Protocolo Ante La Corte

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 11

SILENCIANDO AL ACUSADOR

LA RESTAURACIÓN DE TU DERECHO DE NACIMIENTO

TERCERA EDICIÓN

JACQUELIN Y DANIEL HANSELMAN

1
CONTENIDO

Preparación para el Tribunal del Cielo .......................................................... 2


La Confesión de Fe en Jesucristo .................................................................. 4
Desmantelando al Hombre Fuerte de la Religión .......................................... 5
La Proclamación del Pacto ........................................................................... 9
Oración de Cierre ....................................................................................... 11

Preparación para el Tribunal del Cielo


Antes de entrar en la Sala del Tribunal de Dios, es necesario determinar dónde comenzarás tu
caminar hacia la justicia, la libertad y la bendición. Algunos de ustedes se ocuparán de las
acusaciones personales, mientras que otros se ocuparán de las acusaciones generacionales. Las dos
claves fundamentales en todo este proceso en la Corte Celestial son el arrepentimiento y el perdón.
La oraciones en este libro le guiarán durante cada proceso. Necesitas permitir que el Espíritu Santo
ore a través de ti. Estas oraciones están diseñadas para ser dinámicas y personales, con el Espíritu
Santo guiándote a áreas ocultas de iniquidad, trauma y amargura. Pensamientos, imágenes y
recuerdos pueden guiarte durante este camino.
Cada vez que presentas un caso ante el tribunal, entras en Sus Cortes con acción de gracias y por
sus atrios con alabanza (Salmo 100:4). Imagínate en una sala de audiencias. Tú estás solicitando que
el tribunal entre en sesión y escuche tu caso. Pide amablemente al Juez Justo que se siente. Necesitas
pedir que toda información relevante en los libros del Cielo y del Infierno esté disponible para ti
durante todo el procedimiento. Pide que tu Abogado, el Espíritu Santo, esté presente con los siete
espíritus de Dios. Isaías 11:1-2 dice: El Espíritu del Señor reposará sobre él, Espíritu de sabiduría y de
inteligencia, Espíritu de consejo y poder, Espíritu de conocimiento y temor del Señor. Tu Representante es tu
abogado defensor quien le dará sabiduría, entendimiento, consejo y conocimiento para que tú recibas
justicia.
Sostente en el Espíritu del temor del Señor, que es el principio de la sabiduría, para que esté
contigo en la Sala de las Cortes Celestiales durante todos los procedimientos. Pídele a tu intercesor,

2
Jesucristo, que esté presente con la sangre rociada del Cordero que clama continuamente por
misericordia. Tu mediador es el que intercede en tú nombre. Tú debes llamar a los testigos de tu línea
de sangre y tus amistades, para que estén presentes en el Cielo. La gran nube de testigos puede
testificar en tu nombre. A nivel nacional, es necesario pedir por todos aquellos santos, conocidos y
desconocidos, quienes han avanzado el Reino de Dios en tu nación, o han sido dañados por las
iniquidades de tu familia. Pide a los ángeles escribas que registren todos los procedimientos, a los
ángeles adjuntos que mantengan el orden, y al acusador de los hermanos que venga y se presente
pero en silencio.
Como primera orden en la Corte Celestial, tú necesitas presentar un testimonio de tu vida en
Cristo. Un ejemplo de esto está disponible en la página 24 bajo el título: La Confesión de Fe en
Jesucristo. Tú puedes incluir en el testimonio: tus años sirviendo al Señor, tu ministerio fiel al pueblo
de Dios, tu servicio alimentando a los pobres y necesitados, entregando el diezmo, y tu fidelidad
como esposo o esposa, padre o madre. Esto establece tu posición como hijo de Dios con el derecho
a entrar en la Corte Celestial para recibir justicia. Entonces pide por el testimonio de aquellos en la
gran nube de testigos que testifiquen a tu favor. Siéntate en silencio en la Sala de Audiencias para
escuchar como testifican. Personalmente, en mi espíritu, los he escuchado confirmando mis
oraciones por mi familia.
Después de completar el trabajo de ese día en la Corte Celestial, agradezca al Juez Justo, y pídale
a la Corte por una continuidad1, tome la Comunión con la Proclamación del Pacto (p.30) y termine
con la Oración de Cierre (p.32). Debes declarar la Proclamación del Pacto con tu corazón mientras
meditas en el sufrimiento de Jesús, y Su sangre preciosa cobra vida. Es un descubrimiento darse
cuenta de que el ADN de Jesucristo está codificado con la memoria de Su gloria en el Monte de la
Transfiguración, la misma transfiguración prometida a Sus hijos.

—————————— ❧ ——————————

1
Continuidad - permanecer en el mismo lugar y condición. En el contexto de un tribunal, es un aplazamiento de
un paso en un procedimiento a un día futuro. Cuando usted pide una continuación, el acusador no está autorizado a
continuar acosando mientras el tribunal está deliberando este caso.

3
La Confesión de Fe en Jesucristo
————— O R A C I Ó N —————

Padre, yo creo en mi corazón y confieso con mi boca que Jesucristo es el Señor. Creo
que Él es el Hijo de Dios y que Él murió en la cruz por todos mis pecados e iniquidades.
Tú me escogiste de antemano desde antes de la fundación del mundo. Fui predestinado
para ser conformado a la imagen de tu Hijo. Fui llamado para tus propósitos divinos en
la tierra. Fui justificado por la sangre de Jesucristo. Fui glorificado con la gracia y el poder
del Espíritu Santo para cumplir mi llamado. Fui santificado por la obra del Espíritu Santo
para ser separado del mundo y unirme a Jesucristo.
Decreto que, por causa de la cruz, no hay cargo alguno contra mí por parte del Padre
o del Hijo. Tú me has dado todas las cosas para que pueda ser más que vencedor en esta
vida por medio de Aquel que me ama (Romanos 8:29-30, 33, 37).
Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma
mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. Él es quien perdona todas tus
maldades, el que sana todas tus dolencias, el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona
de favores y misericordias. Porque, como la altura de los cielos sobre la tierra,
engrandeció su misericordia sobre los que le temen. Así como está lejos el oriente del
occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones. Mas la misericordia de Jehová es
desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, y su justicia sobre los hijos
de los hijos, sobre los que guardan su pacto y los que se acuerdan de sus mandamientos
para ponerlos por obra. (Salmos 103:1-4, 11-12, 17-18).
Padre, me maravillo al contemplar tu entrañable bondad hacia los que te temen, a los
que guardan tu pacto y caminan en tus mandamientos. Vengo ante ti en este día para
proclamar que Jesús es el Sumo Sacerdote de mi confesión. Te doy gracias por
permitirme entrar confiadamente ante tu trono a través de la justicia de Jesús, porque Él
hizo un camino para que yo pudiera venir ti.
Por tanto, vengo con confianza como hijo tuyo, sabiendo que tú escuchas mis
oraciones y que tú corazón está lleno de misericordia hacia mí. Sé que tú eres fiel para
completar la buena y perfecta obra que has comenzado en mi vida. Deseo libertad
completa de todo pecado que me bloquea y que me separa de mi destino. Deseo libertad
completa de toda acusación generacional, amarguras, ataduras, maldiciones y fortalezas
generacionales.
Padre, deseo recuperar la áreas en mi vida que han sido controladas por el enemigo
de mi alma. Como Jesús en Juan 14:30, quiero ser capaz de proclamar que el príncipe de
4
este mundo no tiene poder sobre mí; puedo caminar como un vencedor en esta vida por
medio de la justicia que tengo en Cristo Jesús. En el Nombre de nuestro Señor y Rey
Jesucristo, amén.

—————————— ❧ ——————————

Desmantelando al Hombre Fuerte de la Religión


La religión contamina tu vida de maneras muy sutiles. No importa qué religión ha practicado tu
familia - Budismo, Hinduismo, Islam o Cristianismo. Tendrás que superar las formas de la religión.
Si has nacido en una familia involucrada en la iglesia por generaciones, es probable que estés
tratando con una fuerte raíz del espíritu fariseo. Jesús advirtió a Sus discípulos que tuvieran cuidado
con la levadura de los fariseos, de los saduceos y de los herodianos. Los fariseos basaron su justicia
en el cumplimiento de la ley-legalismo. Los saduceos negaron lo milagroso y basaron sus creencias
en una cosmovisión griega más que en una cosmovisión bíblica. Los herodianos escucharon el
mensaje evangélico de arrepentimiento, pero se negaron a cambiar su estilo de vida de inmoralidad
sexual. Mezclaban la política con la religión.
La iglesia ignora la realidad de la influencia contaminante de la religión. Satanás no hace guerra
contra la religión, sino contra tu fe viva en el Cristo Resucitado -la Palabra de Dios. La religión no
debe confundirse con la liturgia que fluye por amor al Señor. Cada persona tiene la capacidad de
caminar en las formas de la religión, confiando en las acciones externas como la fuente de la rectitud
(justicia). La religión es controladora, y exige el servicio a través de acciones externas pero no se
mueve por los mandamientos del Señor para amar. En vez de usar toda la armadura de Dios, estás
vestido con la armadura de la religión.

————— O R A C I Ó N —————

En el nombre de Jesús, ato al hombre fuerte de la religión en mi vida. Confieso que


mi familia ha caminado en auto-justificación y ha juzgado a los demás con dureza. Me
arrepiento de todos los juicios que he hecho en contra de otras denominaciones en el
Cuerpo de Cristo. Los juzgué como engañados y andando en tinieblas. Mis ancestros
incluso han matado a otros cristianos en el nombre de Cristo debido a este espíritu asesino
5
farisaico. Juez Justo, te pido que perdones todas las palabras, hechos y acciones
cometidas por mis ancestros y por mí que hayan destruido a otros en el Cuerpo de Cristo.
Límpianos de esta culpa de sangre.
Confieso el odio generacional al pueblo judío (Israel) arraigado en la teología de
reemplazo enseñada por cientos de años por la iglesia, los celos de su posición como
Pueblo Elegido, y creyendo en las mentiras de Satanás contra ellos. Hemos intentado
robarles Sus preciosas promesas. Te pido que limpies el linaje de mi familia de
antisemitismo. Confieso los graves pecados contra tu pueblo por medio de pensamientos,
palabras y acciones. Mis ancestros intentaron sacarlos de la faz de la tierra a través de
pogromos (destrucción sistemática de aldeas judías en Europa), el Holocausto, el retiro
de niños judíos de sus padres, y el asesinato. Padre, pido que la sangre de Jesús nos limpie
de esta culpa de sangre contra tu Pueblo Elegido. Pido que todas las mentiras que he
creído sean reveladas por medio de la verdad de tú Palabra. En el nombre de Jesucristo,
acepto las ramas naturales del olivo y su posición delante de Ti. Los bendigo con paz
(Shalom).
Reconozco que sólo hay un justo, Jesucristo, y todas mis obras de justicia son como
trapos de inmundicia delante del Trono de Dios. Renuncio a mi identidad auto-
justificada enraizada en las buenas obras, la afiliación religiosa y las mentiras
"humanistas" de la bondad innata del hombre. Renuncio a toda actitud y creencia que se
opone a la cruz, al sacrificio de Jesús y a la verdad santificadora de la Palabra de Dios.
Reconozco que mi auto-justificación ha destruido la verdadera intimidad con mi familia,
con los demás y con el Cuerpo de Cristo. ¡Padre, he abrazado esta falsa justicia y he
declarado que soy bueno! He estado participando del fruto del Conocimiento del Bien y
del Mal en lugar del Árbol de la Vida. Cada vez que participo de este fruto envenenado,
el espíritu farisaico se fortalece en mi vida. Pido que el antídoto, la sangre de Jesús, se
aplique a mi alma. Perdóname por vivir tan alejado de mi destino en Cristo. Ayúdame a
entrar y disfrutar de tu vida abundante por medio de la humildad y el amor.
Hoy me pongo en contra del hombre fuerte de la religión en mi familia y en mi vida -
el espíritu farisaico. Yo le despojo de la armadura en la que él se ha apoyado (Lucas
11:21-22). Me despojo del casco de la inflexibilidad, limitando mi visión y oído a la
verdad, a causa de las fortalezas en mi pensamiento. Estas fortalezas se oponen a la
verdad de la Palabra de Dios. Mi fortaleza de orgullo en la justicia de mis creencias ha
cerrado mi mente y me mantuvo atrapado con una visión distorsionada de Dios y del
mundo.
Quito la coraza de justicia propia mantenida por mi arrogancia y orgullo que se
niegan a asumir la responsabilidad o reconocer mis acciones pecaminosas contra los

6
demás. Considero todo lo que hago y digo como correcto y bueno porque he comido del
Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal. Padre, permíteme ver que mi justicia viene
sólo por la sangre de Jesucristo. Todas mis acciones egoístas son como trapos inmundos
delante de Ti.
Desato mis lomos del cinturón de la decepción y el engaño que han contaminado el
fluir puro del Espíritu, la unción, y mis dones. El engaño me ha impedido producir
descendencia santa en el Señor. Todo lo que oigo y veo es examinado a través de esta
corriente contaminada. Padre, límpiame de todo engaño y trae un fluir puro de tu vida.
Señor, enséñame a comparar mis pensamientos y acciones con la Palabra de Dios, la
naturaleza de Cristo y el fruto del Espíritu.
Me despojo de las botas de guerra que me hacen sentir tan fácilmente ofendida y
herida. He usado estas botas para pisar, destruir y despreciar los dones, las visiones, las
voces, los propósitos y el destino de otros. Padre, perdóname por ser egoísta. Busco la
ofensa y rápidamente hago la guerra con los que me rodean. ¡Señor, enséñame a ser un/a
pacificador/a!
Me quito el escudo del necio que apaga la verdad de la Palabra de Dios, mientras trae
convicción, juicio sano y sabiduría santa a mi corazón. Padre, permíteme escuchar la
verdad en Tu Palabra por medio de líderes, otros y del Espíritu ¡Quita las sendas del necio
de mi camino!
Remuevo la espada de la muerte que destruye a otros con palabras de crítica,
reprensión, maldición, justificación, culpa, juicio, acusación, mentiras, chismes y
adulación. Padre, perdóname por cada palabra que ha traído muerte en vez de vida. Pido
que toda palabra profana sea arrebatada para que no dé fruto. Por favor cubre todas mis
palabras de muerte con la sangre de Jesús. Padre, que tenga una lengua de vida. ¡Que
cada palabra que hablo a los demás esté de acuerdo con Tú corazón!
Padre, me arrepiento de ser un recipiente del enemigo a través de mis oraciones
carnales contra los planes y propósitos del Espíritu Santo en la tierra. Me he levantado
como juez contra el movimiento del Espíritu Santo y he orado maldiciones contra el
liderazgo, hecho adoración, creando manifestaciones inusuales de Tú Espíritu,
avivamientos y nuevas revelaciones de Tu Palabra. Todo lo medí basado en mi
conocimiento y entendimiento. Con mis palabras inspiradas por demonios, he sido usado
para apagar los fuegos del avivamiento en el Cuerpo de Cristo. Perdóname; No entendía
el poder de mi lengua para liberar la muerte, y los poderes demoníacos del Infierno contra
Tu obra en el Cuerpo de Cristo. Perdóname por atraer a otros al acuerdo con el Infierno
contra la obra del Espíritu Santo. Perdóname por levantarme como dios en la asamblea,
pensando que yo entendía tus maravillosos caminos. Yo soy sólo polvo y tú eres el
7
Creador del Universo, lleno de la sabiduría de todos los siglos. Todo entendimiento y
conocimiento pertenecen a Ti. Pido que los acuerdos que he hecho con otros y con el
Infierno queden inhabilitados (sin validez).
Padre, consuma con fuego la armadura del hombre fuerte, la armadura falsa de la
religión farisaica. No volveré a confiar en esta falsa armadura. Te pido que desarraigues
los caminos farisaicos de mi vida. Envía tu fuego y consume completamente esta raíz de
mi vida. Purifica mi corazón del veneno de este fruto que me mantiene separado de tú
corazón de amor. Me niego a alimentarme del fruto del Árbol del Conocimiento del Bien
y del Mal. Mantenme alerta a la tentación de confiar en caminos religiosos en lugar de
apoyarme en Ti.
Perdóname por cada persona que he envenenado contra ti por mis duros métodos
farisaicos. Perdóname por presentar una imagen falsa de Ti a los que me rodean.
Destruye esta imagen falsa en sus vidas para que puedan servirte en verdad. Perdóname
por la guerra que hice contra los que se negaron a inclinarse ante mi ídolo de la religión.
Señor, ayúdame a humillarme y hacer la paz con las personas a las que percibo como
enemigos.
Padre, te pido que destruyas el yugo de la religión de mi vida. Destruye los grilletes
de la condenación y la frustración. Declaro que estoy unido al Señor. Tú prometiste que
tu yugo es fácil, y ligera tu carga.
Ahora, me pongo toda la armadura de Dios comenzando con el casco de la salvación,
que renueva mi mente por medio de la Palabra de Dios. Todo lo que escucho y veo, lo
juzgo en base a la Palabra de Dios. Estoy de acuerdo con tu Palabra, tus pensamientos y
tus propósitos.
Me pongo la coraza de justicia, que es la justicia de Cristo. Confiadamente me acerco
a tu Trono para recibir misericordia. Tú declaraste que yo soy santo y, por lo tanto, lo
soy. El Señor es mi justicia. La justicia de Jesucristo protege mi corazón de toda
condenación y culpa.
Tengo el cinturón de la verdad alrededor de mis lomos. Declaro que nada está
escondido en la oscuridad o encubierto en mi vida. Estoy desnudo y sin vergüenza
delante de mi Padre en la verdad de mi redención. Mi espíritu nace de lo alto, de la
simiente incorruptible. Mi ser más íntimo es el lugar permanente del Señor. Corrientes
de agua viva, pura y santa fluyen de mi interior, trayendo vida a una tierra seca.
Mis pies están calzados con el apresto del Evangelio de la Paz. Camino con el espíritu
de paz como ministro de reconciliación. Coloco el escudo protector de la fe sobre mi vida,
que apaga todos los dardos de fuego del maligno. Tu fidelidad es mi escudo, y confío en
tu capacidad para guardarme del mal.
8
Utilizo con habilidad la Espada del Espíritu -la Palabra de Dios. Seré eficaz en mi uso
de la Palabra de Dios para liberar a los ángeles que obedecen a la Palabra del Señor.
Oraré con mi entendimiento y oraré con el espíritu. Estaré vigilante y oraré en todo
tiempo, en cada temporada del Cuerpo de Cristo y por las naciones del mundo, con
determinación y perseverancia, para que el Reino de Dios se manifieste en la tierra.
Señor, yo confío en tu armadura. Con la armadura completa del Dios Todopoderoso,
puedo resistir al enemigo. Desmantelo al hombre fuerte de la religión y proclamo que
estoy libre de su control. ¡Gracias Señor por liberarme del dominio de este hombre fuerte!
¡Aleluya! Puedo caminar en mi posición como hijo del Dios Altísimo totalmente
dependiente de la justicia de Cristo Jesús, Su Palabra, Su verdad y Su misericordia. En el
nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amén.

—————————— ❧ ——————————

La Proclamación del Pacto


En Isaías 43:26 (Biblia Amplificada-AMP) se nos instruye: “Hazme recordar (recuérdame tus
méritos), entremos juntos a juicio, para que puedas justificarte (probado como justo)” En Lucas 22:19-20b
(Biblia Amplificada -AMP), recordamos las palabras del Señor: “Entonces tomó un pan, y habiendo dado
gracias, lo partió y se los dio, diciendo: —Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de
mí. De igual manera, después de haber cenado, tomó la copa, diciendo: —Esta copa es el nuevo pacto o alianza
(confirmado) en mi sangre, que por vosotros se derrama (se ha derramado).”
Por tu relación de pacto con el Señor, puedes acercarte confiadamente al trono de Dios para
recibir misericordia y gracia en el tiempo de necesidad. Es muy importante que se recuerden a ustedes
mismos, a las huestes del Infierno, a los ejércitos de los ángeles, e incluso al Dios Padre, tu relación
de pacto con él. Has sido justificado por medio de la sangre de Jesús y estás en una relación de pacto
con un Dios que guarda Su pacto.
Cuando hayas terminado de confesar tus pecados e iniquidades personales y generacionales, es
esencial que, en tu tiempo de arrepentimiento, pongas un sello a esta alianza por medio de la
Proclamación del Pacto y la Comunión.

9
————— O R A C I Ó N —————

Padre, vengo confiadamente ante tu trono recordándote el pacto que tengo contigo
por medio del cuerpo inmolado y de la sangre del Cordero de Dios, Jesucristo. Declaro
que esta Copa del Pacto es santa. Llamo a la gran nube de testigos, a los ejércitos de los
ángeles, y a los poderes de las tinieblas a que atiendan, mientras proclamo que soy un
hijo de un Dios que guarda Su pacto. He sido santificado por el sacrificio perfecto de
Jesucristo. ¡He sido limpiado, perfeccionado y justificado!
Declaro en el Tribunal del Cielo que he sido redimido por la sangre de Jesucristo, que
he sido trasladado del reino de las tinieblas al Reino de la Luz. A través de los
sufrimientos de Jesucristo, soy libre del poder del pecado, de la culpabilidad y de la copa
de la ira!
He sido crucificado con Cristo y la vida que ahora vivo, la vivo por la fe en el Hijo de
Dios. Te doy gracias por darme lo mejor del trigo. Bendigo este pan y declaro que estoy
recibiendo tu vida, tu fuerza, y tu virtud divina en mi cuerpo, alma y espíritu. Estoy
recibiendo el ADN de Jesucristo codificado con la memoria de Su gloria en el Monte de
la Transfiguración. Tengo completa salvación y Shalom (paz) por medio de la vida en Su
carne. Él fue molido por mi iniquidad. Este día traigo los moretones (marcas) de mi
generación al cuerpo de Jesucristo. Recibo completa sanidad en cada área pervertida
(corrompida) de mi ADN. Declaro que la sangre, señal de mi pacto con Cristo, me limpia
de toda impureza y me santifica. Yo soy hijo del Dios Altísimo, y he sido justificado
delante de Sus ojos. Vivo en el Shalom de Dios. En el nombre de nuestro Amado Señor
Jesucristo, amén.

—————————— ❧ ——————————

10
Oración de Cierre
Siempre que estés involucrado en cualquier oración, es importante sellarla para evitar cualquier
reacción del enemigo. La siguiente oración, la hemos aprendido de intercesores en California.
Cuando la aplicábamos al terminar una intercesión, descubrimos que no teníamos reacción violenta
del enemigo.

————— O R A C I Ó N —————

Padre, pido que cada palabra que se pronunció hoy sea sellada para el tiempo y la
eternidad. Pido que estas palabras sean registradas en los Libros del Cielo. Pido que los
ejércitos de los ángeles sean puestos en libertad a nuestro favor para que veamos las
bendiciones del Señor que nos hacen ricos con toda bendición espiritual en lugares
celestiales, lo que por derecho nos pertenece por nuestro Pacto eterno con el Dios
Todopoderoso. Yo sello esta intercesión por medio de la sangre del Cordero, por el poder
del Espíritu Santo y por la Palabra de Dios. Declaro, según Isaías 55:11, que toda palabra
en acuerdo con la voluntad del Padre no volverá vacía sin cumplir lo que Él desea y sin
llevar a cabo aquello para lo cual fue enviada. Declaro que el aliento del Espíritu Santo -
zoe vida - está sobre estas oraciones. Declaro que el enemigo no librará contra mi vida o
mi familia maldiciones, contra-maldiciones, estrategias o represalias contra nuestra
salud, matrimonios, hijos, nietos, finanzas, ministerio, destino o bienestar, en el nombre
de nuestro amado Señor Jesús, Amén.

—————————— ❧ ——————————

11

También podría gustarte