Sintaxis Tema 6

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SINTAXIS Y SEMÁNTICA DEL ESPAÑOL

TEMA 6. NOCIONES FUNDAMENTALES

La reflexión sobre nuestra propia lengua sirve para el conocimiento de sus


posibilidades expresivas, de las estructuras lingüísticas características y de la riqueza
patrimonial de la lengua española tanto en su unidad como en su variedad (lo que nos
une y lo que nos separa). Para aprender otros idiomas es necesario primero conocer
nuestro propio idioma. También es importante para conservar el patrimonio lingüístico
del idioma, así como para ampliar el dominio del mismo. En definitiva, para aumentar
nuestra propia cultura y formación.

1. LA GRAMÁTICA Y SUS PARTES

La gramática estudia la estructura de las palabras, cómo se combinan estas entre sí,
qué significado otorgan esas combinaciones… Desde este punto de vista, la gramática
comprendería la morfología (estructura de las palabras, constitución interna y sus
variaciones) y la sintaxis (análisis de la manera en que se combinan las palabras y se
disponen linealmente, así como los grupos que forman). Una noción restrictiva y
tradicional de la gramática es la que se centra en la parte morfosintáctica. Sin
embargo, hay concepciones más actuales que incluyen también la parte fónica:
fonética (análisis de los sonidos del habla) y la fonología (análisis de la organización
lingüística de los fonemas). Lo que cabe preguntarse es qué ocurre con la semántica y
la pragmática, puesto que estas son necesarias para la descripción gramatical.

En cada uno de estos niveles, sea el que sea, hay unidades sustantivas (unidades
importantes). Cuando hablamos de fonología, serían los rasgos distintivos, fonemas,
sílabas. En la morfología, en cambio, serían los morfemas y después las palabras. La
interrelación es que, por ejemplo, la palabra es la unidad máxima de la morfología y, a
la vez, es la unidad mínima de la sintaxis. Las palabras (o una sola unidad) forman
grupos sintácticos y estos forman oraciones.

Hay distintos tipos de gramática:

- Gramática sincrónica: estudia los fenómenos lingüísticos en un momento


determinado (1454, siglo XVII o siglo XX). Sin evolución en el tiempo, suele ser
la actual, aunque puede ser una sincronía en el pasado sin perspectiva
diacrónica.
- Gramática histórica o diacrónica: estudia el modo en que evolucionan los
fenómenos lingüísticos durante cierto periodo (del siglo XV al XVII, del año
1350 al año 1370).

Según los objetivos y el fundamento gramatical:


- Gramática descriptiva: presenta las propiedades de las unidades gramaticales
en cada uno de los niveles de análisis.
- Gramática normativa: establece los usos considerados ejemplares en la lengua
culta de una comunidad.
- Gramática teórica: la fundamentada en una determinada teoría gramatical.

La Nueva gramática de la lengua española es sincrónica (aunque con referencias a la


historia), descriptiva y no renuncia a dar datos normativos. Los datos manejados
proceden de usos atestiguados y de la introspección del gramático o de los hablantes
consultados. Estos están valorados a partir de dos criterios:

- Gramaticalidad: respeto de los principios del sistema (gramaticalidad o


*agramaticalidad).
- Corrección idiomática: valoración social, si tiene o no prestigio.

2. UNIDADES FÓNICAS Y UNIDADES MORFOLÓGICAS

FONÉTICA Y FONOLOGÍA: la fonología estudia las unidades o sonidos con valor


distintivo y la fonética estudia los mecanismos de la producción y percepción de los
sonidos. Las unidades características son los fonemas (/t/ y /d/) y los archifonemas,
mayores que los rasgos distintivos. Las unidades suprasegmentales serían la prosodia
(se encarga del estudio de estos elementos fónicos suprasegmentales), el acento y la
entonación o patrones melódicos.

MORFOLOGÍA: es la parte de la gramática que estudia la estructura de las palabras y


las variantes que estas presentan. Además, estudia el papel gramatical de cada
segmento en relación los demás. Hay varios tipos de morfología (estudiables desde dos
perspectivas: diacrónica o sincrónica):

- Morfología flexiva: estudia las variaciones de las palabras que implican cambios
de contenido de naturaleza gramatical con consecuencias en las relaciones
sintácticas: concordancia o rección // número, género, persona, tiempo,
aspecto, modo…
- Morfología léxica: también llamada formación de palabras, estudia la
estructura de las palabras y las pautas que permiten construirlas o derivarlas:
bases léxicas, variantes, paradigma derivativo o familia de palabras // raíz, afijo;
sufijación, prefijación y parasíntesis…

3. UNIDADES SINTÁCTICAS
3.1. Las clases de palabras
Son los paradigmas que las palabras forman en función de sus propiedades
combinatorias y de las informaciones morfológicas que aceptan. Por un lado, tenemos
las clases sintácticas de palabras, que se dividen en dos grupos:

- Clases o subclases con informaciones gramaticales, no aluden al mundo


(significaciones abstractas: referencia, pluralidad, función…): artículos,
pronombres, adverbios...
- Clases con informaciones léxicas: sustantivos, adjetivos…

Estas clases sintácticas son el artículo, adjetivo, verbo, preposición, interjección,


sustantivo, pronombre, adverbio y conjunción. Estas tienen características de
desarrollo sintáctico, aunque también tienen características morfológicas.

Existen unas categorías que podríamos llamar menores y que son las clases
transversales. Son así porque no tienen una serie de características que las diferencie o
que haga que tengan un status al mismo nivel que las clases sintácticas. Estas
participan de rasgos combinados de las otras, tienen características de una clase mayor
y de otra. Son, por ejemplo, los indefinidos, numerales, demostrativos. Estos últimos
tienen características de adjetivo, pero también tienen características pronominales.

3.2. Los grupos sintácticos

A partir de las unidades léxicas simples, la sintaxis puede articular unidades mayores
llamadas grupos, frases o sintagmas (expansiones o proyecciones de su respectivo
núcleo). Pueden ser grupos nominales, adjetivales, verbales o adverbiales.

Los grupos sintácticos lexicalizados: tenemos, por un lado, el grupo sintáctico, un


sintagma libre, que es el grupo que tiene composicionalidad. Este grupo de palabras se
interpreta sumando el significado de cada una de las palabras que lo componen. Lo
contrario a esto son las locuciones o grupos de palabras lexicalizados, que funcionan
como una sola pieza y están incluidos en el diccionario. Su función sintáctica es
idéntica a la de la categoría que le da nombre: ojo de buey > locución nominal, tomar
el pelo > locución verbal. Lo que sería una unidad pluriverbal. Aquí no funciona el
concepto de composicionalidad, sino el de idiomaticidad. Hay varios tipos de
locuciones: nominales (cabeza de turco), adjetivas (de miedo), preposicionales (a pesar
de), interjectivas (¡a ver!), verbales (meter la pata), adverbiales (a medias), conjuntivas
(ya que).

3.3. Las funciones

Las clases de palabras, tanto las mayores como las transversales, y los grupos
sintácticos establecen relaciones (vínculos que permiten su aportación semántica al
contenido de la oración). Estas relaciones se llaman funciones. Para hablar de función
es necesario tener en consideración distintos grupos, porque uno es algo con respecto
a otro. La doble interpretación del lenguaje depende de la interpretación sintáctica:
Llegará el lunes tendrá una doble interpretación según la función que se le asigne a el
lunes. Hay tres clases de funciones: sintácticas, semánticas e informativas.

El concepto de predicado: tradicionalmente se emplea con dos sentidos:

- La expresión gramatical cuyo contenido se atribuye al referente del sujeto: El


maestro explicaba la lección a los alumnos. Predicación que se hace sobre una
entidad que es el sujeto.
- Categorías que designan estados, acciones, propiedades o procesos en los que
intervienen uno o varios participantes: El maestro explicaba la lección a los
alumnos. Estos predicados requieren una estructura argumental, normalmente
con tres participantes o actantes: alguien, algo, a alguien. Las expresiones que
aportan información, pero no van requeridas por el verbo son los adjuntos.

Las funciones sintácticas representan las formas mediante las que se manifiestan las
relaciones que expresan los argumentos: algo es algo con respecto a algo. Algo es
sujeto o CD por exponentes funcionales, cosas que percibimos: una marca de
concordancia, el orden, la posición… Cada función se caracteriza por diversas marcas o
exponentes gramaticales (índices formales): concordancia, posición, presencia de
preposiciones… Del sujeto, por ejemplo, las características son la concordancia y
posición. El predicado, según su interpretación, tendrá unas características u otras. El
complemento directo se caracteriza por la posición y la preposición a si es de persona.
El complemento indirecto puede ser argumental o no argumental, según el verbo
seleccione o no argumentos: si el verbo sí los selecciona, uno de ellos será el
complemento indirecto. Si es no argumental, suele aparecer pegado al verbo en forma
de le. El complemento de régimen suele ir pedido por un verbo y tiene preposición.

La valencia de los predicados viene determinada por su significado. Será mayor o


menos en virtud de ese significado. Clasificación de los predicados por su valencia
(número de argumentos exigidos): avalentes (sin argumentos: llover), monovalentes
(predicados de lugar, un solo argumento exigido: dormir), bivalentes (predicados de
dos lugares, dos argumentos exigidos: decidir), trivalentes (predicados de tres lugares:
tres argumentos exigidos: entregar).

3.4. La oración

Una cosa son las oraciones, que son unidades mínimas de predicación, es decir,
segmentos que ponen en relación un sujeto con un predicado. Otra cosa son los
enunciados, que no son necesariamente una unidad oracional, son unidades
informativas: ¡Te felicito! (oracional, tiene un verbo) o ¡Enhorabuena! (no tiene verbo,
pero sí tiene significado). Es una unidad mínima de la comunicación: ¡Fuego!, ¡Arriba!
Dadas ciertas condiciones contextuales y discursivas, los enunciados pueden ser
palabras, grupos de palabras y oraciones. Para clasificar las oraciones existen tres
criterios:

- Actitud del hablante (modalidad): según la actitud del hablante (modus)


respecto del contenido del mensaje (dictum), cómo presenta quien la
certidumbre, la duda…: declarativas, interrogativas, exclamativas…
- Naturaleza de su predicado: según las propiedades del verbo: oraciones
transitivas, intransitivas y copulativas.
- Dependencia o independencia respecto de otras unidades:
 Oraciones simples: sin otras oraciones que ocupen alguno de sus
argumentos o modifiquen algunos de sus componentes.
 Oraciones subordinadas: dependen de alguna otra categoría a la que
complementan o modifican. Tipos de subordinadas: sustantivas (o
argumentales), adjetivas o de relativo y adverbiales o circunstanciales.

La lengua es un entramado en el que partimos de aspectos tan pequeños como la


fonología, que se desarrollan en alófonos y fonemas que forman la fonética. Estos
elementos fonéticos se aglutinan entre ellos y forman afijos, sufijos, prefijos…
unidades mayores, que ya tienen significado, por lo que hablamos en el ámbito de la
palabra, unidad máxima de la morfología. Estas a su vez se combinan en sintagmas y
aquí hablamos ya de sintaxis. Esta todo interrelacionado.

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