S2 - Tarea (EP) - Resumen de La Conferencia de Fernando Savater
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Asignatura
Ética Profesional
Grupo
103
Presentado por
(1-20-1983)
Presentado a
Fecha de Entrega
La Ética es intentar recordar lo que no pasa, lo que no pasa de moda aquello que
permanece. Vivimos en un mundo que cambia, mundo que se transforma, pero
luego hay cosas que no varían, cosas esenciales que no cambian. Y esas son las
cosas de las que se ocupa la ética.
No es más que la reflexión de aquello que es valioso para la vida, lo que la hace
digna. Reflexión que hace cada uno de nosotros sobre lo que yo soy y quiero ser,
de la sociedad y su libertad. Lo que hace la vida más digna de ser vivida por un ser
humano y no es una cosa que esté escrita y hay que seguirla como un reglamento,
sino simplemente. Es aquello que una persona que reflexiona y dice bueno, ¿Cómo
puedo vivir mejor? ¿Qué tengo que hacer? Imitar lo que veo a mi alrededor a pesar
de que vea desastres y cosas terribles. Preguntarle a alguien que puede engañarme
o puede contarme lo que le sea más útil o más interesante para él, o intentar
reflexionar sobre lo que yo soy, sobre lo que yo quiero, sobre la sociedad en que
vivo o sobre el mundo que comparto con los otros y a partir de ahí, encontrar los
valores desde los cuales yo puedo vivir. La ética no es más que eso.
La ética y las supersticiones son cosas distintas, las supersticiones no tienen nada
que ver con la ética. Hay gente que primero se lava los dientes y luego desayuna lo
mismo que hay gente que primero desayuna y luego se lava los dientes.
Esas son cosas que no tienen mucho que ver con la moral. La moral es una cosa
que trata de asuntos serios y eso son cosas que no tienen importancia ninguna. No
tiene nada que ver con la ética. Un ejemplo sencillo sería la mentira, nadie ha dicho
que es mejor la mentira que la verdad en ninguna parte y que esta sea preferible en
vez de la verdad. Todos han considerado que la mentira es algo peor que la verdad.
La mentira es algo que no tiene valor frente al valor de la verdad. No hay ningún
pueblo, ni antiguo, ni moderno, ni civilizado, que haya considerado que es mejor
ser cobarde que valiente. No existe. En todas partes se ha considerado y es mejor el
valor que la cobardía. No hay ningún pueblo que haya considerado que es mejor la
avaricia que la generosidad. No existe. Si no existe, no puede existir ese tipo de
cosas. La avaricia, la cobardía, etcétera, son formas de debilidad. Nadie miente si
se siente fuerte, miente el que se siente débil porque intenta obtener alguna ventaja
por vía de la mentira o el que sabe que sus privilegios no los podrá defender más
que mintiendo. Ese miente por miedo, por miedo a perder sus privilegios o por
miedo a sufrir algún tipo de castigo. Nadie es cobarde, naturalmente, por sentirse
fuerte. Nadie es avaro si se siente fuerte. Si no se siente seguro, es más bien
generoso
Las debilidades nunca han sido apreciadas en la ética, porque la ética está al
servicio de la vida y es mejor ser fuerte para poder afrontarla. Las virtudes si son
respaldadas por la ética, estas muestran fortaleza en un ámbito determinado.
Aristoteles cita: “La virtud la aprendemos de las personas que viven bien”.
La reflexión ética busca una forma de vida que corresponda a cada uno, más
adecuada a la condición humana y no a las circunstancias. Porque los seres
humanos, naturalmente nos encontramos con situaciones diferentes, afrontamos
problemas distintos, pero los principios y los valores no cambian tanto.