5.1. Inflación y Tasas de Interés - Razonamiento Matemático - Instituto Consorcio Clavijero

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5.1.

Inflación y tasas de interés

Introducción

Desde el punto de vista matemático, la base de las matemáticas financieras la encontramos en la relación resultante de recibir una
suma de dinero hoy (llamada valor actual) y otra diferente (llamada valor futuro) de mayor cantidad, transcurrido un periodo de tiempo.
La diferencia entre el valor actual y el valor futuro responde por el “valor” asignado por las personas al sacrificio de consumo actual y al
riesgo que perciben y asumen al posponer el ingreso.

Las matemáticas financieras son una derivación de las matemáticas aplicadas que estudian el valor del dinero en el tiempo,
combinando el capital, la tasa y el tiempo para obtener un rendimiento o interés, a través de métodos de evaluación que permiten tomar
decisiones de inversión. Son llamadas también análisis de inversiones, administración de inversiones o ingeniería económica.

Concepto de inflación

La inflación es un fenómeno económico que se presenta en todos los países del mundo, aunque con diversa intensidad, y se ve
reflejado en el alto costo de los productos de primera necesidad (aumento de los precios) y en la constante devaluación de la moneda
(pérdida del poder adquisitivo).
La inflación tiene sus orígenes en los periodos de preparación de las grandes guerras, cuando existe una mayor demanda de bienes y de
inversión en relación con la producción, por lo que los precios tienden a elevarse, aunque desde la misma aparición de la moneda de
plata u oro, los reyes y gobernantes e incluso los particulares causaban inflación al disminuir la cantidad de metal precioso en las
monedas, con lo cual perdían parte de su poder de compra.

La inflación es el desequilibrio existente entre la cantidad de bienes y servicios y la cantidad de circulante (dinero). Cuando aumenta el
dinero la gente compra más, los precios suben y aumenta la inflación, cuando hay escasez de bienes y servicios, igualmente suben los
precios generando inflación. Se refleja con la devaluación de la moneda.

 Para más información sobre la inflación en México puedes revisar la siguiente página web de Banxico:

 Banco de México. (2001).  Inflación. Extraído el 14  de Julio de 2011 desde


http://www.banxico.org.mx/portal-inflacion/index.html

Causas de la inflación

Varias son las causas que provocan este fenómeno, entre ellas, la de tipo: económico, social, político, histórico, demográfico, cultural,
etc., pero desde el punto de vista económico las causas de la inflación provienen del concepto mismo.

1. Provenientes del circulante:

La cantidad de dinero o circulante aumenta por los siguientes motivos:

Por el aumento de los sueldos o salarios por parte del gobierno, ya sea en forma directa o indirecta.
Por las emisiones inorgánicas que realiza el Estado a través del Banco Central; llámese emisiones inorgánicas (elaboración de
monedas) a las realizadas sin respaldo económico.
Debido al aumento de las exportaciones porque generan divisas, siempre y cuando éstas no sean utilizadas o invertidas
adecuadamente en el desarrollo productivo del país.
Por el aumento de los créditos externos, igualmente cuando éstos se destinan a gastos superfluos.
Por la concesión por parte de los bancos u otras instituciones privadas nacionales, que permiten a la población endeudarse y
adquirir bienes innecesarios.

2. Provenientes de los bienes: Los bienes disminuyen por los siguientes motivos:

Por los fenómenos naturales adversos como inundaciones, plagas, sequías, etc., que reducen la producción.
Por el aumento de las ventas de productos de consumo masivo al exterior, o por la fuga de éstos por las fronteras sin que
previamente se hayan satisfecho las necesidades internas.
Debido a las migraciones campesinas, porque al abandonar los campos, además de reducirse la producción, aumenta la
demanda en las grandes ciudades y surgen los problemas sociales.
Por la falta de ayuda estatal a las actividades agrícolas, ganaderas e industriales.
Por la llamada economía del derroche, que consiste en realizar gastos innecesarios, más allá de la capacidad productiva.

Efectos de la inflación
Todo fenómeno inflacionario causa una serie de efectos o consecuencias en la economía de los pueblos, afectando especialmente a
las clases más desprotegidas.
Los principales efectos de este fenómeno podemos sintetizarlos en los siguientes:

La población reduce el consumo de bienes y servicios o desmejora la calidad, por cuanto con los mismos salarios y los precios
más altos la gente compra menos.
Los productores igualmente reducen la producción debido a la falta de demanda.
Los fabricantes ante la disminución de las ventas despiden a los trabajadores y cierran las empresas temporal o
definitivamente.
Frente a la desocupación aumentan los problemas de tipo social.
Ante escasez de productos en los mercados aparece la especulación con el fin de vender a mayor precio.
Los movimientos sindicales presionan por conseguir incremento de sueldos, congelamiento de precios, supresión de las
medidas económicas y aun el cambio de gobierno.
La moneda se devalúa, es decir, pierde su poder adquisitivo.
Al devaluarse la moneda, quienes se perjudican son los acreedores porque reciben moneda sin respaldo.
La inflación es un fenómeno que afecta directamente y en mayor magnitud a las personas de ingresos fijos y bajos.
Cuando la inflación es acelerada, las personas que tienen bienes raíces, joyas, artefactos u otros enseres, se ven obligados a
vender para seguir subsistiendo.
Ante la crisis económica los gobiernos se ven obligados a solicitar préstamos en su mayoría con altos intereses, lo que
compromete el futuro del país.
Cuando la inflación tiene un ritmo acelerado se denomina hiperinflación o galopante, en cuyo caso el comercio internacional se
ve perjudicado.
Finalmente, las obras que ejecuta el gobierno se paralizan debido al aumento en sus costos, lo que obliga a un reajuste de
precios.

La deflación

Es el fenómeno contrario a la inflación, pero igualmente perjudicial para la economía del país. Este fenómeno se originó en los periodos
de la posguerra, en donde la demanda efectiva era tan pequeña que la oferta de productos resultaba abundante y, por ende, los precios
van en caída, por eso se le conoce también como recesión, en razón de que caen también los ingresos y los niveles de empleo.

La deflación consiste en la disminución de los medios de pago (dinero) en la circulación. Los resultados de esta crisis producen efectos
contrarios a todo lo anotado en la inflación.

Los efectos de la deflación son:

Se reduce los medios de pago (circulante).


La moneda se revaloriza.
La capacidad de compra de las personas se limita.
Los precios de los bienes en los mercados bajan.
Los oferentes venden menos.

Concepto de interés y tipo de interés

Entendemos por interés el precio o recompensa a pagar por la disposición de capitales ajenos durante un determinado periodo.

Evidentemente, este precio va a depender, en primer lugar, de la cuantía del capital dispuesto y de la amplitud del intervalo de tiempo
durante el cual se va a disponer de este capital. Ahora bien, el nivel de ese precio en términos relativos, es decir, el precio o recompensa
que se va a pagar por unidad de capital y por unidad de tiempo (que denominaremos, en general, tipo O tasa de interés) viene
determinado por la oferta y demanda de dinero en la economía, oferta y demanda que, a su vez, dependen de la política monetaria y
fiscal, así como de las expectativas de los agentes económicos sobre el comportamiento futuro de la actividad económica. Cómo
interaccionan todos estos factores y la determinación a partir de ellos del nivel de los tipos de interés va más allá del objetivo de este
curso. Pero antes de entrar en el estudio del interés, el tipo o tasa de interés y el cálculo de intereses debemos analizar el concepto de
“operación financiera”.

Se entiende por operación financiera la sustitución de uno o más capitales por otro u otros equivalentes en distintos momentos de
tiempo, mediante la aplicación de una ley financiera.

En definitiva, cualquier operación financiera se reduce a un conjunto de flujos de caja (cobros y pagos) de signo opuesto y distintas
cuantías que se suceden en el tiempo. Así, por ejemplo, la concesión de un préstamo por parte de una entidad bancaria a un cliente
supone para este último un cobro inicial (el importe del préstamo) y unos pagos periódicos (las cuotas) durante el tiempo que dure la
operación. Por parte del banco, la operación implica un pago inicial único y unos cobros periódicos.

La realización de una operación financiera implica, por tanto, que se cumplan tres puntos:

Sustitución de capitales. Ha de existir un intercambio de un(os) capital(es) por otro(s).


Equivalencia. Los capitales han de ser equivalentes, es decir, debe resultar de la aplicación de una ley financiera.
Aplicación de una ley financiera. Debe existir acuerdo sobre la forma de determinar el importe de todos y cada uno de los
capitales que compongan la operación, resultado de la consideración de los intereses generados.

Podemos establecer diferentes clasificaciones de las operaciones financieras a saber:


1. Según la duración:

A corto plazo: la duración de la operación no supera el año.


A largo plazo: aquellas con una duración superior al año.

2. Según la ley financiera que opera:

a. Según la generación de intereses:

En régimen de simple: los intereses generados en el pasado no se acumulan y, por tanto, no generan, a su vez, intereses en el
futuro.
En régimen de compuesta: los intereses generados en el pasado sí se acumulan al capital de partida y generan, a su vez,
intereses en el futuro.

b. Según el sentido en el que se aplica la ley financiera:

De capitalización: sustituye un capital presente por otro capital futuro.


De actualización o descuento: sustituye un capital futuro por otro capital presente.

3. Según el número de capitales de que consta:

Simples: constan de un solo capital en la prestación y en la contraprestación.


Complejas (o compuestas): cuando constan de más de un capital en la prestación y/o en la contraprestación.

El mercado está formado por dos agentes, los inversionistas (excedentarios), quienes poseen el recurso, y aquellos que lo necesitan
(los deficitarios). El agente excedentario entrega el recurso al agente deficitario, por período determinado y a cambio recibe beneficios.

Los intereses percibidos por los agentes prestamistas a las empresas adquieren gran importancia en la actualidad, éstos son la
principal fuente de obtención de recursos en el corto plazo, por ello es necesario hacer el análisis respectivo de los montos devueltos a
los prestamistas y la forma de calcularlos, el interés cobrado por uno u otro préstamo puede variar su monto de acuerdo con ciertos
factores que serán abordados más adelante.

El concepto de interés, está profundamente arraigado en la mentalidad de quienes viven en un sistema capitalista. No necesitamos
formación académica para entender que cuando recibimos dinero en calidad de préstamo, es justo pagar una suma adicional al
devolverlo. La aceptación de esta realidad económica, es común en todos los estratos socioeconómicos.

El dinero puede convertirse en capital a base de la producción capitalista. Y gracias a esta transformación de un valor dado se
transforma en un valor que se incrementa a sí mismo.

El interés tiene importancia fundamental en los movimientos de capitales, la colosal infraestructura financiera y crediticia descansa
sobre este concepto básico de pagar por el uso del dinero tomado en préstamo. Sin el interés el mercado de capitales o simplemente
los negocios no existirían.

El interés es el monto pagado por la institución financiera para captar recursos, así como el monto cobrado por prestar recursos. El
interés es la diferencia entre la cantidad acumulada menos el valor inicial; sea que tratemos con créditos o con inversiones.

Actualmente, con mercados financieros complejos y ampliamente desarrollados, las economías domésticas y las empresas
intermediarias del mercado, canalizan los fondos desde los agentes excedentarios o inversionistas, prestando dinero, al agente
deficitario, el cual utiliza estos recursos para satisfacer sus necesidades. Todo esto genera el traspaso de fondos desde los ahorristas,
hasta quienes compran realmente los bienes de capital.

El interés es un precio, el cual expresa el valor de un recurso o bien sujeto a intercambio, es la renta pagada por el uso de recursos
prestados, por período determinado. Es un factor de equilibrio, hace que el dinero tenga el mismo valor en el tiempo. Si la tasa de
interés anual es el 10%, quiere decir que el prestamista recibe por concepto de intereses $10, por cada $100 prestados al año.

El tipo de interés depende directamente de dos factores reales no monetarios: la preferencia por tener los recursos a la promesa de
recursos futuros y la productividad de la inversión. El interés es el precio del dinero en el tiempo.

Ahora veamos los distintos tipos de interés utilizados por los mercados financieros.

Interés fijo y variable: Conocemos como tipo de interés fijo, a la tasa de interés constante en el tiempo. La tasa variable es el tipo de
interés donde una parte la calculamos sobre una base fija más un índice de referencia. El índice de referencia varía según las
condiciones del mercado. En México las instituciones financieras utilizan la TIIE (Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio) como
referencia.

Clasificamos los plazos de las tasas de interés de dos formas:

Interés de corto plazo: Referido a los intereses que devengan o liquidan intereses en un período inferior a 12 meses. Interés de largo
plazo: Son intereses devengados o liquidados en períodos superiores a un año.

Rédito y tipo de interés

Se entiende por rédito (r) el rendimiento generado por un capital. Se puede expresar en tanto por cien (%), o en tanto por uno.
Si en el momento t1 disponemos de un capital Q y éste se convierte en un capital C2 en un determinado momento t2, el rédito de la
operación será:

Sin embargo, aunque se consideran las cuantías de los capitales inicial y final, no se tiene en cuenta el aspecto temporal, es decir, en
cuánto tiempo se ha generado ese rendimiento. Surge la necesidad de una medida que tenga en cuenta el tiempo: el tipo de interés (i).

Se define el tipo de interés (i) como el rédito por unidad de tiempo, es decir:

Veamos un ejemplo:

Un monto de $5,000 genera $6,000 dentro de un año. Determinar el rendimiento (la tasa de interés de la operación financiera).

Por lo tanto:

VA = $5,000; VF = $6,000;

$ 6,000 - $ 5,000l
r= r = 20% de rendimiento
$ 5,000

Rédito o rendimiento y tipo coincidirán cuando el intervalo de tiempo es la unidad (1).

Introducción a los tipos de Tasas de interés: nominal y efectiva

A todos nos resulta común escuchar, sobre todo en su relación con las entidades financieras, que se habla de tasa de interés nominal
anual (TNA) y de tasa de interés efectiva anual (TEA).

Sin duda alguna, el caso más común que se presenta es el de los certificados de depósito a plazo fijo, en las cuentas corrientes
remuneradas, o lo que es más habitual, lo que hay que pagar de intereses cuando se solicita un préstamo a un banco; en cualquiera de
estos casos aparecen normalmente las siglas TNA, o lo que es lo mismo Tasa Nominal Anual.

Pero esta tasa no te indica el rendimiento real del producto financiero al cabo de 365 días, o el interés real que se paga por el préstamo,
dado que "no contempla el “efecto de la capitalización de los intereses”. Es decir, si, por ejemplo, en el caso de un depósito a plazo fijo,
al vencimiento de los 30 días éste se renueva por otro período similar, incorporando los intereses al capital y suponiendo que la tasa de
interés es la misma; se puede comprobar que los intereses que ganará en el segundo período de 30 días serán mayores a los generados
en el primero; debido a que el capital colocado es superior al habérsele acumulado al depositado originalmente, los intereses ganados
en el primer período y así sucesivamente. A todo ello nos hemos referido en el tema anterior al hablar de interés simple y compuesto.
Veamos ahora brevemente en este tema las fórmulas para calcular las Tasas de interés nominal y efectiva.

Tasa nominal

La Tasa nominal anual sirve para calcular el interés utilizando la fórmula más sencilla para cálculo de interés que existe, que es la
denominada fórmula de interés simple; a saber:

Interés = Capital x Tasa/100 x plazo en días/365

Usando la tasa nominal anual se hace posible para el gran público (que no maneja los conocimientos de matemática financiera
avanzada) la comprensión y el control de la liquidación de intereses mediante la utilización de la fórmula de interés simple.

Es decir, que la tasa nominal de interés es una tasa cuya única razón de ser es posibilitar que el público pueda controlar su depósito
mediante la aplicación de la fórmula de interés simple.

Tasa efectiva

Como decíamos en la introducción de este mismo tema, con la tasa nominal no se conocerá cuál es el rendimiento de una inversión, ya
que no contempla la capitalización de intereses.

La determinación de esta tasa efectiva anual de interés se realiza sobre la base de la denominada “fórmula de interés compuesto”, cuya
utilización para la persona que no posee conocimientos de matemática financiera resulta sensiblemente más compleja que la fórmula
de interés simple, y ella es la siguiente:
Interés = Capital x ((1 + i)ⁿ -1)

Donde:

i es la tasa de interés efectiva anual expresada en tanto por uno;

n es un número que resulta de dividir la cantidad de días por el cual se realiza la inversión, dividido entre 365 que son los días del año.

Cuando las entidades financieras definen la tasa de interés que van a pagar a un depositante (o en su caso cobrar a un acreedor),
piensan en tasas efectivas, y luego que toman la decisión que fija el nivel de la misma, calculan las tasas nominales equivalente a ellas;
para, de esta manera, hacer posible que las personas sin conocimientos avanzados de matemática financiera puedan controlar el
importe del interés que van a recibir, en su caso abonar; utilizando la sencilla y consecuentemente muy difundida fórmula de interés
simple.

Conocer esta diferencia entre tasa efectiva anual y nominal anual también resulta muy importante en el momento de evaluar el costo de
un préstamo.

Sobre los conceptos de Tasa nominal y Tasa efectiva y su relación, puedes acceder al siguiente documento:

Plaza, M. (n.d.). Las Tasas de Interés Efectiva y Nominal. Extraído el 14  de Julio de 2011 desde
http://macareo.pucp.edu.pe/~mplaza/001/apuntes_de_clases
/matefinanciera/tasasinteres.pdf.
En caso de que el enlace no este activo para verlo haz clic aquí.

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