Árbol de Justicia Nuevo Nacimiento 1
Árbol de Justicia Nuevo Nacimiento 1
Árbol de Justicia Nuevo Nacimiento 1
“…Bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo…” (Mateo
28:19)
Se entiende con claridad cuando examinamos este verso más cuidadosamente.
1) Dice “…En el nombre…” (singular y no en los nombres plurales). Esto significa
que se invoca un nombre y la Biblia nos dice en Hechos 4:12 “…En ningún otro hay
salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres en que
podamos ser salvos”
2) Las palabras Padre, Hijo y Espíritu Santo no son nombres propios. Son
pronombres propios que al ponerse en el contexto correcto se están refiriendo al
nombre de esa persona. El hecho de que estén escritos con mayúscula es mayor
prueba de que se refieren a una persona. Esta persona es Jesucristo.
Además, la mayoría de nosotros somos padres e hijos, sin embargo, nuestro nombre
oficial no es padre o hijo. Si alguno nos acusa de ser muy meticulosos sobre detalles
insignificantes pregúntele amablemente cuál banco honraría o aceptaría un cheque
firmado con tan solo el título padre o hijo. Todo documento debe llevar el nombre. Si
las cosas terrenales requieren tanta exactitud ¿Es acaso una gran sorpresa que las
cosas celestiales haya tanta o más seriedad?
3) ¿Cuál sería el nombre del Padre? Jesús manifestó el nombre de su Padre, Jesús
dijo: “Yo he venido en nombre de mi Padre…” (Juan 5:43). Uno de los títulos dados al
niño del cual Isaías profetizó fue Padre Eterno.
“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se
llamará su nombre admirable, consejero, Dios fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz”
(Isaías 9:6)
4) Los judíos continuamente rechazaban las afirmaciones de Jesús . Repetidamente le
preguntaban “¿Tú quién eres? Entonces le dijeron: ¿Tú quién eres? Entonces Jesús
les dijo: Lo que desde el principio os he dicho. Muchas cosas tengo que decir y juzgar
de vosotros, pero el que dice me envió es verdadero, y yo, lo que he oído de él, esto
hablo al mundo. Pero no entendieron que les hablaba del padre” (Juan 8:25-27)
Lección 4
5) Jesús le explicó a Felipe que cuando uno lo veía a él, veía al padre. Esto
significa mucho más que el ser uno en propósito, o el ser uno por medio del
matrimonio. Cuando las personas se unen en uno por medio de una asociación
empresarial o una relación matrimonial, aun cuando sean uno en propósito o sean
declarados marido y mujer en el matrimonio, aun con todo no es posible ver a uno con
ver al otro. Sin embargo, Jesús dijo: “El que me ha visto a mí, ha visto al padre…”
“Jesús dijo: Si me conocieseis, también a mi Padre conoceréis, y desde ahora le
conocéis y le habéis visto. Felipe le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros y
no me has conocido Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al padre, ¿Cómo pues
dices tú, muéstranos al Padre?” (Juan 14:7-9)
6) ¿Cuál es el nombre del Hijo? El ángel dijo: “Y dará a luz un hijo y llamarás su
nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (Mateo 1:21)
El ángel dijo: “Y ahora concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo y llamarás su
nombre Jesús” (Lucas 1:31)
Pedro dijo: “Sea notorio a todos vosotros, a todo el pueblo de Israel, que, en el nombre
de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de los
muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano.
Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a
ser cabeza del ángulo. Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre
bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (Hechos 4:10-12)
7) ¿Cuál es el nombre del Espíritu Santo?
El niño que había de nacer (Isaías 9:6) había de ser el consejero o el consolador
mencionado por Jesús en Juan 14:16-18.
El profeta Isaías dijo: “Y se llamará su nombre… consejero…” (Isaías 9:6)
Jesús dijo: “Y yo rogaré al Padre y os dará otro Consolador, para que esté con
vosotros para siempre: El Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir,
porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros y
estará en vosotros. No os dejaré huérfanos, vendré a vosotros” (Juan 14:16-18)
En la Biblia ni tan solo una vez llegó alguno a repetir el mandamiento de Jesús, “…en
el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo”. Los apóstoles entendieron el
mandamiento y lo cumplieron al bautizar en el nombre de Jesús. Jesús dio el
mandamiento y ellos lo cumplieron.
Por ejemplo, si usted le dice a alguien: Dame el libro y él se limita a repetir el
mandamiento dame el libro, usted nunca obtendrá el libro. Jesús mandó a sus
discípulos a bautizar en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y ellos
obedecieron al bautizar en el nombre de Jesucristo.
En algunos casos tan solo una explicación general será suficiente. Pero en otros
casos, especialmente donde ya ha habido alguna experiencia religiosa o algún
contacto bíblico anterior, es posible que surjan preguntas más profundas acerca de la
divinidad, la trinidad, la unicidad de Dios, entre otras.
Lección 4
Cualquiera sea el caso, las respuestas son las mismas y siempre deben ser dadas
respetuosa, firme y verazmente. Es importantísimo, sin embargo, que este concepto y
el del arrepentimiento sean enteramente entendidos antes del bautismo.
Conclusión
Permítale hacer preguntas. Termine con una oración ferviente e invítelos al próximo
culto.