Los Hebreos
Los Hebreos
Los Hebreos
Palestina, territorio que forma en la actualidad Israel, llamada en la antigüedad el País del Canaán
o Tierra Prometida. Estaba situada al sur de Siria, en el Asia Menor.
Limitaba por el norte con fenicia y Siria por el sur, con el desierto del Sinaí; por el este, con el
desierto de Arabia; y por el oeste, con el mar Mediterráneo.
Descripción
Palestina comprende unos 25000 km2 de superficie. Está atravesado por el río Jordán, que recorre
de norte a sur. Este río nace en el monte Hermón y desagua en el mar Muerto, a 400 metros bajo
el nivel del mar.
En el mar Muerto no existe vida animal ni vegetal, por que sus aguas están cargadas de sal y
betún. Sus orillas demuestran haber tenido gran actividad volcánica, la que es relacionada con la
tradición bíblica con la desaparición de Sodoma y Gomorra.
La mayor parte de su territorio es árido o desértico; pero sus colinas están cubiertas de bosques,
como los montes Tabor, Nebo y los Olivos. Su clima es caluroso y seco. Sus suelos son propicios
para el pastoreo y el cultivo de vid, higuera y olivo. Sus tierras fértiles son escasas y se localizan a
lo largo del río Jordán.
En la antigüedad, Palestina comprendía tres regiones: Galilea, al norte, con su capital Nazaret;
Samaria, al centro, con su capital Samaria; y Judea, al sur, con su capital Jerusalén.
2. Evolución histórica
Los primeros habitantes que se establecieron en Palestina fueron los cananeos, de origen semita,
aproximadamente en el tercer milenio a.c. Estos pobladores primitivos tuvieron que soportar los
ataques constantes de las tribus del desierto que ambicionaban sus tierras, por su fertilidad, hasta
que en los siglos XIV y XV a.C. tuvieron que ceder al avance de la cultura hebrea.
Los hebreos o judíos formaban una tribu de raza semita que vivían en la región de Ur, en el valle
de la Mesopotamia. 2000 años antes de Cristo abandonaron la región de Ur y se trasladaron a
Siria. Algunas tribus avanzaron llevando sus rebaños y se infiltraron en la región de Canaán, donde
recibieron el nombre de hebreos, que significa: «desde allá, el que viene del más allá del
Eufrates». Posteriormente algunas tribus judías, aprovechando la conquista de Egipto por los
icsos, semitas como ellos, se instalaron en el delta del río Nilo, donde permanecieron durante 500
años. Después de la expulsión de los icsos, los israelitas quedaron en cautiverio, obligados a
trabajos forzados y perseguidos, por los egipcios.
Periodos de su historia
El pueblo hebreo, a través de su historia, ha pasado por tres períodos: el de los Patriarcas,el de los
Jueces y el de los Reyes.
2.2.1 Período de los Patriarcas
Se llama así al período en que las tribus hebrea eran gobernadas por los ancianos a quienes se les
llamaban patriarcas. El Patriarca era el jefe, y como tal, ejercía la máxima autoridad sobre las
personas y bienes. También era el padre, juez, sacerdote y jefe del ejército.
a. Abraham
Abraham fue el primer patriarca. Nació en la ciudad de Ur, en mesopotamia. La biblia nos relata
que a los 75 años este patriarca oyó la voz de Dios, que le ordenaba abandonar la tierra de Ur para
conducir a su pueblo a la tierra prometida o país del Canaán. Los historiadores aseguran que dicho
acontecimiento ocurrió en el reinado de Hamurabi, hacia el años 2050 a.C.
b. Jacob
Jacob fue hijo de Isaac y Rebeca, llamado también Israel, que quiere decir el que lucha con Dios. Se
casó en Caldea y se trasladó a Palestina. Tuvo 12 hijos. Ellos fueron los fundadores de las 12 tribus
de Israel. Uno de ellos, llamado José, era el que tenía todas las preferencias de su padre, lo que
generó la envidia de sus hermanos, quienes lo vendieron a unos mercaderes. Estos, a su vez, lo
vendieron a Putifar, funcionario egipcio.
En cierta ocasión, el faraón Apopi había soñado que siete vacas gordas eran devoradas por siete
vacas flacas. Ante el fracaso de los mejores adivinos del imperio, José interpretó acertadamente
este sueño, manifestando que a siete años de abundancia, en el que se tendría que reservar los
excedentes de cosecha, le seguirían otros siete años de sequía y miseria. El faraón maravillado por
la interpretación lo nombró ministro. Después de algunos años, llegó la hambruna y miseria
anunciadas. Un día, José reconoció a sus hermanos que habían llegado en busca de granos. Este
también se hizo reconocer, los perdonó y los mandó que trasladasen a su anciano padre Jacob,
para instalarlo en las fértiles tierras del delta del río Nilo.
c. Moisés
Los israelitas se multiplicaron en Egipto y debido a su origen despertaron odio y recelo de los
faraones. Fueron sometidos a la esclavitud y a realizar trabajos forzados, como la construcción de
gigantescos templos, palacios, pirámides y caminos. En estas circunstancias apareció Moisés para
liberar a su pueblo.
La Biblia manifiesta que el faraón ordenó, ante el incremento del pueblo hebreo que fueran
sacrificados los recién nacidos. Una mujer de la tribu de Levi escondió a su hijo en una cesta
embreada y lo depositó en el río Nilo, en el lugar en que acostumbraba bañarse la hija del faraón.
La referida princesa encontró el cesto con el niño, dispuso su rescate y le puso el nombre de
Moisés, que quiere decir salvado de las aguas.
Cuando este patriarca tenía cuarenta años, Dios se le apareció y le ordenó liberar a los hijos de
Israel del yugo egipcio.
La partida del pueblo hebreo hacia el desierto del Sinaí hasta la «tierra prometida». En el viaje,
Moisés consolidó el monoteísmo religioso con la que hace que su pueblo crea en un solo Dios al
recibir los 10 mandamientos de Jehová en el monte Sinaí.
También llamado del “afianzamiento nacional”. Los hebreos se constituyen como nación por
primera vez. Moisés murió antes de entrar en Canaán, la «tierra prometida». Josué guió al pueblo
en su conquista ya que estaba ocupada por otros pueblos. La cultura hebrea logró tomar posesión
en el siglo XII a. de C. conducida cada tribu por un jefe militar y religioso llamado Juez. Adoptaron
la forma de vida sedentaria formando pueblos y ciudades.
a. Débora
Uno de los primeros jueces fue una mujer , ella era profetisa y fue famosa por sentarse bajo una
palmera donde cualquiera podía buscar su consejo y desde donde emitía las órdenes de batalla.
Barak, el mayor guerrero de esa época, se negaba a ir a la batalla sin ella. Juntos dirigían a las
tropas en contra del ejército canaanita que era mucho más grande y que estaba apoyado por 900
carrozas de hierro, mientras que Israel no contaba con ninguna.
En la víspera de la batalla, Barak dudaba si los guerreros israelíes podrían pelear frente a este
oponente tan fuerte, pero Déborah se mantuvo firme. Una tormenta inesperada se desató en el
cielo y el aguacero resultante convirtió el terreno en barro; el hierro de los carros quedó atascado
y los canaanitas entraron en pánico.
De esa forma, se cumplió la profecía de Déborah, que decía que “éste es el día en que Dios
entregará a Sisera en vuestras manos*.
b. Gedeón
El cual significa «Destructor», «Guerrero poderoso», fue un juez y guerrero del Antiguo Israel. Fue
el quinto de los jueces del pueblo judío y es considerado como uno de los más sobresalientes por
la magnitud de su «obra guerrera» contra uno de los pueblos enemigos de Israel: los madianitas.
Hijo de Joás de la tribu de Manasés.
En sustancia, la vida de Gedeón se sitúa tras el asentamiento de los judíos en el llano de Ofrá
donde habían asimilado los cultos idolátricos de las poblaciones aledañas. Tras esa infidelidad,
Yahveh les habría castigado enviando tribus nómadas y grupos de amalecitas y madianitas a
hacerles la guerra. En esos combates, dos hermanos de Gedeón habrían sido asesinados. Los
israelitas se arrepintieron y pidieron perdón. Yahveh envió a su ángel a hablar con Gedeón para
anunciarle que sería el libertador de su pueblo. Éste pidió una prueba, tras un diálogo algo
sarcástico con el ángel. Este último le dio la prueba que pedía abrasando un sacrificio con fuego
milagroso. Al día siguiente Gedeón destruyó el altar de Baal y ante la indignación del pueblo, Joás,
su padre, le defendió diciendo que si Baal era dios, se encargaría de castigar el sacrilegio. Desde
ese día fue conocido como Gedeón Jerobaal.
c. Jefté
Hijo de Galaad, Jefté fue desheredado y expulsado por sus medio hermanos, por lo que se trasladó
a la región de Tob. Sin embargo Los ancianos de Galaad intentaron convencerlo que los liderara en
la guerra contra los amonitas, iniciada poco tiempo antes, a lo que Jefté se negó, a menos que
después de la guerra conservara la posición de liderazgo, cosa que los ancianos aceptaron.
Jefté, luego de haber amenazado a los amonitas juró que el primero que atraviese la puerta de mi
casa para salir a saludarme después de mi victoria sobre los amonitas, será para Yahveh y lo
sacrificaré por el fuego o cualquiera que me saliere a recibir de las puertas de mi casa, cuando
volviere de los Amonitas en paz, será de Jehová, y le ofreceré en holocausto.
Luego ganó la batalla con facilidad. Al volver victorioso, lo sale a recibir su única hija. Él se lamenta
(rasga sus vestiduras), pues no puede echarse atrás en su promesa. Su hija le dice que debe honrar
su promesa. Le pide a su padre llorar su virginidad por dos meses, y vuelve a cumplir el voto, a
diferencia del sacrificio no realizado de Abraham (impedido por un ángel), el de Jefté sí fue
consumado, pero no precisamente como se infiere, sino como dedicación de su vida a Dios
prescindiendo del matrimonio.
d. Sansón
Sansón fue un juez famoso por su fuerza de superhéroe y por conducir la pelea contra el mayor
enemigo de Israel: los filisteos.
Sansón, que juzgó a Israel por 20 años, fue uno de los que se enfrentó a los filisteos. Él era un nazir
(que es una forma de penitencia en la que la persona se abstiene temporalmente de cortarse el
pelo y de beber vino).
Para debilitar a los filisteos, fingió unirse a ellos, tomando deliberadamente a una mujer filistea
como esposa llamada Dalila, ella se dio cuenta de que Sansón era la principal amenaza para su
pueblo. Después de muchos intentos fallidos y muchas súplicas, ella finalmente logró que Sansón
le revelase el secreto de su fuerza sobrenatural, luego de lo cual le cortó el pelo mientras dormía.
Como resultado, los filisteos pudieron capturarlo, cegarlo y encerrarlo en prisión.
En la ejecución publica de sansón este derribó las columnas del templo, con lo que la construcción
colapsó, matando a todos los que estaban adentro.
Samuel
En el tiempo en que apareció Samuel, el pueblo judío había pasado cerca de 400 años sin un
liderazgo central.Cuando Samuel era joven, viajaba por la tierra dictando la ley judía y dando
consejos al pueblo, pero ahora que había envejecido, ya no lo podía hacer. Mientras tanto sus dos
hijos, que habían asumido su rol, probaron no ser queridos por el pueblo.
Entonces fue enviada una delegación para pedirle a Samuel que ungiese a un rey en su lugar:
Y le dijeron «He aquí que tú has envejecido, y tus hijos no andan en tus caminos. Ahora pues. Pon
sobre nosotros un rey que nos juzgue, como todas las naciones.
Samuel no lo quería hacer, pero Dios le dio el visto bueno y encontró un rey para el pueblo.
Y así es como se cerró el período de los Jueces. Samuel actuó como líder por 13 años y en los dos
últimos dirigió al pueblo judío junto con el primer rey judío, cuyo nombre era Saúl.
Se denomina así al período en que los hebreos eran gobernados por los reyes. Surgió por la
necesidad de unificar y defenderse contra sus enemigos, los filisteos de la costa y los nómades del
desierto, para lo cual contaron con un gran espíritu de solidaridad, unidad religiosa y el ejemplo de
las grandes monarquías de Egipto y Mesopotamía.
Los principales reyes fueron: Saúl, David y Salomón.
a. SAÚL
Fue nombrado rey a petición del pueblo. Durante su gobierno organizó un magnífico ejército, que
le permitió a la cultura hebrea vivir en paz y asegurar sus fronteras. Convertido en brillante
guerrero, combatió a los filisteos y a los nómades del desierto.
b. DAVID
Se hizo famoso por su valiente hazaña de dar muerte con su honda al gigantesco guerrero filisteo
llamado Goliat.
David fue un rey profeta, verdadero creador del Estado Hebreo. Fundó la capital del reino en los
restos de las fortaleza de jebús, a la que llamó Jerusalén, ciudad que fue símbolo de la unidad
religiosa y política del pueblo judío. Condujo con gran pompa a esta ciudadela el Araca de la
Alianza.
Este era un cofre de cedro, donde los hebreos guardaban las Tablas de la Ley, que celosamente
habían conservado durante sus andanzas por el desierto.
El rey profeta había establecido un poderoso ejército con el cual sometió fácilmente a sus
enemigos (filisteos, moabitas, madianitas, amalecitas, amonitas y sirios). Durante su gobierno el
dominio de la cultura hebrea se extendió desde el río Eufrates hasta el mar Rojo, con excepción de
Fenicia.
La aparente unidad del Estado de Israel fue turbada por conspiraciones palaciegas contra David,
hasta el punto de que su hijo Absalón se sublevó contra su autoridad. David puso vencerlo gracias
a sus mercenarios, quienes le dieron muerte. Esta muerte le causó profundo pesar y le inspiró
admirables poesías.
SALOMÓN
A la muerte de David le sucedió en el trono su hijo preferido Salomón. En su reinado, los hebreos
adquirieron un gran desarrollo material, particularmente en la actividad comercial, con cuyas
riquezas embellecieron su capital y construyeron el templo de Jerusalén, en siete años.
Este templo se edificó según las indicaciones de David, en el lugar donde se encontraba el Arca de
la Alianza, por artesanos cananeos y fenicios. Sus muros eran de grandes bloques de piedra y los
ensamblajes, de cedro dorado y esculpido.
El templo comprendía un recinto de acceso público; un patio atrio de los sacerdotes, en el cual
había un altar para los sacrificios y una fuente de bronce con agua para las purificaciones; y un
santuario que se dividía en dos cámaras: en una adornada por diez candelabros de siete brazos, se
quemaba incienso; en la otra, se guardaba el Arca de la Alianza.
2.3 El Cisma
Se denomina cisma a la división del pueblo hebreo en dos reinos: el de Israel y el de Judá. Esto se
debió a que las tribus de la región central y del norte se negaron a pagar los tributos implantados
por Salomón.
Comprendía las diez tribus del norte y aclamaron por rey a Jeroboan. Este reino era mas extenso y
poderoso que Judá. Su capital fue la ciudad de Samaria.
Comprendía las dos tribus del sur: Judá y Benjamín, que permanecieron fiel a su rey Roboam, hijo
de Salomón y heredero legítimo del reino. Tenía por capital a la ciudad de Jerusalén. Conservaron
y desarrollaron las enseñanzas bíblicas.
Ambos reinos vivían en constantes contradicciones internas. Estas querellas generaron, en Israel y
Judá, la aparición de los profetas.
Los profetas eran hombres de condición humilde; una especie de oradores populares, inspirados
por Dios. Lucharon ardorosamente por defender la pureza de la religión hebrea. Vivían retirados
en el desierto y en las montañas dedicados a la meditación y a la oración. Visitaban también a las
tribus, predicando profecías y penitencias o recordando al pueblo sus deberes para con Jehová.
Anunciaban severos castigos para aquellos que incumplieran el Decálogo de los mandamientos de
Dios.
Los principales profetas fueron: Elías, Amós, Isaías, Jeremías, Ezequiel y Daniel.
Elías
Este profeta acusó al rey Acab de Israel de haber traicionado la religión y profetizó su muerte,
quien efectivamente murió a los pocos años en una batalla campal.
Amos
Fue un predicador religioso en el sur de Palestina. Fustigó el lujo de los potentados, su corrupción,
su avaricia y su crueldad para con los desposeídos.
Isaías
Jeremías
Ezequiel
Apareció en la época del cautiverio, en Babilonia. Predicó la fe profunda en Jehová y el retorno del
pueblo hebreo a la libertad y el esplendor.
2.5.1 Los dos reinos fueron absorbidos por los grandes imperios.
Israel fue conquistado por el poderoso ejército asirio, en el año 722 a.C.
Judá, mantuvo su independencia por más de un siglo y se libró de la conquista asiria. En el año 597
a.C. Nabucodonosor sometió al reino de Judá y redujo al cautiverio, en Babilonia, al rey y a las
clases altas.
La destrucción del reino judío, repercutió sobre la vida política y sus propias creencias de los
hebreos. Como consecuencia aparecieron distintas sectas que se disputaban entre sí, como la de
los fariseos, saduceos y escenios.
Los fariseos, condenaban todas las prácticas supersticiosas y proclamaban la aplicación estricta del
mosaísmo o la «ley de Moisés».
Los saduceos, también defensores del mosaísmo. Negaban la inmortalidad del alma y los castigos y
premios más allá de la vida. Además, aseguraban que la felicidad se conseguía con el goce de los
bienes terrenales.
Los escenios, fueron pequeñas comunidades defensoras de la ley de Moisés y de una moral
extremadamente severa.
La aparición de Cristo acentuó más estas diferencias religiosas, ya que muchos judíos abrazaron la
nueva religión cristiana y otros, la combatieron.
2.5.2 La Diáspora
Los judíos no pudieron recuperar su libertad política, pues sufrieron sucesivas dominaciones de los
persas, griegos, romanos, árabes,turcos e ingleses. Sin embargo, mantuvieron su nacionalismo
judío a través de una fe profunda, sin mezclarse con poblaciones de origen distinto.
3. Organización Económica
3.1 La propiedad
La igualdad primitiva sobrevivió a través del año sabático, que consistía en que un año de cada
siete, era necesario dejar en reposo los campos, cediendo a los pobres lo que la tierra produjera
por sí misma.
También se celebraba el año del jubileo, fiesta solemne que realizaban cada cincuenta años(siete
veces siete años) en la que además de dejar en reposo las tierras, volvían a sus dueños originales
las fincas vendidas y recobraban su libertad los esclavos.
Los hebreos se destacaron en agricultura y sobresalieron en el cultivo del trigo, la cebada, la vid, el
olivo y las higueras. En sus campos pastaban cabras, asnos, ovejas y bueyes.
3.3 El Comercio
Se comercializaban mediante caravanas por tierra y por medio de embarcaciones con los pueblos
del Mediterráneo Oriental y del mar Rojo, para lo cual contó con el equipamiento y guía de los
fenicios.
– La tierra le proporcionaba trigo, aceite y miel que se cambiaban por la madera y productos
manufacturados de Fenicia.
– Del misterioso país de Ophir (costa de Somalía, África), traían oro, piedras preciosas y maderas
raras.
– Las especias y el incienso se importaban del reino de Saba (Arabia) a Palestina, que luego se
distribuía en Egipto, Siria y Fenicia.
– Se establecieron relaciones comerciales entre Palestina y Tiro, ciudad fenicia que dominaba el
Mediterráneo.
4.1 El Monoteísmo
El pueblo hebreo tuvo la convicción de creer en un solo Dios Universal, llamado Jehová, creador de
todas las cosas.
Esto fue producto de una larga evolución religiosa, cristalizada por Moisés, quien impulsó
vigorosamente el monoteísmo durante 40 años de vida errante a través del desierto, luego del
éxodo.
4.2 La Biblia
La palabra Biblia viene de la voz griega biblos, que significa libro. En efecto, la biblia es el conjunto
de Libros Sagrados o Sagradas Escrituras del pueblo judío y de las religiones cristianas. Por su
profundo contenido religioso, filosófico y literario, está considerado como la obra más hermosa de
la humanidad. Se encuentra formando diversos libros, todos reunidos en un solo cuerpo. Se divide
en dos partes: el Antiguo y el Nuevo Testamento.