DISCURSO,

IMPUGNACION CATOLICA Y PIADOSA,

A ALGUNAS DE LAS PROPOSICIONES

del discurso, que sobre la extincion de monacales, y reforma

de regulares, hizo el 6 de Noviembre anterior en la Socie-
dad patriótica constitucional de esta ciudad el Abate,
ciudadano D. José Marchena, socio íntimo
que se titula de ella,

Y CONSEJOS UTILES,

QUE EN ELLA LE DA UN AMIGO.

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SEVILLA
IMPRENTA DE CARO HERNANDEZ,
1820,
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DESÍ.
 CIUDADANOS.

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y0ESnecesidad, y obligacion, en que me he consi
derado, á pesar de juzgarme tan escas o de conoc i-
mientos, me han obligado á tomar la «pluma para
,
presentarme á vosotros, cosa que nunca he hecho
haciéndome justicia, y conociendo mi poca ilustr a-
cion y disposicion: mas cuando llegó (quizá óporel
providencia) á mis manos el discurso, que recit
dia 6 de Noviembre anterior en la Socied pat rió-
tica, constitucional de esta ciudad el ciudadano, D.
osé Marchena, socio íntimo, que se titula de ella,
sobre la ley relativa 4 la extincion de monacales, y
reforma de regulares; cuando, repito, Jlegó á mis
manos tal discurso, me pareció muy bien que in-
teresase su talento, é instruccion en favor de lo dis-
puesto por el Gobierno, ya para cumplir con la
obligacion, que tiene todo buen ciudadano de con-
formarse con sus disposiciones, ya para acreditar
estas para con el pueblo ignorante, si se concep-
tuaba con opinion pública, y bastante para influir
en el vulgo, y ya finalmente para contrarestar por
favor del Gobierno á los que dice en su discurso
que opinan en contra, no obstante que no he oido
hablar 4 persona alguna contra la disposicion, aca-
“so porque vivo con demasiado retiro: mas cuando
para hablar de la citada ley, observé en su dis-
curso algunas expresiones, que nada tienen que ver
en
con la materia, 6 asunto de que principalmente
él se trata, y que por otra parte no me sonaba n
bien; despues de haber leido, y meditado sus €x-
 54]
presiones con aquella detencion, que exige su mu-
cho peso, y gravedad, me pareció que no faltaria
quien las contradijera, é impugnara, habiéndose es-
parcido tantos egemplares: pero cuando despues del
mucho tiempo, que ha pasado desde que se recitó
en la Sociedad, he visto que nadie ha impugnado
algunas ó muchas de las expresiones, que contiene
el tal discurso, he dicho á mi pluma lo mismo, que
nuestro sabio español Cervantes de Saavedra dijo 4
la suya, cuando escribió su Sátira Caballeresca; á
saber;
Tate, tate, Folloncicos,
De ninguno sea tocada,
h Que aquesta nueva aventura
Para mí estaba guardada.

La autoridad tiene su origen del mismo Dios: asi

lo dijo el mismo Jesucristo á uno de los jueces, á
quien fue presentado por amor á los hombres, como
reo, quien es la misma inocencia, verdad, y justi-
cia por esencia, cuando le dijo: no tendrias tú au-
toridad sobre mí, si no te se hubiera concedido de lo
alto: por esto, y porque esta autoridad de Dios re-
side hoy en nuestro Congreso de Cortes, vuelvo á
decir que el ciudadano Marchena ha hecho muy
bien en formar un- discurso en favor de lo estable-
cido por la autoridad legítima, para la extincion de
los monacales, y reforma de los regulares, y mu-
cho mas si sabia, que habia quien opinaba contra
lo dispuesto en la ley; pero si para esto se mezcla
en otras materias, y suelta proposiciones poco con-
formes con la piedad cristiana, ó verdaderamente
contrarias al dogma de una Religion protegida co-
mo única, y exclusiva de cualquiera otra por la ley
fundamental de la Monarquía; está fuera de duda
que si ha hecho bien en sostener y apoyar la dis-
posicion del Gobierno en la extincion de monaca-
 [5]
les, y reforma de regulares, tambien se ha degrada-
do mucho en materia de religion por las proposicio-
nes, que contiene su. discurso, que si aqui por modes-
tia, y no tener autoridad para calificarlas de blas-
femas Ó heréticas no se les da este nombre, siempre
son poco piadosas, por tanto, para guardar método
y buen órden. en cuanto sea posible, se sentarán á
la letra las proposiciones que parezcan. principales,
segun, y como se contienen en su discurso, y cada
una, despues de patentizar su error y de conven-
cerlo, se clasificará ó colocará en la especie á que
corresponda.
Despues de decir Marchena que la excelencia
de la ley (quiere decir la razon en que se funda
la ley) acerca de las órdenes de monacales de Es-
paña es tan palpable, que fuera cerrar los ojos á
la evidencia dudar de ella un solo instante: (hasta
aqui vamos bien.) Dice: por que ¿4 quién se pueden
esconder los perjuicios, que á España redundaban del
estanco de inmensas fincas en manos muertas, la po-
sesion de abundantísimas riquezas en premio de la
ociosidad , 0 de faenas totalmente imútiles para el
cuerpo social, tantos caudales sacados de la circu-
lacion, enterrados en lo interior de los santuarios, co-
mo si el oro y la plata fuesen mas preciosos á la
vista del que lo crió todo que el barro, y la arcilla,
como si tuviera el Eterno ojos de carne? Dice que
el Ser que vivifica la naturaleza entera, el gran De-
miurgos, (no sé por quién, ni á qué deidad se le
dió este nombre; solo sé que no lo he visto en lo
que he leido de sagrada Escritura, ni Santos Padres,
y de consiguiente estraño que al grande, único y
verdadero Dios se le nombre asi) zo aprecia en mas
los ricos metales que el lodo vil, porque ni se des-
lumbra con el brillo de aquellos, ni se recrea en con-
templarlos. Sigue diciendo: que los necios humanos
han prestado 4 la Divinidad sus mezquinas ideas:
 | | [6 ]
es verdad que el soberano Congreso de las Cortes,
luego' que cargó sobre sí el peso del gobierno, y se
encontró con un reino'sin erario, empeñado en mu-
chos millones, y con el tal cual egército que habia
sin pagar, 4 la manera que un prudente padre de
familias, cuando se ve en atraso, cercena muchos gas-
tos, aunque sean de su mayor gusto, por ocurrir á
otros, que aunque no lo sean tanto, son de mayo!
necesidad ; á ese modo en. caso de tomar recursos
se propuso, se discutió, y por último se acordó san”
cionar la ley de extincion de monacales, ocupar sus
caudales, y dar una pensitacion á cada monge, par?
su cóngrua sustentación; pero ¿qué tiene esto qué
ver con que el ciudadaho Marchena diga en su dis
curso que: la posesion de abundantísimas riquezas eran.
en premio de la ociosidad, 0 de faenas totalmente
imitiles al cuerpo social? Mas claro: en la opiniol
del autor del discurso los monges, y regulares so
una especie de gente ociosa, é inútil, y si en algo
€5”
se ocupa, su ocupacion á nadie es provechosa:
to no lo ha dicho el Gobierno, ni ba sido causa
motivo de la ley, sino lo que queda sentado; y de
aqui es, que asegurando antes que el autor de esté
discurso, 6 impugnación no tiene pariente algun?
monge, ni regular, ni ha sido, ní es amigo íntimo
de ninguno, le parece que está en el caso de mi
nifestar cuanto con referencia á muchos Santos PY
Alap. vers. 15 dres dice el doctísimo Alapide acerca de los reg!”
cap. 7. in Á- lares y monges, á saber: que la Religion es una e
poc. fol, 155» pecie de cielo terreno, paraiso, y templo de Dio
en la tierra, y que los religiosos, y monges son 40
geles terrestres y hombres celestiales: que tienen
Sus manos las palmas de su victoria, porque 2 pe
d
donaron, y vencieron al mundo, y sus vanida
porque gastan sus dias y vida en domar sus so0pa
nes, y porque los cláustros y monasterios
gares destinados para servir 4 Dios, y cuarteles
 [87 [7]
ph et 2 soldados espirituales: que los monasterios son el asi-
“lo del inocente, para perseverar en su inocencia, y
del pecador para huir de la.ocasion de la culpa, y
facilitarse los,medios, y. libertad para. hacer peni-
tencia: que los monges y regulares son los que ala-
ban á Dios dia, y noche en contínua. meditacion,
salmodía, y oracion, y que son una milicia angéli-
ca, siempre ocupada en las alabanzas de Dios: que
uu ua Som, aquella porcion escogida, á.quien Dios apacien-
a un a ta, favorece,y. protege, á quienes, como dijo Abra-
lero: han en otro tiempo,
les dice: no temas, que yo soy
Génes. cs 15. tu Dios,y tu premio eterno, é infinito: que los mon-
ges y regulares son aquellos, que no tienen hambre
usb pde delicias, ni: sed de, riquezas, y bienes terre-
le mus 205 Bos, que no conocen.
la ambicion, ni la codicia, por-
ad da as que todo
con.su- familia y: parientes lo renunciaron
Sup 2sinon Par la, soledad del cláustro: y por último dice este
oso Sabio autor citando á S. Gerónimo, que en los mon-
pugbro. ges, y regulares son comunes los sentimientos, ves-
tido, y, comida: quees comun Dios, la piedad, los
uo) premios, las contradiciones,,los trabajos y las vic-
212,7 torias. A: mas de esto ¿cuántos de estos hombres á
o costa de sus tareas, y. pervigilios mos han escrito
E Obras en todas materias, y ciencias, que cada una
ui coo. , en.su ramo. basta para hacerun sabio? ¿Cuántos
bios e han hecho sacrificio de sí mismos, por dar á cono-
ba... cer al: Crucificado á las naciones mas remotas, bár-
“ss io :barasy feroces, cuya tierra han regado con su
misma sangre? Y finalmente ¿cuántos de estos hom-
bres, entre los cuales ha habido hasta generales de
. egército, con sus oraciones, votos, y penitencias so-
Y or las de por sí,:Óó acompañadas con las de los demas
US ia en comunidad, han alcanzado de Dios para ciertas
personas, familias, pueblos, y aun para reinos en-
teros especiales favores, ó librádoles de muchos ma-
les? ¿Y á esta clase de personas llama Marchena
ociosas, y si ocupadas, estima sus faenas totalmente
inútiles al cuerpo social? Convenga pues en que lo
 | A o ES
-premeditó poco; queen su discurso trató de una
clase de personas, de que no tiene completo cono-
cimiento, y asi podrá escusarse de la nota que me-
rece semejantes proposiciones. +:
“Para no hacer fastidioso “éste: discurso, es me-
nester” omitir la burla ó sarcasmo picante que con-
tiene aquello de los hegociantes de indulgencias, que
por el oro vendian el perdon de los pecadosy la eter-
na: bienaventuranza:'omítase lo de que es cada co-
munidad 'monástica una “sociedad secretd, que es da-
ble,y aun presumible; se encueñtre en perpétua cons-
““piracion contra el Gobierno,y' que es muy: mas. te-
mible que cualquiera otra asociacion misteriosa, ex-
tendiéndoseá decir, no sin alguna libertad demasia-
-do' inmoral, é impolítica, que esta' reflexion tan ob-
“vía hubiera podido 'retraer d los legisladores de ha-
“ber dejado. subsistir ocho casas de monacales, que
podrán muy bien convertirse 'én armerías : omítase,
repito, “todo esto, cuya satisfacciones demasiado
¡sencilla 'y' facil, con 'Otras muchas cosas, que con-
tiene el discúrso de Marchena ,' y 'cotítinuemos el
órden de las expresiones que quedan señaladas.
Ha dicho este que son perjudiciales 4 la socie-
dad tantos capitales sacados de: la: circulacion, en-
zerrados en lo interior de los santuarios, como si el
Eterno tuviera ojos de' carne; como “si'el oro y la
=uplata fuesen mas preciosos dla vista*del que lo crió
todo, que el: barro y la arcilla: que los necios huma-
nos han prestado á la Divinidad sus mezquinas ideas,
y que los hombres han fingido constantemente á ÍM
Divinidad codiosa, como el mas avariento de sus se-
mejantes. ¡Qué impiedad! Estas: expresiones no $
pueden calificar ni entender de otra manera, ni €f
otro concepto que dirigidas contra el magnífico cul-
to, que en nuestras iglesias tributamos al verdader0
Dios, los que tenemos la dicha de serle fieles, Y
conocerlo, haciéndole ofrenda del oro, plata, Y
 [9]
“cuanto precioso poseemos, y de su liberal, y be-
néfica mano hemos recibido, juntamente con nues-
tros corazones, y afectos; y para satisfacer á esta
mezquina opinion del Abate Marchena, es menes-
ter, tomando la materia desde su origen, sentar
como principio, que como consta del sagrado y
canónico libro del Génesis, desde que Dios crió al
Hombre, su semejante, se le dió á conocer, co-
mo su Criador, su Dios, y Señor supremo, y
como tal le impuso leyes, y penas, en el caso
de quebrantarlas; y de aqui es, que en todos tiem-
pos ha querido su Magestad tener lugares deter-
minados, y seguros, para su culto, y adoracion;
esto ha sido, no solo desde que Cristo nuestro Se-
ñor vino á redimir al género hnmano, sí tambien
desde el principio del mundo. En la ley natural
Abel, Noé, Abraham, Jacob, Melquisedec , ofre-
cieron á Dios sacrificios en aquellos lugares, donde
tenian erigidos altares para las oblaciones; los que
abora llamamos templos.
En la ley de Moisés, ó ley Escrita, al descen-
der los israelitas al Desierto, les mandó Dios que
£
fabricasen un templo portátil, para ofrecer en él
Cap. 12.v,13. sacrificios, y holocaustos, y en el Deuteronómio les
dice: guárdate, y cuida no ofrezcas tus holocaustos
en todo lugar, que vieres, sino es en aquel, que Dios
Lo, 3. Cap. 7. ha elegido. En el sagrado libro de los Reyes, se
hace mencion de aquel magnífico templo de Salo-
mon, cuyo esplendor, magnificencia, y riquezas,
fue el asombro del mundo, y lo santificó el mismo
Dios, para que su santo Nombre durára allí eter-
namente. bi ris
En la ley de gracia, se erigieron templos desde
los: preliminares: de la Iglesia, como afirma S. Pa-
blo, llamando iglesias á aquellas posesiones, que te-
nian en todos los lugares, en los cuales se celebra-
ban los divinos misterios, y se hacian sacrificios,
| 2
 [10 ]
Lib. 10. San Clemente, refiere que Teofilo Antiochense, hom-
bre poderoso, y rico, fabricó una iglesia suntuosa
en sus mismas Casas, donde puso su Cátedra el
Apostol S. Pedro, y predicaba la ley Evangélica.
Lib, 2. Eusebio Cesariense dice en su Historia Eclesiástica,
que en todos los lugares tenian los Apóstoles, Dis-
cípulos del Señor, y convertidos sus casas de ora-
cion (lo que asegura con muchos del tiempo de
los Apóstoles) no tan espléndidas como en estos
tiempos, cuya estrechez y temor duró hasta el tiem-
po de Constantino Magno, que concedió ámplia fa-
cultad en todos los lugares, para que edificasen
iglesias suntuosísimas, templos magníficos, y el mis-
mo Constantino edificó muchas Basílicas en Roma,
cabeza del orbe cristiano.
Tenemos hasta aqui, que desde que hubo hom-
bres, en todos tiempos, respectivamente ha tenido
Dios lugares, Ó templos, destinados para que el
hombre le tribute culto, adoracion, y ofrendas: va-
_mos ahora á hacer ver que estos lugares ha que-
rido Dios, y manifestado expresamente, que sean
santos, sagrados, y dignos de todo respeto, y ve-
neracion. Del sagrado libro del Exodo, consta que 7

Cap. ro el mismo Señor mandó á Moisés que consagráras

no solo el Tabernáculo, si tambien el altar, vasos»
y todos los demas ornamentos, é instrumentos, per-
tenecientes al ministerio de los sacrificios. En-la ley
Natural está la escala de Jacob: y despertando, t0”
«mó la piedra, en que habia reclinado la cabeza;
la ungió, y consagró, llamándole lugar santo, cas2
de Dios, y puerta del cielo, segun que asi es ex”
Cap. 28. preso en el Génesis. A la vuelta de Mesopotamí3
- de Siria junto á Betbel;, se apareció el Señor 4 Ja-
cob, le bendijo, y le puso: por nombre Israel, Y
“Jacob en señal de aquel beneficio, eligió, y alz9
por título una piedra en el mismo lugar, donde
Dios le habia hablado; sobre él ofreció sacrifició»
derramó oleo (sombra de la consagracion de los tel
 [1]
Cap. 25. plos) segun es expreso en el Génesis: de todo lo
que se infiere, que el templo, como lugar señalado
para el mismo Dios en la tierra, fue, €S, y será el
mas santo y respetable.
Tratemos pues ahora, por qué los templos y
santuarios, no solo han de estar siempre decentes,
sino que, si es posible, todo cuanto en ellos haya,
debe ser maguífico, y espléndido: ya dejo dicho de
aquel magnífico templo de Salomon, cuyo esplen-
dor y magnificencia fue el asombro del mundo, y
que el mismo Dios, santificándolo, aprobó su mag-
Cathed. 24. nífica suntuosidad; y ahora digo que $. Cirilo dice,
que se deben edificar, y adornar los templos con
la mayor esplendidez que sea posible: S. Ambro-
sio encarga á los sacerdotes el mayor culto y her-
mosura en el templo. En el Africa, en el tiempo
de Magencio, habia infinitos ornamentos en las
iglesias de oro y plata. El Emperador Constantino,
cuando enviaba limosna para los pobres, lo prime-
ro, que encargaba , era el adorno del templo. El
altar que consagró á S. Esteban, lo hizo clavar
con clavos de oro, colocando en él seis coronas de
oro, y seis lámparas de lo mismo.
Ahora bien, Dios, el grande, único, y verda-
dero Dios, (4 quien el Abate Marchena llama en
discurso el gran Demiurgos) no tiene ojos de carne,
ni con su grandeza y divinidad son compatibles las
mezquinas ideas de los flacos mortales; (con esta
«novedad nombra á los de su especie, aunque sea á
costa de confundirlos con cualquiera bestia, ó ju-
mento) todos los que son hijos de la santa Iglesia,
reia de las gentes, saben que Dios, como Criador
de todo lo: que tiene ser, y de cuya mano bené-
fica, y liberal todos han recibido cuanto tienen, no
necesita de nadie, ni de nada; y. apesar de esto, y
de: que para Dios en «cuanto ente,:ó substancia en-
titiva, es lo mismo el lodo que el oro, y este que
 [12 ]
aquel, es lo cierto,.que en nuestrros santuarios hay,
y debe haber suntuosidad , magnificencia, y rique-
zas: ¿y por qué debe ser esto asi, preguntaré yo
al Abate Marchena? Y cuando este no responda,
convencido de cuanto dejo dicho, respectivo á las
edades bel mundo, ó leyes Natural, Escrita, y de
Gracia, de cuya autenticidad, y fe divina no pue-
de dudarse, se le dirá que Dios solo es capaz de
conocerse á sí mismo en cuanto á su ser, atribu-
tos, y perfecciones: que solo él con su infinita sa-
biduría puede conocer, y ponderar. como verda-
derameñte son, los beneficios, que ha hecho porel
hombre, sacándolo de la nada al ser, llenándolo de
honor, y gloria, y haciéndolo superior á cuantos
entes hay criados en la naturaleza, como lo ha di-
Psalm. 8. cho David: en cuanto á los beneficios infinitos, é
incalculables al juicio, y talento humano, que Dios
ha hecho á los hombres en cuanto á la redencion,
y vocacion, es mejor á mi juicio dejarlo á la pie-
dad cristiana, que tratar de persuadirlo en este dis-
curso.
Es decir esto, que de parte de Dios hay un de-
recho infinito á ser amado, servido, y honrado con
culto interno, y externo; y que de parte del hom-
bre hay una obligacion infinita 4 tributarle todo
amor, obsequio, y servicio; de aqui es, que las ri-
quezas que el Abate Marchena llama enterradas en
los santuarios, acaso para dar 4.entender que á na-
die sirven, las que son, y si se reunieran en un so-
lo templo todas las riquezas, y preciosidades ,que
hay en todo el mundo, todas ellas no: bastaban á
cumplir la infinita obligacion que tiene el hombre
de dar culto á Dios, con actos externos, y que las
que hay, no solo no deben estimarse inútiles, como
los tesoros enterrados, sino que todos opinamos, Y
debemos opinar, que no hay riquezas, ó preciosl-
dades de mejor uso, y destino que las, que sirven
 Par? [15]
en los templos al culto de su Criador;.de lo que se
infiere, que las expresiones que dejo señaladas en
lo material de sus palabras, son ridículas, y en lo
formal de su sentido, sino son esencial y verdade-
ramente impias, son poco piadosas.
Mas, dice nuestro Abate preguntando, ¿com
pudiera ser opuesto á la piedad, lo que es provecho-
so para el cuerpo social? Y concluye diciendo: por
tanto, si hay una. asercion, cuyos términos impli-
quen, lo.es afirmar, que lo que.es contrario al dr-
den social, puede prescribirlo la Religion, 0 vedar
lo que aquel prescribe; este criterio es infalible, y
nio sufre excepcion ninguna. Ya he dicho no es mi
ánimo calificar su escrito en toda su extension, si-
no solo en lo que me ha parecido, que se opone
4 lo piadoso, y religioso; y por tanto, estas pro-
posiciones, asi puestas en abstracto, y sin sujeta ma-
teria á que contraerlas, no es facil graduar todo el .
fondo, y extension, con que se hayan puesto en un
-escrito, Ó discurso tan capcioso, y lleno de maqui-
nacion poco piadosa: por tanto, parece no hay ne-
cesidad de detenerse en ellas.
-—Coñtinúa el Abate orador, diciendo: omitiremos
aqui la indagacion, de si siendo la Religion en gene-
ral la coleccionde relaciones, imaginarias en las fal-
sun sdsy reales en las verdaderas, del hombre con Dios,
dictadas «por la conciencia, y el convencimiento, pue-
aude. el Estado regularlas, y prescribirlas. Esta cues-
tion no la dice él por sí, pero lo hace por otros,
diciendo:que los mas de los filósofos, y estadistas
piensan ,que estas materias (de religion) ó son su-
««periores á las leyes humanas,:Óó estan exentas de su
jurisdiccion: en una palabra, esto quiere decir, te-
niendo.en consideracion,.Ó no, lo que queda dicho
en el fin desu párrafe anterior, que nuestro Con-
greso de Cortes no ha ténido autoridad para po-
.ner la Religion Católica por la del Estado, exclu-
 j [14]
-siva por “artículo de Constitucion: lo funda, en que
el: pensamiento es por esencia libre, segun los mis-
mos filósofos, y en que el fundador del cristianis-
mo envió á sus discípulos en medio delos gentiles,
sin vedarles nunca el trato con“ellos,:y que él mis-
mo obró prodigios con la:Samaritana, el Centurion,
y la Cananea, cismática aquella, y estos idólatras:
esto. prueba, que Jesucristo, y sus Discípulos, tra-
taban “al gentil, al idólatra, y al pecador, para
atraerlos al conocimiento dela: verdad : lo mismo
ha hecho siempre la santa Iglesia: nuestra madre,
enviando ministros apostólicos á todas las partes del
globo, para que den á conocer al Crucificado, los
informen de la verdad, y santidad de su ley, de
“los cuales no'pocos han sido mártires, y gran par-
te de los diez y ocho, ó veinte millones, que re-
“conoce la Iglesia por tales, y-que con su sangre
han testificado la verdad de nuestra sagrada Reli-
gion, los cuales no solo avergonzaban, y confun-
dian á los tiranos, sino: que alcanzaron de Dios in-
- numerables beneficios para «ellos.
Sigue el orador Marchena su discurso, dicien-
do que: Jos que con el estudiode la legislacion po-
sitiva, reunen el de la filosofía de la jurispruden-
«cia, no pueden entender como violan los: derechos del
pueblo, 0. los de :alguno. de sus<conciudadanos , los
que creen que hay en Cristo una sola naturaleza, 0
Jos que atribuyéndole dos, admiten en éluna sola vo-
luntad. Asi habla este Abate, despueside haber di-
cho antes, que los que reunem estos «dos conocí-
«mientos, leen con asombro que se-use de violencia, |
y coaccion, contra los queen ciertos puntos de la
mas recóndita metafísica, (¿si dará este nombre
los artículos de fé? No me atrevo 4 asegurarlo) di-
sienten. de las opiniones,'que presumen los legisla-
dores 'ser:de la mayor parte de: la Nacion; pero
sea des esto lo que fuere: Esta'proposicion está re-
 [15]
¿oducidas:á) que, el que diga -uno,«que
en Cristo hay
“una sola naturaleza, 6 atribúyale otro,dos, no vio-
uv lándose-en ello los derechos.
del «pueblo, ó los de
algun ciudadano.,- el contrato social, en que se fun-
da la potestad de las leyes, no se puede extender
: ¿4 cosas:que ninguna conexion, tienen con el órden
131.5 ascivil:¡bueno!:¿Con:qué el. negar un artículo de fe
5: enpuna Nacion, cuyo: culto, y, religion es único,
y cumún á. todos; porque, asi estáadoptado por co-
mun consentimiento (que. es el. pacto social) no
violará los derechosde. la sociedad,.y de consi-
«guiente, los del. individuo;
como; parte de ella? Na-
¿dies me/pareces,
que. dirá. tal: yantes,¡sÍ, que será
'y¿-eastigado ¿el querlohiciere,. si no.«por,un tribunal
- privativo, porla jurisdiecion.ordinaria eclesiástica,
“si antes no se reconcilía con la Iglesia, y recibe
humildemente la penitencia:
ques le, imponga.
cssizono Pero detengámonos,4 observar las. palabras li-
n«terales de Marchena,:en,el. caso, propuesto. Dice:
, dos que creen en. Cristo una sola. naturaleza, 0 los
que atribuyéndole dos, Sc. Quien:habla asi, parece
os0que-implícitamenteda 4. entender queél cree una,
Yo nomas, y que las dos. las tiene .por atribuidas,
que:son las que tiene, verdaderamente, segun nos
«lo enseña, y asegura: la-fe: mas dejando esto para
que lo jgzgue el que penetra el: corazon de los
hombres, es lo cierto, que su.modo de hablar es
como, opinable sy todos. sabemos. que: la opinion,
«envuelve duda : «y. preguntaré ahora; ¿quién opina
que en Jesucristo hay una sola-naturaleza? ¿Quién?
¿Nestorio? ¿El herege, é impio Nestorio, que flo-
reció el siglo quinto de la Iglesia, y dijo, y sos-
tuvo, que María ¡Santísima fue: Madre de Cristo,
pero.no Madre de Dios, por cuya blasfemia fue
Ub. 1. Hist. su lengua comida de gusanos, segun lo refiere Eya-
Pp. 7.
grio? Pues sepa el Abate Marchena, que en ma-
teria de dogmas no hacen opinion los hereges, y
 [16]
mucho. menos: enla materia que negaron, y por la
que' se separaron de-la Iglesia, y quizá tampoco
harán opinion en las materias morales, cuyo punto
no estamos en el caso de apurar. Y por último,
segun los filósofos jurisperitos, resuelve Marchena,
que no es menos absurdo obligar á. los individuos
de la sociedad, '4 que admitan como verdadero ul
código de ideas religiosas, sea el que fuere, qué
-obligarles 4 que 'admitan un sistema de historia
natural, ó de física, el de las moléculas orgánicas,
ó el del ovario;de suerte, que si antes' ha dicho,
con referencia 4 los-mas de los filósofos, ó esté”
distas'; que las materias de 'religion, -Ó son supé”
“riores 4 las leyes humanas, ó estan exentas de
jurisdiccion; y ahora dice, que es un absurdo P%
ner 4 los individuos de la sociedad un código 4*
ideas' religiosas, sea cual fuere, no queda duda en
que reprueba, que el artículo de Constitucion ns
ga Religion del Estado,la católica, con exclusiof
de otra: y siesta no es del gusto, ni se conformá
con la opinion de Marchena, apesar de ser tan P'
ra en su moral, tan justa en/sus preceptos, y, Y
- que su divinidad, y el ser dictada por el mismo
“Dios, se persuade por ella misma ¿qué religion “
la que quiere ese filósofo pervertido, ó poco piado”
so? No lo expresa; pero bastante dice con esto:
quiere ,segun se deja traslucir, y entender, qué 4
- Nacion Española, ó no tenga religion propia ap
que si tiene la Católica, no sea exclusiva: m4* € el
€5 ques
ro: parece que lo que quiere Marchena, todos E
judio, €l herege, y el ateista, y demas,
dieran estar, y cupieran en nuestra amada spal El
lo cual sería monstruoso : lo primero, porqU*
pacto social, que tanto decanta este Abate, €2 * y.
tro reino, consiste en la unidad de culto: lo $ ci2
do, porque gentes de distinto culto, y. creen m
por lo regular son de distinto moral, y est es
 [17]
0] influye tanto en: lassóciedad) es de presumir, que
la: alteraráy ly ¡pertubará;clo cual'se verificaria con
el judio:por un: órden extraordinario, porque sien-
do enemigo nuestro.,y verdaderamente contrario,
los «actos de» religion suyos; serian un' escándalo, é
insulto para. nosotros, y ¡ponsel «contrario los nues-
tros para .ellos;. y ¡lo tercero; porque:los hijos de
la gran Señora de:las gentes, que lo es.nuestra Ma-
«drela Santa Iglesia, nose deben:mezclar, ni con-
«fundir: con los hijos:de las «esclavas, que lo son to-
dos 'aquellos:que estanfuera: de su,gremio, y uni-
dad, cuya separacion: está representada, en el cui-
: dado :que tenias Sara en. que: sus ¡hijos estuviesen see
parados delos de los de :la esclava Agar.
puc Sigue Marchena su discurso, diciendo que ya que
la; Nacion
ha 'erigido. Religion
del Estado la Cató-
wo lica, le incumbe «velar. con .infatigable zelo, para
que so color de cristiana piedad ,hno-se acrediten
máximas de moral que dañen al órden social: (¡que
ciudadano tan celoso!):y despues de'haber pegado
¿4 suvdiscutso aquello de: dad:al Cesar lo que es del
Cesar , y.á Dios loque es de Dios, en cuya con-
gruencia, y, oportunidad ¡no-ha habido para que de-
i tenerse. Dice que: la: salvación eterna: del hombre es
obra de Dios solo, y que, si los que gobiernan qui-
Sieren poner mano en ella, serán dignos de castigo:
en que la potestad civil: no se «dirige principrimen-
te á que los hombres se salven, estamos conformes:
aunque tampoco le está prohibido, antes pot el con-
trario, debe castigar la contravencion á la ley di-
vina, cuando loque esta. prohibe, lo prohibe aque-
Jla, 6 convienen una con lo que manda, ó prohibe
la otray pero aunque la potestad civil no cuide prin-
cipalmente de la salvacion eterna del hombre, no
es verdad que la salvacion de este sea obra de solo
Dios; aqui toca el Abate aquella cuestion , qUe S0-
3
 l [ 18 ]
abre la) predestinación tratan con mucha escrupulo-
sidad los: Santos Padres, y Teólogos, por ser mate-
ria grave, y delicada; mas sin que sea visto que un
- hombre de nuestro.estado usurpe sus derechos á los
sabios :Doctores, á: quien solo corresponde hablar de
' ¿materias tan graves, obligados de la necesidad en
que nos “ha puesto este Abate, diremos: que no es
cierta, y que cuando: menos esimpia la proposicion
de que: la salvacion. eterna del hombre es obra de
Dios solo:lo primero, porqueesta. proposicion no
se conforma:
y. es:contraria.á aquel artículo de fe,
que nos enseña. queuel dia: del ¡juicio ¡universal ven-
drá segunda vez':al mundo Jesucristo 4 juzgar vi-
vos, y muertos, esto es, justos, y pecadores; y que
unos serán salvos, y predestinados, porque guarda-
- Ton su-santa ley, y mandamientos, y otros serán
“==condenados, ¡porque no los guardaron ;.esta razon,
de por qué guardaron, Ó'no:los mandamientos, su-
pone ¡necesariamente méritos de parte del hombre.
y falsifica:que su salvacion «eterna sea obra de solo
vDios: lo:segundo,, porque si-la salvacion eterna del
: hombre fuera obra de solo Dios, ¿4 qué la imposicion
de leyes,
y mandamientos, si :porguardarlos, Ó
quebrantarlos, usando de la libertad que se le dió, no
habia de merecer, ó desmerecer? Es cierto que Dios,
para quien no hay pasado, ni futuro, porque á su
infinita sabiduría, y comprehension todo es presen-
- te, desde su eternidad ¡nos tuvo á: todos presentes,
y supo si nos habiamos de salvar, ó condenar; pe-
ro esta preciencia de nuestra salvacion, Ó condena”
cion la tuvo, porque tuvo tambien la de nuestras
virtudes, Ó pecados; de «suerte, que. aunque Dios
sabe la. salvacion, Ó condenacion de todo hombres
-no es por un modo de decreto absoluto, sino con”
dicionado , porque sabe si ha de corresponder, ó n0
á la gracia, y auxilios, y si usando de la libertad,
 [19]
que le ha:dado pata que élija*el bien, ó el mal,
“ha de usar,
:ó abusar de'ella: yolo tercero, porque
en esta materia, nada es mas. comun á todos los
Teólogos, y Santos Padres: que aquel. axioma, ó
¿Esprincipio: que dice, )y nos. enseña-4 “cada 'uno: que -
> el que te crió 4 tés sinivé nóute salvard d tí sin tí.
“Basta: lo dicho para acreditar, que,siino es herética,
es impia la proposicion sentada. :
Otras'cosas dice el. ciudadano Marchena en su
1 discurso,
que ttodasslas +omite
el antor de este, ya
¿15 porque'estan' contenidas:€n
las proposiciones impug-
nadas;' ya porque ho' se 'opohen al:dogma, ó dis-
ciplina católica; y ya por'convertirse: á él como
«¿quien lo'conoce, y ama mas que lo que él piensa,
243 no ya revestido del-odio que ha concebido, contra
“00 sus proposiciones, 'sino poseido deaquel amor dul-
2b 20 ee, y dulzura amorosa que nos:iospira la Religion
- +4 los cristianos, cuando vemos grandes yerros en
pr! nuestros hermanos: sí, Marchena mio, está en que
do oil! te amo,y en que soy tu amigo fiel, y la cosa mas
Ea 95 oumátil, cuando. por! mi oficiosidad, y sin otra causa
3 isque!la devtu bien; trato de reparartu mal, como
Tomas Moro. lo“dijo: un cristiano poetaen este verso:
Pd . 113 TIL j ] . J -

+ Utiliús nihil esse potest quam fidus amicus,

poes 21 Qui tua damna
suo lentat “oficio.
n POTIO 2O0TUOTTTS Y USDIT ¿Bl

Mp Tú, como sabio letrado, y humanista, sabes muy

Lip,8. Ethic. bien, que segun el filósofo' Aristóteles, el amor tie-
| ne, ó se dirige á uno de tres fines, que son, á lo
deleitable, á lo útil, 6 4 lo honesto; cuando el amor
se dirige á los dos primeros fines, dura poco; cuan-
do se dirige á lo honesto, es verdadero, y perpé-
tuo, y asi es el mio para contigo; y en su recono-
cimiento, y buena correspondencia, solo quiero que
me ojgas, y respondas á esta pregunta: ¿eres tú
 [el 7 [ 20 ]
aquel Marchena, «hijo «de: un' sabio ::letrado , y
perfecto; católico, que luego que fuiste capaz, te
Dios que te habia criado,
dió 4: conocer-al: .
te
informó-de su Ley: santas, de sus. Mandamientos,
. yA

¿y Misterios? ¿Eres/túsaquel:¡Marchena;, infante, que

. “apenas tenia seis. años, á quien llevaba el ayo, 0
yA

, pedagogo García4 Jas casas 'principales de tu pa-

tria para 'quelas gentes gustasen dde oir á un niño
de aquella edad ,icon la amayor. compostura, y con
olas) palabras ¡mas «claras, y «devotas explicar los mis-
y. terios mas: profundos «nuestra sagrada: Religion con
«toda aquella: claridad de; que ellos:son susceptibles?
¿Erestú aquel Marchena,' de quien no sin funda-
mento todos creian, que eras una de aquellas cria-
turas felices,4. quien Dios previene,con gracias an-
- ticipadas,y particulares, porque-los destina á un
eminente grado desantidad, Ó 4 otros fines de su
providencia? ¿Eres «tú, finalmente, aquel Marche-
na, que aun en. la: primera gracia; é inocencia
te reputabas por grande pecadors: por: indigno de
o amar, y. servir á tu: Dios , indigno de me-
«y.¿mas
“ recer sus promesas, y premios? ¡Ahi:¡ah! ¡ah! TÚ
eres aquel, pero. no pareces el mismo!; .«aquel:.er2
fiel, y creyente, y tú parece que estás enfermo de
incredulidad: aquel creia en un Dios Trino, y Uno;
Trino, y distinto en.las personas, y uno en la esen”
cia, divinidad, y atributos; pero tú (que se yo, 0j2”
lá que me engañe) temo, y recelo que sigas la equ'
vocada opinion de los que creen un Ser Supreim0
sin estas esenciales cireunstancias, y esto lo confió”
san, porquese alcanza 'con la razon natural; 00
obstante que hasta esto negó el impio Epicuro, CU”
Sapient, C. 2. ya religion, y creencia se reducia á este verso, €
V. 10» gun Alápide: |

Ede, bibe, lude, post mortem nulla voluptas:

o
 [21]
Es decir: come, bebe, diviértete, y date 4 delei-
tes, que despues de la muerte, no hay penas que
temer, ni bienes que gozar. ¡O pérfido Lucifer, por
qué ¡medios tan: extraños has logrado que tantos
hombres no hayan ocupado las sillas que tú perdis-
te por tu soberbia!
Mas ahora, Ó caro amigo, ¿por qué pareces hoy
distinto del que eras en tus primeros años, Ó por
qué piensas de otro modo? La razon es clara, por-
«que has estado en reinos estraños, donde la Reli-
«gion católicano era' exclusiva, donde (en mi con-
«cepto)separado de la fuente, donde se bebe el agua
eristalina, de la doctrina mas pura, has bebido en
las. cisternas disipadas, é inmundas del error, é in-
credulidad, y. á: mi ver, este, y no otro es el ori-
gen de tu mudanza; y. de aqui es, que sin embar-
go de haber dicho un autor agudo, y. sentencioso
que los hombres son buenos, ó malos segun las pri-
meras ideas, y conocimientos que conciben en su
infancia, como lo expresó en este verso:
2 «Omnia cepto tramite vadunt,
Primusque dies dedit extremum.
.. No obstante, tú has sido excepcion de esta regla,
¡¿y ono hubiera sido asi, si hubieras sido mas cauto
en' evitar la leccion de libros emponzoñados , que
dictados por el autor de la mentira, y del engaño,
con la sal de la agudeza, y dulzura de expresio-
nes, atraen la voluntad; y cautiva esta, pocas ve-
ces vence el entendimiento, y por eso en ciertas
cosas aquel es mas aguerrido soldado que mas hu-
ye, y aquel que evita la ocasion consigue la ma-
Suarez,
yor victoria, como lo dijo un cristiano poeta en esta
-Quintilla:
Huye, huye la ocasion,
 [22 ]
Que no serás en la lid
Mas sabio que Salomon,
Ni mas santo que David,
Ni mas fuerte que Sanson.

Paréceme que estoy en el caso de recordarte,

Heres. 26, amigo mio, que la heregía, segun: S. Epifanio, ha-
blando de los gnósticos, es, y consiste no solo, se-
gun este Santo Padre, en blasfemar 4 Abrahan, Moi-
sés, Elias, y á los Profetas, sino al mismo Dios que
los hizo Profetas, como lo hicieron los Arrianos,
Macedonianos, y Sabelianos, cuando no entendien-
do el misterio de la Beatísima Trinidad, lo negaron,
y blasfemaron, los Calvinianos, y Zuinglianos, no
entendiendo el misterio de la Eucaristía, lo niegan,
y blasfeman, porque los hereges solo creen lo que
alcanzan, y entienden; la heregía tiene tres cau-
sas, Ó fuentes de donde nace, á saber: soberbia,
ligereza de ánimo, y «concupicencia; cuyas cuali-
- dades, segun los Mitólogos, hacian á aquel mons-
truo, llamado el Sphinx, enigma de la ignorancia,
que pintaban con cara de doncella, alas de ave, y
pies de Leon, que en no pudiendo satisfacer al enig-
ma que le presentaban, mataba al que se lo pro-
Emblem. 187. ponla; de cuya monstruosa bestia trato'Alciato pre-
guntando : ¿qué monstruo es este? Y “se responde:
es el Sphinx: y vuelve á preguntar: ¿por qué tie-
ne cara de doncella, alas de ave, y pies de leon?
Y se respondeá sí mismo: porque este es el aspec-
to, y presencia que ha tomado la ignorancia, Y
este es el triple origen, y causa de mal tan gran-
de; porque á unos los hace bestias, é ignorantes 12
ligereza del ánimo, á otros la concupiscible, ó vef-
gonzoso deleite, y á Otros la soberbia del corazon:
todo se contiene en estos yersos: |
 [23]
Quod monstrum id? Sphinx est; cur candida virginis
ora, A
Et volucrum pennas , crura léonis habet?
Hanc faciem assumpsit rerum ignorantia, tanti
Scilicet triplex causa, et origo mali-
Sunt quos ingenium leve, sunt quos blanda voluptas,
Sunt et quos faciunt corda superba rudes,

Esta es la heregía, é incredulidad, amigo mio;

en ella pocas veces deja de concurrir uno, ó mu-
chos de aquellos seis pecados, que porque contie-
nen cierta malicia contra la bondad de Dios, se
llaman pecados contra el Espíritu: Santo, y segun
ln Math. c. 2. el doctísimo Alápide son seis, á saber: presuncion,
y, 31.
- desesperacion, contradicion de la verdad que co-
«nocen, envidia de la caridad fraterna, impeniten-
cia, y obstinacioy. Se estremecen las carnes á quien
no tenga la fe apagada, en considerar el mal tan
grande que es la heregía, la impiedad, y la incre-
dulidad. ¡Ojalá, caro amigo, que las expresiones de
tu papel sean efecto de haberlo meditado poco, y
que no sean sentimientos de tu corazon!
Ya te he dado un bosquejo muy superficial de
la fealdad de este monstruo, y ahora te digo, que
la Iglesia nuestra Madre, Esposa de Jesucristo, en
diez, y ocho siglos que cuenta, poco tiempo ha care-
cido de esta clase de perros que le ladren; apenas ha
habido siglos, ó han sido muy pocos, en los que
estos abortos del averno no le hayan hecho contra-
diciones de varios modos, mas ella, como Reina, y
Señora de las gentes, inmutable á todos los ha vis-
to nacer, hacerse de su partido, y prosélitos, y
morir sin que todos sus esfuerzos, ni conatos la ha= -
yan. alterado ni un ápice ni en el dogma, ni en su
moral, ni en la pureza de su doctrina; por el con=
trario sus enemigos, no solo no han conseguido, ni
 [24]
conseguirán ventaja de ella, sino que si vinieran
sus inventores Arrio, Calvino, Lutero, Eutiques, y
demas canalla, no conoceaian los errores que inven-
taron, porque es tanto lo que en ella han quitado,
“y puesto, que ya no tienen mas que el nombre de
su inventor; ¿y qué te parece, amado Marchena,
que se deduce de aqui? Está claro: que las sectas
son obras de hombres, y de consiguiente, altera-
bles, mudables, é insubsistentes, y que nuestra Re-
ligion santa es obra de Dios, y por eso á pesar de
tener algunos misterios impenetrables, no ba teni-
do, ni tiene, ni podrá jamas tener mudanza, ni pre-
valecer contra ella las puertas del infierno.
Dios nunca ha mirado con indiferencia los ul-
trages, y contradiciones que los gereges han hecho
4 su amada Esposa:la santa Iglesia, antes sí en es-
te mundo ha ostentado su indignacion, y justicia
contra ellos, y todos los de:que he adquirido no-
ticia para probar esta verdad, han vivido pooo,
han muerto desastradamente, y se han condenado.
Simon Mago, del siglo primero de la Iglesia, en
virtud de su mágica, y pacto con el demonio vo-
ló, y por medio dela oracion de S. Pedro cayó
desde el Capitolio, se quebró las piernas, y espiró»
Lib. 2. contr. Asi lo refiere Arnobio, y S. Máximo. Montano con
gent. sus Profetisas, se ahorcó segun Eusebio. anes, he”
Homil. 5.. de rege del siglo tercero, que se llamó Maniqueo, fut
Nativit. SS.
Pet. et Paul.
atenaceado por el Rey de los Persas, porque ha"
Lib. 5. c. 16. biéndose comprometido 4 enrar á su hijo, lo mi”
Hzres. 66. tó; lo cuenta S. Epafanio. Los Donatistas, porqué
arrojaron la sagrada Eucaristía á los perros, fuerol
Lib. 2. contr. despedazados por ellos; lo refiere Optato. .4rf%
Parmenion. yendo á la iglesia para robar sus riquezas, le ac”
metió un dolor de vientre, y en la excresion arto”
Lib. 10. Hist, JÓ los intestinos, Ó entrañas, y con ellos el al?
Lap. 13, para arder en los infiernos: lo trae Rufino. Fuliantr
 [25]
Emperador, apóstata, murió atravesado de una sae-
Orat, 1.in Ju- ta, Ó lanza, que cayó de lo alto, segun lo refiere:
han, S. Gregorio Nacianzeno. Prisciliano, fue muerto:
- Epist, 2..Petri por Máximo el Tirano, segun Alápide. Leon, Ar-
C. 2. Vi Io menio Iclonocasta, y uno de los hereges que resis-
tian que 4 las santas imágenes inanimadas se les
diese culto, murió violentamente en la misma igle-
Loc. citato. sia, segun refiere Alápide. El Emperador Heraclio
Monotélita, sufrió una muerte repentina, é inmun-
4. Diálog. c. da, como lo cuenta S, Gregorio. Valente Arriano,
30. vencido de los Godos, habiéndose acogido á una
barraca, Ó choza, fue quemado en. ella, segun lo
In Coronicon. . refiere S, Gerónimo. Vestorio, en el siglo quinto
negó que la: Santísima Virgen era Madre de Dios,
y dijo que solo fue Madre de; Cristo, y por esta
blasfemia fue su lengua comida de gusanos; lo re-
Lib. 1. Hist. fiere Evagrio. .Hunerico, herege Arriano, persegui-
e dor de los cristianos, fue comido de gusanos, como
Lib..1. Wan- lo refiere Victor. Anastasio, Emperador Eutiquia-
dal... “no, fue muerto ¡por un rayo;lo refiere Pablo Diá-
ln ejus; vita., cono. Lutero despues, de cenar fue; abogado, y so-
Eod. loco; :focado , como lo dice el mismo autor. Zuinglio en
“la guerra helbética, habiendo: prometido desarmar
á los:cristianos , fue: muerto, por, ellos. _4ndres Ca-
rolstadio fue arrebatado. por los demonios; lo dice
Loc. citatos... Alápide. Calvino, que vivió en el.siglo. diez, y seis
como Herodes fue comido de gusanos, y murió en-
tre las blasfemias,. y la, desesperacion; lo refiere
ln ejus vita. Bolseco : y todos .estos, y mas trae el sapientísimo
: *¡19, V. 24. Alápide en.el lugar citado,y en el libro del Apo-
¡ calipsis.
Todos. estos
y.tantos
, mas, son los que condu-
.cidos.por la concupiscencia, figurada en la cara de
doncella, por la: ligereza de su ánimo, figurado en
las alas, y por la soberbia, figurada en los pies de
leon, que tenia la. .bestia Sphinx,
pe segun los Mitó-
 [26 ]
logos, han combatido por tiempos, pero en vano á
“la Esposa del Cordero, y Nave mística, la santa
Iglesia; fuera de la cual: no' hay' salvacion , como
tampoco hay verdadera fe sin 'obedecerla, y: ren="
dirse 4 ella. Ella es verdaderamente el depósito de'
las verdades de nuestra Religion , y del espíritu del
Crucificado; el que no la escucha debe ser tenido
por publicano; sus preceptos son leyes, sus reglas
“decretos, sus decisiones oráculos, resistirse á obe-
- decerla', es lo mismo que arrostrarse, y oponerse
al mismo Dios. Ella es sobrenatural á sus dog mas
(4 los que los impios llaman' recóndita metafísica)
santa en sus máximas, y respetable en sus leyes:'
¡qué dicha, qué beneficio haber nacido en su seno,
haber sido alimentado con su leche, esto es, con
“su doctrina, y poseer su luz'indefectible como nos
sucede.4 nosotros! Pero ¡qué desgracia no dar oi-
dos 4 sus voces, no ser dóciles 4 su voluntad, y
“dejando sus caminos, abrirse nuevas sendas -para
' caminar á ciegas, y sin guia, como les sucede £
os hereges, que todosse formaron una religion,Ó
ley orgullosa, extravagante, y de capricho! Nin-
guno se hizo sordo á las voces de- la Iglesia, que
al punto no se hiciese tambien' ciego. No se hace
mudo , pero parece que solo sabe hablar para ha-
cer notorio á todos cuanto se ha descaminado.
Es tan impenetrable, é invencible nuestra sa-
grada Religion, que:no han bastado para alterar
sus dogmas, leyes, ni moral, todos los esfuerzos
de los hereges, y Sectarios; pero ni tampoco las
persecuciones que ha padecido. -Apenas habia na-
cido; cuando se sublevaron contra ella los judios
para sufocarla 'aun en la cuna: aun no tenia po£
discípulos mas que 4 doce pescadores sin nacimien”
to, sin nombre, sin estudio, sin apoyo humano;
aun no tenia mas que un puñado de “fieles, todoS
 [27]
“simples, groseros, y pobres, cuando los grandes del
mundo, los sabios: de la: Grecia; los Emperadores,
los Gobernadores ¡detodas las. provincias: cuando
todo el universo se conjuraron: contra ella, alboro-
tados por la incomprehensibilidad de sus dogmas, es-
¿pantados: de la pureza, de la santidad,:y de la aus-
teridad de su: moral, indignados á vista de la fla-
queza; simplicidad, y pobreza: de los predicado-
“res, y doctoresde Religion tan pasmosa, todos
conspiraron contra ella: horcas,:cadalsos, acúleos,
-catastas,' parrillas, fuego, fieras,:todo lo emplea-
+ ¿ron “contra los confesorés:del nombre:de Jesucristo:
“13¡pero: qué importa? Unos ton: firmeza; y constan-
cia. generosa, sufrian lo intenso de los tormentos
alabando al Crucificado, ofreciéndose 4 sí mismos
; en sacrificio: “otros despedazados ¡4 azotes con plo-
: 2madas, cubiertos de llagas, y destrozados sus Cuer-
pos; eran cerradosen los calabozos, donde por vir--
tud divina eran curados, y llenos de divinos con-
suelos para volver'de nuevo':4 entrar en la pelea:
unos eran metidos en el fuego, y en-calderas de
aceite, y pez ¡hirviendo, y. no eran. ni quemados,
“ni consumidos, sino que paseándose por las llamas,
ó como sí estuvieran en un deleitable baño alaba-
ban, y engrandecian á su Dios; y “¿aun le pedian
no'les 'negase la gracia de morir por el que habia
muerto por ellos: “otros eran “echados 4 las fieras,
y despedazados;'y: en otros se veia la maravilla de
+ olvidar estas la hambre,
:y ayuno,'en que estaban,
y perdiendo su natural fuerza y; lamer”, albagar 4
los confesores de Jesucristo, y postrarse á sus pies:
y de unos y otros se cuentan en la Iylesia mas de
diez, y ocho millones de Mártires, que quiere decir
testigos, que con su sangre han firmado la verdad, y
santidad de nuestra Religion, entre los cuales mu-
chos fyeron jóvenes de pocos:años, doncellas tier=
 [28]
3 nas, y delicadas, ó viejos decrépitos:,
“de cuya san-
'igreorenacian: nuevos confesores, é infinitas conver-
siones, que en multitud asombrosa decian, que no
habia mas Dios, y Religion verdadera que la de
los cristianos; en términos, que los tiranos se veian
en la ¡necesidad de abandonar. el campo por no
- verse confundidos, y vencidos.
- Ahora:bien; y siendo 'esto asi ¿es posible que
haya habido en el mundo hereges, ateistas, deis-
tas, materialistas, impios, é incrédulos? Vuelvo á
preguntar: ¿será posible que hayai-habido hombres
' que. para ser' tales, se separen:de la grey de la san-
ta Iglesía, Arca mística, fuera de la cual ninguno
se salva, y todos han de naufragar, y perecer? ¿Y
seria finalmente posible, que los hijos de la santa
Iglesia cambien la luz por las tinieblas, y la ver-
dad porel error? ¿Y que hayan de ser tan obs-
tinados, que de intento cierren los ojos para no ver
la luz, y tapen sus oidos para no oir la verdad?
¡O Dios, qué ingrato te ha sido el hombre, á quien
criaste de la nada, á quien redimiste á tanta cos-
ta, y mas que todos, aquel á quien no hiciste del
número de los llamados criándolo entre los genti-
les, sino de los predilectos, y escogidos, haciéndo-
lo planta del jardin ameno de tu Iglesia, donde lo
has cultivado con tus méritos, cuya virtud se co-
munica por. sus Sacramentos! Todas las naciones
del mundo te alaben y bendigan.
Y tú, Abate Marchena, ó. eres, ó no lo que
manifiestatu papel, ó discurso; si lo fueras te po-
dria yo decir lo mismo que el sapientísimo Juan
Obén, dijo en distinto sentido á un hijo de un' muy
“amigo suyo, cuando le dijo: que no encontraba en
él mas mérito que haber sido hijo de tal padre:

Juan Obén. Laus tua quod tanti filius patris eras.

 + [29]
PD Y
E

En cuyo: caso te compadeceria;,:y en señal de que

sentia tu desgracia (que verdaderamente lo seria, y
“muy grande, verte envueltoen: las sombras del
deismo, y su incredulidad )te repetiria aquella ele-
gia, enla cual el: P. Sidronio Hosquio, Jesuita,
“aconsejó á un joven atolondrado, que desenfrena-
+ damente se habia: entregado: á: los placeres, la que
¿concluyó diciéndole: vuelve atras, joven, no es ese
tu camino, vuelve atras, porque por ese camino
tantos han perecido, cuantos han caminado: como
se contiene en este versos": s-
»

Sidron, Hosq. Verte gradum, juvenis, non est tua semita, verte
Hac periere omnes quot: quotiere via,

-:o::Mas no:siendo'
tal, ni:sintiendo lo que escribis-
te, en recompensa del buen afecto que me debes,
por ser hijo de un padre, y abuelo tan letrados como
buénos católicos, permíteme que te diga, que procu-
res parecer lo que eres, y detestes, aborrezcas, y
huyas ser lo que pareces; que otra vez para hablar
en público te detengas, y premedites un poco mas,
para que no desaires los no comunes talentos con que
fuiste dotado: te vuelvo á repetir,-que las expresio-
nes de tu papel las aborrezco, pero á tí te amo: y en
prueba de ello me despido de tí con aquel verso
del poeta Ovidio, cuando escribia á su muger des-
de el Ponto:

Accipe quo semper finitur epistola verbo,

Atque meis distent ut tua fata. Vale.

Entre vosotros, mis caros, libres, 'é indepen-

dientes conciudadanos, se sabe bien, que si hubo
quien aplaudiera el discurso del Abate Marchena,
fue porque como las palabras pasan tan breve, no
 [30]
una simple lectura para penetrar todo su fon-
bastó
' dozmas luego que fue impreso, y leido con dete-
nida reflexion, es notorio que todos han dado una
prueba nada equívoca de su religioso desagrado,
mirándolo. con indiferencia, y quizá con desprecio;
lo cual no'obstante, me ha ¡parecido útil impug-
marlo; paraoque' sus expresiones ningun, efecto pro-
duzcan, aun en el: ánimo del mas sencillo, é 1g-
norante; por: lo: que «si en ello he acertado, mé
conceptuo ventajosamente remunerado con merecer
la pública aprobacion; y si he errado, espero sé
me disimulen mis defectos en recompensa de ml
buena intencion: Valete. 102 000
Todo cuanto ha dicho el autor de este discur-
so, lo sujeta 4 la censura de la santa Iglesia, y del
«Gobierno, á cuyo dictamen;«y opinion desde aho-
ra. somete el suyo. 0.0000 ¿93

SpA C
Este discurso es propiedad de su autor, sin CU”
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