Etica. Introduccion A Su Problematica Y-40-54

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40

 
 
 

 
El  alumno:    
 
• caracterizará   las   principales   ramas  
  de  la  filosofía;    
• situará  a  la  ética  en  el  contexto  de  
  estas   ramas   o   disciplinas  
filosóficas;  
  • comprenderá   la   naturaleza   y  
alcances  de  la  ética  como  disciplina  
  filosófica;  
• obtendrá   una   caracterización  
  general  de  la  ética,  de  su  objeto  de  
estudio  y  de  sus  métodos;  
  • comprenderá   y   delimitirá   el  
aspecto   teórico   y   práctico   de   la  
 
ética   y   relacionará   esta   disciplina  
v La  ética  como  disciplina  filosófica   con   otras   ciencias,   tales   como   la  
o Disciplinas  teóricas  o  gnoseológicas     psicología,  la  sociología,  la  historia  
o Disciplinas  prácticas   y  la  antropología.    
 

v Concepto  de  ética  


o Definición  etimológica  
o Definición  de  la  ética  por  su  objeto  de  estudio  
 

v Relaciones  y  diferencias  entre  ética  y  moral  


 

v  La  ética  como  teoría  de  la  moral  


o Ética  crítica  
o Ética  aplicada  (también  llamada  normativa)  
 
41  
 
v Normativismo  ético  
 

v La  ética  concebida  como  ciencia  


 

v Método  de  la  ética  


o El  método  inductivo    
o El  método  deductivo    
o Métodos  filosóficos  
 

v Relación  de  la  ética  con  otras  ciencias  


o Psicología    
o Psicoanálisis  
§ El  yo  
§ El  ello  
§ El  súper  yo    
o Sociología  
o Antropología  e  historia    
o Teoría  del  derecho    
o Ética  y  economía  
 

22 Ética: Introducción a su problemática y su historia

La ética como disciplina filosófica

Como ya hemos apuntado, la ética es una disciplina filosófica. De acuerdo con el tipo de
problemas que abordan, las disciplinas o ramas de la filosofía se han dividido en disciplinas
teóricas o gnoseológicas y disciplinas prácticas.
42  
 
Disciplinas teóricos o gnoseológicos
Estas disciplinas giran en torno a los problemas cognoscitivos. Aquí podemos ubicar a la teoría
del conocimiento o gnoseología (de la palabra gnosis, conocimiento y logos, tratado o estudio),
cuyos planteamientos se refieren a los modos, clases, esencia, posibilidad, validez y origen del
conocimiento humano; a la lógica que se propone investigar los elementos y estructuras
formales de los sistemas de enunciados, a la filosofía de la ciencia (llamada en ocasiones:
epistemología) que investiga la estructura, fundamento y métodos desarrollados por los sistemas
científicos.

Disciplinas prácticas
Estas disciplinas se refieren a la acción humana. Además de preocuparse por temas
eminentemente teóricos denominado;-, "abstractos", la filosofía centra su atención en los
principios, formas y sentido de la praxis humana, en la naturaleza de la conducta individual y
colectiva, sus fines, normas y valores, en el problema de lo que son el sr, la libertad, la
obligatoriedad, las virtudes morales, etcétera.
Dentro del conglomerado de disciplinas prácticas de la filosofía podemos mencionar, en primer
lugar, nuestra disciplina de estudio: la ética, la cual estudia la conducta moral del hombre en la
vida social; la axiología o teoría de ios valores, que estudia tanto la experiencia estitíiatrva como
los principios axiológicos universales, sus formas, fundamentos y alcances; la estética cuyas
reflexiones se centran en las formas y principios de la contemplación y la creación artística. Otras
disciplinas de carácter práctico, muy ligadas con las anteriormente citadas, son: la filosofía del
derecho, la filosofía política, la filosofía social, la filosofía de la educación, la filosofía de la cultura
y la filosofía de la religión. El coronamiento o remate de estas disciplinas está repre-setifado por
una rama filosófica muy importante que engloba todas las filosofías: la antropología filosófica
cuyo objeto de investigación es el hombre como sujeto de la cultura, como creador y sustentador
de valores morales, religiosos, estéticos, económicos, etcétera.
La ética, pues, en cuanto disciplina filosófica queda ubicada —como se observa en el siguiente
esquema— como una disciplina práctica de la filosofía de acuerdo con su tema de estudio que
es la moral conforme a la cual el hombre modela su existencia.

Teoría del conocimiento

Lógica

Teóricas o Filosofía de la ciencia

gnoseológicas Filosofía de la ciencia

Axiología

Ética

Estética
43  
 
Filosofía del derecho

Prácticas Filosofía social y política

Filosofía de la educación

Filosofía de la religión

Concepto de ética

Una vez ubicada la ética como una disciplina filosófica de carácter práctico, ya que al reflexionar
sobre la vida moral, se interesa por mejorar nuestra existencia mediante la realización de lo que
es bueno, pasemos ahora a tratar de definirla.

23 Caracterización de la ética

Definición etimológica
Como todo saber, la ética puede ser analizada etimológicamente, investigando sus raíces
lingüísticas. El término ética se deriva de la palabra griega ethos. Parece ser que el primero que
usó esta palabra fue el poeta Hornero, quien entendía por ethos: "Lugar habitado por hombres y
animales". En este sentido primigenio, un pensador contemporáneo, Martin Heidegger, se refiere
al ethos como lugar o morada, y por ello dice que la morada o ethos del hombre es el ser. Otra
interpretación interesante de la palabra ethos se encuentra en el filósofo griego Zenón de Citio,
quien sostiene que el ethos es la fuente de la vida, de la que manan los actos singulares.14

La acepción más conocida y difundida del vocablo ethos se presenta a partir de Aristóteles,
ligado a un conocimiento llamado precisamente ética. Según esta acepción, ethos significa
temperamento, carácter, hábito, modo de ser. De acuerdo con el significado etimológico, ética
sería una teoría o un tratado de los hábitos y las costumbres.
Una característica del ethos, entendido como conjunto de hábitos y maneras de ser del hombre,
es su sentido no natural. En efecto, el ethos según la tradición griega, implica una serie de
costumbres adquiridas por hábito y no innatas; el ethos significa una conquista del hombre a lo
largo de su vida. En este sentido se dice que el ethos constituye una "segunda naturaleza"; se
trata de un conjunto de hábitos de los cuales el hombre se apropia, modificando su naturaleza.
En relación con esto, recuérdese que Aristóteles distingue entre virtudes éticas o morales y
                                                                                                                       
14
Cfr. José Luis Aranguren, Ética, Madrid, Revista de Occidente, 1958
44  
 
virtudes dianoéticas o intelectuales. Las primeras se generan por una repetición de actos y
costumbres; en su Etica Nicomaquea Aristóteles dice: "Una golondrina no hace verano, tampoco
un acto virtuoso hace feliz y dichoso al hombre". Las virtudes éticas son, pues, fruto de la
costumbre, se llegan a conquistar por medio de un modo sistemático de vida. Comenta
Aristóteles, refiriéndose a las virtudes éticas o morales: "Las virtudes no nacen en nosotros ni por
naturaleza ni contrariamente a la naturaleza, sino que, siendo nosotros naturalmente capaces de
recibirlas, las perfeccionamos en nosotros por la costumbre".15 En cuanto a las virtudes
intelectuales o dianoéticas, éstas se fundan en una comprensión racional o intelectual de la
conducta. Las virtudes intelectuales, dice Aristóteles, deben su nacimiento y desarrollo sobre
todo al magisterio, y por eso requieren de experiencia y tiempo.
En Aristóteles, pues, la ética se encuentra muy ligada a su sentido etimológico. Por ética
entiende una serie de reflexiones sobre el ethos (modos de vida, virtudes) y todo lo relacionado
con él.

Figura   2.1     Las   virtudes,   según  


Se advierte una relación entre la palabra
Aristóteles,  no  nacen  con  nosotros,  sino  
que  al  recibirlas,  las  desarrollamos  y  las  
ethos, acabada de analizar
perfeccionamos   mediante   el   hábito   o   la  
someramente, y la palabra mos, de
costumbre.  
donde deriva moral. El término moral
procede
  del latín mos, que también significa costumbre, hábito, en el
sentido de conjunto de normas o reglas adquiridas por medio del hábito.
Actualmente se piensa que tanto ethos como mos, si bien nos ubican en el
terreno de la ética —el ámbito de lo humano, actos que el hombre conquista
a través de su vida— son imprecisos para definir objetivamente esta disciplina. Una de las
limitaciones de la definición etimológica de la ética (como teoría de hábitos y costumbres) es su
generalidad. Puede observarse que en cada época existen en la sociedad, en sus distintos
grupos sociales, diversos hábitos y costumbres, pero no todos tienen una significación moral. El
mundo de los hábitos y costumbres es bastante complejo y diverso; no todos ellos pueden ser
calificados de morales. Observa Xavier Zubiri que "el vocablo ethos tiene un sentido
infinitamente más amplio que el que damos hoy a la palabra ética. Lo ético comprende, ante
todo, las disposiciones del hombre en la vida, su carácter, sus costumbres y, naturalmente,
también lo moral".16
Para no caer, entonces, en la amplitud y ambigüedad de la definición etimológica de la ética, se
formulará otra definición, pero ya no a partir de su etimología, sino en relación con su objeto de
estudio.

Definición de la ética por su objeto de estudio


Toda ciencia tiene un objeto de estudio llamado campo de investigación, factum (hecho del cual
parte), materia de estudio, etc. ¿Cuál es el campo de investigación de la ética? El objetivo de la
ética radica en el 24 Ética: Introducción a su problemática y su historia

                                                                                                                       
15
Aristóteles. Etica Nicomaquea, México, UNAM, 1963.
16
Citado por José Luis Aranguren, op. cit.
45  
 
estudio y comprensión del territorio cultural llamado moral. De acuerdo con esto, puede
afirmarse que ética es la ciencia filosófica encargada de estudiar o reflexionar sobre la moral.
Pero como la moral tiene un carácter humano y social, puede ampliarse esta definición, diciendo:
La ética es la disciplina filosófica que estudia el comportamiento moral del hombre en sociedad.
Respecto de su carácter filosófico, ya se dijo que la ética es una de las disciplinas filosóficas
fundamentales. Algunas ramas de la filosofía se han separado de su tronco, como la psicología.
Sin embargo, la ética sigue considerándose como una ciencia filosófica, como parte de la
filosofía, pero no de una filosofía metafísica y apriorística desligada de la experiencia y de los
fundamentos históricos y concretos que ofrece la cultura.

A fin de explicar un poco más nuestra definición, podemos señalar las siguientes características
básicas contenidas en la misma.

1. La ética es una rama o parte de la filosofía.


2. Su campo de investigación es la moral.
3. El fenómeno moral es una creación exclusiva del hombre. Sólo ciertos actos humanos
pueden ser
calificados de buenos o malos desde el punto de vista de la moral. Solamente el hombre
tiene un sentido ético o una "conciencia moral".
4. Además, y relacionado con el punto anterior, la moral es un fenómeno eminentemente
social, puesto que rige o regula la vida del hombre en la sociedad. Ello significa que la
moral no tendría sentido para un hombre —si pudiera ser conce bido así— que estuviera
completamente aislado o desvinculado del medio social, como un Robin- son Crusoe.

Figura   2.2     Aparentemente,   la  


Relaciones y
moral   no   podría   ser   practicada   diferencias entre ética
por   un   ser   que   no   vive   en  
sociedad.   y moral
 

El objeto de la ética es la moral; esta afirmación permite hacer algunas observaciones sobre las
relaciones y, diferencias entre ética y moral. Las relaciones que existen entre ellas son obvias:
es la relación que guarda una ciencia cualquiera con su objeto de estudio. La ética necesita de
la moral para sacar sus conclusiones, para explicarla, para elaborar sus hipótesis y teorías; pero
ello no significa que la tarea de la ética consista en inventar o crear la moral. Muy
acertadamente el filósofo José Luis Aranguren observa que "los profesores de ética olvidan con
demasiada frecuencia que la ética no crea su objeto, sino que se limita a reflexionar sobre él".17
La ética no puede prescindir de la historia de la moral concreta, pero esto no significa que se
pueda confundir con ella. La moral y la ética son diferentes de la misma manera que son
diferentes, por ejemplo, la biología y los fenómenos vitales que estudia. Unos son objetos de
investigación; la otra (la biología) es una ciencia cuya tarea es precisamente estudiar aquellos
fenómenos. De la misma manera debe entenderse la ética: ésta es una ciencia, mientras que la
moral es el objeto de esta ciencia. Esto significa que la moral no es ciencia, pero ello no impide

                                                                                                                       
17
José Luis Aranguren, op. cit.
46  
 
que pueda convertirse en el objeto de una investigación científica. Es muy importante reparar en
estas diferencias, ya que a menudo se suele afirmar que la moral es ciencia, o bien, utilizar la
palabra "ética" como sinónimo de moral. Así, por ejemplo, la expresión ética profesional es
equívoca, porque generalmente se refiere a un código moral que debe observar un profesional,
y no a una ciencia como es la ética.
Entonces, se debe tener presente lo siguiente: ética es la ciencia de la moral, mientras que la
moral es el objeto de estudio de la ética.
Una prueba de que la moral no es una ciencia lo demuestra el hecho —como señala el maestro
Adolfo Sánchez Vázquez en su libro de Ética— de que en la historia han aparecido una serie de
morales que nada tienen que ver con la actitud científica; morales irracionales y autoritarias.
Piénsese, por ejemplo, en las morales rudimentarias de los pueblos primitivos, las cuales se
basaban en tabúes y prohibiciones extrañas y muchas veces absurdas. Las sectas religiosas y
místicas pueden proporcionar abundantes ejemplos de morales irracionales; por ejemplo, las
reglas que prescribía la Escuela pitagórica: abstenerse de las habas, no recoger lo que se ha
caído, no tocar un gallo blanco, no mirarse en un espejo fuera de la luz, entre otras. ¿En qué se
fundaban estas reglas? Evidentemente, en meros tabúes.

25 Caracterización de la ética

La ética como teoría de la moral


La ética, como ya se explicó, es la ciencia que estudia la moral del hombre en la sociedad.
Hablando en forma estricta, todas las disciplinas filosóficas son teóricas en la medida en que
reflexionan críticamente sobre sus objetos y no se proponen prescribir la conducta o crear
reglas artísticas, morales o religiosas. Esta observación vale esencialmente para las llamadas
disciplinas prácticas a las que ya nos hemos referido y cuya denominación puede llevarnos a
algunas confusiones. Estas disciplinas son llamadas "prácticas" por encontrar su centro de
estudio en la praxis humana, en la acción, finalidades, normas y valores que el hombre se
propone realizar durante su vida, pero no porque tengan como tarea expresa elaborar una serie
de reglas o recetas encaminadas a guiar todo el cúmulo de experiencias humanas. Así, por
ejemplo, la estética no se propone formular una serie de reglas universalmente válidas para
normar la creación artística; análogamente la ética no se propondrá crear códigos y pautas de
conducta o recetarios morales para conducir el comportamiento concreto de los individuos en su
vida social e íntima. La ética no se reduce a una prédica moral y como dice Patrik Nowell-Smith,
esta disciplina "no es una tía universal, ni un cura párroco, ni un consultorio cívico".18
Sin embargo, la ética se ha caracterizado como una disciplina práctica. Esto es aceptable
siempre y cuando se aclare que su supuesta normatividad procede de la naturaleza de su
objeto: la moral. Y como se sabe, la moral está constituida por una serie de normas, costumbres
                                                                                                                       
18
Citado por Javier Muguerza en La razón sin esperanza, Madrid, Taurus,

1977, p. 24.

 
47  
 
y formas de vida que se presentan como obligatorias, valiosas y orientadoras de la actividad
humana. Por el solo hecho de estudiar y reflexionar sobre estas normas o reglas de conducta
que forman el mundo de la moral se dice que la ética es una ciencia normativa. La ética es una
ciencia práctica porque tiene por objeto la conducta humana. Es la ciencia del orden moral de la
vida individual y social del hombre.
Sin embargo, el calificativo de "ciencia práctica" o "ciencia normativa" no es muy afortunado
porque suscita la idea —como ya se advirtió— de que esta disciplina tiene como finalidad
formular recetas o consejos útiles para la vida moral de cada individuo. Y ello no es así, porque
—como afirma George Edward Moore—:

los filósofos, a diferencia de los moralistas, no se ocupan de establecer reglas para


distinguir aquellos modos de obrar que casi siempre, o siempre, son justos, o aquellos
otros que son injustos, ni siquiera de dar listas de las cosas buenas o malas, sino que se
esfuerzan por contestar cuestiones mucho más generales y fundamentales, como las
siguientes: ¿Qué es lo que queremos decir de una acción cuando la calificamos como
justa o injusta?, y ¿qué es lo que significa decir de un estado < cosas que es bueno o
malo?19

Así, pues, debe distinguirse muy claramente entre el moralista que prescribe normas, invita a
realizar un modo de vida que cree justo y bueno (Cristo, Buda, el legendario Zoroastro, entre
otros), y el filósofo, el ético, que, tomando como base la moral históricamente determinada, se
encarga de reflexionar y explicar dicha moral.
La ética no se propone expresamente dirigir la vida humana, sino explicar la moral; no intenta
decir a cada cual lo que ha de hacer u omitir en cada caso concreto de la vida, no es una
casuística. En su obra Los dos problemas fundamentales de la ética, Arthur Schopenhauer
escribe como epígrafe la siguiente frase: "Predicar la moral es fácil, fundamentar la moral, difí-
cil". Y es precisamente esto último lo que constituye la ardua tarea de la ética.
La ética es normativa en un sentido indirecto, por la naturaleza de su objeto, pero no en un
sentido directo, ya que no se propone dar una lista de deberes y de no deberes; esto significa
que no incurre en una pres-criptiva. Esta conclusión puede plantear la siguiente reflexión: ¿es
acaso la ética puramente especulativa o contemplativa?, ¿le está definitivamente vedado a la
ética orientar las acciones humanas hacia la creación de una sociedad más justa y perfecta? Se
puede responder que, en última instancia, la separación entre teoría y praxis es artificial. No se
niega que la explicación crítica que la ética realice sobre la moral pueda repercutir, en alguna
forma, en la vida concreta del hombre. En su imprescindible libro de Ética, dice el filósofo
Eduardo García Máynez: "La ética es, o puede ser normativa en cuanto que, al llevar a la
conciencia del hombre las directrices que han de orientar su conducta, influye en las decisiones
de su

26 Ética: Introducción a su problemática y su historia

                                                                                                                       
19
George Edward Moore, Ética, México, Editora Nacional, 1964.
48  
 
albedrío, convirtiéndose, de manera mediata, en factor determinante de la acción humanaM Por
ello, escribe Nicolai Hartmann. es "la mayéutica de la conciencia moral".20
Lo que queremos decir, en conclusión, es que no podemos separar tajantemente lo teórico de lo
práctico. De alguna manera los principios éticos establecidos por las teorías morales
determinan el comportamiento de los individuos. Por ejemplo, la teoría esgrimida por Sócrates
en el diálogo El Critón determinó que éste no se fugara de su prisión y aceptara
resignadamente la sentencia de muerte prescrita por los jueces de su tiempo.
La teoría que se sustente acerca de la moral no sólo influirá sobre nuestra conducta individual,
sino también en el comportamiento de la sociedad y la estructura de sus instituciones.

Para explicar las relaciones entre lo teórico y lo práctico, algunos autores hablan de dos
niveles que encontramos en la ética: la ética crítica y la ética aplicada.

Ética crítica
Es la ética propiamente teórica; se encarga de determinar cuáles "opiniones o creencias
morales son válidas. Una creencia moral es válida cuando se ha probado que cumple la función
de garantizar la felicidad individual y la armonía social; también cuando evita el sufrimiento
individual y el daño social".21
A la ética critica también se le denomina "metaéti-ca" en cuanto que consiste en el análisis
lógico y epistemológico de los principios éticos. Un ejemplo: "en la ética cristiana se dice que el
bien humano es la santidad y éste se alcanza cumpliendo los Mandamientos de la Ley de Dios.
La definición de 'santidad' es una cuestión de ética crítica; el fundamento de los Mandamientos
de la Ley Divina también lo es. Supone, primero, que Dios existe y que se comunica con las
criaturas y les ordena determinados comportamientos".22

Ética aplicada (también llamada normativa)


Su tarea fundamental "consiste (con base en una fundamentación teórica) en guiar la conducta
para decidir cuál es la mejor decisión entre las posibles de realizar en una situación concreta.
Es decir, indica al agente moral preocupado por su actuación cuál es su deber y por qué ése:
para ello, se estudian los valores y las mejores formas de solucionar los problemas morales de
la convivencia humana".23

Es preciso señalar que la ética aplicada no es una prédica moral o un "moralismo", no dice a
las personas lo que deben hacer o pensar acerca de lo que es bueno o malo, sino que trata de
ajustar los actos a ciertos principios éticos que son fruto de la reflexión y de la fundamentación
teórica.

Lecturas

                                                                                                                       
20
Eduardo García Máynez, Etica. México, Porrúa, 1960, pp. 18-19.
21  Graciela  Hierro,  Ética  de  la  libertad,  México,  Fuego  Nuevo,  1990,  p.  49.  
22  Ibídem,  p.  55.  
23  Ibídem,  p.  50.  
49  
 
En esta caracterización o definición de la ética, detengamos un poco nuestro
camino, hagamos un pequeño alto, para invitarte a reflexionar sobre la esencia misma
de la ética, su sentido y utilidad para nuestra vida, para esto, apóyate en estos dos
breves textos que a continuación te ofrecemos:
Me  he  esforzado  por  mostrar  que  el  verdadero  objeto  de  la  ética  lo  constituyen,  además  de  los  actos  y  los  hábitos  y,  
en   cieño   sentido,   por   encima   de   ellos,   la   vida   en   su   totalidad   unitaria   y,   lo   que   es   más   importante,   el   ethos   o  
carácter  moral;  o,  dicho  en  otras  palabras,  si  se  advierte  que  lo  decisivo  éticamente  no  son  solo  las  acciones  aisladas,  
sino   el   sentido   virtuoso   o   vicioso   de   la   vida   y,   sobre   todo,   el   ser   bueno   o   malo;   si   se   advierte   que   el   ser   está   por  
encima   del   hacer,   aun   cuando   se   manifieste   a   través   de   él,   entonces   es   claro   que   la   cualificación   moral   de   las  
estructuras   superiores,   vida   y   ethos,   ha   de   repercutir,   por   fuerza,   en   la   de   los   actos   que   en   ellas   se   insertan.   Para   los  
santos  todo  es  santo.  'Ama  et  fac  quod  vis  "  porque,  si  amas  rectamente,  cuanto  hagas  será  recto'.

José  Luis  Aranguren,  Ética,  Madrid,  Revista  de  Occidente,  1968,  pp.  324-­‐325.  

27 Caracterización de la ética

El objeto de la ética  

Los   conceptos   de   bien,   la   justicia,   la   felicidad,   la   conciencia   son   del   dominio   común.   Y   aun   cuando  
tienen   una   naturaleza   difícilmente   aprehensible,   ejercen   sobre   el   hombre   un   inmenso   poder.   ¿En   qué  
reside   su   fuerza,   de   dónde   proviene   su   poder   mágico   sobre   la   persona?   ¿Es   capaz   nuestra   mirada  
consciente   de   penetrar   en   lo   profundo   de   las   inquietudes   morales   de   los   hombres?   Esta   vida   se   puede  
vivir   como   sea.   Pero   también   se   puede   aspirar   a   vivir   una   vida   buena   y   digna.   ¿Qué   vida   es,   en  
nuestra  consideración,  buena  y  digna?  ¿Cuál  es  el  sentido  de  la  vida  humana  y  cómo  satisfacer  la  sed  
ilimitada   del   hombre   de   ser   mejor,   más   puro?   A   éstas   y   otras   preguntas   análogas   está   llamada   a  
responder  la  ética,  rama  antiquísima  e  interesantísima  de  la  ciencia  filosófica.  

V.  Bakshtanovski,  et  al.,  Ética,  México,  Editorial  

Progreso,  1989.  

Normativismo ético  

Se  denomina  normativismo  ético  o  ética  normativista  la  tendencia  a  sobreestimar  el  carácter  práctico  o  
normativo   de   la   ética   en   detrimento   de   su   naturaleza   teórica.   Según   el   normativismo,   la   ética   se  
reduciría  a  una  especie  de  prescriptiva  encaminada  a  normar  la  conducta  del  hombre.  Muchos  manuales  
de  ética  desembocan  en  un  normativismo,  sostienen  que  la  ética  consiste  en  la  fácil  tarea  de  prescribir  
normas;   y,   así,   incluyen   capítulos  meramente  prescriptivos  que  hablan  sobre  las  obligaciones   del   hombre  
hacia  Dios,  la  patria,  la  familia,  etc.,  sobre  consejos,  en  suma,  para  el  logro  de  la  dicha.  
La  ética  normativista  pretende  formular  reglas  de  conducta,  dar  normas  a  las  que  se  deben  ajustar  
nuestros   actos.   Por   ejemplo   Wilhelm   Max   Wundt   considera  la   ética   como   una   ciencia   normativa,   como   la  
lógica  y  la  estética.  También  se  puede  señalar  el  caso  de  Dilthey  que,  después  de  reflexionar  en  forma  
breve  sobre  el  verdadero   sentido   de   la   ética,   enumera   deberes   y   derechos  y  cae,  de  este  modo,  en  una  
prescriptiva.  
De   acuerdo   con   el   normativismo,   la   ética   no   se   propone   comprobar   lo   que   es,   sino   determinar   lo   que  
debe   ser;  ella  se  encarga  de  suministrar  las  reglas  y  normas  de  conducta  que  han  de  seguirse.  De  esta  
50  
 
manera,  la  ética  es  concebida  como  una  especie  de  moral  aplicada.  Pero  ya  se  señaló  que  la  ética  está  lejos  
de  ser  una  moral  aplicada,   puesto   que   esto   llevaría   a   confundir   la   ética   con   la   moral.   Además,   si   la   ética  
se  concibe  como  una  prescriptiva  (o  ética  normativista),  entonces  jamás  será  ciencia,  ya  que  los  deberes  
y  derechos  que  prescribe  sólo  son  expresiones  de  un  determinado  momento  histórico.  

Sin   embargo,   esto   no   significa   que   hay   un   abismo   entre   la   teoría   y   la   práctica;   aunque   la   ética   sea  
estrictamente   teórica,   esto   no   implica   que   sus   teorías   no   puedan   tener   consecuencias   prácticas.   Si   al  
teórico   de   la   ética   no   le   importa   el   cumplimiento   de   su   doctrina,   la   realización   de   lo   bueno   por   la  
humanidad,  entonces  mejor  que  cambie  de  ocupación,  porque  está  perdiendo  el  tiempo.24  

La ética concebida como ciencia


 

Una   vez   rechazado   el   normativismo   para   caracterizar   esta   disciplina,   queda   decir   que   el   carácter,  
strictu   sensu,   que   define   la   ética   es   el   aspecto   teórico.   Ante   todo  la  ética  es  teórica,  porque  su  papel  
consiste   en   explicar,   fundamentar,   plantear   y   resolver   problemas   en  torno   de   la   moral.   En   este   sentido,  
la   tarea   de   la   ética   es   la   propia   de   una   ciencia.   No   puede   haber   una   ética   sin   base   científica,   un  
conocimiento   ético   que   no   se   base   en   la   ciencia.   La   ética   elabora   hipótesis   y   teorías   sobre   la   moral,  
propone   conceptos,   explica   categorías   relativas   a   la   experiencia   moral.   En   su   ya   mencionada   obra.  
Adolfo  Sánchez  Vázquez  enseña  que,  ante  los  hechos   morales,  la  ética  aspira  a  encontrar  sus  principios  
generales,   no   simplemente   se   dedica   a   registrarlos   y   describirlos,   sino   que   los   trasciende   mediante  
conceptos,   hipótesis   y   teorías   (aquí   es   donde   pueden   relacionarse   la   lógica   y   la   metodología   de   la  
ciencia  con  la  ética).  

28 Ética: Introducción a su problemática y su historia

En   cuanto   a   ciencia,   la   ética   requiere   desarrollarse   conforme   a   exigencias   comunes   a   toda   ciencia.  
Dichas  exigencias  son  las  siguientes.25  

a) Objetividad.  Significa  que  la  ciencia  intenta  explicar  los  hechos  tal  como  son,  independientemente  de  
su  valor  emocional  o  comercial.  
b) Racionalidad.  Significa  que  la  ciencia  está  formada  por  conceptos,  juicios  y  raciocinios,  y  de  
ninguna  manera  por  sensaciones,  imágenes,  pautas  de  conducta,  etcétera.  
c) Sistematicidad.  Significa  que  la  ciencia  no  es  un  agregado  de  informaciones  inconexas,  sino  un  
sistema  de  ideas  conectadas  lógicamente  entre  sí.  
d) Metodicidad.  Significa  que  la  ciencia  necesita  un  método.  Los  investigadores  no  caminan  en  forma  
arbitraria,  sino  que  planean  mediante  procedimientos  lógicos  llamados  métodos.  
 

Método de la ética
                                                                                                                       
24  Paula  Gómez  Alonso,  La  ética  en  el  siglo  xx,  México,  rx  
25  Cfr.  Mario  Bunge,  La  ciencia,  su  método  y  su  filosofía,  Buenos  Aires,  Siglo  XX,  1972.  
51  
 
 
Si  la  ética  aspira  a  ser  una  ciencia,  entonces  debe  desarrollarse  conforme  a  un  método.  Puede  observarse  
que   el   carácter   teórico   de   la   ética   deriva   de   su   método,   pues   hay   una   correlación   entre   teoría   y   método,  
ya  que  toda  teoría  implica  necesariamente  un  método.  No  puede  concebirse  la  ciencia  sin  un  método  de  
investigación.  Por  tanto,  puede  deducirse  la  siguiente  conclusión:  el  carácter  normativo  de  la  ética  deriva  
de  su  objeto,  mientras  que  el  carácter  teórico  deriva  de  su  método.  
Pero,   ¿qué   es   un   método?   La   palabra   método   viene   del   griego   metá,   fin,   y   odos,   camino.  
Etimológicamente   significa   "el   camino   que   conduce   al   fin".   El   significado   etimológico   de   la   palabra  
método  nos  aproxima  bastante   a   su   significado  real.  En  general  se  denomina  método   conjunto   de   los  
procedimientos   adecuados  
para  obtener  un  fin:  en  nuestro  caso,  este  fin  es  el  conocimiento  de  la  moral.  
Debe  advertirse  que  existen  métodos  especiales  para   cada   rama   del   saber.   Así.   Las   ciencias   experimentales  
utilizan   preferentemente   el   método   inductivo;   mientras   que   las   ciencias   formales   aplican   el   método  
deductivo.  Hay,   pues,   una   correlación   entre   la   naturaleza   de   las  ciencias  y  el  tipo  de  método  que  deben  
adoptar.  En  este  sentido,  el  método  propio  de  la  ética  debe  adecuarse  a   la   naturaleza   de   su   objeto.   No  
sería  adecuado,  por  ejemplo,  decir  que  el  método  apropiado  de  la  ética  es  el  utilizado   por   las   ciencias  
experimentales   o   factuales,   o   bien   el   que   utiliza   la   matemática.   Debe   buscarse,   entonces,   un   método  
que   se   avenga   al   objeto   de   la   ética.   Ya   se   indicó   que   el   objeto   de   la   ética   es   la   moral   del   hombre.   En   el  
objeto   de   la   ética   interviene   la   voluntad   del   hombre,   su   libertad,   el   conjunto   de   sus   decisiones  
concebidas   a   la   luz   de   la   historia.   Por   tanto,   el   método   de   la   ética   debe   tener   en   cuenta   el   aspecto  
humano,  social  e  histórico  inherente  a  su  campo  de  investigación.  
En  la  historia  de  la  filosofía  no  hay  un  criterio  unánime  de  cuál  es  el  método  propio  de  la  ética.  De  
hecho   cada   corriente   filosófica,   cada   pensador,   cada   filósofo   ha   propuesto   su   propia   metodología.   A  
continuación  se  mencionan  algunos  métodos  ensayados  por  la  ética  a  lo  largo  de  su  historia.  
 

El  método  inductivo  
En   general,   este   método   procede   de   lo   particular   a   lo   general.   De   la   revisión   de   distintos   casos  
particulares  se  eleva  a  establecer  una  ley,  una  explicación  general  del  fenómeno  observado,  ley  que  vale  
no  sólo  para  esos  casos  observados  y  experimentados,  sino  para  todos  los  de  su  especie.  

El  esquema  lógico  que  corresponde  a  la  inducción  es  el  siguiente:  

A,  B,  C...  son  S  

A,  B,  C...  son  P  

Todo  S  es  P  

29 Caracterización de la ética

Este   método   es   utilizado   en   las   ciencias   experimentales   (biología,   química,   fisiología,   etc.),   en   ciencias  
donde  intervienen  fundamentalmente  la  observación  y  la  experimentación.  

Se  piensa  que  la  ética  griega  se  caracteriza  por  ser  altamente  especulativa.  Sin  embargo,  Aristóteles  
se   aparta   de   esta   tradición,   al   introducir   en   su   ética   un   criterio   empírico.   En   vez   de   partir   de   conceptos  
apriorísticos,  Aristóteles  observa  las  costumbres  de  su  época,  para  deducir  que  era  el  sumo  bien  aquello  a  
52  
 
que  todos  los  hombres  aspiran  (la  felicidad).  Este  procedimiento  de  Aristóteles  puede  considerarse  ya  
como  una  aplicación  del  método  inductivo  en  la  ética.  

Otro   ejemplo   de   procedimiento   inductivo   en   la   historia   de   la   ética   se   encuentra   en   aquellas  


tendencias   que   se   han   agrupado   bajo   el   nombre   de   ética   empírica.   Den-­‐.         n   criterio   claramente  
empírico,   el   sofista   Cali-­‐des.   En   el   diálogo   platónico   Gorgias,   llega   a   derivar   del:   el   obrar   humano   la  
máxima  norma  de  conducta:  "*H   derecho   se   funda   en   el   poder."   Esta   norma   no   era  asas  que  el  reflejo  
de  repetidas  observaciones:  el  frecuente  abuso  de  los  fuertes  sobre  los  débiles,  la  conquista  de  los  
pueblos  pequeños  por  parte  de  los  poderosos.  Si  esto  sucede  con  frecuencia,  entonces  es  válido  la  
ley   o   norma   que   dice:   "El   poderoso   debe   someter   al   débil,   cumpliendo   así   una   ley   natural".   En   los  
empiristas  la  i  es  ciencia  de  lo  que  es,  mas  no  de  lo  que  debe  ser.  

Figura   2.3     Basándose   en   una   ética   de   metodología   empírica,   el  


sofista   Calicles   concluía   que   la   experiencia   muestra   que   los   débiles  
son  siempre  sometidos  por  los  fuertes.  

   

El  método  deductivo  
 
La   deducción   es   el   procedimiento   inverso   a   la   inducción:   aquí   se   parte   de   lo   general   para   llegar   a   lo  
particular  Este  método  es  el  propio  de  las  ciencias  formales  lógica,  matemática).  La  lógica  lo  define  como  
la   inferencia   mediata   que   parte   de   dos   o   más   juicios   llamados   premisas   para   obtener   otro   llamado  
conclusión.  Un  ejemplo  de  razonamiento  deductivo  es  el  siguiente:  

• "Ningún  pez  respira  por  pulmones."    



"El  delfín  respira  por  pulmones."    
• Luego,  "el  delfín  no  es  pez".  
 

Se  podría  decir  que  el  procedimiento  deductivo  ha  sido  la  manera  de  pensar  propias  de  las  éticas  
especulativas  y  tradicionales.  Estas  éticas  tratan  de  deducir  sus  conceptos  éticos  a  partir  de  una  idea  
inalterable  de  la  naturaleza  humana.  

Un  ejemplo  del  empleo  de  la  deducción  en  ética  lo  proporciona  el  filósofo  judío  Baruch  Spinoza  
(1634-­‐1677).   Spinoza   aplica   en   su   obra   Ética   demostrada   según   el   orden   geométrico   un   método  
rigurosamente   matemático   con   axiomas,   definiciones,   proposiciones   con   sus   demostraciones,  
escollos  y  corolarios.  Este  procedimiento  hace,  sin  duda,  que  la  lectura  de  su  libro  sea  difícil.  

Figura  2.4    La  


 
ética  
I  
demostrada  
según   el   De  Dios  
orden  
geométrico   II  
de   Baruch  
Spinoza.  

 
53  
 
De  la  naturaleza  y  del  origen  del  alma  

III  

Del  origen  y  la  naturaleza  de  los  afectos  

IV  

De  la  servidumbre  humana  

V  

De  la  potencia  del  entendimiento  o  de  la  libertad  humana  

30 Ética: Introducción a su problemática y su historia

Métodos  filosóficos  
 

Tanto   el   procedimiento   inductivo     como   el   deductivo   pertenecen   a   los   métodos   científicos.   Frente   a  
éstos,  la  lógica  estudia  los  llamados   métodos  filosóficos,   que   ha   creado   la   filosofía   a   partir  de  sus  propias  
concepciones.   Entre   ellos   están:   el   fenomenológico,   el   método   crítico   trascendental   y   el     método  
dialéctico.  

 El   método   fenomenológico,   creado   por   el   filósofo   alemán   edmund   Husserl   (1859-­‐1938),   consiste   en  
volver  de  los  objetos  a  los  actos  de  la  conciencia  (vivencias)  en  que  nos  ofrecen  y  estudiar  las  estructuras  
de   conciencia   en   su   generalidad   ideal,   esto   es,   como   esencias.   Pero   el   método   fenomenológico  
constituye  también  toda  una  corriente  filosófica  que  abarca  el  pensamiento   de  A.  Pfánder,  que  lo  aplica  
a  la  lógica,  de  Max  Scheler  y  D.  V.  Hildebrand,  que  lo  aplican  al  campo  de  la  ética,  y  de  M.  Merleau  Ponty,  
que  lo  ensaya  en  la  psicología.  
El   mismo   Husserl   piensa   que   su   método   es   adecuado   para   todas   las   ciencias,   y   que   la   aplicación  
correcta  de  la  fenomenología  a  la  filosofía  convertiría  a  ésta  en  una  ciencia  rigurosa.  
En  términos  más  sencillos  y  de  manera  literal,  la  fenomenología  significa  estudio  o  descripción  de  los  
fenómenos   (morales,   históricos,   religiosos,   etc.),   para   determinar   su   eidos   o   esencia.   Parafraseando   el  
espíritu  cartesiano,  Husserl  considera  que  la  fenomenología  no  presupone  nada:  ni  el  mundo  natural  ni  el  
sentido  común,  ni  las  proposiciones  de  la  ciencia,  ni  las  experiencias  psicológicas.  Este  método  se  coloca  
antes  de  toda  creencia  y  de  todo  juicio  para  explorar  simplemente  lo  dado,  el  fenómeno  en  sí.  

El   método   fenomenológico   puede   ser   útil   en   la   ética   en   dos   sentidos:   directamente,   analizando  
fenómenos  morales  para  determinar  sus  rasgos  esenciales  —por  ejemplo,  los  rasgos  característicos  del  
acto  moral,  o  el  examen  de  los  diversos  tipos  de  obligación  para  determinar  cuál  es  la  obligación  moral  
en   sentido   estricto—,   indirectamente,   sirviéndose   de   otros   análisis   fenomenológicos   de   campos  
colindantes   con   la   moral.   Para   poner   un   solo   ejemplo,   el   estudio   que   G.   van   der   Leew   realiza   en   su  
Fenomenología  de  la  religión  puede  ser  de  gran  utilidad  en  el  tema  relacionado  con  la  distinción  entre  
moral  y  religión  

 
54  
 
El   método   crítico   trascendental   fue   creado   por   Emmanuel   Kant   (1724-­‐1804).   Este   método   consiste   en  
proyectar  la  atención  no  sobre  los  objetos  mismos,  sino  sobre  el  saber  que  nos  da  la  cultura,  indagando  las  
bases  •  elementos  a  priori  (universales  y  necesarios)  del  conocimiento.  No  se  trata,  por  tanto,  de  una  
investigación   psicológica   del   conocer,   que   implicaría   un   proceso  de  experiencia,  sino  de  la  averiguación  
de   las   condiciones   necesarias   de   toda   experiencia.   En   el   caso   de  la  ética.  Kant  plantea  el  problema  de  
¿Cómo  es  posible  la  moral?,  explica  las  bases  objetivas  (a  priori)  de  la  moral;  no  describe,  por  tanto,  de  
manera  empírica  y  psicológica  el  fenómeno  de  la  moral,  sino  que  trata  de  elevarse  del  metofactum  (la  
moral)  para  determinar  sus  principios  a  priori.  

El   método   dialéctico   ha   tenido   una   larga   evolución   en   la   historia   de   la   filosofía.   Este   método   se  
remonta  a  Zenón  de  Elea,  el  cual  lo  concibe  como  un  arte  de  discutir.  Más  tarde,  Sócrates  lo  denomina  
mayéutica  o  arte  de  dar  a  luz  la  verdad  por  medio  del  diálogo.  Posterior-­‐  

El  método  dialéctico  ha  tenido  una  larga  evolución  en  la  historia  de  la  filosofía.  Este  método  se  remonta  a  
Zenón   de   Elea,   el   cual   lo   concibe   como   un   arte   de   discutir.   Más   tarde,   Sócrates   lo   denomina  mayéutica  o  
arte  de  dar  a  luz  la  verdad  por  medio  del  diálogo.  Posterior-­‐  

La  dialéctica  en  Marx  y  Engels  no  se  refiere  al  proceso  de  la  idea  (como  en  Hegel),  sino  a  la  propia  reali-­‐
dad  (de  ahí  la  famosa  frase  de  Marx  acerca  de  que  era  necesario  invertir  la  dialéctica  hegeliana).  

La  dialéctica  permite  comprender  eficientemente  el  fenómeno  de  los  cambios  históricos;  y  por  este  
hecho   puede   ser   adecuada   para   comprender   el   campo   de   la   moral,   que   se   distingue   por   ser  
fundamentalmente  histórico  y  cambiante.  

Relación de la ética con otras ciencias  

31 Caracterización de la ética

El  psicoanálisis,  en  su  intento  de  establecer   a  la  psicología  como  una  ciencia  natural,  incurrió  en  
el  error  de  divorciar  a  la  psicología  de  los  problemas  de  la  filosofía  y  de  la  ética.

Erich  Fromm,  Ética  y  psicoanálisis  

Si   la   ética   pretende   lograr   plena   objetividad   debe   buscar   apoyo   en   las   diversas   ciencias,  
especialmente   en   aquellas   que   se   refieren   al   hombre   (ciencias   humanas   o   ciencias   sociales).   Esto   no  
significa  que  nuestra  disciplina  se  confunda  con  estas  ciencias,  sólo  se  afirma  que  éstas  constituyen  sus  
más  valiosos  auxiliares.  La  ética  es  una  ciencia  filosófica,  pero  ello  no  quiere  decir  que  pueda  valerse,  para  
su   desarrollo,   de   las   conclusiones   establecidas   por   otras   ciencias   que,   desde   diversos   puntos   de   vista,  
analizan  al  hombre  y  a  la  sociedad.  En  seguida  se  mencionan  algunas  ciencias  que  pueden  ayudar  a  la  ética  
en   sus   explicaciones.   Primeramente   nos   referiremos   a   la   psicología.   Algunos   autores   ubican   a   esta  
disciplina  como  ciencia  humana,  otros  como  ciencia   natural,   otros   más   como   ciencia   limítrofe   o   interme-­‐
dia  entre  las  ciencias  naturales  o  experimentales  y  las  ciencias  sociales.  

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