Biología y Cultura
Biología y Cultura
Biología y Cultura
F. Miró Esteban (Miró, 1981: 57) resume con las siguientes palabras los dos cambios
fundamentales que fueron necesarios para que apareciera el ser humano tal como lo
conocemos en la actualidad:
1. La posición erecta, es decir, el paso de cuadrúpedo a bípedo. Esto permitió que las manos,
que son órganos de gran utilidad para la manipulación tanto en hombres como en simios,
pudieran ser utilizadas para la defensa, la fabricación de utensilios, armas, etc. Al no ser
necesaria la utilización de la mandíbula para la agresión o la defensa, tuvo una única misión
masticadora, disminuyendo su tamaño.
2. También aumentó considerablemente el tamaño del cerebro que se triplicó desde los
Australopithecus. Su superficie total es de 20 000 cm2 en el hombre frente a los 5 000 cm2 del
gorila. Este aumento de superficie se debe fundamentalmente a la formación de repliegues,
que son las circunvoluciones cerebrales. Este crecimiento del cerebro no fue homogéneo, sino
que determinadas zonas como el neocórtex y los lóbulos occipitales y temporales, son las que
más han aumentado. también son capaces de aprender rudimentariamente y de transmitir
algunas informaciones elementales.
El crecimiento del cerebro posibilitó la aparición del lenguaje simbólico, el cual ha permitido a
los humanos la utilización de un nuevo mecanismo de transmisión de información a los
descendientes y de intercambio entre los miembros de la sociedad que denominamos cultura.
Los primates que no disponen de lenguaje como los humanos también son capaces de
aprender rudimentariamente y de transmitir algunas informaciones elementales.