Como Protegerse de La Informacion Falsa
Como Protegerse de La Informacion Falsa
Como Protegerse de La Informacion Falsa
Hoy tenemos acceso a más información que nunca. Eso puede ayudarnos a cuidar nuestra salud
y sentirnos más seguros. ¡Pero cuidado! Entre tanta información, también puede encontrar cosas
como estas:
• Noticias engañosas
• Informes falsos
• Teorías conspiratorias
Por ejemplo, durante la pandemia del COVID-19, el secretario general de las Naciones Unidas
advirtió sobre una epidemia muy peligrosa de información falsa. Dijo que cada vez hay más
remedios milagrosos y consejos de salud que pueden perjudicarnos y que las mentiras inundan
los medios de comunicación. También dijo: “Insólitas teorías de la conspiración infectan Internet.
El odio se está volviendo viral, estigmatizando y difamando a personas y a grupos”.
Por supuesto, siempre ha habido información falsa. Pero un libro sabio, la Biblia, dijo hace mucho
que en nuestro tiempo los malvados y los impostores irían “de mal en peor, engañando y siendo
engañados” (2 Timoteo 3:1, 13). Y ahora con internet es más fácil y rápido que nunca recibir y
hasta esparcir sin querer noticias falsas. Por eso, nuestro correo electrónico, nuestras redes
sociales y las alertas que recibimos pueden llenarse de datos manipulados y verdades a medias.
¿Qué puede hacer para protegerse de la información falsa y de las teorías conspiratorias? Aquí
encontrará algunos consejos de la Biblia que le pueden servir.
No crea todo lo que ve y todo lo que oye
Lo que dice la Biblia: “El ingenuo se cree todo lo que le dicen, pero el prudente mide bien todos
sus pasos” (Proverbios 14:15).
Si no tiene cuidado, lo pueden engañar fácilmente. Por ejemplo, piense en los videos cortos o en
las imágenes con mensajes que se vuelven tan populares en internet, especialmente en las redes
sociales. Estamos hablando de lo que la gente llama memes, que se crean para hacer reír. Pero
las imágenes y los videos pueden manipularse o sacarse de contexto fácilmente. Hasta se
pueden hacer videos de personas reales haciendo o diciendo cosas que nunca hicieron ni dijeron.
“La mayor parte de la información falsa que los investigadores encuentran en las plataformas
sociales incluye contenidos, como los memes, que manipulan el contexto” (Axios Media).
Pregúntese: “¿Es una noticia real o solo un meme?”.
Analice la fuente y el contenido
Lo que dice la Biblia: “Comprueben todas las cosas” (1 Tesalonicenses 5:21).
Puede que una historia sea muy popular o se repita muchas veces en las noticias, pero antes de
creerla o reenviarla, compruebe que sea cierta. ¿Cómo?
Vea si puede confiar en la fuente, es decir, el origen de la información. Es posible que las
agencias de noticias y otras organizaciones manipulen una historia por sus intereses económicos
o políticos. Por eso, compare la misma información en diferentes medios de comunicación. Hasta
los amigos podrían, sin darse cuenta, enviar información falsa en correos electrónicos o en las
redes sociales. Así que no confíe en una noticia a menos que pueda comprobar la fuente original.
Asegúrese de que el contenido está al día y es exacto. Fíjese en las fechas y en los datos que
pueda verificar. También fíjese si lo que se dice está bien respaldado. Sobre todo, tenga mucho
cuidado si se simplifica demasiado la explicación de un tema complejo o si un informe está
preparado para provocar una respuesta emocional.
“Me atrevería a decir que comprobar los hechos es ahora tan importante como lavarse las manos”
(Sridhar Dharmapuri, oficial superior de inocuidad alimentaria y nutrición de las Naciones Unidas).
Pregúntese: “¿Presenta esta noticia una opinión como si fuera un hecho probado? ¿Da solo una
versión de la historia?”.
Déjese guiar por los hechos, no por sus preferencias personales
Lo que dice la Biblia: “El que confía en su propio corazón es un insensato” (Proverbios 28:26).
La gente normalmente confía en la información que apoya lo que ellos quieren creer. Y, por otro
lado, las compañías de internet se basan en los historiales de búsqueda y las preferencias
personales para mandar noticias y alertas. Pero lo que nos gusta oír no siempre es lo que
necesitamos oír.
“Todos tenemos la capacidad de pensar y ser razonables, pero nuestros deseos, esperanzas,
miedos y motivaciones muchas veces inclinan la balanza para que aceptemos que una
información es cierta si apoya lo que nosotros queremos creer” (Peter Ditto, psicólogo social).
Pregúntese: “¿Me fio de esta información simplemente porque es lo que quiero creer?”.
No divulgue información falsa
Lo que dice la Biblia: “No divulgues una noticia falsa” (Éxodo 23:1).
Recuerde que la información que usted comparte con otros puede influir en lo que ellos piensen y
hagan. Si manda información falsa, aunque sea sin querer, eso puede tener malas consecuencias.
“La regla número uno es ir más despacio, hacer una pausa y preguntarse: ‘¿Estoy lo
suficientemente seguro de esto como para compartirlo?’. Si todos hicieran eso, veríamos una
reducción dramática de la desinformación en línea” (Peter Adams, vicepresidente sénior del News
Literacy Project).
Pregúntese: “¿Voy a compartir esta información porque sé que es verdad?”.
Shauna Bowes, una psicóloga investigadora, dice que las teorías conspiratorias “tal vez están
teniendo más presencia que nunca en la forma de pensar y en el comportamiento de la gente”.
Esto es lo que necesita saber sobre las teorías conspiratorias.
¿Qué es una teoría conspiratoria? Es una afirmación de que existe un complot secreto de un
grupo —siniestro y con mucho poder— que provocará un suceso de graves consecuencias.
¿Por qué son peligrosas? Las teorías conspiratorias pueden hacer que la gente pierda la
confianza en las fuentes de información autorizadas. Hasta pueden hacer que algunas personas
no hagan caso de los consejos que se les dan sobre salud y seguridad. En ocasiones, estas
teorías promueven los prejuicios y la violencia contra el grupo que se cree que ha tramado la
conspiración.
¿Por qué tienen tanto éxito? Según la Encyclopaedia Britannica, las teorías conspiratorias se
vuelven más populares cuando la ansiedad, la incertidumbre o los problemas afectan a todo el
mundo. Además, dice que esto puede pasar durante una guerra o una crisis económica y
después de desastres naturales, como los tsunamis, los terremotos y las pandemias. En esas
situaciones tan difíciles, la gente acepta las teorías conspiratorias porque apoyan lo que ellos
creen o porque les ayudan a entender por qué pasan cosas malas.