibchas para el fenómeno cultural
diverso de hoy en día en Centroamérica, a pesar de la definición de áreas de
influencia particulares en la región.
Las poblaciones macro-chibchas ocuparon la región oriental
centroamericana y quizás no hayan logrado mayor incidencia sobre el territorio
con la recolección de frutos y la pesca; pero es importante reconocer que pudieron
haber trasladado el uso de ciertos rasgos culturales simbólicos referidos a la
muerte y los elementos de la naturaleza que fusionaron pronto con las muestras
inglesas y africanas, incluyendo las españolas.
No es casual que el Wallagallo, que se practicara en algu nos pueblos de la
Costa Atlántica, como los garífunas en Honduras y Nicaragua se pueda percibir
como una muestra intrínseca de todas esas expresiones culturales, pero
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/ Revista sobre Arqueología en Internet , vol. 8, núm. 2, 2007. [Ejemplar dedicado a la Arqueología de la
Cuenca de México, coordinado por Natàlia Moragas Segura].
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La identidad cultural mesoamericana
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BIBLIOGRAFÍA
del concepto”. Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Ciencias Sociales , vol. 6, núm. 3,
noviembre, 1999-febrero, 2000, p. 239.
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No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
https://www.enriquebolanos.org/media/archivo/CCBA%20-
%20SERIE%20CRONISTAS%20-%2001%20-%2002.pdf
ROACH, John: “Las sorprendentes aventuras de un marinero irlandés / El
marinero extraviado en la Costa Caribe de Nicaragua, esclavo de los indios y
prisionero de los españoles (1770-1783)”, en Piratas y aventureros en las costas
de Nicaragua . Selección y comentarios: Jaime Íncer Barquero. Managua,
Fundación Vida / Colección Cultural de Centroamérica, 2003. En:
https://www.enriquebolanos.org/media/archivo/CCBA%20-
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ROMERO CONTRERAS, A. Tonatiuh y Laura ÁVILA RAMOS: “Mesoamé rica:
historia y reconsideración del concepto”. Universidad Autónoma del Estado de
Morelos (UAEM), Ciencias Sociales , vol. 6, núm. 3, noviembre, 1999-febrero,
2000. En: http://ri.uaemex.mx/bitstream/handle/20.500.11799/37966/7256 -73-
22679-1-10-20171013.pdf ?sequence=1&isAllowed=y
ROVIRA MORGADO, Rossen: “Mesoamérica: concepto y realidad de un
espacio cultural”. Arqueoweb / Revista sobre Arqueología en Internet , vol. 8, núm.
2, 2007. [Ejemplar dedicado a la Arqueología de la Cuenca de México, coordinado
por Natàlia Moragas Segura]. En: https://webs.ucm.es/info/arqueoweb/pdf/8-
2/rovira.pdf
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De la historia de las ideas a la nueva hi storia intelectual
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INTRODUCCIÓN
En los últimos veinte años la historia intelectual experimentó un desarrollo
creciente y dinámico en el campo historiográfico. Esta productividad de estudios
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99
Chartier, R. El mundo como representación. Historia cultural: entre práctica y representación,
Gedisa, Barcelona, 2002, p.14.
283
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100
Sin ánimo de ser exhaustivo remitirse a Rorty, R., El giro lingüístico: dificultades meta
filosóficas de la filosofía lingüística, Paidós, Barcelona, 1990; Vallespín, F., “Giro Lingüístico e
historia de las ideas: Q. Skinner y la escuela de Cambridge” en Aramayo, Roberto; Muguerza,
Javier y Valdecantos, Antonio (comp.). El individuo y la historia. Antinomias de la herencia
moderna, Paidós, Barcelona, 1995, pp. 287 -301; Chartier, R. “La historia hoy en día: dudas,
desafíos, propuestas” en Olábarri, I. y Caspistegui, F. J. La Nueva Historia Cultural: la influencia
del postestructuralismo y el auge de la interdisciplinariedad. Cursos de verano de El Escorial,
Ed. Complutense, Madrid, 1996, pp. 21 -33; Palti, Elías, Giro Lingüístico e Historia Intelectual.
Universidad de Quilmes, Quilmes, 1998; Dosse, François, La marche des idées. Histoire des
intellectuels. Histoire intellectuelle, Éditions La découverte, París, 2003.
101
Cochrane, E. “Historia de las ideas e historia de la cultura” en La historiografía en Occidente
desde 1945, III Conversaciones Internacionales de Historia, Navarra, 1995, pp. 131 -148.
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102
Nisbet, R. La formación del pensamiento sociológico, 2 tomos, Buenos Aires, Amorrortu, 2003.
285
De la historia de las ideas a la nueva hi storia intelectual
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categoría, donde los hechos y las concepciones formaban una unidad indisoluble.
A su vez, consideraba que las ideas poseían una dimensión dinámica, trazaban un
recorrido, un tránsito. Revestían un espesor social, un “espacio” en donde se
trasladan de una cultura a otra, de una época a otra, dando así una multiplicidad
de sentidos y “relieves” superpuestos de significados.
Para Arthur Lovejoy, un historiador de las ideas debía demostrar una
capacidad para “...el discernimiento y análisis de conceptos y un ojo avezado para
las relaciones lógicas o las afinidades cuasi lógicas no inmediatamente obvias
entre ideas” 103. Desde el registro metodológico, la Historia de las ideas se presentó
como un campo abordado por un abanico de visiones complementarias: se definía
en el ámbito de la interdisciplinariedad.
El otro enfoque, no solo se constituyó como otro modelo explicativo en
torno al fenómeno del análisis del pensamiento, sino que también propuso otra
semántica para definir su objeto de estudio: mentalités. La Historia de las
mentalidades nació como respuesta a la crisis de valores ideológicos y morales
producida por las consecuencias del mundo de entreguerras. En este sentido,
presentó un deseo por responder a ciertas preguntas invocando al pasado para
entender un presente derrumbado y fragmentado -en su más íntimo ser- por la
Gran Guerra. Problemáticas tales como la ausencia de Dios, el sentido de la vida
y la muerte, la presencia del amor, lanzaron interrogantes hacia un pasado no tan
lejano: ¿qué pensaban y qué creían sus antepasados? ¿cómo lo hacían? ¿qué
cantidad de hijos tenían? ¿cómo era la vida del hombre “común”? ¿cuáles y cómo
eran las alegrías, angustias, miedos?
La historiografía francesa, específicamente la denominada Escuela de los
Annales, fue la que condujo las primeras respuestas quizás por la acumulación de
varias tradiciones previas. La difusión de la sociología de corte naturalista, en
especial la noción suministrada por Emile Durkheim de “conciencia colectiva”,
inspiró a los primeros historiadores de este movimiento a incorporar el aspecto
social como un fenómeno imprescindible para comprender las mentalidades.
Frente a la irreductibilidad del planteo de las ideas-unidad de Lovejoy, la
Historia de las mentalidades se direccionaba a analizar todos los niveles de la
sociedad, en tanto, se preocupaba por entender las concepciones de sectores
sociales relegados. La centralidad estaba puesta en el conjunto de los sujetos
históricos y sus sentidos del mundo constituyendo un abordaje que enfatizaba
una “estructura mental colectiva”.
Sin embargo, este conjunto de trabajos prefiguró la tesis que después Duby
desarrollará en el libro más significativo e influyente en el campo de la historia
103
Lovejoy, A. “Reflexiones sobre la historia de las ideas”, Prismas, Revista de Historia
Intelectual, Universidad Nacional de Quilmes, Quilmes, Vol. IV, 2000, p. 129.
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de las mentalidades: Les trois ordres ou l´imaginaire du féodalisme 104. Esta obra
tiene como propósito estudiar la articulación de la estructura social en la época
feudal con la “superestructura” ideológica. Duby abrió la puerta de un abordaje
estructuralista aplicado a los estudios de la mentalidad en el Norte de Francia.
Esta investigación radicó en un análisis de la sociedad feudal a través de
numerosos documentos y autores prácticamente abandonados. Apoyado en esas
fuentes, Duby planteó que el orden feudal se fundamentó en un imaginario que
concebía a la sociedad como una estructura basada en tres tipos de actores
sociales con una función muy clara: los monjes y el discurso; los caballeros nobles
y la defensa; y los comerciantes y campesinos y la producción. Es decir,
demostraba la existencia de una trifuncionalidad en dicha sociedad: los que oran
(piensan), los que guerrean (gobiernan) y los que trabajan (producen). En tanto,
es que el autor trata de “vincular fuertemente las representaciones colectivas y
las conductas personales al estado de una sociedad, es decir, a su historia” 105.
El aporte de la psicología social a la historia colectica de las mentalidades
fue también decisiva en su desarrollo llevando a determinar, por ejemplo, usos de
metodologías y técnicas estadísticas y exactas para estandarizar las fuentes
utilizadas. El método serial y cuantitativo, extraído de la demografía y la historia
económica, resultó primordial. La Historia de las mentalidades
“no ha dudado en explotarlo con la ayuda de computadoras: este único
medio de sacar todo el jugo y todas las correlaciones de documentos bastante
homogéneos para constituir corpus, y a la vez verdaderamente masivos, como las
50.000 relaciones de causas de la Inquisión española o las 15.000 de la
portuguesa o las matrículas de recluta” 106.
Años más tarde, se presenció una disputa entre los seguidores de la idea -
unidad y los que abogaban por las estructuras mentales. Roger Chartier expresa
esta situación cuando indica que durante la década de 1960
“se constituye en objeto histórico fundamental un objeto que es
diametralmente opuesto al de la historia intelectual clásica: frente a la idea,
construcción consciente de un espíritu individualizado, se opone, la mentalidad
104
Duby, G. Les trois ordres ou l´imaginaire du féodalisme. Gallimard, París, 1978 (trad. cast.:
Los tres órdenes o el imaginario del feudalismo, Petrel, Barcelona, 1980).
105
Duby, G. “Historia de las mentalidades”, en Rojas, B. (comp.), Obras selectas de Georges
Duby, F.C.E, México, 1999, p. 47.
106
Bennassar, B. “Historia de las mentalidades”, en Vázquez de Prada, V.; Olábarri, I. y
Caspistegui, F., Para comprender el cambio social. Enfoques teóricos y perspectivas
historiográficas, Pamplona, 1997, p. 160.
287
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siempre colectiva que regula, sin explicarse, las representaciones y los juicios de
los sujetos en sociedad” 107.
107
Chartier, R. El mundo como representación..., Op. cit., p. 23.
108
Bourdieu, P. El oficio de científico. Ciencia de la ciencia y reflexividad. Anagrama, Barcelona,
2003; Chartier, R. El mundo como representación..., Op. cit, pp. 45 -62; Foucault, M., El orden
de los discursos. Tusquets, Buenos Aires, 2004.
109
Foucault, M. La Arqueología del Saber, Siglo Veintiuno Editores, Buenos Aires, 2002, p. 352.
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110
Dreyfus, H. y Rabinov, P. Michel Foucault: más allá del estructuralismo y la hermenéutica,
Nueva Visión, Buenos Aires, 2001, p. 17.
111
Waldenfels, B. De Husserl a Derrida. Introducción a la fenomenología, Paidós, Barcelona,
1992, p. 35.
112
Ankersmit, F.R. “La verdad en la literatura y en la historia” en Olábarri, I. y Caspistegui, F.
La Nueva Historia Cultural..., Op. cit., pp. 49 -57.
113
Chartier, R. “La historia hoy en día: dudas, desafíos, propuestas” en Olábarri, I. y Caspistegui,
F. La Nueva Historia Cultural..., Op. cit, p. 20.
114
Geertz, C. Reflexiones antropológicas sobre temas filosóficos, Paidós, Barcelona, 2002, p.
141.
289
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115
Ídem, p. 42.
290
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116
Vallespín, F. “Giro Lingüístico e historia de las ideas...”, Op. cit., p. 288.
117
Bruner, G. Realidad mental y mundos posibles. Los actos de la imaginación que dan sentido
a la experiencia, Gedisa, Barcelona, 1998.
291
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118
Este término fue expresado por primera vez por Gustav Bergmann, pero fue difundido por
Richard Rorty. Véase Rorty, R. El giro lingüístico..., Op. cit. En nuestro caso, es utilizado en un
<sentido amplio> dando a entender, no sólo el recorrido de las distintas apreciaciones de los
autores de este movimiento intelectual, sino el fundamento básico que evidencia que nuestra
aproximación al conocimiento “gira” en torno al carácter lingüístico.
119
Gadamer, H. G. Mito y Razón, Barcelona, Paidós, 1997, pp. 67 -81.
120
Geertz, C. La interpretación de las culturas, Gedisa, Barcelona, 1988.
121
Gadamer, H. G. El giro hermenéutico, Cátedra, Madrid, 1998.
122
Derrida, J. La desconstrucción en las fronteras de la filosofía. La retirada de la metáfora,
Paidós, Barcelona, 1998.
123
Para analizar dos visiones heterogéneas sobre esta cuestión comparar las apreciaciones de
Koselleck, R. Futuro Pasado. Para una semántica de los tiempos históricos, Paidós, Barcelona,
1993 y Ricoeur, P., Tiempo y narración, 3 vols., Gedisa, Barcelona, 1994.
292
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124
Vallespín, F. “Giro Lingüístico e hi storia de las ideas...”, Op. cit, p. 289; Burke, P., Hablar y
Callar. Funciones sociales del lenguaje a través de la historia, Gedisa, Barcelona, 2001, pp. 16 -
17.
125
Dosse, F. La marche des idées..., Op. cit.
126
Foucault, M. El orden..., Op. cit, p. 14.
127
Para profundizar este asunto, remitirse a Grondin, J. Introducción a la hermenéutica filosófica,
Herder, Barcelona, 1999; Hernández-Pacheco, J. Corrientes actuales de filosofía. La escuela de
Francfort. La filosofía hermenéutica, Tecnos, Madrid, 1996.
128
Koselleck, R. Futuro Pasado..., Op. cit, pp. 105 -173.
293
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de los “conceptos” 129. Una “palabra” tiene muchos significados en general, pero
no tiene más que un significado en cada contexto o situación. En cambio, un
“concepto” siempre aparece como un término ambiguo o polisémico, en cualquier
contexto que se presente. Por ello, pone en evidencia la historicidad y la larga
duración en el análisis del pensamiento político. Koselleck introduce el concepto
de Sattelzeit: un tiempo entre dos eras, una época entre los dioses muertos y los
nuevos. Este momento de transición se inscribe entre 1750 -1850, entre
Montesquieu y Marx. Para el autor, antes de 1750 los cambios que se producen
en el pensamiento son graduales, y éstos se observan muy l entamente en los
vocabularios y los lenguajes, pero luego, con el derrumbe del absolutismo, el
hombre busca nuevos conceptos y, recién en este punto, el tiempo se acelera y
las transformaciones producidas en la semántica se vuelven dinámicas y más
complejas de detectar.
Por último, se encuentra la tradición anglosajona, que parte de las ideas de
Wittgenstein, y continúa con las indagaciones de John Austin, John Greville Agard
Pocock, Quentin Skinner, Anthony Pagden, y otros. Esta corriente en general
denominada Escuela de Cambridge, impulsa la “historia de los lenguajes
políticos” 130. Para esta escuela, los textos son considerados como actos de habla,
en tanto, se distingue un nivel locutivo de un enunciado y su fuerza ilocutiva, es
decir, se diferencia lo que se dice y lo que se hace al decirlo 131. Esta consideración
es de suma importancia porque otorga al lenguaje un espacio de acción y un
proceso performativo en el medio social y cultural en el cual se desenvuelve. El
lenguaje es entendido como un objeto de estudio activo que puede ir modelando
e interactuando con el medio social. De la misma manera, es necesario
comprender ese acto de habla dentro de un escenario de relaciones lingüísticas
para lograr percibir la intencionalidad del actor social, qué acción emprendió éste
al decir lo que decía en el contexto en que lo llevo a cabo 132. Así pues, el texto
cobra pertinencia en un contexto específico. La escuela de Cambridge pone su
atención en el análisis de los lenguajes puestos en circulación a través de las
controversias y los intercambios narrativos producidos en determinados
contextos. Se pregunta fundamentalmente cómo un autor dialoga con los
problemas políticos de la época. Esto le permitiría al investigador conocer las
129
Hölscher, L. “Los fundamentos teóricos de la historia de los conceptos (begriffsgeschichte)”
en Olábarri, I.-Caspistegui, F. J. (dir.) La Nueva Historia Cultural..., Op. cit., pp. 69 -82.
130
Una visióna global de estos autores puede verse en Palti, E., Giro Lingüístico e Historia
Intelectual..., Op. cit.
131
Austin, J. Cómo hacer cosas con palabras. Palabras y acciones, Gedisa, Barcelona, 1988.
132
Pocock, J. Grenville Agard, Politics, Language, and Time. Essays on political thought and
history, Athenaeum, New York, 1971; Skinner, Q., The foundations of Modern political thought,
Cambridge University Press, Cambridge, 1978. (trad. cast.: Los fundamentos del pensamiento
político moderno, F.C.E., México, 1986).
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133
Pocock, J. Grenville Agard, Op. cit.; Skinner, Q., Op. cit.
134
White, H. El texto histórico como artefacto literario, Paidós, Barcelona, 2003.
295
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A modo de conclusión
El “exceso de realidad” que sustentaba la historia intelectual tradicional
provoca en la actualidad desde los nuevos lineamientos de la nueva historia
intelectual un “exceso de abstracción”. La reacción de la flamante historia
intelectual produce en algunos casos un obstáculo al considerar a las ideas
vaciadas de contenidos y desplegadas sólo a través de los contornos de sus actos
comunicativos, como meras categorías lingüísticas aisladas de su contexto social.
Sin embargo, la posible aproximación a tal aporía no es colocarse en un justo
medio entre ambos abordajes. El desafío se bosqueja en buscar un espacio
académico compartido que proponga miradas y debates abarcadores sobre las
problemáticas complejas percibiendo distintos niveles argumentativos
interconectados sin que ninguno de éstos se convierta en el modelo hegemónico.
Concibo que el abordaje de una historia intelectual enfocada
exclusivamente desde la lingüisticalidad y desprendida del componente histórico -
contextual se caracteriza por evidenciar un análisis demasiado estrecho y, en
algunos casos, artificioso. La nueva historia intelectual, que pone el acento en los
estudios de los lenguajes, debería articularse desde una historia cultural o, si se
prefiere, desde una historia de la cultura política. No puede perderse de vista que
el lenguaje es un fenómeno de la cultura material y simbólica del hombre
elaborado en distintas situaciones y a lo largo del tiempo. Los “momentos de
enunciación” de los lenguajes, dispuestos en los diferentes niveles discursivos,
son el reflejo de un proceso de apropiación por parte de los actores sociales que
construyen “los sentidos” de sus prácticas culturales. En tanto, el lenguaje político
como objeto de estudio remite necesariamente al hecho cultural, ya que es a
partir del “uso” social del mismo por parte de una comunidad interpretativa el que
éste otorgue una significación “generalizada” y “compartida”.
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135
Altamirano, C. Para un programa de historia intelectual y otros ensayos, Siglo Veintiuno
Editores, Buenos Aires, 2005.
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GEOGRAFÍA
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No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
La Caja de Herramientas
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“Hemos navegado plácidamente a lo largo de la costa ... todo el día, una tierra
ancha y baja, densamente cubierta de una vegetación tropical verde ... A la vista hay
tres montañas nobles: conos altos y simétricos, con los lados surcados por valles con
forma de arrugas velados por una neblina púrpura de ensueño que es encantadora a la
vista, y cumbres envueltas en un gran turbante de nubes ondulantes. Dicen que son
volcanes, pero no vemos humo. No importa, es un paisaje de hadas que es muy
agradable de contemplar ". Mark Twain, diciembre de 1866, carta escrita a bordo del
vapor Columbia en alta mar de Guatemala, publicada en San Francisco Alta California,
15 de marzo de 18673.
1 INTRODUCCION
América Central abarca un intrincado mosaico de paisajes dinámicos m oldeados
por una amplia gama de procesos de la superficie de la Tierra. Pocas otras regiones del
mundo exhiben una magnitud comparable de diversidad geomórfica. A lo largo del istmo
centroamericano, dominios tectónicos, litológicos y climáticos altamente v ariables (Figs.
3.1 3.3) se superponen en una pequeña área terrestre (0.4% de la superficie terrestre
total de la Tierra). La fisiografía resultante se caracteriza por un conjunto heterogéneo
de provincias geomórficas (Fig. 3.4), cada una con un conjunto d e formas de relieve
distintivo que conserva una historia única de la evolución del paisaje. Con más de 1500
km de longitud, Centroamérica se extiende desde las escarpadas tierras altas mayas de
Guatemala en el norte, hasta las cordilleras costeras húmedas del istmo de Darién en
Panamá en el sur. Este estrecho puente terrestre une los dos continentes americanos y
forma una división crítica entre las cuencas del océano Pacífico y Atlántico, que varía en
ancho desde menos de 100 km en el Canal de Panamá hasta más de 400 km a través de
las tierras altas interiores de Nicaragua y Honduras. Desde imponentes picos volcánicos
(> 4000 m de elevación) hasta tierras bajas aluviales cubiertas de jungla, y desde
escarpadas costas tectónicas hasta lagunas de margen pasivo , Centroamérica encarna
un microcosmos geomórfico de notable diversidad.
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terrestre geológicamente tenue que une los dos continentes americanos y crea una
división topográfica entre las cuencas del Océano Atlántico y Pacífico. Esta estrecha
masa de tierra juega un papel vital en la dirección de la evolución ecológica de las
Américas [47, 48], y también puede influir profundamente en la circulación oceánica y
el clima global [49-51]. Durante el Cenozoico, se ha desarrollado una diversa gama de
paisajes a lo largo del istmo en respuesta a interacciones dinámicas entre tipos de rocas
regionalmente variables, tectónica compleja de límites de placas y un clima tropical
enérgico. Por lo tanto, Centroamérica sirve como un laboratorio único para el estudio de
una amplia gama de procesos geomórficos y las consecuentes vías de evolución del
paisaje. Este capítulo explora la geomorfología regional de América Central y define un
sistema de provincias fisiográficas (Fig. 3.4) que caracteriza la diversidad del paisaje
general de esta región dinámica. El capítulo está organizado en secciones que brindan
una descripción general de los accidentes geográficos característicos y los procesos
geomórficos que definen cada una de las provincias fisiográficas. La primera mitad del
capítulo analiza las provincias geomórficas del norte de Centroamérica y la segunda
mitad examina las del sur de Centroamérica. Cada sección proporciona una breve
revisión de la investigación geomórfica actual dentro de las provincias fisiográficas.
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Debido a la amplia gama de temas posibles, no es práctico cubrir todos los aspectos de
estos diversos paisajes. Por lo tanto, la discusión se limita a un subconjunto de temas
críticos que brindan una idea general de la geomorfología regional de América Central.
Varios de estos temas se exploran con mayor detalle en los cuatro capítulos siguientes:
Vulcanismo y accidentes geográficos volcánicos (Capítulo 4), Paisajes kársticos (Capítulo
5), Geología y geomorfología glacial (Capítulo 6) y Morfología costera y arrecifes de coral
(Capítulo 7). ).
3.2 GEOMORFOLOGÍA DEL NORTE DE AMÉRICA CENTRAL
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El norte de Centroamérica se extiende a ambos lados del límite entre dos dominios
corticales importantes (Fig. 3.1), el bloque maya del sur de México, Belice y norte de
Guatemala, y el bloque Chortis del sur de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua
[52 55]. Estos dos terrenos del sótano se yuxtaponen a través de la zona de falla
Motagua-Polochic del centro de Guatemala, que define el límite activo de la placa de
América del Norte y el Caribe. El contraste litológico y estructural entre los bloques Ma ya
y Chortis (Fig. 3.2) ejerce un control de primer orden sobre la geomorfología regional
en el norte de Centroamérica. Esta plantilla geomórfica a su vez se ve afectada por la
deformación activa del límite de la placa a lo largo de la zona de falla Motagu a-Polochic
con tendencia este-oeste y el margen convergente de América Central con tendencia
noroeste a lo largo de la costa del Pacífico. El vulcanismo del Cenozoico tardío, generado
por subducción en la Fosa de América Central, imparte una influencia adi cional en la
geomorfología regional. Tanto los bloques Maya como Chortis (Fig. 3.1) abarcan terrenos
de basamento continental de rocas ígneas y metamórficas del Paleozoico inferior (Fig.
3.2) [52-58]. En el bloque maya al norte, el basamento está cubierto por una secuencia
gruesa de sedimentos clásticos y carbonatos del Paleozoico superior, lechos rojos
continentales del Jurásico superior y rocas carbonatadas y evaporíticas del Cretácico al
Eoceno [59-61].
Esta secuencia se expone a través del bloque maya dentro de la Sierra Madre del
sureste de México, las tierras altas del norte de Guatemala y las vastas tierras bajas de
la plataforma de Yucatán. El basamento del bloque Chortis, al sur de la zona de falla
Motagua-Polochic, está cubierto por sedimentos mesozoicos clásticos y carbonatados,
lechos rojos del Territorio inferior y una espesa secuencia de ignimbritas neógenas [59,
62-64]. Estas rocas están expuestas a lo largo de las tierras altas de Chortis del sur de
Guatemala, Honduras y Nicaragua. Mientras que el bloque Maya ha experimentado una
rotación menor en relación con el cratón de América del Norte, el bloque Chortis alóctono
al sur, ha experimentado un desplazamiento y una rotación significativos hacia el sureste
en relación con su posición original al noroeste del bloque Maya. La geomorfología
regional del norte de Centroamérica está fuertemente influenciada por los contrastes
litológicos y estructurales entre estos dos bloques tectónicos adyacentes.3.2.1 Provincia
del Altiplano Maya La provincia de las tierras altas mayas (Fig. 3.4) se extiende en un
amplio arco desde la Sierra Madre de Chiapas de México, hacia el este a través del
altiplano guatemalteco del norte, hasta las montañas mayas del sur de Belice. Estas
escarpadas tierras altas consisten en una serie de cadenas montañosas
morfológicamente distintas separadas por profundos cañones controlados por fallas y
ocasionales amplios valles aluviales.
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Elevándose sobre las tierras bajas húmedas del Petén, la cordillera Lacandón
consiste en una serie de cordilleras y valles que exhiben un paisaje kárstico accidentado
de abundantes sumideros, protuberancias aisladas y drenajes superficiales pobremente
integrados [65]. La cordillera central de Lacandón también abarca algunas tierras altas
kársticas de bajo relieve más amplias con columnas y torres de piedra caliza ocasionales.
A lo largo del margen sur de la cordillera Lacandón (Fig. 3.5), se ha formado una extensa
llanura aluvial donde varios ríos importantes descienden de las cordilleras superiores
Cuchumatanes y Chamá hacia el sur [65]. Esta amplia llanura interior consiste en una
red de importantes llanuras aluviales, desarrolladas donde la rápida sedimentación
sepultó la topografía kárstica subyacente.3.2.1.4 Montañas mayas Las Montañas Mayas
de Belice (Fig. 3.5) consisten en un altiplano delimitado por fallas (<1200 m de
elevación) que expone rocas de basamento graníticas y meta -sedimentarias dentro de
un synclinorium de tendencia noreste [57, 58]. Este bloque montañoso aislado se eleva
abruptamente sobre las tierras bajas circundantes de la región de Petén y la llanura
costera de Belice [65]. Los sistemas fluviales que drenan de las Montañas Mayas
experimentan cambios bruscos en la morfología de los canales a medida que cruzan el
frente empinado de la montaña que separa las rocas cristalinas deformadas dentro del
macizo de la plataforma carbonatada generalmente plana de las tierras bajas adyacentes
[68]. La línea costera al este de las Montañas Mayas (Fig. 3.5) se caracteriza por una
serie de pequeños deltas construidos con sedimentos clásticos gruesos erosionados del
interior metamórfico e ígneo del bloque montañoso [69]. Esta morfología costera difiere
considerablemente de las costas de bajo relieve al norte y al sur, caracterizadas por
amplios estuarios y lagunas alimentadas por redes de arroyos que drenan terrenos
carbonatados.3.2.2 Provincia Plataforma de Yucatán
Extendiéndose hacia el norte de las tierras altas mayas, se encuentran las
extensas tierras bajas carbonatadas de Petén, el norte de Belice y la península de
Yucatán (Figs. 3.5 y 5.1). Juntas, estas regiones abarcan las tierras kársticas más
extensas del continente norteamericano, que cubren más de 100.000 km2 [70 -73] (véase
también el Capítulo 5). La provincia de la plataforma de Yucatán presenta una amplia
variedad de accidentes geográficos kársticos, que incluyen sumideros, cenotes, valles
secos, cabinas de agua, torres y elaboradas redes de cuevas. Esta vasta plataforma
carbonatada se puede subdividir en varias regiones fisiográficas distintas (Fig. 3.4), cada
una de las cuales exhibe una topografía característica y un conjunto único de accidentes
geográficos kársticos. El carácter geomórfico de cada una de estas áreas está
estrechamente relacionado con las variaciones regionales en la litología, la estructura y
la profundidad del nivel freático.3.2.2.1 Llanura kárstica con hoyos septentrionales En la
península de Yucatán en México (Fig. 3.4), se desarrolla un paisaje kárstico
relativamente tenue a través de una secuencia plana de rocas carbonatadas marinas del
Cenozoico [70, 71].
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El tercio norte de la península consiste en una llanura kárstica con hoyos de bajo
relieve (0-30 m de elevación), caracterizada por una densa red de sumideros y cenotes
(pozos de colapso inundados que acceden al nivel freático). El drenaje subterráneo
eficiente dentro de la llanura kárstica con hoyos da como resultado una ausencia total
de arroyos superficiales [74-77]. Un extenso sistema interconectado de cavernas
inundadas (de hasta 130 km de largo) se encuentra debajo de las tierras bajas del norte
de Yucatán. Estas cavernas se formaron por la agresiva disolución kárstica durante los
rodales bajos a nivel del mar del Pleistoceno tardío. Gran parte de esta red de cuevas
ahora está inundada por agua subterránea estratificada que consiste en una capa salina
inferior, cubierta por una lente de agua dulce superpuesta. Una prominente alineación
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La extensa llanura de la llanura cárstica septentrional del norte (Fig. 3.4) está
bordeada a lo largo de su borde sur por la prominente escarpa de falla La Sierrita de
Ticul de tendencia noroeste [70]. El acantilado Ticul consiste e n una línea abrupta de
colinas que se elevan hasta 50 m por encima las tierras bajas del norte. Esta cadena de
colinas forma una cresta distinta que se extiende por casi 200 km a través del norte de
la península de Yucatán, dividiendo la llanura kárstica con hoyos del norte de un terreno
kárstico montañoso al sur. La llanura kárstica montañosa del sur (Fig. 3.4) cubre gran
parte de la región de Campeche de la península de Yucatán, al sur de la escarpa de
Ticul. Esta extensa tierra alta (60-80 m de elevación) presenta un terreno kárstico
irregular caracterizado por abundantes colinas con depresiones intermedias de piso
plano (poljes). Muchas de estas depresiones albergan corrientes superficiales efímeras
y contienen sedimentos aluviales. Estas cuencas ocasion almente se inundan durante la
temporada de lluvias debido al drenaje kárstico ineficiente en esta región.3.2.2.3 Meseta
kárstica y tierras bajas de Petén En la región de Petén de Guatemala, y partes adyacentes
del noroeste de Belice (Figs. 3.4 y 5.1), se ha formado un terreno kárstico claramente
más accidentado y heterogéneo en una secuencia más antigua de rocas carbonatadas
del Cretácico-Paleógeno [65, 80]. La diversidad de la geomorfología kárstica en esta
región está controlada por variaciones locales en la litología y estructura del lecho de
roca carbonatada. La meseta kárstica (<450 m de elevación) del noreste de Petén exhibe
un paisaje montañoso con relieve local de más de varios cientos de metros. El drenaje
superficial a través de la meseta está poco desarrollado y abundantes sumideros
alimentan una extensa red de fracturas de solución y cavernas. A lo largo del margen
oriental de la meseta kárstica de Petén, el paisaje exhibe una topografía accidentada
controlada por fallas normales subyacentes [65, 81]. El relieve local puede exceder los
100 m a través de escarpados formados a lo largo de los márgenes controlados por fallas
de depresiones alargadas. Un conjunto diverso de accidentes geográficos kársticos se
encuentra en esta área, incluidos valles secos, colinas de piedra caliza residual, cabinas
aisladas, sumideros, corredores de solución, fisuras abiertas y elaborados sistemas de
cuevas.
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Al oeste de la meseta kárstica de Petén, hay una región de tierras bajas húmedas
que consta de una vasta llanura aluvial de bajo relieve cubierta por grandes pantanos y
numerosos lagos [65]. La red fluvial que drena esta región presenta un patrón irregular,
interrumpido localmente por el drenaje kárstico subterráneo. En algunas áreas, se ha
formado una topografía ondulada por la disolución del karst y el relleno aluvial a través
de una serie de pliegues dentro del lecho de roca carbonatada.3.2.2.4 Llanura costera
con fallas en bloques del estelas costas de bajo relieve de la plataforma de Yucatán (Fig.
3.4) se caracterizan por amplias lagunas, manglares y marismas inundadas
estacionalmente. A lo largo de la costa caribeña orientada al este de la plataforma
(incluido el norte de Belice), la morfología alargada de las lagunas costeras y las tierras
bajas sigue una serie de crestas y depresiones bordeadas de fallas con tendencia norte -
noreste [70]. En alta mar, una extensa red de arrecifes periféricos y cayos de coral
también se ha desarrollado a lo largo de este grano estructural (formando la segunda
barrera de arrecifes más larga del mundo). Esta estructura de horst y graben es el
resultado de una deformación transtensional ampliamente distribuida a lo largo del límite
de transformación de América del Norte y el Caribe al sur de la península de Yucatán.
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En El Salvador, el frente volcánico activo está alineado a lo largo de las fallas del
límite sur de la depresión media (Fig. 3.5), una cuenca estructural alargada en el extremo
noroeste de la Depresión de Nicaragua. Al igual que en Guatemala, los volcanes
salvadoreños se localizan donde las fallas transversales se cruzan con la vaguada [20 -
23].En el oeste de El Salvador (Figs. 3.5 y 4.1), los estratovolcanes de Izalco y Santa
Ana ocurren dentro de un gran complejo volcánico controlado por fallas que también
incluye la caldera de Coatepeque [101]. Este cúmulo volcánico es la fuente de una serie
de ignimbritas andesíticas cuaternarias que se extienden hacia el norte hasta la
depresión media. El colapso de un edificio del Pleistoceno tardío en el volcán Santa Ana
desató una avalancha masiva de escombros que viajó más de 50 km hacia el sur hacia
el Océano Pacífico [102]. Igual que Guatemala, las tierras bajas pobladas de El Salvador
enfrentan una amenaza significativa de avalanchas de escombros y lahares generados
por fallas gravitacionales a lo largo del frente volcánico [103 106].El volcán San Salvador,
adyacente a la ciudad capital del país (Figs. 3.5 y 4.1), consta de múltiples restos de
centros eruptivos cuaternarios, incluido un gran cráter central (El Boquerón) y varios
picos circundantes [105-107]. La cercana caldera de Ilopango forma una gran cuenca
llena de un lago creada por una serie de grandes derrumbes que generaron depósitos
de tefra generalizados que se encuentran en todo el centro de El Salvador [108, 109].
Al sureste de la caldera de Ilopango (Figs. 3.5 y 4.1), el volcán San Vicente consiste en
una amplia masa compuesta de dos estratoconos superpuestos [103].
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3.5). La meseta central de Chortis (Fig. 3.4) está aislada del Mar Caribe y el Océano
Pacífico, recibiendo menos lluvia (1.0-1.5 m / año) que las tierras altas rifadas al oeste
(> 2 m / año) y la vertiente caribeña muy disecada. al e ste (> 3 m / año) [27].Las
imágenes tomográficas de la placa Cocos en subducción revelan un espacio entre losas
que se extiende a lo largo de las tierras altas de Chortis [27]. La rotura de la losa durante
el Mioceno y el afloramiento asociado del manto flotante debajo de la placa del Caribe
pueden haber inducido el levantamiento epirogénico de las tierras altas de Chortis [27].
Este levantamiento a escala regional, que comenzó en el Mioceno medio a tardío,
condujo a un profundo atrincheramiento de ríos serpenteantes en toda la región. La
incisión en meandro vertical sin migración lateral implica que el levantamiento procedió
sin fallas o inclinaciones locales, como un evento regional que afectó a toda la sierra de
Chortis [27].
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formando los límites de bloques montañosos alargados. Los canales fluviales desplazados
y otros indicadores geomórficos sugieren que estas fallas se adaptan a la transtensión
lateral izquierda a lo largo del flanco norte de las tierras altas de Chortis. L os bloques
de fallas transtensionales en esta área pueden representar la extensión en tierra de las
cuencas normales delimitadas por fallas dentro de las tierras fronterizas de Honduras en
alta mar al sur de la zona de fallas de Swan Island. La diferencia en orientación y
cinemática entre los valles de rift orientados de norte a sur al oeste (Fig. 3.5), y las
cuencas y rangos de este a oeste orientados al este (Fig. 3.6), se atribuye a variaciones
en el ángulo de divergencia entre el vector de movimiento de la placa del Caribe y la
zona de falla del límite de la placa [114]. 3.2.7 Provincia de Mosquito Coast Tierras bajas
La provincia de Mosquito Coast Tierras bajas (Fig. 3.4) consiste en una amplia llanura
aluvial densamente vegetada, de hasta 150 km de ancho, a lo largo de la parte orientada
al este de la costa caribeña de América Central. Con tasas de precipitación anuales de
4-6 m / año, estas tierras bajas húmedas representan una de las regiones más húmedas
de la Tierra. Las llanuras aluviales de la Cost a de los Mosquitos se formaron durante el
Cenozoico tardío sobre una masa coalescente de depósitos de arena y grava deltaica
derivados de las tierras altas interiores erosionadas hacia el oeste [115]. Estos depósitos
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ubicado entre los lagos de Nicaragua y Managua [130 -133]. El escudo de Las Sierras
(Figs. 3.6 y 4.1) forma un altiplano anómalo en forma de medialuna (elevación> 900 m)
a lo largo del frente volcánico central de Nicaragua. Este macizo alargado consiste en
una amplia plataforma orientada al mar de depósitos de ignimbrita de edad Plio -
Pleistoceno, producidos principalmente por erupciones inusualmente explosivas de
magma máfico de la caldera de Masaya.3.2.9.4 Cordillera de Cocibolca La Cordillera de
Cocibolca (Fig. 3.6) del sur de Nicaragua se extiende hacia el sureste desde el Escudo
de Las Sierras hasta la isla de Ometepe en el Lago de Nicaragua. Esta cordillera consiste
en una cadena muy espaciada de cuatro volcanes principales que forman una serie de
promontorios e islas dentro del lago de Nicaragua. Ubicado en la orilla noroeste del lago,
el volcán Mombacho (Figs. 3.6 y 4.1) es un gran estrato cono con un perfil irregular,
marcado por múltiples episodios de colapso de edificios durante el Cuaternario tardío.
Estos eventos desencadenaron avalanchas de escombros y lahares que forman extensos
depósitos de montículos en las tierras bajas que rodean la montaña [134]. Estos
depósitos incluyen un promontorio adyacente y un grupo de pequeñas islas que se
extienden hacia el lago. El volcán Zapatera, al sureste de Mombacho, consiste en un
escudo volcánico de baja altura que forma una isla ancha cerca de la costa noroeste del
lago de Nicaragua (Figs. 3.6 y 4.1). Este volcán cuenta con una caldera en la cima de 2
km de ancho con una cúpula de lava central de 300 m de altura. Al sureste de Zapatera,
los espectaculares estratovolcanes gemelos de Concepción y Madera forman la isla de
Ometepe, ubicada en el centro del Lago de Nicaragua (Figs. 3.6 y 4.1). Elevándose a
más de 1600 m sobre el lago, Concepción es uno de los volcanes más activos, con 25
erupciones registradas en los últimos 120 años [135]. Los recientes flujos de lava y
lahares continúan expandiendo la costa de la isla de Ometepe.3.2.10 Provincia del frente
del Arco de Sandino La provincia del arco de Sandino (Fig. 3.4) se extiende a lo largo
de toda la costa del Pacífico de Nicaragua, desde Punta Cosigüina en el Golfo de Fonseca,
hasta Punta Descartes en Costa Rica, justo al norte de la península de Santa Elena. Esta
estrecha franja costera se encuentra al oeste de la depresión y el frente volcánico de
Nicaragua. Incluye una llanura costera de bajo relieve del norte construida con
escombros volcánicos de la Cordillera de Los Maribios (Fig. 3.6), y una costa sur
bordeada de acantilados donde las rocas sedimentarias marinas del Cretácico -Neógeno
de la cuenca del antearco de Sandino se extienden sobre la tierra en una serie de
pliegues paralelos a los márgenes [25, 136-139] (véase también el capítulo 7).3.2.10.1
Costa norte de Nicaragua La costa norte del Pacífico de Nicaragua, entre el golfo de
Fonseca y Puerto Sandino (Fig. 3.6), consiste en una llanura aluvial de bajo relieve
desarrollada sobre escombros volcánicos desprendidos de volcanes activos de la
Cordillera de Los Maribios. El flujo de escombros del huracán Mitch de 1998 del volcán
Casita se extendió hasta la llanura costera durante casi 10 km, produciendo inundaciones
cargadas de sedimentos que se extendieron aún más a lo largo de los canales de arroyos
locales. De manera similar a las amplias plataformas de escombros volcánicos del arco
de proa Chortis hacia el norte, la llanura costera del norte de Nicaragua enfrenta un
peligro significativo debido a los flujos de escombros volcánicos altamente móviles. Las
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[141].norte de Costa Rica [162, 163]. La colisión de Cocos Ridge con e l margen sur de
Costa Rica genera un pronunciado levantamiento y acortamiento de la placa superior
desde el arco de proa hacia la cuenca del arco posterior [28 -37]. A lo largo del margen
central de Costa Rica, los montes submarinos subducidos en el flanco de la cresta
noroeste erosionan la pendiente exterior de la zanja [151, 152] y producen un
levantamiento correlativo de bloques de fallas de antearco en la costa [33 -35].3.3.1
Provincia del Frente Volcánico de Chorotega El frente volcánico del sur de Centroamérica
(Figs. 3.4 y 4.1) está segmentado en una serie de cordilleras distintas que han
evolucionado en respuesta a variaciones en la geometría, tectónica y geoquímica de
subducción a lo largo de la Fosa de Mesoamérica [19 -23, 36, 162-170] (ver también el
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Capítulo 4). En Costa Rica, una historia dinámica de la tectónica cenozoica generó un
cinturón volcánico complejo que incluye las cordilleras de Guanacaste, Tilarán, Aguacate,
Central y Talamanca (Figs. 3.7 y 4.1). En Panamá, el vulcanismo cuaternario se ha
limitado a la Cordillera Central al oeste de la Zona del Canal (Figs. 3.7 y 4.1). Las
variaciones espaciales y temporales en el sistema de subducción han dado lugar a fuertes
contrastes en la química del magma y el estilo de erupción a lo largo del fren te volcánico
de Chorotega [21-23]. Los cambios en el espesor y buzamiento de la losa han provocado
episodios de migración y rotación del frente volcánico, lo que ha dado lugar a una
morfología compleja de cordilleras superpuestas y cuencas intermedias [36, 170]. Cada
uno de los volcánicos cordilleras de Costa Rica y Panamá exhibe una geomorfología e
historia geológica únicas [171-177].3.3.1.1 Cordillera de Guanacaste El segmento norte
del frente volcánico de Chorotega (Figs. 3.7 y 4.1) consiste en una caden a cuaternaria
de estratovolcanes en forma de escudo conocida como la Cordillera de Guanacaste [169].
Los cuatro volcanes primarios de esta cadena, Orosí-Cacao, Rincón de la Vieja, Miravalles
y Tenorio, están construidos con coalescencia de coladas de lava y material piroclástico
emitido por múltiples respiraderos. A diferencia de la Cordillera Central al sur, los
volcanes de Guanacaste forman cada uno montañas distintas que se elevan
abruptamente sobre un paisaje circundante de bajo relieve. Las brechas ent re estos
volcanes permiten el paso fácil de los vientos alisios entre las cuencas del Caribe y el
Pacífico, lo que resulta en un clima excepcionalmente seco a lo largo de la costa del
Pacífico de Guanacaste. Dos calderas remanentes ocurren a lo largo de la Cordillera de
Guanacaste, y una amplia meseta de ignimbrita (2000 km2) se extiende hacia el mar
desde la base de la cadena. Construidas con tobas silícicas emitidas por respiraderos
precordilleranos, las ignimbritas de Guanacaste forman una llanura suave mente
ondulada (Fig. 3.7) que termina en una escarpa abrupta de 100 -150 m de altura cerca
de la actual costa del Pacífico. Los ríos que drenan la cordillera han incrustado barrancas
profundas en la meseta. El puesto de avanzada sur de la cordillera de Guanacaste es el
volcán Arenal, un estrato cono del Holoceno relativamente pequeño (15 km3) y muy
activo [178-180]. Ubicado detrás del macizo erosionado de la extinta Cordillera de
Tilarán (Figs. 3.7 y 4.1), este cono de lados empinados (> 1200 m de altura) se eleva
abruptamente sobre una depresión estructural en la que se ha formado. Una explosión
piroclástica mortal en 1968 diezmó 15 km2 de selva tropical en el flanco occidental del
volcán. Desde este evento, Arenal se ha mantenido en constante actividad, des atando
ocasionales flujos de ceniza y lava que continúan alterando el paisaje circundante.3.3.1.2
Cordilleras de Tilarán y Aguáchatelas cordilleras extintas de Tilarán y Aguacate (Fig. 3.7)
consisten en remanentes fuertemente disecados de estratovolcanes y calderas
compuestos de lavas, brechas, tobas y depósitos de lahar neógeno -cuaternarios
basálticos a andesíticos [169, 181, 182]. La alteración hidrotermal y la meteorización
tropical profunda han desestabilizado las empinadas laderas de estas cordilleras, lo que
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largo de la cordillera da como resultado un mayor desgaste y erosión, una incisión más
profunda en el arroyo y deslizamientos de tierra más frecuentes en la vertiente húmeda
del Caribe. A lo largo de ambos flancos de la Cordillera Central (Fig. 3.7), la expansión
gravitacional del macizo volcánico genera prominentes escarpes de pliegues de
propagación de fallas a lo largo de la base de las montañas [183]. Estas estructuras
compensan una secuencia de flujos de lava cuaternarios, tobas de flujo de ceniza,
depósitos de lahar y tefra que cubren las laderas volcánicas. Los arroyos que drenan las
empinadas laderas de la Cordillera Central han cortado una red radial de barrancas
profundamente incisas en la secuencia volcánica del Cuaternario [36]. Estos cañones
sirven como conductos que alimentan flujos piroclásticos, lavas y lahares hacia las tierras
bajas adyacentes tanto del Valle Central como de la llanura costera del Caribe.3.3.1.4
Valle Central El alargado Valle Central de Costa Rica (Fig. 3.7) consiste en una cuenca
de este a oeste (600-1200 m de elevación) situada entre los volcanes activos de la
Cordillera Central y los restos volcánicos erosionados de la Cordillera del Aguacate. A lo
largo del Cuaternario, esta cuenca de las tierras altas se llenó de una acumulación espesa
(> 1 km) de lavas andesíticas a dacíticas, rocas piroclásticas, depósitos de lahar y
sedimentos lacustres [36, 181, 182].El suelo del Valle Central (Fig. 3.7) consiste en una
superficie de tierras altas de bajo relieve con cañones fluviales profundamente incisos
cortados en la secuencia volcánica del Cuaternario subyacente [35, 36]. Estos cañones
abruptos delinean una red generalizada de fallas transcurrentes sísmicamente activas,
con tendencia noreste y noroeste que compensan las unidades rocosas neógeno -
cuaternarias en todo el Valle Central y las cadenas volcánicas adyacentes [34 -36, 184
186]. Además de controlar los patrones de drenaje regionales, estas estructuras exhiben
abundantes características geomórficas asociadas con fallas activas, que incluyen
escarpes abruptos, cordilleras de compresión, estanques de hundimiento y manantiales
perennes. Las fallas activas del Valle Central marcan el borde de ataque del cinturón
deformado de Costa Rica Central [34], un frente de deformación difusa que se está
propagando hacia la placa superior en respuesta a la subducción superficial del lecho
marino engrosado por puntos calientes debajo de Costa Rica central. Esta amplia zona
de falla se extiende a lo largo del frente volcánico de Costa Rica central (Fig. 3.1),
uniendo el cinturón deformado de Panamá Norte en la costa del Caribe, con la Fosa de
América Central en el margen del Pacífico. A lo largo de la historia de Costa Rica, estas
fallas han producido terremotos dañinos de poca profundidad, incluido el evento de 1910
que destruyó la capital colonial Cartago [187, 188]. Se han documentado períodos de
mayor actividad sísmica a lo largo del cinturón deformado de Costa Rica central en
asociación con grandes terremotos de empuje centrados en los márgenes del Pacífico y
el Caribe [189-192]. Esta zona de deformación activa marca el límite occidental de la
microplaca de Panamá [30, 34].Las redes de drenaje controladas por fallas del Valle
Central alimentan la garganta de Tárcoles, un cañón prominente que atraviesa las tierras
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otros volcanes Cuaternarios, incluidos La Yeguada y El Valle [164 -166]. Las edades
isotópicas en los flujos de lava, junto con las características geomórficas juveniles,
proporcionan evidencia de la actividad reciente en estos volcanes.3.3.2 Provincia del
frente del Arco de Chorotega El arco de proa de Chorotega (Fig. 3.4) se extiende a lo
largo de la costa del Pacífico desde la península de Santa Elena de Costa Rica en el norte
(Fig. 3.7), hasta el Golfo de Panamá en el sur (Fig. 3.8). Esta costa del margen
convergente que se deforma rápidamente se caracteriza por una topografía abrupta
[201] y una serie de penínsulas y promontorios que exponen rocas del basamento
oceánico del Mesozoico tardío [202-205] y sedimentos pelágicos suprayacentes a
marinos poco profundos de edad Paleógeno-Cuaternario [206-208] . Estas penínsulas y
promontorios, ubicados tanto en Costa Rica como en Panamá, incluyen Santa Elena,
Nicoya, Herradura, Quepos, Osa, Burica, Soná y Azuero (Figs. 3.7 y 3.8). Al i gual que el
frente volcánico adyacente, el arco de proa de Chorotega está altamente segmentado
con fuertes contrastes en estructura y morfología costera vinculados a variaciones en
las placas subductoras de Cocos y Nazca costa afuera [28 -37] (ver también Capítulo 7).A
lo largo del arco de proa de Chorotega (Fig. 3.4), las placas subductoras de Cocos y
Nazca exhiben variaciones dramáticas en espesor, rugosidad, buzamiento y ángulo de
convergencia que coinciden con fuertes contrastes en el estilo de deformaci ón de la
placa superior. En general, el fondo marino en subducción tiene una cubierta de
sedimentos mínima y, en muchas áreas (por ejemplo, costa afuera del sur de Costa
Rica), es anormalmente grueso con una rugosidad morfológica sustancial.[151, 152].
Como resultado, la erosión por subducción produce cicatrices y hundimientos a lo largo
de gran parte del arco de proa costa afuera [159-161]. Sin embargo, en contraste, el
arco delantero interior subaéreo a lo largo de la costa ha experimentado un
levantamiento en muchas áreas, consistente con un empuje fuera de secuencia o una
subplaca debajo del margen [33, 35, 37].El patrón general de deformación Cuaternaria
a lo largo de la costa de Costa Rica refleja fuertemente la batimetría costa afuera
asociada con la subducción de la Cordillera Cocos (Fig. 3.1) y el dominio de los montes
submarinos [29, 33, 35]. En general, las tasas de levantamiento cuaternario derivadas
de terrazas marinas y fluviales fechadas radiométricamente disminuyen paralelamente
al margen, moviéndose hacia el noroeste alejándose de la subducción de Cocos Ridge.
Estas tasas oscilan entre un máximo de 6-7 m / k.y. a horcajadas sobre la cresta en el
sur, a tasas de fondo de <1 m / k.y. por encima de la suave corteza subductora en el
norte. Esta tendencia general de longitud de onda larga refleja una disminución en la
flexión hacia arriba de la corteza predominante a medida que el espesor de la placa
subductora disminuye alejándose del eje Cocos Ridge. La rugosidad de longitud de onda
más corta relacionada con los montes submarinos superpone la variabilidad local en este
patrón de elevación de fondo [33]. A lo largo de la costa del Pacífico central de Costa
Rica (Fig. 3.7), las tasas de levantamiento varían marcadamente a través de una serie
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tasas de elevación superan la tasa de aumento del nivel del mar en el Holoceno tardío.
La datación por radiocarbono de 35 muestras de depósitos fosilíferos, de arena
intermareal y de rocas de playa arrojó edades del Holoceno tardío que oscilaron entre
0,3 y 7,4 ka [35, 211, 212]. Las tasas de levantamiento disminuyen de un máximo de
6.0 m / ky cerca de Cabo Blanco, a <1.0 m / ky a lo largo de una longitud de 20 km
tanto de las líneas costeras de margen perpendicular como de margen paralelo de la
costa, extremo sur de la península. Esta tendencia indica una rotación activa de las
paleoshorelinas del Holoceno hacia el norte, consistente con la inclinación observada en
las terrazas adyacentes de Cóbano del Pleistoceno. El rápido levantamiento y la
inclinación hacia el norte del extremo sur de la Península de Nicoya se han atribuido a
la subducción de los montes submarinos frente a la costa del cabo de Cabo Blanco [35,
211, 212].A lo largo de la costa norte de la península de Nicoya (Fig. 3.7), una superficie
adicional de erosión marina del Pleistoceno tardío (superficie de Iguanazul) se corta a
través de los basaltos del lecho marino del Cretácico tardío [213 -215]. La superficie de
Iguanazul consta de al menos tres peldaños separados de corte de olas que preserva n
las paleo-costas de 10 a 32 m de altura. La correlación de edad con los niveles altos del
Pleistoceno tardío en 80-215 ka (estadios 5-7 del isótopo de oxígeno marino) indica tasas
de elevación neta de 0.1-0.3 m / k.y. Los horizontes de las rocas de la playa datados
por radiocarbono a lo largo de la playa activa arrojan edades del Holoceno consistentes
con un levantamiento reciente de <0.5 m / k.y. [213-215].Mientras que el norte de la
península de Nicoya se encuentra en la costa del "dominio liso" de la p laca de Cocos, la
península sur se encuentra dentro de los montes submarinos subductores del "dominio
rugoso" (Fig. 3.1). La diferencia de orden de magnitud en las tasas de elevación del
Cuaternario entre el norte de la península de Nicoya (superficie de Iguanazul) y la
península sur (superficie de Cóbano) puede estar relacionada con fuertes contrastes en
la rugosidad, espesor y buzamiento de la placa de Cocos en subducción en alta mar. El
levantamiento rápido y la rotación de bloques del extremo sur de la península es
consistente con la subducción de los montes submarinos a lo largo de la tendencia
proyectada de la cadena de montes submarinos Fisher [35, 211, 212]. Un gran terremoto
de subducción centrado en la costa de Cabo Blanco en 1990 (M 7.0) puede hab er roto
una aspereza de montaña submarina, fotografiada tanto por las ubicaciones de las
réplicas como por la tomografía sísmica [190, 218].3.3.2.3 Costa Orotina -Esparza A lo
largo de 150 km de costa al sur de la península de Nicoya (Fig. 3.7), los princip ales ríos
troncales que drenan el antearco interior fluyen a lo largo de un sistema de fallas
costeras ortogonales activas. Estas fallas escarpadas segmentan la línea costera del
antearco interior en siete bloques delimitados por fallas con tasas de levant amiento
cuaternario muy diferentes, determinadas a partir de terrazas marinas y fluviales
elevadas [30, 33-36]. Estos bloques de falla se denominan (de norte a sur): Esparza,
Orotina, Herradura, Esterillos, Parrita y Quepos. La línea costera entre la Península de
Nicoya y el promontorio de Herradura (Fig. 3.7) consiste en un piedemonte costero de
bajo relieve (<250 m) (750 km2) a lo largo de la base de la extinta cordillera volcánica
Aguacate [35, 36, 219]. Esta región incluye las cuencas de drenaje inferio r de los ríos
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Barranca, Jesús María y Tárcoles, que fluyen hacia el suroeste hacia el Golfo de Nicoya.
Estos ríos siguen valles controlados por fallas incididos dentro de sedimentos costeros
neógenos-cuaternarios, escombros volcánicos y depósitos piroclást icos. Las fallas
Barranca, Jesús María y Tárcoles forman los límites de los bloques de fallas Esparza y
Orotina. El bloque bajo de la falla de Orotina (Fig. 3.7) entre los ríos Jesús María y
Tárcoles está cubierto por una secuencia Cuaternaria de depósit os de lahar, flujos de
ceniza, arenas volcánicas y gravas fluviales de> 100 m de espesor [35, 36, 219]. Durante
el Cuaternario temprano, una serie de lahares generados por erupciones descendieron
del frente volcánico a la llanura costera, formando el marco de un abanico de escombros
de 25 km de ancho (abanico de Orotina). La rápida erosión ascendente a través de la
división de drenaje de Aguacate condujo a la captura de un arroyo dentro del Valle
Central (Fig. 3.7) y una incisión profunda del sistema de dre naje moderno que se canaliza
hacia la garganta de Tárcoles. Este cambio en la ubicación de la división de drenaje
Pacífico-Caribe abrió un camino para que los flujos piroclásticos se derramen sobre el
abanico de escombros de Orotina en la costa del el Pacífico sobre las gravas del río [35,
36].El interior del bloque de fallas de Orotina está cortado por una serie de fallas de
deslizamiento de inmersión activas hacia el noreste que dan como resultado una
topografía de horst y graben que expone sedimentos del Mioceno y depósitos de lahar
del Plio-Pleistoceno dentro de alturas topográficas aisladas [34 36]. Estas fallas muestran
hasta 50 m de desplazamiento vertical dentro de una toba soldada fechada en 350 ka.
Los mecanismos focales del terremoto, las rupturas históricas del suelo, los
desplazamientos cuaternarios cartografiados y los datos de fallas de meso escala del
abanico de escombros de Orotina son todos consistentes con la deformación
transtensional a lo largo de las fallas perpendiculares del margen de impacto del noreste.
Hasta cinco terrazas de relleno aluvial del Cuaternario tardío (10 -260 m de elevación)
ocurren a lo largo de los tramos inferiores de los ríos Barranca y Tárcoles controlados
por fallas [35]. Los desplazamientos verticales de los escalones de las terrazas y los
bancos marinos del Holoceno en la costa indican un deslizamiento activo a lo largo de
estas fallas. La terraza superior del río (superficie de El Diablo) forma una extensa
meseta a lo largo del pie de la Cordillera del Aguacate [30, 35, 36, 219]. Esta superficie
cubre una acumulación espesa (> 50 m) de grava aluvial altamente erosionada que
exhibe un suelo distintivo, de color rojo brillante y rico en arcilla. Esta terraza de relleno
profundamente erosionada se asemeja a otras que se encuentran a lo largo de muchos
de los principales sistemas fluviales que drenan el antearco de Chorotega. Estos
omnipresentes depósitos de relleno de valles se interpretan como prismas aluviales
elevados formados durante el aumento del nivel del mar hacia los páramos eustáticos
del Cuaternario tardío [35]. Las terrazas más bajas y empotradas también pueden
reflejar la degradación del valle durante los períodos de aumento del nivel del mar. Un
marco regional de correlación de terrazas desarrollado para el margen del Pacífico
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llanuras aluviales tierra adentro y un complejo delta que se fusiona en la costa. Una
secuencia de abanicos aluviales masivos se ha desarrollado a lo largo del pie de la
cordillera volcánica donde los ríos principales salen del frente de la montaña [229]. En
muchos casos, los ríos modernos han incidido debajo de extensas superficies de abanico
de tierras altas compuestas por densas acumulaciones de gravas fluviales del
Pleistoceno, cubiertas por suelos bien desarrollados, de color rojo intenso y ricos en
arcilla [233]. Estos suelos y las superficies agradacionales asociadas pueden tener
correlación de edad con las terrazas aluviales del Pleistoceno observadas a lo largo del
arco anterior del Pacífico de Costa Rica [35].A lo largo de la costa de Tortuguero (Fig.
3.7), la línea costera de bajo relieve y cargada de sedimentos traza un arco amplio y
continuo de más de 120 km entre el río San Juan en el norte y el promontorio de Limón
en el sur. Este litoral consiste en una banda de 10-15 km de ancho de crestas de playa
progradantes paralelas a la costa que se extienden a lo largo del margen de la vasta
llanura aluvial. Los tramos inferiores de los ríos que se acercan a la costa se desvían a
menudo entre la orilla-paralas crestas de la playa, lo que da como resultado una
morfología costera de lagunas alargadas e islas de barrera estrechas. En varios lugares
a lo largo de la costa de Tortuguero, el paisaje de bajo relieve se ve interrumpido por
colinas abruptas generadas por el vulcanismo de arco posterior del Neógeno -
Cuaternario. Estas colinas volcánicas, sin embargo, representan solo una desviación
menor de la topografía monótona general de las tierras bajas de Tortuguero.3.3.3.2 Sur
de Limón y Costa de Bocas del Toro El paisaje de bajo relieve de la región de Tortuguero
contrasta marcadamente con la morfología emergente escarpada de las costas del sur
de Limón y Bocas del Toro hacia el sur (Fig. 3.7). A lo largo de este segmento sur del
arco posterior de Chorotega, una estrecha llanura costera (<20 km) con topografía
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geomorfología de la región de Limón y Bocas del Toro (Fig. 3.7) está controlada por un
acortamiento de la corteza activo dentro del cinturón deformado del N orte de Panamá a
lo largo del margen caribeño del bloque de Panamá [234]. El rápido levantamiento por
encima de las fallas de empuje que bordean el noreste ha llevado a la aparición de
terrazas de coral del Cuaternario a lo largo de la costa sur de Limón [ 235]. El
hundimiento activo también ha producido una vaguada de bajo relieve en el interior de
las islas emergentes del archipiélago de Bocas del Toro. Durante el terremoto M7.6 del
Valle de la Estrella de 1991, el levantamiento cosísmico de 0.5 -1.5 m afectó la costa sur
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[244-246]. Por ejemplo, una importante línea de falla con tendencia noreste a lo largo
del Río Gatún (Fig. 3.8) forma el límite sur de un altiplano en el sótano en el extremo
norte de la Zona del Canal. Este lineamiento se extiende hacia el este en las co rdilleras
costeras del norte del Istmo de Darién y se interpreta como una falla importante de
deslizamiento lateral izquierdo [38]. Los abundantes escarpes al norte de la falla de
Gatún y generalmente orientados al este sugieren que la Zona del Canal está
experimentando una extensión activa de este a oeste a través de una serie de fallas
normales [38]. Estas fallas normales pueden representar la terminación occidental de la
cizalladura lateral izquierda a lo largo de las principales fallas de deslizamiento de rumbo
dentro de la región de Darién en el este de Panamá.3.3.5 Provincia del Istmo de Darién
El istmo de Darién (Fig. 3.4) del este de Panamá está delimitado por un conjunto de
montañas escarpadas con dirección noroeste a lo largo de sus costas del Cari be y del
Pacífico (Fig. 3.8). Estos incluyen las cordilleras de San Blas y Darién a lo largo de la
costa del Caribe, y las cordilleras de Majé, Bagre y Sapo a lo largo del lado del Pacífico.
Estas tierras altas costeras flanquean una cuenca alargada de tie rras bajas centrada a
lo largo de los amplios valles de los ríos Bayano, Chucunaque y Tuira (Fig. 3.8). En la
costa del Pacífico, el Golfo de San Miguel (Fig. 3.8) forma una ensenada profunda hacia
las montañas costeras donde el estuario del río Tuira dese mboca en las tierras bajas
centrales hacia el océano. Gran parte del paisaje húmedo y accidentado del Istmo de
Darién permanece envuelto en una densa vegetación tropical, lo que contribuye a su
reputación como una de las regiones más remotas de América Central. Los macizos
costeros del Istmo de Darién exponen un complejo de basamento cristalino Cretácico -
Eoceno compuesto predominantemente por rocas ígneas máficas altamente deformadas
[142, 243, 248, 249]. Estas rocas pertenecen al bloque Chocó (Fig. 3.1), u n terreno de
basamento oceánico alóctono que se encuentra debajo del este de Panamá y el oeste de
Colombia [4]. El bloque Chocó está separado del bloque Chorotega hacia el oeste, a
través de fallas del sótano del Terciario de la Discontinuidad del Canal de Panamá. Las
rocas del basamento de la región de Darién están cubiertas a lo largo de los flancos de
las montañas costeras por basaltos almohadillados del Eoceno -Mioceno y sedimentos
marinos profundos depositados antes de la colisión de Panamá con América del Sur
[243]. Estas rocas están enterradas a su vez por una espesa secuencia post -colisión de
sedimentos siliciclásticos neógenos dentro del núcleo de un sinclinorio complejo centrado
a lo largo de la cuenca Bayano-Chucunaque. Dentro de Panamá y el sur de Costa Rica,
los terrenos del basamento Chocó y Chorotega (Fig. 3.1) juntos forman el moderno
bloque Panamá, una microplaca semirrígida que se encuentra atrapada entre las placas
del Caribe, Cocos, Nazca y América del Sur [5, 6]. . Los cinturones de plegad o y empuje
frente a la costa del istmo norte y sur de Darién (cinturones deformados del norte y sur
de Panamá) acomodan la convergencia activa con las placas del Caribe y Nazca [39]. La
colisión activa entre el bloque de Panamá y el cratón de América del S ur al este se
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produce a través de las fallas de empuje de la zona de sutura Atrato -Urubá en el oeste
de Colombia [148].3.3.5.1 Cinturón deformado de Panamá Este . La colisión en curso
entre el bloque de Panamá y América del Sur da como resultado una rotació n en el
sentido de las agujas del reloj y un deslizamiento lateral izquierdo a lo largo de varias
fallas importantes con dirección noroeste que cortan el istmo oriental de Darién [38].
Juntas, estas estructuras constituyen una zona de deformación difusa co nocida como el
cinturón deformado de Panamá Oriental [42]. Las fallas de los cerros Sansón, Sambú,
Majé y del río Jaqué (Fig. 3.8) siguen cada una de las líneas prominentes con dirección
noroeste a lo largo de los flancos de las cordilleras costeras del Pacífico. La falla de las
colinas Sansón forma el límite entre la cuenca de Chucunaque (Fig. 3.8) y las tierras
altas costeras al suroeste [38, 42]. La topografía montañosa al noreste de la falla expone
los sedimentos del Paleógeno de la cuenca de Chucunaque dentro de una serie de
anticlinales escalonados con brechas. Estos estratos plegados se yuxtaponen a las rocas
del basamento oceánico del Cretácico expuestas al suroeste de la falla dentro de las
tierras bajas estuarinas del río Tuira. La falla de Sambú, al suroeste del río Tuira (Fig.
3.8), marca el límite entre los macizos de Bagre y Sapo cerca de la costa [38, 42, 250].
Un escalón a la izquierda en esta falla delimita la cuenca del Sambú, que forma la entrada
al Golfo de San Miguel y un amplio valle aluvial entre las sierras de Bagre y Sapo (Fig.
3.8). La falla de Majé se inclina hacia la costa hacia el noroeste desde el Golfo de San
Miguel donde compensa las rocas del basamento del macizo de Majé [38, 42]. La falla
del río Jaque a lo largo del frente de la cordillera suroeste del macizo del Sapo sigue la
costa del Pacífico hacia el sureste desde el istmo de Darién hacia el oeste de Colombia
[38, 42, 250].Las fallas laterales izquierdas de tendencia noroeste del Istmo de Darién
terminan en sus extremos sureste a lo largo de una zona de fallas de empuje de
tendencia norte dentro de la zona de sutura Panamá -Sudamérica [38, 42, 243]. Hacia el
noroeste, las fallas del lado izquierdo se extinguen a medida que se acercan a las
estructuras extensionales con dirección norte a lo largo de la Discontinuidad de la Zona
del Canal. La presencia de sedimentos no deformados del Plioceno -Pleistoceno a lo largo
de los valles de fallas en el istmo oriental de Darién puede indicar que las fallas del lado
izquierdo ya no están activas [243]. Si este es el caso, el bloque de Panamá en esta
región ahora puede estar actuando como una placa rígida al chocar con América del
Sur.3.4
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A lo largo de la vertiente del Pacífico, la provincia del arco delantero Chortis (Fig.
3.4) abarca una amplia llanura costera formada por abanicos de escombros aluviales que
descienden de las tierras altas volcánicas. Detrás del frente volcánico, y al sur de la zona
de falla de Motagua, la provincia de Chortis Tierras altas (Fig. 3.4) se extiende por el
interior montañoso de Guatemala, Honduras y Nicaragua. Esta extensa región de
topografía alta incluye una meseta dividida en el oeste, un macizo central estable, una
zona fronteriza costera norte de crestas rodeadas de fallas y una zona oriental de
montañas diseccionadas frente a la costa del Caribe. La Provincia de las Tierras Bajas
de la Costa de los Mosquitos (Fig. 3.4), al este de las tierras altas de Chortis, abarca las
extensas llanuras aluviales a lo largo de la costa caribeña de Honduras y Nicaragua. La
provincia de la Depresión de Nicaragua (Fig. 3.4) consiste en una cuenca estructural
delimitada por fallas que se extiende por 600 km entre el arco de proa c ostero y las
tierras altas de Chortis. Esta tierra baja tectónica incluye la depresión media de El
Salvador, el golfo de Fonseca y los lagos de Managua y Nicaragua. La Provincia del
Frente Volcánico Nicaragüense (Fig. 3.4) abarca una cadena de estratovolca nes y
calderas centrados a lo largo de las fallas fronterizas del suroeste de la depresión de
Nicaragua. El Sandino La provincia del Arco delantero (Fig. 3.4), al suroeste del frente
volcánico de Nicaragua, incluye una llanura costera de bajo relieve comp uesta de detritos
volcánicos en el norte, y una costa escarpada de bahías de bolsillo y promontorios
rocosos en el sur. La Provincia del Frente Volcánico Chorotega (Fig. 3.4) de Costa Rica
y Panamá consiste en una serie segmentada de cordilleras distintas que han
evolucionado en respuesta a la tectónica altamente variable a lo largo del margen sur
de América Central. Se produce una gran brecha volcánica a lo largo de un segmento
elevado sobre la subducción Cocos Ridge.
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La provincia adyacente del Arco delantero Chorotega (Fig. 3.4) abarca una costa
tectónica accidentada, caracterizada por promontorios elevados y penínsulas
prominentes, así como un cinturón de plegado y empuje activo hacia el interior de la
Cordillera de Cocos. La provincia de Chorotega Back Arc (Fig. 3.4) presenta una amplia
llanura aluvial en el norte de Costa Rica y una costa escarpada con arrecifes de coral
levantados formados dentro de un cinturón activo de arco trasero. La Provincia de Tierras
Bajas de la Zona del Canal (Fig. 3.4) incluye una franja de paisaje de bajo relieve
densamente fracturado que se extiende por el centro de Panamá. Al este, adyacente a
América del Sur, la provincia del Istmo de Darién (Fig. 3.4) consiste en una serie de
cordilleras costeras húmedas delimitadas por fallas que flanquean un valle central
alargado. Como se describe a lo largo de este capítulo, las provincias fisiográficas de
Centroamérica (Fig. 3.4) exhiben cada una un conjunto característico de accidentes
geográficos que registra una historia única de la evolución del paisaje. La geomorfología
distintiva de cada provincia refleja una interacción dinámica entre los tipos de rocas
regionalmente variables, la tectónica de límites de placa activa y un clima tropical
enérgico. En su conjunto, las provincias fisiográficas de esta región dinámica abarcan
una gama excepcionalmente diversa de paisajes y accidentes geográficos asociados.
Centroamérica, por lo tanto, sirve como un laboratorio geomórfico excepcional para el
estudio de una amplia gama de procesos superficiales y su huella en el paisaje.
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Nota del Editor: Propiamente Centroamérica es un término político para designar a la
Federación Centroamericana. América Central es un término geográfico para designar a las
naciones del istmo incluyendo Panamá que era un departamento de Colombia, nunca fue de
la federación Centroamérica.
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agua. En la era precolombina, las áreas del norte de Centroamérica fueron habitadas por
los pueblos indígenas de Mesoamérica. Entre ellos, los más notables eran los mayas, que
habían construido numerosas ciudades en toda la región, y los aztecas, que habían creado
un vasto imperio. Las culturas precolombinas del este de El Salvador, el este de Honduras,
el Caribe de Nicaragua, la mayor parte de Costa Rica y Panamá eran predominantemente
hablantes de las lenguas chibcha en el momento del contacto europeo y son consideradas
por algunos como culturalmente diferentes y agrupadas en el Área Istmo-Colombiana.
Después de la expedición española de los viajes de Cristóbal Colón a las Américas, los
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Tales posesiones le dieron un gran poder sobre los gobiernos de los países
pequeños. Ese fue uno de los factores que llevaron a la acuñación de la expresión
república bananera. [9]Después de más de doscientos años de disturbios sociales,
conflictos violentos y revolución, Centroamérica permanece hoy en un período de
transformación política. Pobreza, injusticia social y la violencia todavía está muy
extendida. Nicaragua es la segunda más pobre que país del hemisferio occidental (solo
Haití es más pobre) Centroamérica es un istmo que se estrecha desde el sur extensión
de México a la porción noroeste de América del Sur. El Océano Pacífico se encuentra al
suroeste, el Mar Caribe al noreste y el Golfo de México al norte. Algunos fisio grafistas
definen el Istmo de Tehuantepec como el límite geográfico norte de la Región Central.
América, mientras que otros utilizan las fronteras noroccidentales de Belice y Guatemala.
A partir de ahí,
La masa de tierra centroamericana se extiende hacia el sureste hasta el río Atrato,
donde se conecta con las tierras bajas del Pacífico en el noroeste de América del Sur.
Puntos altos en CentroaméricaDe las muchas cadenas montañosas dentro de América
Central, las más largas son la Sierra Madre de Chiapas, la Cordillera Isabelia y la Cordillera
de Talamanca. A 4,22o metros (13,85o pies), el
Volcán Tajumulco es el pico más alto de
Centroamérica. Otros puntos altos de Centroamérica
se enumeran en la siguiente tabla. Entre las sierras
se encuentran fértiles valles aptos para la cría de
ganado y para la producción de café, tabaco, frijoles
y otros cultivos. La mayor parte de la población de
Honduras, Costa Rica y Guatemala vive en valles. [13]
Los vientos alisios tienen un efecto significativo sobre
el clima de Centroamérica. Las temperaturas en
Centroamérica son más alto justo antes de la
temporada de lluvias de verano, y son más baja
durante la estación seca del invierno, cuando los
vientos alisios contribuyen a un clima más fresco. Las
temperaturas más altas ocurren en abril, debido a
mayores niveles de luz solar, menor nubosidad y una
disminución de los vientos alisios.
La biodiversidad. Centroamérica es parte de
la biodiversidad mesoamericana, con el 7% de la
biodiversidad mundial. La ruta migratoria del Pacífico
es un Los siete países de Central principal ruta
migratoria norte-sur para las aves migratorias en las Américas, América y sus capitales
extendiéndose desde Alaska hasta Tierra del Fuego. Debido a la forma de embudo forma
de su masa terrestre, las aves migratorias se pueden ver en muy alto concentraciones en
Centroamérica, especialmente en primavera y otoño. Como puente entre América del
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Norte y América del Sur, América Central tiene muchas especies de los reinos Neártico y
Neotropical. Sin embargo, los países del sur (Costa Rica y Panamá) de la región tienen
más biodiversidad que los países del norte (Guatemala y Belice), mientras que los países
centrales (Honduras, Nicaragua y El Salvador) tienen la menor biodiversidad. [15] La
siguiente tabla muestra estadísticas recientes.
Geografía de Centroamérica Más de 30 especies de la flora y fauna de la región
están amenazadas, 107 de las cuales están clasificadas como en peligro crítico. Los
problemas subyacentes son la deforestación, que la FAO estima en un 1,2% anual en
Centroamérica y México combinados, la fragmentación de las selvas tropicales y el hecho
de que el 80% de la vegetación de Centroamérica ya se ha convertido en agricultura.
[231 Los esfuerzos para proteger la fauna y la flora de la región se realizan mediante la
creación de ecorregiones y reservas naturales. El 36% del territorio terrestre de Belice se
encuentra bajo alguna forma de estado protegido oficial, lo que le da a Belice uno de los
sistemas más extensos de áreas protegidas terrestres de las Américas. Además, el 13%
del territorio marino de Belice también está protegido. [241 Un gran arrecife de coral se
extiende desde México hasta Honduras: la Barrera Mesoamericana Belice Sistema de
arrecifes. La Barrera de Coral de Belice es parte de esto. La Barrera de Coral de Belice
alberga una gran diversidad de plantas y animales, y es uno de los ecosistemas más
diversos del mundo. Es el hogar de 70 especies de corales duros, 36 especies de corales
blandos, 500 especies de peces y cientos de especies de invertebrados. Hasta ahora, sólo
se ha descubierto alrededor del 10% de las especies de la barrera de coral de Belice.
[251
Flora
De 2001 a 2010, se perdieron 5.376 kilómetros cuadrados (2.076 millas cuadradas)
de bosque en la región. En 2010, Belice tenía el 63% de la cubierta forestal restante,
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Costa Rica el 46%, Panamá el 45%, Honduras el 41%, Guatemala el 37%, Nicaragua el
29% y El Salvador el 21%. La mayor parte de la pérdida ocurrió en el bioma del bosque
húmedo, con 12.201 kilómetros cuadrados (4.711 millas cuadradas). La pérdida de
vegetación leñosa fue compensada parcialmente por una ganancia en el bioma del
bosque de coníferas con 4,730 kilómetros cuadrados (1,830 millas cuadradas) y una
ganancia en el bioma del bosque seco con 2,054 kilómetros cuadrados (793 millas
cuadradas). Los manglares y los desiertos contribuyeron solo en un 1% a la pérdida de
vegetación forestal. La mayor parte de la deforestación se localizó en las laderas del
Caribe de Nicaragua con una pérdida de 8.574 kilómetros cuadrados (3.310 millas
cuadradas) de bosque en el período de 2001 a 2010. La regeneración más significativa
de 3.050 kilómetros cuadrados (1.180 millas cuadradas) de bosque fue visto en la
vegetación leñosa de coníferas de Honduras. La ecorregión de bosques de pino-encino
de América Central, en el bioma de bosques de coníferas tropicales y subtropicales, se
encuentra en América Central y el sur de México. Los bosques de pino-encino de
Centroamérica ocupan un área de 111,400 kilómetros cuadrados (43,000 cuadrados que
se extienden a lo largo de las montañas, columna vertebral de América Central, que se
extiende desde la Sierra Madre de Chiapas en el estado de Chiapas en México a través
de las tierras altas de Guatemala, El Salvador y Honduras hasta el centro de Nicaragua.
Los bosques de pino-encino se encuentran entre 600-1,800 metros (2,000-5,900 pies) de
elevación, [271 y están rodeados en elevaciones más bajas por bosques tropicales
húmedos y bosques tropicales secos. Las elevaciones superiores a los 1.800 metros
(5.90o pies) suelen estar cubiertas de bosques montanos centroamericanos.
Los bosques de pino y encino de América Central están compuestos por muchas
especies características de las zonas templadas de América del Norte, como robles, pinos,
abetos y cipreses. El bosque de laurisilva es el tipo más común de bosque nuboso siempre
verde templado de América Central, que se encuentra en casi todos los países de América
Central, normalmente a más de 1.000 metros (3,30o pies) sobre el nivel del mar. Las
especies de árboles incluyen robles de hoja perenne, miembros de la familia de los
laureles y especies de Weinmannia, Drimys y MagnoliaP81 El bosque nuboso de Sierra de
las Minas, Guatemala, es el más grande de Centroamérica. En algunas zonas del sureste
de Honduras existen bosques nubosos, el más grande ubicado cerca de la frontera con
Nicaragua.
En Nicaragua, los bosques nubosos están situados cerca de la frontera con
Honduras, pero muchos fueron talados para cultivar café. Todavía hay algunas colinas
templadas de hoja perenne en el norte. El único bosque nuboso en la zona costera del
Pacífico de América Central se encuentra en el volcán Mombacho en Nicaragua. En Costa
Rica, existen bosques de laurisilva en la Cordillera de Tilarán y Volcán Arenal, llamado
Monteverde, también en la Cordillera de Talamanca. Los bosques montanos de América
Central son una ecorregión del bioma de bosques latifoliados húmedos tropicales y
subtropicales, según la definición del Fondo Mundial para la Naturaleza.19-1
Estos bosques son del subtipo estacional caducifolio húmedo y semiperennifolio
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personas han muerto como resultado de estos desastres naturales. La mayor parte de
Centroamérica descansa sobre la Placa del Caribe. Esta placa tectónica converge con las
placas de Cocos, Nazca y América del Norte para formar la Fosa de América Central, una
importante Zona de subducción. La trinchera de América Central se encuentra en algunos
60-160 kilómetros (37-99 millas) de la costa del Pacífico de Central dentro de América y
corre más o menos paralela a ella. Muchos quetzal grandes, Se han producido terremotos
como resultado de la actividad sísmica en Guatemala. Se cree que la Placa de Cocos
debajo de la Placa de América del Norte en la Fosa de América Central causó el terremoto
de la Ciudad de México de 1985 que mató a 40.000 personas. La actividad sísmica en la
Fosa de América Central también es responsable de los terremotos de 1902, 1942, 1956,
1982, 1992, enero de 2001, febrero de 2001, 2007, 2012, 2014 y muchos otros
terremotos en América Central. La Fosa de América Central no es la única fuente de
actividad sísmica en América Central. La falla de Motagua es una continuación en tierra
de la depresión de Caman que forma parte del límite tectónico entre la placa de América
del Norte y la placa del Caribe.
Esta falla de transformación atraviesa Guatemala y luego continúa costa afuera
hasta que se fusiona con la Fosa de América Central a lo largo de la costa del Pacífico de
México, cerca de Acapulco. La actividad sísmica en la falla de Motagua ha sido responsable
de los terremotos de 1717, 1773, 1902, 1976, 1980 y 2009. Otra continuación en tierra
de la depresión de las Caimán es la falla Chixoy-Polochic, que corre paralela y
aproximadamente a 80 kilómetros (50 millas) al norte de la falla de Motagua. Aunque
menos activa que la falla de Motagua, todavía se cree que la actividad sísmica en la falla
de Chixoy Polochic es capaz de producir terremotos muy grandes, como el terremoto de
1816 en Guatemala. [31]Managua, la capital de Nicaragua, fue devastada por los
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millas cuadradas). Los valores del Índice de Desarrollo Humano provienen de las
estimaciones para 2017. [351Idiomas en Centroamérica (2010)El idioma oficial
mayoritario en todos los países centroamericanos es el español, excepto en Belice, donde
el idioma oficial es el inglés. Los idiomas mayas constituyen una familia de idiomas que
consta de aproximadamente 26 idiomas relacionados. Guatemala reconoció formalmente
a 21 de ellos en 1996. Xinca, Miskito y Garífuna también están presentes en
Centroamérica. - -Variaciones lingüísticas del español centroamericano clásico.
Grupos étnicos. Esta región del continente es muy rica en cuanto a grupos
étnicos. La mayoría de la población es mestiza, con importantes poblaciones mayas y
afrodescendientes presentes, incluidas las minorías xinca y garífuna. La inmigración de
árabes, judíos, chinos, europeos y otros trajo grupos adicionales a la zona. Mapa de
383
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América Central de los pueblos indígenas antes del contacto europeo Grupos étnicos en
Centroamérica (2010)
Grupos religiosos. La religión predominante en Centroamérica es el cristianismo
(95,6%) 371. A partir de la colonización española de Centroamérica en el siglo XVI, el
catolicismo romano se convirtió en la religión más popular en la región hasta la primera
mitad del siglo XX. Desde la década de 1960, ha habido un aumento de otros grupos
cristianos, en particular el protestantismo, así como otras organizaciones religiosas e
individuos que se identifican como no religiosos.1381• El protestantismo en
entre varios estados miembros. En 1991, la agenda de integración avanzó aún más con
la creación del Sistema de Integración Centroamericana (Sistema para la Integración
Centroamericana, o SICA). SICA proporciona una base legal clara para evitar disputas
entre los estados miembros. La membresía del SICA incluye las 7 naciones de
Centroamérica más la República Dominicana, un estado que tradicionalmente se
considera parte del Caribe. El 6 de diciembre de 2008, el SICA anunció un acuerdo para
buscar una moneda común y un pasaporte común para los países miembros. [39] No se
discutió un cronograma para la implementación. Centroamérica ya cuenta con varias
instituciones supranacionales como el Parlamento Centroamericano, el Banco
Centroamericano de Integración Económica y el Mercado Común Centroamericano. El 22
de julio de 2011, el presidente Mauricio Funes de El Salvador se convirtió en el primer
presidente pro tempore del SICA. El Salvador también se convirtió en la sede del SICA
con la inauguración de un nuevo edificio [40].
Economía. Ver también: Economía de Belice, Economía de Costa Rica, Economía
de El Salvador, Economía de Guatemala, Economía de Honduras, Economía de Nicaragua
y Economía de PanamáRepública Federal de Centroamérica, 4 Escudos (1835). Golpeado
en la ceca de San José, Costa Rica (se acuñaron 697)
Secretaría de Integración Económica Centroamericana. Firmado en 2004,
el Tratado de Libre Comercio de Centroamérica (CAFTA) es un acuerdo entre Estados
Unidos, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y República
Dominicana. El tratado tiene como objetivo promover el libre comercio entre sus
miembros. Centroamérica atraviesa actualmente un proceso de transformación política,
económica y cultural que se inició en 1907 con la creación de la Corte de Justicia
Centroamericana. En 1951 el proceso de integración continuó con la firma del Tratado de
San Salvador, que creó la ODECA, la Organización de Estados Centroamericanos. Sin
embargo, la unidad de la ODECA se vio limitada por conflictos entre varios estados
miembros. En 1991, la agenda de integración avanzó aún más con la creación del Sistema
de Integración Centroamericana (Sistema para la Integración Centroamericana, o SICA).
SICA proporciona una base legal clara para evitar disputas entre los estados miembros.
La membresía del SICA incluye las 7 naciones de Centroamérica más la República
Dominicana, un estado que tradicionalmente se considera parte del Caribe. El 6 de
diciembre de 2008, el SICA anunció un acuerdo para buscar una moneda común y un
pasaporte común para los países miembros. [39] No se discutió un cronograma para la
implementación. Centroamérica ya cuenta con varias instituciones supranacionales como
el Parlamento Centroamericano, el Banco Centroamericano de Integración Económica y
el Mercado Común Centroamericano. El 22 de julio de 2011, el presidente Mauricio Funes
de El Salvador se convirtió en el primer presidente pro tempore del SICA. El Salvador
también se convirtió en la sede del SICA con la inauguración de un nuevo edificio
385
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región. [43] [44] Sus principales exportaciones son café, azúcar, banano, petróleo, ropa
y cardamomo. De sus exportaciones anuales de 10.290 millones de dólares, [45] el 40,2%
va a los Estados Unidos, el 11,1% al vecino El Salvador, el 8% a Honduras, el 5,5% a
México, el 4,7% a Nicaragua y el 4,3% a Costa Rica. [46 ]
La región es particularmente atractiva para las empresas (especialmente las de
confección) debido a su proximidad geográfica a Estados Unidos, salarios muy bajos y
ventajas fiscales considerables. Además, la caída de los precios del café y otros productos
de exportación y las medidas de ajuste estructural impulsadas por las instituciones
financieras internacionales han arruinado en parte la agricultura, favoreciendo el
surgimiento de las maquiladoras. Este sector representa el 42 por ciento de las
exportaciones totales de El Salvador, el 55 por ciento de Guatemala y el 65 por ciento de
Honduras. Sin embargo, se cuestiona su contribución a las economías de estos países;
se importan materias primas, los trabajos son precarios y mal remunerados, y las
exenciones fiscales debilitan las finanzas públicas. [47]También son criticadas por las
condiciones laborales de los empleados: insultos y violencia física, despidos abusivos
(especialmente de trabajadoras embarazadas), jornada laboral, impago de horas
extraordinarias. Según Lucrecia Bautista, coordinadora del sector de maquilas de la firma
auditora Coverco, en las maquilas se infringen habitualmente las normas laborales y no
hay voluntad política para hacer cumplir su aplicación. En el caso de infracciones, la
inspección del trabajo muestra una notable indulgencia. Se trata de no desanimar a los
inversores. Los sindicalistas están sujetos a presiones y, a veces, a secuestros o
asesinatos. En algunos casos, los líderes empresariales han utilizado los servicios de las
maras. Por último, en los círculos de empleadores circulan listas negras con nombres de
sindicalistas o activistas políticos [47].Según las proyecciones, el crecimiento económico
en América Central se desacelerará ligeramente en 2014-15, ya que los factores internos
específicos de cada país compensan los efectos positivos de una actividad económica más
sólida en los Estados Unidos. [48]
Turismo El Gran Agujero Azul frente a la costa de Belice es un destino de
ecoturismo de primer orden. Es un sitio del patrimonio mundial de la UNESCO El turismo
en Belice ha crecido considerablemente en tiempos más recientes y ahora es la segunda
industria más grande del país. El Primer Ministro de Belice, Dean Barrow, ha manifestado
su intención de utilizar el turismo para combatir la pobreza en todo el país. [51] El
crecimiento del turismo ha afectado positivamente a las industrias agrícola, comercial y
financiera, así como a la industria de la construcción. Los resultados de la economía
impulsada por el turismo de Belice han sido significativos, ya que la nación recibió a casi
un millón de turistas en un año calendario por primera vez en su historia en 2012. [52]
Belice es también el único país de América Central que tiene el inglés como idioma oficial,
lo que hace de este país un destino cómodo para los turistas de habla inglesa. [53]Costa
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Rica es la nación más visitada de Centroamérica. [54] El turismo en Costa Rica es uno de
los sectores económicos de más rápido crecimiento del país, [55] habiéndose convertido
en la principal fuente de ingresos extranjeros en 1995. [56] Desde 1999, el turismo ha
generado más divisas que las exportaciones de banano, piña y café juntas. [57] El auge
del turismo comenzó en 1987, [56] con un número de visitantes que pasó de 329.000 en
1988, a 1,03 millones en 1999, a un récord histórico de 2,43 millones de visitantes
extranjeros y 1,92 mil millones de dólares en ingresos en 2013. [54] En 2012, el turismo
contribuyó con el 12,5 por ciento del PIB del país y fue responsable del 11,7 por ciento
del empleo directo e indirecto. [58]El turismo en Nicaragua ha crecido considerablemente
recientemente y ahora es la segunda industria más grande del país. El presidente de
Nicaragua, Daniel Ortega, ha manifestado su intención de utilizar el turismo para combatir
la pobreza en todo el país [59]. El crecimiento del turismo ha afectado positivamente a
las industrias agrícola, comercial y financiera, así como a la industria de la construcción.
Los resultados para la economía impulsada por el turismo en Nicaragua han sido
significativos, y la nación recibió un millón de turistas en un año calendario por primera
vez en su historia en 2010. [60]
Transporte. Vea también: Transporte en Belice, Transporte en Costa Rica,
Transporte en El Salvador, Transporte en Guatemala, Transporte en Honduras, Transporte
en Nicaragua y Transporte en Panamá Placas de matrícula centroamericanasCarreterasVer
también: Carreteras en BeliceLa Carretera Interamericana es la sección centroamericana
de la Carretera Panamericana y se extiende por 5.470 kilómetros (3.400 millas) entre
Nuevo Laredo, México y la Ciudad de Panamá, Panamá. Debido a la rotura de 87
kilómetros (54 millas) en la carretera conocida como el Darién Gap, no es posible cruzar
entre Centroamérica y Sudamérica en un automóvil. Vías fluviales. Ver también:
Categoría: Transporte por agua en Belice, Categoría: Transporte por agua en Costa Rica,
Categoría: Transporte por agua en Guatemala, Categoría: Transporte por agua en
Honduras, Categoría: Transporte por agua en Nicaragua, Categoría: Transporte por agua
en Panamá, Lista de ríos de Belice, Lista de ríos de Costa Rica, Lista de ríos de El Salvador,
Lista de ríos de Guatemala, Lista de ríos de Honduras, Lista de ríos de Nicaragua, Lista
de ríos de Panamá, Eco canal, Canal de Nicaragua y Canal de Panamá Puertos y
puertosVer también: Puertos de Belice, Categoría: Puertos y puertos de Guatemala, y
Categoría: Puertos y puertos de Panamá Aeropuertos. Vea también: Lista de aeropuertos
en Belice, Lista de aeropuertos en Costa Rica, Lista de aeropuertos en El Salvador, Lista
de aeropuertos en Guatemala, Lista de aeropuertos en Honduras, Lista de aeropuertos
en Nicaragua y Lista de aeropuertos en Panamá
Vías férreas. Artículo principal: Transporte ferroviario en Centroamérica Vea
también: Transporte ferroviario en Belice, Transporte ferroviario en Costa Rica, Transporte
ferroviario en El Salvador, Transporte ferroviario en Guatemala, Transporte ferroviario en
Honduras, Transporte ferroviario en Nicaragua y Transporte ferroviario en Panamá.
Educación. Lista de escuelas de arquitectura en Centroamérica Lista de
universidades en Belice Lista de universidades en Costa Rica Lista de universidades en El
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Revista de Temas Nicaragüenses
No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
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ANTROPOLOGÍA
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Una nueva cronología arqueológica para el Pacífico Nicaragüense
@ Geoffrey McCafferty- [email protected]
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ANTROPOLOGÍA
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Antropología
Rigoberto Navarro Genie y Roberto Sirias Pérez@ [email protected]
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Una nueva cronología arqueológica para el Pacífico Nicaragüense
@ Geoffrey McCafferty- [email protected]
sugirió una secuencia local para la isla de Ometepe, al igual que Paul Healy (1980)
para la región de Rivas y Silvia Salgado González (1996) para Granada. Estos son
útiles para interpretar los desarrollos locales, pero son difíciles para las
comparaciones entre regiones. Desde 2000, la cantidad de investigación
arqueológica en el Pacífico de Nicaragua ha aumentado dram áticamente.
Investigadores de la Universidad de Calgary (McCafferty 2010, en prensa), la
Universidad de Leiden, la Universidad de Saitama, y SUNY Plattsburgh han
realizado grandes proyectos, a menudo en colaboración con arqueólogos de la
Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua en Managua. Como resultado, se
han excavado numerosos sitios y se dispone de más de 60 fechas de radiocarbono.
La siguiente es una breve descripción de los sitios fechados en el Pacífico de
Nicaragua, junto con las fechas de radiocarbono. A continuación, se ofrecerá una
sugerencia para una nueva cronología específica de la región.
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Una nueva cronología arqueológica para el Pacífico Nicaragüense
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AYALA (Granada, Gr 2)El sitio Ayala está ubicado cerca de la base del volcán
Mombacho en el Departamento de Granada. Inicialmente fue muestreado por
Haberland (1978), pero Silvia Salgado González (1996) lo investigó más
extensamente durante su estudio regional. Posteriormente fue excavado
revelando ocupaciones de los períodos de Bagaces y Sapoá (Salgado González
1996: 437).BRITO (Rivas)Ubicado en la costa del Pacífico, Brito fue excavado
durante los preparativos para el canal interoceánico. El sitio consta de varios
montículos bajos dentro de un manglar. Las excavaciones recuperaron cerámicas
que representan toda la secuencia cerámica, y las fechas C14 confirman esta larga
historia de ocupación (Lechado y Balladares 2016). La interpretación funcional del
sitio fue para la producción de sal.
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SANTA ISABEL (Ri-44) Santa Isabel es un sitio a orillas del lago Cocibolca,
en el Departamento de Rivas. Santa Isabel fue excavada por primera vez por
Willey y Norweb a fines de la década de 1950 y principios de la de 1960 (Healy
1980), y en la década de 1990 fue inspeccionada por Niemel, quien también
realizó excavaciones a pequeña escala (Niemel 2003). Las excavaciones más
extensas fueron realizadas por la Universidad de Calgary entre 2000-2005
(McCafferty 2008; McCafferty y Steinbrenner 2005). Estos incluyeron el muestreo
de seis montículos bajos, probablemente casas (Figura 7) y numerosas urnas
funerarias.
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d.C. en lugar de la fecha correcta 1330 AP (Navarro Genie 1993). Por lo tanto, la
interpretación que asoció las fechas estatuarias al período de Ometepe debe
revisarse a unos 600 años antes. Las dos fechas de radiocarbono Beta pertenecen
a la característica alrededor de la intrusiva urna Espinoza Red Banded, sospechada
hasta la fecha del período Tempisque Tardío / Bagaces Temprano (ca. 100 -500
d.C). Sin embargo, las fechas del C14 son mucho más tardías. Se interpreta que
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vasos de resistencia negativa, incluidos vasos con pico, y vasos con incisión de
Bocana (Figura 15). El cementerio de Las Delicias incluía estas vasijas como ajuar
funerario, además de ocasionales piedras de moler. En Ticuantepe, se descubrió
un complejo funerario único durante un trabajo de construcción profundo. Dos
individuos adultos habían sido colocados sobre piedras de moler alineadas, y
estaban acompañados por un cuenco grande lleno de restos esqueléticos humanos
adicionales, así como varias ollas pequeñas de cerámica roja (Figura 16). La
asignación cronológica de este contexto fue proporcionada por Jorge Zambrana
con base en materiales comparativos. El contexto temprano en Sonzapote también
puede datar del período de Las Delicias, basado nuevamente en la identificación
de Zambrana de la cerámica Jobo Inciso y Espinoza Red Banded; el tipo cerámico
predominante en estos contextos tiene una superficie naranja con decoración
modelada e incisa que llamamos Sonzapote Orange (Figura 17). El volcán
Mombacho al sur de Granada experimentó un colapso catastrófico del flanco entre
200 y 300 d.C. (Shea et al. 2006; Stansell 2013), cuando miles de millones de
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con fechas del período Santa Isabel, esto puede haber representado un
crecimiento y diversificación de la población. La propia Santa Isabel puede haber
sido un "puerto de comercio" para la región (Chapman 1957), y fue el sitio de
fabricación de productos exóticos como piedra verde, conchas, textiles y joyas de
hueso tallado (McCafferty 2008; McCafferty y McCafferty 2008). Además de los
Policromes de Papagayo, se agregaron los Policromes de Bramadero, Vallejo,
Madeira y Pataky al conjunto de artículos para servir (Figura 24).El período de La
Paz (1250-1400 d. C.) está mejor representado por sitios a lo largo de la orilla del
lago Xolotlán. En particular, los principales sitios de Santa Isabel de El Rayo y
Santa Isabel parecen haber sido abandonados por esta época. Posiblemente, esto
podría ser una prueba de los cambios étnicos y la guerra implícita que se
mencionan en los textos etnohistóricos. La cerámica de diagnó stico de este
período puede incluir la continuación de los tipos anteriores, con la adición de
Luna y Policromo de Managua (Figura 25), pero el análisis cerámico detallado no
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Historia de vida
© Alexander Zosa-Cano – [email protected]
HISTORIA DE VIDA
137
Autobiografía Completa del General Emiliano Chamorro - Revista Conservadora No. 67. abril
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Hurtado y Plaza, Blas, and Carlos Molina Argüello. Memorial de mi vida. Managua: Banco de
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Pedrarias Dávila José Mejía Lacayo Pedro Arias de Ávila nació en 1468 y murió en
1531. Se casó con Isabel de Bobadilla; tuvieron nueve hijos: Diego Arias, regidor de
Segovia, que murió en 1529; Juan Arias, que murió en 1531; Beatriz de Bobadilla, monja
en las Dueñas de Sevilla; Francisco de Bobadilla, fraile de Santo Domingo de Piedrahita;
María de Peñalosa, casada con Rodrigo de Contreras; Catalina Arias, monja en San
Antonio el real de Segovia; Isabel de Bobadilla, casada con Hernando de Sota; Arias
Gonzalo, II conde de Puño en rostro, Elvira Arias, casada con Urbano Arellano. Llama la
atención que hay tres hijos, Beatriz e Isabel de Bobadilla, y María de Peñalosa, casada
con Rodrigo de Contreras, que no llevan el apellido Arias. En España a lo largo del tiempo
han ido constituyéndose numerosas familias (hidalgas, nobles, campesinas, urbanas,
aristocráticas) que han ido nombrándose con diversos apellidos, aunque recién su sistema
de apellidar a las personas se adoptó legalmente en 1870, según la tradición de usar dos
apellidos; uno paterno y uno materno. Los primeros registros sobre los apellidos en
España se remontan al último tercio del siglo IX, cuando se formaban por derivación del
nombre del padre o de un antecesor del portador en las clases nobles. Esta costumbre
se fue extendiendo hacia todas las clases sociales décadas más tarde. Para la segunda
mitad del siglo XII empiezan a utilizar términos con los que designar linajes concretos
utilizando para ello su lugar de origen o de señorío; entre los siglos XIV y XVI se comenzó
a utilizar el patronímico como una prolongación del nombre, independientemente de cuál
sea el nombre del padre, y se basa en imponer a cada recién nacido el patronímico de la
persona en cuyo honor se le ha puesto el nombre. Con la conquista y colonización
hispánica de América, se fueron instalando varias familias en las colonias cuyos registros
fueron multiplicándose. En la década de 1990, se promulgó una nueva legislación que
permitía la alteración del orden de los apellidos en España con la intención de acomodar
la igualdad de derechos entre hombre y mujer.Los primeros registros sobre los apellidos
en España se remontan al último tercio del siglo IX, cuando se formaban por derivación
del nombre del padre o de un antecesor del portador en las clases nobles. Esta costumbre
se fue extendiendo hacia todas las clases sociales décadas más tarde. Para la segunda
mitad del siglo XII empiezan a utilizar términos con los que designar linajes concretos
utilizando para ello su lugar de origen o de señorío; entre los siglos XIV y XVI se comenzó
a utilizar el patronímico como una prolongación del nombre, independientemente de cuál
sea el nombre del padre, y se basa en imponer a cada recién nacido el patronímico de la
persona en cuyo honor se le ha puesto el nombre. Con la conquista y colonización
hispánica de América, se fueron instalando varias familias en las colonias cuyos registros
fueron multiplicándose. En la década de 1990, se promulgó una nueva legislación que
permitía la alteración del orden de los apellidos en España con la intención de acomodar
la igualdad de derechos entre hombre y mujer. Sabemos que, en su origen, el apellido
familiar aparece con la finalidad de distinguir a unas personas de otras cuando llevan el
mismo nombre de pila. En principio, en casi todas las culturas, se adoptó para esta
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Historia de vida
© Alexander Zosa-Cano – [email protected]
hacía oficiar su propio funeral. Tan siniestro ritual, según parece, se debía a que unos
años antes de viajar a América sufrió una catalepsia y fue enterrado. En pleno funeral,
Pedrarias se despertó y, a partir de entonces, en el aniversario de aquel extraño suceso
y en ocasiones señaladas, se hacía oficiar el funeral en vida, siempre dentro del ataúd
como agradecimiento al divino suceso. Para dar ánimos a sus hombres y también para
amedrentar a sus enemigos, solía decir: “Don Pedro Arias no teme a nada, ya murió y a
la misma muerte venció”. ■
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Historia de vida
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DERECHO
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Derecho
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RESEÑAS
Editor: Alexander Zosa-Cano
[email protected]
Se reciben reseñas tanto críticas como descriptivas. Enviarlas d irectamente
al editor de la sección. Las descriptivas
describen el libro sin juzgarlo. Son
importantes porque permiten al lector tener
un conocimiento más profundo del libro aún
antes de leerlo. Las reseñas críticas, por lo
contrario, juzgan el contenido, sus méritos
y sus defectos manteniendo un espíritu
objetivo y un lenguaje académico. El
criterio del editor es que una reseña es una
forma de crítica literaria en la que un libro
se analiza en base al contenido, el estilo y el mérito. Debe evaluar los aci ertos y
desaciertos del autor con un nivel académico. No debe ser un panegírico del autor,
sino una guía para el lector. La reseña debería ser una fuente primaria de opinión
que oriente al lector antes de comprar o leer el libro.
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Flora de Nicaragua: Reseña de la exploración botánica
© W. D. Stevens y Olga Martha Montiel – [email protected]
tópicos que, uno tras otro, los libros de historia han venido sosteniendo. Pero el
libro de Bethany Aram no es una reinterpretación de textos y documentos ya
conocidos, no se limita a expresar una opinión más, si bien contraria a la
tradicional, sino que, además, saca a la luz una base documental inédita que
queda ya a disposición de otros estudiosos que quieran realizar sus propios
análisis históricos, pero ahora basándose en hechos documentados y no en
leyendas. Sin embargo, el análisis más interesante que realiza la autora en este
libro trasciende los límites de los dos personajes biografiados y se adentra en las
motivaciones de la Corona para acometer la conquista. Convencida de que
Pedrarias, a diferencia de lo que era habitual entre los grandes capitanes de esta
aventura, fue un fiel y leal ejecutor de las directrices reales, se ve obligada a
estudiar éstas para entender a aquél. Las conclusiones son duras, pero alejadas
tanto de las opiniones sectarias de la Leyenda Negra como de la visión edulcorada
de la leyenda «patriótica». Son juicios bien documentados que, al ser emitidos
por quien ha demostrado su amor y afinidad hacia nuestro país al casarse con un
español, afincarse en Sevilla y nacionalizarse española, deben ser considerados
con respeto. A los pueblos les ocurre como a las personas, que sólo cuando
conocen y aceptan su verdadera historia son capaces de superar los trauma s de
su pasado y madurar. Pero la autora no es simplemente una investigadora erudita
y esforzada, sino que combina su voluntad de análisis con una gran capacidad de
síntesis que le permite, con mucha intuición, pasar de los hechos concretos a
conclusiones de carácter general que afectan tanto a la conquista como a la
política de Castilla o a la psicología y sistema de valores del hombre del siglo XVI.
Todo esto, contado en una prosa ágil, a veces irónica, pero siempre clara y directa,
hace que la lectura de este estudio resulte apasionante. En fin, como español y
como entusiasta de la Historia, no puedo sino manifestar mi agradecimiento a
Bethany Aram por el honor que me hace pidiéndome que prologue este excelente
libro y por su interés y dedicación abnegada a nuestro país y su pasado, con el
convencimiento de que su carrera se verá coronada con otros muchos éxitos. El
Conde de Puñonrostro. ■
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GENEALOGÍA
© RTN – [email protected]
GENEALOGÍA
433
La familia Alvarez
© RTN – [email protected]
La familia Alvarez
Pío Bolaños Álvarez
Los siguientes datos genealógicos concernientes a la familia Alvarez,
se resumen de apuntes escritos por don Pío Bolaños Alvarez —de su
puño y letra— en un cuaderno de familia. Advierte don Pío que los
reconstruyó con base en datos que su abuelo, don Macario Alvarez
Valero, había reunido en un libro de memorias que se perdió en el
incendio de Granada (1856) llevado a cabo por el filibustero
Henningsen, y que volvió, el propio don Macario, a ordenar años más
tarde, basándose en lo que recordaba. El primer miembro, pues, de la
familia Alvarez en Nicaragua, resultaría ser:
I. — Doña Teresa Alvarez. Según consta en las notas de don Macario,
doña Teresa tuvo un hijo —Tomás (1)—con un señor Ortega, y dos
hijos naturales que cargaron con el apellido materno: Simona (2) y
Francisco (3).
II. — Francisco Alvarez (3), casó don doña Petrona Engracia Valero.
III. — Hijos de este matrimonio fuerbn: José Antonio Alvarez Valero
(A); Emigdio Alvarez Valero (B); Alejandro Alvarez Valero (C);
Macario Alvarez Valero ID);
Teresa Alvarez Valero (E);
Don Macario Alvarez Valero nació en Granada en noviembre 11 de
1809 y casó, en León, con doña Dolores Zelaya el agosto 15 de 1835.
Doña Dolores era hija natural de Francisca Zelaya y del cura de
Managua Presbítero Policarpo Irigoyen, de familia granadina.
IV. — Del matrimonio de don Macario Alvarez Valero con doña
Dolores Zelaya, nacieron los siguientes nueve hijos:
Macario Justo (a) que murió soltero y muy jovencito; Francisco Pío
(b) casado en Costa Rica con Josefa Bolandi;
Dolores Engracia Id, nacida en León en diciembre 14 de 1839, casada
el enero 22 de 1871 con don PIO BOLAÑOS BENDAÑA, y fallecida
en Granada el marzo 16 de 1932;
Modestana Rosalía (d), soltera;
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Revista de Temas Nicaragüenses
No. 165 –Enero 2022 – ISSN 2164-4268 - http://www.temasnicas.net/
También están relatadas en las Memorias las varias salidas del joven
Bolaños del país; sus primeros contactos con los gobernantes
liberales (el Jefe del Estado, pariente cercano, empezó a quererlo y a
protegerlo desde los comienzos de su período presidencial); la
participación en los hechos revolucionarios de Panamá, en los que se
halló mezclado por puro espíritu de aventura, y que ninguna seria
razón podría explicar; el viaje a Sur América y el regreso a Nicaragua
por deseo del propio Presidente, su siempre más íntima colaboración
con él en los años sucesivos.
De vuelta al país, y siguiendo una tradición que siempre ha florecido
en Nicaragua, don Pío entra en la política por la puerta del
periodismo. Sus compañeros en esta etapa —y vale la pena
evidenciarlo-- son dos jóvenes de su misma formación y procedencia
social: Adolfo Vivas y Hernán Guzmán, sobrino el primero, hijo
natural el segundo, de don Enrique Guzmán, máximo representante
entonces, con Anselmo H. Rivas, de la intelectualidad conservadora.
Son todos ellos tránsfugas —por así decirlo— del bando político
granadino, y juntos, fundan La Democracia, en la que don Pío
escribirá las crónicas sociales, Vivas los editoriales; y Hernán, con el
seudónimo de El caballero de la Tenaza polemizará con su propio
padre, a la sazón en Costa Rica.
Poco después (1901) encontramos a don Pío secretario de la
Delegación nicaragüense al Congreso Jurídico Centroamericano que
se celebra en El Salvador; encabeza la Delegación el Dr. Bruno
Hermógenes Buitrago, abogado leonés de los más estimados, y
político de intachable honradez. En San Salvador, como delegado de
Honduras, hallarán, ya viejo, a don José Leonard, antiguo profesor en
los colegios de Granada y León y famoso por el discurso pronunciado
en la inauguración del Instituto de Occidente, discurso que tantas
polémicas ocasionara, hallándose entre las causas de los disturbios
culminados en la expulsión de los Jesuitas.
El año sucesivo (1902), siendo el anciano don Hilario Selva, (tío
materno de don Enrique Guzmán), Jefe Político y Comandante de
armas en Granada, es descubierto, se cree por lo menos descubrir, un
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viaje a los Estados Unidos. No tenía mucho que alistar para mi viaje,
así es que resolví salir para Corinto el 24 ó 25 de Mayo, a fin de
esperar ahí el vapor que me llevaría a Panamá". (3).
Hay en la página que hemos transcrito, una frase que vale la pena
subrayar, y es la que se refiere a la alegría que los familiares de don
Pío manifestaron a la noticia de su viaje. No parece atrevido suponer
que la activa militancia política del joven Bolaños, y sobre todo la
misión que había Ilevabo a cabo el año anterior, le habían ocasionado
hondos resentimientos y enemistades en su propia ciudad y entre el
círculo conservador, vencido pero siempre poderoso.
A la estancia en New York como Cónsul de Nicaragua, y a todo lo
que ese período significó para don Pío, están dedicados las últimas
páginas de sus Memorias (que desgraciadamente llegan sólo hasta
1903) y a ellas podrá acudir directamente el lector deseoso de mayores
detalles.
Veamos ahora sucintamente lo que pasó años después, cuando, a raíz
del derrumbamiento del gobierno liberal, don
(3) Ibldem, págs. 46.47.
Pío se trasladó a Costa Rica, país en el que vivió cincuenta años más y
en donde murió.
Nombrado Cónsul en New York, Don No, que mientras tanto habíase
casado (el 31 de Mayo de 1906) con una hermosa señorita
costarricense de origen italiano, Doña Alice Annunziata Ulloa Loría
(30-3-1886 - 16-3-1932) vivió muchos años en la metrópoli
estadounidense, donde, entre otras cosas, se mantuvo en amistosas
relaciones con Rubén Darío. Datan de esta época las composiciones
en verso que el poeta escribió en loor de doña Alice, y que
reproducimos en apéndice.
Al sobrevenir la revolución de Mena y la renuncia de Zelaya, don Pío
se vino a Nicaragua, antes a Managua, luego a Granada, y luego a
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Managua, otra vez. En 1912, después de sus tres primeros hijos, Luis,
Juan José y Doris de Jesús, nacieron los gemelos Oscar y Hernán.
La situación de Nicaragua era entonces de mucho cuidado: habían
desembarcado los marinos norteamericanos, se desataban las
pasiones, el hambre probaba duramente a la población (el hijo mayor
de don No, ingeniero Juan José Bolaños, aún recuerda, según nos
contó en amena charla, los "maizoles" —unos panes de maíz
bastantes desagradables— que se comían entonces).
Don Pío envió la familia a San José y se reunió con ella en la capital
costarricense allá por el año de 1914 en víspera de la primera guerra
mundial. Alejado ya de la militancia política, aún cuando nunca
perdiera los contactos con desterrados nicaragüenses, se dedicó a
reorganizar su vida familiar y entró en los negocios, tras haber vivido
inicialmente en la casa de la suegra Loría Iglesias. En 1915 emprende
otro viaje a los Estados Unidos, donde obtiene la representación para
Costa Rica de la casa automovilística Dodge, que se manejará en San
José junto con un cuñado Hernán Ulloa. También pertenece a los dos
una casa importadora de géneros varios, y en 1917, la segunda bomba
de gasolina que aparece en San José. Por algunos años los negocios
proceden satisfactoriamente y don Pío conoce un período de
tranquilidad y paz. En 1917 suben al poder en Costa Rica los
hermanos Tinoco y don Pío, íntimo de uno de los principales
opositores del Gobierno, el Dr. Gustiniani, tiene que esconderse. Lo
ayudan en esta época los señores Coto y don Francisco Aguilar
Barquero qué será presidente por un corto período después de los
Tinoco. Sigue don Pío manteniendo activos contactos con los
nicaragüenses, tanto en su patria como en Costa Rica y en 1925 hace
su primer viaje a Nicaragua de donde se va otra vez a los Estados
Unidos para cuidar de sus negocios. Don Francisco Orlich, padre del
futuro presidente de Costa Rica y buen amigo de don Pío, le confía al
hijo que va a Boston: esperándolos en la estación, encontramos a otro
personaje (entonces muy joven) del que volveremos a oír hablar: don
Pepe Figueres, también futuro presidente, y por tres veces, de Costa
Rica.
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1. Abaunza
Duque, Estrada Sacasa, Esteban: Nicaragua /Historia y familias. 1821-
1833. Managua, Xerox de Nicaragua, 2001, 179 p. Recuento de los hechos a raíz
de la independencia y de la participación en ellos de numerosos personajes, de
quienes se trazan micro biografías políticas, centradas en sus interrelaciones
familiares. Acota datos sobre la antigüedad de las familias (ninguna desciende de
conquistadores o “primeros pobladores” del siglo XVI), la endogamia, los
emigrantes e inmigrantes, militares y clérigos, hijos de extracción humilde e
ilegítimos. Lo complementa un anexo –nueve cuadros genealógicos– sobre las
familias Abaunza, Agüero, Argüello, Bolaños, de la Cerda, Chamorro, Díaz de
Mayorga, Sacasa y Zavala. Los Abaunza tienen su origen en el matrimonio de
Benito José de Abaunza y María Antonieta Martínez de Tinerol, padres de Justo
Abaunza Martínez, quien encabezó el gobierno provisional de León (agosto –
noviembre, 1851), tras el golpe de estado que el general Trinidad Muñoz dio al
gobierno constituido de José Laureano Pineda. Genealogista de afición, el autor
ha recurrido a 438 “fuentes” (la mayoría orales, pero incluyendo también
documentos primarios) para registrar 40,233 personas y 15,141 familias
(matrimonios e hijos), en su mayor parte de Centroamérica. Honestamente,
corrigió errores de su libro reseñado en RAGHN , tomo LXI, noviembre, 2005, pp.
151-152.
2. Alonso, Kühl Aráuz, Eddy: Matagalpa y sus gentes. Managua, Publicaciones y
Servicios , Nicaragua Fácil. 2000. 448 p. En el segundo y cuarto capítulo se provee
información acerca de unas cincuenta familias de inmigrantes europeos, desde el
matrimonio formado por los alemanes Luis Elter (1814-1916) y Katharina Braun
(1830-1887), introductores del cultivo cafetalero y de unas ochenta naturales del país.
Entre ellas, las de apellido Alonso, Amador, Aráuz, Arneto, Baldizón, Cantarero,
Guevara, Mantilla, Maradiaga, Montes, Navarro, Somarriba y Zeledón.Los Alonso
provienen del chileno Domingo Alonso de la Vega, quien arribó en un barco de vela
–desde Valparaíso– al Realejo; trasladado a León, fue el padre de Domingo Alonso
Veira, casado con Mercedes Jerez Quiñónez; de este matrimonio nacieron diecisiete
hijos: los Alonso Jerez. Uno de ellos, Domingo Alonso Jerez, conoció a la matagalpina
Concepción García Vega, con quien contrajo matrimonio y tuvieron cuatro hijos: Elías,
Ernesto, Domingo y Paula Alonso García. Elías es el padre de Elías Alonso Rosales
(1919-1994), progenitor de Mario J. Alonso Icabalceta, Presidente del Banco Central
de Nicaragua.
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Libros de familias e investigaciones genealógicas
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9. Cardenal, Cardenal A., Luis G.: La Familia Cardenal. San Salvador, Talleres
Gráficos, UCA, 1998. 590 p., il.El más extenso libro de familia nicaragüense. De
contenido suigéneris, lleva prólogo por Norman J. Caldera Cardenal, autor del
capítulo IX: “Árboles genealógicos de la familia Cardenal” (pp. 557 -590). Le
preceden: “I. El Fundador [Juan Lorenzo Cardenal Loinaz: 1766 -1845]; II. El
Canciller [Pedro Cardenal Ayerdi: 1817-1875]; III. El Abuelo [Salvador Cardenal
Saborío: 1859-¿ ]; IV. El Candidato [Julio Cardenal Argüello: 1887-1975]; V. La
Casa de los Leones; VI. El Comandante [Luis G. Cardenal A.: 1925 -1999]; VII.
Semblanzas [de siete figuras representativas] y VIII. Anexos” [otras semblanzas,
redactadas a última hora de Carlos: 1903-1978 y Rodolfo: 1896-1994, ambos
Cardenal Argüello y tíos de Luis G. Cardenal; más el de su sobrino Antonio
Cardenal Caldera, “Jesús Rojas”, guerrillero del FLMN, asesinado en El
Salvador].Reproduce numerosas cartas y centenares de fotografías, la mayoría de
las cuales corresponden al autor desde niño hasta sus últimos días, autollamado
“Comandante”, ya que lo fue “de dedo” –y por tres meses– en Olama y Mollejones,
como lo reconoce (p. 303). No contradice la dedicatoria: “He tratado de evitar,
hasta donde es posible, exponer hechos negativos sobre ellos [sus familiares];
pero tampoco es posible escribir un libro real, sincero, legítimo, diciendo mentiras
favorables o solo cosas bonitas”. Y admite que su libro “podría haber sido mejor
si los miembros de la familia hubieran contribuido más” (p. 9). Los Cardenal –
originalmente de León y trasladados luego a Granada y Managua – entroncaron,
aparte de las citadas, con otras familias: Alemán, Chamorro, Cuadra, Martínez,
Oyanguren, Pellas, Portocarrero, Tellería, Terán y Vargas. Véase a Marco A.
Cardenal, autor de una genealogía inédita de su familia ( Nicaragua y su historia,
Op., cit., p. 209).
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11. Cuadra, Cuadra Pasos, Carlos: “Los Cuadra: una hebra en el tejido de la
historia de Nicaragua”. RCPC , Libro del Mes, núm. 83, agosto, 1967, pp. 1-26.
Pionero como libro de familia en el país y acaso en Centroamérica. Algunos
capítulos se anticiparon en revistas de los años cincuenta. Inconclusa, esta obra
fue “hecha con gran amor […] y es una inapreciable herencia para nosotros sus
hijos y un valioso aporte para la historia de Nicaragua” (“Una aclaración de su
hijo Pablo Antonio”). Utiliza documentos familiares conservados desde el siglo
XVII. Se reprodujo en el volumen I de las Obras (Managua, Colección Cultural
Banco de América, 1976, pp. 11-101) del autor. Vivas Benard, Pedro Pablo:
“Familia Cuadra en Nicaragua”, RCPC, núm. 83, agosto, 1967, pp. 1-36. Contiene
1.934 descendientes de Antonio de la Quadra Sánchez, primero del apellido que
se estableció en Nicaragua. Casado con Sebastiana de Gutiérrez, procreó a
Santiago, nacido en Granada y bautizado en la parroquia de la ciudad el 6 de
octubre de 1718.La descendencia de José Joaquín Quadra Lugo (1822 -1880) y
Virginia Pasos Arellano (1839-1906) ha sido actualizada por su actual nieto de
mayor edad en Pinceladas familiares (Managua, s. i., 2005, pp. 8-10) y en la
bisagra histórica: “José Joaquín Quadra [Cardenal], ( La Prensa, 20 de junio,
2005).
12. Darío. Cuadra Cea, Luis: “Genealogía de la familia de Rubén Darío: de 1610
a 1967”. RAGHN, tomo XXXII, enero-junio, 1967, pp. 6-26. Precedida de una
conferencia que pronunció en el Teatro Municipal de León la noche del 6 de
febrero de 1936, el autor detalla los miembros de doce generaciones. Parte del
Capitán don Alonso Díaz de Mayorga, “descendiente del Cid Campeador por línea
recta de varón” (p. 23), casado en León con Juana Ortiz. Terminó de elaborarse
el 1 de mayo de 1967. Un “Árbol genealógico de Rubén Darío”, menos profuso y
más claro, se había publicado en el volumen de autores varios: Nicaragua y Rubén
Darío en el XXV aniversario de su muerte. Managua, Publicaciones del “Comité
Nacional Rubén Darío”, 1941, p. 151.
13. De la Cerda, Romero Vargas, German: “La aristocracia
nicaragüense en el siglo XIX”. Cuadernos Universitarios [León], 2ª época, núm.
XXX, 1971, pp. XX; reproducido en BNBD , núm. 112, julio-septiembre, 2001, pp.
133-156. Síntesis anticipada de lo que sería el libro segundo de la segunda parte
de su obra Las estructuras sociales de Nicaragua en el siglo XVIII. Especifica el
poder económico, el social y el político, principalmente, de las familias de León y
Granada. Entre las primeras, destaca a los Sarrias; entre las segun das, a los
Sacasa. No omite a los Vílchez y Cabreras de Nueva Segovia, establecidos en
León; ni a los de la Cerda en la villa de Rivas. Los cuatro hermanos de la Cerda
(Francisco, Álvaro, José y Leonardo) y sus cónyuges e hijos, “por sus alianzas
matrimoniales, por los cargos municipales, por sus bienes, por el número de
esclavos y sirvientes, y por su cultura intelectual se distinguían de las otras
familias españolas de Rivas”.
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17. Guzmán, Vivas Benard, Pedro Pablo: “Familia Guzmán”. RCPC, núm.
86, noviembre, 1967, pp. 48-54.Breve genealogía que abarca ocho generaciones
a partir del progenitor de la familia en el siglo XIX: el presbítero Camilo Solórzano
Miranda, quien tuvo con Rosa Guzmán un hijo único: Fernando Guzmán Solórzano
(1811-1891), presidente de Nicaragua (1867-1871). Casado con Fernanda Selva
Estrada, Guzmán Solórzano –o viceversa– procreó ocho hijos: los Guzmán Selva.
Cuatro de ellos sobresalieron: Enrique (periodista y filólogo), Gustavo (erudito),
Horacio (diplomático) y Constantino (médico). Cerutti, Franco: “El asunto
Guzmán–Selva”. Anuario de Estudios Centroamericanos, núm. 2, San José,
Universidad de Costa Rica, 1976, p. 189.Cuadro genealógico que demuestra el
parentesco –primos hermanos– de Enrique Guzmán Selva (1843-1911) y Carlos
Selva Jiménez (1838-1912). La madre del primero, Fernanda Selva Estrada, era
hermana de José Dolores Selva Estrada, a su vez casado con Cipriana Jiménez.
“Tanto doña Fernanda como don José Dolores eran hijos legítimos de don Silvestre
Selva (1777-1855), Jefe de Estado en el año 1844 cuando la guerra de Malespín,
y de doña Sabina Estrada, una inquieta y talentosa dama costarricense, amiga de
Walker…” (p. 144).Don Silvestre –aclara el investigador– “era hijo natural de una
señora Selva con don Roberto Sacasa Marenco […] El matrimonio Selva-Estrada
tuvo por lo menos nueve hijos legítimos: Fernanda, Justa, Isidra, Lorenza, José
Dolores, Silvestre, Pedro Higinio, Hilario y Raymundo, sin incluir a una hija natural
–Salvadora– que don Silvestre tuvo con doña Manuela Castrillo” (p. 145).
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21. Mejía, Mejía Lacayo, José: “Los Mejía Bárcenas”. Inédito. 20 h. (en
prensa).Acuciosa investigación genealógica centrada en los nueve hijos de José
Antonio Mejía Bermúdez (nacido en Nandaime el 11 de abril de 1811) y María del
Carmen Bárcenas (1830-1900). Basada en fuentes primarias (fe de bautismos,
apuntes manuscritos de ascendientes, etc.) y secundarias (el “Diario íntimo” –ya
publicado– de Enrique Guzmán Selva), destaca la actuación política del primero,
bisabuelo del autor. Sólo uno de los hijos (José de la Trinidad: 1856 -1907) no
nació en Granada, sino en la “La Flor”, hacienda chontaleña (hoy departament o
de Río San Juan), donde vivió la familia desde el 22 de enero de 1855 hasta finales
de septiembre de 1857. Allí murió Ana Mercedes Escolástica (1846 -1955). Los
otros hijos fueron: José Antonio Vicente (1848-1924), Segundo Bernabé de los
Reyes (1850), Manuel y Dolores Josefa Benancia (sic), gemelos; María del Carmen
(1853-1919), Josefa Margarita de Jesús (1859- ¿) y Camilo Adolfo ( ¿-1896).Más
de cuarenta mil nicaragüenses llevan el apellido Mejía como primer o segundo
apellido, entre otros los Delgado (5,234), Lacayo (4,155), Marenco (3,735) y
Avilés (2,949). Tres ramas independientes de Mejía se deslindan: los de Oriente
(Granada y Masaya), Las Segovias y Chontales. La primera está emparentada con
las familias Avilés y Cuadra. José Antonio Mejía Bárcenas, tenedor de libros, era
dueño de una finca en Campuzano; Bernabé fue diputado liberal por Managua y
suscribió la constitución de 1893; Manuel tuvo una librería en Granada desde 1880
hasta 1891, año en que se trasladó a Guatemala y editó textos para ese gob ierno
en San Francisco, California; José, autor del libro Tabla de equivalencias, pesos y
medidas (1893), casó con Amanda Marenco en 1896, no sin haber procreado con
Ángela Chamorro, de Managua, tres hijos; y Camilo –como los anteriores– era
“inteligente, activo, enérgico, decente”, según el obituario de su amigo Enrique
Guzmán Selva.
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24. Pallais, Mínguez, J. J.: “Familia” [de Azarías H. Pallais: 1884-1954], en “El
Padre Pallais y sus glosas”. Analecta Calasanctiana [Salamanca], vol. XXI, enero-
junio, 1979, pp. 83-84.Datos básicos de los ascendientes del poeta y sacerdote.
El judío francés Henry Pallais Kertangille, casado en 1838 con Josefa Bermúdez
Jerez, es su abuelo; Santiago Desiderio Pallais Bermúdez (1839 -1911), médico,
su padre; tuvo doce hermanos. Una tía suya, Salvadora Pallais Bermúdez (1843 -
1905) fue la esposa de Louis Enmanuel Debayle Montgolfier; de este matrimonio
nació el médico Luis H[enry] Debayle Pallais (1865-1938). Este contrajo nupcias
con Casimira Sacasa (1872-1853), hija de Roberto Sacasa (1840-1896),
presidente de Nicaragua (1889-1893), hermana de Juan B. Sacasa (1874-1946),
otro mandatario efímero (1933-36), suegra del dictador Anastasio Somoza García
(1896-1956), presidente (1937-1947 y 1951-1956) y abuela materna de Luis y
Anastasio Somoza Debayle, también presidente: el primero durante un período
(1957-1963) y el segundo en dos (1967-1971 y 1974-1979).
25. Rodríguez, Rodríguez Serrano, Felipe: Estudio genealógico de las familias
Matuz y Rodríguez. Managua (s. i.), 1963, pp. 21-46. Segunda parte del título ya
citado. Francisco Rodríguez es el primer miembro conocido de esta familia
jinotepina. Casó con Catalina Mora y tuvo cinco hijos. La primera, Evarista
Rodríguez Mora, nació en Jinotepe el 26 de noviembre de 1807. Su fe de bautismo
dice que era mulata, como sus padres. Entre los miembros destacados de esta
familia figura Felipe Rodríguez Mayorga (1875-1958), Encargado de Negocios de
Nicaragua en los Estados Unidos y destinatario de la famosa Nota Knox.
26. Romero, Grassiano, María Dominica: “Los Romero, árbol genealógico”, en
Con María para todos como Don Bosco. Se llama María Romero Meneses de
Nicaragua. Roma, Instituto María Auxiliadora, 1987, pp. 12-13. Interesante
cuadro de los ascendientes y familiares de la beata que llevan otros apellidos:
Arana, Bendaña, Burgos, Cuadra, Guillén, Lugo, Marenco, Mesa, Ocón, Ortega,
Sacasa, Salaverry.
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UNIVERSALES
piensa que su forma de vida es más normal que la forma de vida de otras
personas.■
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Filosofía china
Wikipedia
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Era imperial Durante la breve dinastía Qin, cuya filosofía oficial era el
legismo, se realizó una persecución contra las escuelas mohista y confucianista.
El legismo siguió siendo influyente hasta que los emperadores de la dinastía Han
adoptaron el taoísmo y el confucianismo como doctrina oficial. Estas dos últimas
fueron las doctrinas filosóficas dominantes hasta el siglo XX, con la entrada del
budismo (Durante la dinastía Tang), negociada durante mucho tiempo, porque se
pensaba que era similar en muchos aspectos al taoísmo. Él Neoconfucianismo
restablecía los viejos principios confucianos aparecidos durante la dinastía Song,
con características del budismo, del taoísmo y del Legismo. Fue popularizado más
adelante durante el reinado de la dinastía Ming. La influencia del taoísmo y del
confucianismo a menudo se describen en la siguiente frase: "Los chinos son
confucionistas durante el día y taoístas por la noche". También, muchos chinos
mandarines eran funcionarios en la vida laboral y poetas o pintores en su tiempo
libre.
Era moderna Durante las edades moderna e industrial, la filosofía china
comenzó a integrar conceptos de la filosofía occidental, como pasos hacia la
modernización. Durante la Revolución de Xinhai se produjeron numerosos
levantamientos, como el del cuatro de mayo, que suprimieron totalmente las
viejas instituciones y prácticas imperiales de China. Por esta época hubo
tentativas de incluir conceptos como Democracia, Republicanismo o
Industrialización en la filosofía china, sobre todo por Sun Yat-sen al comienzo del
siglo XX, mientras que Chen Tu-Hsiu introdujo el marxismo y el trotskismo, y otras
doctrinas comunistas. Posteriormente Mao Tse-Tung incluyó el estalinismo para
orientar al Partido Comunista Chino hacia su propia versión de Socialismo con
características chinas, que en el uso popular es conocido como Maoísmo. Cuando
el Partido Comunista de China subió al poder, las escuelas filosóficas anteriores,
exceptuando el taoísmo, fueron suprimidas durante la Revolución Cultural. Sin
embargo, las antiguas doctrinas aún tienen influencia en la filosofía china. En la
actualidad, el gobierno chino está interesado en promover un socialismo de
mercado. Desde el movimiento radical de la Revolución Cultural, el gobierno chino
ha pasado a ser más tolerante con las prácticas filosóficas y religiosas
tradicionales. La constitución de 1978 de la República Popular de China garantiza
"libertad de culto", siempre y cuando éstas no atenten contra la soberanía de la
República Popular. Se ha permitido el establecimiento o restablecimiento de
instituciones espirituales y filosóficas, ya que el PCC no las ve como una amenaza,
aunque son vigiladas y controladas por el Estado. Las doctrinas del pasado aún
están muy inculcadas en la cultura china. Al igual que la japonesa, la filosofía
china se ha convertido en una amalgama de ideas. Acepta nuevos conceptos, pero
no olvida sus viejas creencias.
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Legalismo
El legalismo o legismo (chino 法家 pinyin fǎjiā, escuela de 'métodos' o
'estándares')10 fue una escuela filosófica china que se centraba en la filosofía
política, las leyes, la realpolitik y la gestión burocrática.11 Ignorando en gran
medida la moralidad o las visiones idealizadas de cóm o debería ser la sociedad,
se centraron en el gobierno pragmático a través del poder del autócrata y el
estado. Su objetivo era lograr el orden social, seguridad y estabilidad.12 Siglos
más tarde, las ideas del legalismo influyeron en las del régimen maoí sta.13Una
figura clave de esta escuela fue el administrador y filósofo político Shen Buhai (c
400-337 a.C.).14 Otra figura central, Shang Yang (390-338 a.C.), fue un destacado
reformador que transformó el estado Qin en el poder dominante que conquistó el
resto de China en 221 a.C.15 El sucesor de Shen, Han Fei (c.280 - 233 a.C.)
sintetizó el pensamiento de los otros legalistas en su texto homónimo, el Han
Feizi, uno de los textos legalistas más influyentes que fue utilizado por los
sucesivos gobernantes chinos como una guía para el gobierno y organización
burocrática del estado imperial.1617Sus teorías representaban los intereses de
los terratenientes. Tenían una visión materialista del mundo, plasmada en la frase
El hombre vence al cielo (tian) con lo que se oponía claramente al confucianismo.
También defendían el Gobierno mediante las leyes que se oponía al Gobierno
mediante los ritos de los confucianos. Una máxima del legismo era «cuando la
época cambia, las maneras cambian» y su principio fundamental era la
jurisprudencia. En este contexto legismo significa «filosofía política que mantiene
la regla de la ley», distinguiéndose así del sentido occidental de la palabra.
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Budismo
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Maoísmo
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equilibrada no posee castas diferenciadas donde una clase social oprime a la otra,
y es así como Lao-Tsé y Chuang-Tsé platean que la sociedad jerarquizada es un
desequilibrio, al ser el monarca el que consume excesivamente, a costa de la
explotación del pueblo, y en este punto se asemejan a pensadores occidentales
como Karl Marx y Pierre-Joseph Proudhon, al sostener que la igualdad solo se
obtendrá al abolir el poderío del ente jerárquico y sustituirlo por un nuevo orden
social sin clases sociales. Otras similitudes se aprecian en los asuntos referentes
a la religión, donde por lo general, las creencias de los sectores filosóficos más
conservadores de ambos continentes, siempre tiende a promover la creencia teísta
y el respeto a las autoridades religiosas, tal como sucede en el Legalismo,
Confucianismo, Monarquismo y Capitalismo, mientras que sus opositores plantean
ideologías revolucionarias donde desacreditan al poder sacerdotal por
considerarlo alienador y defensor de las castas dominantes, y descreen de la
existencia o intervención de las divinidades, volcándose a pensamientos ateístas,
tal como sucede en el Taoísmo, Buddhismo, Marxismo y Anarquismo. A pesar de
sus muchas diferencias en los conceptos ontológicos donde la filosofía europea y
china han pensado totalmente diferente, desarrollaron similitudes en sus
rivalidades y su accionar político y social. Las dos filosofías exploraron
profundamente en los campos de la investigación y utilizaron argumentos
similares en esas áreas. Por ejemplo, había filósofos en China , al igual que la
escuela de la lógica, que hicieron de la racionalidad científica su principal modo
de pensar, mientras que había filósofos de Occidente, como Marco Aurelio que vio
la meditación como el camino hacia la sabiduría. Es justo en lo que hace t an
diferentes a las escuelas filosóficas occidental y china, en donde suelen
asemejarse la una a la otra, según cuales sean las distintas escuelas de
pensamiento que hayan gestado, y los impulsores que las hayan promovido. Cabe
destacar también que a las filosofías más radicales de ambos continentes, se las
ha considerado como algo negativo por parte de las posturas dominantes de las
sociedades establecidas con sus statu quo conservadores, y por eso han sido
víctimas de persecución tanto los taoístas y budistas, como los marxistas y
anarquistas. Así también, los jefes de estado detractores de estas filosofías, se
han valido de tergiversaciones para deformarlas y convertirlas en objeto de culto,
contradiciendo así sus principios originales de emancipación para formar
corrientes dogmáticas que hacen justamente lo contrario, al imponer doctrinas
absolutistas a las masas y hacerles seguir las políticas de los líderes
gubernamentales y sacerdotales, con la excusa de que esa es la voluntad de la
filosofía que siguen, cuando en realidad los conceptos originales de las mismas
se oponían totalmente a las formas de doblegamiento. Esto puede ejemplificarse
al ver como los líderes militares de los países socialistas, han establecido cultos a
la personalidad, tales como el Estalinismo y el Maoísmo; o revisionismos tales
como la Socialdemocracia, alegando ser marxistas cuando de hecho, contradicen
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Junta Directiva: Carlos Arellano Hartig, Alberto Bárcenas Reyes
[email protected], Guillermo Bendaña García [email protected], Eddy Kühl
Arauz, [email protected], Jean Michel Maes [email protected], Harlan
Oliva Regidor [email protected], Nubia O. Vargas [email protected],
quien funge como Secretaria de la Junta Directiva; Manuel Fernández Vilches y
Carlos Tünnermann Bernheim [email protected]
Las funciones de la Junta Directiva son: Preparar las funciones que rigen
las actividades de la Junta Directiva y de cada uno de sus miem bros; Nombrar
un presidente, un tesorero y un secretario y todos los cargos de la Revista;
Obtener personería jurídica como una organización sin fines de lucro; esto es un
paso serio, en caso de Nicaragua, debe tener un padrino político o pagar mordida
a un diputado, de no ser así, se engaveta. Fuera de esto, mantener una ONG
representa gastos, tanto para iniciarla como para mantenerla, todos los
documentos deben ser hecho por abogado, sobre papelería formal). La ONG debe
de estar inscrita luego en la Dirección General de Impuestos (DGI) donde debe
declarar su contabilidad, aun no habiendo dinero, de olvidar declarar multan;
Solicitar fondos, si se requieren para seguir publicando Revista de Temas
Nicaragüenses; en general cuando no hay fondos todo va bien, luego que hay
fondos surgen pleitos por dinero o por formalismos en torno al dinero. Sería mejor
buscar patrocinadores que pueden aportar, en especies, servicios o materiales;
Abrir una cuenta bancaria para depositar los fondos; en caso se apruebe el
obtener fondos; Aprobar los documentos para solicitar fondos; en caso se apruebe
el obtener fondos; Administrar los fondos y aprobar partidas para usos
específicos; en caso se apruebe el obtener fondos; Encontrar y nombrar al editor
general; Evaluar el desempeño del editor general para publicar la Revista de
Temas Nicaragüenses cada seis meses; ver punto 8; Reemplazar al editor general
cuando la evaluación de su desempeño lo amerite ver punto 8; Nombrar nuevos
miembros de la Junta Directiva, eligiéndolos entre los candidatos por simple
mayoría; ver punto 8; Expulsar a cualquier miembro de la Junta Directiva, después
de escuchar los cargos contra él, y someter el caso a votación. Se requiere simple
mayoría para la expulsión; una medida extrema que puede mermar el número de
miembros de la Junta Directiva; Fijar metas a lograr al editor general sobre el
desempeño y calidad de la revista, la organización del Comité Editorial, y el uso
de los fondos asignados para la publicación de la revista; el cargo de editor
general es voluntario, no asalariado; Administrar el sitio web, y contratar los
servicios de hospedaje; Comprar el dominio temasnicas.net; Administrar la
cuenta de correos con Wix; Aprobar cada edición de Revista de Temas
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haya dicho anteriormente sobre la licencia y derechos de autor, que todas las
ediciones de la revista son propiedad de la junta directiva, y que José Mejía Lacayo
renunciaba a esos derechos en favor de la junta, no existen tales derechos sobre
las ediciones de la revista, puesto que son de acceso público; ni ha habido
aceptación legal expresa o tácita de tal renuncia de derecho. En adición, si no
existe legalmente una junta directiva, no se puede hacer renuncia alguna de
derechos en favor de ella. Con relación a los nombres de dominio, están
protegidos por la ley, en particular por el tratado de libre comercio entre los países
centroamericanos, República Dominicana y los Estados Unidos de América.
(CAFTA-DR). Esto quiere decir que la junta directiva nominal no tiene facultad
alguna para decidir sobre la titularidad del dominio web de la revista, y no se ha
traspasado formalmente esa titularidad a entidad alguna. Los artículos y ensayos
individuales publicados en la revista continúan siendo propiedad de sus autores.
Licencia y Copyright Notices. The editions of Temas Nicaragüenses en
PDF, MOBI y EPUB format Mayo be downloaded freely from the website
http://www.temasnicas.net/ y stored en a hard drive to read, to archive, to print
a copy for personal use, or for distribution among friends, without requesting
authorization from the editor. There is no legal organization related to the journal,
not even in fact, since there are no partners or associates, but collaborators.
Therefore, there is no board of directors other than nominally, without hierarchy
(legal representative) or faculties to decide on the destiny of the journal, y less
on the domain name of the same. There are no formal powers en this regard, nor
powers to represent the board. That en any case, should be by consensus not
only of the nominal members of the board of directors by the general editor, but
of the collaborators, due to the relations established with them en the editorial
policy. On the other hand, although it has been said previously regarding license
y copyrights, that all editions of the journal are owned by the board of directors,
and that José Mejia Lacayo waived those rights in favor of the board, there are
no such rights as the journal is of public access; nor has there been any expre ssed
or implied legal acceptance of such waiver. in addition, if a board of directors does
not legally exist, no waiver of rights can be made in its favor. en relation to domain
names, they are protected by law, en particular by the free trade agreement
between the Central American countries, the Dominican Republic and the United
States of America. (CAFTA-DR). This means the nominal board of directors has no
powers to decide upon the ownership of the web domain of the journal,
particularly as said ownership has not been assigned to any entity. Individual
articles y essays published in the journal continue to be the property of their
authors.◼
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Imagen de madero y texto reproducido de la obra del Capitán D. Francisco Antonio de Fuentes
y Guzmán, Recordación Florida: Discurso historial y demostración natural, material, militar y
política del Reyno de Guatemala. Prólogo del Licenciado J. Antonio Vi llacorta C., 3 vols. Ciudad
Guatemala: Sociedad de Geografía e Historia, 1932 -33.
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Contraportada
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Suponiendo que la descripción de Fuentes del madero fuera exacta y que llevara
registros de las conquistas aborígenes, entonces es indicado asignarle a su
ejecución una fecha anterior a la Conquista.» 141
141
Traducido de Fowler Jr., William R., The Cultural Evolution of Ancient Nahua Civilizations:
The Pipil-Nicarao of Central America, pages 15-16, 1st edition, Norman, OK: University of
Oklahoma Press, 1989.
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