Bases Jurídicas de La Independencia

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Bases jurídicas de la independencia. El conflicto de 1808.

La nueva España vivió 300 años de nominación después de la conquista de


México por España. Hubieron condiciones nefastas para la población
indígena. Había 25 millones de indígenas que disminuyeron muy rápido.
Esto de debió al trabajo en las minas, la encomienda, guerras, malas cosechas
y las epidemias por enfermedades que trajeron los españoles. La disminución
de los indígenas se suplió con negros. Para 1810 había 10 000 negros
esclavos.
Causas internas: fueron principalmente la desigualdad económica y social de
sus habitantes la clasificación de castas despreciadas y explotadas. Los
indígenas protegidos por las indias, querían emanciparse de este tutelaje.
España ya no era la nación unitaria en su modalidad y costumbres, pues
borbones habían llevado una conducta política extraña.
Causas externas: está la influencia de las ideas francesas ya que los criollos y
demás dirigente de la guerra de independencia recibieron mucha influencia
de dicha tendencia teórica, a lo que se refiere de los derechos fundamentales
del hombre. Otro factor que influyó en el idealismo de los insurgentes fue la
independencia de las 13 colonias inglesas en Estados Unidos (1776) esto hizo
que se levantaran en armas en contra del régimen monárquico
Otro factor fueron los ideales de la revolución francesa (1879) ya que este
suceso significó el triunfo de la burguesía sobre la nobleza y el clero.
La invasión Napoleónica a la corona Española fue un acontecimiento
aprovechado por los líderes de América Latina para encabezar las
revoluciones de independencia de las colonias españolas. Esto ocurre cuando
Napoleón ocupa España y sustituye al monarca Carlos IV, los españoles
estaban muy ocupados defendiendo su país y el pueblo de México al
enterarse de la invasión Francesa en España aprovecha para promover el
movimiento de la Independencia por medio de carteles en todo el país.
Proyecto gaditano: constitución de Cádiz
La Constitución de Cádiz aprobada el 19 de marzo de 1812, festividad de San
José, conocido por eso como la Pepa, es la primera Constitución propiamente
española. La Constitución se aprobó en el marco de la Guerra de
Independencia (1808 a 1814) y fue la respuesta del pueblo español a las
intervenciones invasoras de Napoleón Bonaparte.
Habían quienes deseaban seguir anclados en el antiguo régimen quienes
deseaban una reforma moderada a la iglesia y aquellos que influidos por las
doctrinas y ejemplo de Francia consideraban que la reconstrucción había de
ser radical.
La soberanía, poder pleno y supremo del Estado que hasta entonces había
correspondido al Rey, pasa ahora a la nación, como ente supremo y distinto a
los individuos que la integran, representado por los diputados, sin
estamentos ni mandato imperativo. La separación de poderes siguió el
modelo de la constitución francesa de 1791 y la de los Estados unidos.
La constitución incorporó algunos derechos como la libertad personal o el
derecho de propiedad. La constitución de Cádiz dedicaba atención especial a
las cortes, al rey y a sus secretarios de despacho o ministros. Las Cortes de
organizaban en una Cámara Única. Los diputados a Cortes eran elegidos
mediante sufragio indirecto, siendo necesario para ser candidato poseer una
renta anual procedente de bienes propios. Por lo que quedaba en manos de
clases acomodadas.
Los poderes del Rey se modificaron, ahora su condición ya no era por un
título divino ahora lo hacía por la gracia de Dios y la constitución. Su poder
se limitó conservando una participación en el poder legislativo. La
Constitución tuvo una vigencia efímera, Fernando VII la derogó en 1814, con
ello terminó la vigencia de la Constitución de Cádiz, pero no su influjo que
afectó a la política nacional hasta 1868.
Proyecto insurgentes: Constitución de Apatzingán.
Ningún otro documento constitucional fue más desestimado que el Decreto
de Apatzingán o el Derecho Constitucional para la Libertad de la América
Mexicana como es también conocida. Obra del Congreso Constituyente
convocado por José María Morelos y Pavón es de un valor histórico
inestimable, porque representa la primera manifestación de fe constitucional
de la nación mexicana y contiene una de las mas puras y generosas
expresiones del pensamiento individualista y liberal de los siglos XVIII Y XIX.
La soberanía es uno de los temas que más destaca esta constitución. Llevaba
inherente la facultad de legislar, de ejecutar las leyes y de aplicarlas a los
casos particulares.
Cabe también señalar el reconocimiento que le da a la religión católica,
apostólica y romana, la igualdad ante la ley, el respeto a la libertad, y a los
derechos individuales e inviolabilidad del domicilio.
El decreto contempla una Republica Central con un poder Ejecutivo
depositado en un triunvirato que gobierna en forma colegiada, un congreso
formado por 15 diputados y una corte o tribunal de justicia. Establece tres
secretarías del país, la de guerra, Hacienda y Gobierno. Se integra de 242
artículos, distribuidos en dos apartados o títulos, denominado el primero:
Principios o Elementos Constitucionales, y el segundo: Forma de Gobierno, y
en 28 capítulos, de los que 6 se agrupan en el primer apartado y los veintidós
restantes en el segundo.
La Constitución de Apatzingán era un instrumento de lucha. Contra la
monarquía, la república; contra el despotismo, la libertad; contra la sujeción,
la independencia; contra la conquista, la reivindicación; contra el derecho
divino, la soberanía; contra la sucesión de la corona por nacimiento, la
elección democrática.
La Carta de Apatzingán, cumple en la historia de México precisamente el
papel de fundar al Estado y es por ello nuestra Constitución Constituyente.
Tratados de Córdova y acta de Independencia.
Con el nombre de Tratados de Córdova se denominó el documento firmado
el 24 de agosto de 1821 entre Juan O´Donojú, ultimo Jefe Superior de la
Nueva España (representante de la corona Española en territorio mexicano) y
Agustín de Iturbide máxima autoridad del ejercito Trigarante.
De este tratado se desprende el reconocimiento de la Nueva España como el
Imperio Mexicano, políticamente independiente. Conformada por la corona
en posesión de Fernando VII. Se formaría una junta Provisional Gubernativa
que sería integrada por O´Donojú, la Junta sería la encargada de nombrar una
regencia compuesta por tres personas en las que recaería el Poder Ejecutivo.
Y a su vez, cumpliría el rol del monarca “hasta que esté empuñe el cetro del
Imperio”
El 27 de septiembre el Ejército con Iturbide a la cabeza, entró en la ciudad de
México y al día siguiente se firmó el Acta de Independencia de México y se
eligió el Presidente de la Junta que fue Iturbide. Con este documento se sella
el proceso de emancipación iniciado con el Grito de Dolores en 1810.
Acta de Independencia del Imperio Mexicano.
Es el documento mediante el cual el Imperio Mexicano declaró su
Independencia del imperio Español y fue redactado en el Palacio Nacional de
la Ciudad de México, el 28 de septiembre de 1821. De la cual se redactaron
dos ejemplares. Uno permaneció en el salón de sesiones de la Cámara de
Diputados hasta que fue destruida en un incendio en la Cámara en 1909. La
otra copia fue robada y vendida en 1830 pero fue recuperada por
Maximiliano de Habsburgo y tras el fusilamiento de este fue sacada del país
por Agustín Fischer, confesor del emperador. El documento de 52.9 por 71.8
centímetros, se conserva actualmente en el Archivo General de la Nación.
Evolución Constitucional.
La Constitución en México, es la norma fundamental o carta magna,
establecida para regir jurídicamente al país, fijando los límites y definiendo
las relaciones entre los poderes de la federación: poder legislativo, ejecutivo
y judicial, entre los tres niveles diferenciados del gobierno (el federal, estatal
y municipal), establece las bases para el gobierno y para la organización de
las instituciones en que el poder se asienta y garantiza un pacto social
supremo de la sociedad mexicana, los derechos y los deberes del pueblo.
Fue promulgada el 05 de febrero de 1917. México ha tenido diversas
constituciones:
 Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos, 4 de octubre
de 1824, establece organización de gobierno federal pero no regula las
garantías individuales.
 Constitución Centralista de 1836 las siete leyes constitucionales crea el
supremo poder conservador.
 Nueva Constitución de 1857- implanta una república federal
representativa y democrática. Se crea un capítulo dedicado a las
garantías individuales.
 Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917 o Carta
Magna de 1917. Busca garantizar las demandas de los grupos que
participaron en la resolución y redimir los conflictos entre clases, con
esta se logra legitimar el gobierno y concentrar el poder.
Constituciones federalistas.
Entró en vigor el 04 de octubre de 1824 después del derrocamiento del
primer Imperio Mexicano de Agustín de Iturbide. En esta constitución, la
republica tomaba el nombre de Estados Unidos Mexicanos y era definida
como una república federal representativa con el catolicismo como religión
oficial.
Tras la renuncia de Agustín de Iturbide al Imperio Mexicano, se estableció un
Supremo Poder Ejecutivo formado por un triunvirato.
El 31 de enero de 1824 se aprobó el acta constitutiva de la federación, la
nación asumió oficialmente la soberanía y se constituyó por estados libres,
soberanos e independientes.
El 02 de octubre de 1824, Guadalupe Victoria fue declarado primer
presidente de los Estados Unidos Mexicanos para el periodo de 1828-1829.
La Constitución de 1824 estaba formada por 7 títulos y 171 artículos, fue
basada en la Constitución de Cádiz. Se implantó el sistema de federalismo en
una república representativa popular, la cual estaba integrada por diecinueve
estados, cuatro territorios dependientes del centro y el distrito federal. El
derecho de igualdad de los ciudadanos quedó restringido por la permanencia
del fuero militar y eclesiástico.
Aunque no se había establecido en la Constitución, la esclavitud estaba
prohibida en la república. El presidente Vicente Guerrero expidió el decreto
de “Abolición de la esclavitud” el 15 de septiembre de 1829.
La Constitución de 1857 estaba conformada por 8 títulos y 128 artículos, fue
similar a la carta magna de 1824, implantó de nueva cuenta el federalismo y
la republica representativa, la cual constaba de veinticinco estados, un
territorio y el distrito federal. Apoyó la autonomía de los municipios en los
que se divide políticamente cada estado.
Incluía un capítulo dedicado a las garantías individuales, y un procedimiento
judicial para proteger esos derechos, conocido como amparo. También la
autonomía de los estados para elegir a sus gobernantes y tener su propio
conjunto de leyes.
Constituciones Centralistas.
La Constitución de régimen centralista de 1836 fue una serie de instrumentos
constitucionales que alteraron la estructura de la naciente República Federal
de los Estados Unidos Mexicanos a principios del siglo XIX. Las leyes fueron
promulgadas por el Presidente interino José Justo Corro el 30 de diciembre
de 1836. Estas medidas de corte centralista ocasionaron la declaración de
Independencia de Texas, la de Tamaulipas y la Yucatán.
Con base a las 7 leyes se estableció un cuarto poder: el Supremo Poder
Conservador. El cual fue integrado por 5 ciudadanos. Este cuarto poder tenía
la facultad de regular las acciones de los otros poderes (legislativo, ejecutivo
y judicial).
El 23 de octubre de 1835 de aprobaron las Bases de Reorganización de la
Nación Mexicana, se dio fin al sistema federal y se estableció un sistema
centralista provisional.
*Los quince artículos de la primera ley, otorgaban la ciudadanía a aquellos
que supieran leer y tuvieran un ingreso anual mínimo de 100 pesos, excepto
para los trabajadores domésticos, quienes no tenían derecho a voto.
*La segunda ley permitía al presidente el cierre del congreso y la supresión
de la Suprema Corte, prohibiendo a los militares tomar este último cargo.
Consta de 23 artículos.
*La tercera ley establecía un gobierno bicameral (senadores y diputados),
electos por órganos gubernamentales. Constaba de 58 artículos.
* La cuarta ley especificaban el mecanismo de elección presidencial, donde la
Suprema Corte y el senado y la Junta de Ministros nominarían a tres
candidatos cada uno, y la cámara baja (diputados) elegiría entre los nueve
candidatos, al Presidente y al Vicepresidente. El poder Ejecutivo se
depositaría en un presidente que duraría en el cargo 8 años con opción a
reelegirse y con el cargo irrenunciable.
*La quinta ley especificaba el mecanismo de elección de los once miembros
de la Suprema Corte de Justicia, de la misma forma que el mecanismo de
elección presidencial. Consta de 51 artículos.
*Los 31 artículos de la sexta ley sustituía a los estados federados, por
departamentos cuyos gobernadores y legisladores eran seleccionados por el
presidente, establece la división territorial de la república.
*La séptima ley prohibía volver al sistema legal anterior por seis años. Otorga
al congreso la facultad d resolver todas las controversias constitucionales así
como sus reformas.
Aplicación del derecho y supervivencia del derecho indiano

La independencia marca el fin de la época indina, pero no del derecho


indiano. Este derecho mantuvo plena vigencia por un tiempo más o menos
prolongado, salvo que por excepción fue reformado o reemplazado, esto
sucedió primero en el terreno político e institucional, pues la más urgente
necesidad de los estados sucesores era consolidarse bajo su propio gobierno.

La nueva legislación se limita a superponerse al derecho Indiano. Esta


situación se prolonga hasta la codificación. Solo con ello se puede decir que
se pone fin a la vigencia del derecho indiano, porque se le reemplazó por el
derecho codificado.

De esa forma el derecho indiano desaparece como derecho vigente y pasa a


convertirse en mero antecedente histórico del derecho codificado. La
supervivencia del derecho indiano después de la independencia abarca en
general toda la vida jurídica y se manifiesta de múltiples formas a través de la
literatura jurídica.

Intentos Codificadores.

El 07 de diciembre de 1871 se promulgó el Código Penal para el distrito


Federal y territorio de la Baja California sobre delitos del fuero común, y para
toda la República sobre delitos contra la Federación, e inició su publicación
en el diario Oficial del 14 de diciembre siguiente y fue remitido a los
gobernadores de los estados de la República para su posible adopción.

El 25 de septiembre de 1896 el presiente Porfirio Díaz promulgó el Código


Federal de Procedimientos Civiles, que entró en vigor el 01 de Enero de 1897,
con lo que se reorganizó el Poder Judicial de la Federación, este
ordenamiento fue reformado en razón a las últimas modificaciones
constitucionales en materia judicial, así en 1908 e expidió el Código Federal
de Procedimientos Civiles publicado en el Diario Oficial de la Federación del
24 de febrero de 1942 que es el que rige actualmente.
Relación entre el Estado mexicano y la Iglesia

Es un problema histórico y en esta perspectiva debe verse como un punto


medular en la relación Estado-Iglesia, durante décadas la iglesia pugnó por
que el Estado le adjudicara personalidad jurídica.

Cuando se revisa la historia política y jurídica de nuestro país en el siglo XIX


destaca como aspecto básico el de las conflictivas relaciones Iglesia-Estado
siempre fueron conflictivas durante el periodo 1821-1840, es decir, desde la
consumación de la independencia hasta el inicio del gobierno del Presidente
Manuel Ávila Camacho, cuando la política del Estado mexicano se suavizó y
ambas instituciones trataron de mantener una relación respetuosa y hasta
cierto punto cordial, si bien en muchas ocasiones vulnerando los textos
constitucionales y legales vigentes. De los momentos de crisis se pueden
mencionar, la prereforma de 1833, la expedición de las leyes
preconstitucionales, la expedición de la Constitución de 1857, La expedición
de las leyes de Reforma, la conclusión de las relaciones con el Vaticano en
1861, el gobierno de Sebastián Lerdo de Tejada, la expedición de la
Constitución de 1917, la guerra cristera bajo el mandato de Álvaro Obregón y
Plutarco Elías Calles.

Reivindicación del patronato

El gobierno insurgente atendió a la dotación del culto en los pueblos


dominados y se ocupó de la resolución de otros problemas de corte religioso,
prohibiendo la bula de la Santa Cruzada, debido a que el dinero recolectado
se destinaba a financiar a las tropas realistas. El primer imperio mantuvo una
postura favorable a la iglesia. El de Iguala y los Tratados de Córdova
aseguraban el mantenimiento de los fueros del clero. El monarca Español
Insistía en que el patronato le correspondía a la Corona, el gobierno sostenía
que era a la nación, el papa declaró extinto el patronato a consecuencia de la
Independencia y librar a la iglesia del control estatal.

La Constitución de 1824 estableció que la religión de México era y sería la


Católica, Apostólica y Romana, además facultaba al congreso General para
arreglar el ejercicio del Patronato en la Federación.

Separación de competencias en la Constitución 1857


La separación de las funciones civiles y religiosas, fue efectuada hasta la
promulgación de la Constitución de 1857, ya que era común la celebración de
oficios religiosos para conmemorar actos cívicos y políticos, pero dentro de
las llamadas Leyes de Reforma se dio la separación del Estado de la iglesia.

Leyes de Reforma

Las Leyes de Reforma son un conjunto de leyes expedidas entre 1855 y 1863,
durante los gobiernos de Juan Álvarez, Ignacio Comonfort y Benito Juárez.
Varias de ellas se elevaron a rango constitucional por el Congreso
Constituyente que redactó la Constitución Federal de los Estados Unidos
Mexicanos de 1857.

En medio del fragor de la guerra el gobierno de Juárez, desde Veracruz, dio a


conocer un manifiesto a la Nación el 7 de julio de 1859. En éste delineó las
medidas que consideraba indispensables “para poner un término definitivo a
esta guerra sangrienta y fratricida”, así como para “desarmar de una vez a
esta clase (el clero) de los elementos que sirven de apoyo a su funesto
dominio…”.

Siguieron después las denominadas “Leyes de Reforma”:

Ley de Nacionalización de los Bienes Eclesiásticos: del 12 de julio de 1859.


Esta Ley decreta que entran “al dominio de la nación todos los bienes que el
clero secular y regular ha estado administrando con diversos títulos, sea cual
fuere la clase de predios, derechos y acciones en que consistan, el nombre y
aplicación que hayan tenido”, y declara que habrá “perfecta independencia”
entre los negocios del Estado y los negocios puramente eclesiásticos. “El
gobierno se limitará a proteger con su autoridad el culto público de la religión
católica, así como el de cualquiera otra”.

Ley de Matrimonio Civil: del 23 de julio de 1859. El artículo 1 de esta Ley


declara que “El matrimonio es un contrato civil que se contrae lícita y
válidamente ante la autoridad civil. Para su validez bastará que los
contrayentes, previas las formalidades que establece esta ley, se presenten
ante aquélla y expresen libremente la voluntad que tienen de unirse en
matrimonio.”

Ley Orgánica del Registro Civil o Ley sobre el Estado Civil de las Personas:
del 28 de julio de 1859. De acuerdo con el artículo 1 de esta Ley “Se
establecen en toda la República funcionarios que se llamarán Jueces del
estado civil y que tendrán a su cargo la averiguación y modo de hacer constar
el estado civil de todos los mexicanos y extranjeros residentes en el territorio
nacional por cuanto concierne a su nacimiento, adopción, arrogación,
reconocimiento, matrimonio y fallecimiento”.

Ley sobre Libertad de Cultos: del 4 de diciembre de 1860. Esta Ley se expidió
casi al finalizar la guerra y cuando el triunfo de los liberales era un hecho. Con
ella culmina la obra inconclusa de la Constitución de 1857 pues la libertad de
cultos no fue inscrita por el Constituyente. En su artículo 1 la ley señalaba
que “Las leyes protegen el ejercicio del culto católico y de los demás que se
establezcan en el país, como la expresión y efecto de la libertad religiosa, que
siendo un derecho natural del hombre, no tiene ni puede tener más límites
que el derecho de terceros y las exigencias del orden público. En todo lo
demás, la independencia entre el Estado por una parte, y las creencias y
prácticas religiosas, por otra, es y será perfecta e inviolable. Para la aplicación
de estos principios se observará lo que por las Leyes de la Reforma y por la
presente se declara y determina”.

Además, el Ejecutivo promulgó diversos decretos:

Decreto que declara que cesa toda intervención del clero en los cementerios
y camposantos, quedando los lugares respectivos bajo jurisdicción civil, del
31 de julio de 1859.

Decreto que declara qué días deben tenerse como festivos y prohíbe la
asistencia oficial a las funciones de la Iglesia, del 11 de agosto de 1859.
Declara que dejan de ser días festivos, para el efecto del cierre de tribunales,
oficinas y comercios, todos los no comprendidos en los siguientes: los
domingos, el día de año nuevo, el jueves y viernes de la Semana Mayor, el
jueves de Corpus, el 16 de septiembre, el 1º y 2 de noviembre, y los días 12 y
24 de diciembre (Artículo 1).

Decreto por el que quedan secularizados los hospitales y establecimientos de


beneficencia, del 2 de febrero de 1861, que hasta la fecha habían
administrado las autoridades y corporaciones eclesiásticas.

Decreto por el que se extinguen en toda la República las comunidades de


religiosas, del 26 de febrero de 1863. Este decreto se expide durante la
invasión y ocupación del territorio nacional por el ejército francés. Quedan
extinguidas “en toda la República las comunidades de señoras religiosas”
pero dicha extinción no comprende a las Hermanas de la Caridad, pues,
“aparte de no hacer vida en común, están consagradas al servicio de la
humanidad doliente”.
Mediante la expedición de estas leyes y decretos se logró en México la
separación Iglesia-Estado. La nueva constitución polarizó a la sociedad, en
diciembre de 1857 los conservadores desconocieron al gobierno y a la nueva
carta magna mediante el Plan de Tacubaya, el cual dio inicio a la guerra de
Reforma o de los tres años. Los liberales lograron la victoria, el 1 de enero de
1861, el presidente Juárez regresó a la Ciudad de México. Es por esta razón
que varios de los decretos y leyes fueron expedidos en el puerto de Veracruz.
Sin embargo la estabilidad del país volvió a ser interrumpida, el gobierno
tuvo que suspender los pagos a la deuda extranjera. Mediante la Convención
de Londres, los gobiernos de Francia, Reino Unido y España decidieron
intervenir en México. Se logró un acuerdo con los británicos y los españoles,
pero no así con los franceses, quienes con este pretexto y con la ayuda de los
conservadores comenzaron la intervención armada y poco después el
Segundo Imperio Mexicano. Juárez se vio obligado a escapar de la capital
manteniendo su gobierno itinerante. Se logró restaurar la república hasta
1867.

Nacimiento del juicio de amparo.

El Amparo Mexicano en el Porfiriato.

La ley orgánica de los Artículos 101 y 102 de la Constitución, fue aprobada el


19 de enero de 1869 y promulgada al día siguiente. En ella se eliminaron las
tres instancias; se estableció la posibilidad de que las decisiones de los jueces
pasaran directamente a la Corte para su revisión y resolución inmediata; se
precisaron los procesos de responsabilidad por el incumplimiento de las
resoluciones y se identificaron con precisión los efectos restitutorios y
relativos de las sentencias, primordialmente.

Con la Ley Orgánica de los Artículos 101 y 102 de la Constitución Federal


promulgada por el presidente Manuel González el 14 de diciembre de 1882,
continuó el proceso de institucionalización, se puede decir que se ampliaron
las posibilidades de representación para la promoción de la demanda; se
confirió competencia a los jueces locales para actuar en los casos en que no
hubiera juzgadores de amparo; se permitió el uso del telégrafo; se precisó el
principio de definitividad; se introdujo la suspensión de oficio; se
puntualizaron los requisitos de formación de jurisprudencia; y se derogó la
improcedencia en contra de las decisiones judiciales.

Finalmente se debe dar cuenta del Código Federal de Procedimientos Civiles


de 1908, que le permitió al juicio de amparo entrar de lleno a su plena
actividad.
Entre las principales características estaba lo relativo a la regulación del
amparo contra actos judiciales el orden civil, incorporando algunas
restricciones para solucionar los problemas de volumen que ya para entonces
eran preocupantes. En este ordenamiento se mejoró la definición de las
partes y se ampliaron sus posibilidades de representación; se ajustaron las
formalidades de las notificaciones; se continuó con el trabajo de precisión de
la improcedencia y el sobreseimiento; se incorporó la modalidad de la
suspensión temporal; se regularon los supuestos del amparo judicial en
materia civil; se dio cabida a ciertas formas de caducidad; se eliminó la
casación frente al amparo, y se ordenó la publicación de las sentencias en el
Semanario Judicial de la Federación.

Surgimiento del derecho administrativo

La Justicia Administrativa tiene su antecedente histórico e ideológico desde el


año de 1789 en el desarrollo de la Revolución Francesa y en la lucha de los
gobernados para tener no solo obligaciones ante la Monarquía, sino para
tener derechos, iniciando así el establecimiento de los principios
fundamentales de derechos de los particulares.
 

A nivel federal, los antecedentes de la justicia administrativa en México se


ubican a mediados del siglo XIX (1852-1853), con Teodosio Lares, reconocido
jurista de la época, quien planteó la revisión de los actos de las autoridades
administrativas para que éstas se ajustaran al marco legal y promovió la Ley
para el Arreglo de lo Contencioso Administrativo; lo anterior toda vez que la
fracción XX del artículo 110 de la Constitución Federal de 1824, permitía
interpretar la instauración del contencioso administrativo, y la creación de un
Tribunal que conociera de las causas en contra de la actuación de la
administración pública.
 

En 1853, fue publicada la Ley para el Arreglo de lo Contencioso


Administrativo, instaurándose la jurisdicción contenciosa administrativa en
México, que conocería una sala integrante del Consejo de Estado, creado de
acuerdo al modelo francés; sin embargo, se declaró inconstitucional por la
Suprema Corte de Justicia de la Nación.
 
Después de varios antecedentes ubicados en los años de 1855, 1856, 1857 y
1865; durante 1936, el entonces presidente de la República Lázaro Cárdenas
del Río promulgó la Ley de Justicia Fiscal, para que el 1 de enero de 1937 la
justicia administrativa naciera formalmente en el país, con la expedición del
Código Fiscal de la Federación en 1938, dando inicio a las actividades
del Tribunal Fiscal de la Federación, hoy Tribunal Federal de Justicia
Administrativa, dotado plena autonomía y competencia para reconocer la
legalidad o declarar la nulidad de actos o procedimientos administrativos.

El corpus jurídico y la doctrina indiana

Corpus de derecho castellano-indian es una propuesta colectiva e


interdisciplinaria que abarca la compilación, digitalización, procesamiento,
macroanálisis y publicación anotada en línea del conjunto de los textos
jurídicos vigentes en el marco de la monarquía castellana entre el siglo XIII y
principios del XIX.
El núcleo principal del proyecto es la construcción de un modelo para el
macroanálisis de estos textos jurídicos y, en consecuencia, la generación de
herramientas analíticas y de consulta del corpus que permitan comprender la
interrelación entre sus distintos elementos semánticos y conceptuales y su
transformación a través de los siglos y así proponer una interpretación de
cómo es que posiblemente funcionaban en el contexto del discurso y la
práctica en el orden jurídico tradicional de la cultura jurisdiccional, tanto en
el ámbito de la doctrina, del ejercicio de la potestad normativa como en el
del actuar cotidiano del aparato de gobierno e impartición de justicia.
El proyecto implica diversas conexiones y diálogos en diversos ámbitos. En el
ámbito interdisciplinario, entre los historiadores de la corriente crítica
(cultural) del derecho, lingüistas, humanistas digitales y programadores; en el
ámbito teórico y metodológico, entre dos posturas acaso antagónicas en
apariencia: la lectura densa y cercana de los textos jurídicos hecha por la
historia cultural del derecho a lo largo de varias décadas y la lectura distante.
Lo anterior nos obliga a discutir ciertos principios teóricos, como lectura
densa, tomada por la historia cultural del derecho de la idea de descripción
densa (Geertz, 1973), como sistema capaz de ser leído como texto en
relaciones contextuales, o un nivel más complejo (Genette, 1992) y su noción
de transtextualidad. Varios historiadores del derecho han aplicado incluso
algo parecido a la lectura cercana del criticismo literario (Clavero, 1991). Esto
interesa al estudiar el derecho de antiguo régimen frente a la posibilidad de
aplicación de metodologías computacionales enfocadas, generalmente, a una
lectura distante (Moretti, 2013) en la búsqueda de estructuras formales
mediante el análisis de grandes cantidades de texto/data. Es justamente
necesario pensar en la posibilidad de ensayar no sólo una minería de texto
cuantitativa sino en aspectos más cualitativos, modelando campos
semánticos que se transforman históricamente.

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