Restaurando La Imagen de Dios en El Hombre
Restaurando La Imagen de Dios en El Hombre
Restaurando La Imagen de Dios en El Hombre
Muchas veces decimos que lo único que llevaremos al cielo es nuestro carácter. Entonces,
si queremos ir al cielo con Cristo, su carácter debe ser reproducido en nuestras vidas, pero,
¿cómo puede ocurrir esto? ¿Qué nos dice la Biblia y los escritos de Elena de White acerca de
esto?
Para responder estas preguntas les invito a viajar al principio de la Biblia, justamente en el
momento en el que este carácter fue dañado y veremos cuál es la solución que el cielo nos da
DESAROLLOR
“Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza;
y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en
Cuando el escritor hebreo usaba las palabras cielo, tierra se refería al universo y cuando usaba
las palabras cielo, tierra y mar hacía referencia al planeta tierra, por lo tanto, si en Gén. 1:26,
el dominio entregado al hombre es sobre las aves de los cielos los peces del mar y bestias en
toda la tierra somos mayordomos no solo del tiempo, talento, tesoro y templo sino de TODO.
Segundo Principio: “El hombre no puede ser Mayordomo de nada si no es a través la Imagen
de Dios en el hombre”.
Es decir esta imagen es la que habilita al hombre para responder a Dios y a sus requerimientos.
a) Solo a través de la imagen de Dios en el hombre está habilitado para responder a todos los
requerimientos divinos. (Administrar la tierra como sus Mayordomos.).
b) El gran desafío de Adán y Eva era conservar la imagen y semejanza con la que Dios los
creó.
c) Si el enemigo quería tomar dominio de todo debía comenzar por dañar la imagen de
tierra.).
A) Como el primer punto ya fue mencionado (Dios crea al hombre a su imagen), siendo el
“Tan pronto como el Señor, por medio de Jesucristo, creó nuestro mundo y colocó a Adán y
Eva en el Jardín del Edén, Satanás proclamo su propósito de transformar a su semejanza a los
borrar la imagen de Dios de toda descendencia humana e implantar la suya propia en lugar de
la divina. Y con el fin de lograr sus propósitos adoptó métodos de engaño. Se lo llamó el padre
de mentira, acusador de Dios y de quienes son leales a él y asesino desde el principio. Utilizó
todo medio disponible con el fin de lograr que Adán y Eva cooperaran con él en la apostasía y
Si la respuesta a la primera pregunta es afirmativa, ¿cómo es que esto pudo ser posible?
“Y vivió Adán ciento treinta años, y engendró un hijo a su semejanza, conforme a su imagen,
“Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol
codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el
“El pecado mancilló y casi borró la semejanza divina. Las facultades físicas del hombre se
debilitaron, su capacidad mental disminuyó, su visión espiritual se oscureció. Quedó sujeto a la
Desde que esto sucedió hasta que Jesús viniera a rescatar a la raza habían pasado 4.000 años.
Fue este el contexto en el que Jesús nuestro salvador vino a esta tierra.
Pero, ¿para qué vino?, esta es otra pregunta que necesita una respuesta.
excepto Cristo, puede amoldar de nuevo el carácter que ha sido arruinado por el pecado. El
vino para expulsar a los demonios que habían dominado la voluntad. Vino para levantarnos
del polvo, para rehacer según el modelo divino el carácter que había sido mancillado, para
hermosearlo con su propia gloria” (DTG, p. 28).
“El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo ha estado pecando desde el principio.
El Hijo de Dios fue enviado precisamente para destruir las obras del diablo” (1 Juan 3:8,
NVI).
“Cristo siempre tenía presente el resultado de su misión. Su vida terrenal, tan recargada de
penas y sacrificios, era alegrada por el pensamiento de que su trabajo no sería inútil. Dando
su vida por la vida de los hombres, iba a restaurar en la humanidad la imagen de Dios. Iba
a levantarnos del polvo, a reformar nuestro carácter conforme al suyo y embellecerlo con su
Cristo venció en el terreno donde Adán había perdido. Solo podemos exclamar ¡Bendito
Jesús!
Es importante destacar que aunque Cristo recuperó lo que el hombre había perdido, esto no
“En el plan de restaurar la imagen divina en el hombre, se estableció que el Espíritu Santo,
como agente modelador actuara en las mentes humanas como si fuera Cristo mismo” (EGW,
El apóstol Pablo entendía muy bien este conflicto lo escribió en su carta a los Corintios. “Por
tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor,
somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor”
(2 Corintios 3:18).
suceda).
“La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la COMUNIÓN del Espíritu Santo sean con
Siendo la comunión el lugar donde comienza el proceso de restauración, debemos saber que
“Con intenso interés, consideró los sacrificios ofrecidos por Adán y sus hijos. En esta ceremonia
discernía el símbolo de la comunión entre la tierra y el cielo. Se dedicó a interceptar esta
• Sábado
La pregunta es ¿Nuestro estilo de vida tiene relación con la información que tenemos?
Probablemente usted estará pensando en que para tener comunión necesita leer la Biblia y
Orar. Sin embargo, usted podrá tener muchos deseos de estudiar la Biblia, pero lo que necesita
no siempre es una Biblia: lo que necesita es tiempo para leer la Biblia.
Usted podrá tener muchos deseos de orar, pero lo que necesita no siempre es saber qué decir:
Entonces podríamos responder de la siguiente forma: para que usted tenga comunión necesita
INDISCUTIBLEMENTE tiempo y espacio, de otra forma esto nunca ocurrirá. Pensando en
“Con intenso interés, consideró los sacrificios ofrecidos por Adán y sus hijos. En esta ceremonia
discernía el símbolo de la comunión entre la tierra y el cielo. Se dedicó a interceptar esta
comunión” (DTG, p. 89).
comunión, o sea, nos quita el tiempo y los espacios para que esto suceda.
Tiempo Lugar
Es aquí donde quisiera formular mi llamado, según lo que hemos visto. Dios creó al hombre a
esto se realiza es a través de la comunión. Para que tengamos comunión necesitamos tiempo
El tiempo no llegará por que solo lo sepamos, este vendrá cuando tomemos una actitud
decidida frente a esto. El tiempo no vendrá por que aparezcan días de 25 horas. Si no tenemos
tiempo en las 24 horas que siempre tendremos es porque probablemente hemos entregado
nuestro tiempo a muchas otras cosas y no hemos priorizado el tiempo que debemos darle a
Dios.
porque elegimos ver TV hasta tarde, entonces si queremos tener comunión, tendremos que
hacer cambios.
la segunda venida.
“La verdad se ha abierto camino a su corazón, y está implantada allí por el Espíritu Santo,
quién es la verdad. Cuando la verdad toma posesión del corazón, el hombre da una evidencia
“En cuanto a mí, en justicia veré tu rostro; quedaré satisfecho cuando despierte a tu
semejanza” (RVA 2015).
Entonces usted quiere ser parte de aquellos sobres los cuales Dios reproducirá su carácter.