Simulación Del Acto Jurídico - Simulación Relativa y Parcial
Simulación Del Acto Jurídico - Simulación Relativa y Parcial
Simulación Del Acto Jurídico - Simulación Relativa y Parcial
NACIONAL”
TÍTULO
Simulación del Acto Jurídico: Simulación Relativa y Parcial
AUTORES:
PROFESOR:
Dr. Manuel Enemecio Castillo Venegas
CURSO:
Derecho Civil II: Acto Jurídico
CICLO:
III - 2022
PIURA - PERÚ
2022
SIMULACIÓN RELATIVA
Tiene como característica principal disfrazar un acto: en el cual realiza aparentemente un
negocio jurídico, pretendiendo y ejecutando en realidad otro distinto, los contratantes
concluyen un negocio verdadero, que ocultan bajo una forma diversa, de modo que su
verdadera naturaleza permanezca secreta.
La acción aparente del negocio sólo sirve para engañar al público; pero detrás de esa falsa
apariencia se esconde la verdad que las partes han querido realizar y ocultar a los terceros.
La simulación relativa consta de dos regulaciones de intereses, una simulada, es fingida y
aparente además no tendrá ningún efecto, y otra disimulada, este es el verdadero acto que las
partes celebran pero mantienen oculto.
Según la doctrina no necesariamente se realizan dos actos jurídicos, sino que la simulación
comprende un negocio o contrato jurídico complejo, con doble carácter una aparente y otro
verdadero, aprobado por la voluntad de las partes.
REGULACIÓN ARTÍCULO 191 C.C
"Cuando las partes han querido concluir un acto distinto del aparente, tiene efecto entre ellas
el acto ocultado ( simulado) en la medida que concurran los requisitos de sustancia y forma y
no perjudique el derecho de tercero".
En este panorama, se debe entender estos requisitos mencionados, los mismos que están
contenidos en el artículo 140 del mismo.
Los cuales se aluden explícitamente como:
1) Agente capaz, plena capacidad de ejercicio, salvo las restricciones contempladas en la ley.
2) Objeto físicamente y jurídicamente posible. 3) Fin lícito 4) Observancia de la forma
prescrita bajo sanción de nulidad.
La simulación debe cumplir con los requisitos del art. 140, además no ser perjudicial
para un tercero, esto determinará la validez de la simulación.
SIMULACIÓN PARCIAL
Según Anibal Torres (2018) nos dice que, “la simulación puede ser total o parcial, según que
la apariencia se refiere a todo el acto solo a una parte de él respectivamente” pg (757). Es
decir, que, la base para determinar la totalidad o parcialidad de la simulación del acto
jurídico, se guía por el alcance de la apariencia exteriorizada (acto simulado), que puede
cubrir a todo el acto, o sólo a una de sus partes o cláusulas.
Entonces, la simulación es total cuando todo el contenido del acto jurídico es aparente; y es
parcial cuando sólo una parte del contenido es aparente, se refiere solamente a alguna
estipulación singular del acto.
La simulación relativa parcial se caracteriza por preservar la naturaleza del acto, ya que, el
acto aparente aún mantiene la naturaleza del acto real en su exteriorización a terceros:
donación, compraventa, alquiler, etc. Y solo simula o aparenta ciertas estipulaciones o
cláusulas del acto real: precio, plazo, condición, cargo, etc.
Con respecto al primero, se alude a aquel tercero relativo que ha adquirido el bien, objeto del
acto simulado, mediante compraventa u otro, por el titular aparente o testaferro del acto
simulado. Ejemplo: A vende, mediante simulación, un bien a B, quien, burlando la confianza,
vende el bien a C que le compró de buena fe, esto es, en la firme creencia de que B es el
verdadero propietario. C vendría a ser el tercero adquirente del titular aparente (B).
Cuando hablamos del tercero acreedor del titular aparente, se refiere al tercero relativo que
tiene como deudor al testaferro del acto simulado, por ende tiene la legítima acción de
adquirir el patrimonio objeto del acto, ya que todos los bienes presentes o futuros del deudor
(testaferro en este caso) constituyen garantía patrimonial de su obligación. Ejemplo: X vende
simuladamente un bien a Y, para que luego se lo retribuya a Z; sin embargo, Y en su
condición de deudor con M, le retribuye el bien que M que de buena fe lo acepta. En este
caso M vendría a ser el tercero acreedor del titular aparente (Y).
Y por último, tenemos al tercero acreedor del enajenante aparente, que es el sujeto que tiene
como deudor al titular real, pero que este último, de mala fe, enajena ficticiamente sus bienes
a otro tercero. Ejemplo: A es deudor de B, y para no cumplir con su obligación, enajena de
manera aparente su patrimonio a C. En este caso, A vendría a ser el tercero acreedor del
enajenante aparente (B)
Entonces, si aquel tercero relativo que, desconociendo de la simulación realizada entre las
partes simulantes, adquiere un bien o derechos del titular aparente mediante un pago o
sacrificio patrimonial, no le sería oponible la simulación o se le podría impedir su efecto.