Los Diez Mitos Sobre Lubricantes Que Nadie Te Había Respondido Antes

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Los diez mitos sobre lubricantes que nadie

te había respondido antes


La mejor forma de cuidar el motor de tu coche es vigilar el aceite de tu
motor. Hemos tratado este asunto en diferentes ocasiones y desde
diferentes puntos de vista, pero hemos querido saber si se nos quedaba
algo en el tintero preguntando a quienes más saben de lubricantes. Y
esos no son otros que TOTAL España, líder del mercado en lubricantes
para automoción, gracias al prestigio y calidad de sus tres marcas:
TOTAL, ELF y GULF, (en España y Portugal) fabricadas y comercializadas
en nuestro país… y que ahora cuentan con una nueva e interesante tienda
online donde puedes comprar sus productos con más comodidad.

Y sí. A pesar de que de coches y su mantenimiento sabemos un rato,


hemos descubierto un sinfín de cosas.

1. Si tengo que rellenar aceite, cuanto más mejor


Quien más o quien menos, sabe que llevar el coche con poco aceite es de
lo peor que se le puede hacer a un coche. Pare ello debe comprobarse el
nivel de aceite, una operación para la que solamente necesitas un lugar
completamente plano, el motor de tu coche frío… y un trapo para limpiar
la varilla del coche. En TOTAL han hecho un video muy simpático donde
explican cómo hacerlo correctamente.

Y es aquí donde llegamos al mito. A pesar de que la varilla marca


perfectamente los niveles máximos y mínimos, muchas personas creen
que, si el echar aceite es bueno, cuánto más, mejor. Error. Llenar el cárter
demasiado puede causar un exceso de calor por el aumento de la
resistencia, lo cual acortará la vida útil del motor de tu coche. No sólo
eso. Se salpicará mucho lubricante a los cilindros, que quemarán más
aceite y aumentarán los depósitos en la cámara de combustión, que
pueden derivar en problemas de funcionamiento.

Parte del error viene porque la gente cree que hay que echar todo el
contenido de la lata de aceite, o que ha oído el rumor de que un coche de
cuatro cilindros necesita cuatro litros de lubricante. Por eso lo mejor es
leer bien antes el manual del coche… Y guardar el aceite que te sobre,
para rellenar cuando baje el nivel.

Hablando de relleno de aceite, en TOTAL nos cuentan que han lanzado


unos packs de relleno de aceite, que solamente pueden adquirirse a
través de la tienda online y que cuenta con una lata de un litro y el resto
de los elementos necesarios para realizar la operación cómodamente.

2. Si el aceite del motor está muy negro, algo falla

Es algo muy común. Cuando se realiza el cambio de aceite (si no


sabes hacerlo tú mismo, lo mejor es que acudas a un taller de confianza)
mucha gente ve el aceite negro y cree que algo falla. Pues es
exactamente al revés, ya que eso significa que el aceite está cumpliendo
su cometido.

Los fabricantes de lubricantes modernos añaden aditivos detergentes y


dispersantes, cuya función es limpiar las piezas internas del motor,
eliminando la carbonilla. Esa suciedad queda en suspensión en el aceite
(de ahí su color), y es mejor que esté ahí que no que se deposite en el
motor, donde sería realmente perjudicial. Por eso, si sale limpio significa
que esos residuos se han quedado por la mecánica.

3. Da igual el aceite que eches


Todos los aceites lubricantes no son iguales. Hay diferentes tipos de
lubricantes para motor, con características físicas, tecnología y contenido
de aditivos. Cada lubricante es diferente… y sirve para coches diferentes.
Ya te contamos cómo elegir el mejor aceite para tu motor. Hazles caso a
las recomendaciones del fabricante (busca aceites con el mismo índice
de viscosidad que te indican) y a los expertos de tu taller. ¿Tienes dudas?
TOTAL, cuenta con un equipo de expertos que responderán a tus
preguntas.

4. No debo mezclar aceites

Es necesario conocer qué se está mezclando. Se pueden combinar


aceites de diferente marca, siempre y cuando se mantenga
la equivalencia en su índice de viscosidad y su calidad. ¿Y mezclar un
aceite sintético con uno mineral? No es recomendable hacerlo, salvo en
un caso de emergencia, ya que acabará perdiendo viscosidad y aditivos,
con lo que la lubricación del motor será deficiente.

5. Si añado aditivos, el lubricante hará mejor su trabajo

No es necesario añadir nada a los lubricantes. Un montón de


investigadores, después de tiempo y esfuerzo, han determinado cuáles
son los aditivos necesarios para ese aceite funcione a la perfección. No
existen productos milagrosos, que sean capaces de reducir el consumo
de coches antiguos o alargar la vida de los lubricantes usados. De hecho,
un aditivo puede generar reacciones no esperadas, como alterar las
propiedades del lubricante y crear problemas graves… En lugar de ahorrar
dinero, lo estarás malgastando.

6. Como uso poco el coche, no cambio el aceite desde hace años


Todo el mundo, incluidos los fabricantes de los automóviles,
recomiendan cambiar el aceite del coche cada cierto número de
kilómetros. Pero ¿qué ocurre si se usa tan poco el coche que para
alcanzar ese kilometraje deben pasar varios años? Pues que, en estos
coches que no se mueven a menudo, es posible que no alcancen
las temperaturas óptimas de funcionamiento. En ese caso se pueden
generar lodos en el motor. La vida útil del lubricante, además del
kilometraje,  también está asociada a la condición mecánica del vehículo,
al uso adecuado de refrigerantes y al modo de conducción.

7. No hace falta cambiar el filtro en cada cambio de aceite

El filtro de aceite, que suele estar situado sobre el motor, se encarga de


retener las impurezas acumuladas en el aceite del motor. Es tan
importante su función que se recomienda cambiarlo cada vez que se
cambie el aceite. El sobrecoste es ínfimo, entre 3 y 8 euros, en
comparación con el riesgo que se corre por no hacerlo, que se colapse y
las impurezas lleguen a partes que no deberían.

8. El aceite no influye en el consumo


Por supuesto que sí. El correcto mantenimiento del vehículo ayuda a
mantener a raya los consumos. Desde llevar los neumáticos con la
presión correcta a tener un motor limpio… que es la función del
lubricante. De este modo, si se emplea gasolina o diésel con menor
contenido de azufre, el lubricante estará más limpio, durará más y el
motor durará más tiempo.

9. El aceite no se desgasta

Si no se desgastase, no haría falta cambiarlo cada cierto tiempo… ¿no


crees? Cuando el coche funciona a temperaturas muy altas el lubricante
empieza a oxidarse y se espesa… y tampoco realiza bien su trabajo si hay
demasiada carbonilla, agua, ácidos, impurezas, partículas metálicas…
Todo esto puede causar que se taponen los filtros y los recorridos del
lubricante, así que cámbialo cuando te indiquen para evitar problemas
mayores.

10. Los aceites minerales no son perjudiciales para el medio ambiente

Uno suele pensar que un aceite mineral es más «natural», por lo que no
importa cómo debe deshacerse del aceite usado. En TOTAL, muy
comprometidos con el desarrollo sostenible, nos sacan de nuestro error.
Ambos productos causan impacto sobre el medio ambiente y es clave
llevarlo a un punto donde sepamos que se va a gestionar de modo
adecuado.

Siempre hay que reciclarlo. Un solo litro de aceite usado tirado en la


naturaleza puede llegar a cubrir 1.000 m2 de agua e impide a la flora y
fauna oxigenarse durante años. Y si se incinera mal, genera gases
toxicos. Reciclando, además se consigue, por cada de tres litros de aceite
usado, crear un litro de aceite nuevo, que puede volver a ser utilizado
como lubricante.

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