La Esterilización
La Esterilización
La Esterilización
es una técnica, que comprende todos los procedimientos mecánicos, físicos y químicos, de
descontaminación en la que se destruyen los microorganismos y las esporas existentes
sobre un objeto (gérmenes patógenos), consiguiendo un instrumental muy seguro para su
posterior utilización.
Todos los microorganismos son susceptibles, en distinto grado, a la acción del calor, cuyos
efectos se deben principalmente a dos razones:
El agua es una especie química muy reactiva y muchas estructuras biológicas son
producidas por reacciones que eliminan agua.
El vapor de agua posee un coeficiente de transferencia de calor mucho más elevado que el
aire.
El Autoclave es el aparato con el que se realiza la esterilización por el vapor de agua a
presión. Este proceso de esterilización requiere de una exposición en su interior durante
unos 20 a 30 minutos a 120° C a una atmósfera de presión (estas condiciones pueden
variar).
Hoy en día los autoclaves disponen de programas en los que se selecciona la presión,
temperatura y tiempo del proceso.
Se efectúa por medio del autoclave de Chamberland, dejando abierta la válvula de escape,
o sea funcionando a la presión normal. Puede también realizarse a temperaturas más
bajas, 56o u 80o para evitar la descomposición de las sustancias a esterilizar, por las
temperaturas elevadas.
Acondicionamiento. Pretende dejar el material preparado para que pueda recibir el vapor
de agua. Lo primero que habrá que hacer es eliminar el aire que hay en el propio material y
en el autoclave. La manera de hacerlo depende del modelo de autoclave. Por tanto, habrá
que seguir las instrucciones del fabricante pero en esta fase ya se va introduciendo vapor
por una tubería conectada al autoclave. Normalmente el autoclave va inyectando vapor y
luego extrae la mezcla de vapor y aire. Esta inyección y extracción se hace varias veces.
Exposición al vapor. Se sigue introduciendo vapor y van aumentando la presión y la
temperatura hasta alcanzar lo programado. Cuando se alcanzan la temperatura y la presión
deseadas, el autoclave comienza a controlar el tiempo de esterilización. Así se inicia la
esterilización propiamente dicha.
Evacuación del vapor. El vapor se va extrayendo poco a poco y va disminuyendo la presión
hasta alcanzar valores negativos.
Secado. El calor de las paredes del autoclave y la evacuación del vapor (presión negativa)
harán que se evaporen las gotas de agua que se habían condensado sobre el material. El
resultado es un producto estéril y absolutamente seco.
Estufa Poupinelle. (Agente Físico: Calor: Seco)
Se trata de un aparato, en el que se introduce el material a esterilizar en distintos estantes,
está compuesto por una doble cámara, en las que el aire caliente generado por una
resistencia, circula por la cavidad principal y por el espacio entre ambas cámaras, a
temperatura de 170°C para el instrumental metálico y a 140°C para el contenido de los
tambores. Este calor seco producirá la muerte de los microorganismos.
Este método fue uno de los más utilizados hasta la aparición del autoclave.
Las radiaciones ionizantes tienen una gran penetrabilidad y se las utiliza para esterilizar
materiales termolábiles (termosensibles) como jeringas descartables, sondas, etc. Se
utilizan a escala industrial por sus grandes costos.
Los rayos ultravioletas afectan a las moléculas de DNA de los microorganismos. Son
escasamente penetrantes y se utilizan para la esterilización de las superficies en los
quirófanos.
El empleo de los rayos gamma está basado en los conocimientos sobre la energía atómica.
Este tipo de esterilización se aplica a productos o materiales termolábil es y de gran
importancia en el campo industrial. Puede esterilizar antibióticos, vacunas, alimentos, etc.
Destruye todos los microorganismos incluso virus. Sólo hasta 2015 está autorizado su uso
mezclado con otros gases hidroclorofluorocarbonos porque daña la capa de ozono
(mezclado no es inflamable).
El nuevo sistema consiste en utilizar óxido de etileno puro (sin mezclar) que se presenta en
cartuchos de unidosis. El esterilizador tiene un volumen reducido y esteriliza a presión
menor que la atmosférica (negativa). Aunque el óxido de etileno no se mezcle con otros
gases, el hecho de que cada cartucho sea de un solo uso, que el volumen del aparato sea
pequeño y que se trabaje a presión negativa disminuye enormemente la probabilidad de
que se inflame o explote. Además, como no se mezcla con otros gases, los problemas
medioambientales también quedan prácticamente resueltos.
Todavía hoy existen esterilizadores que son incapaces de realizar la aireación del material.
En estos casos, una vez que se igualan las presiones dentro y fuera del esterilizador se
saca el material inmediatamente y se traslada a una estufa especial que realizará la
aireación.
Se trata de una estufa porque con aire caliente se retira más rápidamente el óxido de
etileno. Por ejemplo, con aire a 50° se tarda unas 12 horas, mientras que si está a 60°
harán falta 8 horas para eliminarlo. Si aireáramos a temperatura ambiente (22°) haría falta
una semana.
Nunca se deben esterilizar textiles ni algodón utilizando óxido de etileno. Son tan porosos
que por mucho que los aireemos será difícil eliminar el óxido de etileno que los impregna.
La tendencia actual es utilizar el óxido de etileno sólo cuando el material no pueda ser
esterilizado de otra manera, puesto que la esterilización por óxido de etileno requiere tomar
toda una serie de precauciones para trabajar con seguridad (el personal tiene que conocer
cómo manipular los equipos para evitar riesgos humanos y medioambientales y seguir
rigurosamente los protocolos al efecto).
Es muy eficaz.
Puede esterilizar el material que no soporta las altas temperaturas (autoclave-estufa).
Desventajas del óxido de etileno:
Esterilizador moderno que realiza la fase de aireación. Una vez que lo paremos pasará un
minuto hasta que se abra la puerta automáticamente. Debemos aprovechar ese minuto
para abandonar la sala donde se encuentra el esterilizador. Dejaremos pasar 15 minutos, y,
para sacar el material del esterilizador utilizaremos medidas de protección personal:
guantes de nitrilo, mascarilla rígida y gafas de protección ocular. Recuerda que el óxido de
etileno es tóxico por contacto y por inhalación.
Esterilizador que no realiza la fase de aireación. En este caso entraremos en la sala con las
misma medidas de protección personal y nada más terminar el proceso abriremos la puerta
y sacaremos el material lo más rápidamente posible y lo introduciremos en la estufa de
aireación.
En las instalaciones de esterilización por óxido de etileno suelen existir unos detectores de
fugas. Son unos dispositivos que cuando se sobrepasa una determinada concentración de
óxido de etileno en el aire ambiente emiten una señal sonora.
Otra posibilidad es que el personal cuando vaya a entrar en la sala donde se encuentra el
esterilizador lleve un monitor personal. Éste es un pequeño ordenador con una alarma que
saltará en cuanto la concentración de óxido de etileno en el aire se aproxime a la permitida.
El gran problema es que tiene mala penetración en las luces estrechas. Por eso, todo
material que posea conductos o tubuladuras muy estrechas (menor de 3 milímetros de
diámetro) debe ser esterilizado por otro método.
También pueden ser usadas en Estufas de Formol, que son cajas de doble fondo, en
donde se colocan las pastillas y se calienta hasta los 60° C y pueden esterilizar materiales
de látex, goma, plásticos, etc.
Este método tiene la ventaja de ser rápido y ser el único esterilizante efectivo frío.
Esta serie de controles garantizan que los materiales sometidos a esterilización están libres
de microorganismos, dando la seguridad de que podemos confiar en la asepsia de los
mismos.
Controles físicos.
Se trata del registro de una serie de parámetros físicos que intervienen en el ciclo de
esterilización.
Este papel sirve para registrar doce horas de esterilización por autoclave. Como una
esterilización dura como mucho una hora y media en dicho papel se pueden hacer registros
de varios ciclos distintos.
Cuando el papel se coloca en el autoclave, éste va girando mientras que dos agujas
entintadas van desplazándose y pintando la gráfica. El autoclave pinta dos gráficas al
mismo tiempo para cada ciclo: una en color rojo que corresponde a la temperatura y otra en
color azul que corresponde a la presión. En las líneas verticales existen unos números del
1 al 12 que marcan el tiempo en horas. Las líneas horizontales marcan presiones (valores
de 1 a 4) y temperaturas (valores de O a 160 °C).
Dependiendo del fabricante algunos registros son gráficos y otros numéricos. En ellos se
registran la presión, la temperatura, la humedad relativa, el tiempo de cada fase,… etc.
Controles químicos.
Teniendo en cuenta que los autoclaves y los esterilizadores de óxido de etileno registran
las condiciones de presión y temperatura en un punto del esterilizador, puede suceder que
tengamos un control físico válido, pero, que, en realidad, en otro punto del esterilizador, no
se dieran las condiciones adecuadas. Por eso, además de los controles físicos, se utilizan
controles químicos en los paquetes de material a esterilizar.
Estos controles se tratan de compuestos químicos que cambian de color cuando entran en
contacto con el agente esterilizante.
Se llaman controles químicos externos porque están en la parte externa del paquete, y,
además, nos permiten distinguir cuál ha sido esterilizado y cuál no.
Las bolsas mixtas tienen una parte del papel que está impregnada en un compuesto
químico que cambiará de color (ver las indicaciones del fabricante) al entrar en contacto
con el vapor o con el óxido de etileno.
Las cintas adhesivas impregnada con el compuesto químico que cambian de color si el
agente esterilizante llega a ella. (Sujetan los paquetes textiles verdes y, también, se
colocan en los cierres de seguridad de los contenedores).
Controles químicos internos.
Con los controles químicos externos se logra saber si se dieron las condiciones adecuadas
en la superficie de un paquete, pero eso no quiere decir que el agente esterilizante haya
llegado al interior del mismo.
Los controles químicos internos son tiras de cartón que están impregnadas de un
compuesto, que cambiarán de color cuando las condiciones de esterilización sean las
adecuadas. Hay que colocarlos antes de cerrar el envase y, en cada paquete, hay que
colocar, al menos, uno, en la zona de ese paquete, en la que puede ser más difícil que
llegue el agente esterilizante.
Cuando se abra un paquete estéril es necesario confirmar que el control químico interno ha
cambiado de color, garantizando que el proceso de esterilización ha sido adecuado, en
caso contrario, debe desecharse y coger otro.
Normalmente se utiliza un solo control biológico para cada carga completa de autoclave o
de esterilizador de óxido de etileno, colocando la bolsa, entre la carga, en el sitio de peor
acceso para el agente esterilizante.
Se utilizan unas esporas para la esterilización por vapor y otras distintas para la
esterilización por óxido de etileno. Las casas comerciales presentan estos dispositivos de
distintas maneras (impregnando tiras de papel, en ampollas,…etc.).
A continuación detallamos el de uso más común, se trata de un tubito plástico, con unos
orificios, que en su interior, contiene una tira de papel impregnada con esporas y una
cápsula de cristal con un líquido de color. Este tubito plástico con su contenido se introduce
en una jeringa y ésta se envasa en una doble bolsa mixta, antes de introducirla junto a la
carga que se va a esterilizar.
Una vez que hemos analizado todos los tipos de controles es necesario realizar una serie
de puntualizaciones:
Material limpio y seco, que está montado, lubricado, y, se ha comprobado que funciona.
Selección del método de esterilización.
Envasado.
Etiquetado.
Colocación de la carga
Esterilización.
Extracción de la carga.
Validación o control del proceso:
➜ Si NO se valida ➜ volver al paso 3.
➜ Sí se valida ➜ Almacenamiento.
Material limpio y seco, que está montado, lubricado, y, se ha comprobado que funciona.
Debemos disponer el material que vamos a esterilizar, una vez realizada una correcta
limpieza.
Envasado.
Tiene como objetivo mantener el material estéril una vez que ha sido esterilizado. El
envasado previo permite que una vez esterilizado el material podamos sacarlo y cogerlo sin
guantes conservando su calidad de estéril y también permite su posterior almacenamiento.
No puede ser cualquier tipo de envase, como mínimo debe permitir que el vapor de agua o
el óxido de etileno lo atraviesen para que pueda entrar en contacto con el objeto que
queremos esterilizar, y, a la vez, tiene que actuar como barrera frente a los
microorganismos.
Para la esterilización con autoclave un envase debe cumplir las siguientes condiciones:
Papel crepado. Es un tejido formado por poliéster y celulosa. Es de color verde claro. Tiene
alta resistencia física, es una muy buena barrera para microorganismos y permite la
penetración y salida del agente esterilizante. Se usa como envoltorio de los paquetes de
textil: (Conjunto de paños, sábanas y sabanillas verdes que se utilizan en una intervención
quirúrgica).Fig. 15-18
- Tejido sin tejer. Su aspecto es muy parecido al del papel crepado pero hay varias
diferencias: su calidad, elasticidad y resistencia son mayores que las del papel crepado y
es de color azul. Se utiliza para envolver bandejas de instrumental. - Contenedores rígidos.
Son recipientes parecidos a cajas con tapa. Pueden ser de aluminio o de plástico rígido
especial. En estos recipientes se introducen cestillos con juegos completos de instrumental
para intervenciones quirúrgicas. Las tapas presentan una serie de perforaciones.
Los contenedores para óxido de etileno las poseen en la tapa y en la base de la caja. En
las perforaciones se ponen unos filtros de papel o de tela que permiten la entrada y salida
del agente esterilizante pero impiden el paso de los microorganismos una vez que se ha
esterilizado. Los filtros de papel son de un solo uso mientras que los de tela son de varios
usos.
Un buen contenedor debe tener: una tapa que encaje perfectamente y que se pueda fijar a
la caja con dispositivos de cierre seguros. Una vez cerrado se colocan unos precintos que
indican claramente si el contenedor ha sido abierto después de la esterilización. ![Fig. 15-
19](/apuntes/tcae/img/15-19.jpg)
- Bolsa mixta. Tiene una cara de papel (celulosa) y otra de plástico transparente que
permite ver perfectamente el contenido de la bolsa. Siempre que manipulemos una bolsa
mixta con material ya esterilizado es preferible hacerlo por la cara de plástico, que es la
más resistente y segura. ![Fig. 15-20](/apuntes/tcae/img/15-20.jpg) ![Fig.
15-21](/apuntes/tcae/img/15-21.jpg)
- Bolsa simple. Es otro tipo de bolsa de papel de celulosa por ambas caras Se utiliza para
como bolsa-envoltorio de gasas, textil blanco y guantes estériles. - Tywek®. Tiene una
capa plástica transparente y otra opaca de polietileno. Es el envase de elección en la
esterilización por gas plasma de peróxido de hidrógeno. Tiene una muy buena resistencia
mecánica a la rotura y es una muy buena barrera frente a los microorganismos. ![Fig. 15-
22](/apuntes/tcae/img/15-22.jpg)