El Contrato Como Fuente de Las Obligaciones

El contrato como fuente de las obligaciones.
Nuestro Código Civil, en su Título III, Capitulo I, regula lo concerniente a las

fuentes de las Obligaciones, y define, en su Artículo 1.133 "El contrato", siendo
que el mismo es considerado la principal fuente de obligaciones.
ARTÍCULO 1.133: "EL CONTRATO ES UNA CONVENCIÓN ENTRE DOS O MÁS
PERSONAS PARA CONSTITUIR, REGLAR, TRANSMITIR, MODIFICAR O
EXTINGUIR ENTRE ELLAS UN VÍNCULO JURÍDICO."
Ahora bien, de acuerdo a la definición del contrato que nos brinda nuestra
legislación, tenemos que, ese vínculo jurídico que surge entre dos o más
personas, hace nacer en ellas la "obligación" de cumplir una prestación o
contraprestación a favor de la otra parte.
Se considera al contrato "fuente" de las obligaciones precisamente porque de lo
estipulado en él "nace" la obligación de una o de todas las partes de cumplir con
una prestación previamente establecida por ellas. Esta obligación, bien puede ser
de dar, de hacer o de no hacer.
También, dependiendo de la naturaleza del contrato, si es unilateral o bilateral, la
obligación estará a cargo de una o de todas las partes contratantes.
Muchos autores sostienen que hay que diferenciar el "contrato" de la "convención"
o "convenio", ya que si bien ambos hacen surgir derechos y obligaciones en las
partes, la diferencia fundamental radica en que el contrato
requiere de ciertas formalidades para su existencia, y los derechos y obligaciones
son exigibles civilmente, mientras que en la convención o convenio, nacen, se
modifican o se extinguen derechos y obligaciones sin requerir estos de mayores
formalidades.
Si bien nuestro Código Civil define al contrato, en el Art. 1.133, como una
"convención", lo más acertado sería definirlo como un "acuerdo" entre las partes,
el cual está sometido a la existencia de elementos formales sin cuyo concurso no
estaríamos en presencia de un contrato sino de un convenio.
Algunos autores señalan que si el acuerdo de voluntades tiene un objeto distinto a
la creación de una obligación, estaríamos en presencia de una convención y no de
un contrato.
Otros destacan el contenido u objeto que regula dicho acuerdo, que en el caso de
los contratos serán las relaciones jurídico-patrimoniales. Sin embargo, en varias
oportunidades el legislador patrio utiliza ambos términos como sinónimos como es
el caso del artículo 1.387 CC que indica que “no es admisible la prueba de testigos
para probar la existencia de una convención celebrada con el fin de establecer una
obligación o de extinguirla…”
En cuanto a la diferencia entre contrato y convención, como ya hemos señalado,
hay distintas posiciones doctrinarias, hay autores para quienes ambos términos
son sinónimos y autores para quienes uno y otro son figuras distintas. Pero,
siendo que nuestro Código Civil establece que el contrato es una convención, a
los fines de evitar confusiones terminológicas, lo asumiremos como sinónimos, lo
cual no es impedimento para que cada uno de ustedes se incline por una u otra
posición doctrinaria.
Es importante tener presente esta distinción para evitar confusiones al momento
de consultar o investigar con relación al contrato como fuente de obligaciones, ya
que podemos toparnos con algún autor para quien Contrato y Convención NO son
sinónimos.
Yo, personalmente, me inclino por la teoría que establece que contrato y
convención son figuras distintas, que el contrato requiere de la presencia de
ciertas formalidades y/o elementos para su existencia y, que el incumplimiento de
las obligaciones nacidas del mismo pueden ser exigidas judicialmente, mientras
que la convención no requiere de las formalidades del contrato para su existencia.
Para mi, el contrato es un ACUERDO entre dos o más personas, que
MANIFIESTAN SU VOLUNTAD de obligarse la una con la otra. Ahora bien, no
obstante la posición doctrinaria por la que nos inclinemos, debemos tener muy
presente que, cuando nuestra legislación habla de "convención", debemos
entender que habla de "contrato".
CARACTÉRES DEL CONTRATO:
Entre los caracteres del contrato encontramos:
1-BILATERALIDAD: El contrato es un acto jurídico, o más precisamente, un
negocio jurídico bilateral. Es una convención porque combina el concurso de dos o
más voluntades para la consecución de un determinado efecto jurídico.
2-PATRIMONIALIDAD: Regula relaciones o vínculos de carácter patrimonial,
susceptibles de ser valorados desde el punto de vista económico y es lo que
propiamente lo diferencia de la convención.
3-PRODUCE EFECTOS OBLIGATORIOS: Obliga a todas las partes que lo
integran en virtud del consensualismo.
4-ES FUENTE DE OBLIGACIONES: La más importante y la que mayor número
de relaciones obligatorias genera. Y desde un punto de vista más amplio se alude
a que el contrato es fuente de derecho, que crea un estatuto de sujeción.
5-PRESENTA UNA IMPORTANTE FUNCIÓN ECONÓMICA Y SOCIAL: Sirve
para canalizar las necesidades más simples y rudimentarias a través del
intercambio. De las cuales se distinguen subfunciones de cambio, crédito,
garantía, custodia, previsión, recreación y cooperación.
6-SE FUNDAMENTA EN LA VOLUNTAD: Esto es, es obra exclusiva de la
voluntad de los contratantes.

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