Que Es La Estetica
Que Es La Estetica
Que Es La Estetica
La Estética estudia las razones y las emociones estéticas, así como las
diferentes formas del arte. La Estética, así definida, es el dominio de la filosofía
que estudia el arte y sus cualidades, tales como la belleza, lo eminente, lo feo o
la disonancia.
-Lo gracioso
-Lo grandioso
-Lo elegante
-Lo sublime
-Lo ridículo
-Lo trágico
La estética los agrupa a todos estos bajo un concepto general, el que nos da por
resultado el producir por la sola contemplación un deleite. Todos estos partiendo
de la categoría de bello puede ser comparados y graduados en base a este
concepto concreto a naturaleza de la estética y la belleza.
Por lo tanto, se cree que es posible pensar que un objeto bello no es bello por
ser insensible a la belleza. También se cree que es posible disfrutar de algo
menos hermoso por algo más bello, porque las pasiones no siempre van
conforme a la razón. En última instancia, se diría lo siguiente:
La belleza no es una cualidad de las cosas mismas sino que existe sólo en la
mente de quien las contempla, de suerte que cada mente percibe una belleza
diferente. No hay impresiones de la belleza. La búsqueda de la belleza real sería
necesariamente infructuosa. En este sentido, el dicho popular ha establecido
la inutilidad de discutir sobre gustos, axioma que hemos de extender tanto al
gusto de la mente como al del cuerpo, conciliando la filosofía con el sentido
común.
Sin embargo, existe una especie de sentido común que se opone a esta
concepción y viene a quebrar el principio de la igualdad natural de gustos, a
la luz de la comparación de objetos muy desproporcionados. Lo que llamamos
"bello" responde a una preferencia compartida de los individuos, es decir, se
deriva de una concordancia sistemática o por lo menos general en la inclinación
por algo. Existe frente al subjetivismo exacerbado, cierta objetividad, ciertas
reglas generales de aprobación o censura respecto del gusto estético que
pueden obtenerse de la experiencia, de la observación general de lo que
universalmente complace a los hombres y, por ende, existe la posibilidad del
juicio crítico.
Lo feo es estético
No hay nada en la naturaleza que pueda calificarse de feo. La fealdad no es
una propiedad de la naturaleza, sino de la cultura. Esto significa que belleza y
fealdad son relativas como las modas, las usanzas, las novedades, los estilos,
los gustos, las costumbres y las manías. Se trata de usanzas, novedades, estilos,
gustos y manías definidos no desde las cualidades humanas, sino desde
satisfacciones de minorías (modistas, diseñadores, modelos, artistas de la
originalidad, creadores caprichosos, árbitros de la elegancia, estilos despóticos
y tiránicos), de sujetos volubles, de voluntades inconsistentes. Sin embargo,
como alega Paul Valéry, lo que ha sido creído por todos siempre y en todas
partes, tiene todas las posibilidades de ser falso. ¿Hay algo en el universo que
no sea bello? ¿Algo que no tenga nada de hermoso? ¿En un universo de cosas
y seres limitados y, por consiguiente, inevitable y forzosamente defectuosos,
puede la fealdad considerarse un estigma, desprovista de valor? Lo que
calificamos como "feo", ¿a que nivel o dimensión de la realidad se refiere? ¿Qué
hondura del ser puede interesar y afectar la "cultura" de la belleza erigida en el
Occidente? ¿La belleza y la fealdad son datos empíricos? Es decir, ¿lo que
disgusta nuestros gustos particulares puede establecerse como criterio de lo
feo? Lo feo, además, ¿es feo en sí, es feo formalmente hablando, es feo
subjetivamente o es feo según los criterios de una
embrollada disciplina filosófica, la estética, sujeta a variables (modas, prejuicios,
opiniones) históricas y teóricas?
Los dos términos de esta relación concreta, singular, constituyen una totalidad
o estructura peculiar que llamaremos situación estética. Como en
toda estructura, sus elementos, así como la totalidad de que forman parte, solo
existen en su unidad y dependencia de que forman parte, solo existen en su
unidad y dependencia mutuas. Para que un objeto exista estéticamente, es
preciso que se relacione con un sujeto concreto, singular, que lo usa, consume
o contempla de acuerdo con su naturaleza propia: estética. Por consiguiente,
mientras no es consumido o contemplado, solo es estético potencialmente. El
sujeto, a su vez, solo se comporta estéticamente cuando entra en
la relación adecuada con su objeto. El objeto necesita del sujeto para existir, de
la misma manera que el sujeto necesita del objeto para encontrarse en
un estado estético. La situación estética se halla condicionada por diversos
factores. Podemos hablar de factores objetivos cuando han de darse
necesariamente en el objeto para que el sujeto pueda entablar
una relación estética con él, y de factores subjetivos cuando constituyen
condiciones necesarias para que el sujeto pueda entrar en esa relación con el
objeto correspondiente.
Objetivismo:
Cualquier discusión sobre la construcción social del gusto debe comenzar con el
trabajo seminal del sociólogo francés Pierre Bourdieu. Bourdieu no era sólo
interesado en los gustos culturales sino también en la forma en que surge de
sabor y se emplea en las luchas por el reconocimiento social y estatus. En 1979
se publica- 'Matrícula de honor: una crítica social del juicio de gusto " establecido,
una trabajo que reunió a su pensamiento a través de una serie de Disco- líneas
y que explora el estilo de vida de la clase de Francia estructura (Bourdieu, 1984).
Con el apoyo de un análisis de la estadística los datos ya están en el dominio
público, sostuvo que nuestro gusto, y, de hecho todo
nuestro comportamiento de consumo, es una expresión de la clase social.
Diferentes clases sociales pueden ser identificadas por el camino en el que
expresan sus gustos en música, arte, ropa, hogar la decoración y por supuesto
la comida que comen. Sin embargo, su análisis de la clase no depende de
simples económico o materialista criterios.
Además, los valores tienen polaridad, es decir, pueden ser positivos o negativos,
y también jerarquía, en cuanto que los hay superiores e inferiores o, desde otro
punto de vista, unos son más importantes que otros. Podemos citar como
ejemplo que si alguien tiene como un valor la honradez diremos que quiere serlo
no por relación a alguna otra cosa sino por sí mismo. Sería este un ejemplo de
lo que nosotros consideraríamos un valor positivo, que no sería el último o
superior si esa persona al mismo tiempo considera que dejaría de ser honrada
si con ello salvara la vida de alguien. Llamamos valores a aquellas cualidades
que tienen las cosas y las acciones y comportamientos humanos que las hace
estimables y deseables por sí mismas y no por relación a alguna otra cosa. En
este sentido diremos que son queridas como fin y no instrumentalmente o
como medios.