Ley de Planeación
Ley de Planeación
Ley de Planeación
TEXTO VIGENTE
Última reforma publicada DOF 16-02-2018
Nota de vigencia: La reforma al primer párrafo del artículo 21, publicada en el DOF 16-02-2018, entrará en
vigor el 1o. de octubre de 2024.
Al margen un sello con el Escudo Nacional que dice: Estados Unidos Mexicanos.- Presidencia de la
República.
DECRETO
LEY DE PLANEACION
CAPITULO PRIMERO
Disposiciones Generales
Artículo 1o.- Las disposiciones de esta Ley son de orden público e interés social y tienen por objeto
establecer:
I.- Las normas y principios básicos conforme a los cuales se llevará a cabo la Planeación Nacional del
Desarrollo y encauzar, en función de ésta, las actividades de la administración Pública Federal;
II.- Las bases de integración y funcionamiento del Sistema Nacional de Planeación Democrática;
III.- Las bases para que el Ejecutivo Federal coordine las actividades de planeación de la
Administración Pública Federal, así como la participación, en su caso, mediante convenio, de los órganos
constitucionales autónomos y los gobiernos de las entidades federativas, conforme a la legislación
aplicable;
V.- Las bases de participación y consulta a la sociedad, incluyendo a los pueblos y comunidades
indígenas, a través de sus representantes y autoridades, en la elaboración del Plan y los programas a
que se refiere esta Ley, y
VI.- Las bases para que el Ejecutivo Federal concierte con los particulares las acciones a realizar para
la elaboración y ejecución del Plan y los programas a que se refiere esta Ley.
Artículo 2o.- La planeación deberá llevarse a cabo como un medio para el eficaz desempeño de la
responsabilidad del Estado sobre el desarrollo equitativo, incluyente, integral, sustentable y sostenible del
país, con perspectiva de interculturalidad y de género, y deberá tender a la consecución de los fines y
objetivos políticos, sociales, culturales, ambientales y económicos contenidos en la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos. Para ello, estará basada en los siguientes principios:
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I.- El fortalecimiento de la soberanía, la independencia y autodeterminación nacionales, en lo político,
lo económico y lo cultural;
III.- La igualdad de derechos entre las personas, la no discriminación, la atención de las necesidades
básicas de la población y la mejoría, en todos los aspectos de la calidad de la vida, para lograr una
sociedad más igualitaria, garantizando un ambiente adecuado para el desarrollo de la población;
IV.- Las obligaciones del Estado de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos
reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte;
V.- El fortalecimiento del pacto federal y del Municipio libre, para lograr un desarrollo equilibrado del
país, promoviendo la descentralización de la vida nacional;
VI.- El equilibrio de los factores de la producción, que proteja y promueva el empleo; en un marco de
estabilidad económica y social;
VII.- La perspectiva de género, para garantizar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres,
y promover el adelanto de las mujeres mediante el acceso equitativo a los bienes, recursos y beneficios
del desarrollo, y
Artículo 3o.- Para los efectos de esta Ley se entiende por planeación nacional de desarrollo la
ordenación racional y sistemática de acciones que, en base al ejercicio de las atribuciones del Ejecutivo
Federal en materia de regulación y promoción de la actividad económica, social, política, cultural, de
protección al ambiente y aprovechamiento racional de los recursos naturales así como de ordenamiento
territorial de los asentamientos humanos y desarrollo urbano, tiene como propósito la transformación de
la realidad del país, de conformidad con las normas, principios y objetivos que la propia Constitución y la
ley establecen.
Mediante la planeación se fijarán objetivos, metas, estrategias y prioridades, así como criterios
basados en estudios de factibilidad cultural; se asignarán recursos, responsabilidades y tiempos de
ejecución, se coordinarán acciones y se evaluarán resultados.
Artículo 4o.- Es responsabilidad del Ejecutivo Federal conducir la planeación nacional del desarrollo
con la participación democrática de la sociedad, de conformidad con lo dispuesto en la presente Ley.
Artículo 5o.- El Ejecutivo Federal elaborará el Plan Nacional de Desarrollo y lo remitirá a la Cámara
de Diputados del Congreso de la Unión para su aprobación, en los plazos previstos en esta Ley. En el
ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales y en las diversas ocasiones previstas por esta Ley,
la Cámara de Diputados formulará, asimismo, las observaciones que estime pertinentes durante la
ejecución y revisión del propio Plan.
Para el inicio de los trabajos de elaboración del Plan Nacional de Desarrollo se estará a lo dispuesto
en el artículo 43 de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
Artículo 6o.- El Presidente de la República informará al Congreso de la Unión sobre el estado general
que guarda la administración pública del país, haciendo mención expresa de las acciones y los resultados
obtenidos relacionados con la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo, los Programas Sectoriales y, en
su caso, los programas especiales, así como lo concerniente al cumplimiento de las disposiciones del
artículo 2o. Constitucional en materia de derechos y cultura indígena.
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El contenido de la Cuenta Pública Federal deberá relacionarse, en lo conducente, con la información a
que alude este artículo, a fin de permitir a la Cámara de Diputados su análisis con relación a los objetivos
y prioridades del Plan Nacional de Desarrollo y de los Programas Sectoriales.
Artículo 8o.- Los Secretarios de Estado al dar cuenta anualmente al Congreso de la Unión del estado
que guardan sus respectivos ramos, informarán del avance y grado de cumplimiento de los objetivos y
prioridades fijados en la planeación nacional que, por razón de su competencia, les correspondan y de los
resultados de las acciones previstas.
Informarán también sobre el desarrollo y los resultados de la aplicación de los instrumentos de política
económica, social, ambiental y cultural en función de dichos objetivos y prioridades, precisando el
impacto específico y diferencial que generen en mujeres y hombres.
En su caso, explicarán las desviaciones ocurridas y las medidas que se adopten para corregirlas.
Los funcionarios a que alude el primer párrafo de este artículo y los Directores y Administradores de
las entidades paraestatales que sean citados por cualquiera de las Cámaras para que informen cuando
se discuta una ley o se estudie un negocio concerniente a sus respectivos ramos o actividades, señalarán
las relaciones que hubiere entre el proyecto de Ley o negocio de que se trate y los objetivos de la
planeación nacional, relativos a la dependencia o entidades a su cargo.
Artículo 9o.- Las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal deberán planear y
conducir sus actividades con perspectiva intercultural y de género y con sujeción a los objetivos y
prioridades de la planeación nacional de desarrollo, a fin de cumplir con la obligación del Estado de
garantizar que éste sea equitativo, incluyente, integral, sustentable y sostenible.
Para el caso de las entidades, los titulares de las Secretarías de Estado proveerán lo conducente en el
ejercicio de las atribuciones que como coordinadores de sector les confiere la ley. Las entidades que no
estuvieran agrupadas en un sector específico, se sujetarán a lo previsto por el artículo 7 de la Ley Federal
de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
El Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, dará seguimiento a los
avances de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal en el logro de los
objetivos y metas del Plan y sus programas, con base en el Sistema de Evaluación del Desempeño
previsto por la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
Artículo 10.- Los proyectos de iniciativas de leyes y los reglamentos, decretos y acuerdos que formule
el Ejecutivo Federal, señalarán las relaciones que, en su caso, existan entre el proyecto de que se trate y
el Plan y los programas respectivos.
Artículo 11.- En caso de duda sobre la interpretación de las disposiciones de esta Ley, se estará a lo
que resuelva para afectos administrativos, el Ejecutivo Federal, por conducto de la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público.
CAPITULO SEGUNDO
Sistema Nacional de Planeación Democrática
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Artículo 12.- Los aspectos de la Planeación Nacional del Desarrollo que correspondan a las
dependencias y entidades de la Administración Pública Federal se llevarán a cabo, en los términos de
esta Ley, mediante el Sistema Nacional de Planeación Democrática.
Las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal formarán parte del Sistema, a
través de las unidades administrativas que tengan asignadas las funciones de planeación dentro de las
propias dependencias y entidades.
Artículo 13.- Las disposiciones reglamentarias de esta Ley establecerán las normas de organización y
funcionamiento del Sistema Nacional de Planeación Democrática y el proceso de planeación a que
deberán sujetarse las actividades conducentes a la formulación, instrumentación, control y evaluación del
Plan y los programas a que se refiere este ordenamiento.
Artículo 14.- La Secretaría de Hacienda y Crédito Público tendrá las siguientes atribuciones:
II.- Elaborar y someter a consideración del Presidente de la República, el proyecto de Plan Nacional
de Desarrollo, tomando en cuenta las propuestas de las dependencias y entidades de la Administración
Pública Federal y, en su caso, de los órganos constitucionales autónomos y de los gobiernos de las
entidades federativas, así como los planteamientos que deriven de los ejercicios de participación social
incluyendo a los pueblos y comunidades indígenas y a las personas con discapacidad en términos de la
Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad;
III.- Establecer los criterios generales que deberán observar las dependencias y entidades de la
Administración Pública Federal para la elaboración de los programas derivados del Plan que tengan a su
cargo, para lo cual se deberá prever la participación que corresponda a los gobiernos de las entidades
federativas, municipios y demarcaciones territoriales; los ejercicios de participación social de los pueblos
indígenas y, en su caso, incorporar las recomendaciones y propuestas que realicen;
IV.- Cuidar que el Plan y los programas que se generen en el Sistema, mantengan congruencia en su
elaboración y contenido;
V.- Coordinar las actividades que en materia de investigación y capacitación para la planeación
realicen las dependencias de la Administración Pública Federal;
VI.- Se deroga
VII.- Definir los mecanismos para que verifique, periódicamente, la relación que guarden los
presupuestos de las diversas dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, así como
los resultados de su ejecución, con los objetivos y prioridades del Plan y sus programas, así como para
adoptar las adecuaciones a los programas respectivos que, en su caso, resulten necesarias para
promover el logro de sus objetivos, y
VIII.- Promover la incorporación de indicadores que faciliten el diagnóstico del impacto de los
programas en grupos específicos de la población, distinguiendo por origen étnico, género, edad,
condición de discapacidad, tipo de localidad, entre otros.
I.- Participar en la elaboración del Plan Nacional de Desarrollo, respecto de la definición de las
políticas financiera, fiscal y crediticia;
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II. Proyectar y calcular los ingresos de la Federación y de las entidades paraestatales, considerando
las necesidades de recursos y la utilización del crédito público, para la ejecución del Plan y los
programas;
III.- Procurar el cumplimiento de los objetivos y prioridades del Plan y los programas, en el ejercicio de
sus atribuciones de planeación, coordinación, evaluación y vigilancia del Sistema Bancario.
IV.- Verificar que las operaciones en que se haga uso del crédito público prevean el cumplimiento de
los objetivos y prioridades del Plan y los programas; y
V.- Considerar los efectos de la política monetaria y crediticia, así como de los precios y tarifas de los
bienes y servicios de la Administración Pública Federal, en el logro de los objetivos y prioridades del Plan
y los programas.
I.- Intervenir respecto de las materias que les competan, en la elaboración del Plan Nacional de
Desarrollo, observando siempre las variables ambientales, económicas, sociales y culturales que incidan
en el desarrollo de sus facultades;
II.- Coordinar el desempeño de las actividades que en materia de planeación correspondan a las
entidades paraestatales que se agrupen en el sector que, conforme a la Ley Orgánica de la
Administración Pública Federal, determine el Presidente de la República.
III.- Elaborar los programas sectoriales, considerando las propuestas que, en su caso, presenten las
entidades del sector, los órganos constitucionales autónomos, y los gobiernos de las entidades
federativas, así como las que deriven de los ejercicios de participación social y de los pueblos y
comunidades indígenas interesados;
IV.- Asegurar la congruencia de los programas sectoriales con el Plan, así como con los programas
especiales en los términos que establezca éste;
V.- Considerar el ámbito territorial de las acciones previstas en sus programas sectoriales,
promoviendo que los planes y programas de los gobiernos de las entidades federativas guarden
congruencia con éstos;
VI.- Vigilar que las entidades del sector que coordinen, conduzcan sus actividades conforme al Plan
Nacional de Desarrollo y al programa sectorial correspondiente, y cumplan con lo previsto en el programa
institucional a que se refiere el Artículo 17, fracción II;
VII.- Verificar periódicamente la relación que guarden los presupuestos de las entidades paraestatales
del sector que coordinen, así como los resultados de su ejecución, con los objetivos y prioridades de los
programas sectoriales, a fin de promover las adecuaciones que consideren necesarias para el logro de
sus objetivos, y
VIII.- Coordinar la elaboración y ejecución de los programas especiales y regionales que correspondan
conforme a su ámbito de atribuciones.
II.- Elaborar sus respectivos programas institucionales, en los términos previstos en esta Ley, la Ley
Federal de las Entidades Paraestatales o, en su caso, por las disposiciones que regulen su organización
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y funcionamiento, atendiendo a las previsiones contenidas en el programa sectorial correspondiente
observando en lo conducente las variables ambientales, económicas, sociales y culturales respectivas;
III.- Elaborar sus anteproyectos de presupuesto considerando los objetivos de sus respectivos
programas institucionales;
IV.- Considerar el ámbito territorial de sus acciones, atendiendo las propuestas de los gobiernos de las
entidades federativas, a través de la dependencia coordinadora de sector, conforme a los lineamientos
que al efecto señale esta última;
V.- Asegurar la congruencia del programa institucional con el programa sectorial respectivo; y
VI.- Verificar periódicamente la relación que guarden sus actividades, así como los resultados de su
ejecución con los objetivos y prioridades del programa institucional.
Artículo 18.- La Secretaría de la Función Pública realizará, en los términos de las disposiciones
aplicables, el control interno y la evaluación de la gestión gubernamental, respecto de las acciones que
lleven a cabo las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal en el cumplimiento del
Plan y los programas.
Estas comisiones podrán, a su vez, contar con subcomisiones para la elaboración de programas
especiales que el mismo Presidente determine.
CAPITULO TERCERO
Participación Social en la Planeación
Artículo 20.- En el ámbito del Sistema Nacional de Planeación Democrática tendrá lugar la
participación y consulta de los diversos grupos sociales, con el propósito de que la población exprese sus
opiniones para la elaboración, actualización y ejecución del Plan y los programas a que se refiere esta
Ley.
Las organizaciones representativas de los obreros, campesinos, pueblos y grupos populares; de las
instituciones académicas, profesionales y de investigación de los organismos empresariales; y de otras
agrupaciones sociales, participarán como órganos de consulta permanente en los aspectos de la
planeación democrática relacionados con su actividad a través de foros de consulta popular que al efecto
se convocarán. Así mismo, participarán en los mismos foros los diputados y senadores del Congreso de
la Unión.
Las comunidades indígenas deberán ser consultadas y podrán participar en la definición de los
programas federales que afecten directamente el desarrollo de sus pueblos y comunidades.
Para tal efecto, y conforme a la legislación aplicable, en las disposiciones reglamentarias deberán
preverse la organización y funcionamiento, las formalidades, periodicidad y términos a que se sujetarán la
participación y consulta para la planeación nacional del desarrollo.
Artículo 20 Bis.- En los asuntos relacionados con el ámbito indígena, el Ejecutivo Federal consultará,
en forma previa, a las comunidades indígenas, para que éstas emitan la opinión correspondiente.
CAPITULO CUARTO
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Plan y Programas
La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión aprobará el Plan Nacional de Desarrollo dentro del
plazo de dos meses contado a partir de su recepción. En caso de que no se pronuncie en dicho plazo, el
Plan se entenderá aprobado en los términos presentados por el Presidente de la República.
La aprobación del Plan por parte de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, consistirá en
verificar que dicho instrumento incluye los fines del proyecto nacional contenidos en la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos. En caso de que el Plan Nacional de Desarrollo no los incluya,
la Cámara de Diputados devolverá el mismo al Presidente de la República, a efecto de que dicho
instrumento sea adecuado y remitido nuevamente a aquélla para su aprobación en un plazo máximo de
treinta días naturales.
La vigencia del Plan no excederá del periodo constitucional del Presidente de la República. Sin
perjuicio de lo anterior, deberá contener consideraciones y proyecciones de por lo menos veinte años,
para lo cual tomará en consideración los objetivos generales de largo plazo que, en su caso, se
establezcan conforme a los tratados internacionales y las leyes federales.
El Plan Nacional de Desarrollo precisará los objetivos nacionales, la estrategia y las prioridades del
desarrollo integral, equitativo, incluyente, sustentable y sostenible del país, contendrá previsiones sobre
los recursos que serán asignados a tales fines; determinará los instrumentos y responsables de su
ejecución, establecerá los lineamientos de política de carácter global, sectorial y regional; sus previsiones
se referirán al conjunto de la actividad económica, social, ambiental y cultural, y regirá el contenido de los
programas que se generen en el sistema nacional de planeación democrática.
Artículo 21 Bis.- El Plan Nacional de Desarrollo considerará una visión de largo plazo de la política
nacional de fomento económico, a fin de impulsar como elementos permanentes del desarrollo nacional y
el crecimiento económico elevado, sostenido y sustentable, la promoción permanente del incremento
continuo de la productividad y la competitividad, y la implementación de una política nacional de fomento
económico, que incluya vertientes sectoriales y regionales.
Para tal efecto, el Ejecutivo Federal incluirá, como parte del Plan, consideraciones de largo plazo, con
un horizonte de hasta veinte años, respecto de la política nacional de fomento económico a que se refiere
este.
La política nacional de fomento económico de largo plazo podrá ajustarse durante el proceso de
emisión del Plan Nacional de Desarrollo para el período de gobierno correspondiente; manteniendo en
todo momento el horizonte de hasta veinte años para la política nacional de fomento económico.
Los programas derivados del Plan Nacional de Desarrollo deberán guardar congruencia, en lo que
corresponda, con el horizonte de veinte años y la Ley para Impulsar el Incremento Sostenido de la
Productividad y la Competitividad de la Economía Nacional.
I.- Un diagnóstico general sobre la situación actual de los temas prioritarios que permitan impulsar el
desarrollo nacional así como la perspectiva de largo plazo respecto de dichos temas;
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II.- Los ejes generales que agrupen los temas prioritarios referidos en la fracción anterior, cuya
atención impulsen el desarrollo nacional;
III.- Los objetivos específicos que hagan referencia clara al impacto positivo que se pretenda alcanzar
para atender los temas prioritarios identificados en el diagnóstico;
IV.- Las estrategias para ejecutar las acciones que permitan lograr los objetivos específicos señalados
en el Plan;
V.- Los indicadores de desempeño y sus metas que permitan dar seguimiento al logro de los objetivos
definidos en el Plan, y
VI.- Los demás elementos que se establezcan en las disposiciones jurídicas aplicables.
Artículo 22.- El Plan indicará los programas sectoriales, institucionales, regionales y especiales que
deberán ser elaborados conforme a este capítulo, sin perjuicio de aquellos cuya elaboración se encuentre
prevista en las leyes o que determine el Presidente de la República posteriormente.
Estos programas observarán congruencia con el Plan, y su vigencia no excederá del período
constitucional de la gestión gubernamental en que se aprueben, aunque sus previsiones y proyecciones
se refieran a un plazo mayor.
Artículo 23.- Los programas sectoriales se sujetarán a las previsiones contenidas en el Plan y
especificarán los objetivos, prioridades y políticas que regirán el desempeño de las actividades del sector
administrativo de que se trate. Contendrán asimismo, estimaciones de recursos y determinaciones sobre
instrumentos y responsables de su ejecución.
Artículo 24.- Los programas institucionales se sujetarán a las previsiones contenidas en el Plan y en
el programa sectorial correspondiente. Las entidades, al elaborar sus programas institucionales, se
ajustarán a lo previsto en esta Ley, sin perjuicio de lo dispuesto, en lo conducente, por la Ley Federal de
las Entidades Paraestatales y, en su caso, por las disposiciones que regulen su organización y
funcionamiento.
Artículo 25.- Los programas regionales se referirán a las regiones que se consideren prioritarias o
estratégicas, en función de los objetivos nacionales fijados en el Plan, y cuya extensión territorial rebase
el ámbito jurisdiccional de una entidad federativa. El Ejecutivo Federal señalará la dependencia
responsable de coordinar la elaboración y ejecución de cada uno de estos programas.
Artículo 26.- Los programas especiales se referirán a las prioridades del desarrollo integral del país,
fijados en el Plan o a las actividades relacionadas con dos o más dependencias coordinadoras de sector.
El Ejecutivo Federal señalará la dependencia responsable de coordinar la elaboración y ejecución de
cada uno de estos programas.
Artículo 26 Bis.- Los programas derivados del Plan deberán contener al menos, los siguientes
elementos:
I.- Un diagnóstico general sobre la problemática a atender por el programa así como la perspectiva de
largo plazo en congruencia con el Plan;
II.- Los objetivos específicos del programa alineados a las estrategias del Plan;
III.- Las estrategias para ejecutar las acciones que permitan lograr los objetivos específicos del
programa;
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IV.- Las líneas de acción que apoyen la implementación de las estrategias planteadas en cada
programa indicando la dependencia o entidad responsable de su ejecución;
V.- Los indicadores estratégicos que permitan dar seguimiento al logro de los objetivos del programa,
y
Artículo 27.- Para la ejecución del Plan y los programas sectoriales, institucionales, regionales y
especiales, las dependencias y entidades elaborarán sus anteproyectos de presupuestos, considerando
los aspectos administrativos y de política económica, social, ambiental y cultural correspondientes.
Artículo 28.- El Plan y los programas a que se refieren los artículos anteriores especificarán las
acciones que serán objeto de coordinación con los gobiernos de las entidades federativas y de inducción
o concertación con los grupos sociales interesados.
Artículo 29.- Los programas regionales y especiales deberán ser sometidos por la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público a la consideración y aprobación del Presidente de la República.
Los programas sectoriales deberán ser sometidos a la consideración y aprobación del Presidente de
la República por la dependencia coordinadora del sector correspondiente, previo dictamen de la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Los programas institucionales deberán ser sometidos por el órgano de gobierno y administración de la
entidad paraestatal de que se trate, a la aprobación del titular de la dependencia coordinadora del sector.
Artículo 30.- Los programas sectoriales, regionales, especiales e institucionales deberán ser
publicados en el Diario Oficial de la Federación, en los plazos previstos por las disposiciones que al
efecto emita el Ejecutivo Federal. En el caso de los programas sectoriales y los especiales que determine
el Ejecutivo Federal, deberán publicarse dentro de los seis meses posteriores a la publicación del Plan.
Artículo 31.- Los programas serán revisados por el Ejecutivo Federal en los términos que determinen
las disposiciones reglamentarias, considerando la participación social, incluyendo la de los pueblos y
comunidades indígenas, las cuales establecerán el procedimiento para, en su caso, realizar las
adecuaciones correspondientes a éstos.
Artículo 32.- Una vez aprobados el Plan y los programas, serán obligatorios para las dependencias
de la Administración Pública Federal, en el ámbito de sus respectivas competencias.
Conforme a las disposiciones legales que resulten aplicables, la obligatoriedad del Plan y los
programas será extensiva a las entidades paraestatales. Para estos efectos, los titulares de las
dependencias, en el ejercicio de las atribuciones de coordinadores de sector que les confiere la ley,
proveerán lo conducente ante los órganos de gobierno y administración de las propias entidades.
La ejecución del Plan y los programas podrán concertarse, conforme a esta ley, con las
representaciones de los grupos sociales interesados o con los particulares.
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Mediante el ejercicio de las atribuciones que le confiere la ley, el Ejecutivo Federal inducirá las
acciones de los particulares y, en general, del conjunto de la población, a fin de propiciar la consecución
de los objetivos y prioridades del Plan y los programas.
La coordinación en la ejecución del Plan y los programas deberá proponerse a los gobiernos de las
entidades federativas o a los órganos constitucionales autónomos, a través de los convenios respectivos.
CAPITULO QUINTO
Coordinación
Artículo 33.- El Ejecutivo Federal podrá convenir con los órganos constitucionales autónomos y los
gobiernos de las entidades federativas, satisfaciendo las formalidades que en cada caso procedan, la
coordinación que se requiera a efecto de que éstos participen en la planeación nacional del desarrollo;
coadyuven, en el ámbito de sus respectivas competencias, a la consecución de los objetivos de la
planeación nacional, y para que las acciones a realizarse por dichas instancias se planeen de manera
conjunta. En los casos de coordinación con los gobiernos de las entidades federativas se deberá
considerar la participación que corresponda a los municipios y demarcaciones territoriales.
Artículo 34.- Para los efectos del artículo anterior, el Ejecutivo Federal podrá convenir con los
gobiernos de las entidades federativas:
II.- Los procedimientos de coordinación entre las autoridades de todos los órdenes de gobierno
para propiciar la planeación del desarrollo integral de cada entidad federativa y de los
municipios, y su congruencia con la planeación nacional, así como para promover la
participación de los diversos sectores de la sociedad en las actividades de planeación;
IV.- La elaboración de los programas regionales a que se refiere el artículo 25, de conformidad con
los criterios establecidos en la fracción III del artículo 14 de este ordenamiento, y
V. La ejecución de las acciones que deban realizarse en cada entidad federativa, y que competen
a ambos órdenes de gobierno, considerando la participación que corresponda a los municipios
interesados y a los sectores de la sociedad.
Para este efecto la Secretaría de Hacienda y Crédito Público propondrá los procedimientos conforme
a los cuales se convendrá la ejecución de estas acciones, tomando en consideración los criterios que
señalen las dependencias coordinadoras de sector, conforme a sus atribuciones.
Artículo 35.- En la celebración de los convenios a que se refiere este capítulo, el Ejecutivo Federal
definirá la participación de los órganos de la Administración Pública centralizada que actúen en las
entidades federativas, en las actividades de planeación que realicen los respectivos gobiernos de las
entidades.
CAPITULO SEXTO
Concertación e Inducción
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Artículo 37.- El Ejecutivo Federal, por sí o a través de sus dependencias, y las entidades
paraestatales, podrán concertar la realización de las acciones previstas en el Plan y los programas, con
las representaciones de los grupos sociales o con los particulares interesados.
El Ejecutivo Federal podrá signar convenios de concertación de acciones con las comunidades
indígenas, en todos aquellos asuntos que se consideren pertinentes y de conformidad con lo establecido
en las leyes que rijan en la materia de que se trate.
Artículo 38.- La concertación a que se refiere el artículo anterior será objeto de contratos o convenios
de cumplimiento obligatorio para las partes que lo celebren, en los cuales se establecerán las
consecuencias y sanciones que se deriven de su incumplimiento, a fin de asegurar el interés general y
garantizar su ejecución en tiempo y forma.
Artículo 39.- Los contratos y convenios que se celebren conforme a este capítulo se consideran de
Derecho Público.
Las controversias que se susciten con motivo de la interpretación y cumplimiento de estos contratos y
convenios, serán resueltos por los tribunales federales.
Artículo 40.- Los proyectos de Presupuesto de Egresos de la Federación; las iniciativas de las leyes
de ingresos, los actos que las dependencias de la administración pública federal realicen para inducir
acciones de los sectores de la sociedad, y la aplicación de los instrumentos de política económica, social
y ambiental, deberán ser congruentes con los objetivos y prioridades del Plan y sus programas.
El propio Ejecutivo Federal y las entidades paraestatales observarán dichos objetivos y prioridades en
la concertación de acciones previstas en el Plan y sus programas, con las representaciones de los grupos
sociales o con los particulares interesados.
Artículo 41.- Las políticas que normen el ejercicio de las atribuciones que las leyes confieran al
Ejecutivo Federal para fomentar, promover, regular, restringir, orientar, prohibir, y, en general, inducir
acciones de los particulares en materia económica, social y ambiental, se ajustarán a los objetivos y
prioridades del plan y los programas.
CAPITULO SEPTIMO
Responsabilidades
Artículo 42.- A los servidores públicos de la Administración Pública Federal, que en el ejercicio de sus
funciones contravengan las disposiciones de esta Ley, se les sancionará en términos de la Ley General
de Responsabilidades Administrativas.
Artículo 43.- Las responsabilidades a que se refiere el artículo anterior, son independientes de las de
orden penal o político que se puedan derivar de los mismos hechos.
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