Actividades de Autonomía Emocional

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ACTIVIDADES DE AUTONOMÍA EMOCIONAL

Rafael Bisquerra Alzina

Resumen

En este artículo se presentan varias actividades para el desarrollo de la competencia


de la autonomía emocional. Este artículo es el lógico complemento de "La autonomía
emocional: entre las dos orillas", de carácter más bien teórico, publicado en este
mismo Manual de orientación y tutoría. Remitimos a este último artículo para una
fundamentación teórica sobre la autonomía emocional, lo cual constituye un
requisito sine qua non para desarrollar los ejercicios y actividades prácticas que aquí
se proponen.

1. INTRODUCCIÓN
En este artículo se presentan varias actividades prácticas para el desarrollo de la
autonomía emocional. Dichas actividades constituyen un complemento del artículo
«La autonomía emocional: entre las dos orillas», de carácter más bien teórico, que
está publicado en este mismo Manual de orientación y tutoría, y al cual remitimos
para una fundamentación de la práctica que aquí se propone.

La intención es sugerir ejercicios y actividades que, tal vez, hayan sido


elaborados y aplicados con otras finalidades, pero que también pueden constituir
recursos útiles para la autonomía emocional. En la colección de libros que lleva por
título «Educación emocional y en valores» podemos encontrar varias obras
eminentemente prácticas con abundantes ejercicios en este sentido. Remitimos
particularmente a las actividades propuestas por López (2003) para la Educación
Infantil, Renom (2003) para la Educación Primaria, Pascual y Cuadrado (2001)
para la Educación Secundaria Obligatoria, y Güell y Muñoz (2003) para la
Educación Secundaria postobligatoria.

2. ACTIVIDADES

2.1. Hacia la autonomía emocional


Nivel apropiado: ESO.

En el proceso de maduración durante la adolescencia es muy importante el


desarrollo de la autonomía en sentido general y de la autonomía emocional en
particular. La persona autónoma es capaz de decidir y actuar por sí misma.

Objetivos

• Tomar conciencia de lo que es la autonomía emocional.


• Fomentar la autonomía emocional.
• Valorar las conductas que favorecen la autonomía emocional.

Procedimiento

Trabajo individual. Se pedirá a cada alumno que nombre cinco personas con las
que mantenga buenas relaciones. Se les concederán un par de minutos antes de
pasar al comentario.

Trabajo en grupo-clase. A partir de este momento, el profesor o profesora debe


dinamizar la sesión con la ayuda de la hoja del alumno. Lo importante no es tanto
lo que se escribe, sino la construcción personal de la autonomía.

Es normal que el alumnado exponga que se sentiría mal. Se puede trabajar para
que intenten concretar a qué se refieren con ese sentirse «mal»: enfadado,
decepcionado, frustrado, etc.

Hay que plantearles si se puede hacer algo para evitarlo. Las respuestas pueden
ir desde la negación absoluta a la afirmación, pasando por todo tipo de
matizaciones.

Se trata de introducir elementos de reflexión que lleven al grupo a construir una


realidad en la que se acepte que esto es posible que ocurra. Que cuando pasa no
me gusta, pero que «soy yo» el que debe reconducirlo. No puedo esperar que sea
otra persona la que me haga sentir bien.

El coloquio termina cuando se observa que el alumnado ha comprendido lo que


es la autonomía, y la autonomía emocional en particular, y por otra parte
manifiesta una actitud favorable a su desarrollo.

Recursos

Hoja del alumno y lápiz o bolígrafo.

Observaciones

El alumnado debe comprender lo que es la autonomía emocional y adoptar una


actitud favorable hacia su desarrollo.

Temporalización

Depende de la implicación del grupo en el diálogo. El profesorado debe tener la


suficiente flexibilidad para dedicarle el tiempo que considere oportuno.

Hacia la autonomía emocional


Hoja del alumnado
Escribe el nombre de cinco personas con las que mantienes muy buenas relaciones. Si es
posible, recuerda las personas con las que mejor te relacionas.
1.
2.
3.
4.
5.
Ahora imagina que por alguna razón una de estas personas «pasa de ti» en el momento
en que la necesitas.
Elige a una de estas personas para seguir el ejercicio.
¿Cómo te sentirías si no te presta atención cuando le diriges la palabra?

2.2. Yo decido mi estado de ánimo


Nivel apropiado: ESO y Bachillerato.

A veces no somos conscientes de que podemos decidir la actitud que vamos a


adoptar ante la vida, y también nuestro estado de ánimo, incluso ante ciertas
situaciones de conflicto. La narración de esta actividad está basada en el libro de
Soler y Conangla (2004), Aplícate el cuento. Relatos, cuentos y anécdotas de
ecología emocional para una vida inteligente y equilibrada, publicado en Barcelona
por editorial Amat. En concreto en el capítulo «Escoger el equilibrio», hay una
narración titulada «Soy yo quien decide», que hemos adaptado con permiso de los
autores.

Objetivos

• Tomar conciencia de cómo podemos decidir el estado de ánimo.


• Fomentar la autonomía emocional.
• Valorar los pensamientos y conductas que favorecen la autonomía
emocional.

Procedimiento

Trabajo en grupo-clase. El profesor explica la siguiente historia:


Juan, una persona adulta, va a comprar el periódico acompañado de su compañero
Manuel. Se dirige a Antonio, el señor del quiosco, y se establece este diálogo entre Juan
(J) y Antonio (A):
J.- ¿Sería tan amable de darme El País, por favor?
A.- (Casi gritando) ¡No sé donde lo tengo! ¡Mira a ver si lo encuentras!
J.- (Después de buscar un rato entre montones de periódicos) Ya lo he encontrado. ¿Se
quiere cobrar, por favor? (Le alarga un billete de 5 euros).
A.- (Casi chillando) ¡No tengo cambio! ¡Estoy harto de decir que hay que venir con el
dinero contado!
J.- ¿Tiene la bondad de mirarlo, por favor? Sólo son 5 euros.
A.- Anda ya, como si yo no tuviera nada más que hacer que dar cambio!
(Pasan unos breves momentos de silencio)
A.- Bueno, para no verte más, ¡aquí tienes el cambio! (Más que dárselo, Antonio casi le
tira las monedas a Juan, de tal forma que algunas se caen al suelo y Juan tiene que
recogerlas).
J.- Que pase usted muy buenos días y hasta mañana.
Después de este diálogo se inicia otro entre Manuel y Juan:
M.- ¿Cómo que hasta mañana? No querrás decir que mañana piensas volver a este
mismo quiosco, teniendo en cuenta la forma como te ha tratado.
J.- Pues sí. Siempre vengo a este quiosco.
M.- ¿Y cómo acostumbra a tratarte?
J.- Más o menos siempre igual que hoy.
M.- Pues no entiendo nada. A mí no me vería más el pelo.
J.- Lo entiendo perfectamente. Pero yo no estoy dispuesto a que sea él quien decida mi
estado de ánimo. Por eso, por la mañana, cuando me levanto, me miro al espejo y me
digo: «A ver Juan, ¿de qué estado de ánimo vas a estar hoy?». Y me respondo a mí
mismo: «De buen humor todo el día. Y no voy a permitir que nadie me lo cambie». Para
asegurarme de que va a ser así, voy al quiosco a comprar el periódico para entrenarme y
prepararme para el resto del día.

Finalizada la lectura se inicia un coloquio con objeto de comentar cómo cada uno
puede decidir su estado de ánimo, aunque esto no sea fácil. Requiere mucha
autonomía emocional y un largo entrenamiento.

Recursos

El texto de lectura que tendrá el profesor.

Observaciones

El alumnado debe comprender que la autonomía emocional es una competencia


difícil de adquirir, pero que es posible y además vale mucho la pena. Esto debe
despertar un interés para entrenarse para ello.

Temporalización

Depende de la implicación del grupo en el diálogo. El profesorado debe tener la


suficiente flexibilidad para dedicarle el tiempo que considere oportuno.

2.3. ¿Sabes quién eres y cómo te llamas?


Nivel apropiado: ESO y Bachillerato.
La persona con autonomía emocional no se siente fácilmente influida por los
comentarios poco agraciados que otras personas puedan hacer.

Objetivo

• Desarrollar competencias de autonomía emocional.

Procedimiento

Trabajo individual. El profesor dará la siguiente consigna al alumnado: «Escribe


en una hoja de papel cómo te llamas y quién eres. Describe algunos rasgos de tu
personalidad».

Les dejaremos unos 5-10 minutos para que contesten. Una vez hayan
terminado, se pasa al ejercicio en gran grupo.

Trabajo en grupo-clase. El profesor dice: «Imagínate que yo grito: ¡Romualdo!


¡Hermenegildo! ¡Fu-Man-Chu! ¡Gengis-Kahn!». Se trata de que el docente
pronuncie en voz alta, casi gritando, varios nombres de personas que no coincidan
con ninguno de los nombres de los alumnos.

Después preguntará: «¿Tú te sientes aludido si yo grito estos nombres?».

La respuesta lógica es no. Nadie suele sentirse aludido al oír un nombre que no
es el suyo.

Seguidamente el profesor preguntará: «Y si grito: “¡Oye tú! ¡Estúpido! ¡Imbécil!


¡Idiota!”, ¿te sientes aludido?».

Aquí se inicia un diálogo. Algunos se sentirán aludidos y otros no. En general, se


trata de tomar conciencia de que la emoción que experimento si oigo los nombres
no es la misma que si oigo los insultos. Ninguno de ellos va conmigo, pero los
segundos me pueden afectar más. ¿Por qué? Por diversas razones. Pero una de
ellas es porque me puedo sentir aludido, y esto puede dar lugar a un conflicto.
Cuando me siento insultado, se activa la emoción de la ira que me impulsa a
atacar de alguna forma. Se trata de tomar conciencia de ello. A partir de la toma
de conciencia, hay que intentar regular la impulsividad. De lo contrario, nos
podemos meter en problemas de los que nos sea difícil salir. Puede ayudar el
hecho de relativizar lo que dice el otro, pensando que no va dirigido a mí. Yo no
me llamo así. Estará pensando en otra persona. En caso de que realmente se
refiera a mí, lo más suave que se le puede decir es que está equivocado: yo me
conozco y sé que no lo soy. Esto incluye conciencia de sí mismo, autoestima y
autonomía emocional. Con estas competencias se está en mejores condiciones
para hacer frente a las provocaciones, pensando que eso no va conmigo. El diálogo
debe conducir a estas conclusiones. No porque lo diga el profesor, sino porque el
profesor formula las preguntas apropiadas para conducir el diálogo del alumnado
hacia ese punto. Lo importante es lo que dice el alumnado. Con el diálogo y la
razón dialógica está construyendo su propia autonomía emocional. Ejemplos de
preguntas orientativas para el debate pueden ser:

• ¿Cómo te sientes cuando te insultan?


• ¿Qué tienes ganas de hacer?
• ¿Qué vas a salir ganando con ello?
• ¿Has pensado que tal vez lo haga sólo para provocar?
• ¿Estás dispuesto a dejarte llevar por el otro?
• ¿Estás dispuesto a dejar que sea el otro quien decida cómo te tienes que
sentir?
• ¿Estás dispuesto a dar todo el poder al otro para que sea él quien decida lo
que tienes que pensar, sentir y hacer?
• ¿Qué te parece si lo interpretas como si estuviera nombrando a una
persona que no está presente?
• ¿Qué harías si el otro estuviera gritando un nombre de persona que no
conoces?
• ¿Qué te parece «pasar olímpicamente» de las provocaciones?

En todo caso, si se diera un problema de este tipo, cuando los ánimos estén
calmados se puede dialogar, averiguar qué puede haber pasado y procurar
resolver el conflicto de forma positiva. Cuando los ánimos están encrespados,
cualquier diálogo constructivo es imposible. Es mejor dejarlo estar y esperar el
momento oportuno.

Como dice un proverbio africano, «no se trata de lo que yo diga, sino de cómo
respondes tú. Si no sabes quién eres, entonces cualquiera te puede poner un
nombre; y si cualquiera te puede poner un nombre, entonces responderás a
cualquier cosa». Tenemos una predisposición a responder de manera reactiva,
debemos tenerlo presente y actuar con cuidado.

Recursos

Hoja de papel y lápiz o bolígrafo para el alumnado.

Observaciones

El alumnado debe comprender que la autonomía emocional supone, a veces, no


verse afectado por los comentarios, provocaciones o insultos que otros te dirigen.
Lo mejor es pensar que están dirigiéndose a otra persona: lo que dice no se refiere
a mí; está equivocado.

Temporalización

Depende de la implicación del grupo en el diálogo, pero en general esta


actividad puede ocupar una sesión de clase. El profesorado debe tener la suficiente
flexibilidad para dedicarle el tiempo que considere oportuno.

2.4. It's A Heartache


La dependencia emocional se produce, a veces, en las relaciones de pareja. Son
las mujeres las que están más predispuestas a la dependencia emocional, que
impide el crecimiento de la autonomía.
Nivel apropiado: cursos superiores de ESO y Bachillerato. Esta actividad es
muy apropiada para la clase de Inglés o para la clase de tutoría en colaboración
con Inglés.

Objetivos

• Conocer lo que es la dependencia emocional.


• Tomar conciencia de cómo la dependencia emocional nos puede causar
problemas.
• Aprender a amar manteniendo un equilibrio entre la dependencia y la
desvinculación.

Procedimiento

Trabajo en grupo-clase. Se entrega a cada alumno una copia de la letra de la


canción de Bonnie Tyler It's a heartache (ver hoja del alumno, más abajo).

El profesor pide a un alumno que lea la letra de la canción en inglés. Se


preguntará al grupo si tienen alguna dificultad en la comprensión de la letra. En
caso afirmativo se aclaran las dudas.

Trabajo individual. Con objeto de asegurar su comprensión, se pide al alumnado


que la traduzca a su propia lengua. Se deja un tiempo prudencial para ello.

Trabajo en grupo-clase. Una vez realizada la traducción, se pide a un alumno


que la explique en voz alta. Se trata de asegurar la comprensión de la letra, antes
de pasar a escucharla.

Después se escucha la canción. Pueden visionar también el vídeo de la misma,


que se puede encontrar en YouTube. El alumnado suele motivarse con la audición
de canciones, lo que contribuye a crear un clima emocional favorable para la
actividad.

Después se comenta la letra. Se trata de hacer incidencia en algunas frases. Por


ejemplo:

• «As much as I depended on you» (tanto como yo dependía de ti).


• «It ain't wise to need someone, as much as I depended on you» (no es
sabio necesitar a alguien tanto como yo dependía de ti).

El diálogo puede dar mucho de sí si el profesor lo encauza hacia la búsqueda de


un equilibrio, donde el amor no sea una dependencia emocional, sino una
vinculación afectiva saludable.

Recursos

• El texto con la letra de la canción (hoja del alumnado).


• CD con la canción.
• Si se desea, vídeo de la canción interpretada por Bonnie Tyler (hay una
versión en directo en YouTube).
Observaciones

El alumnado debe comprender que el amor está en un equilibrio entre la


desvinculación y la dependencia. Es un equilibrio difícil de lograr, pero es posible.
Dirigirse hacia ello supone ponerse en camino hacia la autonomía emocional.

Temporalización

Una sesión de clase.

It's A Heartache
Hoja del alumnado
Lee esta canción y tradúcela al castellano (o a la lengua de la respectiva comunidad:
catalán, euskera, gallego).
Intérprete: Bonnie Tyler
Álbum: Natural force
It's A Heartache
It's a fool's game
It's a heartache
Nothing but a fool's game
Nothing but a heartache
Standing in the cold rain
Hits you when it's too late
Feeling like a clown
Hits you when you're down
It ain't right with love to share
It's a fool's game
When you find he doesn't care for
Nothing but a fool's game
you
Standing in the cold rain
It ain't wise to need someone
Feeling like a clown
As much as I depended on you
It's a heartache
It's a heartache
Nothing but a heartache.
Nothing but a heartache
Love him till your arms break
Love him till your arms break
Then he lets you down
Then he let's you down
It ain't right with love to share
It's a fool's game
When you find he doesn't care for you
Standing in the cold rain
It ain't wise to need someone
Feeling like a clown
As much as I depended on you
It's a heartache
It's a heartache
Love him till your arms break
Nothing but a heartache
Then he let's you down
Hits you when it's too late
It's a fool's game
Then he let's you down
Standing in the cold rain

3. BIBLIOGRAFÍA
Bisquerra, R. (2000). Educación emocional y bienestar. Barcelona: Praxis.

Bisquerra, R. (2007). La autonomía emocional: entre las dos orillas. En M.


Álvarez y R. Bisquerra, Manual de orientación y tutoría. Barcelona: Wolters Kluwer
Educación.

Güell, M. y Muñoz, J. (2003). Educación emocional. Programa para la educación


secundaria postobligatoria. Barcelona: Praxis.
López, E. (2003). Educación emocional. Programa para 3-6 años. Barcelona:
Praxis.

Pascual Ferris, V. y Cuadrado Bonilla, M. (2001). Educación emocional.


Programa de actividades para educación secundaria obligatoria. Barcelona: Praxis.

Renom, A. (2003). Educación emocional. Programa para la educación primaria.


Barcelona: Praxis.

Soler, J. y Conangla, M.M. (2004). Aplícate el cuento. Relatos, cuentos y


anécdotas de ecología emocional para una vida inteligente y equilibrada.
Barcelona: Amat.

Soler, J. y Conangla, M.M. (2006). Ámame para que me pueda ir. Barcelona:
Amat.

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