CONCEPTO DE CALCULO ACTUARIAL Ok

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Referencia: Concepto Jurídico.

- NO AFILIACIÓN AL SISTEMA GENERAL DE


PENSIONES POR PARTE DEL EMPLEADOR AL TRABAJADOR. (CALCULO
ACTUARIAL)

En atención a su consulta generada a nuestra organización queremos precisar lo


siguiente:

Es menester indicarle que, frente al caso expuesto, existen preceptos normativos,


constitucionales y jurisprudenciales que protegen al trabajador frente a una contingencia
como lo es la vejez, que, si bien es cierto, para este tipo de coyuntura se atribuye una
prestación económica, denominada pensión de vejez, en virtud del resultado final de
largos años de trabajo.

En consecuencia, el no reconocimiento de dicha prestación por culpa patronal, esto es


una mala fe del empleador con el trabajador ya que es una obligación legal que dicho
empleador realice durante toda la vida laboral los aportes y de no hacerlo transgrede
derechos constitucionales de carácter fundamental, como el mínimo vital, la seguridad
social, la vida digna y la dignidad humana, en conexidad con el derecho a la vida y al
trabajo.

Por ende, para no vulnerar la protección al acceso de obtener una pensión de vejez, la ley
le atribuye unas obligaciones al emperador respecto al pago de aportes a seguridad social
en pensión, pues así taxativamente lo expresa la ley 100 de 1993 en su artículo 22:

“ARTÍCULO 22. OBLIGACIONES DEL EMPLEADOR. El empleador será responsable del


pago de su aporte y del aporte de los trabajadores a su servicio. Para tal efecto,
descontará del salario de cada afiliado, al momento de su pago, el monto de las
cotizaciones obligatorias y el de las voluntarias que expresamente haya autorizado por
escrito el afiliado, y trasladará estas sumas a la entidad elegida por el trabajador, junto
con las correspondientes a su aporte, dentro de los plazos que para el efecto determine el
Gobierno.

El empleador responderá por la totalidad del aporte aun en el evento de que no hubiere
efectuado el descuento al trabajador.” (Subrayado fuera del texto).

Con sujeción a lo anteriormente descrito, se imponen sanciones moratorias al empleador


por incumplimiento de dicha obligación, cuando este último haya afiliado al trabajador al
sistema general de pensiones, contrario sensu, no se impone ningún tipo de sanción
moratoria en caso de que el empleador no haya afiliado durante la relación laboral a el
trabajador, así lo ha consagrado el artículo 23 de la ley en mención:

“ARTICULO. 23.-SANCIÓN MORATORIA. Los aportes que no se consignen dentro de los


plazos señalados para el efecto, generarán un interés moratorio a cargo del empleador,
igual al que rige para el impuesto sobre la renta y complementarios. Estos intereses se
abonarán en el fondo de reparto correspondiente o en las cuentas individuales de ahorro
pensional de los respectivos afiliados, según sea el caso.” (Subrayado fuera del texto).
En el escenario en que el empleador no haya efectuado la afiliación al trabajador, se le
indilga otro tipo de responsabilidad, mediante el cual, el empleador deberá asumir el pago
de la pensión cuando el trabajador cause el derecho, es decir, cuando cumpla con los
requisitos para que le sea reconocida su prestación económica traducida en pensión de
vejez.

Lo que conlleva a dilucidar, es que por inobservancia de sus obligaciones, la sanción que
se le impone al citado, es que él mismo debe responder con su propio patrimonio por no
haber afiliado al empleado. Pues como se puede observar, son dos situaciones diferentes
frente a los quebrantamientos de las obligaciones descritas, que de cierta manera
constituyen cargas moratorias o compromisorias frente al incumplimiento de aportes de
pensión del afiliado o no afiliado en su momento.

Ahora bien, para remediar la omisión del empleador que no afilió al trabajador, este debe
transferir una referida suma de dinero, resultado del cálculo actuarial, al fondo de
pensiones, para que de esta manera se habilite el periodo laboral no cotizado y se pueda
realizar el cómputo total de semanas para acceder a la correspondiente pensión de vejez
o en su defecto a una indemnización sustitutiva, tal como lo faculta la ley 100 de 1993
artículo 33:

“Artículo 33 modificado por el artículo 9 de la Ley 797 de 2003. Para tener el derecho a la
Pensión de Vejez, el afiliado deberá reunir las siguientes condiciones:

1. <Ver Notas del Editor> Haber cumplido cincuenta y cinco (55) años de edad si es mujer
o sesenta (60) años si es hombre.

A partir del 1o. de enero del año 2014 la edad se incrementará a cincuenta y siete (57)
años de edad para la mujer, y sesenta y dos (62) años para el hombre.

2. Haber cotizado un mínimo de mil (1000) semanas en cualquier tiempo.

A partir del 1o. de enero del año 2005 el número de semanas se incrementará en 50 y a
partir del 1o.de enero de 2006 se incrementará en 25 cada año hasta llegar a 1.300
semanas en el año 2015.

PARÁGRAFO 1o. Para efectos del cómputo de las semanas a que se refiere el presente
artículo, se tendrá en cuenta:

a) El número de semanas cotizadas en cualquiera de los dos regímenes del sistema


general de pensiones;

b) El tiempo de servicio como servidores públicos remunerados, incluyendo los tiempos


servidos en regímenes exceptuados;

c) El tiempo de servicio como trabajadores vinculados con empleadores que antes de la


vigencia de la Ley 100 de 1993 tenían a su cargo el reconocimiento y pago de la pensión,
siempre y cuando la vinculación laboral se encontrara vigente o se haya iniciado con
posterioridad a la vigencia de la Ley 100 de 1993.
d) El tiempo de servicios como trabajadores vinculados con aquellos empleadores que por
omisión no hubieren afiliado al trabajador.

e) El número de semanas cotizadas a cajas previsionales del sector privado que antes de
la Ley 100 de 1993 tuviesen a su cargo el reconocimiento y pago de la pensión.

En los casos previstos en los literales b), c), d) y e), el cómputo será procedente siempre
y cuando el empleador o la caja, según el caso, trasladen, con base en el cálculo
actuarial, la suma correspondiente del trabajador que se afilie, a satisfacción de la entidad
administradora, el cual estará representado por un bono o título pensional.

Los fondos encargados reconocerán la pensión en un tiempo no superior a cuatro (4)


meses después de radicada la solicitud por el peticionario, con la correspondiente
documentación que acredite su derecho. Los Fondos no podrán aducir que las diferentes
cajas no les han expedido el bono pensional o la cuota parte.

PARÁGRAFO 2o. Para los efectos de las disposiciones contenidas en la presente ley, se
entiende por semana cotizada el periodo de siete (7) días calendario. La facturación y el
cobro de los aportes se harán sobre el número de días cotizados en cada período.”
(Subrayado y negrilla fuera del texto).

CONCLUSIONES.

1. Es preciso que la falta de atención a lo dispuesto por la norma por parte del
empleador implique que este finalmente responda con su patrimonio por la
pensión patronal. (suma de dinero a favor del trabajador) esto con sujeción al
cálculo indexado hasta el día que se realice el pago ya previamente explicado.
2. Es necesario precisar que los derechos pensionales son imprescriptibles, es decir
que se pueden demandar en cualquier tiempo y su reconocimiento implica
indexación de lo debido hasta que se realice el pago al fondo de pensiones o en
su caso al trabajador.
PROCEDIMIENTO PARA QUE SE RECONOZCA EL TIEMPO QUE NO COTIZÓ EL
EMPLEADOR FRENTE AL FONDO DE PENSIONES

El empleador debe elevar una solicitud al fondo de pensiones que haya ELEGIDO
LIBREMENTE el trabajador (Régimen de Prima Media con Prestación Definida
Colpensiones o Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad RAIS), en el que podrán
realizar el correspondiente calculo actuarial teniendo en cuenta el periodo laborado por el
trabajador y no cotizado por el empleador. En consecuencia, el empleador debe proceder
a realizar el pago fruto de dicha liquidación para que la entidad conmute el tiempo no
cotizado, de lo contrario el fondo no reconocerá la contraprestación.

No obstante, en ese orden de ideas, la Corte Constitucional mediante sentencia T 234/18


ha expresado mediante precedente jurisprudencial lo siguiente:

“Si el empleador omitió afiliar a su trabajador a un fondo de pensiones, pero lo hace


(afiliación) de manera tardía, la ley contempla la obligación que tiene el empleador de
trasladar al sistema, el valor de los aportes correspondientes al tiempo laborado por el
empleado y que no fue cotizado por el patrono. Así, el fondo o administradora expide al
empleador un cálculo actuarial de lo adeudado, correspondiente a los aportes que se
debieron realizar desde el mismo momento en que inició la relación laboral73, este hace
el correspondiente pago, trasladando la responsabilidad pensional a la entidad, la cual, si
se cumplen los requisitos para una prestación económica deberá ser quien la asuma.

Específicamente, en el segundo caso que se presenta cuando el empleador afilia


tardíamente a su empleado, como se dijo, debe solicitar al fondo o administradora de
pensiones el cálculo actuarial (aportando los demás documentos que exija la entidad para
el efecto) a partir del cual debe tomar la decisión de pagar dicho valor a la administradora
y trasladar el riesgo o asumir las prestaciones económicas que puedan presentarse.

Es clara la intensión del legislador al prever esta figura (pago del cálculo actuarial), y es la
de permitirle al trabajador que el periodo que su empleador no hizo los aportes a un fondo
porque no lo afilió, se contabilice dentro de su historial de semanas de cotización para
todos los efectos prestacionales que se hallen inmersos dentro del Sistema General de
Pensiones. De tal manera que si se hace la correspondiente afiliación del empleado por
parte del empleador y se paga el valor del cálculo actuarial, a satisfacción de la entidad
administradora de pensiones, los periodos pagados deben ser aplicados para la fecha en
que se laboraron y debieron ser reportados.”

Como se puede colegir, el legislador les ha brindado una protección a aquellos


trabajadores, cuando el empleador es negligente en este tipo de situaciones, pues existen
medios alternativos para proteger estos derechos de carácter irrenunciable, como la
acción de tutela o el proceso ordinario laboral. En efecto, la tutela podrá ser utilizada
siempre y cuando se cumplan los requisitos señalados por la Corte Constitucional en la
sentencia T 045 de 2016:

1. “Demostrar que en efecto es una persona que pertenece a la tercera edad.


2. la afectación del mínimo vital o de otros derechos constitucionales como la salud,
la vida digna o la dignidad humana
3. La demostración de cierta actividad administrativa y judicial desplegada por el
interesado tendiente a obtener la protección de sus derechos, y
4. Que se acredite siquiera sumariamente, las razones por las cuales el medio
judicial ordinario es ineficaz para lograr la protección inmediata de los derechos
fundamentales presuntamente afectados”.

Ahora bien, frente al caso en que el empleador por mera liberalidad haya escogido el
fondo de pensiones sin consentimiento del trabajador, es imprescindible destacar que la
selección de uno o cualquiera de los regímenes previstos es libre y voluntaria por parte
del afiliado, quien para tal efecto manifestará por escrito su elección al momento de la
vinculación o del traslado. En virtud de lo anterior, el empleador o persona natural o
jurídica que desconozca este derecho, será responsable por las sanciones impuestas por
el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social o del Ministerio de Salud. Ley 100 de 1993
artículo 271:

“ARTÍCULO 271. SANCIONES PARA EL EMPLEADOR. <La competencia asignada en


este artículo al Ministerio de Salud, será ejercida por la Superintendencia Nacional de
Salud. Ver Notas de Vigencia> El empleador, y en general cualquier persona natural o
jurídica que impida o atente en cualquier forma contra el derecho del trabajador a
su afiliación y selección de organismos e instituciones del Sistema de Seguridad
Social Integral se hará acreedor, en cada caso y por cada afiliado, a una multa
impuesta por las autoridades del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social o del
Ministerio de Salud, en cada caso, que no podrá ser inferior a un salario mínimo
mensual vigente ni exceder cincuenta veces dicho salario. El valor de estas multas se
destinará al Fondo de Solidaridad Pensional o a la subcuenta de solidaridad del Fondo de
Solidaridad y Garantía del Sistema General de Seguridad Social en Salud,
respectivamente. La afiliación respectiva quedará sin efecto y podrá realizarse
nuevamente en forma libre y espontánea por parte del trabajador.

El Gobierno Nacional reglamentará los mecanismos para el control del pago de


cotizaciones de los trabajadores migrantes o estacionales, con contrato a término fijo o
con contrato por prestación de servicios.” (Negrilla fuera del texto).

Selección libre de los regímenes de pensiones, Ley 100 de 1993 artículo 13:

“ARTÍCULO 13. CARACTERÍSTICAS DEL SISTEMA GENERAL DE PENSIONES. El


Sistema General de Pensiones tendrá las siguientes características:

a. <Literal modificado por el artículo 2 de la Ley 797 de 2003. El nuevo texto es el


siguiente:> La afiliación es obligatoria para todos los trabajadores dependientes e
independientes;

b. La selección de uno cualquiera de los regímenes previstos por el artículo anterior


es libre y voluntaria por parte del afiliado, quien para tal efecto manifestará por escrito
su elección al momento de la vinculación o del traslado. El empleador o cualquier persona
natural o jurídica que desconozca este derecho en cualquier forma, se hará acreedor a
las sanciones de que trata el inciso 1o. del artículo 271 de la presente ley.” (Negrilla
fuera del texto).

En conclusión, la liberalidad del empleador puede de cierta manera vulnerar la vida digna
de un trabajador, pues si bien es cierto, el reconocimiento de una pensión de vejez puede
fluctuar entre el régimen de ahorro individual con solidaridad y el régimen de prima media
con prestación definida – Colpensiones, ya que los dos regímenes manejan diferentes
características o requisitos para acceder a dicha prestación económica, por ende, el
empleador no es el idóneo para determinar qué régimen le conviene más al trabajador.

Atentamente.

Alejandro Porras & Asociados.


Abogados en Bogotá.

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