Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en Cuba son una organización comunitaria importante con funciones y objetivos definidos que apoyan las estrategias políticas y estatales. Los CDR tienen amplia experiencia trabajando en la comunidad para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de la sociedad. Son la organización de masas más grande del país y juegan un papel clave en la movilización del pueblo y en tareas de salud, economía y participación ciudadana. Su función social es una prioridad para preservar y fortalecer
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Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en Cuba son una organización comunitaria importante con funciones y objetivos definidos que apoyan las estrategias políticas y estatales. Los CDR tienen amplia experiencia trabajando en la comunidad para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de la sociedad. Son la organización de masas más grande del país y juegan un papel clave en la movilización del pueblo y en tareas de salud, economía y participación ciudadana. Su función social es una prioridad para preservar y fortalecer
Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en Cuba son una organización comunitaria importante con funciones y objetivos definidos que apoyan las estrategias políticas y estatales. Los CDR tienen amplia experiencia trabajando en la comunidad para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de la sociedad. Son la organización de masas más grande del país y juegan un papel clave en la movilización del pueblo y en tareas de salud, economía y participación ciudadana. Su función social es una prioridad para preservar y fortalecer
Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en Cuba son una organización comunitaria importante con funciones y objetivos definidos que apoyan las estrategias políticas y estatales. Los CDR tienen amplia experiencia trabajando en la comunidad para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de la sociedad. Son la organización de masas más grande del país y juegan un papel clave en la movilización del pueblo y en tareas de salud, economía y participación ciudadana. Su función social es una prioridad para preservar y fortalecer
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Loa CDR en Cuba y su importancia
En Cuba, dentro de las organizaciones comunitarias, se significa en la presente investigación a los
Comités de Defensa de la Revolución (CDR) como objeto de estudio, ya que, posee función social, misión y objetivos bien delimitados en correspondencia con las estrategias políticas y estatales. Se corrobora la importancia de la participación de la organización con amplias experiencias de trabajo en la comunidad, que se desarrolla con perspectiva de mejoras, a partir de articular y armonizar la presencia del pueblo en la proyección y ejecución de estrategias comunitarias, para satisfacer las necesidades materiales y espirituales de la sociedad. En esta organización, es esencial estimular la socialización de las principales experiencias sobre la función social como vía eficaz hacia la integración de todos los miembros, en un momento de complejidad y contradicciones sociales en Cuba. En la sociedad cubana, la función social de los CDR, se considera una prioridad para la conservación y fortalecimiento del sistema político, como expresa la idea siguiente:
Es la más poderosa de las organizaciones cubanas gubernamentales, que tiene la movilización de
los partidarios de la Revolución como uno de sus objetivos principales. También participa en tareas de salud, higiene, de apoyo a la economía y de fomento de la participación ciudadana en distintos ámbitos, como en la participación en las elecciones o en las asambleas. (Castro, 1972: 2) Se precisa la importancia de los CDR por ser la mayor organización de masas del país, en la que se agrupan los ciudadanos de forma voluntaria, sin distinción de credos, género y raza. Tienen como función esencial la movilización del pueblo en defensa de la Revolución, ante los incesantes planes del enemigo. Se significan las tareas a desarrollar por la organización en las diferentes esferas de la vida política, económica y social de la nación, así como el papel decisivo para la revitalización de las tareas en la comunidad de forma activa y consciente. El contenido en la labor de dirección de los CDR, como organización comunitaria1 en un contexto cambiante de la sociedad, demanda de un análisis sistemático en su función social, a partir del autoaprendizaje transformador, hacia la socialización de experiencias en el accionar de la participación comunitaria. Necesita del compromiso individual de dirigentes y miembros, profundizar en la conciencia social del ser humano y desarrollar la capacidad de liderazgo en la organización, a través de mecanismos interactivos de dirección en correspondencia con los intereses psicosociales-culturales e ideopolíticos del pueblo. Esta nueva visión de la organización, tiene su expresión sociopolítica en la intervención del Presidente de la República de Cuba, cuando expresa: «Hemos convocado a pensar distinto, a ser proactivos, a distinguir las potencialidades del tiempo que vivimos, cualitativamente diferentes, como también lo son los seres humanos» (Díaz-Canel, 2019: 3). En la presente idea, se sientan las bases para un análisis integral de la realidad actual, orienta a buscar alternativas con una visión de proactividad en el trabajo hacia una participación consciente de los seres humanos. Para ello, es necesario profundizar en las posibilidades que brinda el contexto, indagar en las expectativas, los motivos e intereses de la sociedad de forma que se logre una adecuada articulación entre la palabra y la acción. El presente trabajo promueve un análisis teórico de la función social, a partir de las valoraciones de sus protagonistas: los cederistas y líderes. Se toman en cuenta las experiencias, valoraciones y alternativas desde los niveles de base, donde mejor se conocen los problemas de la comunidad.