Arrendamiento Fianciero o Leasing

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ARRENDAMIENTO FIANCIERO O LEASING

El leasing financiero o arrendamiento financiero, en ocasiones, es confundido


con un simple contrato de alquiler. Sin embargo, entre sus propiedades se
encuentra el favorecer a las empresas al permitirles adquirir un bien con
una ventaja comparativa en contraposición a la de los préstamos
convencionales.
¿A qué nos referimos? A la depreciación de un bien.
Pongamos como ejemplo a una empresa minera, la cual necesita
automóviles para desplazarse en la zona de extracción de minerales. Si la
empresa decide pedir un préstamo al banco para comprar los equipos y es
aprobada, deberá adquirirlos acorde a la cotización actual del bien en el
mercado y endeudarse con el sistema financiero.
Por el contrario, si la empresa en cuestión realiza un leasing financiero, podrá
acceder a un precio competitivo en arrendamiento que le permitirá contar
con equipos modernos, conservar su rentabilidad y mantener la opción de
comprar el bien hacia el final del contrato.
En cuanto a este último aspecto, uno de los beneficios que obtendrá la
empresa de este ejemplo si es que se decide a comprar el bien mediante
leasing financiero, es que puede hacerlo con una ventaja diferencial más
competitiva que la de un préstamo bancario. ¿Cómo? Depreciando el bien en
función de su antigüedad y uso. De este modo, la empresa paga la diferencia
restante del costo de los equipos que desea y genera un escudo fiscal que
tiene un efecto positivo para su liquidez al momento de deducir impuestos.

¿Qué es el leasing financiero?


A partir de lo que hemos explicado en el ejemplo al inicio del artículo,
podemos definir entonces que el leasing financiero es un tipo de contrato de
arrendamiento con opción de compra mediante el cual una entidad otorga
financiamiento a una empresa para adquirir activos. De modo que esta
pueda arrendar un bien; y, si es que así lo desea, adquirirlo hacia el final del
contrato.
Los bienes que se pueden financiar mediante el leasing financiero son
aquellos considerados durables. En tal sentido, son ejemplos de bienes que
se pueden arrendar
 Inmuebles como oficinas, locales, etc.
 Activos tecnológicos tales como laptops, computadoras.
 Automóviles.
 Equipos de producción como maquinaria industrial.

Características del leasing financiero


Como hemos mencionado anteriormente, una de las características
principales del leasing financiero es el poder adquirir el bien hacia el final
del contrato. No obstante, otras características de los bienes alquilados
mediante leasing financiero también son las siguientes:
 Este tipo de contratos se encuentran regulados por la
Superintendencia de Banca y Seguros (SBS).
 Los contratos de leasing financiero tienen un promedio de duración
mayor a un año.
 Posibilidad de financiar el 100% del valor de los activos.
 Depreciar el bien al momento de decidirse a comprarlo. De este modo,
se generan ventajas a nivel fiscal al momento de deducir impuestos.

Depreciación acelerada de bienes


Al respecto de la depreciación de bienes, una de las medidas para la
reactivación económica brindadas por el Gobierno de Martín Vizcarra, fue el
incentivar y posibilitar el acceso a financiamiento para pequeñas empresas,
emprendimientos y startups.
Mediante el Decreto Legislativo N° 1488, el Gobierno Central designó a la
SUNAT como ente regulador del proyecto de depreciación acelerada de
bienes. De modo que, a partir de ello, más empresas puedan recuperar
rápidamente sus inversiones en activos fijos y adaptarse competitivamente
ante las nuevas demandas producidas a partir de la pandemia por el
COVID_19.
De acuerdo a Andina, se estima que gracias a la depreciación acelerada de
bienes, se duplique la tasa actual de depreciación de un bien para el 2021;
siendo así que algunas empresas puedan llegar a deducir el valor de algunos
bienes en solo dos años.

Diferencia entre leasing financiero y leasing


operativo
A pesar de que ambos productos, leasing financiero y leasing operativo, se
encuentran diseñados para favorecer a la rentabilidad de una empresa,
ambos poseen diferentes enfoques.
Como hemos explicado hasta ahora, el leasing financiero brinda la
oportunidad al arrendador de adquirir el bien hacia el final del contrato. Sin
embargo, en el caso del leasing operativo, no existe esta opción en tanto que
el enfoque de este es distinto del leasing financiero.
Mientras que el leasing financiero se centra en la adquisición del bien y
rentabilidad económica en términos de costo de adquisición del activo, el
leasing operativo está enfocado en la rentabilidad a partir del servicio de
alquiler. De modo que, a diferencia del leasing financiero, el leasing
operativo ofrece adicionalmente al alquiler del activo, el servicio de gestión y
administración del mismo. Siendo así que, si este presenta algún fallo, estos
gastos no corren por cuenta de la persona que alquila el bien, sino por la
empresa dueña del bien.

Leasein: primera empresa autorizada por la


SBS para realizar el nuevo leasing financiero

En el Perú, el leasing financiero solía ser un tipo de contrato manejado


exclusivamente por la banca, con lo cual, los sectores empresariales que no
poseían un perfil crediticio que diera cuenta de grandes movimientos,
quedaban desatendido pues no eran considerados aptos. Sin embargo, ello
ha llegado a su fin a partir del D. U. N° 023-2020 con la creación del Registro
de empresas de arrendamiento financiero no comprendidas por la Ley
General.
A partir del 12 de noviembre del 2020, Leasein se ha transformado en la
primera empresa aprobada por el Sistema de Banca y Seguros (SBS) para
brindar el nuevo leasing financiero en el Perú. Gracias a esto, ahora nos es
posible llevar nuestra oferta competitiva a más empresas pequeñas, startups
y emprendimientos para que estas puedan financiar sus activos de una forma
ágil, sencilla y digital.
OTROS ASPECTOS LEASING FINANCIERO
También, puede denominarse arrendamiento financiero, leasing financiero
o leasing operativo, y es un contrato entre dos partes por la cual una pone a
disposición de otra un determinado bien a cambio de unas cuotas (rentas)
pactadas de antemano durante un tiempo determinado.

En este sentido, el arrendatario tiene los siguientes derechos:

 Adquirir la propiedad del bien a un precio establecido a la finalización


del contrato.
 Devolver el bien y rescindir el contrato.
 Renovarlo negociando las nuevas condiciones.

Por su parte, el arrendador pone a disposición del arrendatario un bien de


su propiedad por el cual recibirá rentas por el uso y disfrute del mismo.
Teniendo, por ello, la obligación de vender el bien a final del contrato si el
arrendatario ejerciera su derecho.

Ventajas y desventajas del leasing


Las empresas por ejemplo utilizan este sistema por dos razones
fundamentales:

 No necesitan realizar grandes inversiones de compras de activos, pueden


renovar los activos periódicamente al término del contrato. Es decir,
realizar otro contrato de leasing con un nuevo activo.
 Además, el leasing tiene la consideración de gasto (pagos por alquiler) por
lo que pueden deducirse estos costes. 

Ahora bien, el leasing también tiene algunas desventajas:

 No se tiene el bien en propiedad.


 Por norma general, no se puede devolver el bien hasta que acaba el
contrato.
 Podría resultar más costoso que otras alternativas, por lo que debemos
valorarlo siempre en comparación con otras opciones.
 Las cláusulas podrían ser desventajosas. De modo que si bien es cierto que
el arrenda datario tiene una serie de derechos, también tiene una serie de
obligaciones que debe cumplir si no quiere ser penalizado.

Uso del leasing y características


El uso de este sistema ha crecido exponencialmente en la sociedad, debido
en buena parte a que cualquier persona puede acceder a un bien mediante
un alquiler, que de otra forma no podría hacerlo, por el volumen de la
inversión o el coste de mantenimiento.
Este tipo de arrendamiento financiero se emplea principalmente para el
leasing de coches, de edificios y de máquinas de producción en algunos
sectores. En este caso, y salvo que se pacte lo contrario, todos los gastos de
mantenimiento corren por cuenta del arrendador (propietario) mientras
que el arrendatario tan solo debe hacerse cargo del pago de una cuota
anual, incurriendo el propietario en el buen estado del bien, los servicios y
costes imprevistos.

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