Conductimetría
Conductimetría
Conductimetría
Las disoluciones electrolíticas conducen la corriente eléctrica y también presentan resistencia a su paso,
siendo por tanto aplicable la Ley de Ohm . La conductividad de las disoluciones
electrolíticas, va acompañada de transporte de carga eléctrica y de materia, depende de la velocidad de los iones,
del tamaño y carga de éstos, de la viscosidad del medio en que se mueven, de la temperatura y de la actividad
(concentración efectiva de una especie química) de las especies disueltas. La resistividad específica o simplemente
2
resistividad, se define como la resistencia de la disolución acuosa medida entre dos electrodos metálicos de 1 cm
de superficie y separados por 1 cm de distancia, en el SI se mide en Ω.m y tiene la siguiente expresión ρ = , que
también se aplica a los hilos conductores.
Conductímetro de sobremesa
-1
La conductividad, σ (μS·cm ) es la conductancia de una columna de agua comprendida entre dos
2
electrodos metálicos de 1 cm de superficie y separados el uno del otro por 1 cm de distancia. Se define como la
inversa de la resistividad específica “ρ”, σ = .
Unidades de medida
G = conductancia = en el SI se mide en siemens (S), que es . (
La resistencia eléctrica viene dada por: ; (resistividad) ; = σ ( conductividad); por tanto: σ =
(conductividad)= (unidad muy grande para medir “σ” de un agua de consumo); por lo que se
-1 -6 -1 4 -1
utiliza μS·cm (microsiemens/centímetro); 1 μS = 10 S ; 1S.m = 10 μS·cm .
o
La conductividad de un agua depende de la temperatura, por lo tanto si “σ” no se mide a 20 C hay que
efectuar una corrección según la siguiente fórmula:
o
σ 20 C = σT . f
El factor “f” se determina mediante la siguiente tabla:
Existe una relación entre la concentración de sales disueltas de un agua y su conductividad. A veces la
o
mineralización determinada por pesada del extracto seco a 105 C, no es rigurosamente idéntica a la calculada a
partir de la conductividad. En efecto, la vaporización puede llevar consigo transformaciones de las estructuras de los
bicarbonatos en carbonatos, cristalización de sulfatos con un cierto número de moléculas de agua; lo que ocasiona
que la masa de extracto seco no represente con exactitud el de las sales disueltas. Por otra parte, la medida de la
conductividad está influenciada por el pH de la disolución acuosa, el número de oxidación de los iones y el grado de
ionización de las sales.
El cálculo de de la mineralización a partir de la conductividad no permite tener un valor exacto de la
misma. Los valores de la mineralización a partir de la conductividad, se efectúan a partir de la tabla siguiente:
Conductividad específica (C.E.) (S/cm) Sólidos totales disueltos (ppm = mg/l) (TDS=STD)
Inferior a 50 1,365 x C.E. a 20ºC
50 a 166 0,948 x C.E. a 20ºC
166 a 333 0,770 x C.E. a 20ºC
333 a 833 0,716 x C.E.a 20ºC
833 a 10000 0,759 X C.E. a 20ºC
Superior a 10000 0,850 x C.E. a 20ºC
o
La mineralización determinada por este método es inferior a la obtenida por pesada del residuo seco a 105 C. Se
aproximan ambos valores para conductividades entre 333 y 833 S/cm.
Control de resultados del análisis del agua. Métodos que utilizan la conductividad
La conductividad total del agua puede reconstituirse a partir de la suma de las conductividades de los
diferentes iones. Sin embargo, éstas no son proporcionales a su concentración debido a la interacción de los iones.
Cuanto más diluida sea la disolución, menos importante será esta interacción. Se ha de tener en cuenta que la
conductividad de los cationes y la de los aniones no presenta, en general una gran diferencia.
CONDUCTIVIDAD DE LOS IONES EN DISOLUCIÓN
“MÉTODO AMERICANO”
Iones Conductividad específica a 25ºC (S/cm)
por mg/l
Bicarbonato ( HCO31-) 0,715
Calcio ( Ca2+ ) 2,60
Carbonato ( CO32-) 2,82
Cloruro ( Cl1- ) 2,14
Magnesio ( Mg2+) 3,82
Nitrato ( NO31- ) 1,15
Potasio ( K1+) 1,84
Sodio (Na1+) 2,13
Sulfato ( SO42-) 1,54
Como la conductividad se puede relacionar con la concentración de materia disuelta, vamos a estudiar parámetros
que miden también niveles de determinadas sustancias en el agua.
Salinidad
La salinidad representa la concentración iónica total de un agua. Es un parámetro utilizado habitualmente
en las aguas salobres (concentración de sales entre un agua dulce y un agua salada). Se identifica con el parámetro
o
sólidos totales disueltos (STD) o residuo seco a 105 C. En aguas marinas tiene un valor medio de 35 g/l. Como en las
aguas salobres, las proporciones relativas de iones se mantienen casi constantes, se suelen relacionar los valores de
salinidad con la concentración de algunos iones más característicos de las mismas, como por ejemplo el ion cloruro,
el ion sodio, etc.
El aumento de la salinidad en aguas no marinas, puede deberse a las siguientes causas:
Efluentes industriales.
Escorrentía de las aguas de regadío.
Aguas salobres de galerías.
Depósito de aerosoles salinos oceánicos.
Utilización de sal en carreteras en países con fuertes nevadas.
Los niveles elevados de salinidad causan problemas en el regadío y en la vida acuática. Estos problemas están
relacionados con los procesos de ósmosis (tendencia del agua a salir de las células y pasar al medio circundante).
Dureza
Es un parámetro relacionado con los citados anteriormente, que mide fundamentalmente las
+ + + +
concentraciones de los iones calcio (Ca2 ) y magnesio (Mg2 ), y de otros menos abundantes como Fe2 , Zn2 ,…
Dureza total de un agua (TH = grado hidrotimétrico)
+ +
Es la suma de las concentraciones de Ca2 y Mg2 , se expresa como ppm de CaCO3, también en grados
o
franceses (1 F = 10 ppm de CaCO3).
No es fácil definir un límite entre lo que constituye un agua dura y un agua blanda. Sin embargo, se puede
o
considerar que un agua que tiene una concentración inferior a 75 mg/l de CaCO3 de TH (es decir 7,5 F) o a 30 mg/l de
2+
Ca es un agua blanda (J.Rodier, 2011) y que, por encima de esa concentración, se trata de un agua dura. Pero la
2+ 2+
dureza total es debida fundamentalmente a los iones Ca y Mg , por lo que hay tener en cuenta también la
2+
concentración del catión Mg al calcular el límite de 75 mg/l de carbonato de calcio de TH. La OMS (2006) considera
o
blanda un agua, si tiene una dureza total expresada como CaCO3 inferior a 100 ppm o TH=10 F, dependiendo del pH
y la alcalinidad (concentraciones de carbonatos y bicarbonatos). Según la OMS (2006) un agua con una dureza total
de 200 ppm de CaCO3 puede producir incrustaciones en las tuberías, dependiendo del pH y la alcalinidad (T AC).
Una elevada dureza puede causar problemas en los procesos de lavado, en las calderas de vapor, en los
intercambiadores de calor, etc. Los problemas de lavado se deben fundamentalmente a la formación de sales
insolubles, al reaccionar los cationes causantes de la dureza con los jabones, por ejemplo:
+ +
2C17H35-COONa (estearato sódico) + Ca2 → (C17H35-COO)2Ca + 2 Na1
También se pueden formar depósitos de sales de calcio y magnesio en las tuberías, en forma de carbonatos o
sulfatos.
Nota
El Real Decreto 140/2003 establece como valor paramétrico máximo para la conductividad de un agua de bebida
2500 μS/cm (BOE 21-2-2003). Directiva 98/83/CE del Consejo, diario oficial de la UE 5-12-98 (Valor que nos parece
muy permisivo).
Referencias bibliográficas utilizadas para su elaboración: (32), (33), (36), (8), (29) y aportaciones personales.
Consultar la bibliografía citada para ampliar conocimientos.