Nehemías 11

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 4

NEHEMÍAS 11

Abramos nuestras Biblias en el capitulo 4 del Libro de Nehemías.

Haciendo un poco de historia, recordaremos que Nehemías inició la obra


de reedificar los muros caídos de la ciudad de Jerusalén. Desde el inicio
mismo de la obra no dejó de estar presente la oposición. Inicialmente fue
como un simple desacuerdo, luego se tornó en una calumnia, Nehemías fue
acusado de encabezar una rebelión contra el rey, después fue en forma de
un desprecio hiriente cuando Tobias dijo: Lo que ellos edifican del muro
de piedra, si subiere una zorra lo derribará. Finalmente fue como una
amenaza vedada. Los enemigos de la obra conspiraron entre si para caer
por sorpresa sobre Jerusalén y hacerle daño.

A todo esto, Nehemías no detuvo la obra. Cuando fue del caso solamente
oró y respondió con energía al adversario. Cuando fue necesario, oró y
puso una guardia armada. A toda la oposición exterior, Nehemías
respondió de una manera adecuada y cosa importante, jamás pensó en
detener la obra. Desistir de continuar con la obra hubiera sido equivalente
a conceder una gran victoria al enemigo y esto estaba lejos de ser
aceptado por Nehemías.

Pero a veces la oposición a la obra del Señor, no se origina en el exterior


sino en el interior. Cuando la oposición viene de afuera, en cierta medida
podemos sortearla, porque en fin de cuentas no se espera otra cosa del
mundo. El mundo ha aborrecido la obra del Señor y lo seguirá
aborreciendo, por tanto es natural que se oponga a la obra del Señor.

Lo triste es cuando la oposición se origina dentro de la obra del Señor. Es


allí cuando verdaderamente duelen las heridas. El desánimo con todo su
poder destructor se había hecho presente en Jerusalén. En los versículos
10-12 de Nehemías 4 tenemos la causa del desánimo y en los versículos
13 a 23 vemos la cura contra el desánimo.

Nehemías 4:10-12 dicen "Y dijo Judá: Las fuerzas de los acarreadores se
han debilitado y el escombro es mucho, y no podemos edificar el muro. Y
nuestros enemigos dijeron: no sepan, ni vean, hasta que entremos en
medio de ellos y los matemos, y hagamos cesar la obra. Pero sucedió que
cuando venían los judíos que habitaban entre ellos, nos decían hasta diez
veces: De todos los lugares de donde volviereis, ellos caerán sobre
vosotros"

Recordemos que la obra había avanzado hasta mas o menos la mitad. A


medio camino es donde la situación se puso cuesta arriba. Los judíos
fueron presa del desánimo. La causa del desánimo fue la debilidad.
Probablemente el continuo trabajo causó cansancio , lo cual a su vez trajo
como consecuencia la debilidad.

El cansancio es caldo de cultivo para el desánimo. Como creyentes que


somos debemos buscar un equilibrio entre el trabajo y el descanso y
cuando hayan síntomas de un debilitamiento, lo más recomendables como
se dice desconectarse del trabajo y descansar.

Otra causa para el desánimo fue la pérdida de motivación adecuada. Los


judíos dejaron de fijar su mirada en una Jerusalén con sus muros
reedificados y colocaron su mirada en los escombros. Cada vez que nos
fijamos en el problema, estamos en peligro de caer en el desánimo.
Llegamos a ser como Pedro cuando caminó sobre las aguas. Mientras
miraba a Jesús todo iba bien, pero tan pronto retiró su mirada de él y se
fijó en las olas del mar embravecido, empezó a hundirse.

Otra causa para el desánimo fueron las amenazas de los enemigos de la


obra. Si, por un tiempo fueron capaces de vivir bajo la presión de la
oposición, pero a la larga esta oposición empezó a hacer su efecto
negativo en la moral de los judíos.

Es interesante ver el papel que jugaron algunos judíos para que las
amenazas terminen por desanimar al pueblo. Dice el texto que estos judíos
vinieron hasta 10 veces con sus noticias alarmistas sobre un inminente
desastre. Que triste es ver que a veces los propios miembros de la familia
se prestan para aliarse al enemigo y así desanimar la obra del Señor.

¿Cuáles fueron las causas del desánimo? La debilidad o cansancio, la


desmotivación al. Mirar los escombros y no el fin de la obra y las
amenazas de los enemigos.

Consideremos ahora la cura para el desánimo. Lo primero que hizo


Nehemías fue detener la obra. Que interesante, ninguna oposición externa
logró que la obra se parara, pero cuando surgió el desánimo al interior de
Judá, Nehemías se vio forzado a detener la obra. Lo que pasa es que el
desánimo es mortífero.

Cuando se presenta es necesario combatirlo con toda la energía posible.


Nehemías tomo cinco pasos para combatir el desánimo.

Primero unió a las familias con un propósito común, la defensa de la


ciudad. Nehemías 4:13 dice: "Entonces por las partes bajas del lugar,
detrás del muro, y en los sitios abiertos, puse al pueblo por familias con
sus espadas, con sus lanzas y con sus arcos"
Una buena cura para el desánimo es buscar un propósito común, así todos
tienen una misma mentalidad, aparte de la meta principal. Para Nehemías
fue la defensa de la ciudad.

Segundo. Hizo que se fijaran en el Señor de la Obra no tanto en la obra del


Señor. Nehemías 4:14 dice: "Después miré, y me levanté y dije a los
nobles y a los oficiales, y al resto del pueblo: No "temáis delante de ellos;
acordaos del Señor, grande y temible y pelead por vuestros hermanos, por
vuestros hijos y por vuestras hijas, por vuestras mujeres y por vuestras
casas"

Mirar a los escombros siempre desanima, pero mirar al Señor grande y


temible disipa el desánimo así como la luz disipa las tinieblas.

Tercero, introdujo cambios creativos. Nehemías 4:15-18 dice: "Y cuando


oyeron nuestros enemigos que lo habíamos entendido, y que Dios, había
desbaratado el consejo de ellos, nos volvimos todos al muro, cada uno a
su tarea. Desde aquel día la mitad de mis siervos trabajaba en la obra, y la
otra mitad tenia lanzas, escudos, arcos y corazas; y detrás de ellos
estaban los jefes de toda la casa de Juda. Los que edificaban en el muro,
los que acarreaban y los que cargaban, con una mano trabajaban en la
obra, y en la otra tenían la espada. Porque los que edificaban, cada uno
tenia su espada ceñida a sus lomos, y así edificaban; y el que tocaba la
trompeta estaba junto a mi"

Los cambios que introdujo Nehemías fueron tan creativos que lograron el
objetivo deseado; que; el desánimo desaparezca y todos vuelvan a
trabajar. Muchas veces cuando nos encontramos desanimados, un cambio
creativo puede devolvernos el animo para trabajar.

Cuarto, diseño un plan de defensa. Nehemías 4:19-20 dice: "Y dije a los
nobles, y a los oficiales y al resto del pueblo: La obra es grande y
extensa, y nosotros estamos apartados en el muro, lejos unos de otros. En
el lugar donde oyereis el sonido de la trompeta, reunios allí con nosotros;
nuestro Dios peleará por nosotros"

Notemos que Nehemías confiaba plenamente en Dios, pero no se quedó


cruzado de brazos sino que diseñó un plan para defensa, esto contribuyó
para eliminar el desánimo en la población, cuando todos podían palpar que
había seguridad para trabajar.

Quinto, buscó maneras para servir a los demás. Nehemías 4:21-23 dice:
"Nosotros, pues, trabajábamos en la obra; y la mitad de ellos tenían lanzas
desde la subida del alba hasta que salía las estrellas. También dije
entonces al pueblo: cada uno con su criado permanezca dentro de
Jerusalén y de noche sirvan de centinela y de día en la obra. Y ni yo ni mis
hermanos, ni mis jóvenes, ni la gente de guardia que me seguía, nos
quitamos nuestro vestido; cada uno se desnudaba solamente para bañarse"

Una de las terapias más efectivas para combatir el desánimo es enfocar la


atención en el servicio a los demás. Así se logra evitar el lamentarse por
la situación de uno mismo o la auto conmiseración.

¿Cómo combatió Nehemías el desánimo? Buscó un propósito común, Fijó


su mirada en el Señor, introdujo cambios creativos, diseñó un plan de
defensa y buscó maneras de servir a los demás. Que Dios nos ayude a
luchar de esta manera contra el desánimo.

También podría gustarte