CURSO: CUENTOS PARA TRABAJAR LAS
EMOCIONES EN EL AULA
ALEXANDRA VICENTE PÉREZ
DNI: 73134695P
Cuentos y sentimientos
1- Explica qué es para ti un cuento y cómo piensas que puede ayudar a los niños
o niñas.
Para mí un cuento es una forma de aprendizaje. Es una herramienta muy eficaz para que
tanto pequeños como mayores aprendamos a convivir de manera positiva.
En la mayoría de los cuentos siempre se aprende algún tipo de valor, como la amistad,
el amor, la tolerancia…y es una forma muy ilustrativa de enseñarles a los niños este tipo
de conceptos desde que son muy pequeños y de una manera que lo van a entender muy
bien. Con ello conseguiremos que, si uno de nuestros alumnos ha aprendido desde
pequeño a entender y respetar este tipo de valores, cuando sea mayor será una persona
mucho más abierta y respetuosa con los demás.
2- ¿Cuál era tu cuento preferido cuando eras niño/a? ¿Por qué crees que te
gustaba tanto? ¿qué mensaje te transmitía ese cuento? ¿Cuál era tu personaje
favorito? ¿Crees que este personaje tiene algo que ver con el niño o niña que
eras entonces? ¿Es posible que se pareciese a ti o que tuviese alguna cualidad
que tu entonces desearas tener?
Mi cuento favorito cuando era pequeña era Blancanieves y los 7 enanitos. La verdad que
era tanto el libro como la película. Mis padres me decían que me sabía los diálogos de
memoria. Pero para ser sincera, nunca me había planteado porque ese era mi libro
favorito. Yo supongo que fue porque es el primer libro que me compraron mis padres y
que me leyeron.
Mi personaje favorito obviamente era Blancanieves, en todos los libros o películas que
veía de princesas, éstas eran mis favoritas. No sé si me quería parecer a ella o sí tenía
algo que ver con la niña que era, pero siempre me han gustado los animales y cuando el
cazador la abandona en el bosque y se siente muy angustiada por estar sola, los animales
se le acercan y le ayudan a encontrar la casa de los enanitos. Supongo que algo de eso
sería lo que me hacía parecerme a ella. Que, en momentos de angustia, lo único que
quería era abrazar a mi perro.
Creo que el mensaje que me transmitía este cuento y en general todos los que tienen
que ver con princesas era que al final el bueno siempre gana. Cuando creces empiezas
a leer cosas de que sí Blancanieves no tenía personalidad, que si es un cuento
sexista…pero cuando yo era pequeña solo me fijaba en que el bien siempre gana. Que,
si eres bueno y feliz, al final todo te irá bien.
3- ¿Cuáles son las etapas evolutivas descritas por Piaget en relación con los
cuentos?
Período Sensoriomotor, de 0 a 3 años: El niño va aprendiendo a manejar su
movimiento, sobre su cuerpo.
La humanidad sabía eso y creo cuentos para ese periodo, los cuentos Sensoriomotrices,
que utilizan los elementos sensoriomotores y los demás sentidos; olfato, vista, oído…
Período Preoperatorio, de los 4 a 6 años: Aunque Piaget realmente de llamó
Período Mágico-Simbólico, el niño pasa de lo puramente sensoriomotriz a otro
tipo de cuentos.
Tenemos los cuentos acumulativos y los que son cuasi-simbólicos, que aún no son
mágicos, pero tienen algo de simbólicos y en ellos ocurren cosas simbólicas. Además, En
el final de este periodo ya encontramos los cuentos Maravillosos.
Operaciones Concretas, de 9 a 14 años aproximadamente: Aquí tenemos como
cuentos los problemas matemáticos, las historias de todo tipo; de aventuras, …
Operaciones Formales: Aparece la lógica, los porqués de las cosas. Los cuentos
que encajan aquí serían los mitos, que hablan de relaciones y situaciones
humanas.
Son temas que al niño o niña adolescente le interesan, son mapas conceptuales
también, a nivel emocional.
4- ¿Cuáles son las diferencias entre cuento y mito?
La principal diferencia entre un cuento y un mito, es que, en el cuento, lo que ocurre,
por muy maravilloso que esto sea, le pasa a un niño normal y corriente por lo que le
resulta muy fácil identificarse con él. Sin embargo, en un mito, los personajes son dioses
o semidioses y están más alejados de su identificación con un niño o niña pequeños.
5- Explica qué significa el rito de paso en los cuentos.
A la hora de contar un cuento es preciso respetar unos ritos de entrada y salida,
mediante fórmulas que se alejan del lenguaje ordinario para que el niño sepa cuando
entra y sale del cuento.
Es muy importante cuando comencemos con el cuento empezar con alguna frase tipo:
“Érase una vez”, “En un lugar muy lejano” para que el niño entienda que va a entrar en
un mundo mágico donde cualquier cosa puede suceder. Cuando el cuento termina,
hemos de volver a pronunciar unas palabras rituales tipo: “Y colorín colorado…”, “Y
fueron felices y comieron perdices” para que el niño sepa que está de vuelta en el
mundo real y que del cuento puede traerse el aprendizaje, pero no quedarse ahí.
6- ¿Qué opinas sobre los prejuicios en los cuentos de hadas?
Creo que sí que es verdad que en la mayoría de los cuentos que nos han contado de
pequeños y por lo tanto son los que más conocemos, el príncipe siempre es el que salva
a la princesa. Pero también creo que cada vez más se oyen más cuentos, más películas
y más libros en los que el rol está cambiado.
Hay que hacerles ver a los niños y niñas que no siempre es el chico el fuerte y el que
consigue salvar a la chica, si no que las chicas también pueden tener esa capacidad. Si a
la hora de contar cuentos, les leemos de ambos tipos y no solo en los que el personaje
masculino es el héroe, aprenderán a respetarse los unos a los otros desde que son muy
pequeños.
7- ¿Qué cuentos utilizarías para trabajar los celos y la envidia en el aula?
Yo creo que utilizaría la Cenicienta y Blancanieves. Creo que son dos cuentos en los que
se ve muy bien la envidia que le tiene la madrastra a Cenicienta y la bruja a Blancanieves
y como hacen todo lo posible para complicarles la vida.
8- ¿Cuáles son las diferencias entre celos y envidia?
La principal diferencia entre los celos y la envidia es el sentir que te falta algo que tiene
otro. En el caso de la envida esa falta nace de un proceso comparativo con otra persona,
sin embargo, en el caso de los celos esa falta se produce porque otro se ha metido en
medio y se ha llevado algo que llenaría esa falta.
9- ¿Qué entendemos por atención a la diversidad en el aula?
Para mí, atención a la diversidad recoge todas las actuaciones que se ponen a disposición
de los centros para atender a todo su alumnado para que este alcance su máximo
desarrollo. Estas actuaciones pueden ser de apoyo al alumnado de forma puntual,
intermitente o continua, refuerzo del aprendizaje, medidas para mejorar la accesibilidad
tanto del alumnado al centro como al conocimiento que en el centro se ofrece. El
objetivo es conseguir alcanzar el principio de igualdad de oportunidades.
10- ¿Cómo crees que puedes ayudar desde el aula a respetar esa diversidad?
Como futura orientadora lo primero destacaría tener una mente abierta, flexible y en
contaste actualización de las últimas estrategias, métodos, estudios, programas,
actividades… que realizan otros centros aquí y fuera. También entender que cada
persona es única y que a esta le rodea un mundo social, familiar, escolar que es diferente
al del resto y que además sus procesos de aprendizaje también lo son.
Desde el Departamento de Orientación se puede realizar un Plan de Actividades que
incluya en sus programas y actuaciones, la mayor atención a la diversidad posible, que
responda a las necesidades, si es posible de la mayor parte de los alumnos. Veo
importante la implicación y participación para ello de toda la comunidad educativa,
incluidos profesores/tutores, padres y de aquellos que de forma indirecta también
forman parte del centro, como las asociaciones y entidades de la ciudad.
11- ¿Por qué es tan importante leer repetidas veces un mismo cuento cuando el
niño nos lo demanda?
Primero porque hasta que no se les ha leído el cuento tres veces no explosionará la
conversación. Al ser la tercera vez que los niños escuchan el cuento se sienten cómodos
con los materiales, son capaces de ejercer su capacidad de predicción, pueden practicar
nuevo vocabulario y pueden aportar su visión de la historia porque la dominan. También
es un momento en el que los niños abandonan su mundo interior para acompañar al
personaje.
Además, tenemos que tener en cuenta que el niño cuando nos está pidiendo que le
volvamos a contar el cuento, lo que nos está demandando es seguridad. Necesita sentir
que al igual que le ocurre al personaje del cuento, si continúa en el camino de la vida y
aún con sus miedos permanece ahí, y es honesto y generoso, al final obtendrá el tesoro.
12- ¿Qué opinas respecto a la forma en que el actual sistema educativo influye
sobre la cooperación o el egoísmo en el aula?
Opino que la sociedad está montada de tal manera que estudias para aprobar, para ser
el mejor y no estudias para aprender. En el colegio te enseñan a que tienes que estudiar
para sacar las mejores notas porque luego de eso dependerá que puedas entrar en una
buena o en una mala universidad.
Obviamente esto tiene que cambiar, tenemos que dejar de valorar tanto los resultados,
la evaluación cuantitativa y centrarnos más en la evaluación cualitativa. Nosotros como
docentes tenemos que procurar que esto sea así, pero mientras que los de arriba no
cambien este método, de nada va a servir.
13- Haz alguna propuesta para promover la solidaridad en el aula.
En el centro en el que estuve haciendo las prácticas del Máster de Orientación Educativa,
habían puesto en marcha un programa llamado: Pequeños Gestos que se trabajaba con
todos los alumnos de la ESO en las horas de tutoría.
En este programa consistía sobre todo en el visionado de vídeos y a raíz de ellos hacer
varias actividades y dinámicas. Un vídeo que me gustó mucho fue uno en el que un
profesor les habla a sus alumnos de la posibilidad que tienen de cambiar el mundo. Tras
el visionado del vídeo, en la dinámica los alumnos tenían que proponer alguna acción
que favoreciera a toda la clase y qué aspectos pensaban que se podían mejorar: orden,
limpieza, silencio en explicaciones, trabajo en grupos y relación entre compañeros.
Para trabajar este último punto, hicimos una ronda en la que individualmente cada uno
de los alumnos escribía una idea de los 5 apartados y una vez escritas y recogidas las
aportaciones individuales, se hicieron grupos por temas y de cada uno salió una idea
para poder aplicar, la que entre todos les parecía mejor.
Después hubo una puesta en común de lo trabajado en cada grupo y entre toda la clase
se decidió la acción que se iban a proponer como grupo para empezar. Después si se
quiere se pueden numerar las acciones de los grupos para ver cuál será la siguiente que
puede aplicarse en el plazo de un mes o en el que se determine.
14- ¿Qué entendemos por símbolo? ¿De qué forma utilizan los símbolos los
cuentos?
Los símbolos son todas esas palabras que son nombres y que a través de ellas el mensaje
del cuento llega a nuestro inconsciente. Añadir también que todos los símbolos del
cuento representan cosas y personas que nos vamos encontrando en nuestra vida.
Los cuentos tienen el poder de ser un mapa de conciencia, nos dicen cómo se
solucionarían los problemas, pero nos lo dicen la mayoría de las veces mediante
símbolos.
15- Escribe un cuento en el que de forma simbólica puedan trabajarse algunos de
los valores que hemos visto en este curso o cualquier otro que a ti te parezca
interesante.
Escrito al final.
16- Explica la diferencia entre el análisis de un cuento a nivel interpsíquico e
intrapsíquico.
La diferencia es que el análisis del cuento a nivel interpsíquico es entre personas y a nivel
intrapsíquico es a nivel interno. Es decir, cuando hablamos del nivel interpsíquico los
personajes reflejan las relaciones personales, mientras que cuando hablamos del nivel
intrapsíquico cada elemento del cuento es parte de nosotros.
17- Si te encontrases en el aula con un problema de aceptación de algún alumno
diferente. ¿Cuál sería tu propuesta?
El objetivo general de la educación es garantizar la igualdad de derechos y
oportunidades para el pleno desarrollo de la personalidad del alumnado y la superación
de cualquier tipo de discriminación. Una de las metodologías que más he practicado
cuando he estado de prácticas ha sido el aprendizaje cooperativo.
Este tipo de aprendizaje supone utilizar el trabajo en equipo de los alumnos para
aprovechar al máximo la interacción entre ellos con el fin de maximizar el aprendizaje
de todos. El aula se organiza durante toda o parte de la jornada en grupos base
heterogéneos (pero homogéneos entre sí), generalmente definidos por el docente
cuando ya conoce bien a los alumnos de unos cuatro o cinco alumnos. En los grupos
base se programa un trabajo que combina actividades individuales y colectivas y el grupo
no logra su resultado si no lo alcanzan todos sus miembros.
Una dinámica que he utilizado más de una vez y que creo que funciona bastante bien es
la Técnica del Rompecabezas. En ella los alumnos se dividen en equipos de entre tres y
seis miembros, heterogéneos en cuanto a raza, sexo, capacidad y factores de
personalidad, y a cada miembro del grupo se le asigna una parte de la tarea que deben
dominar. Después de que cada uno ha leído y preparado su parte, se reúne con los de
otros grupos que también tengan el mismo tema (grupo de expertos) donde discuten la
información. Luego vuelven a su grupo y enseñan a sus compañeros lo que han
aprendido.
La finalidad que busca este método es poner a los alumnos en situación de
interdependencia extrema, creando las condiciones necesarias para que el trabajo de
cada miembro del equipo sea absolutamente imprescindible para que el resto de los
miembros pueda completar la tarea.
18- ¿Qué es un cuento protosimbólico? ¿Con qué edades podemos utilizarlo?
Los cuentos protosimbólicos son cuentos en los que no aparece claramente la magia,
pero hay elementos simbólicos y tienen una estructura sencilla. Además, son cuentos
claramente instructivos y preventivos y en ellos, los animales son depositarios de
emociones básicas.
Son cuentos adecuados para niños de dos a cinco años-seis años, aunque podemos
seguir contándolo para niños más mayores si el mensaje sigue siendo necesario.
19- Comenta algo que te haya llamado la atención al leer el dossier.
La verdad que el documento que habla sobre la Cuentoterapia y el autismo me ha
parecido de lo más interesante. He intentado buscar el vídeo del Caso de Simón, pero
no he sido capaz de encontrarlo (si me lo pudieras mandar). Igualmente, la historia que
cuenta la profesora me parece increíble y creo que es una muy buena manera de
trabajar con los alumnos que padecen de este trastorno y con el resto de alumnado en
general.
Mi trabajo fin de máster era sobre cómo trabajar las emociones con alumnado con TEA
y la verdad que investigué mucho sobre el tema y es algo que me encanta. Me gustaría
seguir aprendiendo sobre los cuentos y como este recurso puede ser de gran ayuda. De
momento no he encontrado así ningún tipo de formación en relación a este tipo de
metodologías, pero sí que me he apuntado a un curso que haré próximamente sobre la
grafología infantil y la interpretación de dibujos, herramienta que también me parece
muy útil para trabajar con los alumnos.
20- Aporta libremente alguna idea para trabajar con cuentos en el aula.
Algo que me parece muy divertido a la hora de trabajar con los alumnos es la
dramatización. Como digo mi TFM trataba sobre alumnado con TEA y muchas de las
actividades propuestas eran representaciones teatrales ya que me parece muy buena
forma de trabajar tanto las habilidades sociales como las emocionales.
Creo que con los cuentos también podríamos usar el teatro. Los niños y las niñas
mediante el juego dramático podrían asumir distintos roles y representar los personajes
que aparecen en el cuento. Me parece muy buena forma para que los alumnos
desarrollen tanto su expresión corporal como su expresión comunicativa.
Cuento:
Érase una vez una niña de diez años que vivía en un pueblecito de Teruel, llamada
Carlota. Carlota era la pequeña de tres hermanos y era una niña muy curiosa a la que
siempre le encantaba investigar y perderse por los caminos de su precioso pueblo.
Un día Carlota, como cada tarde, después del cole, le dijo a su madre si podía ayudarle
a hacer los deberes. Su madre, como siempre, le dijo que se esperase un momento que
estaba ocupada, que estaba haciendo la cena. Jolín pensó Carlota, siempre igual, encima
seguro que hace verdura. ¡Con lo poco que me gusta! Que egoísta es mi madre. Pues
me voy a pasear.
- Adiós Mamá, me voy a dar una vuelta. Luego haré los deberes. Le dijo Carlota.
- Adiós hija, ten cuidado. Y a las 8 en casa eh. Le contestó.
- Vale mamá, luego nos vemos.
Carlota cogió su abrigo y salió por la puerta.
- ¿Dónde puedo ir hoy? Pensó. Y empezó a andar sin rumbo, simplemente
contemplando el maravilloso paisaje que tenía a su alrededor.
De repente Carlota escuchó un ruido. ¡Viene de ahí! Y visualizó una pequeña cueva que
se escondía tras unos cuantos arbustos.
- ¿Hola? Preguntó Carlota asustada. Nada. Silencio. ¿Hola? ¿Hay alguien ahí? Volvió a
preguntar y seguía sin respuesta.
Carlota se adentró en la cueva poco a poco, con miedo de que algo malo le pudiera
suceder. Cuando ya llevaba un rato caminando, imaginándose todo tipo de cosas que se
podría encontrar, vislumbró al fondo un ser que ella jamás había visto, era como si fuera
un niño pequeño, pero con la cara de su papá, pensó ella.
- ¡Hola! Me llamo Carlota, ¿Cómo te llamas tú?
El pequeño ser se le quedó mirando y tímidamente le contestó:
- Hola, me llamo Claudio y soy un gnomo.
- ¡Hola Claudio! Nunca te había visto por aquí. ¿Vives tú solo? ¿Qué haces aquí? ¿Te
puedo tocar?
Carlota no paraba de hacerle preguntas al gnomo debido a su fascinación. Por fin le
pasaba algo interesante y sus amigas iban a flipar cuando se lo contara.
- Ven, sígueme. Le dijo Claudio.
Carlota, intrépida como ella sola, decidió seguir a Claudio. Estuvieron andando durante
bastante rato, o eso le pareció a Carlota, hasta que de repente llegaron como a una
especie de mina en la que había un montón de gnomos como Claudio, trabajando en el
proceso de algo que parecían como piedras preciosas.
- Ven, por aquí. Le volvió a decir Claudio.
Carlota siguió emocionada detrás de él y de pronto se vio subida en una especie de altar
desde el que podía ver a todos esos pequeños gnomos trabajando.
- ¡Atención, atención!
Y todos los gnomos dejaron de trabajar para prestarle atención a Claudio.
- Os presento a Carlota, es una humana de verdad y es la que nos va a ayudar con nuestra
misión contra los enanos.
- ¡Bieeeen! ¡Bravo!
Todos los gnomos empezaron a aplaudir y a corear el nombre de Carlota. Pero Carlota
no entendía nada. ¿Quiénes son esos enanos? ¿Qué se supone que tengo que ver yo en
eso? No entiendo nada.
- Oye Claudio, ¿Qué es eso de los enanos? ¿Qué tengo que hacer?
Claudio la miró y le dijo:
- Ven, te enseñaré algo.
Llevó a Carlota por una especie de pasadizos hasta llegar a una sala en la que había
muchos libros. Claudio cogió uno y le hizo señales a Carlota para que se sentara.
-Te contaré una historia:
Hace unos 50 años, nuestro gran líder Pater Gnomis, descubrió esta cueva en la que tú
estás ahora mismo. Descubrió un montón de piedras preciosas y junto con su familia
empezó un negocio familiar. Se levantaban por la mañana, cogían las piedras, las
llevaban al taller y trabajaban las que eran preciosas para luego llevarlas al mercado y
venderlas. Así se ganaban la vida y así estuvieron durante mucho tiempo.
Un día, un enano llamado Glotis, entró a nuestra cueva y robó todas nuestras piedras
preciosas, la fórmula para trabajarla y nuestras máquinas de trabajo. Desde ese día
Glotis y todos los enanos se hicieron con el negocio de las piedras. Pater le suplicó que
por favor le devolviera la fórmula, que además no estaba completa, solo él conocía el
secreto final para que quedaran así de brillantes. Pero Glotis se negó, su egoísmo y su
avaricia le cegaron y dejó a los gnomos sin el negocio que tanto les había costado
conseguir.
Pater tenía la fórmula, pero no tenía con que trabajar. Se lo habían llevado todo. Por
otro lado, los enanos podían trabajar con lo robado y la fórmula, no quedarían igual de
perfectas que las de Pater, pero por lo menos tenían con qué ganarse la vida.
Desde ese día Pater se juró a si mismo que algún día recuperaría el que había sido su
gran descubrimiento y que los gnomos volveríamos a vivir de él. Pater murió hace un par
de años, pero todos nosotros seguimos trabajando para conseguir por lo que él luchó
durante tanto tiempo.
- A día de hoy, nosotros seguimos levantándonos cada mañana y seguimos trabajando,
pero las piedras que tenemos ya no son lo que eran. Cuando nos robaron, se llevaron
toda nuestra maquinaria y como no podemos hacer piedras preciosas de calidad,
tampoco tenemos dinero para comprar máquinas nuevas. Pero has aparecido tú y tú
serás nuestra salvación.
- ¿Yo? Dijo Carlota.
- Sí, tú. Tú puedes ayudarnos.
- Pero, ¿cómo podría hacer yo eso?
- Pues solo tendrías que ir a su fábrica, haciéndote pasar por compradora, mientras
nosotros entramos y les robamos todas las máquinas y la fórmula de Pater.
- Hmmm…no me convence mucho ese plan eh. Soy solo una niña, no creo que me tomen
enserio.
- Por favor, tienes que ayudarnos. Dijo Claudio. Eres nuestra única oportunidad, la
oportunidad que hemos estado esperando durante años.
- Está bien. Dijo Carlota. Total, aún me quedan un par de horas hasta que tenga que
volver a casa.
Carlota y el resto de gnomos planearon el robo. Cuando ya lo tenían todo pensado, se
dirigieron a la fábrica de los enanos.
- Vamos Carlota, tú puedes.
Carlota llamó a la puerta y un señor muy bajito le abrió la puerta.
- Hola, buenas tardes, soy Carlota y me he enterado de que aquí vendéis piedras
preciosas. Le quiero hacer un regalo a mi madre. ¿Puedo entrar?
- Sí, adelante. Le dijo el enano que le había abierto la puerta.
La verdad es que Carlota estaba un poco asustada, habían repasado el plan un millón de
veces, pero tenía miedo de que la pudieran descubrir.
- Bueno, tenemos collares, anillos, pulseras… ¿Qué estabas buscando?
- Hmmm…una pulsera estaría bien.
- Perfecto, tenemos todas estas. Y el enano le enseñó las pulseras a Carlota.
Carlota que no se podía estar callada decidió improvisar:
- Oye perdona, ¿te puedo hacer una pregunta?
- Sí, claro. Dijo el enano.
- Es que me he enterado de que tenéis un conflicto con los gnomos. ¿Qué fue lo que
pasó?
El enano miró a Carlota de arriba abajo. ¿Cómo lo sabes? Nadie conoce esa historia.
- Rumores…, me he enterado por ahí. Soy una niña muy curiosa y me gustaría que me
contaras la historia de lo que pasó. Es un trabajo para el cole. Se inventó Carlota.
- Bueno, está bien. Le dijo el enano. Te contaré la historia.
- ¡No me lo puedo creer! Dijo Carlota. ¿Ósea que vosotros lleváis años intentando
negociar con los gnomos?
- Así es. Dijo el enano. Glotis, antes de morir, nos confesó lo que habían hecho y que la
única manera que teníamos de vender piedras de calidad es con el secreto que solo
Pater y los gnomos conocían. Pero siempre que hemos intentado hablar con ellos, nos
ha sido imposible.
Carlota le dijo que esperase un momento que ahora volvía.
- Pssst, chicos, venid. Les dijo a los gnomos.
- ¿Ya se ha ido? Preguntó Claudio.
- No, pero tengo que contaros una cosa.
Claudio y tres gnomos más entraron a la fábrica junto con Carlota y el enano.
- ¿Carlota que haces? ¿Por qué nos has hecho entrar? Este no era el plan, lo has
fastidiado todo. Ahora nunca podremos recuperar lo que era nuestro.
- ¿De qué están hablado? Miró el enano a Carlota. ¿Qué plan?
- Bueno, si me dejáis hablar os cuento. Dijo Carlota.
- Os he reunido a todos porque me he dado cuenta de que, hablando las cosas, podríais
haber llevado años trabajando juntos.
- ¿De qué estás hablando? Dijo Claudio. Ellos nos robaron y por su culpa no tenemos
dinero.
- Escúchame Claudio. El enano me ha dicho que lleva años intentando hablar con
vosotros para llegar a un acuerdo pero que tú siempre te has negado a abrirle la puerta.
- Bueno sí… pero es que…Balbuceó Claudio.
- Pero ni es que ni nada. Se me ocurre que podríais trabajar todos juntos. Los gnomos
lleváis años trabajando las piedras y tenéis una fórmula que los enanos no tenéis, como
he podido observar en las pulseras. Además, vosotros los enanos, tenéis las máquinas
necesarias para poder trabajarlas adecuadamente. ¿Qué os parece? Unos ponéis las
máquinas y otros la fórmula. ¿Es justo no? Y así todos podéis trabajar juntos.
Claudio no estaba muy convencido, pero al final añadió:
- Bueno, podríamos probar ¿no? Todo sea por conservar el negocio de nuestros seres
queridos y seguir haciendo lo que más nos gusta, las piedras preciosas.
- ¡Perfecto! Exclamó Carlota. Pues manos a la obra.
Y así fue como gnomos y enanos, gracias a Carlota, empezaron a trabajar juntos por un
mismo fin, dejando a un lado el egoísmo que les había hecho llegar hasta ese punto.
- ¡Aiba si son las ocho! Chicos me tengo que ir o mis padres se enfadarán conmigo.
- Vale Carlota, muchas gracias por todo. Dijeron todos a la vez. Y a esto Claudio añadió:
- No le cuentes nada de esto a nadie ¿eh? Será nuestro secreto.
- Está bien Claudio, será nuestro secreto. ¿Pero podré ir a visitaros?
Y de repente Carlota, se despertó de su sueño. ¿Había sido real? Carlota estaba
convencida de que lo que había vivido había sido real. Pero no podía ser, estaba en su
cama con el pijama puesto.
- ¡Carlota! A desayunar. Gritó su madre.
Carlota un poco dormida aún, bajó a desayunar.
- ¿Oye Carlota, esto es tuyo? Y su madre le enseñó una pulsera.
¡Era la pulsera que le había enseñado el enano! Sabía que era real. Pensó Carlota.
-Sí, bueno, no. Es un regalo para ti. Te la he comprado por ayudarme siempre en todo y
nunca pedirme nada a cambio.
Carlota y su madre se abrazaron. Carlota había comprendido que hay que dejar el
egoísmo de lado y que hay que hacer cosas por la gente que te trata bien, y ese era el
caso de sus padres. Si su madre había estado ocupada en ese momento era porque
estaba preparándoles la cena, algo que hacía cada día sin pedir ayuda, ni nada a cambio
a los demás. Solo lo hacía porque nos quería mucho y quería lo mejor para nosotros.
Carlota al día siguiente volvió al bosque para darles las gracias a sus nuevos amigos por
la pulsera, pero nunca volvió a encontrar ni la cueva de los gnomos ni la fábrica de los
enanos. Pero Carlota sabía que había sido real, que no solo había sido un sueño y que
se acordaría de ellos para siempre.
Y fin colorado, este cuento se ha acabado.