Papá y Mamá Ya No Viven Juntos

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G R U P O

E D I T O R I A L

norma
INFANTIL «JUVENIL

PAPA Y MAMA
YA NO
VIVEN JUNTOS
KATE PETTY y LISA KOPPER
Samuel preferiría que Susana no hubiera ido a jugar
hoy con él:
Ella no quiere jugar a construir campamentos.
Tampoco quiere hacer pasteles de barro.
Es más, n i siquiera quiere hacer pasteles.
—¿Quieres galletas, Susana?
— N o —le contesta ella—. No tengo hambre, Samuel
— y continúa sentada en el sillón, frente al televisor.
Samuel se alegra cuando la mamá de Susana llega
a recogerla.
Susana corre hacia su madre y la abraza con fuerza.
La mamá de Susana también parece triste.
—Ultimamente no me entiendo muy bien con el padre
de Susana y esta situación es difícil para todos en casa
—les comenta a Samuel y a su mamá, antes de marcharse
con Susana.
En el colegio, Samuel ya no aguanta a Susana: ella pelea
por todo, ¡y hasta lo hace llorar durante el recreo!

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—¡Ya no te quiero! —le reprocha Samuel, muy molesto.
— A mí nadie me quiere —le dice Susana a la
profesora—. Mamá y papá pelean a todas horas, y no me
hacen caso cuando les pido que dejen de hacerlo.
La mamá de Samuel va a recoger a su hijo al colegio, y él
le cuenta cómo le fue durante el día.
—Mamá, tú y papá también pelean, ¿no es cierto?
—Claro que sí, Samuel -^-le contesta ella—. Todos los
esposos riñen ocasionalmente, pero tu padre y yo siempre
nos reconciliamos pues somos buenos amigos.
—Sin embargo hay padres que dejan de ser amigos —
continúa la mamá de Samuel— y no logran reconciliarse
después de una pelea. En esos casos tal vez lo más
conveniente para todos es que ellos dejen de vivir juntos.
—¿Dónde está t u papá? —le pregunta Samuel a Susana
mientras juegan en casa de ella.
Susana no quiere contestarle pues está muy triste. Su
mamá le ha dicho que el papá se fue de la casa
temporalmente.
—Lo extraño mucho —le confiesa Susana a Samuel—;
pero ahora mamá está menos triste que antes y papá me
lleva a pasear con frecuencia. Cuando quieras, puedes
acompañarnos, Samuel.
Cuando Samuel regresa a casa, se pone a jugar con su
papá. Inquieto con el asunto de la separación de los padres
de Susana, le pregunta:
—¿Tú no nos vas a abandonar a mamá y a mí, verdad?
—Claro que no, Samuel —le responde el papá—. Me
sentiría muy solo sin ustedes.
—¿Y crees que el papá de Susana se siente solo ahora que
se fue de la casa? —pregunta Samuel.
—Supongo que extraña a Susana tanto como ella lo
extraña a él. Pero aunque ahora los padres de Susana
viven momentos difíciles, ya no pelean tanto como antes
y eso es mejor —le contesta el papá.
r

U n día, Susana invita a Samuel a salir con ella y con su


papá. Juegan al fútbol u n rato y después van al parque
de diversiones.
A l almuerzo, el papá de Susana
les compra papas fritas y leche
malteada.

Y antes de regresar
a casa, les permite dar
una última vuelta en
el cohete.
Unas semanas después, Susana le cuenta a Samuel
lo que ha sucedido en los últimos días: Su papá se
mudó a u n apartamento nuevo, y allí hay una
habitación reservada especialmente para ella;
hasta puede dejar allí algunas de sus cosas.
Susana invita a Samuel a conocer el apartamento de su
papá, ¡que todavía está bastante desocupado!, y
Samuel se imagina que puede ser divertido tener dos
hogares.
A Susana le gustan sus dos hogares. Aunque preferiría
que su mamá y su papá vivieran juntos, ellos son más
felices ahora y eso la alegra.
Susana todavía se siente triste cuando su papá se despide
de ella antes de volver a su apartamento. Pero Susana sabe
que su papá siempre la querrá y vendrá cuando ella lo
necesite, ¡y eso es lo más importante de todo!
—¡Adiós papá! —le dice al despedirse—. Hola mamá,
¡ya estoy aquí!
abrazarse

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