Calidad de Vida y Funcionalidad en La Depresión: J.M. Benítez Moreno
Calidad de Vida y Funcionalidad en La Depresión: J.M. Benítez Moreno
Calidad de Vida y Funcionalidad en La Depresión: J.M. Benítez Moreno
Funcionalidad y calidad de vida son dos conceptos estre- que consuma el tiempo y las energías del sujeto, es decir, que
chamente ligados al de salud en su más amplia acepción. le signifique un deterioro de la calidad de vida.
Entendemos por funcionalidad la capacidad del individuo Calidad de vida es un concepto ligado al grado de satis-
para llevar a cabo de una forma efectiva las actividades de facción que tiene la persona con su situación física, su es-
la vida diaria. Dicho concepto –más allá de la mera ejecu- tado emocional, su vida familiar, amorosa, social así como
ción de tareas simples– comprende aspectos relativos a la el sentido que le atribuye a su vida.
autonomía del sujeto, a su capacidad de relacionarse con Podemos definir la calidad de vida como el bienestar, la
los demás y con el entorno, a la posibilidad que tiene de felicidad y la satisfacción de una persona, que le otorga
realización personal mediante el pensamiento, la comuni- la suficiente autonomía (libertad de elección y de acción)
cación, la ejecución, la producción y el disfrute. Gran par- como para poder calificar de positiva su vida2. La Organi-
te de dichos elementos se ven mermados con el paso del zación Mundial de la Salud (OMS) define la calidad de vi-
tiempo, el envejecimiento –sin ser una enfermedad, sino da como “aquella percepción que un individuo tiene de su lu-
un proceso fisiológico– comporta una reducción paulatina gar en la existencia, en el contexto de la cultura y del sistema
de la funcionalidad, determinada también por el estilo de de valores en los que vive y en relación con sus expectativas, sus
vida y las características del entorno1. A edades más tem- normas, sus inquietudes. Se trata de un concepto muy amplio
pranas, la funcionalidad puede verse comprometida por la que está influido de modo complejo por la salud física, el esta-
aparición de la enfermedad. do psicológico, el nivel de independencia, las relaciones sociales
El término calidad de vida aparece por primera vez en la y la relación con los elementos esenciales del entorno del indi-
década de los cincuenta (Ordway, 1953) y hay que dife- viduo”.
renciarlo del concepto de nivel de vida, que hace referencia El aumento de la esperanza de vida no se asocia nece-
a aquellas condiciones de vida que pueden fácilmente ser sariamente a una mejor calidad de ésta. Las medidas clási-
traducidas en términos cuantitativos o económicos (renta cas de resultados en medicina (mortalidad, morbilidad y
per cápita, nivel educativo, condiciones de la vivienda, expectativa de vida) no son parámetros suficientes para
consumo de bienes, etc.), y que nos remite al concepto de evaluar la calidad de los dispositivos de salud, ya que no
bienestar social. tienen en cuenta la percepción del paciente respecto a su
La calidad de vida es un proceso cambiante consistente situación. Se hace por ello necesario incorporar el concep-
en una interacción continua entre el sujeto y su entorno, to de calidad de vida relacionada con la salud (CVRS).
es el resultado del desarrollo saludable de la persona y de Schumaker y Naughton (1996) la definen como la percep-
la interacción armónica entre su estado físico y su estado ción subjetiva, influenciada por el estado de salud actual, de
mental (funcionalidad), la satisfacción de sus necesidades la capacidad para realizar aquellas actividades importantes
reales, su entorno familiar, social, laboral y el medio am- para el individuo3.
biente, que hace posible compaginar de forma equilibrada Evaluar la calidad de vida de un paciente significa co-
el ser y el tener, sin que el anhelo de posesión le empuje a nocer el impacto de una enfermedad y su tratamiento so-
objetivos inalcanzables o le exija un esfuerzo permanente bre la percepción que él tiene de su propio bienestar.
MEDICIÓN DE LA FUNCIONALIDAD
Correspondencia: J.M. Benítez Moreno. Y CALIDAD DE VIDA EN LA DEPRESIÓN
CAP Vila Olímpica. Toda enfermedad tiene un coste psíquico y somático para
C/ Joan Miró, 17.
08005 Barcelona. España. el sujeto que la padece, y repercusiones para los miembros
Correo electrónico: [email protected] de su unidad convivencial, de manera que una de las pri-
meras consecuencias de toda enfermedad es su efecto per- da, y algunas de las características generales de la enfer-
nicioso sobre la calidad de vida. medad mental nos lo corroboran (tabla 1).
Tal efecto va a depender fundamentalmente de la natu- Los trastornos del estado de ánimo inciden de forma es-
raleza de la enfermedad, de su pronóstico, de las carac- pecial en la funcionalidad y en la calidad de vida de las
terísticas personales del sujeto y del tipo de intervención y personas y de sus familias, así entre los criterios del Ma-
relación terapéutica que se establezca con el paciente y sus nual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales
familiares. (DSM-IV-TR) para el diagnóstico de un episodio depresivo
Cuando nos referimos al ámbito de la salud mental, he- mayor encontramos la condición de que “los síntomas pro-
mos de recordar, en primer lugar, la definición de trastor- voquen malestar clínicamente significativo o deterioro social,
no mental como “todo síndrome o patrón de comportamiento laboral o de otras áreas importantes de la actividad del indivi-
o psicológico de significación clínica que aparece asociado a un duo”. Por lo que se puede afirmar que depresión y calidad
malestar, a una discapacidad o a un riesgo significativamente de vida son expresiones antagónicas (fig. 1).
aumentado de morir o de sufrir dolor, discapacidad o pérdida No conviene olvidar que un porcentaje no inferior al
de libertad”4, por lo que en la misma definición de trastor- 20% de los pacientes con enfermedades médicas crónicas
no mental queda patente la afectación de la calidad de vi- (diabetes, cardiopatía isquémica, hipertensión arterial, etc.)
Sueño no reparador
Bajo rendimiento
Pérdida de energía
Síntomas conductuales
– Psicomotricidad alterada
– Aislamiento
– Pasividad
Limitación de la funcionalidad
Deterioro calidad de vida
Sentimientos desproporcionados
de inutilidad y de culpa
Ideación suicida
desarrollará un trastorno depresivo mayor4, por lo que los ventario de Beck para la depresión, la escala de depresión
médicos de Atención Primaria deberíamos estar muy aten- geriátrica de Yesavage, etc., con las que podemos obtener
tos a la aparición de los primeros síntomas depresivos que, una información indirecta sobre la funcionalidad y calidad
no en pocas ocasiones, se manifiestan en forma de dolor, de vida del paciente deprimido. Nada nos dicen, sin em-
empeoramiento de la actividad física, social y personal. To- bargo, dichas escalas de la vivencia que experimentan los
do ello nos invita a la reflexión sobre la posible responsa- familiares o el mismo paciente respecto a su enfermedad.
bilidad, en la aparición de algunas depresiones, del dete- El conocimiento de las condiciones de vida de los pa-
rioro de la calidad de vida que provocan la mayoría de las cientes depresivos nos resulta necesario para evaluar de
enfermedades médicas crónicas que a diario atendemos en forma integral los resultados terapéuticos, ya que la infor-
las consultas, ya que las limitaciones a las que conducen mación sobre su nivel de integración personal y social nos
no dejan de ser vividas como una pérdida por parte del pa- permite conocer los recursos psicosociales necesarios para
ciente, y uno de los elementos nucleares de la depresión es mejorar su situación existencial5. En dicha evaluación, hay
la vivencia de pérdida. que contar siempre con la información de los familiares,
Es preciso conocer el impacto de la depresión sobre la puesto que constituyen el pilar fundamental sobre el que
funcionalidad del paciente con el fin de mejorar su calidad se asienta el resultado de nuestras intervenciones y son un
de vida. elemento altamente vulnerable –por la carga que repre-
En la década de los sesenta, Dickey y Wagenar propu- senta el proceso de reestructuración y adaptación que han
sieron un enfoque informacional que otorgase igual impor- de recorrer– al que deberemos atender de forma especial
tancia a las observaciones que sobre la enfermedad hacían (cuidar al cuidador).
el equipo de salud, el enfermo y sus familiares, de manera Hace unos 25 años, Seva Díaz y sus colaboradores de-
que la evaluación del impacto de la enfermedad sobre la sarrollaron el Cuestionario psicosocial Zaragoza, en un in-
vida del paciente se sustentase en las observaciones apor- tento de evaluación de un gran número de aspectos relativos
tadas por los tres elementos citados. a la calidad de vida de la población zaragozana. Posterior-
Son numerosos los instrumentos que pretenden medir mente, el mismo equipo trabajó con la escala de bienestar
el constructo de calidad de vida, si bien lo que miden son general (EBEG) y de adaptación al estrés (1990, Seva Díaz
únicamente aspectos parciales de la capacidad funcional y colaboradores), que explora el nivel de energía, la per-
del sujeto. La OMS, a principios de los noventa, creó un cepción o sensación de buena salud, el estado de ánimo, la
grupo de trabajo para mejorar la definición de calidad de situación de tensión-relajación del sujeto y su satisfacción
vida, del que resultó un nuevo instrumento, el WHO- en la vida durante el último año.
QOL-100 para evaluar la CVRS. La escala de adaptación al estrés (Pearlin, 1978) es otra
Cuando se evalúa la CVRS de una persona, ésta debe herramienta que se ha utilizado en nuestro medio para ob-
encontrar respuesta a las dimensiones de referencia, tem- tener información sobre el control de los sentimientos e
porales y de experiencia (tablas 2 y 3). impulsos, el mantenimiento del buen humor pese a las di-
Los médicos estamos familiarizados con la utilización ficultades, la capacidad de control y de resolución de las
de herramientas que nos permiten confirmar nuestras sos- dificultades, la necesidad de otra persona para resolver los
pechas diagnósticas y evaluar la progresión de los sínto- problemas y la actitud del individuo frente a la ayuda de
mas, así como el efecto del tratamiento sobre la sintoma- los demás. En definitiva, es una escala que mide, entre
tología del paciente depresivo. En este sentido, resulta otras variables, el nivel de tolerancia a la frustración y la re-
relativamente sencillo y cómodo el uso de escalas como la sistencia del sujeto ante la adversidad, concepto éste que
de Hamilton para la depresión, la escala de Zung, el in- nos aproxima al de resiliencia: capacidad del ser humano
Tabla 4. Medidas de incapacidad funcional y menoscabo Escala de evaluación de la actividad global (EEAG)
de la Asociación Norteamericana de Psiquiatría
Medidas de incapacidad funcional y menoscabo:
– Índice de Katz
Es una escala heteroaplicada para evaluar el funciona-
– Medida de independencia funcional miento general de los pacientes psiquiátricos, aunque
– Escala Plutchik de valoración geriátrica muestra ciertas limitaciones al mezclar síntomas con dis-
– Índice de actividad de Duke capacidad, por lo que es más aconsejable utilizar la escala
Medidas físicas y mentales: de discapacidad de la OMS.
– Cuestionario de calidad de vida relacionada con la salud SF-36
Medidas de bienestar psicológico y salud mental:
– Cuestionario de salud general Inventario de discapacidad de Sheehan (SDI)
– Índice de bienestar psicológico Escala que puede ser heteroaplicada o autoaplicada, que
– Hospital anxiety and depression scale explora la discapacidad (grado en que los síntomas inter-
– Cuestionario de incapacidad de Sheehan fieren en el trabajo, las relaciones familiares y sociales del
– Inventario de experiencias de duelo
– Inventario Texas revisado de duelo paciente), estrés percibido (grado en que los aconteci-
– Cuestionario de salud del paciente mientos estresantes le han dificultado la vida desde la últi-
– Escala de calidad de vida para depresión ma visita) y apoyo social percibido (porcentaje de apoyo
– Cuestionario Sevilla de calidad de vida que el paciente ha obtenido respecto al que necesitaba la
Medidas de salud social:
última semana).
– Cuestionario de apoyo social funcional Duke-UNK
– Índice de ajuste psicosocial
– Cuestionario de función familiar Apgar-familiar Escala autoaplicada de adaptación social (SASS)
– Entrevista Manheim de apoyo social Evalúa la conducta y el ajuste social de los pacientes con
Medidas de dolor: depresión en el momento actual, a partir de la exploración
– Escala o test de Madison de valoración de componentes psicógenos
del dolor
de diferentes áreas de la vida del paciente (trabajo, familia,
– Escala de incapacidad por dolor lumbar de Oswestry ocio, relaciones sociales, motivaciones e intereses). Los
– Escala de dolor-función de la cadera puntos de corte asignan tres categorías: desadaptación so-
– Cuestionario de dolor cervical cial, normalidad y superadaptación patológica.
Disponemos asimismo de un conjunto de escalas que mi-
den diferentes aspectos de la funcionalidad, pero que fueron
diseñadas inicialmente para la evaluación en casos de de-
para afrontar experiencias traumáticas e incluso extraer un mencia, como es la escala de Lawton y Brody (de actividad
beneficio de las mismas6. instrumental de la vida diaria), el índice de Barthel (de acti-
Para evaluar la calidad de vida de los pacientes esqui- vidad básica de la vida diaria) o el índice de Katz (tabla 4).
zofrénicos, Malm y colaboradores desarrollaron la Quality
of fife checklist (QOLC), de la que derivaron otras tres he-
rramientas: INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN
– El Quality of life self-report (QLS-100), cuestionario de DE LA CALIDAD DE VIDA RELACIONADA
calidad de vida. CON LA SALUD
– La Social belonging scale (SBS), escala de relaciones so-
ciales que evalúa el nivel de contactos interpersonales en Cuestionario SF-36 sobre el estado de salud
la vida del paciente. (short-form-36)
– El Standar of living interview (SOL) o entrevista de Escala autoaplicada para medir el nivel de calidad de vida
estándar de vida. relacionada con la salud (física y mental). Evalúa 8 escalas:
Las tres escalas citadas son producto del trabajo en funcionamiento físico, rol físico, dolor, salud general, vitali-
equipo de Skanze y Malm, y han sido traducidas al es- dad, funcionamiento social, rol emocional y salud mental.
pañol y adaptadas por Seva Díaz y colaboradores5. La escala de salud mental consta de 5 ítems que intentan
evaluar el estado de ánimo del paciente (inquietud, intran-
quilidad, desánimo) durante el último mes. No existen pun-
INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN tos de corte, a mayor puntuación, mejor calidad de vida7-9.
DEL NIVEL DE FUNCIONAMIENTO El SF-36 es el cuestionario más usado en la bibliografía
internacional como instrumento de medida de la CVRS.
Escala de discapacidad de la Organización Mundial de la Salud Estudios realizados en nuestro país revelan que la puntua-
Es una escala heteroaplicada para la valoración clínica de ción media disminuye en todas las escalas a medida que
las limitaciones presentadas por los enfermos psiquiátricos aumenta la edad, excepto en la escala de salud mental9.
graves. Nos aporta información actual, del último mes, del
último año o de cualquier período que el investigador de- Instrumento de evaluación de calidad de vida de la OMS
termine, explorando las áreas específicas de funciona- (World Health Organization quality of life [WHOQOL-100])
miento: cuidado personal, funcionamiento ocupacional, Como se ha apuntado más arriba, este instrumento fue di-
funcionamiento en la familia y funcionamiento en el contexto señado por un grupo de trabajo de la OMS exclusivamen-
social en general7. te para evaluar la calidad de vida. Es un cuestionario
Tabla 5. Áreas de evaluación del instrumento de evaluación de calidad Escala de calidad de vida (Quality of life scale [QLS])
de vida de la Organización Mundial de la Salud (WHOQOL-100) Inicialmente fue diseñada para medir la interferencia de la
Dominio físico (3 facetas):
esquizofrenia en la calidad de vida del paciente, aunque su
– Dolor y molestias uso se ha generalizado a otro tipo de pacientes. Es un ins-
– Energía y fatiga trumento que explora funciones intrapsíquicas, relaciones
– Sueño y descanso interpersonales, función instrumental (trabajo, estudio,
Dominio psicológico (5 facetas): obligaciones) y el nivel de autonomía en el uso de objetos
– Sentimientos positivos
– Pensamiento/aprendizaje/memoria/concentración
comunes y tareas cotidianas, todo ello durante las 4 sema-
– Autoestima nas anteriores. Es una escala heteroaplicada que exige for-
– Imagen corporal y apariencia mación por parte del entrevistador al requerirse para su
– Sentimientos negativos realización una entrevista semiestructurada.
Dominio de nivel de independencia (4 facetas):
– Movilidad
– Actividades cotidianas Cuestionario Sevilla de calidad de vida (CSCV)
– Dependencia de medicación o tratamiento También es una herramienta diseñada para la evaluación
– Capacidad de trabajo de la percepción de su calidad de vida por parte del pa-
Dominio de relaciones sociales (3 facetas): ciente esquizofrénico en el momento actual, a partir de
– Relaciones personales
una escala autoaplicada.
– Soporte social
– Actividad sexual
Dominio de entorno (8 facetas): Escala de calidad de vida para la depresión (Quality of life
– Seguridad física y protección depression scale [QLDS])
– Hogar Es una escala que persigue evaluar cómo la enfermedad
– Recursos económicos
– Cuidados de salud y sociales: disponibilidad/calidad
y su tratamiento determinan la calidad de vida del pa-
– Oportunidades para adquirir información/habilidades ciente deprimido. Elaborada en forma de 34 ítems de
– Participación y oportunidades para recreo/ocio respuesta dicotómica (sí/no) es útil para sondear la per-
– Entorno físico cepción subjetiva de la enfermedad en el momento ac-
– Transporte tual. No existen puntos de corte, a mayor puntuación,
Dominio espiritualidad/religión/creencias personales (1 faceta)
peor calidad de vida. Existe una versión adaptada para la
población española.
autoaplicado que explora la percepción que las personas Escala de sobrecarga del cuidador de Zarit
tienen sobre su situación en la vida dentro del contexto Si bien se trata de un instrumento ideado para evaluar la
cultural y del sistema de valores en el que viven, teniendo sobrecarga de los cuidadores de pacientes con demencia,
en cuenta también sus objetivos, expectativas e intereses, puede sernos de utilidad para aquellos familiares de pa-
a partir de la valoración del sujeto sobre diversos aspectos cientes con depresión mayor, con la finalidad de conocer
de su vida (tabla 5). el grado de afectación que sufren como consecuencia del
Posteriormente la OMS ha desarrollado una versión cuidado que prestan. Esta escala, autoaplicada, evalúa as-
abreviada, el WHOQOL-BREF que comprende 26 ítems, pectos de la salud física, la salud psíquica, las actividades
mediante los cuales proporciona información sobre 4 de sociales y los recursos económicos del cuidador.
las 6 dimensiones del WHOQOL-100: física, psicológica,
relaciones sociales y entorno. Cuestionario APGAR de Smilkstein (APGAR familiar)
Resulta de gran interés para conocer el grado de atención
Cuestionario de salud EuroQOL-5D (EQ-5D) a la salud en el núcleo familiar, así como la forma en que
Escala autoaplicada de la que se dispone de una versión en repercute la enfermedad de uno de sus miembros en el
nuestro idioma, que evalúa las dimensiones movilidad, resto de la familia, al evaluar cinco componentes básicos
cuidado personal, actividades cotidianas, dolor/malestar y de la función familiar (APGAR corresponde al acrónimo
ansiedad/depresión, y se complementa con una escala vi- en inglés de estos cinco parámetros) (tabla 6).
sual analógica representada por una línea vertical de 20 cm
de longitud, graduada del 0 al 100, en la que el paciente
debe señalar el punto que mejor represente su estado de ¿CÓMO MEJORAR LA CALIDAD DE VIDA
salud global el día de la prueba. DE LOS PACIENTES DEPRIMIDOS?
Las claves para mejorar la calidad de vida del paciente de-
Cuestionario sobre calidad de vida: satisfacción y placer (Quality primido radican en un diagnóstico lo más precoz posible,
of life enjoyment and satisfaction questionnaire [Q-LES-Q]) con la pronta instauración de un tratamiento adecuado y a
Escala autoaplicada que pretende medir la satisfacción y el unas dosis terapéuticas ajustadas, puesto que el objetivo
placer del paciente con su vida cotidiana durante la última prioritario será alcanzar lo antes posible la remisión de los
semana, a partir de la exploración de diferentes ítems (sa- síntomas y la recuperación completa del estado anímico,
lud física, estado anímico, trabajo, situación familiar, acti- que es la forma más adecuada de mejorar la calidad de vi-
vidades de tiempo libre, etc.). da del paciente y de las personas que con él conviven.
El diagnóstico precoz tiene una de sus claves en el he- sempeña en la génesis y resolución de las enfermedades.
cho de que con cierta frecuencia la depresión se presenta Abogamos porque –cuando sea posible– algunos de los
en forma de síntomas somáticos (artromialgias, dispepsia, contactos con el paciente deprimido tengan lugar en su
cefaleas, sensación de mareo, disfunciones sexuales, sínto- domicilio, con lo que puede mejorar la relación entre el
mas genitourinarios, etc.) o síntomas inespecíficos (in- profesional, el paciente y su familia. En este sentido, es
somnio, distractibilidad, astenia); para ello es de suma im- justo reconocer que no estamos descubriendo nada nue-
portancia tener una formación básica en psicopatología vo que no hayan hecho ya en décadas pasadas los abne-
que nos permita detectar los factores de riesgo de depre- gados médicos rurales.
sión y los signos de alarma. Si conocemos el grado de funcionalidad del paciente
Una entrevista clínica cuidadosa, semiestructurada, antes de caer en su trastorno depresivo podremos evaluar
donde mostremos un interés por el paciente en su globa- la cuantía de la pérdida en el momento presente, lo cual
lidad y sepamos transmitir una actitud empática, es el me- nos puede orientar sobre la verdadera gravedad de la en-
jor instrumento para alcanzar cualquier diagnóstico sobre fermedad y su evolución. De cara a conocer la calidad de
patología mental, al tiempo que suele ejercer un efecto be- vida del paciente, interesa saber cuáles son sus expectati-
neficioso sobre el paciente deprimido y repercute positiva- vas y a qué patrones se compara.
mente en el grado de confianza que éste y sus familiares Un componente a tener en cuenta al valorar la calidad
depositarán en nosotros. de vida del paciente es preguntarle sobre los efectos que
El seguimiento del paciente y de sus familiares a partir subjetivamente considera positivos y los que considera ne-
de visitas periódicas favorecerá la adherencia al tratamien- gativos del tratamiento farmacológico que sigue. Así, no
to y nos facilitará la identificación de efectos adversos de la debemos obviar nuestro interés por cuestiones que pue-
medicación. den verse alteradas como consecuencia de la depresión o
Muchas personas que sufren depresión viven el inicio por el tratamiento: apetito, sueño, ritmo deposicional, de-
de la enfermedad de forma solitaria y tienen serias dificul- seo y respuesta sexual, peso corporal, etc. Conviene tener
tades para identificar y comunicar qué les está ocurriendo, registrado (aunque sea en forma de escalas visuales analó-
por lo que no es infrecuente que entre el paciente y los fa- gicas) la percepción del enfermo sobre estas cuestiones,
miliares se creen situaciones tensas motivadas por esas di- para disponer de elementos objetivos a la hora de evaluar
ficultades en la identificación del problema10, de manera la eficacia del tratamiento.
que cuando consultan al médico ya está arraigado el sufri- Una cuestión que no debe olvidar quien atienda a un
miento en el paciente y sus familiares. paciente deprimido es abordar de forma directa la posibi-
Un elemento fundamental en la mejora de la calidad de lidad del suicidio, ¿qué otro elemento más contundente
vida de nuestros pacientes deprimidos (y en la restitución puede haber para evaluar la calidad de vida que el deseo
de su salud) es la información. Debemos informar en tér- de morir? En no pocas ocasiones los pacientes agradecen
minos asequibles a nuestros interlocutores sobre la enfer- que se hable de ello y –cuando se facilita que verbalicen
medad, sobre las posibilidades terapéuticas, sobre los efec- sus pensamientos al respecto– pueden llegar a sentir un
tos esperables de la medicación, todo ello de una forma gran alivio (tabla 7).
veraz, sin despertar nunca falsas expectativas. La familia, El éxito del tratamiento de un paciente deprimido va a
que a menudo se siente desorientada, agradecerá profun- depender de muchos factores, la mayoría de los cuales
damente este tipo de actuaciones y habremos conseguido están ligados a la forma en que actúa el médico. Uno de
su alianza en el proceso terapéutico. los elementos que pueden conducir al fracaso es caer en la
Hay experiencias que refieren beneficios de la visita do- inercia clínica, es decir, la reticencia de un médico en el
miciliaria por parte del equipo de salud (médico, enfer- momento de iniciar o intensificar un tratamiento, derivar
mera, trabajadora social), porque la observación del pa- al especialista, etc., pese a estar indicado. El médico reco-
ciente en su contexto familiar aporta información que no noce la existencia de un problema en el manejo del pa-
puede obtenerse en el marco de la consulta del centro de ciente con depresión, pero no adopta medidas de cambio
salud, ayudando a comprender in situ la dinámica de in- para solucionarlo.
teracción entre los miembros de la unidad de conviven- Más allá de los cuestionarios, que tienen su indudable
cia10 y su realidad social, que tan importante papel de- utilidad, lo que nos interesa saber del paciente deprimido
Tabla 7. Estrategias de mejora de la calidad de vida del paciente mentar en nuestra aptitud (conocimientos sobre psicopato-
deprimido logía y terapéutica) y en nuestra actitud: escucha activa, em-
– Entrevista clínica productiva
patía, ecpatía y asertividad. Difícilmente encontraremos un
– Identificación de estresores y de otros factores de riesgo cuestionario o escala que pueda superar la precisa y rica in-
– Diagnóstico precoz de la depresión formación que se obtiene de una buena entrevista clínica, en
– Instauración temprana del tratamiento la que el manejo adecuado de los elementos básicos de la
– Información al enfermo y familiares sobre la enfermedad, comunicación cumplen su misión informativa a la vez que
el tratamiento y los recursos sociosanitarios disponibles
– Incluir alguna visita domiciliaria en el proceso terapéutico
ejercen un indudable efecto terapéutico.
– Evaluar objetivamente el grado de funcionalidad del paciente
Evaluar el riesgo de suicidio
–
– Fortalecer la adherencia terapéutica BIBLIOGRAFÍA
– Evitar la inercia terapéutica 1. Martín ML, Moreiras O, Carbajal A. Funcionalidad psicocosial en
– Enfoque multidisciplinar (médico, enfermera, trabajadora social) un grupo de ancianos españoles. Rev Mult Gerontol. 2001:11(1):8-
11.
2. Vallejo-Nagera JA Guía práctica de psicología. Madrid: Temas de
hoy; 1991.
3. Schwartzmann L. Calidad de vida relacionada con la salud: aspec-
tos conceptuales. Cienc Enferm. 2003;9(2):9-21.
y de las personas que con él conviven respecto a la calidad 4. American Psychiatric Association. Manual diagnóstico y estadístico
de sus vidas básicamente es: de los trastornos mentales, DSM-IV-TR. Barcelona: Masson SA;
– Del paciente: estado de ánimo, capacidad de comu- 2002.
5. Seva Díaz A. Medición de la calidad en psiquiatría. En: Bulbena A,
nicación, actividades en las que ahora se ve limitado, sín- Berrios GE, Fernández de Larrinoa PF, editores. Medición clínica en
tomas físicos y su intensidad, si tiene o no un proyecto de psiquiatría y psicología. Barcelona: Masson SA; 2000. p. 89-105.
futuro (o si alberga ideas de muerte), efectos y actitudes 6. Vera Poseck B, Carbelo Baquero B, Vecina Jiménez ML. La expe-
riencia traumática desde la psicología positiva: resiliencia y creci-
frente a la medicación. miento postraumático. Papeles del Psicólogo. Universidad Com-
– De los familiares: qué tanto de carga está significando plutense. 2006;1(27).
la enfermedad para ellos, qué modificaciones en su forma 7. Bobes J, Portilla MP, Bascarán MT, Sáiz PA, Bousoño M. Banco de
y estilo de vida se han visto obligados a tomar, cuáles son instrumentos básicos para la práctica de la psiquiatría clínica. 2.ª
ed. Barcelona: Ars Médica; 2002.
sus necesidades, cuál es su estado de salud (biopsicoso- 8. Sierra P, Livianos L, Rojo L. Quality of life for patients with bipolar
cial). disorder: relationship with clinical and demographic variables. Bi-
El conocimiento que podemos tener los médicos de fa- polar Disorders. 2005;7(2):159-65.
9. Banegas JR, Rodríguez-Artalejo F, Alonso J, López-GArcía E, Gra-
milia del paciente, de su entorno y de su biografía, nos faci- ciani A, Gutiérrez-Ficas JL. Valores de referencia de la versión es-
lita calibrar en cada caso la vulnerabilidad y la resiliencia de pañola del cuestionario de salud SF-36 en población adulta de más
cada uno de los consultantes a los que asistimos a diario. Tal de 60 años. Med Clin. 2003;120(15):568-73.
información, imprescindible para conocer la funcionalidad 10. Pezo Silva MC, Costa Stefanelli M, Komura H, Luiza A. En busca
de solución para el sufrimiento: vivencias de familiares en el pro-
y la calidad de vida del paciente, se obtiene a partir de unas ceso de enfrentamiento de la depresión. Cienc Enferm. 2004;10
entrevistas clínicas bien elaboradas y que deberemos funda- (2):31-41.